Vous êtes sur la page 1sur 1

Normativas curriculares

La normativa curricular es una de las instancias donde se define buena parte de las prevenciones,
énfasis y atenciones propias de la cotidianidad de la escuela. Al finalizar los contenidos, las
recomendaciones metodológicas, las fundamentaciones y las bibliografías, el currículum organiza el
campo posible de acción de maestros y alumnos, delimitando los objetos con los que debe interactuar en
su experiencia.
El currículum es una suerte de” ley” en la escuela, de norma que establece contenidos y regula lo que se
debe enseñar. Y la relación que existe entre la norma y la práctica tiene una concreción histórica y una
política particular. En todos los países del mundo, la letra de la ley es distinta a su ejercicio diario pero en
América Latina se suma otro elemento: la cultura política qué hace que el poder regulador de la ley y las
normas sea aún más relativo, por ejemplo, la ley N° 1420 estableció favorecer y dirigir simultáneamente
el desarrollo moral, intelectual y físico de todo niño de 6 a 14 años de edad. Se hizo evidente la filosofía
educativa de la generación del 80, representante de la élite oligárquica que entendía que todos debían
ser socializados de la misma forma, sin importar sus orígenes nacionales, la clase social o la religión, y
esta forma de escolaridad fue considerada un terreno “ neutro”, “ universal”, qué abrazaría por igual a
todos los habitantes. Entre esos contenidos la enseñanza de la lectoescritura fue fundamental, contribuyó
a que la Argentina fuera un país con una “ciudadanía letrada”. Para las niñas además era obligatorio el
conocimiento de labores de mano y nociones de economía doméstica y para los varones el conocimiento
de ejercicios, de evoluciones militares más sencillas y en las campañas tener nociones de agricultura, es
decir que aprendían algunos contenidos similares y otros diferenciados. El trabajo, como contenido
vinculado los sectores productivos, quedó marginado a los circuitos “menores” del sistema o bien a
experiencias sindicales obreras por fuera de las instituciones oficiales. Los saberes humanistas y
abstractos estaban mucho más jerarquizados que los saberes productivos vinculados al hacer de las
clases laboriosas. La escuela primaria debía enseñar a los alumnos a ser súbditos para convertirse en
“argentino de ley”, debían abandonar sus lenguas, sus costumbres, sus héroes, sus formas de vestirse y
relacionarse. El sistema escolar participó en la campaña de nacionalización de la población, desde 1908
y recibió el título de “cruzada patriótica”. La nación debía aprender a través de los contenidos pero
también de los rivales. Las fiestas y actos escolares adoptaron formas militaristas, con ideas sobre la
autoridad, la comunidad y la educación del cuerpo de modo muy autoritario.

Vous aimerez peut-être aussi