DOMINGO, 1 CUARESMA – 22 DE FEBRERO DE 2015 - Nº 2217 – CICLO B

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"CONVIÉRTANSE Y CREAN EN LA BUENA NUEVA"

Lema: “Cuaresma: Camino de conversión personal y comunitaria”
Jesús va al desierto para encontrarse Galilea a proclamar el Evangelio
con Dios y descubrir la misión que anunciando que está cerca el Reino
Dios Padre le encomienda. de Dios.
En este relato san Marcos concreta el Tentado por “Satanás”.
ideal de Alianza que relata el libro del Como relata Mateo y Lucas la
Génesis a través de Noé, concluido el tentación acompaña a Jesús a lo
diluvio. largo de toda su vida. El sentido
bíblico de la tentación no es
Impulso del Espíritu. fundamentalmente la de seducción,
Jesús acaba de recibir en el Jordán sino el de juzgar a una persona
el rito del agua y no inicia su misterio o ponerla a prueba; lo que puede
hasta la muerte del Bautista. El mismo hacerse con el propósito de probar
Espíritu que descendió sobre Jesús o mejorar su carácter, como así
en el bautismo, es el que lo conduce también con el fin malicioso de
al desierto, enfatizándonos en la frase poner al descubierto su debilidad o
inicial del Evangelio: “El Espíritu llevó a como el hombre pone a prueba al
Jesús al desierto”. Obedeciendo a un hombre, para medir su valor, donde
impulso del Espíritu Santo, se retira al el tentador no es tan torpe como
desierto donde permanece cuarenta para proponernos directamente
días, en sentido bíblico el número 40 adorarle. Sólo nos propone
representa el “cambio”, de un periodo decidirnos por lo racional, preferir
a otro, los años de una generación. El un mundo planificado y organizado,
diluvio dura 40 días y 40 noches: Los en el que Dios puede ocupar un
israelitas pasan por 40 años en el desierto; Moisés permanece lugar, meramente privado, sin interferir en nuestros propósitos
40 días en el monte Sinaí, y Elías peregrina 40 días al Horeb. esenciales. Nosotros debemos luchar en estos cuarenta días
Así, Jesús en un encuentro personal descubre su vocación de (tiempo de cuaresma) y vencer con la armadura de la verdad a
servicio. Cuando arrestaron a Juan el Bautista, se marcha a todo proyecto que tiene por finalidad alejarnos de Dios.

Para vivir la Cuaresma deberíamos preguntarnos: ¿Creo o no en Cristo?, ¿Con que disposición inicias
PREGUNTAS esta Cuaresma?
DE REFLEXIÓN ¿A que acción de compromiso cristiano te invita el Papa Francisco? ¿Cuáles son las tentaciones que te
acechan? ¿Cómo actuas ante ellas?

RITO DE ENTRADA 3. ACTO PENITENCIAL

M. Hermanas y hermanos: Hoy iniciamos el camino de la Cua- C. Humildes y penitentes, nos acercamos a Dios misericordioso
resma que nos conduce a la Pascua. Es tiempo de conversión, y le pedimos que tenga piedad de nosotros, que nos reconoce-
tiempo para llevar a la práctica el lema de la Cuaresma: "Camino mos pecadores. (Silencio breve)
de conversión personal y comunitario". Con este propósito inicia-
mos nuestra celebración. C. Tú que fuiste tentado por el espíritu del mal:
Señor, ten piedad.
1. CANTO DE ENTRADA: “Sí, me levantaré” (VSJ. 360) C. Tú que venciste la tentación con la fuerza de la Palabra de
Sí, me levantaré, Dios:
volveré junto a mi Padre. Cristo, ten piedad.
C. Tú que nos llamas a compartir tu victoria:
A Ti, Señor, elevo mi alma. Señor, ten piedad.
Tú eres mi Dios y mi Salvador.
C. Dios todopoderoso tenga misericordia de nosotros, perdone
Mira mi angustia, mira mi pena, nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna. Amén
dame la gracia de tu perdón.
Mi corazón busca tu rostro, 4. ORACION COLECTA
oye mi voz, Señor, ¡ten piedad! C. Oremos (silencio). Dios todopoderoso, concédenos que por la
práctica anual de la Cuaresma, progresemos en el conocimien-
2. SALUDO to del misterio de Cristo y vivamos en conformidad con él. Por
C. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén. nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la
C. La gracia y el amor de Jesucristo, que nos llama a la conver- unidad del Espíritu Santo, y es Dios por los siglos de los siglos.
sión esté con ustedes. Y con tu espíritu. Amén.
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5. PRIMERA LECTURA.
M. La alianza que Dios ha hecho con toda la humani-
dad y con la naturaleza por medio de Noé, continua
presente hoy. Con esta Alianza Dios da inicio del tiem-
po nuevo, de la historia nueva.
Lectura del libro del Génesis 9, 8-15
Dios dijo a Noé y a sus hijos:
«Yo establezco mi Alianza con ustedes, con sus
descendien­tes, y con todos los seres vivientes que están
con ustedes: con los pájaros, el ganado y las fieras salva-
jes; con todos los animales que salieron del arca, en una
palabra, con todos los seres vivientes que hay en la tierra.
Yo estableceré mi Alianza con ustedes: los morta­les ya no
volverán a ser exterminados por las aguas del Diluvio, ni
habrá otro Diluvio para devastar la tierra».
Dios añadió: «Éste será el signo de la Alianza que es-
tablezco con ustedes, y con todos los seres vivientes
que los acompañan, para todos los tiempos futuros:
Yo pongo mi arco en las nubes, como un signo de mi
Alianza con la tierra. Cuando cubra de nubes la tie-
rra y aparezca mi arco entre ellas, me acordaré de mi
Alianza con ustedes y con todos los seres vivientes, y
no volverán a preci­pitarse las aguas del Diluvio para
destruir a los mortales».
Palabra de Dios.
6. SALMO RESPONSORIAL 24, 4-5b. 6. 7b-9
R. Tus senderos, Señor, son amor y fidelidad.
Muéstrame, Señor, tus caminos,
enséñame tus senderos.
Guíame por el camino de tu fidelidad;
enséñame, porque Tú eres mi Dios y mi Salvador. R.
8.
EVANGELIO
M. El episodio de Jesús en el desierto
marca el camino cuaresmal de cada cris-
tiano y de toda la Iglesia: Dedicar la vida
a la misión que Cristo nos ha encomen-
dado.
“El hombre no vive solamente de pan,
sino de toda palabra que sale de la boca
de Dios.”
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Acuérdate, Señor, de tu compasión y de tu amor,
porque son eternos.
Por tu bondad, Señor,
acuérdate de mí según tu fidelidad. R.
El Señor es bondadoso y recto:
por eso muestra el camino a los extraviados;
Él guía a los humildes para que obren rectamente
y enseña su camino a los pobres. R.
7. SEGUNDA LECTURA.
M. El Diluvio es figura del sacramento del bautismo. Reci-
biéndolo, los cristianos participamos de la muerte y de la
resurrección de Jesucristo.
Lectura de la primera carta del Apóstol san Pedro 3,
18-22
Queridos hermanos:
Cristo padeció una vez por los pecados -el justo por los
injus­tos—para que, entregado a la muerte en su carne y
vivificado en el Espíritu, los llevara a ustedes a Dios. Y en-
tonces fue a hacer su anuncio a los espíritus que estaban
prisioneros, a los que se resis­tieron a creer cuando Dios
esperaba pacientemente, en los días en que Noé cons-
truía el arca. En ella, unos pocos —ocho en total— se
salvaron a través del agua.
Todo esto es figura del bautismo, por el que ahora ustedes
son salvados, el cual no consiste en la supresión de una
mancha corpo­ral, sino que es el compromiso con Dios de
una conciencia pura, por la resurrección de Jesucristo,
que está a la derecha de Dios, después de subir al cielo
y de habérsele sometido los Ángeles, las Dominaciones y
las Potestades.
Palabra de Dios.
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo
según san Marcos 1,12-15
El Espíritu llevó a Jesús al desierto, donde fue
tentado por Satanás durante cuarenta días.
Vivía entre las fieras, y los ángeles lo servían.
Después que Juan Bautista fue arrestado,
Jesús se dirigió a Galilea. Allí proclamaba la
Buena Noticia de Dios, diciendo: «El tiempo
se ha cumplido: el Reino de Dios está cerca.
Conviértanse y crean en la Buena Noticia.»
Palabra del Señor.
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COMUNIDAD EUCARÍSTICA: COMUNIDAD MISIONERA

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9. HOMILIA (Silencio) 13. ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
C. Te pedimos que nos dispongamos, Señor, para ofrecer conve-
10. CREDO nientemente estos dones con los que iniciamos el camino cua-
Creo en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la resmal. Por J.C.N.S. Amén
tierra.
Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que fue conce- PLEGARIA EUCARÍSTICA
bido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de santa María
Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, 14. CANTO DE COMUNIÓN: “¿Cómo le cantaré?” (VSJ. 200)

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muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resu- ¿Cómo le cantaré al Señor,
citó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la cómo le cantaré?
derecha de Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a ¿Cómo le cantaré al Señor?
juzgar a vivos y muertos. Hombre de barro soy.
Creo en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia católica, la comunión
de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la Él está en los montes y en el mar;
carne y la vida eterna. Amén Él llena el silencio de la noche en calma
y camina en la ciudad.
11. ORACION UNIVERSAL No mira en el hombre su color
C. Dios Padre, en este domingo que iniciamos el tiempo de cua- ni mira el dinero; es Padre de todos
resma, te pedimos que escuches las súplicas, que con humildad y a todos quiere el Señor.
te presentamos. A cada oración respondemos: Por Cristo, Ven-
cedor del mal, óyenos.
RITO DE COMUNIÓN
Por la Iglesia, para que sea una verdadera comunidad de
fe, escuche la Palabra de Dios y camine viviendo el lema 15. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
de esta Cuaresma. Oremos. C. Te pedimos, Padre, que reconfortados con el Pan del cielo
que alimenta nuestra fe, acrecienta nuestra esperanza y forta-
Por el Papa Francisco, para que su ministerio universal lece nuestra caridad, aprendamos a tener hambre de este Pan
impulse a la humanidad hacia una conversión integral y vivo y verdadero y a vivir de toda Palabra que sale de tu boca.
duradera. Oremos. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén
Por los Obispos, Sacerdotes y Diáconos, para que en
este tiempo de Cuaresma, acompañen a los fieles a una RITO DE CONCLUSIÓN
conversión personal y comunitaria. Oremos. M. Hermanas y hermanos: Después de haber vivido y participa-
Por los gobernantes, para que trabajen con justicia, priori- do en la Mesa del Señor, vayamos a nuestros hogares llenos de
fe y confianza, acercarnos a Dios en la oración y solidarizándo-
cen la seguridad y el bienestar de las personas impulsan- nos con nuestros hermanos más necesitados. Estamos todos
do la construcción de una sociedad según el mensaje del inivitados a vivir el lema de la Cuaresma. “Cuaresma: Camino
Evangelio. Oremos. de conversión personal y comunitaria”
Por nuestras comunidades parroquiales, para que sepan 16. BENDICIÓN.
vivir con alegría el Evangelio, caminen en un cambio pro- C. Dios Padre, misericordioso, les conceda, como al hijo pródi-
fundo y verdadero con esperanza y en oración. Oremos. go, el gozo de volver a la casa paterna. Amén.
Por nosotros para que sepamos vivir intensamente la C. Cristo, modelo de oración y vida, los guie a la auténtica con-
conversión cristiana como nos pide la liturgia de este versión del corazón, a través del camino de la Cuaresma. Amén
tiempo de Cuaresma. Oremos.
C. El Espíritu de Sabiduría y de fortaleza los sostenga en la lu-
(La Asamblea presente otras intenciones referidas a las urgen- cha contra el maligno, para que puedan celebrar con Cristo la
cias del momento que vive nuestro país, región, comunidad.) victoria pascual. Amén.
C. Escucha Padre nuestra oración, ayúdanos con tu gracia a vivir C. Y la bendición de Dios todopoderoso, del Padre, del Hijo (✝) y
este tiempo de conversión. Por J.C.N S. Amén. del Espíritu Santo, descienda sobre ustedes y permanezca para
siempre. Amén.
12. CANTO DE OFRENDAS: “Te ofrecemos, Señor lo que nos diste” (VSJ. 157
Te ofrecemos, Señor, lo que nos diste Tú. 17. CANTO FINAL: “Óyenos Madre de Cristo” (VSJ. 275)
Óyenos, Madre de Cristo,
Los días que se abren con luz y oraciones, óyenos, Madre de Dios,
las tardes repletas de frutos y gozo. esta canción que tus hijos
te dirigimos con nuestro amor.
El pan en las manos de tu sacerdote,
el cáliz que eleva por todos los hombres. Porque sabemos que con gran amor de Madre
cuidas a quienes te invocan de corazón,
Los cuerpos que ganan su pan con trabajo, por eso ahora te entonamos nuestro canto
los hombres que luchan y esperan tu reino. para alabarte y pedir tu intercesión.

SUGERENCIAS PARA LA CELEBRACIÓN

4 En el recinto del Templo, exhibir mensajes referidos a la Cuaresma.
4 Colocar en lugar visible el lema de esta Cuaresma: "Camino de conversión personal y comunitaria".
4 Fomentar el silencio litúrgico para meditar el mensaje de la Palabra y el significado de la Cuaresma.
4Vivir intensamente el Acto Penitencial.
4Se puede vivir el rito de la Ceniza Cuaresmal al finalizar la celebración.
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DEJARSE GUIAR POR EL ESPÍRITU DEL SEÑOR

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La comunidad creyente, seguidora de Je-

sús, ha iniciado, el pasado Miércoles de
Ceniza, la Cuaresma.

Nos preguntamos ¿Qué debemos hacer

este tiempo?, ¿cómo vivirlo?, ¿qué actitu-
des debemos asumir?

Partiendo de la experiencia de vida de

Jesús, tentado en el desierto, el mensaje
del Evangelio nos invita a vivir esa misma
experiencia.

La comunidad de san Marcos sitúa a Je-

sús en el desierto, al que fue guiado por
el Espíritu. El desierto es lugar y tiempo de decisiones. El advenimiento del reinado de Dios, pone al hombre, y
este tiempo de cuaresma a nosotros, ante la decisión de cambiar de mente y de corazón, donde el ejemplo de
Jesús, ha de inspirar siempre la conducta de los fieles: “Se ha cumplido el tiempo y está cerca del Reino de
Dios: arrepiéntanse y crean en la Buena Noticia” (Evangelio)

Este tiempo en que Jesús expresa e invita a participar de los bienes del Reino mediante la conversión, ha de ser
una salida al encuentro de Dios que viene en Jesús, a liberarnos, a pesar de que por reconocer a Cristo como
único Señor, suframos persecución.

En esta Cuaresma, tiempo que la Iglesia nos brinda para vivir una experiencia de cercanía con el Señor, dejémo-
nos guiar por su Espíritu y optemos por el proyecto de vida que Él nos ofrece, porque su Espíritu está presente
y vive con nosotros. “El Espíritu de Dios habita en ustedes” (Rom 8,9)

La Iglesia nos exhorta

“La alegría que hemos recibido en el encuentro con
Jesucristo, a quien reconocemos como el Hijo de Dios
encarnado y redentor , deseamos que llegue a todos los
hombres y mujeres heridos por las adversidades; deseamos
que la alegría de la buena noticia del Reino de Dios, de
Jesucristo vencedor del Pecado y de la muerte, llegue a
todos” (DA 28-29)

Dios habla cada día: del 23 de febrero al 2 de Marzo

Liturgia de las Horas I Semana.
Lunes: Lev 19,1-2.11-18; Sal 18,8-10.15; Mt 25,31-46
Martes: Is 55,10-11; Sal 33,4-7.16-19; Mt 6,7-15
Miércoles: Jon 3,1-10; Sal 50,3-4.12-13.18-19; Lc 11,29-32
Jueves: Est 3,6; 4,11-12.14-16.23-25; Sal 137,1-3.7c-8; Mt 7,7-12
Viernes (abstinencia): Ez 18,21-28; Sal 129,1-8; Mt 5,20-26
Sábado: Dt 26,16-19; Sal 118,1-2.4-5.7-8; Mt 5,43-48
Domingo, 2 de Cuaresma: Gn 22,1-2.9a-13.15-18; Sal 115,10.15-19; Rm 8,31b-34; Mc 9,2-10

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