Vous êtes sur la page 1sur 7

Nº 6 / 24 de junio de 2018

El Alcázar
…educación, historia, literatura, arte, música y más

La Catedral, centro de la cultura cristiana

Por

GASTÓN H. GUEVARA

En este número:

Recensión a:

Como el barro en manos del Alfarero El amor a la sabiduría. Étienne Gilson

Por Por

MARIANELA QUIROGA CEFERINO P. D. MUÑOZ


Nº 6 / 24 de junio de 2018

La Catedral, centro de la cultura cristiana


GASTÓN H. GUEVARA

“Señor, he amado la belleza de tu casa”. símbolo del Dios siempre más No podemos dejar de 2
Salmo 26, 8.
grande y tiene fuerza para nombrar a la Liturgia -cántico

La Cristiandad concibió una evocar, a través de todas sus sempiterno rebosante de vida-,

inteligencia asombrada que se manifestaciones artísticas, lo pues todas estas

encontraba en continuo sempiterno. El templo católico manifestaciones culturales no

diálogo con lo extraordinario – es el centro de la cultura, su fueron espontáneas, sino que

en lo ordinario- y con fuerzas síntesis y su más alto tienen su principium, es decir, su


exponente. Todas las origen permanente e
supra-humanas. Se da aquí una
aspiraciones del hombre intrínseco, en el culto: la
compenetración entre lo
medieval confluían en él y en cultura vive del culto. Y la
humano y lo divino que dio un
él se verticalizaban. medieval era por excelencia un
pensamiento riquísimo en
símbolos y analogías (la rebozar de belleza y armonía
Se ha considerado al arte
gramática del misterio) y por porque vivía del y en el culto.
sacro de la Catedral como un
ello también un arte La fe daba vida a las piedras.
valor “cuasi sacramental”, es
profundísimo. Fue un pensar decir, como símbolo de lo En la catedral se da una
en imágenes. Fue fijar la mirada sagrado, que trata de expresar síntesis formidable entre lo
en el Misterio que todo lo ciñe, por lo visible lo invisible. El eterno y el devenir. Todo tenía
deleitándose de gozo y alegría al templo, no es por ningún que hacer resaltar aquel mundo
percatarse que la realidad es motivo un monumento –como invisible del cual este es signo:
siempre más grande y que se
hoy creen los turistas- sino un desde la piedra fundamental,
escapa a los cálculos y a los
santuario; es un ambiente que pasando por la orientación del
instrumentos de medición.
permite a la gracia manifestarse templo y concluyendo en el

La fe se hace plegaria, y se de la mejor manera, altar. Todo quiere mostrarnos

hace templo. El templo es la provocando una comunicación algo, todo quiere de-velarnos

expresión concreta de la fe. La con lo divino. Es un espacio y algo. Pongamos dos ejemplos.

fe abría horizontes de infinitud un tiempo consagrados, Primero: los vitrales. Estos


y eternidad. El templo es sustraídos de toda utilidad. grandes vitrales de las

La Catedral, centro de la cultura cristiana El Alcázar


Nº 6 / 24 de junio de 2018

catedrales medievales contaban no se puede entender. Él le da El templo, podemos


al pueblo fiel la historia sentido a todo el acontecer concluir, es una sutil
sagrada. Son hechos humano. Segundo: la música. manifestación de la gloria
trascendidos por la luz física A la voz silenciosa del templo divina, a semejanza de
que los ilustra y manifiestan de que nos habla de un Silencio Jesucristo en la Transfiguración,
ese modo al que es llamado imperecedero de donde ha y que lleva a los fieles que allí se 3

“Luz de Luz” y “Sol de Justicia”. brotado la Palabra que ha encuentran a exclamar:


La historia entonces, está creado todas las cosas, se une la
¡Qué bien estamos aquí!
iluminada y atravesada por música cómo un pórtico hacia el
Dios de palmo a palmo, y sin Él silencio que debe continuarla.

Como el barro en las manos del Alfarero


MARIANELA QUIROGA DE AMIEVA

Hablar del Venerable Fulton todo hombre, por lo que nos Anhelo presente aunque
Sheen es referirse a una deja entrever su concepción muchas veces escondido en el
persona que se ha entregado antropológica. alma de los hombres.
como barro al Alfarero de la
Este arzobispo Fulton Sheen ha extraído la
Vida. Su vida y sus obras son
estadounidense presenta la metáfora de la vasija de una
reflejo del amor de Dios y
visión de un hombre débil y carta de San Pablo a los
ejemplo de un ser humano que
herido en lo más profundo de corintios. Con aquella quiso
vive in persona Christi. Sus
sí por el pecado de nuestros reflejar la frágil condición
enseñanzas son, para nosotros,
primeros padres y aumentado humana y la grandeza de la
una guía espiritual en esta
por los propios. Hombre vocación sacerdotal. Naturaleza
peregrinación.
ignorante y miserable, que no humana identificada con la
En el inicio de su se percibe capaz de recibir en sí vasija de barro. Vocación al
autobiografía “Tesoro en vasija de lo más grande de la vida, a sacerdocio como un gran tesoro
barro. La autobiografía de Fulton causa de tanta pobreza. Pero y regalo divino. Se nos muestra
Sheen” (Ed. Logos, Rosario, esta indigencia es para Dios un lo maravilloso del sacerdocio y
2015) Fulton Sheen hace grito de nuestra condición el gran deber que nuestros
referencia a sí mismo como una humana. Una naturaleza caída pastores tienen. Pero también,
vasija de barro, dentro de la pero a la vez transida por las debilidades con las que
cual se encuentra un gran nuestros más sinceros anhelos luchan, que son las mismas que
tesoro. Esto no es válido tan de divinidad. Anhelos de tenemos los demás hombres,
sólo para sí mismo, sino para conocer, amar y servir a Dios. pero entre ellos y nosotros hay

La Catedral, centro de la cultura cristiana El Alcázar


Nº 6 / 24 de junio de 2018

una gran diferencia. Con estas miseria, para mostrarse en su enriquecido con oportunidades
palabras lo expresa Fulton infinito Poder y Misericordia. y regalos: esto significa que
Sheen: exigirá que le pague un alto
Dios nos ha dado impuesto a las ganancias en el
“Nuestra caída puede ser innumerables pastores que, tan Día Final” (Sheen, p. 23)
mucho mayor que la caída de de barro como nosotros, han
otros debido a la altura desde Esta enseñanza no sólo es
sido bendecidos con el tesoro
la que tropezamos. De todos válida para nuestros sacerdotes,
de ser “mediadores entre Dios y 4
los hombres malos, los sino también para cada uno de
los hombres”. En el día del
religiosos malos son los peores, nosotros, en la medida que nos
natalicio del Venerable Siervo
porque son los que han sido corresponde. Medida que
de Dios Fulton Sheen,
llamados a estar más cerca de conoce el alma en la intimidad
Cristo” (Sheen, p. 20) apreciemos el sacerdocio,
con Cristo.
recemos por nuestros pastores y
Este sacerdote nos enseña el pidámosles entrega plena. Una Reconociendo nuestro
modo en que el mismo Dios gran cosa se le ha dado a cada propio barro, miremos en la
trabaja. Ya que Él, en su sacerdote: la vocación de servir interioridad del tesoro que se
infinita Providencia, elige a los a Dios en cuerpo y alma. nos ha confiado y vivamos
más débiles a fin de revelar Fulton Sheen reconoce que la fieles en el cumplimiento de la
todo su poder a través de estos respuesta a este llamado tiene Voluntad de Dios. Cada uno
pobres instrumentos. ¿Por qué? sus exigencias: de nosotros conoce cuál es su
Porque “de otra manera, parecería llamado. Y por más frágiles que
“Cuando se le ha dado
que es el barro quien hace el bien, y nos sintamos dejémonos
mucho a un hombre, se le
no el Espíritu” (Sheen, p. 22) moldear, a imitación de Fulton
exigirá mucho; y cuanto más se
Gran Sabiduría es Dios que se Sheen, como el barro se entrega
le haya confiado, más se le
sirve de nuestra debilidad, de pedirá a cambio. Dios me ha en las manos de su alfarero.
nuestra flaqueza, nuestra dado no solamente una
vocación, sino que la ha

Recensión

Étienne Gilson, El amor a la sabiduría


(Rialp, Madrid, 2015, 72 pp.)

CEFERINO P. D. MUÑÓZ

La editorial Rialp, de la en esta oportunidad la tercera que tuvo una vastísima labor
mano de Rafael Caldera ─a edición española del libro del intelectual pero que brilló
cargo de la presentación, medievalista francés Étienne sobre todo por sus escritos y
traducción y notas─, nos ofrece Gilson (1884-1978), pensador alocuciones en torno al

La Catedral, centro de la cultura cristiana El Alcázar


Nº 6 / 24 de junio de 2018

pensamiento de Tomás de conocimientos que alguien decir que nada es verdad hasta
Aquino. posee. En cambio, para nuestro que llegue a serlo para
autor, el auténtico erudito es nosotros, esto no quiere decir
El volumen está compuesto
aquel cuya vida intelectual es que algo sea verdad tan solo
por un discurso y una
parte de su vida moral, el que porque es verdad para
conferencia que Gilson diera
ha decidido ajustar su vida nosotros, “al contrario, tuvo que 5
en la Universidad de Harvard y
intelectual a las exigencias de su convertirse en vuestra propia
en la de Marquette
conciencia moral. Y lo primero verdad, porque era, es o será verdad
respectivamente. El primer
que ello exige es la honradez para toda mente humana normal
texto data de 1927 y se titula
intelectual, es decir un respeto capaz de captarla” (p. 27).
Ética de los estudios superiores,
escrupuloso por la verdad. El
mientras que el segundo es de En el siguiente texto,
erudito que posee esta virtud,
1948 y lleva por nombre Historia de la filosofía y educación
v.gr., nunca cita un libro que
Historia de la filosofía y educación filosófica, Gilson retoma algunos
no ha usado y nunca usa un
filosófica. En ambos textos el tópicos que aparecen esbozados
libro que no ha de citar. Así
autor aborda el tema del en el apartado anterior, pero
como en la honradez moral no
verdadero amor a la sabiduría, ahonda un poco más en ellos.
hay detalles que puedan
pero en cada uno toca con su Nos dice que la filosofía más
omitirse, lo mismo puede
prolija y afable pluma algún que un saber determinado es
decirse de la honradez
aspecto del mismo. una vida dedicada a la
intelectual. La segunda virtud
búsqueda de un saber: la
En Ética de los estudios que se exige de un erudito es la
sabiduría. Por ello para nuestro
superiores ─a pesar de los casi humildad, a la que en lenguaje
autor hay pocos auténticos
noventa años de la moderno podría llamarse
filósofos, pues no hay que
conferencia─ se ofrece un tema sumisión a la verdad u objetividad.
confundir al profesor de
por demás actual y necesario Esta virtud implica estar
filosofía con el filósofo: aquél
para el académico e siempre abiertos a la verdad,
se dedica a la vida activa (a
investigador que se precie de sea antigua o nueva, y por
enseñar) y éste a la
tal. Allí Gilson redefine el supuesto someternos a ella,
contemplativa (a filosofar). De
término erudición (scholarship) cualquiera sea la época o la
lo dicho anteriormente surge
que suele estar más difundido, dirección de la cual provenga.
una aporía: si la filosofía
es decir aquél que pone el En este orden de ideas, si bien
requiere de toda la vida, cómo
acento en la cantidad de tenemos todo el derecho a
puede enseñarse en los años

La Catedral, centro de la cultura cristiana El Alcázar


Nº 6 / 24 de junio de 2018

que dura un estudio de grado; que el problema gilsoniano Pues bien, aquí entra a tallar
incluso el asunto se complica aquí presente no es solo la historia de la filosofía como
más si uno profundiza y se aprender filosofía sino llegar a parte de una educación
pregunta si la filosofía puede ser un filósofo, es decir poseer filosófica. Dicha historia no es
ser enseñada o aprendida. En la filosofía pero de un modo una escuela de escepticismo o
este sentido, que los profesores más perfecto, a saber, como la enseñanza de la suma de 6

sepan la verdad y nos la digan sabiduría. Así, para el todos los errores sino que hay
no quiere decir que nosotros medievalista francés “No se que entender que no se puede
automáticamente la sepamos, puede ser creador en filosofía a ser filósofo prescindiendo de la
pues nadie conoce sino por su menos de ser un verdadero filósofo; historia. Gilson pone el
propia inteligencia. Sin pero se puede vivir y morir siendo conocido caso de Santo Tomás
embargo, como explica Santo un verdadero filósofo sin haber y los tomistas: cuán común ha
Tomás, aunque los docentes no creado nada en filosofía” (p. 46). sido el reemplazo de las obras
puedan pensar por nosotros, sí del Aquinate por aquellas ad
Ahora bien, esa vida
pueden ayudarnos y hasta mentem Divi Thomae; cuán
consagrada a la búsqueda de la
hacernos pensar por nosotros común la substitución de un
sabiduría necesita que se le
mismos. Entonces aparece tratado filosófico por un
enseñe no ya filosofía sino a
nuevamente la cuestión de manual de filosofía. Por tanto
filosofar. Y esta tarea solo
cómo se puede enseñar para Gilson “La historia de la
podrá llevarla a cabo un
filosofía. Por cierto, Gilson no filosofía no puede ser un
maestro que a la vez sea un
apunta a cuestiones cementerio de filósofos muertos,
gran filósofo y que posea una
pedagógicas o metodológicas porque en filosofía no hay muertos.
afinidad espiritual con su
sino a indagar cuál es el mejor Gracias a la historia, todos los
discípulo. Puesto que encontrar
acceso a la filosofía. Si bien grandes filósofos viven todavía […]”
un guía con semejantes
nuestro autor no le quita valor (p. 64). La gran tarea de la
cualidades es muy difícil, por
a las famosas introducciones, historia de la filosofía es buscar
ello no solo tenemos que
dice que éstas no deben ser más las fuentes de dicha filosofía.
buscarlo en la
que eso: introducciones. Pues Incluso más, la filosofía no
contemporaneidad sino
donde comienza la filosofía tiene existencia propia fuera de
también en el pasado; quizás
deben terminar las los grandes filósofos y solo estos
ese antiguo maestro esté
introducciones. Recordemos podrán encender otras vidas
esperándonos para que le
que esto viene a cuento dado filosóficas. Por ello Gilson nos
contemos nuestras dificultades.

La Catedral, centro de la cultura cristiana El Alcázar


Nº 6 / 24 de junio de 2018

recuerda que la filosofía en sí o este sentido, junto a clásicos de una auténtica ética filosófica
en estado puro no existe, ella es como La vida intelectual de vivida por su autor; pues
una esencia no un ser. De allí Sertillanges o El trabajo después de estudiar sus obras,
que la idea de una philosophia intelectual de Guitton, El amor a ¿quién podría dudar de que
perennis apunte a la posibilidad la sabiduría es un escrito Gilson fue un verdadero
que tiene todo hombre de indispensable para los que amante de la sabiduría y ─por 7

actualizar una esencia con su emprenden el camino qué no─ un maestro que
propia existencia. anunciado en el título. encienda nuestra propia vida
filosófica?
Creemos que ésta es una Si bien estamos ante un
obra cuasi obligatoria tanto libro pequeño en cuanto al
para los estudiantes que están número de páginas, sin dudas
Publicado en: “Sapientia”,
haciendo sus primeras armas es enorme por su contenido y
Vol. LXXII, Nº 239, 2016.
intelectuales cuanto para los por la propia experiencia de
Autorizado por el autor para su
jóvenes académicos e Gilson que se trasluce en la
reproducción.
investigadores nóveles. Y en lectura, esto es, la experiencia

REVISTA ÍTAKA
Urge en nuestros días construir el tercer barco. ¿Y los otros dos?
Quemados ya, hundidos acaso. O tomados por piratas, las carabelas
“Verdad” y “Bien” navegan hoy bajo el yugo de los grandes comerciantes.
¿Qué hacer? Durante siglos hemos columbrado la hermosura, nuestra
añorada patria, Ítaka, como un imposible lejano: nada con que navegar,
condenados a ser náufragos perpetuos. ¿Qué hacer? Obsoletos “Verdad” y
“Bien”, la única vía libre es nuestra barcaza “Belleza”. Es apenas una balsa,
mas en nosotros está el robustecerla y lanzarnos rumbo a Ítaka.
Nos urge hoy en día construir un tercer barco, esta revista. Ahora tras
ella.

Contactos:
Gabriel: 261-5400196
Juan: 261-5072873

La Catedral, centro de la cultura cristiana El Alcázar

Vous aimerez peut-être aussi