CARNE DE CERDO

Dra. Ángela Rivas (*)

La mayoría de las personas piensan que el cerdo puede comer cualquier tipo de
materia prima. Dicha afirmación no escapa de la verdad, ya que la especie suina
digiere alimentos de origen vegetal y animal, aunque es fundamental determinar
si el porcino es capaz de transformar todo lo que lleva a la boca en carne, que
será aprovechada por el consumidor final.

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 / ABC RuralAM PLIA R

CARNE DE CERDO

En primer lugar, cualquier productor o interesado en criar cerdos debe saber que cada
categoría posee requerimientos específicos. El lechón lactante es el que está aún con su
madre mamando. El lechón iniciador es aquel recién destetado hasta los 25 a 30 kg de peso
vivo. El lechón en crecimiento se considera hasta los 60 kg de peso vivo y el cerdo
terminador, hasta el peso de faena. Posteriormente, se encuentran las categorías de los
reproductores, principalmente las hembras o marranas: secas, gestantes o preñadas y
lactantes.
ALIMENTOS A SUMINISTRAR

El lechón lactante solo está capacitado para digerir leche materna hasta la tercera semana de
vida, cuando comienza a segregar sustancias (enzimas) que le permiten digerir otras
materias primas. No obstante, algunos productores, en su afán de destetar más rápido al
animal y producir aceleradamente, comienzan a suministrar balanceado a partir de los 10
días. Esta acción tiene éxito solo si el balanceado contiene cantidades suficientes de leche
sustituta que el lechón es capaz de digerir.

Lo importante es saber que el cerdo, como la mayoría de las especies, necesita de todos los
nutrientes esenciales diariamente, entre ellos, proteínas, energía, vitaminas, minerales y
agua. Eso significa que no es suficiente darle mandioca hoy, restos de comida mañana y
abundante agua al día siguiente. Todos los nutrientes, en su dieta diaria, representan la
fórmula para que aumente de peso en la medida que las ingiera. Agua limpia, fresca y a
voluntad es la receta para los requerimientos del líquido vital.

Los demás nutrientes, principalmente la energía y las proteínas, serán proveídas a través de
distintas materias primas que componen el balanceado. Por ende, por razones prácticas, es
posible dividir a las materias primas en proteicas y energéticas.

MATERIAS PRIMAS ENERGÉTICAS

El maíz molido, sorgo molido, mandioca y batata son las materias primas que pueden
constituir íntegramente la porción energética de la dieta. Hay que conocer que la porción
energética constituye hasta el 80 % de un balanceado. Otras materias primas que proveen
energía, pero no pueden constituir toda la porción energética, son: triguillo, afrecho de
trigo, afrecho de arroz, cebada, como residuo de destilería, pulpa de coco, y los
complementos energéticos: frutas, hortalizas y verduras.

MATERIAS PRIMAS PROTEICAS

Las mismas están clasificadas en origen vegetal y animal. En el caso de las primeras están
el expeler, es decir, el residuo de las oleaginosas luego de la extracción de los aceites, así
como la soja, el sésamo y la almendra de coco. En menor proporción, tanto por la
producción como por restricciones nutricionales, el algodón y maní.
Las materias primas proteicas de origen animal la constituyen las harinas: de carne, carne y
hueso, pollo, pescado y los subproductos lácteos. Dadas las restricciones impuestas para la
exportación de carne es importante conocer estos detalles antes de alimentarlos con estas
materias primas.

En cuanto a las vitaminas y minerales existen en el mercado varias marcas que poseen
todos los requerimientos de los cerdos; son los llamados suplementos vitamínico-
minerales. Uno de los mayores potenciales o factor favorable para la cría de cerdos lo
constituye la producción agrícola paraguaya.

COSTO DE LOS ALIMENTOS

Muchos de los costos de las materias primas (granos) se encarecen porque son exportados
en gran medida al igual que los productos y subproductos resultantes, como carne de pollo,
huevos, carne de cerdo, embutidos y chacinados.

Teniendo en cuenta que Paraguay produce estos alimentos (soja, maíz, entre otros) para
obtener la denominada “carne ecológica”, resulta importante considerar este factor a la hora
de comercializar el producto final; ya que alimentando a los animales con productos de
origen vegetal se gana un mercado exigente, en las condiciones que imponen para ser
importados.

(*) Especialista en producción porcina

FUENTE: Ángela Rivas / ABC Color – Suplemento Rural

26/04/2017.-