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creer.
Esto implica tener una casa grande, una carrera consolidada, un buen cuerpo y
viajes todos los años.
Lo cierto es que todo el mundo tiene su propio camino para recorrer en esta
vida; lo que aportará la verdadera felicidad y éxito difiere en cada persona, así
que no, no hay una única definición de éxito.
2. La vida es un trabajo duro
La vida está hecha para ser disfrutada y, por eso, aunque pasemos por
momentos malos, deberíamos ser capaces de apreciar los buenos.
Tu vida debería estar llena de momentos de alegría y felicidad; no debe ser una
lucha constante y desgastante. Encárgate de eso.
3. La vida pasa sin que nos demos cuenta
Si bien todos somos diferentes, tendemos a dibujar una linea divisoria alrededor
de nuestros círculos sociales y familiares, dejando fuera a todos los que no
encajan. Eso no está bien.
Deberíamos ser más abiertos para nutrirnos y aprender de todo aquello que es
diferente a nosotros.
6. Tenemos que competir por recursos limitados
La vida está hecha para ser abundante y sin límites. Creamos la escasez, en
lugar de enfocar nuestros esfuerzos en crear, dar y contribuir para ayudar a la
humanidad a alcanzar su máximo potencial.
7. La felicidad viene de las cosas externas
Todos sabemos que el dinero no compra la felicidad, pero aún así tendemos a
darle más importancia de la que corresponde a cosas materiales y externas.
Como dijo Buda, “Aferrarse a la ira es como agarrar un carbón caliente con la
intención de lanzarlo a otra persona, uno es el único que se quema”.
Es mejor dejar que las cosas pasen, porque si sigues recordándolas, el único
que sufre eres tú.
9. Hay algo mal con nosotros
Como dice un proverbio budista, “Todos somos perfectos tal y como somos”.
10. Lo que las otras personas digan de nosotros
sí importa
Pero la verdad es que nunca lo sabremos a ciencia cierta, así que cuando tu ego
comience a llenarte de dudas, recuerda que todo es una historia de ficción.
11. Vemos las cosas como realmente son
Respira hondo y deja que todo tu cuerpo se relaje, busca sensaciones y observa
sin hacer juicios.
13. Cuando damos algo, perdemos algo
Nos han enseñado a confiar en nuestras mentes, pero muchas veces nuestra
intuición o voz interna nos entrega una mejor orientación. Escúchala.
15. Tenemos que ser más realistas