ORACIONES DEL CONSAGRADO acrézcase en incendio; arda siempre en el altar de mi la fidelidad de cada día a la voluntad del Padre.
idelidad de cada día a la voluntad del Padre. bien y en ti confío: eres la Virgen fiel a Dios y a los
1.- PARA PEDIR EL AMOR DE JESUCRISTO.
“No espere alcanzar misericordia de Dios quien ofenda a
su Madre bendita”.
Para alcanzar de tu misericordia, una verdadera
devoción hacia tu Santísima Madre y difundir esta
devoción por toda la tierra, concédeme amarte
ardientemente y acepta para ello la súplica inflamada
que te dirijo con San Agustín y tus verdaderos amigos:
“Tú eres, Oh Cristo,
Mi Padre Santo, mi Dios Misericordioso,
Mi Rey Poderoso, mi Buen Pastor,
Mi Único Maestro, mi mejor ayuda,
Mi Amado Hermosísimo, mi Pan Vivo,
Mi Sacerdote por la eternidad,
Mi Guía hacia la Patria,
Mi Luz Verdadera, mi Dulzura Santa,
Mi Camino Recto, mi Sabiduría Preclara,
Mi Humilde Simplicidad, mi Concordia Pacífica,
Mi Protección Total, mi Rica Heredad,
Mi Salvación Eterna…
¡Cristo Jesús, Señor amabilísimo! ¿Por qué habré
deseado durante la vida algo fuera de ti, mi Jesús y mi
Dios? ¿Dónde me hallaba cuando no pensaba en ti?
Anhelos todos de mi corazón, inflámense y desbórdense
desde ahora hacia el Señor Jesús; corran, que mucho se
han retrasado, apresúrense hacia la meta, busquen a
quien buscan.
¡Oh Jesús! ¡Anatema quien no te ame! ¡Rebose de
amargura quien no te quiera!
¡Dulce Jesús, que todo buen corazón dispuesto a la
alabanza, te ame, se deleite en ti, se admire ante ti!
¡Dios de mi corazón! ¡Herencia mía, Cristo Jesús!
¡Desfallezca el latir de mi corazón! Vive, Señor, en mí;
enciéndase en mi pecho la viva llama de tu amor,
5. AL ESPÍRITU SANTO
Oh Espíritu Santo, ayúdame a cumplir mi compromiso,
concédeme todas las gracias; planta y cultiva en mí el
árbol de la vida verdadera que es la amabilísima María
para que crezca y de flores y frutos abundantes.
Oh Espíritu Santo, concédeme amar y venerar a María tu
esposa fidelísima, apoyarme en su amparo maternal y
recurrir a Ella confiadamente en toda circunstancia.
Forma con Ella en mí a Jesucristo hasta la plena
madurez espiritual (cf. Ef. 4,13). Amén.
6. A MARÍA
¡Oh María, Hija predilecta del Padre, Madre admirable
del Hijo, Esposa fidelísima del Espíritu Santo!
Tú eres mi Madre espiritual, mi admirable maestra y
soberana, mi gozo, mi corona, mi corazón y mi alma.
Tú eres toda mía por bondad del Señor y yo te
pertenezco por justicia.
Más, aún no soy tuyo cuanto debo: por ello, hoy me
consagro a ti en disponibilidad plena y eterna,
comprometiéndome a arrancar de mí cuanto desagrade
a mi Dios y a plantar, levantar y producir todo lo que tú
quieras.
Que la luz de tu fe disipe las tinieblas de mi espíritu, que
tu humildad profunda sustituya a mi orgullo, que tu
contemplación contenga a mi alocada fantasía, que tu
visión no interrumpida de Dios llene con su presencia mi
memoria, que el fuego de tu ardiente caridad incendie la
tibieza y frialdad de mi pecho, que mis pecados cedan el
paso a tus virtudes y el fulgor de tu gracia me acompañe
al encuentro con Dios. Madre mía amadísima,
alcánzame la gracia de no tener más espíritu que el tuyo
para conocer a Jesús y su Evangelio; más alma que la
tuya para alabar y glorificar al Señor; más corazón que el
tuyo para amar a Dios como tú lo amas.
corazón, queme en mis entrañas, incendie lo íntimo de
mi alma, y que en el día de mi muerte comparezca yo del
todo perfecto en tu presencia. Amén”.
2.- CONSAGRACIÓN DE SÍ MISMO A
JESUCRISTO LA SABIDURÍA ENCARNADA
POR MEDIO DE MARÍA.
¡Oh Jesús! Sabiduría eterna y encarnada, te adoro en la
gloria del Padre, durante la eternidad, y en el seno
virginal de María, en el tiempo de tu Encarnación.
Te agradezco que hayas venido al mundo - hombre entre
los hombres y servidor del Padre – para librarme de la
esclavitud del pecado.
Te alabo y glorifico porque has vivido en obediencia
amorosa a María, para hacerme fiel discípulo tuyo.
Desgraciadamente, no he guardado las promesas y
compromisos de mi bautismo, no soy digno de llamarme
hijo de Dios.
Por ello, acudo a la misericordiosa intercesión de tu
Madre, esperando obtener por su ayuda, el perdón de
mis pecados y una continua unión contigo, Sabiduría
encarnada.
Te saludo, pues, Oh María Inmaculada, Templo viviente
de Dios: en ti ha puesto su morada la Sabiduría eterna,
para recibir la adoración de los ángeles y de los
hombres, te saludo, oh Reina del cielo y de la tierra; a ti
están sometidas todas las criaturas. Te saludo, refugio
seguro de los pecadores, todos experimentan tu gran
misericordia.
Acepta los anhelos que tengo de la Divina Sabiduría y mi
consagración total:
Consciente de mi vocación cristiana, renuevo hoy, en tus
manos, mis compromisos bautismales.
Renuncio a Satanás, a sus seducciones y a sus obras y
me consagro a Jesucristo para llevar mi cruz con Él, en
No te pido visiones, ni revelaciones, ni gustos, ni
consuelos aún espirituales.
Para ti, el ver claro sin tinieblas ni dudas; para ti, el
saborear el gozo pleno; para ti, el triunfar junto a tu Hijo;
para ti, el dominar cielos y tierra y humillar los poderes
del maligno; para ti, el difundir como tú quieras los dones
del Altísimo.
Esta es tu mejor parte, que no te será nunca arrebatada
y me llena de gozo el corazón.
Para mí solamente gozarme en tu alegría, seguirte en tu
camino, creer confiado solamente en Dios, sufrir con
alegría cerca a Cristo, morir al egoísmo cada día,
colaborar contigo para salvar al mundo.
Te pido solamente poder decir tres veces Amén, en
todos los momentos de mi vida:
Amén a cuanto hiciste en este mundo, Amén a cuanto
hoy haces en el cielo, Amén a cuanto ahora haces en mi
alma, para que en ella Cristo sea glorificado en plenitud,
en el tiempo y en la eternidad. Amén.
7. VEN, ESPÍRITU CREADOR
Ven, Espíritu Creador,
nuestras almas visita
y tu gracia infinita
infunde al corazón.
Tú eres el abogado,
don de Dios, viva fuente,
fuego y amor ardiente
y espiritual unción.
Fuente de siete Dones,
mano de Dios abierta,
del Padre rica oferta,
hálito inspirador.
CORONILLA DE ALABANZAS
A MARÍA
V/. Dígnate aceptar mis alabanzas, Virgen Santísima.
R/. Dame fuerzas contra tus enemigos.
1. CORONA DE EXCELENCIA
* Padrenuestro.
* Dios te salve, María.
V/. Bienaventurada eres, Virgen María, que llevaste en tu
seno al Señor y Creador del mundo
R/. engendraste al que te formó, permaneciendo siempre
virgen.
V/. Regocíjate, Virgen María.
R/. ¡Regocíjate mil veces!
* Dios te salve, María.
V/. Oh Virgen Santa e Inmaculada, no sé con qué
alabanzas honrarte dignamente
R/. porque llevaste en tu seno al que no pueden contener
los cielos.
V/. Regocíjate, Virgen María.
R/. ¡Regocíjate mil veces!
* Dios te salve, María.
V/. Muy hermosa eres, oh María
R/. no hay en ti mancha alguna.
V/. Regocíjate, Virgen María.
R/. ¡Regocíjate mil veces!
* Dios te salve, María.
V/. Hay más virtudes en ti, Virgen María,
R/. que estrellas en el cielo.
V/. Regocíjate, Virgen María.
R/. ¡Regocíjate mil veces!
Gloria al Padre, y al Hijo...
En presencia de toda la iglesia, te reconozco ahora por hombres, que no dejas perder nada de cuanto a ti se
mi Madre y Soberana. Te ofrezco y consagro mi confía; eres la Virgen Poderosa: nadie podrá hacerte
persona, mi vida y el valor de mis buenas acciones daño ni perjudicar tampoco a los que tú amas. Amén.
pasadas, presentes y futuras. Dispón de mí y de cuanto
me pertenece para la mayor gloria de Dios en el tiempo y
4.- ORACIÓN A JESUCRISTO
la eternidad.
Madre del Señor, acepta mi oblación y preséntala a tu
Gracias, Señor Jesucristo, por haberme concedido la
Hijo; si Él me redimió con tu colaboración, debe también
gracia de consagrarme a María.
ahora recibir de tu mano el don total de mí mismo. Que
Ella será mi socorro, que levantándome de mi propia
yo viva plenamente esta consagración para prolongar en
miseria, me introducirá más y más profundamente en tu
mí la amorosa obediencia de tu Hijo y dar respuesta vital
amistad.
a la misión que Dios te ha confiado en la historia de la
Ay, Señor, débil como soy, sin Ella ya hubiera
salvación.
naufragado en mis pecados. ¡Sí, María me hace falta
Madre de misericordia, alcánzame la verdadera
sabiduría de Dios y hazme plenamente disponible a tu
ante ti y en todas partes! Con Ella, en cambio me libraré
del pecado y de sus consecuencias y podré acercarme a
acción maternal.
ti, dialogar contigo y agradarte en todo; aceptar
Oh Virgen fiel, haz de mí un auténtico discípulo de tu
radicalmente tu Evangelio, salvarme e irradiar tu amor y
Hijo, la Sabiduría encarnada. Contigo, Madre y modelo
salvación a mis hermanos.
de mi vida, llegaré a la perfecta madurez de Jesucristo,
¡Como quisiera, oh Jesús, publicar ante todas las
en la tierra, y a la gloria del cielo Amén. criaturas tu gran misericordia a favor mío! Y hacer que
todo el mundo conozca, que a no ser por María, hace
3.- ORACIÓN DE CONFIANZA tiempo estaría yo condenado ¡y agradecerte dignamente
este favor!
Acepta, querida Madre y Reina mía, toda mi persona y ¡María está conmigo! ¡Qué tesoro tan precioso! ¡Qué
cuanto con la gracia de tu querido Hijo he podido hacer alegría tan inmensa!
de bueno. Pero Señor, amor con amor se paga; que ingratitud la
Yo mismo no soy capaz de conservarlo dada mi mía si no me consagrara a Ella totalmente.
debilidad e inconstancia, ¡y la forma en que me Salvador mío amadísimo: antes morir que vivir sin Ella.
combaten continuamente mis enemigos espirituales! Mil y mil veces como Juan ante la Cruz (Jn. 19, 27) he
Veo todos los días caer por tierra los cedros del Líbano, aceptado a María como tu don más precioso, y ¡cuántas
y convertirse en aves nocturnas las águilas que volaban veces me he consagrado a Ella, aunque todavía con
en torno al sol. tanta imperfección!
Mil justos caen a mi izquierda, diez mil a mi derecha… Por ello quiero ahora, con la madurez y disponibilidad
(Sal. 91, 7). Más yo confío en ti mi poderosa y más que que esperas de mí, consagrarme a Ella nuevamente.
poderosa Madre. Tenme, que no caiga; conserva mis Arranca de mi ser cuanto no pertenezca a tan augusta
bienes, que no me saqueen; protege en mí la vida divina. Reina: pues, si no es digno de Ella, tampoco es digno de
¡Defiende a quien a ti se ha consagrado! Yo te conozco
ti. Amén.
Infúndenos tu lumbre Bendita Señora
y con tu viva llama la más dulce y buena:
el corazón inflama, borrando el pecado,
dale fuerza y vigor. endulza las penas
Aleja al enemigo Danos vida santa
danos paz y victoria, y recto camino
guíanos a la gloria, para que en el cielo
Divino defensor. veamos a tu Hijo.
Obtennos conocerte, Gloria al Padre Eterno,
Espíritu Divino Gloria a Jesucristo,
vivir en ti, Dios Trino, Gloria al Santo Espíritu
y disfrutar de tu Amor. y Gloria a los tres.
Amén. Amén.
8. OH SANTA MARÍA 9. MAGNÍFICAT
Oh Santa María
Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi
de mares estrella, espíritu en Dios, mi Salvador; porque ha mirado la
Virgen de Dios Madre humillación de su esclava.
y del cielo puerta. Desde ahora me felicitarán todas las generaciones,
porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí: su
Retomando el Ave Nombre es Santo, y su misericordia llega a sus fieles de
que Gabriel te diera, generación en generación.
la paz corrobora Él hace proezas con su brazo: dispersa a los soberbios
cambia el nombre de Eva. de corazón, derriba del trono a los poderosos y enaltece
a los humildes, a los hambrientos los colma de bienes y
Al ciego ilumina a los ricos los despide vacíos.
y libra al cautivo, Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de su
ahuyenta los males misericordia -como lo había prometido a nuestros
da bienes Divinos. padres- en favor de Abraham y su descendencia por
siempre. Amén.
Haz ver que eres Madre,
por ti nuestras preces
reciba el que es tuyo
y ser nuestro quiere.
.
2. CORONA DE PODER * Dios te salve, María.
V/. Gloria a ti, Alegría de los justos:
* Padrenuestro. R/. condúcenos contigo a las alegrías del cielo.
* Dios te salve, María. V/. Regocíjate, Virgen María. R/. ¡Regocíjate mil veces!
V/. Gloria a ti, Reina del universo,
R/. condúcenos contigo a la felicidad del Cielo. * Dios te salve, María.
V/. Regocíjate, Virgen María. R/. ¡Regocíjate mil veces! V/. Gloria a ti, prestísima ayuda nuestra en la vida y la
muerte;
* Dios te salve, María. R/. llévanos contigo al reino de los cielos.
V/. Gloria a ti, tesorera de las gracias del Señor: V/. Regocíjate, Virgen María. R/. ¡Regocíjate mil veces!
R/. danos participar en los dones de Dios. Gloria al Padre, y al Hijo...
V/. Regocíjate, Virgen María. R/. ¡Regocíjate mil veces!
OREMOS:
* Dios te salve, María.
V/. Gloria a ti, mediadora entre Dios y los hombres: Dios te salve, María, Hija de Dios Padre, Madre de Dios
R/. haz que sea más íntimo nuestro encuentro con Hijo, Esposa del Espíritu Santo, Templo augusto de la
Cristo. Santísima Trinidad.
V/. Regocíjate, Virgen María. R/. ¡Regocíjate mil veces! Dios te salve, María, Señora mía, mi tesoro, mi belleza,
Reina de mi corazón, Madre, vida, dulzura y esperanza
* Dios te salve, María. mía queridísima, –más aún– mi corazón y mi alma.
V/. Gloria a ti, Triunfadora sobre las fuerzas del mal: Soy todo tuyo, Oh Virgen benditísima, y todo lo mío es
R/. sé nuestra piadosa guía por los senderos del tuyo.
Evangelio. More en mí tu alma para engrandecer al Señor, more en
V/. Regocíjate, Virgen María. R/. ¡Regocíjate mil veces! mí tu espíritu para regocijarme en Dios.
Gloria al Padre, y al Hijo... Oh Virgen fidelísima, ponte como un sello sobre mi
corazón, para que en ti y por ti permanezca fiel al Señor.
3. CORONA DE BONDAD Concédeme, por tu bondad, la gracia de contarme en el
número de los que amas, enseñas, diriges, nutres y
* Padrenuestro. proteges como a hijos.
* Dios te salve, María. Haz que despreciando por tu amor todos los consuelos
V/. Gloria a ti, Refugio de los pecadores: terrenos, aspire continuamente a los bienes celestiales,
R/. intercede por nosotros ante el Señor. hasta que por medio del Espíritu Santo, tu Esposo
V/. Regocíjate, Virgen María. R/. ¡Regocíjate mil veces! fidelísimo, y de ti, Esposa suya fidelísima, sea formado
en mí Jesucristo, tu Hijo, para gloria del Padre celestial.
* Dios te salve, María.
AMÉN.
V/. Gloria a ti, Madre de los hombres:
R/. enséñanos a vivir como hijos de Dios.
V/. Regocíjate, Virgen María. R/. ¡Regocíjate mil veces!
JACULATORIAS PARA EL ROSARIO
V/. María es madre de gracia y madre de
misericordia.
R/. En la vida y en la muerte, ampáranos madre
nuestra.
V/. Sea amado y adorado en todo momento
R/. Jesús en el Santísimo Sacramento
OH JESÚS MÍO, PERDONA NUESTROS
PECADOS; LÍBRANOS DEL FUEGO DEL
INFIERNO; LLEVA AL CIELO A TODAS LAS
ALMAS, ESPECIALMENTE A LAS MÁS
NECESITADAS DE TU INFINITA MISERICORDIA.
AMÉN.
V/. El Rosario de María nos libre de todo mal.
R/. Alabemos noche y día a la Reina celestial.
VEN, DIVINA VOLUNTAD, VEN A REINAR EN
LOS CORAZONES DE LAZOS DE AMOR
MARIANO Y EN LOS DEL MUNDO ENTERO.
AMÉN.
SAN JOSÉ
SAN MIGUEL ARCÁNGEL
San Miguel Arcángel, con tu luz: ilumínanos.
San Miguel Arcángel, con tus alas: protégenos.
San Miguel Arcángel, con tu espada: defiéndenos.
LETANÍAS A MARÍA.
“No espere alcanzar misericordia de Dios quien
ofenda a su Madre bendita”.
Para alcanzar de tu misericordia, una verdadera
devoción hacia tu Santísima Madre y difundir esta
devoción por toda la tierra, concédeme amarte
ardientemente y acepta para ello la súplica
inflamada que te dirijo con San Agustín y tus
5. AL ESPÍRITU SANTO
Oh Espíritu Santo, ayúdame a cumplir mi
compromiso, concédeme todas las gracias; planta y
cultiva en mí el árbol de la vida verdadera que es la
amabilísima María para que crezca y dé flores y
frutos abundantes.
Oh Espíritu Santo, concédeme amar y venerar a
María tu esposa fidelísima, apoyarme en su amparo
maternal y recurrir a Ella confiadamente en toda
circunstancia. Forma con Ella en mí a Jesucristo
hasta la plena madurez espiritual (cf. Ef. 4,13).
Amén.
6. A MARÍA
¡Oh María, Hija predilecta del Padre, Madre
admirable del Hijo, Esposa fidelísima del Espíritu
Santo!
Tú eres mi Madre espiritual, mi admirable maestra y
soberana, mi gozo, mi corona, mi corazón y mi
alma.
Tú eres toda mía por bondad del Señor y yo te
pertenezco por justicia.
Más, aún no soy tuyo cuanto debo: por ello, hoy me
consagro a ti en disponibilidad plena y eterna,
comprometiéndome a arrancar de mí cuanto
desagrade a mi Dios y a plantar, levantar y producir
todo lo que tú quieras.
Que la luz de tu fe disipe las tinieblas de mi espíritu,
que tu humildad profunda sustituya a mi orgullo,
que tu contemplación contenga a mi alocada
fantasía, que tu visión no interrumpida de Dios llene
con su presencia mi memoria, que el fuego de tu
ardiente caridad incendie la tibieza y frialdad de mi
pecho, que mis pecados cedan el paso a tus
virtudes y el fulgor de tu gracia me acompañe al
encuentro con Dios. Madre mía amadísima,
alcánzame la gracia de no tener más espíritu que el
tuyo para conocer a Jesús y su Evangelio; más
alma que la tuya para alabar y glorificar al Señor;
altar de mi corazón, queme en mis entrañas,
incendie lo íntimo de mi alma, y que en el día de mi
muerte comparezca yo del todo perfecto en tu
presencia. Amén”.
COMUNIÓN ESPIRITUAL
y digno de llamarme hijo de Dios.
Por ello, acudo a la misericordiosa intercesión de tu
Madre, esperando obtener por su ayuda, el perdón
de mis pecados y una continua unión contigo,
Sabiduría encarnada.
Te saludo, pues, Oh María Inmaculada, Templo
viviente de Dios: en ti ha puesto su morada la
Sabiduría eterna, para recibir la adoración de los
ángeles y de los hombres, te saludo, oh Reina del
cielo y de la tierra; a ti están sometidas todas las
criaturas. Te saludo, refugio seguro de los
pecadores, todos experimentan tu gran
misericordia.
Acepta los anhelos que tengo de la Divina
Sabiduría y mi consagración total:
Consciente de mi vocación cristiana, renuevo hoy,
en tus manos, mis compromisos bautismales.
Renuncio a Satanás, a sus seducciones y a sus
obras y me consagro a Jesucristo para llevar mi
cruz con Él, en la fidelidad de cada día a la voluntad
del Padre.
más corazón que el tuyo para amar a Dios como tú
lo amas.
No te pido visiones, ni revelaciones, ni gustos, ni
consuelos aún espirituales.
Para ti, el ver claro sin tinieblas ni dudas; para ti, el
saborear el gozo pleno; para ti, el triunfar junto a tu
Hijo; para ti, el dominar cielos y tierra y humillar los
poderes del maligno; para ti, el difundir como tú
quieras los dones del Altísimo.
Esta es tu mejor parte, que no te será nunca
arrebatada y me llena de gozo el corazón.
Para mí solamente gozarme en tu alegría, seguirte
en tu camino, creer confiado solamente en Dios,
sufrir con alegría cerca a Cristo, morir al egoísmo
cada día, colaborar contigo para salvar al mundo.
Te pido solamente poder decir tres veces Amén, en
todos los momentos de mi vida:
Amén a cuanto hiciste en este mundo, Amén a
cuanto hoy haces en el cielo, Amén a cuanto ahora
haces en mi alma, para que en ella Cristo sea
glorificado en plenitud, en el tiempo y en la
eternidad.
7. VEN, ESPÍRITU CREADOR
Ven, Espíritu Creador,
nuestras almas visita
y tu gracia infinita
infunde al corazón.
Tú eres el abogado,
don de Dios, viva fuente,
fuego y amor ardiente
y espiritual unción.
Fuente de siete Dones,
mano de Dios abierta,
del Padre rica oferta,
hálito inspirador.
CORONILLA DE ALABANZAS A
MARÍA
V/. Dígnate aceptar mis alabanzas, Virgen
Santísima.
R/. Dame fuerzas contra tus enemigos.
1. CORONA DE EXCELENCIA
* Padrenuestro.
* Dios te salve, María.
Bienaventurada eres, Virgen María, que llevaste en
tu seno al Señor y Creador del mundo: engendraste
al que te formó, permaneciendo siempre virgen.
V/. Regocíjate, Virgen María.
R/. ¡Regocíjate mil veces!
* Dios te salve, María.
Oh Virgen Santa e Inmaculada, no sé con qué
alabanzas honrarte dignamente, porque llevaste en
tu seno al que no pueden contener los cielos.
V/. Regocíjate, Virgen María.
R/. ¡Regocíjate mil veces!
* Dios te salve, María.
Muy hermosa eres, oh María, no hay en ti mancha
alguna.
V/. Regocíjate, Virgen María.
R/. ¡Regocíjate mil veces!
* Dios te salve, María.
Hay más virtudes en ti, Virgen María, que estrellas
en el cielo.
V/. Regocíjate, Virgen María.
R/. ¡Regocíjate mil veces!
Gloria al Padre, y al Hijo...
En presencia de toda la iglesia, te reconozco ahora cuanto a ti se confía; eres la Virgen Poderosa:
por mi Madre y Soberana. Te ofrezco y consagro mi nadie podrá hacerte daño ni perjudicar tampoco a
persona, mi vida y el valor de mis buenas acciones los que tú amas. Amén.
pasadas, presentes y futuras. Dispón de mí y de
cuento me pertenece para la mayor gloria de Dios 4.- ORACIÓN A JESUCRISTO
en el tiempo y la eternidad.
Madre del Señor, acepta mi oblación y preséntala a Gracias, Señor Jesucristo, por haberme concedido
tu Hijo; si Él me redimió con tu colaboración, debe la gracia de consagrarme a María.
también ahora recibir de tu mano el don total de mí Ella será mi socorro, que levantándome de mi
mismo. Que yo viva plenamente esta consagración propia miseria, me introducirá más y más
para prolongar en mí la amorosa obediencia de tu profundamente en tu amistad.
Hijo y dar respuesta vital a la misión que Dios te ha Ay, Señor, débil como soy, sin Ella ya hubiera
confiado en la historia de la salvación. naufragado en mis pecados. ¡Sí, María me hace
Madre de misericordia, alcánzame la verdadera falta ante ti y en todas partes! Con Ella, en cambio
sabiduría de Dios y hazme plenamente disponible a me libraré del pecado y de sus consecuencias y
tu acción maternal. podré acercarme a ti, dialogar contigo y agradarte
Oh Virgen fiel, haz de mí un auténtico discípulo de en todo; aceptar radicalmente tu Evangelio,
tu Hijo, la Sabiduría encarnada. Contigo, Madre y salvarme e irradiar tu amor y salvación a mis
modelo de mi vida, llegaré a la perfecta madurez de hermanos.
Jesucristo, en la tierra, y a la gloria del cielo Amén. ¡Como quisiera, oh Jesús, publicar ante todas las
criaturas tu gran misericordia a favor mío! Y hacer
3.- ORACIÓN DE CONFIANZA que todo el mundo conozca, que a no ser por
María, hace tiempo estaría yo condenado ¡y
Acepta, querida Madre y Reina mía, toda mi agradecerte dignamente este favor!
persona y cuanto con la gracia de tu querido Hijo he ¡María está conmigo! ¡Qué tesoro tan precioso!
podido hacer de bueno. ¡Qué alegría tan inmensa!
Yo mismo no soy capaz de conservarlo dada mi Pero Señor, amor con amor se paga; que ingratitud
debilidad e inconstancia, ¡y la forma en que me la mía si no me consagrara a Ella totalmente.
combaten continuamente mis enemigos Salvador mío amadísimo: ante morir que vivir sin
espirituales! Ella mil y mil veces como, Juan ante la Cruz (Jn.
Veo todos los días caer por tierra los cedros del 19, 27) he aceptado a María como tu don más
Líbano, y convertirse en aves nocturnas las águilas precioso, y ¡cuántas veces me he consagrado a
que volaban en torno al sol. Ella, aunque todavía con tanta imperfección!
Mil justos caen a mi izquierda mil a mi derecha… Por ello quiero ahora, con la madurez y
(Sal. 91, 7). Más yo confío en ti mi poderosa y más disponibilidad que esperas de mí, consagrarme a
que poderosa Madre. Tenme que no caiga; Ella nuevamente.
conserva mis bienes, que no me saqueen; protege Arranca de mí ser cuanto no pertenezca a tan
en mí la vida divina. augusta Reina: pues, si no es digno de Ella,
¡Defiende a quien a ti se ha consagrado! Yo te tampoco es digno de ti.
conozco bien y en ti confío: eres la Virgen fiel a
Dios y a los hombres que no dejas perder nada de
Infúndenos tu lumbre Bendita Señora
y con tu viva llama la más dulce y buena:
el corazón inflama, borrando el pecado,
dale fuerza y vigor. endulza las penas
Aleja al enemigo Danos vida santa
danos paz y victoria, y recto camino
guíanos a la gloria, para que en el cielo
Divino defensor. veamos a tu Hijo.
Obtennos conocerte, Gloria al Padre Eterno,
Espíritu Divino Gloria a Jesucristo,
vivir en ti, Dios Trino, Gloria al Santo Espíritu
y disfrutar de tu Amor. y Gloria a los tres.
Amén. Amén.
8. OH SANTA MARÍA 9. MAGNÍFICAT
Oh Santa María Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra
de mares estrella, mi espíritu en Dios, mi salvador; porque ha mirado
Virgen de Dios Madre la humillación de su esclava.
y del cielo puerta. Desde ahora me felicitarán todas las generaciones,
porque el Poderoso ha hecho obras grandes por
Retomando el Ave mí: su Nombre es Santo, y su misericordia llega a
que Gabriel te diera, sus fieles de generación en generación.
la paz corrobora Él hace proezas con su brazo: dispersa a los
cambia el nombre de Eva. soberbios de corazón, derriba del trono a los
poderosos y enaltece a los humildes, a los
Al ciego ilumina hambrientos los colma de bienes y a los ricos los
y libra al cautivo, despide vacíos.
ahuyenta los males Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de su
da bienes Divinos. misericordia -como lo había prometido a nuestros
padres- en favor de Abraham y su descendencia
Haz ver que eres Madre, por siempre.
por ti nuestras preces Amén.
reciba el que es tuyo
y ser nuestro quiere.
2. CORONA DE PODER * Dios te salve, María.
Gloria a ti, Alegría de los justos: condúcenos
* Padrenuestro. contigo a las alegrías del cielo.
* Dios te salve, María. V. Regocíjate, Virgen María.
Gloria a ti, Reina del universo, condúcenos contigo R. ¡Regocíjate mil veces!
a la felicidad del Cielo. * Dios te salve, María.
V/. Regocíjate, Virgen María. Gloria a ti, prestísima ayuda nuestra en la vida y la
R/. ¡Regocíjate mil veces! muerte; llévanos contigo al reino de los cielos.
* Dios te salve, María. V. Regocíjate, Virgen María.
Gloria a ti, tesorera de las gracias del Señor: danos R. ¡Regocíjate mil veces!
participar en los dones de Dios. Gloria al Padre, y al Hijo...
V/. Regocíjate, Virgen María.
R/. ¡Regocíjate mil veces! OREMOS:
* Dios te salve, María.
Gloria a ti, mediadora entre Dios y los hombres: Dios te salve, María, Hija de Dios Padre, Madre de
haz que sea más íntimo nuestro encuentro con Dios Hijo, Esposa del Espíritu Santo, Templo
Cristo. augusto de la Santísima Trinidad.
V. Regocíjate, Virgen María. Dios te salve, María, Señora mía, mi tesoro, mi
R. ¡Regocíjate mil veces! belleza, Reina de mi corazón, Madre, vida, dulzura
* Dios te salve, María. y esperanza mía queridísima, –más aún– mi
Gloria a ti, Triunfadora sobre las fuerzas del mal: corazón y mi alma.
sé nuestra piadosa guía por los senderos del Soy todo tuyo, Oh Virgen benditísima, y todo lo mío
Evangelio. es tuyo.
V. Regocíjate, Virgen María. More en mí tu alma para engrandecer al Señor,
R. ¡Regocíjate mil veces! more en mí tu espíritu para regocijarme en Dios.
Gloria al Padre, y al Hijo... Oh Virgen fidelísima, ponte como un sello sobre mi
corazón, para que en ti y por ti permanezca fiel al
3. CORONA DE BONDAD Señor.
Concédeme, por tu bondad, la gracia de contarme
* Padrenuestro. en el número de los que amas, enseñas, diriges,
* Dios te salve, María. nutres y proteges como a hijos.
Gloria a ti, Refugio de los pecadores: intercede por Haz que despreciando por tu amor todos los
nosotros ante el Señor. consuelos terrenos, aspire continuamente a los
V. Regocíjate, Virgen María. bienes celestiales, hasta que por medio del Espíritu
R. ¡Regocíjate mil veces! Santo, tu Esposo fidelísimo, y de ti, Esposa suya
* Dios te salve, María. fidelísima, sea formado en mí Jesucristo, tu Hijo,
Gloria a ti, Madre de los hombres: enséñanos a vivir para gloria del Padre celestial.
como hijos de Dios. AMÉN.
V. Regocíjate, Virgen María.
R. ¡Regocíjate mil veces!