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MEDITACION DIA PRIMERO:

DIOS CREADOR

La santa Biblia comienza con estas palabras “Al principio creo Dios el cielo y la tierra”
También el credo que se reza en la Santa Misa comienza diciendo “Creo en un solo
dios”.
Es esta la verdad fundamental de nuestra fe. Es lo que nos hace felices y da sentido a
nuestra vida: existe Dios. Estamos en las manos del dios único y verdadero que ha
creado todo cuanto existe.
El nos cuida con su providencia amorosa y en su regazo nos sentimos seguros.
Aunque a veces nos lleve por caminos difíciles de entender pero estamos seguros de
que él es el único señor de la historia; tanto de la historia grande de todos, como también
de la pequeña historia de cada uno de nosotros.
A dios no se le pasa ningún detalle y nos cuida y protege con amor.
Al colocarnos en este mundo nos dio una tarea que cumplir, por que todos entramos en
los planes de Dios.
Si Dios es tan maravilloso es necesario que le correspondamos con nuestra manera de
actuar:
Ante todo amarle con todo nuestro corazón según nos pide el primero de todos los
mandamientos “Amaras al Señor tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma,
con todas tus fuerzas”.
Debemos además glorificarle e invocarlo. La sagrada escritura nos enseña que en el
cielo lo glorificaremos por toda la eternidad. Es bueno que desde ahora lo alabemos y
bendigamos.
No olvides que Dios tiene que ser el primero en tu vida.
Su nombre es santo y quiere que tú te esfuerces en parecerte a Él.
Él te dice “Sean Santos porque yo, el Señor, soy Santo”.
Haciendo en cada momento la voluntad de Dios cumplirás tu vocación mas hermosa
que es imitar a la Santísima Trinidad.
MEDITDACION DIA SEGUNDO

DIOS ES TRINIDAD

El único Dios maravilloso que existe que nos ha querido revelar como vive El su
felicidad eterna en la Santísima Trinidad.
La Sagrada Escritura nos enseña que en Dios hay tres personas.
Precisamente el primero de los misterios luminosos nos recuerda la presencia de la
Santísima Trinidad en el Bautismo de Jesús . Dice el evangelio que se abrió el cielo
mientras Jesús se bautizaba. El Espíritu Santo se apareció en forma de paloma y se
oyó la voz del padre manifestando el amos infinito que tiene a su hijo.
También cuando nos bautizaron, el sacerdote obedeciendo el mandato de Jesucristo,
derramo el agua sobre nosotros diciendo “yo te bautizo en el nombre del padre del
hijo y del Espíritu Santo”.
La fe en la Santísima Trinidad nos enseña que hay un solo Dios pero que no esta
solo. En El hay tres personas distintas que forman la comunidad de amor más
maravillosa que jamás pudo existir .
El padre goza eternamente con su hijo a quien “engendra” por vía de pensamiento.
Y del amor del padre y del hijo “procede” el Espíritu Santo.
De esta manera el conocimiento y el amor hacen infinitamente felices a estas tres
personas que están tan unidas que son un único Dios verdadero.
Una de las cosas más hermosas que podemos pensar con respecto de la Santísima
Trinidad es que habita en nuestros corazones. Así nos enseña Jesús “Si alguno
me ama será amado de mi Padre” y vendremos a El y haremos morada en él”.
Con mucha fe adora a este Dios tan maravilloso que vive dentro de ti.
MEDITACION DIA TERCERO

DIOS ES PADRE

Nos enseña San Pablo que el Espíritu Santo, dentro de nuestros corazones nos invita
continuamente a repetir la palabra mas hermosa : ABBA, que significa PADRE
QUERIDO.
Jesús por su parte nos dice e n el evangelio: “Cuando recen digan Padre
Nuestro”.
El mismo invocaba continuamente a su Padre siempre que hacia oración y de una
manera especial en los momentos mas importantes de su vida : La ultima cena y la
crucifixión .os
Al morir su última palabra fue “Padre en tus manos encomiendo mi espíritu” y esto
es lo que la iglesia en su oración oficial nos enseña a repetir cada noche. ¡Que felices
son los hijos que tienen un buen padre en casa ¡ EL los protege, les da lo que
necesitan siempre está preocupado por ellos.
En esta casa grande que es el mundo, también tenemos un papa bueno que nos
cuida y nos ama. Jesús nos dice que Él tiene contados hasta nuestros cabellos para
indicarnos hasta donde llega su amor.
Si a veces suceden cosas malas y abusos en el mundo no podemos echarle la culpa
a Dios sino que son las pasiones de los hombres las que las realizan por que
Dios respeta la libertad de los malos lo mismo que de los buenos pero en la
eternidad dará a cada uno lo que ha merecido con sus obras. Por tu parte confía
siempre en el señor.
Ponte en manos de su providencia que te cuida y te protege.
Aprende de los santos mártires que fueron tan valientes y confiaron tanto en Dios
que no temieron perder la vida seguros de que Dios los iba a recompensar
eternamente.
En tus oraciones repite con frecuencia la palabra “PADRE” para dirigirte a Dios y
te sentirás muy feliz.
MEDITACION DIA CUARTO.

DIOS ES HIJO

Jesús, hablando con Nicodemo , le decía “Tanto amo Dios al mundo que le
entrego a su hijo único”.
Y así fue. El Verbo de Dios, para cumplir el Plan que había trazado la Trinidad Santa
se hizo pequeño.
Nació como uno de tantos. La gente lo llamaba “EL Hijo del Carpintero” por qué no
se distinguió de los otros hombres de Nazaret.
El nos enseño en que consiste el Reino del Padre y como para entrar en él, debemos
convertirnos de corazón y aceptar el evangelio como norma de vida.
Hizo Milagros.
Comenzó convirtiendo el agua en vino en Cana de Galilea, curo enfermos, devolvió
la vista a varios ciegos, resucito al hijo de la viuda de Naim a la hija de Jairo y
a Lazaro, perdono los pecados a muchos, cuando estaba agonizando en la cruz
perdono también al buen ladrón y le ofreció llevarlo al Reino de los cielos.
Nos entrego su vida permitiendo que el soldado romano le abriera el corazón con
la lanza y brotara hasta la última gota de su sangre por nosotros.
Como era Dios Verdadero el Padre lo resucito para hacerlo vencedor del pecado y
de lad muerte.
Agradece a Jesús haz un rato de oración recordando y agradeciendo las maravillas
que ha hecho en ti, desde el bautismo; tantas veces que ha venido a ti en la
eucaristía y la alegría de la promesa que te ha hecho cuando dijo “Voy a
prepararles un lugar en la casa de mi padre”.
MEDITACION DIA QUINTO

DIOS ES ESPIRITU SANTO

EL Espíritu Santo es Dios


El procede del amor del Padre y del hijo. Es tan maravilloso, tan grande, tan
perfecto como las otras dos divinas personas.
El nos enseña a través de las Escrituras.
El nos inspira para que hagamos el bien y sobre todo es el Espíritu Santo el que,
como nos enseña EL Evangelio según San Lucas “encarno al verbo de Dios en
las entrañas de la Santísima Virgen María”.
También nos enseña la Liturgia que es el Espíritu Santo quien viene en cada Eucaristía,
para realizar el milagro de la conversión del pan y el vino en el cuerpo y sangre de Cristo.
Recuerda que con fe lo que has oído tantas veces:
“Te pedimos, señor que envíes tu Espíritu Santo para que este pan y este vino se
conviertan en el cuerpo y en la sangre de Nuestro Señor Jesucristo”.
El espíritu Santo conoce la intimidad de Dios algo así como nuestra alma conoce nuestro
interior. Por eso el Espíritu Santo es quien mejor nos puede enseñar las cosas de Dios.
Las personas que tienen por amigo y confidente al Espíritu Santo, los que lo invocan y le
cuentan sus cosas como hace un amigo con su amigo, son las más privilegiadas porque el
Espíritu Santo es la fuente de la Espiritualidad y de la sanidad.
Demos gracias al Espíritu Santo porque El es el dulce huésped del alma y el amigo
personal de cada uno de nosotros. Y, repitámosle muchas veces, con fe: “Ven, Espíritu
Santo Creador”.
MEDITACION SEXTO DIA

LA SANTISIMA TRINIDAD ESTA EN NOSOTROS

Ya recordamos la promesa de Jesús hablando de su Padre que vendrá a nosotros y morara


en nosotros.
Esta es una verdad muy consoladora.
Como las tres divinas personas siempre están unidas, donde está el Padre, esta también el
Hijo y está también el Espíritu Santo.
Por eso, cuando tenemos relación con una de las tres personas nos estamos comunicando
con las otras dos.
También San Pablo nos recuerda que, por la gracia de Dios, nos convertimos en templo
del Espíritu Santo:
“¿No saben que son templo de Dios y que el Espíritu Santo habita en ustedes?”.
Debemos sentirnos muy felices porque la fe nos enseña que nunca estamos solos.
Dios está con nosotros.
Tenemos el poder del Dios bueno que como Padre y amigo, está siempre a nuestra
disposición.
Donde vamos nos acompaña. Cuando rezamos nos escucha. Cuando descansamos nos
cuidad.
El saber que Dios esta en nosotros y en las demás personas, nos obliga a respetarnos a
nosotros mismos y a respetar también al prójimo porque Dios lo quiere a el como nos
quiere a nosotros.
Este pensamiento también les ayuda a recordar a los padres de familia que deben bautizar
a sus niños desde muy pequeños, como manda la iglesia, para que la Santísima Trinidad
los cuide y santifique.
¡Qué bien se vive en una familia donde todos están unidos en el mismo amor del Dios
uno y trino!
MEDITACION SEPTIMO DIA

NUESTRA PATRONA LA SANTISIMA TRINIDAD

Cuando San Gregorio Nacianceno bautizaba a los catecúmenos, solía decirles: “Los
confió hoy a la Santísima Trinidad. Por ella los introduciré, dentro de poco, en el
agua y los sacare de ella. Se la doy como compañera y patrona de toda su vida”.
Dentro de la iglesia es frecuente que tengamos santos patronos. Patronos de una
parroquia, de una hermandad, de una familia. Incluso los buenos cristianos ponen a sus
hijos en el nombre de algún santo para que los proteja durante su vida.
No hay duda de que el patrono más importante que podemos tener es Dios mismo.
La Santísima Trinidad lo puede todo y nos quiere más que nadie. Por eso nos sentimos
felices bajo su protección.
Debemos manifestar la devoción verdadera a nuestro Dios realizando bien todo lo que
hacemos, invocándolo frecuentemente y sobre todo viviendo felices y confiados en su
presencia ya que sabemos que en todo momento nos acompaña. Por eso San Gregorio nos
decía no solo que nos la daba como patrona sino como compañera para toda nuestra vida.
Recuerda con fe a la Santísima Trinidad, entroniza su imagen en tu casa.
Medita frecuentemente esa oración sencilla que la Iglesia nos enseña a repetir: “Gloria
al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo”.
Y, todo lo que haces, procura hacerlo “en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu
Santo”.
MEDITACION OCTAVO DIA

EL OJO DE DIOS

A veces se representa a Dios como un ojo metido en un triángulo.


Ante todo debes tener presente que Dios no es ni el ojo ni el triángulo.
El triángulo nos recuerda simplemente que no va contra la razón el decir que hay un solo
Dios y en El tres personas.
No quiere decir nada más.
De la misma manera, el arbolito con tres ramas, no es tampoco imagen de Dios sino otra
simple comparación ingeniosa para enseñar que no hay contradicción entre la razón y la
fe.
El ojo, por su parte, tiene un significado más hermoso.
No quiere decir que Dios es como un policía que nos persigue para ver si cometemos una
falta y castigarnos. Se trata más bien de enseñar que Dios nos cuida como un Padre bueno.
Donde quiera que estemos podemos contar con su Providencia.
Es como el padre de familia que cuida de las flores y los pajaritos pero se preocupa mucho
más de sus hijos, a cada uno de los cuales ama con amor personal.
Cada vez que veas representado ese ojo en algún libro, estampa o cuadro, piensa: Dios
me ve, me conoce a mí y yo quiero ver todas las cosas a través de mi Padre celestial.
Nunca estoy solo. Dios me cuida y me protege.
Trinidad Santa, yo te adoro y me alegro de que seas tan maravillosa que puedes estar, al
mismo tiempo, en todas partes y queremos a todo con el mismo amor infinito.
MEDITACION NOVENO DIA

LA VIRGEN Y LA SANTISIMA TRINIDAD

La Santísima Virgen María ha sido la criatura que ha estado más cerca de Dios.
En efecto, ella es la Hija predilecta de Dios Padre, la Madre del Verbo encarnado y la
Esposa del Espíritu Santo.
A veces al invocarla la llamamos templo y sagrario de la Santísima Trinidad.
Esto quiere decir, que si nosotros somos templo de Dios, porque en nosotros habita el
Espíritu Santo (como hemos meditado en días anteriores) con mucha más razón podemos
llamar a la Virgen templo de Dios, porque llevo físicamente en sus entrañas maternales
al Verbo encarnado por obra del Espíritu Santo.
Por eso mismo se compara también a la Virgen con el Arca de la alianza. Esta era
respetada porque guardaban en ella la vara de Aarón que floreció, un vaso con mana y las
tablas de la ley.
Pero la Virgen, en cambio, llevaba en su cuerpo virginal al Señor, representado en todas
aquellas cosas.
La biblia cuenta que David no se atrevió a guardar en su casa el Arca de la alianza, en
cambio Obedeon si la llevo tres meses y se sintió muy bendecido por el Señor.
Cuantas más bendiciones dejaría Dios en el cuerpo y alma de su Madre durante los nueve
meses que lo llevo en sus entrañas y todos los años que le acompaño en Nazaret.
A la virgen también se le compara con el templo de Jerusalén porque en este Dios se
hacía presente y se ofrecían tantos sacrificios.
Dios exigió que se hicieran de materias preciosas el Arca de la alianza y el templo; cuantos
privilegios habrá dado a la Virgen Santísima que llevo en su seño a su Hijo amado.
Madre nuestra, haz que la Santísima Trinidad se sienta también feliz en nuestro corazón.

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