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En el viaje al psiquiátrico vimos que el personal se apega a un protocolo en las

decisiones que toman respecto a las personas con las que tratan. Ese protocolo guía
las condiciones de higiene, de dirigirse a las personas, de la medicación, etc.

Y a pesar de poder considerarse como personas incompetentes en la vida social


cotidiana, a las personas internadas no se les niega la convivencia y se respetar la
dignidad. Vimos el material del que dispone el hospital y las instalaciones.

Algunos pacientes estaban dormidos y otros estaban despiertos. Uno de los


pacientes, en su conversación con un doctor, a pesar de mostrarse agresivo, parecía
tener lucidez y capacidad de discernimiento.

Se nos explico las personas que llagaban en estado de crisis eran revisadas en un
área aparte donde se les calmaba, trataban en caso de tener heridas físicas y
valoraba su alcance psicológico.

En caso de considerarse que la persona representa un peligro para sí mismo o para


los demás, se les interna.

El área donde están internados los pacientes cuanta con aéreas con césped
artificial debido a que algunos internos fumaban el césped real. El mobiliario esta
unido al piso con el propósito de que los internos no se hagan daño a ellos o a otros.
Las regaderas están diseñadas de modo que no sobresalgan de la pared, esto a
causa de que algunos internos decidían colgarse del cuello apoyándose en la
regadera.

Hay un consultorio psicológico a disposición de los internos.Se nos explico que a los
internos se les droga para inhibir sus impulsos sexuales

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