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GRADO EVALUACIÓN

INSTITUCIÒN EDUCATIVA “EL NIQUIA” GRUPO REFUERZO


DARIO LONDOÑO CARDONA FECHA TALLER X

VALOR DE LA SEMANA
“ LA VALENTÍA”
Docente: Natalia Agudelo

“No es valiente el que no tiene miedo, sino el que sabe conquistarlo”


Nelson Mandela

La valentía está asociada al heroísmo, la gallardía y el valor. Cuando una persona es valiente, logra vencer
sus temores o dudas y actúa con decisión y firmeza. La valentía se demuestra en los grandes actos (como
en una guerra o una emergencia), pero también en las pequeñas acciones cotidianas (al decir una verdad
dolorosa a un ser querido).
Es posible entender a la valentía como una acción esforzada que parece superar a las fuerzas naturales. El
valiente saca fuerzas de donde la gente común no tiene y termina haciendo cosas extraordinarias.
Puede decirse que la valentía es una virtud del ser humano para llevar adelante una iniciativa a pesar de las
dificultades y los impedimentos. Estas trabas generan miedos que son superados gracias a la valentía y el
coraje.

Cuando alguien menciona la palabra “valentía”, muchas personas piensan de inmediato en alguno de los
superhéroes que aparecen en los cómics, la televisión o el cine. Estos personajes imaginarios no sienten
temor frente a sus enemigos ni dudan antes de realizar alguna tarea riesgosa. Nunca los vemos temblar
o ponerse nerviosos si un villano los desafía a muerte o si se ven obligados a salvar a un inocente que se
encuentra en peligro.
Otra imagen que viene a la mente de muchos cuando se habla de valentía es la de aquellos individuos que
practican deportes extremos, es decir, que se lanzan en paracaídas, navegan en balsas por ríos caudalosos,
escalan montañas o conducen autos de carreras a gran velocidad. En el terreno de los valores, la valentía
no tiene nada que ver con los superhéroes ni con los deportistas extremos.

Los verdaderos valientes no cuentan con poderes sobrehumanos y, por lo general, no arriesgan la vida
realizando actividades peligrosas sólo por diversión. Muy por el contrario, se trata de personas comunes y
corrientes que, la mayor parte del tiempo, actúan de manera pacífica. ¿En qué radica entonces su valentía?
Estos hombres y mujeres son valientes porque no evaden los desafíos que les plantea la vida ni se dan por
vencidos cuando las cosas no resultan como ellos esperaban. Algunas veces deben enfrentarse a
situaciones aparentemente sencillas, como hablar en público o reconocer frente a otra persona que
cometieron un error. En otras ocasiones se trata de retos difíciles, como encarar la muerte de un ser querido
o enterarse de que padecen una enfermedad seria. En cualquiera de estos casos, la valentía surge como
una fuerza interior que impulsa a las personas a seguir adelante, a no evitar las responsabilidades ni dejar
que otros resuelvan sus problemas.

ACTIVIDAD…
1. Lee el siguiente cuento: “Las Cabras Testarudas”

Vivía en la isla de Puerto Rico un muchacho que trabajaba como pastor. Cada día salía al campo con su
rebaño de cabras para que comieran hierba y corrieran libres por el monte. Al caer la tarde el chico silbaba
y todos los animales se acercaban a él para regresar a la granja formando un pelotón.
En una ocasión, a última hora, cuando la luna comenzaba a asomar entre las nubes, el pastorcillo las
llamó como de costumbre pero algo extraño sucedió: por más que silbaba y hacía gestos con las manos,
las cabras le ignoraban.
No entendía nada y comenzó a gritar como un descosido:
– ¡Vamos, vamos, venid aquí, tenemos que irnos ya!
Nada, las cabras parecían sordas. El chico, desesperado, se sentó en una piedra y comenzó a llorar.
Al ratito un lindo conejo se paró ante él y le preguntó:
– ¿Por qué lloras, amigo?
– Lloro porque las cabras no me hacen caso y si no regreso pronto mi padre me va a castigar.
– ¡No te preocupes, tranquilo, yo te ayudaré! ¡Ya verás cómo las hago caminar!
El conejo empezó a saltar y a gruñir entre las cabras para llamar su atención, pero ellas continuaron
pastando como si fuera invisible. Abatido, se sentó en la piedra al lado del pastor y comenzó a llorar junto
a él.
En eso pasó una zorra que, viendo semejante drama, se atrevió a preguntar:
– ¿Por qué lloras, conejito?
– Lloro porque el pastor se puso a llorar porque sus cabras no le hacen caso y si no regresa pronto su
padre le va a castigar.
– Tranquilo, os echaré una mano ¡Voy a ver qué puedo hacer!
El zorro se acercó a las cabras con cara de malas pulgas y respiró una gran bocanada de aire; un segundo
después salieron de su boca unos cuantos aullidos de esos que ponen los pelos de punta al más valiente.
A pesar de que resonaron en todo el valle ¿sabes qué sucedió?… Pues que las cabras ni se giraron para
ver de dónde venían los escalofriantes sonidos.
El zorro, con la moral por los suelos, se unió a la pareja con los ojos llenos de lágrimas.
Al cabo de un rato salió de entre la maleza el temido lobo. Se quedó muy sorprendido al ver un chico, un
conejo y un zorro juntos llorando a mares. Sintió mucha curiosidad por saber qué les entristecía tanto y le
pareció oportuno preguntar al zorro.
– Perdona si te parezco un metomentodo, zorro, pero ¿por qué lloras?
– Lloro porque el conejo llora porque el pastor se puso a llorar porque sus cabras no le hacen caso y si no
regresa pronto su padre le va a castigar.
– Bueno, pues no parece tan difícil… ¡Voy a intentarlo yo!
El lobo pegó un brinco y sacó los colmillos para asustar a las cabras, pero fracasó. Los blancos y
apacibles animales no se movieron ni medio metro de donde estaban. Pensando que con la vejez había
perdido toda su capacidad de atemorizar, se hizo un hueco en la piedra y también empezó a lloriquear
como un bebé.
Una abejita que volaba cerca se quedó muy sorprendida al ver el curioso grupo de animales llorando a
lágrima viva. Intrigadísima, se acercó zumbando y, sin posarse, preguntó al lobo:
– ¿Por qué lloras, lobo? ¡No es propio de ti!
– Lloro porque el zorro llora porque vio llorar al conejo que llora porque el pastor se puso a llorar porque
sus cabras no le hacen caso y si no regresa pronto su padre le va a castigar.
– Estaos tranquilos ¡yo haré que se vayan!
Por primera vez todos dejaron de sollozar y, al unísono, estallaron en carcajadas. El pastorcillo, sin dejar
de reír, le dijo:
– ¿Tú, con lo pequeña que eres? ¡Qué graciosa! Si nosotros no lo hemos conseguido tú no tienes ninguna
posibilidad.
El pequeño insecto se sintió dolido pero no se dio por vencido.
– ¿Ah, no?… ¡Ahora veréis!
Sin perder tiempo se fue hacia el rebaño y comenzó a zumbar sobre él. Las cabras, que tenían un oído
muy fino, se sintieron muy molestas y dejaron de comer para taparse las orejas.
Entonces, la abeja llevó a cabo la segunda parte del plan: sacó su afilado y brillante aguijón trasero y se lo
clavó en el culo a la cabra más anciana, que era la líder del grupo. Al sentir el picotazo la vieja cabra salió
corriendo hacia la granja como alma que lleva el diablo, y todas las demás la siguieron atropelladamente.
El pastor, el conejo, el zorro y el lobo contemplaron atónitos cómo, una tras otra, atravesaban el cercado y
se reagrupaban. Después, miraron sonrojados a la pequeña abeja y el pastor se disculpó en nombre de
todos:
– Perdona, amiga, por habernos reído de ti ¡Nos has dado una buena lección! ¡Gracias por tu ayuda y
hasta siempre!
La abejita sonrió, les guiñó un ojo, y se fue zumbando por donde había venido.
Y así es cómo termina esta pequeña historia que nos enseña que lo importante no es ser grande o fuerte,
sino tener confianza en uno mismo para afrontar los problemas y las situaciones difíciles ¡Si te lo
propones, casi todo se puede conseguir!

CRISTINA RODRÍGUEZ LOMBA


2. Escribe tu propia definición sobre el valor de la “Valentía”.
3. Que enseñanza te deja la historia de Las cabras testarudas.
4. Escoge una de las siguientes frases y con ella elabora una cartelera en tu cuaderno:

 Atrévete a ser valiente hoy y confía en que cuando extiendas tus alas, volarás (María Demuth)
 Lo único a temer es el miedo en sí mismo (Franklin D. Roosevelt)
 No se puede ser valiente si solo te ocurren cosas maravillosas (Mary Tyler Moore)
 Ser valiente no significa que no tienes miedo (Neil Gaiman)
 El que es valiente es libre (Lucio Anneo Séneca)
 El valor se encuentra en los lugares más insospechados (J.R.R. Tolkien)
 Ser valiente no es la ausencia del miedo. Ser valiente es tener miedo pero encontrar un camino a
través de él (Bear Grylls).
5. En tu vida real quién es tu héroe y por qué?
6. Describe una situación donde la vida te haya llevado a ser valiente.
7. Por qué crees que en la vida debemos ser valientes? Justifica tu respuesta
8. Crea tu propia frase sobre la valentía.
9. Menciona a una persona de la televisión que consideres valiente y explica por qué?
10. Inventa un comic sobre el valor de la valentía con uno de tus súper héroes favoritos. (Mínimo 6
cuadros).

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