El universo consiste en millones de estrellas, planetas y otros cuerpos celestes,

que se agrupan para formar galaxias. Nuestra galaxia, donde se encuentra la

Tierra, se llama Vía Láctea.

El universo se compone de cuerpos celestes y el vasto espacio donde se

encuentran. Los cuerpos celestes más importantes son las estrellas y los
planetas que, junto con otros elementos, como satélites y meteoritos, se
agrupan para formar galaxias.

Hay cientos de miles de millones de galaxias en el Universo. Nuestra galaxia,

donde se encuentra la Tierra, se llama Vía Láctea. Esta es la ubicación del Sol,
que es la única estrella en el Sistema Solar.

La teoría más ampliamente aceptada sobre el origen del Universo es la teoría

del Big Bang, que postula que el Universo se formó hace 15.000 millones de
años como resultado de una explosión.

Según esta teoría, antes del Big Bang, el material que compone el Universo
estaba concentrado en un punto. La explosión causó que el material se separe,
dispersándolo en todas las direcciones. Así es como se formaron las estrellas y
otros cuerpos celestes.

Esta expansión todavía se puede observar hoy. Aún se desconoce si continuará

indefinidamente o si algún día se detendrá, y todo el material se concentrará
nuevamente en un solo punto, como lo fue al principio.
Los seres humanos siempre han estado fascinados por el Universo, observando
las estrellas y la Luna y preguntándose qué son y si significan algo.

Las constelaciones, por ejemplo, ya eran conocidas en la Grecia clásica. Son

formas imaginarias construidas al agrupar varias estrellas brillantes. Toman la
forma de animales y dioses, y se les dio un significado, a veces relacionado con
los mitos de esa época. Este fue el nacimiento de la astronomía, que es el
estudio de los cuerpos celestes del Universo.

Las estrellas y las constelaciones también fueron una herramienta efectiva

para la orientación nocturna, mientras que el Sol sirvió de guía durante el día.
Por ejemplo, Pole Star o Polaris marcó el norte para los marineros.

La sucesión de días y meses se organizó observando cuerpos celestes, como la

Luna. Se creó un calendario lunar, donde cada mes comenzaba con la Luna
nueva y duraba 29 días, hasta la llegada de la próxima luna nueva.

Más tarde, se creó el calendario solar, que es el que usamos actualmente,

basado en el movimiento de la Tierra alrededor del Sol. Este calendario divide
el año en 365 días.

La invención del telescopio, a principios del siglo XVII, representó un gran

avance porque los astrónomos pudieron usar este instrumento para observar el
cielo, en lugar de usarlo solo a simple vista. Cada vez más, se construyeron e
instalaron telescopios más grandes y potentes en los observatorios de las
montañas para capturar mejor la luz de las estrellas.

En la actualidad, los telescopios más modernos ya no se encuentran en los

observatorios terrestres. Están en el espacio, orbitando la Tierra, lo que les
permite recibir luz de las estrellas sin interferencia de la atmósfera. El más
famoso de ellos es el telescopio Hubblespace, que orbita nuestro planeta en 97
minutos.

Hoy, los telescopios más importantes están en el espacio. El más famoso de

ellos es el telescopio Hubble, que orbita la Tierra.
Recuerda

Una atmósfera es una capa de gases que rodea algunos planetas, como la
Tierra. Las nubes y otros fenómenos atmosféricos dificultan la observación del
cielo.
Otra forma de observar el Universo es mediante el uso de sondas espaciales,
que envían información a la Tierra, o naves espaciales tripuladas, que permiten
a los seres humanos viajar en el espacio y estudiarlo.

Hoy, los telescopios más importantes están en el espacio. El más famoso de

ellos es el telescopio Hubble, que orbita la Tierra