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Elementos arquitectónicos, lo primero a destacar es la sustitución del arco de medio punto por
el arco apuntado, con esto también se sustituyen a las bóvedas de arista por la de crucería,
que está formada por cuatro arcos apuntados.
De la bóveda de crucería hay que tener en cuenta tres elementos, el arco apuntado, la clave y
los nervios.
Clave, es el punto central e interno de la bóveda de crucería donde confluyen las fuerzas de los
distintos arcos, mientras que los nervios son estructuras internas de la propia bóveda que
trasladan esa fuerza desde la clave a los pilares de la parte inferior.
Arcos fajones, son arcos apuntados que sirven para sustentar el techo de la boveda, su nombre
como es lógico viene de la palabra faja, se lo coloca para evitar que la piedra del techo salga
fuera o se caiga.
DIFERENCIA ENTRE ARCO FAJON Y ARCO APUNTADO: TODO ARCO FAJON EN UN ARCO
APUNTADO, PERO NO TODO ARCO APUNTADO ES FAJON, EL FAJON ES SOLO AQUEL QUE SIRVE
PARA SUSTENTAR LA BOVEDA DE CRUCERIA.
Triforio o tribuna, pasillo ubicado en la página superior de las naves laterales, una especie de
palco situado encima de esas dos partes.
Pilares, estructura que sirve para recoger las fuerzas de la parte superior del edificio y evitar
que este se derrumbe.
Ventanales, tienen un función fundamental, que es permitir que la luz ilumine la catedral
gótica, en este estilo artístico es sumamente importante la iluminación.
Contexto:
Desde la caída del Imperio Romano de Occidente como consecuencia de las invasiones
germánicas (siglo V) hasta el siglo X, Europa atraviesa una época de profunda inestabilidad. El
ordenamiento social y político romano, junto al arte, la cultura y la ciencia se ven gravemente
dañados.
Los desplazamientos masivos de pobladores, las grandes invasiones (siglos IX y X) de vikingos,
hunos y musulmanes y las guerras que éstas acarrean, sumen al continente, salvo momentos y
lugares concretos, en una situación de precariedad social.
Las pestes, el hambre y las guerras de la época parecen anunciar el fin del mundo, justificando
el terror milenario que el hombre medieval siente durante las últimas décadas del siglo X.
La planta tiene forma de cruz latina. Presenta una o tres naves, siendo la central más amplia
que las laterales.
Cada nave acaba en un ábside, generalmente semicircular. Y el ábside se suele cubrir con una
bóveda de cuarto de esfera.
En el interior de las iglesias este arco está sustentado por capiteles profusamente decorados
con escenas bíblicas, animales fantásticos.
El desarrollo en profundidad del arco de medio punto , genera la bóveda de cañón, la que se
refuerza mediante arcos fajones. En las naves laterales suele emplearse la bóveda de arista,
que se genera por el cruce en ángulo recto de dos bóvedas de cañón.
La bóveda, que confiere más solidez y perdurabilidad al edificio, al ser más pesada que los
techos de madera, requiere de muros más gruesos. Éstos, para sostener esas bóvedas de
piedra, no admitirán muchos vanos y requerirán de contrafuertes, tanto en el exterior como en
el interior.
La decoración inunda cada uno de estos elementos arquitectónicos, cumpliendo una clara
función didáctica.
Simbolismo de la iglesia románica
• Además de las naves, el transepto, el ábside, solía haber un atrio o pórtico en la entrada
(nártex), un claustro o patio rodeado de columnas, una cripta para las reliquias, y torres-
campanarios (exentas o adosadas al edificio).
• Los atrios sirvieron como lugares de reunión civiles, las torres para vigilancia militar, lo que
prueba la importancia de la iglesia en la vida comunitaria.