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PROGRAMA DE ESTUDIO CAT.

I - PARTE I – RELACIONES FAMILIARES

BOLILLA I: LA FAMILIA.

P. 1 y 2) . ¿Qué es el derecho de familia?

Una definición clásica denomina que el derecho de familia es el conjunto de normas que regulan las relaciones
jurídicas familiares tanto personales como patrimoniales.

¿Cuáles son las relaciones jurídicas familiares? ¿Las que crean un vínculo jurídico? ¿Qué es un vínculo jurídico? ¿Y
cuáles son los que la ley ampara?

Zannoni dice que “donde no existe vinculo jurídico tampoco existe relación jurídica familiar”. Por eso es necesario
esclarecer cuales son esos vínculos jurídicos que la ley ampara para visualizar los perfiles actuales de esta rama del
derecho. Una primera aproximación permite afirmar que son vínculos protegidos aquellos que derivan de la unión
conyugal, la filiación y el parentesco.

El concepto de familia: la familia está formada por todos los individuos unidos por vínculos jurídicos familiares que
hallan origen en el matrimonio, en la filiación y en el parentesco; en la filiación quedan comprendidas la biológica, o
por naturaleza y la adoptiva. Habrá vínculos jurídicos familiares entre determinados sujetos cuando existan derechos
subjetivos familiares entre ellos (Zannoni).

No hay un solo tipo de familia, existen varios más allá del ejemplo tradicional de familia (madre,
padre, hijo e hija).
Los diferentes tipos de familias cambian en función de la época, la geografía, el desarrollo
IMPORTANTE económico, técnico y social, de la clase social y de la evolución de las ideas.
Si bien la familia puede tener origen en un hecho biológico, los vínculos jurídicos están
condicionados por la cultura de cada sociedad, si bien las familias han existido siempre, el
concepto de familia, como el de matrimonio y el de filiación, es una creación cultural, no natural y
por lo tanto cambiante, por eso se entiende que no exista un modelo universal e inmutable, sino
diversos tipos de familia.

EVOLUCION HISTORICA

 El concepto de único de familia fue creado por el positivismo y la sociología en la revolución industrial; hay
un paso de la sociedad feudal a la industrial y con el cambio de producción cambia la familia.
 Antes de esto la organización de la familia era más horizontal, trabajaban todos juntos, tenía lugar una
constitución de hogares muy numerosos cuyos integrantes convivían en una misma casa, con fuerte arraigo
a la tierra de los ascendentes, la que trabajaban a los fines de obtener recursos económicos. Existía un
régimen sucesorio que adjudicaba todos los bienes al único heredero, el hijo mayor varón, obligando al resto
de la familia a convivir en casa de los padres, salvo las hijas mujeres quienes contraían matrimonio para
formar parte de otra organización familiar.
 Con la mudanza del campo a la ciudad se empiezan a diferenciar los roles entre el hombre y la mujer
(trabajaban y cuidaban a sus hijos respectivamente). La revolución industrial produce un cambio en la forma
de trabajo y de organización social: Se separa la casa y el trabajo, la forma capitalista de producción requiere
que se trabaje en un lugar (fabricas) y luego se vuelva al hogar. Se reducen los miembros de la familia. Viene
la idea de que la familia nuclear es la familia normal.
 Por último, la familia contemporánea une por un periodo de extensión relativa a dos individuos en busca de
amor, solidaridad y contención.
 En la actualidad hay numerosos factores a tener en cuenta:
- la modificación en la organización de la convivencia: no se convive para que uno trabaje y otro cuide a
los hijos;
- el cambio en la sexualidad: ya no es solo heterosexual, sino también homosexual;
- los cambios en la procreación: ya no hace falta tener sexo para quedar embarazada, hay cambios en la
natalidad y la forma de concebir gracias a las técnicas de reproducción humana asistida.

En síntesis, actualmente se ha modificado la estructura tradicional de familia.

TIPOS DE FAMILIA:

- Familia nuclear: formada por los progenitores y uno o más hijos


- Familia extensa: abuelos, tíos, primos y otros parientes consanguíneos o afines.
- Familia monoparental: en la que el hijo o hijos viven con un solo progenitor (ya sea la madre o el padre).
- Familia ensamblada, reconstituida o mixta: en la cual uno o ambos miembros de la actual pareja tiene uno o
varios hijos de uniones anteriores.
- Familia unipersonal: conformada por una sola persona.
-
P. 3) La familia en Argentina. Concepto de familia en nuestra legislación. Perfiles sociológicos actuales….

Nunca fue conceptualizada en una norma con carácter general. Sin embargo;

 en el Código Civil de Vélez, este establecía que la familia “comprende la mujer y los hijos legítimos y
naturales, tanto los que existan al momento de la constitución, como los que naciesen después, el número
de sirvientes necesarios, y además las personas que a la fecha de constitución del uso o de la habitación
Vivian con el usuario o el habitador, y las personas a quienes estos deban alimentos”.
 En 1954, se sanciono la ley 14394, el art. 36 decía: “se entiende por familia la constituida por el propietario y
su cónyuge, sus descendientes o ascendientes o hijos adoptivos; o en su defecto de ellos, sus parientes
colaterales hasta el tercer grado inclusive de consanguinidad que convivieren con el constituyente”.
 En el 2005, el poder Ejecutivo reglamento que se entenderá por familia o núcleo familiar, a los progenitores,
y a las personas vinculadas con los niños y niñas y adolescentes, por vínculo de parentesco, consanguinidad
o afinidad.
 En el código Civil y Comercial no hay una definición especifica de familia, pero Lorenzetti señala “En materia
de familia se han adoptado decisiones importantes a fin de dar un marco regulatorio acorde a los tiempos
actuales”.
 El nuevo código ha ampliado la conceptualización de familia en dos sentidos:
a) además de la tradicional familia matrimonial, agrega la regulación de formas familiares actuales, como las
uniones convivenciales y las familias ensambladas.
b) aparta el componente heterosexual.
BOLILLA II: CONSTITUCIONALIZACION DEL DERECHO DE FAMILIA.

*(desarrollo completa de la unidad de manera conjunta siguiendo un hilo)

Tradicionalmente se sostenía que el derecho de familia pertenecía a la rama del derecho privado con normas de
orden público.
Sin embargo, el derecho internacional ha dicho que es un eje del sistema constitucional, las demás instituciones
jurídicas se ven modificadas por su presencia. Por eso, el CCyC se asienta en la lógica de la constitucionalizacion del
derecho privado.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos en recientes pronunciamientos, ha puesto de manifiesto la
diversidad de las familias, diciendo que: “…en la Convención Americana no se encuentra determinado un concepto
cerrado de familia, ni mucho menos se protege un solo modelo ‘tradicional’ de la misma… el concepto de vida
familiar no está reducido únicamente al matrimonio y debe abarcar otros lazos familiares…”.
Somos un país de matrimonio igualitario -siendo realmente un ejemplo para toda la región, siguiéndose postulados
básicos que marca la Corte Interamericana de Derechos Humanos en casos que han marcado un rumbo de
ampliación de derechos como ha sido el resonado caso "Atala Riffo contra Chile" del 24/02/2012 en el que se dice de
manera elocuente que la orientación sexual es una categoría sospechosa, es decir, que tiene una fuerte sospecha de
discriminación- y en este mismo sentido, la ley de identidad de género, la ley de cobertura de técnicas de
reproducción asistida, la ley de protección integral de derechos de niños, niñas y adolescentes, la ley de protección
integral de las mujeres, y tantas otras legislaciones por mencionar las más recientes para mostrar y demostrar que
un nuevo texto civil integral que se anime a "dar de nuevo" en el campo del derecho privado.
Por manda constitucional-convencional, este nuevo y necesario texto debía tomar todos los avances y desarrollo que
se ha venido dando en el campo de los Derechos Humanos, el cual ha interpelado de manera profunda la legislación
civil actual, a tal punto de presionar una nueva normativa integral y sistémica.
Si a ello le sumamos que tras la reforma constitucional nuestro país adoptó una serie de tratados internacionales
otorgándole jerarquía constitucional y que, independientemente de ello, habrá siempre de tenerse en cuenta la
pauta de la Convención de Viena sobre Derecho de los Tratados (1969) que establece el principio pacta sunt
servanda (los tratados están hechos para ser cumplidos) en virtud del cual "todo tratado en vigor obliga a las partes
y debe ser cumplido por ellas de buena fe" (art. 26) y que "una parte no podrá invocar las disposiciones de su
derecho interno como justificación del incumplimiento de un tratado" (art. 27), la constitucionalización del derecho
privado y la sanción de un CCyC acorde a las exigencias de derechos humanos aparece como una obligación
ineludible.
En este orden de ideas, bien es sabido que las dos obligaciones principales que se establecen en los tratados
internacionales de derechos humanos son las de respetar y garantizar el ejercicio y goce de estos derechos.
Así, por ejemplo, la Convención Americana de Derechos Humanos (CADH) establece en su art. 1 que "los Estados
Parte en esta Convención se comprometen a respetar los derechos y libertades reconocidos en ella y a garantizar su
libre y pleno ejercicio a toda persona que esté sujeta a su jurisdicción".
A su vez, en su art. 2 incorpora el consecuente deber de adoptar disposiciones de derecho interno disponiendo que
"si el ejercicio de los derechos y libertades mencionados en el artículo 1 no estuviere ya garantizado por
disposiciones legislativas o de otro carácter, los Estados Partes se comprometen a adoptar, con arreglo a sus
procedimientos constitucionales y a las disposiciones de esta Convención, las medidas legislativas o de otro carácter
que fueren necesarias para hacer efectivos tales derechos y libertades".
En igual sentido, la Convención sobre Derechos del Niño (CDN) establece en su art. 2 que "los Estados Parte
respetarán los derechos enunciados en la presente Convención y asegurarán su aplicación a cada niño sujeto a su
jurisdicción, sin distinción alguna" y que "tomarán todas las medidas apropiadas para garantizar que el niño se vea
protegido contra toda forma de discriminación o castigo por causa de la condición, las actividades, las opiniones
expresadas o las creencias de sus padres, o sus tutores o de sus familiares".
En definitiva, estas normas incorporan obligaciones positivas (garantizar) y negativas (respetar), de hacer y de no
hacer, que obligan al Estado a tomar ciertas medidas en pos de asumir su compromiso de respeto de los derechos
humanos.
A su vez, se aspira a que el CCyC incorpore nociones y criterios propios de la región para convertirse en un Código
con identidad cultural latinoamericana, que a su vez esté basado en la igualdad, en el paradigma de la no
discriminación y que refleje la constitucionalización del derecho privado (ya vigente desde la doctrina).
Por otro lado, asumiendo que el lenguaje no es neutral y rompiendo con la lógica patriarcal y androcéntrica clásica
del derecho privado, el CCyC pretende reflejar su adecuación a los estándares de derechos humanos mediante, por
ejemplo, el cambio de "patria potestad" por "responsabilidad parental", del vocablo "menores" por el de "niños,
niñas y adolescentes" para hacer referencia a este sector de la población, la regulación de derechos de personas con
"capacidades diferentes", de las "comunidades originarias", de las familias en plural y otros tantos sujetos de
derecho que "no habían tenido una recepción sistemática hasta el momento".
Respecto a esta última figura, el CCyC asiste a lo que se ha dado a llamar "democratización de la familia" tal como se
denomina en los fundamentos, y señala que se ha pasado del "derecho de familia" al "derecho de las familias" en
plural, partiendo de la base de "la amplitud de los términos del artículo 14 bis de la Constitución Nacional que se
refiere de manera general a la ‘protección integral de la familia’" y reconoce que, dada la realidad social, la familia
heterosexual "debe compartir el espacio con otros núcleos sociales que también constituyen familias, como, por
ejemplo, las fundadas a partir de una unión convivencial, las que se generan tras la ruptura de una unión anterior,
habiendo o no hijos (conformación familiar que se conoce en doctrina (...) como "familia ensamblada"), las que
aparecen reconocidas por la Ley 26618, etcétera".
Así, el CCyC pone el eje, a lo largo de su articulado, en el principio de igualdad, de autonomía de la voluntad, en el
reconocimiento del derecho a la vida familiar y por tanto la no injerencia en la vida privada también familiar, a tono
con la jurisprudencia más reciente en materia de derechos humanos dictada por la Corte Interamericana de
Derechos Humanos (Corte IDH) en los casos Fornerón vs. Argentina y Atala Riffo vs. Chile, ambos de 2012.
Al mismo tiempo, en materia de interpretación, los fundamentos y el texto del CCyC sientan sus propias reglas y
determinan que "los casos que este Código rige deben ser resueltos según las leyes que resulten aplicables,
conforme con la Constitución Nacional y los tratados de derechos humanos en los que la República sea parte" (art. 1
CCyC). Con ello hace referencia no solo a "los" tratados sino a "todos los tratados internacionales suscriptos por el
país y que resultan obligatorios, deben ser tenidos en cuenta para decidir un caso". A su vez, el CCyC determina que
"la ley debe ser interpretada teniendo en cuenta sus palabras, sus finalidades, las leyes análogas, las disposiciones
que surgen de los tratados sobre derechos humanos, los principios y los valores jurídicos, de modo coherente con
todo el ordenamiento" (art. 2) apelando, según se señala en los fundamentos, a la función en materia de
hermenéutica jurídica que tienen estos tratados.
Por tanto, y utilizando las palabras de los fundamentos del CCyC, "puede afirmarse que existe una reconstrucción de
la coherencia del sistema de derechos humanos con el derecho privado".

Principales avances en materia de familia, niñez y adolescencia

A continuación se listarán los principales cambios introducidos en el CCyC en materia de familia, infancia y
adolescencia.
- Interés superior del niño
Esta figura aparece textualmente en reiteradas oportunidades en especial en lo que hace referencia a las decisiones
de los niños, niñas y adolescentes (NNyA) sobre su propio cuerpo, cuando se trata de establecer el vínculo filial, en
materia de adopción, de responsabilidad parental y de restitución internacional.
En este sentido es importante tener en cuenta que este principio, establecido en el art. 3.1, CDN constituye al decir
de Cillero Bruñol la maximización de todos los derechos y es, según la Observación General Nº 14 (2013) del Comité
de los Derechos del Niño, un derecho en sí mismo, un principio interpretativo fundamental y una norma de
procedimiento (párr. 6).
La elección de citar este principio y derecho en el articulado del CCyC no es neutral y se pone a tono con la
consideración de que "... los niños poseen los derechos que corresponden a todos los seres humanos -menores y
adultos- y tienen además derechos especiales derivados de su condición, a los que corresponden deberes específicos
de la familia, la sociedad y el Estado" (Corte IDH, Opinión Consultiva Nº 17, Condición Jurídica del Niño, párr. 54).

- Principio de autonomía progresiva y responsabilidad parental

En concordancia con la CDN, el CCyC establece que los NNyA son plenamente capaces y que podrán asumir ciertas
obligaciones, deberes y ejercer derechos por sí mismos de acuerdo a su desarrollo y grado de madurez.
En este sentido, así como los padres y/o madres tienen responsabilidades, derechos y obligaciones para con sus hijos
e hijas, los NNyA también tienen obligaciones para con sus progenitores de acuerdo a su edad y grado de desarrollo
(art. 671).
Estas figuras se encuentran plasmadas en los art. 26 y 638 en adelante del CCyC y se basan en la idea de que los
niños, niñas y adolescentes tienen todos los derechos que les corresponden a los adultos más un plus de derechos y
que, si bien ejercen gran parte de sus derechos a través de sus representantes (quienes según la CDN están llamados
a criarlos y orientarlos -art. 14.2- con iguales responsabilidades -art. 18-) si cuentan con "edad y grado de madurez
suficientes" pueden ejercerlos por sí (art. 26, CCyC). En este sentido el CCyC prevé que los NNyA pueden tomar
decisiones sobre su propio cuerpo y que además conservan su plena responsabilidad siendo adolescentes respecto
de sus propios hijos y por tanto serán ellos los encargados de proporcionarles cuidado y orientación y no los abuelos
(arts. 26 y 644, CCyC respectivamente).
El principio de autonomía progresiva se condice con los postulados de la CDN "a mayor autonomía, disminuye la
representación de los progenitores en el ejercicio de los derechos de los hijos" (art. 639, CCyC) y sienta las bases
para determinar lo que ha dado a llamarse responsabilidad parental.
En este sentido, es de destacar que el CCyC ya no habla de "patria potestad" sino de "responsabilidad parental",
puesto que el primer término aludía al patriarcado y en consecuencia a tener potestad sobre los "menores" que era
considerados objetos, en concordancia con la vieja lógica tutelar.
Luego de la ratificación de la CDN y de la sanción de la Ley Nacional de Protección Integral de Niños, Niñas y
Adolescentes (Ley 26061) tales categorías no son admisibles y por ello el CCyC propone la figura de "responsabilidad
parental" dando cuenta de que los niños son sujetos de derecho y no objetos de protección.
A su vez, es de destacar que el ejercicio de la responsabilidad parental se rige por el interés superior del niño (art.
639, CCyC). Esta no es una creación artificial sino que tiene eco en otros instrumentos internacionales como ser la
CDN que establece que "ambos padres tienen obligaciones comunes en lo que respecta a la crianza y desarrollo del
niño" (art. 18), que tienen el derecho de impartirles "dirección y orientación" (art. 5) y de guiarlos en el ejercicio de
sus derechos (art. 14); la Convención sobre todas las formas de discriminación contra la Mujer art. 16.1.d que
establece que "los Estados deben asegurar a hombres y mujeres (...) los mismos derechos y responsabilidades como
progenitores", entre otros instrumentos.

- Derecho de los niños, niñas y adolescentes a ser oídos

Por su parte, el derecho del niño a ser oído no solo es un principio rector de la CDN (art. 12) sino que además se
encuentra plasmado en varios pasajes del CCyC y va de la mano del derecho a contar con una defensa técnica.
Por ej. el art. 26 establece que el niño tiene derecho a ser oído "en todo proceso judicial que le concierne así como a
participar en las decisiones de su persona" y que a su vez "su opinión debe ser tenida en cuenta y valorada" (art.
707, CCyC).
Ello en línea con la autonomía progresiva y en concordancia con el art. 27 de la Ley Nacional 26061 que garantiza el
derecho "a ser asistido por un letrado preferentemente especializado en niñez y adolescencia" en todo el proceso
judicial.
Estos dos derechos se encuentran plasmados también en la acción autónoma que puede ser ejercida por el
adoptado a los fines de conocer los orígenes (art. 596, CCyC), la posibilidad de actuar en carácter de parte en el
proceso de determinación de la situación de adoptabilidad (art. 608) como en el de adopción propiamente dicho
(art. 617), brindándole la posibilidad de estar en juicio contra sus progenitores (art. 679), entre otros.

- Familias en plural y autonomía de la voluntad

La CDN establece en su preámbulo que la familia es el "grupo fundamental de la sociedad y medio natural para el
crecimiento y bienestar de todos sus miembros, y en particular de los niños".
Atendiendo a la sociedad multicultural, a los avances científicos ineludibles y al principio de igualdad que debe regir
en todos los aspectos de la vida de las personas, el CCyC introduce una tercera fuente filial: la derivada de técnicas
de reproducción humana asistida (TRHA).
Así el CCyC establece que hay tres fuentes filiales: por naturaleza (o biológica), por adopción o por TRHA, donde se
pondrá especial énfasis en el consentimiento (art. 560) y en la voluntad procreacional (art. 562) para determinar la
filiación, es decir, en el deseo de ser padre y/o madre independientemente de quién haya aportado el material
genético.
De esta manera el CCyC establece que los tres tipos de filiación tienen iguales efectos y por tanto pone en pie de
igualdad a todos los NNyA independientemente de sus relaciones familiares y de sus orígenes.

- Adopción
El CCyC establece, en concordancia con el art. 9, CDN y la Ley de Protección Integral Nº 26061, que la adopción es
una institución jurídica que tiene por objeto proteger el derecho de los NNyA a vivir y desarrollarse en una familia
que le procure los cuidados tendientes a satisfacer sus necesidades afectivas y materiales, cuando éstos no le
pueden ser proporcionados por su familia de origen. La adopción se otorga solo por sentencia judicial, emplaza al
adoptado en el estado de hijo y obliga a tener consideración primordial (en todos los casos y en todos los aspectos)
del interés superior del niño, conforme con las disposiciones del CCyC.
Influenciado por el fallo Fornerón vs. Argentina (2012) de la Corte IDH, el CCyC fija un piso mínimo para esta figura,
involucrando en el procedimiento al niño (ponderando su interés superior y satisfaciendo su derecho a ser oído y
que su opinión sea tenida en cuenta), a la familia biológica (puesto que no solo son citados los padres sino que su
familia ampliada es la primera en orden de prioridad para la adopción) y la familia adoptante. Así, establece reglas y
tiempos precisos que buscan garantizar los derechos de todas las partes intervinientes a la vez que propone un
proceso expedito para no someter a los niños a un largo procedimiento que los afecte considerablemente en
relación a su noción de los tiempos (art. 594 en adelante).

¿Cuáles son los principios sobre los que se edifica este libro segundo?
El principio de igualdad y no discriminación, el principio de libertad e intimidad, el principio de realidad, el
reconocimiento de diversas formas de vivir en familia, el principio de autonomía progresiva de niños, niñas y
adolescentes, el derecho a vivir en familia, el principio de solidaridad familiar y todo ello, transversalizado por la
protección al más débil y junto a ello, la obligada perspectiva de género ya que en muchas ocasiones, las más débiles
son las mujeres que tras la ruptura de la pareja se quedan totalmente desamparadas.

Orden público y autonomía privada

La autonomía de la voluntad encuentra en el orden público constitucional su justo límite a partir de la noción de
solidaridad familiar. En ese sentido, el código tiene disposiciones orientadas a lograr un mejor y mayor equilibro.

Igualdad y no discriminación

Dos principios que están presentes en todo el código. Se busca la igualdad real, desarrollando una serie de normas
orientadas a plasmar una verdadera ética de los vulnerables. Se relaciona íntimamente con el principio de no
discriminación. En la tradición histórica, el sujeto de derechos privados ha sido el hombre. Se ha cambiado el
paradigma para concebirlo en términos igualitarios, sin discriminaciones basadas en el sexo, la religión, el origen o su
riqueza. Por otro lado, el termino discriminación, tiene otra acepción que da cuenta del reconocimiento de una
diferencia. Si bien todos somos iguales en cuanto a nuestros derechos, en otros aspectos somos todos diferentes.
Ignorar esas diferencias implica imposibilitarle a ciertas personas acceder a sus derechos (ej. El mismo acceso para
personas que no caminan, o el mismo asiento para un obeso). Eso significa la necesidad de crear mecanismos para
que la igualdad formal se transforme en igualdad de oportunidades y tratos.
BOLILLA III: EL ESTADO DE FAMILIA.

1) Estado de familia: es el lugar o la posición que ocupa una persona respecto de la familia a la que pertenece. De
dicho estado se determinaran derechos y obligaciones en función de la ubicación del individuo en relación con sus
vínculos familiares. Se conforma tanto por los vínculos derivados del emplazamiento de las relaciones familiares de
parentesco, así como del estado civil vinculado a la relación patrimonial.
El estado de familia es un atributo de las personas de existencia visible, que resulta entonces inescindible de la
persona misma, y por tanto inalienable e irrenunciable.
Reúne los siguientes caracteres:

1) Universal: el estado de familia abarca todas las relaciones jurídicas familiares.


2) Unidad: el estado de familia de una persona comprende la totalidad de los vínculos jurídicos que lo ligan con
otras, sin diferenciarse o calificarse en razón de su origen matrimonial o extramatrimonial.
3) Indivisible: el estado de familia no puede dividirse, significa que se ostenta determinado emplazamiento frente a
todas las personas por igual.
4) Reciproco: el vínculo que une a dos personas en una familia es correlativo, se es padre e hijo, cónyuges, etc. Tiene
excepción en el estado de soltero o viudo.
5) Oponibilidad: el estado de familia puede ser opuesto erga omnes. Sus efectos alcanzan tanto a aquellos que
integran el vínculo familiar, así como a los terceros ajenos a este.
6) Estabilidad o permanencia: la estabilidad del estado de familia no significa que sea inmutable, pues puede cesar o
ser modificado; pero mientras dura el estado de familia es permanente.
7) Inalienable: el estado de familia no se puede transferir.
8) Irrenunciable: no es posible renunciar al estado de familia.
9) Imprescriptibilidad: el estado de familia no es prescriptible, es decir que no se adquiere ni se pierde por el
transcurso del tiempo.
10) Inherencia personal:
- artículo 713: “las acciones de estado de familia son de inherencia personal y no pueden ser ejercidas por vía de
subrogación. Solo se trasmiten por causa de muerte en los casos en que la ley lo establece”.
- Artículo 1617: “no pueden cederse los derechos inherentes a la persona humana”

2) Título de estado de familia: es el instrumento o conjunto de instrumentos legales que exteriorizan jurídicamente
el emplazamiento familiar de la persona y le permiten el ejercicio de las acciones que dé el emergen.
Zannoni, divide entre título de estado en sentido formal y material:
En sentido formal, hace referencia a los instrumentos públicos en los que se basa el emplazamiento familiar, entre
los que se encuentran el certificado emitido por el registro del estado civil y capacidad de las personas, el
testamento por el que procede el reconocimiento de hijos o la sentencia judicial.
En sentido material, es el emplazamiento mismo en un determinado estado de familia, constitutivo de relaciones
jurídicas familiares.
Ambos conceptos, material y formal, están indisolublemente unidos. No hay emplazamiento sin título, y por eso el
emplazamiento es sustancialmente el título, es decir, el emplazamiento se constituye por el título de estado.
Se ha sostenido que el título de estado es la prueba legal del estado de familia. Es que el título de estado tendrá por
fin la acreditación de un determinado estado de familia. Constituyendo de esta forma su medio probatorio más
importante. Su registración deberá efectuarse en el registro del estado civil y capacidad de las personas.

Posesión de estado de familia y posesion aparente:


- Posesion de estado: goce de hecho de un determinado estado de familia con título o sin el.
- Posesion aparente: En el caso de que la persona no tenga el título, la posesión de estado de familia crea un
estado aparente de estado de familia. Así, el estado filial podrá convertirse en el estado de familia de hijo a
través del emplazamiento si media reconocimiento o sentencia judicial. Tal posesión de estado (cuando no
haya título) tiene importancia jurídica, porque, según los casos, permite a la ley presumir que quieren en los
hechos se han conducido públicamente como si estuvieran emplazados en el estado de familia, reconocen
por medio de esa conducta la existencia de los presupuestos sustanciales del estado.

Artículo 584: “la posesión de estado debidamente acreditada en juicio tiene el mismo valor que el reconocimiento,
siempre que no sea desvirtuada en por prueba en contrario sobre el nexo genético”;
Artículo 585: “convivencia. La convivencia de la madre durante la epoca de concepcion hace presumir el vinculo filial
a favor de su conviviente, excepto oposicion fundada”.
Artículo 573: "el reconocimiento del hijo ya fallecido no atribuye derechos en su sucesión a quien lo formula, ni a los
ascendientes de su rama, excepto que haya habido posesión de estado de hijo" permite que la posesión de hijo se
pueda reclamar una vez que este ya haya fallecido, si se ejerció la posesión de estado de familia.
Artículo 597: en materia de adopción, la posesión de estado de hijo fehacientemente acreditada es una de las
excepciones al principio de que solo pueden ser adoptadas personas menores de edad. "Excepcionalmente puede
ser adoptada la persona mayor de edad cuando: b) hubo posesión de estado de hijo mientras era menor de edad,
fehacientemente comprobada”.

3. Acciones de Estado. Clasificación.

Entendemos que son acciones de estado de familia las que tienen por finalidad comprobar un título de estado del
cual se carece, destruir un estado falso o inválido, crear un estado de familia nuevo o modificar un estado ya
existente.
Las acciones de familia se refieren tanto al estado matrimonial como al estado filial, es decir que comprenden las
acciones de filiación, las relativas al vínculo conyugal y al derivado de la unión convivencial. Entre ellas encontramos
las siguientes acciones:
– Acción de reclamación del estado matrimonial.
– Acción de reclamación del estado de conviviente.
– Acción de divorcio.
– Acción de disolución de la unión convivencial.
– Acción de reclamación de la filiación matrimonial.
– Acción de impugnación de la paternidad.
– Acción de impugnación de la maternidad.
– Acción de reclamación de estado de hijo extramatrimonial.
– Acción de impugnación de la maternidad extramatrimonial.
– Acción de nulidad del reconocimiento.
– Acción de adopción.
– Acción de revocación de la adopción.
– Acción de nulidad de la adopción.
– Acción de pérdida de la autoridad parental.
Estas acciones tienen como característica el hecho de ser irrenunciables, imprescriptibles y de inherencia personal,
pero no se establece claramente que son inalienables.
El art. 713 del CCyCN establece con acierto la inherencia personal de las acciones de familia que provienen del hecho
de que el estado de familia, como atributo de la personalidad, sea inherente a la persona, es decir que está excluido
su ejercicio por toda persona que no sea su titular.
No obstante que las acciones de familia son de inherencia personal, el Código prevé que la acción de adopción sea
ejercida de oficio por el juez y por el órgano administrativo (art. 616), lo que contradice completamente el carácter
de inherente a la persona que tiene la acción por la cual se solicita la filiación adoptiva de un menor. En realidad, es
impensable que el juez, sin el acuerdo del adoptado y sin su aceptación, pueda iniciar una acción de filiación
adoptiva. Lo que puede hacer es impulsar a quien tiene la guarda con fines de adopción a iniciar el proceso de
adopción, bajo apercibimientos varios, pero no siendo representante del adoptante, no puede iniciar en su nombre
una acción de inherencia personal.
Las acciones de estado de familia, en principio, son irrenunciables, debido a que el estado de familia es
irrenunciable. La norma aclara que los derechos patrimoniales derivados del estado de familia están sujetos a
prescripción y también a la posibilidad de la renuncia.
Por otra parte, las acciones son también imprescriptibles aunque se admite la caducidad de la acción de nulidad de
matrimonio.
ARTÍCULO 712. Irrenunciabilidad e imprescriptibilidad. Las acciones de estado de familia son irrenunciables e
imprescriptibles, sin perjuicio de su extinción en la forma y en los casos que la ley establezca. Los derechos
patrimoniales que son consecuencia del estado de familia están sujetos a prescripción
ARTÍCULO 713. Inherencia personal. Las acciones de estado de familia son de inherencia personal y no pueden ser
ejercidas por vía de subrogación. Sólo se transmiten por causa de muerte en los casos en que la ley lo establece.
1) Según su objeto: constitutivas (crean un determinado titulo de estado, ej. Adopcon);

modificativas (modifican un estado de familia ya existente, ej. Divorcio);

extintivas (dan por finalizado un estado familiar, como la nulidad del matrimonio).

2) Según la sentencia y los efectos que produce:

- Sentencias constitutivas: aquellas sentencias cuyo ejercicio es el presupuesto para la constitución, modificación, o
extinción de un estado de familia determinado. Daran origen a un nuevo estado, lo transformaran o lo darán por
concluido.
- Sentencias declarativas: aquellas en las que se declara la existencia o inexistencia de los presupuestos que
son el fundamento del vínculo jurídico familiar. Tendrá por fin exponer, manifestar, un estado de familia
preexistente.

CADUCIDAD:

4. PROCESOS DE FAMILIA.

El sistema jurídico receptado en la Constitución Nacional (CN) establece que los Códigos de fondos son regulados en
forma exclusiva por el gobierno federal, mientras que las leyes de procedimiento son establecidas por cada provincia
en particular.
El Código Civil y Comercial de la Nación (en adelante CCyCN) se aparta de esta norma relativa a la división de poderes
entre la Nación y las Provincias y regula en su articulado tanto el proceso de familia como el proceso sucesorio que
hasta el momento ha sido competencia exclusiva de los Estados provinciales de conformidad con lo establecido por
los arts. 121, 5; 75, inc. 12; 116 y 117 de la CN).

El sistema propugnado por el CCyCN sigue la antigua doctrina jurisprudencial de la Corte Suprema de Justicia de la
Nación, que establece que las normas procesales dictadas por la legislatura nacional son constitucionales, en tanto
resulten esenciales para la vigencia de la institución de fondo, y es similar al seguido por la ley 26.485, en tanto sólo
establece principios uniformes mínimos, que aparecen como imprescindibles para hacer efectivos los derechos de
fondo establecidos en el Código, pero se abstiene de regular los procedimientos en sí.

Los procesos de familia, han sido regulados en el Título VIII, “Procesos de familia”, del Libro II, “Relaciones de
familia”, del CCyCN, en cuatro capítulos comprendidos entre los arts. 705 al 723.

- El capítulo 1 se refiere a los “Disposiciones generales”;


- el capítulo 2 trata de las “Acciones de estado de familia”;
- el capítulo 3 se refiere a las “Reglas de competencia”;
- el capítulo 4 se ocupa de “Las medidas provisionales”.

Los conflictos familiares no pueden ser solucionados de acuerdo a reglas clásicas cuya estructura tradicional sólo
permite asignar culpas y castigos, tornándose ineficaz para solucionar conflictos familiares. De allí que es necesario
para el derecho de familia tener una adecuada herramienta procesal para hacerlo efectivo, y ello es lo que busca el
sistema proyectado.

Efectos de la cosa juzgada: cabe preguntarse si la sentencia que se dicta en una acción de estado tiene efecto solo
entre las partes que litigaron o si, en cambio, la cosa juzgada es oponible erga omnes.
Hay que distinguir entre el efecto de la cosa juzgada y la oponibilidad erga omnes del título de estado.
Quienes están legitimados para promover el juicio podrán hacerlo aunque antes se haya dictado sentencia en juicio
promovido por otro legitimado. Pero, independientemente de ello, el titulo de estado que la sentencia constituye o
modifica es oponible erga omnes, o sea que se mantiene indivisible ese estado de familia que se constituye o
modifica por la sentencia, sin perjuicio de que, en el futuro, pudiere ser alterado por otra sentencia.

4) Acto jurídico familiar: no hay una definición de acto jurídico familiar, sino que para llegar a ese concepto debe
tenerse en cuenta la definición de acto jurídico en general: acto humano, voluntario, licito que tiene por fin
inmediato la adquisición, modificación o extinción de relaciones o situaciones jurídicas. Cuando aquello que se
adquiere, modifica o extingue tiene contenido familiar, es decir que se trata de relaciones jurídicas familiares, se lo
denomina acto jurídico familiar.
Zannoni define al acto jurídico familiar como el acto humano, voluntario (porque es hecho con discernimiento,
intención y libertad sin vicios) y lícito (porque no está prohibido por la ley) que tiene como fin jurídico crear,
modificar, conservar o extinguir relaciones jurídicas de familia, y debe estar previsto por la ley.

Clasificación de los actos jurídicos familiares:

1) Puede ser unilaterales y bilaterales, ya sea que requieran el consentimiento de una o de ambas personas
(ejemplo: unilateral es el reconocimiento del hijo, pues se perfecciona por el solo reconocimiento del padre; bilateral
es, en cambio el matrimonio, pues requiere el consentimiento de ambos contrayentes).
2) Patrimoniales o personales (extramatrimoniales).
3) Formales o no formales (ejemplo: el matrimonio es un acto formal y, en cambio, no es formal el reconocimiento
de un hijo).
4) De emplazamiento o de desplazamiento en el estado de familia. El matrimonio, emplaza en el estado de
cónyuges; el emplazamiento es recíproco por ejemplo el estado de familia que se crea entre una madre y su hija, se
crea el estado de familia teniendo un hijo. La revocación de la adopción simple, desplaza del estado de familia
creado por la adopción.
BOLILLA IV: FUERO DE FAMILIA.

*PANTALLAZO A LOS FUNDAMENTOS DEL ANTEPROYECTO:

El Anteproyecto sigue la línea legislativa del Proyecto de 1998 que regula en un Título especial cuestiones relativas a
las acciones de estado de familia, pero de un modo más amplio, extendiendo el Título no sólo a este tema sino
también a los procesos de familia en general.
En este sentido, se enumeran los principios generales de los procesos de familia, surgidos de los principales avances
y consideraciones esgrimidas a la luz del derecho procesal constitucional de la familia.
Se cita, en primer lugar, el principio de tutela judicial efectiva, que comprende el acceso a la justicia, el de economía
y el de celeridad procesal, recogiéndose así el valor y entidad que se otorga a este principio en las 100 Reglas de
Brasilia sobre Acceso a la Justicia en condiciones de vulnerabilidad, todo en relación directa con los principios de
inmediación, buena fe, lealtad procesal, oficiosidad y oralidad.
Se afirma la especialidad del fuero de familia y la consecuente necesidad de que los tribunales estén conformados
con equipo multidisciplinario; se reitera la aplicación obligatoria del principio del interés superior del niño en todo
proceso en que estén involucrados niños, niñas y adolescentes.
Se regula la participación de éstos y de las personas con discapacidad, no sólo en lo relativo al derecho a ser oídos en
su aspecto formal o como sinónimo de escucha de manera personal, sino también en lo que hace a la defensa
técnica a través de un patrocinio letrado propio.
En disposiciones particulares se prevén otras reglas, tales como el acceso limitado al expediente, la oficiosidad y
gratuidad, previéndose las excepciones. También están presentes la libertad y flexibilidad probatoria, receptándose
el principio de las cargas dinámicas y, de conformidad con la especialidad de los asuntos de familia, la posibilidad de
que parientes y allegados puedan ser ofrecidos como testigos, facultándose al tribunal a no admitir la declaración de
personas menores de edad. Se receptan las nociones de irrenunciabilidad, imprescriptibilidad –que no excluye la
caducidad - e inherencia personal de las acciones de estado de familia.
Se regulan las reglas de competencia relativa a diferentes procesos de familia, entre otros: procesos en los que se
deciden de modo principal derechos de niños, niñas y adolescentes (guarda, custodia, régimen de comunicación y
alimentos); derivadas de las uniones convivenciales; los alimentos entre cónyuges y las acciones de filiación cuando
involucra a personas mayores de edad. Tratándose de derechos de niños, niñas y adolescentes, el elemento central
para la fijación de la competencia es el lugar en el cual ellos tienen su centro de vida, de conformidad con lo previsto
en el artículo 3 de la ley 26.061 y jurisprudencia consolidada en este sentido.
Se resuelve un tema discutido, como es el del juez competente en la liquidación de la sociedad conyugal cuando uno
de los dos ha sido declarado en concurso o quiebra.
El Título dedicado al derecho internacional privado completa estas disposiciones para los supuestos en los que
interviene algún elemento extranjero.
Se omite la regulación de los recursos, por cuanto la conformación de los tribunales en cada provincia difiere
sustancialmente.
Se regulan las medidas provisionales de carácter personal y patrimonial, en el marco del proceso de divorcio y de
nulidad de matrimonio, o incluso antes de iniciarse, en razón de urgencia.
Se extiende la posibilidad del dictado de medidas provisionales a los casos de uniones convivenciales, si ello
correspondiere.
1) PRINCIPIOS GENERALES DE LOS PROCESOS DE FAMILIA.

Los principios generales se encuentran establecidos en los arts. 705 a 710 (recogen las 100 Reglas de Brasilia sobre
Acceso a la Justicia en condiciones de vulnerabilidad)
Estos principios generales son:

1. Tutela judicial efectiva

El derecho fundamental de toda persona de acceder a tribunales independientes en procura de Justicia proclamado
en el art. 10 de la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948, el art. XVIII de la Declaración Americana de
Derechos y Deberes del Hombre.
Pero donde está especialmente desarrollada es en la Convención Americana sobre Derechos Humanos (PSJCR). Su
art. 8.1 establece más claramente su contenido, señalando que implica el derecho:
a) a ser oído con las debidas garantías; b) a que el proceso se desarrolle dentro de un plazo razonable; y c) a ser
juzgado por un juez o tribunal competente; independiente; e imparcial, establecido con anterioridad por la ley.
A su vez, en el art. 25.1 de esta Convención dispone: “Toda persona tiene derecho a un recurso sencillo y rápido o a
cualquier otro recurso efectivo ante los jueces o tribunales competentes, que la ampare contra actos que violen sus
derechos fundamentales reconocidos por la Constitución, la ley o la presente convención, aun cuando tal violación
sea cometida por personas que actúan en ejercicio de sus funciones oficiales”.

Contenido El contenido del derecho a la tutela judicial efectiva es muy amplio, ya que despliega sus efectos en
tres momentos distintos: - al acceder a la justicia;
- durante el desarrollo del proceso; y
- al tiempo de ejecutarse la sentencia.

La tutela judicial efectiva en el CCyCN: SUPUESTOS.

Múltiples son los supuestos en los cuales el CCyCN hace aplicación del principio de tutela judicial efectiva tratando
de eliminar trabas que impidan acceder a los derechos.

-El art. 421 que admite que el matrimonio en art. de muerte pueda celebrarse ante cualquier juez o funcionario
judicial, lo que permite hacer efectivo la libertad de casarse.

-En la facultad que le otorga al juez el art. 440 para solicitar al obligado en el convenio regulador del divorcio que
otorgue garantías reales o personales como requisito para la aprobación del convenio.

-En el art. 443 nuevamente se intenta lograr una tutela efectiva con respecto a la atribución del uso de la vivienda
otorgando al juez posibilidad de determinar el plazo de duración, la procedencia y los efectos para atribuir el uso de
la vivienda, así como la facultad de establecerlo de forma gratuita o mediante el pago de una renta. Iguales
facultades tiene el juez para proteger la vivienda familiar en las uniones convivenciales.

-Dentro del régimen patrimonial del matrimonio la búsqueda de la tutela efectiva se advierte en la posibilidad de
que el juez autorice a uno de los cónyuges a realizar los actos que requieran el asentimiento del otro, Arts 458 y 460.

-en materia alimentaria para lograr una tutela judicial efectiva se otorgan al juez múltiples facultades entre ellas la
posibilidad de fijar al responsable de incumplimiento reiterado de alimentos intereses superiores a las tasas más
altas que cobre el BCRA, art. 552 y también se habilita al juez para imponer cualquier tipo de medida razonable para
asegurar la eficacia de la sentencia (sobre el tema nos referimos a lo dicho en el capítulo de alimentos entre
parientes.

2. Inmediación

La inmediación es esencial en el proceso de familia donde por los intereses en juego el magistrado no puede esperar
a que quede firme el llamado de autos para resolver o para involucrarse en el proceso.

Por el contrario, tiene que tener un contacto directo y personal con las partes, con los peritos, con los
representantes de las personas con discapacidad reducida, con los apoyos y con el ministerio público

En la mayoría de los casos la asistencia personal a las audiencias es ineludible y su participación por intermedio de
representante desvirtuaría el sentido que persigue el ordenamiento procesal; la actuación autónoma de los letrados
debe ser excepcional y referirse en principio a actos procesales de mero impulso.

En definitiva, de lo que se trata es de involucrarse en el proceso, buscar la resolución amigable del conflicto y, de no
ser posible, concentrar la recepción de la prueba oral en una o en pocas audiencias, lograr que sea el juez quien las
reciba y obtener que entre ese acto decisivo para la suerte del litigio y la sentencia transcurra el menor tiempo
posible. Es que como señalaba el gran maestro Podetti, “es muy distinto escudriñar en las declaraciones escritas la
existencia de un hecho controvertido, que interrogando y escuchando personalmente a los testigos”.

EJ:

-se advierte en el art. 404 cuando exige que el magistrado tenga una entrevista personal con los menores para
otorgarle dispensa judicial a fin de contraer matrimonio valido sino tienen la edad nupcial suficiente.
-También se encuentra presente en el art. 405 que exige la entrevista personal con del juez con las personas que
carecen de falta de salud mental a fin de otorgarle dispensa judicial para contraer matrimonio.

-Otra expresión del principio de inmediación estada dada en el art. 716 en cuanto ordena que en aquellos procesos
relativos a derechos de niños, niñas y adolescentes (sean los mismos principales o modificatorios de lo resuelto por
otra jurisdicción), es juez competente aquel que sea del lugar donde la persona menor de edad tiene su centro de
vida. Se entiende en base al interés del menor y a la capacidad del magistrado de verificar las situaciones fácticas
que le fueran traídas a examen.

3. Buena fe y lealtad procesal.

La buena fe y lealtad procesal constituyen el principio de moralidad procesal que es necesario preservar en todo
proceso, e imprescindible hacerlo en el ámbito de un proceso de familia donde no se puede ganar posiciones
valiéndose de “agachadas”, argucias o engaños.
La mayoría de los códigos procesales civiles y comerciales de las provincias establecen la facultad de los jueces de
sancionar todo acto contrario al deber de buena fe y lealtad (art. 34 inc. 5 CPCCN).
El principio de buena fe y lealtad procesal es un concepto abierto que puede definirse como el deber de los sujetos
procesales (las partes, el juez, personal judicial, auxiliares de justicia) de adaptar su comportamiento durante el
proceso a un conjunto de reglas, criterios de conducta, de carácter ético, social y deontológico. La defensa de una
parte no puede basarse en perjudicar el derecho a defensa de la otra o en la inducción a error del órgano
jurisdiccional, impidiendo o dificultando que pueda ofrecer una efectiva tutela de los intereses en conflicto. La
libertad de la conducta de las partes no puede extenderse al extremo de lesionar la buena fe y la ética procesal,
dado que si bien el proceso es un conflicto en que cada profesional defiende con todas las herramientas sustanciales
y procesales los intereses de su parte, y lo contrario puede considerarse mala praxis, éste ha de ser leal.

4. Oficiosidad,

Se establece que el juez de familia debe ser un juez activo, director del proceso, que ejerce sus amplios poderes-
deberes. El principio de oficiosidad comprende las facultades del juez en materia de prueba, las medidas
ordenatorias e instructorias (incluyendo el impulso de oficio) y la limitación del principio de disposición de los hechos
y del proceso.
Todas estas facultades deben ser ejercidas posibilitando el ejercicio del derecho de defensa, que implica la
posibilidad de ser oído, presentar defensas, ofrecer contraprueba, controlar la prueba, y alegar sobre su mérito.
Se consagra el impulso procesal de oficio. Por ende el juez debe realizar todas las medidas necesarias para que el
expediente avance hacia la sentencia, incluyendo confeccionar cédulas y oficios, proveer la prueba y fijar de oficio
las audiencias, entre otras. Se deroga implícitamente el instituto de la caducidad de instancia. La solución de los
conflictos de familia interesa no sólo a las partes sino a la sociedad toda. Por eso se carga sobre el servicio de justicia
el otorgar una solución jurisdiccional. Dado que es responsabilidad del tribunal el avance del expediente, no puede la
inacción de la parte generar la caducidad del proceso.
El impulso oficioso no procede en los asuntos de naturaleza exclusivamente económica en los que las partes sean
personas capaces. Se refiere a las partes en sentido técnico/sustancial: si un representante legal actúa en el proceso
la parte es el incapaz representado.
Por el carácter de interés público de los derechos de familia y su importancia para la paz social, aun en los procesos
de familia que se pueden considerar no dispositivos, el principio de disposición de los hechos y del proceso sufre
limitaciones. No es posible disponer del proceso, es decir allanarse a la pretensión, ni desistir del derecho o del
proceso. Son derechos indisponibles y el juez debe investigar pues la sociedad toda está interesada en que se
encuentre la verdad jurídica material. Es posible lograr una solución conciliatoria pero siempre con el control del juez
y Asesor de menores en su caso. Asimismo el juez puede investigar hechos que no hayan sido incorporados por las
partes en el proceso, siempre que la materia lo justifique.

5. Oralidad,

El principio de oralidad ha de entenderse como una comunicación directa entre las partes, el juez y todos quienes
participen en el proceso familiar, que acompaña necesariamente al principio de inmediatez, que difícilmente pueda
darse en un sistema escrito.

Ejemplos del principio de oralidad los tenemos en las audiencias que debe celebrar el juez con los menores y las
personas con falta de salud mental a fin de autorizarlos a contraer matrimonio, arts 404, 405 CCyCN.
Asimismo en cuanto a la nulidad de los matrimonios se advierte la oralidad en cuanto a que el juez debe oír a los
cónyuges a fines de establecer si hubo o no nulidad relativa por falta de edad legal o salud mental.
También se verifica en el supuesto que la nulidad relativa sea demandada por los parientes que pudieron haberse
opuesto a la celebración del matrimonio, en este caso se debe oír a ambos cónyuges y evaluar la situación del
afectado.

6. Acceso limitado al expediente.

En el sistema del derecho procesal civil rige el principio de la publicidad, que establece que todos los actos del
proceso en cuanto no afecten la moralidad, el orden público y el interés de los litigantes pueden ser conocidos
En materia de procesos de familia, el Código propugna un sistema opuesto al sistema de publicidad, inclinándose por
el “sistema de reserva”, que se compatibiliza mejor con la característica privada y personalísima de los intereses en
juego; de allí que se establezca un acceso limitado al expediente que debe entenderse extendido a la privacidad de
las audiencias y a la consulta del protocolo para preservar efectivamente el derecho que es su fundamento.

7. Acceso a la justicia,

Para asegurar el acceso igualitario a la tutela de los derechos, se debe remover los obstáculos económicos,
culturales, y geográficos que la restringen y/u obstaculizan. La desigualdad de los habitantes debe compensarse con
medidas positivas que aseguren la remoción de estos obstáculos, como la organización de asistencia letrada gratuita,
mecanismos de información general y difusión para erradicar el desconocimiento de los derechos y mecanismos
judiciales, y cursos de formación de los operadores jurídicos para la concientización e implementación de cursos de
acción (procedimientos estándar) para la detección y solución de tales problemas.
Por lo tanto implícitamente, se incorpora el principio de gratuidad del procedimiento y costas y de desformalización,
evitando que cortapisas de carácter formal limiten u obstaculicen el desarrollo del proceso. Para efectivizar la
gratuidad, en los procesos de familia debe regularse el beneficio de litigar sin gastos (como en materia laboral), y
estar exentos de abonar la tasa de justicia (como regla pudiendo exceptuarse cuando la pretensión tenga contenido
patrimonial).
En materia de costas, asimismo, debe regularse en forma diferenciada al proceso civil clásico. En el proceso de
familia la doctrina y jurisprudencia han propugnado una tendencia a prescindir del principio de la derrota. Se
considera que la intervención del juez es una carga común por ser necesaria para componer las diferencias entre las
partes o, en otros casos, para resguardar los intereses del denunciado o demandado (ej. interdicción, inhabilitación).
Por ello el principio en estudio implica que la regla debería ser costas por su orden y la excepción costas a cargo del
perdidoso cuando es su conducta la que ha hecho necesaria la intervención judicial de otra manera obviable. Este
último sería el caso de los alimentos en que las costas estarían a cargo del alimentante si fue demandado, salvo
conciliación o allanamiento, en que serían en el orden causado.
En este sentido la Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha expresado: “Las garantías a la tutela judicial
efectiva y al debido proceso imponen una interpretación más justa y beneficiosa en el análisis de los requisitos de
admisión a la justicia, al punto que por el principio “pro actione”, hay que extremar las posibilidades de
interpretación en el sentido más favorable al acceso a la jurisdicción” (informe 105/99 emitido en el caso 10.194,
“Palacios, Narciso - Argentina”, publicado en LA LEY, 2000-F).

8. Personas vulnerables. El interés superior de niños, niñas y adolescentes. (ya visto)

9. Resolución pacífica de los conflictos.

Lo que indica el principio es que el tribunal debe favorecer la conciliación como medio de superar diferencias
procurando la pacificación de la contienda mediante el avenimiento de las partes. Este medio halla un fundamento
acabado en lo relativo al conflicto familiar.
La resolución pacífica de los conflictos en el CCyC tiende a buscar una solución no controversial de los conflictos, así
por ejemplo:
- Responsabilidad parental, en caso de desacuerdos reiterados entre los progenitores, cualquiera de ellos
puede acudir al juez competente, quien puede someter las discrepancias a mediación. (art. 642)
- El juez puede disponer la intervención del equipo técnico del tribunal para que colabore con el menor en
el derecho de conocer sus orígenes.
10. Especialización.

El código recoge en este principio un viejo anhelo de los doctrinarios del derecho de familia y del derecho procesal
que requieren la especialización de los jueces para lograr efectividad en las resoluciones.
En definitiva se requiere un juez que además de juez director sea un juez “de acompañamiento”, capaz de pacificar
la contienda con el fin de que el conflicto llevado a tribunales no signifique un quiebre de las futuras relaciones entre
los integrantes del grupo familiar que seguirán vinculados como padres, hijos, hermanos, etc. En este aspecto el juez
de familia cumple además de una importante función pacificadora una función docente.
REGLAS DE COMPETENCIA- ARTS. 716- 720.

En el capítulo III del Título VIII se establecen normas sobre la competencia, determinando que en los procesos
relativos a los derechos de niños, niñas y adolescentes es juez competente el juez donde el menor de edad tiene su
centro de vida. En los de divorcio o en los de uniones convivenciales, el juez del último domicilio conyugal o el del
demandado, a elección del actor. En el de alimentos y pensiones compensatorias, el juez del domicilio conyugal o
convivencial, el del beneficiario o el del demandado a elección del actor.

1). Juez competente en acciones de divorcio.

El proceso de divorcio puede ser por presentación conjunta o por petición unilateral (art. 437 CCyCN). En ambos
casos será juez competente el juez del último domicilio conyugal.
En el caso de divorcio por petición unilateral, además de ser competente el juez del último domicilio conyugal, tiene
competencia el juez del domicilio del demandado a elección del actor.
En el supuesto de divorcio por presentación conjunta, es también competente el juez del domicilio de cualquiera de
los cónyuges (art. 717 CCyCN).

1.1. Juez competente en acciones de disolución de la sociedad conyugal cuando medie quiebra o concurso

El sistema propuesto establece que si se ha declarado el concurso o la quiebra de uno de los cónyuges, en la
liquidación del régimen patrimonial del matrimonio es competente el juez del proceso colectivo (art. 717 del CCyCN).
El fundamento por el cual los juicios fundados en relaciones de familia que refieren a cuestiones netamente
patrimoniales (en el caso, liquidación de la sociedad conyugal), quedan bajo el fuero de atracción de la quiebra, está
dado porque de este modo se atiende al principio de universalidad y concentración impuestos por la ley para hacer
efectiva la competencia del juez sobre los bienes del fallido, pagar a los acreedores en situación de quiebra, además
de la conveniente participación del síndico en causas donde se involucran los bienes desapoderados.
La competencia en materia de acciones de divorcio o nulidad del matrimonio, asuntos conexos y las que refieran a
los efectos de la sentencia se atribuye al juez del último domicilio conyugal o el del demandado, de manera similar a
la forma en que lo establecía el art. 227 del régimen derogado.
El nuevo texto añade la alternativa de que pueda serlo el juez de cualquiera de los domicilios de los cónyuges si la
presentación es conjunta. Esta decisión es razonable pues se refiere a una situación frecuente entre esposos que han
interrumpido la convivencia y han trasladado su domicilio a un lugar distinto del que fuera sede del último hogar
conyugal. Obligar a regresar a dicho lugar al solo efecto de tramitar el divorcio, si ninguno de los interesados
mantiene allí su residencia, no encuentra justificación alguna.

2). Juez competente en acción de nulidad de matrimonio

En las acciones de nulidad de matrimonio y en las acciones conexas con ellas y las que versan sobre los efectos de la
sentencia, es competente el juez del último domicilio conyugal o el del demandado a elección del actor (art. 717 del
CCyCN).
Entre las acciones conexas a la acción de nulidad de matrimonio se encuentran las acciones de disolución de la
comunidad, las demandas por indemnización de daños y perjuicios al cónyuge de mala fe y las acciones para la
demostración de los aportes de cada cónyuge a efectos de dividir los bienes en proporción a ellos como si se tratase
de una sociedad de hecho; todas ellas serán de competencia del juez del domicilio del accionado o el del último
domicilio conyugal a elección del accionante (art. 439 del CCyCN).
También es una acción conexa al juicio de nulidad la acción para solicitar compensación económica que sólo
corresponde al cónyuge de buena fe. En este caso, el juez competente por pensiones compensatorias entre
cónyuges o convivientes es el juez del último domicilio conyugal o convivencial, o el del domicilio del beneficiario, o
el del demandado, o aquel donde deba ser cumplida la obligación alimentaria, a elección del actor (art. 719 del
CCyCN).

3). Juez competente en acciones de filiación

Para determinar la competencia en acciones de filiación hay que coordinar lo dispuesto por los arts. 716, 720 y 581
del Código proyectado y determinar si es ejercida por una persona mayor de edad o menor de edad.
La acción de filiación, sea ejercida por personas menores de edad o con capacidad restringida, es de competencia del
juez del lugar donde el actor tiene su centro de vida o el del domicilio del demandado, a elección del actor (art. 581
del CCyCN).
Por otra parte, si la acción de filiación es iniciada por un mayor de edad, la competencia se fija por el domicilio del
demandado (art. 720 del CCyCN).

4). Juez competente en acciones de adopción

En lo referente a adopción, el nuevo régimen del CCyCN trae como novedad que en el Título VI, capítulo II, se regula
el estado de adoptabilidad, que requiere de un proceso administrativo y uno judicial para obtenerlo. Es decir que en
lugar de los dos procesos que el Código Civil requiere para llegar a la adopción (juicio de guarda preadoptiva y juicio
de adopción) en el sistema proyectado se deben seguir cuatro procesos, uno administrativo y tres judiciales.
Estos últimos son: el juicio de declaración de adoptabilidad, el juicio de guarda pre adoptiva y el juicio de adopción.
Por otra parte, se regula más acabadamente la adopción del mayor de edad y la adopción de integración.
Para determinar la competencia en estos procesos se armonizan las reglas sobre juez competente determinadas en
el título de “Adopción” y con las establecidas en del título de “Procesos de familia”.

4.1. Juez competente en el juicio de declaración judicial de adoptabilidad


El juicio de declaración judicial de adaptabilidad tramita ante el juez que ejerció el control de legalidad de las
medidas excepcionales (art. 609 del CCyCN).
Puede ocurrir que no hayan existido medidas excepcionales; en este caso la regla que fija la competencia es la
establecida en el art. 716 del CCyCN) y, por lo tanto, será competente el juez del lugar donde la persona menor de
edad tiene su centro de vida.

4.2. Juez competente en el juicio de guarda con fines de adopción


La guarda con fines de adopción debe ser discernida por el juez que dictó la sentencia que declara el estado de
adoptabilidad (art. 612 CCyCN).
4.3 Juez competente en el juicio de adopción
En el juicio de adopción el sistema proyectado otorga a los pretensos adoptantes la facultad de elegir llevar el juicio
de adopción en el juzgado del domicilio del niño o ante el tribunal que otorgó la guarda con fines de adopción. En
este sentido, el art. 615 prevé una regla especial de competencia que dice que es juez competente para la adopción
el que otorgó la guarda con fines de adopción o el del lugar donde el niño, niña o adolescente tiene su centro de
vida, a elección.

4.4. Juez competente en el juicio de adopción de integración


La adopción de integración se configura cuando se adopta al hijo del cónyuge o del conviviente (art. 620 CCyCN).
En la adopción de integración no se exige declaración judicial de estado de adoptabilidad; y tampoco se exige previa
guarda con fines de adopción (art. 632). Con lo cual las reglas sobre competencia judicial se desvinculan de las
establecidas en el proceso de declaración de adaptabilidad y de las fijadas en el juicio de guarda previa.
En definitiva, en el juicio de adopción de integración es juez competente el del lugar donde el niño, niña o
adolescente tiene su centro de vida.

4.5. Juez competente en el juicio de adopción de mayor de edad


El Código Civil y Comercial permite que excepcionalmente puede ser adoptada la persona mayor de edad cuando: a)
se trate del hijo del cónyuge o conviviente de la persona que pretende adoptar; b) hubo posesión de estado de hijo
mientras era menor de edad, fehacientemente comprobada (art. 597 CCyCN).
El Código no prevé ninguna norma especial para la determinación del juez competente en el supuesto de adopción
del mayor de edad, por lo que habrá que estar a las normas generales sobre competencia en las acciones de filiación,
ya que la adopción es uno de los tres tipos de filiación.
En definitiva, en la acción de adopción planteada por una persona mayor de edad es competente el juez del
domicilio del demandado, ya que por tratarse de una acción de filiación se le aplican las normas del art. 720.

5. Juez competente en las acciones derivadas de la unión convivencial

En los conflictos derivados de las uniones convivenciales, es competente el juez del último domicilio convivencial o el
del demandado a elección del actor (art. 718 del CCyCN).

6. Juez competente en acciones de alimentos

En relación con los alimentos, hay que distinguir los alimentos entre cónyuges, de los alimentos para los hijos
menores y de los alimentos entre parientes.
A) En el juicio de alimentos para los hijos menores, es competente el juez del lugar donde la persona menor de edad
tiene su centro de vida (art. 716 del CCyCN).
B) En las acciones por alimentos entre cónyuges o convivientes, es competente el juez del último domicilio conyugal
o convivencial, o el del domicilio del beneficiario, o el del demandado, o aquel donde deba ser cumplida la obligación
alimentaria, a elección del actor (art. 719 del CCyCN).

7. Juez competente en acciones para solicitar compensación económica


El cónyuge o conviviente a quien el divorcio o la disolución de la unión convivencial produce un desequilibrio
manifiesto que signifique un empeoramiento de su situación y que tiene por causa adecuada el vínculo matrimonial
o convivencial y su ruptura, tiene derecho a una compensación.
El juez competente para fijar la compensación es el juez del último domicilio conyugal o convivencial, o el del
domicilio del beneficiario, o el del demandado, o aquel donde deba ser cumplida la prestación compensatoria a
elección del actor (art. 719 del CCyCN).

MEDIDAS PROVISIONALES.
El último de los capítulos del Título VIII del Libro II del CCyCN realiza una enumeración enunciativa de las medidas
provisionales relativas a las personas y a los bienes que se pueden tomar tanto en el divorcio y en la nulidad de
matrimonio, como en la unión convivencial.

La denominación “medidas provisionales” se justifica porque ellas necesariamente deben establecer un plazo de
duración, según lo establecido en el art. 722, in fine. Lo que en realidad será muy difícil de fijar en algunos casos
como en el que se refiere a los alimentos, que no se fijan por plazo sino por necesidad o teniendo en cuenta las
circunstancias personales de las partes.

*Las medidas personales se enuncian en el art. 721, de manera no taxativa. Entre ellas se establece que el juez
puede:

a) determinar, teniendo en cuenta el interés familiar, cuál de los cónyuges ha de continuar en el uso de la vivienda
familiar y, previo inventario, qué bienes retira el cónyuge que deja el inmueble;

b) si corresponde, establecer la renta por el uso exclusivo de la vivienda por parte de uno de los cónyuges;

c) ordenar la entrega de los objetos de uso personal;

d) disponer de un régimen de alimentos y ejercicio y cuidado de los hijos; e) determinar los alimentos que solicite el
cónyuge.

*En cuanto a las medidas relativas a los bienes, (ART722) el juez está facultado a dictar las medidas de seguridad
para evitar que la administración o disposición de los bienes por uno de los cónyuges pueda poner en peligro, hacer
inciertos o defraudar los derechos patrimoniales del otro, cualquiera que sea el régimen patrimonial matrimonial. El
magistrado también puede ordenar las medidas tendientes a individualizar la existencia de bienes o derechos de los
que los cónyuges fuesen titulares.

A estas medidas hay que adicionarles las medidas protectorias especiales establecidas para la etapa de indivisión
poscomunitaria, consistentes en:
a) la autorización para realizar por sí solo un acto para el que sería necesario el consentimiento del otro cónyuge, si
la negativa requerida es injustificada;
b) la designación de un cónyuge o de un tercero como administrador de la masa del otro (art. 483 del CCyCN).

Es importante tener en cuenta que existen diferentes tipos de denominación para las medidas cautelares, que sería
importante unificar porque, por ejemplo, el art. 479, bajo el título de “Medidas cautelares”, remite al art. 483, que
se refiere a medidas protectorias. Así tenemos:

– Medidas cautelares (arts. 479, 550 CCyCN).


– Medidas protectorias (art. 483 CCyCN).
– Medidas provisionales (art. 721 CCyCN).
– Simplemente medidas (art. 135 CCyCN, en tutela; art. 553, en alimentos; art. 557, medidas para asegurar la
comunicación; art. 642, medidas de intervención interdisciplinaria en ejercicio de la responsabilidad parental).

2 y 3) JUZGADOS DE FAMILIA. UBICACIÓN Y EVOLUCION EN LA PROV. DE BS.AS (…) Juzgados uniperson (…)

La ley 11.453 y la creación de un fuero especializado con órganos y principios específicos.


La provincia de Buenos Aires había tenido, con la sanción de la ley 7.861 en el año 1972, la primera experiencia en el
funcionamiento de tribunales colegiados como órganos decisores en los procesos vinculados tanto con el derecho de
familia como con la responsabilidad civil, interdictos y acciones posesorias. Sin embargo, esta iniciativa en la órbita
del proceso civil (los tribunales sólo llegaron a funcionar en La Plata y Lomas de Zamora) no tuvo el éxito esperado,
motivo por el cual fue derogada a partir del 1/3/79 mediante la ley 9.200.
Pasados catorce años desde esa derogación, el 29 de noviembre de 1993 fue publicada la ley 11.453 por la cual se
crea específicamente el “Fuero de Familia” en el ámbito del Poder Judicial de la provincia de Buenos Aires. Dicha
norma produjo, a su vez, la reforma del Código Procesal Civil y Comercial bonaerense incorporándose a este cuerpo,
como Libro VIII, los artículos 827 a 853 bajo la denominación “Proceso ante los Tribunales de Familia”.
Este cambio implicó no sólo la creación de un fuero con una especializada competencia material, sino que estableció
también, reeditando el intento de la ley 7.861, el desenvolvimiento de un proceso con principios propios ante un
tribunal colegiado de instancia única. De este modo, y a diferencia de lo que acontece para los otros asuntos
predominantemente patrimoniales en lo civil y comercial, instauró un modo de administrar justicia que sin prescindir
de la escritura, reduce su ámbito de aplicación priorizando la oralidad mediante un sistema de audiencias, logrando
así una mayor proximidad y cercanía de los jueces con los asuntos y personas involucradas en la peculiar
conflictividad que caracteriza al derecho de familia.

Siendo sus principales innovaciones:

a) la creación de un funcionario, el Consejero de Familia, que interviene fundamentalmente en la Etapa Previa


intentando la conciliación (arts. 832/837, C.P.C.C.);
b) la existencia en cada tribunal de un Cuerpo Técnico auxiliar que asistirá interdisciplinariamente y colaborará con
los jueces y el consejero de familia en las tareas y funciones que éstos le asignen (art. 3, ley 11.453);
c) la implementación de la audiencia preliminar (arts. 842, 843, C.P.C.C.); y
d) la instrumentación de la oralidad a través de una audiencia de vista de causa para los procesos de conocimiento
no sujetos a un trámite especial (arts. 838, 846, 847, 848, 849, 850 y 851, C.P.C.C.).
La ley 13.634 del Fuero de Familia y del Fuero Penal del Niño (B.O. 13/5/2008), introdujo importantes cambios en la
materia. Luego de establecer los principios generales del Fuero de Familia y del Fuero de la Responsabilidad Penal
Juvenil, determinó en el art. 8 la disolución de los Tribunales de Familia existentes a fin de su transformación en
Juzgados Unipersonales -lo cual fue prorrogado por las leyes 13.797, 13.821 (2008), 13.944 (2009), 14.116 (2010),
14.173, 14.291 y 14.400.

Además de crear los juzgados de familia, determinó la recepción en el fuero de familia de la competencia civil de los
Tribunales de Menores, sin perjuicio de reconocer la intervención de los servicios de promoción y protección integral
de los derechos creados en la ley 13.298.
Los Juzgados de Familia están integrados por un Juez de Primera Instancia. Cada juzgado cuenta con un Consejero de
Familia -pudiéndose ampliar su número por razones estadísticas- y funcionará un Equipo Técnico Auxiliar que asistirá
interdisciplinariamente y colaborará con el Juez y el Consejero en las tareas y funciones que éstos les asignen y con
la dotación personal que fije la Suprema Corte de Justicia. El Equipo Técnico está integrado por un médico psiquiatra,
un psicólogo y un trabajador social. En función del índice de litigiosidad la Suprema Corte podrá proponer la creación
de nuevos cargos (art. 12, ley 13.634).
La ley 13.634 también establece que los recursos tramitarán y serán resueltos por una Sala especializada en materia
de Familia, integrada a las Cámaras de Apelaciones en lo Civil y Comercial (art. 852, C.P.C.C., texto según ley 13.634),
aunque no establece la creación de un Equipo Técnico para dicha Sala. Para avanzar con el cumplimiento de dicha
normativa -cuyo atraso se vio reflejado en las diversas prórrogas dispuestas en el ámbito parlamentario- la Suprema
Corte bonaerense (SCBA) dictó diversas resoluciones.
Así, por Resolución 3622/2008 –texto luego modificado por la Res. 1747/2011- determinó la numeración de los
citados juzgados unipersonales, indicando en cada caso el magistrado reasignado que será su titular, conforme el
Anexo de dicha disposición.
Por Resolución 3718/2008 indica los pasos a seguir para la disolución y división material de las causas de los
Tribunales de Familia, asignando responsabilidades a Jueces y Funcionarios.
Por Resolución 3718/2008 se requirió a los Sres. Jueces de los Juzgados creados la elevación de una propuesta de
distribución de expedientes en trámite.
Por Resolución 3488/2010 la SCBA, con carácter de prueba piloto para el Departamento Judicial La Plata, dispuso la
redistribución de las causas en trámite por materias, disponiendo que los Juzgados 4 y 5 atiendan específicamente
las cuestiones vinculadas con violencia familiar, salud mental y control de las medidas de abrigo (conf. incs. “n”, “o”,
“t”, “u” y “v” del art. 827, C.P.C.C.), asignando las restantes materias a los Juzgados 1, 2, 3 y 6.
Por Resolución 2652/2011, la SCBA reglamentó dicha normativa, aprobando las materias, códigos, categorías y
subcategorías que se utilizarán en el inicio de las causas correspondientes a la experiencia piloto, además de
determinar otras pautas reglamentarias en orden a la distribución de las causas de manera distinta a lo establecido
por el art. 830 del C.P.C.C., con el fin de asignarlas según la especialización por materia establecida por la Res.
3488/2010.
Finalmente, en la Resolución 2963/11, la SCBA dispuso la disolución -de conformidad con lo normado por el art. 8 de
la ley 13.364- de los Tribunales de Instancia única del Fuero de Familia N° 1 y 2 del Departamento Judicial de La Plata
(art. 1), fijó el día 1/11/2011 como fecha de efectivo funcionamiento de los Juzgados de Familia N° 1, 2, 3, 4, 5 y 6 del
Departamento Judicial de La Plata (art. 2), aprobó los criterios adoptados para la distribución de expedientes por los
Jueces del fuero en el marco de las previsiones establecidas en la Res. 3718/2008 (art. 4), determinando que la
Cámara Primera de Apelación en lo Civil y Comercial tome los respectivos juramentos de ley a los magistrados y
proponga un cronograma de turnos para los Juzgados de Familia para su aprobación, discriminando su atención en el
marco de lo previsto en la Resolución 3488/2010 (arts. 7 y 9), y encomendando a la Secretaría de Planificación el
monitoreo de la prueba piloto establecida por Res. 3488/2010 (art. 13).
Especialidad.
La ley 11.453 (sancionada el 14/10/93, promulgada el 4/11/93 y publicada en el Boletín Oficial el 29/11/93, entró en
vigencia en el Departamento Judicial La Plata el 3/4/95) , estableció en el Poder Judicial de la Provincia de Buenos
Aires, el “Fuero de Familia”, compuesto por Tribunales Colegiados de Instancia Única (art. 1), modifica la Ley
Orgánica del Poder Judicial (5827) (art. 5, 6, 7 y 8), se integra al Código Procesal Civil y Comercial (art. 2),
incorporando al mismo el Libro VIII (Proceso ante los Tribunales Colegidos de Instancia única del Fuero de Familia),
arts. 827 a 853 (art. 4), con lo que viene a implementar un proceso con características propias para el fuero de
familia, remitiendo -salvo para los que tuvieren un proceso especial- a lo previsto para el proceso sumario, con las
modificaciones contenidas en el Libro VIII (art. 838, C.P.C.C.).
Se establece que los Tribunales Colegiados de Instancia Única del Fuero de Familia serán puestos en funcionamiento
por el Poder Ejecutivo con la mayor prontitud dentro de las posibilidades presupuestarias de la Provincia (art. 10).
Tal como ya se expresó, la ley 13.634 dispuso la disolución de los Tribunales de Familia a efectos de su
transformación en Juzgados Unipersonales de Familia (arts. 8, 9, 10, 11 y 12), y sustituyó íntegramente el Libro VIII
(Proceso ante los Jueces de Familia), arts. 827 a 853 (art. 16).
Los procesos que tramiten ante los Juzgados de Familia se regirán por las disposiciones del C.P.C.C., aplicándose la
normativa del Libro VIII, con las modificaciones que surgen de la ley 13.634 en todo aquello que fuera pertinente. En
particular, podrá tenerse en cuenta en todo proceso que se inicie ante estos Juzgados, cuando resulte pertinente, la
actuación previa de los Servicios de Protección de Derechos, creados según lo dispuesto por la Ley 13.298 de
Promoción y Protección Integral de los Derechos del Niño (art. 15, ley 13.634).
Las Cámaras de Apelación en lo Civil y Comercial, serán Tribunal de Alzada de los fallos y demás providencias
recurribles dictados por los Jueces de Primera Instancia en lo Civil y Comercial y de Familia de su respectivo
Departamento (art. 38, ley 5827, texto según ley 13.634). {En La Plata, el turno para el conocimiento de dichas causas en
grado de apelación quedará fijado por la fecha del fallo recurrido; la Cámara que en dicha fecha se encuentre en turno, será
competente para conocer el recurso. La prevención con arreglo a estas normas, será definitiva para el conocimiento de recursos
posteriores (art. 38, ley 5827, texto según ley 13.634)}
Los recursos tramitarán y serán resueltos por una Sala especializada en materia de Familia, integrada a las Cámaras
de Apelaciones en lo Civil y Comercial, en la forma que la ley Orgánica del Poder Judicial establecerá (art. 852,
C.P.C.C., texto según ley 13.634), lo cual aún no ha sido puesto en práctica, con lo que desde el funcionamiento de
los Juzgados de Familia la respectiva Cámara en lo Civil y Comercial Departamental es quien resuelve los recursos
planteados.
La creación de un fuero especial encuentra fundamento en la necesidad de proteger los derechos sociales
reconocidos en el art. 36 de la Constitución Provincial. {En materia de segunda instancia no se cumple con el principio de
especialidad, ya que actualmente las Cámaras en lo Civil y Comercial son las que actúan como Alzada de las resoluciones del
Fuero de Familia}
Sin perjuicio de ello el modo e intensidad con que los conflictos familiares irrumpen y la naturaleza de los derechos
en juego, requieren un proceso más sensible y de mayor plasticidad, donde el juez debe asumir un rol más activo y
dúctil –interesado más por las normas de fondo que por las de forma-, que debe ejercer de manera continua sus
deberes a través de una intervención más directa tendiente a “planchar” los pliegues y repliegues del proceso en
aras de una tutela judicial efectiva (art. 15, Const. de la Prov. de Bs. As.).

Derecho del niño a ser escuchado. Reserva de identidad.

La Convención sobre los Derechos del Niño (art. 12), la ley nacional 26.061 (arts. 2, 3 inc. b, 19, 24, 27 incs. a y b y 66)
y la ley 13.634 (art. 3), establecen el derecho a ser escuchado, que se traduce en la posibilidad cierta de que una
persona que no haya cumplido los 18 años tenga la oportunidad de expresar sus opiniones y necesidades, y de que
se tomen en cuenta las decisiones que le conciernen. En consecuencia, el derecho de los niños a ser escuchados por
parte de los responsables -tanto en sede administrativa como judicial-, se materializa como un postulado con
sustento constitucional (art. 75, inc. 22, C.N.).
La ley 13.634 hace hincapié en la reserva de la identidad del niño (art. 4), con la prohibición de difundir datos que
permitan identificarlos en informaciones periodísticas y de toda índole (art. 5). Asimismo, aclara que ese carácter
reservado de las actuaciones, no incluye a las partes (arts. 5 y 86).

Audiencias orales con observancia de los principios de continuidad, inmediación, contradicción y concentración.

El art. 2 de la ley 13.634 (B.O. 13/5/2008), establece que las audiencias y vistas de causa serán orales bajo pena de
nulidad y se practicarán con la presencia obligatoria de todas las partes, de acuerdo a los principios de continuidad,
inmediación, contradicción y concentración. Tales principios, constituyen directivas que deben ser el piso de
marcha de todos los actos que conforman el proceso, desde su inicio hasta su culminación.

LEY 13.634-

ARTICULO 9.- Créanse los siguientes Juzgados de Familia:

1) Tres (3) en el Departamento Judicial Azul: Uno (1) con asiento en Azul, uno (1) en sede Tandil y uno (1) en sede
Olavarría.
2) Cuatro (4) en el Departamento Judicial Bahía Blanca: Tres (3) con asiento en Bahía Blanca y uno (1) en sede Tres
Arroyos.
3) Uno (1) en el Departamento Judicial Dolores.
4) Uno (1) en el Departamento Judicial Junín.
5) Seis (6) en el Departamento Judicial La Plata.
6) Nueve (9) en el Departamento Judicial La Matanza.
7) Doce (12) en el Departamento Judicial Lomas de Zamora.
8) Uno (1) en el Departamento Judicial Mercedes.
9) Seis (6) en el Departamento Judicial Mar del Plata.
10) Nueve (9) en el Departamento Judicial Morón.
11) Uno (1) en el Departamento Judicial Necochea.
12) Uno (1) en el Departamento Judicial Pergamino.
13) Seis (6) en el Departamento Judicial Quilmes.
14) (Texto según Ley 13772) Diez (10) en el Departamento Judicial San Isidro: siete (7) con asiento en la ciudad de
San Isidro y competencia territorial sobre los partidos de San Fernando, San Isidro, Tigre y Vicente López, y tres (3)
en sede Pilar, con competencia territorial sobre el partido homónimo.
15) (Texto según Ley 13772) Ocho (8) en el Departamento Judicial de General San Martín: seis (6) con asiento en la
ciudad de General San Martín y competencia territorial sobre los partidos de José C. Paz, General San Martín,
Malvinas Argentinas y Tres de Febrero y dos (2) con asiento en el Partido de San Miguel, con competencia territorial
sobre el partido homónimo.
16) Tres (3) en el Departamento Judicial San Nicolás.
17) Uno (1) en el Departamento Judicial Trenque Lauquen.
18) Uno (1) en el Departamento Judicial Zárate-Campana, en sede Campana.

La etapa previa y su función de prevención:

El inicio de esta fase jurisdiccional no beligerante: De acuerdo a lo dispuesto por los arts. 828 y 829 del Código
Procesal Civil y Comercial de la provincia de Buenos Aires (según ley 11.453), el principio general en materia de inicio
de actuaciones es la presentación de la solicitud de trámite (no de la demanda) ante la Receptoría General de
Expedientes, la cual deberá contar con firma de letrado. Sin embargo, en los casos de urgencia, es admitida la
ausencia de patrocinio letrado aunque sólo a los efectos de pedir la intervención jurisdiccional y hasta la adopción,
en caso de corresponder, de las medidas que no admitan dilación.
Recibida la causa, el juez de trámite puede disponer la radicación directa de la misma ante el tribunal, suprimiendo
la etapa previa si razones de urgencia o la naturaleza de la cuestión lo exigen. Ahora bien, sin perjuicio de los
criterios de cada magistrado y la particular valoración sobre la gravedad y circunstancias de cada caso, en general es
conveniente dar intervención al consejero, es decir, abrir igualmente la etapa previa en situaciones de urgencia, a fin
de indagar interdisciplinariamente si realmente la urgencia alegada es tal.
Por lo demás, es una oportunidad de trabajar informalmente y en un marco de confidencialidad con los involucrados
y el equipo técnico, lo cual no implica descuidar la celeridad, a fin de lograr soluciones prontas y previas a la
intervención directa del tribunal (aunque, vale la pena recordarlo, el juez de trámite interviene de todas formas por
cuanto el consejero carece de imperium para disponer medidas precautorias, en caso de ser necesarias).
En este sentido, debe tenerse en cuenta que esta etapa previa, aún cuando en ella no se logren cambios respecto de
las pretensiones originales, es una oportunidad clave para reducir, de acuerdo al modo en que se maneje el
consejero y sus colaboradores, el nivel de agresividad o ansiedad personal de las partes, incluso logrando la
deposición de actitudes violentas, y de ese modo transitar por el resto del proceso con un clima más distendido y
propicio para una adecuada solución compositiva.
Por otra parte, si bien de acuerdo a lo normado por el art. 831, tiene también el consejero la posibilidad de informar
al juez de trámite que, en base a los elementos que se desprenden de la solicitud y su experiencia profesional no
resulta conveniente el tránsito por la etapa previa conciliatoria bajo su conducción, esta opinión no resulta
vinculante para el magistrado. De allí que, en casos urgentes no es conveniente esta ida y vuelta de las actuaciones
por el tiempo que ello insume y, en consecuencia, si el juez ha merituado inicialmente la conveniencia de la etapa
previa, teniendo en cuenta que él es, en realidad, quien lidera el equipo de trabajo integrado por el consejero y el
cuerpo técnico auxiliar, debe seguirse su requerimiento. Es decir, se deben aunar esfuerzos y no burocratizar las
diferencias de criterios, cooperando con la búsqueda de prontas respuestas a los problemas por los cuales la gente
concurre al servicio judicial.

DE LA ETAPA PREVIA- ley

ARTICULO 828. Presentación. Toda persona que peticione por cualquiera de los supuestos enumerados en el artículo
que antecede deberá presentarse, con patrocinio letrado, ante el Juez de Familia que corresponda, salvo que optare
por hacerlo ante los Juzgados de Paz, en cuyo caso se estará a los procedimientos establecidos para los mismos.
Serán radicados directamente ante éste órgano jurisdiccional, los asuntos que no admiten demora o aquellos que
por su especial naturaleza, resulte improcedente la etapa previa. En ambos casos deberá mediar la decisión del Juez
en ese sentido. En esta etapa todas las actuaciones serán sin formalidades, con excepción de las resoluciones que
dicte el Magistrado.

ARTICULO 829. Trámite. La etapa previa se promoverá mediante la presentación de “solicitud de trámite” ante la
Receptoría General de Expedientes, de conformidad a la reglamentación que establezca la Suprema Corte de
Justicia, pudiendo la misma presentarse sin patrocinio letrado cuando razones de urgencia lo justificaren.

ARTICULO 830. Radicación. Competencia. Presentada la solicitud en la Receptoría General de Expedientes, se la


restituirá de inmediato al interesado, con indicación del Juzgado asignado. En esta oportunidad, dicha Oficina
constatará la existencia de peticiones anteriores de las partes, y en su caso la remitirá al Juzgado que hubiere
prevenido.
El Juez respectivo procederá de inmediato a dar intervención al Consejero de Familia, ante quien deberán
sustanciarse todas las actuaciones.
ARTICULO 831. Informe. Resolución. El Consejero de Familia, una vez recibida la solicitud, informará dentro de las
veinticuatro (24) horas sobre la conveniencia de la etapa.
Si la considerase inadmisible, elevará las actuaciones de oficio en el mismo plazo al Juez, quien resolverá en
definitiva. Podrá interponer reposición, en caso de denegatoria.

PROCESO DE CONOCIMIENTO

ARTICULO 838. Trámite. Salvo los procesos que tienen trámite especial en cuanto a sus formas, los demás se regirán
por las disposiciones del proceso plenario abreviado -sumario- previstas en este Código, con las modificaciones
contenidas en el presente Libro.
El Juez en atención a la mayor o menor complejidad de la cuestión, podrá cambiar el tipo de proceso mediante
resolución fundada, intimando por cédula a las partes para que dentro del plazo de diez (10) días adecuen sus
peticiones conforme a su decisión, la que sólo será susceptible de reposición.

ARTICULO 839. Demanda. Contestación. Excepciones. La demanda, contestación de demanda, reconvención,


oposición de excepciones cuando corresponda sus contestaciones y todos los otros actos del período instructivo de
la instancia, se harán por escrito.

ARTICULO 840. Falta de contestación de demanda. La falta de contestación de demanda importará el


reconocimiento de los hechos lícitos pertinentes, y el Juez dictará sentencia, sin perjuicio de decretar las medidas o
diligencias del artículo 36, inciso 2), de este Código, si lo estimare necesario.

ARTICULO 841. Posibilidad de las partes. El demandado en la contestación y el actor en la oportunidad del artículo
484 tercer párrafo, podrán manifestar oposición a:
a) Los hechos invocados por la contraria, alegando que no son conducentes para la decisión del pleito.
b) Las medidas probatorias ofrecidas por considerarlas impertinentes, superfluas, o innecesariamente onerosas.

ARTICULO 842. Audiencia preliminar. Una vez trabada la litis, el Juez convocará a una audiencia, a celebrarse en un
plazo no mayor de diez (10) días.
Si el actor o reconviniente, no compareciere a la audiencia sin justa causa, a pedido de parte, se lo tendrá por
desistido del proceso y se le impondrán las costas. Si en iguales circunstancias no compareciere el demandado, se le
aplicará una multa, a favor de la otra parte, que se fijará entre diez (10) y veinte (20) Jus, y cuyo importe deberá
depositarse dentro del tercer día de notificado.
Por única vez y por razones de fuerza mayor, debidamente acreditadas, el Juez podrá diferir la audiencia.
Las pautas indicadas precedentemente regirán igualmente para la audiencia de vista de la causa.

ARTICULO 843. Contenido de la audiencia preliminar. En la audiencia preliminar, el Juez procederá a:


1) Interrogar informalmente a las partes sobre todas las circunstancias que estime conducentes para la
delimitación de las cuestiones en disputa.
2) Invitar a las partes a reajustar sus pretensiones, si correspondiere, como asimismo a que desistan de las
pruebas que resultaren innecesarias, sin perjuicio de las atribuciones del Juzgado conforme al inciso 7) de este
artículo.
3) Procurar especialmente que los litigantes pongan término a sus diferencias mediante conciliación o
avenimiento amigable.
4) Subsanar los defectos u omisiones que se hubieren suscitado, conforme al artículo 34 inciso 5) apartado b.
5) Receptar la prueba sobre las excepciones de previo y especial pronunciamiento, en caso de existir algún hecho
decisivo a probar, en cuyo supuesto se recibirá exclusivamente la que fuere esencial.
6) Dictar la sentencia interlocutoria que resuelva las excepciones previas, salvo que exista prueba pendiente en
cuyo caso la resolución podrá dilatarse hasta la celebración de la audiencia de vista de la causa.
7) Estimar expresamente los alcances de los escritos de contestación de la demanda y del traslado del
artículo 356, a los fines del artículo 354, inciso 1).
Siempre que hubiere hechos conducentes controvertidos el Juez dictará resolución fundada abriendo la causa a
prueba. En su defecto declarará la cuestión de puro derecho previo traslado por su orden.
Determinará en su caso los hechos que considere inconducentes, así como las medidas de prueba improcedentes,
superfluas o meramente dilatorias.
8) Fijará el día y hora de la audiencia de vista de causa, que tendrá lugar dentro de los cuarenta (40) días.
9) Dispondrá en ese acto, o a más tardar dentro de los cinco (5) días, la producción previa de todas aquellas
diligencias que no pudieran practicarse en la audiencia. Solicitará los informes, la remisión de los testimonios o
documentos en poder de terceros o las partes, o existentes en otras oficinas públicas o privadas y se practicarán
reconocimientos judiciales, reconstrucciones de hecho e informes asistenciales.
10) Resolverá sobre la producción de la prueba pericial por un Perito con sujeción al artículo siguiente.

ARTICULO 844. Prueba pericial. La prueba pericial se practicará por intermedio de los profesionales integrantes del
Equipo Técnico del Juzgado. Si se tratare de una especialidad distinta, se lo designará de la Asesoría
Pericial Departamental, salvo que éste tampoco contase con ella en cuyo caso se lo desinsaculará de la lista
respectiva. Los peritos, sin perjuicio de su concurrencia a la vista de la causa, anticiparán su dictamen por escrito no
menos de diez (10) días antes de la audiencia. Las partes podrán solicitar explicaciones conforme al artículo 473 que
serán dadas en la vista de la causa.

ARTICULO 845. Prueba testimonial. El Juez podrá disponer la declaración de personas cuyo conocimiento pudiera
gravitar en la decisión de la causa, mencionadas por las partes en los escritos de constitución del proceso o que
surjan de las constancias probatorias producidas.
Los testigos que tuvieran domicilio en un radio de 500 km. del asiento del Juzgado, estarán obligados a comparecer
ante el mismo para prestar declaración.
La parte proponente sufragará los gastos que a pedido del interesado, fijará el Juez sin recurso alguno. Si actuase con
beneficio de litigar sin gastos el Estado abonará los inherentes al traslado con cargo del reembolso al mejorar de
fortuna.
Las personas citadas recabarán de la dependencia policial más próxima a su domicilio la entrega de las órdenes de
pasaje necesarias.

ARTICULO 846. Trámites previos. Toda prueba que haya de ser producida con anterioridad a la audiencia de la vista
de la causa deberá ser incorporada indefectiblemente hasta diez (10) días antes de su realización. En caso contrario,
se prescindirá de la misma, salvo que la demora u omisión se debiere exclusivamente a las autoridades comisionadas
a ese fin, en cuyo supuesto la parte podrá solicitar se practiquen antes de finalizar la vista, lo que resolverá el Juez
sin recurso alguno.

ARTICULO 847. Facultades del Juez. El Juez podrá disponer la conducción inmediata por la fuerza pública de testigos,
peritos, funcionarios y otros auxiliares cuya presencia fuera necesaria y que citados en forma no hayan concurrido
sin causa justificada.

ARTICULO 848. Actuación del Juez. La actuación de funcionarios y del Magistrado será en todos los casos personal.
Podrá comisionar a Trabajadores Sociales para que produzcan los informes pertinentes, los que serán puestos de
manifiesto con diez (10) días de antelación como mínimo a la vista de la causa.

ARTICULO 849. Vista de causa. En la audiencia de vista de causa al Juez le incumbe:


1) Intentar conciliación.
2) Ordenar el debate, recibir los juramentos o promesas, formular las advertencias necesarias y ejercitar las
facultades disciplinarias para asegurar el normal desenvolvimiento de la misma.
3) Procurar que las partes, testigos y peritos se pronuncien con amplitud respecto de todos los hechos pertinentes
controvertidos.
La audiencia no concluirá hasta que se hayan ventilado la totalidad de las cuestiones propuestas. Sin embargo el Juez
excepcionalmente podrá suspenderla por causas de fuerza mayor o por la necesidad de incorporar algún elemento
de juicio considerado indispensable, en cuyo caso proseguirá el primer día hábil siguiente o el que se fije dentro de
los cinco (5) días de removido el obstáculo que demandó la suspensión.

ARTICULO 850. Trámite del acto. Abierto el acto, éste se ajustará a las siguientes prescripciones:

1) Se dará lectura a las diligencias y actuaciones probatorias practicadas con anterioridad, salvo que las partes
prescindan de ella por considerarse suficientemente instruidas y acto continuo se recibirá la prueba que se ordenó a
producir en la resolución del artículo 843. Sin perjuicio de los poderes del Juez, las partes tendrán intervención a los
efectos de su contralor y sus letrados podrán interrogar directa y libremente a la contraparte, a los testigos y a los
peritos. El Juez podrá limitar dicha facultad cuando se ejerza en forma manifiestamente improcedente o se advierta
propósito de obstrucción.
2) Las partes podrán presentar hasta el momento de iniciarse la audiencia los documentos a que se refiere el
artículo 334 o alegar hechos nuevos posteriores a la oportunidad prevista en el artículo 363. En ambos casos se dará
traslado a la contraria. El Juez sin embargo los desestimará cuando considere que su admisión entorpeciere
manifiestamente el desarrollo de la audiencia o afectare la igualdad de las partes.
3) Terminada la recepción de dicha prueba y de aquella que en el acto de la audiencia el Juez hubiera resuelto
recibir y decididas las cuestiones que sobre el mismo punto se hubieran planteado, se concederá la palabra a las
partes y al Ministerio Público, si tuviese intervención, para que, si así lo desearen, aleguen verbalmente sobre su
mérito, en exposiciones, que salvo decisión del Juez en otro sentido, no excederán de veinte (20) minutos. No
podrán ser sustituidas por escritos en ningún caso, bajo pena de nulidad.
4) Finalizado el debate, quedará concluida la audiencia, debiendo el Juez llamar autos para sentencia, la que
deberá ser dictada dentro del plazo de treinta (30) días.

ARTICULO 851. Acta. De lo sustancial de la audiencia se levantará acta, consignando el nombre de los
comparecientes, de los peritos y testigos y sus datos personales. De igual modo se procederá con respecto a las
demás pruebas. A pedido de cualquiera de las partes, podrá dejarse mención de alguna circunstancia especial
siempre que el Juez lo considere pertinente, y sin perjuicio de lo dispuesto por el artículo 126.

ARTICULO 852. Recursos. En lo pertinente, rigen las disposiciones del artículo 494, y las del Libro I, Título IV, Capítulo
IV y Capítulo V de este Código. El recurso tramitará y será resuelto por una Sala especializada en materia de Familia,
integrada a las Cámaras de Apelaciones en lo Civil y Comercial, en la forma que la Ley Orgánica del Poder Judicial
establecerá.

ARTICULO 853. Normas supletorias. Las demás disposiciones de este Código regirán supletoriamente, en cuanto
fueren compatibles.”

ARTICULO 17. Sustitúyese el artículo 3 del Decreto-Ley Nº 7.967/72 y sus modificatorias, por el siguiente:

“Artículo 3. Todo Juez que reciba la comunicación a que hace referencia el artículo 1°, deberá, dentro de las
veinticuatro (24) horas de producida ésta, solicitar al Director del Hospital, informe médico pericial sobre el
internado, el que deberá serle contestado en un lapso no mayor de cuarenta y ocho (48) horas de recibido. Dentro
de las veinticuatro (24) horas de receptado el informe, el Juez interviniente deberá expedirse confirmando o
revocando la internación.
En los casos que intervenga un Juez de Familia, éste también dará inmediata intervención al Consejero de Familia a
los fines de que realice las investigaciones del caso”.

5) Asesores de Incapaces

Los Asesores de Incapaces son los magistrados que deben intervenir en protección de los derechos de niños, niñas,
adolescentes y personas afectadas en su salud mental, en procesos judiciales y extrajudiciales.
Su intervención, siempre en aras de garantizar una protección especial, puede ser de asistencia y control de los
representantes legales o apoyos de sus asistidos, o bien de representación directa de éstos ante la omisión de los
representantes legales, la existencia de intereses contrapuestos o la ausencia de los mismos (art. 103 Código Civil y
Comercial, y art. 38 de la ley 14442).
La falta de intervención del asesor de incapaces en los procesos judiciales, en perjuicio de los niños, niñas,
adolescentes y personas afectadas en su salud mental causa la nulidad de las actuaciones (art. 103 del Código Civil y
Comercial).

ARTÍCULO 38.- Deberes y atribuciones del Asesor de Incapaces. Corresponde al Asesor de Incapaces:
1. Intervenir en todo asunto judicial o extrajudicial que interese a la persona o bienes de los incapaces, cuando
las leyes lo dispongan, so pena de nulidad de todo acto o proceso que tuviere lugar sin su participación, sin
perjuicio de la responsabilidad de quienes - por acción u omisión- la hubieren impedido.
2. Tomar contacto inmediato y directo con los incapaces que representen judicialmente, y con aquéllos que
requieran su asistencia, aunque no exista causa judicial en trámite.
3. Asistir al incapaz en toda audiencia ante los jueces de la causa, cuanto de cualquier otro magistrado que
requiera su comparendo.
4. Peticionar en nombre de ellos, por propia iniciativa, cuando carezcan de representantes o existan entre
éstos y los incapaces conflicto personal u oposición de intereses o resulte necesario para impedir la
frustración de los derechos a la vida, salud, identidad, y de ser oídos por el juez de la causa.
5. Intervenir ante los órganos competentes en materia civil del niño, niña y adolescente.
6. Tomar contacto con la comunidad a través de las instituciones vinculadas con la protección y asistencia de
los incapaces a fin de coordinar acciones conducentes a tales fines.
7. Controlar a la situación de los incapaces o internados alojados por cualquier causa en lugares de detención o
establecimientos sanitarios, velando por el respeto de los derechos y garantías formulando las denuncias y
requerimientos pertinentes; y promover su externación cuando corresponda.
Quienes dificulten, obstruyan o impidan el ejercicio de estas atribuciones, incurrirán en falta, sin perjuicio de la
responsabilidad penal que pudiera corresponderles por ello.
BOLILLA V: PARENTESCO

1. Parentesco. Concepto. Clases. Cómputo: grado, línea, tronco y rama.

Art. 529.— Concepto y terminología. Parentesco es el vínculo jurídico existente entre personas en razón de la
naturaleza, las técnicas de reproducción humana asistida, la adopción y la afinidad.
Las disposiciones de este Código que se refieren al parentesco sin distinción se aplican sólo al parentesco por
naturaleza, por métodos de reproducción humana asistida y por adopción, sea en línea recta o colateral.

Se abandona la referencia a la sangre o consanguinidad a la que hacia referencia el antiguo código, el cual solo
contemplaba a la familia nuclear constituida a partir del matrimonio católico, monogámico e indisoluble, razón por la
cual regulaba el parentesco por naturaleza, refiriéndose a la consaguinidad y priorizando el vinculo legitimo.
Este artículo establece como regla que toda vez que en el código se use la denominacion "parentesco sin distinción",
en ella no queda incluido el parentesco por afinidad.

Clases:

Parentesco por naturaleza: Vincula a las personas que descienden unas de otras, como progenitores, hijos/as,
nietos/as o que tienen un antepasado común como puede ser el caso de hermanos/as, tíos/as, sobrinos/as.-
CAUSA FUENTE/ ORIGEN: Naturaleza.

Parentesco por técnicas de reproducción humana asistida: A través de estas, apelando al avance tecnológico, la
voluntad procreacional se constituye en una causa fuente de vínculos de parentesco en igualdad de condiciones que
la filiación por naturaleza.
En este caso, padre y/o madre es quien manifiesta su voluntad procreacional a través del consentimiento previo,
informado y libre. No se admite reclamo ni acción filiatoria alguna contra los dadores de gametos. No existe vínculo
alguno con ellos ni derechos y deberes jurídicos, sino solo con sus padres y/o madres, de acuerdo con la
determinación legal y con los parientes de estos
CAUSA FUENTE/ ORIGEN: voluntad procreacional - consentimiento libre e informado.

Parentesco por adopción: Es el que se genera con esta institución y de acuerdo al régimen previsto en el art 619 del
código, puede ser de tres tipos: adopción plena, simple y de integración.-
-En el primer caso se confiere al adoptado la condición de hijo y se extinguen los vínculos jurídicos con la familia de
origen, con la excepción de la subsistencia de los impedimentos matrimoniales. El juez tiene la potestad de dejar
subsistente el vínculo jurídico con uno o varios parientes de la familia de origen.-
-En la adopción simple, se otorga también el estado de hijo al adoptado, pero no se establece nexo jurídico alguno
con los parientes ni con el cónyuge del adoptante, excepto los supuestos contemplados expresamente en el Código,
como por ejemplo crear esos vínculos entre uno o varios parientes del adoptante.-
-La adopción de integración resulta si el adoptado tiene un solo vínculo filial de origen, se inserta en la familia del
adoptante con los efectos de la adopción plena. En cambio, si el adoptado tiene doble vinculo, el juez interviniente
tiene facultades de mantener subsistentes los vínculos jurídicos con uno o varios parientes de la familia de origen.-
CAUSA FUENTE/ ORIGEN: sentencia judicial- ley.

Parentesco por afinidad: Esta establecido por el vínculo jurídico que une a un consorte con los parientes del otro
cónyuge. Los parientes de cada cónyuge no adquieren parentesco legal con los parientes del otro. Los consuegros y
concuñados no son parientes, aunque se traten como familia.
2) Linaje. Línea. Generación, o grado. Tronco. Rama (…)

Se llama GRADO al vínculo entre dos personas que pertenecen a generaciones sucesivas y establece la mayor o
menor proximidad en el parentesco.
La sucesión de grados forma las LINEAS, que es la serie no interrumpida de grados.
Además, se denomina RAMA la línea en relación con su origen y TRONCO es la denominación que se le da al
antecesor común de cual derivan dos o más líneas.

Art. 531.- Grado. Línea. Tronco. Se llama:


a) grado, al vínculo entre dos personas que pertenecen a generaciones sucesivas;
b) línea, a la serie no interrumpida de grados;
c) tronco, al ascendiente del cual parten dos o más líneas;
d) rama, a la línea en relación a su origen.

Art. 532.- La proximidad del parentesco se determina por el número de generaciones. Cada generación forma un
grado. La serie de grados forma la línea, que puede ser directa o colateral:

 Línea directa la forman una la serie de grados entre personas que descienden o ascienden unas de otras
(abuelos, padres, hijos, nietos…).

 La línea colateral la constituyen la serie de grados entre personas que no descienden unas de otras, pero que
proceden de un tronco común (hermanos, tíos, sobrinos…)

Art. 533.— Cómputo del parentesco. En la línea recta hay tantos grados como generaciones. En la colateral los
grados se cuentan por generaciones, sumando el número de grados que hay en cada rama entre cada una de las
personas cuyo parentesco se quiere computar y el ascendiente común.

Para determinar el grado de parentesco entre dos personas debemos contar por escalones hacia un tronco común.
Así, el hijo dista del padre un grado, dos del abuelo y tres del bisabuelo.
En la colateral se sube hasta el tronco común y después se baja hasta la persona con quien se quiera determinar el
grado de parentesco. Así, el hermano dista dos grados del hermano, tres del tío, cuatro del primo hermano, y así en
adelante. Lo expuesto corresponde al parentesco por naturaleza.

El computo en el derivado de la afinidad se hace en forma análoga a la que la ley indica para el que surge por
naturaleza. Así, la nuera o el yerno son parientes del suegro o suegra en primer grado

Vinculo simple y doble.

ARTICULO 534.-Hermanos bilaterales y unilaterales. Son hermanos bilaterales los que tienen los mismos padres.
Son hermanos unilaterales los que proceden de un mismo ascendiente en primer grado, difiriendo en el otro.

Los hermanos bilaterales son aquellos que comparten los mismos padres, ya sea por naturaleza, por TRHA, o por
adopción.
Los hermanos unilaterales son aquellos que tienen un progenitor común, difiriendo del otro.

Esta diferencia tiene relevancia en el derecho sucesorio. El art. 2440 dispone “En la concurrencia entre hermanos
bilaterales y hermanos unilaterales, cada uno de éstos hereda la mitad de lo que hereda cada uno de aquéllos.
En los demás casos, los colaterales que concurren heredan por partes iguales.”. Es decir que en la sucesión que
concurran como herederos hermanos bilaterales y unilaterales, estos últimos heredaran la mitad. (VER CADA CASO
EN CONCRETO. EJ: sucesion progenitor común: mismo porcentaje p/ hnos uni y bilaterales, excepto disp. Legal en
contrario).

ARTICULO 535.-Parentesco por adopción. En la adopción plena, el adoptado adquiere el mismo parentesco que
tendría un hijo del adoptante con todos los parientes de éste.
La adopción simple sólo crea vínculo de parentesco entre el adoptado y el adoptante.
*En ambos casos el parentesco se crea con los límites determinados por este Código y la decisión judicial que
dispone la adopción.

IMPORTANTE No deben realizarse distinciones legales entre los tipos filiales que a través de su
enumeración en el artículo 529 han quedado equiparados en relación de sus efectos.

Art. 536.— Parentesco por afinidad. Cómputo. Exclusión. El parentesco por afinidad es el que existe entre la
persona casada y los parientes de su cónyuge. Se computa por el número de grados en que el cónyuge se encuentra
respecto de esos parientes.
El parentesco por afinidad no crea vínculo jurídico alguno entre los parientes de uno de los cónyuges y los parientes
del otro.

El último párrafo se refiere al caso de lo que comúnmente se conoce como consuegros o concuñados, disponiendo la
inexistencia de parentesco entre ellos.
Por otra parte, el código regula también a las familias ensambladas:

Art. 672.— Progenitor afín. Se denomina progenitor afín al cónyuge o conviviente que vive con quien tiene a su
cargo el cuidado personal del niño o adolescente.
Solo hay vinculo de parentesco entre uno de los cónyuges y el hijo/a del otro.
El art 676 reconoce un derecho alimentario a los hijos del cónyuge o conviviente.

ESQUEMA.

PARENTESCO

2º GRADO
ABUELOS
Ascendientes

1º GRADO 3º GRADO 4º GRADO


PADRES TIOS PRIMOS
R E C T A

1º GRADO
2º GRADO PADRES CONYUGE
INTERESADO CONYUGE
HERMANO (No es pariente)

Progenitor Afín de Hijo de I


3º GRADO 1º GRADO
L I N E A

1º GRADO 1º GRADO
SOBRINO HIJO DE I HIJO DE I +C HIJO Adoptivo
ADOPCION plena
Hermano unilateral
2º GRADO
NIETO Descendientes

3º GRADO
BISNIETO

L I N E A C O L A T E R A L
Efectos civiles, penales, procesales, laborales y previsionales del parentesco.

Efectos civiles:
Impedimentos matrimoniales:
En el art 403 se consignan como impedimentos para contraer matrimonio los siguientes:
a) el parentesco en línea recta en todos los grados, cualquiera que sea el origen del vínculo;
b) el parentesco entre hermanos bilaterales y unilaterales, cualquiera que sea el origen del
vínculo;
c) la afinidad en línea recta en todos los grados;

De ello se desprende que uno de los efectos jurídicos civiles mas importantes es que el parentesco es una de las
causales que impiden la celebración de un matrimonio valido. Se legitima a los parientes para oponerse a la
celebración del matrimonio cuando existan dichos impedimentos (art 411, inc b) como asimismo los habilita a iniciar
las acciones de nulidad en algunos casos.

Uniones convivenciales: En las uniones convivenciales se exige como requisitos para el reconocimiento de efectos
jurídicos a la unión, la inexistencia entre sus integrantes, de parentesco en la línea recta en todos los grados, en la
línea colateral hasta el segundo grado y para el caso de parentesco por afinidad, en línea recta en todos los grados.

Alimentos: El parentesco es también una de las fuentes de obligación alimentaria, cuando se trate de ascendientes
y descendientes, hermanos bilaterales y unilaterales o entre los parientes por afinidad en primer grado. Es necesario
aclarar, que estas reglas no se aplican a los alimentos debidos por los padres a sus hijos menores de 21 años, ya que
en estos casos rigen las disposiciones propias de los derivados de la responsabilidad parental. Estas pautas resultan
aplicables también a los hijos hasta los 25 años si estudian y se capacitan.

Derecho de comunicación: Se confiere a aquellos parientes que tienen obligaciones alimentarias ente si.

3 y 4) Obligaciones alimentarias derivados del parentesco. Caracteres. Alcance y parientes obligados. Distinción
con otras fuentes alimentarias. Contenido. Alimentos de los ascendientes a favor de los descendientes.

Alimentos derivados del parentesco:


Los alimentos configuran una obligación civil de base legal, con fuerte basamento en el principio de solidaridad
familiar, correspondiendo su satisfacción a los parientes de grado mas remoto, solo en forma subsidiaria y sucesiva,
y no simultanea respecto a los de grado mas cercano.
Como principio genérico podemos decir que los alimentos siempre son debidos por quienes se encuentran en
mejores condiciones como para hacer frente a ellos.
Bien puede suceder que en la misma línea y en el mismo grado existan dos parientes con suficiencia económica tal
que les permita responder al reclamo. Esta situación también es tratada por el dispositivo anotado, el que apunta
que en ese caso, aquellos se encintraran obligados por partes guales, aunque el juez, observando las posibilidades
financieras de cada uno y sus cargas familiares podrá fijar cuotas diferentes.-

Art. 537.— Enumeración. Los parientes se deben alimentos en el siguiente orden:


a) los ascendientes y descendientes. Entre ellos, están obligados preferentemente los más próximos en grado;
b) los hermanos bilaterales y unilaterales.
En cualquiera de los supuestos, los alimentos son debidos por los que están en mejores condiciones
para proporcionarlos. Si dos o más de ellos están en condiciones de hacerlo, están obligados por partes iguales, pero
el juez puede fijar cuotas diferentes, según la cuantía de los bienes y cargas familiares de cada obligado.

El catálogo de personas obligadas no se circunscribe únicamente hacia los parientes por consaguinidad, sino que
también existe obligación alimentaria respecto de la familia afín.
El art 538 señala que la obligación se ciñe únicamente a aquellos vinculados en línea recta en primer grado. Es decir
responderían por la misma, los suegros respecto de sus yernos o nueras y viceversa, quedan afuera los cuñados, por
ejemplo.
Art. 538.— Parientes por afinidad. Entre los parientes por afinidad únicamente se deben alimentos los que están
vinculados en línea recta en primer grado.

Para el ejercicio de esta acción, se consagran como presupuestos para su ejercicio la falta de medios del accionante
para alimentarse, a más de la imposibilidad para adquirir aquellos con su trabajo. Tal como puede destacarse del
análisis de su texto, el artículo prescinde de la causa que genero el estado menesteroso del accionante, habida
cuenta del carácter netamente asistencial que tiene el reclamo alimentario.

Art. 545- Prueba. El pariente que pide alimentos debe probar que le faltan los medios económicos suficientes y la
imposibilidad de adquirirlos con su trabajo, cualquiera que sea la causa que haya generado tal estado.

Por su parte, el art 541 apunta que la prestación de alimentos comprende lo necesario para la subsistencia,
habitación, vestuario y asistencia médica, correspondientes a la condición del que la recibe, en la medida de sus
necesidades y de las posibilidades económicas del alimentante. Para el caso en que el alimentado sea una persona
en la menor edad, se amplía aquella, abarcando también los gastos necesarios para responder a las necesidades
educativas de quien las percibe.-

Art. 541- Contenido de la obligación alimentaria. La prestación de alimentos comprende lo necesario para la
subsistencia, habitación, vestuario y asistencia médica, correspondientes a la condición del que la recibe, en la
medida de sus necesidades y de las posibilidades económicas del alimentante. Si el alimentado es una persona
menor de edad, comprende, además, lo necesario para la educación.

Caracteres de la obligación alimentaria:

Este deber es reciproco, aquellos sujetos que se encuentren comprendidos dentro del elenco de personas
compelidas a su cumplimiento se deben la prestación entre sí.
El art 539 establece que la obligación alimentaria no puede ser compensada y no podrá ser objeto de transacción,
gravamen o embargo alguno. La norma concluye estableciendo el carácter irrepetible de lo pagado en concepto de
alimentos:

Art. 539.— Prohibiciones. La obligación de prestar alimentos no puede ser compensada, ni el derecho a reclamarlos
o percibirlos, ser objeto de transacción, renuncia, cesión, gravamen o embargo alguno. No es repetible lo pagado en
concepto de alimentos.

Sin embargo, existen supuestos en los que se hace lugar a la posibilidad de repetir lo efectivamente abonado. El
primero de ellos se encuentra tratado en el art 549, el que resalta que en el supuesto en que haya mas de un
obligado al pago, quien los haya prestado puede ejercer la mentada acción respecto de los otros obligados, en
proporción a lo que corresponde a cada uno. Entendemos que nada impide que el pariente en grado de preferencia
menor, intente la repetición respecto de los que se encuentran más próximos al requirente.

El derecho y la obligación alimentaria, en general, tienen los siguientes caracteres:


a) Intransmisibilidad: Aunque la norma guarde silencio, el derecho a recibir alimentos no se transmite a los
herederos del que los percibía, y tampoco la obligación de pagarlos se traslada a los sucesores del alimentante; ni
puede ser ejercido por vía de acción subrogatoria.

b) Irrenunciabilidad: El derecho no puede renunciarse. Debe precisarse, sin embargo, que tal restricción se refiere al
derecho a percibirlos, mas no a la renuncia a las cuotas ya devengadas, que, como tales, se encuentran en el
patrimonio del que las recibe. Esta salvedad vale también en punto a la intransmisibilidad, cuando el crédito o la
deuda por alimentados devengados forma parte del patrimonio transmitido a sus herederos (art. 540).
c) Inalienabilidad: El derecho a recibir alimentos se encuentra fuera del comercio y, como tal, no puede ser objeto de
cesión, o transacción, con la misma salvedad de las cuotas devengadas y no percibidas que pueden ser cedidas. Otra
consecuencia de este principio es la imposibilidad de embargar las sumas que se reciban y la incompensabilidad de
los alimentos con obligación alguna a cargo del alimentado.

d) Reciprocidad: Si bien no hay norma expresa que establezca la reciprocidad de los alimentos entre parientes, esta
característica se encuentra implícita en la naturaleza alimentaria.

e) Irrepetibilidad: Los alimentos pagados por el alimentante son irrepetibles contra el alimentado.

Artículo 540:”las prestaciones alimentarias devengadas y no percibidas pueden compensarse, renunciarse o


transmitirse a título oneroso o gratuito.”

Contenido:
Artículo 541:”la prestación de alimentos comprende lo necesario para la subsistencia, habitación, vestuario y
asistencia médica, correspondientes a la condición del que la recibe, en la medida de sus necesidades y de las
posibilidades económicas del alimentante. Si el alimentado es una persona menor de edad, comprende, además, lo
necesario para la educación.”

Modo de cumplimiento:
Artículo 542:”la prestación se cumple mediante el pago de una renta en dinero, pero el obligado puede solicitar que
se lo autorice a solventarla de otra manera, si justifica motivos suficientes.
Los pagos se deben efectuar en forma mensual, anticipada y sucesiva pero, según las circunstancias, el juez puede
fijar cuotas por periodos más cortos."

5) Juicio de alimentos. Tramite. Mdidas cautelares (…) régimen procesal del juicio de alimentos. Alimentos
provisorios...

Artículo 543:”la petición de alimentos tramita por el proceso mas breve que establezca la ley local, y no se acumula
a otra pretensión.”

Alimentos provisorios:

Artículo 544:”desde el principio de la causa o en el transcurso de ella, el juez puede decretar la prestación de
alimentos provisionales, y también la expensas del pleito, si se justifica la falta de medios.”

Prueba:

Artículo 545:”el pariente que pide alimentos debe probar que le faltan los medios económicos suficientes y la
imposibilidad de adquirirlos con su trabajo, cualquiera que sea la causa que haya generado tal estado.”

Artículo 546:”incumbe al demandado la carga de probar que existe otro pariente de grado mas próximo o de igual
grado en condición de prestarlos, a fin de ser desplazado o concurrir con el en la prestación. Si se reclama a varios
obligados, el demandado puede citar a juicio a todos o parte de los restantes, a fin de que la condena los alcance.”

De la redacción del artículo 537 se infiere que corresponde al peticionante demandar a los parientes en línea recta y
más próximos en grados; en caso de faltar ellos, o que sus recursos sean insuficientes, deberá demandar a los
hermanos ya sea bilateral o unilateral o a los parientes por afinidad.
Pero, pone en cabeza del demandado la carga de probar que existe algún pariente de grado más próximo, o el
pariente de igual grado en condiciones de prestarlos, ya sea para desligarse de la obligación o concurra con él en la
prestación.
A más de ello, en caso de reclamarse a varios obligados, el demandado puede citar a juicios a todos los restantes a
fin de establecer un litis consorcio pasivo necesario, y la sentencia los alcance.
Asimismo, el demandado, tiene el derecho de pedir en el juicio de alimentos se cite a todos o a aquellos restantes
parientes obligados a fin de que sean alcanzados por la condena de alimentos.

Articulo 547:”el recurso contra la sentencia que decreta la prestación de alimentos no tiene efecto suspensivo, ni el
que recibe los alimentos puede ser obligado a prestar fianza o caución alguna de devolver lo recibido si la sentencia
es revocada.”

La sentencia de primera instancia que deniegue los alimentos será apelable en ambos efectos. Si los admite, el
recurso se concederá sólo en efecto devolutivo, o sea que no suspenderá la ejecución del fallo y el actor podrá exigir
su cumplimiento al demandado aunque éste hubiera apelado.

Reclamo contra los abuelos a favor de la persona menor de edad:

La obligación de los abuelos respecto de sus nietos menores de edad es unilateral, quedando solamente obligados
aquellos al cumplimiento de la misma, y no pudiendo reclamar la fijación de una cuota de manutención, respecto de
estos últimos.

El art 541 circunscribe el contenido de la prestación alimentaria entre parientes a los gastos necesarios para la
subsistencia, habitación, vestuario y asistencia medica de quien la recibe y para el caso de que el beneficiario sea
una persona menor de edad, alcanza también a las erogaciones educativas.

La obligación de los progenitores respecto de sus hijos es mayor: el art 659 establece que alcanza la satisfacción de
las necesidades de los hijos de manutención, educación, esparcimiento, vestimenta, habitación, asistencia, gastos
por enfermedad y los gastos necesarios para adquirir una profesión u oficio.

La ley consagra un orden de prelación de los sujetos que se encuentran civilmente obligados al cumplimiento de la
prestación alimentaria. De esto se sigue que los mas alejados en el grado respecto del accionante solamente podrán
ser demandados ante el caso que los parientes mas próximos se encontrasen imposibilitados de cumplir con la
prestación a su cargo.
Con respecto a la obligación de los abuelos de prestar alimentos respecto de sus nietos menores de edad,
encontramos dos líneas doctrinarias definidamente opuestas y una que intenta mediar entre las dos para intentar
brindar respuesta al conflicto

 Tesis restrictiva. Obligación subsidiaria: Señala que toda vez que la ley consagra un orden sucesivo del
cumplimiento de la obligación, habrá que estarse a lo que ella dice. Implica que el deber alimentario de los
abuelos respecto de sus nietos menores de edad se actualiza únicamente ante la imposibilidad de
cumplimiento de los progenitores de estos últimos.
Aun cuando la obligación alimentaria se encuentra potencialmente en cabeza de todos los parientes que la
deben de acuerdo a la ley, solo nace en forma efectiva para el mas lejano cuando no existe pariente mas
cercano en condiciones de satisfacerla. Por lo tanto, la obligación de los abuelos respecto a sus nietos es de
carácter subsidiaria, solamente naciendo en forma efectiva para el mas lejano cuando no existe pariente
mas cercano en condiciones de satisfacerla.

 Tesis amplia. Obligación directa: Esta obligación alimentaria debe ser reputada como directa o simultanea
con la que corresponde a sus progenitores. Ello, sirviéndose del art 27 inc 2 de la Convención sobre los
derechos del niño, el que no trae en su texto un orden de prelación de sujetos obligados al cumplimiento del
deber alimentario respecto de los niños, a lo que agregan que la subsidiariedad lesiona el contenido de la
norma rectora del interés superior del niño.
Estima la presente doctrina que la obligación alimentaria de los abuelos respecto de sus nietos debe ser
reputada como directa, quedando pues, igualada con aquella que recae sobre los progenitores del niño.

 Tesis intermedia: Esta tesis parte de considerar que el orden subsidiario no entra en contradicción con
elemento alguno del derecho internacional de los derechos humanos, aunque sin embargo, sostiene que
dicho orden no debe redundar en el cumplimiento de pautas formales que produzcan una dilación
innecesaria en la percepción de la acreencia alimentaria respecto de los menores de edad. Esta postura, sin
desconocer lo normado por la ley argentina, también hace lugar a lo establecido por la Convención sobre los
derechos del Niño, pues si bien este instrumento internacional dispone en inc 2 de su art 27 que los padres u
otras personas encargadas del niño tienen el deber de proporcionar las condiciones de vida que se reputen
como necesarias para el desarrollo del niño, ello de modo alguno se contrapone con la subsidiariedad de la
obligación de los abuelos fijada por el código de fondo.
Si de la prueba rendida en autos surge la posibilidad de cumplimiento de la prestación por un obligado de
grado preferente, el de vinculo remoto quedara liberado. Ante el reclamo de la fijación de una prestación
alimentaria a favor de un menor, no cabe exigir que se agoten una serie de actos formales si las
circunstancias demuestran que serán inútiles, sino que basta con alegar la convicción de que no existe otro
remedio que condenar a los abuelos.

Nuestro Código: El art 668 admite la posibilidad de demandar contra los ascendientes en el mismo proceso en que
se acciona contra los progenitores debiendo en tal supuesto verosímilmente demostrarse, además de los requisitos
ya visto respecto de los parientes accionantes, las dificultades del actor para percibir los alimentos del progenitor a
cuyo cargo se encuentran.
Si bien los abuelos resultan civilmente obligados al cumplimiento d la cuota alimentaria a favor de sus nietos, ello de
ningún modo puede llevar a desatender el contexto financiero de aquellos, teniendo el magistrado que realizar un
delicado equilibrio entre las necesidades a ser cubiertas y la realidad financiera del demandado, pues mal puede la
solidaridad familiar importar el riesgo físico de los alimentantes.

Coparticipación de la cuota: La ley establece un orden sucesivo en el cumplimiento de la obligación alimentaria,


hallándose preferentemente obligados los parientes mas cercanos en el grado reclamante y ante la igualdad de
grado, deberán soportar la cuota los que se encuentren en mejores condiciones de prestar los alimentos. Tanto los
abuelos por vía materna como paterna pueden ser demandados por tal concepto, encontrándose esta opción en
cabeza del legitimado para intentar la acción.
El art 650 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación le brinda la posibilidad a los abuelos condenados a
cumplir con la obligación alimentaria de sus nietos, de iniciar incidente de coparticipación, a los fines de que la cuota
que fuera oportunamente fijada sea también soportada por los abuelos que no hubiesen sido condenados en el
juicio de alimentos que se dispuso.

Efectos de la sentencia:

Artículo 548:”los alimentos se deben desde el día de la interposición de la demanda o desde la interpelación al
obligado por medio fehaciente, siempre que la demanda se presente dentro desde los seis meses de la
interpelación.”

Ya antes de la sanción del Código Procesal vigente que establece en su artículo 644 que la sentencia comienza a
correr desde el día de la interposición de la demanda, la jurisprudencia mayoritaria se había inclinado por la
retroactividad a la fecha de interposición de la demanda, considerada como el momento en que se expresa la
necesidad del accionante.

Ahora bien, si se ha constituido en mora al alimentante con anterioridad a la iniciación de la demanda, por medio
fehaciente, ya sea telegrama o por carta documento o cualquier otro medio con fecha cierta, los alimentos correrán
desde la constitución en mora, siempre que la demanda se interponga dentro de los seis meses de la interpelación.
Ese plazo de caducidad rige sólo a los efectos de retrotraer la cuota alimentaria a dicha fecha, vencido el cual, los
alimentos correrán desde el día de la interposición de la demanda.

Artículo 549:”en caso de haber más de un obligado al pago de los alimentos, quien los haya prestado puede repetir
de los otros obligados, en proporción a lo que a cada uno le corresponde.”

Medidas tendientes al cumplimiento:

Articulo 550:”puede disponerse la traba de medidas cautelares para asegurar el pago de alimentos futuros,
provisionales, definitivos o convenidos. El obligado puede ofrecer en sustitución otras garantías diferentes.”

Articulo 551:”es solidariamente responsable del pago de la deuda alimentaria quien no cumple la orden judicial de
depositar la suma que debió descontar a su dependiente o a cualquier otro acreedor.”
Se hace responsablemente solidario al empleador del obligado.

Articulo 552:”las sumas debidas por alimentos por el incumplimiento en el plazo previsto devengan una tasa de
interés equivalente a la más alta que cobran los bancos a sus clientes, según las reglamentaciones del Banco Central,
a la que se adiciona la que el juez fije según las circunstancias del caso.”

Articulo 553:”el juez puede imponer al responsable del incumplimiento reiterado de la obligación alimentaria
medidas razonables para asegurar la eficacia de la sentencia.”

Frente al incumplimiento del alimentante, la vía procesal de ejecución de la sentencia es la prevista por el art. 648,
CPCCN: Intimación de pago, embargo y ejecución de los bienes.

Estas serian las medidas cautelares en general, pero se admiten otros medios procesales compulsivos para obligar al
alimentante al cumplimiento de la prestación debida:

1) la inscripción en registros de deudores alimentarios morosos (ley 13.066);


2) sanciones conminatorias, como la astreintes regulada en el artículo 804;
3) sanciones penales (ley 13.944);
4) otras que quedan a inventiva de los jueces, por ejemplo un fallo que prohibía al obligado a salir del país.

Cese de la obligación alimentaria:

artículo 554:”cesa la obligación alimentaria:


1) si el alimentado incurre en alguna causal de indignidad;
2) por la muerte del obligado o del alimentado;
3) cuando desaparecen los presupuestos de la obligación.
La pretensión de cese, aumento o reducción de los alimentos tramita por el procedimiento más breve que prevea la
ley local.”

6) Derecho de comunicación entre parientes (…)

Legitimación activa y pasiva:

Entre las personas unidas por un vínculo de parentesco o por lazos afectivos existe el derecho a mantener un
contacto personal de la manera mas fluida y fructífera posible, teniendo en cuenta las circunstancias particulares de
cada caso. Este contacto, tradicionalmente ha sido denominado régimen de visitas y mas modernamente derecho de
comunicación.
El código regula el derecho de una debida comunicación no solo con relación al parentesco sino haciendo extensivo
el derecho a quienes justifiquen un interés afectivo.
Asimismo, se trata de un derecho-deber, ya que beneficia tanto a la persona que lo solicita como a aquella respecto
de la cual se admite la comunicación o el debido contacto.
El art 555 deja de hacer referencia a la obligación alimentaria por razones de parentesco haciendo concreta la
enumeración de las personas a las que el Código le reconoce el derecho de comunicación con el fin de evitar
cualquier tipo de sujeción de la debida comunicación a la obligación alimentaria.

Art. 555.— Legitimados. Oposición. Los que tienen a su cargo el cuidado de personas menores de edad, con
capacidad restringida, o enfermas o imposibilitadas, deben permitir la comunicación de estos con sus ascendientes,
descendientes, hermanos bilaterales o unilaterales y parientes por afinidad en primer grado. Si se deduce oposición
fundada en posibles perjuicios a la salud mental o física de los interesados, el juez debe resolver lo que corresponda
por el procedimiento más breve que prevea la ley local y establecer, en su caso, el régimen de comunicación más
conveniente de acuerdo a las circunstancias.

La norma contempla la obligación de las personas que tengan a su cargo niños, niñas y adolescentes, personas con
capacidad restringida, enfermas o imposibilitadas; de permitir a otras que, en razón de la existencia de un vínculo de
parentesco o afectivo legítimo, desean tener un contacto personal o comunicación con los primeros.-
Quienes pueden exigir este derecho, entonces, son los ascendientes, descendientes, hermanos unilaterales o
bilaterales y parientes por afinidad en primer grado.-
Además, el derecho se extiende a quienes en razón de circunstancias de hecho especiales o de la dinámica familiar
pueden acreditar la existencia de vínculos afectivos y la conveniencia del régimen de comunicación, es decir que el
interés de quienes lo soliciten debe coincidir con el de quienes van a resultar beneficiados. En relación con estos
otros beneficiarios, el art 556 dispone:

Art. 556.— Otros beneficiarios. Las disposiciones del artículo 555 se aplican en favor de quienes justifiquen un
interés afectivo legítimo.

LEGITMACION ACTIVA -> La legitimación activa surge de los arts 555 y 556 a saber:
Ascendientes, descendientes, hermanos bilaterales o unilaterales, parientes por afinidad e primer grado y quienes
tengan un interés afectivo legitimo.
LEGITIMACION PASIVA: Conforme lo que establece el art 555 se trata de quienes tienen a su cargo el cuidado de
aquellos en cuyo beneficio se establece el régimen de comunicación o contacto, los que serán en su caso:

a) Padres y/o madres incluyendo a los padres y/o madres afines


b) Tutores
c) Curadores
d) Simples cuidadores de personas capaces pero imposibilitadas, por ej por cuestiones de salud.

Oposición: Quienes tengan el carácter de legitimados pasivos en el proceso de fijación de un régimen de


comunicación podrán oponerse al progreso de la acción. La oposición no debe ser arbitraria sino estar debidamente
justificada. Los motivos que deben alegar y probar están acotados a que la petición pueda resultar perjudicial para
los interesados.

Es decir que la legitimación activa la tienen:


1) los ascendientes y descendientes;
2) los hermanos bilaterales y unilaterales;
3) los parientes por afinidad en primer grado;
4) y quienes justifiquen un interés afectivo legítimo.
Los legitimados pasivos son:

1) los progenitores, tutores o curadores;


2) o cualquier persona que tenga a su cargo el cuidado de:
Menores de edad, personas con capacidad restringida, o enfermas o imposibilitadas
sean estas menores o no.

Régimen procesal:

El pedido de la fijación de un régimen de comunicación deberá tramitarse por el procedimiento mas breve que
prevea la ley local.-
El incumplimiento del acuerdo del régimen de comunicación es un hecho que se da de forma frecuente en los
tribunales. En virtud de ello, el juez podrá imponer al responsable del incumplimiento reiterado, establecido por
sentencia o acuerdo homologado “medidas razonables para asegurar su eficacia” según lo establecido por el art 557

Art. 557. Medidas para asegurar el cumplimiento. El juez puede imponer al responsable del incumplimiento
reiterado del régimen de comunicación establecido por sentencia o convenio homologado medidas razonables para
asegurar su eficacia.
Se señala la aplicación de lo previsto en el art 804 que establece la posibilidad de fijar sanciones pecuniarias al que
no cumple los deberes jurídicos impuestos en una revolución judicial.-
Tampoco puede ser excluida la posibilidad de accionar por los daños y perjuicios que ocasione el incumplimiento.
BOLILLA VI: EL MATRIMONIO.

1. Esponsales. Concepto. Evolución historica. (…)

Se denomina ESPONSALES a la promesa que mutuamente se hacen los integrantes de una pareja de contraer
matrimonio. Actualmente es una promesa sin fuerza vinculante, que no permite obligar a su cumplimiento, pues la
libertad en la elección del cónyuge es un presupuesto indiscutible del matrimonio contemporáneo. Por lo tanto el
rompimiento de la promesa no constituye un ilícito civil.
El código civil originario y posteriormente, la ley 2393 de matrimonio civil dispusieron que "La ley no reconoce
esponsales de futuro. Ningún tribunal admitirá demandas sobre la materia, ni indemnización de perjuicios que ellos
hubieran causado". Esta postura continuo hasta la sanción de la ley 23.515, que si bien mantuvo la falta de valor
vinculante de los esponsales, suprimió el párrafo que prohibía expresamente todo reclamo indemnizatorio. Esto
llevo a que la doctrina entendiera que la prohibición expresa había sido derogada, y de esta manera, se abría la
puerta a la reparación civil ante la ruptura de los esponsales.
Es decir, si bien era válida la ruptura sin causa ni explicación de una promesa de matrimonio, la acción por daños y
perjuicios procedía no por la ruptura sino a partir de la demostración de la ilicitud de esta. Para tener tal carácter
debía ser intempestiva y en el marco de una conducta dolosa o culposa de uno de los esponsales que le generara un
daño al otro. No solo debía haber un proyecto de casarse sino también una fecha.
La incertidumbre culmino con la sanción del código civil y comercial de la nación que continua en la senda de no
reconocer esponsales en el futuro, pero desestima explícitamente el reclamo de los daños y perjuicios por la ruptura
intempestiva.

Actualmente el artículo 401 establece: (...)” No hay acción para exigir el cumplimiento de la promesa de matrimonio
ni para reclamar daños y perjuicios causados por la ruptura, sin perjuicio de la aplicación de las reglas del
enriquecimiento sin causa, o de la restitución de donaciones si así correspondiera”.
Solo habrá acción, si resultó de esa ruptura un desequilibrio económico por el enriquecimiento sin causa de uno de
los contrayentes o si hubo donaciones en vistas a ese matrimonio, que no se celebró, que se deberán restituir.

Daños y perjuicios

- Enriquecimiento sin causa: por aplicación de los principios generales, el incumplimiento de la promesa esponsalica
solo puede generar un efecto jurídico si se acredita el enriquecimiento sin causa de la persona que provoco la
ruptura. Este instituto requiere la existencia del enriquecimiento de una de las partes y el correlativo
empobrecimiento de la otra. Además, que no exista causa que lo justifique, o de existir, que la misma sea injusta o
ilegitima. Y por último, que no exista una acción específica que proteja esta situación.

ARTICULO 1794.-Caracterización. Toda persona que sin una causa lícita se enriquezca a expensas de otro, está
obligada, en la medida de su beneficio, a resarcir el detrimento patrimonial del empobrecido.
Si el enriquecimiento consiste en la incorporación a su patrimonio de un bien determinado, debe restituirlo si
subsiste en su poder al tiempo de la demanda.

ARTICULO 1795.-Improcedencia de la acción. La acción no es procedente si el ordenamiento jurídico concede al


damnificado otra acción para obtener la reparación del empobrecimiento sufrido.

-Restitución de donaciones: el código continua la senda de admitir la restitución de las donaciones efectuadas con
miras al futuro matrimonio, tanto entre cónyuges como de terceros hacia ellos.

Donaciones por razón de matrimonio:


Articulo 451: “las donaciones hechas en las convenciones matrimoniales se rigen por las disposiciones relativas al
contrato de donación. Solo tienen efectos si el matrimonio se celebra”.
Articulo 452: “las donaciones hechas por terceros a uno de los novios, o a ambos, o por uno de los novios al otro, en
consideración del matrimonio futuro, llevan implícita la condición de que se celebre matrimonio válido”.
Articulo 453: “la oferta de donación hecha por terceros a uno de los novios, o ambos queda sin efecto si el
matrimonio no se contrae en el plazo de un año. Se presume aceptada desde que el matrimonio se celebra, si antes
no había sido revocada”.

2) Matrimonio. Concepto y cracteres. Matrimonio como estado y como acto. Requisitos de existencia. Matrimonio
igualitario.

El matrimonio se logra en virtud de un acto jurídico, es decir, un acto voluntario, lícito, que tiene por fin inmediato
establecer las relaciones jurídicas conyugales. Es un acto subjetivamente complejo, constituido por el
consentimiento de los contrayentes y el control de su legalidad ejercido por el oficial publico encargado del Registro
Civil en un típico acto administrativo.
El matrimonio como estado implica un conjunto de derechos y deberes que se generan entre los cónyuges desde el
acto matrimonial, o sea, desde la celebración del matrimonio.
El matrimonio es un lazo jurídico establecido por la ley que determina entre dos personas una serie de derechos y
obligaciones.

Articulo 431: “los esposos se comprometen a desarrollar un proyecto de vida en común basado en la cooperación, la
convivencia y el deber moral de fidelidad. Deben prestarse asistencia mutua”.
Articulo 402: “ninguna norma puede ser interpretada ni aplicada en sentido de limitar, restringir, excluir o suprimir
la igualdad de derechos y obligaciones de los integrantes del matrimonio, y los efectos que este produce, sea
constituido por dos personas de distinto o igual sexo”.

Se establece en primer lugar la igualdad de género: no hay posiciones privilegiadas jurídicamente, ambos son
iguales;
En segundo lugar la igualdad de matrimonio, en cuanto al matrimonio celebrado entre dos mujeres, dos hombres o
un hombre y una mujer; se veda toda discriminación por razón de identidad sexual y de género.

Hasta la sancion de la ley 26.618, la diversidad de sexo de los contrayentes era un requisito de fondo para la
celebración del matrimonio, y de esta manera, la igualdad de género conllevaba a la inexistencia del acto. Hoy esto
cambió.

3) Requisitos de existencia:
Los elementos estructurales del acto son condiciones de existencia, y a los que alude el artículo 406: “para la
existencia del matrimonio es indispensable el consentimiento de ambos contrayentes expresado personal y
conjuntamente ante la autoridad competente para celebrarlo, excepto lo previsto en este Código para el matrimonio
a distancia. El acto que carece de este requisito no produce efectos civiles”.

La ausencia de alguno de estos elementos estructurales del acto jurídico matrimonial, provoca su inexistencia, lo
cual no equivale a invalidez o nulidad. Esta es una sanción de ineficacia que, reconociendo la existencia estructural
del matrimonio, lo priva de sus efectos propios por mediar vicios en algunos de los presupuestos que la ley exige
para su celebración. Entonces habrá inexistencia del matrimonio cuando el aparente matrimonio carezca de alguno
de los elementos estructurales que atañen a la formación.
En cambio, un matrimonio estará afectado de nulidad cuando no obstante presentar los elementos estructurales
que se relacionen a su existencia, hayan fallado o estén viciadas las condiciones de validez, es decir, los presupuestos
que la ley exige para que el acto produzca, en plenitud, sus efectos propios.

Para que el acto sea válido deberán concurrir los siguientes requisitos:
1) Que no haya impedimentos, prohibiciones para casarse.
2) Que no haya consentimiento viciado, ni por error ni por dolo ni por violencia.
Modalidad de expresión: los contrayentes deben formalizar su consentimiento:

- en forma personal, frente a oficial público. No se puede contraer matrimonio a través de representantes o
apoderados.
- se requiere la expresión conjunta de ambos contrayentes. El principio general es que ambos coincidan en las
circunstancias de tiempo y lugar. Sin embargo, este principio tiene su excepción: el código prevé la posibilidad de
que los contrayentes presten su consentimiento de manera personal, pero no conjunta. Esta modalidad se
denomina: "matrimonio a distancia"

-La expresión del consentimiento puede hacerse en idioma nacional o extranjero (asistido por un traductor publico
matriculado, o por un intérprete), verbal, escrita o por medios inequívocos.

Prohibición de modalidades:

ARTICULO 408.-Consentimiento puro y simple. El consentimiento matrimonial no puede someterse a modalidad


alguna. Cualquier plazo, condición o cargo se tiene por no expresado, sin que ello afecte la validez del matrimonio.

Se prohíbe a los cónyuges introducir modalidades en el acto jurídico matrimonial. Los contrayentes no pueden
decidir contraer matrimonio por un determinado plazo, o bajo alguna condición (ej.: no tener hijos) o bien, imponer
un cargo para alguno de los contrayentes o terceros.

*Intervención de autoridad competente: Como regla general la autoridad competente para celebrar un matrimonio
es el oficial publico encargado del Registro del Estado Civil y Capacidad de las Personas que corresponda al domicilio
de cualquiera de los futuros cónyuges.

Las excepciones a dicha regla se dan en dos supuestos de matrimonio en artículo de muerte:

(ARTICULO 421.-Matrimonio en artículo de muerte. El oficial público puede celebrar matrimonio con prescindencia
de todas o de alguna de las formalidades previstas en la Sección 1ª, cuando se justifica que alguno de los
contrayentes se encuentra en peligro de muerte, con el certificado de un médico y, donde no lo hay, con la
declaración de dos personas. En caso de no poder hallarse al oficial público encargado del Registro del Estado Civil y
Capacidad de las Personas, el matrimonio en artículo de muerte puede celebrarse ante cualquier juez o funcionario
judicial, quien debe levantar acta de la celebración, haciendo constar las circunstancias mencionadas en el artículo
420 con excepción del inciso f) y remitirla al oficial público para que la protocolice.) O matrimonio a distancia.
El oficial público cumple una doble función, por un lado recepta el consentimiento de los contrayentes, y por el otro,
manifiesta que ellos quedan unidos en matrimonio, empezándolos de ese modo en el nuevo estado de familia.

*Vicios del consentimiento: el matrimonio en cuyo acto de celebración el consentimiento de los contrayentes
hubiese sido afectado por vicios de violencia, dolo o error, adolecerá de nulidad relativa.

ARTICULO 409.-Vicios del consentimiento. Son vicios del consentimiento:


a) la violencia, el dolo y el error acerca de la persona del otro contrayente;
b) el error acerca de las cualidades personales del otro contrayente, si se prueba que quien lo sufrió no habría
consentido el matrimonio si hubiese conocido ese estado de cosas y apreciado razonablemente la unión que
contraía.
El juez debe valorar la esencialidad del error considerando las circunstancias personales de quien lo alega.

Para reputar como voluntario un acto jurídico, deben confluir en el dos elementos: un elemento externo, la
declaración de la voluntad y otros elementos internos: el discernimiento, la intención y la libertad. La intención
puede estar afectada por el error, y el dolo y la libertad por la violencia.

- La violencia: la violencia puede ser tanto física como moral o intimidación. La violencia física es la "fuerza
irresistible" ejercida sobre uno o ambos contrayentes para obtener la celebración del acto. En cambio, la violencia
moral se da cuando se inspira en la persona el temor racional y fundado de sufrir un mal inminente y grave en su
persona o bienes o en la de sus descendientes o ascendientes.
Generalmente resulta as frecuente la hipótesis de una intimidación o violencia moral.
Requisitos de la intimidación: 1.existencia de injustas amenazas, es decir, que no sean legitimas. 2. caracter fundado
de temor. 3. inminencia y gravedad del mal. 4. bienes sobre los que debe recaer. 5. relacion causal entre las
amenazas y el consentimiento.

-El dolo: ARTICULO 271.-Acción y omisión dolosa. Acción dolosa es toda aserción de lo falso o disimulación de lo
verdadero, cualquier artificio, astucia o maquinación que se emplee para la celebración del acto. La omisión dolosa
causa los mismos efectos que la acción dolosa, cuando el acto no se habría realizado sin la reticencia u ocultación.

El dolo califica la conducta de uno de los contrayentes (dolo directo) o de un tercero (dolo indirecto) que, mediante
las maniobras, artificios o maquinaciones indujo al otro contrayente a contraer matrimonio.

ARTICULO 272.-Dolo esencial. El dolo es esencial y causa la nulidad del acto si es grave, es determinante de la
voluntad, causa un daño importante y no ha habido dolo por ambas partes.
Para viciar el consentimiento el dolo debe ser esencial y para ello la ley exige que:
1. sea grave, que haya ocasionado un verdadero engaño.
2. que sea la causa determinante del acto, es decir, que de no haber mediado el dolo no se habría consentido el
matrimonio.
3. que ocasione un daño importante
4. que no haya existido dolo en ambos contrayentes.

ARTICULO 273.-Dolo incidental. El dolo incidental no es determinante de la voluntad; en consecuencia, no afecta la


validez del acto.

-El error: El error es el falso conocimiento de un hecho al que un contrayente llega de manera espontánea.
El articulo 409 prevé dos supuestos de error como vicio de la voluntad: el error acerca de la persona del otro
contrayente, o el error sobre las cualidades personales de aquel.

3. Formas de celebración.

Son las solemnidades que prevé la legislación para que el acto jurídico matrimonial produzca efectos. Existen dos
formas: la ordinaria y la extraordinaria.

Forma ordinaria: articulo 416: “quien pretende contraer matrimonio debe presentar ante el oficial publico
encargado del Registro del Estado Civil y Capacidad de las Personas correspondiente al domicilio de cualquiera de
ellos, una solicitud que debe contener:
1) Nombres y apellidos, y numero del documento de identidad, si lo tienen;
2) Edad;
3) Nacionalidad, domicilio y el lugar de su nacimiento;
4) Profesión;
5) Nombres y apellidos de los padres, nacionalidad, números de documentos de identidad si los conocen, profesión y
domicilio;
6) Declaración de si han contraído matrimonio con anterioridad. En caso afirmativo, el nombre y el apellido del
anterior cónyuge, lugar de la celebración del matrimonio y causa de disolución, acompañando certificado de
defunción o copia debidamente legalizada de la sentencia ejecutoriada que hubiera anulado o disuelto el
matrimonio anterior, o declarado la muerte presunta del cónyuge anterior, según el caso.
Si los contrayentes o alguno de ellos no sabe escribir, el oficial público debe levantar acta que contenga las mismas
enunciaciones”.

Es decir que antes de contraer matrimonio se debe presentar esta solicitud. El oficial público con esa documentación
verifica la capacidad de la persona para contraer matrimonio y si esto se cumple se firma el acta.

Pero ¿qué sucede si alguien se opone a que dicho acto jurídico se lleve a cabo o no queda probada en la
documentación que se adjunta la aptitud nupcial?

Articulo 417: “si de las diligencias previas no resulta probada la habilidad de los contrayentes, o se deduce oposición,
el oficial publico debe suspender la celebración del matrimonio hasta que se prueba la habilidad o se rechace la
oposición, haciéndolo contar en acta, de la que debe dar copia certificada a los interesados, si la piden”.

4) Impedimentos para contraer matrimonio. Concepto. Tipos. Impedimentos dirimentes e impedientes.

Concepto: Se denomina impedimentos matrimoniales a aquellas prohibiciones de la ley que afectan a las
personas para contraer un determinado matrimonio. Es decir, son todas aquellas circunstancias que impiden
contraer un matrimonio válido. Se trata de hechos o situaciones jurídicas preexistentes que afectan a uno o ambos
contrayentes.
Se deben distinguir dos momentos:

a) antes de la celebración del matrimonio, los impedimentos operan como caua de oposición a su celebración por
quienes se encuentren legitimados a oponerse; y respecto de cualquier persona, como fundamento de la denuncia
de su existencia ante la autoridad competente.
b) después de la celebración del matrimonio, operaran como causa de nulidad si se trata de impedimentos
dirimentes, o de la aplicación de sanciones civiles o penales, si son impedientes.
Tipos.

Artículo 403: “son impedimentos dirimentes para contraer matrimonio: 1) El parentesco en línea recta en todos
los grados, cualquiera sea el origen del vínculo; 2) El parentesco entre hermanos bilaterales y unilaterales,
cualquiera que sea el origen del vínculo; 3) La afinidad en línea recta en todos los grados; 4) El matrimonio anterior,
mientras subsista; 5) Haber sido condenado como autor, cómplice o instigador del homicidio doloso de uno de los
cónyuges; 6) Tener menos de 18 años; 7) La falta permanente o transitoria de salud mental que le impide
tener discernimiento para el acto matrimonial.”

Impedimentos dirimentes: constituyen un obstáculo para la celebración de un matrimonio válido. Traen


aparejada la nulidad del matrimonio.
El principio general es que toda persona esta habilitada para contraer matrimonio a excepción de aquellas que se
encuentren comprendidas en las situaciones o hechos determinados en la norma que vedan expresamente su
celebración. Estos obstáculos se denominan impedimentos dirimentes. No solo obstan su licitud, sino también la
validez.

a) Parentesco: el articulo 403 prohibe determinados vínculos, en línea recta en todos los grados y entre hermanos,
en ambos casos, cualquiera sea el origen del vinculo.
b) impedimento de ligamen: no se puede contraer matrimonio si hay uno anterior que subsista. El fundamento esta
en la vigencia cultural del matrimonio monogamico. Solo se puede subsanar si se anula el anterior.
c) crimen: la norma sanciona la conducta de quien asesina o participa en el asesinato del conyuge de la persona con
quien pretende contraer matrimonio.
d) falta de edad nupcial: la edad minima es de 18 años. Es de carácter absoluto, temporario porque desaparece al
alcanzar la edad nupcial, dispensable y la sanción que provoca es la nulidad relativa.
d) dispensa judicial: los sujetos que no alcancen la edad nupcial, pueden contraer matrimonio valido previa dispensa
judicial.

5) ARTICULO 404.-Falta de edad nupcial. Dispensa judicial. En el supuesto del inciso f) del artículo 403, el menor de
edad que no haya cumplido la edad de 16 años puede contraer matrimonio previa dispensa judicial. El menor que
haya cumplido la edad de 16 años puede contraer matrimonio con autorización de sus representantes legales. A
falta de ésta, puede hacerlo previa dispensa judicial. El juez debe mantener una entrevista personal con los futuros
contrayentes y con sus representantes legales. La decisión judicial debe tener en cuenta la edad y grado de madurez
alcanzados por la persona, referidos especialmente a la comprensión de las consecuencias jurídicas del acto
matrimonial; también debe evaluar la opinión de los representantes, si la hubiesen expresado. La dispensa para el
matrimonio entre el tutor o sus descendientes con la persona bajo su tutela sólo puede ser otorgada si, además de
los recaudos previstos en el párrafo anterior, se han aprobado las cuentas de la administración. Si de igual modo se
celebra el matrimonio, el tutor pierde la asignación que le corresponda sobre las rentas del pupilo de conformidad
con lo dispuesto en el artículo 129 inciso d).

Autoriza la celebración del matrimonio de sujetos que no hayan cumplido los 18 años. Los contrayentes pueden
peticionar judicialmente la remoción de la valla legal y el juez debe mantener una entrevista personal con ellos y sus
representantes.

e) falta de salud mental: la falta de salud mental debe impedirle a la persona tener discernimiento para el acto
matrimonial. Es absoluto, transitorio, dispensable y la sanción de la celebración del matrimonio sin la dispensa
judicial, conlleva a la nulidad relativa. Puede ser demandada la nulidad por cualquiera de los conyuges si
desconocían el impedimento. También puede ser demandada por los parientes de la persona que padece el
impedimento.

Se autoriza la dispensa judicial del impedimento de falta de salud mental que le impde al pretenso contrayente
tener discernimiento para el acto matrimonial.

ARTICULO 405.-Falta de salud mental y dispensa judicial. En el supuesto del inciso g) del artículo 403, puede
contraerse matrimonio previa dispensa judicial. La decisión judicial requiere dictamen previo del equipo
interdisciplinario sobre la comprensión de las consecuencias jurídicas del acto matrimonial y de la aptitud para la
vida de relación por parte de la persona afectada. El juez debe mantener una entrevista personal con los futuros
contrayentes; también puede hacerlo con su o sus apoyos, representantes legales y cuidadores, si lo considera
pertinente.

- Impedimentos impedientes son aquellos que afectan la regularidad de la celebración del matrimonio,
pero que no provocan su invalidez. No traen aparejada la nulidad del matrimonio. Su violación determina la licitud
del matrimonio, pero no afecta su validez. También se los llama prohibitivos, porque se agotan en la prohibición y
solo cumplen una función preventiva.
a) enfermedad venera en periodo de contagio. Es temporario pues rige mientras dure el contagio.

b) VIH: hay quienes consideran que se encuentra incluida en un impedimento marital. Y otros quienes lo niegan
alegando que seria discriminatorio.

Otros tipos de impedimentos:

- Impedimentos absolutos: aquellos que obstan a la celebración del matrimonio con cualquier persona.
- Impedimentos relativos: aquellos que afectan a uno de los sujetos en relación al matrimonio que
pretendiese contraer con otra u otras personas exclusivamente.
- Impedimentos dispensables: aquellos que pueden ser dejados de lado.
- Impedimentos indispensables: aquellos que no pueden ser dejados de lado.
- Los impedimentos pueden ser temporales (ej.: tener 5 años) o perpetuos (ej.: casarse con un hermano).
ARTICULO 403.-Impedimentos matrimoniales.
Son impedimentos dirimentes para contraer matrimonio:
a) el parentesco en línea recta en todos los grados, cualquiera que sea el origen del vínculo;
b) el parentesco entre hermanos bilaterales y unilaterales, cualquiera que sea el origen del vínculo;
c) la afinidad en línea recta en todos los grados;
d) el matrimonio anterior, mientras subsista;
e) haber sido condenado como autor, cómplice o instigador del homicidio doloso de uno de los cónyuges;
f) tener menos de dieciocho años;
g) la falta permanente o transitoria de salud mental que le impide tener discernimiento para el acto matrimonial.

Los legitimados para la oposición los enumera el articulo 411: “el derecho a deducir oposición a la celebración del
matrimonio por razón de impedimentos compete:
1) Al cónyuge de la persona que quiere contraer otro matrimonio;
2) A los ascendientes, descendientes y hermano de alguno de los futuror esposos, cualquiera sea el origen del
vinculo;
3) Al Ministerio Publico, que debe deducir oposición cuando tenga conocimiento de esos impedimentos,
especialmente, por la denuncia de cualquier persona realizada de conformidad con lo dispuesto en el articulo
siguiente”.
Para poder oponerse a la celebración del matrimonio se debe acreditar la legitimación.

6) Recaudos para la celebración del matrimonio

Articulo 418: “el matrimonio debe celebrarse públicamente, con la comparecencia de los futuros cónyuges, por ante
el oficial publico encargado del Registro del Estado Civil y Capacidad de las Personas que corresponda al domicilio de
cualquiera de ellos. Si se celebra en la oficina que corresponde a ese oficial público, se requiere la presencia de dos
testigos y las demás formalidades previstas en la ley. El número de testigos se eleva a cuatro si el matrimonio se
celebra fuera de esa oficina.
En el acto de la celebración del matrimonio el oficial público da lectura al artículo 431, recibe de cada uno de los
contrayentes la declaración de que quieren respectivamente constituirse en cónyuges, y pronuncia que quedan
unidos en matrimonio en nombre de la ley.
La persona que padece limitaciones en su aptitud para comunicarse en forma oral debe
expresar su voluntad por escrito o por cualquier otra manera inequívoca”.

Cabe agregar que se deben verificar los datos de los testigos, la identidad de las personas presentes y su idoneidad.
Además el consentimiento dado debe ser libre, pleno y no viciado siendo este dado uno después del otro por los
contrayentes y no al unísono.

Forma extraordinaria:
1) Matrimonio en articulo de muerte: articulo 421: “el oficial publico puede celebrar matrimonio con prescindencia
de todas o alguna de las formalidades previstas en la Sección 1o, cuando se justifica que alguno de los contrayentes
se encuentra en peligro de muerte, con el certificado de un medico y, donde no lo hay, con la declaración de dos
personas.
En caso de no poder hallarse al oficial publico encargado del Registro de Estado Civil y Capacidad de las Personas, el
matrimonio en articulo de muerte puede celebrarse ante cualquier juez o funcionario judicial, quien debe levantar
acta de celebración, haciendo
constar las circunstancias mencionadas en el articulo 420 con excepción del inc. f) y remitirla al oficial publico para
que la protocolice”.

En este caso alguno de los cónyuges debe encontrarse suficientemente enfermo, pudiendo así omitir los recaudos.
2) Matrimonio a distancia: articulo 422: “el matrimonio a distancia es quien en el cual el contrayente ausente
expresa su consentimiento personalmente, en el lugar en que se encuentra, ante la autoridad competente para
celebrar matrimonios, según lo previsto en este Código en las normas de derecho internacional privado”.

Articulo 2623: “se considera matrimonio a distancia aquel en el cual el contrayente ausente expresa su
consentimiento, personalmente, ante la autoridad competente para autorizar matrimonios del lugar donde se
encuentra. La documentación que acredite el consentimiento del ausente solo puede ser ofrecida dentro de los
noventa días de la fecha de su otorgamiento. El matrimonio a distancia se considera celebrado en el lugar donde se
preste el consentimiento que perfecciona el acto. La autoridad competente para celebrar el matrimonio debe
verificar que los contrayentes no están afectados por impedimentos legales y decidir sobre las causas alegadas para
justificar la ausencia”.

7) Oposición a la celebración de matrimonio:

Articulo 410: “solo pueden alegarse como motivos de oposición los impedimentos establecidos por la ley. La
oposición que no se funde en la existencia de alguno de esos impedimentos debe ser rechazada sin mas trámite”.
El artículo se refiere a los impedimentos establecidos en el artículo 403.
El articulo 412 establece que: “cualquier persona puede denunciar la existencia de alguno de los impedimentos
establecidos en el articulo 403 desde el inicio de las diligencias previas y hasta la celebración del matrimonio por
ante el Ministerio Publico, para que deduzca la correspondiente oposición, si lo considera procedente, con las
formalidades y el procedimiento previstos en los artículos 413 y 414”.

Una vez celebrado el matrimonio solo se podrá pedir su nulidad.


Es decir la denuncia la puede realizar cualquier persona con interés a diferencia de la oposición que solo la pueden
realizar los legitimados activos (que tengan interés y el vinculo que establece el articulo 411); el que denuncia no es
parte del proceso, el que hace la oposición si lo es; y por ultimo la denuncia se hace ante el Ministerio Publico y es
este quien la lleva adelante, en cambio, la oposición se hace ante el oficial publico y solo la pueden realizar los
legitimados activos.

El articulo 413 establece las formas y los requisitos de la oposición: “la oposición se presenta al oficial publico del
Registro que ha de celebrar el matrimonio verbalmente opor escrito con expresión de:
1) Nombre y apellido, edad, estado de familia, profesión y domicilio del oponente;
2) Vinculo que une al oponente con alguno de los futuros contrayentes;
3) Impedimento en que se funda la oposición;
4) Documentación que prueba la existencia del impedimento y sus referencias, si las tiene. Si no la tiene, el lugar
donde esta, y cualquier otra información útil.
Cuando la oposición se deduce en forma verbal, el oficial publico debe levantar acta
circunstanciada, que firma con el oponente o con quien firme a su ruego, si aquel no sabe o no puede firmar. Cuando
se deduce por escrito, se debe transcribir en el libro de actas con las mismas formalidades.”.

En el acta circunstanciada el oficial publico transcribe lo que el legitimado le comunica, es decir la causa por la cual
no puede contraer matrimonio. Debe verificar la aptitud de la persona para oponer la oposición.

Procedimiento de la oposición: el artículo 414 establece que deducida la oposición el oficial público la hace conocer
a los contrayentes; desde aquí existen dos posibilidades:
1) Que alguno de ellos o ambos admitan la existencia del impedimento legal, entonces el oficial público lo hará
constar en acta y no celebrara el matrimonio.

2) O que los contrayentes no lo reconozcan. Deben expresarlo ante el oficial publico dentro de los tres días
siguientes al de la notificación; este levanta un acta remite al juez competente copia autorizada de todo lo actuado
con los documentos presentados y suspende la celebración del matrimonio. El juez competente debe sustanciar y
decidir la oposición por el procedimiento más breve que prevea la ley local, recibida la oposición, da vista por tres
días al Ministerio Publico. Resulta la cuestión, el juez remite copia de la sentencia al oficial público.

El artículo 415 expresa que una vez recibido el testimonio de la sentencia firme si se desestima la oposición, el oficial
publico procede a celebrar el matrimonio. Si la sentencia declara la existencia del impedimento, el matrimonio no
puede celebrarse. En ambos casos, el oficial publico debe anotar la parte dispositiva de la sentencia al margen del
acta respectiva.

9) MATRIMONIO A DISTANCIA
ARTICULO 422.-Matrimonio a distancia. El matrimonio a distancia es aquel en el cual el contrayente ausente
expresa su consentimiento personalmente, en el lugar en que se encuentra, ante la autoridad competente para
celebrar matrimonios, según lo previsto en este Código en las normas de derecho internacional privado.
ARTICULO 2623.-Matrimonio a distancia. Se considera matrimonio a distancia aquel en el cual el contrayente
ausente expresa su consentimiento, personalmente, ante la autoridad competente para autorizar matrimonios del
lugar en que se encuentra.
La documentación que acredite el consentimiento del ausente sólo puede ser ofrecida dentro de los noventa días de
la fecha de su otorgamiento.
El matrimonio a distancia se considera celebrado en el lugar donde se preste el consentimiento que perfecciona el
acto. La autoridad competente para celebrar el matrimonio debe verificar que los contrayentes no están afectados
por impedimentos legales y decidir sobre las causas alegadas para justificar la ausencia.

10) Prueba del matrimonio:


Prueba ordinaria del matrimonio:
El articulo 423 dice en su primera parte:”el matrimonio se prueba con el acta de su celebración, su testimonio, copia
o certificado, o con la libreta de familia expedidos por el Registro de Estado Civil y Capacidad de las Personas”.

Prueba subsidiaria del matrimonio:


Sigue diciendo el articulo 423:”Cuando existe imposibilidad de presentarlos, la celebración del matrimonio puede
probarse por otros medios, justificando esa imposibilidad. La posesión de estado, por si sola, no es prueba suficiente
para establecer el estado de casados o para reclamar los efectos civiles del matrimonio”.

Entonces cuando existe imposibilidad de presentar los documentos referidos en la primera parte del articulo la
celebración del matrimonio podrá probarse por otros medios, pero la posesión de estado por si sola no es prueba
suficiente; si lo será si además se le suma un acta deficiente por faltar las formalidades. Debe justificarse la
imposibilidad de presentar esos documentos.

Ineficacia extraterritorial del matrimonio.


Articulo 2622:”la capacidad de las personas para contraer matrimonio, la forma del acto, su existencia y validez, se
rigen por el derecho del lugar de la celebración, aunque los contrayentes hayan dejado su domicilio para no
sujetarse a las normas que en el rigen.
No se reconoce ningún matrimonio celebrado en país extranjero si rige alguno de los impedimentos previstos en los
artículos 575, segundo párrafo y 403, incs a), b), c), d), y e).
El derecho del lugar de celebración rige la prueba de la existencia del matrimonio”.

Es decir que si se celebrara un matrimonio estado presentes los impedimentos nombrados en el artículo el juez no
les reconocerá efectos, pero ello no implica juzgar sobre la eventual validez que el matrimonio puede tener, ya que
el desconocimiento de la eficacia extraterritorial se limita a privar de efectos a ese matrimonio.

11 Y 12) Efectos del matrimonio. Derechos y deberes de los cónyuges. Cohabitación. Fidelidad. Asistencia.
Alimentos.

Los derechos y deberes de los cónyuges se hacen efectivos una vez que se contrae el matrimonio. Con el nuevo
régimen de divorcio incausado la violación de éstos, no da lugar a resarcimiento ni tampoco podrán ser alegados
para solicitar el divorcio.
Están enumerados en los artículos 431 y 432 y ellos son:
1) alimentos;
2) cooperación;
3) convivencia;
4) asistencia mutua y
5) el deber moral de fidelidad.

Los derechos y deberes matrimoniales tienen que ver con el proyecto de vida en común, el matrimonio está basado
en pautas internas de cooperación, convivencia, asistencia mutua y fidelidad (deber moral).
La convivencia no implica necesariamente cohabitación (la cohabitacion permite y fomenta la comunidad de vida, y
esta comunidad se integra tanto con la convivencia material (habitar una misma vivienda), como con la comunidad
psicologica,que exige una profunda e integral comunicacion entre los conyuges en todos los niveles del ser. ), sino
también un proyecto de vida en común, se debe admitir que se encuentren uno u otro elemento para permitir que
formas alternativas de vida familiar entren en le matrimonio.

Que la fidelidad sea un deber moral implica que, si alguno o ambos cónyuges es infiel no habría sanción alguna para
ninguno de ellos, esto porque la fidelidad es un deber del matrimonio monogamico católico, es decir, el no mantener
relaciones sexuales con terceros, pero no es un deber legal. la transgrecion de este deber de indole moral no trae
aparejada ninguna sancion civil, no configura causal de divorcio atento a la vigencia de un sistema que no requiere la
expresion de causa alguna y tampoco habilitara el reclamo indemnizatorio.
La fidelidad es la especial lealtad que se deben los conyuges por causa del matrimonio en otodos los aspectos de la
vida y no solo en orden al ejercicio de la sexualidad. Por ello se suele hablar de fidelidad material y de un fidelidad
moral.
Lo que todavía no queda muy claro con el nuevo Código es que pasaría si se violaran alguno de estos deberes.
¿daría lugar a una acción por daños y perjuicios? Habrá que esperar a ver que pasa con su aplicación.

El deber de asistencia mutua, o sea reciproco, puede ser entendido en sentido genérico, ser parte de un proyecto de
vida en común, la ayuda mutua, el respeto reciproco, lo cual puede resumirse en el concepto de la solidaridad
familiar, como deber moral; y en sentido jurídico, como la posibilidad que tienen ambos de reclamarse alimentos.

El deber de alimentos es el único deber jurídico establecido entre los cónyuges, su cumplimiento puede ser
reclamado judicialmente y puede implicar una sanción jurídica (en su caso, podría caer bajo un tipo penal. La acción
de alimentos es una acción de estado de familia ya que deriva del estado de casado y como tal imprescriptible e
irrenunciable salvo excepciones (articulo 712.)

El artículo 432 establece cuando los cónyuges se deben alimentos:


1) Durante la vida en común
2) Durante la separación de hecho
3) Con posterioridad al divorcio, la prestación alimentaria solo se debe en lo supuestos previstos en este Código, o
por convención de las partes
Y termina diciendo que esta obligación se rige por las reglas relativas a los alimentos entre parientes en cuanto sean
compatibles (los cónyuges no son parientes).

El artículo 433 establece las pautas para la fijación de alimentos durante la vida en común y la separación de hecho.
ARTICULO 433.-Pautas para la fijación de los alimentos. Durante la vida en común y la separación de hecho, para la
cuantificación de los alimentos se deben tener en consideración, entre otras, las siguientes pautas:
a) el trabajo dentro del hogar, la dedicación a la crianza y educación de los hijos y sus edades;
b) la edad y el estado de salud de ambos cónyuges;
c) la capacitación laboral y la posibilidad de acceder a un empleo de quien solicita alimentos;
d) la colaboración de un cónyuge en las actividades mercantiles, industriales o profesionales del otro cónyuge;
e) la atribución judicial o fáctica de la vivienda familiar;
f) el carácter ganancial, propio o de un tercero del inmueble sede de esa vivienda. En caso de ser arrendada, si el
alquiler es abonado por uno de los cónyuges u otra persona;
g) si los cónyuges conviven, el tiempo de la unión matrimonial;
h) si los cónyuges están separados de hecho, el tiempo de la unión matrimonial y de la separación;
i) la situación patrimonial de ambos cónyuges durante la convivencia y durante la separación de hecho.
El derecho alimentario cesa si desaparece la causa que lo motivó, el cónyuge alimentado inicia una unión
convivencial, o incurre en alguna de las causales de indignidad.
En estos supuestos el deber alimentario cesa si:
1) desaparece la causa que lo motivo;
2) si el cónyuge alimentado inicia una unión convivencial;
3) o si el alimentado incurre en alguna de las causales de indignidad.

El articulo 434 establece que: “las prestaciones alimentarias pueden ser fijadas aun después del divorcio:
1) a favor de quien padece una enfermedad grave preexistente al divorcio que le impida autosustentarse. Si el
alimentante fallece, la obligación se transmite a sus herederos

2) a favor de quien no tiene recursos propios suficientes ni posibilidad razonable de procurárselos. Se tienen en
cuenta los incs b), c) y e) del articulo 433. La obligación no puede tener una duración superior al número de años que
duro el matrimonio y no procede a favor de quien recibe la compensación económica del artículo 441.

En los dos supuestos previstos en este articulo la obligación cesa si: desaparece la causa que la motivo, o si la
persona beneficiada contrae matrimonio o vive en una unión convivencial, o cuando el alimentado incurre en alguna
de las causales de indignidad. Si el convenio regulador del divorcio se refiere a alimentos, rigen las pautas
convenidas.”
BOLILLA VII: DISOLUCION. DIVORCIO. NULIDAD

1. Causas de disolución del matrimonio.


Articulo 435: “el matrimonio se disuelve por:
1) Muerte de uno de los cónyuges;
2) Sentencia firme de ausencia con presunción de fallecimiento;
3) Divorcio declarado judicialmente.

Divorcio. Concepto. Requisitos.

El artículo 435 establece como una de las causales de disolución del matrimonio al divorcio declarado judicialmente.
La disolución del matrimonio opera cuando el vínculo se extingue por causas que sobrevienen a la celebración. Esto
significa que el acto matrimonial existió y produjo todos los efectos jurídicos, pero en un momento, y por las causas
taxativamente enumeradas en la ley, el matrimonio se disuelve y dejan de existir los efectos que tenía.
La disolución del matrimonio importa la extinción del contenido de la relación jurídica matrimonial.
Cuando se sancionó el Código Civil en 1871, la muerte era la única causa de extinción del vínculo matrimonial. Con la
ley 14.394, de 1954, se incluyeron dos causales más: el matrimonio del cónyuge del declarado ausente con
presunción de fallecimiento y el divorcio vincular (por conversión de la sentencia de separación personal). El divorcio
regulado por esta ley tuvo muy corta vigencia, ya que fue suspendido en el año 1956. La ley 23.515 introdujo el
divorcio vincular en el país, por lo que se incluyó esta causal de disolución de la sociedad conyugal.
Si bien esta causal de disolución ya existía en la regulación del CC, en el texto actual se han realizado algunas
modificaciones formales. En efecto, en el art. 213, inc. 3, CC se establecía “sentencia de divorcio vincular” (ahora
quedó establecido “divorcio declarado judicialmente”); porque de ese modo se lo diferenciaba de la separación
personal que no disolvía el vínculo matrimonial. Como en el CCyC no se regula la separación personal, no existe
motivo para aclarar que el divorcio es vincular. El único divorcio que se regula en el CCyC rompe el vínculo
matrimonial, por lo que no tiene sentido utilizar la expresión “divorcio vincular”. Sin perjuicio de que en el artículo se
establece que la tercera causa de disolución del matrimonio es el “divorcio declarado judicialmente”, es importante
dejar aclarado que el único divorcio que se recepta en el CCyC es el divorcio judicial.

Evolución legislativa:
En su inicio, el artículo 167 del Código Civil disponía la celebración canónica del matrimonio entre personas católicas
y, tratándose del matrimonio entre católico y cristiano no católico autorizado por la Iglesia Católica, la celebración
que fuese de practica en la iglesia de la comunión a que perteneciere el esposo no católico (artículo 180).
Para ambos supuestos, confirió a la autoridad eclesiástica el conocimiento y la decisión sobre impedimentos y
dispensas (artículos 168 y 172) y también en las causas por divorcios (artículo 201).
Respecto al divorcio que correspondía decidir a los jueces civiles, o sea el de los matrimonios celebrados sin
autorización de la Iglesia Católica de conformidad a los ritos de la iglesia a la que los contrayentes pertenecieren:
artículo 183, dispuso que consistía solamente en la separación personal de los esposos sin disolución del vínculo
matrimonial (artículo 198).
De tal modo, los efectos de la sentencia no eran otros que la extinción del deber de cohabitación (artículo 209), pero
subsistía expresamente consagrado el deber de fidelidad, pudiendo ser criminalmente acusado el que cometiera
adulterio (artículo 208).
Los artículos 216 y 217 consagraron la subsistencia del deber de alimentos entre los cónyuges divorciados; el
primero estableciendo que habiendo dado el marido causa al divorcio debería contribuir a la manutención de la
mujer, y el segundo disponiendo que cualquiera de los esposos que hubiese dado causa al divorcio tenía derecho a
que el otro, si tuviese medios, le proveyera lo preciso para su subsistencia, si le fuera de toda necesidad y no tuviera
recursos propios.
La ley 2393 dictada en 1888, si bien secularizó el matrimonio consagrando la celebración civil obligatoria, mantuvo la
indisolubilidad del vínculo por divorcio.
Establecía el artículo 64 que el divorcio consistía únicamente en la separación personal de los esposos sin que se
disolviera el vínculo matrimonial.
A su vez el artículo 66, repudió el divorcio por mutuo consentimiento de los cónyuges, exigiendo la alegación de
hechos culpables enumerados en el artículo 67 que constituyeron las típicas causales de divorcio culpable conocidas
en nuestro derecho.
La ley 14394 que comenzó a regir desde el 29 de junio de 1955 admitió la conversión de la separación personal de
los cónyuges en los términos que consagraba el artículo 64 de la ley 2393, en divorcio vincular. La declaración de
disolución del vínculo matrimonial autorizaba a ambos cónyuges a contraer nuevas nupcias. Pero el 1° de marzo de
1956 se declaró en suspenso el artículo 31 de la ley 14394, en cuanto habilitaba para contraer nuevo matrimonio a
las personas divorciadas. A su vez, se debían paralizar, en el estado en que se encontraren, los trámites judiciales
destinados a actuar la conversión del artículo 31 de la ley 14394, no dándose curso a las nuevas peticiones que se
presentaren sobre ello.
Es recién por la ley 23515 que se incorporó al Código Civil una legislación orgánica sobre el matrimonio, previendo
también la disolución del vínculo matrimonial por divorcio en los términos del artículo 213 inc. 3.

En la época de Vélez el Código Civil estaba pensado para un único tipo de familia, siendo sus normas en gran medida
de orden público, es decir, normas que las partes no podían dejar de lado; con el nuevo Código hay un cambio de
paradigma; ya la doctrina y la jurisprudencia venían diciendo que la autonomía de la voluntad en el derecho de
familia era importante y había artículos en los que no se aplicaba. El Código se apoya primordialmente en tres
pilares:
1) Autonomía de la voluntad (implica libertad);
2) Igualdad (sin importar el género);
3) Responsabilidad (acá si aparecen normas de orden público que tienen que ver con la solidaridad familiar y no
pueden ser dejadas de lado).

El Código Civil y Comercial de la Nación adopta un divorcio incausado, a petición de ambos o uno de los esposos y sin
requerir plazo alguno. Estas serían las características de la disolución del vínculo matrimonial.
1) En materia de divorcio se introducen modificaciones sustanciales al pasarse de un régimen causado a uno
incausado o sin expresión de causa. Es decir, se prescinde de cualquier manifestación acerca de las razones —sean
de índole objetivas como ser el paso del tiempo de la celebración del matrimonio o estar separados de hecho; o
subjetivas, fundadas en la violación a uno o varios derechos deberes derivados del matrimonio— para que uno de
los cónyuges o ambos soliciten, y la justicia decrete el divorcio.

¿Cuál es el fundamento de esta línea legislativa? Ello está perfectamente explicitado en los "Fundamentos" del
Anteproyecto que dio lugar al nuevo texto civil y comercial. En este sentido, se afirma: "Otra modificación sustancial
es la supresión de las causales subjetivas de divorcio. La experiencia judicial ha demostrado el alto nivel de
destrucción y desgaste emocional al que se someten los cónyuges y sus familias cuando se opta por el divorcio
contencioso. El valor pedagógico de la ley es conocido; el
Anteproyecto pretende contribuir a la pacificación de las relaciones sociales en la ruptura matrimonial. La
eliminación de las causales subjetivas es una manera de colaborar a superar la ruptura matrimonial de la manera
menos dolorosa posible. De este modo, y de conformidad con la línea legislativa que adoptan varios países en sus
reformas más recientes, se prevé un único sistema de divorcio remedio".

Específicamente, una consecuencia ineludible de la derogación del sistema causado subjetivo o culpable es otra
"modificación importante se vincula a los derechos y deberes que derivan de la celebración del matrimonio. Se
establece el compromiso de los cónyuges de llevar adelante un proyecto de vida, elemento tradicional del
matrimonio, basado en la cooperación y el deber moral de fidelidad. Este punto de partida reconoce el alto valor
axiológico de los deberes de fidelidad y cohabitación, pero al receptarse un régimen incausado de divorcio, su
incumplimiento no genera consecuencias jurídicas. En cambio se conserva el derecho y deber jurídico de asistencia,
previéndose expresamente el deber alimentario y las pautas para su fijación, mientras se encuentren casados o
conviviendo, o separados de hecho; tras el divorcio esa obligación puede existir por acuerdo de partes o ante dos
supuestos expresamente previstos, fundados en el principio de solidaridad familiar:

1)a favor de quien padece una enfermedad grave preexistente al divorcio transmitiéndose a los herederos del
alimentante; y 2)a favor de quien carece de recursos suficientes y de la posibilidad razonable de procurárselo" (conf.
Fundamentos del Anteproyecto).

Se eliminan los deberes matrimoniales como deberes jurídicos, a excepción de la obligación alimentaria en
determinados supuestos. Empero el incumplimiento de ese deber no tiene previsto constituirse en causal de
divorcio. Como se expresa en los fundamentos del Anteproyecto: “el matrimonio se celebra y se sostiene por la
voluntad coincidente de ambos contrayentes y, por ende, cuando la voluntad de uno de ellos o ambos desaparece,
el matrimonio no tiene razón de ser y no puede ser continuado, habilitándose por este simple y elemental
fundamento, que uno o ambos pueda solicitar su divorcio. El respeto por la libertad y autonomía de la persona
humana y su proyecto de vida impone la obligación de evitar forzar a un sujeto a continuar en un matrimonio que ya
no se desea. La protección integral de la familia de tipo matrimonial no implica desconocer los derechos
fundamentales de cada uno de sus integrantes, o quienes no pueden ver conculcados sus derechos a costa o por
fuerza del matrimonio.”

¿Es compatible el deber jurídico de convivencia en el marco de un régimen de divorcio incausado? La respuesta
negativa se impone. Veremos sintéticamente por qué.
Es evidente que si se deroga el régimen de divorcio culpable, la violación al deber de cohabitar o convivencia no
debe tener lugar a sanción alguna, de allí que la cohabitación había sido quitada del elenco de derechos y deberes
jurídicos enunciados en el art. 431 de la normativa proyectada, incluso, tampoco era calificado de deber moral como
o conjuntamente con el de fidelidad. En el texto aprobado en Senadores se lo volvió a incorporar quedando como un
deber jurídico en la denominación pero sin efectos prácticos ya que su incumplimiento no traería ninguna
consecuencia, efecto o sanción jurídica.

¿Qué ventajas o perjuicios podría tener que el deber de convivencia sea entendido un deber jurídico? Más allá de
conculcar principios constitucionales-convencionales como de intimidad, privacidad y libertad expresamente
previstos en el art. 19 de la Constitución Nacional, puntualmente perjudica a un tipo de relaciones de pareja que se
ve con mayor frecuencia en el abanico cada vez más amplio de realidades familiares.
Nos referimos a las llamadas en el derecho anglosajón de parejas "LAT" (siglas en inglés: "living aparttogether"
traducido como parejas con domesticidad común), que son aquellas parejas —matrimoniales o no— con un
proyecto en común, respeto mutuo, fidelidad, cooperación y asistencia, pero que deciden no convivir o no
comparten la misma vivienda. Como también se dice, parejas que viven juntos pero separadas.

¿Sería constitucional-convencionalmente válido que un matrimonio pueda nacer "separado de techo"? A diferencia
de lo que acontece en los supuestos que se dirimieron en la justicia alegándose separación de hecho como causal de
divorcio por matrimonios que viven en el mismo hogar (elemento objetivo) pero sin la finalidad de continuar un
proyecto de vida en común (elemento subjetivo); en este tipo de relaciones afectivas que muestra la realidad
contemporánea, sucede totalmente lo contrario. El elemento subjetivo, el proyecto en común está latente y ausente
la convivencia bajo el mismo techo.

Por lo general, son segundas o terceras uniones cuyos integrantes tienen hijos de parejas anteriores y por diversas
razones eligen —autonomía de la voluntad— no compartir el mismo techo. ¿Acaso dos personas que prestan el
consentimiento ante el oficial del registro civil, tienen un proyecto de vida en común y deciden vivir uno en una
vivienda y el otro en el piso de arriba, a la vuelta o a algunas cuadras de distancia porque ambos tienen hijos
adolescentes y no quieren unir ambas familias se puede considerar que no son un matrimonio sólo porque no
cumplen con el deber de cohabitación? Según el proyecto de reforma hasta los cambios que tuvo de último
momento antes de su sanción en Senadores, esta particular tipología familiar tenía su espacio en total consonancia
con las nociones de pluralidad y "multiculturalidad" que campeaban el Anteproyecto.
Si bien en el art. 431 el deber de convivencia está consignado como un deber jurídico, cabe dejar expresado que su
supuesto "incumplimiento" no tendrá ninguna consecuencia o efecto jurídico negativo porque ya hoy en la práctica
no lo tiene.
Cabría preguntarse qué importancia tiene desde el plano jurídico en el marco de un divorcio incausado. Ninguna, ya
que al no haber un divorcio culpable, si uno se va del hogar no podría ser pasible de ser decretado cónyuge culpable.
Qué otro efecto podría tener. Y es aquí en el que hay que pregonar por una mirada sistémica de todo el régimen civil
proyectado, ya que de lo contrario, una vez más el fantasma de los daños y perjuicios —que se pretendió excluir del
proyecto de reforma y que ya hoy en día está en franca retirada— podría volver a instalarse.

¿Cuál habría sido la razón de esta reincorporación? Una respuesta posible podría ser el fundamentalismo
conservador y tradicional ya mencionado que se resiste a que el derecho de familia caiga bajo las redes de la
obligada perspectiva constitucional— convencional y por ende, humana. La otra, ceder ante el engañoso slogan de
que la convivencia no puede ser un elemento sine qua non en las uniones convivenciales y estar ausente en el
matrimonio. Esta afirmación es más efectista que real.

Veamos. Cabe recordar que no se incurre en un tratamiento discriminatorio cuando se regula distinto lo que es de
por sí, diferente. El matrimonio es un acto formal; por el contrario, la unión convivencial es eminentemente
informal. ¿Cuándo una relación de pareja es lo suficientemente "fuerte" para que el Derecho no le pueda dar la
espalda y debe reconocer ciertos o determinados efectos legales? Para el reconocimiento como tales, deben contar
con determinados requisitos, ente los cuales se encuentra la convivencia (singular, pública, notoria, estable y
permanente tal como surge del art. 509 proyectado) sostenida durante un lapso mínimo de tiempo (2 años, según lo
dispuesto en el art. 510) para evitar la judicialización acerca de cuánto tiempo debe transcurrir para que una persona
pueda gozar de los derechos que el proyecto le otorga a las pareja que conforman una unión convivencial. En el
matrimonio, dada la formalidad que lo rodea, no es necesario tener que cumplir todos estos requisitos para ser
considerado tal, es en ese contexto, que la convivencia no se lo observa un elemento central para la existencia de un
matrimonio.

Con la redacción del art. 431 es claro que empeora considerablemente el régimen matrimonial más que el actual.
Sucede que en el actual al menos, el art. 199 prevé algunos supuestos de excepción al deber de cohabitación, como
ser cuestiones de trabajo, estudio u otras razones que habilitan el cese de la cohabitación de manera transitoria que
no afectan el verdadero sentido y finalidad del matrimonio: el proyecto de vida en común. En el texto que ha
quedado en el proyecto no se establece ninguna excepción al deber de convivir, por lo cual, esto obligará a llevar
adelante una ardua tarea interpretativa con los riesgos que ello lleva implícito. ¿Acaso un nuevo Código Civil no
debería tener entre sus principales finalidades evitar la mayor cantidad de debates interpretativos, ser un
instrumento legal lo más claro y preciso posible?

¿Qué sucedería si un cónyuge se va a cursar un doctorado al exterior y en el ínterin, su pareja fallece? ¿Se trataría de
un supuesto de exclusión de la vocación hereditaria por el cese de la convivencia? Es claro que la intención del
matrimonio era seguir adelante con su proyecto de vida marital, por lo cual, es esperable que el juez que intervenga
en el proceso sucesorio tenga la habilidad de hacer llevar adelante un análisis integral de la normativa proyectada y a
la vez, tenga en cuenta que este cambio que ha sufrido el art. 431 responde más a presiones irrazonables que a una
modificación a tono o coherente con el todo el régimen proyectado y por lo tanto, la verdadera naturaleza del deber
de convivencia es, al igual que la fidelidad, un deber moral quedando fuera también de la "autoridad de los
magistrados" como lo dispone el art. 19 de la Constitución Nacional.
Esta es la interpretación correcta del deber de convivencia.

El otro punto que merece ser reiterado y así aclarado para evitar cualquier tipo de duda, se refiere al deber moral de
fidelidad. Si bien este ha estado presente desde los inicios, es decir, desde la redacción del Anteproyecto, lo cierto es
que merece dedicarle un espacio especial para ahuyentar cualquier fantasma de pretender reavivar la culpa en el
divorcio a través de acciones de daños y perjuicios.

¿Por qué en los Fundamentos del Anteproyecto se le dedica especial atención a justificar la razón por la cual el deber
de fidelidad queda expresamente entendido como un deber moral? Este interrogante se relaciona íntimamente con
el siguiente otro: ¿por qué será que siempre las cuestiones relacionadas con lo "sexual" han incomodado tanto al
Derecho? Tanto la doctrina como la jurisprudencia han colocado sobre el deber de fidelidad una carga que no estaba
presente en el resto de los derechos y deberes matrimoniales; como si fuere una especie de "súper deber" que le
interesa al derecho perseguir y castigar con especial ahínco. Esto demuestra las dificultades por separar Estado—
Iglesia/ Derecho— Religión, siendo que la fidelidad siempre ha estado vinculada a la "moral cristiana". En el nuevo
texto legal, al menos se avanza bastante en el tema al establecer que la fidelidad constituye un deber moral y no
jurídico; y por lo tanto, que su supuesto "incumplimiento" no genera ningún efecto en el plano civil quedando y así
engrosando, el listado de cuestiones que quedan en la esfera de reserva que establece el art. 19 de la Constitución
Nacional. En total consonancia con ello, se deja en claro que cualquier conducta de los cónyuges referida a la
fidelidad-infidelidad por parte de uno o de ambos, no puede traer aparejada ninguna sanción civil;
básicamente, ni ser causal de divorcio por adulterio o en su defecto, injurias graves, y las consecuencias negativas
que se derivan para el cónyuge culpable; ni la posibilidad de peticionar la reparación de los daños y perjuicios al no
estarse más ante un hecho ilícito, antijurídico.
En este marco, fácil se advierte que ni la separación de hecho ni la infidelidad serían conductas reprochables según
el ordenamiento jurídico que se avizora y por lo tanto, la imposibilidad jurídica de reclamar supuestos daños y
perjuicios por este tipo de actitudes.
Al respecto, y apelándose una vez más a los Fundamentos del Anteproyecto como fuente autorizada de
interpretación, se señala que "Los daños que pueden ser indemnizados a través del sistema general de la
responsabilidad civil son aquellos que no tienen su causa en el vínculo matrimonial en sí mismo ni en los deberes
que de él emanan, sino en la condición de persona. Se separa, así, lo relativo al vínculo matrimonial del derecho de
daños". Sucede que los daños derivados del divorcio se desprenden del sistema subjetivo, siendo la causa el
incumplimiento de alguno o varios derechos— deberes jurídicos del matrimonio los que al configurar un hecho ilícito
generan el deber de reparar. Por ende, y a contrario sensu, si la fidelidad no es un derecho deber jurídico sino moral,
mal puede configurar un hecho ilícito por no ser antijurídico, no dándose así los presupuestos de la responsabilidad
civil.

2) El proyecto consagra el divorcio incausado. En consecuencia, se han suprimido todos los plazos, tanto los que
exigían un número de años de matrimonio, como aquellos en que se debían acreditar los lapsos de separación de
hecho requeridos.
En la actualidad, si el objetivo del tiempo de separación a cumplir como requisito es la reflexión, cada pareja conoce
mejor que nadie el proceso de maduración que necesita para pedir el divorcio. A su vez, exigir un periodo de
matrimonio nada demuestra si la ruptura en los hechos ya ha acontecido.
Se afirma en los fundamentos que: “se elimina todo plazo de espera, sea que se contabilice desde la celebración de
las nupcias, o de la separación de hecho para la tramitación del divorcio. Esta postura legislativa también se funda en
la necesidad de evitar intromisiones estatales irrazonables en el ámbito de intimidad de los cónyuges.”

3) Se eliminan las audiencias de conciliación. Se parte de la base de la no injerencia del Estado en materia que atañe
exclusivamente a los involucrados, pues la causa de divorcio es la voluntad de uno o de ambos de culminar la
relación matrimonial. En este marco, no hay espacio para que deban contarle al juez las razones que signaron la
decisión, pues los motivos quedan en la esfera íntima de quienes los han padecido.

4) El otro gran avance del nuevo Código es que la disolución del vínculo puede ser solicitada por uno solo de los
miembros de la pareja. Obviamente también pueden hacerlo en forma conjunta. En ambos casos es requisito
indispensable presentar un convenio regulador.
El eje de la reforma en este tema es la responsabilidad. Es posible acceder al divorcio sin el consentimiento del otro,
pero se deben asumir las consecuencias que acarreará la ruptura, tales como con quien de los padres vivirán los
hijos, alimentos, atribución de la vivienda, etc. Todos estos temas deben proponerse claramente en el convenio y se
apela a que este sea redactado con madurez.

5) irrenunciabilidad a la facultad de solicitar el divorcio: la facultad de solicitar el divorcio es irrenunciable.


ARTICULO 436.-Nulidad de la renuncia. Es nula la renuncia de cualquiera de los cónyuges a la facultad de pedir el
divorcio; el pacto o cláusula que restrinja la facultad de solicitarlo se tiene por no escrito.

2. Proceso de divorcio. Características.


Artículo 436:”es nula la renuncia de cualquiera de los cónyuges a la facultad de pedir el divorcio; el pacto o cláusula
que restrinja la facultad de solicitarlo se tiene por no escrito.”

En nuestro ordenamiento jurídico, el vínculo matrimonial se disuelve y no es posible renunciar a pedir el divorcio. En
el caso en que se hubiese realizado un pacto o convenio en ese sentido, el mismo se tiene por no escrito. La
irrenunciabilidad a la facultad de solicitar el divorcio se funda en los principios constitucionales de libertad,
autonomía personal (artículo 19 CN) y del derecho a casarse (artículo 20 CN).

Artículo 437:”el divorcio se decretara judicialmente a petición de ambos o de uno solo de los cónyuges.”

El divorcio continúa siendo judicial, no se admite el divorcio administrativo que contemplan algunas legislaciones en
el derecho comparado. El juez deberá dictar la sentencia a pedido de uno o de ambos cónyuges.
Se regula un solo tipo de divorcio, el incausado. Se suprimen las causas objetivas y subjetivas, y se elimina la figura
de la separación personal.
Se suprimen todos los plazos que establecía el CC, tanto el que se fijaba desde la celebración del matrimonio para
solicitar el divorcio por mutuo consentimiento como los plazos de falta de convivencia que habilitaban el pedido de
separación y divorcio por la causal objetiva, así como el trámite de la doble audiencia.
Las razones de los profundos cambios en materia de divorcio se encuentran claramente expresadas en los
“Fundamentos del Anteproyecto...”: “... El avance de la autonomía de la voluntad en el derecho de familia no es
ajeno al ámbito del derecho matrimonial. Precisamente, ha sido en este campo en el cual la jurisprudencia y doctrina
nacional y comparada muestra un desarrollo exponencial del principio previsto en el artículo 19 de la CN; prueba de
ello son diversas sentencias que declaran la inconstitucionalidad de algunos artículos del CC por atacar el principio
de libertad de los cónyuges en la construcción, vida y ruptura matrimonial.
El anteproyecto amplía la aptitud de decisión de los integrantes del matrimonio. La mirada rígida sobre las relaciones
humanas familiares, bajo la excusa de considerar todo de orden público, contraría la noción de pluralismo que
pregona la doctrina internacional de los Derechos Humanos. En efecto, existe un derecho a la vida familiar y,
consecuentemente, la injerencia estatal tiene límites.
En virtud del avance de la autonomía de la voluntad en las relaciones de familia, y tomando en cuenta el desarrollo
de la doctrina y jurisprudencia respecto del principio del articulo 19 CN, se consagra un sistema de divorcio que
respeta la libertad e intimidad de los esposos, donde la injerencia estatal tiene límites precisos.
Las modificaciones tienen por fin lograr un mejor y mayor equilibrio en esta tensión entre autonomía de la voluntad
y orden público, específicamente al momento de la ruptura del matrimonio, para que pueda realizarse de modo
pacífico y menos traumático.

Artículo 438:”toda petición de divorcio debe ser acompañada de una propuesta que regule los efectos derivados de
este; la omisión de la propuesta impide dar trámite a la petición.
Si el divorcio es peticionado por uno solo de los cónyuges, el otro puede ofrecer una propuesta reguladora distinta.
Al momento de formular las propuestas, las partes deben acompañar los elementos en que se fundan; el juez puede
ordenar, de oficio o a petición de las partes, que se incorporen otros que se estiman pertinentes. Las propuestas
deben ser evaluadas por el juez, debiendo convocar a los cónyuges a una audiencia.
En ningún caso el desacuerdo en el convenio suspende el dictado de la sentencia de divorcio.
Si existe desacuerdo sobre los efectos del divorcio, o si el convenio regulador perjudica de modo manifiesto los
intereses de los integrantes del grupo familiar, las cuestiones pendientes deben ser resueltas por el juez de
conformidad con el procedimiento previsto por la ley local.”

Se establece un procedimiento de divorcio muy sencillo, a pedido de uno o de ambos cónyuges, con el único
requisito de la presentación de un convenio regulador de los efectos del divorcio o de una propuesta de convenio
cuando el pedido es unilateral.
Si ambos están de acuerdo, presentarán directamente el convenio regulador; en caso contrario, deben presentar
una propuesta de convenio. Podría ocurrir que acuerden algunos de los temas, pero no otros: en este caso, es
posible formular un acuerdo regulador respecto de los temas que han consensuado y una propuesta respecto de los
demás. Se prioriza, de este modo, el convenio que realicen directamente los esposos como forma de solucionar los
temas que los vinculan luego de la ruptura matrimonial.
Se procurará, en principio, que sean las mismas partes las que lleguen a acuerdos sobre todos los temas, pero si esto
no ocurriera, un cónyuge deberá hacer una propuesta y el otro podrá ofrecer una propuesta reguladora distinta. Las
partes deben acompañar los elementos en que se fundan y el juez puede ordenar, de oficio o a petición de las
partes, que se incorporen otros que se estiman pertinentes. Ambas propuestas van a ser evaluadas por el juez, quien
convocará a los cónyuges a una audiencia.
La oportunidad procesal de acompañar la propuesta de convenio o el convenio regulador es al momento de
iniciación del trámite de divorcio, de manera que la presentación de la misma configura un requisito de admisibilidad
del pedido de divorcio, ya sea el efectuado de común acuerdo o el pedido unilateralmente.
Podría darse el caso de que los cónyuges se encuentren separados de hecho y hayan solicitado la homologación de
un acuerdo respecto de los efectos de esa separación en forma previa a la demanda de divorcio. En tal caso, junto
con el pedido de divorcio, podrán ratificar las condiciones del acuerdo suscripto con anterioridad —si es que no ha
existido una alteración de las circunstancias y quieren mantener enteramente su contenido—, o bien pueden
modificar las cláusulas que consideren convenientes.
También en este último caso, y a falta de acuerdo entre los esposos, podrá uno de ellos presentar una propuesta de
modificación del acuerdo, la que deberá ponerse en conocimiento del otro cónyuge. En estos casos, debe tenerse
por cumplido el requisito de admisibilidad del pedido de divorcio.
La audiencia se convoca con el fin de evaluar el contenido de la o las propuestas, no tratándose de una audiencia de
divorcio, ya que en cualquier caso se va a dictar la sentencia que disuelve el vínculo matrimonial. Se readecúa,
entonces, en este artículo la función del juez en el proceso de divorcio, quien debe evaluar la propuesta y controlar
que no se perjudiquen los intereses del grupo familiar. En consecuencia, deberá conversar con las partes,
informarlas y verificar que no se haya incurrido en abuso del derecho ni violado el orden público en la suscripción del
convenio. Si existe desacuerdo sobre los efectos del divorcio, o si el convenio regulador perjudica de modo
manifiesto los intereses de los integrantes del grupo familiar, las cuestiones deberán ser resueltas por el juez, de
conformidad con el procedimiento previsto en la ley local.

ARTICULO 439.-Convenio regulador. Contenido. El convenio regulador debe contener las cuestiones relativas a la
atribución de la vivienda, la distribución de los bienes, y las eventuales compensaciones económicas entre los
cónyuges; al ejercicio de la responsabilidad parental, en especial, la prestación alimentaria; todo siempre que se den
los presupuestos fácticos contemplados en esta Sección, en consonancia con lo establecido en este Título y en el
Título VII de este Libro. Lo dispuesto en el párrafo anterior no impide que se propongan otras cuestiones de interés
de los cónyuges.

ARTICULO 440.-Eficacia y modificación del convenio regulador. El juez puede exigir que el obligado otorgue
garantías reales o personales como requisito para la aprobación del convenio.
El convenio homologado o la decisión judicial pueden ser revisados si la situación se ha modificado sustancialmente.

- Supuesto de pedido unilateral de divorcio


En el caso que el divorcio sea solicitado por uno de los cónyuges, el mismo deberá presentar la propuesta de
acuerdo regulador, teniendo la otra parte la posibilidad de presentar una propuesta distinta. El peticionante debe
acompañar los elementos en los que se funda. Como la norma no especifica los elementos, pueden adjuntarse los
que se consideren relevantes, tales como recibos de sueldos del alimentante y comprobantes de los gastos de los
hijos en el caso de los alimentos; tasación de los bienes en caso de convenios de liquidación de sociedad conyugal;
detalles de deudas; entre otros.
El juez deberá dar traslado de la propuesta a los fines de que preste conformidad o presente otra propuesta de
acuerdo. En este último caso, la otra parte también deberá adjuntar los elementos en que se funde. El magistrado
puede ordenar, de oficio o a petición de las partes, que se incorporen otros elementos que se estiman pertinentes.
Ambas propuestas van a ser evaluadas por el mismo en la audiencia a la que deben concurrir los cónyuges. La
audiencia debe ser convocada en todos los casos con el único y claro objetivo de tratar las cuestiones referidas a las
propuestas, es decir, a las consecuencias que el divorcio traerá a la familia. En el caso de que la propuesta haya sido
consensuada por las partes, el juez la homologará, salvo que la misma perjudique los intereses de los integrantes del
grupo familiar. En este caso, procurará en la audiencia que las partes la modifiquen.

- Supuesto de pedido conjunto de divorcio


En el caso de que ambas partes realicen el pedido de divorcio, podrán acordar todos los temas y presentar
conjuntamente el convenio regulador. Esta es la situación deseable: aquella en la que el rol del juez sea únicamente
verificar en la audiencia que no se perjudica el interés familiar en ninguna de las cláusulas del convenio. Pero podría
suceder que las partes pidan el divorcio en forma conjunta pero que no acuerden en las consecuencias. En tal caso,
podrán adjuntar un convenio de los temas que han consensuado y una propuesta de convenio respecto de los
demás temas, o bien presentar cada uno una propuesta diferente, procediéndose del mismo modo que se trató en
el punto anterior. Solo cuando no fuera posible el pacto, se deberá dictar una resolución que imponga las medidas
que se requieren para cada caso.

Disposiciones transitorias: el articulo 8 de la ley 26.994 dispone como norma complementaria que:
"En los supuestos en que al momento de entrada en vigencia de esta ley hubiese decretado la separacion personal,
cualquiera de los que fueron conyuges puede solicitar la conversion de la sentencia de separacion personal en
divorcio vincular.
Si la conversion se solicita de comun acuerdo, es competente el juez que intervino en la separacion o el del domicilio
de cualquiera de los que peticionan, a su opcion; se resuelve, sin tramite alguno, con la homologacion de la peticion.
Si se solicita unilateralmente, es competente el juez que intervino en la separacion o el del domicilio del exconyuge
que no peticiona la conversion; el juez decide previa vista por 3 dias.
La resolucion de conversion debe anotarse en el registro que tomo nota de la separacion"

3. Efectos del divorcio.. Compensación económica. Atribución de la vivienda.

Artículo 439:” el convenio regulador debe contener las cuestiones relativas a la atribución de la vivienda, la
distribución de los bienes, y las eventuales compensaciones económicas entre los cónyuges; el ejercicio de la
responsabilidad parental, en especial, la prestación alimentaria; todo siempre que se den los presupuestos facticos
contemplados en esta Sección, en consonancia con lo establecido en este Título y en el Titulo VII de este Libro.
Lo dispuesto en el párrafo anterior no impide que se propongan otras cuestiones de interés de los cónyuges.”

El convenio regulador es un negocio jurídico bilateral en el que los cónyuges establecen las consecuencias jurídicas
del divorcio.

El convenio regulador otorga a las partes la posibilidad de consensuar todos los temas que consideren importantes.
La referencia del artículo a “otras cuestiones” implica que se trata de temas de carácter enunciativo, lo que consagra
el respeto a la autonomía de la voluntad. No se obliga a los cónyuges a incorporar todas las cuestiones; la idea es
que tienen libertad para convenirlas. El legislador insta a las partes a llegar a acuerdos, entendiendo que esta es la
mejor forma de resolver los efectos del divorcio, pero no podrá obligarlos a pactar cuestiones que ambos no quieren
acordar porque no lo desean o porque no han generado conflictos.
Respecto del ejercicio de la responsabilidad parental, los exesposos podrán tomar en cuenta las previsiones
reguladas en relación al plan de parentalidad, establecidas por el artículo 655 CCyC. En el convenio regulador podría
acordarse la prestación alimentaria en favor del ex cónyuge. En el artículo 434 CCyC han quedado establecidos los
supuestos en los que proceden los alimentos luego del divorcio, no obstante lo cual, en el último párrafo, se
establece que si el convenio regulador se refiere a alimentos, rigen las pautas convenidas. En consecuencia, se
priorizan las condiciones que libremente puedan establecer las partes en el convenio. Se los obliga a pensar en las
consecuencias que el divorcio va a traer a su familia y a consensuar los distintos temas — principalmente, aquellos
relacionados con la responsabilidad parental y los alimentos, cuando existieran hijos—.
El objetivo de esta norma es establecer el contenido del convenio regulador con el fin de que los exesposos arriben a
acuerdos respecto de todos los efectos que el divorcio va a traer aparejado en los miembros de la familia. Si las
partes realizan un convenio parcial, acordando algunas cuestiones, y una propuesta de acuerdo respecto a otros,
podrá el juez, en audiencia (artículo 438 CCyC), intentar que lleguen a una conciliación respecto de estos últimos, así
como incorporar otros temas de conflicto, y de esta forma evitar posteriores incidencias. Este activismo judicial lo es
en beneficio del interés familiar y no obstará al dictado de la sentencia de divorcio. Solo tiene el efecto de crear un
espacio más de intercambio sobre las consecuencias jurídicas de la ruptura familiar y de evitar el pleito, entendiendo
que esta es la vía para pacificar la familia.

Artículo 440:”el juez podrá exigir que el obligado otorgue garantías reales o personales como requisito para la
aprobación del convenio. El convenio homologado o la decisión judicial pueden ser revisados si la situación se ha
modificado sustancialmente.”

Podrán los cónyuges dejar establecido en el convenio regulador cuáles son las garantías para el cumplimiento de las
distintas cláusulas del convenio. En el caso de que no lo hubieran realizado, podrá el juez exigirlas al o a los
obligados.
Estas garantías podrán ser reales o personales, y tienen el fin de garantizar el efectivo cumplimiento de lo pactado.
Estas pueden ser establecidas para todos los casos, aunquelas más frecuentes serán para asegurar las obligaciones
patrimoniales, ya sea el cumplimiento de la obligación alimentaria, la pensión compensatoria o las cuestiones
relacionadas a la división de bienes. También podrán establecerse a los fines del cumplimiento del régimen de
comunicación o de custodia; en este caso, podría ser mediante el pago de una multa al progenitor que las obstruya.
Consagrando el principio de autonomía de la voluntad, serán las mismas partes las que deberán ofrecer las garantías
para el cumplimiento, aunque también el juez puede exigirlas o fijarlas como condición para homologar el convenio.

Queda establecido expresamente que, en caso de modificación de las circunstancias tenidas en cuenta al momento
de formalizar el convenio, o de la sentencia que establezca las consecuencias del divorcio, se podrá modificar el
acuerdo.
Como la familia es dinámica, será frecuente el caso en que sea necesaria una modificación de lo oportunamente
convenido, como, por ejemplo, una actualización de los alimentos, una cuota extraordinaria frente a una necesidad
específica, un cambio en las garantías oportunamente ofrecidas para el cumplimiento de los acuerdos, cambios
respecto a la atribución del hogar conyugal, régimen de comunicación de padres e hijos derivado de la mayor edad
de los hijos, entre otras. En virtud de los innumerables casos que pueden darse en la familia, podrán las partes
consensuar las nuevas condiciones y pedir la homologación del nuevo acuerdo que realicen.

Cuando no lo puedan consensuar, siempre queda abierta la vía incidental para sustanciar el conflicto debido a los
cambios en las circunstancias sobre las cuales definieron o acordaron determinados efectos. Las condiciones que
habilitan la modificación son:

a. que haya existido, y se acredite fehacientemente, una alteración de las circunstancias que se tuvieron en cuenta
para la adopción de las medidas establecidas en el convenio regulador;

b. que la alteración de las circunstancias sea sustancial, de tal importancia que se estime que, de haber existido las
mismas al momento de la suscripción del convenio por las partes o la fijación judicial, se hubieran tomado medidas
distintas;

c. que la modificación no sea transitoria, sino que permanezca en el tiempo; y d. que el cambio de circunstancias no
haya sido provocado voluntariamente para obtener una modificación de las medidas adoptadas.

¿Cuáles son los aspectos del convenio regulador que pueden ser modificados? Si han variado las circunstancias
tenidas en cuenta al formularlos, los pactos referidos a la atribución de la vivienda, prestación alimentaria y
cuestiones referidas a la responsabilidad parental resultan modificables. Pero, con relación a los pactos referidos a la
compensación económica y al convenio de distribución de bienes, es necesario realizar las siguientes previsiones.
Conforme el articulo 441 CCyC, el cónyuge a quien el divorcio le produce un desequilibrio manifiesto que signifique
un empeoramiento de su situación, y que tiene por causa adecuada el vínculo matrimonial y su ruptura, tiene
derecho a una compensación. Esta compensación económica puede ser acordada entre los esposos en el convenio
regulador, tanto su cuantía como la forma de pago (prestación única, una renta por tiempo determinado o,
excepcionalmente, por plazo indeterminado).

A los fines de valorar el monto que representa este desequilibrio, los esposos deberán tomar en cuenta las
circunstancias establecidas en el artículo 442 CCyC, que son el estado patrimonial de cada uno al inicio y a la
finalización de la vida matrimonial; la dedicación que cada uno brindó a la familia y a la crianza de los hijos durante la
convivencia, y la que prestará con posterioridad al divorcio; la edad y estado de salud de los cónyuges e hijos; la
capacitación laboral y la posibilidad de acceder a un empleo del cónyuge que solicita la compensación económica; la
colaboración prestada a las actividades mercantiles, industriales o profesionales del otro cónyuge; la atribución de la
vivienda familiar, y si recae sobre un bien ganancial, un bien propio o un inmueble arrendado. Sin perjuicio de estas
bases que se han establecido para la fijación judicial de la compensación económica, son las que tendrán en cuenta
los esposos al momento de llegar a un acuerdo respecto al monto y demás condiciones de la compensación
económica. Es así que la misma va a fijarse sobre determinadas circunstancias fáctica y tendrá un monto que, una
vez establecido, no resultará modificable, ya que no podrán existir circunstancias sobrevinientes que hagan variar
estas cuestiones analizadas a los fines de evaluar el desequilibrio.
En otras palabras, producido el desequilibrio luego del divorcio, el mismo será evaluado conforme a las cuestiones
particulares que han ocurrido en esa familia y, con base en ello, se fijará el monto y la forma de pago. Estas
circunstancias no pueden ser modificadas una vez evaluadas, ya que se refieren principalmente a hechos anteriores
a la separación, vinculadas al aspecto económico de la familia. Por este motivo el acuerdo mediante el cual se fija la
compensación económica es —repetimos— inmodificable.

Respecto al convenio de bienes, si ambas partes así lo estipulan, se podría modificar o incluir bienes en el acuerdo
suscripto. Pero en el supuesto en que no estén de acuerdo y uno de los esposos pretendiera modificarlo, habrá que
considerar las circunstancias de cada caso en particular, y el juez resolverá en la incidencia respectiva. No hay
obstáculo para que una de las partes pretenda incluir bienes que no han sido incorporados al acuerdo; pero si
pretendiera atacar la validez del convenio regulador suscripto, deberá probar que existió un vicio de la voluntad —
como error, dolo, violencia o lesión— o un vicio del acto jurídico —como simulación o fraude—. En cualquier otro
caso, los acuerdos suscriptos tienen plena validez.
Si el convenio no perjudica de modo manifiesto los intereses de los integrantes del grupo familiar (artículo 438
CCyC), será homologado por el juez.

¿Es eficaz un convenio suscripto por las partes pero que no fue presentado para su homologación? La aprobación
judicial es un requisito de eficacia del convenio, no de su validez, por lo que el pacto entre los esposos, aunque no se
presente ante el juzgado — y, por lo tanto, no sea homologado judicialmente—, tiene la fuerza de obligar a los
firmantes al cumplimiento de lo pactado. En definitiva, se interpreta que, sin perjuicio de que el acuerdo no se haya
homologado —y de que, como consecuencia de ello, no tenga el carácter de convenio regulador en los términos del
artículo que se viene comentando—, tendrá plena validez como negocio jurídico celebrado entre las partes y
resultará eficaz como contrato de carácter consensual y bilateral, aceptado y reconocido por las partes, si concurren
consentimiento, objeto y causa, y se realiza en virtud del principio de la autonomía de la voluntad.

- Compensación económica:
Artículo 441:”el cónyuge a quien el divorcio produce un desequilibrio manifiesto que signifique un empeoramiento
de su situación y que tiene por causa adecuada el vínculo matrimonial y su ruptura, tiene derecho a una
compensación. Esta puede consistir en una prestación única, en una renta por un tiempo determinado o,
excepcionalmente, por plazo indeterminado. Puede pagarse con dinero, con el usufructo de determinados bienes o
de cualquier otro modo que acuerden las partes o decida el juez.”

La compensación económica no se relaciona con la culpa o inocencia en el divorcio.


Tres son las condiciones fácticas que justifican su procedencia:

a. que se produzca un desequilibrio manifiesto de un cónyuge respecto al otro;

b. que tal desequilibrio implique un empeoramiento en la situación del cónyuge que reclama;

c. que tenga por causa adecuada el matrimonio y su ruptura, a través del divorcio.

Esta figura no resulta una consecuencia necesaria del divorcio, sino que procede solo ante la comprobación de tales
presupuestos que pueden derivar de varias y diversas circunstancias, como la colaboración en la actividad lucrativa
del otro, la situación patrimonial, la edad, el estado de salud, la labor de educación y crianza de los hijos menores, las
posibilidades de acceso al mercado de trabajo, la cualificación profesional, entre otras. Sin embargo, nada obsta a
que ambos cónyuges la acuerden al tramitar el divorcio, ya que esta figura jurídica admite la fuente convencional,
consagrando la autonomía de la voluntad de quienes deciden poner fin a su matrimonio y espontáneamente
reconocen la conveniencia de continuar brindando apoyo económico a aquel que se encuentre en peores
condiciones
En los "Fundamentos..." se explica: “El Anteproyecto recepta una figura que tiene aceptación en varias legislaciones
del derecho comparado, y que es coherente con el régimenincausado de divorcio; en efecto, con fundamento en el
principio de solidaridad familiar y en que el matrimonio no sea causa fuente de enriquecimiento o empobrecimiento
económico de un cónyuge a costa del otro, se prevé la posibilidad de que, para aminorar un desequilibrio manifiesto
los cónyuges acuerden o el juez establezca compensaciones económicas.

Estas compensaciones pueden ser abonadas de diferentes modos: prestación dineraria única; renta por un tiempo
determinado o, de manera excepcional, por plazo indeterminado. Por ejemplo, si al momento de contraer nupcias se
optó por llevar adelante una familia en la cual uno solo de los cónyuges era el proveedor económico y el otro
cumplía sus funciones en el seno del hogar y en apoyo a la profesión del otro, no sería justo que al quiebre de esa
elección se deje desamparado a aquél de los cónyuges que invirtió su tiempo en tareas que no se traducen en
réditos económicos; en este caso, se le fijará una compensación económica que puede asumir distintas modalidades
de pago: pensión, cuotas, etc.

Nada impide que los cónyuges convengan su monto y forma de pago, pero, como se trata de un caso de protección
legal con fundamento en la solidaridad familiar, ante la falta de acuerdo el juez puede determinar su procedencia y
fijar su monto si correspondiere. Al tratarse de una herramienta destinada a lograr un equilibrio patrimonial, es
necesario realizar un análisis comparativo de la situación patrimonial de cada uno de los cónyuges al inicio del
matrimonio y al momento de producirse el divorcio, esto es, obtener una ’fotografía’ del estado patrimonial de cada
uno de ellos, y, ante un eventual desequilibrio, proceder a su recomposición”.
Esta “fotografía” del estado patrimonial de cada uno de los cónyuges no se limita a aquellos bienes que integraron
sus patrimonios al inicio y los que lo integran al final, ya que no se trata solo de un análisis cuantitativo. Lo
importante es cómo incidió el matrimonio y el posterior divorcio en la potencialidad de cada uno de los cónyuges
para su desarrollo económico. Por ejemplo, si durante el matrimonio solo uno de los cónyuges fue quien se capacitó
profesionalmente, y el otro fue el encargado de la atención de los hijos y del hogar, posibilitando con esta función el
desarrollo económico del otro, podrá solicitar una compensación económica en su favor, ya que el rol desempeñado
durante el matrimonio y el posterior divorcio implicaron un desequilibrio económico en su perjuicio. Este
desequilibrio pudo haberse mantenido oculto o compensado durante el matrimonio, pero aflora con el divorcio y no
se soluciona con la liquidación de los bienes, independientemente del régimen patrimonial matrimonial que hayan
elegido. La comprobación de las circunstancias fácticas será la base tanto para determinar si procede la
compensación como para establecer el monto.

La compensación económica puede consistir en una prestación única, en una renta por tiempo determinado o,
excepcionalmente, por plazo indeterminado. Se puede abonar con dinero, con el usufructo de determinados bienes,
o de cualquier otro modo que acuerden las partes o decida el juez.
Aplicando los principios de libertad y autonomía, nada impide que los cónyuges acuerden el monto y forma de pago.
Es excepcional la fijación de una renta por tiempo indeterminado, ya que el límite temporal tiende a evitar
situaciones de injusticia.

Artículo 442:”a falta de acuerdo de los cónyuges en el convenio regulador, el juez debe determinar la procedencia y
el monto de la compensación económica sobre la base de diversas circunstancias, entre otras:

1) El estado patrimonial de cada uno de los cónyuges al inicio y a la finalización de la vida matrimonial;
2) La dedicación que cada cónyuge brindó y a la crianza y educación de los hijos durante la convivencia y la que debe
prestar con posterioridad al divorcio;
3) La edad y el estado de salud de los cónyuges y de los hijos;
4) La capacitación laboral y la posibilidad de acceder a un empleo del conyugue que solicita la compensación
económica;
5) La colaboración prestada a las actividades mercantiles, industriales o profesionales del otro cónyuge;
6) La atribución de la vivienda familiar, y si recae sobre un bien ganancial, un bien propio, o un inmueble arrendado.
En este último caso quien abona el canon locativo.

La acción para reclamar la compensación económica caduca a los seis meses de haberse dictado la sentencia de
divorcio.”

La recepción en nuestro derecho de la compensación económica favorece el principio de autonomía de la voluntad,


pues prioriza el acuerdo que pudieran haber realizado los cónyuges en el convenio regulador del divorcio. Ante la
falta de acuerdo y el reclamo en tiempo que realice uno de ellos, corresponderá que el juez la fije.
La norma que comentamos brinda pautas orientadoras para determinar la procedencia y el monto de la misma,
realizando una enumeración de tipo enunciativa, ya que el juez podrá considerar otras, dependiendo de las
particularidades del caso.
Al especificar la norma la expresión “entre otras”, queda claro que las circunstancias enumeradas en los seis incisos
no son las únicas. Lo importante es que se visualice cuáles han sido los roles desarrollados durante la vida
matrimonial, a los fines de determinar —en principio— si procede la fijación de la compensación, y luego, el monto
de la misma.
El artículo establece el plazo de seis meses contados desde el dictado de la sentencia de divorcio para el ejercicio de
la acción destinada a la fijación judicial de la compensación económica.
El plazo corto de caducidad tiene su fundamento en que se procura que los cónyuges resuelvan todas las cuestiones
patrimoniales que se derivan de la ruptura matrimonial de manera simultánea al divorcio. Además, como el objeto
de esta figura es compensar el desequilibrio económico que se produce a causa y como consecuencia del divorcio, es
en ese momento en que debe fijarse, y no sirve a estos fines que transcurra un tiempo prolongado desde que se
dicte sentencia.

Afectación de la vivienda:
Artículo 244: ”puede afectarse al régimen previsto en este Capitulo, un inmueble destinado a vivienda, por su
totalidad o hasta una parte de su valor. Esta protección no excluye la concedida por otras disposiciones legales.”
La afectación se inscribe en el registro de la propiedad inmueble según las formas previstas en las reglas locales, y la
prioridad temporal se rige por las normas contenidas en la ley nacional del registro inmobiliario.
No puede afectarse más de un inmueble. Si alguien resulta ser propietario único de dos o más inmuebles afectados,
debe optar por la subsistencia de uno solo en ese carácter luego del plazo que fije la autoridad de aplicación, bajo
apercibimiento de considerarse afectado el constituido el primer termino. “

Se podrán afectar inmuebles urbanos como rurales; la novedad con respecto a la regulación anterior es que podrá
destinarse la afectación a una vivienda en forma total o parcial.

Articulo 256:”las disposiciones de este Capitulo son aplicables al inmueble rural que no exceda de la unidad
económica, de acuerdo con lo que establecen las reglamentaciones locales.”

Constitución: el acto jurídico de constitución es la inscripción, donde se manifiesta querer constituir ese bien de
familia. Es un acto voluntario de disposición de la parte, titular o titulares, que deben ser capaces; puede ser hecho
por actos entre vivos o por actos de última voluntad. También puede ser decidida por el juez, a petición de parte o
no en la resolución que atribuye la vivienda en el juicio de divorcio o en el que se resuelve las cuestiones relativas a
la conclusión de la convivencia, si hay beneficiarios incapaces o con capacidad restringida.
En cuanto al objeto de la afectación pueden ser inmuebles rurales o urbanos. El bien a afectar debe estar destinado
a vivienda, y si el inmueble es rural, no podra exceder una unidad economica.-
Se extrae de la nueva normativa que puede haber afectaciones parciales. En lo referido a la protección de un bien
mediante este régimen, se puede realizar por una parte del valor del inmueble destinado solo a vivienda.-
La inscripción, tendrá efecto declarativo y retroactivo a la fecha de escritura si se inscribe en los plazos estipulados y
desde la fecha de rogación si se solicita la afectación en el Registro de la Propiedad Inmueble.

Legitimados:
Art. 245.— Legitimados. La afectación puede ser solicitada por el titular registral; si el inmueble está en condominio,
deben solicitarla todos los cotitulares conjuntamente.
La afectación puede disponerse por actos de última voluntad; en este caso, el juez debe ordenar la inscripción a
pedido de cualquiera de los beneficiarios, o del Ministerio Público, o de oficio si hay beneficiarios incapaces o con
capacidad restringida.
La afectación también puede ser decidida por el juez, a petición de parte, en la resolución que atribuye la vivienda en
el juicio de divorcio o en el que resuelve las cuestiones relativas a la conclusión de la convivencia, si hay beneficiarios
incapaces o con capacidad restringida.

La afectación puede realizarse por actos entre vivos, testamento o decisión judicial
El régimen de afectación es optativo para el titular, no se prevé una constitución automática, sino que requiere un
acto expreso de afectación por parte del dueño solicitándola a la autoridad pertinente.-
El art. 245 al no hacer referencia a la familia, ni exigir la acreditación del vinculo, autoriza la afectación a este
régimen de propiedad de la vivienda a favor del titular de dominio sin familia.
Si el inmueble esta en condominio, deben solicitarla todos los cotitulares conjuntamente, desapareciendo por ende,
el recaudo referido al parentesco.-

Beneficiarios:
articulo 246:”son beneficiarios de la afectación:
a) El propietario constituyente, su cónyuge, su conviviente, sus ascendientes o descendientes;
b) En defecto de ellos, sus parientes colaterales dentro del tercer grado que convivan con el constituyente.”

La novedad respecto a la anterior regulación es que ahora puede ser beneficiario el conviviente. No es necesario
tener hijos para afectar el bien. El artículo 246 establece un orden de prelación que es excluyente, es decir, si están
presentes los sujetos mencionados en el primer inc. no podrán ser beneficiarios los sujetos mencionados en el
segundo. Pero nada impide que encontrándose varios de los posibles beneficiarios que establece el primer inc. elija a
uno en vez de a otro, por ejemplo elija como beneficiario a mi nieto y no a mi hijo, porque entre ellos no hay
exclusión. Por ultimo cabe mencionar que para que alguno de los colaterales sea beneficiario deberá convivir con el
titular en el inmueble afectado.

Articulo 247:”si la afectación es peticionada por el titular registral, se requiere que al menos uno de los beneficiarios
habite el inmueble.
En todos los casos, para que los efectos subsistan, basta que uno de ellos permanezca en el inmueble.”

Efectos:
Respecto de los acreedores
Art. 249.— Efecto principal de la afectación. La afectación es inoponible a los acreedores de causa anterior a esa
afectación.
La vivienda afectada no es susceptible de ejecución por deudas posteriores a su inscripción, excepto:
a) obligaciones por expensas comunes y por impuestos, tasas o contribuciones que gravan directamente al
inmueble;
b) obligaciones con garantía real sobre el inmueble, constituida de conformidad a lo previsto en el artículo 250;
c) obligaciones que tienen origen en construcciones u otras mejoras realizadas en la vivienda;
d) obligaciones alimentarias a cargo del titular a favor de sus hijos menores de edad, incapaces, o con capacidad
restringida.

Los acreedores sin derecho a requerir la ejecución no pueden cobrar sus créditos sobre el inmueble afectado, ni
sobre los importes que la sustituyen en concepto de indemnización o precio, aunque sea obtenido en subasta
judicial, sea ésta ordenada en una ejecución individual o colectiva.
Si el inmueble se subasta y queda remanente, éste se entrega al propietario del inmueble.
En el proceso concursal, la ejecución de la vivienda sólo puede ser solicitada por los acreedores enumerados en este
artículo.

El efecto principal sigue siendo el mismo que en el anterior régimen, esto es que la vivienda afectada no es
susceptible de ejecución por deudas posteriores a su inscripción, suprimiéndose la imposibilidad de embargar el
bien.-
Los créditos de causa anterior son aquellos que tienen su origen en un hecho o acto generador de la obligación
acaecido o celebrado con anterioridad a la inscripción. Deudas posteriores son solamente aquellas cuya causa
generadora haya tenido lugar después de la afectación, por ejemplo, las nacidas de un contrato celebrado en fecha
ulterior, de un acto ilícito acontecido mas adelantes, de documentos suscriptos al cabo de cierto tiempo.-
Como efecto principal puede decirse que la afectación de la vivienda no es oponible a los acreedores de causa
anterior a esa afectación; si es oponible a los acreedores por deudas posteriores a esa afectación, pero el articulo
establece cuales son las excepciones es decir, lo casos en los cuales se podrá proceder a la desafectación del bien, y
liquidarlo para cobrar sus acreencias. Solo los sujetos mencionados en el artículo están legitimados para esto y
aquellos que tengan una deuda anterior a la afectación. Si el inmueble se subasta y queda remanente este se
entrega al propietario del inmueble.

Respecto del constituyente

Art. 250.— Transmisión de la vivienda afectada. El inmueble afectado no puede ser objeto de
legados o mejoras testamentarias, excepto que favorezcan a los beneficiarios de la afectación prevista en este
Capítulo. Si el constituyente está casado o vive en unión convivencial inscripta, el inmueble no puede ser transmitido
ni gravado sin la conformidad del cónyuge o del conviviente; si éste se opone, falta, es incapaz o tiene capacidad
restringida, la transmisión o gravamen deben ser autorizados judicialmente.

Se señalan dos efectos centrales respecto del poder de disposición del constituyente:
a) No puede ser objeto de legados o mejoras, con la excepción que ello favorezca a los beneficiarios de la afectación
b) La transmisión o gravamen del bien solo puede hacerse con la conformidad del conyuge o conviviente, o mediante
autorización judicial

La finalidad de la norma es asegurar que el inmueble afectado ampare al cuadro de beneficiarios


La limitación dispositiva se refiere exclusivamente al bien sometido a la afectación, pues respecto de los frutos, son
embargables y ejecutables los que produce el inmueble si no son indispensables para satisfacer las necesidades de
los beneficiarios.-
Existen sin embargo, dos diferencias con el régimen derogado. La ley aclara que la autorización es judicial y además
se suprime el hecho de que la misma se permitiera solamente cuando mediare causa grave o manifiesta utilidad para
la familia.
Es decir que si quiero disponer del bien a los fines de mejorar a uno de mis hijos, solo puedo hacerlo si este esta
como beneficiario del bien. En el caso de querer transmitir o gravar el bien afectado se necesitaría el asentimiento
del otro cónyuge o conviviente y si este se opone o falta se requerirá una resolución judicial. Pero los actos de
administración no necesitan la aceptación de la otra parte.

Articulo 251:”son embargables y ejecutables los frutos que produce el inmueble si no son indispensables para
satisfacer las necesidades de los beneficiarios.”

Desafectacion. Cancelacion. Quiebra.

La eficacia de la afectación es indeterminada temporalmente. Sus efectos perduraran en el tiempo mientras no se


produzca alguna de las causales previstas en la ley para dar lugar al cese de la protección.
La desafectación es el acto por el cual se deja sin efecto la constitución de la afectación, extinguiéndose las
consecuencias legales del instituto, produciendo efectos erga onces.

ARTICULO 255.-Desafectación y cancelación de la inscripción. La desafectación y la cancelación de la inscripción


proceden:
a) a solicitud del constituyente; si está casado o vive en unión convivencial inscripta se requiere el asentimiento del
cónyuge o del conviviente; si éste se opone, falta, es incapaz o tiene capacidad restringida, la desafectación debe ser
autorizada judicialmente;
b) a solicitud de la mayoría de los herederos, si la constitución se dispuso por acto de última voluntad, excepto que
medie disconformidad del cónyuge supérstite, del conviviente inscripto, o existan beneficiarios incapaces o con
capacidad restringida, caso en el cual el juez debe resolver lo que sea más conveniente para el interés de éstos;
c) a requerimiento de la mayoría de los condóminos computada en proporción a sus respectivas partes indivisas, con
los mismos límites expresados en el inciso anterior; (Para la afectación se requiere que lo hagan todos los cotitulares
conjuntamente, ahora bien, para la desafectación, solo se exige la mayoría. Habiendo empate debe decidir el juez lo
que sea mas conveniente a solicitud de cualquiera de ellos.-)
d) a instancia de cualquier interesado o de oficio, si no subsisten los recaudos previstos en este Capítulo, o fallecen el
constituyente y todos los beneficiarios; (En todos estos casos, para obtener la desafectación se requiere un juicio
autónomo con posibilidades de alegar y probar la falta de subsistencia de los presupuestos fácticos que le dieron
lugar a la constitución y con todas las garantías de defensa para el constituyente.)
e) en caso de expropiación, reivindicación o ejecución autorizada por este Capítulo, con los límites indicados en el
artículo 249. (En estos casos opera la extinción del dominio, por lo que no confiere facultades al propietario o a los
beneficiarios para oponerse

En el caso que la desafectación sea requerida por los condóminos estos deben ser la mayoría y no la totalidad como
en el caso de la afectación. Y si se diera la expropiación, reivindicación o ejecución tiene como límites las deudas
anteriores o posteriores según lo establece el artículo 249.
Articulo 249:”(...) Los acreedores sin derecho a requerir la ejecución no pueden cobrar sus créditos sobre el
inmueble afectado, ni sobre los importes que la sustituyen en concepto de indemnización o precio, aunque sea
obtenido en subasta judicial, sea esta ordenada en una ejecución individual o colectiva.
Si el inmueble se subasta y queda remanente, este se entrega al propietario del inmueble. En el proceso concursal, la
ejecución de la vivienda solo puede ser solicitada por los acreedores enumerados en este articulo.”

Articulo 248:”la afectación se transmite a la vivienda adquirida en sustitución de la afectada y a los importes que la
constituyen en concepto de indemnización o precio”
Es decir que en caso de quiebra si quedara remanente este pasara a manos del titular de la vivienda para que pueda
adquirir una nueva y afectarla a la protección ya que la afectación se tramite, se da en este caso una subrogación
real.

Quiebra:
El articulo 107 de la ley de concursos y quiebras, establece que “el fallido es desapoderado de pleno derecho de los
bienes que poseyere al momento de la declaración de quiebra y de los adquiridos hasta su rehabilitación”
Constituye el principal efecto patrimonial de la quiebra. Como regla general puede sostenerse que todos los bienes
son objetos de desapoderamiento, salvo las excepciones contenidas en el art 108.-

ARTICULO 108 (ley de concursos y quiebras).- Bienes excluidos. Quedan excluidos de lo dispuesto en el artículo
anterior:
1) los derechos no patrimoniales;
2) los bienes inembargables;
3) el usufructo de los bienes de los hijos menores del fallido, pero los frutos que le correspondan caen en
desapoderamiento una vez atendida las cargas;
4) la administración de los bienes propios del cónyuge;
5) la facultad de actuar en justicia en defensa de bienes y bienes y derechos que no caen en el desapoderamiento, y
en cuanto por esta ley se admite su intervención particular;
6) las indemnizaciones que correspondan al fallido por daños materiales o morales a su persona;
7) los demás bienes excluidos por otras leyes.

Atribución de la vivienda:
Artículo 443:”uno de los cónyuges puede pedir la atribución de la vivienda familiar, sea inmueble propio de
cualquiera de los cónyuges o ganancial. El juez determina la procedencia, el plazo de duración y efectos del derecho
sobre la base de las siguientes pautas, entre otras

1) La persona a quien se atribuye el cuidado de los hijos;


2) La persona que está en situación económica más desventajosa para proveerse de una vivienda por sus propios
medios;
3) El estado de salud y la edad de los cónyuges;
4) Los intereses de otras personas que integran el grupo familiar.”

Se trata de un efecto del divorcio, por lo cual es independiente del régimen patrimonial matrimonial que hayan
elegido los cónyuges. Se aplicará tanto en el caso de separación de bienes como de comunidad de ganancias.
Mediante esta norma se establece la posibilidad que uno de los cónyuges pida que se le atribuya la vivienda familiar.
Puede tratarse del inmueble propio de cualquiera de los esposos o un bien ganancial. A falta de acuerdo, será el juez
quien determine en qué casos procede, el plazo de duración y los efectos, tomando en cuenta las pautas
establecidas en la norma, que priorizan a quien se encuentre con mayores necesidades habitacionales. La existencia
de hijos incide, pero no es la única pauta que el juez deberá tomar en cuenta.

La atribución de la vivienda supone conceder a uno solo de los cónyuges el derecho de usar del inmueble en el cual
se desarrolló la vida familiar durante el matrimonio. A los efectos de decidir cuál de ellos se encuentra en mejores
condiciones para la atribución, la norma establece que el juez deberá tomar en cuenta pautas objetivas, relacionadas
con la situación de vulnerabilidad o mayor necesidad, dejando de lado toda consideración respecto de la culpa en el
divorcio o el género de los esposos, conforme el principio de igualdad.
Como se trata de un derecho de uso —que no alterará la propiedad del inmueble, aunque configura una clara
restricción al dominio—, la norma incluye tanto un bien propio como ganancial.
Este derecho de uso se refiere al inmueble que revista la calidad de “vivienda familiar”. No se trata de cualquier
inmueble, sino el que ha sido sede de la vida de la familia, aunque, en algún caso particular, pueda resolverse
excepcionalmente la atribución en otro inmueble que no haya sido usado como sede del matrimonio. Lo relevante
es procurar resolver la situación habitacional de la parte más débil, con base en la solidaridad familiar.
La atribución de la vivienda puede realizarse por acuerdo de cónyuges o, a falta del mismo, puede ser impuesta por
el juez.

Convencional: Con base en la autonomía de la voluntad, y conforme lo establece el artículo 439 CCyC, los cónyuges
podrán acordar, en el convenio regulador, a cuál de ellos se le atribuirá el uso de la vivienda familiar. En principio,
serán los propios cónyuges quienes se encuentran en mejores condiciones para acordar el uso de la vivienda, ya que
conocen la realidad íntima de su familia. En consecuencia, y salvo que el interés familiar se encuentre seriamente
comprometido, el juez deberá homologar el acuerdo que realicen en ese sentido.
El convenio podrá incluir el plazo de duración, los efectos de la atribución, el pago de una renta a favor del cónyuge a
quien no se le atribuye el inmueble y cualquier otra cuestión relacionada al uso de la vivienda.
Si se modificaran las circunstancias tenidas en cuenta al realizar el convenio, de común acuerdo, podrán también
modificarse las pautas referidas a la atribución. Aun a falta de acuerdo, el juez podrá modificarlo —por ejemplo,
frente a un cambio en la guarda de los hijos que haga necesario que quien ahora vive con los menores tenga el
derecho de uso de la vivienda familiar—.

Judicial: Si los cónyuges no acuerdan, cualquiera podrá pedir que se le atribuya el hogar conyugal. A tal fin el juez
deberá evaluar las pautas establecidas en la norma para determinar la procedencia, plazo y efectos.
Se trata de un derecho temporal porque implica una restricción al dominio del cónyuge, a quien no se atribuyó el
uso. La justificación es la solidaridad que debe existir entre los miembros de la familia, pero este derecho no es
vitalicio, sino que el juez deberá evaluar las circunstancias de cada caso para determinar el plazo de duración. El
artículo realiza una enumeración ejemplificativa de las pautas que deberá tener en cuenta al juez, a las que se podrá
sumar otras dependiendo de las particularidades de la familia.

Artículo 444:” a petición de parte interesada, el juez puede establecer: una renta compensatoria por el uso del
inmueble a favor del cónyuge a quien no se atribuye la vivienda; que el inmueble no sea enajenado sin el acuerdo
expreso de ambos; que el inmueble ganancial o propio en condominio de los cónyuges no sea partido ni liquidado.
La decisión produce efectos frente a terceros a partir de su inscripción registral. Si se trata de un inmueble alquilado,
el cónyuge no locatario tiene derecho a continuar en la locación hasta el vencimiento del contrato, manteniéndose
el obligado al pago y las garantías que primitivamente se constituyeron en el contrato.”

La atribución del uso y disfrute de la vivienda familiar, como efecto derivado del divorcio, puede serlo sobre un bien
propio o ganancial de alguno de los cónyuges o, incluso, sobre un inmueble que tengan en condominio (articulo 443
CCyC). Quede aclarado que lo que se atribuye, ya sea a través del convenio regulador o por resolución judicial a falta
de acuerdo de las partes, es el uso de la vivienda y no su titularidad.
La norma establece cuáles son los efectos que produce la atribución del uso de la vivienda, con fin de hacer efectiva
la protección de la vivienda familiar, pero teniendo en cuenta que implica una limitación a las facultades dispositivas
del cónyuge propietario. Varias son las opciones que se le otorgan al juez a pedido de parte interesada. Podrá
establecer una renta compensatoria por el uso. También podrá ordenar que el inmueble no sea enajenado sin el
acuerdo expreso de las partes, o que el inmueble ganancial o propio en condominio de los cónyuges, no sea partido
ni liquidado.
Tratándose de un inmueble alquilado, se podrá disponer que el cónyuge no locatario pueda continuar en la locación
hasta el vencimiento del contrato, manteniéndose el obligado al pago así como a las garantías. La determinación de
cuál es la alternativa que mejor protege al grupo familiar —y, especialmente, a los miembros más vulnerables—
dependerá de las circunstancias fácticas. Para que la atribución tenga efectos erga omnes, debe ser inscripta en el
correspondiente registro de la propiedad.

A los fines de garantizar la protección efectiva del cónyuge más vulnerable en cuanto a su derecho de uso de la
vivienda familiar, y de compensar la restricción al dominio del cónyuge al que no se le atribuyó la vivienda, el juez
podrá:

a. Establecer una renta que quien tiene el uso del inmueble deberá abonar al otro cónyuge. Para la fijación del
monto, se deberá tener en cuenta si se trata de un bien propio del cónyuge que percibirá la renta o de un bien
ganancial. Asimismo, si en el inmueble habitan hijos con derecho alimentario, deberá tenerse presente esta
circunstancia, ya que la vivienda integra la prestación alimentaria que corresponde a los progenitores.
b. A pedido de parte, disponer que el inmueble no sea enajenado sin el acuerdo expreso de ambos.
c. Establecer que el inmueble —ganancial o propio en condominio— no sea partido ni liquidado.
d. Toda vez que la protección de la vivienda alquilada está incluida en la nueva regulación, tanto resolver que el
cónyuge no locatario continúe en la locación hasta el vencimiento del contrato como dictaminar que se mantenga
obligado al pago y también a las garantías que se constituyeron en el contrato.

Artículo 445:” el derecho de atribución del uso de la vivienda familiar cesa:


1) Por cumplimiento del plazo fijado por el juez;
2) Por cambio de las circunstancias que se tuvieron en cuenta para su fijación; 3) Por las mismas causas de
indignidad previstas en materia sucesoria.”

-Cese por cumplimiento del plazo fijado por el juez: Si al momento de dictar la sentencia en la que se otorga la
atribución de la vivienda, el juez ha fijado un plazo, el vencimiento del mismo provocará el cese automático de la
atribución. Sin perjuicio de ello, y en el caso de que se mantengan las circunstancias tenidas en cuenta por el
juzgador para la atribución, o de que éstas hayan empeorado, podrá el beneficiario solicitar la ampliación del plazo
por motivos fundados, y el juez concederlo.

-Cese por cambio de las circunstancias que se tuvieron en cuenta para su fijación: Como este derecho está
íntimamente ligado a las circunstancias fácticas de cada caso, si estas se modifican, se podrá resolver el cese de la
atribución. Por ejemplo, podría darse el caso de que, quien tenga atribuida la vivienda, adquiera un inmueble o se
mude de domicilio. El objeto es evitar que se configure una situación de abuso de derecho. Debe tratarse de una
modificación relevante que justifique el pretendido cese de la atribución, el que quedará librado a la apreciación
judicial.

-Cese por las mismas causas de indignidad previstas en materia sucesoria: Se realiza una remisión a las causas de
indignidad previstas en el articulo 2281 CCyC. Se establece que son indignos de suceder:

a. los autores, cómplices o partícipes de delito doloso contra la persona, el honor, la integridad sexual, la libertad o la
propiedad del causante, o de sus descendientes, ascendientes, cónyuge, conviviente o hermanos. Esta causa de
indignidad no se cubre por la extinción de la acción penal ni por la de la pena;
b. los que hayan maltratado gravemente al causante, u ofendido gravemente su memoria;
c. los que hayan acusado o denunciado al causante por un delito penado con prisión o reclusión, excepto que la
víctima del delito sea el acusador, su cónyuge o conviviente, su descendiente, ascendiente o hermano, o haya
obrado en cumplimiento de un deber legal;
d. los que omiten la denuncia de la muerte dolosa del causante, dentro de un mes de ocurrida, excepto que antes de
ese término la justicia proceda en razón de otra denuncia o de oficio. Esta causa de indignidad no alcanza a las
personas incapaces ni con capacidad restringida, ni a los descendientes, ascendientes, cónyuge y hermanos del
homicida o de su cómplice;
e. los parientes o el cónyuge que no hayan suministrado al causante los alimentos debidos, o no lo hayan recogido
en establecimiento adecuado si no podía valerse por sí mismo;
f. el padre extramatrimonial que no haya reconocido voluntariamente al causante durante su menor edad;
g. el padre o la madre del causante que haya sido privado de la responsabilidad parental;
h. los que hayan inducido o coartado la voluntad del causante para que otorgue testamento o deje de hacerlo, o lo
modifique, así como los que falsifiquen, alteren, sustraigan, oculten o sustituyan el testamento;
i. los que hayan incurrido en las demás causales de ingratitud que permiten revocar las donaciones.

Se trata de actos muy graves cometidos en contra del cónyuge —que es titular del inmueble y debe soportar la
atribución—, que imponen la cesación del beneficio. De lo contrario, nos encontraríamos frente a una situación
abusiva por parte de quien usa la vivienda.

5) Nulidades matrimoniales:

El matrimonio esta sujeto a condiciones de validez. La validez del matrimonio presupone que el acto jurídico
no presenta vicios o defectos de legalidad originarios, existentes al tiempo de la celebración, pues si así
fuese, el derecho impide la configuración de una relación matrimonial idónea a través de su anulabilidad. La
nulidad del acto jurídico matrimonial se traduce en su ineficacia, o sea en la privación de sus efectos propios. Las
condiciones de validez del acto matrimonial, suponen su existencia estructural, pero, además, que el acto no
esta afectado en los presupuestos que la ley determina para que produzca, en plenitud, sus efectos. Respecto
del acto jurídico matrimonial, los presupuestos o condiciones de validez se refieren, a la inexistencia de
impedimentos dirimentes entre los contrayentes o de vicios de consentimiento.
El Código Civil argentino (1869) estableció una teoría normativa general del acto jurídico y dentro de ella
legislo también con carácter general sobre su nulidad. De este modo Vélez entendió estructurar un régimen de
ineficacias aplicable a todo acto jurídico, dentro de la cual el matrimonio tendría lógicamente cabida. El
articulo 228 dispuso que “las disposiciones de este Código sobre la nulidad de los actos jurídicos, son extensivas a
los matrimonios celebrados sin autorización de la Iglesia Católica”.
Es importante puntualizar, sin embargo, que la aplicación supletoria de las normas del Código sobre nulidad de los
actos jurídicos se previó solo para los matrimonios celebrados sin autorización de la Iglesia Católica. Para
aquellos que hubiesen sido celebrados ante ella, o con su autorización, regían exclusivamente las normas del
derecho canónico y el juzgamiento de la nulidad quedaba sustraído de la jurisdicción civil.
La ley de matrimonio civil 2393 (1888) derogo el articulo 228 y estableció un régimen especial de nulidades para el
matrimonio. La ley de divorcio vincular 23515 (1987) establece que ningún matrimonio será tenido por nulo sin
sentencia que lo anule, dictada en un proceso promovido por la parte legitimada para hacerlo, es decir solo hay
matrimonios anulables y únicamente por la parte legitimada para hacerlo, no de oficio (articulo 239).
El nuevo Código Civil y Comercial establece de la misma manera el régimen especial de nulidades matrimoniales en
el articulo 715: “ningún matrimonio puede ser tenido por nulo sin sentencia que lo anule, dictada en proceso
promovido por parte legitimada para hacerlo”.

Nulidad de los actos jurídicos en general Nulidad del acto jurídico matrimonial
Se puede pedir de oficio; el articulo 387 establece:”la Solo puede pedirlo la parte legitimadamediante
nulidad absoluta puede declararse por el juez, proceso promovido por esta en el que se dicte
aun sin mediar petición de parte, si es manifiesta sentencia (articulo 715).
en el momento de dictar sentencia”.
Puede pedirse por vía de acción u oponerse como Puede pedirse solo por vía de acción.
excepción (articulo 383).
Legitimación: puede ser alegada por el Ministerio Legitimación: los legitimados en cada caso podrán
Público y por cualquier interesado (articulo 387). invocarla.
No puede ser alegada por quien invoca su propia Si puede invocarla, en algunos casos, quien invoca
torpeza para logar un provecho (articulo 387). su propia torpeza (ejemplo: ligamen previo).
Es renunciable y prescriptible si el acto se ve Son irrenunciables e imprescriptibles (articulo
afectado por una causa de nulidad relativa (no si 712). (sea por nulidad relativa o absoluta)
se ve afectado por una causa de nulidad absoluta).
6) Nulidad absoluta y relativa. Causales. Extinción de la acción de nulidad:

Nulidad absoluta: Articulo 426: ”es de nulidad absoluta el matrimonio celebrado con alguno de los
impedimentos establecidos en los incs. a), b), c), d) y e) del articulo 403. Las causas de nulidad absoluta entonces
serian el parentesco (en línea recta en todos los grados, cualquiera sea el origen del vinculo; entre hermanos
bilaterales y unilaterales, cualquiera sea el origen del vinculo; y la afinidad en línea recta en todos los grados), el
matrimonio anterior mientras subsista y haber sido condenado como autor, cómplice o instigador del homicidio
doloso de uno de los cónyuges.”
Deducida la acción se deberá acreditar el impedimento que provoca la nulidad absoluta del matrimonio. Si la
acción de nulidad se funda en cualquiera de los impedimentos derivados del parentesco, el actor deberá
acredítalo mediante las correspondientes partidas, sus testimonios, certificados o libreta de familia expedidos por
el Registro del Estado Civil y Capacidad de las Personas. En el caso de que el impedimento sea el parentesco
por afinidad, este se debe probar con el acta de matrimonio (disuelto) que muestre que uno de los cónyuges estuvo
casado con un ascendiente o descendiente del otro. El matrimonio anterior se acreditará con el acta de su
celebración, copia o certificado, o con la libreta de familia o mediante prueba supletoria, en su caso, si se
acreditare la imposibilidad de acompañar tales instrumentos. Además es menester acreditar la subsistencia
del primer matrimonio al día en que el demandado contrajo el segundo, probando que no existen en el
Registro Civil constancias de la disolución o anulación del matrimonio anterior. El impedimento de crimen se
prueba con la sentencia ejecutoriada que condenó al cónyuge como autor, cómplice o instigador del homicidio
del primer cónyuge del otro contrayente. La concurrencia de estos impedimentos dirimentes en la celebración
del matrimonio, impiden el reconocimiento de aquellos que pudiesen haberse celebrado, incluso válidamente,
en el extranjeros, ya que en estos casos la nulidad no solo atañe al interés preponderante de los contrayentes,
sino, además al orden publico nacional o internacional.
Los legitimados para pedir la nulidad son los contrayentes y los que podían oponerse a la celebración del matrimonio
(articulo 411).

Nulidad relativa: las causas mencionadas precedentemente son supuestos de nulidad relativa del matrimonio
en razón de que la ley considera prevaleciente el interés de los contrayentes y, en estos casos, la nulidad relativa
puede ser confirmada.
Las causas son:
- La falta de edad nupcial, o sea, tener menos de 18 años (articulo 403 inc. f) cuando el matrimonio es celebrado,
claro esta, sin la dispensa. Los legitimados para demandar la nulidad son el cónyuge que padece el impedimento y
los que en su representación podrían haberse opuesto a la celebración del matrimonio (padres o Ministerio
Publico). En este ultimo caso, el juez debe oír al adolecente, y teniendo en cuenta su edad y grado de madurez
hace lugar o no al pedido de nulidad. De todas maneras el matrimonio puede ser confirmado por ser esta una causa
de nulidad relativa. Si se rechaza la demanda de nulidad el matrimonio tiene los mismos efectos que si
hubiera sido celebrado con la correspondiente dispensa. La petición es inadmisible una vez que los cónyuges
hubiesen cumplido la mayoría de edad, en ese caso será valido es decir, se lo considerara celebrado con la debida
dispensa o autorización (articulo 425 inc. a).
- La falta permanente o transitoria de la salud mental que le impide tener discernimiento para el acto
matrimonial (articulo 403 inc. g). La nulidad puede ser demandada por cualquiera de los cónyuges si
desconocían el impedimento (a diferencia de la nulidad absoluta que puede ser demanda por cualquiera de los
cónyuges aun si conocían el impedimento); pero en este caso, la nulidad no podrá ser solicitada si el cónyuge que
padece el impedimento ha continuado la cohabitación después de haber recuperado la salud; y tampoco podrá ser
solicitada por el cónyuge sano que luego de haber conocido el impedimento no interrumpe la cohabitación. En estos
casos habrá confirmación tacita de ese matrimonio. El plazo de caducidad para pedir la nulidad del matrimonio
es para ambos casos de 1 año y empieza a correr: en el primer caso, una vez que el cónyuge que padece el
impedimento recupera la salud; y en el segundo una vez que el cónyuge sano toma conocimiento de ese
impedimento. La nulidad también puede ser demanda por los parientes de la persona que padece el impedimento
y que podrían haberse opuesto a la celebración del matrimonio (articulo 411); para ellos el plazo para interponer
la demanda es de tres meses desde la celebración del matrimonio. En este caso, el juez debe oír a los cónyuges,
y evaluar la situación del afectado a los fines de verificar si comprende el acto que ha celebrado y cual es su deseo al
respecto. Si el juez rechaza la demanda, el matrimonio se considera valido y celebrado con la debida
dispensa (articulo 425 inc. b).
- El matrimonio celebrado con alguno de los vicios del consentimiento (artículo 409). La nulidad solo puede ser
demanda por el cónyuge que ha sufrido el vicio de error, dolo o violencia. La nulidad no puede ser solicitada si se ha
continuado la cohabitación por mas de treinta días después de haber conocido el error o de haber cesado la
violencia. El plazo para interponer la demanda es de un año desde que cesa la cohabitación (articulo 425 inc. c).
Articulo 714: ”la acción de nulidad del matrimonio no puede ser intentada después de la muerte de uno de los
cónyuges excepto que: 1 )Sea deducida por un cónyuge contra el siguiente matrimonio contraído por su cónyuge; si
se opusiera la nulidad del matrimonio del cónyuge demandante, se debe resolver previamente esta oposición; 2)Sea
deducida por el cónyuge supérstite de quien contrajo matrimonio mediando impedimento de ligamen y se haya
celebrado ignorando la subsistencia del vinculo anterior; 3)Sea necesaria para determinar el derecho del
demandante y la nulidad absoluta sea invocada por descendiente o ascendientes.
La acción de nulidad del matrimonio deducida por el Ministerio Publico solo puede ser promovida en vida de ambos
esposos.
8) Efectos de la nulidad del matrimonio. Buena o mala fe de los cónyuges:
La sentencia de nulidad del matrimonio es declarativa y proyecta sus efectos, con carácter retroactivo, al día
de la celebración del acto. Pero esta retroactividad admite excepciones en relación a los efectos que ese
matrimonio pudiera haber surtido entre los cónyuges, como en relación a terceros;
El artículo 426 dice: ”la nulidad del matrimonio y la buena o mala fe de los cónyuges no perjudica los derechos
adquiridos por terceros que de buena fe hayan contratado con los cónyuges.”
La privación retroactiva de los efectos del matrimonio anulado sufre varias excepciones. En primer lugar, no se
alteran los efectos que el matrimonio habría producido con respecto a terceros de buena fe. Quedan así
protegidos los derechos de quienes hubiesen contratado con los contrayentes creyéndolos válidamente casados,
cuando la eficacia de esos derechos dependiese de la existencia del matrimonio. Ya que la buena o mala fe de los
cónyuges tiene que ver con los efectos entre estos, pero no con terceros, de esta manera se los protege
estableciendo que estos, sin importar si son de buena o mala fe, van a responder de manera solidaria frente a las
deudas contraídas con terceros; es decir que la sentencia de nulidad del matrimonio es inoponible frente a terceros.

Matrimonio putativo: es aquel matrimonio celebrado con algún impedimento o vicio que acarrea la nulidad
pero que ambos o al menos uno de los cónyuges lo hicieron de buena fe, es decir, creyendo que el vínculo era válido.
En tales supuestos, la doctrina del matrimonio putativo constituye una excepción al principio general en cuanto
a los efectos de la nulidad. Esta no se proyecta hacia el pasado, sino solo hacia el futuro, sin perjuicio del efecto
declarativo general de la sentencia.
Artículo 427: ”la buena fe consiste en la ignorancia o error de hecho excusables y contemporáneos a la
celebración del matrimonio sobre el impedimento o la circunstancia que causa la nulidad, o en haberlo
contraído bajo la violencia del otro contrayente o de un tercero.”

Efectos de la buena fe de ambos cónyuges:


Artículo 428:”si el matrimonio anulado ha sido contraído de buena fe por ambos cónyuges produce todos los
efectos del matrimonio válido hasta el día en que se declare su nulidad. La sentencia firme disuelve el régimen
matrimonial convencional o legal supletorio. Si la nulidad produce un desequilibrio económico de uno de ellos
en relación con la posición del otro, se aplican los artículos 441 y 442; el plazo se computa a partir de la sentencia
que declara la nulidad”.
En ese caso la sentencia de nulidad: 1) Pone fin al deber alimentario; 2) Habilita a acudir al sistema de prestación
compensatoria; 3) Solo excepcionalmente, y con autorización judicial, pueden continuar usando el apellido del otro
cónyuge (artículo 67); 4) Subsiste la emancipación que deriva de la celebración del matrimonio de una persona
menor de 18 años (artículo 27); 5) Cesa la vocación hereditaria (artículo 2347); 6) Se disuelve el régimen
convencional o legal supletorio (artículo 477); 7) Opera la presunción de filiación (artículo 566); 8) La nulidad no
afecta el vínculo con los hijos.
Efectos de la buena fe de uno de los cónyuges: artículo 429: ”si solo uno de los cónyuges es de buena fe,
el matrimonio produce todos los efectos del matrimonio valido, pero solo respecto al cónyuge de buena fe
y hasta el día de la sentencia que declare la nulidad.
La nulidad otorga al cónyuge de buena fe derecho a:
1) Solicitar compensaciones económicas, en la extensión mencionada en los artículos 441 y 442; el plazo se
computa a partir de la sentencia que declara la nulidad;
2) Revocar las donaciones realizadas al cónyuge de mala fe;
3) Demandar por indemnización de daños y perjuicios al cónyuge de mala fe y a los terceros que hayan provocado
el error, incurrido en dolo, o ejercido violencia.
Si los cónyuges hubieran estado sometidos al régimen de comunidad, el de buena fe puede optar:
1) Por considerar que el matrimonio ha estado regido por el régimen de separación de bienes;
2) Por liquidar los bienes mediante la aplicación de las normas del régimen de la comunidad;
3) Por exigir la demostración de los aportes de cada cónyuge a efectos de dividir los bienes en proporción a ellos
como si se tratase de una sociedad no constituida regularmente.”

Efectos de la mala fe de ambos cónyuges: artículo 430: ”el matrimonio anulado contraído de mala fe por
ambos cónyuges no produce efecto alguno. Las convenciones matrimoniales quedan sin efecto, sin perjuicio de
los derechos de terceros. Los bienes adquiridos hasta la nulidad se distribuyen, si se acreditan los aportes, como si
fuese una sociedad no constituida regularmente.”

ARTÍCULO 443.- Atribución del uso de la vivienda. Pautas. Uno de los cónyuges puede pedir la atribución de la
vivienda familiar, sea el inmueble propio de cualquiera de los cónyuges o ganancial. El juez determina la
procedencia, el plazo de duración y efectos del derecho sobre la base de las siguientes pautas, entre otras:
a. la persona a quien se atribuye el cuidado de los hijos;
b. la persona que está en situación económica más desventajosa para proveerse de una vivienda por sus propios
medios;
c. el estado de salud y edad de los cónyuges;
d. los intereses de otras personas que integran el grupo familiar.

La atribución de la vivienda supone conceder a uno solo de los cónyuges el derecho de usar del inmueble en el cual
se desarrolló la vida familiar durante el matrimonio. No se trata de cualquier inmueble, sino el que ha sido sede de la
vida de la familia, aunque, en algún caso particular, pueda resolverse excepcionalmente la atribución en otro
inmueble que no haya sido usado como sede del matrimonio. Lo relevante es procurar resolver la situación
habitacional de la parte más débil, con base en la solidaridad familiar.

Modalidades: La atribución de la vivienda puede realizarse por acuerdo de cónyuges o, a falta del mismo, puede ser
impuesta por el juez.
El convenio podrá incluir el plazo de duración, los efectos de la atribución, el pago de una renta a favor del cónyuge a
quien no se le atribuye el inmueble y cualquier otra cuestión relacionada al uso de la vivienda.
Si los cónyuges no acuerdan, cualquiera podrá pedir que se le atribuya el hogar conyugal. A tal fin el juez deberá
evaluar las pautas establecidas en la norma para determinar la procedencia, plazo y efectos. Se trata de un derecho
temporal porque implica una restricción al dominio del cónyuge, a quien no se atribuyó el uso.

ARTÍCULO 444.- Efectos de la atribución del uso de la vivienda familiar. A petición de parte interesada, el juez
puede establecer: una renta compensatoria por el uso del inmueble a favor del cónyuge a quien no se atribuye la
vivienda; que el inmueble no sea enajenado sin el acuerdo expreso de ambos; que el inmueble ganancial o propio en
condominio de los cónyuges no sea partido ni liquidado. La decisión produce efectos frente a terceros a partir de su
inscripción registral.
Si se trata de un inmueble alquilado, el cónyuge no locatario tiene derecho a continuar en la locación hasta el
vencimiento del contrato, manteniéndose el obligado al pago y las garantías que primitivamente se constituyeron en
el contrato.

ARTÍCULO 445.- Cese. El derecho de atribución del uso de la vivienda familiar cesa:
a. por cumplimiento del plazo fijado por el juez;
b. por cambio de las circunstancias que se tuvieron en cuenta para su fijación;
c. por las mismas causas de indignidad previstas en materia sucesoria.

La atribución del uso de la vivienda establecida judicialmente no puede mantenerse en forma indefinida, ya que se
configuraría un abuso de derecho. Si al momento de dictar la sentencia en la que se otorga la atribución de la
vivienda, el juez ha fijado un plazo, el vencimiento del mismo provocará el cese automático de la atribución.
BOLILLA 8: DERECHO PATRIMONIAL MATRIMONIAL

1) REGIMENES MATRIMONIALES (…)

Uno de los aspectos destacados del Código Civil y Comercial de la Nación —C.C.C.N. es haber abandonado el
régimen imperativo y forzoso y cambiarlo por uno convencional donde los esposos pueden optar.

A lo largo del Título II, del Libro Segundo del CCyC, denominado Relaciones de familia, se estructuran las normas
relativas al Régimen patrimonial del matrimonio. Dividido en tres Capítulos, el Título II establece disposiciones
generales a la regulación sistémica del régimen de comunidad y al régimen de separación de bienes.

Distintos regímenes patrimoniales del matrimonio. Autonomía de la voluntad: opción.

A) régimen de comunidad: se caracteriza por la formación de una masa común partible sobre la cual van a participar
ambos cónyuges o uno de ellos y los herederos del otro al disolverse la sociedad conyugal. Los bienes que integran
esta comunidad, el porcentaje a dividir a su finalización, asi como la administración de la misma obligan a una
clasificación de las distintas variantes que puede asumir:

Régimen de la comunidad universal: este tipo de comunidad se forma con todos los bienes de los cónyuges, tanto los
adquiridos antes como despues del matrimonio, sea a titulo gratuito u oneroso. Tiene a su vez una subdivisión: la
comunidad de muebles y ganancias (comprende todos los bienes muebles sin importar que se han adquirido antes o
despues del matrimonio, mas los bienes gananciales); y por otro lado solo las ganancias (se forma sol con lo ganado
por cada uno de los esposos luego de la celebración de las nupcias).

Regimen de comunidad y gestión de los bienes: también se ha clasificado el régimen de comunidad según quien lo
administre. Se distingue entre la gestión separada (reconoce como dueño a aquel de los esposos que adquiera los
bienes, y tendrá su administración); la conjunta (tanto la administración como la propiedad estarán en cabeza de
ambos y las decisiones se toman de común acuerdo); y la indistinta (si bien la calidad de dueño es en común,
cualquiera de los dos podrá hacer gestiones).

B) Separacion de ganancias: no se toma una masa común partible. En líneas generales, la mecánica es similar a la
que tenían los conyuges antes de casarse, es decir, cada uno adquiere para si, administra, dispone y responde por
sus deudas. Al disolverse la unión cada uno se lleva lo suyo.

Participación en las ganancias: en esta modalidad, se tiene en cuenta el patrimonio con que cada uno de los esposos
entra al matrimonio y con el que sale de el. la diferencia entre uno y otro es la ganancia que se ha obtenido durante
la vigencia de la unión. La desigualdad que se obtenga entre lo ganado por cada uno de los esposos es lo que se debe
compensar al cónyuge cuya ganancia haya sido menor, hasta quedar equilibrados.

Autonomía de la voluntad: opción.

Se puede optar por uno entre varios regímenes matrimoniales y existe la posibilidad de cambiarlo luego de la
celebración de las nupcias, cumpliendo ciertos requisitos.
La elección del régimen que regulara las relaciones patrimoniales entre los esposos puede hacerse en forma libre o
eligiendo entre alguno de los sistemas previstos.
En el caso de que no hagan uso de su derecho a elegir, se regirá por el régimen legal que es el que se aplica a la falta
de convención.

2) CARACTERES DEL REGIMEN MATRIMONIAL POR LA LEY ARGENTINA (…)

Características del régimen El Código Civil y Comercial abandona el régimen imperativo al permitir que los cónyuges
opten por uno de los dos regímenes regulados. En rigor de verdad, tal como ha sido previsto, la opción se reduce al
régimen de separación de bienes (artículo 446), ya que a falta de ella se aplica supletoriamente el régimen de
comunidad, es de suponer que quienes no elijan la separación de bienes no expresen nada y como consecuencia se
les aplique el supletorio a falta de opción (artículo 463).
Los cónyuges pueden cambiar de régimen cuantas veces quieran, siempre y cuando haya pasado un año desde la
última modificación (artículo 449).
Se establece además un conjunto de normas que resultan aplicables a ambos regímenes. En ellas se regula sobre la
protección del hogar conyugal y su ajuar, el deber de contribución en las cargas del matrimonio y la responsabilidad
solidaria frente a los acreedores de cualquiera de los cónyuges por deudas contraídas para sostener los gastos
ordinarios del hogar, el sostenimiento y educación de los hijos.

3) Convenciones matrimoniales (…)

ARTÍCULO 446.- Objeto. Antes de la celebración del matrimonio los futuros cónyuges pueden hacer convenciones
que tengan únicamente los objetos siguientes:
a. la designación y avalúo de los bienes que cada uno lleva al matrimonio;
b. la enunciación de las deudas;
c. las donaciones que se hagan entre ellos;
d. la opción que hagan por alguno de los regímenes patrimoniales previstos en este Código.

Convenciones matrimoniales: es el conjunto de normas jurídicas que se encarga de regular las relaciones
económicas de los esposos entre si y entre estos y terceros. Contrato que celebran los cónyuges o los futuros
contrayentes, con el fin de regular cuestiones inherentes a sus relaciones económicas

No son un instituto nuevo: el CC las admitía, aunque con un objeto muy reducido: las donaciones que se
efectuaran los futuros esposos y el inventario de los bienes que cada uno llevara al consorcio matrimonial. El
CCyC mantiene, como objeto de las convenciones matrimoniales, la posibilidad de designar los bienes que cada uno
de los cónyuges aporta al matrimonio, incluyendo la posibilidad de consignar también su avalúo. Tal individualización
recaerá sobre bienes no registrables. El objeto de la convención, en este caso, no es otro que pre constituir prueba
sobre la propiedad personal respecto de aquellos. Se conserva también, como lo previera el régimen
derogado, la posibilidad de que los futuros esposos se efectúen donaciones condicionadas a la celebración del
matrimonio válido. Se introduce como objeto de las convenciones la posibilidad de que los futuros consortes
enuncien las deudas que cada uno lleva al matrimonio para, con ello, evitar que aquellas puedan ser reputadas como
obligaciones que pesan sobre ambos consortes.

ARTÍCULO 447.- Nulidad de otros acuerdos. Toda convención entre los futuros cónyuges sobre cualquier otro
objeto relativo a su patrimonio es de ningún valor.

El CCyC amplía el objeto de las convenciones matrimoniales, pero mantiene, al igual que el CC, la prohibición de todo
pacto o acuerdo en materia patrimonial. Antes de la celebración del matrimonio podrá convenirse lo explícitamente
puntuado en el Art. 446. No podrán acordarse cuestiones relativas al modo de partir los bienes que integran la
comunidad, ni asignar bienes de uso preferente y/o establecer régimen de responsabilidad diverso al
regulado, compensaciones económicas, etc.

Con posterioridad a celebradas las nupcias, las convenciones entre los esposos solo podrán tener por objeto la
modificación del régimen. Fuera de este contorno legalmente establecido, los cónyuges no pueden realizar
ninguna disposición relativa a los bienes. Si lo hicieren, la ley establece que ellas serán de ningún valor.

ARTÍCULO 448.- Forma. Las convenciones matrimoniales deben ser hechas por escritura pública antes de la
celebración del matrimonio, y sólo producen efectos a partir de esa celebración y en tanto el matrimonio no
sea anulado. Pueden ser modificadas antes del matrimonio, mediante un acto otorgado también por escritura
pública. Para que la opción del artículo 446 inciso d), produzca efectos respecto de terceros, debe anotarse
marginalmente en el acta de matrimonio.
La convención matrimonial surte efectos a partir del matrimonio y siempre que este no sea anulado. Hasta la
celebración del matrimonio, y por aplicación del principio de libertad, los pretensos contrayentes pueden
modificar cuantas veces quieran dichas convenciones, siempre que respeten la formalidad que establece la norma:
la escritura pública. La opción de régimen efectuada mediante convención matrimonial producirá efectos respecto
de terceros una vez anotada marginalmente en el acta de matrimonio. Son los cónyuges quienes tendrán la carga de
su registración. Si no lo hicieren, frente a terceros, estarán sujetos al régimen legal supletorio: de comunidad.

ARTÍCULO 449.- Modificación de régimen. Después de la celebración del matrimonio, el régimen patrimonial
puede modificarse por convención de los cónyuges. Esta convención puede ser otorgada después de un año de
aplicación del régimen patrimonial, convencional o legal, mediante escritura pública. Para que el cambio de
régimen produzca efectos respecto de terceros, debe anotarse marginalmente en el acta de matrimonio. Los
acreedores anteriores al cambio de régimen que sufran perjuicios por tal motivo pueden hacerlo declarar
inoponible a ellos en el término de un año a contar desde que lo conocieron.

El cambio más trascendental que el CCyC consagra en este ámbito es la opción que los cónyuges pueden realizar
por el régimen de separación de bienes, suscribiendo convención matrimonial. No ejercida tal opción, los
esposos quedan sometidos al sistema de comunidad, siendo este el régimen legal de aplicación supletoria. La
elección del régimen patrimonial efectuada antes de la celebración del matrimonio, o con posterioridad a aquella, es
susceptible de ser modificada sujetándose a una serie de formalidades necesarias para dotar de eficacia al cambio
sin desatender los derechos de terceros. En primer lugar, debe tratarse de una decisión conjunta, asumida por
ambos cónyuges mayores de edad. Luego, se establece un recaudo temporal: que haya transcurrido un año en
el que se haya mantenido un régimen.

Este plazo debe computarse desde formalizada la escritura, no desde su inscripción marginal.

El tercer requisito alude a la inscripción en el acta matrimonial para que el cambio surta efectos ante terceros.

ARTÍCULO 450.- Personas menores de edad. Las personas menores de edad autorizadas judicialmente para
casarse no pueden hacer donaciones en la convención matrimonial ni ejercer la opción prevista en el
artículo 446 inciso d).

Las personas menores de edad, pese a haber alcanzado la emancipación por la celebración del matrimonio,
se encuentran inhabilitadas para hacer donaciones por convención matrimonial y para optar por el régimen de
separación de bienes.

Donaciones en razón del matrimonio. Deber de contribución. Asentimiento.

ARTÍCULO 451.- Normas aplicables. Las donaciones hechas en las convenciones matrimoniales se rigen por las
disposiciones relativas al contrato de donación. Sólo tienen efecto si el matrimonio se celebra.

Se establecen dos requisitos para su validez: que se instrumenten mediante convención matrimonial (y, como
consecuencia de ello, mediante escritura pública) y que se celebre matrimonio válido, y se determina que, a tales
actos, serán aplicables las reglas propias del contrato de donación. Las donaciones efectuadas mediante convención
matrimonial solo tendrán efecto si aquel se celebra, por tratarse de una donación sujeta a condición resolutoria;
caso contrario, podrá solicitarse la restitución de los bienes o erogaciones realizadas

ARTÍCULO 452.- Condición implícita. Las donaciones hechas por terceros a uno de los novios, o a ambos, o por uno
de los novios al otro, en consideración al matrimonio futuro, llevan implícita la condición de que se celebre
matrimonio válido.

El CCyC establece para el caso de las donaciones efectuadas en razón del matrimonio una condición resolutoria: su
celebración válida, sin distinguir quién fuere el donante, de modo que si el matrimonio no se celebra, las donaciones
deben ser restituidas. En cambio, si el matrimonio se celebra pero luego se declara su nulidad, variarán las
soluciones dependiendo de la buena o mala fe de los cónyuges. Si ambos cónyuges son de buena fe, el matrimonio
producirá todos los efectos de un matrimonio válido hasta el día en que se declare su nulidad, de modo que las
donaciones no deberán ser restituidas. En el caso de que ambos cónyuges fueren de mala fe, el matrimonio no
produce efecto alguno, como consecuencia de ello las donaciones quedan sin efecto, y sus objetos deben restituirse.
Si solo uno de los consortes tuvo buena fe, podrá revocar las donaciones realizadas al cónyuge de mala fe,
consolidándose las donaciones efectuadas por terceros al cónyuge de buena fe.

ARTÍCULO 453.- Oferta de donación. La oferta de donación hecha por terceros a uno de los novios, o a ambos queda
sin efecto si el matrimonio no se contrae en el plazo de un año. Se presume aceptada desde que el matrimonio se
celebra, si antes no ha sido revocada.

el CCyC incorpora un término legal para el sostenimiento de la oferta: que el matrimonio no se efectivice dentro del
año de realizada aquella. Vencido tal plazo sin que las nupcias se hubiesen celebrado, la promesa queda revocada
automáticamente. Asimismo, el CCyC incorpora, expresamente, la posibilidad de revocar la oferta de la donación.

Deber de contribución. Asentimiento.


ARTÍCULO 455.- Deber de contribución. Los cónyuges deben contribuir a su propio sostenimiento, el del hogar y el
de los hijos comunes, en proporción a sus recursos. Esta obligación se extiende a las necesidades de los hijos
menores de edad, con capacidad restringida, o con discapacidad de uno de los cónyuges que conviven con ellos. El
cónyuge que no da cumplimiento a esta obligación puede ser demandado judicialmente por el otro para que lo haga,
debiéndose considerar que el trabajo en el hogar es computable como contribución a las cargas.

La primera obligación de orden patrimonial impuesta a los integrantes de cualquier matrimonio celebrado en la
República, se materializa a través de la realización de un conjunto de contribuciones: los aportes necesarios para
alcanzar el propio sostenimiento, el del hogar y de la descendencia común. El recorte a la soberanía económica de
los cónyuges encuentra justificación en la solidaridad familiar, en cuanto principio se extiende a los hijos no
comunes, como un deber jurídicamente exigible, que comprende la obligación de contribuir a los gastos que insume
el sostenimiento de los hijos menores de edad, con capacidad restringida o incapaces de uno u otro miembro de la
pareja que componen el grupo familiar conviviente.

De tal modo, se confiere respaldo jurídico a quienes, sin tener vínculo biológico, han construido relaciones socio
afectivas. Los gastos necesarios para el impulso del núcleo familiar comprenden víveres, vestido, gastos de salud, de
vivienda y de servicios, etc. La medida del aporte se exige “en función de los recursos” de cada cónyuge.

El CCyC reconoce expresamente que el trabajo doméstico, en el hogar, es computable como contribución. Se le
reconoce legitimación a cualquiera de los cónyuges para requerir del reticente el cumplimiento del deber. El
cónyuge que no da cumplimiento a esta obligación puede ser demandado judicialmente por el otro para que lo haga
debiéndose considerar que el trabajo en el hogar es computable como contribución a las cargas.

ARTÍCULO 456.- Actos que requieren asentimiento. Ninguno de los cónyuges puede, sin el asentimiento del otro,
disponer de los derechos sobre la vivienda familiar, ni de los muebles indispensables de ésta, ni transportarlos fuera
de ella. El que no ha dado su asentimiento puede demandar la nulidad del acto o la restitución de los muebles
dentro del plazo de caducidad de seis meses de haberlo conocido, pero no más allá de seis meses de la extinción del
régimen matrimonial. La vivienda familiar no puede ser ejecutada por deudas contraídas después de la celebración
del matrimonio, excepto que lo hayan sido por ambos cónyuges conjuntamente o por uno de ellos con el
asentimiento del otro.

La protección jurídica de la vivienda comprende el derecho “a la vivienda”, que es un derecho fundamental de la


persona, nacido de la vital necesidad de poder disfrutar de un espacio habitable suficiente para desarrollar su
personalidad, y el derecho “sobre la vivienda”, que es el ámbito donde se materializa el primero. El CCyC consagra la
protección de la vivienda familiar dentro del denominado “régimen primario”, aplicable a cualquier régimen
patrimonial del matrimonio. La inejecutabilidad de la vivienda por deudas contraídas con posterioridad al
matrimonio admite dos excepciones, de carácter restrictivo: las deudas asumidas conjuntamente por ambos
cónyuges, o por uno de ellos contando con el asentimiento del otro. El CCyC considera necesario el asentimiento
para los actos que impliquen “la disposición de derechos”, término comprensivo de todos los derechos reales y
personales: venta, permuta, donación, constitución de derechos reales de garantía o actos que impliquen
desmembramiento del dominio, y la locación. Incluye la protección legal a ciertos bienes considerados
absolutamente necesarios para lograr la realización personal de la familia exigiendo también el asentimiento para
trasladarlos de la morada familiar. La ausencia del asentimiento requerido trae aparejada la nulidad relativa del
negocio concluido sin aquel —vicio que podrá ser saneado por la confirmación del acto o por convalidación judicial
(autorizando la disposición del derecho). La nulidad podrá ser demandada por el cónyuge no disponente dentro del
plazo de seis meses de haber tomado conocimiento del acto cuestionado, pero nunca más allá de los seis meses de
concluido el régimen matrimonial.

ARTÍCULO 457.- Requisitos del asentimiento. En todos los casos en que se requiere el asentimiento del cónyuge
para el otorgamiento de un acto jurídico, aquél debe versar sobre el acto en sí y sus elementos constitutivos.

El cónyuge que da su asentimiento solo brinda su conformidad para la realización del acto, por tanto no puede ser
demandado por su inejecución, ni debe responder por las garantías que del acto se desprenden. El CCyC requiere
que el asentimiento verse sobre el acto jurídico en particular y sus elementos constitutivos (precio, plazo y/o forma
de pago, garantías, etc.), por lo que el cónyuge asintiente deberá ser informado sobre las particularidades del
negocio que se pretende concluir.

ARTÍCULO 458.- Autorización judicial. Uno de los cónyuges puede ser autorizado judicialmente a otorgar un acto
que requiera el asentimiento del otro, si éste está ausente, es persona incapaz, está transitoriamente impedido de
expresar su voluntad, o si su negativa no está justificada por el interés de la familia. El acto otorgado con
autorización judicial es oponible al cónyuge sin cuyo asentimiento se lo otorgó, pero de él no deriva ninguna
obligación personal a su cargo.

ARTÍCULO 459.- Mandato entre cónyuges. Uno de los cónyuges puede dar poder al otro para representarlo en el
ejercicio de las facultades que el régimen matrimonial le atribuye, pero no para darse a sí mismo el asentimiento en
los casos en que se aplica el artículo 456. La facultad de revocar el poder no puede ser objeto de limitaciones.
Excepto convención en contrario, el apoderado no está obligado a rendir cuentas de los frutos y rentas percibidos.

La norma reconoce a los cónyuges(sin distinguir el régimen matrimonial que los rige) la gestión de uno en nombre
del otro con las facultades fijadas según el régimen al que estén sometidos. Reconocido este derecho, establece dos
prohibiciones de toda lógica. En primer término, queda expresamente vedado que el objeto del mandato refiera al
asentimiento requerido para disponer los derechos sobre la vivienda familiar y/o sobre los enseres que la
componen. De otra parte, tampoco pueden acordar la irrevocabilidad del poder.

ARTÍCULO 460.- Ausencia o impedimento. Si uno de los cónyuges está ausente o impedido transitoriamente de
expresar su voluntad, el otro puede ser judicialmente autorizado para representarlo, sea de modo general o para
ciertos actos en particular, en el ejercicio de las facultades resultantes del régimen matrimonial, en la extensión
fijada por el juez. A falta de mandato expreso o de autorización judicial, a los actos otorgados por uno en
representación del otro se les aplican las normas del mandato tácito o de la gestión de negocios, según sea el caso.

5) Regimen primario

Disposiciones comunes a todos los regímenes:

ARTÍCULO 454.- Aplicación. Inderogabilidad. Las disposiciones de esta Sección se aplican, cualquiera sea el régimen
matrimonial, y excepto que se disponga otra cosa en las normas referentes a un régimen específico. Son
inderogables por convención de los cónyuges, anterior o posterior al matrimonio, excepto disposición expresa en
contrario. Se plasma el principio de solidaridad familiar a través del establecimiento de un conjunto de normas
obligatorias, indisponibles para los cónyuges y aplicables con independencia del régimen que regula las relaciones
económicas de los consortes, sea que estén sometidos al régimen de comunidad o al régimen de separación de
bienes.
El CCyC establece un límite claro a través de las disposiciones contenidas en esta Sección, también denominado
”régimen primario”, expresado a través de un catálogo de derechos y prohibiciones que representan un núcleo duro
indisponible para los cónyuges, y que están dirigidos a la protección y plena realización de los derechos humanos de
los integrantes del grupo familiar e, incluso, de terceros ajenos a él. Tales normas son aplicables a cualquiera de los
regímenes reconocidos por el derecho argentino.

Proteccion de la vivienda: (ya visto)

Responsabilidad por deudas: se establece la separacion de las deudas como regla (ARTICULO 505.-Gestión de los
bienes. En el régimen de separación de bienes, cada uno de los cónyuges conserva la libre administración y
disposición de sus bienes personales, excepto lo dispuesto en el artículo 456.Cada uno de ellos responde por las
deudas por él contraídas, excepto lo dispuesto en el artículo 461.)
y excepcionalmente la responsabilidad resulta solidaria: ARTICULO 461.-Responsabilidad solidaria. Los cónyuges
responden solidariamente por las obligaciones contraídas por uno de ellos para solventar las necesidades ordinarias
del hogar o el sostenimiento y la educación de los hijos de conformidad con lo dispuesto en el artículo 455.
Fuera de esos casos, y excepto disposición en contrario del régimen matrimonial, ninguno de los cónyuges responde
por las obligaciones del otro.
El sistema de la solidaridad previsto por la ley rige en las relaciones con los acreedores, ientras que el deber de
contribucion resulta aplicable a la relacion de los esposos entre si.

ARTICULO 456.-Actos que requieren asentimiento. Ninguno de los cónyuges puede, sin el asentimiento del otro,
disponer de los derechos sobre la vivienda familiar, ni de los muebles indispensables de ésta, ni transportarlos fuera
de ella. El que no ha dado su asentimiento puede demandar la nulidad del acto o la restitución de los muebles
dentro del plazo de caducidad de seis meses de haberlo conocido, pero no más allá de seis meses de la extinción del
régimen matrimonial.

La vivienda familiar no puede ser ejecutada por deudas contraídas después de la celebración del matrimonio,
excepto que lo hayan sido por ambos cónyuges conjuntamente o por uno de ellos con el asentimiento del otro.

La vivenda familiar solo podra ser ejecutada por los acreedores de los esposos, en el caso en que la deuda posterior
a la celebracion del matrimonio hubiera sido contraida por los dos o por uno de ellos con el asentimiento del otro.
ademas, podra resultar ejecutable, en el caso en que ambos, siendo solteros, hubieran contraido deudas en forma
conjunta antes del matrimonio.

P 4 y 6) Régimen de comunidad. Carácter supletorio. Calificación: bienes propios y gananciales. Contratos entre
cónyuges: problema. Contratos permitidos, prohibidos y casos dudosos.

ARTÍCULO 463.- Carácter supletorio. A falta de opción hecha en la convención matrimonial, los cónyuges
quedan sometidos desde la celebración del matrimonio al régimen de comunidad de ganancias reglamentado
en este Capítulo. No puede estipularse que la comunidad comience antes o después, excepto el caso de cambio de
régimen matrimonial previsto en el artículo 449.

Una de las grandes modificaciones que introduce el CCyC en materia de régimen de bienes en el matrimonio
consiste en la posibilidad de elegir u optar por otro régimen jurídico: separación de bienes. De este modo, se
deroga el régimen legal único y forzoso. El CCyC reconoce a los esposos autonomía de la voluntad,
estableciendo un sistema convencional no pleno que los habilita a seleccionar antes del matrimonio, y aun
después, el régimen de bienes al que sujetarán sus relaciones patrimoniales (comunidad o separación). Se establece
un marco normativo que operará como régimen supletorio, a falta de opción, que, con mayor precisión, se
denomina régimen de comunidad, y mantiene el sistema clásico de la ganancialidad establecido en el CC. Se trata
de un régimen de comunidad restringido a las ganancias, ya que, al igual que el ordenamiento anterior, excluye
todos los bienes de los esposos anteriores al matrimonio y los que adquieran después de la celebración por un título
que les confiera el carácter de propio (art. 464 CCyC). La masa común se integra con todos los bienes que
adquieran los cónyuges a título oneroso después de la celebración del matrimonio. Lo esencial de este régimen es la
formación de una masa común integrada por los bienes gananciales destinada a ser dividida entre los cónyuges,
o entre uno de ellos y los herederos del otro, al momento de la disolución de la comunidad.
Tanto la comunidad cuanto el régimen de separación de bienes cuentan con disposiciones comunes,
indisponibles para los cónyuges, relativas al deber de contribución para el sostenimiento del hogar y de los
hijos; a la responsabilidad solidaria por las deudas para cubrir tales gastos; y a la necesidad de contar con
asentimiento del cónyuge no titular para disponer de la vivienda familiar.

ARTÍCULO 464.- Bienes propios. Son bienes propios de cada uno de los cónyuges:

a. los bienes de los cuales los cónyuges tienen la propiedad, otro derecho real o la posesión al tiempo de la
iniciación de la comunidad;
b. los adquiridos durante la comunidad por herencia, legado o donación, aunque sea conjuntamente por
ambos, y excepto la recompensa debida a la comunidad por los cargos soportados por ésta. Los recibidos
conjuntamente por herencia, legado o donación se reputan propios por mitades, excepto que el testador o
el donante hayan designado partes determinadas. No son propios los bienes recibidos por donaciones
remuneratorias, excepto que los servicios que dieron lugar a ellas hubieran sido prestados antes de la
iniciación de la comunidad. En caso de que el valor de lo donado exceda de una equitativa remuneración de los
servicios recibidos, la comunidad debe recompensa al donatario por el exceso;
c. los adquiridos por permuta con otro bien propio, mediante la inversión de dinero propio, o la reinversión
del producto de la venta de bienes propios, sin perjuicio de la recompensa debida a la comunidad si hay un saldo
soportado por ésta. Sin embargo, si el saldo es superior al valor del aporte propio, el nuevo bien es ganancial, sin
perjuicio de la recompensa debida al cónyuge propietario;
d. los créditos o indemnizaciones que subrogan en el patrimonio de uno de los cónyuges a otro bien propio;
e. los productos de los bienes propios, con excepción de los de las canteras y minas;
f. las crías de los ganados propios que reemplazan en el plantel a los animales que faltan por cualquier causa. Sin
embargo, si se ha mejorado la calidad del ganado originario, las crías son gananciales y la comunidad debe al
cónyuge propietario recompensa por el valor del ganado propio aportado;
g. los adquiridos durante la comunidad, aunque sea a título oneroso, si el derecho de incorporarlos al patrimonio ya
existía al tiempo de su iniciación;
h. los adquiridos en virtud de un acto anterior a la comunidad viciado de nulidad relativa, confirmado
durante ella;
i. los originariamente propios que vuelven al patrimonio del cónyuge por nulidad, resolución, rescisión o
revocación de un acto jurídico;
j. los incorporados por accesión a las cosas propias, sin perjuicio de la recompensa debida a la comunidad por
el valor de las mejoras o adquisiciones hechas con dinero de ella;
k. las partes indivisas adquiridas por cualquier título por el cónyuge que ya era propietario de una parte
indivisa de un bien al comenzar la comunidad, o que la adquirió durante ésta en calidad de propia, así como los
valores nuevos y otros acrecimientos de los valores mobiliarios propios, sin perjuicio de la recompensa debida a la
comunidad en caso de haberse invertido bienes de ésta para la adquisición;
l. la plena propiedad de bienes cuya nuda propiedad se adquirió antes del comienzo de la comunidad, si el
usufructo se extingue durante ella, así como la de los bienes gravados con otros derechos reales que se
extinguen durante la comunidad, sin perjuicio del derecho a recompensa si para extinguir el usufructo o los otros
derechos reales se emplean bienes gananciales;
m. las ropas y los objetos de uso personal de uno de los cónyuges, sin perjuicio de la recompensa debida a la
comunidad si son de gran valor y se adquirieron con bienes de ésta; y los necesarios para el ejercicio de su
trabajo o profesión, sin perjuicio de la recompensa debida a la comunidad si fueron adquiridos con bienes
gananciales;
n. las indemnizaciones por consecuencias no patrimoniales y por daño físico causado a la persona del cónyuge,
excepto la del lucro cesante correspondiente a ingresos que habrían sido gananciales;
ñ. el derecho a jubilación o pensión, y el derecho a alimentos, sin perjuicio del carácter ganancial de las cuotas
devengadas durante la comunidad y, en general, todos los derechos inherentes a la persona;
o. la propiedad intelectual, artística o industrial, si la obra intelectual ha sido publicada o interpretada por primera
vez, la obra artística ha sido concluida, o el invento, la marca o el diseño industrial han sido patentados o
registrados antes del comienzo de la comunidad. El derecho moral sobre la obra intelectual es siempre personal
del autor.
El CCyC concentra, en solo dos normas, los supuestos de bienes que habrán de reputarse como propios de
cada cónyuge y como gananciales. El diseño del régimen de calificación de bienes propios y gananciales se
estructura sobre la base de diversas reglas:

- Principio de inmutabilidad de masas: refiere a la imposibilidad de modificar la calificación de los bienes. Esta
regla goza del carácter de orden público, razón por la cual está vedado a los cónyuges modificar los aspectos que de
ella emanan. Asimismo, se integra con dos principios del derecho civil: el de subrogación, expresado a través de una
construcción jurídica que permite trasladar las características de la cosa subrogada a la subrogante; y el de
accesoriedad, regla que se enuncia a través de la máxima ”lo accidental tiene el carácter de la sustancia”.
- La presunción de ganancialidad: salvo prueba en contrario, todo bien que no pueda calificarse como propio
pertenece a la comunidad.
- Naturaleza de la adquisición: los bienes obtenidos a título gratuito son propios, mientras que las
adquisiciones onerosas son gananciales.

- Criterio temporal. Determina que los bienes adquiridos antes del principio de la comunidad son propios; y
que los adquiridos con posterioridad, gananciales.
-Teoría del derecho (causa o título) anterior. Cuando la adquisición de un bien, vigente la comunidad, reconoce un
derecho anterior a ella, se reputará propia. Idéntico criterio será aplicable en materia de ganancialidad: esto es,
aquel bien ingresado extinguida la comunidad, pero que reconozca causa o título anterior a tal momento, será
ganancial.
- Calificación única.
- Teoría de las recompensas: supone el reconocimiento de un crédito a favor de uno de los cónyuges o de la
comunidad, con el propósito de restablecer la composición de las masas patrimoniales propias de cada uno evitando
que el haber propio de cada cónyuge aumente a expensas del común, o disminuya en beneficio de la masa
ganancial.

ARTÍCULO 465.- Bienes gananciales. Son bienes gananciales:

a. los creados, adquiridos por título oneroso o comenzados a poseer durante la comunidad por uno u otro de
los cónyuges, o por ambos en conjunto, siempre que no estén incluidos en la enunciación del artículo 464;
b. los adquiridos durante la comunidad por hechos de azar, como lotería, juego, apuestas, o hallazgo de
tesoro;
c. los frutos naturales, industriales o civiles de los bienes propios y gananciales, devengados durante la
comunidad;
d. los frutos civiles de la profesión, trabajo, comercio o industria de uno u otro cónyuge, devengados durante la
comunidad;
e. lo devengado durante la comunidad como consecuencia del derecho de usufructo de carácter propio;
f. los bienes adquiridos después de la extinción de la comunidad por permuta con otro bien ganancial, mediante la
inversión de dinero ganancial, o la reinversión del producto de la venta de bienes gananciales, sin perjuicio de la
recompensa debida al cónyuge si hay un saldo soportado por su patrimonio propio. Sin embargo, si el saldo es
superior al valor del aporte ganancial, el nuevo bien es propio, sin perjuicio de la recompensa debida a la
comunidad;
g. los créditos o indemnizaciones que subrogan a otro bien ganancial;
h. los productos de los bienes gananciales, y los de las canteras y minas propias, extraídos durante la
comunidad;
i. las crías de los ganados gananciales que reemplazan en el plantel a los animales que faltan por cualquier causa y
las crías de los ganados propios que excedan el plantel original;
j. los adquiridos después de la extinción de la comunidad, si el derecho de incorporarlos al patrimonio había sido
adquirido a título oneroso durante ella;
k. los adquiridos por título oneroso durante la comunidad en virtud de un acto viciado de nulidad relativa,
confirmado después de la disolución de aquélla;
l. los originariamente gananciales que vuelven al patrimonio ganancial del cónyuge por nulidad, resolución, rescisión
o revocación de un acto jurídico;
m. los incorporados por accesión a las cosas gananciales, sin perjuicio de la recompensa debida al cónyuge por el
valor de las mejoras o adquisiciones hechas con sus bienes propios;
n. las partes indivisas adquiridas por cualquier título por el cónyuge que ya era propietario de una parte
indivisa de carácter ganancial de un bien al extinguirse la comunidad, sin perjuicio de la recompensa debida
al cónyuge en caso de haberse invertido bienes propios de éste para la adquisición;
ñ. la plena propiedad de bienes cuya nuda propiedad se adquirió a título oneroso durante la comunidad, si el
usufructo se consolida después de su extinción, así como la de los bienes gravados con derechos reales que se
extinguen después de aquélla, sin perjuicio del derecho a recompensa si para extinguir el usufructo o los otros
derechos reales se emplean bienes propios.
No son gananciales las indemnizaciones percibidas por la muerte del otro cónyuge, incluso las provenientes
de un contrato de seguro, sin perjuicio, en este caso, de la recompensa debida a la comunidad por las primas
pagadas con dinero de ésta. Los bienes gananciales son aquellos que conforman la masa común de los cónyuges, y
respecto de los cuales cada esposo tiene un derecho potencial sobre los adquiridos por el otro, que se materializará
al extinguirse la comunidad.

ARTÍCULO 466.- Prueba del carácter propio o ganancial. Se presume, excepto prueba en contrario, que son
gananciales todos los bienes existentes al momento de la extinción de la comunidad. Respecto de terceros, no es
suficiente prueba del carácter propio la confesión de los cónyuges. Para que sea oponible a terceros el carácter
propio de los bienes registrables adquiridos durante la comunidad por inversión o reinversión de bienes propios, es
necesario que en el acto de adquisición se haga constar esa circunstancia, determinándose su origen, con la
conformidad del otro cónyuge. En caso de no podérsela obtener, o de negarla éste, el adquirente puede requerir
una declaración judicial del carácter propio del bien, de la que se debe tomar nota marginal en el
instrumento del cual resulta el título de adquisición. El adquirente también puede pedir esa declaración judicial en
caso de haberse omitido la constancia en el acto de adquisición. Entre cónyuges, la carga de la prueba pesará
respecto de aquel que pretenda excluir la ganancialidad demandado la propiedad exclusiva del bien.

En relación a los terceros (acreedores y/o herederos forzosos de uno de los esposos), tratándose de bienes propios
aportados por los esposos a la comunidad , los obtenidos durante aquella por un derecho nacido con anterioridad a
la misma, de los obtenidos por accesión o en virtud del principio de accesoriedad , y la de los obtenidos
durante la comunidad por título gratuito, queda claro que para probar tal carácter bastará con acreditar la
fecha de adquisición documentada en los respectivos instrumentos de operación.

La oponibilidad a terceros del carácter propio de un bien adquirido por subrogación requerirá: a. que en el
acto de adquisición conste que el bien se adquiere por permuta o reinversión de fondos propios; b. la manifestación
del origen propio de los fondos utilizados, especificando la causa que determina tal propiedad c. la conformidad del
cónyuge del adquirente, lo que supone el reconocimiento de este de la sinceridad de la calificación propia del bien.

Gestión de los bienes de la comunidad. Asentimiento. Fraude.

ARTÍCULO 469.- Bienes propios. Cada uno de los cónyuges tiene la libre administración y disposición de sus
bienes propios, excepto lo dispuesto en el artículo 456.

No obstante ello, y por imperio de la protección constitucional del derecho humano a la vivienda se impone una
única restricción a la gestión de los bienes propios: la contenida en el art. 456 CCyC relativa al asentimiento del
esposo no titular del bien para disponer de los derechos sobre la vivienda familiar, cualquiera fuere su carácter
—propia o ganancial— y a los muebles indispensables de esta, restricción extensiva al traslado de estos enseres
fuera de aquella.

ARTÍCULO 470.- Bienes gananciales. La administración y disposición de los bienes gananciales corresponde al
cónyuge que los ha adquirido. Sin embargo, es necesario el asentimiento del otro para enajenar o gravar: a. los
bienes registrables; b. las acciones nominativas no endosables y las no cartulares, con excepción de las
autorizadas para la oferta pública, sin perjuicio de la aplicación del artículo 1824. c. las participaciones en
sociedades no exceptuadas en el inciso anterior; d. los establecimientos comerciales, industriales o agropecuarios.
También requieren asentimiento las promesas de los actos comprendidos en los incisos anteriores. Como lo
sostiene la doctrina en forma unánime, el asentimiento no compromete el sistema de administración separada,
en tanto opera como condición jurídica de validez del acto, sin que quepa referir a un supuesto de co-disposición.

ARTÍCULO 471.- Bienes adquiridos conjuntamente. La administración y disposición de los bienes adquiridos
conjuntamente por los cónyuges corresponde en conjunto a ambos, cualquiera que sea la importancia de la
parte correspondiente a cada uno. En caso de disenso entre ellos, el que toma la iniciativa del acto puede requerir
que se lo autorice judicialmente en los términos del artículo 458.

A las partes indivisas de dichos bienes se aplican los dos artículos anteriores. A las cosas se aplican las normas
del condominio en todo lo no previsto en este artículo. Si alguno de los cónyuges solicita la división de un
condominio, el juez de la causa puede negarla si afecta el interés familiar.

Con la incorporación de esta norma se completa la regulación de los tres supuestos de gestión de bienes que pueden
darse en el régimen de comunidad: propios, gananciales y adquiridos en condominio. Respecto de los últimos, el
CCyC no distingue el carácter de las porciones indivisas de cada consorte (propias o gananciales); y admite la
aplicación de las reglas del condominio, pero con importantes limitaciones para los cónyuges: a. supresión de la
decisión por mayoría en la administración; b. posibilidad de autorización judicial en caso de disenso sobre la
administración o la disposición; y c. limitación de la facultad de requerir la división de los condominios.

ARTÍCULO 472.- Ausencia de prueba. Se reputa que pertenecen a los dos cónyuges por mitades indivisas los bienes
respecto de los cuales ninguno de ellos puede justificar la propiedad exclusiva.

ARTÍCULO 473.- Fraude. Son inoponibles al otro cónyuge los actos otorgados por uno de ellos dentro de los
límites de sus facultades pero con el propósito de defraudarlo. En cuanto al momento en que puede deducirse
la acción de fraude, entendemos que aquella podrá interponerse tanto durante la vigencia del régimen de
comunidad como luego de su disolución, durante la etapa de indivisión postcomunitaria.

ARTÍCULO 474.- Administración sin mandato expreso. Si uno de los cónyuges administra los bienes del otro sin
mandato expreso, se aplican las normas del mandato o de la gestión de negocios, según sea el caso.

7) Extinción de la comunidad: concepto y causales.


ARTÍCULO 475.- Causas. La comunidad se extingue por:
a. la muerte comprobada o presunta de uno de los cónyuges;
b. la anulación del matrimonio putativo;
c. el divorcio;
d. la separación judicial de bienes;
e. la modificación del régimen matrimonial convenido.

a) ARTÍCULO 476.- Muerte real y presunta. La comunidad se extingue por muerte de uno de los cónyuges. En el
supuesto de presunción de fallecimiento, los efectos de la extinción se retrotraen al día presuntivo del fallecimiento.
b) Anulación de matrimonio putativo: la norma establece la declaración de nulidad del matrimonio putativo como
causal de extinción de la comunidad. Solo en este caso —matrimonio contraído de buena fe por ambos cónyuges o
por uno solo de ellos que ha optado por disolver el régimen patrimonial conforme las previsiones del art. 429, párr.
3, CCyC— resulta posible aludir a existencia de matrimonio y, con él, al régimen patrimonial matrimonial.
c) ARTÍCULO 437.- Divorcio. Legitimación. El divorcio se decreta judicialmente a petición de ambos o de uno solo de
los cónyuges.
El divorcio continúa siendo judicial. El juez deberá dictar la sentencia a pedido de uno o de ambos cónyuges.
Se regula un solo tipo de divorcio, el incausado. Se suprimen las causas objetivas y subjetivas, y se elimina la figura
de la separación personal. Se suprimen todos los plazos que establecía el CC, tanto el que se fijaba desde la
celebración del matrimonio para solicitar el divorcio por mutuo consentimiento como los plazos de falta de
convivencia que habilitaban el pedido de separación y divorcio por la causal objetiva, así como el trámite de la doble
audiencia.
Al establecer un divorcio incausado, se hace hincapié en los efectos y no en las causas que llevaron a la ruptura del
matrimonio.
Separación judicial de bienes.

ARTÍCULO 477.- Separación judicial de bienes. La separación judicial de bienes puede ser solicitada por uno de los
cónyuges:
a. si la mala administración del otro le acarrea el peligro de perder su eventual derecho sobre los bienes gananciales;
b. si se declara el concurso preventivo o la quiebra del otro cónyuge;
c. si los cónyuges están separados de hecho sin voluntad de unirse;
d. si por incapacidad o excusa de uno de los cónyuges, se designa curador del otro a un tercero.

El CCyC sistematiza, en una sola norma, las causas por las que un cónyuge podrá requerir la extinción de la
comunidad a través de la acción autónoma de separación de bienes. En este sentido, supera notablemente al
sistema derogado, que contenía algunas causales diseminadas en varios artículos.
La acción de separación judicial de bienes requiere, como presupuesto de admisibilidad, acreditar la existencia de
alguna de las causales previstas en forma taxativa por la norma.

ARTÍCULO 478.- Exclusión de la subrogación. La acción de separación de bienes no puede ser promovida por los
acreedores del cónyuge por vía de subrogación.

Los terceros acreedores no podrán subrogarse en los derechos de un cónyuge y peticionar la separación judicial de
bienes, puesto que carecen de derecho a afectar los gananciales. La garantía de sus créditos es el patrimonio del
deudor.
Los herederos del cónyuge que peticionara la separación judicial de bienes podrán continuar la acción iniciada por
aquel, pues, de lo contrario, el demandado se vería beneficiado. Si bien la comunidad quedaría extinguida por la
muerte, los bienes que hubieran ingresado en el patrimonio del accionante entre la fecha de iniciación de la acción
de separación de bienes y la fecha de la muerte serían gananciales, de lo cual resulta una clara injusticia.

ARTÍCULO 479.- Medidas cautelares. En la acción de separación judicial de bienes se pueden solicitar las medidas
previstas en el artículo 483.

ARTÍCULO 480.- Momento de la extinción. La anulación del matrimonio, el divorcio o la separación de bienes
producen la extinción de la comunidad con efecto retroactivo al día de la notificación de la demanda o de la petición
conjunta de los cónyuges.
Si la separación de hecho sin voluntad de unirse precedió a la anulación del matrimonio o al divorcio, la sentencia
tiene efectos retroactivos al día de esa separación.
El juez puede modificar la extensión del efecto retroactivo fundándose en la existencia de fraude o abuso del
derecho.
En todos los casos, quedan a salvo los derechos de los terceros de buena fe que no sean adquirentes a título
gratuito.
En el caso de separación judicial de bienes, los cónyuges quedan sometidos al régimen establecido en los artículos
505, 506, 507 y 508.

Se instituye, como principio, que la extinción de la comunidad opera con efecto retroactivo al día de la notificación
de la demanda o de petición conjunta.
Luego, se establecen como excepción los casos en los que la separación de hecho hubiera precedido al divorcio o a la
nulidad del matrimonio, en cuyo caso la extinción de la comunidad tendrá efectos retroactivos al día de verificado el
cese de la cohabitación.

8) Indivisión postcomunitaria. Administración. Pasivo. Efectos frente a los acreedores.

ARTÍCULO 481.- Reglas aplicables. Extinguido el régimen por muerte de uno de los cónyuges, o producido el
fallecimiento, mientras subsiste la indivisión postcomunitaria se aplican las reglas de la indivisión hereditaria. Si se
extingue en vida de ambos cónyuges, la indivisión se rige por los artículos siguientes de esta Sección.
Existe indivisión cuando dos o más personas tienen derechos en común sobre un bien o un conjunto de bienes sin
que exista división material de sus partes.
Extinguida la comunidad y el matrimonio, el principio es el acuerdo. A falta de acuerdo, y de manera subsidiaria,
subsistirán las normas de la comunidad. junto al deber de informar de parte del titular del bien ganancial al otro
comunero respecto de la intención de otorgar actos de administración extraordinaria, y a la facultad que se
reconoce al cónyuge no titular para oponerse al acto de disposición comunicado, permitiéndole requerir la nulidad
del acto y/o la restitución de los bienes. El Código remite a las normas de indivisión hereditaria cuando la extinción
opera por muerte de uno de los consortes.

ARTÍCULO 482.- Reglas de administración. Si durante la indivisión postcomunitaria los excónyuges no acuerdan las
reglas de administración y disposición de los bienes indivisos, subsisten las relativas al régimen de comunidad, en
cuanto no sean modificadas en esta Sección. Cada uno de los copartícipes tiene la obligación de informar al otro, con
antelación razonable, su intención de otorgar actos que excedan de la administración ordinaria de los bienes
indivisos. El segundo puede formular oposición cuando el acto proyectado vulnera sus derechos.

La facultad de los cónyuges para celebrar acuerdo con el objeto de fijar las reglas de administración y disposición de
los bienes gananciales durante el periodo de indivisión postcomunitaria solo será posible si la extinción comunitaria
opera conjuntamente con la disolución del vínculo matrimonial.
El acuerdo de gestión de gananciales es válido y exigible entre las partes sin que se requiera para su eficacia
homologación judicial, salvo que forme parte del convenio regulador del divorcio,

Nada obsta a que las partes modifiquen las reglas de gestión acordadas para regir el periodo de indivisión
postcomunitaria, pues el fundamento del acuerdo es el principio de autonomía de la voluntad.

No existiendo acuerdo sobre el modo de gestión de los bienes en la etapa de indivisión postcomunitaria, los
cónyuges siguen sometidos a las normas a las que se hallaban sujetos vigente la comunidad. A tales disposiciones
habrá que incorporar las relativas al deber de información sobre intención de otorgar actos de administración
extraordinaria y el deber de rendir cuentas por parte del titular del bien que produce frutos y rentas, junto al
derecho a requerir compensación por el uso y goce exclusivo de un bien común.

ARTÍCULO 483.- Medidas protectorias. En caso de que se vean afectados sus intereses, los partícipes pueden
solicitar, además de las medidas que prevean los procedimientos locales, las siguientes:
a. la autorización para realizar por sí solo un acto para el que sería necesario el consentimiento del otro, si la
negativa es injustificada;
b. su designación o la de un tercero como administrador de la masa del otro; su desempeño se rige por las facultades
y obligaciones de la administración de la herencia.

ARTÍCULO 486.- Pasivo. En las relaciones con terceros acreedores, durante la indivisión postcomunitaria se aplican
las normas de los artículos 461, 462 y 467 sin perjuicio del derecho de éstos de subrogarse en los derechos de su
deudor para solicitar la partición de la masa común.

El Código ratifica el principio de responsabilidad separada vigente la comunidad, de modo que las deudas contraídas
en este periodo son personales del cónyuge que las contrajo; también la responsabilidad solidaria es excepcional y
se caracteriza por el fin que la causó, mientras que subsiste la responsabilidad concurrente por los gastos de
conservación y reparación de los bienes gananciales.
Señalado el pasivo de la indivisión y, a pesar del estado de los bienes gananciales, ello no significa que las masas no
tengan su propia individualidad frente a terceros, por lo cual cada masa ganancial continúa como garantía de las
obligaciones contraídas por el cónyuge propietario.
La norma autoriza a todos los acreedores de los copartícipes a subrogarse en los derechos de su deudor o en los del
no contratante para solicitar la partición de la masa común. La subrogación en tales derechos nunca podrá ser
superior al monto del crédito que pretende ejecutarse. Los acreedores del cónyuge no titular, como son los
subrogantes, tienen interés en que los bienes se transmitan, sean partidos y pasen, total o parcialmente, de la
cabeza de quien era el titular exclusivo antes de la disolución para que, de este modo, puedan agredir bienes que
antes no podían atacar porque estaban bajo la titularidad del cónyuge no deudor.
ARTÍCULO 487.- Efectos frente a los acreedores. La disolución del régimen no puede perjudicar los derechos de los
acreedores anteriores sobre la integralidad del patrimonio de su deudor.

9) Liquidación. Efectos. Recompensas. Cargas de la comunidad.


Liquidación de la comunidad
ARTÍCULO 488.- Recompensas. Extinguida la comunidad, se procede a su liquidación. A tal fin, se establece la cuenta
de las recompensas que la comunidad debe a cada cónyuge y la que cada uno debe a la comunidad, según las reglas
de los artículos siguientes.

Reciben la denominación de recompensas los créditos entre los cónyuges que surgen con motivo de la gestión
patrimonial de los bienes propios y gananciales durante la comunidad, que han de determinarse después de su
disolución, a fin de establecer con exactitud la masa que entrará en la partición.
Su propósito es restablecer la debida composición de las masas patrimoniales propias de cada cónyuge, teniendo en
cuenta los bienes que las constituían al iniciarse la sociedad conyugal y los que fueron adicionándose o
sustrayéndose después.

El pago de la recompensa supone la satisfacción de una relación crédito/deuda entre un cónyuge acreedor y un
cónyuge deudor, pues se trata de créditos debidos entre cónyuges, o entre uno de ellos y los herederos del otro a
causa de su participación en la comunidad.

El Código establece, como directiva general, el deber de compensar los supuestos en los que hubo provecho de una
u otra masa —ganancial o propia—, en detrimento de la otra, por uso de fondos que no le pertenecen.
Se trata de un derecho adquirido de contenido patrimonial, por tanto renunciable extinguida la comunidad y
transmisible por causa de muerte. En cuanto a la prescripción, cabe señalar que, tratándose de una obligación
personal y no teniendo plazo especial legalmente previsto, la acción para reclamar las recompensas se rige por el
término genérico (art. 2560 CCyC, que lo establece en cinco años), computable a partir de que queda firme la
sentencia de divorcio.

La extensión de la recompensa será variable, según se trate de compensación debida al copartícipe o a la


comunidad. Así, la debida por uno de los copartícipes a la comunidad equivaldrá al 50% del monto de los gastos,
mejoras o pagos efectuados, por tratarse de un crédito ganancial que, al extinguirse la comunidad, se transforma en
copropiedad de ambos. Si la recompensa es debida por la comunidad a uno de los copartícipes, aquel tendrá
derecho a retirar de la masa ganancial el total del valor de la inversión verificada con fondos propios, sin perjuicio de
lo que le corresponda por efecto de la partición de la comunidad.

ARTÍCULO 489.- Cargas de la comunidad. Son a cargo de la comunidad:


a. las obligaciones contraídas durante la comunidad, no previstas en el artículo siguiente;
b. el sostenimiento del hogar, de los hijos comunes y de los que cada uno tenga, y los alimentos que cada uno está
obligado a dar;
c. las donaciones de bienes gananciales hechas a los hijos comunes, y aun la de bienes propios si están destinados a
su establecimiento o colocación;
d. los gastos de conservación y reparación de los bienes propios y gananciales.

Se utiliza la expresión cargas de la comunidad para aludir a débitos (compromisos) contraídos por cualquiera de los
cónyuges en beneficio de la comunidad, aun cuando las obligaciones son siempre personales de cada uno.

ARTÍCULO 490.- Obligaciones personales. Son obligaciones personales de los cónyuges:


a. las contraídas antes del comienzo de la comunidad;
b. las que gravan las herencias, legados o donaciones recibidos por uno de los cónyuges;
c. las contraídas para adquirir o mejorar bienes propios;
d. las resultantes de garantías personales o reales dadas por uno de los cónyuges a un tercero, sin que de ellas derive
beneficio para el patrimonio ganancial;
e. las derivadas de la responsabilidad extracontractual y de sanciones legales.
ARTÍCULO 491.- Casos de recompensas. La comunidad debe recompensa al cónyuge si se ha beneficiado en
detrimento del patrimonio propio, y el cónyuge a la comunidad si se ha beneficiado en detrimento del haber de la
comunidad.

Si durante la comunidad uno de los cónyuges ha enajenado bienes propios a título oneroso sin reinvertir su precio se
presume, excepto prueba en contrario, que lo percibido ha beneficiado a la comunidad.

Si la participación de carácter propio de uno de los cónyuges en una sociedad adquiere un mayor valor a causa de la
capitalización de utilidades durante la comunidad, el cónyuge socio debe recompensa a la comunidad. Esta solución
es aplicable a los fondos de comercio.

Supuestos expresos de recompensas contemplados por el Código:


A favor de la comunidad por empleo de sus fondos para:
• pagar deuda personal de un cónyuge
• hacer frente a cargos impuestos a adquisiciones a título gratuito
• adquirir bienes propios por subrogación
• adquirir partes indivisas de un bien en el que un cónyuge tenía participación antes deiniciar la comunidad
• extinguir derechos reales y lograr la plena propiedad sobre un bien respecto del cual antes de la comunidad se
detentaba la nuda propiedad
• la adquisición de bienes de uso personal o necesarios para el trabajo o profesión que reconocen gran valor
• por el valor de la mejora o adquisiciones por accesión a cosa propia. Y a favor del cónyuge, en caso de haberse
utilizado fondos propios para:
• solventar una deuda de la comunidad
• adquirir bienes gananciales por subrogación
• adquirir partes indivisas de un bien en las que era titular con carácter ganancial
• extinguir derechos reales y consolidar la plena propiedad sobre un bien cuya nuda propiedad reconocía carácter
ganancial
• equivalente al valor del ganado propio aportado en caso de mejora de la calidad del ganado originario
• por el valor de las mejoras o adquisiciones por accesión a bienes gananciales hechas con fondos propios (art. 465,
inc. m, CCyC).

ARTÍCULO 492.- Prueba. La prueba del derecho a recompensa incumbe a quien la invoca, y puede ser hecha por
cualquier medio probatorio.

ARTÍCULO 493.- Monto. El monto de la recompensa es igual al menor de los valores que representan la erogación y
el provecho subsistente para el cónyuge o para la comunidad, al día de su extinción, apreciados en valores
constantes. Si de la erogación no derivó ningún beneficio, se toma en cuenta el valor de aquélla.

ARTÍCULO 494.- Valuación de las recompensas. Los bienes que originan recompensas se valúan según su estado al
día de la disolución del régimen y según su valor al tiempo de la liquidación.

ARTÍCULO 495.- Liquidación. Efectuado el balance de las recompensas adeudadas por cada uno de los cónyuges a la
comunidad y por ésta a aquél, el saldo en favor de la comunidad debe colacionarlo a la masa común, y el saldo en
favor del cónyuge le debe ser atribuido a éste sobre la masa común. En caso de insuficiencia de la masa ganancial, en
la partición se atribuye un crédito a un cónyuge contra el otro.

10) Partición. Formas. Responsabilidad.

ARTÍCULO 496.- Derecho de pedirla. Disuelta la comunidad, la partición puede ser solicitada en todo tiempo, excepto
disposición legal en contrario.

ARTICULO 497.-Masa partible. La masa común se integra con la suma de los activos gananciales líquidos de uno y
otro cónyuge.

ARTICULO 498.-División. La masa común se divide por partes iguales entre los cónyuges, sin consideración al monto
de los bienes propios ni a la contribución de cada uno a la adquisición de los gananciales. Si se produce por muerte
de uno de los cónyuges, los herederos reciben su parte sobre la mitad de gananciales que hubiese correspondido al
causante. Si todos los interesados son plenamente capaces, se aplica el convenio libremente acordado.

ARTICULO 499.-Atribución preferencial. Uno de los cónyuges puede solicitar la atribución preferencial de los bienes
amparados por la propiedad intelectual o artística, de los bienes de uso relacionados con su actividad profesional,
del establecimiento comercial, industrial o agropecuario por él adquirido o formado que constituya una unidad
económica, y de la vivienda por él ocupada al tiempo de la extinción de la comunidad, aunque excedan de su parte
en ésta, con cargo de pagar en dinero la diferencia al otro cónyuge o a sus herederos. Habida cuenta de las
circunstancias, el juez puede conceder plazos para el pago si ofrece garantías suficientes.

El CCyC incorpora, en esta norma, el derecho a pedir la partición de la comunidad en todo tiempo, sin límite
temporal ni prescripción, excepto disposición en contrario.
En caso de muerte comprobada o presunta del/los cónyuges, la partición puede ser pedida por el cónyuge supérstite
y por los herederos del cónyuge fallecido, si los hubiera. En el supuesto de anulación de matrimonio putativo, la
partición podrá ser peticionada por ambos (si fueren de buena fe), o por uno de ellos, si eligiere la aplicación del
régimen de comunidad y la liquidación conforme estas normas.
Tratándose de separación judicial de bienes o de modificación del régimen patrimonial, cualquiera de los cónyuges
podrá pedir la partición de la masa común.
En el caso de divorcio, se aplicarán las normas relativas al convenio regulador.

ARTÍCULO 500.- Forma de la partición. El inventario y división de los bienes se hacen en la forma prescripta para la
partición de las herencias.

La partición puede ser de dos modos: privada, si todos los copartícipes están presentes y son capaces, o judicial. En
este último caso, el Código establece, de manera expresa, la figura del partidor, así como la posibilidad de que
cualquiera de los copartícipes soliciten la licitación de alguno de los bienes de la herencia, al tiempo que contempla
las diferentes etapas del proceso particional y los objetivos de cada una ellas :composición de la masa, formación de
lotes, asignación, entre otras.

ARTÍCULO 501.- Gastos. Los gastos a que dé lugar el inventario y división de los bienes de la comunidad están a cargo
de los cónyuges, o del supérstite y los herederos del premuerto, a prorrata de su participación en los bienes.

ARTÍCULO 502.- Responsabilidad posterior a la partición por deudas anteriores. Después de la partición, cada uno de
los cónyuges responde frente a sus acreedores por las deudas contraídas con anterioridad con sus bienes propios y
la porción que se le adjudicó de los gananciales.

ARTÍCULO 503.- Liquidación de dos o más comunidades. Cuando se ejecute simultáneamente la liquidación de dos o
más comunidades contraídas por una misma persona, se admite toda clase de pruebas, a falta de inventarios, para
determinar la participación de cada una. En caso de duda, los bienes se atribuyen a cada una de las comunidades en
proporción al tiempo de su duración.

ARTÍCULO 504.- Bigamia. En caso de bigamia y buena fe del segundo cónyuge, el primero tiene derecho a la mitad de
los gananciales hasta la disolución de su matrimonio, y el segundo a la mitad de la masa ganancial formada por él y
el bígamo hasta la notificación de la demanda de nulidad.

11) RÉGIMEN DE SEPARACIÓN DE BIENES.

1. Régimen de separación de bienes: concepto. Posibilidad de opción.

Una de las grandes modificaciones introducidas por el Código al régimen patrimonial del matrimonio gira en torno al
lugar que le dan a la voluntad, en materia de organización de la economía familiar, dando la posibilidad de optar por
el régimen de comunidad de bienes y ganancias o el de separación de bienes, al que, en el CC, solo se podía
acceder mediante decisión judicial frente a supuestos en los que se demostrara la ineptitud en la gestión de los
bienes, o bien frente al abandono voluntario de la convivencia marital o la declaración de incapacidad del cónyuge.

Es el regimen económico matrimonial por el que se produce una separación de patrimonios de los conyuges. Por
ende, pertenecen a cada conyuge los bienes:
a) que tuviese en el momento inicial del mismo; y
b) los que despues adquiera por cualquier titulo.

Cada cónyuge conserva la independencia de su patrimonio y, por ende, retiene la propiedad y el exclusivo
uso, goce y disposición de sus bienes y de los frutos de los mismos. El régimen de separación de bienes, como su
propia denominación lo expresa, consiste en que cada uno de los cónyuges tiene la libre administración y
disposición de sus bienes personales, y se hace responsable por las deudas que contrae con excepción de la
responsabilidad solidaria prevista en el art. 461 CCyC.

Al finalizar el matrimonio, ninguno de los esposos tiene derecho a recibir porción alguna de los bienes del otro, no
hay masa común a distribuir.
Los conyuges pueden adquirir bienes en forma conjunta, ya sea en partes distintas o iguales, por ende pueden tener
bienes en común bajo el régimen del condominio.

Quienes se encuentran facultados para ejercer la opción son los futuros esposos mayores de edad, plenamente
capaces, dispuestos a celebrar el matrimonio y que otorguen la respectiva escritura.
En cuanto a la forma, se requiere que los contrayentes otorguen la escritura publica en la cual opten por el termino
aludido y, además, se deberá dejar constancia de tal acto en el acta de celebración de matrimonio. (el silencio torna
aplicable el régimen de comunidad).

Gestión en el régimen de separación de bienes. Deber de contribución. Prueba. Responsabilidad por deudas.
Protección de la vivienda.

ARTÍCULO 505.- Gestión de los bienes. En el régimen de separación de bienes, cada uno de los cónyuges conserva
la libre administración y disposición de sus bienes personales, excepto lo dispuesto en el artículo 456. Cada uno
de ellos responde por las deudas por él contraídas, excepto lo dispuesto en el artículo 461.
El Código instituye un conjunto de disposiciones indisponibles que se imponen a los cónyuges:
-Se impone la realización de un conjunto de contribuciones de parte de los cónyuges, consistente en los aportes
necesarios para alcanzar su propio sostenimiento, el del hogar y el de la descendencia común.
-En materia de gestión, se decide una única restricción consistente en contar con el asentimiento del
cónyuge no titular del bien cuando se trate de la disposición de los derechos sobre la vivienda familiar y de los
muebles indispensables de esta, así como para transportarlos fuera de ella.
-Se consagra el principio general de la inejecutabilidad del inmueble que constituyera la vivienda familiar por las
deudas contraídas tras la celebración de las nupcias.
-Se establece el principio genérico de responsabilidad separada por deudas, regla que se complementa con
supuestos de solidaridad legal pasiva frente a las deudas destinadas a satisfacer las necesidades ordinarias del hogar,
o aplicadas para lograr el sostenimiento y la educación de los hijos comunes.
ARTÍCULO 506.- Prueba de la propiedad. Tanto respecto del otro cónyuge como de terceros, cada uno de los
cónyuges puede demostrar la propiedad exclusiva de un bien por todos los medios de prueba. Los bienes cuya
propiedad exclusiva no se pueda demostrar, se presume que pertenecen a ambos cónyuges por mitades.
Demandada por uno de los cónyuges la división de un condominio entre ellos, el juez puede negarla si afecta el
interés familiar.

Cese del régimen de separación de bienes.

La separación de bienes cesa por la disolución del matrimonio o por la modificación del régimen convenida entre los
conyuges. La disolución del matrimonio se puede producir, por muerte o por divorcio. En todos los supuestos, en
caso de no existir acuerdo entre conyuges o entre ellos y sus herederos, la partición de bienes en común se hace en
la forma prevista para la partición de las herencias.

ARTÍCULO 507.- Cese del régimen. Cesa la separación de bienes por la disolución del matrimonio y por la
modificación del régimen convenido entre los cónyuges. El Código regula con claridad las dos formas por las
que puede cesar el régimen de separación de bienes: en forma convencional, por modificación consensuada
por los cónyuges adscribiendo al régimen de comunidad; y por disolución del matrimonio: divorcio, muerte
comprobada o presunta de uno o ambos cónyuges, y por nulidad de matrimonio putativo en el que se hubiere
acordado régimen de separación.
BOLILLA IX: UNIONES CONVIVENCIALES

1. Uniones convivenciales. Concepto y características de las uniones convivenciales. Requisitos. Constitución.


Prueba. RegistrO ETCETCTETCTETTCTETCET

Hay personas que deciden optar por un sistema de organización familiar de tipo no matrimonial, ejerciendo su
derecho a no contraer matrimonio y basando esencialmente su vínculo familiar en la libertad y autonomía de
voluntad. Este vinculo familiar, es entonces, una unión convivencial entre dos personas, cualquiera que sea su
orientación sexual, que comparten un proyecto de vida en común, basada en relaciones afectivas de carácter
singular, publica, notoria, estable y permanente. La regulación actual resalta las características de un proyecto de
vida en común, que se logre a través de la convivencia.
Las uniones convivenciales son registrables en forma conjunta por ambos integrantes, pero al solo efecto probatorio,
no configura una exigencia constitutiva de las uniones convivenciales, a diferencia del matrimonio. Una vez
registrada, ninguna de las dos personas podrá registrar otra distinta hasta que no cancele la primera. De allí se
puede hacer una clasificación, entre registradas y no registradas. En ambos casos para que produzcan los efectos del
CCyC deben ser de al menos dos años de duración.

Restricciones legales: al no estar unidos en matrimonio no están sujetos a su régimen, entonces serian ellos mismos
quienes regularían su unión. Sin embargo, la autonomía de la voluntad es plena ya que se imonen algunas
restricciones legales tanto como que no podrán ser contrarios al orden publico, ni al prinicpio de igualdad de los
convivientes, ni afectar los derechos fundamentales de sus integrantes; y además no podrán dejar sin efecto algunas
disposiciones como el “piso minimo legal”.

Piso minimo obligatorio: es una de las restricciones legales a la autónomia de la voluntad. El fundamento reside en
la protección del principio de solidaridad familiar, una vez establecidas las relaciones familiares, surge una
responsabilidad y solidardad que impide desentenderse de ciertos aspectos. Integran este piso minimo los siguientes
efectos jurídicos: A) asistencia durante la convivencia; B) contribución a los gastos del hogar; C) responsabilidad por
deudas frente a terceros; D) protección a la vivienda familiar.
Son requisitos obligatorios, se encuentren o no registrados.

Otros efectos jurídicos: en forma supletoria y a falta de pacto en contrario, se reconocen una serie de efectos
jurídicos a las uniones convivenciales.
Durante la unión, las relaciones patrimoniales se regiran conforme a aquello que los convivientes pacten, y a falta de
este, se establece una administración separada de los bienes de titularidad de cada conviviente. Una vez finalizada la
convivencia, las adquisiciones se mantienen en el patrimionio al que ingresaron. Cesada la convivencia, se tiene
derecho a una compensación económica, puede consistir en una prestación única o en forma de renta por tiempo
determinado. Ademas se prevé también la atribución del uso de la vivienda familiar, para el conviviente que este a
cargo de hijos menores de edad, o al que acredite extrema necesidad.

2. Pactos de convivencia. Contenido. Límites. Modificación y cesación. Oponibilidad frente a terceros.

Los pactos de convivencia pueden realizarse sobre cuestiones que no afecten el orden público, éste es el limite
impuesto a la autonomía de la voluntad; es un piso mínimo de derechos del cual los convivientes no se pueden
apartar, es el núcleo duro o régimen primario; si se pueden establecer mejores derechos, pero no peores.
Fuera de ello pueden realizar pactos de convivencia sobre lo que quieran.

Articulo 513: ”las disposiciones de este Titulo son aplicables excepto pacto en contrario de los convivientes. Este
pacto deber ser hecho por escrito y no puede dejar sin efecto los dispuesto en los artículos 519, 520, 521 y 522.”
Que el pacto deba ser hecho por escrito no implica que deba hacerse por escritura publica. ¿ART 518? 

Contenido: Articulo 514: ”los pactos de convivencia pueden regular, entre otras cuestiones: 1)La contribución a las
cargas del hogar durante la vida común; 2)La atribución del hogar común, en caso de ruptura; 3)La división de los
bienes obtenidos por el esfuerzo común, en caso de ruptura de la convivencia.”
Las cuestiones enumeradas en el articulo sobre que puede regular el pacto de convivencia son enunciativas,
las personas pueden regular sobre lo que ellas quieran.
Limites:

Articulo 515: ”los pactos de convivencia no pueden ser contrarios al orden publico, ni al principio de igualdad de
los convivientes, ni afectar derechos fundamentales de cualquiera de los integrantes de la unión convivencial.”
Modificación y cesación: Articulo 516: ”los pactos pueden ser modificados y rescindidos por acuerdo de ambos
convivientes. El cese de la convivencia extingue los pactos de pleno derecho hacia el futuro.”

Oponibilidad frente a terceros: Articulo 517: ”los pactos, su modificación y recisión son oponibles frente a terceros
desde su inscripción en el registro previsto en el articulo 511 y en los registros que correspondan a los bienes
incluidos en estos pactos. Los efectos extintivos del cese de la convivencia son oponibles a terceros desde que se
inscribió en esos registros cualquier instrumento que constate la ruptura.”

Efectos de las uniones convivenciales durante la vida en común:

Este o no registrada el Código regula la unión convivencial ya que la registración no es un requisito de existencia de
la misma sino un medio de prueba.

Articulo 518: ”las relaciones económicas entre los integrantes de la unión se rigen por lo estipulado en el pacto de
convivencia. A falta de pacto, cada integrante de la unión ejerce libremente las facultades de administración y
disposición de los bienes de su titularidad, con las restricción regulada en este Titulo para la protección de la
vivienda familiar y de los muebles indispensables que se encuentren en ella.”
Es decir, que en primer lugar las relaciones económicas se rigen por el pacto que hayan hecho los convivientes y
en caso de que este falta se ambos tendrán la libre administración y disposición de los bienes que son de su
titularidad.

Articulo 519: ”los convivientes se deben asistencia durante la convivencia”.


Este artículo se refiere a que los convivientes se deben alimentos mientras dure la convivencia.
Articulo 520: ”los convivientes tienen la obligación de contribuir a los gastos domésticos de conformidad con lo
dispuesto en el articulo 455.”
Articulo 521: ”los convivientes son solidariamente responsables por las deudas que uno de ellos hubiera contraído
con terceros de conformidad con lo dispuesto en el articulo 461.”
Articulo 522: ”si la unión convivencial ha sido inscripta, ninguno de los convivientes puede, sin el asentimiento
del otro, disponer de los derechos sobre la vivienda familiar, ni de los muebles indispensables de esta, ni
transportarlos fuera de la vivienda. El juez puede autorizar la disposición del bien si es prescindible y el interés
familiar no resulta comprometido. Si no media esa autorización, el que no ha dado su asentimiento puede
demandar la nulidad de acto dentro del plazo de caducidad de seis meses de haberlo conocido, y siempre
que continuase la convivencia. La vivienda familiar no puede ser ejecutada por deudas contraídas después de
la inscripción de la unión convivencial, excepto que hayan sido contraídas por ambos convivientes o por uno
de ellos con el asentimiento del otro.”

3. Cese de la convivencia. Causas. Compensaciones económicas. Efectos.

El articulo 523 enumera los supuestos que general el cese de la union convivencial.

ARTICULO 523.-Causas del cese de la unión convivencial. La unión convivencial cesa:


a) por la muerte de uno de los convivientes;
b) por la sentencia firme de ausencia con presunción de fallecimiento de uno de los convivientes;
c) por matrimonio o nueva unión convivencial de uno de sus miembros;
d) por el matrimonio de los convivientes;
e) por mutuo acuerdo;
f) por voluntad unilateral de alguno de los convivientes notificada fehacientemente al otro;
g) por el cese de la convivencia mantenida. La interrupción de la convivencia no implica su cese si obedece a motivos
laborales u otros similares, siempre que permanezca la voluntad de vida en común.
Debe recordarse que por aplicacion de lo dispuesto en el articulo 511 la exticion de la union convivencial debe
registrarse a los fines probatorios. para cancelar la isncripccion sera suficiente la voluntad de uno solo de ellos, pues,
en algunos casos, sera imposible contar con el consentimiento del otro conviviente, como ocurre con la muerte, y en
otros, que la decision corresponde a uno solo de ellos.

Compensacion economica: con un alcance similar al que se ha fijado para el caso del divorcio, tambien ante el cese
de la union convivencial es posible requerir la fijacion de una compensación económica. La diferencia mas
importante es que no podra fijarse por tiempo indeterminado, sino que tendra que estar sujeta a un plazo que no
podra ser superior a la duracion que ha tenido la convivencia. las pautas para fijar la compesacion economica estan
enunciadas en el articulo 525 (siendo iguales a las establecidas para el divorcio y el plazo de caducidad de 6 meses
para reclamar su determinacion)

ARTICULO 525.-Fijación judicial de la compensación económica. Caducidad. El juez determina la procedencia y el


monto de la compensación económica sobre la base de diversas circunstancias, entre otras:
a) el estado patrimonial de cada uno de los convivientes al inicio y a la finalización de la unión;
b) la dedicación que cada conviviente brindó a la familia y a la crianza y educación de los hijos y la que debe prestar
con posterioridad al cese;
c) la edad y el estado de salud de los convivientes y de los hijos;
d) la capacitación laboral y la posibilidad de acceder a un empleo del conviviente que solicita la compensación
económica;
e) la colaboración prestada a las actividades mercantiles, industriales o profesionales del otro conviviente;
f) la atribución de la vivienda familiar.
La acción para reclamar la compensación económica caduca a los seis meses de haberse producido cualquiera de las
causas de finalización de la convivencia enumeradas en el artículo 523.

4) Efectos: ATRIBUCION DE LA IVIENDA FAM…….

- atribución de la vivienda familiar: se protege a un conviviente luego del cese de la convivencia, aatribuyendole el
uso del inmueble donde residian. se debe tomar en cuenta si tiene a su cargo el cuidado de hijos menores de edad
con capacidad restrigida o discapacidad.
El otro supuesto se presenta cuanado tiene una extrema necesidad y le resulta imposible procurarsela en forma
inmediata (articulo 526), sera por un tiempo determinado que no puede exceder de 2 años desde el cese de la
convivencia. a peticion de parte interesada, el juez puede establecer una renta compensatoria por el uso del
inmueble a favor del conviviente a quien no se atribuye la vivienda; tambien que el inueble no sea enajenado
durante el plazo previsto sin el acuerdo expreso de ambos o que el inmueble en condominio de los convivientes no
sea partido ni liquidado.
El cese de la atribucion de la vivienda se produce por el cumplimiento del plazo fijado, por el cambio de las
circunstancias que lo motivaron o porque el beneficiado incurre en las causas de indignidad.

ARTICULO 526.-Atribución del uso de la vivienda familiar. El uso del inmueble que fue sede de la unión convivencial
puede ser atribuido a uno de los convivientes en los siguientes supuestos:
a) si tiene a su cargo el cuidado de hijos menores de edad, con capacidad restringida, o con discapacidad;
b) si acredita la extrema necesidad de una vivienda y la imposibilidad de procurársela en forma inmediata.
El juez debe fijar el plazo de la atribución, el que no puede exceder de dos años a contarse desde el momento en que
se produjo el cese de la convivencia, conforme a lo dispuesto en el artículo 523.
A petición de parte interesada, el juez puede establecer: una renta compensatoria por el uso del inmueble a favor
del conviviente a quien no se atribuye la vivienda; que el inmueble no sea enajenado durante el plazo previsto sin el
acuerdo expreso de ambos; que el inmueble en condominio de los convivientes no sea partido ni liquidado. La
decisión produce efectos frente a terceros a partir de su inscripción registral.
Si se trata de un inmueble alquilado, el conviviente no locatario tiene derecho a continuar en la locación hasta el
vencimiento del contrato, manteniéndose él obligado al pago y las garantías que primitivamente se constituyeron en
el contrato.
El derecho de atribución cesa en los mismos supuestos previstos en el artículo 445.

- derecho real de habitacion temporal y gratuito: ante el fallecimiento de un conviviente, el superstite carece de
vocacion hereditaria, sin que tenga trascendencia la duracion que pudo haber tenido la union convivencial. cabe
señalar que el unico derecho que se le reconoce al conviviente superstite es un derecho real de habitacion gratuito
sobre el inmueble de propiedad del causante que constituyo el ultimo hogar familiar. ademas, es requisito para su
procedencia que el inmueble no se encuentre en condominio con otras personas.
Para que pueda invocar este derecho, el conviviente superstite debe carecer de vivienda propia habitable o no debe
tener bienes suficientes que aseguren el acceso a esta. a diferencia de lo que ocurre en materia de muerte del
conyuge en que el derecho de habitacion se goza de pleno derecho y en froma vitalicia , el conviviente superstite
debe requerir en forma expresa que se le reconozca este derecho. el derecho de habitacion se le reconoce por un
tiempo determinado, de 2 años, pero no se indica si se computara desde el momento del fallecimiento o desde que
fue invocado.
El derecho es inoponible a los acreedores del causante, por lo que estos podran ejecutar el bien sin que se tome en
cuenta el derecho de habitacion.

El derecho se extingue si el conviviente superstite constituye una nueva union convivencial, contrae matrimonio o
adquiere una vivienda propia habitable o bienes suficientes para acceder a esta.

5) distribución de bienes: artículo 528: ”a falta de pacto, los bienes adquiridos durante la convivencia se
mantienen en el patrimonio al que ingresaron, sin perjuicio de la aplicación de los principios generales
relativos al enriquecimiento sin causa, la interposición de personas y otros que puedan corresponder”.
Es decir, la unión convivencial no genera un régimen patrimonial distinto, ni tampoco tienen vocación sucesoria los
convivientes.
BOLILLA X: FILIACION

1) CONCEPTO

La palabra filiación deriva del latín filius que significa hijo. En la actualidad, puede definirse la filiación como el
vínculo jurídicos existente entre padres/madres e hijos, determinado por la procreación natural, por la técnicas de
reproducción humana asistida o por la adopción, ello conforme lo establecido en el art 558 del código. El concepto
de filiación no comprenderá solamente la relación biológica sino también todos aquellos casos en que el derecho
configure el emplazamiento filial, así sea como resultado de la aplicación de las técnicas de reproducción humana
asistida o por la figura de la adopción. En definitiva la filiación es un acto simbólico que nombra a un niño como hijo
de alguien, es vinculo jurídico que une a los hijos con sus padres y/o madres.-

FUENTES La filiación puede surgir de distintas fuentes. Hasta la unificación del código civil y comercial, tenia su
origen en la naturaleza o la adopción. El nuevo plexo legal incorpora la filiación por técnicas de reproducción
humana asistida.

Art. 558.— Fuentes de la filiación. Igualdad de efectos. La filiación puede tener lugar por naturaleza, mediante
técnicas de reproducción humana asistida, o por adopción.
La filiación por adopción plena, por naturaleza o por técnicas de reproducción humana asistida, matrimonial y
extramatrimonial, surten los mismos efectos, conforme a las disposiciones de este Código. Ninguna persona puede
tener más de dos vínculos filiales, cualquiera sea la naturaleza de la filiación.

Las distintas clases entonces son:

Filiación por naturaleza: Es la que se origina en el vinculo biológico y puede ser matrimonial, si los hijos nacen en el
matrimonio o extramatrimonial si lo hacen fuera de el.
Filiación por técnicas de reproducción humana asistida: Surge entre las personas que acuden a estos procedimientos
y el niño nacido, pudiendo generar un vinculo biológico (con gametos de la pareja) o social (con gametos de
terceros), debiendo los intervinientes prestar su consentimiento libre, pleno e informado a la técnica a la que se
hayan sometido. Si los padres están unidos en matrimonio será matrimonial y sino lo están será extramatrimonial.

Filiación por adopción: Es la creada por la ley a través del instituto de la adopción. Puede ser plena o simple, según
extinga o no el vinculo con la familia del origen, respectivamente. Existe además, lo que se denomina adopción de
integración que permite emplazar en este estado, por medio de esta figura, al hijo/a del/la cónyuge o conviviente.
Ninguna persona puede tener mas de dos vínculos filiales, cualquiera que sea la naturaleza de la
filiación. Por lo tanto, si una persona pretende emplazar a otra en un estado del que ya goza, debe previamente
desplazar el anterior.-
El certificado de nacimiento expedido por el Registro de Estado Civil y Capacidad de las Personas, no debe aclarar la
fuente de la filiación. Todos los hijo son iguales y gozan de los mismos derechos, independientemente de la manera
en que fueron concebidos y/o emplazados.

Art. 559.— Certificado de nacimiento. El Registro del Estado Civil y Capacidad de las Personas sólo debe expedir
certificados de nacimiento que sean redactados en forma tal que de ellos no resulte si la persona ha nacido o no
durante el matrimonio, por técnicas de reproducción humana asistida, o ha sido adoptada.

EVOLUCION HISTORICA

El régimen filiatorio argentino originariamente se basaba en principios patriarcales que coincidían con el momento
de su sanción, fundado ello en el matrimonio monogámico, católico e indisoluble.- Se distinguía entre hijos legítimos
que eran aquellos nacidos durante el matrimonio e hijos ilegítimos, que eran los nacidos fuera de este y en este
ultimo caso se los distinguía en sacrílegos, incestuosos, adulterinos y naturales, estableciendo diferencias en cuanto
a sus derechos.
La ley 2.393 elimina la categoría de hijos sacrílegos. La ley 10.903 incluye a los hijos naturales entre los sujetos a la
patria potestad. La ley 14.367 deroga las distintas categorías de hijos extramatrimoniales, distinguiendo solo entre
legítimos e ilegítimos.
El mayor avance en la materia se produce con la sanción de la ley 23.264. Esta nueva normativa ya no se refiere a
hijos ilegítimos sino a extramatrimoniales, terminando con todo atisbo de discriminación basada en el sentido
peyorativo del término.

El Pacto de San José de Costa Rica (CADH) establecía que no debían existir diferencias entre los hijos por la fuente de
la filiación. Con la reforma Constitucional de 1994 esta, junto con otros instrumentos incorporados al art 75 inc 22 de
dicho cuerpo legal que contiene disposiciones similares, adquiere jerarquía constitucional.

Debe tenerse en cuenta que antiguamente el sistema filiatorio era cerrado, se fundaba en presunciones que no
admitían prueba en contrario, priorizando asi la “familia aparente” en pos de la “paz familiar”.
Con la ley 23.264, este sistema fue reemplazado por otro abierto, sobre la base de presunciones iuris tantum,
prevaleciendo en este caso la realidad biológica.
Otro de los antecedentes a tener en cuenta es la sanción de la ley 26.618 que modifico el derecho matrimonial
existente hasta el momento, al eliminar la diversidad de sexos como requisito esencial para la existencia del
matrimonio, permitiendo de esta manera que dos personas del mismo sexo puedan acceder a ese instituto.
Si bien esa norma solo se limito a regular todo lo concerniente al matrimonio, el sistema filiatorio se vio alterado en
la práctica.
Estas familias homoparentales suelen recurrir a las técnicas de reproducción humana asistida para satisfacer sus
deseos de maternidad y/o paternidad.
Es en este contexto social y cultural que en el año 2014 se sanciono el Código Civil y Comercial teniendo en cuenta la
necesidad de adaptar el derecho a la realidad y evitar planteos y declaraciones oficiosas de inconstitucionalidad,
adecuando la legislación interna a la internacional y constitucional y procurando de esta manera brindar a la
sociedad una mayor seguridad jurídica.

2) DETERMINACION DE LA MATERNIDAD

La determinación de la maternidad consiste en señalar a alguien por parte de la ley como madre de una persona.
Antiguamente en, en nuestro código civil, se requería que la madre reconociera a su hijo nacido fuera del
matrimonio y fue recién con la ley 23.264 que se introdujo expresamente la determinación de la maternidad por el
hecho del parto, equiparando la filiación matrimonial con la extramatrimonial. Por lo tanto, la determinación legal a
través del parto prevalece sobre la voluntad de la madre.

Art. 565.— Principio general. En la filiación por naturaleza, la maternidad se establece con la
prueba del nacimiento y la identidad del nacido.

La inscripción debe realizarse a petición de quien presenta un certificado del médico, obstétrica o agente de salud si
corresponde, que atendió el parto de la mujer a quien se atribuye la maternidad del nacido. Esta inscripción debe
ser notificada a la madre, excepto que sea ella quien la solicita o que quien denuncia el nacimiento sea su cónyuge.
Si se carece del certificado mencionado en el párrafo anterior, la inscripción de la maternidad por naturaleza debe
realizarse conforme a las disposiciones contenidas en los ordenamientos relativos al Registro del Estado Civil y
Capacidad de las Personas.

De acuerdo con el artículo reseñado, la maternidad por naturaleza se determina por: a) el hecho objetivo del parto
debidamente acreditado, es decir, la prueba del nacimiento y b) la identidad del nacido. El medico, obstetra o agente
de salud que asistió el parto, elabora el certificado con los datos del nacimiento y las huellas del niño y de la madre.-
Sino cuenta con certificado, se determinara de acuerdo con la normativa del Registro de Estado Civil y Capacidad de
las Personas.

La inscripción debe notificarse a la madre salvo que sea ella o su cónyuge quien la solicite. Ello tiene como finalidad
que la mujer tome conocimiento de que un niño fue inscripto como su hijo, para poder impugnar esa filiación en
caso de no responder a la realidad.

La maternidad, en la filiación por naturaleza, queda determinada por el hecho objetivo del parto. A tales fines
deberá acreditarse:
1.-El parto de la mujer, es decir, que ella ha dado a luz al hijo nacido
2.-La identidad del niño que ha dado a luz la mujer
3.-La presentación ante la autoridad administrativa del certificado emitido por el medico, obstetra o agente de salud
interviniente
4.-Si se carece de este certificado, la inscripción de la maternidad quedara sujeta a las normas locales que se dicten.
Finalmente resulta necesario destacar que no debe confundirse la determinación con la prueba, ya que esta ultima
surgirá de la partida de nacimiento y además si es matrimonial del acta de matrimonio
En los casos de técnicas de reproducción humana asistida, la madre es también quien da a luz, es decir, se determina
la maternidad por el parto.

Art. 562.— Voluntad procreacional. Los nacidos por las técnicas de reproducción humana asistida son hijos de quien
dio a luz y del hombre o de la mujer que también ha prestado su consentimiento
previo, informado y libre en los términos de los artículos 560 y 561, debidamente inscripto en el Registro del Estado
Civil y Capacidad de las Personas, con independencia de quién haya aportado los gametos.

3) DETERMINACION DE LA FILIACION. CONCEPTO

La determinación de la filiación implica señalar jurídicamente quien es el padre y/o la madre de una persona.

La determinación de la filiación puede ser:

Legal: Es aquella que establece la ley conforme a determinados supuestos, como lo son el parto y las presunciones

Voluntaria: Cuando proviene del hecho del reconocimiento (expreso o tácito) como acto volitivo o de la voluntad
procreacional en el caso de las técnicas de reproducción humana asistida .

Judicial: Cuando resulta de la sentencia que la declara como consecuencia de un reclamo efectuado. El código
unificado incorporo las cuestiones de filiación relacionadas con el matrimonio igualitario, así como las propias de las
técnicas de reproducción humana asistida. En este caso, la filiación se determina a través de la voluntad
procreacional, expresada mediante el consentimiento informado.-

Por estas razones hoy se prefiere hablar de determinación de la filiación y no de la paternidad o la maternidad.

DETERMINACION DE LA FILIACION MATRIMONIAL

La determinación de la filiación consiste en señalar jurídicamente a alguien como padre y/o madre de una persona, y
cuando se trate de un matrimonio, se presume que es tal el/la cónyuge de la madre .
El código civil hacía referencia a la determinación de la paternidad. El nuevo plexo normativo, en cambio alude a la
determinación de la filiación, contemplando también a los matrimonios y parejas del mismo sexo.
Es por ello que el nuevo código deja de lado la presunción de paternidad para referirse a la presunción de la filiación,
compatibilizando las distintas formas familiares que en el se receptan.
Las presunciones de filiación matrimonial se aplican a la/el cónyuge de la persona que da a luz, aunque solo en los
casos de filiación por naturaleza, y dentro de los plazos expresamente establecidos, pero nunca cuando se acude a
TRHA.

En este sentido, el art 569 dispone:


Art. 569.— Formas de determinación. La filiación matrimonial queda determinada legalmente y Su prueba:
a) por la inscripción del nacimiento en el Registro del Estado Civil y Capacidad de las Personas y
por la prueba del matrimonio, de conformidad con las disposiciones legales respectivas;
b) por sentencia firme en juicio de filiación;
c) en los supuestos de técnicas de reproducción humana asistida, por el consentimiento previo, informado y libre
debidamente inscripto en el Registro del Estado Civil y Capacidad de las Personas.
El ultimo inciso fue incorporado por el nuevo código, el resto reitera disposiciones ya vigentes en la normativa
anterior.

Determinación de la filiación matrimonial por naturaleza: El art 566 dispone:


Art. 566.— Presunción de filiación. Excepto prueba en contrario, se presumen hijos del o la cónyuge los nacidos
después de la celebración del matrimonio y hasta los trescientos días posteriores a la interposición de la demanda de
divorcio o nulidad del matrimonio, de la separación de hecho o de la muerte.La presunción no rige en los supuestos
de técnicas de reproducción humana asistida si el o la cónyuge no prestó el correspondiente consentimiento previo,
informado y libre según lo dispuesto en el Capítulo 2 de este Título.

La presunción de filiación de un niño que nace dentro del matrimonio, recae sobre el/la cónyuge de su madre. Sin
embargo, puede probarse lo contrario. El articulo establece taxativamente dentro de que circunstancias deberá
darse el nacimiento de este niño para que la presunción se haga efectiva, es decir, que sin la necesidad de
reconocimiento previo expreso por el o la cónyuge de la madre, la norma hace surgir la presunción. Estos requisitos
son:
a) Existencia del matrimonio al momento del nacimiento, el cual deberá haberse contraído con las formalidades
previstas en el Código
b) Que el nacimiento se haya producido hasta los 300 días posteriores a: 1.- la interposición de la demanda que
produzca la ruptura del vinculo matrimonial ya sea por divorcio o por nulidad; 2.-la separación de hecho, la muerte o
la ausencia con presunción de fallecimiento
c) Inexistencia de prueba en contrario Recaída la presunción, la filiación será de carácter matrimonial.-

SEPARACION DE HECHO
La separación de hecho es el estado jurídico en el que se encuentran los cónyuges, quienes sin previa decisión
jurisdiccional definitiva, quiebran el deber de cohabitación en forma permanente, sin que una necesidad jurídica lo
imponga, ya sea por voluntad de uno o ambos esposos.
Implica el cese de la cohabitación y consecuentemente la interrupción en el mantenimiento de relaciones sexuales
y/o el proyecto de vida en común. Por ello, al desaparecer el fundamento que da origen a la presunción, la misma
cesa, ello si el niño nace después de 300 días del quiebre de la cohabitación.

Sin embargo, el art 567 dispone:

Art. 567.— Situación especial en la separación de hecho. Aunque falte la presunción de filiación en razón de la
separación de hecho de los cónyuges, el nacido debe ser inscripto como hijo de éstos si concurre el consentimiento
de ambos, haya nacido el hijo por naturaleza o mediante el uso de técnicas de reproducción humana asistida. En
este último caso, y con independencia de quién aportó los gametos, se debe haber cumplido además con el
consentimiento previo, informado y libre y demás requisitos dispuestos en la ley especial.
La normativa prevé la posibilidad de que a pesar de haber cesado la presunción, los progenitores (aun cónyuges) a
través de su consentimiento, inscriban a ese niño como hijo matrimonial.

MATRIMONIOS SUCESIVOS

Este supuesto se halla contemplado en el art 568 que dispone:

Art. 568.— Matrimonios sucesivos. Si median matrimonios sucesivos de la mujer que da a luz, se presume que el
hijo nacido dentro de los trescientos días de la disolución o anulación del primero y dentro de los ciento ochenta días
de la celebración del segundo, tiene vínculo filial con el primer cónyuge; y que el nacido dentro de los trescientos
días de la disolución o anulación del primero y después de los ciento ochenta días de la celebración del segundo
tiene vínculo filial con el segundo cónyuge.
Estas presunciones admiten prueba en contrario. Esta disposición se aplica cuando el niño nace dentro de los 300
días de disolución o anulación del primer matrimonio y se contrajo uno nuevo.
En este caso, si el nacimiento se produjo dentro de los 180 días de la celebración del segundo enlace tiene vinculo
filial con el primer cónyuge y si es posterior a dicho plazo, el hijo será del segundo cónyuge.
La norma contempla la posibilidad de desvirtuarse por prueba en contrario. La presunción implica que la
determinación de la filiación se halla establecida por la ley y quien intente demostrar lo contrario, debe acreditarlo
valiéndose de cualquier medio de prueba.
Determinación de la filiación matrimonial en los casos de TRHA: En estos casos, la filiación se determina por la
voluntad procreacional manifestada a través del consentimiento informado, conforme lo establecido en el art 569
inc c) del código.

Art. 569.— Formas de determinación. La filiación matrimonial queda determinada legalmente y se prueba:
a) por la inscripción del nacimiento en el Registro del Estado Civil y Capacidad de las Personas y
por la prueba del matrimonio, de conformidad con las disposiciones legales respectivas;
b) por sentencia firme en juicio de filiación;
c) en los supuestos de técnicas de reproducción humana asistida, por el consentimiento previo, informado y libre
debidamente inscripto en el Registro del Estado Civil y Capacidad de las Personas.

4) DETERMINACION DE LA FILIACION EXTRAMATRIMONIAL

El art 570 dispone:


Art. 570.— Principio general. La filiación extramatrimonial queda determinada por el reconocimiento, por el
consentimiento previo, informado y libre al uso de las técnicas de reproducción humana asistida, o por la sentencia
en juicio de filiación que la declare tal.

La filiación extramatrimonial se determina por:


a) El reconocimiento (solo paterno)
b) La sentencia firme en juicio de filiación
c) El consentimiento pleno, informado y libre en TRHA

La determinación de ambas clases de filiaciones se diferencia en que la extramatrimonial incorpora el acto jurídico
del reconocimiento, no existiendo en este caso matrimonio que pueda probarse, razón por la cual no se aplica
presunción alguna.
Dicho acto puede ser voluntario si se efectúa en el Registro de Estado Civil y Capacidad de las Personas , por
instrumento publico, privado o testamento, o bien forzado, si es necesario iniciar una acción judicial para lograr el
emplazamiento filial a través de una sentencia.
En las TRHA no rige el reconocimiento sino la voluntad procreacional como forma de
determinación, tanto en la filiación matrimonial como en la extramatrimonial.

RECONOCIMIENTO. CONCEPTO

El reconocimiento es el acto jurídico familiar por el cual una persona declara que otra es su hijo.
Se trata de un acto que tiene por fin inmediato emplazar a un niño en el estado de hijo con respecto a quien lo
reconoce, y hacer efectivos los derechos y obligaciones que de este emplazamiento se deriven.

En cuanto a sus caracteres pueden mencionarse los siguientes:


a) Es declarativo de estado, es decir, se limita a afirmar un vinculo jurídico que ya existe; tiene
efectos retroactivos a la época de la concepción, aunque los derechos y deberes derivados de la responsabilidad
parental surgen a partir del reconocimiento, con la salvedad que establece el código sobre los alimentos debidos a
hijos aun no reconocidos durante el tramite del proceso.
b) Es formal, ya que debe realizarse mediante una declaración ante el oficial del registro por instrumento público o
privado debidamente reconocido o por disposición de última voluntad. La oponibilidad erga onces surge solo a partir
de que el reconocimiento se inscribe en el registro.
c) Es lícito, es decir, conforme a la ley
d) Es individual, en virtud de que solo puede ser llevado a cabo por el padre
e) Es unilateral, ya no requiere la aceptación del reconocido
f) Es puro y simple, es decir, que no esta sujeto a condición, plazo o cargo.
g) Es voluntario e irrevocable, lo que brinda seguridad jurídica, ya que quien lo practica no puede posteriormente
por su sola voluntad dejarlo sin efecto sin perjuicio de las acciones de nulidad e impugnación que le
correspondieren. Se distingue entre el reconocimiento voluntario, es decir, la declaración espontánea del padre, ya
sea ante el registro por instrumento publico o privado o bien mediante un acto de ultima voluntad; y el forzado, que
es el derivado de sentencia judicial, aunque en este caso no se esta en presencia de un acto jurídico unilateral y
voluntario, sino ante una resolución de un magistrado que declara la filiación del niño.

Legitimado activo: Solo puede ejercer el reconocimiento el padre. No podrán reconocer hijos quienes no tengan la
edad y el grado de madurez suficiente para hacerlo como tampoco los declarados incapaces por sentencia judicial.

Legitimado pasivo: Puede ser reconocida toda persona que tenga una diferencia de edad lógica con el reconociente,
de manera que biológicamente puede ser su hijo, siempre que no tenga otra filiación previamente establecida que la
contradiga, conforme surge de la regla de doble vinculo filial. Si ello ocurre, es necesaria una impugnación previa.-
Puede reconocerse a un hijo ya fallecido, pero ello no confiere derechos hereditarios, a fin de evitar la captación de
la herencia, es decir, que el acto solo responda a intereses económicos.
Art. 571.— Formas del reconocimiento. La paternidad por reconocimiento del hijo resulta:
a) de la declaración formulada ante el oficial del Registro del Estado Civil y Capacidad de las
Personas en oportunidad de inscribirse el nacimiento o posteriormente;
b) de la declaración realizada en instrumento público o privado debidamente reconocido;
c) de las disposiciones contenidas en actos de última voluntad, aunque el reconocimiento se efectúe en forma
incidental.

Art. 573.— Caracteres del reconocimiento. El reconocimiento es irrevocable, no puede sujetarse a modalidades que
alteren sus consecuencias legales, ni requiere aceptación del hijo.
El reconocimiento del hijo ya fallecido no atribuye derechos en su sucesión a quien lo formula, ni a los demás
ascendientes de su rama, excepto que haya habido posesión de estado de hijo.

Art. 574.— Reconocimiento del hijo por nacer. Es posible el reconocimiento del hijo por nacer, quedando sujeto al
nacimiento con vida.

Consecuencias de la falta de reconocimiento. Daños y perjuicios: Articulo 587:


”el daño causado al hijo por la falta de reconocimiento es reparable, reunidos los requisitos previstos en el Capitulo
1 del Titulo V del Libro Tercero de este Código.”

FILIACION POR TECNICAS DE REPRODUCCION HUMANA ASISTIDA

Se puede definir a la reproducción humana asistida como el conjunto de procedimientos mediante los cuales se
intenta acercar, a través de la ciencia, el espermatozoide al ovulo, y de esta manera lograr el embarazo.
El código unificado, que incorpora esta fuente filiatoria, habla de la reproducción humana, porque existe también en
la especie vegetal y animal. Es asistida no artificial, porque la concepción se produce naturalmente, aunque con la
colaboración de la ciencia.

Las técnicas son básicamente dos: la inseminación artificial, y la fecundación extracorporal o fertilización in Vitro.

- La inseminación artificial es el método mas sencillo, que consiste en colocar una muestra de semen dentro del
útero de la mujer en un consultorio. Puede ser homologa cuando el semen que se inocula a la mujer pertenece al
marido o heterologa cuando es de un tercero, donante o dador.

- En la fecundación in Vitro, en cambio se extrae el ovulo de la mujer, se lo une al espermatozoide y una vez
obtenido el embrión se lo coloca en útero de aquella que gestara el embarazo.

Las técnicas de fecundación asistida permiten separar la procreación de la copula entre los progenitores, e incluso,
disociar la madre genética de la portadora o la social, ya que puede suceder que quien lleve adelante el embarazo no
sea la misma mujer que ha aportado el ovulo.

VOLUNTAD PROCREACIONAL

Es el acto volitivo de querer ser padre o madre, sin perjuicio de la existencia de componentes genéticos propios. No
es lo mismo ser padre que progenitor biológico. Quien se comprometió a donar su material genético o a gestar un
hijo para otro no puede luego pretender ser el padre o madre, ya que estaría yendo contra sus propios actos.
En la filiación por naturaleza prima el vínculo biológico, en la adopción e social y en la procreación asistida el que
surge de la voluntad procreacional. Si esta última no existiera, no habría seguridad jurídica en el uso de estas
técnicas, y por temor al reclamo futuro, nadie recurriría a ellas.
Por lo tanto, quien a través del consentimiento informado, manifestó su intención de tener un hijo debe ser su padre
o madre. De lo contrario, la persona que dono el semen o los óvulos podría iniciar acciones de filiación con resultado
favorable como consecuencia de la pericia de ADN, priorizándose así el nexo biológico a ultranza.
Por lo expuesto, la filiación en el caso de las TRHA se determina a través de la voluntad procreacional, siempre que
esta se haya manifestado de acuerdo con el procedimiento establecido por el Código unificado y por la ley especial a
dictarse en la materia.
El hecho de que el donante de material genético sea anónimo no afecta el derecho a la identidad de las personas
concebidas y nacidas por reproducción humana asistida, dado que la identidad biológica se resguarda mediante un
legajo base que se confecciona con todos los datos del donante de lamentos, que podrá ser utilizado, conforme lo
prevé el art 564, por razones fundadas evaluadas por el juez o, sin requerimiento judicial, cuando sea relevante para
la salud. Esa circunstancia no da lugar al inicio del reclamo filiatorio alguno, en virtud de que no es lo mismo
establecer lazos filiatorios (vinculo jurídico) que conocer el origen biológico (saber la verdad en cuanto al origen)

Efectivamente, el art 563 establece:


Art. 563.— Derecho a la información de las personas nacidas por técnicas de reproducción asistida. La información
relativa a que la persona ha nacido por el uso de técnicas de reproducción
humana asistida con gametos de un tercero debe constar en el correspondiente legajo base para la inscripción del
nacimiento.
El artículo siguiente se refiere al contenido de la información en estos términos:
Art. 564.— Contenido de la información. A petición de las personas nacidas a través de las técnicas de reproducción
humana asistida, puede: a) obtenerse del centro de salud interviniente información relativa a datos médicos del
donante, cuando es relevante para la salud; b) revelarse la identidad del donante, por razones debidamente
fundadas, evaluadas por la autoridad judicial por el procedimiento más breve que prevea la ley local. El nuevo plexo
normativo adopta una solución intermedia entre el anonimato absoluto y el levantamiento total del mismo.

CONSENTIMIENTO INFORMADO

Para someterse a las TRHA, es necesario expresar el consentimiento pleno, informado y libre ante el centro de salud
que las va a llevar a cabo. Por lo tanto, este debe manifestarse sin vicio ni modalidad alguna, previa indicación del
método que se va a utilizar y sus consecuencias, debiendo protocolizarse el instrumento que lo contiene ante
escribano publico o certificarse ante la autoridad sanitaria local.
Es entonces un acto formal, ya que debe manifestarse en forma expresa, clara y precisa para su posterior
protocolización o certificación.

Es entonces la voluntad procreacional la que determina la paternidad que se origina en estas técnicas. Padre es
quien tiene intenciones de serlo y lo manifiesta y no aquel que aporta el gameto:

Art. 560.— Consentimiento en las técnicas de reproducción humana asistida. El centro de salud interviniente debe
recabar el consentimiento previo, informado y libre de las personas que se someten al uso de las técnicas de
reproducción humana asistida. Este consentimiento debe renovarse cada vez que se procede a la utilización de
gametos o embriones.

La forma y requisitos del consentimiento están previstos en el art 561 según el cual:

Art. 561.— Forma y requisitos del consentimiento. La instrumentación de dicho consentimiento debe contener los
requisitos previstos en las disposiciones especiales, para su posterior protocolización ante escribano público o
certificación ante la autoridad sanitaria correspondiente a la jurisdicción. El consentimiento es libremente revocable
mientras no se haya producido la concepción en la persona o la implantación del embrión.
Dicho consentimiento no solo debe expresarse antes de someterse a estas técnicas, sino además en cada
oportunidad en que van a utilizarse los embriones o gametos, ya que podría ser revocado.

NATURALEZA JURIDICA DEL EMBRION. FALLO ATAVIA MURILLO C/ COSTA RICA

En primer lugar, es posible afirmar que gameto es una célula sexual reproductiva madura, de constitución
cromosomita, capaz de fusionarse con otra célula de similar origen, pero de sexo opuesto, para dar lugar al cigoto.
Son, entonces, los óvulos y espermatozoides. No hay dudas de que en este caso no puede hablarse de personas.-
Se denomina embrión al organismo durante los primeros estadios de desarrollo hasta los tres meses de embarazo
(alrededor de ocho semanas), es que se lo llama feto.-
Tanto los embriones como los gametos pueden ser conservados mediante el congelamiento en nitrógeno líquido, a
través de lo que se denomina criopreservacion -200 º.

El art. 19 del código establece que la existencia de la persona humana comienza con la concepción.
El proyecto originario disponía que la existencia de la persona humana comenzaba con la concepción en la mujer o
con la implantación del embrión en ella en los casos de técnicas de reproducción humana asistida, sin perjuicio de la
protección que le brinde la legislación especial al embrión implantado. Finalmente el articulo fue modificado.
Existen dos grandes posturas sobre el tema: a que considera que el embrión no implantado es persona y la que lo
niega.

En cuanto a la primera, interpreta la legislación anterior a la reforma de 2014 teniendo en cuenta la voluntad del
legislador. Entendían que Vélez Sarsfield no podía conocer en la época otra forma de concepción fuera del seno
materno, y si lo hubiera sabido seguramente la iba a proteger porque su intención era amparar la vida desde la
fusión de gametos.

La segunda postura, que no considera persona al embrión no implantado, se fundamenta en el desarrollo biológico,
hablando de preembrion hasta la implantación, de embrión hasta los tres meses de gestación y de feto hasta el
término del embarazo. Para los autores que defienden esta tesitura, el preembrion no seria persona. Asimismo,
quienes realizaban una interpretación gramatical del anterior art 63 del viejo código, entendían que se era persona
desde la concepción en el seno materno.

En el fallo Atavia Murillo y otros vs Costa Rica, La Corte Interamericana de Derechos Humanos ha manifestado que
“El embrión no puede ser entendido como persona a efectos del art 4.1 de la Convención Americana de Derechos
Humanos dado que la concepción tiene lugar desde el momento en que aquel se implanta en el útero, razón por la
cual antes de este evento no habría lugar a la aplicación de la norma”

Respecto de la concepción, la Corte Interamericana esgrime “A efectos de la interpretación del termino concepción,
la prueba científica concuerda en diferenciar dos momentos complementarios y esenciales en el desarrollo
embrionario: la fecundación y la implantación y solo al cumplirse el segundo momento se cierra el ciclo que permite
entender que existe concepción, pues, si bien al ser fecundado el ovulo se da paso a una célula diferente y con la
información genética suficiente para el posible desarrollo de un ser humano, lo cierto es que si el embrión no se
implanta en el cuerpo de la mujer sus posibilidades de desarrollo son nulas, es decir, no recibiría los nutrientes
necesarios, ni estaría en un ambiente adecuado para su desarrollo”

Se intento legislar teniendo en cuenta el estado actual de la reproducción humana asistida, según el cual no es
posible el desarrollo del embrión fuera del seno materno, conforme a lo dispuesto por la Corte Interamericana de
Derechos Humanos, cuyas sentencias son obligatorias para los países que han ratificado el Pacto de San José de
Costa Rica, el cual en la Argentina tiene rango constitucional.

GESTACION POR SUSTITUCION


La gestación por sustitución consiste en que una mujer leve adelante un embarazo para, luego de dar a luz al niño,
entregarlo a otra persona o pareja. Puede hacerlo utilizando óvulos propios, de la persona que la contrato o de
terceros. El semen también puede ser de quien tiene voluntad de procrear o de un tercero. Puede ser entonces,
homologa o heterologa.
Se lo utiliza cuando la mujer que desea ser madre no puede gestar a su hijo. Sin embargo, también pueden
requerirlo quienes no deseen pasar por la experiencia de un embarazo o un parto, parejas formadas por dos
hombres e incluso hombres solos.
Existen tres posturas a nivel internacional acerca de la aceptación o rechazo de la gestación por sustitución: una que
la acepta, otra que la rechaza por considerarla un contrato licito, contrario a la moral y a las buenas costumbres, y
una tercera que la admite cuando no tiene fines de lucro y se funda en la solidaridad familiar (la gestante es la
hermana, prima u otra persona de la familia de quien desea tener ese hijo)
El proyecto de Código Civil y Comercial derogo el articulo, por lo que no esta previsto en la legislación actual,
existiendo un vacío legal sobre legal sobre el tema.

FILIACION POST MORTEM


El hijo póstumo es aquel que es concebido, o nace, luego del fallecimiento de algunos de sus progenitores. Existe un
procedimiento que consiste en inseminar a la mujer, o implantarle un embrión crioconservado, luego del
fallecimiento de quien aporto el gameto.
Debe distinguirse en este caso la fecundación post mortem, donde el embrión aun no se formo, sino que el material
genético que se utiliza para la realización de la técnica se hallaba congelado, de la implantación post mortem, que se
da en los casos en que el embrión se encontraba crioconservado.
El debate ético, transita por la vía de determinar si es adecuado que un niño nazca deliberadamente en el marco de
una familia monoparental, luego del fallecimiento de su madre o su padre.
Otro tema consiste en decidir si basta con el consentimiento general ya prestado, o es necesario un específico, dado
lógicamente en vida, para la implantación o inseminación posterior al fallecimiento.
El Proyecto de Reforma de Unificación de Código Civil y Comercial contemplaba expresamente este tema, aunque la
Cámara de Senadores lo suprimió. Esta disposición era similar a la que surge del art 21 de la ley 26.862, por lo tanto
esta prevista expresamente en nuestra legislación aunque no incorporada al nuevo Código.
Es necesario destacar que se trata de cuestiones que ya se han planteado jurisprudencialmente, conforme surge del
caso en Mendoza de 2014, en el cual se autorizo a una mujer a inseminarse con gametos crioconservados de su
marido fallecido pese a que el mismo no había prestado su consentimiento.
En cuanto al régimen sucesorio, el art 2279 establece que las personas nacidas después del fallecimiento del
causante por técnicas de reproducción humana asistida, siempre que cumplimentaran los requisitos previstos por la
ley, poseen derechos hereditarios.- Sin embargo, no hace referencia al caso en el cual se ha producido el deceso de
ambos progenitores y el embrión se encuentra congelado, sin que hayan efectuado manifestación alguna. Quienes
consideran que éste es persona, creen que debe ser dado en adopción y sus padres serán sus adoptantes.

6 y 7) ACCIONES DE FILIACION CONCEPTO

Las acciones de filiación son aquellas que se encargan de emplazar o desplazar a una persona de un determinado
estado de padre, madre, hijo o hija. Tienden a constituirlo, modificarlo o extinguirlo.- Pueden ser de emplazamiento,
cuando su objetivo es incluir a la persona en un estado, o de desplazamiento cuando se ocupan de excluirla. Se
caracterizan por ser: a) Inalienables, porque no pueden ser objeto de cesión b) Irrenunciables, ya que se hallan fuera
del ámbito de la autonomía de la voluntad c) Inherentes a la persona, porque solo el titular puede ejercerlas d)
Imprescriptibles, aunque susceptibles de caducidad. Pueden extinguirse por la inactividad a lo largo del tiempo.
Manteniendo la misma redacción que el art. 251 del Código de Vélez, el presente artículo 576 establece que las
acciones de filiación, al igual que las restantes acciones de estado de familia, son imprescriptibles e irrenunciables.
No se enumeran las otras características que también poseen ese tipo de acciones como la inalienabilidad y la
inherencia personal.

(576 que la acción de filiación no se extingue ni por prescripción ni por renuncia, aunque sí los derechos
patrimoniales adquiridos a través de ella.)

La norma dispone: Art. 576.— Caracteres. El derecho a reclamar la filiación o de impugnarla no se extingue por
prescripción ni por renuncia expresa o tácita, pero los derechos patrimoniales ya adquiridos están sujetos a
prescripción.

ACCIONES DE FILIACION Y TRHA


Art. 577.— Inadmisibilidad de la demanda. No es admisible la impugnación de la filiación matrimonial o
extramatrimonial de los hijos nacidos mediante el uso de técnicas de reproducción humana asistida cuando haya
mediado consentimiento previo, informado y libre a dichas técnicas, de conformidad con este Código y la ley
especial, con independencia de quién haya aportado los gametos. No es admisible el reconocimiento ni el ejercicio
de acción de filiación o de reclamo alguno de vínculo filial respecto de éste. De lo contrario, nadie donaría su
material genético sabiendo que esta sujeto a un posible reclamo posterior de maternidad o paternidad, surgiendo
asimismo una gran inestabilidad jurídica y afectiva. Estas disposiciones coinciden con la Ley Nacional de
Reproducción Humana Asistida (Ley 26.862) cuyos arts 24 y 25 prohíben a los hijos nacidos mediante estas técnicas,
a los terceros y al o a la cónyuge de la mujer que da a luz, iniciar acción alguna para impugnar y/o negar la
maternidad o paternidad, cuando medio consentimiento previo, libre e informado.- En caso de que una persona sola
se someta a estas técnicas y luego contraiga matrimonio o forme pareja, su nuevo cónyuge o conviviente no podrá
reconocer a sus hijos, sino acudir al instituto de la adopción de integración.

PRINCIPIOS GENERALES DEL PROCESO FILIATORIO

Articulo 579:”en las acciones de filiación se admiten toda clase de pruebas, incluidas las genéticas, que pueden ser
decretadas de oficio o a petición de parte. Ante la imposibilidad de efectuar la prueba genética a alguna de las
partes, los estudios se pueden realizar con material genético de los parientes por naturaleza hasta el segundo grado;
debe priorizarse a los mas próximos.
Si ninguna de estas alternativas es posible, el juez valora la negativa como indicio grave contrario a la posición del
renuente.” Se incorpora en el texto legal, por primera vez en el Código, la posibilidad de recurrir a otros parientes
que permitan obtener algún grado de certeza en el resultado de la prueba genética, ante la imposibilidad de efectuar
el estudio a alguna de las partes, aunque su precisión sea menor que si se realiza sobre las personas directamente
involucradas.
El texto del actual art. 579 recepta, a su vez, el texto del art. 4º de la ley 23.511 en relación a la interpretación de la
negativa a someterse al estudio genético, como un indicio grave contrario a la posición del renuente. Esta norma
introduce el calificativo de "grave " no contemplado en la redacción dada por la ley antecedente.
Ahora bien, la cuestión que se planteó y, se seguirá planteando aún después de la incorporación de esta nueva
norma, es la extensión o el alcance a darle a dicho indicio.
En este punto encontramos básicamente dos posiciones: Quienes consideran que dicho indicio reviste un carácter
secundario o complementario de otras pruebas. Esta postura sostiene que se debe recurrir a otros medios de prueba
para formar la convicción del juez, ya que no constituye una presunción legal sino judicial, sometida al margen de
discrecionalidad del magistrado. Sin embargo, se ha aclarado que a mayor avance científico en la certeza obtenida
de las pruebas genéticas, mayor será el peso a otorgarle a este indicio derivado de la negativa.
Y quienes entienden que la negativa sería suficiente en sí misma para acreditar el nexo biológico al punto de
asignársele el valor de un reconocimiento de la paternidad imputada. O sea que si la única prueba que se tiene es la
genética y el padre no accede a realizarla ese indicio grave será suficiente para dictar sentencia.
El proceso de filiación tiene por objeto el emplazamiento o desplazamiento de una persona en un estado de familia.

Juez competente.
El art 581 dispone: Art. 581.— Competencia. Cuando las acciones de filiación sean ejercidas por personas menores
de edad o con capacidad restringida, es competente el juez del lugar donde el actor tiene su centro de vida o el del
domicilio del demandado, a elección del actor. Iniciar la acción en el lugar donde el niño o la persona mayor de edad
con capacidad restringida tenga su centro de vida, implica facilitar el acceso a la jurisdicción. Siempre será necesaria
la intervención del Ministerio Publico, por estar involucrados intereses de personas menores de edad. También debe
conferirse vista al agente fiscal por tratarse de cuestiones de orden publico, que afectan a toda la sociedad y
producen efectos frente a terceros a partir de su inscripción registral.

- Legitimación activa y pasiva: El legitimado activo es la persona que reclama una filiación determinada (acción de
emplazamiento) o pretende desvirtuar con el juicio la filiación en la que se halla emplazado (acción de
desplazamiento) Legitimado pasivo es la persona contra quien se insta la acción.

- Plazos: Las acciones de filiación tienen un plazo de caducidad, vencido este ya no podrán intentarse. Si se inician
posteriormente a él serán denegadas.- El código ha equiparado los plazos de caducidad en un año para todos los
interesados y para todas las acciones, resguardando el derecho del hijo que puede iniciarlas en cualquier tiempo. El
plazo comienza a computarse desde la inscripción del nacimiento, o bien desde que la persona supo o pudo tomar
conocimiento del hecho que da origen a la acción.

- Medidas cautelares: En el proceso de filiación pueden plantearse todo tipo de medidas cautelares, siendo las mas
comunes aquellas que se solicitan para evitar que se pierdan pruebas o para percibir alimentos desde el inicio del
juicio.
- Pruebas: El art 579 del código establece como principio general que en los procesos filiatorios podrá utilizarse
cualquier medio de prueba. Asimismo, prevé expresamente la posibilidad de valerse de prueba pericial biológica.
(Art. 579.— Prueba genética. En las acciones de filiación se admiten toda clase de pruebas, incluidas las genéticas,
que pueden ser decretadas de oficio o a petición de parte. Ante la imposibilidad de efectuar la prueba genética a
alguna de las partes, los estudios se pueden realizar con material genético de los parientes por naturaleza hasta el
segundo grado; debe priorizarse a los más próximos. Si ninguna de estas alternativas es posible, el juez valora la
negativa como indicio grave contrario a la posición del renuente. El objeto de la prueba ofrecida y producida consiste
en comprobar o no la existencia de nexo biológico entre las partes intervinientes. Por ello, el mismo articulo
establece la opción, en el caso de no poder efectuarse la pericial biológica con el causante por hallarse ausente o
rebelde, de realizar esta pericia con un familiar cercano hasta el segundo grado del parentesco por naturaleza.- La
pericia de ADN en la actualidad es la prueba por excelencia en este tipo de procesos).

Asimismo, el art 580 admite la posibilidad que pueda recurrirse a la prueba genética Post Mortem:
Art. 580.— Prueba genética post mortem. En caso de fallecimiento del presunto padre, la prueba puede realizarse
sobre material genético de los dos progenitores naturales de éste. Ante la negativa o imposibilidad de uno de ellos,
puede autorizarse la exhumación del cadáver. El juez puede optar entre estas posibilidades según las circunstancias
del caso. Cuando el presunto padre se haya fallecido, la prueba genética podrá realizarse con algún abuelo paterno
que se encuentre vivo y si no es posible, el juez ordenara entonces la exhumación del cadáver. Sin embargo, ello no
es subsidiario, ya que el juez puede optar de acuerdo con las circunstancias del caso.

- Finalización del proceso: El proceso puede finalizar con una sentencia o bien con su desistimiento (no del derecho
porque no puede renunciarse a él por una cuestiona de orden publico) o allanamiento. La sentencia debidamente
inscripta en el Registro de Estado Civil y Capacidad de las Personas produce efectos erga omnes cuando es
emplazamiento o desplazamiento. Sin embargo, si rechaza la demanda, cualquier otro legitimado puede entablarla
nuevamente sino intervino en el proceso anterior

RECLAMO ALIMENTARIO ANTERIOR AL RECONOCIMIENTO Art. 586.


— Alimentos provisorios. Durante el proceso de reclamación de la filiación o incluso antes de su inicio, el juez puede
fijar alimentos provisorios contra el presunto progenitor, de conformidad a lo establecido en el Título VII del Libro
Segundo. Puede solicitarse una prestación alimentaria para hijos no reconocidos y los alimentos se reclaman tendrán
carácter provisorio.-
Art. 664.— Hijo no reconocido. El hijo extramatrimonial no reconocido tiene derecho a alimentos provisorios
mediante la acreditacion sumaria del vinculo ó í invocado. Si la demanda se promueve antes que el juicio de
filiacion, en la ó resolucion que determina alimentos provisorios el juez debe establecer un plazo ó para promover
dicha accion, bajo apercibimiento de cesar la cuota fijada ó mientras esa carga esté incumplida.
Asimismo, el art 665 permite que la mujer embarazada reclame alimentos al presunto progenitor, debiendo
acreditar sumariamente la filiación alegada. Si bien dicho reclamo corresponde a la mujer, no hay dudas de que se
realiza a favor de su hijo por nacer.
Art. 665.— Mujer embarazada. La mujer embarazada tiene derecho a reclamar alimentos al progenitor presunto con
la prueba sumaria de la filiación alegada.

POSESION DE ESTADO
Consiste en el ejercicio de hecho de un estado de familia, es el goce con o sin titulo.- Art. 584.— Posesión de estado.
La posesión de estado debidamente acreditada en juicio tiene el mismo valor que el reconocimiento, siempre que no
sea desvirtuada por prueba en contrario sobre el nexo genético. El articulo consagra la necesidad de probar la
posesión para que sea equiparada al reconocimiento, tal como lo hacia la legislación anterior, aunque ahora se
elimina el termino “expreso” y no se habla de nexo biológico sino genético.

La determinación de la filiación surge de la sentencia dictada en un proceso judicial donde aquella se demostró.

Presunción en caso de convivencia: LA convivencia con la madre durante la época de la concepción, de acuerdo con
lo previsto en el art 585 hace presumir el vinculo filial con su conviviente, salvo oposición fundada:

Art. 585.— Convivencia. La convivencia de la madre durante la época de la concepción hace presumir el vínculo filial
a favor de su conviviente, excepto oposición fundada. El demandado podría interponer la exceptio plurium
concunbenium, por la cual sin negar la unión convivencial, invoca que la madre ha mantenido relaciones sexuales
con otras personas durante el periodo de la concepción.
Para que rija esa presunción, es necesario demostrar que la concepción se produjo durante la vida en común.
Deberá probarse entonces, la unión convivencial con sus características propias, tales como la cohabitación, la
permanencia, la estabilidad, entre otras.
La filiación en ese caso quedara determinada pos sentencia judicial.-

Daños y perjuicios derivados de la falta de reconocimiento:

En la falta de reconocimiento de un hijo, existe un acto contrario a la ley, ya que la persona que a sabiendas de que
tiene un hijo no lo reconoce, esta actuando en contra del derecho; si se desconocía la paternidad o se tenían motivos
fundados para dudar de ellas, no procedería el reclamo. Lo resarcible no es el desamor, sino el incumplimiento del
deber jurídico que ocasiono un daño.
Antiguamente, en el derecho de familia no se admitía ningún tipo de indemnización por daños.
El art 587 reconoce expresamente la posibilidad de exigir la reparación del daño causado por la falta de
reconocimiento:

Art. 587.— Reparación del daño causado.


El daño causado al hijo por la falta de reconocimiento es reparable, reunidos los requisitos previstos en el Capítulo 1
del Título V de Libro Tercero de este Código. El legitimado activo para reclamar estos daños derivados del no
reconocimiento es el hijo. El legitimado pasivo es quien omitió reconocerlo.
A los fines de que prospere la acción, es necesario que previamente se haya dictado sentencia favorable en un juicio
de reclamación de estado.
El reclamo de la indemnización de daños derivados de la responsabilidad civil prescribe a los 3 años.

ACCION DE RECLAMACION

Esta acción tiene por fin inmediato el emplazamiento de una persona en el estado de hijo. Podrá reclamarse la
filiación matrimonial dirigiendo la acción contra los cónyuges en forma conjunta cuando no ha sido inscripto como
hijo de ambos, o en el caso de ser extramatrimonial contra quienes considere sus progenitores.
Accion de filiación matrimonial y extramatrimonial.

Art. 582.— Reglas generales. El hijo puede reclamar su filiación matrimonial contra sus progenitores si no resulta de
la inscripción en el Registro del Estado Civil y Capacidad de las Personas. La acción debe entablarse contra los
cónyuges conjuntamente. El hijo también puede reclamar su filiación extramatrimonial contra quienes considere sus
progenitores. En caso de haber fallecido alguno de los progenitores, la acción se dirige contra sus herederos. Estas
acciones pueden ser promovidas por el hijo en todo tiempo. Sus herederos pueden continuar la acción iniciada por él
o entablarla si el hijo hubiese muerto en la menor edad o siendo persona incapaz. Si el hijo fallece antes de
transcurrir un año computado desde que alcanzó la mayor edad o la plena capacidad, o durante el primer año
siguiente al descubrimiento de las pruebas en que se haya de fundar la demanda, su acción corresponde a sus
herederos por todo el tiempo que falte para completar dichos plazos. Esta disposición no se aplica en los supuestos
de técnicas de reproducción humana asistida cuando haya mediado consentimiento previo, informado y libre, con
independencia de quienes hayan aportado los gametos.

Legitimación: Son legitimados activos para iniciarla los hijos y sus herederos. Si el hijo es menor de edad, estaría
representado, mas allá del asesor de incapaces, por un tutor ad litem, o bien por elaborado del niño.-
Si se trata de un hijo extramatrimonial, puede estar representado por el progenitor que lo ha reconocido, ya que
este vinculo filial no se vería afectado por el ejercicio de la acción.
- Ante el fallecimiento del principal interesado (el hijo) los herederos de este podrán continuar con la acción cuando:
1) el fallecimiento se produjo siendo menor de edad o incapaz;
2) cuando hubiera iniciado la acción antes de su deceso. En este ultimo caso no caduca la acción, ya que la norma no
fija plazo alguno;
3) muere dentro del año siguiente a haber adquirido plena capacidad, sus herederos pueden continuarla hasta que
se cumplan esos términos.
- Los legitimados pasivos son el progenitor y su cónyuge en un litisconsorcio pasivo necesario si se reclama una
filiación matrimonial; o solo uno de ellos si es extramatrimonial porque en este caso no rigen las presunciones y el
resultado del reclamo no afectaría al otro progenitor.
- Si los padres han fallecido, los legitimados pasivos serán sus herederos; ello se aplica tanto ante la muerte de uno
como de ambos.
- Caducidad: El hijo puede iniciar la acción en cualquier tiempo, ya que de lo contrario afectaría el derecho a la
identidad del mismo. Sin embargo, rigen para sus herederos los plazos de caducidad ya mencionados.
- Prueba: Tendrá por objeto probar la existencia de nexo biológico entre el accionante y el demandado, pudiendo
para ello recurrirse a cualquier medio de prueba.
- Efectos: La finalidad de esta acción consiste en emplazar al hijo en un determinado estado de familia, teniendo
efectos erga omnes a partir de la inscripción de la sentencia en el Registro de Estado Civil y Capacidad de las
Personas
ACCION DE RECLAMACION DE LA FILIACION POR EL MINISTERIO PUBLICO

Se trata de una acción de emplazamiento que se inicia cuando un hijo es inscripto solo con filiación materna. Será,
en este caso, el Ministerio Publico quien la inste para que el niño posea el emplazamiento filial que le corresponde:
Art. 583.— Reclamación en los supuestos de filiación en los que está determinada sólo la maternidad. En todos los
casos en que un niño o niña aparezca inscripto sólo con filiación materna, el Registro Civil debe comunicar al
Ministerio Público, el cual debe procurar la determinación de la paternidad y el reconocimiento del hijo por el
presunto padre. A estos fines, se debe instar a la madre a suministrar el nombre del presunto padre y toda
información que contribuya a su individualización y paradero. La declaración sobre la identidad del presunto padre
debe hacerse bajo juramento; previamente se hace saber a la madre las consecuencias jurídicas que se derivan de
una manifestación falsa. Antes de remitir la comunicación al Ministerio Público, el jefe u oficial del Registro Civil
debe citar a la madre e informarle sobre los derechos del niño y los correlativos deberes maternos, de conformidad
con lo dispuesto en la ley especial. Cumplida esta etapa, las actuaciones se remiten al Ministerio Público para
promover acción judicial. A diferencia de la normativa anterior, en este caso no se le consulta a la madre sobre la
posibilidad de iniciar una acción, atento a que no se trata de un derecho propio sino de su hijo.-

Procedimiento: El artículo prevé el procedimiento que debe seguir el órgano administrativo para instar o continuar
la reclamación de la paternidad. Lo expuesto tiene por finalidad evitar que la madre, ya sea por ignorancia o carencia
de recursos, se abstenga de accionar para que el hijo tenga filiación paterna acreditada, aun queriendo hacerlo.

- Este procedimiento se divide en dos etapas: en la primera, de carácter administrativo, interviene el funcionario del
Registro y en la segunda el Ministerio Publico, pudiendo iniciar la acción por vía judicial.

8) ACCIONES DE IMPUGNACION

Las acciones de impugnación tendrán por fin dejar sin efecto una filiación preestablecida, razón por la cual se trata
de acciones de desplazamiento. Estas acciones, no se aplican a los hijos nacidos por TRHA

ACCION DE NEGACION DE LA FILIACION PRESUMIDA POR LA LEY


concepto: Consiste en negar la filiación presumida por la ley cunado el hijo nace dentro de los 180 días siguientes a
la celebración del matrimonio.

Art. 591.— Acción de negación de filiación presumida por la ley.

El o la cónyuge de la mujer que da a luz puede negar judicialmente el vínculo filial del hijo nacido dentro de los
ciento ochenta días siguientes a la celebración del matrimonio. La acción caduca si transcurre un año desde la
inscripción del nacimiento o desde que se tuvo conocimiento de que el niño podría no ser hijo de quien la ley lo
presume. Si se prueba que el o la cónyuge tenía conocimiento del embarazo de su mujer al tiempo de la celebración
del matrimonio o hubo posesión de estado de hijo, la negación debe ser desestimada. Queda a salvo, en todo caso,
la acción de impugnación de la filiación que autorizan los artículos anteriores. Esta disposición no se aplica en los
supuestos de técnicas de reproducción humana asistida cuando haya mediado consentimiento previo, informado y
libre, con independencia de quienes hayan aportado los gametos. Se diferencia de la acción de impugnación, en que
en este caso, teniendo en cuenta los plazos mencionados en el art 591, l concepción necesariamente se produjo
antes de haberse celebrado las nupcias, por lo que la ley presume que existen mayores posibilidades de que el/la
cónyuge de la madre no sea el progenitor del hijo cuya filiación se le atribuye.

- Legitimación: El legitimado activo es el o la cónyuge de quien dio a luz, es decir, quien pretende desvirtuar la
presunción. No procede la acción si se tuvo conocimiento del embarazo o existió posesión de estado.
- Los legitimados pasivos son quien dio a luz y su hijo. Si fuere menos de edad, se requerirá de la designación de un
tutor ad litem Caducidad: El plazo de caducidad es de un año desde la inscripción del nacimiento o de que se tomo
conocimiento de la situación.
- Prueba: Podrá utilizarse cualquier medio. Deberá demostrarse la fecha del matrimonio y la del parto, a través de
los correspondientes certificados, y además los hechos por los cuales resulta imposible que exista el vínculo filial que
la ley presume.
- Efectos: La sentencia favorable va a desvirtuar la presunción, por lo que el hijo será extramatrimonial e inscripto
con un solo apellido, pudiendo luego ser reconocido por otra persona o bien quedando expedita la vía para iniciar
una acción de reclamación.
ACCION DE IMPUGNACION PREVENTIVA DE LA FILIACION PRESUMIDA POR LA LEY

La acción de impugnación preventiva tiene por objeto evitar que el niño que nazca sea emplazado en el estado filial
que la ley presume. Esta acción prevista en el art 592 puede ser iniciada durante el embarazo por el o la cónyuge de
quien se halla en este estado, para impedir que ese niño o niña se inscriba como hijo suyo. Puede incoarse, por lo
tanto hasta el momento del nacimiento:
Art. 592.— Impugnación preventiva de la filiación presumida por la ley.

Aun antes del nacimiento del hijo, el o la cónyuge pueden impugnar preventivamente o la filiación de la persona por
nacer. Esta acción puede ser ejercida, además, por la madre y por cualquier tercero que invoque un interés legitimo.
La inscripción del nacimiento posterior no hace presumir la filiación con el cónyuge de quien da a luz si la acción es
acogida.
Esta disposición no se aplica en los supuestos de técnicas de reproducción humana asistida cuando haya mediado
consentimiento previo, informado y libre, con independencia de quienes hayan aportado los gametos Legitimación:
Los legitimados activos son el o la cónyuge de la madre, esta ultima, o cualquier tercero que invoque un interés
legitimo.

- El legitimado pasivo será la mujer embarazada y el niño por nacer, representado por un tutor ad litem,
conformándose un litisconsorcio pasivo necesario y si la inicia la madre, la acción se dirigirá contra su marido y el hijo
por nacer.
- Caducidad: La norma no menciona expresamente un plazo de caducidad, pero se deduce de su simple lectura que
esta dado por el nacimiento del niño ya que puede intentarse hasta ese momento, existiendo luego la posibilidad de
plantear otras acciones.- Prueba: Puede utilizarse cualquier medio de prueba, como podrían ser las constancias de
realización de un viaje o los certificados que acrediten el padecimiento de una enfermedad que impidió que se
mantuvieran relaciones sexuales entre los cónyuges a la época de la concepción.
- Efectos: Si la sentencia hace lugar a la acción, el niño se inscribirá como extramatrimonial con el apellido de su
madre y podrá ser reconocido por su progenitor biológico.
En caso de que la mujer de a luz y aun no se haya dictado sentencia, puede requerirse como medida cautelar que no
se lo inscriba como hijo de el/la cónyuge de la madre, sino solo con el apellido de ella hasta que se resuelva la
pretensión.

ACCION DE IMPUGNACION DE LA FILIACION PRESUMIDA POR LA LEY

Esta acción tiene por fin desvirtuar la filiación que la ley presume.

Art. 589.— Impugnación de la filiación presumida por la ley. El o la cónyuge de quien da a luz puede impugnar el
vinculo filial de los hijos nacidos durante el matrimonio o dentro de los trescientos días siguientes a la interposición
de la demanda de divorcio o nulidad, de la separación de hecho o de la muerte, mediante la alegación de no poder
ser el progenitor, o que la filiación presumida por la ley no debe ser razonablemente mantenida de conformidad con
las pruebas que la contradicen o en el interés del niño. Para acreditar esa circunstancia puede valerse de todo medio
de prueba, pero no es suficiente la sola declaración de quien dio a luz. Esta disposición no se aplica en los supuestos
de técnicas de reproducción humana asistida cuando haya mediado consentimiento previo, informado y libre, con
independencia de quienes hayan aportado los gametos. Se podrá alegar que quien se halla inscripto como
madre/padre no es tal. Puede utilizarse cualquier medio de prueba siendo insuficiente la mera declaración de quien
dio a luz, atento a que se trata de cuestiones de orden publico en las que no basta con la prueba confesional para
dictar sentencia.
- Legitimación: Los legitimados activos para iniciar esta acción son el hijo, la madre el o la cónyuge de quien dio a luz
o cualquier tercero que invoque un interés legitimo. La norma actual reconoce a la madre como legitimada para
iniciar esta acción, ya que se elimino el adulterio como causal de divorcio. Entre los terceros interesados, debe
incluirse al padre biológico, que previo a la reforma tenia vedado el inicio de la acción. Si la acción la insta el o la
cónyuge los legitimados pasivos son la madre y el hijo; si la deduce el hijo, la madre y su cónyuge. Si la plantea otro
interesado, lo haría contra el hijo, la madre y su cónyuge.

Art. 590.— Impugnación de la filiación presumida por ley.


El hijo puede iniciar la acción en cualquier tiempo para los demás legitimados, la acción caduca si transcurre un año
desde la inscripción del nacimiento o desde que se tuvo conocimiento de que el niño podría no ser hijo de quien la
ley lo presume.
En caso de fallecimiento del legitimado activo, sus herederos pueden impugnar la filiación si el deceso se produje
antes de transcurrir el término de caducidad establecido en este artículo. En este caso, la acción caduca para ellos
una vez cumplido el plazo que comenzó a correr en vida del legitimado.”
La legitimación activa la tienen el o la cónyuge de quien da a luz, la madre, el hijo y cualquier tercero que invoque un
interés legitimo.
En relación con la caducidad de la acción, el hijo puede impugnar su filiación en cualquier tiempo, pero para los
demás legitimados la acción está sujeta al plazo de caducidad de un año contado desde la inscripción del nacimiento
o desde que se tuvo conocimiento de que el niño podría no ser hijo de quien la ley lo presume. Los herederos de
todos los legitimados activos pueden impugnar la filiación si el deceso se produjo antes de transcurrir el término de
caducidad descripto en los párrafos anteriores, y la acción les caduca una vez cumplido el plazo que comenzó a
correr en vida del legitimado.

Legitimación y caducidad. La acción de impugnación de la filiación del o la cónyuge de quien da a luz puede ser
ejercida por éste o ésta, por el hijo, por la madre y por cualquier tercero que invoque un interés legítimo. El hijo
puede iniciar la acción en cualquier tiempo. Para los demás legitimados, la acción caduca si transcurre un año desde
la inscripción del nacimiento o desde que se tuvo conocimiento de que el niño podría no ser hijo de quien la ley lo
presume. En caso de fallecimiento del legitimado activo, sus herederos pueden impugnar la filiación si el deceso se
produjo antes de transcurrir el término de caducidad establecido en este artículo. En este caso, la acción caduca para
ellos una vez cumplido el plazo que comenzó a correr en vida del legitimado.
Caducidad: El hijo puede iniciar la acción en todo tiempo. El resto de los legitimados activos tienen un plazo de
caducidad de un año desde la inscripción del nacimiento o desde que se tomo conocimiento de la situación. Si el
legitimado fallece antes de que se cumpla el plazo de caducidad, la acción puede ser iniciada o continuada por sus
herederos hasta que se complete dicho termino
Este plazo de un año deberá computarse desde la inscripción del nacimiento o desde que se tuvo conocimiento de
que el niño (o el adulto, aunque la ley no lo aclare) podría no ser hijo de quien ha quedado emplazado como
progenitor, sea por helecho objetivo del parto o por la presunción legal.

- Prueba: Resulta insuficiente la mera declaracion de quien dio a luz, por ello deben acompañarse otros medios de
prueba. Estas acciones son indisponibles al encontrarse involucrado el orden publico, por lo tanto, no puede
modificarse un estado de familia con la mera voluntad de las personas.

- Efectos: La sentencia desplazara la filiación presumida por la ley, por lo que el niño podrá ser reconocido voluntaria
o judicialmente y además tendrá expedita la vía para iniciar una acción de reclamación.

ACCION DE IMPUGNACION DEL RECONOCIMIENTO

Esta acción, tiene por objeto dejar sin efecto el acto jurídico de reconocimiento previamente efectuado, por lo que
es propia de la filiación extramatrimonial. Por ello, esta destinada a demostrar, en el plano de la realidad biológica,
que el reconocido no es hijo de quien practico dicho acto.

Art. 593.— Impugnación del reconocimiento. El reconocimiento de los hijos nacidos fuera del matrimonio puede ser
impugnado por los propios hijos o por los terceros que invoquen un interés legítimo. El hijo puede impugnar el
reconocimiento en cualquier tiempo. Los demás interesados pueden ejercer la acción dentro de un año de haber
conocido el acto de reconocimiento o desde que se tuvo conocimiento de que el niño podría no ser el hijo. Esta
disposición no se aplica en los supuestos de técnicas de reproducción humana asistida cuando haya mediado
consentimiento previo, informado y libre, con independencia de quienes hayan aportado los gametos.

Legitimación: El legitimado activo es el hijo o cualquier persona que tenga un interés legitimo. Si la inicia el hijo, el
legitimado pasivo será el reconociente. Si lo hace un tercero interesado, la incoara contra el hijo a través de un
representante y el reconociente, conformando un litisconsorcio pasivo necesario.
Caducidad: Puede ser iniciada por el hijo en todo tiempo o por todo aquel que invoque un interés legitimo en el
plazo de un año desde que se efectuó el reconocimiento o tomo conocimiento de la situación.
- Prueba: La prueba intentara demostrar la inexistencia de nexo biológico entre reconociente y reconocido, pudiendo
emplearse cualquier medio.
- Efectos: Al tratarse de una acción de desplazamiento deja abierta la vía para otro reconocimiento posterior o bien
para entablar una acción de reclamación.
ACCION DE IMPUGNACION DE LA MATERNIDAD

Es una acción destinada a desvirtuar el vínculo filial que une al hijo con su madre. Por medio de ella se intenta
demostrar que la mujer que se designa como madre en las inscripciones registrales, en realidad no es tal. Conforme
a la clasificación de las acciones de estado, se trata de una acción de desplazamiento, declarativa.

- Art. 588.— Impugnación de la maternidad. En los supuestos de determinación de la maternidad de conformidad


con lo dispuesto en el artículo 565, el vínculo filial puede ser impugnado por no ser la mujer la madre del hijo que
pasa por suyo. Esta acción de impugnación puede ser interpuesta por el hijo, la madre, el o la cónyuge y todo tercero
que invoque un interés legítimo. La acción caduca si transcurre un año desde la inscripción del nacimiento o desde
que se conoció la sustitución o incertidumbre sobre la identidad del hijo. El hijo puede iniciar la acción en cualquier
tiempo. En los supuestos de filiación por técnicas de reproducción humana asistida la falta de vínculo genético no
puede invocarse para impugnar la maternidad, si ha mediado consentimiento previo, informado y libre.

Legitimación: Podrá incoarla el hijo en cualquier tiempo. Si el hijo es menor de edad, se le nombrara un tutor
especial para que lo represente o en su caso, si cuenta con la edad suficiente, podrá hacerse representar por un
letrado. También se hallan legitimados para iniciar la acción la madre, su cónyuge o un tercero que invoque un
interés legitimo. Respecto de este ultimo, se ha dicho que debe tener un interés actual y directo que puede ser
patrimonial o extrapatrimonial. Se aplica esta acción en los casos de maternidad tanto dentro como fuera del
matrimonio.

- En cuanto a los legitimados pasivos, si la maternidad es matrimonial e inicia la acción el hijo, la demanda se dirigirá
contra los cónyuges conjuntamente, constituyéndose un litisconsorcio pasivo necesario. Si la inicia el cónyuge, será
contra la mujer y el hijo. Si lo hace la mujer, será contra el cónyuge y el hijo. Si lo hace un tercero, será contra la
mujer, su cónyuge y su hijo.
- Si es extramatrimonial, el hijo la iniciara contra la madre, si lo hace esta última la planteara contra el hijo y si lo
hace un tercero lo será contra la mujer y el hijo

Caducidad: El hijo puede iniciar la acción en todo tiempo, atento a que no puede ver cercenada esta posibilidad en
pos del derecho a la identidad. En cuanto al resto de los legitimados activos, la norma incorpora un plazo de
caducidad de un año que antes no existía.- Prueba: Podrá utilizarse cualquier tipo de pruebas para desplazar el
vinculo materno filial, siendo determinantes en la actualidad las genéticas.

- Efectos: Obtenida la sentencia de desplazamiento, el hijo quedara inscripto sin maternidad acreditada. A partir de
ese momento, podrá ser reconocido por sus padres biológicos, o bien podrá iniciarse la acción de reclamación que
corresponda.

NULIDAD DEL RECONOCIMIENTO


Se trata de la acción destinada a tacar, por encontrarse viciado, el acto jurídico de emplazamiento efectuado por el
reconociente, afectando su validez
No impide que el reconociente pueda realizar un nuevo reconocimiento de la misma persona en el futuro mediante
un nuevo acto jurídico, ya que lo que se anula es este ultimo por adolecer de algún vicio, independientemente del
emplazamiento real.
La nulidad puede configurarse mediante vicios del consentimiento, falta de discernimiento de quien lo presta, vicios
de forma, incompatibilidad con un estado anterior que no se impugno previamente, reconocimiento de un hijo
adoptado plenamente, imposibilidad real de que el reconociente sea el padre o la madre. Puede ser conforme a la
teoría general de las nulidades, absoluta o relativa.- Legitimación y caducidad: La nulidad absoluta podrá solicitarla
cualquier interesado n tanto que la nulidad relativa solo puede ser invocada por quien sufrió el vicio.
Si inicia el hijo, la acción deberá ser dirigida contra el reconociente; si la inicia el reconociente, contra el hijo. En caso
de que quien invoque la acción sea un tercero, lo hará contra el hijo y el reconociente, quienes conformaran un
litisconsorcio pasivo necesario
Esta acción no esta sujeta a caducidad sino a prescripción. Si se trata de vicios del consentimiento, el plazo será de
dos años del conocimiento o cesación, mientra que en el resto de los casos se aplicara el plazo genérico de 5 años.

Prueba: La prueba deberá demostrar la existencia del vicio que se invoca y puede emplearse cualquier medio.
Efectos: La sentencia desplazara el estado de hijo con efecto retroactivo a la fecha del nacimiento. Sin embargo, si
se hace lugar a la acción, podrá efectuarse un nuevo reconocimiento por parte de la misma persona.
BOLILLAXI: ADOPCION.

1) ADOPCION CONCEPTO

La adopción como fenómeno jurídico de emplazamiento familiar, según la tipificación legal, resulta:

Art. 594. Concepto.

La adopción es una institución jurídica que tiene por objeto proteger el derecho de niños, niñas y adolescentes a vivir
y desarrollarse en una familia que le procure los cuidados tendientes a satisfacer sus necesidades afectivas y
materiales, cuando éstos no le pueden ser proporcionados por su familia de origen. La adopción se otorga solo por
sentencia judicial y emplaza al adoptado en el estado de hijo, conforme con las disposiciones de este Código.

En términos generales, la adopción es la institución en virtud de la cual se crea entre dos personas un vinculo similar
al que deriva de la filiación natural, creación que tiene como eje directriz el mejor y superior interés de los niños,
niñas y adolescentes.(en adelante NNA) La adopción tiene una finalidad única y principal que es logara satisfacer el
derecho humano del NNA a vivir en familia, en consideración a su mejor y superior interés en el marco del afecto.

EVOLUCION LEGISLATIVA

El concepto de adopción se ha transformado; ha logrado una forma diferente a la que lucia en el siglo pasado. La
construcción del fenómeno adopción en el siglo pasado partía de la idea del eje de satisfacer las necesidades “del
adoptante” en su imposibilidad de tener hijos biológicos. Hoy la idea eje del concepto de adopción como figura
jurídica es la necesidad del NNA de satisfacer su derecho humano a vivir en familia.

El codificador originario no regulo el instituto de la adopción, pues contradice ideológicamente aquello que la
sociedad de la época legitimaba: organización familiar biológica y de raza blanca En el año 1948 se introduce la
adopción en la legislación nacional mediante la ley 13.252. Se incorpora la adopción simple donde se crea un vinculo
de filiación entre adoptante y adoptado y no se rompen los vínculos de sangre con la familia de origen, excepto la
patria potestad y sus derechos hereditarios respecto de sus parientes biológicos.- En el año 1971 se sanciona la ley
19.134 que deja sin efecto la 13.252.

Se modifica la edad minima del adoptante y se disminuye el número de años de matrimonio, se admite la adopción
de mas de un niño de uno u otro sexo, se autoriza la adopción aun habiendo descendencia, se reduce el plazo de
guarda y en casos especiales se acepta una segunda adopción. Se establece la adopción plena en la cual el adoptado
se convierte en hijo legitimo del adoptante con todas las prerrogativas que esto implica, suprimiéndose los derechos
y obligaciones con el parentesco de sangre.- En el año 1997, como efecto directo de la incorporación a nuestro
derecho argentino de la Convención de los Derechos del Niño (en adelante la CDN) se sanciono la ley 24.779 que
contenía 4 aspectos fundamentales con respecto a la anterior.
a) Se suprimió el carácter extrajudicial de la guarda, estableciendo indefectiblemente el carácter judicial. Se
establecía un registro de aspirantes a guarda con fines de adopción, con el fin de evaluar la idoneidad de futuros
adoptantes y tratar de darle una familia lo más apta posible al niño.

- b) Se introdujo la exigencia de un tiempo mínimo de residencia en el país.

c) Se comprometía, mediante la correspondiente sentencia, a hacerle conocer al menor su realidad biológica.- d) La


posibilidad de que el menor sea oído, de acuerdo a su edad.- Finalmente en el año 2005 se sanciono la ley nacional
26.061 y la ley provincial 13.298 de Promoción y Protección Integral de los Derechos de los Niños, a fin de adecuar la
legislación vigente en concordancia con lo dispuesto por la CDN de jerarquía constitucional.

Normas Constitucionales aplicables;

La familia, en sentido amplio o extenso, es el conjunto de personas entre las cuales existe un vinculo jurídico de
orden familiar, entre ellos puede o no existir convivencia y su extensión o tamaño depende del reconocimiento que
el ordenamiento el otorgue a tales relaciones.

En el caso de la adopción, la familia cumple una función educadora, socializadora, conteniendo y dando afecto al
niño, niña y adolecente, transmitiéndole la formación y cultura permitiéndoles vivir en sociedad.
Si bien el artículo 14 bis de la Constitución Nacional establece “la protección integral de la familia” se refuerza su
protección con la reforma de 1994, incorporando las convenciones internacionales (artículo 75, inciso 22).

Así, se habla de familia como grupo fundamental de la sociedad que debe recibir la protección y asistencia
necesarias (CDN), debiendo ser protegida por la sociedad y el estado (DUDH y CADH).

La familia resulta un ámbito esencial para la crianza del niño, que debe ser protegido integralmente y asistido
personal y materialmente para que sean suplidas sus carencias

(CDN). Esta normativa resalta la importancia de que todo niño, niña o adolecente se desarrolle dentro de un núcleo
familiar. La familia debe cobijar o amparar al menor, procurando satisfacer sus necesidades afectivas, como así
también materiales, formándolo como persona y preparándolo para insertarse en la sociedad

-PRINCIPIOS GENERALES

Art. 595.— Principios generales. La adopción se rige por los siguientes principios:
a) el interés superior del niño; Para resolver sobre el otorgamiento de la adopción, en todos los casos el juez o
tribunal deberá valorar el interés superior del NNA, que prevalece tanto por sobre el de el o de los adoptantes, como
por sobre el de los padres biológicos.- La Convención sobre los Derechos del Niño, prioriza de manera absoluta el
interés superior de los NNA, haciéndolo prevalecer por sobre el interés de los adultos e inclusive sobre lo que se
denomina verdad biológica.
b) el respeto por el derecho a la identidad; Este constituye otro de los principios que debe regir la adopción, el cual
esta dado, fundamentalmente, por el derecho del adoptado a conocer sus orígenes, lo que se encuentra consagrado
en el inc e) del art 595, como también el 596.- La identidad personal esta íntimamente ligada a la persona en su
individualidad especifica y vida privada, sustentadas ambas en una experiencia histórica y biológica, así como en la
forma en que se relaciona dicho individuo con los demás a través del desarrollo de vinculo en el plano familiar y
social. La relación entre el instituto de la adopción y el derecho a la identidad esta plasmado en el art 596 que, en
concordancia con el art ( de la CDN, dispone: Art. 596.— Derecho a conocer los orígenes. El adoptado con edad y
grado de madurez suficiente tiene derecho a conocer los datos relativos a su origen y puede acceder, cuando lo
requiera, al expediente judicial y administrativo en el que se tramitó su adopción y a otra información que conste en
registros judiciales o administrativos. Si la persona es menor de edad, el juez puede disponer la intervención del
equipo técnico del tribunal, del organismo de protección o del registro de adoptantes para que presten
colaboración. La familia adoptante puede solicitar asesoramiento en los mismos organismos. El expediente judicial y
administrativo debe contener la mayor cantidad de datos posibles de la identidad del niño y de su familia de origen
referidos a ese origen, incluidos los relativos a enfermedades transmisibles. Los adoptantes deben comprometerse
expresamente a hacer conocer sus orígenes al adoptado, quedando constancia de esa declaración en el expediente.
Además del derecho a acceder a los expedientes, el adoptado adolescente está facultado para iniciar una acción
autónoma a los fines de conocer sus orígenes. En este caso, debe contar con asistencia letrada.
c) el agotamiento de las posibilidades de permanencia en la familia de origen o ampliada; La intención de este
principio legal, es tasar el tiempo del proceso para el NNA y que el agotamiento de las posibilidades de permanencia
de estos con sus padres de sangre no debe exagerarse hasta un punto tal que demore innecesariamente su
institucionalización, privándolo del derecho a tener una familia.
d) la preservación de los vínculos fraternos, priorizándose la adopción de grupos de hermanos en la misma familia
adoptiva o, en su defecto, el mantenimiento de vínculos jurídicos entre los hermanos, excepto razones debidamente
fundadas; Se dispone la priorización de la adopción de grupos de hermanos en la misma familia adoptiva. El art 621
establece la facultad del juez de mantener los vínculos subsistentes con uno o varios de sus parientes de sangre. Por
lo que, aun en el supuesto de que los hermanos sean adoptados por distintas personas, los vínculos entre ellos
pueden ser mantenidos.
e) el derecho a conocer los orígenes; En el nuevo código y en los fundamentos de reforma, se pone el acento en el
derecho del NNA a conocer sus orígenes y a acceder a los expedientes judicial y administrativo en que se tramito la
adopción, así como a cualquier otra información que conste en registros. El NNA no solo conocerá su origen
biológico, sino el texto y el contexto, de hecho, administrativo y jurisdiccional de su devenir histórico familiar que lo
ubicaron en situaciones jurídicas diversas.- Conforme a lo que establece el código, el adoptado con edad y grado de
madurez suficiente, conocerá los entretelones jurisdiccionales que lo llevaron a su actual estado de hijo adoptivo.
El art 596 establece también que los adoptantes deben comprometerse especialmente a hacer conocer su origen al
adoptado. Frente a este deber de los padres adoptivos, esta el derecho del adoptado que podrá, en caso de
conocimiento tardío o indirecto de su realidad biológica y/o jurídica, solicitar a la jurisdicción el reproche de la
conducta de sus padres adoptivos y hasta la revocación de la adopción.- Finalmente el art 596 dispone sobre el
derecho del adoptado adolescente a iniciar una acción autónoma para conocer sus orígenes, debiendo a ese efecto
contar con asistencia letrada. Es calificada de autónoma por ser ajena a la adopción y los vínculos jurídicos que
derivan de esta, y en conformidad a lo normado solo puede ser iniciada a partir de los 13 años de edad, en que los
menores son legalmente considerados como adolescentes. Con ella se trata de determinar quienes son los
progenitores biológicos del adoptado, aunque no se crea vinculo jurídico alguno con ellos
f) el derecho del niño, niña o adolescente a ser oído y a que su opinión sea tenida en cuenta según su edad y grado
de madurez, siendo obligatorio requerir su consentimiento a partir de los diez años. Cada vez, con más asiduidad los
jueces tienen en cuenta en mayor o menor medida la opinión de los NNA en las cuestiones que, en general, les
atañen, y particularmente en materia de adopción, ya que lo expresado por el mismo, puede constituir un elemento
valioso a los efectos de resolver lo que mejor convenga a su interés
.- Este principio no puede entenderse en el sentido de que necesariamente se deba seguir la voluntad expresada por
ellos, para lo cual esta debe concordar en líneas generales, con la solución que en el caso particular le parezca más
adecuada al juzgador.
- La ultima parte de este inciso, establece que el consentimiento del menor para la adopción es obligatorio a partir
de los 10 años de edad. La misma pauta es reglada en el inc d) del art 617, que dispone que el pretenso adoptado
mayor de 10 años debe prestar consentimiento expreso. Al derecho a ser oído, se le suma “prestar el
consentimiento” para la adopción sin el cual el juez no puede otorgarla.
- La clave y la esencia de la exigencia del consentimiento al NNA mayor de 10 años prestado expresamente en el
proceso de adopción, es una exigencia legal que lo beneficia, que hace a su derecho de ser sujeto de derecho y parte
activa en el proceso que tiene por objeto emplazarlo como hijo de otras personas distintas a sus padres biológicos y
que la valoración e interpretación de este “consentimiento expresado” debe estar a cargo de operadores
especializados e integrados desde la interdisciplina.

2) REQUISITOS PARA SER ADOPTANTE

El nuevo código dispone expresamente quienes pueden adoptar a un NNA, en ese sentido, enuncia un orden en su
redacción que no resulta un orden de prioridad sino de posibilidades legales empíricas y señala:
a) Por un matrimonio b) Por una pareja de convivientes c) Por una persona sola La ley señala como requisitos para
ser adoptantes los siguientes:
1) Todo adoptante debe ser por lo menos 16 años mayor que el adoptado, excepto cuando el cónyuge o conviviente
adopta al hijo del otro cónyuge o conviviente.
- 2) En caso de muerte del o de los adoptantes u otra causa de extinción de la adopción, se puede otorgar una nueva
adopción sobre la persona menor de edad
3) Puede ser adoptante la persona que resida permanentemente en el país por un periodo mínimo de 5 años
anterior a la petición de la guarda con fines de adopción. Este plazo no se exige a las personas de nacionalidad
argentina o naturalizada en el país.
4) La persona que pretenda ser adoptante debe encontrarse inscripta en el registro de adoptantes.

EDAD MINIMA
En lo referente al requisito de la edad, resulta fundamental para que proceda al otorgamiento de la adopción, que el
adoptante sea por lo menos 16 años mayor (en la legislación anterior era 18 años mayor) que el adoptado.
La diferencia de edad entre adoptante y adoptado no se exige cuando se adopta al hijo del cónyuge o conviviente,
tampoco se requiere cuando el cónyuge supérstite adopta al hijo del premuerto o al hijo de la pareja conviviente
premuerta.
RESIDENCIA EN EL PAIS

La nueva ley ha establecido como requisito para el otorgamiento de la adopción que los adoptantes acrediten de
manera fehaciente e indubitable, la residencia permanente en el país por un periodo mínimo de 5 años anterior a la
petición de guarda. El código dispone expresamente que este plazo no se exige a las personas de nacionalidad
argentina o naturalizada en el país.

Se le puede otorgar la adopción de un argentino/a a una persona o a un matrimonio o una pareja conviviente
argentina residente en el exterior, si el órgano jurisdiccional así lo determina.

INSCRIPCION REGISTRAL Como exigencia legal, toda persona que decida adoptar debe inscribirse en el respectivo
registro de aspirantes a guardas con fines adoptivos (Dirección Nacional del Registro Único de Aspirantes a la Guarda
con fines Adoptivos del Ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos) Las provincias y la Cuidad Autónoma
de Buenos Aires han creado también sus propios registros y mediante convenios con la DNRUA conforman la “Red
Nacional de Registros”.

PROHIBICIONES Art. 601.— Restricciones. No puede adoptar:

a) quien no haya cumplido veinticinco años de edad, excepto que su cónyuge o conviviente que adopta
conjuntamente cumpla con este requisito; Este mínimo ha bajado, ya que la legislación anterior disponía 30 años
como edad

b) el ascendiente a su descendiente; Se prohíbe la adopción de los nietos por parte de sus abuelos, e incluso de los
bisnietos por parte de sus bisabuelos, aunque ello fuera poco probable en razón de la diferencia de edad entre
ambos. Un sector de la doctrina considera que su fundamento era razonable si se atiende a que la adopción es una
institución cuya finalidad esencial consiste en dotar de ámbito familiar al NNA que, por carecer de el se encuentra
desprotegido o abandonado. Un menor que tiene abuelos, no se encuentra ni desprotegido ni abandonado, porque
no carece de ámbito familiar propio. Por otra parte se señala que para el desarrollo psicológico del NNA es
perjudicial ser el hermano de quien es su madre.

- En cambio, otro sector de la doctrina considera que siempre hay que dar prioridad al interés del menor y que este
permite que en el caso concreto sea mas beneficioso acordar la adopción a los abuelos, teniendo en cuenta as
circunstancias del caso.

- c) un hermano a su hermano o a su hermano unilateral. La adopción entre parientes próximos no se justifica; pues
existiendo el vinculo de parentesco aquella aparece como innecesaria; la adopción entre hermanos puede resultar
perjudicial, por la modificación directa de los vínculos cotidianos del menor sobre la configuración de la personalidad
del niño, además de innecesaria.

ADOPCION UNIPERSONAL Y CONJUNTA

Adoptantes matrimonio o pareja conviviente:


En caso de que los adoptantes sean matrimonio o pareja conviviente, la adopción debe otorgarse a ambos cónyuges
o a ambos miembros de la pareja (convivientes) ya que de acuerdo con lo que establece el art 602, la regla general
de la adopción por personas casadas o en unión convivencial es que pueden adoptar solo si lo hacen conjuntamente.
Asimismo, el art 603 marca una excepción a esta regla y señala que la adopción por personas casadas o en unión
convivencial puede ser unipersonal si: a) El cónyuge o conviviente ha sido declarado persona incapaz o de capacidad
restringida y la sentencia le impide prestar consentimiento valido para este acto. b) Los cónyuges se encuentran
separados de hecho Art. 602.— Regla general de la adopción por personas casadas o en unión convivencial.

Las personas casadas o en unión convivencial pueden adoptar sólo si lo hacen conjuntamente.

Art. 603.— Adopción unipersonal por parte de personas casadas o en unión convivencial. La adopción por personas
casadas o en unión convivencial puede ser unipersonal si:

a) el cónyuge o conviviente ha sido declarado persona incapaz o de capacidad restringida, y la sentencia le impide
prestar consentimiento válido para este acto. En este caso debe oírse al Ministerio Público y al curador o apoyo y, si
es el pretenso adoptante, se debe designar un curador o apoyo ad litem;

b) los cónyuges están separados de hecho. Adopción conjunta de personas divorciadas o cesada la convivencia: Las
personas que durante el matrimonio o la unión convivencial mantuvieron estado de madre o padre con una persona
menor de edad, pueden adoptarla conjuntamente aun después del divorcio o cesada la unión. Lo determinante no
es la adopción conjunta por dos personas o la unipersonal, sino la satisfacción del mejor y superior interés del NNA
en cada caso.

Art. 604.— Adopción conjunta de personas divorciadas o cesada la unión convivencial. Las personas que durante el
matrimonio o la unión convivencial mantuvieron estado de madre o padre con una persona menor de edad, pueden
adoptarla conjuntamente aún después del divorcio o cesada la unión. El juez debe valorar especialmente la
incidencia de la ruptura al ponderar el interés superior del niño.
Adopción conjunta y fallecimiento de uno de los guardadores: Cuando la guarda con fines de adopción del NNA se
hubiese otorgado durante el matrimonio o unión convivencial y el periodo legal se completa después del
fallecimiento de uno de los cónyuges o convivientes, el art 605 dispone que:
Art. 605.— Adopción conjunta y fallecimiento de uno de los guardadores. Cuando la guarda con fines de adopción
del niño, niña o adolescente se hubiese otorgado durante el matrimonio o unión convivencial y el período legal se
completa después del fallecimiento de uno de los cónyuges o convivientes, el juez puede otorgar la adopción al
sobreviviente y generar vínculos jurídicos de filiación con ambos integrantes de la pareja.

En este caso, el adoptado lleva el apellido del adoptante, excepto que fundado en el derecho a la identidad se
peticione agregar o anteponer el apellido de origen o el apellido del guardador fallecido

Adopción por el tutor del NNA: El código prevé que el tutor solo puede adoptar a su pupilo una vez extinguidas las
obligaciones emergentes de la tutela. El espíritu de la norma es evitar que el tutor evada las obligaciones que
derivan de su gestión como administrador de los bienes del menor que se encuentra bajo su tutela, ya que si el tutor
ha malversado bienes de su pupilo, este convertido en hijo adoptivo difícilmente pudiera reclamar judicialmente el
cobro o la rendición de cuentas del adoptante durante su gestión como tutor.

Incidencia de la ley 26618 (matrimonio igualitario)

Artículo 326: El hijo adoptivo llevará el primer apellido del adoptante, o su apellido compuesto si éste solicita su
agregación. En caso que los adoptantes sean cónyuges de distinto sexo, a pedido de éstos podrá el adoptado llevar el
apellido compuesto del padre adoptivo o agregar al primero de éste, el primero de la madre adoptiva. En caso que
los cónyuges sean de un mismo sexo, a pedido de éstos podrá el adoptado llevar el apellido compuesto del cónyuge
del cual tuviera el primer apellido o agregar al primero de éste, el primero del otro. Si no hubiere acuerdo acerca de
qué apellido llevará el adoptado, si ha de ser compuesto, o sobre cómo se integrará, los apellidos se ordenarán
alfabéticamente.
En uno y otro caso podrá el adoptado después de los DIECIOCHO (18) años solicitar esta adición.
Todos los hijos deben llevar el apellido y la integración compuesta que se hubiera decidido para el primero de los
hijos.
Si el o la adoptante fuese viuda o viudo y su cónyuge no hubiese adoptado al menor, éste llevará el apellido del
primero, salvo que existieran causas justificadas para imponerle el del cónyuge premuerto.
ARTICULO 17. — Sustitúyese el artículo 332 del Código Civil, el que quedará redactado de la siguiente forma:
Artículo 332: La adopción simple impone al adoptado el apellido del adoptante, pero aquél podrá agregar el suyo
propio a partir de los DIECIOCHO (18) años
El cónyuge sobreviviente adoptante podrá solicitar que se imponga al adoptado el apellido de su cónyuge premuerto
si existen causas justificadas.

Separación de hecho y adopción. Uniones convivenciales y adopción:

Articulo 603:”la adopción por persona casada o en unión convivencial puede ser unipersonal si:

1) El cónyuge o conviviente ha sido declarado persona incapaz o de capacidad restringida, y la sentencia le impide
presta consentimiento válido para este acto. En este caso debe oírse al Ministerio Público y al curador o apoyo y, si
es el pretenso adoptante, se debe designar un curador o apoyo ad litem;

2) Los cónyuges están separados de hecho.

Adopción conjunta de personas divorciadas o convivientes separados:

Articulo 604:”las personas que durante el matrimonio o la unión convivencial mantuvieron estado de madre o padre
con una persona menor de edad, puede adoptarla conjuntamente aun después del divorcio o cesada la unión. El juez
debe valorar especialmente la incidencia de la ruptura al ponderar el interés superior del niño.”

Adopción conjunta y fallecimiento de uno de los guardadores:

Articulo 605:”cuando la guarda con fines de adopción del niño, niña o adolecente se hubiese otorgado durante el
matrimonio o unión convivencial y el periodo legal se completa después del fallecimiento de uno de los cónyuges o
convivientes, el juez puede otorgar la adopción al sobreviviente y generar vínculos jurídicos de filiación con ambos
integrantes de la pareja.

En este caso, el adoptado lleva el apellido del adoptante, excepto que fundado en el derecho a la identidad se
peticione agregar o anteponer el apellido de origen o el apellido del guardador fallecido.”

La reforma mantiene la adopción unipersonal como la bipersonal o conjunta, con total independencia de la
orientación sexual de la o las personas, pretensas adoptantes por

aplicación del principio de igualdad y no discriminación que introdujo la ley 26.618 y que la reforma respeta por
manda legal y constitucional de conformidad con el principio de no regresividad. ¿Cuál es la ampliación que propone
la reforma? Lo que ya varias voces jurisprudenciales admitieron y voces doctrinarias vienen bregando hace años: la
adopción conjunta a parejas no casadas, siendo la calidad para ser adoptante el elemento central en interés superior
del niño a ser adoptado y no si la pareja ha o no ha formalizado el vínculo de pareja.

¿Y si dos personas se divorcian en el marco de un proceso de adopción? También pueden adoptar en forma
conjunta, ya que el fracaso en la relación entre los adultos no es un obstáculo para reconocer la aptitud para ser
padres adoptivos, máxime cuando el niño ya convive en ese grupo familiar cuyos adultos se separaron pero se
mantiene intacto el cuidado y afecto hacia el niño. Además se flexibilizan ciertos requisitos como ser la edad para
adoptar, la cual disminuye de 30 a 25 años, aclarándose que cuando se trata de una adopción conjunta (sea por
parte de un matrimonio o una unión), es suficiente con que uno de ellos cumpla con este mínimo etáreo. Otro
cambio sustancial que involucra a quienes pueden adoptar se refiere a la residencia permanente en el país por un
lapso de 5 años anteriores a la guarda; si bien se mantiene esta previsión se aclara que este requisito no rige para las
personas de nacionalidad argentina o naturalizada en el país.

Por último se agrega un requisito: el estar debidamente inscripto en el correspondiente registro de adoptantes. ¿Por
qué? La inscripción es un requisito esencial ya que toda persona que pretende adoptar un niño debe estar preparada
para adoptar y este análisis deben llevarlo adelante organismos especializados como los registros locales que
cuentan con la versación en la difícil y compleja tarea de evaluar la aptitud para adoptar. Máxime cuando son los
jueces quienes tienen la gran responsabilidad de elegir los mejores padres adoptivos para un niño de una nómina
que suele ser extensa, y ellos carecen de la formación necesaria para llevar adelante esta tarea, por lo cual necesitan
de la asistencia de los registros de adoptantes. ¿Acaso una buena elección de los futuros padres adoptivos de un
niño no permitirá evitar conflictos de extrema gravedad como son los casos de “devoluciones”?

- REQUISITOS DEL ADOPTADO Art. 597.— Personas que pueden ser adoptadas. Pueden ser adoptadas las personas
menores de edad no emancipadas declaradas en situación de adoptabilidad o cuyos padres han sido privados de la
responsabilidad parental. Excepcionalmente, puede ser adoptada la persona mayor de edad cuando: a) se trate del
hijo del cónyuge o conviviente de la persona que pretende adoptar; b) hubo posesión de estado de hijo mientras era
menor de edad, fehacientemente comprobada. Como requisito general se exige que el adoptado sea menor de edad
para conceder la adopción. Se debe ser menor de edad al tiempo en que se otorga la guarda judicial, ya que la
sentencia de adopción se retrotrae al momento del otorgamiento aquella, salvo en el supuesto de adopción del hijo
del cónyuge.

- ADOPCION DE VARIOS ADOPTADOS

Pueden ser adoptadas varias personas, simultanea o sucesivamente: Art. 598.— Pluralidad de adoptados. Pueden
ser adoptadas varias personas, simultánea o sucesivamente. La existencia de descendientes del adoptante no impide
la adopción. En este caso, deben ser oídos por el juez, valorándose su opinión de conformidad con su edad y grado
de madurez. Todos los hijos adoptivos y biológicos de un mismo adoptante son considerados hermanos entre sí. El
juez de la adopción cuenta con la facultad de otorgar la adopción plena o simple según las circunstancias y
atendiendo fundamentalmente al interés superior del niño.- La posibilidad de adopciones múltiples facilita la
adopción de hermanos biológicos. Si bien la regla en cuanto a grupos de hermanos es la inseparabilidad de ellos,
cuando esta no es posible es preferente que los menores sean dados en adopción y no que se mantengan en
establecimientos asistenciales.

DESCENDENCIA DEL ADOPTADO. Derecho a conocer los orígenes. Acción autónoma por parte del adoptado:
Artículo 596:”el adoptado con edad y grado de madurez suficiente tiene derecho a conocer los datos relativos a su
origen y puede acceder, cuando lo requiera, al expediente judicial y administrativo en el que se tramito su adopción
y a otra información que conste en registros judiciales o administrativos.
Si la persona es menor de edad, el juez puede disponer la intervención del equipo técnico del tribunal, del organismo
de protección o del registro de adoptantes para que presten colaboración. La familia adoptante puede solicitar
asesoramiento en los mismos organismos.
El expediente judicial y administrativo debe contener la mayor cantidad de datos posibles de la identidad del niño y
su familia de origen referidos a ese origen, incluidos los relativos a enfermedades transmisibles.
Los adoptantes deben comprometerse expresamente a hacer conocer sus orígenes al adoptado, quedando
constancia de esa declaración en el expediente.
Además del derecho a acceder a los expedientes, el adoptado adolecente esta facultado para iniciar una acción
autónoma a los fines de conocer sus orígenes. En este aso, debe constar con asistencia letrada.”

El derecho a conocer el origen implica la posibilidad para el adoptado de saber quienes fueron sus progenitores
biológicos sin crear lazos jurídicos.

El nuevo Código mejora, amplía y fortalece la regulación del derecho del adoptado a conocer sus orígenes, noción
más amplia que la de realidad biológica a la que alude el Código sustituido.

La novedad es que no sólo el adoptado mayor de edad podrá acceder a su expediente de adopción, sino que
también podría hacerlo en la menor edad. En este sentido, se menciona el acceso no sólo al proceso de adopción,
sino a todo expediente o cualquier fuente de información relativos al origen, biografía o historia del adoptado. Sin
embargo, no se establece una edad determinada a partir de la cual se puede ejercer de manera personal este
derecho; sino que se deja abierto para que todo adoptado, con madurez suficiente, si tiene inquietud acerca de sus
orígenes, pueda ver satisfecho ese derecho. En este sentido, depende de una valoración que el juez haga en
concreto sobre el niño que aspira a acceder a su expediente.

En atención a que los niños y adolescentes merecen una protección especial, se prevé que cuando el adoptado no ha
alcanzado aún la mayoría de edad, el juez puede disponer la intervención de profesionales especializados. Además,
se pondera que la familia adoptiva pueda solicitar asesoramiento ante estos mismos profesionales o servicios
especializados e interdisciplinarios. La ley proyectada inteligentemente prevé esta necesidad de contención para el
menor de edad.
La norma obliga a los adoptantes a hacer conocer su origen al adoptado.

Se amplía el ámbito material o fuentes de información sobre los orígenes, no circunscribiéndose al proceso de
adopción sino a todo ámbito –judicial o administrativo- en el que se pueda localizar información referida al origen;
esta información es de tal relevancia, que se establece la obligación de resguardar dicha fuente que permitirá al
adoptado el día de mañana conocer su historia; se recepta una doble ampliación, no sólo con relación a los
organismos o personas que pueden brindar dicha información, sino también que todos ellos están a disposición para
asesorar no solo a los adoptados sino también a los adoptantes.
Se regula una acción autónoma a los fines de conocer los orígenes, que puede ser ejercida por el adoptado
adolescente, quien deberá contar con asistencia letrada. De este modo, se logra un equilibrio entre el derecho a la
identidad y la irrevocabilidad de la adopción plena, siendo posible que el adoptado conozca sobre sus orígenes, sin
que ello altere el vínculo jurídico adoptivo.

3) DECLARACION JUDICIAL DEL ESTADO DE ADOPTABILIDAD. PLAZOS

Es aquel procedimiento con reglas propias para demarcar correctamente el rol de familia de origen y definir la
desvinculación del NNA con dicha familia de origen.

Resulta presupuesto de derecho para que un NNA se encuentre en condiciones de ser entregado en guarda con fines
adoptivos.

El código tipifica la figura y dispone normativamente los tres diferentes supuestos fácticos y jurídicos que podrían
dar lugar a la declaración judicial del estado de adoptabilidad:
Art. 607.— Supuestos. La declaración judicial de la situación de adoptabilidad se dicta si:

a) un niño, niña o adolescente no tiene filiación establecida o sus padres han fallecido, y se ha agotado la búsqueda
de familiares de origen por parte del organismo administrativo competente en un plazo máximo de treinta días,
prorrogables por un plazo igual sólo por razón fundada;

b) los padres tomaron la decisión libre e informada de que el niño o niña sea adoptado. Esta manifestación es válida
sólo si se produce después de los cuarenta y cinco días de producido el nacimiento;

c) las medidas excepcionales tendientes a que el niño, niña o adolescente permanezca en su familia de origen o
ampliada, no han dado resultado en un plazo máximo de ciento ochenta días.
Vencido el plazo máximo sin revertirse las causas que motivaron la medida, el organismo administrativo de
protección de derechos del niño, niña o adolescente que tomó la decisión debe dictaminar inmediatamente sobre la
situación de adoptabilidad. Dicho dictamen se debe comunicar al juez interviniente dentro del plazo de veinticuatro
horas. La declaración judicial de la situación de adoptabilidad no puede ser dictada si algún familiar o referente
afectivo del niño, niña o adolescente ofrece asumir su guarda o tutela y tal pedido es considerado adecuado al
interés de éste.

El juez debe resolver sobre la situación de adoptabilidad en el plazo máximo de noventa días. Declarar ese estado
jurídico demanda a la jurisdicción considerar y verificar el cumplimiento de determinados presupuestos legales:

a) Haber superado la instancia ejecutiva b) Instancia jurisdiccional de guarda del NNA en hogares alternativos
familiares o en familias de acogimiento c) La petición del estado de adoptabilidad por parte de la Asesoria de
Incapaces El órgano administrativo debe emitir un dictamen donde describe la situación socio familiar del NNA y
considerar en su caso que el NNA se encuentra situación de adoptabilidad, es decir en una situación donde no han
dado resultados las gestiones administrativo –sociales –políticas, para que el NNA permanezca en su familia de
origen o ampliada y no hay referentes afectivos que quieran o puedan asumir su guarda o la tutela.

Al dictamen de situación de adoptabilidad del NNA emitido por el órgano administrativo y comunicado al órgano
jurisdiccional, le sigue la declaración judicial de la situación de adoptabilidad, que no puede ser dictada si algún
familiar o referente afectivo del niño ofrece asumir su guarda o tutela y tal pedido es considerado adecuado al
interés de este.

SUJETOS DEL PROCESO

1) Con carácter de parte, el NNA si tiene edad y grado de madurez suficiente, participara en el proceso con asistencia
letrada.
2) Con carácter de parte, los padres u otros representantes legales del NNA
3) En posición jurídica, sin carácter de parte, el organismo administrativo, que participo en la etapa extrajudicial
4) En posición jurídica, sin carácter de parte, el Ministerio Publico
5) Referentes familiares y/o allegados afectivos, sin carácter de partes; respecto de ellos, el juez también puede
escucharlos y considerar sus manifestaciones, siempre que ello haga al mejor interés del NNA.

Reglas del procedimiento

a) Tramita ante el juez que ejercio el control de legalidad de las medidas excepcionales
b) Es obligatoria la entrevista personal del juez con los padres, si existen, y con el NNA cuya situación de
adoptabilidad se tramita
c) La sentencia debe disponer que se remitan al juez interviniente en un plazo no mayor a los 10 días el o los legajos
seleccionados por el registro de adoptantes y el organismo administrativo que corresponda a los fines de proceder a
dar inicio en forma inmediata al proceso de guarda con fines de adopción.

El código unificado dispone que la sentencia de privación de responsabilidad parental equivale a la declaración
judicial de estado de adoptabilidad, por lo tanto no es necesario un proceso de privación de de la responsabilidad
parental que habilite el inicio del proceso de adopción.

Art. 610.— Equivalencia. La sentencia de privación de la responsabilidad parental equivale a la declaración judicial en
situación de adoptabilidad.
Una vez que el juez de familia declara judicialmente al NNA en situación de adoptabilidad, es el momento procesal
que juntamente con el Ministerio Pupilar se emprende la búsqueda de esa “familia” alternativa que va a satisfacer el
derecho humano de ese NNA de vivir en ella, de sentirse contenido y protegido por otro grupo familiar que no es el
de su origen.

4) Tipos de guarda:

GUARDA CON FINES ADOPTIVOS

El nuevo código regula la guarda con fines adoptivos en los art 611 a 614. No se trata de un segundo proceso, sino
como una consecuencia jurídica directa de la sentencia que declara la situación de adoptabilidad del NNA, cuyo
único objetivo – finalidad es evaluar el vinculo afectivo que se genera entre la persona o pareja debidamente
registrada y seleccionada por el juez y el NNA.

La guarda con fines de adopción debe ser discernida inmediatamente por el juez que dicta la sentencia que declara
la situación de adoptabilidad. La normativa se centra en la elección de los pretensos adoptantes y en el
otorgamiento de un lazo para verificar si el vínculo afectivo entre estos y el NNA se ha construido o se encuentra en
eficaz construcción.

Art. 611.— Guarda de hecho. Prohibición. Queda prohibida expresamente la entrega directa en guarda de niños,
niñas y adolescentes mediante escritura pública o acto administrativo, así como la entrega directa en guarda
otorgada por cualquiera de los progenitores u otros familiares del niño La transgresión de la prohibición habilita al
juez a separar al niño transitoria o definitivamente de su pretenso guardador, excepto que se compruebe
judicialmente que la elección de los progenitores se funda en la existencia de un vínculo de parentesco, entre éstos y
el o los pretensos guardadores del niño. Ni la guarda de hecho, ni los supuestos de guarda judicial o delegación del
ejercicio de la responsabilidad parental deben ser considerados a los fines de la adopción.

Art. 612— Competencia. La guarda con fines de adopción debe ser discernida inmediatamente por el juez que dicta
la sentencia que declara la situación de adoptabilidad. El juez que declaro la situación de adoptabilidad seleccionara
a los pretensos adoptantes de la nomina remitida por el registro de adoptantes.

A los fines de la selección, convocara a autoridad administrativa que intervino en el proceso de la declaración en
situación de adoptabilidad, organismo que también puede comparecer de manera espontánea.

Para la selección, se deben tomar en cuenta, entre otras, las siguientes pautas: a) las condiciones personales, edades
y aptitudes del o de los pretensos adoptantes; b) su idoneidad para cumplir con las funciones de cuidado y
educación; c) sus motivaciones y expectativas frente a la adopción; d) el respeto asumido frente al derecho a la
identidad y origen del NNA.- El juez debe citar al NNA cuya opinión debe ser tenida en cuenta según su edad y su
grado de madurez. Cumplidas las medidas antes descriptas, el juez dicta sentencia de guarda con fines de adopción.
El plazo de guarda no puede excederlos 6 meses.

- Art. 613.— Elección del guardador e intervención del organismo administrativo. El juez que declaró la situación de
adoptabilidad selecciona a los pretensos adoptantes de la nómina remitida por el registro de adoptantes. A estos
fines, o para otras actividades que considere pertinentes, convoca a la autoridad administrativa que intervino en el
proceso de la declaración en situación de adoptabilidad, organismo que también puede comparecer de manera
espontánea. Para la selección, y a los fines de asegurar de un modo permanente y satisfactorio el desarrollo pleno
del niño, niña o adolescente, se deben tomar en cuenta, entre otras pautas: las condiciones personales, edades y
aptitudes del o de los pretensos adoptantes; su idoneidad para cumplir con las funciones de cuidado, educación; sus
motivaciones y expectativas frente a la adopción; el respeto asumido frente al derecho a la identidad y origen del
niño, niña o adolescente. El juez debe citar al niño, niña o adolescente cuya opinión debe ser tenida en cuenta según
su edad y grado de madurez.

Art. 614.— Sentencia de guarda con fines de adopción. Cumplidas las medidas dispuestas en el artículo 613, el juez
dicta la sentencia de guarda con fines de adopción. El plazo de guarda no puede exceder los seis meses.

LA GUARDA DE HECHO
El art 611 prohíbe expresamente la entrega directa en guarda del NNA mediante escritura publica o acto
administrativo, así como la entrega directa en guarda otorgada por cualquiera de los progenitores u otras familiares
del niño.- La sanción legal, frente al incumplimiento de la mentada prohibición habilita al juez a separa el NNA
transitoria o definitivamente de su guardador, excepto que se compruebe judicialmente que la elección de los
progenitores se funda en la existencia de un vinculo de parentesco, entre estos y el o los pretensos guardadores del
NNA.- La falta de inscripción de los pretensos adoptantes en el Registro es causal de nulidad absoluta de la adopción
torgada, ello conforme el art 634 inc h) porque la registración implica la previa evaluación técnico científico social de
los pretensos padres hecha por el Estado.

5) PROCESO DE ADOPCION. JUEZ COMPETENTE

El juez competente en el juicio de adopción resulta aquel que otorgo la guarda con fines de adopción, o a elección de
los pretensos adoptantes, el del lugar en el que el niño tiene su centro de vida si el traslado fue considerado en esa
decisión.

Sin embargo, no se establece una edad determinada a partir de la cual se puede ejercer de manera personal este
derecho; sino que se deja abierto para que todo adoptado, con madurez suficiente, si tiene inquietud acerca de sus
orígenes, pueda ver satisfecho ese derecho. En este sentido, depende de una valoración que el juez haga en
concreto sobre el niño que aspira a acceder a su expediente.

En atención a que los niños y adolescentes merecen una protección especial, se prevé que cuando el adoptado no ha
alcanzado aún la mayoría de edad, el juez puede disponer la intervención de profesionales especializados. Además,
se pondera que la familia adoptiva pueda solicitar asesoramiento ante estos mismos profesionales o servicios
especializados e interdisciplinarios. La ley proyectada inteligentemente prevé esta necesidad de contención para el
menor de edad.

La norma obliga a los adoptantes a hacer conocer su origen al adoptado.

Se amplía el ámbito material o fuentes de información sobre los orígenes, no circunscribiéndose al proceso de
adopción sino a todo ámbito –judicial o administrativo- en el que se pueda localizar información referida al origen;
esta información es de tal relevancia, que se establece la obligación de resguardar dicha fuente que permitirá al
adoptado el día de mañana conocer su historia; se recepta una doble ampliación, no sólo con relación a los
organismos o personas que pueden brindar dicha información, sino también que todos ellos están a disposición para
asesorar no solo a los adoptados sino también a los adoptantes.

Se regula una acción autónoma a los fines de conocer los orígenes, que puede ser ejercida por el adoptado
adolescente, quien deberá contar con asistencia letrada. De este modo, se logra un equilibrio entre el derecho a la
identidad y la irrevocabilidad de la adopción plena, siendo posible que el adoptado conozca sobre sus orígenes, sin
que ello altere el vínculo jurídico adoptivo.

El proceso de adopción comienza con la declaración judicial de la situación de adoptabilidad:

articulo 607:” la declaración judicial de la situación de adoptabilidad se dicta si:

1) Un niño, niña o adolecente no tiene filiación establecida o sus padres han fallecido, y se ha agotado la búsqueda
de familiares de origen por parte del organismo administrativo competente en un plazo máximo de treinta días,
prorrogables por un plazo igual solo por razones fundadas;
2) Los padres tomaron la decisión libre e informada de que el niño o niña sea adoptado. Esta manifestación es valida
solo si se produce después de los cuarenta y cinco días de producido el nacimiento;
3) Las medidas excepcionales tendientes a que el niño, niña o adolecente permanezca en su familia de origen o
ampliada, no han dado resultado en un plazo máximo de ciento ochenta días. Vencido el plazo máximo sin revertirse
las causas que motivaron la medida, el organismo administrativo de protección de derechos del niño, niña o
adolecente que tomó la decisión debe dictaminar inmediatamente sobre la situación de adoptabilidad. Dicho
dictamen se debe comunicar al juez interviniente dentro del plazo de veinticuatro horas.
La declaración judicial de la situación de adoptabilidad no puede ser dictada si algún familiar o referente afectivo del
niño, niña o adolecente ofrece asumir su guarda o tutela y tal pedido es considerado adecuado al interés de este.
El juez debe resolver sobre la situación de adoptabilidad en el plazo máximo de noventa días.”
El artículo no tiene antecedentes en el ordenamiento de Vélez. En la práctica de nuestros tribunales en general la
declaración de adoptabilidad se dictaba en el mismo acto en el que se otorgaba la guarda con fines de adopción en
los términos del art. 317 del texto de Vélez.
El artículo recibe una práctica judicial consolidada (la declaración judicial de situación de adoptabilidad) como un
procedimiento con reglas propias para demarcar correctamente el rol de la familia de origen y de la pretensa
adoptante en todo el proceso hasta la adopción de un niño. Se regulan tres supuestos diferentes que deben ser
analizados por separado:
a) niños sin filiación establecida o progenitores fallecidos, siempre que se haya agotado la búsqueda de familiares
En este caso, la autoridad administrativa debe agotar la búsqueda de los familiares de origen por un plazo de 30 días
prorrogables por otros 30 días, si median razones fundadas.
Si algún familiar o referente afectivo del niño, niña o adolescente ofrece asumir su guarda o tutela y el pedido es
considerado adecuado, no se puede dictar la declaración de adoptabilidad.
Si, por el contrario, se agotó el plazo sin que se encontraran a los familiares de origen, o éstos no tuvieren intención
de recibir al niño, se debe dictar la declaración judicial de adoptabilidad.
b) la decisión libre e informada de los padres de que su hijo sea adoptado, manifestación que no puede ser
expresada dentro de los 45 días de nacido el niño
Los padres tienen la facultad de decidir si quieren dar a su hijo en adopción mediante una declaración en tal sentido.
Cabe preguntarse cómo juega este inciso con lo dispuesto en la misma norma relativa a la presencia de algún
familiar o referente afectivo del niño o niña dispuesto a asumir su guarda o tutela. En este caso, si el juez considera
que ello es valioso para el niño, no dictará la declaración de adoptabilidad.
Puede suceder que exista desacuerdo entre los padres y estos familiares o referentes, en ese caso la decisión de los
padres cede frente al principio por el cual el niño debe permanecer en su familia de sangre.
La norma nos despierta todo tipo de dudas, piénsese el caso en que una joven que aún vive con sus padres da a luz y
no quiere asumir la maternidad de su hijo/a, si sus progenitores ofrecen el cuidado el hijo continuará en ese grupo
familiar donde convivirá con su madre que manifestó su deseo de no criarla.
Entendemos que supuestos como éste podrían ser perjudiciales para el superior interés del niño.
Claro está que la sola voluntad de los padres no es suficiente cuando existen familiares o referentes dispuestos a
ejercer la guarda o tutela del niño.
Otro supuesto preocupante es que el referente o familiar desista más adelante de la guarda que ofreció, el niño
sufrirá un nuevo abandono.
En el caso que los padres sean menores de edad, ellos no pueden entregar a sus hijos en adopción sin el
asentimiento de quienes tienen su responsabilidad parental de conformidad a lo dispuesto por el art. 644 de este
Código.
c) comprobación judicial, previo dictamen del organismo administrativo interviniente, de que las medidas
excepcionales dictadas y trabajadas en el marco del sistema de protección integral de niños, niñas y adolescentes en
los plazos que establece la ley 26.061 no dieron resultado positivo, por lo cual el niño no puede regresar a su familia
de origen o ampliada
Cuando las niñas, niños y adolescentes estuvieran temporal o permanentemente privados de su medio familiar o
cuyo superior interés exija que no permanezcan en ese medio, se pueden tomar medidas excepcionales tendientes a
que el niño permanezca en su familia de origen o ampliada, por un plazo de 180 días; si estas medidas no dan
resultado, el juez debe dictaminar sobre la situación de adoptabilidad y comunicárselo al juez en el plazo de 24 hs.
De este modo, podemos observar cómo el Código armoniza con la ley 26.061 (sistema de protección integral de
derechos de niños y adolecentes) y procura que todas las partes que intervienen gocen de las debidas garantías
constitucionales, tanto en los procedimientos administrativos como en los procesos judiciales conducentes a la
adopción de un niño.
En caso que el órgano administrativo dictamine que el niño no se encuentra en situación de adoptabilidad, dicha
decisión, como todo acto administrativo, será recurrible sea por la vía jerárquica o mediante las acciones judiciales
correspondientes de acuerdo a la normativa contencioso administrativo de cada jurisdicción.
La reforma es realista. Sabe que una gran cantidad de situaciones que podrían dar lugar a la adopción provienen de
una intervención previa en el marco del llamado “Sistema de Protección Integral de Derechos de Niños y
Adolescentes” que regula la ley 26.061. Se trata de una normativa central y básica en todo lo referido a los derechos
humanos de niños y adolescentes y por lo tanto, tratándose de la regulación de una figura como la adopción
directamente vinculada a la protección de este grupo social, la interacción entre ambas normativas es ineludible. Así
lo hace la reforma. ¿En qué aspectos se observa este puente legislativo? Un claro ejemplo es el previsto en el inciso
c) del art. 607 que se refiere a cuándo o ante qué casos un juez puede decidir la declaración de adoptabilidad de un
niño. Una de las causas de esta declaración involucra, precisamente, el mencionado sistema de protección; y es
cuando en dicho contexto se ha trabajado de manera profunda e interdisciplinaria con la familia de origen y/o
ampliada durante un tiempo razonable y expresamente previsto por la ley 26.061 (90 días, prorrogable por otros 90
días más por razones fundadas), y no haya sido posible revertir la situación de vulnerabilidad planteada y por ende,
que el niño no pueda regresar a su núcleo familiar para ver satisfecho su derecho a vivir en familia. Pero este no es el
único supuesto en el cual se muestra este necesario entrelazamiento entre el sistema de protección integral y la
adopción. Otro se refiere al papel que juegan los organismos administrativos de protección de derechos en todo el
proceso adoptivo. ¿Por qué? Porque muchos casos de adopción provienen de situaciones en donde intervino en su
momento dicho organismo.
Son los profesionales que lo integran quienes conocen realmente a los niños, ya que no sólo han intentado que
regrese a su familia de origen o ampliada, sino también quienes le han elegido el hogar o la familia cuidadora con la
cual vivir hasta que se decida en definitiva – nada más ni nada menos- con quienes vivirá de manera permanente.
¿Acaso en el interés superior del niño no es imperativo revalorizar el rol de aquellos organismos- personas que van
generando un vínculo y empatía con el niño en esta especial situación? La respuesta afirmativa se impone. Esto es lo
que hace la reforma. Reconocer la complejidad de la adopción implica aceptar y valorar a todos los que trabajan en
este iter o proceso que comprende la adopción de un niño. De este modo, la reforma le da un espacio a todos los
que, de algún modo, participan en el camino de la adopción.
Los tiempos de la adopción: Un primer y necesario proceso es la mencionada “declaración judicial de la situación de
adoptabilidad”. Se trata de un proceso que en la práctica, se lleva adelante pero sin una normativa expresa, por lo
cual, cada juez actúa según su saber y entender. Dejar atrás este silencio normativo en una primera etapa central
para la adopción como lo es, nada más ni nada menos, saber si un niño se encuentra o no en situación de ser
adoptado, constituye un avance elocuente que trae consigo la reforma. Y un segundo proceso, el de adopción
propiamente dicho que se regula en los arts. 615 a 618. ¿Y la guarda para adopción? No es un proceso judicial más
sino que es lo que tiene que ser: la figura que se otorga de manera provisoria para evaluar si la familia pretensa
adoptante que se selecciona, efectivamente, genera empatía y lazo afectivo con el niño. También fundado en el
“factor tiempo” y en el mencionado principio de realidad –en este caso, de las dudas o incertidumbres que presenta
la regulación actual y que tanto la doctrina como la jurisprudencia esperan respuesta-
, en el Anteproyecto se dispone que la sentencia de privación de la responsabilidad parental equivale a la declaración
judicial del estado de adoptabilidad (art. 610), por lo tanto, no es necesario reeditar y así extender ninguna decisión
tendiente a la adopción de un niño cuyos padres han sido privados de su responsabilidad parental. En esta misma
línea, el proyecto establece de manera expresa que una vez cumplido el período de guarda “el juez interviniente, de
oficio o a pedido de parte o de la autoridad administrativa, inicia el proceso de adopción” (art. 616), cuestión hoy
totalmente silenciada en la normativa vigente. De este modo, la preocupación por el “factor tiempo” no sólo está en
el principio del proceso –en sentido amplio- de la adopción que suele ser el cuándo y cómo llegar a la decisión de
adoptabilidad, sino también durante todas las instancias para llegar a la sentencia que emplaza a un niño en su
estado de hijo adoptivo.
Partes y sujetos intervinientes. Citación a los progenitores biológicos. Juez competente:

Articulo 608:”el procedimiento que concluye con la declaración judicial de la situación de adoptabilidad requiere la
intervención:

1) Con carácter de parte, del niño, niña o adolecente, si tiene edad y grado de madurez suficiente, quien comparece
con asistencia letrada;
2) Con carácter de parte, de los padres u otros representantes legales del niño, niña o adolecente;
3) Del organismo administrativo que participó en la etapa extrajudicial;
4) Del Ministerio Público.

El juez también puede escuchar a los parientes y otros referentes afectivos.”

Articulo 609:” se aplican al procedimiento para obtener la declaración judicial de la situación de adoptabilidad, las
siguientes reglas:

1) Tramita ante el juez que ejerció el control de legalidad de las


medidas excepcionales;
2) Es obligatoria la entrevista personal del juez con los padres, si existen, y con el niño, niña o adolecente cuya
situación de adoptabilidad se tramita;
3) La sentencia debe disponer que se remita al juez interviniente en un plazo no mayor a los diez días el o los legajos
seleccionados por el registro de adoptantes y el organismo administrativo que corresponda, a los fines de proceder a
dar inicio en forma inmediata al proceso de guarda con fines de adopción.”
Puede ocurrir que no hayan existido medidas excepcionales, en este caso la regla que fija la competencia es la
establecida en el artículo 716, que especialmente dice que: En los procesos referidos a responsabilidad parental,
guarda, cuidado, régimen de comunicación, alimentos, "adopción" y otros que deciden en forma principal o que
modifican lo resuelto en otra jurisdicción del territorio nacional sobre derechos de niños, niñas y adolescentes, es
competente "el juez del lugar donde la persona menor de edad tiene su centro de vida".

Equivalencia: articulo 610:”la sentencia de privación de la responsabilidad parental equivale a la declaración judicial
en situación de adoptabilidad.”

Art. 615.— Competencia.

Es juez competente el que otorgó la guarda con fines de adopción, o a elección de los pretensos adoptantes, el del
lugar en el que el niño tiene su centro de vida si el traslado fue tenido en consideración en esa decisión. Una vez
cumplido el periodo de guarda se da inicio al proceso de adopción. Se trata de un proceso que tiene por objeto el
dictado de una sentencia constitutiva que apareja el emplazamiento de una persona en el estado de hijo adoptivo,
sea que suprima el anterior (adopción pena) o que lo mantenga (adopción simple) El NNA es parte del proceso de
adopción, en el anterior código resultaban partes los adoptantes y el Ministerio Público de Menores. El juez ejerce la
dirección y hasta el impulso inmediato del juicio de adopción luego de otorgar la guarda adoptiva. Debe oír al NNA
en el proceso y como se señalara si el NNA es mayor de 10 años debe prestar consentimiento para su adopción. En el
anterior código, el juez escuchaba al NNA si lo consideraba conveniente.

- Art. 616.— Inicio del proceso de adopción. Una vez cumplido el período de guarda, el juez interviniente, de oficio o
a pedido de parte o de la autoridad administrativa, inicia el proceso de adopción.

PARTES Y SUJETOS INTERVINIENTES

Partes: Son parte los pretensos adoptantes, el pretenso adoptado, el Ministerio Publico y la autoridad administrativa
que intervino en el proceso de la declaración en situación de adoptabilidad

Art. 617.— Reglas del procedimiento. Se aplican al proceso de adopción las siguientes reglas: a) son parte los
pretensos adoptantes y el pretenso adoptado; si tiene edad y grado de madurez suficiente, debe comparecer con
asistencia letrada;

b) el juez debe oír personalmente al pretenso adoptado y tener en cuenta su opinión según su edad y grado de
madurez;
c) debe intervenir el Ministerio Público y el organismo administrativo;
d) el pretenso adoptado mayor de diez años debe prestar consentimiento expreso;
e) las audiencias son privadas y el expediente, reservado. Asistencia letrada: Tanto los pretensos adoptantes como
el NNA que cuente con edad yngrado de madurez, deben contar con asistencia letrada; también la autoridad
administrativa que se presente en el proceso, ya que según el código reviste carácter de parte y como tal debe
cumplir con esa requisitoria procesal.

- Contacto personal del juez y consentimiento del NNA: El juez debe oír personalmente al pretenso adoptado y tener
en cuenta su opinión. El pretenso adoptado mayor de 10 años debe prestar consentimiento expreso.

- Carácter de las audiencias y expediente: Las audiencias y el expediente tienen carácter reservado, ellos como
consecuencia de la preservación de la intimidad de las partes intervinientes en el proceso y especialmente del NNA.

- Sentencia de Adopción: Se trata de una sentencia constitutiva, que apareja el emplazamiento de una persona en el
estado de hijo adoptivo. La sentencia que otorga la adopción tiene efectos retroactivos a la fecha de la sentencia que
torgo la guarda con fines adoptivos, excepto cuando se trata de la adopción del hijo del cónyuge o conviviente, cuyos
efectos se retrotraen a la fecha de promoción de la acción de adopción, ello como consecuencia de que en la
adopción de integración no hay un proceso previo de guarda con fines adoptivos, ni proceso de declaración de la
situación de adoptabilidad.

6) CLASES DE ADOPCION El código enumera tres tipos de adopción:

Art. 620.— Concepto. La adopción plena confiere al adoptado la condición de hijo y extingue los vínculos jurídicos
con la familia de origen, con la excepción de que subsisten los impedimentos matrimoniales. El adoptado tiene en la
familia adoptiva los mismos derechos y obligaciones de todo hijo. La adopción simple confiere el estado de hijo al
adoptado, pero no crea vínculos jurídicos con los parientes ni con el cónyuge del adoptante, excepto lo dispuesto en
este Código. La adopción de integración se configura cuando se adopta al hijo del cónyuge o del conviviente y genera
los efectos previstos en la Sección 4a de este Capítulo. Facultades Judiciales:

Art. 621.— Facultades judiciales. El juez otorga la adopción plena o simple según las circunstancias y atendiendo
fundamentalmente al interés superior del niño. Cuando sea más conveniente para el niño, niña o adolescente, a
pedido de parte y por motivos fundados, el juez puede mantener subsistente el vínculo jurídico con uno o varios
parientes de la familia de origen en la adopción plena, y crear vínculo jurídico con uno o varios parientes de la familia
del adoptante en la adopción simple. En este caso, no se modifica el régimen legal de la sucesión, ni de la
responsabilidad parental, ni de los impedimentos matrimoniales regulados en este Código para cada tipo de
adopción

A) ADOPCION PLENA Confiere al adoptado una filiación que sustituye a la de origen y lo hace quedar emplazado en
carácter similar, simétrico al de hijo biológico del adoptante, con las consecuentes relaciones jurídicas con el resto
de la familia de este, se crea estado jurídico de familia en relación a su familia adoptiva y se extingue el estado
jurídico de familia que nació con el y su familia biológica. Se produce un desplazamiento integral de la familia de
origen, como consecuencia de ello, un desplazamiento también integral con la del adoptante.

El art 624 destaca que la adopción del hijo es causa de extinción de la responsabilidad parental de sus padres, sin
perjuicio de la posibilidad de restitución de revocación o nulidad de la adopción.

Caracteres y pautas de aplicación legal: La adopción plena es irrevocable, sin perjuicio de la facultad del adoptado
de indagar a través de una acción autónoma, respecto de sus orígenes, de accionar por alimentos o cuestiones
sucesorias contra sus progenitores, acciones que no alteran los efectos de la adopción plena.

La adopción plena se debe otorgar preferentemente cuando se trate de NNA huérfanos de padre y madre que no
tengan filiación establecida. También puede otorgarse cuando se haya declarado al NNA en situación de
adoptabilidad; cuando sena hijos de padres privados de la responsabilidad parental o cuando los progenitores hayan
manifestado frente al juez su decisión libre e informada de dar a su hijo en adopción.

APELLIDO DEL NNA EN LA ADOPCION PLENA

Si se trata de una adopción unipersonal, el hijo adoptivo lleva el apellido del adoptante; si el adoptante tiene doble
apellido puede solicitar que este sea mantenido.
Si se trata de una adopción conjunta, se aplican las reglas generales relativas al apellido de los hijos matrimoniales.
Excepcionalmente y fundado en el derecho a la identidad del adoptado, a petición de parte interesada, se puede
solicitar agregar o anteponer el apellido de origen al apellido del adoptante o al de uno de ellos si la adopción es
conjunta.
En todos los casos, si el adoptado cuenta con la edad y grado de madurez suficiente, el juez debe valorar
especialmente su opinión.
Vinculación con la familia de origen: La adopción plena presupone una desvinculación real y preexistente con la
familia biológica porque esta no existe o no ha cumplido con sus deberes fundamentales respecto del menor. Por
ende este tipo de adopción no tiende a preservar vínculos anteriores sino a crear nuevos vínculos con una nueva
familia.
Permite dar al niño una identidad filiatoria de la que carece. Sin perjuicio de ello, dentro de las facultades que el
código otorga al juez y en consideración con el caso concreto y a pedido de parte, especialmente a pedido del propio
NNA, puede, a pesar de la adopción plena, mantener vínculos con la familia biológica, siempre en el marco de
decisión del mejor interés del NNA.

7) ADOPCION SIMPLE

Confiere al adoptado la posición de hijo biológico, pero no crea vinculo de parentesco entre aquel y la familia
biológica del adoptante, sino a los efectos expresamente determinados en el Código.
Es así que el adoptado por adopción simple conserva un estado de familia determinado en relación a su familia
biológica, puesto que no se rompe totalmente el vinculo de parentesco con esta, sino que, por el contrario, se crea
un nuevo vinculo familiar con el adoptante, no así con el resto de su familia biológica.
En relación al adoptante, el hijo adoptado por adopción simple adquiere los mismos derechos y obligaciones e
idéntico emplazamiento de estado de familia que si fuera un hijo biológico, por lo que resulta indudable la relación
de parentesco entre la descendencia del adoptado y el adoptante.

EFECTOS Art. 627.— Efectos. La adopción simple produce los siguientes efectos: a) como regla, los derechos y
deberes que resultan del vínculo de origen no quedan extinguidos por la adopción; sin embargo, la titularidad y el
ejercicio de la responsabilidad parental se transfieren a los adoptantes; b) la familia de origen tiene derecho de
comunicación con el adoptado, excepto que sea contrario al interés superior del niño; c) el adoptado conserva el
derecho a reclamar alimentos a su familia de origen cuando los adoptantes no puedan proveérselos; d) el adoptado
que cuenta con la edad y grado de madurez suficiente o los adoptantes, pueden solicitar se mantenga el apellido de
origen, sea adicionándole o anteponiéndole el apellido del adoptante o uno de ellos; a falta de petición expresa, la
adopción simple se rige por las mismas reglas de la adopción plena; e) el derecho sucesorio se rige por lo dispuesto
en el Libro Quinto.

REVOCACION Art. 629.— Revocación. La adopción simple es revocable:

a) por haber incurrido el adoptado o el adoptante en las causales de indignidad previstas en este Código;

b) por petición justificada del adoptado mayor de edad;

c) por acuerdo de adoptante y adoptado mayor de edad manifestado judicialmente. La revocación extingue la
adopción desde que la sentencia queda firme y para el futuro. Revocada la adopción, el adoptado pierde el apellido
de adopción. Sin embargo, con fundamento en el derecho a la identidad, puede ser autorizado por el juez a
conservarlo.

8) ADOPCION DE INTEGRACION

La adopción de integración no solo involucra la adopción del hijo del cónyuge, sino también del conviviente.- Esta
adopción siempre mantiene el vínculo filiatorio y todos sus efectos entre el adoptado y el progenitor de origen,
cónyuge o conviviente del adoptante. La adopción de integración produce los siguientes efectos entre el adoptado y
el adoptante: a) Si el adoptado tiene un solo vinculo filial de origen, se inserta en la familia del adoptante con los
efectos de la adopción plena; las reglas relativas a la titularidad y ejercicio de la responsabilidad parental se aplican a
las relaciones entre el progenitor de origen, el adoptante y el adoptado b) Si el adoptado tiene doble vinculo filial de
origen se aplica lo dispuesto en el art 621.

Además de lo expuesto, la adopción de integración se rige por las siguientes reglas:

Art. 632.— Reglas aplicables. Además de lo regulado en las disposiciones generales, la adopción de integración se
rige por las siguientes reglas:

a) los progenitores de origen deben ser escuchados, excepto causas graves debidamente fundadas;
b) el adoptante no requiere estar previamente inscripto en el registro de adoptantes;
c) no se aplican las prohibiciones en materia de guarda de hecho;
d) no se exige declaración judicial de la situación de adoptabilidad;
e) no se exige previa guarda con fines de adopción;
f) no rige el requisito relativo a que las necesidades afectivas y materiales no puedan ser proporcionadas por su
familia de origen de conformidad con lo previsto en el artículo 594.

Como síntesis de la regulación en materia de adopción de integración se impone señalar que:

a) Se puede otorgar la adopción plena de integración y preservar el vínculo con el padre biológico.
b) Se mantienen los deberes alimentarios y el derecho sucesorio con relación a la familia de origen.
c) Se exime de requisitos como la edad, la guarda o los años de matrimonio o convivencia, facilitando este tipo de
adopción
d) Se deja abierta la posibilidad que a pedido de parte o a criterio del juez se pueda otorgar como simple si se
considera que es conveniente para el adoptado.

CONVERSION
Es la posibilidad de convertir una adopción simple en plena, ello resulta a petición de parte y por razones fundadas.
El juez competente resulta el que otorgo la adopción. La conversión tiene efecto desde que la sentencia queda firme
y para el futuro.
9) Art. 622.— Conversión. A petición de parte y por razones fundadas, el juez puede convertir una adopción simple
en plena. La conversión tiene efecto desde que la sentencia queda firme y para el futuro.

PRENOMBRE El código señala que el prenombre del adoptado debe ser respetado. Excepcionalmente y por razones
fundadas, el juez puede disponer la modificación del prenombre en el sentido que se le peticione.

- Art. 623.— Prenombre del adoptado. El prenombre del adoptado debe ser respetado. Excepcionalmente y por
razones fundadas en las prohibiciones establecidas en las reglas para el prenombre en general o en el uso de un
prenombre con el cual el adoptado se siente identificado, el juez puede disponer la modificación del prenombre en
el sentido que se le peticione.

EFECTOS DE LA SENTENCIA. INSCRIPCION

Art. 637.— Inscripción. La adopción, su revocación, conversión y nulidad deben inscribirse en el Registro del Estado
Civil y Capacidad de las Personas.

EXTINCION DE LA ADOPCION. NULIDAD ABSLUTA Y RELATIVA La nulidad de la adopción se produce por vicios
anteriores o concomitantes a su otorgamiento, ya que contiene una ineficacia estructural porque su defecto es
originario o congénito.- Art. 634.

Nulidades absolutas.
Adolece de nulidad absoluta la adopción obtenida en violación a las disposiciones referidas a:
a) la edad del adoptado;
b) la diferencia de edad entre adoptante y adoptado;
c) la adopción que hubiese tenido un hecho ilícito como antecedente necesario, incluido el abandono supuesto o
aparente del menor proveniente de la comisión de un delito del cual hubiera sido víctima el menor o sus padres;
d) la adopción simultánea por más de una persona, excepto que los adoptantes sean cónyuges o pareja conviviente;
e) la adopción de descendientes;
f) la adopción de hermano y de hermano unilateral entre sí;
g) la declaración judicial de la situación de adoptabilidad;
h) la inscripción y aprobación del registro de adoptantes;
i) la falta de consentimiento del niño mayor de diez años, a petición exclusiva del adoptado.
Art. 635.— Nulidad relativa. Adolece de nulidad relativa la adopción obtenida en violación a las disposiciones
referidas a:

a) la edad mínima del adoptante;


b) vicios del consentimiento;
c) el derecho del niño, niña o adolescente a ser oído, a petición exclusiva del adoptado.
REVOCACION DE LA ADOPCION SIMPLE O DE INTEGRACION

Es el acto jurisdiccional que deja sin efecto una adopción eficazmente concedida a causa de motivos configurados
durante su vigencia.- Se produce por causas posteriores a la adopción, ya que la ineficacia es funcional porque si bien
la adopción nació valida, se la deja sin efecto por carecer de función social.
- Es un acto jurídico familiar constitutivo, jurisdiccional y de desplazamiento del estado de familia adoptivo, que cesa
por razones posteriores a su constitución. Es un acto jurídico porque es un acto voluntario licito que tiene como fin
modificar o transformar el estado familiar de una persona que dejara de ser hijo adoptivo o padre adoptante de
otra.- La revocación de la adopción no opera de pleno derecho sino que se necesita una declaración judicial a pedido
de los interesados, los beneficia personalmente y no es extensiva a los restantes hijos adoptivos. Afecta a los
descendientes del adoptado que pierden su vocación hereditaria con respecto al adoptante y a sus ascendientes y
también pierden el derecho al nombre en su caso.

Art. 633.— Revocación. La adopción de integración es revocable por las mismas causales previstas para la adopción
simple, se haya otorgado con carácter de plena o simple. Características Enumeración taxativa: los supuestos de
revocación de la adopción son los enumerados expresamente en el art 629 y la remisión de 633. Se excluyen otros
supuestos.- Voluntaria: Si bien los supuestos que posibilitan la revocación de la adopción se encuentran enumerados
en la ley, ello no implica que pueda ser declarado de oficio por el juez, ni que la revocación se produzca de pleno
derecho, sino que se requiere de la voluntad del adoptante o adoptado o de ambos, según los casos.

De interpretación restrictiva: Aunque el vinculo que crea la adopción simple es restringido, no deja de constituir un
Vinculo filiatorio, por lo tanto, la posibilidad de su revocación debe ser interpretada restrictivamente, máxime
teniendo en cuenta que los efectos de la adopción alcanzan a los descendientes del adoptado.
Entre vivos: Es un acto jurídico entre vivos, por ello, no podrá ser intentado a la muerte de alguna de las partes,
máxime cuando sus efectos se producen hacia el futuro y con la muerte cesan los personales de la adopción y los
patrimoniales se encuentran resguardados con las causales de indignidad sucesoria, que son también causales de
revocación de la adopción.
BOLILLA XII: PROTECCION INTEGRAL DE NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES

1) El sistema de protección integral es el conjunto de políticas que consideran al niña, niño y el adolescente como
un sujeto activo de derechos, en un sentido abarcativo de los mismos y a lo largo de todo su crecimiento. Define las
responsabilidades de la familia, la sociedad y el Estado en relación a los derechos universales y especiales por su
condición de personas en desarrollo.

En la base de este Sistema se encuentran el conjunto de Políticas Públicas Básicas y Universales, que definen la
concepción del niño /a o adolescente como sujeto de derechos; las políticas necesarias para su pleno desarrollo:
educación, salud, desarrollo social, cultura, recreación, juego, participación ciudadana; y la garantía estatal para el
pleno acceso a las mismas, la prioridad en la atención y la permanencia en ellas a lo largo de todo su crecimiento.

En el Sistema de Protección Integral los Derechos constituyen las Políticas Públicas Universales. El Estado garantiza
a todos los niños, las niñas y adolescentes el pleno acceso, la gratuidad y prioridad en la atención. Además
reconoce la calidad de sujetos activos de derecho habilitando el ejercicio de la ciudadanía

Política estatal:

Es obligación del Estado adoptar las medidas administrativas, judiciales, legislativas, presupuestarias y de cualquier
índole, destinadas a garantizar la plena efectividad de los derechos y garantías fundamentales de las niñas, niños y
adolescentes. Artículo 4º CIDN.

Toda acción u omisión que se oponga a este principio constituye un acto contrario a los derechos fundamenta-les de
las niñas, niños y adolescentes.

Objetivo de las Políticas Públicas:

· Fortalecimiento del rol de la familia en la efectivización de los derechos de las niñas, niños y adolescentes;
· Descentralización de los organismos de aplicación y de los planes y programas específicos de las distintas políticas
de protección de derechos, a fin de garantizar mayor autonomía, agilidad y eficacia;
· Gestión asociada de los organismos de gobierno en sus distintos niveles en coordinación con la sociedad civil, con
capacitación y fiscalización permanente;
· Promoción de redes intersectoriales locales;
· Propiciar la constitución de organizaciones y organismos para la defensa y protección de los derechos de las niñas,
niños y adolescentes.

2) La Convención de los Derechos del Niño.

La Convención tiene su origen en los principios básicos contenidos en la Declaración de Ginebra (1924), que sirvió de
fundamento a la Declaración de los Derechos del Niño adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas el
20 de noviembre de 1959. Si bien la afirmación formal de los derechos del niño no significa su concreción efectiva,
tiene importancia como expresión de consenso internacional que deslegitima conductas abusivas y constituye una
fuente jurídica primordial dirigida a promover las normas y mecanismos indispensables para asegurar y defender los
derechos de la infancia. Es un instrumento que facilita la lucha contra serios problemas que afectan a la niñez como
el maltrato infantil, el secuestro y tráfico de niños, la explotación sexual o la explotación en el trabajo. La
Convención, como instrumento específico que concierne a todas las personas menores de 18 años (art. 1°), reitera
gran parte de los derechos humanos contenidos en los instrumentos internacionales. La intención ha sido afirmar
con mayor énfasis y de manera expresa que los niños son titulares de derechos fundamentales. Todos sabemos que
la dependencia del niño, su mayor vulnerabilidad y necesidad de protección han generado creencias y conductas
sociales capaces de lesionar sus derechos. Se distinguen en relación con los derechos humanos y, por lo tanto,
también respecto de los derechos del niño, por una parte, derechos civiles y políticos (como el derecho a la vida, a
un nombre, a una nacionalidad, a la libertad de expresión, libertad de pensamiento, de conciencia y de religión) y,
por la otra, derechos sociales, económicos y culturales (como el derecho a la salud, a la educación, a un nivel de vida
adecuado, a la seguridad social, a la información o al esparcimiento). La diferencia más importante que aparece
entre ambas categorías es que, mientras en la primera, los derechos son tutelados por el Estado frente a las posibles
violaciones, en la segunda, los derechos tendrían carácter programático, no susceptibles de protección jurídica
inmediata. La obligación del Estado respecto de tales derechos alcanzaría con brindar los medios materiales para
satisfacerlos, pero sólo dentro de sus posibilidades y recursos .

La Convención de los Derechos del Niño dispone expresamente que los Estados Partes adoptarán medidas "hasta el
máximo de los recursos de que dispongan y, cuando sea necesario, dentro del marco de la cooperación
internacional" (art. 4°). Hoy en día, sin embargo, se va abriendo la idea de que los derechos sociales y económicos
pueden ser reclamados cuando el Estado desvía los recursos para fines contrarios a los intereses de la ciudadanía.

Los niños poseen, además de los derechos de toda persona, derechos específicos indispensables para su formación
que requieren del adulto y de la sociedad global comportamientos que los garanticen. Existen, por otra parte,
problemas particulares de los niños, como sus relaciones con los padres o sustitutos, su derecho a mantener
contacto con ambos padres en caso de separación, el sistema de adopción, el abandono o la venta y tráfico de niños.

La propuesta para formalizar una Convención sobre los derechos del niño se presentó a la Asamblea General de las
Naciones Unidas en 1978. Es decir, fueron necesarios once años para arribar a un acuerdo de voluntades. El
resultado, en muchos aspectos, ha sido un texto de compromiso tendiente a aunar los distintos criterios. Es
necesario advertir que la Convención tiene un significado distinto para los países desarrollados que para los países
pobres. Para los primeros, asegurada, en mayor medida, la protección del niño en cuanto a salud, educación y
seguridad, el instrumento adquiere importancia respecto de los derechos relacionados con el desenvolvimiento
personal del niño o adolescente, como el derecho a la libertad de expresión, de asociación, a dar la opinión sobre
aspectos que conciernen a su persona; para los países subdesarrollados, continúan siendo primordiales problemas
como el hambre, la mortalidad infantil, el analfabetismo o la explotación en el trabajo.

Operatividad de la Convención Los preceptos de la Convención integran el derecho argentino porque los tratados
internacionales revisten la jerarquía de "Ley Suprema de la Nación"

(art. 31, Constitución Nacional). Esto significa que la Convención se encuentra en un plano de igualdad jerárquica
respecto de las leyes internas. La Corte Suprema sostuvo que tanto las leyes de la Nación como los tratados
internacionales "integran el ordenamiento normativo interno de la República..." y que no hay prelación ni
superioridad de unos respecto de los otros .

Igualmente, en relación con el Pacto de San José de Costa Rica, afirmó que por su ratificación había adquirido
virtualidad jurídica interna ; Esto significa que las normas de la Convención pueden ser invocadas ante los tribunales
nacionales porque forman parte de nuestro derecho interno . La aprobación de la Convención de los derechos del
niño por una ley, hace que su contenido tenga ejecutoriedad y derogue normas precedentes que podrían
contradecirlo. La Convención, como cualquier tratado internacional celebrado por nuestro país, prevalece sobre el
derecho vigente por ser la última expresión de la voluntad normativa del Estado. Es decir, los derechos consagrados
en la Convención no son programáticos, aspiraciones a lograr, sino operativos. Si hay colisión de normas, la ley
posterior prima sobre la anterior. Sin embargo, este criterio tiene sus opositores y la jurisprudencia en algunos fallos
ha sostenido que una ley ratificatoria de un tratado internacional sólo significa el compromiso de adecuar su
legislación interna a los principios del instrumento internacional. A nuestro entender, la Argentina tiene el deber de
adoptar las medidas necesarias para el cumplimiento de las obligaciones que contrajo al depositar el instrumento de
ratificación de la Convención (art. 49). Por una parte, dictar las normas necesarias para reglamentar adecuadamente
los derechos consagrados; por la otra, garantizar, hasta tanto tales preceptos no se dicten, la tutela de los mismos.
Es decir, el amparo puede darse tanto por una ley específica como por una sentencia judicial (. De no seguirse esta
posición tales derechos tendrían carácter abstracto y carecerían de vigencia hasta tanto el Estado Parte no los
incorporara expresamente al derecho positivo. De esta manera, quedaría al arbitrio de cada país el cumplimiento del
compromiso contraído.

La Corte Interamericana de los Derechos Humanos ha sostenido que al aprobar los tratados sobre derechos
humanos, "...los Estados se someten a un orden legal dentro del cual ellos, por el bien común, asumen varias
obligaciones, no en relación con otros Estados, sino hacia los individuos bajo su jurisdicción". Asimismo, los Estados
Partes no pueden alegar la ausencia de normas o la existencia de preceptos legales contrarios a los términos de la
Convención para no aplicar los derechos consagrados, ya que el art. 27 de la Convención de Viena establece que no
es posible invocar el derecho interno como causa para el incumplimiento de las obligaciones internacionales. En
otros términos, la Convención de Viena, ratificada en nuestro país por la ley 19.865 (Adla, XXXII-D, 6412), acuerda
supremacía a los tratados sobre las leyes internas. En suma: las afirmaciones precedentes no hacen más que recoger
las ideas de una firme orientación doctrinaria dirigida hacia la integración del derecho vigente, rechazando la división
entre el derecho interno y el derecho internacional .

Las cláusulas de los pactos internacionales serían operativas, a menos que de las mismas surgiera su carácter
programático, o sea, se desprendiera la necesidad de que se dictaren las pertinentes normas en el orden interno. La
Convención preceptúa, como mecanismo de control, la creación de un Comité de los Derechos del Niño que tiene la
finalidad de examinar los progresos realizados en el cumplimiento de las obligaciones contraídas por los Estados
Partes (art. 43). Estos se comprometen a presentar a dicho Comité, por conducto del Secretario General de las
Naciones Unidas, informes sobre las medidas que hayan adoptado para dar efecto a los derechos reconocidos en la
Convención y sobre el progreso realizado en cuanto al goce de tales derechos (art. 44). El Comité puede formular
sugerencias y recomendaciones generales basadas en la información recibida (art. 45). El texto transcripto no
significa dar carácter programático a los derechos declarados, sino vigilar el grado de cumplimiento efectivo de las
normas. Este cumplimiento se manifiesta tanto en la sanción de leyes, para ajustar nuestro derecho interno a su
contenido, como en las disposiciones, políticas sociales y fallos judiciales destinados a asegurar los derechos
consagrados. Cuando se trate de preceptos que no fueran directamente ejecutables y requiriesen el dictado de
normas para hacerlos operativos, el Estado que incumple esta obligación incurre en la violación del compromiso de
carácter omisivo.

La Convención de los Derechos del Niño frente a los instrumentos internacionales precedentes y al derecho interno:
El art. 41 de la Convención de los Derechos del Niño privilegia el derecho interno de un Estado Parte o los
compromisos precedentes que ha asumido un país, si tales normas favorecen en mayor medida los derechos del
niño. Esto significa que la situación del menor no se halla sujeta exclusivamente a los términos de la Convención y,
por tanto, no se excluye la aplicación de documentos anteriores que la Argentina hubiese ratificado si fueren más
beneficiosos para el niño.

Necesidad en que los derechos del niño resulten efectivamente tutelados: Si la razón de los derechos del niño es
asegurar sus necesidades básicas, debe pensarse en los modos en que tales exigencias serán tuteladas. No basta con
una enumeración de derechos, sino que es preciso buscar los caminos para que tengan efectividad. Es decir,
imaginar los mecanismos para garantizarlos, tanto desde el punto de vista asistencial como de su protección
jurisdiccional.
Como dice Bidart Campos, "de las normas a la realidad hay una distancia semejante a la que existe entre el remedio
en la estantería de la farmacia y el remedio aplicado al cuerpo del enfermo".
Ningún niño calmará su hambre porque una ley le asegure un nivel de vida digno, ni tampoco calmará el dolor del
golpe recibido porque se le asegure que tiene el derecho a no ser maltratado. Las reformas legales que se proyecten
en cada país para ajustar la legislación interna a los términos de la Convención y reglamentar sus normas, deben ir
acompañadas de una serie de medidas tendientes a que los derechos que se introduzcan tengan efectividad.
Mencionamos a título ilustrativo:

1) políticas sociales que garanticen el derecho a la vida, a la salud, a la educación y a todos los derechos sociales,
económicos y culturales que la Convención consagra; 2) programas para el conocimiento y comprensión de los
derechos del niño dirigidos a padres, hijos e instituciones (art. 42 de la Convención); 3) difusión de los derechos del
niño en las escuelas y organizaciones escolares; 4) capacitación a los profesionales y asistentes sociales en contacto
con el menor; 5) formación especializada de los jueces y abogados para posibilitar una mejor defensa de los
derechos del menor. Es indispensable el reconocimiento de los derechos del niño por el adulto y la comunidad en su
conjunto, peldaño esencial para modificar ideas muy enraizadas en la sociedad. Los derechos humanos que las
normas obligan y comprometen sólo constituyen un marco de referencia. La real dimensión aparece en la práctica
concreta. VII. Los derechos del niño en el ámbito privado y en el ámbito público. Su interacción El espacio privado y
el espacio público no son campos autónomos: existe una constante interacción entre ambos, de modo tal que la
tutela del menor en la sociedad va unida ineludiblemente a su protección en el seno de la familia. Los derechos del
niño con relación al trabajo, la salud, educación, nivel de vida o desarrollo, llevan a una necesaria articulación entre
el contexto familiar y el social.

DE esta manera, por ejemplo, la problemática del trabajo del menor tendrá una dimensión distinta de acuerdo con el
tipo de familia y el estrato socio-económico al cual pertenece el niño o joven. La identificación de un menor en
situación de riesgo y las posibles soluciones también depende de las características de la constelación familiar. Las
alternativas educativas, educación formal o informal se vinculan igualmente con la estructura familiar. En suma: los
derechos del niño sólo pueden ser amparados teniendo en cuenta la relación dialéctica constante que existe entre el
"adentro" y el "afuera" de la familia, entre el mundo público y el privado.

Principios generales de la Convención La Convención contiene los siguientes principios generales básicos:

1. El principio de no discriminación

El principio de no discriminación (art. 2°), asegura la aplicación de los derechos de la Convención a todo niño, sin
distinción alguna. Una de las expresiones de la discriminación es la desigualdad entre los hijos nacidos dentro y fuera
del matrimonio que se manifiesta en que los primeros tienen más derechos que los segundos. El movimiento
legislativo expresado en documentos internacionales, constituciones y legislaciones nacionales evolucionó hacia la
no distinción de las consecuencias legales cualesquiera fueren las condiciones del nacimiento. Sin embargo, en el
momento actual, pese a la afirmación del principio de no discriminación, se mantiene una diferenciación difícil de
superar pues la igualdad de efectos asentada formalmente no alcanza a tener concreción real por las mayores
dificultades que tienen los hijos extramatrimoniales para el emplazamiento filial paterno. Ya en este camino, en
nuestro país se dieron numerosos pasos. Después de eliminarse toda prohibición para la investigación de la
paternidad existente en textos anteriores, la reciente reforma introdujo diversas modificaciones tendientes a
facilitar el emplazamiento filial extramatrimonial.

2. El interés superior del niño.

El art. 3° de la Convención dispone que en todas las medidas concernientes a los niños que adopten las instituciones
públicas, privadas, los tribunales, las autoridades administrativas o los órganos legislativos, deberá atenderse
primordialmente al "interés superior del niño".

Este principio es de contenido indeterminado, sujeto a la comprensión y extensión propios de cada sociedad y
momento históricos, de modo tal que lo que hoy se estima beneficia al niño o joven, mañana se puede pensar que lo
perjudica. Constituye un instrumento técnico que otorga poderes a los jueces, quienes deben apreciar tal "interés"
en concreto, de acuerdo con las circunstancias del caso. Este principio, tradicional en los textos legislativos y vigente
en nuestro país, apunta a dos finalidades básicas: constituirse en pauta de decisión ante un conflicto de intereses y
en criterio para la intervención institucional destinada a proteger al niño.

Interes superior del niño. concepto:


El principio del interés superior del niño o niña, también conocido como el interés superior del menor, es un
conjunto de acciones y procesos tendientes a garantizar un desarrollo integral y una vida digna, así como las
condiciones materiales y afectivas que permitan vivir plenamente y alcanzar el máximo de bienestar posible a niñas y
niños. (es una norma de interpretacion y de resolucion de conflictos)
Se trata de una garantía de que las niñas y los niños tienen derecho a que, antes de tomar una medida respecto de
ellos, se adopten aquellas que promuevan y protejan sus derechos y no las que los conculquen. Así se tratan de
superar dos posiciones extremas: el autoritarismo o abuso del poder que ocurre cuando se toman decisiones
referidas a los niños y niñas, por un lado, y el paternalismo de las autoridades por otro.

El interés superior del niño es un concepto triple; es un derecho, es un principio y es una norma de procedimiento.

Se trata del derecho del niño y la niña a que su interés superior sea una consideración que se prime al sopesar
distintos intereses para decidir sobre una cuestión que le afecta.

Es un principio porque, si una disposición jurídica admite más de una interpretación, se elegirá la interpretación que
satisfaga de manera más efectiva el interés superioŕ del niño.

Y es una norma de procedimiento, siempre que se deba tomar una decisión que afecte el interés de niñas y/o niños,
el proceso deberá incluir una estimación de las posibles repercusiones de esa toma de decisión en los intereses de
las niñas y niños. La evaluación y determinación de su interés superior requerirá garantías procesales. Se debe, por
ejemplo, dejar patente y explicar cómo se ha respetado este derecho en la decisión.

Derecho a la identidad. Concepto y clases de identidad. Relación con los institutos de la adopción y las técnicas de
reproducción humana asistida . Ley 26.061

ARTICULO 11. — DERECHO A LA IDENTIDAD. Las niñas, niños y adolescentes tienen derecho a un nombre, a una
nacionalidad, a su lengua de origen, al conocimiento de quiénes son sus padres, a la preservación de sus relaciones
familiares de conformidad con la ley, a la cultura de su lugar de origen y a preservar su identidad e idiosincrasia,
salvo la excepción prevista en los artículos 327 y 328 del Código Civil.

Los Organismos del Estado deben facilitar y colaborar en la búsqueda, localización u obtención de información, de
los padres u otros familiares de las niñas, niños y adolescentes facilitándoles el encuentro o reencuentro familiar.
Tienen derecho a conocer a sus padres biológicos, y a crecer y desarrollarse en su familia de origen, a mantener en
forma regular y permanente el vínculo personal y directo con sus padres, aun cuando éstos estuvieran separados o
divorciados, o pesara sobre cualquiera de ellos denuncia penal o sentencia, salvo que dicho vínculo, amenazare o
violare alguno de los derechos de las niñas, niños y adolescentes que consagra la ley.

En toda situación de institucionalización de los padres, los Organismos del Estado deben garantizar a las niñas, niños
y adolescentes el vínculo y el contacto directo y permanente con aquéllos, siempre que no contraríe el interés
superior del niño.

Sólo en los casos en que ello sea imposible y en forma excepcional tendrán derecho a vivir, ser criados y
desarrollarse en un grupo familiar alternativo o a tener una familia adoptiva, de conformidad con la ley.

Clases:

Identidad nacional: Es la identidad basada en el concepto de nación, es decir, el sentimiento de pertenencia a una
colectividad histórico-cultural definida con características diversas, rasgos de cosmovisión definidos con mayor o
menor localismo o universalismo (desde la cultura a la civilización), costumbres de interacción, organización social y
política (particularmente, el Estado -tanto si se identifica con él como si se identifica contra él-). La identificación con
una nación suele suponer la asunción, con distintos tipos y grados de sentimiento (amor a lo propio, odio o temor a
lo ajeno, orgullo, fatalismo, victimismo entre otros) de las formas concretas que esas características toman en ella.
Se da simultáneamente a otras identidades individuales o identidades colectivas basadas en cualquier otro factor (la
lengua, la raza, la religión, la clase social,y más.), asumiéndolas, superponiéndolas, ignorándolas o negándolas. Suele
tomar como referencia elementos explícitos tales como símbolos patrios, símbolos naturales y signos distintivos
(banderas, escudos, himnos, selecciones deportivas, monedas, etc.).

Identidad cultural: conjunto de valores, orgullos, tradiciones, símbolos, creencias y modos de comportamiento que
funcionan como elementos dentro de un grupo social y que actúan para que los individuos que lo forman puedan
fundamentar su sentimiento de pertenencia que hacen parte a la diversidad al interior de las mismas en respuesta a
los intereses, códigos, normas y rituales que comparten dichos grupos dentro de la cultura dominante.
Identidad personal: Desde un punto de vista psicológico puede decirse que identidad personal es que uno sea “sí
mismo” y no “otro”. Se trata pues, de un conjunto de rasgos personales que conforma la realidad de cada uno y se
proyecta hacia el mundo externo permitiendo que los de más reconozcan a la persona. La individualidad sólo es
posible cuando se logra ver la personalidad auténtica del ser humano, de manera tal que éste pueda reconocerse a sí
mismo como parte de la humanidad, como un ser único y diferente de los demás

Derecho del niño a ser oído y a participar de los procesos judiciales. El abogado del niño: criterios legales y
jurisprudenciales.

Convencion sobre los derechos del niño:

Artículo 12

1. Los Estados Partes garantizarán al niño que esté en condiciones de formarse un juicio propio el derecho de
expresar su opinión libremente en todos los asuntos que afectan al niño, teniéndose debidamente en cuenta las
opiniones del niño, en función de la edad y madurez del niño.
2. Con tal fin, se dará en particular al niño oportunidad de ser escuchado, en todo procedimiento judicial o
administrativo que afecte al niño, ya sea directamente o por medio de un representante o de un órgano apropiado,
en consonancia con las normas de procedimiento de la ley nacional.

El artículo 24 de la Ley 26.061 de Protección Integral de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes reconoce el
derecho a opinar y a ser oído:
“Las niñas, niños y adolescentes tienen derecho a:
a) Participar y expresar libremente su opinión en los asuntos que les conciernan y en aquellos que tengan interés;
b) Que sus opiniones sean tenidas en cuenta conforme a su madurez y desarrollo. Este derecho se extiende a todos
los ámbitos en que se desenvuelven las niñas, niños y adolescentes; entre ellos, al ámbito estatal, familiar,
comunitario, social, escolar, científico, cultural, deportivo y recreativo.”

La ley establece que en todo procedimiento judicial o administrativo que afecte al niño. Es decir, en todos los
procedimientos donde se traten asuntos que te involucren o te afecten, y tengan que ver con vos.
Los procedimientos judiciales incluyen la separación de los padres, la custodia, el cuidado y la adopción, los niños en
conflicto con la ley, restitución de menores, los niños víctimas de violencia física o psicológica, los abusos sexuales u
otros delitos, la atención de salud, y la seguridad social.

3) Ley 26.061

El abogado del niño:

ARTICULO 27. — GARANTIAS MINIMAS DE PROCEDIMIENTO. GARANTIAS EN LOS PROCEDIMIENTOS JUDICIALES O


ADMINISTRATIVOS. Los Organismos del Estado deberán garantizar a las niñas, niños y adolescentes en cualquier
procedimiento judicial o administrativo que los afecte, además de todos aquellos derechos contemplados en la
Constitución Nacional, la Convención sobre los Derechos del Niño, en los tratados internacionales ratificados por la
Nación Argentina y en las leyes que en su consecuencia se dicten, los siguientes derechos y garantías:

a) A ser oído ante la autoridad competente cada vez que así lo solicite la niña, niño o adolescente;
b) A que su opinión sea tomada primordialmente en cuenta al momento de arribar a una decisión que lo afecte;
c) A ser asistido por un letrado preferentemente especializado en niñez y adolescencia desde el inicio del
procedimiento judicial o administrativo que lo incluya. En caso de carecer de recursos económicos el Estado deberá
asignarle de oficio un letrado que lo patrocine;
d) A participar activamente en todo el procedimiento;
e) A recurrir ante el superior frente a cualquier decisión que lo afecte.

Capacidad jurídica de niños, niñas y adolescentes. Autonomía progresiva.

De acuerdo con el articulo 26, la persona menor de edad ejerce sus derechos a traves de sus representantes legales,
quienes en primer lugar son los padres y en caso de suspension o privacion del ejercicio de la responsabilidad
parental, un tutor o un tercero.
La representacion en este caso se ejerce teniend en cuenta la edad y grado de madurez suficiente de la persona
menor de edad para el ejercicio de aquellos actos que son permitidos por el ordenamiento juridico, es decir, que
prevalece el principio de autonomia progresiva que introdujo la doctrina de la proteccion integral que fuera
plasmada por la legislacion en la ley 26.061.

La autonomia progresiva de los niños en el ejercicio de sus derechos fundamentales resulta un postulado implicito
en todo lo articulado de la ley en comentario, pero solo explicitado en tres normas:

ARTICULO 3° — INTERES SUPERIOR. A los efectos de la presente ley se entiende por interés superior de la niña, niño
y adolescente la máxima satisfacción, integral y simultánea de los derechos y garantías reconocidos en esta ley.

Debiéndose respetar:

a) Su condición de sujeto de derecho;


b) El derecho de las niñas, niños y adolescentes a ser oídos y que su opinión sea tenida en cuenta;
c) El respeto al pleno desarrollo personal de sus derechos en su medio familiar, social y cultural;
d) Su edad, grado de madurez, capacidad de discernimiento y demás condiciones personales;
e) El equilibrio entre los derechos y garantías de las niñas, niños y adolescentes y las exigencias del bien común;
f) Su centro de vida. Se entiende por centro de vida el lugar donde las niñas, niños y adolescentes hubiesen
transcurrido en condiciones legítimas la mayor parte de su existencia.

Este principio rige en materia de responsabilidad parental, pautas a las que se ajustarán el ejercicio de la misma,
filiación, restitución del niño, la niña o el adolescente, adopción, emancipación y toda circunstancia vinculada a las
anteriores cualquiera sea el ámbito donde deba desempeñarse.

Cuando exista conflicto entre los derechos e intereses de las niñas, niños y adolescentes frente a otros derechos e
intereses igualmente legítimos, prevalecerán los primeros.

ARTICULO 19. — DERECHO A LA LIBERTAD. Las niñas, niños y adolescentes tienen derecho a la libertad.

Este derecho comprende:

a) Tener sus propias ideas, creencias o culto religioso según el desarrollo de sus facultades y con las limitaciones y
garantías consagradas por el ordenamiento jurídico y ejercerlo bajo la orientación de sus padres, tutores,
representantes legales o encargados de los mismos;

b) Expresar su opinión en los ámbitos de su vida cotidiana, especialmente en la familia, la comunidad y la escuela;

c) Expresar su opinión como usuarios de todos los servicios públicos y, con las limitaciones de la ley, en todos los
procesos judiciales y administrativos que puedan afectar sus derechos.

Las personas sujetos de esta ley tienen derecho a su libertad personal, sin más límites que los establecidos en el
ordenamiento jurídico vigente. No pueden ser privados de ella ilegal o arbitrariamente.
La privación de libertad personal, entendida como ubicación de la niña, niño o adolescente en un lugar de donde no
pueda salir por su propia voluntad, debe realizarse de conformidad con la normativa vigente.

ARTICULO 24. — DERECHO A OPINAR Y A SER OIDO. Las niñas, niños y adolescentes tienen derecho a:

a) Participar y expresar libremente su opinión en los asuntos que les conciernan y en aquellos que tengan interés;

b) Que sus opiniones sean tenidas en cuenta conforme a su madurez y desarrollo.

Este derecho se extiende a todos los ámbitos en que se desenvuelven las niñas, niños y adolescentes; entre ellos, al
ámbito estatal, familiar, comunitario, social, escolar, científico, cultural, deportivo y recreativo.

SISTEMA DE PROMOCION Y PROTECCION INTEGRAL DE DERECHOS ley 13298.

ARTICULO 14.- El Sistema de Promoción y Protección Integral de los Derechos de los Niños es un conjunto de
organismos, entidades y servicios que formulan, coordinan, orientan, supervisan, ejecutan y controlan las políticas,
programas y acciones, en el ámbito provincial y municipal, destinados a promover, prevenir, asistir, proteger,
resguardar y restablecer los derechos de los niños, así como establecer los medios a través de los cuales se asegure
el efectivo goce de los derechos y garantías reconocidos en la Constitución Nacional, la Constitución de la Provincia
de Buenos Aires, la Convención sobre los Derechos del Niño, y demás tratados de Derechos Humanos ratificados por
el Estado Argentino.
El Sistema funciona a través de acciones intersectoriales desarrolladas por entes del sector público, de carácter
central o desconcentrado, y por entes del sector privado.
Para el logro de sus objetivos el sistema de promoción y protección integral de los derechos de los niños debe contar
con los siguientes medios:

a) Políticas y programas de promoción y protección de derechos;


b) Organismos administrativos y judiciales;
c) Recursos económicos;
d) Procedimiento;
e) Medidas de protección de derechos.

ARTICULO 15.-Las políticas de promoción y protección integral de derechos de todos los niños, son el conjunto de
orientaciones y directrices de carácter público dictadas por los órganos competentes, a fin de guiar las acciones
dirigidas a asegurar los derechos y garantías de los niños.
Las políticas de promoción y protección integral de derechos de todos los niños se implementarán mediante una
concertación de acciones de la Provincia, los municipios y las organizaciones de atención a la niñez, tendientes a
lograr la vigencia y el disfrute pleno de los derechos y garantías de los niños.
A tal fin se invita a los municipios a promover la desconcentración de las acciones de promoción, protección y
restablecimiento de derechos en el ámbito municipal, con participación activa de las organizaciones no
gubernamentales de atención a la niñez.

LOS ORGANOS ADMINISTRATIVOS

ARTICULO 16.- El Poder Ejecutivo designará a la Autoridad de Aplicación del Sistema de Promoción y Protección de
los derechos del niño, que tendrá a su cargo el diseño, instrumentación, ejecución y control de políticas dirigidas a la
niñez.
La Autoridad de Aplicación deberá:

1) Diseñar los programas y servicios requeridos para implementar la política de promoción y protección de
derechos del niño.
2) Ejecutar y/o desconcentrar la ejecución de los programas, planes y servicios de protección de los derechos en
los municipios que adhieran mediante convenio.
3) Implementar estudios e investigaciones que permitan contar con información actualizada acerca de la
problemática de la niñez y familia de la Provincia de Buenos Aires. Con ese fin estará autorizado a suscribir convenios
y ejecutar actividades con otros organismos e instituciones públicas y privadas en el orden municipal, provincial,
nacional e internacional, para el conocimiento de los indicadores sociales de los que surjan urgencias y prioridades
para la concreción de soluciones adecuadas. En particular, podrá coordinar con Universidades e instituciones
académicas acciones de investigación, planificación y capacitación, y centralizará la información acerca de la niñez y
su familia de la Provincia de Buenos Aires.
4) Diseñar y aplicar un sistema de evaluación de la gestión de los programas y acciones que se ejecuten.
5) Implementar un Registro Unificado de todos los destinatarios que sean atendidos por el Estado Provincial, los
municipios y las organizaciones no gubernamentales en el territorio provincial. Dicho Registro contendrá todas las
acciones realizadas con cada niño y su familia, y servirá de base de datos para la planificación y seguimiento de las
intervenciones que sean requeridas de cada instancia gubernamental y comunitaria.
6) Crear el Registro Único de Entidades no gubernamentales dedicadas a la prevención, asistencia, atención,
protección y restablecimiento de los derechos de los niños.
7) Promover la formación de organizaciones comunitarias que favorezcan la integración social, la solidaridad y el
compromiso social en la protección de la familia, así como en el respeto y protección de los derechos de los niños,
orientándolas y asesorándolas por sí o a través de las municipalidades.
8) Desarrollar tareas de capacitación y formación permanente dirigidas a profesionales, técnicos y empleados del
Estado Provincial y de los municipios, de las áreas relacionadas con la niñez, como así también del personal y
directivos de organizaciones no gubernamentales inscriptas en el Registro a que se refiere el articulo 25º de la
presente.
9) Fijar las pautas de funcionamiento y de supervisión de los establecimientos y/o instituciones públicos y/o
privados y/o personas físicas que realicen acciones de prevención, asistencia, protección y restablecimiento de los
derechos de los niños.
10) Atender y controlar el estado y condiciones de detención del niño en conflicto con la Ley penal en territorio
provincial que se encontraran alojados en establecimientos de su dependencia
11) Implementar programas de conocimiento y difusión de derechos.
12) Crear, establecer y sostener delegaciones u otros mecanismos de desconcentración apropiados para el
cumplimiento de sus fines.
13) Queda autorizada, en las condiciones que establezca la reglamentación, a efectuar préstamos o comodatos de
inmuebles y entrega de materiales, insumos, semovientes o máquinas para el desarrollo de emprendimientos
productivos o de servicios a niños en el marco de los objetivos de la presente Ley, a través de sus representantes
legales.
El producto de los emprendimientos se imputará a la implementación del peculio de los niños.

ARTICULO 17.- Para atender los fines de la presente Ley, la Autoridad de Aplicación tendrá a su cargo la ejecución de
una partida específica, representada por un porcentaje del Presupuesto General de la Provincia de carácter
intangible.

SERVICIOS LOCALES DE PROTECCION DE DERECHOS

ARTICULO 18.- En cada municipio la Autoridad de Aplicación debe establecer órganos desconcentrados
denominados Servicios Locales de Protección de Derechos. Serán unidades técnico operativas con una o más sedes,
desempeñando las funciones de facilitar que el niño que tenga amenazados o violados sus derechos, pueda acceder
a los programas y planes disponibles en su comunidad. En los casos en que la problemática presentada admita una
solución rápida, y que se pueda efectivizar con recursos propios, la ayuda se podrá efectuar en forma directa.
Les corresponderá a estos servicios buscar la alternativa que evite la separación del niño de su familia o de las
personas encargadas de su cuidado personal, aportando directamente las soluciones apropiadas para superar la
situación que amenaza con provocar la separación.

ARTICULO 19.- (Texto según Ley 14537) Los Servicios Locales de Protección de los derechos del niño tendrán las
siguientes funciones:
a) Ejecutar los programas, planes, servicios y toda otra acción que tienda a prevenir, asistir, proteger, y/o
restablecer los derechos del niño.
b) Recibir denuncias e intervenir de oficio ante el conocimiento de la posible existencia de violación o amenaza en
el ejercicio de los derechos del niño.
c) Propiciar y ejecutar alternativas tendientes a evitar la separación del niño de su familia y/o guardadores y/o de
quien tenga a su cargo su cuidado o atención, teniendo como mira el interés superior del niño.
d) Participar activamente en los procesos de declaración de la situación de adoptabilidad y de adopción, y
colaborar en el trámite de guarda con fines de adopción, con los alcances establecidos en la Ley respectiva.

ARTICULO 20.- Los Servicios Locales de Protección de derechos contarán con un equipo técnico – profesional con
especialización en la temática, integrado como mínimo por:

1.- Un (1) psicólogo


2.- Un (1) abogado
3.- Un (1) trabajador social
4.- Un (1) médico
La selección de los aspirantes debe realizarse mediante concurso de antecedentes y oposición. Los aspirantes
deberán acreditar como mínimo tres años de ejercicio profesional, y experiencia en tareas relacionadas con la
familia y los niños.
Se deberá garantizar la atención durante las 24 horas.

ARTICULO 21.- La Autoridad de Aplicación debe proceder al dictado de la reglamentación para el funcionamiento de
los Servicios de Protección de Derechos en el ámbito de la Provincia.
ARTICULO 22.- La Autoridad de Aplicación podrá disponer la desconcentración de sus funciones en los municipios,
mediante la celebración de convenio suscripto con el Intendente Municipal, que entrará en vigencia una vez
ratificado por Ordenanza.

MEDIDAS DE PROTECCION INTEGRAL DE DERECHOS

ARTÍCULO 32.- Las medidas de protección son aquellas que disponen los Servicios Locales de Promoción y Protección
de Derechos cuando se produce, en perjuicio de uno o varios niños, la amenaza o violación de sus derechos o
garantías, con el objeto de preservarlos o restituirlos.
La amenaza o violación a que se refiere este artículo, puede provenir de la acción u omisión de personas físicas o
jurídicas.
ARTÍCULO 33.- (Texto según Ley 13634) Las medidas de protección de derechos son limitadas en el tiempo, se
mantienen mientras persistan las causas que dieron origen a la amenaza o violación de derechos o garantías, y
deben ser revisadas periódicamente de acuerdo a su naturaleza.

En ningún caso una medida de protección de derechos a de significar la privación de libertad ambulatoria del niño. El
cese de la medida proteccional por decisión unilateral del niño, no podrá ser sancionada bajo ningún criterio o
concepto. En consecuencia queda expresamente prohibido disponer medidas de coerción contra el niño por razón
del abandono del programa.

ARTÍCULO 34.- Se aplicarán prioritariamente aquellas medidas de protección de derechos que tengan por finalidad la
preservación y fortalecimiento de los vínculos familiares con relación a todos los niños.

Cuando la amenaza o violación de derechos sea consecuencia de necesidades básicas insatisfechas, carencias o
dificultades materiales, laborales o de vivienda, las medidas de protección son los programas dirigidos a brindar
ayuda y apoyo incluso económico, con miras al mantenimiento y fortalecimiento de los vínculos familiares.

ARTICULO 35.- (Texto según Ley 14537) Comprobada la amenaza o violación de derechos podrán adoptarse, entre
otras, las medidas que a continuación se enuncian:

a) Apoyo para que los niños permanezcan conviviendo con su grupo familiar.
b) Orientación a los padres o responsables.
c) Orientación, apoyo y seguimiento temporarios a la niña, niño, adolescente y/o su familia.
d) Inscripción y asistencia obligatoria en establecimiento educativo.
e) Solicitud de becas de estudio o para guardería y/o inclusión en programas de alfabetización o apoyo escolar.
f) Asistencia integral a la embarazada.
g) Inclusión del niño, niña o adolescente y la familia, en programas de asistencia familiar.
h) Cuidado del niño, niña o adolescente en el propio hogar, orientado y apoyando a los padres, representantes o
responsables en el cumplimiento de sus obligaciones, conjuntamente con el seguimiento temporal de la familia y del
niño a través de un programa.
i) Tratamiento médico, psicológico o psiquiátrico del niño, niña o adolescente o de alguno de sus padres,
responsables o representantes.
j) Inclusión en programa oficial o comunitario de atención, orientación y tratamiento en adicciones.
k) Asistencia económica.
l) Permanencia temporal, con carácter excepcional y provisional, en ámbitos familiares alternativos o entidades
de atención social y/o de salud, de conformidad con lo establecido en el artículo siguiente.

Medida de Abrigo. ARTÍCULO 35 BIS.- (Artículo Incorporado por Ley 14537)

La medida de abrigo es una medida de protección excepcional de derechos, que tiene como objeto brindar al niño,
niña o adolescente un ámbito alternativo al grupo de convivencia cuando en éste se encuentren amenazados o
vulnerados sus derechos, hasta tanto se evalúe la implementación de otras medidas tendientes a preservarlos o
restituirlos.
La aplicación de la medida de abrigo, que siempre se hará en resguardo del interés superior del niño, es de carácter
subsidiario respecto de otras medidas de protección de derechos, salvo peligro en la demora.
La familia ampliada u otros miembros de la comunidad vinculados con el niño, niña o adolescente, serán
considerados prioritarios al momento de establecer el ámbito alternativo de convivencia.
El niño, niña o adolescente tendrá una participación activa en el procedimiento y, de acuerdo a su edad y grado de
madurez, se le deberá informar que tiene derecho de comparecer con asistencia letrada; sobre la naturaleza de la
medida que se va a adoptar y se deberá garantizar su intervención en la definición de las alternativas de convivencia,
con especial consideración de su opinión al momento de tomar la decisión.
Durante la aplicación de la medida, el organismo administrativo trabajará para la revinculación del niño, niña o
adolescente con su familia de origen; evaluará la implementación de otras medidas tendientes a remover los
obstáculos que impedían la debida protección de los derechos del niño, niña o adolescente; guardará de mantener la
unidad entre hermanos; facilitará el contacto con la familia de origen y buscará la ubicación del mejor lugar para
cada niño, niña o adolescente cerca de su domicilio.
Ante el conocimiento de un niño, niña o adolescente, sin filiación establecido o cuyos padres hayan fallecido, los
servicios de promoción y protección de derechos correspondientes, deberán informar de la situación al Juez de
Familia, en forma inmediata.
La medida excepcional solo será respetuosa del interés superior del niño si es adoptada frente a la imposibilidad de
exclusión del hogar de aquella persona que causare daño al niño, niña o adolescente. Por ello, ante la amenaza o
violación de derechos provenientes de situaciones de violencia intrafamiliar -aunque no constituya delito-, el
organismo administrativo deberá comunicar la situación al Juez de Familia y remitir los antecedentes del caso en un
plazo no mayor de veinticuatro (24) horas, para que la autoridad judicial proceda a la exclusión del agresor. Ante la
imposibilidad de proceder a la exclusión, el juez resolverá junto con el Servicio de Promoción y Protección de
Derechos interviniente, la medida excepcional que corresponda y de ello se notificará al Asesor de Incapaces.
El plazo de duración máxima de la medida no podrá exceder los ciento ochenta (180) días. Vencido el plazo se
deberá proceder de conformidad con lo regulado por la ley respectiva.
Cuando, aún antes del vencimiento del plazo, las medidas de protección fracasaren por incumplimiento o por
motivos imputables a los progenitores, tutores o familiar a cargo, o se advirtiere la existencia de cualquier situación
que coloque al niño, niña o adolescente, en estado de vulnerabilidad de sus derechos; el organismo administrativo
informará esta situación al Juez de Familia y peticionará, si correspondiere, la declaración de la situación
de adoptabilidad.
El Servicio de Promoción y Protección de Derechos deberá comunicar la resolución en la que estima procedente la
medida de abrigo, dentro de las veinticuatro (24) horas, al Asesor de Incapaces y al Juez de Familia competente. El
Juez de Familia deberá resolver la legalidad de la medida en un plazo de setenta y dos (72) horas. En todo momento
se garantizará el derecho del niño, niña o adolescente a ser oído. Cualquier consenso que pudieren manifestar los
progenitores al tiempo de ser adoptada la medida en sede administrativa, carece de toda entidad para enervar el
posterior control judicial sobre su legalidad.
La observancia de las notificaciones establecidas en este artículo constituye un deber del funcionario público a cargo.
Su incumplimiento traerá aparejadas las sanciones disciplinarias y penales correspondientes. A fin de contribuir con
la celeridad y economía procesal que la materia amerita, las notificaciones podrán canalizarse por medios
electrónicos, de conformidad con lo establecido en los artículos 40, 143 y 143 bis del C.P.C.C. conf. Ley 14.142 y el
Acuerdo № 3.540/2011 de la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires.

ARTICULO 36.- El incumplimiento de las medidas de protección por parte del niño no podrá irrogarle consecuencia
perjudicial alguna.

PROCEDIMIENTO

ARTICULO 37.- Cuando un niño sufra amenaza o violación de sus derechos y/o sea víctima de delito, sus familiares,
responsables, allegados, o terceros que tengan conocimiento de tal situación, solicitarán ante los Servicios Locales
de Promoción y Protección de Derechos el resguardo o restablecimiento de los derechos afectados.
En el supuesto que se formule denuncia por ante la autoridad policial, ésta deberá ponerla de inmediato en
conocimiento del Servicio de Promoción y Protección Local.

ARTICULO 38.- Una vez que el Servicio de Promoción y Protección de Derechos tome conocimiento de la petición,
debe citar al niño y familiares, responsables y/o allegados involucrados a una audiencia con el equipo técnico del
Servicio.
En dicha audiencia se debe poner en conocimiento de los mismos la petición efectuada, la forma de funcionamiento
del Sistema de Protección y Promoción de Derechos, los programas existentes para solucionar la petición y su forma
de ejecución, las consecuencias esperadas, los derechos de los que goza el niño, el plan de seguimiento y el carácter
consensuado de la decisión que se adopte.

ARTICULO 39.- Una vez concluidas las deliberaciones y propuesta la solución, debe confeccionarse un acta que
contenga lugar y fecha, motivo de la petición, datos identificatorios de las personas intervinientes, un resumen de lo
tratado en la audiencia, la solución propuesta, el plan a aplicar y la forma de seguimiento del caso particular.
El acta debe ser firmada por todos los intervinientes y se les entregará copia de la misma.

4) NIÑEZ VULNERADA: MALTRATO INFANTIL(…)

LA RESPONSABILIDAD PARENTAL Y EL MALTRATO INFANTIL EN EL NUEVO CÓDIGO CIVIL Y COMERCIAL ARGENTINO


En materia de responsabilidad parental, el nuevo Código Civil y Comercial viene a reemplazar el llamado «poder de
corrección» por el deber de los padres de «prestar orientación y dirección». A su vez, explicita la prohibición total de
los malos tratos.
Actualmente, el Código Civil, en su art. 278, estipula lo siguiente: «Los padres tienen la facultad de corregir o hacer
corregir la conducta de sus hijos menores...».

A continuación reza: «El poder de corrección debe ejercerse moderadamente, debiendo quedar excluidos los malos
tratos, castigos o actos que lesionen o menoscaben física o psíquicamente a los menores». En tal sentido, el art. 647
del nuevo Código Civil y Comercial, reza lo siguiente: «Se prohíbe el castigo corporal en cualquiera de sus formas, los
malos tratos y cualquier hecho que lesione o menoscabe física o psíquicamente a los niños o adolescentes...». Por
otra parte, el art. 646 del mencionado Código enumera los deberes de los progenitores.

Este dispone en sus incisos: «a) cuidar del hijo, convivir con él, prestarle alimentos y educarlo; b) considerar las
necesidades específicas del hijo según sus características: psicofísicas, aptitudes, inclinaciones y desarrollo
madurativo; c) respetar el derecho del niño y adolescente a ser oído y a participar en su proceso educativo, así como
en todo lo referente a sus derechos personalísimos; d) prestar orientación y dirección al hijo para el ejercicio y
efectividad de sus derechos...».
En tal sentido, serán los magistrados quienes resguardarán a los niños de las correcciones excesivas ejercidas por los
progenitores, adoptando las medidas que estimen pertinentes. Una de dichas medidas es la privación de la patria
potestad por poner en peligro la seguridad, la salud física o psíquica o la moralidad del hijo, por los malos
tratamientos, ejemplos perniciosos, o inconducta notoria.
Como podemos observar, se deroga el llamado «poder de corrección» regulándose el derecho / deber de los
progenitores de «prestar orientación y dirección» normado en el inc. d) del art. 646, requiriendo para ello, el deber
del progenitor de considerar las necesidades específicas del hijo conforme sus aptitudes, inclinaciones y desarrollo
madurativo, estipulado en el inc. a) del mismo artículo, incorporando en tal sentido el principio de la capacidad
progresiva. En suma, debe existir entre ambos un claro intercambio, un diálogo.

El término «poder de corrección» guardaba relación con la arcaica expresión «patria potestad» o «pater familias»,
en cuyo contexto los hijos y la mujer estaban sujetos a la voluntad del padre: mientras el padre viviera, los hijos
debían guardarle respeto y obediencia.
En suma, se ejercía un poder según el cual el padre era la ley dentro de la familia. Hoy día la sanción del Código Civil
y Comercial otorga un cambio radical a este concepto con una noción absolutamente opuesta al incorporar la idea
de «responsabilidad parental», según la cual los hijos vienen a ser considerados sujetos plenos de derecho,
adecuándose la nueva normativa al plexo legal vigente en materia de niñez y adolescencia. En tal sentido, los padres
deben educar a través de la palabra, el diálogo, y no a través del maltrato.
BOLILLA XIII: RESPONSABILIDAD PARENTAL

Consideraciones previas: Tener en cuenta reciente modificación al ccc en materia de Responsabilidad Parental.

Ley 27363 – Privación de la Responsabilidad Parental.

Emisor: Poder Legislativo Nacional


Publicación en el Boletín Oficial: 26/06/2017
Sanción: 31/05/2017
Promulgación: 22/06/2017
Síntesis: Privación de la Responsabilidad Parental. Modificación al Código Civil y Comercial

El Senado y Cámara de Diputados de la Nación Argentina reunidos en Congreso, etc. sancionan con fuerza de Ley:
MODIFICACIÓN DEL CÓDIGO CIVIL Y COMERCIAL DE LA NACIÓN – PRIVACIÓN DE LA RESPONSABILIDAD PARENTAL

Artículo 1: Incorpórase al Código Civil y Comercial de la Nación el siguiente artículo 700 bis:

Artículo 700 bis: Cualquiera de los progenitores queda privado de la responsabilidad parental por:
a) Ser condenado como autor, coautor, instigador o cómplice del delito de homicidio agravado por el vínculo o
mediando violencia de género conforme lo previsto en el artículo 80, incisos 1 y 11 del Código Penal de la Nación, en
contra del otro progenitor;
b) Ser condenado como autor, coautor, instigador o cómplice del delito de lesiones previstas en el artículo 91 del
Código Penal, contra el otro progenitor, o contra el hijo o hija de que se trata;
c) Ser condenado como autor, coautor, instigador o cómplice del delito contra la integridad sexual previsto en el
artículo 119 del Código Penal de la Nación, cometido contra el hijo o hija de que se trata.
La privación operará también cuando los delitos descriptos se configuren en grado de tentativa, si correspondiere.
La condena penal firme produce de pleno derecho la privación de la responsabilidad parental. La sentencia definitiva
debe ser comunicada al Ministerio Público a los fines de lo previsto en el artículo 703, teniéndose en cuenta la
asistencia letrada establecida en el artículo 26, segundo párrafo y a la autoridad de protección de los derechos de las
niñas, niños y adolescentes competente en cada jurisdicción, a efectos de que proceda en sede civil, a los efectos de
este artículo. Se deberá observar lo previsto en el artículo 27 de la Ley 26061.

Artículo 2: Modifícase el artículo 702 del Código Civil y Comercial de la Nación el que quedará redactado de la
siguiente manera:
Artículo 702: Suspensión del ejercicio. El ejercicio de la responsabilidad parental queda suspendido mientras dure:
a) La declaración de ausencia con presunción de fallecimiento;
b) El plazo de la condena a reclusión y la prisión por más de tres (3) años;
c) La declaración por sentencia firme de la limitación de la capacidad por razones graves de salud mental que
impiden al progenitor dicho ejercicio;
d) La convivencia del hijo o hija con un tercero, separado de sus progenitores por razones graves, de conformidad
con lo establecido en leyes especiales;
e) El procesamiento penal o acto equivalente, por los delitos mencionados en el artículo 700 bis. El auto de
procesamiento debe ser comunicado al Ministerio Público a los fines de lo previsto en el artículo 703, teniéndose en
cuenta la asistencia letrada establecida en el artículo 26, segundo párrafo y a la autoridad de protección de los
derechos de las niñas, niños y adolescentes competente en cada jurisdicción, a efectos de que proceda en sede civil,
a los fines de este artículo. Se deberá observar lo previsto en el artículo 27 de la Ley 26061. No se procederá a
suspender el ejercicio de la responsabilidad parental en los términos del presente inciso en los casos del artículo 700
bis incisos a) y b), cuando en los hechos investigados o en sus antecedentes mediare violencia de género.

Artículo 3: La presente ley será aplicable a las situaciones jurídicas pendientes o en curso de ejecución.

Artículo 4: Comuníquese al Poder Ejecutivo nacional.


1) CONCEPTO
Art. 638.— Responsabilidad parental. Concepto.
La responsabilidad parental es el conjunto de deberes y derechos que corresponden a los progenitores sobre la
persona y bienes del hijo, para su protección, desarrollo y formación integral mientras sea menor de edad y no se
haya emancipado.

Se trata de un conjunto de deberes y después de derechos, haciendo primar las obligaciones de los adultos. Hace
referencia a los progenitores, incluyendo en la palabra a las familias formadas por madre y padre, así como por dos
madres y dos padres. Explicita los objetivos del instituto, esto es, la protección, el desarrollo y la formación integral
del hijo incorporando desde el comienzo la idea de su crecimiento. Dispone su culminación en la mayoría de edad o
emancipación del hijo, mas de que, como se vera, algunos efectos subsisten con posterioridad a dicho momento.-

DENOMINACION

Hasta la sanción del nuevo código, el derecho argentino contenía regulación sobre la patria potestad. En el nuevo
plexo normativo se ha optado por reemplazar dicha expresión que evoca a la “potestas” del derecho romano
centrado en la idea de dependencia absoluta del niño en una estructura familiar jerárquica, por la de responsabilidad
parental.

ANTECEDENTES

La redacción originaria del código disponía en el art 264 que “La patria potestad es el conjunto de los derechos que
las leyes conceden a los padres desde la concepción de los hijos legítimos, en las personas y bienes de dichos hijos,
mientras sean menores de edad y no estén emancipados”.
Coherente con un sistema donde coexistían distintas categorías de hijos, con marcadas diferencias referidas a los
pocos derechos que se les otorgaba solo a algunos, el codificador concibió la patria potestad solamente en relación
con los hijos legítimos.
La ley 10.903 que regulo el Patronato de Estado introdujo modificaciones al concepto de patria potestad en los
siguientes términos “La patria potestad es el conjunto de derechos y obligaciones que corresponden a los padres
sobre las personas y bienes de sus hijos, desde la concepción de estos y en tanto sean menores de edad y no se
hayan emancipado”.

Se evidencian dos cambios notables: a) junto a los derechos agrego obligaciones de los padres;

b) al eliminar la referencia a los hijos legítimos, incorporo a a los hijos


naturales a la patria potestad.

Pero a continuación, incorporo que el ejercicio de la patria potestad correspondía solo al padre.
La situación continuó de la misma manera hasta la sanción de la ley 23.264. Dicha ley destaco que la patria potestad
es primeramente un conjunto de deberes antes que derechos e incorporo la finalidad del instituto: la protección y
formación integral de los niños.
Por otra parte la patria potestad fue ejercida sobre todos los hijos, sin distinciones. Otra de las reformas sustanciales
tuvo relación con el lugar de la madre, ya que organizo un sistema de ejercicio de la patria potestad en cabeza del
padre y de la madre durante la convivencia, presumiendo que los actos que realiza uno cuentan con el
consentimiento del otro.

Pueden además, resaltarse tres antecedentes que operaron como motor de la reforma:

1) La incorporación a nuestro ordenamiento jurídico interno de los instrumentos internacionales de derechos


humanos, algunos con jerarquía constitucional.
2) La ley 26.061 que deroga el Patronato de Estado e instaura un Sistema de Promoción y
Protección Integral de los Derechos de la Infancia
3) La ley 26.618 de matrimonio igualitario, que termina de romper con la asociación entre familia y heterosexualidad
e incorpora al escenario legal la pluralidad familiar.
PRINCIPIOS QUE LA RIGEN

Art. 639- Principios generales. Enumeración. La responsabilidad parental se rige por los siguientes principios:
a) el interés superior del niño;

Este principio se encuentra establecido en la Convención sobre los Derechos del Niño. La determinación del interés
superior del niño no queda supeditada a consideraciones subjetivas, ya que en el caso concreto dependerá de un
razonamiento coherente que evidencie el por qué elegir determinada opción, dejando traslucir la congruencia en la
toma de decisión.
La ley 26.061 en su art 3 establece que “A los efectos de la presente ley se entiende por interés superior del NNA la
máxima satisfacción, integral y simultanea de los derechos y garantías reconocidos en esta ley”.
Culmina el art señalando que “Cuando exista conflicto entre los derechos e intereses del NNA frente a otros
derechos e intereses igualmente legítimos, prevalecerán los primeros”.

b) la autonomía progresiva del hijo conforme a sus características psicofísicas, aptitudes y desarrollo. A mayor
autonomía, disminuye la representación de los progenitores en el ejercicio de los derechos de los hijos;

Este principio tiende a completar la noción del niño como sujeto pleno de derechos, al introducir la idea de que
crece y ese crecimiento genera diferencias. Se incorpora a nuestro derecho a través del art 5 de la Convención sobre
los Derechos del Niños.
La aplicación del principio implica que a medida que el niño crece, adquiere mayor autonomía en el ejercicio de sus
derechos de acuerdo con la evolución de sus facultades. En su relación con la responsabilidad parental, se plantea de
la siguiente manera: a mayor autonomía disminuye la representación de los progenitores en el ejercicio de los
derechos de los hijos.

La regla general de la autonomía progresiva esta prevista en el art 26 del nuevo código:

Art. 26.— Ejercicio de los derechos por la persona menor de edad. La persona menor de edad ejerce sus derechos a
través de sus representantes legales.
No obstante, la que cuenta con edad y grado de madurez suficiente puede ejercer por sí los actos que le son
permitidos por el ordenamiento jurídico. En situaciones de conflicto de intereses con sus representantes legales,
puede intervenir con asistencia letrada.
La persona menor de edad tiene derecho a ser oída en todo proceso judicial que le concierne así como a participar
en las decisiones sobre su persona.
Se presume que el adolescente entre trece y dieciséis años tiene aptitud para decidir por sí respecto de aquellos
tratamientos que no resultan invasivos, ni comprometen su estado de salud o provocan un riesgo grave en su vida o
integridad física.
Si se trata de tratamientos invasivos que comprometen su estado de salud o está en riesgo la integridad o la vida, el
adolescente debe prestar su consentimiento con la asistencia de sus progenitores; el conflicto entre ambos se
resuelve teniendo en cuenta su interés superior, sobre la base de la opinión médica respecto a las consecuencias de
la realización o no del acto médico.
A partir de los dieciséis años el adolescente es considerado como un adulto para las decisiones atinentes al cuidado
de su propio cuerpo.
Debe analizarse si el niño o adolescente cuenta con las competencias necesarias para levar delante de un modo
razonado, la decisión que postula.

c) el derecho del niño a ser oído y a que su opinión sea tenida en cuenta según su edad y grado de madurez.

Este principio termina de estructurar el sistema de la responsabilidad parental. Conlleva la participación activa del
niño en todo proceso de toma de decisiones sobre asuntos de su interés.

No solo hay que escuchar sino también tomar debidamente en cuenta la opinión del niño según su edad y su grado
de madurez. Ello implica darle un especial peso a la palabra del niño y ese peso estará determinado por la fuerza de
su autonomía.

TITULARIDAD Y EJERCICIO. DISTINTOS SUPUESTOS


La titularidad de la responsabilidad parental se traduce en el cúmulo de deberes y derechos que tienen los
progenitores sobre la persona y bienes de sus hijos, mientras que el ejercicio de dicha responsabilidad implica la
posibilidad concreta de llevar adelante acciones que pongan en movimiento esos deberes y derechos.-
La titularidad siempre corresponde a ambos progenitores, mientras que en la realidad el ejercicio puede presentar
distintas opciones.
A partir del art 641 se regulan las modalidades que puede asumir el ejercicio de la responsabilidad parental de
acuerdo con la situación la que se encuentre el niño y sus progenitores.

Art. 641. Ejercicio de la responsabilidad parental. El ejercicio de la responsabilidad parental corresponde:

a) en caso de convivencia con ambos progenitores, a éstos. Se presume que los actos realizados por uno cuentan con
la conformidad del otro, con excepción de los supuestos contemplados en el artículo 645, o que medie expresa
oposición;
b) en caso de cese de la convivencia, divorcio o nulidad de matrimonio, a ambos progenitores. Se presume que los
actos realizados por uno cuentan con la conformidad del otro, con las excepciones del inciso anterior. Por voluntad
de los progenitores o por decisión judicial, en interés del hijo, el ejercicio se puede atribuir a sólo uno de ellos, o
establecerse distintas modalidades;
c) en caso de muerte, ausencia con presunción de fallecimiento, privación de la responsabilidad parental o
suspensión del ejercicio de un progenitor, al otro;
d) en caso de hijo extramatrimonial con un solo vínculo filial, al único progenitor;
e) en caso de hijo extramatrimonial con doble vínculo filial, si uno se estableció por declaración judicial, al otro
progenitor. En interés del hijo, los progenitores de común acuerdo o el juez pueden decidir el ejercicio conjunto o
establecer distintas modalidades.

Convivencia de los progenitores junto al niño: Cuando los progenitores conviven con el hijo se trata de un ejercicio
compartido o conjunto. Ambos la ejercen de manera indistinta, ya que la ley presume que los actos realizados por
uno cuentan con el consentimiento del otro. La presunción de conformidad no opera cuando un progenitor se opone
expresamente a la realización de un acto.

Puede ser formulada extrajudicialmente para evitar que el otro progenitor lo realice o, si ya lo hubiere realizado,
para que no tenga efectos.

Falta de convivencia de los progenitores: El código privilegia el ejercicio compartido de la responsabilidad parental,
con independencia de que los progenitores convivan o no.

A diferencia de la regulación del código anterior, a partir de la reforma se establece el ejercicio compartido de la
responsabilidad parental con independencia de la modalidad de cuidado personal del hijo que asuma en la
cotidianeidad.
Pueden ambos progenitores ejercer la responsabilidad parental, es decir que sean ambos responsables en llevar
adelante los deberes y derechos que les cabe en esa condición y que el hijo viva solo con uno de ellos.
Pueden existir situaciones en las que ese ejercicio compartido no sea pertinente. En ese caso por voluntad de los
progenitores o por decisión judicial, en interés del hijo, el ejercicio se puede atribuir solo a uno de ellos, o
establecerse distintas modalidades.

Ejercicio unilateral: El código reserva el ejercicio unilateral para los supuestos donde el niño cuente con la presencia
de uno solo de sus padres. Aquí se concentran las funciones derivadas de la responsabilidad parental en aquel de los
progenitores presente, constituyendo uno de los supuestos en los que seria viable la adopción de integración.-

Hijo extramatrimonial con determinación judicial de su parentalidad: La ley establece un tipo de sanción para aquel
progenitor que no ha reconocido voluntariamente a su hijo, impidiéndole el ejercicio de la responsabilidad parental
Progenitores adolescentes:

Art. 644.— Progenitores adolescentes. Los progenitores adolescentes, estén o no casados, ejercen la responsabilidad
parental de sus hijos pudiendo decidir y realizar por sí mismos las tareas necesarias para su cuidado, educación y
salud.

Las personas que ejercen la responsabilidad parental de un progenitor adolescente que tenga un hijo bajo su
cuidado pueden oponerse a la realización de actos que resulten perjudiciales para el niño; también pueden
intervenir cuando el progenitor omite realizar las acciones necesarias para preservar su adecuado desarrollo.
El consentimiento del progenitor adolescente debe integrarse con el asentimiento de cualquiera de sus propios
progenitores si se trata de actos trascendentes para la vida del niño, como la decisión libre e informada de su
adopción, intervenciones quirúrgicas que ponen en peligro su vida, u otros actos que pueden lesionar gravemente
sus derechos. En caso de conflicto, el juez debe decidir a través del procedimiento más breve previsto por la ley
local.
La plena capacidad de uno de los progenitores no modifica este régimen.
En la regulación anterior, el hecho de ser menor de edad no emancipado impedía absolutamente y en todos los
casos ejercer la responsabilidad parental sobre sus hijos, quedando estos sometidos a tutela de alguno de los
abuelos.

Hoy, las personas menores de edad que hayan cumplido 13 años, son los encargados de llevar adelante todos los
actos que hagan a la vida cotidiana de sus hijos, presumiendo la norma que cuentan con el grado de madurez
suficiente para hacerlo.
Sin embargo, el ejercicio de su propia autonomía progresiva como adolescente (y como progenitor) se encuentra
resguardado en las funciones de sus propios progenitores, abuelos de su hijo, a través de sus deberes de orientación
y dirección.

Los progenitores adolescentes consienten, elaboran y toman la decisión como cualquier acto de la vida cotidiana de
sus hijos. Pero para este tipo de actos complejos requieren además el asentimiento de sus propios progenitores.

En síntesis, el consentimiento del progenitor adolescente será suficiente para la toma de decisiones que hacen a la
cotidianeidad de la crianza de su hijo, salvo oposición de sus progenitores. Ahora, debe complementarse con el
asentimiento de su propio progenitor para situaciones extremas.
Todo este sistema se aplica tanto frente a progenitores adolescentes no emancipados como a aquellos que se hayan
emancipado por matrimonio.

Ejercicio conjunto de la responsabilidad parental:

El art 645 establece una serie de actos que requieren ser otorgados conjuntamente por ambos progenitores. Si el
hijo tiene doble vinculo filial, se requiere el consentimiento expreso de ambos progenitores para los siguientes
supuestos:

a) Autorizarlo si es adolescente y tiene 16 y 18 años para contraer matrimonio.-


b) Autorizarlo para ingresar a comunidades religiosas, fuerzas armadas o de seguridad
c) Autorizarlo para salir del país o para el cambio de residencia permanente en el extranjero
d) Autorizarlo para estar en juicio, en los supuestos en que no puede actuar por si
e) Administrar los bienes de los hijos, excepto que haya delegación expresa de la administración

Frente a la ausencia del consentimiento expreso de alguno de los progenitores, ya sea por desacuerdo o por
imposibilidad para prestarlo, debe resolver el juez, teniendo en miras el interés familiar.

Si bien no ha sido previsto por la norma, se estima que también es posible acudir a la vía judicial cuando es el propio
hijo adolescente quien ha tomado alguna de estas decisiones pero no cuanta con el consentimiento de ninguno de
sus progenitores.
Delegación del ejercicio de la responsabilidad parental:

Art. 643.— Delegación del ejercicio. En el interés del hijo y por razones suficientemente justificadas, los progenitores
pueden convenir que el ejercicio de la responsabilidad parental sea otorgado a un pariente, sin perjuicio de lo
establecido en el artículo 674. El acuerdo con la persona que acepta la delegación debe ser homologado
judicialmente, debiendo oírse necesariamente al hijo. Tiene un plazo máximo de un año, pudiendo renovarse
judicialmente por razones debidamente fundadas, por un período más con participación de las partes involucradas.
Los progenitores conservan la titularidad de la responsabilidad parental, y mantienen el derecho a supervisar la
crianza y educación del hijo en función de sus posibilidades.

Igual régimen es aplicable al hijo que sólo tiene un vínculo filial establecido.

La delegación de la responsabilidad parental presenta las siguientes características:

a) Debe obedecer a razones graves


b) Puede recaer únicamente en un pariente, dejando a salvo la posibilidad regulada en el art 674 de delegación de la
responsabilidad parental en el progenitor afín del niño.
c) Se establece el control judicial, ya que obliga a las partes a homologar el acuerdo previendo expresamente la
participación del niño
d) Es transitoria, acorde con los motivos que la justifican
e) Sus efectos se limitan a la convivencia del niño y el delegatario. Este cuenta con todas las facultades para hacer
efectivos los deberes y derechos que deriven de ella.
f) Los progenitores conservan la titularidad de la responsabilidad parental y mantienen el derecho a supervisar la
crianza y educación del hijo en función de sus posibilidades.

Ejercicio de la responsabilidad parental en familias ensambladas:

Los arts 674 y 675 regulan dos alternativas que pueden presentarse cuando el niño vive en el seno de una familia
ensamblada: la posibilidad de delegar transitoriamente el ejercicio de la responsabilidad parental en el progenitor
afín y su ejercicio compartido entre uno de los progenitores y el progenitor afín.-

Personas Incapaces o con capacidad restringida con hijos:

Frente al supuesto de que una persona incapaz o con capacidad restringida tenga hijos, la primera parte del art 140
establece como regla general que “El curador de la persona incapaz o con capacidad restringida es tutor de los hijos
menores de este…” Será entonces el curador quien ejerza los deberes y derechos en relación con la persona y bienes
de la persona menor de edad.-

Desacuerdo entre progenitores:

Art. 642.— Desacuerdo. En caso de desacuerdo entre los progenitores, cualquiera de ellos puede acudir al juez
competente, quien debe resolver por el procedimiento más breve previsto por la ley local, previa audiencia de los
progenitores con intervención del Ministerio Público.
Si los desacuerdos son reiterados o concurre cualquier otra causa que entorpece gravemente el ejercicio de la
responsabilidad parental, el juez puede atribuirlo total o parcialmente a uno de los progenitores, o distribuir entre
ellos sus funciones, por un plazo que no puede exceder de dos años.
El juez también puede ordenar medidas de intervención interdisciplinaria y someter las discrepancias a mediación.
En los supuestos de ejercicio compartido de la responsabilidad parental, la oposición de uno de los progenitores, no
requiere de intervención judicial, pero en caso de que no puedan ponerse de acuerdo, será la vía necesaria. Sin
embargo, la sola oposición impide llevar adelante el acto cuestionado.-
En los supuestos de ejercicio unilateral, el progenitor que no se encuentra en ejercicio de la responsabilidad parental
deberá acudir al camino judicial para manifestar su desacuerdo, ya que la simple oposición no impide la ejecución
del acto cuestionado.
2) DERECHOS Y DEBERES DE LOS PROGENITORES

Se está frente a verdaderos deberes – derechos que se confieren a los titulares no solo atendiendo a sus intereses,
sino principalmente considerando el interés de otro sujeto (el hijo) por lo cual, los derechos que se confieren
implican correlativos deberes.

Art. 646.— Enumeración. Son deberes de los progenitores:


a) cuidar del hijo, convivir con él, prestarle alimentos y educarlo;
b) considerar las necesidades específicas del hijo según sus características psicofísicas, aptitudes y desarrollo
madurativo;
c) respetar el derecho del niño y adolescente a ser oído y a participar en su proceso educativo, así como en todo lo
referente a sus derechos personalísimos;
d) prestar orientación y dirección al hijo para el ejercicio y efectividad de sus derechos;
e) respetar y facilitar el derecho del hijo a mantener relaciones personales con abuelos, otros
parientes o personas con las cuales tenga un vínculo afectivo;
f) representarlo y administrar el patrimonio del hijo.

Los deberes de los progenitores deben llevarse adelante con absoluta prohibición de incluir a los malos tratos. El art
647 dispone:

Art. 647.— Prohibición de malos tratos. Auxilio del Estado. Se prohíbe el castigo corporal en cualquiera de sus
formas, los malos tratos y cualquier hecho que lesione o menoscabe física o psíquicamente a los niños o
adolescentes.
Los progenitores pueden solicitar el auxilio de los servicios de orientación a cargo de los organismos del Estado.

CUIDADO PERSONAL

Art. 648. Cuidado personal. Se denomina cuidado personal a los deberes y facultades de los progenitores referidos a
la vida cotidiana del hijo.
Se traduce en una serie de actos que llevan adelante los progenitores destinados a la crianza de sus hijos. Puede ser
alternado o indistinto:

Art. 650.— Modalidades del cuidado personal compartido. El cuidado personal compartido puede ser alternado o
indistinto. En el cuidado alternado, el hijo pasa períodos de tiempo con cada uno de los progenitores, según la
organización y posibilidades de la familia. En el indistinto, el hijo reside de manera principal en el domicilio de uno de
los progenitores, pero ambos comparten las decisiones y se distribuyen de modo equitativo las labores atinentes a
su cuidado.

En el caso que los progenitores no convivan, se establece:

Art. 649.— Clases. Cuando los progenitores no conviven, el cuidado personal del hijo puede ser asumido por un
progenitor o por ambos.
Art. 651.— Reglas generales. A pedido de uno o ambos progenitores o de oficio, el juez debe otorgar, como primera
alternativa, el cuidado compartido del hijo con la modalidad indistinta, excepto que no sea posible o resulte
perjudicial para el hijo.

Autonomía de la voluntad:
El código incentiva a que sean los propios progenitores quienes determinen de que manera se llevara adelante el
cuidado personal de los hijos.
El plan de parentalidad propuesto debe ser homologado judicialmente, circunstancia que posibilita a revisión por el
magistrado, de lo acordado.

Art. 655. Plan de parentalidad. Los progenitores pueden presentar un plan de parentalidad relativo al cuidado del
hijo, que contenga:
a) lugar y tiempo en que el hijo permanece con cada progenitor;
b) responsabilidades que cada uno asume;
c) régimen de vacaciones, días festivos y otras fechas significativas para la familia;
d) régimen de relación y comunicación con el hijo cuando éste reside con el otro progenitor.

El plan de parentalidad propuesto puede ser modificado por los progenitores en función de las necesidades del
grupo familiar y del hijo en sus diferentes etapas.

Los progenitores deben procurar la participación del hijo en el plan de parentalidad y en su modificación.

Determinación judicial del cuidado personal: En caso que las partes no puedan acordar el pan de parentalidad, el art
656 dispone:

Art. 656.— Inexistencia de plan de parentalidad homologado.


Si no existe acuerdo o no se ha homologado el plan, el juez debe fijar el régimen de cuidado de los hijos y priorizar la
modalidad compartida indistinta, excepto que por razones fundadas resulte más beneficioso el cuidado unipersonal
o alternado. Cualquier decisión en materia de cuidado personal del hijo debe basarse en conductas concretas del
progenitor que puedan lesionar el bienestar del niño o adolescente no siendo admisibles discriminaciones fundadas
en el sexo u orientación sexual, la religión, las preferencias políticas o ideológicas o cualquier otra condición.

Esta prioridad indicada por la ley para el juez por el cuidado personal compartido con modalidad indistinta implica:
a) Que en sus argumentaciones, las partes deban sostener también la inconveniencia de la modalidad compartida
indistinta
b) Que al momento de decidir, si el juez opta por el cuidado unipersonal o alternado, deba fundar porque en el caso
no fue imposible inclinarse por la modalidad compartida indistinta.

El art 656 establece un principio general de trascendental importancia que guía el proceso de determinación judicial
del cuidado personal de los hijos.

CUIDADO UNILATERAL

En caso de que el juez no pueda fijar un sistema de cuidado personal compartido, el código contempla la posibilidad
de acudir al cuidado unilateral:

Art. 653.— Cuidado personal unilateral. Deber de colaboración. En el supuesto excepcional en el que el cuidado
personal del hijo deba ser unipersonal, el juez debe ponderar:

a) la prioridad del progenitor que facilita el derecho a mantener trato regular con el otro;
b) la edad del hijo;
c) la opinión del hijo;
d) el mantenimiento de la situación existente y respeto del centro de vida del hijo.

El otro progenitor tiene el derecho y el deber de colaboración con el conviviente.


Lo expuesto significa que la determinación del progenitor que se hará cargo del cuidado unipersonal del hijo
dependerá en el caso concreto, de la ponderación de cada uno de los ítems establecidos en el artículo. Se trata de la
aplicación de estándares objetivos que brindan seguridad tanto a los progenitores al momento de alegar y probar,
como al juez al momento de decidir.

Ha sido derogada la preferencia materna para el cuidado personal de los hijos menores de 5 años.

COMUNICACIÓN

Cuando el cuidado personal queda a cargo de uno de los progenitores, el hijo cuenta con su derecho humano a
mantener un vínculo estrecho con el otro progenitor:

Art. 652.—Derecho y deber de comunicación. En el supuesto de cuidado atribuido a uno de los progenitores, el otro
tiene el derecho y el deber de fluida comunicación con el hijo.

El deber – derecho de comunicación debe ejercerse de la forma mas amplia posible. El art 654 dispone que cada
progenitor debe informar al otro sobre cuestiones de educación, salud y otras relativas a la persona y bienes del hijo;
lo que refuerza el hecho de que la titularidad de la responsabilidad parental continua en cabeza de ambos y el
ejercicio también puede continuar en cabeza de ambos.

Otorgamiento de la guarda a un pariente: Con el término gustada se hace referencia a la convivencia concreta del
progenitor o de un tercero con el niño.
La guarda no tenia regulación en el anterior código y se la incluyo en el art 657 del nuevo plexo legal:

Art. 657. Otorgamiento de la guarda a un pariente. En supuestos de especial gravedad, el juez puede otorgar la
guarda a un pariente por un plazo de un año, prorrogable por razones fundadas por otro período igual. Vencido el
plazo, el juez debe resolver la situación del niño, niña o adolescente mediante otras figuras que se regulan en este
Código.
El guardador tiene el cuidado personal del niño, niña o adolescente y está facultado para tomar las decisiones
relativas a las actividades de la vida cotidiana, sin perjuicio de que la responsabilidad parental quede en cabeza del o
los progenitores, quienes conservan los derechos y responsabilidades emergentes de esta titularidad y ejercicio.

La diferencia en el ejercicio de la guarda originaria (responsabilidad parental) y la derivada (tutela) por un lado, y la
guarda delegada, por el otro, es que en esta última, al desmembrarse el contenido de los institutos en juego, el
guardador no posee la representación legal del niño y sus deberes se restringen exclusivamente a su cuidado,
protección y formación.
Un supuesto específico de guarda a un tercero lo establece el ar 140 del código en relación con los hijos de personas
con discapacidad o capacidad restringida. En cualquier lugar, señala que el curador del progenitor será el tutor de
sus hijos y seguidamente agrega: “Sin embargo, el juez puede otorgar la guarda del hijo menor de edad a un tercero,
designándolo tutor para que lo represente en las cuestiones patrimoniales.

4) ALIMENTOS

La obligación alimentaria es de la esencia misma de la responsabilidad parental y vincula a los hijos con ambos
progenitores, de manera igualitaria y en virtud del deber de mantenimiento y crianza emanado de ella.

Art. 658.— Regla general. Ambos progenitores tienen la obligación y el derecho de criar a sus hijos, alimentarlos y
educarlos conforme a su condición y fortuna, aunque el cuidado personal esté a cargo de uno de ellos.

La obligación de prestar alimentos a los hijos se extiende hasta los veintiún años, excepto que el obligado acredite
que el hijo mayor de edad cuenta con recursos suficientes para proveérselos por sí mismo.

Los progenitores, con fundamento en la responsabilidad parental, deben alimentos a sus hijos hasta que cumplan 21
años, con independencia de que a los 18 ya sean mayores de edad.

La excepción se encuentra consagrada en el mismo articulo que permite que el progenitor que intente liberarse de
su obligación pruebe que el hijo que se encuentra en la franja entre los 18 y los 21 años puede procurarse por si
mismo los alimentos.
Art. 659.— Contenido. La obligación de alimentos comprende la satisfacción de las necesidades de los hijos de
manutención, educación, esparcimiento, vestimenta, habitación, asistencia, gastos por enfermedad y los gastos
necesarios para adquirir una profesión u oficio. Los alimentos están constituidos por prestaciones monetarias o en
especie y son proporcionales a las posibilidades económicas de los obligados y necesidades del alimentado.

Se reconoce en forma expresa la entidad que adquieren las tareas personales del progenitor que tiene a su cargo el
cuidado personal del hijo. Quien cuida al hijo esta haciendo un aporte:
Art. 660.— Tareas de cuidado personal. Las tareas cotidianas que realiza el progenitor que ha asumido el cuidado
personal del hijo tienen un valor económico y constituyen un aporte a su manutención.

La reclamación de los alimentos derivados de la responsabilidad parental no esta sujeta a la acreditación del estado
de necesidad como en el caso del reclamo a los parientes. No se exige, que quien reclama pruebe la falta de medios
económicos suficientes y la imposibilidad de adquirirlos con su trabajo. Basta el pedido para la procedencia del
reclamo.
La proporción entre las entradas del alimentante y la cuota a fijarse es materia que queda reducida a la negociación
de las partes o a la determinación judicial.

También se regula expresamente la especial situación de la obligación alimentaria en los casos del cuidado personal
compartido, estableciéndose en el art 666 que “si ambos progenitores cuentan con recursos equivalentes, cada uno
debe hacerse cargo de la manutención cuando el hijo permanece bajo su cuidado” Es decir que en este caso no
habría posibilidad de reclamo alimentario.

Ahora, si los recursos de los progenitores no son equivalentes, la misma norma prevé que “aquel que cuenta con
mayores ingresos debe pasar una cuota alimentaria al otro para que el hijo goce del mismo nivel de vida en ambos
hogares”.

Extensión de la obligación alimentaria:

Art. 669.— Alimentos impagos. Los alimentos se deben desde el día de la demanda o desde el día de la interpelación
del obligado por medio fehaciente, siempre que se interponga la demanda dentro de los seis meses de la
interpelación.

Por el período anterior, el progenitor que asumió el cuidado del hijo tiene derecho al reembolso de lo gastado en la
parte que corresponde al progenitor no conviviente.

Es así que se establece la retroactividad de la decisión que resuelve sobre los alimentos, disponiéndose que son
debidos desde el reclamo judicial o extrajudicial, siempre que éste se hubiera realizado dentro de los 6 meses
anteriores al inicio de la demanda, evitándose así pretensiones abusivas.

HIJO MAYOR QUE SE CAPACITA

Art. 663.— Hijo mayor que se capacita. La obligación de los progenitores de proveer recursos al hijo subsiste hasta
que éste alcance la edad de veinticinco años, si la prosecución de estudios o preparación profesional de un arte u
oficio, le impide proveerse de medios necesarios para sostenerse independientemente.

Pueden ser solicitados por el hijo o por el progenitor con el cual convive; debe acreditarse la viabilidad del pedido.

El tope que la norma fija a los 25 años, garantiza un equilibrio entre los derechos en pugna y el posible abuso en el
mantenimiento de los hijos mayores de edad.

Los extremos de la norma deben ser acreditados por el alimentad para formular su reclamo y por el alimentante
para dar fin a su obligación.

Reclamo a ascendientes: El código, con el fin de resguardar los derechos en juego, admite la posibilidad de reclamar
alimentos contra el obligado principal (los progenitores) y simultáneamente a los ascendientes, debiéndose acreditar
la dificultad del primero para cumplir con la obligación a su cargo:

Art. 668.— Reclamo a ascendientes. Los alimentos a los ascendientes pueden ser reclamados en el mismo proceso
en que se demanda a los progenitores o en proceso diverso; además de lo previsto en el título del parentesco, debe
acreditarse verosímilmente las dificultades del actor para percibir los alimentos del progenitor obligado.

Alimentos provisorios: Los alimentos provisorios se traducen en una cuota que se fija con anterioridad a la sentencia
de fondo para cubrir gastos imprescindibles mientras dure el proceso en el que se determinara la pensión. No son
una categoría autónoma.-

Hijo no reconocido: El código contempla la posibilidad de solicitar los alimentos provisorios aun antes de promover
el juicio de filiación:

Art. 664.— Hijo no reconocido. El hijo extramatrimonial no reconocido tiene derecho a alimentos provisorios
mediante la acreditación sumaria del vínculo invocado. Si la demanda se promueve antes que el juicio de filiación, en
la resolución que determina alimentos provisorios el juez debe establecer un plazo para promover dicha acción, bajo
apercibimiento de cesar la cuota fijada mientras esa carga esté incumplida.
Mujer embarazada: El art 665 le reconoce a la mujer embarazada el derecho a reclamarle alimentos al presunto
progenitor de su hijo con la prueba sumaria de la filiación alegada.

Hijo fuera del país:

Art. 667.— Hijo fuera del país o alejado de sus progenitores. El hijo que no convive con sus progenitores, que se
encuentra en un país extranjero o en un lugar alejado dentro de la República, y tenga necesidad de recursos para su
alimentación u otros rubros urgentes, puede ser autorizado por el juez del lugar o por la representación diplomática
de la República, según el caso, para contraer deudas que satisfagan sus necesidades. Si es adolescente no necesita
autorización alguna; sólo el asentimiento del adulto responsable, de conformidad con la legislación aplicable.

Subsistencia del deber alimentario: La obligación alimentaria de los progenitores subsiste durante la privación y la
suspensión del ejercicio de la responsabilidad parental.(Art 704).

Frente al incumplimiento del deber alimentario, el código otorga a determinadas personas legitimación procesal
para iniciar el reclamo:

Art. 661.— Legitimación. El progenitor que falte a la prestación de alimentos puede ser demandado por:

a) el otro progenitor en representación del hijo;


b) el hijo con grado de madurez suficiente con asistencia letrada;
c) subsidiariamente, cualquiera de los parientes o el Ministerio Público.

5) DEBERES Y DERECHOS DE LOS HIJOS….

DEBERES DE LOS HIJOS

Los hijos menores de edad, en el marco de la relación democrática que los vincula con sus progenitores, tienen una
serie de deberes regulados en el bodigo que derivan de la responsabilidad parental y se sustentan en la solidaridad
familiar:

Art. 671.— Enumeración. Son deberes de los hijos:


a) respetar a sus progenitores;
b) cumplir con las decisiones de los progenitores que no sean contrarias a su interés superior;
c) prestar a los progenitores colaboración propia de su edad y desarrollo y cuidar de ellos u otros ascendientes en
todas las circunstancias de la vida en que su ayuda sea necesaria.

DEBERES Y DERECHOS DE LOS PROGENITORES E HIJOS AFINES

Art. 673.— Deberes del progenitor afín. El cónyuge o conviviente de un progenitor debe cooperar en la crianza y
educación de los hijos del otro, realizar los actos cotidianos relativos a su formación en el ámbito doméstico y
adoptar decisiones ante situaciones de urgencia. En caso de desacuerdo entre el progenitor y su cónyuge o
conviviente prevalece el criterio del progenitor.

Esta colaboración no afecta los derechos de los titulares de la responsabilidad parental.

Se reconoce la afectividad que se genera entre el progenitor y los hijos de su pareja cuando conviven, bajo vínculos
de familiaridad, otorgando ciertos derechos y deberes a los primeros sin excluir los derechos y deberes de los
progenitores como principales responsables de los hijos, ya que ante cualquier divergencia prevalece su decisión.

6) REPRESENTACION

La representación de los hijos por sus progenitores tanto en el ámbito judicial como en el extrajudicial tiende a suplir
su falta de capacidad para la realización de determinados actos.
A partir de la reforma se ha flexibilizado la noción de universalidad de la representación para limitarse al ejercicio de
sus derechos que el hijo no puede ejercer por si mismo, en el marco de la autonomía progresiva.
En el plano patrimonial, la representación de los progenitores se encuentra plasmada en el art 677 en los siguientes
términos “Los progenitores pueden estar en juicio por su hijo como actores o demandados” Son los progenitores
quienes tienen la facultad de decidir cuando demandar, a quien y con que objeto. Sin embargo, el principio descripto
cuenta con varias excepciones:

Capacidad del hijo adolescente: La última parte del art 677 establece:

Se presume que el hijo adolescente cuenta con suficiente autonomía para intervenir en un proceso conjuntamente
con los progenitores, o de manera autónoma con asistencia letrada.
De esta forma, la representación de los progenitores en relación con lo hijos adolescentes queda supeditada a la
autonomía de estos.
El art 678 resuelve el conflicto que podría plantearse frente al supuesto de que los progenitores, en el marco del
ejercicio de su responsabilidad parental, no acordaran con el inicio de una acción por parte de su hijo adolescente.

Se prevé la posibilidad de acudir a la vía judicial en los siguientes términos:

Art. 678.— Oposición al juicio. Si uno o ambos progenitores se oponen a que el hijo adolescente inicie una acción
civil contra un tercero, el juez puede autorizarlo a intervenir en el proceso con la debida asistencia letrada, previa
audiencia del oponente y del Ministerio Público.

Sin embargo, el art 680 establece que:


Art. 680.— Hijo adolescente en juicio. El hijo adolescente no precisa autorización de sus progenitores para estar en
juicio cuando sea acusado criminalmente, ni para reconocer hijos.

En consecuencia, la defensa penal y el reconocimiento de hijos por parte de una persona mayor de 13 años, no
requiere autorización de sus progenitores.
Para el resto de las acciones, el código presume suficiente autonomía para su ejercicio, pero requiere la autorización
de sus progenitores, la cual será brindada en el marco de las facultades de orientación y dirección con las que
cuentan.
Sin perjuicio de ello, el joven cuanta con la posibilidad de acudir a la vía judicial si estima que la oposición o falta de
autorización de sus progenitores es arbitraria.

Juicio contra los progenitores:

El código regula expresamente la facultad del hijo de reclamar a sus progenitores por cualquier medio. La
responsabilidad parental se traduce en deberes y derechos que deberán ser cumplidos y frente a su incumplimiento
se establece la posibilidad de reclamar su exigibilidad.

Con la nueva redacción del Código, el hijo también puede hacerlo, incluso a sus propios progenitores:

Art. 679.— Juicio contra los progenitores. El hijo menor de edad puede reclamar a sus progenitores por sus propios
intereses sin previa autorización judicial, si cuenta con la edad y grado de madurez suficiente y asistencia letrada.

Representación y acceso al trabajo: Cuando el hijo es menor de 16 años la representación de sus progenitores es
absoluta en este ámbito y el acceso al trabajo requiere de su autorización. Sin embargo, el articulo refiere que los
progenitores deben ajustarse a las disposiciones del Código y de leyes vigentes. Se trata de la normativa nacional e
internacional que protege a niños y adolescentes de la explotación laboral, tendiendo a la erradicación del trabajo
infantil.

Art. 681.— Contratos por servicios del hijo menor de dieciséis años. El hijo menor de dieciséis años no puede ejercer
oficio, profesión o industria, ni obligar a su persona de otra manera sin autorización de sus progenitores; en todo
caso, debe cumplirse con las disposiciones de este Código y de leyes especiales.

La autorización de los progenitores requerida en el articulo, carece de ámbito de aplicación, en tanto se encuentra
prohibido que las personas menores de 16 años trabajen. La única excepción regulada es la ocupación de los hijos
que se encuentren entre los 14 y 16 años en empresas familiares.

En relaciona con los hijos mayores de 16 años, el código establece:


Art. 682.— Contratos por servicios del hijo mayor de dieciséis años. Los progenitores no pueden hacer contratos por
servicios a prestar por su hijo adolescente o para que aprenda algún oficio sin su consentimiento y de conformidad
con los requisitos previstos en leyes especiales.

Debe entenderse que alude únicamente a aquellos mayores de 16 años. La norma exige el consentimiento del hijo,
prohibiendo cualquier acto de los progenitores que prescinda de el.

Cuando el hijo mayor de 16 años, con la debida autorización de sus progenitores, accede a algún empleo, profesión o
industria, el código en el art 683 presume que también esta autorizado:

Art. 683.— Presunción de autorización para hijo mayor de dieciséis años. Se presume que el hijo mayor de dieciséis
años que ejerce algún empleo, profesión o industria, está autorizado por sus progenitores para todos los actos y
contratos concernientes al empleo, profesión o industria. En todo caso debe cumplirse con las disposiciones de este
Código y con la normativa especial referida al trabajo infantil.
Los derechos y obligaciones que nacen de estos actos recaen únicamente sobre los bienes cuya administración está a
cargo del propio hijo.

Por su parte, el art 684 establece que los contratos de escasa cuantía de la vida cotidiana celebrados por el hijo, se
presumen realizados con la conformidad de los progenitores.

ADMINISTRACION DE LOS BIENES


La gestión de los bienes del hijo menor de edad forma parte de los deberes – derechos que los progenitores tienen a
su cargo. Su administración se extiende a la totalidad de los bienes del hijo, con excepción de aquellos señalados en
el art 686:
Art. 686.— Excepciones a la administración. Se exceptúan los siguientes bienes de la administración:
a) los adquiridos por el hijo mediante trabajo, empleo, profesión o industria, que son administrados por éste,
aunque conviva con sus progenitores;
b) los heredados por el hijo por indignidad de sus progenitores;
c) los adquiridos por herencia, legado o donación, cuando el donante o testador haya excluido expresamente la
administración de los progenitores.

Por su parte, el art 685 establece:


Art. 685.— Administración de los bienes. La administración de los bienes del hijo es ejercida en común por los
progenitores cuando ambos estén en ejercicio de la responsabilidad parental. Los actos conservatorios pueden ser
otorgados indistintamente por cualquiera de los progenitores.

Esta disposición se aplica con independencia de que el cuidado sea unipersonal o compartido.

Ejercicio compartido de la responsabilidad parental

a) Los actos de conservación, entendiendo por tales aquellos que vinculan con lo urgente e ineludible para mantener
en su integridad los bienes que componen un patrimonio determinado, pueden ser otorgados indistintamente por
cualquiera de sus progenitores.-
b) Los actos de administración referidos a la obtención de rentas, utilidades o productos que corresponden al
destino económico del patrimonio del hijo, deben ser otorgados por ambos progenitores de manera conjunta.-
c) Los actos de disposición, es decir, aquellos que implican una alteración, a través de enajenación o gravamen en el
patrimonio del hijo, también deben ser otorgados de manera conjunta, pero además el código exige la autorización
judicial:

Art. 692.— Actos que necesitan autorización judicial. Se necesita autorización judicial para disponer los bienes del
hijo. Los actos realizados sin autorización pueden ser declarados nulos si perjudican al hijo.

Ejercicio unilateral de la responsabilidad parental


En los supuestos en donde existe uno solo de los progenitores, sea por muerte, ausencia, privación o por cualquier
otra causa, la administración de los bienes corresponde únicamente al que esta presente, sin que el supuesto genere
mayores dificultades.
Ahora, frente a la hipótesis donde los progenitores dejan de convivir y por voluntad de ambos, o por decisión
judicial, el ejercicio se atribuye a uno de ellos, debe entenderse el art 685 a la luz del conjunto de normas que
regulan la materia.
Los actos conservatorios, llevados a cabo con fines puramente beneficiosos para el hijo, pueden ser otorgados por
cualquiera de los dos progenitores.
Los actos de administración necesitan del consentimiento expreso de ambos, a lo que se suma el consentimiento
expreso del hijo adolescente. Pero además, los actos de disposición requieren también autorización judicial
pudiendo el progenitor que no ejerce la responsabilidad parental, manifestar en dicho proceso su disconformidad
con el acto de que se trate.

Designación de administrador: El sistema de administración de los bienes de os hijos, contempla su delegación en


uno de los progenitores, ya sea de manera voluntaria o forzada:

Art. 687. Designación voluntaria de administrador. Los progenitores pueden acordar que uno de ellos administre los
bienes del hijo; en ese caso, el progenitor administrador necesita el consentimiento expreso del otro para todos los
actos que requieran también autorización judicial.

El progenitor administrador llevara delante de manera unilateral todos los actos de administración, prescindiendo
del consentimiento expreso del otro. Sin embargo, se requerirá el consentimiento expreso de ambos progenitores
para el otorgamiento de cualquier acto de disposición, ya que estos necesitan autorización judicial.

En ambos casos, se requerirá el consentimiento expreso del hijo adolescente:


Art. 688.— Desacuerdos. En caso de graves o persistentes desacuerdos sobre la administración de los bienes,
cualquiera de los progenitores puede recurrir al juez para que designe a uno de ellos o, en su defecto, a un tercero
idóneo para ejercer la función.
Muerte de uno de los progenitores: El art 693 establece que, frente a la muerte de uno de los progenitores, el otro
tiene la obligación de realizar un inventario de los bienes a los efectos de determinar cuales se incorporan al
patrimonio de los hijos:
Art. 693.— Obligación de realizar inventario. En los tres meses subsiguientes al fallecimiento de uno de los
progenitores, el sobreviviente debe hacer inventario judicial de los bienes de los cónyuges o de los convivientes, y
determinarse en él los bienes que correspondan al hijo, bajo pena de una multa pecuniaria a ser fijada por el juez a
solicitud de parte interesada.

Disposiciones especiales: El art 689 prohíbe la celebración de contratos con sus hijos en los siguientes términos:
Art. 689.— Contratos prohibidos. Los progenitores no pueden hacer contrato alguno con el hijo que está bajo su
responsabilidad, excepto lo dispuesto para las donaciones sin cargo previstas en el artículo 1549.
No pueden, ni aun con autorización judicial, comprar por sí ni por persona interpuesta, bienes de su hijo ni
constituirse en cesionarios de créditos, derechos o acciones contra su hijo; ni hacer partición privada con su hijo de
la herencia del progenitor prefallecido, ni de la herencia en que sean con él coherederos o colegatarios; ni obligar a
su hijo como fiadores de ellos o de terceros.

La actividad de administración de los progenitores en relación con terceros se encuentra regulada en el art 690:
Art. 690.— Contratos con terceros. Los progenitores pueden celebrar contratos con terceros en nombre de su hijo
en los límites de su administración. Deben informar al hijo que cuenta con la edad y grado de madurez suficiente.
Respecto de la locacion de los bienes, el art 691 dispone que lleva implícita la condición de extinguirse cuando la
responsabilidad parental concluya.-
Fin de la administración: La administración de los bienes de los hijos concluye naturalmente cuando estos adquieren
la mayoría de edad y culminan los deberes y derechos derivados de la responsabilidad parental.-
El art 695 también señala que los progenitores pierden la administración de los bienes del hijo cuando son privados
de la responsabilidad parental.-
La administración ruinosa o la ineficiencia del progenitor en llevar adelante la gestiona de os bienes de su hijo,
también es motivo para la perdida de la administración. Prescribe el art 694:
Art. 694.— Pérdida de la administración. Los progenitores pierden la administración de los bienes del hijo cuando
ella sea ruinosa, o se pruebe su ineptitud para administrarlos. El juez puede declarar la pérdida de la administración
en los casos de concurso o quiebra del progenitor que administra los bienes del hijo.
Será facultativo para el juez decretar la perdida de la administración en los casos de concurso o quiebra del
progenitor que administra los bienes del hijo.-
Se encuentran legitimados, el otro progenitor, si es que se trata de la remoción de uno solo de ellos, y el propio hijo
si cuenta con la edad y grado de madurez suficiente.-
Art. 696.— Remoción de la administración. Removido uno de los progenitores de la administración de los bienes,
ésta corresponde al otro. Si ambos son removidos, el juez debe nombrar un tutor especial.

USUFRUCTO
La administración de los bienes de los hijos pueden producir frutos y su uso y goce corresponde a estos y no a sus
progenitores. Tal es el principio general dispuesto por el art 697:
Art. 697.— Rentas. Las rentas de los bienes del hijo corresponden a éste. Los progenitores están obligados a
preservarlas cuidando de que no se confundan con sus propios bienes. Sólo pueden disponer de las rentas de los
bienes del hijo con autorización judicial y por razones fundadas, en beneficio de los hijos. Los progenitores pueden
rendir cuentas a pedido del hijo, presumiéndose su madurez.

La nueva redacción derogo el usufructo paterno, instituto mediante el cual los frutos de los bienes de los hijos
ingresaban al patrimonio de sus progenitores.
Entre los deberes - derechos que derivan de la responsabilidad parental, uno de ellos consiste en la permanente
preservación de las rentas de los bienes de los hijos.

La rendición de cuentas es el mecanismo diseñado para la justificación del uso de dichas rentas y tan activa es la
participación de los hijos, que pueden solicitarla ellos mismos. Cabe destacar que en este caso, el código presume la
madurez del niño, si reclama a sus progenitores la rendición de cuentas:

Art. 698.— Utilización de las rentas. Los progenitores pueden utilizar las rentas de los bienes del
hijo sin autorización judicial pero con la obligación de rendir cuentas, cuando se trata de solventar los siguientes
gastos:
a) de subsistencia y educación del hijo cuando los progenitores no pueden asumir esta responsabilidad a su cargo
por incapacidad o dificultad económica;
b) de enfermedad del hijo y de la persona que haya instituido heredero al hijo;
c) de conservación del capital, devengado durante la minoridad del hijo.

7) CESACION DE LA RESPONSABILIDAD PARENTAL. EXTINCION (MOD. CCC Ley 27363).

El art 699 establece que la responsabilidad parental se extingue ipso iure por distintos motivos. Si bien se hace
referencia a la titularidad, la extinción de esta lleva aparejada la de su ejercicio
Art. 699.— Extinción de la titularidad. La titularidad de la responsabilidad parental se extingue por:
a) muerte del progenitor o del hijo;
b) profesión del progenitor en instituto monástico;
c) alcanzar el hijo la mayoría de edad;
d) emancipación, excepto lo dispuesto en el artículo 644;
e) adopción del hijo por un tercero, sin perjuicio de la posibilidad de que se la restituya en caso de revocación y
nulidad de la adopción; la extinción no se produce cuando se adopta el hijo del cónyuge o del conviviente.

PRIVACION DE LA RESPONSABILIDAD PARENTAL

El art 700 regula los supuestos de hecho que habilitan se declare judicialmente que uno o ambos progenitores han
sido privados de la responsabilidad parental. Se trata de una sanción producto del incumplimiento grave de los
deberes – derechos derivados del vínculo jurídico que los une con sus hijos:

Art. 700.— Privación. Cualquiera de los progenitores queda privado de la responsabilidad parental por:
a) ser condenado como autor, coautor, instigador o cómplice de un delito doloso contra la persona o los bienes del
hijo de que se trata;
b) abandono del hijo, dejándolo en un total estado de desprotección, aun cuando quede bajo el cuidado del otro
progenitor o la guarda de un tercero;
c) poner en peligro la seguridad, la salud física o psíquica del hijo;
d) haberse declarado el estado de adoptabilidad del hijo.
En los supuestos previstos en los incisos a), b) y c) la privación tiene efectos a partir de la sentencia que declare la
privación; en el caso previsto en el inciso d) desde que se declaró el estado de adoptabilidad del hijo.

Artículo 700 bis:

Artículo 700 bis: Cualquiera de los progenitores queda privado de la responsabilidad parental por:
a) Ser condenado como autor, coautor, instigador o cómplice del delito de homicidio agravado por el vínculo o
mediando violencia de género conforme lo previsto en el artículo 80, incisos 1 y 11 del Código Penal de la Nación, en
contra del otro progenitor;
b) Ser condenado como autor, coautor, instigador o cómplice del delito de lesiones previstas en el artículo 91 del
Código Penal, contra el otro progenitor, o contra el hijo o hija de que se trata;
c) Ser condenado como autor, coautor, instigador o cómplice del delito contra la integridad sexual previsto en el
artículo 119 del Código Penal de la Nación, cometido contra el hijo o hija de que se trata.

La privación operará también cuando los delitos descriptos se configuren en grado de tentativa, si correspondiere.
La condena penal firme produce de pleno derecho la privación de la responsabilidad parental. La sentencia definitiva
debe ser comunicada al Ministerio Público a los fines de lo previsto en el artículo 703, teniéndose en cuenta la
asistencia letrada establecida en el artículo 26, segundo párrafo y a la autoridad de protección de los derechos de las
niñas, niños y adolescentes competente en cada jurisdicción, a efectos de que proceda en sede civil, a los efectos de
este artículo. Se deberá observar lo previsto en el artículo 27 de la Ley 26061.

La privación de la responsabilidad parental produce efectos para el futuro y se trata de una sanción definitiva. De
manera excepcional podría restituirse si se demostrara que dicha circunstancia satisface de mejor manera el interés
superior del niño. Tal lo establecido en el art 701:

Art. 701.— Rehabilitación. La privación de la responsabilidad parental puede ser dejada sin efecto por el juez si los
progenitores, o uno de ellos, demuestra que la restitución se justifica en beneficio e interés del hijo.

SUSPENSION DEL EJERCICIO DE LA RESPONSABILIDAD PÁRENTAL


El ejercicio de la responsabilidad parental puede suspenderse por circunstancias que hagan imposible llevar adelante
los deberes – derechos que conlleva.
Se trata de situaciones intermedias que no derivan de un incumplimiento deliberado de la función sino que
encuentran razones en otro tipo de causas.

Se suspende el ejercicio de la responsabilidad parental de los progenitores mientras duran las circunstancias que la
habitan, las cuales se encuentran reguladas en el art 702 (nueva redacción):

* Artículo 702: Suspensión del ejercicio. El ejercicio de la responsabilidad parental queda suspendido mientras dure:
a) La declaración de ausencia con presunción de fallecimiento;
b) El plazo de la condena a reclusión y la prisión por más de tres (3) años;
c) La declaración por sentencia firme de la limitación de la capacidad por razones graves de salud mental que
impiden al progenitor dicho ejercicio;
d) La convivencia del hijo o hija con un tercero, separado de sus progenitores por razones graves, de conformidad
con lo establecido en leyes especiales;
e) El procesamiento penal o acto equivalente, por los delitos mencionados en el artículo 700 bis. El auto de
procesamiento debe ser comunicado al Ministerio Público a los fines de lo previsto en el artículo 703, teniéndose en
cuenta la asistencia letrada establecida en el artículo 26, segundo párrafo y a la autoridad de protección de los
derechos de las niñas, niños y adolescentes competente en cada jurisdicción, a efectos de que proceda en sede civil,
a los fines de este artículo. Se deberá observar lo previsto en el artículo 27 de la Ley 26061.
No se procederá a suspender el ejercicio de la responsabilidad parental en los términos del presente inciso en los
casos del artículo 700 bis incisos a) y b), cuando en los hechos investigados o en sus antecedentes mediare violencia
de género.
EFECTOS DE LA PRIVACION Y SUSPENSION DE LA RESPONSABILIDAD PARENTAL

Art. 703.— Casos de privación o suspensión de ejercicio. Si uno de los progenitores es privado de la responsabilidad
parental o suspendido en su ejercicio, el otro continúa ejerciéndola. En su defecto, se procede a iniciar los procesos
correspondientes para la tutela o adopción, según la situación planteada, y siempre en beneficio e interés del niño o
adolescente.
Art. 610.— Equivalencia. La sentencia de privación de la responsabilidad parental equivale a la declaración judicial en
situación de adoptabilidad.
A través de la adopción, se le garantiza al niño su derecho de vivir en familia.

8) RESPONSABILIDAD CIVIL DE LOS PADRES….

edad a un tercero, designándolo tutor para que lo represente en las cuestiones patrimoniales.-

Responsabilidad por los hechos de los hijos: El art 1754 establece la responsabilidad de los progenitores por los
daños que produzcan sus hijos: “Los padres son solidariamente responsables por los daños causados por los hijos
que se encuentran bajo su responsabilidad parental y que habitan con ellos, sin perjuicio de la responsabilidad
personal y concurrente que pueda caber a los hijos.

En consecuencia, responderán solidariamente cuando:

a) Se trate de un supuesto de responsabilidad parental compartida


b) Si los progenitores no conviven, se trate de un supuesto de cuidado personal compartido, de modalidad alternada
o indistinta.

En el caso de que el cuidado personal sea unilateral, será responsable el progenitor que conviva con el hijo. La
excepción esta dada por el hecho de que en el momento del hecho dañoso el niño estuviera al cuidado del otro
progenitor.

Art. 1755.— Cesación de la responsabilidad paterna. La responsabilidad de los padres es objetiva, y cesa si el hijo
menor de edad es puesto bajo la vigilancia de otra persona, transitoria o permanentemente. No cesa en el supuesto
previsto en el artículo 643.
Los padres no se liberan, aunque el hijo menor de edad no conviva con ellos, si esta circunstancia deriva de una
causa que les es atribuible.
Los padres no responden por los daños causados por sus hijos en tareas inherentes al ejercicio de su profesión o de
funciones subordinadas encomendadas por terceros. Tampoco responden por el incumplimiento de obligaciones
contractuales válidamente contraídas por sus hijos.
BOLILLA XIV: TUTELA. SALUD MENTAL.

1) TUTELA. ANTECEDENTES HIST….

La tutela es el derecho o responsabilidad que una autoridad recibe para velar por una persona que no ha llegado a la
mayoría de edad o que no puede cuidarse a sí mismo. La tutela es dar amparo, protección y asistencia.

Es la institución jurídica y social por la que una o más personas capaces y aprobadas judicialmente como idóneas,
mediante deberes, cumplen una función de cuidado que incluye la alimentación y educación de un niño que no se
encuentre bajo responsabilidad parental.
Con esa expresa finalidad lo representa jurídicamente en aquellos actos para los que carece de capacidad y
administra sus bienes, todo en un conjunto de deberes y derechos de acuerdo con la legislación para su pleno
desarrollo hasta su mayoría de edad o emancipación.

Art. 104.— Concepto y principios generales. La tutela está destinada a brindar protección a la persona y
bienes de un niño, niña o adolescente que no ha alcanzado la plenitud de su capacidad civil cuando no haya
persona que ejerza la responsabilidad parental.

Se aplican los principios generales enumerados en el Título VII del Libro Segundo.

Si se hubiera otorgado la guarda a un pariente de conformidad con lo previsto en el Título de la


responsabilidad parental, la protección de la persona y bienes del niño, niña y adolescente puede quedar a
cargo del guardador por decisión del juez que otorgó la guarda, si ello es más beneficioso para su interés
superior; en igual sentido, si los titulares de la responsabilidad parental delegaron su ejercicio a un
pariente. En este caso, el juez que homologó la delegación puede otorgar las funciones de protección de la
persona y bienes de los niños, niñas y adolescentes a quienes los titulares delegaron su ejercicio. En ambos
supuestos, el guardador es el representante legal del niño, niña o adolescente en todas aquellas cuestiones
de carácter patrimonial.
La tutela se ejerce teniendo presentes los siguientes principios:
a) Interés superior del niño.
b) La autonomía progresiva del hijo conforme a sus características psicofísicas, aptitudes y desarrollo. A mayor autonomía, disminuye
la representación de los progenitores en el ejercicio de los derechos de los hijos.-
c) El derecho del niño a ser oído y a que su opinión sea tenida en cuenta según su edad y grado de madurez. Rige el superior interés
del niño o adolescente, la autonomía progresiva.

Funciones de la tutela:

1) El cuidado de un niño o adolescente teniendo en mira para su logro la realización plena de los derechos de estos.
2) Administración de los bienes teniendo en cuenta las disposiciones de este Código respecto de la actuación
personal de niño o adolescente en ejercicio de sus derechos a ser oído y el progresivo reconocimiento de su
capacidad otorgado por la ley o autorizado por el juez.
3) Representación. El tutor o tutores ejercen la representación jurídica en función de la menor edad, teniendo en
cuenta la autonomía progresiva de los niños y lo dispuesto en relación con la guarda delegada a un tercero o a la
delegación del ejercicio de la responsabilidad parental efectuada por los progenitores.

CARACTERES DE LA TUTELA

Es una función personalísima, y este carácter la hace intransmisible, indelegable. Deben personalmente ejercer la
función, lo que no significa que frente a un acto determinado, el tutor o tutores pueden otorgar un mandato, pero
esta circunstancia es en relación a la ejecución de un acto específico y no excluye a la responsabilidad del tutor en su
función.-
Otro carácter es que la tutela es supletoria de la responsabilidad parental, dejando a salvo el caso de la tutela
especial establecida en el art 109, solo por muerte, privación de la responsabilidad parental o ausencia con
presunción de fallecimiento.
ART. 105. Caracteres. La tutela puede ser ejercida por una o más personas, conforme aquello que más beneficie al
niño niña o adolescente.
Si es ejercido por más de una persona, las diferencias de criterio, deben ser dirimidas ante el juez que haya
discernido la tutela, con debida intervención del Ministerio Publico.
El cargo del tutor es intransmisible; el Ministerio Publico interviene según lo dispuesto en el articulo 103.

TIPOS DE TUTELA

La tutela se otorga por designación de los padres o por el juez:

Art. 106.— Tutor designado por los padres. Cualquiera de los padres que no se encuentre privado o suspendido del
ejercicio de la responsabilidad parental puede nombrar tutor o tutores a sus hijos menores de edad, sea por
testamento o por escritura pública. Esta designación debe ser aprobada judicialmente. Se tienen por no escritas las
disposiciones que eximen al tutor de hacer inventario, lo autorizan a recibir los bienes sin cumplir ese requisito, o lo
liberan del deber de rendir cuentas.

Si los padres hubieran delegado el ejercicio de la responsabilidad parental en un pariente, se presume la voluntad de
que se lo nombre tutor de sus hijos menores de edad, designación que debe ser discernida por el juez que homologó
la delegación o el del centro de vida del niño, niña o adolescente, a elección del pariente.

Si existen disposiciones de ambos progenitores, se aplican unas y otras conjuntamente en cuanto sean compatibles.
De no serlo, el juez debe adoptar las que considere fundadamente más convenientes para el tutelado.

Designación de los padres: Los padres que no han sido privados o suspendidos del ejercicio de la responsabilidad
parental pueden nombrar tutor o tutores a sus hijos menores de edad, sea por testamento o por escritura publica.-

En los supuestos de tutela testamentaria se tendrán en cuenta los efectos de la revocación y caducidad del
testamento, teniendo presente que es irrenunciable la facultad de modificar o revocar las cláusulas testamentarias.

Designación a guardadores: El código establece que cuando los padres hubiesen delegado el ejercicio de la
responsabilidad parental en un tercero, se presume la voluntad de que estos sean los guardadores, esa prensuncion
tendra que ratificarse con la aprobación judicial y haber acreditado la idoneidad para el ejercicio de la guarda, la que
puede posteriormente convertirse en tutela, de acuerdo con los requisitos establecidos en el art 104 del código.-

Cuando los padres, por razones fundadas, delegan la guarda, debe prima facie reconocerse la voluntad presunta de
que estos sean los tutores de sus hijos, todo bajo la debida aprobación judicial.

El juez de la guarda o el del centro de la vida del niño deberá aprobar la designación efectuada por los padres. La
aprobación judicial y la valoración de la idoneidad giraran siempre sobre el interés superior del niño, la opinión dada
por ellos, dentro del principio de inmediatez con el juez interviniente. La decisión debe ajustarse a los principios
generales establecidos en el art 104.

Todo el proceso de tutela tendrá la debida intervención del Ministerio Público.

Tutela dativa: El art 107 establece que ante la ausencia de designación paterna de tutor o tutores o ante la
excusación, rechazo o imposibilidad de ejercicio de aquellos designados, el juez debe otorgar la tutela a la persona
que sea mas idónea para brindar protección al niño, debiendo fundar razonablemente los motivos que justifican
dicha idoneidad.

Prohibiciones para ser tutor dativo: La prohibición es para el juez quien no podrá designar a ninguna persona
vinculada a su persona fuera de la función jurisdiccional.-

Art. 108.— Prohibiciones para ser tutor dativo. El juez no puede conferir la tutela dativa:
a) a su cónyuge, conviviente, o parientes dentro del cuarto grado, o segundo por afinidad;
b) a las personas con quienes mantiene amistad íntima ni a los parientes dentro del cuarto grado, o segundo por
afinidad;
c) a las personas con quienes tiene intereses comunes;
d) a sus deudores o acreedores;
e) a los integrantes de los tribunales nacionales o provinciales que ejercen sus funciones en el lugar del
nombramiento; ni a los que tienen con ellos intereses comunes, ni a sus amigos íntimos o los parientes de éstos,
dentro del cuarto grado, o segundo por afinidad;
f) a quien es tutor de otro menor de edad, a menos que se trate de hermanos menores de edad, o existan causas
que lo justifiquen.

Tutela especial: Los supuestos de la tutela especial tienden a representar al menor en algún negocio o acto jurídico
puntual, sin que dichas cuestiones tengan incidencia para modificar el resto de las relaciones inherentes a la
responsabilidad parental o de la tutela general, que continúan normalmente.
Se deberá designar un tutor especial cuando un hijo bajo el régimen de responsabilidad parental encuentra su
derecho en oposición directa con la representación que ejercen los padres. No se debe constreñir exclusivamente la
representación a una situación patrimonial como la venta de un bien o un acto de liberalidad como la donación, sino
que se debe designar un tutor especial, en casos de ejercicio de derechos personales, como puede ser un proceso de
violencia familiar, régimen de comunicación o custodia. La figura del defensor del niño puede armonizarse con la
designación de un tutor especial. Se agrega como supuesto particular la designación de un tutor especial cuando
existan razones de urgencia y hasta tanto se tramite la designación del tutor definitivo.

PERSONAS EXCLUIDAS

De acuerdo con el art 110 se encuentran excluidos para ser tutores, aquellos que no tengan domicilio en la
Republica, las personas quebradas no rehabilitadas, los que hayan sido suspendidos o privados del ejercicio de la
responsabilidad parental o hayan sido removidos de la tutela, curatela o apoyo de otra persona incapaz o con
capacidad restringida por causa que les fuera atribuible.

Art. 110.— Personas excluidas. No pueden ser tutores las personas:

a) que no tienen domicilio en la República;


b) quebradas no rehabilitadas;
c) que han sido privadas o suspendidas en el ejercicio de la responsabilidad parental, o han sido removidas de la
tutela o curatela o apoyo de otra persona incapaz o con capacidad restringida, por causa que les era atribuible;
d) que deben ejercer por largo tiempo o plazo indefinido un cargo o comisión fuera del país;
e) que no tienen oficio, profesión o modo de vivir conocido, o tienen mala conducta notoria;
f) condenadas por delito doloso a penas privativas de la libertad;
g) deudoras o acreedoras por sumas considerables respecto de la persona sujeta a tutela;
h) que tienen pleitos con quien requiere la designación de un tutor. La prohibición se extiende a su cónyuge,
conviviente, padres o hijos;
i) que, estando obligadas, omiten la denuncia de los hechos que dan lugar a la apertura de la tutela;
j) inhabilitadas, incapaces o con capacidad restringida;
k) que hubieran sido expresamente excluidas por el padre o la madre de quien requiere la tutela, excepto que según
el criterio del juez resulte beneficioso para el niño, niña o adolescente.

DISCERNIMIENTO DE LA TUTELA

El discernimiento de la tutela es el acto jurisdiccional por el cual queda investido jurídicamente en su función de
tutor “la persona designada de acuerdo a las modalidades que el Código establece.
Ellas son la tutela designada por los padres (art 106), la tutela dativa (art 107) y los casos de tutela especial (art 109).
El discernimiento califica jurisdiccionalmente la evaluación realizada de la conveniencia o el provecho del
nombramiento del tutor basada en su idoneidad. Es un acto de neto carácter judicial por medio del cual el tutor
designado es puesto en posesión del cargo por el juez.

El juez del discernimiento es el juez donde el niño tiene su centro de vida, entendiéndose por este, el lugar donde los
niños hubiesen transcurrido en condiciones legitimas la mayor parte de su existencia. Es la residencia del niño el eje
a tener en cuenta para determinar al juez competente.

Art. 112.— Discernimiento judicial. Competencia. La tutela es siempre discernida judicialmente.


Para el discernimiento de la tutela es competente el juez del lugar donde el niño, niña o adolescente tiene su centro
de vida.

Art. 113.— Audiencia con la persona menor de edad. Para el discernimiento de la tutela, y para cualquier otra
decisión relativa a la persona menor de edad, el juez debe:
a) oír previamente al niño, niña o adolescente;
b) tener en cuenta sus manifestaciones en función de su edad y madurez;
c) decidir atendiendo primordialmente a su interés superior.
Esta obligación legal es impostergable e irrenunciable para el juez, pudiendo el niño y el Ministerio Publico declarar
la nulidad de esa omisión.

ACTOS ANTERIORES AL DISCERNIMIENTO. INVENTARIO Y AVALUO

Art. 114.— Actos anteriores al discernimiento de la tutela. Los actos del tutor anteriores al discernimiento de la
tutela quedan confirmados por el nombramiento, si de ello no resulta perjuicio para el niño, niña o adolescente.
Es decir que los actos celebrados quedan convalidados con el discernimiento.

Discernida la tutela, los bienes del tutelado deben ser entregados al tutor, previo inventario y avaluo que realice
quien el juez designe. Si el tutor tiene un credito contra la persona sujeta a tutela, debe hacerlo constar en el
inventario; sino lo hace, no puede reclamarlo luego, excepto que al omitirlo haya ignorado su existencia.
Hasta tanto se haga el inventario, el tutor solo puede tomar las medidas que sean urgentes y necesarias.
La confección del inventario y avalúo e los bienes del niño son un deber esencial del tutor. El juez debe señalar el
plazo para hacer el inventario según la naturaleza y situación de los bienes del niño y establecer el tiempo en el que
el tutor debe hacer el inventario judicial de ellos.
Mientras el inventario no esta hecho, el tutor no podrá tomar medidas sobre los bienes, salvo aquellas urgentes y
necesarias. Debido a los caracteres de su función de cuidado, resguardo, representación y administración el tutor
responderá por su omisión, con daños y perjuicios y podrá ser removido del cargo. El inventario es siempre de
carácter judicial y debe intervenir en la diligencia el defensor del niño, bajo pena de nulidad. (art 103)

El niño puedo, de acuerdo con su madurez y en ejercicio de su autonomía progresiva, participar de la diligencia de
inventario, pudiendo formarse un juicio propio sobre el acto del inventario y sus consecuencias.

El tutor debe contabilizar en el inventario en el caso de tener algún crédito contra el niño y si no lo hiciese, no podrá
reclamarlo en adelante, a menos que el tiempo del inventario hubiese ignorado la deuda a su favor, los bienes que
en adelante adquiriese, que el niño recibiera por herencia, legado o donación, deben ser inventariados.

Art. 115.— Inventario y avalúo. Discernida la tutela, los bienes del tutelado deben ser entregados al tutor, previo
inventario y avalúo que realiza quien el juez designa.
Si el tutor tiene un crédito contra la persona sujeta a tutela, debe hacerlo constar en el inventario; si no lo hace, no
puede reclamarlo luego, excepto que al omitirlo haya ignorado su existencia.
Hasta tanto se haga el inventario, el tutor sólo puede tomar las medidas que sean urgentes y necesarias.
Los bienes que el niño, niña o adolescente adquiera por sucesión u otro título deben inventariarse y tasarse de la
misma forma.

2) EJERCICIO DE LA TUTELA. RESPONSABILIDAD. ACTOS PROHIB (..)

EJERCICIO DE LA TUTELA

Art. 117.— Ejercicio. Quien ejerce la tutela es representante legal del niño, niña o adolescente en todas aquellas
cuestiones de carácter patrimonial, sin perjuicio de su actuación personal en ejercicio de su derecho a ser oído y el
progresivo reconocimiento de su capacidad otorgado por la ley o autorizado por el juez.
Art. 118.— Responsabilidad. El tutor es responsable del daño causado al tutelado por su culpa, por acción u omisión,
en el ejercicio o en ocasión de sus funciones. El tutelado, cualquiera de sus parientes, o el Ministerio Público pueden
solicitar judicialmente las providencias necesarias para remediarlo, sin perjuicio de que sean adoptadas de oficio.
El tutor representa al niño por el que ejerce su función, pero esta representación se debe realizar con la opinión del
niño tal como resulta del art 12 de la Convención sobre los derechos del Niño.
Actuara reconociendo la capacidad progresiva del niño en la toma de decisiones que involucren sus derechos
personales y/o patrimoniales.
El tutor responde por culpa, acción u omisión. El código faculta al propio tutelado a reclamar los daños y obtener la
reparación debida, sin perjuicio de las medidas que el juez puede tomar de oficio.

Educación y alimentos: El art 119 establece que el juez debe fijar las sumas requeridas para la educación y alimentos
del niño, ponderando la cuantía de sus bienes y la renta que producen, sin perjuicio de su adecuación conforme a las
circunstancias.
Si los recursos de la persona sujeta a tutela no son suficientes para atender a su cuidado y educación, el tutor puede,
con autorización judicial, demandar alimentos a los obligados a prestarlos.

La administración de los bienes del tutelado:

El tutor tiene la responsabilidad de gestionar y administrar el patrimonio de la persona tutelada. Los tutores pueden
autorizar al tutelado en la ejecución de actos judiciales y extrajudiciales, representarlo en estos actos y administrar
sus bienes.
La administración extraordinaria es la que excede la mera administración con autorización judicial y debida
intervención del Ministerio Público.
La finalidad de la administración es ordenar las cuentas debiendo enfocar los recursos económicos administrados en
financiar el patrimonio que requiere la educación y alimentación de la persona tutelada. En el caso de ser titular un
patrimonio, el deber que conlleva la función debe realizar todas las gestiones útiles para su conservación e
incremento.
Para asegurar la transparencia de esta función, el código estructura en los art 120 y 121 los actos prohibidos y
aquellos que requieren autorización judicial.
Los únicos actos discrecionales son los de administración propiamente dicha, actos que puede ejecutar libremente,
el tutor administra los bienes, los conserva, los repara, los aumenta.

Actos prohibidos:

En la tutela son idénticos que para los padres. No pueden, ni siquiera con autorización judicial, comprar por si o por
persona interpuesta bienes de su hijo, ni constituirse en cesionarios de créditos, derechos o acciones contra su hijo,
ni hacer partición privada con su hijo de la herencia del progenitor prefallecido, ni de la herencia en que sean con él
coherederos o colegatarios, ni obligar a su hijo como fiadores de ellos o de terceros.

Art. 120.— Actos prohibidos. Quien ejerce la tutela no puede, ni con autorización judicial, celebrar con su tutelado
los actos prohibidos a los padres respecto de sus hijos menores de edad.

Antes de aprobada judicialmente la cuenta final, el tutor no puede celebrar contrato alguno con el pupilo, aunque
haya cesado la incapacidad.

Actos que requieren autorización judicial:

Art. 121.— Actos que requieren autorización judicial. Además de los actos para los cuales los padres necesitan
autorización judicial, el tutor debe requerirla para los siguientes:

a) adquirir inmuebles o cualquier bien que no sea útil para satisfacer los requerimientos alimentarios del tutelado;
b) prestar dinero de su tutelado. La autorización sólo debe ser concedida si existen garantías reales suficientes;
c) dar en locación los bienes del tutelado o celebrar contratos con finalidad análoga por plazo superior a tres años.
En todos los casos, estos contratos concluyen cuando el tutelado alcanza la mayoría de edad;
d) tomar en locación inmuebles que no sean la casa habitación;
e) contraer deudas, repudiar herencias o donaciones, hacer transacciones y remitir créditos aunque el deudor sea
insolvente;
f) hacer gastos extraordinarios que no sean de reparación o conservación de los bienes;
g) realizar todos aquellos actos en los que los parientes del tutor dentro del cuarto grado o segundo de afinidad, o
sus socios o amigos íntimos están directa o indirectamente interesados.

El tutor requiere de autorización judicial para todo acto que pueda comprometer el patrimonio del niño y es el
estado quien debe otorgar la garantía en la función jurisdiccional. Los distintos supuestos del art transcripto son
enunciativos pues si el interés del niño indica que una operación de naturaleza patrimonial es en su beneficio, el juez
puede autorizarlos.

El juez puede autorizar la transmisión, constitución o modificación de derechos reales sobre los bienes del niño, si
estos actos son en beneficio del acrecentamiento o conservación del patrimonio de la persona tutelada. El Código
establece que los bienes de valor afectivo solo podrán ser vendidos en caso de necesidad.-

Por regla general, la venta se hará en subasta publica con excepción de aquellos muebles de escaso valor o si, a juicio
del juez, la venta extrajudicial resultara mas ventajosa.

RESPONSABILIDAD DEL TUTOR


La responsabilidad del tutor, en principio, resulta de la mala administración sin perjuicio de la responsabilidad que
pueda caberle por la función de tutor de manera integral. Para determinar el daño en la administración, el art 134
reafirma que la carga de la función implica buena fe en el desempeño, pero si hay atribución de culpa o dolo deberá
indemnizar el daño causado:

Art. 134.— Daños. Si el tutor no rinde cuentas, no lo hace debidamente o se comprueba su mala administración
atribuible a dolo o culpa, debe indemnizar el daño causado a su tutelado. La indemnización no debe ser inferior a lo
que los bienes han podido razonablemente producir.

RETRIBUCION

El tutor tiene derecho a la retribución que se fije judicialmente, teniendo en cuenta la importancia de los bienes del
tutelado y el trabajo que ha demandado su administración en cada periodo. En caso de tratarse de tutela ejercida
por dos personas, la remuneración será única y distribuida entre ellos conforme al criterio judicial. La remuneración
única no podrá exceder de la décima parte de los frutos líquidos de los bienes del menor de edad. Se mantiene la
décima para establecer los honorarios del tutor. La tutela no tiene fin lucrativo, sino que implica el compromiso
frente a la realización de los derechos del niño.-

Dos son las condiciones para tener derecho a la retribución:

1) la existencia de bienes y

2) el trabajo, la calidad e intensidad de este en la administración.

El guardador que ejerce funciones de tutela también tiene derecho a la retribución.


Los frutos pendientes al comienzo de la tutela y a su finalización deben computarse a los efectos de la retribución,
en la medida en que la gestión haya sido útil para su percepción.

Cese del derecho a la retribución:

Art. 129.— Cese del derecho a la retribución. El tutor no tiene derecho a retribución:
a) si nombrado por un testador, éste ha dejado algún legado que puede estimarse remuneratorio de su gestión.
Puede optar por renunciar al legado o devolverlo, percibiendo la retribución legal;
b) si las rentas del pupilo no alcanzan para satisfacer los gastos de sus alimentos y educación;
c) si fue removido de la tutela por causa atribuible a su culpa o dolo, caso en el cual debe también restituir lo
percibido, sin perjuicio de las responsabilidades por los daños que cause;
d) si contrae matrimonio con el tutelado sin la debida dispensa judicial.

3) RENDICION DE CUENTAS (…)

Art. 130.— Deber de rendir cuentas. Periodicidad. Quien ejerce la tutela debe llevar cuenta fiel y documentada de
las entradas y gastos de su gestión. Debe rendir cuentas: al término de cada año, al cesar en el cargo, y cuando el
juez lo ordena, de oficio, o a petición del Ministerio Público. La obligación de rendición de cuentas es individual y su
aprobación sólo libera a quien da cumplimiento a la misma.
Aprobada la cuenta del primer año, puede disponerse que las posteriores se rindan en otros plazos, cuando la
naturaleza de la administración así lo justifique.
La rendición de cuentas judicial constituye la descripción escrita, con respaldo documental y demostración del
equilibrio permanente entre el debe y el haber.
Tiene carácter individual e indivisible, aunque se trate de tutela plural. Esto esta íntimamente relacionado con los
caracteres de la tutela, siendo intransmisible e indelegable. Las debe rendir el tutor al juez de la tutela. La obligación
de rendir cuentas es inexcusable para el tutor.
El tutor debe rendir cuentas ante la persona tutelada, ante el Ministerio Publico, los parientes y los acreedores, pues
estos últimos pueden tener un interés legítimo en las cuentas de la tutela, pudiendo ejercer acción subrogatoria.-
La obligación de rendir cuentas es individual, esto quiere decir que solo queda liberado quien cumple.
El requisito para pedir la rendición de cuentas es que existan dudas sobre la administración, que la persona tutelada
no consienta o no tenga conocimiento de cómo se llevan las cuentas.

Rendición final:

Art. 131.— Rendición final. Terminada la tutela, quien la ejerza o sus herederos deben entregar los bienes de
inmediato, e informar de la gestión dentro del plazo que el juez señale, aunque el tutelado en su testamento lo
exima de ese deber. Las cuentas deben rendirse judicialmente con intervención del Ministerio Público.
Los gastos del tutor serán abonados por el niño o adolescente si las cuentas estuvieren dadas en debida forma.
El art 133 establece que el tutor tiene derecho a la restitución de todos los gastos razonablemente hechos. Estos
actos tienen siempre el debido control del Ministerio Público.
Art. 132.—Gastos de la rendición. Los gastos de la rendición de cuentas deben ser adelantados por quien ejerce la
tutela y deben ser reembolsados por el tutelado si son rendidas en debida forma.
Art. 133.— Gastos de la gestión. Quien ejerce la tutela tiene derecho a la restitución de los gastos razonables hechos
en la gestión, aunque de ellos no resulte utilidad al tutelado. Los saldos de la cuenta devengan intereses.

4) TERMINACION DE LA TUTELA

Art. 135. Causas de terminación de la tutela. La tutela termina:

a) por la muerte del tutelado, su emancipación o la desaparición de la causa que dio lugar a la tutela;
b) por la muerte, incapacidad, declaración de capacidad restringida, remoción o renuncia aceptada por el juez, de
quien ejerce la tutela. En caso de haber sido discernida a dos personas, la causa de terminación de una de ellas no
afecta a la otra, que se debe mantener en su cargo, excepto que el juez estime conveniente su cese, por motivos
fundados.
En caso de muerte del tutor, el albacea, heredero o el otro tutor si lo hubiera, debe ponerlo en conocimiento
inmediato del juez de la tutela. En su caso, debe adoptar las medidas urgentes para la protección de la persona y de
los bienes del pupilo.

Remoción del tutor:

La remoción implica en su naturaleza una sanción por falta de buen desempeño del cargo de tutor, salvo situaciones
que pudieran exculpar de responsabilidad por hechos fortuitos o que su capacidad hubiese sido restringida y esta
obstara al ejercicio. El art 136 dispone:

Art. 136. Remoción del tutor. Son causas de remoción del tutor:
a) quedar comprendido en alguna de las causales que impide ser tutor;
b) no hacer el inventario de los bienes del tutelado, o no hacerlo fielmente;
c) no cumplir debidamente con sus deberes o tener graves y continuados problemas de convivencia.
Están legitimados para demandar la remoción el tutelado y el Ministerio Público.
También puede disponerla el juez de oficio.

Suspensión provisoria:

La sola eventualidad de mal desempeño activa el resguardo y garantía a través de medidas, como es en este caso la
suspensión provisoria:
Art. 137. Suspensión provisoria. Durante la tramitación del proceso de remoción, el juez puede suspender al tutor y
nombrar provisoriamente a otro.
5) DETERMINACION DE LA CAPACIDAD: CONVENCION INTERNACIONAL DE LAS PCD: ART 12(…)

El código en sus art 22 y 23 refiere a la capacidad de derecho y a la capacidad de ejercicio.-

La capacidad jurídica se estableció en el código derogado como la capacidad para ser titular de un derecho y la
aptitud para el ejercicio de ese derecho.

El concepto refería a aquellas personas que por su edad, por encontrarse declarados dementes en sentido jurídico o
por ser sordomudos que no podían darse a entender por escrito, debían tener un régimen de incapacidad absoluta.

Nuestro país ratifico la Convención Internacional de los Derechos con Discapacidad (ahora CDPD) que en su art 12
reconoce que las personas con discapacidad tienen capacidad jurídica en iguales condiciones que las demás.

Esta convención impacto respecto de la modificación actual al concepto de capacidad jurídica, abandonando el
criterio medico-jurídico para determinar la capacidad jurídica de las personas e introduciendo el concepto desde el
modelo social, que se caracteriza por la posibilidad jurídica de contar con apoyos para la toma de decisiones.-

La diferencia radica en que en el código anterior la capacidad jurídica se determinaba por un criterio medico jurídico
donde la persona era asociada al concepto de enfermedad (dementes en sentido jurídico)
El concepto de capacidad jurídica que adopta el nuevo código a partir de su reforma, refiere a un sistema mixto
dejando claramente establecido que toda persona humana goza de la aptitud para ser titular de derechos y deberes
jurídicos y que toda persona humana puede ejercer por si misma sus derechos “excepto las limitaciones
expresamente previstas en este código y en una sentencia judicial”.

Lo expuesto significa que no existe en el Código una división tajante entre personas capaces e incapaces. Establece
una presunción de capacidad jurídica plena, con excepción de las limitaciones expresamente previstas.

Capacidad jurídica y sistema de apoyos

En el siguiente cuadro se muestra como quedó el régimen de limitaciones a la capacidad jurídica en el CCCN, las
situaciones en las que se aplica y la figura de asistencia y acompañamiento que se designará para que la persona
pueda ejercer sus derechos con la mayor plenitud posible.
6)
a) Personas capaces: Se mantiene en el ccc el principio que refiere a que la capacidad de la persona es la regla y su
limitación solo puede ser dispuesta excepcionalmente.
La excepcionalidad de la limitación se encuentra acentuada, sobre todo en la regulación de la situación jurídica de
personas con enfermedades mentales, donde la presunción de capacidad se mantiene, aún en supuestos de
internación.

b) Personas con capacidad restringida: El nuevo Código dispone que las personas mayores de trece (13) años que
sufren de adicciones y de alteraciones mentales permanentes de gravedad suficiente como para poder dañarse a sí
mismas o a sus bienes, puedan quedar sometidas a un régimen de capacidades restringidas con la designación de un
curador o un sistema de apoyos multidisciplinario.
Ello es una sustancial diferencia con el régimen anterior, en el que estos casos quedaban emplazados en el régimen
de la inhabilitación e incluso en el de incapacidad. Como se verá, la declaración de incapacidad supone ahora una
absoluta ineptitud para relacionarse con el medio y expresar la voluntad.
En todos aquellos casos en que no pueda verificarse dichos extremos corresponderá el presente régimen de
restricciones a la capacidad, con la posibilidad para el Juez de designar una o varias personas de su confianza que le
presten apoyo, con el fin de promover su autonomía y facilitar la comunicación, comprensión y manifestación de la
voluntad para el ejercicio de sus derechos.

c) Inhabilitados: En los artículos 48 a 50 del ccc, se reserva esta categoría para los pródigos y se reafirma el
fundamento de la asistencia de un curador para actos de disposición, en protección del patrimonio familiar. Como en
el caso anterior, se establece la designación de un apoyo, que deberá asistir al inhabilitado para el otorgamiento de
actos de disposición, y de aquellos que establezca la sentencia de inhabilitación.

d) Incapaces de ejercicio: Se elimina la ya criticada distinción – por su escasa utilidad práctica y anacronismo - entre
incapaces absolutos y relativos, disponiendo el artículo 24 que son incapaces de ejercicio:
“ a) las personas por nacer; b) la persona que no cuente con la edad y grado de madurez suficiente ; c) la persona
declarada incapaz por sentencia judicial, en la extensión dispuesta en esa decisión.

SISTEMA DE APOYATURA

Art. 102.— Asistencia. Las personas con capacidad restringida y las inhabilitadas son asistidas por los apoyos
designados en la sentencia respectiva y en otras leyes especiales.

Significa que el articulo mantiene el nombramiento de un curador designado por el juez pudiendo también en el
mismo cuerpo de la sentencia designar los apoyos necesarios.

Art. 43.— Concepto. Función. Designación. Se entiende por apoyo cualquier medida de carácter judicial o
extrajudicial que facilite a la persona que lo necesite la toma de decisiones para dirigir su persona, administrar sus
bienes y celebrar actos jurídicos en general.

Las medidas de apoyo tienen como función la de promover la autonomía y facilitar la comunicación, la comprensión
y la manifestación de voluntad de la persona para el ejercicio de sus derechos.

El interesado puede proponer al juez la designación de una o más personas de su confianza para que le presten
apoyo. El juez debe evaluar los alcances de la designación y procurar la protección de la persona respecto de
eventuales conflictos de intereses o influencia indebida. La resolución debe establecer la condición y la calidad de las
medidas de apoyo y, de ser necesario, ser inscripta en el Registro de Estado Civil y Capacidad de las Personas.

Estos apoyos serán designados por el juez que intervenga debiendo tener en mira la función especifica que debe
cumplir el apoyo.

Medidas de apoyo:
Se parte del presupuesto como regla general que las personas tienen plena capacidad jurídica, que incluye la
capacidad de obrar con los apoyos necesarios.
El segundo párrafo del art 43 establece que las medidas tienen como función la de promover la autonomía y facilitar
la comunicación, la comprensión y la manifestación de voluntad de la persona para el ejercicio de sus derechos.

El tercer párrafo del art 43 establece que el interesado puede proponer al juez la designación de una o as personas
de su confianza para que le presten apoyo. El juez debe evaluar los alcances de la designación y procurar la
protección de la persona respecto de eventuales conflictos de interés o influencia indebida. La resolución debe
establecer la condición y la calidad de las medidas de apoyo, y de ser necesario, ser inscripta en el registro de estado
civil y capacidad de las personas. El artículo señala que el apoyo puede ser unilateral o plural.

Salvaguardas: Las salvaguardas están previstas en la CDPD con el fin de evitar el abuso de hecho y de derecho en
contra de la persona que requiera apoyos para el ejercicio de su capacidad.

El legislador ha procurado el reconocimiento del principio de autonomía de la persona, resguardando la eventual


posibilidad de conflicto de intereses o abuso por parte de terceros designados como apoyos. En ese sentido, la
designación realizada por la persona encuentra el límite del control judicial, a quien le cabe la función de garantía en
el ejercicio de los derechos.

Inscripción de la sentencia:

La inscripción resulta necesaria a los efectos de la publicidad de los actos frente a terceros, así como la seguridad
jurídica de ellos, pues el tercero contratante deberá conocer que la persona actúa con los apoyos necesarios para la
toma de decisiones y los efectos que genere el acto jurídico a celebrarse.

7) Proceso

Normas procesales relativas al juicio por enfermedad mental

El CCyC introduce modificaciones relativas a las condiciones y recaudos procesales, desde la perspectiva de que los
mismos resultan sustanciales al derecho comprometido y por tal razón no pueden dejarse librados a discrecionalidad
de los Códigos provinciales. Así, se modifica lo atinente a la legitimación para solicitar la restricción, resultando
sustancial el reconocimiento de la legitimación de la propia persona interesada, directamente relacionado con el art.
36 CCyC, que señala: “La persona en cuyo interés se lleva adelante el proceso es parte y puede aportar todas las
pruebas que hacen a su defensa”.

ARTÍCULO 33.- Legitimados. Están legitimados para solicitar la declaración de incapacidad y de capacidad
restringida: a. el propio interesado; b. el cónyuge no separado de hecho y el conviviente mientras la convivencia no
haya cesado; c. los parientes dentro del cuarto grado; si fueran por afinidad, dentro del segundo grado; d. el
Ministerio Público.

ARTÍCULO 35.- Entrevista personal. El juez debe garantizar la inmediatez con el interesado durante el proceso y
entrevistarlo personalmente antes de dictar resolución alguna, asegurando la accesibilidad y los ajustes razonables
del procedimiento de acuerdo a la situación de aquél. El Ministerio Público y, al menos, un letrado que preste
asistencia al interesado, deben estar presentes en las audiencias.

La inmediación exigida por el artículo se funda en la situación de vulnerabilidad de la persona sujeta al proceso, en
función de su padecimiento. Se relaciona con el objetivo de garantizar el derecho de acceso a la justicia (art. 18 CN;
arts. 8° y 25 CADH; Reglas de Brasilia sobre Acceso a la Justicia de las Personas en Condiciones de Vulnerabilidad; art.
13 CDPD).

La CDPD establece la obligación de asegurar “que las personas con discapacidad tengan acceso a la justicia en
condiciones de igualdad con las demás, incluso mediante ajustes de procedimientos y adecuados a la edad, para
facilitar el desempeño de las funciones efectivas de esas personas como participantes directos e indirectos, incluida
la declaración como testigos, en todos los procedimientos judiciales, con inclusión de la etapa de investigación y
otras etapas preliminares” (art. 13).

El acceso a la justicia se vincula con las obligaciones de respeto y garantía del principio de no discriminación; así,
como ha señalado la Corte IDH, “para alcanzar sus objetivos, el proceso debe reconocer y resolver los factores de
desigualdad real de quienes son llevados ante la justicia. La presencia de condiciones de desigualdad real obliga a
adoptar medidas de compensación que contribuyan a reducir o eliminar los obstáculos y deficiencias que impidan o
reduzcan la defensa eficaz de los propios intereses”.

Competencia
A los fines de determinar la competencia en los procesos de determinación de la capacidad, la norma establece dos
pautas: el domicilio o el lugar de internación, según corresponda. Esto importa una evaluación previa que ha
efectuado el legislador, respecto a cuál es el magistrado que se encuentra en mejores condiciones de proteger y
preservar la situación de la persona, amén que satisface la inmediatez del tribunal, de los auxiliares de la justicia, del
Ministerio Público y del curador, para poder cumplir con su finalidad.
Al determinar el juez competente teniendo en cuenta el domicilio real actual de la persona, se cumple con el
principio constitucional de la tutela judicial efectiva. El juez podrá adoptar todas las medidas necesarias tendientes a
resguardar a la persona y su patrimonio, y asegurar que se efectivicen de manera urgente (arts. 9° y 13 CDPD; art. 25
CADH). Como efecto de esta solución deben entenderse inaplicables las regulaciones provinciales que conserven una
pauta contraria.

Asistencia letrada La persona en cuyo interés se lleva adelante el proceso judicial tiene derecho a participar en él
con asistencia letrada, que debe ser proporcionada por el Estado si carece de medios (art. 31, inc. e) CCyC). Dicho
derecho debe ser garantizado por el juez en la primera oportunidad procesal; por ello, si la persona comparece sin
abogado, debe nombrársele uno de inmediato, a fin de que le represente y preste asistencia durante todo el
proceso.

SENTENCIA-

ARTÍCULO 37.- Sentencia. La sentencia se debe pronunciar sobre los siguientes aspectos vinculados a la persona en
cuyo interés se sigue el proceso: a. diagnóstico y pronóstico; b. época en que la situación se manifestó; c. recursos
personales, familiares y sociales existentes; d. régimen para la protección, asistencia y promoción de la mayor
autonomía posible. Para expedirse, es imprescindible el dictamen de un equipo interdisciplinario.

A tono con el modelo social de la discapacidad, las normas de la CDPD y la ley nacional 26.657, el CCyC inhabilita la
posibilidad de declaración de incapacidad civil o de sus restricciones como consecuencia del solo diagnóstico de
discapacidad. En la valoración judicial, el diagnóstico es solo uno de los aspectos considerados, debiendo centrarse la
actividad de ponderación en la situación contextual de la persona y en la existencia de apoyos y ajustes que
permitan el ejercicio personal de sus derechos —“recursos personales, familiares y sociales existentes”

ARTÍCULO 40.- Revisión. La revisión de la sentencia declarativa puede tener lugar en cualquier momento, a
instancias del interesado. En el supuesto previsto en el artículo 32, la sentencia debe ser revisada por el juez en un
plazo no superior a tres años, sobre la base de nuevos dictámenes interdisciplinarios y mediando la audiencia
personal con el interesado.
Es deber del Ministerio Público fiscalizar el cumplimiento efectivo de la revisión judicial a que refiere el párrafo
primero e instar, en su caso, a que ésta se lleve a cabo si el juez no la hubiere efectuado en el plazo allí establecido.

La exigencia de revisión es coherente con la concepción interdisciplinaria de la salud mental, así como con el modelo
social de la discapacidad (CDPD), al tiempo que se erige contraria a la regulación civil tradicional, que ha entendido a
la incapacidad desde un concepto biológico-jurídico, consecuencia del cual la modificación de la sentencia originaria
solo podía habilitarse en caso de “recuperación”: con la rehabilitación.

Cese de la incapacidad y de las restricciones a la capacidad.

ARTÍCULO 47.- Procedimiento para el cese. El cese de la incapacidad o de la restricción a la capacidad debe
decretarse por el juez que la declaró, previo examen de un equipo interdisciplinario integrado conforme a las pautas
del artículo 37, que dictamine sobre el restablecimiento de la persona. Si el restablecimiento no es total, el juez
puede ampliar la nómina de actos que la persona puede realizar por sí o con la asistencia de su curador o apoyo.

El “cese” de la incapacidad o la capacidad restringida, alude al cese “total” de las restricciones oportunamente
impuestas en la sentencia originaria, diferenciándose de las eventuales modificaciones que la sentencia original
puede recibir a consecuencia del ejercicio del deber de revisión permanente que regula el art. 40 CCyC.
BOLILLA XV: VIOLENCIA FAMILIAR Y DE GENERO.

1. VIOLENCIA CONTRA LA MUJER:

A partir de la "Década de la Mujer" establecida por las Naciones Unidas (1975-1985) el tema de la "Violencia contra
la Mujer" es instalado en la Agenda Internacional respondiendo a la demanda de las organizaciones de mujeres de
todo el mundo, que le asignan un carácter prioritario a su consideración y tratamiento. Un paso importante fue,
primero, su reconocimiento como un problema social y, posteriormente, su inclusión como una violación de los
derechos humanos de las mujeres.En el año 1979, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprueba la
“Convención Sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer”.

En la Segunda Conferencia Mundial sobre la Mujer realizada en Copenhague en 1980, se plantea directamente el
problema de las mujeres golpeadas y la violencia familiar, adoptándose la resolución “La Mujer Maltratada y la
Violencia en la Familia”.

"La Declaración de la Asamblea General de las Naciones Unidas sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer",
adoptada el 20 de diciembre de 1993, puntualiza que la noción de discriminación incluye la violencia basada en el
sexo, salvando de este modo, la no mención explícita de esta problemática en la Convención de 1979.

Reconoce la necesidad imperiosa de hacer extensivos a las mujeres los derechos y principios relativos a la igualdad,
seguridad, libertad y dignidad de los seres humanos.

Su artículo 1º define la violencia contra la mujer: “…como todo acto de violencia basado en la diferencia de género
que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, inclusive la
amenaza de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública
como privada“. Tiene como antecedente la Recomendación General Nº19 de la CEDAW, del año 1992.

La Asamblea General de los Estados Americanos (OEA) aprueba, en el año 1994, la “Convención Interamericana para
Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer” conocida como “Convención de Belem Do Pará”. Su
Preámbulo declara que la violencia contra las mujeres es una violación a sus derechos humanos. Es el primer
instrumento regional que hace un reconocimiento expreso, en este sentido.

Convención Interamericana para la Sanción, Prevención, y Erradicación de la Violencia contra la Mujer

Fue adoptada por aclamación en el Vigésimo Cuarto Período Ordinario de Sesiones de la Asamblea General de la
Organización de Estados Americanos, en Belem do Pará, Brasil, el 9 de junio de 1994. En su Preámbulo, los Estados
Parte afirman que "la violencia contra la mujer constituye una violación de los derechos humanos y las libertades
fundamentales y limita total o parcialmente a la mujer el reconocimiento, goce y ejercicio de tales derechos y
libertades" (…), reiteran que "la violencia contra la mujer es una ofensa a la dignidad humana y una manifestación de
las relaciones de poder históricamente desiguales entre hombres y mujeres" (…), y finalmente expresan que "la
eliminación de la violencia contra la mujer es condición indispensable para su desarrollo individual y social y su plena
e igualitaria participación en todas las esferas de la vida"

-La Convención, en su artículo 1º, define que debe entenderse por violencia contra la mujer “cualquier acción o
conducta, basada en su género, que cause muerte, daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico a la mujer, tanto
en el ámbito público como en el privado”.
- Por su parte, en su artículo 2º, dispone que se entenderá que la violencia contra la mujer incluye "la violencia física,
sexual y psicológica", y determina que comprende:
a) la que tenga lugar dentro de la familia o en cualquier otra relación interpersonal, ya sea que el agresor comparta o
haya compartido el mismo domicilio que la mujer, y que comprende entre otros, violación, maltrato y abuso sexual;
b) que tenga lugar en la comunidad y sea perpetrada por cualquier persona y que comprende, entre otros, violación,
abuso sexual, tortura, trata de personas, prostitución forzada, secuestro y acoso sexual en el lugar de trabajo,
instituciones educativas, establecimientos de salud, etc., y
c) que sea perpretada o tolerada por el Estado o sus agentes, donde quiera que ocurra. El Capítulo II, relativo a los
derechos protegidos, establece, en su artículo 3º que: “toda mujer tiene derecho a una vida libre de violencia, tanto
en el ámbito público como en el privado”,

-En el art. 6 “que el derecho a una vida libre de violencia, incluye entre otros:

a) a ser libre de toda forma de discriminación y b) a ser valorada y educada libre de patrones estereotipados de
comportamiento y prácticas sociales y culturales basadas en conceptos de inferioridad o subordinación”.

En el Capítulo III, sobre "Deberes de los Estados" el artículo 7º condena toda forma de violencia contra la mujer y los
Estados Parte convienen en adoptar por todos los medios apropiados y sin dilaciones, políticas orientadas a prevenir,
sancionar y erradicar dicha violencia, mediante:

- incluir en su legislación interna normas penales, civiles y administrativas, para hacer efectiva la Convención;

- establecer procedimientos legales justos y eficaces para la mujer que haya sido sometida a violencia, que incluyan,
entre otros, medidas de protección, un juicio oportuno, el acceso efectivo a los mismos, así como los mecanismos
judiciales y administrativos para asegurar a la mujer acceso o a resarcimiento, reparación del daño y otros medios de
compensación justos y eficaces, etc.

Y en el artículo 8º, los Estados Parte convienen en adoptar en forma progresiva medidas específicas, inclusive
programas, para:

- fomentar el conocimiento y la observancia del derecho de las mujeres; la modificación de patrones socioculturales
incluyendo el diseño de programas de educación formales y no formales, apropiados a todo nivel del proceso
educativo;

- fomentar la educación y capacitación del personal en la administración de justicia, policial y demás personal
encargados de la aplicación de la Ley;

- suministrar servicios especializados apropiados para su atención y ofrecer a la mujer objeto de violencia, acceso a
programas eficaces de rehabilitación y capacitación;

- garantizar la investigación y recopilación de estadísticas y demás información pertinente sobre las causas,
consecuencias y frecuencia de la violencia contra la mujer, y evaluar la eficacia de las medidas para su prevención,
sanción y eliminación, etc.

En el Capítulo IV sobre "Mecanismos Interamericanos de Protección", se establece que:

- Los países de América Latina que han adherido a esta convención se comprometen a informar periódicamente a la
Comisión Interamericana de Mujeres, sobre los avances realizados para su efectiva aplicación, en sus respectivos
territorios nacionales.

- Cualquier persona o grupo de personas o entidad no gubernamental legalmente reconocida puede presentar a la
Comisión Interamericana de Derechos Humanos peticiones que contengan denuncias o quejas de violación del
Artículo 7 de la Convención.

De esta manera, nuestro país y el resto de los países de América Latina que han asumido el compromiso de su
aplicación, cuentan con una herramienta excepcional para combatir la violencia contra la mujer, en todas sus
formas.

Disposiciones Constitucionales y Tratados Internacionales


La Reforma de la Constitución Nacional de 1994 incorpora en su texto diversos Tratados Internacionales de Derechos
Humanos, entre los que se encuentra la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación
contra la Mujer. Este instrumento reafirma y garantiza el derecho de todas las mujeres a una vida libre de violencia.

En diciembre de 1994, se sanciona la Ley N° 24.417 de Protección contra la Violencia Familiar. Es reglamentada en
marzo de 1996 por el Poder Ejecutivo Nacional por Decreto 235/96. Con relación al marco legislativo y, teniendo
presente la organización federal del estado argentino su ámbito de aplicación se circunscribe a la Ciudad de Buenos
Aires, por lo que las jurisdicciones provinciales son invitadas a adherir a la misma.

En el año 1996 se incorpora al derecho interno las obligaciones asumidas internacionalmente por nuestro país
mediante la Ley Nº 24.632 la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia Contra la
Mujer.

LEY 26.485 VIOLENCIA CONTRA LA MUJER Prevención, sanción y erradicación.

ARTICULO 1º — Ambito de aplicación. Orden Público. Las disposiciones de la presente ley son de orden público y de
aplicación en todo el territorio de la República, con excepción de las disposiciones de carácter procesal establecidas
en el Capítulo II del Título III de la presente.

ARTICULO 2º — Objeto. La presente ley tiene por objeto promover y garantizar:


a) La eliminación de la discriminación entre mujeres y varones en todos los órdenes de la vida;
b) El derecho de las mujeres a vivir una vida sin violencia;
c) Las condiciones aptas para sensibilizar y prevenir, sancionar y erradicar la discriminación y la violencia contra las
mujeres en cualquiera de sus manifestaciones y ámbitos;
d) El desarrollo de políticas públicas de carácter interinstitucional sobre violencia contra las mujeres; 1947)
e) La remoción de patrones socioculturales que promueven y sostienen la desigualdad de género y las relaciones de
poder sobre las mujeres;
f) El acceso a la justicia de las mujeres que padecen violencia;
g) La asistencia integral a las mujeres que padecen violencia en las áreas estatales y privadas que realicen actividades
programáticas destinadas a las mujeres y/o en los servicios especializados de violencia.

ARTICULO 3º — Derechos Protegidos. Esta ley garantiza todos los derechos reconocidos por la Convención para la
Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, la Convención Interamericana para Prevenir,
Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer, la Convención sobre los Derechos de los Niños y la Ley 26.061 de
Protección Integral de los derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes y, en especial, los referidos a:

a) Una vida sin violencia y sin discriminaciones;


b) La salud, la educación y la seguridad personal;
c) La integridad física, psicológica, sexual, económica o patrimonial;
d) Que se respete su dignidad;
e) Decidir sobre la vida reproductiva, número de embarazos y cuándo tenerlos, de conformidad con la Ley 25.673 de
Creación del Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable;
f) La intimidad, la libertad de creencias y de pensamiento;
g) Recibir información y asesoramiento adecuado;
h) Gozar de medidas integrales de asistencia, protección y seguridad;
i) Gozar de acceso gratuito a la justicia en casos comprendidos en el ámbito de aplicación de la presente ley;
j) La igualdad real de derechos, oportunidades y de trato entre varones y mujeres;
k) Un trato respetuoso de las mujeres que padecen violencia, evitando toda conducta, acto u omisión que produzca
revictimización.

ARTICULO 4º — Definición. Se entiende por violencia contra las mujeres toda conducta, acción u omisión, que de
manera directa o indirecta, tanto en el ámbito público como en el privado, basada en una relación desigual de poder,
afecte su vida, libertad, dignidad, integridad física, psicológica, sexual, económica o patrimonial, como así también su
seguridad personal. Quedan comprendidas las perpetradas desde el Estado o por sus agentes. Se considera violencia
indirecta, a los efectos de la presente ley, toda conducta, acción omisión, disposición, criterio o práctica
discriminatoria que ponga a la mujer en desventaja con respecto al varón.

ARTICULO 5º — Tipos. Quedan especialmente comprendidos en la definición del artículo precedente, los siguientes
tipos de violencia contra la mujer:

1.- Física: La que se emplea contra el cuerpo de la mujer produciendo dolor, daño o riesgo de producirlo y cualquier
otra forma de maltrato agresión que afecte su integridad física.
2.- Psicológica: La que causa daño emocional y disminución de la autoestima o perjudica y perturba el pleno
desarrollo personal o que busca degradar o controlar sus acciones, comportamientos, creencias y decisiones,
mediante amenaza, acoso, hostigamiento, restricción, humillación, deshonra, descrédito, manipulación aislamiento.
Incluye también la culpabilización, vigilancia constante, exigencia de obediencia sumisión, coerción verbal,
persecución, insulto, indiferencia, abandono, celos excesivos, chantaje, ridiculización, explotación y limitación del
derecho de circulación o cualquier otro medio que cause perjuicio a su salud psicológica y a la autodeterminación.

3.- Sexual: Cualquier acción que implique la vulneración en todas sus formas, con o sin acceso genital, del derecho de
la mujer de decidir voluntariamente acerca de su vida sexual o reproductiva a través de amenazas, coerción, uso de
la fuerza o intimidación, incluyendo la violación dentro del matrimonio o de otras relaciones vinculares o de
parentesco, exista o no convivencia, así como la prostitución forzada, explotación, esclavitud, acoso, abuso sexual y
trata de mujeres.

4.- Económica y patrimonial: La que se dirige a ocasionar un menoscabo en los recursos económicos o patrimoniales
de la mujer, a través de:
a) La perturbación de la posesión, tenencia o propiedad de sus bienes;
b) La pérdida, sustracción, destrucción, retención o distracción indebida de objetos, instrumentos de trabajo,
documentos personales, bienes, valores y derechos patrimoniales;
c) La limitación de los recursos económicos destinados a satisfacer sus necesidades o privación de los medios
indispensables para vivir una vida digna;
d) La limitación o control de sus ingresos, así como la percepción de un salario menor por igual tarea, dentro de un
mismo lugar de trabajo.

5.- Simbólica: La que a través de patrones estereotipados, mensajes, valores, íconos o signos transmita y reproduzca
dominación, desigualdad y discriminación en las relaciones sociales, naturalizando la subordinación de la mujer en la
sociedad.

ARTICULO 6º — Modalidades. A los efectos de esta ley se entiende por modalidades las formas en que se
manifiestan los distintos tipos de violencia contra las mujeres en los diferentes ámbitos, quedando especialmente
comprendidas las siguientes:

a) Violencia doméstica contra las mujeres: aquella ejercida contra las mujeres por un integrante del grupo familiar,
independientemente del espacio físico donde ésta ocurra, que dañe la dignidad, el bienestar, la integridad física,
psicológica, sexual, económica o patrimonial, la libertad, comprendiendo la libertad reproductiva y el derecho al
pleno desarrollo de las mujeres. Se entiende por grupo familiar el originado en el parentesco sea por consanguinidad
o por afinidad, el matrimonio, las uniones de hecho y las parejas o noviazgos. Incluye las relaciones vigentes o
finalizadas, no siendo requisito la convivencia;

b) Violencia institucional contra las mujeres: aquella realizada por las/los funcionarias/os, profesionales, personal y
agentes pertenecientes a cualquier órgano, ente o institución pública, que tenga como fin retardar, obstaculizar o
impedir que las mujeres tengan acceso a las políticas públicas y ejerzan los derechos previstos en esta ley. Quedan
comprendidas, además, las que se ejercen en los partidos políticos, sindicatos, organizaciones empresariales,
deportivas y de la sociedad civil;

c) Violencia laboral contra las mujeres: aquella que discrimina a las mujeres en los ámbitos de trabajo públicos o
privados y que obstaculiza su acceso al empleo, contratación, ascenso, estabilidad o permanencia en el mismo,
exigiendo requisitos sobre estado civil, maternidad, edad, apariencia física o la realización de test de embarazo.
Constituye también violencia contra las mujeres en el ámbito laboral quebrantar el derecho de igual remuneración
por igual tarea o función. Asimismo, incluye el hostigamiento psicológico en forma sistemática sobre una
determinada trabajadora con el fin de lograr su exclusión laboral;

d) Violencia contra la libertad reproductiva: aquella que vulnere el derecho de las mujeres a decidir libre y
responsablemente el número de embarazos o el intervalo entre los nacimientos, de conformidad con la Ley 25.673
de Creación del Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable;
e) Violencia obstétrica: aquella que ejerce el personal de salud sobre el cuerpo y los procesos reproductivos de las
mujeres, expresada en un trato deshumanizado, un abuso de medicalización y patologización de los procesos
naturales, de conformidad con la Ley 25.929.

f) Violencia mediática contra las mujeres: aquella publicación o difusión de mensajes e imágenes estereotipados a
través de cualquier medio masivo de comunicación, que de manera directa o indirecta promueva la explotación de
mujeres o sus imágenes, injurie, difame, discrimine, deshonre, humille o atente contra la dignidad de las mujeres,
como así también la utilización de mujeres, adolescentes y niñas en mensajes e imágenes pornográficas, legitimando
la desigualdad de trato o construya patrones socioculturales reproductores de la desigualdad o generadores de
violencia contra las mujeres.

2) Ley Nacional de Protección de la Violencia Familiar

La sanción de la Ley Nacional Nº24.417, el día 7 de diciembre de 1994 de Protección contra la Violencia Familiar y su
posterior reglamentación por el Decreto 235/96, significa un importante avance en cuanto al reconocimiento, por
parte del Congreso Nacional, de la necesidad de dar respuesta a las múltiples demandas de la sociedad sobre esta
problemática y su incorporación como política pública del Estado Nacional.

La Ley 24.417 y su Decreto Reglamentario incorporan, con su sanción, los siguientes avances en esta temática:

- incluye explícitamente en el concepto de grupo familiar al originado en las uniones de hecho;

- la informalidad como regla en la substanciación de la denuncia: escrita o verbal, no requiere patrocinio letrado para
su radicación y el carácter sumario de los plazos legales;
- la posibilidad de solicitar, conjuntamente con la denuncia, la adopción de medidas cautelares en relación a cuota
alimentaria y régimen de visitas, exclusión del golpeador del hogar o prohibición de acceso al domicilio de la víctima
o su lugar de trabajo, entre otras;

- la obligación de los profesionales de la salud y de los servicios asistenciales sociales y educativos, de denunciar los
hechos de violencia que conocieran en razón de su labor en el caso de los menores, incapaces, ancianos y
discapacitados;

- la competencia de los Juzgados de Familia para entender en estas denuncias, sin perjuicio de la inclusión de la
reforma del Código de Procedimientos Penales para que el juez pueda ordenar la exclusión del hogar del procesado,
cuando las circunstancias del caso hicieran presumir fundadamente su repetición;

- la creación de Centros de Orientación y Asesoramiento, y de un Cuerpo Interdisciplinario especializado para prestar


apoyo técnico a los juzgados intervinientes; - el diseño de un registro de denuncias centralizado;

- el reconocimiento al trabajo de las organizaciones no gubernamentales especializadas que puedan aportar equipos
interdisciplinarios para el diagnóstico y tratamiento de la violencia familiar.

A pesar de este avance legislativo, la Ley crea algunas confusiones y puede ser mejorada en diversos aspectos. Debe
ser entendida como una “herramienta” más, dentro del conjunto de una política pública de prevención que debe
desarrollarse con vigor a nivel nacional. La eficacia de una medida judicial depende de políticas sociales de apoyo, de
redes sociales de sostén, del aporte de las organizaciones de la sociedad civil. De lo contrario, sus alcances son muy
limitados.
PROGRAMA DE ESTUDIO- PARTE II – DERECHO SUCESORIO.

BOLILLA XVII: LA SUCESIÓN.

1) Concepto. Especies, sucesión mortis causa. Definición (-…)

Sucesión. Concepto: “La sucesión es la transmisión de derechos de una persona a otra, de tal manera que en
adelante ésta pueda ejercerlos en su propio nombre”.

El CCCN ha definido en su artículo 400 los distintos tipos de sucesores que se reconocen: “sucesor universal es el que
recibe todo o una parte indivisa del patrimonio de otro, sucesor singular el que recibe un derecho en particular”.
Sucesores son aquellas personas a las cuales se transmiten los derechos de otras personas, de modo que en adelante
puedan ejercerlos en su propio nombre.

ARTICULO 400.-Sucesores. Sucesor universal es el que recibe todo o una parte indivisa del patrimonio de otro;
sucesor singular el que recibe un derecho en particular.

Especies:

Existen distintos criterios para clasificar las especies de sucesión; uno de ellos consiste en dividirlas de acuerdo al
contenido, que determina la sucesión universal y la sucesión singular. Y otro se basa en el hecho generador de la
transmisión, que será la voluntad cuando ocurra entre vivos o la muerte en el otro supuesto.

Sucesión universal y singular:

-El sucesor universal es aquel a quien pasa todo o una parte alícuota del patrimonio de otra persona

-El sucesor singular es aquel al cual se transmite un objeto particular que sale de los bienes de otra persona.

Por lo tanto, habrá sucesión universal cuando se transmita todo o una parte alícuota del patrimonio de una persona,
y habrá sucesión singular cuando se transmita un objeto particular.

Sucesión entre vivos y por causa de muerte:

- Sucesión entre vivos: la fuente de transmisión es un acto jurídico realizado por el titular del derecho.

- Sucesión mortis causa: el hecho jurídico generador de la transferencia de los derechos es la muerte de su titular.

Es posible combinar ambas clasificaciones, aunque no de una manera plena. En efecto, no es admisible que exista
una sucesión universal entre vivos, ya que nadie puede desprenderse de su patrimonio, por ser un atributo de la
personalidad, aun cuando puede si, transmitir todos los bienes que en un momento determinado posea.
Puede haber sucesión singular entre vivos y ello ocurrirá cuando por cualquier acto jurídico, se transfiera un derecho
sobre un bien a otra persona, para que esta ejerza ese derecho en nombre propio.
También es posible la sucesión universal por causa de muerte, mediante la cual se transmitirá la herencia de la
persona fallecida. Y por último, puede haber sucesión singular por causa de muerte cuando el causante haya
efectuado legados particulares de su testamento.

Fundamento. Vinculación con el derecho de familia:

Todo el derecho sucesorio se basa en la existencia de la propiedad privada. El traspaso de esa propiedad privada
debe efectuarse, a la muerte de su titular, a favor de otras personas. Esta determinación del heredero puede ser
hecha por la ley o por la voluntad del causante a través de un testamento.

*La sucesión intestada tiene su fundamento en el reconocimiento de los afectos presuntos del causante y en la
protección familiar. De allí su íntima vinculación con el derecho de familia.
*Por el contrario, la sucesión testamentaria reposa en la libre voluntad expresada por el causante en su testamento,
que en nuestro ordenamiento jurídico se encuentra limitada en caso de existir herederos legitimarios.

Elementos de la sucesión mortis causa:

a) El causante: Es la persona fallecida. Es importante porque sin ella no habría transmisión sucesoria.

b) Elementos personales: Son los sucesores o herederos.

c) Elementos reales: Son aquellos que comprenden a los herederos y legatarios. Es el contenido de la transmisión.

d) Elementos formales: Constituidos por:

- La apertura de la sucesión.
- Las fuentes de la vocación sucesoria.
- Aceptación por parte de los herederos.

Fuentes de la sucesión “mortis causa”:

El heredero es llamado por la ley o por testamento.


Dentro del llamamiento hecho por la ley, existe un llamamiento imperativo que corresponde a aquellos miembros
de la familia a los que la ley les atribuye una porción de la herencia, de la cual no pueden ser privados salvo causa de
desheredación (herederos forzosos legitimarios).
Existe también un llamamiento supletorio que tendrá vigencia a falta de herederos forzosos, y a falta de herederos
instituidos por el causante en su testamento. Los herederos llamados supletoriamente se denominan “legítimos”.
En primer lugar hay que verificar si existen herederos designados por la ley que tengan un llamamiento imperativo. A
falta de herederos legitimarios, el causante puede designar heredero a quien quiera, y entonces se encuadra dentro
de la sucesión testamentaria.
A falta de herederos forzosos y testamentarios vuelve a aplicarse el llamamiento deferido por la ley en forma
supletoria y recibirán la herencia los parientes colaterales hasta el cuarto grado.

Clases:

-Sucesión en la persona: surge en el derecho romano, significa que el heredero es el continuador de la persona del
causante, y como tal se produce la confusión de patrimonios y la consiguiente responsabilidad personal del heredero
por las deudas de la persona muerta.

- Sucesión en los bienes: surge en el derecho germánico, la confusión de patrimonios solo se producía cuando se
habían cancelado todas las deudas del causante no respondiendo el heredero con sus bienes personales en caso de
no alcanzar los bienes hereditarios.

La sucesión como persona: la sucesión no es una persona jurídica. La muerte, apertura y la


transmisión de la herencia, se causan en el mismo instante. No hay entre ellas el menor
intervalo de tiempo. Una persona jurídica debe tener un patrimonio propio, pero resulta que los
propietarios de los bienes son los herederos desde el mismo momento de la muerte del
causante.
Tampoco tiene un objeto social que cumplir y los bienes se administran según la voluntad de los
herederos. Carece de los requisitos esenciales de toda persona jurídica y no puede por sí
adquirir derechos ni contraer obligaciones.

2. Sucesores. Concepto y Clases.caract…….

Heredero y Legatario. Concepto. Carácter.

Art. 2278: Heredero y legatario. Concepto. Se denomina heredero a la persona a quien se transmite la universalidad
o una parte indivisa de la herencia; legatario, al que recibe un bien particular o un conjunto de ellos.
Se han establecido dos especies de sucesores:

1) los herederos que tienen un llamamiento que puede ser universal o bien una parte indivisa de la herencia; y
2) los legatarios que tienen un llamamiento particular.

Los herederos desde la muerte del causante tienen todos los derechos y acciones de aquel de manera indivisa, con
excepción de los que no son transmisibles por sucesión, y continúan en la posesión de lo que el causante era
poseedor, conforme al art. 2280.
El heredero cuando es el único llamado ha adquirido, como efecto de la muerte y la consiguiente apertura de la
sucesión, la totalidad de la herencia.

En el caso de coexistir más de una persona llamada como heredero, a cada uno de ellos le corresponderá la parte
indivisa de la herencia que coincide con su porción hereditaria, es decir que la herencia se dividirá entre la cantidad
de herederos y el resultado será la porción indivisa que a cada uno de ellos le corresponde y que se materializara con
la partición.

Otra característica del heredero es que responde por las deudas del causante con los bienes que reciben o con su
valor en caso de haber sido enajenados.

El heredero responderá con sus propios bienes por las deudas del causante y por las cargas de la herencia si:

a) no hubiese hecho el inventario en el plazo de tres meses desde que los acreedores o legatarios lo intiman
judicialmente a su realización,
b) oculta fraudulentamente los bienes de la sucesión omitiendo su inclusión en el inventario,
c) exagera dolosamente el pasivo sucesorio,
d) enajena bienes de la sucesión excepto que el acto sea conveniente y el precio obtenido ingrese a la masa.

Heredero de cuota:

ARTICULO 2488.- Herederos de cuota. Los herederos instituidos en una fracción de la herencia no tienen vocación a
todos los bienes de ésta, excepto que deba entenderse que el testador ha querido conferirles ese llamado para el
supuesto de que no puedan cumplirse, por cualquier causa, las demás disposiciones testamentarias. Si la adición de
las fracciones consignadas en el testamento excede la unidad, se reducen proporcionalmente hasta ese límite. Si la
suma de las fracciones no cubre todo el patrimonio, el remanente de los bienes corresponde a los herederos
legítimos y, a falta de ellos, a los herederos instituidos en proporción a sus cuotas.
El heredero de cuota tiene derecho a recibir la fracción de la herencia que le asignó el testador, pero no tienen
vocación al todo de la herencia. Sin embargo puede suceder que el testador haya dispuesto que en caso de que no
puedan cumplirse otras disposiciones testamentarias, acrecerá la porción del heredero de cuota.
La responsabilidad del heredero de cuota por las deudas del causante y por las cargas hereditarias se limita a los
bienes que recibe o a su valor en caso de haber sido enajenados.

Legatario particular:

Recibe un bien determinado o un conjunto de ellos y no tiene derecho sobre los otros bienes que componen la
herencia. El legatario no acrece por sobre el bien legado, salvo que el testador hubiese dispuesto lo contrario.
El legatario particular no continua la persona la persona del difunto, nunca se confunden sus propios bienes con la
herencia.
En cuanto a las deudas del causante, el legatario solo es responsable hasta el valor de lo que recibe y nunca
responderá con sus propios bienes frente a los acreedores del fallecido.
El legatario es considerado coo un acreedor del causante y su derecho se limita a reclamar la entrega del bien
legado.
El legatario tiene derecho al cobro de su legado sobre los bienes de la herencia, con preferencia sobre los acreedores
de los herederos (2316).

ARTICULO 2316.-Preferencia. Los acreedores por deudas del causante y por cargas de la sucesión, y los legatarios
tienen derecho al cobro de sus créditos y legados sobre los bienes de la herencia, con preferencia sobre los
acreedores de los herederos.
3) La muerte como hecho generador. Muerte real, muerte presunta.

...Muerte real: artículo 23 de la ley 24193 “el fallecimiento de una persona se considerará tal cuando se verifiquen de
modo acumulativo los siguientes signos, que deberán persistir ininterrumpidamente seis horas después de su
constatación conjunta:

a) ausencia irreversible de respuesta cerebral con pérdida absoluta de conciencia,


b) ausencia de respiración espontanea,
c) ausencia de reflejos encefálicos y constatación de pupilas fijas no reactivas,
d) inactividad encefálica corroborada por medios técnicos y/o instrumentales adecuados a las diversas situaciones
clínicas...
La muerte se prueba con la partida del registro civil conforme lo establece el art. 96.

...Muerte presunta: la ausencia con presunción de fallecimiento puede ocasionarse por la ausencia de una persona
sin que se tengan noticias durante tres años, o cuando se encontraba en el lugar de un incendio, terremoto, acción
de guerra u otro hecho semejante susceptible de ocasionar la muerte o participo de una actividad que implique el
mismo riesgo y no se tiene noticias de el por el término de dos años, y si se encontraba en un buque o aeronave
naufragado o perdido y no se tuviera noticias de su existencia por el termino de seis meses.

4) Apertura de la sucesión. Concepto. Efectos. Conmoriencia. Diferencia con el proc. sucesorio: etcetcetc

Apertura de la sucesión:

Se produce en el mismo momento de la muerte del causante y tiene como consecuencia la transmisión instantánea
de la herencia a los herederos.

El art. 2277 establece “la muerte real o presunta de una persona causa la apertura de su sucesión y la transmisión
de su herencia a las personas llamadas a sucederlo por el testamento o por la ley.

Hechos que producen la apertura de la sucesión: Muerte real.

Muerte presunta.

Conmoriencia:

Habrá conmoriencia cuando dos o más personas hubiesen fallecido en un desastre común o en cualquier otra
circunstancia de modo que no se pueda saber cuál de ellas falleció primero.

ARTICULO 95.-Conmoriencia. Se presume que mueren al mismo tiempo las personas que perecen en un desastre
común o en cualquier otra circunstancia, si no puede determinarse lo contrario.

Diferencia con el juicio sucesorio: La apertura de la sucesión produce la transmisión de los derechos a los herederos
y legatarios, mientras que el juicio sucesorio tiene por fin ratificar quienes son los herederos e inscribir los bienes a
su nombre.

*Régimen sucesorio abierto por presunción de fallecimiento: (art. 85/86)

Hay tres sucesos que permiten la declaración de la muerte presunta:


1) la ausencia durante 3 años sin que se tengan noticias de la persona. (Fecha presuntiva de muerte: el último día del primer año
y medio)

2) en caso de incendio, terremoto, acción de guerra y otro suceso semejante, si no se tuvieren noticias durante 2 años (fecha
presuntiva de muerte: el día del suceso, el día del término medio en que ocurrió el hecho)

3) en caso de encontrarse en un buque o aeronave naufragado o perdido, y del que no se tuviesen noticias durante 6 meses (el
ultimo día en que se hayan tenido noticias del buque o de la aeronave).
Previo inventario los herederos recibirán los bienes y estos se inscribirán a su nombre en los registros, con la pre notación de
que no podrán enajenarlos y gravarlos sin autorización judicial. Dicha pre notación concluirá y los herederos podrán disponer
libremente de los bienes a los cinco años del día presuntivo del fallecimiento o a los ochenta del nacimiento del ausente, Si este
reaparece luego de cesada la pre notación se le restituirán los bienes que existiesen en el estado en que se hallasen, los
adquiridos con el valor de los que faltaren, y el precio que se adeudase de los enajenados, así como también los frutos no
consumidos

*Régimen sucesorio abierto debido a la ausencia por la desaparición forzada de personas:

La ley 24.321 que regula la desaparición forzada de personas permite la declaración de la ausencia de aquellas personas cuya
desaparición forzada se hubiera producido con anterioridad al 10 de diciembre de 1983. Puede ser solicitada por todos aquellos
que tuvieren un interés legítimo subordinado a la persona del ausente.
El pedido tramitara por juicio sumario ante el juez civil del domicilio del solicitante o en su defecto el de la residencia del
desaparecido. Se fijara como fecha presuntiva de la misma el día que constaba en la denuncia originaria ante el organismo oficial
competente o en su caso el de la última noticia fehaciente sobre el desaparecido.
Una vez declarada la ausencia por esta situación, los efectos serán análogos a los previstos para la ausencia con presunción de
fallecimiento.

5) La transmisión. Concepto. Momento en que opera. Contenido: derechos y obligaciones transmisibles e


intransmisibles.

Concepto: Subrogación o sustitución de una persona por otra, como titular de derechos y obligaciones y, la
transmisión misma de éstos de una persona a otra.

La transmisión de los derechos tiene lugar en forma instantánea en el momento de la muerte del causante.

El contenido de la transmisión es la herencia y esta se compone de todos los derechos y obligaciones que formaban
el patrimonio del difunto, menos los que se extinguen por causa de muerte:

- Los derechos extrapatrimoniales se extinguen con la muerte de su titular y los derechos patrimoniales se
transmiten a los herederos.
- Los atributos de la personalidad (nombre, domicilio, la capacidad, el estado) se extinguen con la muerte, lo
mismo que los derechos de la personalidad (derecho a la vida, al honor, a la libertad).
- Los derechos de familia se extinguen con la muerte de su titular. Lo mismo ocurre con la calidad de tutor o
curador.
- Respecto de las acciones de estado de familia, se puede sostener que en principio no son transmisibles por
vía sucesoria, sin embargo en algunos casos iniciada en vida por el causante, puede ser continuada por los
herederos, y en otros, puede ser promovida por sus sucesores en determinadas condiciones. Los herederos
del causante pueden ser demandados por una acción de estado.
- En el caso de las sociedades de responsabilidad limitada, si el contrato previera la incorporación de los
herederos del socio, el pacto será obligatorio para estos y para los socios.
- En cuanto a los derechos intelectuales, el causante tiene su derecho en forma vitalicia, pero a su muerte se
transmite a los herederos por un lapso determinado (setenta años).

En materia contractual:

ARTICULO 1024.-Sucesores universales. Los efectos del contrato se extienden, activa y pasivamente, a los sucesores
universales, a no ser que las obligaciones que de él nacen sean inherentes a la persona, o que la transmisión sea
incompatible con la naturaleza de la obligación, o esté prohibida por una cláusula del contrato o la ley.

La transmisión mortis causa requiere la reunión de tres elementos (formales):

1) la apertura de la sucesión;
2) la vocación sucesoria, y
3) la aceptación.
Ya mencionados los hechos que dan lugar a la apertura de la sucesión, y producida la muerte, la ley o la voluntad del
causante producirán el llamamiento a una o mas personas para recibir esa herencia en particular, quedara en ese
caso determinada la vocación sucesoria, configurándose el segundo elemento de la transmision.
El llamado a suceder no esta obligado a recibir la herencia sino que, por el contrario, tiene el derecho a elegir entre a
aceptarla simplemente, aceptarla bajo beneficio de inventario, renunciar o guardar silencio.

Recién con la aceptación queda consolidada la transmisión en favor del heredero, ya que en principio no podrá ya
desprenderse de tal calidad por su sola voluntad.

Solamente cuando se han reunido los tres elementos se producirá y perfeccionara la transmisión hereditaria.

6) LEY APLICABLE.

Unidad y pluralidad:

La sucesión a titulo universal es la que tiene por objeto un todo ideal, sin consideración a su contenido especial ni a
los objetos de esos derechos. El sistema de unidad de ley consiste en que el derecho de sucesión se regirá por una
ley única, cualquiera sea el lugar donde se encuentren situados los bienes.

El sistema de pluralidad de leyes se configura cuando se rige el derecho de sucesión por la ley del lugar donde se
encuentren situados los bienes.

El principio de nuestro código es el de unidad de ley determinada por el último domicilio del causante.
BOLILLA XVII: VOCACION SUCESORIA

1. Capacidad para suceder.

Para que una persona pueda recibir una herencia, es necesario que tenga capacidad para suceder y que tenga una
vocación hereditaria vigente y no contrariada. La capacidad para suceder ha sido definida como el conjunto de
requisitos que la ley exige para que una persona pueda ser sujeto pasivo de una transmisión por causa de muerte.
El nuevo código no distingue entre capacidad en general y capacidad para suceder. La regla es la capacidad, y por
ende se aplican las normas de la capacidad en general.

El requisito esencial para poder suceder es que la persona llamada a la herencia exista en aquel instante.

El comienzo de la existencia humana ocurre con la concepción (art. 19) y los derechos y obligaciones del concebido o
implantado en la mujer quedan irrevocablemente adquiridos si nace con vida. Si no nace con vida se considera que la
persona nunca existió. De esto se extrae que el que no ha sido concebido al momento de la muerte no existe y por
ello no puede suceder al causante. No está permitida la filiación post mortem porque para someterse a las técnicas
de reproducción humana asistida se requiere el consentimiento libre, previo e informado de ambos.

ARTICULO 2279.-Personas que pueden suceder. Pueden suceder al causante:

a) las personas humanas existentes al momento de su muerte;


b) las concebidas en ese momento que nazcan con vida;
c) las nacidas después de su muerte mediante técnicas de reproducción humana asistida, con los requisitos previstos
en el artículo 561;
d) las personas jurídicas existentes al tiempo de su muerte y las fundaciones creadas por su testamento. Se concede
capacidad para suceder a la fundación que no existe al momento del fallecimiento pero que se crea como
consecuencia de una disposición testamentaria expresa realizada por el causante en su testamento.

2) Vocación sucesoria. Concepto. Fundamentos. Especies. Vocación actual y eventual. Condiciones de eficiencia.
Causas de excusión. Causas limitativas.

La vocación sucesoria es el llamamiento hecho por la ley o por la voluntad del causante a una persona para que
reciba una herencia determinada. La diferencia que existe entre la capacidad para suceder y la vocación hereditaria
es clara, la capacidad para suceder es general, y la vocacion hereditaria es específica para una sucesión en particular.
Una persona existe y por lo tanto tiene capacidad para suceder a cualquiera, pero solo tendrá vocación hereditaria
respecto de una persona determinada cuando cuente con un llamamiento hecho por la ley o por el causante en su
testamento

Fuentes:

- Voluntad del causante expresada en un testamento valido


- Llamamiento que hace la ley a determinados miembros de la familia del fallido.

Vocación actual: llamamiento a heredar la totalidad de los bienes


Vocación eventual: posibilidad de acrecer en base a la universalidad del titular.

Condiciones de eficiencia:

-existencia de la persona al momento de recibir la herencia.


-existencia del sucesor debe ser cierta
-el llamamiento debe subsistir cuando la sucesión se abre.
- es imprescindible que dicha vocación no se encuentre contrariada.

Causas de exclusión:
a) Renuncia a la herencia: la exclusión por voluntad del llamado a suceder se presenta cuando este manifiesta de una
manera expresa su voluntad de no recibir la herencia. La sucesión se defiere como si el renunciante nunca hubiese
sido llamado a la herencia.

b) Indignidad: la exclusión por sentencia judicial tiene lugar cuando ha incurrido en una causal de indignidad

c) Matrimonio in extremis: art. 2436: “la sucesión del cónyuge no tiene lugar si el causante muere dentro de los
treinta días de contraído el matrimonio a consecuencia de enfermedad existente en el momento de la celebración,
conocida por el superstite, y de desenlace fatal previsible, excepto que el matrimonio sea precedido de una unión
convivencial. (p.5 de aquí en adelante).

d) Divorcio: la sola sentencia de divorcio provoca que los cónyuges no se hereden entre sí.

e) Separación de hecho: art.2437: “la separación de hecho sin voluntad de unirse… excluye el derecho hereditario
entre cónyuges”. La separación de hecho se concreta con el cese de la vida en común y la falta de voluntad de unirse
que menciona la norma se concreta cuando al menos uno de los cónyuges no desea continuar con la convivencia.
Cualquiera haya sido la causa por la que dejaron de convivir, ninguno de los cónyuges heredara al otro.

f) Decisión judicial que pone fin a la convivencia: art.2437 “la decisión judicial de cualquier tipo que implica cese de
la convivencia, excluyen el derecho hereditario entre cónyuges”.

g) Matrimonio extranjero ineficaz en el país: la validez de un matrimonio contraído en el extranjero se rige por el
derecho del lugar de la celebración. Es posible sostener que si el matrimonio extranjero se ha celebrado con alguno
de los impedimentos dirimentes que reconoce la ley argentina, no podría producir efectos dentro del país porque se
está afectando el orden publico internacional. Si se pretendiera reclamar la vocación hereditaria por parte del
cónyuge supérstite de un matrimonio extranjero celebrado existiendo estos impedimentos, el juez argentino puede
negar su eficacia y rechazar la pretensión hereditaria.

Causas limitativas:

En el código existen supuestos en que la vocación hereditaria resulta contrariada en forma parcial o más
precisamente, se afecta la vocación sucesoria testamentaria. Esto quiere decir que si una persona se encuentra
imposibilitada de heredar teniendo en cuenta el llamamiento testamentario, esta situación no le impide que pueda
ser llamado por la ley a recibir esa herencia.

La razón que justifica estas restricciones testamentarias se encuentra en que, al tratarse de personas que mantienen
una vinculación especial con el testador, pueden influir sobre las disposiciones que adopte, torciendo su libre
voluntad de expresión.

El art 2482 establece: Personas que no pueden suceder. No pueden suceder por testamento:

a) los tutores y curadores a sus pupilos, si éstos mueren durante la tutela o curatela o antes de ser aprobadas las
cuentas definitivas de la administración;

b) el escribano y los testigos ante quienes se haya otorgado el testamento, por el acto en el cual han intervenido;

c) los ministros de cualquier culto y los líderes o conductores espirituales que hayan asistido al causante en su última
enfermedad

Art. 2483.-Sanción. Las disposiciones testamentarias a favor de personas que no pueden suceder por testamento
son de ningún valor, aun cuando se hagan a nombre de personas interpuestas. Se reputan tales, sin admitir prueba
en contrario, los ascendientes, los descendientes, y el cónyuge o conviviente de la persona impedida de suceder.

El fraude a la ley puede ser probado por cualquier medio.


Los inhábiles para suceder por testamento que se encuentran en posesión de los bienes dejados por el testador son
considerados de mala fe.

3. Indignidad. Concepto. Naturaleza jurídica. Causales: enumeración y análisis. Acción de indignidad. Legitimación.
Efectos. Perdón. Caducidad.

Indignidad:

Puede ser definida como la exclusión de la herencia decretada contra un heredero o legatario por una sentencia
judicial en virtud de una causa legal. La indignidad puede ser decretada tanto respecto del heredero como de un
legatario. Esta sanción civil tiene como basamento un reproche objetivo formulado por el ordenamiento jurídico
hacia determinadas conductas que han sido consideradas disvaliosas porque implican agresiones o menoscabo a la
integridad, a la libertad, al honor, a la salud, a las afecciones o a la memoria del causante. La indignidad debe ser
decretada por sentencia judicial porque esta institución no se aplica de oficio debido a que debe ser demandada
solamente por el legitimado para hacerlo.

Nadie puede ser reputado como indigno aunque la causa se encuentre acreditada si no media acción del interesado
y sentencia condenatoria. La acción de indignidad no puede ser planteada antes del fallecimiento del causante.

Naturaleza jurídica: no se trata de una incapacidad sino de una causa que contraria la vocación sucesoria impidiendo
que el heredero retenga la herencia.

Causales de indignidad:

Art. 2281. Son indignos de suceder:

- Inc. a) los autores, cómplices o participes de delito doloso contra la persona, el honor, la integridad sexual, la
libertad o la propiedad del causante, o de sus descendientes, ascendientes, cónyuge, conviviente o hermanos. Esta
causa de indignidad no se cubre por la extinción de la acción penal ni por la de la pena.

Tiene que haberse tratado de un delito doloso. Abarca tanto a los autores como a los cómplices y también a los
participes. (VER CASO BARREDA).
Antes se requería la condena penal, mientras que ahora el 2281 establece “basta la prueba de que al indigno le es
imputable el hecho lesivo, sin necesidad de condena penal”.
Si no se ha llegado a esa instancia o la sentencia ha sido absolutoria, de cualquier manera el juez civil podría
considerar que el demandado ha incurrido en la causa de indignidad. Todos estos delitos constituyen una afrenta
contra la persona del causante pero también puede haber recaído en otros miembros de la familia del fallecido.

-Inc. b) “los que hayan maltratado gravemente al causante u ofendido”. No se aclara si el maltrato tiene que haber
sido físico o mental por lo que cabe concluir que ambas conductas quedan incluidas.

-Inc. c) “los que hayan acusado o denunciado al causante por un delito penado con prisión o reclusión, excepto que
la víctima del delito sea el acusador o su cónyuge o conviviente, su descendiente, ascendiente o hermano , o haya
obrado en cumplimiento de un deber legal”. No importa el resultado de la acción penal, si ha mediado
sobreseimiento provisional o definitivo, falta de merito, absolución o condena, porque la causa se configura con la
acusación o denuncia.

- Inc. d) “los que omiten la denuncia de la muerte dolosa del causante, dentro de un mes de ocurrida, excepto que
antes de ese término la justicia proceda en razón de otra denuncia o de oficio. Esta causa de indignidad no alcanza a
las personas incapaces ni con capacidad restringida, ni a los descendientes, ascendientes, cónyuge y hermanos del
homicida o de su cómplice”. Lo que sanciona esta causa es que ante el homicidio doloso del causante, su heredero
no ponga en funcionamiento el accionar de la justicia para que se investigue el hecho. El plazo para hacer la
denuncia es de un mes desde que se produjo la muerte sin dar alternativa en caso que el sucesible ignorara esta
circunstancia. Tampoco hay obligación de efectuar la denuncia cuando el autor del homicidio o su cómplice es
descendiente, ascendiente, cónyuge, hermano de quien pretende ser heredero del causante

Inc. e) “los parientes o el cónyuge que no hayan suministrado al causante los alimentos debidos, o no lo hayan
recogido en establecimiento adecuado si no podía valerse por sí mismo”.

Inc. f) “el padre extramatrimonial que no haya reconocido voluntariamente al causante durante su menor edad”

Inc. g) “el padre o la madre del causante que haya sido privado de la responsabilidad parental.

Inc. h) “los que hayan inducido o coartado la voluntad del causante para que otorgue testamento o deje de hacerlo,
o lo modifique, así como los que falsifiquen, alteren, sustraigan, oculten o sustituyan el testamento”. En ambos
supuestos se ha afectado la libre decisión respecto de la disposición de sus bienes para después de su muerte.

Inc. i) “los que hayan incurrido en las demás causales de ingratitud que permiten revocar las donaciones”. La
donación aceptada solo puede ser revocada por inejecución de los cargos, por ingratitud del donatario, y en caso de
habérselo estipulado expresamente, por supernacencia de hijos del donante.

Perdón:

ARTICULO 2282.-Perdón de la indignidad. El perdón del causante hace cesar la indignidad. El testamento en que se
beneficia al indigno, posterior a los hechos de indignidad, comporta el perdón, excepto que se pruebe el
desconocimiento de tales hechos por el testador.

Acción de indignidad:

Al no operar de pleno derecho, la indignidad solo puede ser decretada por una sentencia judicial.

ARTICULO 2283.-Ejercicio de la acción. La exclusión del indigno sólo puede ser demandada después de abierta la
sucesión, a instancia de quien pretende los derechos atribuidos al indigno. También puede oponerla como excepción
el demandado por reducción, colación o petición de herencia.

La acción puede ser dirigida contra los sucesores a título gratuito del indigno y contra sus sucesores particulares a
título oneroso de mala fe. Se considera de mala fe a quien conoce la existencia de la causa de indignidad.

Legitimación activa: al que ocupara el lugar del indigno en la sucesión del causante.

No cualquier interesado podrá demandar la indignidad quedando excluidos los deudores de la sucesión porque
deben abonar su deuda sin que importe quien es el heredero, los acreedores de la sucesión porque su crédito se
satisface con la herencia con total independencia de quienes sean los herederos, los acreedores del heredero,
puesto que el fundamento moral que sustenta la indignidad no permite que sea ejercida por vida de subrogación y
los legatarios porque su derecho se circunscribe a reclamar la entrega del legado a quien sea heredero.

Legitimación pasiva: se puede demandar por indignidad a los herederos y legatarios. También puede accionarse
contra los sucesores a título gratuito del indigno y contra sus sucesores particulares a titulo oneroso de mala fe.

La sentencia que hace lugar a la demanda produce la exclusión del indigno de la herencia del causante. Para hacer
efectiva esta sentencia deberá modificarse la declaratoria de herederos que se hubiese dictado a favor del indigno o
bien dejarse sin efecto la aprobación del testamento en el que hubiera sido instituido y resolverse lo que
corresponda para asignar la calidad de heredero a quien ha vencido en la acción de indignidad.

Caducidad de la indignidad:

Art. 2284: “caduca el derecho de excluir al heredero indigno por el transcurso de tres años desde la apertura de la
sucesión, y al legatario indigno por igual plazo desde la entrega del legado”.
Corren desde el día de la muerte del causante respecto de los herederos y con relación a los legatarios desde que se
hizo entrega del legado.

Efectos:

Art. 2285: “Admitida judicialmente la exclusión, el indigno debe restituir los bienes recibidos, aplicándose lo
dispuesto para el poseedor de mala fe. Debe también pagar intereses de las sumas de dinero recibidas, aunque no
los haya percibido. Los derechos y obligaciones entre el indigno y el causante renacen, así como las garantías que los
aseguraban”.

CASO BARREDA:

Durante el año 2014 se ha dictado sentencia en la causa de indignidad en la causa “FERNANDEZ ARRECHE HUGO
ENRIQUE C/ BARREDA RICARDO ALBERTO S/EXCLUSION DE HERENCIA", por la Dra. Sandra Grahl, titular del Juzgado
Civil y Comercial nº 17 del Departamento Judicial La Plata.

Admite la acción de declaración de indignidad interpuesta contra el ex odontólogo condenado por el homicidio de su
suegra, de su esposa y de sus dos hijas, cometido mediante disparos de arma de fuego en la ciudad de La Plata.
Aduce que si bien por aplicación de los arts. 3304 y 3545 del Código Civil el accionante, quien es primo segundo de
las hijas del demandado, no estaría legitimado para demandar la declaración de indignidad respecto de éstas
últimas, a fin de dar cumplimiento al mandato constitucional -art. 75 inc. de la CN- y garantizar el control de
convencionalidad, corresponde adaptar la normativa interna a la internacional y extender al accionante la
legitimación para demandar la declaración de indignidad respecto de las hijas, a fin de asegurar que ambas mujeres
objeto de violencia tengan acceso efectivo al resarcimiento, reparación u otro medio de compensación justo y eficaz
-art. 7 inc. g de la Convención de Belem do Pará (Convencion Interamricana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la
Violencia contra las mujeres.

Es que, la aplicación restringida de la norma local resultaba injusta y atentatoria del régimen de protección de los
Derechos Humanos de la Mujeres.

En la actualidad, el Código Civil y Comercial permite la legitimación activa del Fisco para accionar por indignidad. Sin
perjuicio de la ponencia anterior, se sugiere la incorporación expresa de una norma que contemple, la exclusión de
pleno derecho de quienes sean pretensos herederos de las personas contra las que han cometido homicidio, cuando
no existan personas que no puedan contraponerles la acción de indignidad.

La redacción que el Código Civil y Comercial brinda al ejercicio de la acción de indignidad, en su artículo 2283,
plantea nuevamente el debate desde otra perspectiva: “La exclusión del indigno sólo puede ser demandada después
de abierta la sucesión, a instancia de quien pretende los derechos atribuidos al indigno…”

Con esta nueva redacción, no importa motivos morales, ni el carácter por el cual el Estado pudiera recibir los bienes.
Si no hay otros herederos que pueda ir contra el indigno, el Fisco es quien pretende los derechos atribuidos al
indigno, y la redacción deja sin argumentos a cualquier postura en contrario.

4) Desheredación. Sistema del CC d Vélez. Críticas a la supresión del instituto.

*art 3744- El heredero forzoso puede ser privado de la legitima que le es concedida, por efecto de la desheredación
por las causas designadas en este título, y no por otras aunque sean mayores.

*art 3745- La causa de la desheredación debe estar expresada en el testamento. La que se haga sin expresión de
causa o por una causa que no sea de las designadas en este título es de ningún efecto.

*art 3746- Los herederos del testador deben probar la cauda de desheredación expresada por él y no otra, aunque
sea una causa legal, si la causa no ha sido probada en vida del testador.
*art 3747- Los ascendientes pueden desheredar a sus descendientes legítimos o naturales por las causas siguientes:

- por injurias de hecho, poniendo el hijo las manos sobre su ascendiente. La simple amenaza no es bastante

- Si el descendiente a atentado contra la vida del ascendiente.

- si el descendiente a acusado criminalmente al ascendiente de delito que merezca pena de 5 años de prisión o de
trabajos forzados.

*art 1748- el descendiente puede desheredar al ascendientes por las dos últimas causas del art. Anterior.

*art1750- La reconciliación posterior entre el ofensor y ofendido quita el derecho a desheredar y deja sin efecto la
desheredación ya hecha.

La supresión de la Desheredación. Criticas.

En los Fundamentos se explica que se procedió a introducir modificaciones a las causales de indignidad sucesoria
para adaptarlas a la denominación de los delitos en el CP, incorporando un nuevo inciso, vinculado a las causales de
la revocación de las donaciones, y entendiendo que esa era una de las soluciones que permitía derogar el régimen
de la desheredación, para evitar una doble regulación para situaciones prácticamente idénticas.
Resulta discutible este razonamiento, pues los efectos de la desheredación nada tienen que ver con la eventual
revocación de donación. Por otra parte, la configuración de la indignidad es muy diferente a la desheredación.
Si se determina que ciertos parientes reciben necesariamente una porción de los bienes del difunto, aun contra la
voluntad de este, se debe admitir también el derecho del testador de excluirlos por justas causas.
La desheredación es un medio más para defender la legitima de los herederos forzosos ya que justamente es por su
intermedio que se evita que adquieran la herencia persona que han realizado actos o conductas abusivas para el
causante.
El testador, al contar con la posibilidad de excluir de su herencia a estos sucesores, no solo “castiga” a aquellos que
los han ofendido, sino que también protege y defiende la herencia de los demás herederos al impedir que aquellas
personas concurran con ellos a ese llamamiento.
Por tal causa, la supresión no fortalece al instituto de la legitima, ya que esta puede terminar derivándose a un
beneficiario que no se la merezca por haber realizado actos contrarios al causante, con lo que hubiera quebrado ese
fundamento de solidaridad familiar, y afecto mutuo que sirve de base a la legitima.
Finalmente, debemos destacar un efecto contradictorio de esta medida:
La supresión de la desheredación no va a favorecer la promoción de la cultura testamentaria que se pretende
sustentar con la disminución de porciones legitimas, ya que la desheredación se realiza precisamente por vía
testamentaria, Por lo que esta reforma no coincide con la idea del ccc de ampliar el campo de libre disposición del
causante.

Indignidad y supresión de la desheredación

Generalmente se estudian juntas porque ambas sancionan el comportamiento ofensivo del llamado a suceder contra
el causante y con ese fin constituyen causas de extinción de la vocación sucesoria. La indignidad es una sanción legal
y la aplica el juez a instancia de parte interesada contra el sucesor que ha incurrido en alguna de las causales
establecidas en la ley, excluyéndolo de la herencia. La desheredación consiste también en la sanción de exclusión de
la herencia, pero esta vez limitada solo a los herederos forzosos y dispuesta por el causante en su testamento, por el
agravio que aquel le ha inferido, configurativo de alguna de las causales previstas en la ley.

•En cuanto a la sanción de indignidad el nuevo Código amplía considerablemente el elenco de causales (art. 2281),
conforme lo venía reclamando la doctrina y lo propusieron los anteriores Proyectos de reforma del Código Civil.
Además se aclaran y precisan numerosas cuestiones, algunas hoy controvertidas:

a) La indignidad sólo puede ser demandada después de la muerte del causante. Legitimados activos son aquellos
sucesores que pretenden los derechos atribuidos al indigno, y también puede oponerla como excepción el
demandado por reducción, colación o petición de herencia (art. 2283, 1° párr).
Legitimados pasivos, además del indigno, también pueden serlo sus sucesores a título gratuito, y sus sucesores
particulares a título oneroso de mala fe (art. 2283, 3° párr). Ya no se exige el “concierto fraudulento” del art. 3310, y
el nuevo Código considera de mala fe a quien conoce la existencia de la causa de indignidad (art. 2283).

b) Respecto de todas las causales, basta la prueba de que al indigno le sea imputable el hecho lesivo, sin necesidad
de condena penal (art. 2281, último párr).

c) Caducidad: El perdón del causante hace cesar la indignidad (art. 2282). Desaparece la exigencia de que deba ser
expresado por testamento, como lo disponía el antiguo art. 3297, y, en rigor, toda exigencia formal, por lo cual el
perdón puede ser incluso verbal, como lo venía proponiendo la doctrina y los anteriores Proyectos (Anteproyecto
Bibiloni, art. 1900; Proyecto de 1936, art. 1902, inc,. 1°, Anteproyecto de 1954, art. 649, último párr; Proyecto de
1998, art. 2232). Pero el juez deberá ser muy cuidadoso al apreciar la prueba en estos casos, la cual debe ser
inequívoca en cuanto a la existencia del perdón.

Agrega también el art. 2282 que el beneficio testamentario al indigno posterior al hecho, comporta el perdón,
excepto que se pruebe el desconocimiento del hecho por el testador (art. 2282). También caduca la acción para los
herederos a los tres años desde la apertura de la sucesión, y respecto del legatario indigno, por igual plazo desde la
entrega del legado. No obstante, el demandado por el indigno por reducción, colación o petición de herencia puede
oponer la indignidad en todo tiempo (art. 2284).

De tal modo, concluye este artículo el debate que existía sobre la interpretación del art. art. 3298 DE derogado
codigo, que disponía la caducidad de la acción de indignidad por la “posesión de la herencia o legado” por más de
tres años. ¿Se trataba de la posesión hereditaria o de la posesión material de los bienes? La duda se terminó con la
solución categórica del CCC: para todos los herederos, hayan obtenido o no declaratoria de herederos o auto
aprobatorio de testamento, estén o no en posesión material de los bienes, la acción caduca a los tres años desde la
apertura de la sucesión.

d) Decretada judicialmente la indignidad, el indigno debe restituir los bienes recibidos, considerándolo poseedor de
mala fe. Debe los intereses de las sumas de dinero, aunque no los hubiese percibido (art.2285).

•Respecto a la desheredación como ya dijimos, el Código Civil y Comercial la suprime.

Sigue al Anteproyecto Bibiloni, al Proyecto de 1936, y a la minoritaria tendencia legislativa que sólo deja subsistente
el instituto de la indignidad sucesoria, con el argumento de que ésta por ser más amplia, permite abarcar todos los
supuestos de la primera (códigos civiles francés, italiano y venezolano).

En los fundamentos se expresa que suprime la desheredación para evitar que con la indignidad se produzca “una
doble regulación para situaciones prácticamente idénticas”. No es exacto y por ello no nos parece acertada esta
política legislativa.

En efecto, si se mantiene la regulación de las legítimas, la desheredación prevista como sanción para el heredero
forzoso que ofendió gravemente al causante, es un instrumento complementario y necesario, por razones de
estricta justicia. Pues si la ley imperativamente le asigna un heredero al causante, es justo que éste en vida tenga el
medio de excluirlo si ha sido agraviado por aquel.

Sin embargo, con la solución del ccc, no lo podrá hacer, y la indignidad no le remedia la cuestión, puesto que quien
podrá ejercer la acción es el sucesor a quien le pueda interesar desplazar al indigno, y no el ofendido, o sea el propio
causante, que es el único que puede medir con justeza la gravedad de la ofensa. Lo que sucederá, como observa
atinadamente Azpiri, es que ante el agravio sufrido, el causante buscará por todos los medios eludir la imperatividad
de la legítima, para que al fallecer quien lo ofendió no encuentre bienes en la herencia. Otra razón para mantener la
desheredación es que fortifica la autoridad del causante, y por ello frente a la situación actual de una mayor
prolongación de la vida de los seres humanos se habría debido vigorizar la institución en lugar de suprimirla, porque
es un modo más eficaz de proteger a la personas de la tercera edad y de brindarles una posibilidad de que se respete
su dignidad y sus sentimientos.

Por ello, la regulación autónoma de la desheredación es el régimen predominante en las legislaciones que
mantienen el sistema de legítimas (códigos alemán, portugués, español, suizo, brasileño, colombiano, ecuatoriano,
chileno, peruano, paraguayo, uruguayo), la mantuvo el Anteproyecto de 1954 y el Proyecto de la Comisión Federal
aprobado en Diputados en 1993, y es el criterio predominante de la doctrina argentina (Borda, Méndez Costa,
Zannoni, Pérez Lasala, Perrino, Ferrer, Natale, Azpiri, Wilde, Jornadas Nacionales de Derecho Civil de Córdoba, 2009
y Tucumán, 2011 –por unanimidad-). Nos parece disvalioso, por lo tanto, que el nuevo Código se haya apartado de
esta tendencia sin fundamentos claramente definidos.
BOLILLA XVIII: DERECHO DE OPCION. ACEPTACION Y RENUNCIA.

1) Derecho de opción del heredero. Concepto. Fundamento. Capacidad. etcetcetc

Aceptacion y renuncia de la herencia:

En nuestra legislación no está permitido realizar actos jurídicos sobre la posible herencia de una persona que todavía
este viva. Recién con el fallecimiento se abre la posibilidad de expedirse sobre esa herencia. Por ese motivo, el art
2286 ha dispuesto “las herencias futuras no pueden ser aceptadas ni renunciadas”.

Ejercicio del derecho de opción.

Las modificaciones más importantes en este capítulo son las siguientes: el plazo para optar entre la aceptación y la
renuncia se reduce de veinte a diez años desde la muerte del causante (art. 2288). El que no se pronuncia en ese
plazo queda como renunciante. Los terceros interesados, transcurridos nueve días de la muerte del causante,
pueden solicitar judicialmente la intimación al heredero para que opte por la aceptación o renuncia, en un plazo no
menor de un mes ni mayor de tres meses, renovable una sola vez. Vencido el plazo si no se pronuncia queda como
aceptante (art. 2289).
Con estas normas se aclaran temas ampliamente debatidos en razón de la insuficiente reglamentación de los arts.
3313 y 3314 del Código de Vélez Sarsfield. Si el heredero fallece sin optar, transmite a sus herederos ese derecho
(art. 2290)

Es la facultad que tiene el sucesible de elegir entre la aceptación o la renuncia de una herencia determinada. En
realidad al llamado a suceder se le presenta una tercera alternativa, ya que además de aceptar o repudiar la
herencia puede guardar silencio.

ARTICULO 2287.-Libertad de aceptar o renunciar. Todo heredero puede aceptar la herencia que le es deferida o
renunciarla, pero no puede hacerlo por una parte de la herencia ni sujetar su opción a modalidades. La aceptación
parcial implica la del todo; la aceptación bajo modalidades se tiene por no hecha.

ARTICULO 2288.-Caducidad del derecho de opción. El derecho de aceptar la herencia caduca a los diez años de la
apertura de la sucesión. El heredero que no la haya aceptado en ese plazo es tenido por renunciante.
El plazo para las personas llamadas a suceder en defecto de un heredero preferente que acepta la herencia y luego
es excluido de ésta, corre a partir de la exclusión.

ARTICULO 2289.-Intimación a aceptar o renunciar. Cualquier interesado puede solicitar judicialmente que el
heredero sea intimado a aceptar o renunciar la herencia en un plazo no menor de un mes ni mayor de tres meses,
renovable una sola vez por justa causa. Transcurrido el plazo sin haber respondido la intimación, se lo tiene por
aceptante.

La intimación no puede ser hecha hasta pasados nueve días de la muerte del causante, sin perjuicio de que los
interesados soliciten las medidas necesarias para resguardar sus derechos.

Si el heredero ha sido instituido bajo condición suspensiva, la intimación sólo puede hacerse una vez cumplida la
condición.

Fundamento:

El fundamento del derecho de opción esta dado porque el llamado a suceder no se encuentra obligado a recibir la
herencia, contando siempre con la posibilidad de desprenderse de ella mediante la renuncia. Al no existir en nuestra
legislación los herederos necesarios, debe reconocerse siempre la facultad de elegir entre la aceptación o la renuncia
de la herencia.

Plazo, solución en caso de silencio: el derecho de aceptar la herencia caduca a los diez años de la apertura de la
sucesión. El heredero que no haya aceptado en ese plazo, se tiene por renunciante.
Transmisibilidad del derecho de opción: el derecho de opción es transmisible por causa de muerte. Ante el
fallecimiento de una persona, si muere su sucesible sin haberse expedido, los herederos de este tendrán el derecho
de optar respecto de la primera herencia.

Art. 2290: “si el heredero fallece sin haber aceptado ni renunciado la herencia, el derecho de hacerlo se transmite a
sus herederos. Si estos no se ponen de acuerdo en aceptar o renunciar la herencia deferida a su causante, los que la
aceptan adquieren la totalidad de los derechos y obligaciones que corresponden a este. La renuncia de la herencia
del causante fallecido sin aceptar ni renunciar una herencia a él deferida, implica también la renuncia a esta”.
Si se renuncia a la herencia del causante, no se puede aceptar la herencia que se le había transmitido.

Efecto retroactivo de la opción: cuando se ha aceptado o cuando han transcurrido los diez años de la muerte sin
haberse expedido se considera que ha sido aceptante o renunciante desde la apertura de la sucesión.
Art. 2291 “el ejercicio del derecho de opción tiene efecto retroactivo al día de la apertura de la sucesión”.

2) Caducidad de la aceptacion. Situación que acaece…… etc

ARTICULO 2288.-Caducidad del derecho de opción. El derecho de aceptar la herencia caduca a los diez años de la
apertura de la sucesión. El heredero que no la haya aceptado en ese plazo es tenido por renunciante.

El plazo para las personas llamadas a suceder en defecto de un heredero preferente que acepta la herencia y luego
es excluido de ésta, corre a partir de la exclusión.

Derechos de los terceros interesados:

Puede haber interesados en conocer si el llamado a suceder va a aceptar o renunciar a la herencia y el plazo es de
diez años, por lo que no resulta atinado que deban esperar pacientemente el transcurso de ese lapso para saber la
situación en la que aquel quedará. Por ese motivo el art. 2289 ha contemplado este caso:

“cualquier interesado puede solicitar judicialmente que el heredero sea intimado a aceptar o renunciar la herencia
en un plazo no menor de un mes ni mayor a tres meses, renovable una sola vez por justa causa. Transcurrido el
plazo sin haber respondido la intimación, se lo tiene por aceptante. La intimación no puede ser hacha hasta
pasados nueve días de la muerte del causante, sin perjuicio de que los interesados soliciten las medidas necesarias
para resguardar sus derechos. Si el heredero ha sido instituido bajo condición suspensiva, la intimación solo puede
hacerse una vez cumplida la condición”.

Dentro de la expresión” cualquier interesado” deben considerarse incluidos los acreedores del causante porque
necesitan saber a quién reclamarle su crédito, también los legatarios porque tienen el derecho a requerir al
heredero que se cumpla con su legado, los coherederos porque su situación frente a la herencia depende de la
aceptación o renuncia de los otros llamados en igual grado y los acreedores del heredero porque podrían subrogarse
en su derecho cuando se trata de una herencia solvente.
Este interesado debe presentarse judicialmente para que se proceda a realizar la intimación. El plazo que debe fijar
el juez no debe ser menor de un mes ni mayor de tres meses. En caso de guardar silencio al vencimiento del plazo, se
lo tiene por aceptante porque tuvo la oportunidad expresa de renunciar y no lo hizo.

3) Aceptación de la herencia. Concepto. Fundamento. Caracteres. Capacidad. Especies. Formas. Supuestos de


aceptación tácita y forzada. Efectos. Actos que no implican aceptación…. etc

Aceptación de la herencia:

Es el acto voluntario lícito por el cual una persona llamada a suceder asume de manera irrevocable los derechos y
obligaciones que corresponden a la calidad de heredero.
A través de la aceptación se asume la calidad de heredero y no se adquiere porque la aceptación tiene efecto
retroactivo a la fecha del fallecimiento que es el momento en que se transmiten los derechos y las obligaciones que
componen la herencia. Lo que se produce con la aceptación es la consolidación de la calidad de heredero del
llamado a suceder.
La aceptación es irrevocable.
La asunción de los derechos y obligaciones que corresponden a la calidad de heredero debe ser total, ya que esta
situación es indivisible. No se admite que pueda ser aceptante respecto de unos bienes y renunciante de los otros.

Fundamento:
El fundamento de la aceptación se encuentra en la necesidad de otorgar seguridad juridica a la transmision
hereditaria, al consolidar en cabeza del heredero la titularidad de los derechos y obligaciones transferidos.

Capacidad para aceptar la herencia y situaciones especiales: no hay norma específica que establezca la capacidad
necesaria para aceptar una herencia.
Debe diferenciarse la capacidad para recibir una herencia (es suficiente existir al tiempo del fallecimiento), de la
capacidad para aceptarla (se tiene que encontrar en condiciones de ejercer por si mismo ese derecho)

Especies de la aceptación:

En el código de Vélez la aceptación de la herencia podía ser simple o bajo beneficio de inventario. La reforma se
refiere solo a la aceptación sin efectuar diferenciaciones.

Formas de la aceptación:

Art. 2293 “la aceptación de la herencia puede ser expresa o tacita. Es expresa cuando el heredero toma la calidad de
tal en un acto otorgado por instrumento público o privado; es tácita si otorga un acto que supone necesariamente su
intención de aceptar y que no puede haber realizado sino en calidad de heredero”.

La manifestación por escrito en la que se asume la calidad de heredero implica la aceptación expresa de la herencia.
La aceptación tacita se infiere de la naturaleza del acto llevado a cabo por el sucesible y se supedita a que surja de
ese acto la intención de aceptar y a que solo lo podía haber efectuado en la condición de heredero.

ARTICULO 2294.-Actos que implican aceptación. Implican aceptación de la herencia:


a) la iniciación del juicio sucesorio del causante o la presentación en un juicio en el cual se pretende la calidad de
heredero o derechos derivados de tal calidad;
b) la disposición a título oneroso o gratuito de un bien o el ejercicio de actos posesorios sobre él;
c) la ocupación o habitación de inmuebles de los que el causante era dueño o condómino después de transcurrido un
año del deceso;
d) el hecho de no oponer la falta de aceptación de la herencia en caso de haber sido demandado en calidad de
heredero;
e) la cesión de los derechos hereditarios, sea a título oneroso o gratuito;
f) la renuncia de la herencia en favor de alguno o algunos de sus herederos, aunque sea gratuita;
g) la renuncia de la herencia por un precio, aunque sea en favor de todos sus coherederos.

Aceptación forzada de la herencia: se ha definido la aceptación de la herencia como un acto voluntario, pero al
mismo tiempo se hizo la salvedad de un caso en que la calidad de aceptante era impuesta como sanción.

Ello tiene lugar cuando se presentan las condiciones establecidas en el art. 2295 “el heredero que oculta o sustrae
bienes de la herencia es considerado aceptante con responsabilidad ilimitada, pierde el derecho de renunciar, y no
tiene parte alguna en aquello que ha sido objeto de su ocultamiento o sustracción. En el supuesto de que no pueda
restituir la cosa, debe restituir su valor, estimado al momento de su restitución.

Actos que no implican aceptación:


ARTICULO 2296.-Actos que no implica
n aceptación. No implican aceptación de la herencia:

a) los actos puramente conservatorios, de supervisión o de administración provisional, así como los que resultan
necesarios por circunstancias excepcionales y son ejecutados en interés de la sucesión;
b) el pago de los gastos funerarios y de la última enfermedad, los impuestos adeudados por el difunto, los alquileres
y otras deudas cuyo pago es urgente;
c) el reparto de ropas, documentos personales, condecoraciones y diplomas del difunto, recuerdos de familia, hecho
con el acuerdo de todos los herederos;
d) el cobro de las rentas de los bienes de la herencia, si se emplean en los pagos a que se refiere el inciso b) o se
depositan en poder de un escribano;
e) la venta de bienes perecederos efectuada antes de la designación del administrador, si se da al precio el destino
dispuesto en el inciso d) de este artículo; en caso de no poderse hallar comprador en tiempo útil, su donación a
entidades de asistencia social o su reparto entre todos los herederos;
f) la venta de bienes cuya conservación es dispendiosa o son susceptibles de desvalorizarse rápidamente, si se da al
precio el destino dispuesto en el inciso d).

En los tres últimos casos, el que ha percibido las rentas o el precio de las ventas queda sujeto a las obligaciones y
responsabilidad del administrador de bienes ajenos.

Aceptación por persona incapaz o con capacidad restringida.

La aceptación de la herencia por representante legal de una persona incapaz nunca puede obligar a éste al pago de
las deudas de la sucesión más allá del valor de los bienes que le sean atribuidos.
Igual regla se aplica a la aceptación de la herencia por una persona con capacidad restringida, aunque haya actuado
con asistencia, o por su representante legal o convencional.

5) Renuncia a la herencia. Concepto. Caracteres ….

Es el acto expreso mediante el cual una persona llamada a suceder manifiesta su voluntad de no ser heredera.
Se trata de un acto jurídico porque tiene por fin extinguir derechos.
Es un acto unilateral porque se perfecciona con la sola voluntad del renunciante, sin que se requiera que la renuncia
sea aceptada.
Debe ser expresa porque contraria el llamamiento deferido por la ley o por la voluntad del causante, y por ello, no es
posible presumir la intención de renunciar.
Sin embargo puede inferirse que hay una renuncia tacita cuando el sucesivo guarda silencio durante diez años sobre
la herencia que le ha sido deferida.
Como luego de la renuncia se considera que el renunciante nunca tuvo un llamamiento a la herencia, tiene efectos
retroactivos a la fecha de la apertura de la sucesión.

ARTICULO 2298.-Facultad de renunciar. El heredero puede renunciar a la herencia en tanto no haya mediado acto de
aceptación.

Forma de la renuncia: art. 2299 “la renuncia de la herencia debe ser expresada en escritura pública, también puede
ser hecha en acta judicial incorporada al expediente judicial, siempre que el sistema informático asegure la
inalterabilidad del instrumento”.

Retractación de la renuncia: la renuncia puede ser dejada sin efecto por la sola voluntad del renunciante, quedando
emplazado como aceptante.

ARTICULO 2300.-Retractación de la renuncia. El heredero renunciante puede retractar su renuncia en tanto no haya
caducado su derecho de opción, si la herencia no ha sido aceptada por otros herederos ni se ha puesto al Estado en
posesión de los bienes. La retractación no afecta los derechos adquiridos por terceros sobre los bienes de la
herencia.

Efectos de la renuncia:

ARTICULO 2301.-Efectos de la renuncia. El heredero renunciante es considerado como si nunca hubiese sido llamado
a la herencia, sin perjuicio de la apertura del derecho de representación en los casos en que por este Código tiene
lugar.

Si hay coherederos del renunciante estos verán acrecida su porción hereditaria y si fueran llamados herederos de un
grado posterior, verán actualizado su derecho a la herencia.

Acción de los acreedores del renunciante:


ARTICULO 2292.-Acción de los acreedores del heredero. Si el heredero renuncia a la herencia en perjuicio de sus
acreedores, éstos pueden hacerse autorizar judicialmente para aceptarla en su nombre.

En tal caso, la aceptación sólo tiene lugar a favor de los acreedores que la formulan y hasta la concurrencia del
monto de sus créditos.
BOLILLA XIX: RESPONSABILIDAD DE LOS SUCESORES.

1) Responsabilidad del heredero

Desaparece en el nuevo código la tradicional denominación de “beneficio de inventario”, pero se mantiene


sustancialmente el mismo régimen legal, con algunas modificaciones:
la aceptación de la herencia, como regla general, siempre genera la responsabilidad limitada del heredero por las
deudas del causante a los bienes de la herencia, y si los enajena deberá su valor(art. 2280 y 2317), como ocurria con
la norma que presumia hecha bajo beneficio de inventario toda aceptación de herencia (art. 3363 derogado Código
Civil), pero también el heredero puede perder la limitación de su responsabilidad si incurre en ciertos
comportamientos u omisiones, precisados en el art. 2321, y entonces pasa a responder con sus bienes personales
por el pasivo hereditario.
De acuerdo al art. 2280 último párrafo, la responsabilidad del heredero es, como regla, cum viribus hereditaris, es
decir con los mismos bienes de la herencia, y sólo se convierte en pro viribus en el supuesto que los bienes
hereditarios hayan sido enajenados.
Otras dos normas presuponen que la directa garantía patrimonial de los acreedores sucesorios está constituida por
los bienes hereditarios: dichos acreedores tiene preferencia sobre tales bienes en relación a los acreedores
personales de los herederos (art. 2316), y además pueden oponerse a la entrega de los mismos hasta que aquellos
les paguen sus créditos o legados (art. 2359).
De allí que entre las funciones del administrador judicial de la herencia, está la de promover la realización de los
bienes hereditarios para pagar las deudas y legados (art. 2353).
De acuerdo al art. 2321, el heredero pierde la limitación de su responsabilidad, y responde con sus propios bienes
por el pago de las deudas del causante y por las cargas de la herencia, en los siguientes casos, que implican poner en
riesgo la garantía patrimonial de los acreedores:
a) cuando no hace el inventario en plazo de tres meses desde que los acreedores o legatarios lo intimaron
judicialmente a su realización;
b) si oculta fraudulentamente los bienes de la sucesión omitiendo su inclusión en el inventario;
c) exagera dolosamente el pasivo sucesorio;
d) enajena bienes de la sucesión, excepto que el acto sea conveniente y el precio obtenido ingrese a la masa.

La pérdida de la responsabilidad limitada no es automática, los interesados deben promover el incidente sobre
caducidad de la misma. Una vez declarada, se confunden lo patrimonios y la responsabilidad del heredero pasa a ser
ilimitada, respondiendo con sus propios bienes por el pasivo hereditario.

En el supuesto de concurrencia de acreedores sucesorios y acreedores del heredero sobre bienes personales del
heredero, la cuestión se resuelve así (art. 2322): a) por los créditos anteriores a la apertura de la sucesión, los
acreedores del heredero cobran con preferencia a los acreedores y legatarios de la sucesión; b) por los créditos
posteriores, concurren a prorrata con los acreedores del causante.

Se suscita una duda respecto a la situación del heredero frente a los legatarios particulares cuando ha perdido la
limitación de su responsabilidad: de acuerdo al art. 2321 el heredero responde con sus propios bienes sólo frente a
los acreedores del causante y acreedores por cargas de la sucesión, pues no menciona a los legatarios. Pero el inciso
a) del art. 2322 establece la preferencia de los acreedores personales de los herederos, por deudas anteriores a la
apertura de la sucesión, con respecto a los acreedores del causante y legatarios de la sucesión, con respecto a los
bienes personales del heredero, con lo que pareciera que estos legatarios podrían agredir dichos bienes personales.
Pero el inc. b) de dicho artículo, ya no menciona ni a los legatarios ni a los acreedores por cargas de la sucesión.

Ante esta desprolijidad, entendemos que debe prevalecer la regla sentada en el art. 2321: el heredero responde con
sus propios bienes sólo frente a los acreedores del causante y acreedores por cargas de la herencia, pues ambas
clases son acreedores de la sucesión.

(TODO JUNTO, PURO CODIGO)

ARTICULO 2316.-Preferencia. Los acreedores por deudas del causante y por cargas de la sucesión, y los legatarios
tienen derecho al cobro de sus créditos y legados sobre los bienes de la herencia, con preferencia sobre los
acreedores de los herederos.
El fundamento de esta preferencia se encuentra en que el acreedor que contrato con el causante tuvo en cuenta su
solvencia para concederé el crédito y esta situación de hecho no puede resultar agravada por la muerte del deudor
cuando su heredero es insolvente y sus propios acreedores pretenden ejecutar bienes hereditarios.
Esta preferencia puede ser requerida por los acreedores de causante, por los acreedores por cargas de la sucesión y
por los legatarios.
Las cargas de la sucesión son deudas que se han originado como consecuencia de fallecimiento del causante como
los gastos funerarios, y los que corresponden a la conservación, liquidación y división de los derechos respectivos,
inventarios, tasaciones, etc.
A ellos deben agregarse los gastos que se devenguen como consecuencia de la tramitación del juicio sucesorio como
la publicación de edictos, los honorarios de protocolización del testamento ológrafo, los honorarios del
administrador, del inventariador, del tasador, de los profesionales intervinientes, del partidor, del albacea, etc.
Los legatarios también gozan del derecho de cobro preferente.

La preferencia se ejerce respecto de los acreedores personales del heredero y no tiene trascendencia si estos gozan
de un crédito privilegiado o no, porque esa situación no los coloca en una mejoR situación con relación a los bienes
de la herencia.
La preferencia recae sobre los bienes que componen la herencia del causante.

Queda claro que este derecho no podrá ejercerse en la medida en que se hubieran confundido los bienes
hereditarios con los bienes personales del heredero, ya que esta imposibilidad de identificar su origen extingue la
posibilidad de ejercer la preferencia.
La preferencia se otorga solo a favor de quien la ha solicitado.

Si se han satisfecho los créditos contra el causante, los que correspondan a las cargas de la sucesión y los legados, el
resto de los bienes se incorpora al patrimonio de los herederos y sus acreedores podrán cobrar no solo sobre sus
bienes personales, sino también sobre los que ha recibido po herencia.

 ARTICULO 2317.-Responsabilidad del heredero. El heredero queda obligado por las deudas y legados de la sucesión
sólo hasta la concurrencia del valor de los bienes hereditarios recibidos. En caso de pluralidad de herederos, éstos
responden con la masa hereditaria indivisa.

ARTICULO 2318.-Legado de universalidad. Si el legado es de una universalidad de bienes y deudas, el legatario sólo
queda obligado al pago de las deudas comprendidas en aquélla hasta el valor de los bienes recibidos, sin perjuicio de
la acción subsidiaria de los acreedores contra los herederos y los otros legatarios en caso de insuficiencia de los
bienes de la universalidad.

Preferencia de los acreedores sobre los legatarios: primero cobran los acreedores de causante y luego los legatarios.

ARTICULO 2319.-Acción contra los legatarios. Los acreedores del causante tienen acción contra los legatarios hasta el
valor de lo que reciben; esta acción caduca al año contado desde el día en que cobran sus legados.

Como el objeto del legado forma parte de la herencia, cuando se ha entregado al legatario antes d que fuera saldado
un crédito contra el causante, el acreedor tiene esta acción contra el legatario para cobrarse con el bien legado o con
su valor.
Nunca podrá el acreedor pretender el cobro sobre bienes personales del legatario ya que su responsabilidad se
limita al valor del objeto legado.
La acción del acreedor del causante contra el legatario caduca al año de haberse cumplido con el legado porque su
inacción durante ese lapso consolida la propiedad del legado en cabeza del legatario.

6) Reembolso: Artículo 2320: El heredero o legatario que paga una porción de las deudas o de los legados superior a
su parte tiene acción contra sus coherederos o colegatarios por el reembolso del excedente, y hasta el límite de la
parte que cada uno de ellos debía soportar personalmente, incluso en caso de subrogación en los derechos del que
recibe el pago.

Responsabilidad con los propios bienes: Artículo 2321: Responde con sus propios bienes por el pago de las deudas
del causante y cargas de la herencia, el heredero que:
a) no hace el inventario en el plazo de tres meses desde que los acreedores o legatarios lo intimanvjudicialmente a
su realización;
b) oculta fraudulentamente los bienes de la sucesión omitiendo su inclusión en el inventario;
c) exagera dolosamente el pasivo sucesorio;
d) enajena bienes de la sucesión, excepto que el acto sea conveniente y el precio obtenido ingrese a la masa.

Prioridad de los acreedores del heredero sobre los bienes del heredero:

ARTICULO 2322.-En los casos previstos en el artículo 2321, sobre los bienes del heredero, los acreedores del
heredero cobran según el siguiente rango:

a) por los créditos originados antes de la apertura de la sucesión, con preferencia respecto de los acreedores del
causante y de los legatarios;
b) por créditos originados después de la apertura de la sucesión concurren a prorrata con los acreedores del
causante.
BOLILLAXX: PROCESO SUCESORIO E INVESTIDURA DE PLENO DERECHO.

1) Proceso sucesorio. Objeto.

Cuando se inicia el juicio sucesorio, la primera resolución ordena inscribir el proceso en el registro de juicios
universales, y la constancia que expida el registro informará si ya hay otros procesos de la misma persona iniciados
ante otro juzgado de la misma jurisdicción. Si se presenta este caso, resultara imprescindible proceder a la
acumulación de los expedientes.
Dentro de los caracteres del proceso sucesorio se puede señalar que se trata de un juicio voluntario.
Se trata de un proceso universal porque tiene por fin trasmitir la herencia considerada como una universalidad de
bienes.

A los fines arancelarios, el juicio se divide en tres etapas:

1 - la apertura del proceso sucesorio,


2- la declaratoria de herederos o la aprobación formal del testamento, y
3) las inscripciones de los bienes a nombre de los herederos o legatarios

Hay que distinguir el juicio sucesorio intestado del testamentario. En ambos, quien solicita la apertura de proceso
deberá justificar su carácter de parte legítima y acompañar la partida de defunción del causante. Si este hubiere
hecho testamento y el solicitante conociere su existencia, deberá presentarlo cuando estuviese en su poder o indicar
el lugar donde se encontrase, si lo supiere. Cuando le causante hubiese fallecido sin haber testado, deberá
denunciarse el nombre y domicilio de los herederos o representantes legales conocidos.
La calidad de parte legítima se acreditara acompañando las partidas que prueben el vínculo jurídico familiar
existente con el causante.

ARTICULO 2335.-Objeto. El proceso sucesorio tiene por objeto identificar a los sucesores, determinar el contenido de
la herencia, cobrar los créditos, pagar las deudas, legados y cargas, rendir cuentas y entregar los bienes.

2) Juez Competente. Etc

Jurisdiccion:
La jurisdicción sobre la sucesión corresponde a los jueces del lugar del último domicilio del difunto. El domicilio que
tenia el difunto determina el lugar en que se abre su sucesión.

Para la deteriminacion del ultimo domicilio hay que tomar como regla el articulo 73:

ARTICULO 73.-Domicilio real. La persona humana tiene domicilio real en el lugar de su residencia habitual.
Si ejerce actividad profesional o económica lo tiene en el lugar donde la desempeña para el cumplimiento de las
obligaciones emergentes de dicha actividad.

Debe recordarse que el domicilio requiere de dos elementos: por una parte el hecho de la residencia en un lugar
determinado, y por la otra, el elemento intencional de hacer de ese lugar un asiento estable.
La competencia territorial estara dada por el ultimo domicilio, y si el causante falleciese fuera de el, a los efectos de
promover el juicio sucesorio, sera necesario demostrar, a traves de una informacion sumaria, que el traslado fue
accidental o transitorio, y que no tenia el proposito de modificar su domicilio.
Dentro de una misma provincia se puede odificar la competencia territoria, es decir, que el juicio puede tramitar
ante los jueces de un departamento judicial distinto al que corresponde al ultimo domicilio, pero siempre dentro del
mismo abito provincial.
La competencia en razon de la materia, es inmodificable por voluntad de los herederos y corresponde a la ley en
cada jurisdiccion determinar cuales son los jueces que entenderan en el proceso sucesorio.
Cuando el ultimo domicilio se encuentra en el extranjero y hay bienes en el pais, no hay norma que determine la
competencia territorial, el proceso debera promoverse ante el juez del lugar donde se encuentren los bienes , y si
estos estan en jurisdicciones distintas en algunos casos se ha resuelto que la competencia se determina por el lugar
donde se encuentren los bienes mas valiosos, y en otros casos, ha prevalecido el proceso que primero se inicio.
ARTICULO 2336.-Competencia. La competencia para entender en el juicio sucesorio corresponde al juez del último
domicilio del causante, sin perjuicio de lo dispuesto en la Sección 9a, Capítulo 3, Título IV del Libro Sexto.
El mismo juez conoce de las acciones de petición de herencia, nulidad de testamento, de los demás litigios que
tienen lugar con motivo de la administración y liquidación de la herencia, de la ejecución de las disposiciones
testamentarias, del mantenimiento de la indivisión, de las operaciones de partición, de la garantía de los lotes entre
los copartícipes y de la reforma y nulidad de la partición.
Si el causante deja sólo un heredero, las acciones personales de los acreedores del causante pueden dirigirse, a su
opción, ante el juez del último domicilio del causante o ante el que corresponde al domicilio del heredero único.

Fuero de atraccion, alcances: todo tramita ante el mismo juez para que no haya sentencias contradictorias.

Prórroga de jurisdicción: si todos los herederos están de acuerdo, pueden pedir la prórroga de jurisdicción.

3) Investidura de la calidad de heredero. Facult….

Investidura de la calidad de heredero:

Es el reconocimiento público del título de heredero que se puede lograr: de pleno derecho, o por decisión judicial. La
institución tiene un fin publicitario incuestionable.

Investidura de pleno derecho: se adquiere por el solo fallecimiento del causante.

ARTICULO 2337.-Investidura de pleno derecho. Si la sucesión tiene lugar entre ascendientes, descendientes y
cónyuge, el heredero queda investido de su calidad de tal desde el día de la muerte del causante, sin ninguna
formalidad o intervención de los jueces, aunque ignore la apertura de la sucesión y su llamamiento a la herencia.
Puede ejercer todas las acciones transmisibles que correspondían al causante. No obstante, a los fines de la
transferencia de los bienes registrables, su investidura debe ser reconocida mediante la declaratoria judicial de
herederos.

ARTICULO 2338.-Facultades judiciales. En la sucesión de los colaterales, corresponde al juez del juicio sucesorio
investir a los herederos de su carácter de tales, previa justificación del fallecimiento del causante y del título
hereditario invocado. En las sucesiones testamentarias, la investidura resulta de la declaración de validez formal del
testamento, excepto para los herederos enumerados en el primer párrafo del artículo 2337.

En la sucesión de los colaterales hasta el cuarto grado, la investidura corresponde al juez En las sucesiones
testamentarias, la investidura resulta de la validez formal del testamento. En las sucesiones sin testamento, la
investidura es “por declaratoria de herederos”, en las testamentarias por la “declaración de validez formal del
testamento”.

5) Proceso ab-intestato. La declaratoria de herederos. Concepto e importancia. Diligencias previas. Trámites.


Forma. Declaración de validez formal del testamento. Relación con la investidura de la calidad de heredero.

La declaratoria de herederos: es la resolución judicial mediante la cual se reconoce la condición de herederos


llamados por la ley. Resulta imprescindible lograr la declaratoria de herederos a favor de quienes ostentan la
posesión hereditaria de pleno derecho cuando han quedado bienes inmuebles o muebles registrables para proceder
a la registración de los bienes a nombre de los nuevos titulares.

Diligencias previas: Para la promoción del juicio sucesorio intestado es necesario acreditar el fallecimiento real o
presunto del causante. Deberá acompañarse el acta de defunción y copia de la sentencia que declara la muerte
presunta o su desaparición forzada. Deberá, además, demostrarse la legitimación para promoverlo, estando ésta en
cabeza de los miembros de la familia llamados por la ley a recibir la herencia.

ARTICULO 2340:.-Sucesión intestada. Si no hay testamento, o éste no dispone de la totalidad de los bienes, el
interesado debe expresar si el derecho que pretende es exclusivo, o si concurren otros herederos.
Justificado el fallecimiento, se notifica a los herederos denunciados en el expediente, y se dispone la citación de
herederos, acreedores y de todos los que se consideren con derecho a los bienes dejados por el causante, por edicto
publicado por un día en el diario de publicaciones oficiales, para que lo acrediten dentro de los treinta días.
En la provincia de Bsas, también se libra oficio al Colegio de escribanos, y al registro de testamentos, y al IPS para
que se deje de de pagar las jubilaciones y pensiones por la muerte del causante. Luego de cumplidos esos requisitos,
se dicta la declaratoria de herederos.

Forma de la declaratoria de herederos: en esta resolución judicial se está determinando con claridad y certeza
quienes son los herederos que la ley llama y que han acreditado su vínculo para recibir la sucesión del causante.
Si bien se trata de una sentencia, no hay obstáculo para que sea luego modificada. La declaratoria de herederos se
dicta sin perjuicio de terceros y cualquier pretendiente podrá promover demanda impugnando su validez o exactitud
para excluir al heredero declarado o para ser reconocido con él.

Entre aquellos herederos que han tramitado conjuntamente el proceso sucesorio o que se han reconocido
expresamente la calidad de tales, la declaratoria será definitiva y no podrá ser modificada.
A partir de esta resolución, los que allí figuren, han quedado investidos en la calidad de herederos.

Declaración de validez formal del testamento: dentro del juicio sucesorio testamentario también hay una resolución
de trascendencia y esta es la que aprueba el testamento en su aspecto formal.
Dentro de este proceso, será necesario acreditar el fallecimiento del causante y presentar el testamento que se
pretenda hacer valer.

6) ARTICULO 2339..-Sucesión testamentaria. Si el causante ha dejado testamento por acto público, debe
presentárselo o indicarse el lugar donde se encuentre.
Si el testamento es ológrafo, debe ser presentado judicialmente para que se proceda, previa apertura si estuviese
cerrado, a dejar constancia del estado del documento, y a la comprobación de la autenticidad de la escritura y la
firma del testador, mediante pericia caligráfica. Cumplidos estos trámites, el juez debe rubricar el principio y fin de
cada una de sus páginas y mandar a protocolizarlo. Asimismo, si algún interesado lo pide, se le debe dar copia
certificada del testamento. La protocolización no impide que sean impugnadas la autenticidad ni la validez del
testamento mediante proceso contencioso.

La aprobación formal del testamento implica conferir la posesión hereditaria a los herederos incluidos en él.
BOLILLA XXI: PETICION DE HERENCIA Y CESION DE LA HERENCIA.

1) Peticion de la herencia. Concepto. Legitimación etcetc

Acción de petición de herencia: es la acción de petición de herencia es la acción que tiene un heredero para
desplazar a otra persona que también invoca la calidad de heredero o para concurrir con ella en la sucesión del
causante y obtener la entrega de la herencia.

ARTICULO 2310.-Procedencia. La petición de herencia procede para obtener la entrega total o parcial de la herencia,
sobre la base del reconocimiento de la calidad del heredero del actor, contra el que está en posesión material de la
herencia, e invoca el título de heredero.
La disputa se centra entre dos personas que invocan la calidad de heredero y una de ellas, el actor, tiene un derecho
preferente o igual a la herencia respecto del otro.
El requisito esencial de la acción de petición de herencia es que se discuta quien es el autentico heredero del
causante.
El proceso en el que se discuta la petición de herencia del que resultará la calidad de heredero debe tramitar ante el
juez que interviene en el proceso sucesorio. La petición de herencia debe tramitarse por un juicio separado e
independiente pero ante el mismo juez que entiende en la sucesión.

Legitimación activa y pasiva: la acción de petición de herencia corresponde a la persona que tiene un mejor o igual
derecho que quien ostenta hasta ese momento la calidad de heredero y en su contra deberá accionarse.

Supuestos:
a) Pariente de un orden más próximo contra pariente de un orden más lejano.
b) Dentro del mismo orden, pariente de grado más próximo contra pariente de grado más lejano
c) Dentro del mismo orden, pariente de igual grado
d) Pariente de orden subsiguiente o grado más lejano contra pariente de orden preferente o grado más cercano
e) Heredero de llamamiento prioritario contra heredero con llamamiento supletorio
f) Heredero testamentario contra legitimario
g) Heredero testamentario posterior contra heredero testamentario anterior
h) Heredero con llamamiento supletorio contra heredero testamentario
i) Cesionario de la herencia
j) Acreedor del heredero con llamamiento preferente o mejor derecho
k) Heredero del heredero

Medidas cautelares:
El heredero ha recibido la transmisión de los derechos sobre la herencia desde la misma muerte del causante y
puede disponer de ellos sin ninguna limitación.
Para evitar ese riesgo, es necesario requerir al iniciar la acción de petición de herencia la adopción de medidas
cautelares que tiendan a impedir los actos de disposición del accionado respecto de los bienes hereditarios.
El código procesal civil y comercial de la nación ha admitido expresamente la procedencia del embargo preventivo
para la acción de petición de herencia.
El efecto inicial de la sentencia que hace lugar a la acción de petición de herencia esla determinación de la persona
que tiene el carácter de heredero del causante. El efecto siguiente es la restitución de los bienes que integran la
herencia al heredero declarado en la sentencia.

ARTICULO 2312.-Restitución de los bienes. Admitida la petición de herencia, el heredero aparente debe restituir lo
que recibió sin derecho en la sucesión, inclusive las cosas de las que el causante era poseedor y aquellas sobre las
cuales ejercía el derecho de retención. Si no es posible la restitución en especie, debe indemnización de los daños. El
cesionario de los derechos hereditarios del heredero aparente está equiparado a éste en las relaciones con el
demandante.

Como consecuencia de esta disposición, el heredero real debe quedar en la misma situación respecto de los bienes
que hubiera tenido si no existiese el heredero aparente.
No solo debe restituir los bienes hereditarios, sino también los que el causante estaba poseyendo y además aquellos
que hubiera mantenido en virtud de ejercer el derecho de retención.
La responsabilidad del heredero aparente frente al heredero real no se agota con la entrega de los bienes que
componen la herencia, sino que también debe resolverse el alcance de sus deberes según haya sido buena o mala fe.
El heredero aparente es considerado poseedor de mala fe cuando conoce o debió conocer la existencia de herederos
preferentes o concurrentes que ignoraban su llamamiento.

2) Heredero aparente. Efectos de sus actos de administración y de disposición. Obligaciones con el real.

Heredero aparente:

Es aquel que, ostentando tal calidad, resulta vencido en una acción de petición de herencia.

Efectos de los actos de administración realizados por el heredero aparente:

El heredero aparente puede haber realizado actos de administración y eventualmente de disposición sobre los
bienes de la herencia sin haber tenido en definitiva derecho para efectuarlo porque no se trataba del heredero real.

ARTICULO 2315.-Actos del heredero aparente. Son válidos los actos de administración del heredero aparente
realizados hasta la notificación de la demanda de petición de herencia, excepto que haya habido mala fe suya y del
tercero con quien contrató…”

La regla es que los actos de administración son válidos haya habido buena o mala fe del heredero aparente. Solo
quedan sin efecto cuando el heredero aparente de mala fe se pusiera de acuerdo con el tercero que conocía que el
derecho de aquel se encontraba cuestionado.
Si el heredero aparente satisface obligaciones del causante con bienes no provenientes de la herencia, tiene derecho
a ser reembolsado por el heredero.
Si el heredero aparente ha pagado deudas del causante con bienes hereditarios, ha realizado actos de
administración que son regulares y nada cabe objetar sobre ese proceder.

Actos de disposición:
Es preciso distinguir los realizados a título gratuito de los onerosos.
Cualquier acto de disposición a título gratuito realizado por el heredero aparente, ya sea sobre bienes muebles o
inmuebles, no es válido y puede ser cuestionado por el heredero real.
Los actos de disposición a titulo oneroso que realiza el heredero aparente tienen varios condicionantes para que
sean validos.

Artículo 2315: Son también válidos los actos de disposición a título oneroso en favor de terceros que ignoran la
existencia de herederos de mejor o igual derecho que el heredero aparente, o que los derechos de éste están
judicialmente controvertidos…”

En principio los actos de disposición serán válidos si el tercer contratante es de buena fe porque no conocía que el
heredero aparente podía perder esa condición.
Para que el acto de disposición sobre bienes registrables sea valido tiene que haber sido oneroso, el heredero
aparente tiene que haber obtenido una declaratoria de herederos a su favor o la aprobación formal de testamento
en el que fue instituido y el tercer adquiriente tiene que ser de buena fe.
En caso de haber sido realizado un acto de disposición en forma valida, el heredero aparente de buena fe debe
restituir al heredero real el precio recibido mientras que el de mala fe, debe indemnizar todo perjuicio que le haya
causado.

3) Cesión de la herencia:

El contrato de cesión de herencia puede ser definido como aquel por el cual el heredero, cedente, transmite a un
coheredero o a un tercero, cesionario, la universalidad jurídica, herencia o una cuota parte de ella, sin consideración
especial de los elementos singulares que la componen.
La cesión de la herencia es un contrato bilateral, lo que implica un acuerdo de voluntades entre el cedente y el
cesionario.
El momento oportuno para hacer el contrato de cesión de la herencia comienza a partir de la muerte del causante.
Este contrato podrá otorgarse mientras los bienes hereditarios se encuentren indivisos, es decir que luego de la
partición ya no podrá celebrarse la cesión de la herencia.

Caracteres:
-Contrato consensual; porque resulta suficiente el acuerdo de voluntades sin que se requiera la tradición de los
bienes para su perfeccionamiento.
-Traslativo de derechos; porque los derechos sobre la herencia pasan del cedente al cesionario.
-Formal, porque se requiere su instrumentación mediante escritura pública.
-Oneroso o gratuito, según que se perciba una contraprestación o se trate de una liberalidad.
-Aleatorio; porque no se hace un detalle de los bienes, derechos y obligaciones que se ceden y la incertidumbre
acerca de su contenido es el riesgo que se asume al contratar, tal como se explicita más adelante.

Forma: el art. 1618 referido a la cesión de derechos exige en su inc. a) que se haga por escritura pública la cesión de
derechos hereditarios. Corrobora lo expuesto el art. 2302 inc. b) que da por sentado que se debe hacer por escritura
pública al sostener que la cesión tiene efecto respecto de otros herederos, legatarios y acreedores del cedente,
desde que la escritura pública se incorpora al expediente sucesorio.

ARTICULO 1618.-Forma. La cesión debe hacerse por escrito, sin perjuicio de los casos en que se admite la
transmisión del título por endoso o por entrega manual.

Deben otorgarse por escritura pública:

a) la cesión de derechos hereditarios;

b) la cesión de derechos litigiosos. Si no involucran derechos reales sobre inmuebles, también puede hacerse por
acta judicial, siempre que el sistema informático asegure la inalterabilidad del instrumento;

c) la cesión de derechos derivados de un acto instrumentado por escritura pública.

Contenido: la cesión de la herencia se refiere a un contenido patrimonial y no implica en ningún caso la transmisión
de la calidad de heredero.
Este contenido patrimonial está formado por la herencia o por una parte indivisa de ella.

Art. 2304 “el cesionario adquiere los mismos derechos que le correspondían al cedente en la herencia.
Asimismo, tiene derecho de participar en el valor integro de los bienes que se gravaron después de la apertura de la
sucesión y antes de la cesión, y en el de los que en el mismo periodo se consumieron o enajenaron, con excepción de
los frutos percibidos”.

El cesionario debe recibir los bienes en el estado en que se encontraban al momento del fallecimiento, puesto que
las alteraciones que ellos puedan haber sufrido como consecuencia del accionar del heredero no se incluyen dentro
de la cesión.

Si se gravó un bien o se consumieron o enajenaron, se le debe integrar al cesionario el valor que estos bienes tenían
al momento del fallecimiento.
No quedan percibidos dentro de la cesión los frutos percibidos porque pertenecen al cedente.

Art. 2303.-Extensión y exclusiones. La cesión de herencia comprende las ventajas que pueden resultar ulteriormente
por colación, por la renuncia a disposiciones particulares del testamento, o por la caducidad de éstas.

No comprende, excepto pacto en contrario:

a) lo acrecido con posterioridad en razón de una causa diversa de las expresadas, como la renuncia o la exclusión de
un coheredero;

b) lo acrecido anteriormente por una causa desconocida al tiempo de la cesión;


c) los derechos sobre los sepulcros, los documentos privados del causante, distinciones honoríficas, retratos y
recuerdos de familia.

Efectos:
ARTICULO 2302.-Momento a partir del cual produce efectos. La cesión del derecho a una herencia ya deferida o a
una parte indivisa de ella tiene efectos:

a) entre los contratantes, desde su celebración;

b) respecto de otros herederos, legatarios y acreedores del cedente, desde que la escritura pública se incorpora al
expediente sucesorio;

c) respecto al deudor de un crédito de la herencia, desde que se le notifica la cesión.

Efectos entre las partes: el cedente debe entregar al cesionario los bienes hereditarios que se encuentran en su
poder en la medida del derecho cedido.
Si la cesión ha sido onerosa, el cedente responde por la evicción respecto de su calidad de heredero y de la parte
indivisa que le corresponde en la herencia.
Si la cesión ha sido gratuita, el cedente solo responde en los casos en que el donante es responsable.
La cesión no produce efecto alguno sobre la extinción de las obligaciones causadas por confusión.
El cesionario tiene el deber de entregar lo comprometido según las condiciones del contrato a menos que se haya
tratado de una cesión gratuita.
El cesionario es responsable por las deudas del causante y por las cargas de la herencia solo hasta el valor de los
bienes que corresponden a la parte indivisa cedida.
Cuando el heredero cedente ha abonado esas obligaciones, el cesionario debe reintegrarle lo pagado.

Efectos respecto de terceros: el deudor debe abonar a los herederos y por ello, cuando uno de estos ha cedido su
derecho a la parte indivisa de la herencia, para que le sea oponible al deudor, tal cesión debe serle notificada.

ARTICULO 2304.-Derechos del cesionario. El cesionario adquiere los mismos derechos que le correspondían al
cedente en la herencia. Asimismo, tiene derecho de participar en el valor íntegro de los bienes que se gravaron
después de la apertura de la sucesión y antes de la cesión, y en el de los que en el mismo período se consumieron o
enajenaron, con excepción de los frutos percibidos.

ARTICULO 2305.-Garantía por evicción. Si la cesión es onerosa, el cedente garantiza al cesionario su calidad de
heredero y la parte indivisa que le corresponde en la herencia, excepto que sus derechos hayan sido cedidos como
litigiosos o dudosos, sin dolo de su parte. No responde por la evicción ni por los vicios de los bienes de la herencia,
excepto pacto en contrario. En lo demás, su responsabilidad se rige por las normas relativas a la cesión de derechos.
Si la cesión es gratuita, el cedente sólo responde en los casos en que el donante es responsable. Su responsabilidad
se limita al daño causado de mala fe.

ARTICULO 2306.-Efectos sobre la confusión. La cesión no produce efecto alguno sobre la extinción de las
obligaciones causada por confusión.

4) ARTICULO 2307.-Obligaciones del cesionario. El cesionario debe reembolsar al cedente lo que éste pague por su
parte en las deudas y cargas de la sucesión hasta la concurrencia del valor de la porción de la herencia recibida.
Las cargas particulares del cedente y los tributos que gravan la transmisión hereditaria están a cargo del cesionario si
están impagos al tiempo de la cesión.

5) ARTICULO 2308.-Indivisión postcomunitaria. Las disposiciones de este título se aplican a la cesión de los derechos
que corresponden a un cónyuge en la indivisión postcomunitaria que acaece por muerte del otro cónyuge.

ARTICULO 2309.-Cesión de bienes determinados. La cesión de derechos sobre bienes determinados que forman
parte de una herencia no se rige por las reglas de este Título, sino por las del contrato que corresponde, y su eficacia
está sujeta a que el bien sea atribuido al cedente en la partición.
BOLILLA XXII: ESTADO DE INDIVISIÓN.

1) La indivisión hereditaria es el estado de la herencia que se configura cuando existe más de un heredero. La
característica esencial para la existencia de la indivisión es que a la herencia sea llamado más de un heredero. Si
queda un solo heredero, este es el único y exclusivo propietario de todos los bienes dejados por el causante a su
muerte, y en tal caso, no existe la comunidad hereditaria.
El estado de indivisión es el conjunto de bienes que conforman el acervo. El límite temporal del estado de indivisión
va desde la muerte del causante, hasta el momento de la partición.

3) Indivisiones forzosas. Imposición por testamento. Acuerdo entre herederos. Límites y requisitos. Opciones del
cónyuge sobreviviente. Oposición de un heredero. Oponibilidad frente a terceros y derechos de los acreedores.

Indivisiones forzosas. Imposición por testamento:


Art. 2330.-Indivisión impuesta por el testador. El testador puede imponer a sus herederos, aun legitimarios, la
indivisión de la herencia por un plazo no mayor de diez años.
Puede también disponer que se mantenga indiviso por ese plazo o, en caso de haber herederos menores de edad,
hasta que todos ellos lleguen a la mayoría de edad:
a) un bien determinado;
b) un establecimiento comercial, industrial, agrícola, ganadero, minero, o cualquier otro que constituye una unidad
económica;
c) las partes sociales, cuotas o acciones de la sociedad de la cual es principal socio o accionista.

En todos los casos, cualquier plazo superior al máximo permitido se entiende reducido a éste.
El juez puede autorizar la división total o parcial antes de vencer el plazo, a pedido de un coheredero, cuando
concurren circunstancias graves o razones de manifiesta utilidad.

Acuerdo entre herederos:

ARTICULO 2331.-Pacto de indivisión. Los herederos pueden convenir que la indivisión entre ellos perdure total o
parcialmente por un plazo que no exceda de diez años, sin perjuicio de la partición provisional de uso y goce de los
bienes entre los copartícipes.
Si hay herederos incapaces o con capacidad restringida, el convenio concluido por sus representantes legales o con
la participación de las personas que los asisten requiere aprobación judicial.
Estos convenios pueden ser renovados por igual plazo al término del anteriormente establecido. Cualquiera de los
coherederos puede pedir la división antes del vencimiento del plazo, siempre que medien causas justificadas.
Para que la indivisión tenga lugar tiene que ser pactada entre todos los herederos, se exige la unanimidad.
El pacto de indivisión puede ser realizado sobre toda la herencia o sobre una parte de ella, sin que exista restricción
alguna al respecto
No hay obstáculo para que se acuerde la indivisión y al mismo tiempo los herederos pacten la división provisional de
uso y goce de los bienes. Esto significa que han convenido que los bienes queden indivisos, pero el uso exclusivo de
bienes determinados recaerá en cabeza de los herederos tal como resulta del acuerdo.
Aunque el pacto se encuentre vigente porque todavía no ha vencido el plazo, cualquier heredero puede requerir la
partición cuando medien causas justificadas.

Oposición del cónyuge:

Art. 2332.-Oposición del cónyuge. Si en el acervo hereditario existe un establecimiento comercial, industrial,
agrícola, ganadero, minero o de otra índole que constituye una unidad económica, o partes sociales, cuotas o
acciones de una sociedad, el cónyuge supérstite que ha adquirido o constituido en todo o en parte el
establecimiento o que es el principal socio o accionista de la sociedad, puede oponerse a que se incluyan en la
partición, excepto que puedan serle adjudicados en su lote.
Tiene el mismo derecho el cónyuge que no adquirió ni constituyó el establecimiento pero que participa activamente
en su explotación.
En estos casos, la indivisión se mantiene hasta diez años a partir de la muerte del causante, pero puede ser
prorrogada judicialmente a pedido del cónyuge sobreviviente hasta su fallecimiento.
Durante la indivisión, la administración del establecimiento, de las partes sociales, cuotas o acciones corresponde al
cónyuge sobreviviente.
A instancia de cualquiera de los herederos, el juez puede autorizar el cese de la indivisión antes del plazo fijado, si
concurren causas graves o de manifiesta utilidad económica que justifican la decisión.
El cónyuge supérstite también puede oponerse a que la vivienda que ha sido residencia habitual de los cónyuges al
tiempo de fallecer el causante y que ha sido adquirida o construida total o parcialmente con fondos gananciales, con
sus muebles, sea incluida en la partición, mientras él sobreviva, excepto que pueda serle adjudicada en su lote. Los
herederos sólo pueden pedir el cese de la indivisión si el cónyuge supérstite tiene bienes que le permiten procurarse
otra vivienda suficiente para sus necesidades.

Oposición de un heredero:
Art. 2333.-Oposición de un heredero. En las mismas circunstancias que las establecidas en el artículo 2332, un
heredero puede oponerse a la inclusión en la partición del establecimiento que constituye una unidad económica si,
antes de la muerte del causante, ha participado activamente en la explotación de la empresa.
Solo puede ser objeto de oposición a la partición por parte de un heredero un establecimiento que constituya una
unidad económica. Tiene que haber participado activamente en la explotación de la empresa desde antes de la
muerte del causante, poniendo de manifiesto que cuando su actuación es posterior a ese hecho no podrá formular
la oposición.

Oponibilidad frente a terceros y derecho de los acreedores:

Art. 2334: ser oponible a terceros, la indivisión autorizada por los artículos 2330 a 2333 que incluye bienes
registrables debe ser inscripta en los registros respectivos.
Durante la indivisión, los acreedores de los coherederos no pueden ejecutar el bien indiviso ni una porción ideal de
éste, pero pueden cobrar sus créditos con las utilidades de la explotación correspondientes a su deudor.
Las indivisiones no impiden el derecho de los acreedores del causante al cobro de sus créditos sobre los bienes
indivisos.

Inventario: plazo y forma. Requisitos. Pluralidad de herederos. Avalúo. Impugnaciones. Retasa.

En todo proceso sucesorio deben individualizarse los bienes que componen la herencia. Esta determinación se
puede hacer de dos maneras, mediante la facción de un inventario, o por la denuncia que hagan los propios
herederos.

Inventario: consiste en la descripción detallada de los bienes hereditarios, individualizándolos debidamente y


haciendo mención de los datos registrales que correspondan en su caso. Sin embargo, para que este documento
cumpla acabadamente con el fin que persigue debe contemplar también las deudas que gravan la herencia.
Art. 2341.-Inventario. El inventario debe hacerse con citación de los herederos, acreedores y legatarios cuyo
domicilio sea conocido.
El inventario debe ser realizado en un plazo de tres meses desde que los acreedores o legatarios hayan intimado
judicialmente a los herederos a su realización.
El inventario se confeccionara mediante un acta notarial y allí se deberá dejar constancia de las observaciones o
impugnaciones que formulen los interesados, y de la negativa de alguno de los comparecientes a firmar el
instrumento.
La intimación para realizar el inventario debe ser realizada en forma judicial. El momento oportuno para hacer la
intimación comienza cuando los herederos han aceptado la herencia y puede ser llevada a cabo hasta que los
derechos de los acreedores y legatarios prescriban.
Quienes pueden realizar la intimación son los acreedores del causante y los legatarios.
Cuando hubiera más de un acreedor y legatario la intimación efectuada por uno solo de ellos, beneficia a los demás.
La intimación debe ser efectuada a cada uno de los herederos porque la obligación de hacer el inventario es
individual y su omisión trae consecuencias jurídicas para el heredero remiso. Sin embargo, como el inventario se
realiza con citación de los coherederos, cuando uno de ellos lo ha efectuado, los restantes podrán adherirse a él
siempre que tal manifestación se concrete dentro del plazo legal establecido.

La falta de confección del inventario dentro el plazo de tres meses de haber sido intimado judicialmente por parte
interesada, trae como consecuencia que el heredero responderá con sus propios bienes por las deudas del causante
y las cargas de la herencia.
La realización de un inventario requiere la intimación judicial por parte interesada, la intervención de un escribano y
el cumplimiento de los plazos legales. Por ese motivo el art. 2342 permite suplirlo por la denuncia de bienes: “por la
voluntad unánime de los copropietarios de la masa indivisa, el inventario puede ser sustituido por la denuncia de
bienes, excepto que el inventario haya sido pedido por acreedores o lo imponga otra disposición de la ley”.

Avalúo. Impugnaciones. Retasa:


Además de la necesaria descripción del activo y del pasivo de la herencia, resulta imprescindible que los bienes
hereditarios sean valuados ya que, de lo contrario, ese cotejo no permitiría conocer con exactitud la situación
patrimonial que debe enfrentar el heredero. Por ello, el paso siguiente es el avaluó de los bienes inventariados.
Valuar un bien significa adjudicarle un precio en dinero.

Art. 2343.-Avalúo. La valuación debe hacerse por quien designen los copropietarios de la masa indivisa, si están de
acuerdo y son todos plenamente capaces o, en caso contrario, por quien designa el juez, de acuerdo a la ley local. El
valor de los bienes se debe fijar a la época más próxima posible al acto de partición.
Las normas procesales determinan que el tasador será nombrado a propuesta de la mayoría de los herederos o en su
defecto por el juez.
Existen diferencias entre una norma y otra ya que el art. 2343 exige la unanimidad de los herederos capaces para
designar al tasador, mientras que la norma procesal requiere voluntad de la mayoría. A pesar de esta diferencia debe
prevalecer la norma de fondo, ya que tiene aplicación para todo el país y constituye una disposición básica que los
ordenamientos adjetivos no pueden desconocer.
En caso de no contarse con la unanimidad o bien cuando existe algún heredero que no es plenamente capaz, la
elección del tasador recae en el juez. También se ha fijado el momento en que deben ser valuados los bienes, el
tasador deberá determinarlos en la fecha más próxima posible al acto de la partición.

Impugnaciones: tanto el inventario como la tasación se harán conocer a las partes por cedula por un plazo de cinco
días y si no media impugnación serán aprobados y pueden ser impugnados por los interesados.
Art. 2344.-Impugnaciones. Los copropietarios de la masa indivisa, los acreedores y legatarios pueden impugnar total
o parcialmente el inventario y el avalúo o la denuncia de bienes.
Si se demuestra que no es conforme al valor de los bienes, se ordena la retasa total o parcial de éstos. Si las
reclamaciones versaren sobre el avaluó, se convocara a audiencia a los interesados y al perito para que se expidan
sobre la cuestión promovida resolviendo el juez lo que correspondiere
El resultado de la impugnación total o parcial del inventario determinara la inclusión de algún bien que había sido
omitido o la exclusión de aquel que había sido incorporado indebidamente.
Cuando la impugnación deriva en la inclusión de un bien que ha sido ocultado fraudulentamente por el heredero
responsable de hacer el inventario, se genera la responsabilidad de este con sus bienes propios por las deudas del
causante y cargas de la sucesión e inclusive por el cumplimiento de los legados. Lo mismo sucederá cuando el
heredero al tiempo de hacer el inventario ha exagerado dolosamente el pasivo sucesorio.
La impugnación exitosa del avaluó deriva en una retasa de los bienes, pero tampoco se menciona en este caso el
procedimiento para llevarla a cabo y si será realizada por el mismo tasador o deberá designarse a otro nuevo que
cumpla esa labor.
BOLILLA XXIII: ADMINISTRACION DE LA HERENCIA.

1) Administración extrajudicial de la indivisión. Actos conservatorios, de administración y de disposición. Medidas


urgentes. Frutos. Actos prohibidos. Reivindicación y posesión de los bienes.

Art. 2324.-Actos conservatorios y medidas urgentes. Cualquiera de los herederos puede tomar las medidas
necesarias para la conservación de los bienes indivisos, empleando a tal fin los fondos indivisos que se encuentran
en su poder. A falta de ellos, puede obligar a los coherederos a contribuir al pago de los gastos necesarios.

Art. 2325.-Actos de administración y de disposición. Los actos de administración y de disposición requieren el


consentimiento de todos los coherederos, quienes pueden dar a uno o varios de ellos o a terceros un mandato
general de administración.

Son necesarias facultades expresas para todo acto que excede la explotación normal de los bienes indivisos y para la
contratación y renovación de locaciones.
Si uno de los coherederos toma a su cargo la administración con conocimiento de los otros y sin oposición de ellos,
se considera que hay un mandato tácito para los actos de administración que no requieren facultades expresas en
los términos del párrafo anterior.

Art. 2326.-Ausencia o impedimento. Los actos otorgados por un coheredero en representación de otro que está
ausente, o impedido transitoriamente, se rigen por las normas de la gestión de negocios.

Art. 2327.-Medidas urgentes. Aun antes de la apertura del proceso judicial sucesorio, a pedido de un coheredero, el
juez puede ordenar todas las medidas urgentes que requiere el interés común, entre ellas, autorizar el ejercicio de
derechos derivados de títulos valores, acciones o cuotas societarias, la percepción de fondos indivisos, o el
otorgamiento de actos para los cuales es necesario el consentimiento de los demás sucesores, si la negativa de éstos
pone en peligro el interés común.
Asimismo, puede designar un administrador provisorio, prohibir el desplazamiento de cosas muebles, y atribuir a
uno u otro de los coherederos el uso personal de éstas.

Cualquier heredero está legitimado para llevar adelante medidas urgentes. El requisito es la autorización judicial.

Art. 2328.-Uso y goce de los bienes. El heredero puede usar y disfrutar de la cosa indivisa conforme a su destino, en
la medida compatible con el derecho de los otros copartícipes. Si no hay acuerdo entre los interesados, el ejercicio
de este derecho debe ser regulado, de manera provisional, por el juez.
El copartícipe que usa privativamente de la cosa indivisa está obligado, excepto pacto en contrario, a satisfacer una
indemnización, desde que le es requerida.
El consentimiento tácito de uso no otorga derecho a indemnización.
El derecho a indemnización corre desde la oposición fehaciente, pero no tiene efecto retroactivo. Quien usa debe
abonar impuestos y servicios.

Art. 2329.-Frutos. Los frutos de los bienes indivisos acrecen a la indivisión, excepto que medie partición provisional.
Cada uno de los herederos tiene derecho a los beneficios y soporta las pérdidas proporcionalmente a su parte en la
indivisión.
Cualquier heredero puede ejercer la acción de reivindicación para perseguir un bien del causante que está en
posesión de un tercero.
Si se está llevando a cabo una posesión para lograr la usucapión, el heredero posee para todos, no para sí, porque no
se puede poseer sobre parte ideal.

2. Administración judicial de la sucesión. Designación del administrador: distintas opciones. Pluralidad de


administradores. Administración por un extraño. Remuneración, garantías, remoción. Medidas urgentes.

Capacidad:
Art. 2345: las personas humanas plenamente capaces, y las personas jurídicas autorizadas por la ley o los estatutos
para administrar bienes ajenos, pueden ejercer el cargo de administrador.
Designación de administrador: Art. 2346.-Designación de administrador. Los copropietarios de la masa indivisa
pueden designar administrador de la herencia y proveer el modo de reemplazarlo. A falta de mayoría, cualquiera de
las partes puede solicitar judicialmente su designación, la que debe recaer preferentemente, de no haber motivos
que justifiquen otra decisión, sobre el cónyuge sobreviviente y, a falta, renuncia o carencia de idoneidad de éste, en
alguno de los herederos, excepto que haya razones especiales que lo hagan inconveniente, caso en el cual puede
designar a un extraño.

En primer término el juez deberá designar administrador al que propongan la mayoría de los herederos,
entendiéndose que se refiere a la mayoría de las partes indivisas, y no a la mayoría de herederos.

Cuando la mayoría no se puede obtener, y cuando existe una oposición fundada al propuesto por esta, cualquiera de
los herederos puede requerir que el administrador sea designado por el juez.

Solo en caso de grave conflicto entre los herederos la designación recaerá en un tercero, por cuanto entiende que
siempre es mejor administrador aquel que actúa sobre bienes que son, aunque sea en parte, propios.

Para la designación del administrador definitivo se convoca a una audiencia a la que deben ser citados por cedula los
herederos y legatarios de cuota.

La designación del administrador definitivo requiere el acuerdo unánime de los herederos, y si este no existiere será
nombrado el cónyuge supérstite y a falta, renuncia o inidoneidad de este, al propuesto por la mayoría, salvo que
invocasen motivos especiales que a criterio del juez, fuesen aceptables para no efectuar ese nombramiento.

También el testador puede designar administrador de la herencia en su testamento:

Art. 2347.- Designación por el testador. El testador puede designar uno o varios administradores y establecer el
modo de su reemplazo.

Se considera nombrado administrador a quien el testador haya señalado expresamente como tal, o lo haya
designado como liquidador de la sucesión, albacea, ejecutor testamentario o de otra manera similar.

Pluralidad de administradores: Art. 2348.-Pluralidad de administradores. En caso de pluralidad de administradores,


el cargo es ejercido por cada uno de los nombrados en el orden en que están designados, excepto que en la
designación se haya dispuesto que deben actuar conjuntamente.
En caso de designación conjunta, si media impedimento de alguno de ellos, los otros pueden actuar solos para los
actos conservatorios y urgentes.
Cuando hay varios administradores designados ejercerá el cargo el que haya sido nombrado en primer término y a
falta de este, incapacidad, renuncia o remoción, actuaran los que son llamados en forma sucesiva. Sin embargo es
posible que la nominación se haya realizado de forma tal que se requiera la actuación conjunta para ejercer la
administración, por ello, la voluntad coincidente es necesaria para realizar los actos propios de esa gestión. La
normal exceptúa la actuación conjunta cuando media imposibilidad de alguno de los administradores para tomar las
decisiones y se faculta a los restantes para seguir actuando en forma individual, pero solo sobre los actos urgentes o
meramente conservatorios de los bienes.

Remuneración y gastos: como el administrador está cumpliendo una función que recae sobre los bienes que son
aun, parcialmente ajenos, tiene derecho a una retribución. Además tiene derecho a que se le reintegren los gastos
necesarios y útiles que hubiera realizado.

Art. 2349.-Remuneración y gastos. El administrador tiene derecho a que se le reembolsen los gastos necesarios y
útiles realizados en el cumplimiento de su función.

También tiene derecho a remuneración. Si no ha sido fijada por el testador, ni hay acuerdo entre el administrador y
los copropietarios de la masa indivisa, debe ser determinada por el juez.

Garantías: Art. 2350.-Garantías. El administrador no está obligado a garantizar el cumplimiento de sus obligaciones,
excepto que el testador o la mayoría de los copropietarios de la masa indivisa lo exija, o que lo ordene el juez a
pedido de interesado que demuestre la necesidad de la medida.
Si requerida la garantía, el administrador omite constituirla o se rehúsa a hacerlo en el plazo fijado por el juez, debe
ser removido del cargo.
El administrador no debe garantizar el resultado de su gestión, pero las circunstancias del caso pueden originar esa
obligación.
Sera impuesta por el testador o decidida por la mayoría de los coherederos. También podrá ser requerida por un
tercero interesado cuando existan motivos que a criterio del juez, la justifiquen.
La falta de cumplimiento en tiempo de esta imposición es sancionada con la remoción del administrador, ya que si
no ha afianzado el resultado de su labor, continuar con su ejercicio pone en riesgo los bienes hereditarios.

Remoción:

La función del administrador puede terminar con la partición debido a que luego de ella cesa el estado de indivisión
hereditaria, por la renuncia o por la remoción.

Art. 2351.-Remoción. Todo interesado puede solicitar al juez la remoción del administrador si existe imposibilidad de
ejercer el cargo o mal desempeño de éste.

Mientras tramite el pedido, que se sustancia por la vía más breve que permite la legislación procesal, continúa en el
ejercicio de sus funciones si el juez no resuelve designar un administrador provisional.
La primera alternativa que se presenta para la remoción tiene lugar cuando la mayoría de los coherederos que han
designado al administrador deciden hacerlo cesar en sus funciones.
Otro caso tiene lugar cuando es pedida la remoción por uno de los coherederos porque se encuentra imposibilitado
de ejercer el cargo o por mal desempeño
Mientras no se dicte sentencia en el incidente promovido, el administrador continuara ejerciendo su función, ya que
todavía no se ha probado la causa que motiva su remoción. Sin embargo el juez puede hacerlo cesar en sus
funciones y nombrar un administrador provisorio si considera que existe un riesgo para la integridad del acervo
hereditario en caso de continuar actuando el adm.

Medidas urgentes:

Art. 2352.-Medidas urgentes. Si el administrador no ha sido aún designado, rehúsa el cargo, demora en aceptarlo o
debe ser reemplazado, cualquier interesado puede solicitar medidas urgentes tendientes a asegurar sus derechos,
como la facción de inventario, el depósito de bienes, y toda otra medida que el juez considere conveniente para la
seguridad de éstos o la designación de administrador provisional. Los gastos que ocasionan estas medidas están a
cargo de la masa indivisa.

La falta de un responsable que se ocupe de gestionar los bienes hereditarios hace posible que cualquier interesado
requiera la adopción de medidas que aseguren la integridad de la herencia.

3) Funciones del administrador: actos de conservación, administración y disposición. Cobro de créditos y acciones
judiciales. Rendición de cuentas.

Art.2353.-Administración de los bienes. El administrador debe realizar los actos conservatorios de los bienes y
continuar el giro normal de los negocios del causante.

Puede, por sí solo, enajenar las cosas muebles susceptibles de perecer, depreciarse rápidamente o cuya
conservación es manifiestamente onerosa. Para la enajenación de otros bienes necesita acuerdo unánime de los
herederos o, en su defecto, autorización judicial.
Además de gestionar los bienes de la herencia, debe promover su realización en la medida necesaria para el pago de
las deudas y legados
Dentro de los actos propiamente de administración, el administrador tiene amplia facultad para realizar los que
tiendan a la conservación de los bienes hereditarios, es decir aquellos que procuran mantener el bien en si mismo.
En cuanto a los actos de disposición, el administrador tiene diversas facultades: una de ellas se encuentra cuando en
el acervo hereditario hay bienes muebles susceptibles de perecer, depreciarse rápidamente o cuya conservación es
manifiestamente onerosa. Cuando se trate de actos de disposición sobre este tipo de bienes, el administrador puede
realizarlos con su sola voluntad.
Para realizar cualquier otro acto de disposición, debe contar con el acuerdo unánime de los herederos, o bien con la
correspondiente autorización judicial.

Art. 2354.-Cobro de créditos y acciones judiciales. Previa autorización judicial o de los copartícipes si son plenamente
capaces y están presentes, el administrador debe cobrar los créditos del causante, continuar las acciones
promovidas por éste, iniciar las que son necesarias para hacer efectivos sus derechos, y presentarse en los procesos
en los cuales el causante fue demandado.
En ningún caso puede realizar actos que importan disposición de los derechos del causante

La actuación del administrador en estos casos, se encuentra supeditada a la conformidad otorgada por los herederos
capaces y presentes en forma unánime, o bien a la venia supletoria judicial. Cuando pretenda ejercer alguno de
estos derechos deberá acreditar su designación como administrador y además el testimonio de la autorización de los
coherederos o de la resolución judicial que le permite llevar adelante ese acto.
En su carácter de administrador podrá presentarse para continuar las acciones que hubiera iniciado el causante,
iniciar las que resulten necesarias e intervenir cuando el causante hubiera sido demandado.

Así como el administrador tiene derecho a una retribución porque actúa sobre bienes que son ajenos aunque al
menos una parte de ellos lo sea, también por la misma razón tiene el deber de rendir cuentas de su gestión.

Art.2355.-Rendición de cuentas. Excepto que la mayoría de los copropietarios de la masa indivisa haya acordado otro
plazo, el administrador de la herencia debe rendir cuentas de su administración trimestralmente, o con la
periodicidad que el juez establezca.

Esta norma alude a las rendiciones de cuentas periódicas que debe realizar el administrador, ya que la rendición
definitiva se hará al fin de su actuación. Como toda rendición de cuentas, el administrador deberá acompañar la
documentación respiratoria de su actuación.
El 713 CPCC determina que las rendiciones de cuentas parciales se deben poner en conocimiento de los herederos
por cinco días mediante cedula quedando sujetas a la aprobación judicial.

4) Pago de las deudas y cumplimiento de los legados. Presentación y declaración de legítimo abono.Procedimiento
de pago. Garantías. Masa indivisa insolvente.

Todo heredero tiene limitada la responsabilidad salvo en los casos previstos en el art. 2321. Para abonar las deudas
que dejo el causante y cumplir con los legados, también se ha establecido un procedimiento que debe ser cumplido
por el heredero.

a) Presentación de los acreedores: los acreedores del causante deben explicitar su reclamo ante los herederos.

Art. 2356.-Presentación de los acreedores. Los acreedores hereditarios que no son titulares de garantías reales
deben presentarse a la sucesión y denunciar sus créditos a fin de ser pagados. Los créditos cuyos montos no se
encuentran definitivamente fijados se denuncian a título provisorio sobre la base de una estimación.

Todos los acreedores deberán presentarse en el expediente sucesorio para reclamar el pago de su crédito.
Los herederos pueden desconocer el crédito, o cuestionar su legitimidad o cuantía. En ambos casos, se trata por un
expediente por separado.

Legítimo abono: a diferencia de lo que resulta del artículo anterior que tiene créditos en principio debidamente
documentados, se ha admitido la presentación de un acreedor que no cuenta con la correspondiente
instrumentación. En esos casos los herederos por unanimidad pueden aceptarlos en forma expresa como estable el
art. 2357: Los herederos pueden reconocer a los acreedores del causante que solicitan la declaración de legítimo
abono de sus créditos. Emitida tal declaración por el juez, el acreedor reconocido debe ser pagado según el orden
establecido por el artículo siguiente. A falta de reconocimiento expreso y unánime de los herederos, el acreedor está
facultado para deducir las acciones que le corresponden.

Tal reconocimiento puede ser realizado a iniciativa de los propios herederos o como consecuencia de la petición que
hubiera formulado el acreedor dentro del expediente sucesorio. En el caso de que los herederos acepten el crédito,
el juez lo declarara como de legitimo abono y serán pagados en el orden que se establece para los acreedores.
Cuando los herederos no reconozcan ese crédito o bien cuando no exista unanimidad o alguno de ellos no se
encuentre en condiciones de expedirse, al acreedor no le quedara otra alternativa que perseguir el cobro de su
crédito por un expediente separado que tramitara ante el mismo juez del sucesorio.

Procedimiento de pago:

La masa hereditaria debe destinarse a pagar las deudas que dejo el causante y a cumplir con los legados, pero los
herederos o en su caso el administrador deben hacerlo conforme a un orden establecido en la ley.

Art. 2358: Procedimiento de pago. El administrador debe pagar a los acreedores presentados según el rango de
preferencia de cada crédito establecido en la ley de concursos.

Pagados los acreedores, los legados se cumplen, en los límites de la porción disponible, en el siguiente orden:
a) los que tienen preferencia otorgada por el testamento;
b) los de cosa cierta y determinada;
c) los demás legados. Si hay varios de la misma categoría, se pagan a prorrata.

Si el acervo hereditario no alcanza para cubrir todos los créditos que no tienen preferencia podrían ser abonados a
prorrata.
Luego de satisfecha la totalidad de los créditos contra el causante y las cargas de la sucesión, se comienza a cumplir
con los legados y también existe un orden establecido en el artículo que se comenta.

Garantia de los acreedores y legatarios:

Art. 2359.-Garantía de los acreedores y legatarios de la sucesión. Los acreedores del causante, los acreedores por
cargas de la masa y los legatarios pueden oponerse a la entrega de los bienes a los herederos hasta el pago de sus
créditos o legados.

Masa insolvente:

Puede ocurrir que los bienes que componen la herencia no alcancen a cubrir las deudas que dejo el causante. Si se
presenta esa circunstancia será posible recurrir a los recursos que la ley concede frente a la insolvencia del deudor.

Art. 2360.-Masa indivisa insolvente. En caso de desequilibrio patrimonial o insuficiencia del activo hereditario, los
copropietarios de la masa pueden peticionar la apertura del concurso preventivo o la declaración de quiebra de la
masa indivisa, conforme a las disposiciones de la legislación concursal.
Igual derecho, y de acuerdo a la misma normativa, compete a los acreedores.

Art. 2361.-Cuenta definitiva. Concluida la administración, el administrador debe presentar la cuenta definitiva.

Art. 2362.-Forma de la cuenta. Si todos los copropietarios de la masa indivisa son plenamente capaces y están de
acuerdo, la rendición de cuentas se hace privadamente, quedando los gastos a cargo de la masa indivisa.

En caso contrario, debe hacerse judicialmente. De ella se debe dar vista a los copropietarios de la masa indivisa,
quienes pueden impugnarla.
BOLILLA XXVI: CESACIÓN DEL ESTADO DE INDIVISION.

1) La partición es la operación técnica, jurídica y contable que pone fin al estado de indivisión hereditaria.
Mediante la partición, los herederos ven concretada su porción ideal en bienes determinados de los que resultan ser
propietarios exclusivos.
Se trata de una operación y como tal, reúne un conjunto de actos complejos que requieren la intervención de una
persona idónea para llevarla a cabo, el partidor.
La operación es técnica: porque es preciso que se proceda al inventario, a la valuación y a la división de los bienes
hereditarios, es jurídica: porque hay que seguir el procedimiento legal y concretar en bienes la porción indivisa que a
cada heredero le corresponde, y es contable: porque su resultado numérico debe coincidir con la porción que cada
heredero tiene en esa herencia.

El cccn no ha definido a la partición, sino que se ha limitado a remarcar su efecto y la oponibilidad frente a terceros.

Art.2363.-Conclusión de la indivisión. La indivisión hereditaria sólo cesa con la partición. Si la partición incluye
bienes registrables, es oponible a los terceros desde su inscripción en los registros respectivos.

Caracteres: la partición es:


- integral: debe abarcar todos los bienes indivisos para poner fin a la comunidad hereditaria
- obligatoria: porque los herederos no pueden oponerse a su realización, tan solo puede requerirse su postergación
cuando redunde en un perjuicio en el valor de los bienes indivisos o existan casos de indivisión forzosa.
- imprescriptible: el derecho a requerir la partición es imprescriptible mientras continúe la indivisión.
- declarativa: ya que se limita a establecer que los bienes asignados a cada heredero los han tenido desde el mismo
momento de la muerte del causante.
- retroactiva: porque se considera que cada heredero ha sucedido solo e inmediatamente en los bienes
comprendidos en su hijuela y que no tuvo derecho alguno en lo que corresponden a sus coherederos.

Titulares del derecho de pedirla:


Art. 2364.-Legitimación. Pueden pedir la partición los copropietarios de la masa indivisa y los cesionarios de sus
derechos. También pueden hacerlo, por vía de subrogación, sus acreedores, y los beneficiarios de legados o cargos
que pesan sobre un heredero.
En caso de muerte de un heredero, o de cesión de sus derechos a varias personas, cualquiera de los herederos o
cesionarios puede pedir la partición; pero si todos ellos lo hacen, deben unificar su representación.

Art. 2365.-Oportunidad para pedirla. La partición puede ser solicitada en todo tiempo después de aprobados el
inventario y avalúo de los bienes.
Sin embargo, cualquiera de los copartícipes puede pedir que la partición se postergue total o parcialmente por el
tiempo que fije el juez si su realización inmediata puede redundar en perjuicio del valor de los bienes indivisos.

Art. 2366.-Herederos condicionales. Los herederos instituidos bajo condición suspensiva no pueden pedir la
partición mientras la condición no está cumplida, pero pueden pedirla los coherederos, asegurando el derecho de
los herederos condicionales.
Los instituidos bajo condición resolutoria pueden pedir la partición, pero deben asegurar el derecho de quienes los
sustituyen al cumplirse la condición.

ARTICULO 2368.- Prescripción. La acción de partición de herencia es imprescriptible mientras continúe la indivisión,
pero hay prescripción adquisitiva larga de los bienes individuales si la indivisión ha cesado de hecho porque alguno
de los copartícipes ha intervertido su título poseyéndolos como único propietario, durante el lapso que establece la
ley.

2. Modos: provisional y definitiva; total y parcial. Partición en especie, división antieconómica. Partición privada y
partición judicial. Casos en que procede. Diligencias previas. Inventario y tasación. Nombramiento del partidor.
Cuenta particionaria. Licitación. Formación de lotes. (punto + completo)
En principio la partición debe ser total, es decir abarcar todos los bienes indivisos. Solo por excepción, se podrá
realizar una partición parcial.
Art. 2367.-Partición parcial. Si una parte de los bienes no es susceptible de división inmediata, se puede pedir la
partición de los que son actualmente partibles.
La imposibilidad de partir alguno de los bienes hereditarios puede deberse a que el causante en su testamento ha
impuesto la indivisión, o porque ella ha sido acordada por los herederos o bien porque el cónyuge supérstite o un
heredero se ha opuesto a la partición. También puede suceder que la partición sea parcial porque la división hace
antieconómico el aprovechamiento de las partes, o cuando jurídica o materialmente no es posible su división.
La partición puede ser parcial porque todos los herederos presentes y capaces, por unanimidad, así lo decidan.

Modos de hacer la partición:


- Partición definitiva: es aquella que atribuye la propiedad exclusiva de los bienes a los herederos que resulten ser
sus adjudicatarios.
- Partición provisional: es la que atribuye solo el uso y goce de los bienes, manteniendo la propiedad en estado de
indivisión.
Art. 2370.-Partición provisional. La partición se considera meramente provisional si los copartícipes sólo han hecho
una división del uso y goce de los bienes de la herencia, dejando indivisa la propiedad. La partición provisional no
obsta al derecho de pedir la partición definitiva.

- Partición privada:
art. 2369.-Partición privada. Si todos los copartícipes están presentes y son plenamente capaces, la partición puede
hacerse en la forma y por el acto que por unanimidad juzguen convenientes. La partición puede ser total o parcial.
- Partición judicial: art. 2371- Partición judicial. La partición debe ser judicial:
a) si hay copartícipes incapaces, con capacidad restringida o ausentes;
b) si terceros, fundándose en un interés legítimo, se oponen a que la partición se haga privadamente;
c) si los copartícipes son plenamente capaces y no acuerdan en hacer la partición privadamente.

Licitación: consiste en ofertar por un bien determinado un valor mayor al que resulta de su avaluo y con ello, si la
oferta no es superada, se consigue la adjudicación de ese bien en la hijuela del coheredero ofertante y se modifica su
valuación al nuevo monto resultante. Art. 2372.-Licitación. Cualquiera de los copartícipes puede pedir la licitación de
alguno de los bienes de la herencia para que se le adjudique dentro de su hijuela por un valor superior al del avalúo,
si los demás copartícipes no superan suoferta.
Efectuada la licitación entre los herederos, el bien licitado debe ser imputado a la hijuela del adquirente, por el valor
obtenido en la licitación, quedando de ese modo modificado el avalúo de ese bien.
La oferta puede hacerse por dos o más copartícipes, caso en el cual el bien se adjudica en copropiedad a los
licitantes, y se imputa proporcionalmente en la hijuela de cada uno de ellos.
No puede pedirse la licitación después de pasados treinta días de la aprobación de la tasación.

Partidor: es el encargado de llevar a cabo la división de la herencia, adjudicando los bienes en propiedad exclusiva
de los coherederos
Art. 2373.-Partidor. La partición judicial se hace por un partidor o por varios que actúan conjuntamente. A falta de
acuerdo unánime de los copartícipes para su designación, el nombramiento debe ser hecho por el juez.

Pautas para la realización de la cuenta particionaria: existen dentro del cccn una serie de pautas a las que el partidor
se debe ajustar.

- División en especie: una de las pautas a la que debe atenerse el partidor es la de realizar, si es posible la división de
los bienes en especie.
Art.2374.-Principio de partición en especie. Si es posible dividir y adjudicar los bienes en especie, ninguno de los
copartícipes puede exigir su venta.
En caso contrario, se debe proceder a la venta de los bienes y a la distribución del producto que se obtiene. También
puede venderse parte de los bienes si es necesario para posibilitar la formación de los lotes.
Mientras esta forma de división sea viable, ninguno de los coherederos tiene derecho a requerir la venta de todos o
de alguno de los bienes indivisos. La voluntad de uno solo de los herederos es suficiente como para imponer que la
partición se haga en especie aunque la mayoría de ellos hubiera optado por la enajenación.

- División antieconómica: Art.2375.-División antieconómica. Aunque los bienes sean divisibles, no se los debe dividir
si ello hace antieconómico el aprovechamiento de las partes.
Si no son licitados, pueden ser adjudicados a uno o varios de los copartícipes que los acepten, compensándose en
dinero la diferencia entre el valor de los bienes y el monto de las hijuelas.

- Composición de la masa partible: además de realizar el inventario y avalúo de los bienes indivisos es necesario
determinar con exactitud la composición de la masa partible
ARTICULO 2376.- Composición de la masa. La masa partible comprende los bienes del causante que existen al
tiempo de la partición o los que se han subrogado a ellos, y los acrecimientos de unos y otros. Se deducen las deudas
y se agregan los valores que deben ser colacionados y los bienes sujetos a reducción.
Bienes excluidos de la masa partible: no serán partibles temporariamente los bienes sujetos a la indivisión forzosa
contemplados en los art.2330 a 2333. Tampoco podrán incluirse en la masa de partición el inmueble que resulte
afectado por el derecho real de habitación vitalicio y gratuito a favor del cónyuge supérstite. Los bienes asignados a
un fideicomiso no podrán ser partidos hasta que se cumpla el plazo de su duración. Los objetos y documentos que
tengan un valor afectivo u honorifico, etc.

La cuenta particionaria: el resultado de la labor del partidor será la realización de la división de la masa partible en la
cuenta particionaria.
El primer capítulo se llama: “los prenotados”, y en él, el partidor debe hacer un resumen del expediente sucesorio,
individualizando al causante, la fecha de su fallecimiento, la iniciación del juicio, su tramite hasta la declaratoria de
herederos o la aprobación formal del testamento, para concluir con la determinación de los herederos mediante la
transcripción de esta resolución o del testamento junto con el auto de su aprobación formal.
El segundo capítulo se llama “el cuerpo general de bienes”. Allí se individualizan los bienes que deben ser
computados a los efectos de la partición. Además de los bienes inventariados y valuados, deberá el partidor
computar el valor de los bienes colacionables.
El tercer capítulo es el de “las bajas comunes”, en el que deben incluirse no solo las deudas dejadas por el causante,
sino también las deudas por cargas de la sucesión y todos los legados particulares.
Art. 2384.-Cargas de la masa. Los gastos causados por la partición o liquidación, y los hechos en beneficio común, se
imputan a la masa. No son comunes los trabajos o desembolsos innecesarios o referentes a pedidos desestimados,
los que deben ser soportados exclusivamente por los herederos que los causen.
Una vez individualizadas las deudas, cargas y los legados, es preciso formar la llamada hijuela de bajas que consiste
en apartar un lote de bienes con los que se deben cancelar esas deudas y cumplir con los legados.
El cuarto capítulo se denomina “el liquido partible”, y es el resultado de deducir las bajas comunes del cuerpo
general de bienes con los que se conforma la masa de la partición.
El quinto capítulo es “la división”, y en el él partidor debe determinar la cuota hereditaria que le corresponde a cada
heredero y su correspondiente transformación en un valor monetario de acuerdo a la valuación que se haya
efectuado del liquido partible.

Formación de lotes: Art. 2377-Formación de los lotes. Para la formación de los lotes no se tiene en cuenta la
naturaleza ni el destino de los bienes, excepto que sean aplicables las normas referentes a la atribución preferencial.
Debe evitarse el parcelamiento de los inmuebles y la división de las empresas.
Si la composición de la masa no permite formar lotes de igual valor, las diferencias entre el valor de los bienes que
integran un lote y el monto de la hijuela correspondiente deben ser cubiertas con dinero, garantizándose el saldo
pendiente a satisfacción del acreedor. El saldo no puede superar la mitad del valor del lote, excepto en el caso de
atribución preferencial.
Excepto acuerdo en contrario, si al deudor del saldo se le conceden plazos para el pago y, por circunstancias
económicas, el valor de los bienes que le han sido atribuidos aumenta o disminuye apreciablemente, las sumas
debidas aumentan o disminuyen en igual proporción.
Si hay cosas gravadas con derechos reales de garantía, debe ponerse a cargo del adjudicatario la deuda respectiva,
imputándose a la hijuela la diferencia entre el valor de la cosa y el importe de la deuda.
Las sumas que deben ser colacionadas por uno de los coherederos se imputan a sus derechos sobre la masa.
El último capitulo de la cuenta particionaria es “la adjudicación” y en el se concreta la división de la herencia. El
partidor debe formar lotes con los bienes indicados en el liquido partible cuyo resultado numérico coincida con la
porción ideal que le corresponde a cada heredero. Cada uno de estos lotes se denomina hijuela,
En cada hijuela, el partidor detallara los bienes y su correspondiente valor debiendo el resultado final coincido con la
cuota hereditaria, con las compensaciones que correspondan. Art. 2378.-“Asignación de los lotes. Los lotes
correspondientes a hijuelas de igual monto deben ser asignados por el partidor con la conformidad de los herederos
y, en caso de oposición de alguno de éstos, por sorteo.
En todo caso se deben reservar bienes suficientes para solventar las deudas y cargas pendientes, así como los
legados impagos.”

Al asignarse bienes a cada hijuela, el heredero adjudicatario deberá recibir también los títulos que corresponden a
aquellos. (Art. 2379). Como a partir de la aprobación de la cuenta particionaria, cada heredero es propietario
exclusivo de los bienes que se le han asignado, resulta lógico que se le entregue los títulos que sirven de
antecedente de su dominio.

Aprobación de la cuenta particionaria: presentada la partición en el expediente sucesorio se dara vista a los
herederos por el plazo de diez días, debiendo notificárselos por cedula. Si no hubiera oposición, el juez la aprobara
salvo que violare normas sobre la división de la herencia o hubiera incapaces que pudieran resultar perjudicados. Si
mediare oposición el juez citara a una audiencia a las partes, al partidor y si correspondiere, al ministerio pupilar, a
fin de procurar el arreglo de las diferencias y si este no se logra, resolverá dentro de los diez días.
Una vez aprobada la cuenta particionaria y previo a ordenar la inscripción de las hijuelas respecto e los bienes
registrables, deberán solicitarse los certificados acerca del estado jurídico de los inmuebles según las constancias
registrales.
Cumplidos con estos recaudos se expedirán testimonios de las hijuelas a fin de inscribir los bienes a nombre de los
herederos adjudicatarios y en caso de encontrarse ellos situados en extraña jurisdicción se deberá proceder
conforme lo establece la ley 22.172.

3)Principios y Efectos de la partición: carácter declarativo. Garantía de evicción. Defectos ocultos.


Nulidad y reforma de la partición. Prescripción.

La partición pone fin a la indivisión hereditaria conforme lo establece el art. 2363 del CCCN. A partir de ese
momento quedan individualizados los bienes que corresponden en plena y exclusiva propiedad a cada uno de los
herederos.
Carácter declarativo: otro de los efectos de la partición es su carácter declarativo y a consecuencia del cual se
retrotrae su vigencia al momento de la muerte del causante.

Art.2403: Efecto declarativo. La partición es declarativa y no traslativa de derechos. En razón de ella, se juzga que
cada heredero sucede solo e inmediatamente al causante en los bienes comprendidos en su hijuela y en los que se le
atribuyen por licitación, y que no tuvo derecho alguno en los que corresponden a sus coherederos.
Igual solución se entiende respecto de los bienes atribuidos por cualquier otro acto que ha tenido por efecto hacer
cesar la indivisión totalmente, o de manera parcial sólo respecto a ciertos bienes o ciertos herederos.
Los actos válidamente otorgados respecto de algún bien de la masa hereditaria conservan sus efectos a
consecuencia de la partición, sea quien sea el adjudicatario de los bienes que fueron objeto de esos actos”
La consecuencia principal de este efecto es que la adjudicación hecha a favor de cada heredero implica que esos
bienes han sido recibidos directamente del causante y que no tuvo ningún derecho sobre los que se adjudicaron a
los otros herederos

Garantía de evicción: cuando se transmite un derecho de una persona a otra, el transmitente debe asegurar la
existencia y legitimidad del derecho transmitido, se hace extensivo a toda turbación de derecho, o a reclamos de
terceros o a turbación del hecho causados por el transmitente.
Esta es la llamada garantía de evicción y como la esencia de la partición es la igualdad entre los coherederos, los
bienes incluidos en las hijuelas adjudicadas a cada uno de ellos deben mantenerse sin modificaciones por causas
ajenas a los interesados. A fin de asegurar la integridad de dichas hijuelas, se ha mantenido la garantía de evicción
reciproca entre los herederos.

Art. 2404: Evicción. En caso de evicción de los bienes adjudicados, o de sufrir el adjudicatario alguna turbación del
derecho en el goce pacífico de aquéllos, o de las servidumbres en razón de causa anterior a la partición, cada uno de
los herederos responde por la correspondiente indemnización en proporción a su parte, soportando el heredero
vencido o perjudicado la parte que le toque. Si alguno de los herederos resulta insolvente, su contribución debe ser
cubierta por todos los demás.
Ninguno de los herederos puede excusar su responsabilidad por haber perecido los bienes adjudicados en la
partición, aunque haya sido por caso fortuito.
Garantía por vicios ocultos y redhibitorios: los vicios ocultos son aquellos que el adquiriente no conoció al momento
de la adquisición y los vicios redhibitorios son los defectos que hacen la cosa impropia para su destino por razones
estructurales o funcionales o disminuyen su utilidad a tal extremo que, de haberlos conocido, el adquiriente no la
habría adquirido, o su contraprestación hubiese sido significativamente menor.

Art.2407: Defectos ocultos. Los coherederos se deben recíprocamente garantía de los defectos ocultos de los bienes
adjudicados.

Prescripción de la acción de garantía: a diferencia de la legislación anterior en la que existía una norma expresa que
imponía la prescripción de la garantía de evicción a los diez años, en la actualidad no existen normas específicas.
En consecuencia resulta aplicable el art. 2560 que establece el plazo general de la prescripción de cinco años.
El plazo para reclamar por vicios ocultos se ha ampliado, de tres meses, a un año (art.2564)

Nulidad y reforma de la partición:


“la partición puede ser invalidada por las mismas causas que pueden serlo los actos jurídicos…” (art. 2408). Se podrá
requerir la nulidad de la partición por vicios de forma. Tambien podrá haber nulidad porque ha mediado incapacidad
de uno de los coherederos y esa incapacidad no ha sido suplida en la forma prevista por la ley Otra de las causas de
nulidad puede ser la existencia de un vicio del consentimiento que afecte a alguno de los coherederos o bienque se
haya producido el vicio de lesión.
La reforma de la partición puede tener lugar cuando aparecen bienes del acervo que no han sido tenidos en cuenta y
la partición de elles en especie no resulta posible.
Cuando ha existido una causa de nulidad, el perjudicado puede solicitarla en cuyo caso la partición quedara sin
efecto y deberá realizarse una nueva. Sin embargo el art 2408, ofrece otra posibilidad “…el perjudicado puede
solicitar la nulidad, o que se haga una partición complementaria o rectificativa, o la atribución de un complemento
de su porción”.
Esto significa que a pesar de existir una causa de nulidad, el afectado no la deje sin efecto sino que pretenda
salvaguardar su derecho vulnerado con una reforma de la partición.

4) Atribución preferencial de un establecimiento. Derecho de habitación del conyug… etc

Art. 2380: .-Atribución preferencial de establecimiento. El cónyuge sobreviviente o un heredero pueden pedir la
atribución preferencial en la partición, con cargo de pagar el saldo si lo hay, del establecimiento agrícola, comercial,
industrial, artesanal o de servicios que constituye una unidad económica, en cuya formación participó.
En caso de explotación en forma social, puede pedirse la atribución preferencial de los derechos sociales, si ello no
afecta las disposiciones legales o las cláusulas estatutarias sobre la continuación de una sociedad con el cónyuge
sobreviviente o con uno o varios herederos.
El saldo debe ser pagado al contado, excepto acuerdo en contrario.

Atribución preferente de otros bienes:

Art.2381: Atribución preferencial de otros bienes. El cónyuge sobreviviente o un heredero pueden pedir también la
atribución preferencial:
a) de la propiedad o del derecho a la locación del inmueble que le sirve de habitación, si tenía allí su residencia al
tiempo de la muerte, y de los muebles existentes en él;
b) de la propiedad o del derecho a la locación del local de uso profesional donde ejercía su actividad, y de los
muebles existentes en él;
c) del conjunto de las cosas muebles necesarias para la explotación de un bien rural realizada por el causante como
arrendatario o aparcero cuando el arrendamiento o aparcería continúa en provecho del demandante o se contrata
un nuevo arrendamiento con éste.

Derecho real de habitación del cónyuge supérstite. Condiciones y requisitos exigidos para su viabilidad. Régimen
especial de los sepulcros.

Art. 2383: .-Derecho real de habitación del cónyuge supérstite. El cónyuge supérstite tiene derecho real de
habitación vitalicio y gratuito de pleno derecho sobre el inmueble de propiedad del causante, que constituyó el
último hogar conyugal, y que a la apertura de la sucesión no se encontraba en condominio con otras personas. Este
derecho es inoponible a los acreedores del causante.”
Uno de los requisitos para gozar de este derecho es que el inmueble haya constituido el último hogar conyugal. En el
caso de que los cónyuges hayan desarrollado un proyecto de vida en común en el que no incluyan la convivencia en
forma permanente sino esporádica, no existirá el hogar conyugal y por ello no resulta aplicable el derecho de
habitación a favor del sobreviviente.
Otro de los requisitos es que al tiempo del fallecimiento el inmueble no se encontrara en condominio con otras
personas.

Regimen especial de los sepulcros

Al no haber una regulación específica de esta nueva figura se hace muy dificultoso su encasillamiento. Según
determinados autores, la naturaleza jurídica del derecho del titular de la sepultura es la de derecho personal,
mientras que para otros sería correcto hablar de derecho real.
Evidentemente es preferible la posibilidad de adquirir algún derecho real, porque por su publicidad registral da
seguridad y además otorga otras ventajas.
Ocurre que no sólo estamos hablando de obtener un lugar físico sino también estamos adquiriendo una serie de
servicios adicionales (vigilancia, capillas, inhumación, espacios verdes, etc) y acá es donde aparecen las obligaciones.
Analicemos su encuadre legal como un derecho real:
Evidentemente es preferible la posibilidad de adquirir algún derecho real.
Las ventajas son que ofrece mayor garantía, ya que al recaer sobre la cosa, se da una relación (entre ella y los
particulares) directa e inmediata oponible erga omnes. ESTO DA SEGURIDAD.
Otra ventaja es que la registración del derecho real da lugar a la publicidad, dando confiabilidad y seguridad. ES LA
PUBLICIDAD REGISTRAL.

Siempre hay que tener en cuenta que en el ámbito de los derechos reales sus normas reguladoras son de orden
público, y ellas no pueden ser dejadas de lado por las convenciones privadas, rige el principio del «NUMERUS
CLAUSUS» que solo se va a poder encuadrar dentro de los derechos reales ya existentes porque no se puede crear
uno nuevo.
Entonces, dentro de los derechos reales, ya sea sobre cosa propia (como el dominio, condominio, propiedad
horizontal) o sobre cosa ajena (usufructo, uso, habitación, servidumbre) es donde se debe analizar su encuadre.

6) Partición por ascendientes. Concepto. Fundamento. Formas. Efectos. Normas propias para la partición por
donación y por testamento.

La partición por ascendientes es aquella que va a realizar el causante por donación o testamento, respecto de los
bienes que tenga en vida. Determina la hijuela de cada uno de sus herederos.
Las formas pueden ser por donación o por testamento.
Art.2411: Personas que pueden efectuarla. La persona que tiene descendientes puede hacer la partición de sus
bienes entre ellos por donación o por testamento.
Si es casada, la partición de los bienes propios debe incluir al cónyuge que conserva su vocación hereditaria. La
partición de los gananciales sólo puede ser efectuada por donación, mediante acto conjunto de los cónyuges.
Art.2412.-Bienes no incluidos. Si la partición hecha por los ascendientes no comprende todos los bienes que dejan a
su muerte, el resto se distribuye y divide según las reglas legales.
Art.2415: Objeto. La partición por donación no puede tener por objeto bienes futuros.
Puede ser hecha mediante actos separados si el ascendiente interviene en todos ellos.
Art. 2416.-Derechos transmitidos. El donante puede transmitir la plena propiedad de los bienes donados, o bien
únicamente la nuda propiedad, reservándose el usufructo.
También puede pactarse entre el donante y los donatarios una renta vitalicia en favor del primero.
Art. 2417: Acción de reducción. El descendiente omitido en la partición por donación o nacido después derealizada
ésta, y el que ha recibido un lote de valor inferior al correspondiente a su porción legítima, pueden ejercer la acción
de reducción si a la apertura de la sucesión no existen otros bienes del causante suficientes para cubrirla.
Art. 2421.-Enajenación de bienes. La partición hecha por testamento es revocable por el causante y sólo produce
efectos después de su muerte. La enajenación posterior al testamento de alguno de los bienes incluidos en la
partición no afecta su validez, sin perjuicio de las acciones protectoras de la porción legítima que pueden
corresponder.
Sus beneficiarios no pueden renunciar a ella para solicitar una nueva partición, excepto por acuerdo unánime.
7) Colación de donaciones. Concepto. etc

La colación es el derecho que tienen los descendientes y el cónyuge del causante para exigir que otro legitimario que
ha recibido un bien por un acto a título gratuito de aquel, traiga a la masa de partición el valor de dicho bien, a
menos que se lo hubiere dispensado expresamente de hacerlo.
Derecho que tiene un heredero forzoso para exigir que otro heredero forzoso, que ha recibido una donacion en vida
del causante, traiga a la masa de partición el valor de dicha donación.
La donación que efectúa el causante en vida a un heredero forzoso debe ser considerada como un anticipo de la
herencia que le corresponderá.
Por ese motivo, la acción de colación tiene por objeto restablecer la igualdad entre los herederos forzosos que ha
sido quebrada por esta donación.
La colación no opera de pleno derecho, sino que tiene que ser peticionada por un heredero forzoso y debe existir
condena judicial en contra del heredero forzoso donatario.

Requisitos para que la colación pueda tener lugar: que el causante haya transferido por un acto a título gratuito un
bien a un legitimario como son sus descendientes o su cónyuge, que otro legitimario accione por colación, que la
demanda se dirija contra el legitimario que ha recibido el bien, que este hubiera aceptado la herencia y por último
que el fallecido no haya dispensado de la obligación de colacionar.

Especies: Hay dos formas de colacion:

la que se hace en especie, restituyendo a la masa hereditaria el bien donado.


la que se realiza en valores, la cual implica tan solo una operacion matematica en donde el heredero tiene que
restituir el valor de la donacion. (esta especie es la adoptada por nuestro codigo)

Art 2385: Personas obligadas a colacionar. Los descendientes del causante y el cónyuge supérstite que concurren a
la sucesión intestada deben colacionar a la masa hereditaria el valor de los bienes que les fueron donados por el
causante, excepto dispensa o cláusula de mejora expresa en el acto de la donación o en el testamento.

Dicho valor se determina a la época de la partición según el estado del bien a la época de la donación.

También hay obligación de colacionar en las sucesiones testamentarias si el testador llama a recibir las mismas
porciones que corresponderían al cónyuge o a los descendientes en la sucesión intestada.

El legado hecho al descendiente o al cónyuge se considera realizado a título de mejora, excepto que el testador
haya dispuesto expresamente lo contrario.

*Diferencias con las acciones protectoras de la legítima:


La colacion se establece como una obligacion personal, por cuanto no afecta al bien en si mismo, sino que se
materializa mediante el computo del valor del bien donado. El fundamento de la colacion es restablecer la igualdad
entre los coherederos forzosos, quebrada por la donacion que ha constituido un anticipo de la herencia.
Sin embargo, cuando el valor de la donacion excede la porcion disponible, la colacion ademas de resguardar la
igualdad de los herederos impide que mediante esa donacion se vulnere la porcionlegitima que corresponde a esa
herencia.
ello es asi porque la dispensa solo puede alcanzar la porcion disponible y si el valor de la donacion la supera se esta
afectando la integridad legitima.

***Actos sujetos a colación:


a) Donaciones
b) Actos simulados y encubiertos
c) Sociedades entre padres e hijos
d) Presunción de gratuidad: cuando una persona ha entregado a un legitimario un bien reservándose el usufructo, el
uso, la habitación o con la prestación de una renta vitalicia se presume la gratuidad del acto y la intención de
mejorar al beneficiario, y en tal caso, el valor de los bienes debe ser imputado a la porción disponible y el excedente
es objeto de colación.
e) Fideicomiso
Actos de los que resulta una ventaja particular: art. 2391: Beneficios hechos al heredero. Los descendientes y el
cónyuge supérstite obligados a colacionar también deben colacionar los beneficios recibidos a consecuencia de
convenciones hechas con el difunto que tuvieron por objeto procurarles una ventaja particular, excepto dispensa
y lo dispuesto para el heredero con discapacidad en el artículo 2448.

***Actos no sujetos a colación:


Art. 2392.-Beneficios excluidos de la colación. No se debe colación por los gastos de alimentos; ni por los de
asistencia médica por extraordinarios que sean; ni por los de educación y capacitación profesional o artística de
los descendientes, excepto que sean desproporcionados con la fortuna y condición del causante; ni por los gastos
de boda que no exceden de lo razonable; ni por los presentes de uso; ni por el seguro de vida que corresponde al
heredero, pero sí por las primas pagadas por el causante al asegurador, hasta la concurrencia del premio cobrado
por el asegurado. También se debe por lo empleado para establecer al coheredero o para el pago de sus deudas.

Donaciones inoficiosas: Art. 2386.-Donaciones inoficiosas. La donación hecha a un descendiente o al cónyuge cuyo
valor excede la suma de la porción disponible más la porción legítima del donatario, aunque haya dispensa de
colación o mejora, está sujeta a reducción por el valor del exceso.

ARTICULO 2387.-Heredero renunciante. El descendiente o el cónyuge que renuncia a la herencia pueden conservar
la donación recibida o reclamar el legado hecho, hasta el límite de la porción disponible.

Acción de colación: como la colación no opera de pleno derecho requiere la interposición de la demanda por parte
de un legitimado que debe ser dirigía contra quienes tengan la legitimación pasiva y que culmine con la sentencia
que hace lugar a la demanda. Esta acción solo es viable a partir del fallecimiento del causante.
Al tratarse de una acción personal, podrá ser renunciada después de la muerte, ya sea en forma expresa o tacita. La
realización de la partición sin haber planteado previamente la acción de colacion debe ser interpretada como una
renuncia tacita.
Al ser una acción personal, la sentencia que condena a colacionar solo beneficia al heredero demandante y no a
aquellos otros herederos que no intervinieron en ese proceso.
La partición de la herencia deberá postergarse hasta que finalice la acción de colación intentada y eventualmente
solo podría llevarse a cabo una partición provisional con la atribución del uso y goce de los bienes existentes, pero
no la partición definitiva.

Cálculo del valor colacionable:

Art.2385 “...dicho valor se determina a la época de la partición según el estado del bien a la época de la
donación...”.

Es necesario determinar el valor que debe ser colacionado. Para determinar el valor colacionable hay que valuar el
bien tal como se encontraba en el momento en que se hizo la donación y ese importe actualizarlo a la época en que
se realiza la partición.

Modo de hacer la colacion:


ARTICULO 2396.-Modo de hacer la colación. La colación se efectúa sumando el valor de la donación al de la masa
hereditaria después de pagadas las deudas, y atribuyendo ese valor en el lote del donatario.

Frutos: ARTICULO 2394.-Frutos. El heredero obligado a colacionar no debe los frutos de los bienes sujetos a
colación, pero debe los intereses del valor colacionable desde la notificación de la demanda.

Perecimiento sin culpa:


ARTICULO 2393.-Perecimiento sin culpa. No se debe colación por el bien que ha perecido sin culpa del donatario.
Pero si éste ha percibido una indemnización, la debe por su importe.

Responsabilidad del donatario: como la donación traspasa el derecho de propiedad a favor del donatario, el
acrecimiento el perecimiento del bien donado, lo beneficia o perjudica, según el caso.
Cuando el perecimiento se debe a la culpa del donatario, debe colacionar el valor de ese bien.
Lo mismo sucede cuando no ha mediado culpabilidad en el perecimiento, pero se ha percibido una indemnización
que subroga al bien.
Otra situación que deriva del derecho de propiedad que tiene el donatario sobre el bien donado es que no debe los
frutos que este produzca. Sin embargo, la situación cambia cuando ya se ha interpuesto una acción de colación y la
demanda es notificada al donatario. En este supuesto, el legitimario demandado debe los intereses del valor
colacionable desde la notificación de la demanda.

Legitimación activa y pasiva en la acción de colación: distintos supuestos.

- Legitimación activa: ARTICULO 2395.-Derecho de pedir la colación. La colación sólo puede ser pedida por quien
era coheredero presuntivo a la fecha de la donación.
El cónyuge supérstite no puede pedir la colación de las donaciones hechas por el causante antes de contraer
matrimonio.

- Legitimación pasiva: el art. 2385 menciona en su parte pertinente que “los descendientes del causante y el
cónyuge supérstite que concurren a la sucesión intestada deben colacionar a la masa hereditaria el valor de los
bienes que les fueron donados por el causante, excepto dispensa o clausula de mejora expresa en el acto de la
donación o en el testamento...”

Colación por otro: no es admitida en nuestro derecho. No existe deber de colacionar cuando la donación no ha sido
recibida por el propio demandado sino por un pariente de él.
Situación del posible heredero al momento de recibir la donación: art.2388 Heredero que no lo era al tiempo de la
donacion: el descendiente que no era heredero presuntivo al tiempo de la donación, pero que resulta heredero,
no debe donación. El cónyuge no debe colación cuando la donación se realiza antes del matrimonio”.

ARTICULO 2389.-Donación al descendiente o ascendiente del heredero. Las donaciones hechas a los descendientes
del heredero no deben ser colacionadas por éste.
El descendiente del donatario que concurre a la sucesión del donante por representación debe colacionar la
donación hecha al ascendiente representado.

ARTICULO 2390.-Donación al cónyuge del heredero. Las donaciones hechas al cónyuge del heredero no deben ser
colacionadas por éste.
Las hechas conjuntamente a ambos cónyuges deben ser colacionadas por la mitad, por el que resulta heredero.

Objeto de colación. Gastos no colacionables. Dispensa de colación y mejora.

La sentencia condenatoria que obliga a colacionar establecerá el valor del bien colacionable. Hecha esta
determinación, dicho valor se computara dentro de la masa de partición y se imputara en la hijuela del legitimario
donatario.

Art.2396.-Modo de hacer la colación. La colación se efectúa sumando el valor de la donación al de la masa


hereditaria después de pagadas las deudas, y atribuyendo ese valor en el lote del donatario.

Dispensa de la colación:

Conforme resulta del art.2385, la dispensa puede instrumentarse en el acto de la donación o en el testamento, al
igual que una clausula en la que se mejore en forma expresa al donatario.

A pesar de la existencia de herederos forzosos, el causante siempre tiene la posibilidad de decidir acerca del destino
de parte de sus bienes. Esa parte se denomina PORCION DISPONIBLE.
Cuando el causante a traves de su donacion no quiere hacer un anticipo de herencia sino beneficiar al heredero
forzoso donatario, debe manifestarlo en forma expresa.
Esta es la dispensa de la colacion que se podra efectuar en la medida de la porcion disponible. La dispensa de la
colacion requiere la forma testamentaria.
Si el valor de la donacion excediese la porcion disponible y el causante hubiese hecho testamento dispensandolo, la
obligacion de colacionar solo sera admisible por dicho excedente. cuando se ha construido un fideicomiso por
contrato, no cabe interpretar que se ha dispensado la obligacion de colacionar al beneficiario que es heredero
legitimo por cuanto no constituye testamento.
Presunción de mejora: existe un caso en el que la propia norma presume la intención de mejorar en la medida de la
porción disponible. Ello tiene lugar en la situación prevista por el art.2461 “si por acto entre vivos a titulo oneroso el
causante transmite a alguno de los legitimarios la propiedad de bienes con reserva de usufructo, uso o habitación,
o con la contraprestación de una renta vitalicia, se presume sin admitir prueba en contrario la gratuidad del acto y
la intención de mejorar al beneficiario...el valor de los bienes debe ser imputado a la porción disponible y el
excedente es objeto de colación...”.

Hay una presunción legal de gratuidad de un acto que es ostensiblemente oneroso pero que significa solo la
transmisión de la nuda propiedad de dicho bien. Las peculiares circunstancias de esta contratación hacen también
presumir la intención de mejorar al legitimario en la medida de la porción disponible y si hubiera un excedente sería
objeto de colación.

Colación de deudas:

Debido a que al transmitirse la herencia se traspasan no solo los bienes que eran propiedad del causante sino
también los créditos que este tenía, es preciso diferenciar cuando el deudor es al mismo tiempo un heredero y el
caso en que el deudor sea un extraño.
En el primer caso, el heredero recibirá bienes como consecuencia de su condición de tal, pero al mismo tiempo
deberá cancelar la deuda que tenía con el causante.

La colacion de deudas requiere como presupuesto que el heredero forzoso sea deudor del causante. Normalmente
la deuda que el heredero tenia con el causante se compensara con los bienes a recibir pero el problema se presenta
cuando el heredero es insolvente o cuando la deuda ha prescripto. En estos supuestos, no se podra efectuar la
compensacion o no se podra ejecutar al heredero por el cobro del credito.

Art. 2397 Deudas que se colacionan. Se colacionan a la masa las deudas de uno de los coherederos en favor del
causante que no fueron pagadas voluntariamente durante la indivisión, aunque sean de plazo no vencido al
tiempo de la partición.

Art.2398.-Suspensión de los derechos de los coherederos. Los coherederos no pueden exigir el pago antes de la
partición.

Al no poder reclamar el cumplimiento de esta deuda, necesariamente al tiempo de la partición, debe ser
colacionada. Además las deudas que el heredero tenia con el causante, también son objeto de colación las que
contraiga con los otros coherederos respecto de los bienes indivisos.

Art.2399.-Deudas surgidas durante la indivisión. La colación de deudas se aplica también a las sumas de las cuales
un coheredero se hace deudor hacia los otros en ocasión de la indivisión, cuando el crédito es relativo a los bienes
indivisos, excepto que los segundos perciban el pago antes de la partición.

Art. 2400.-Intereses. Las sumas colacionables producen intereses desde la apertura de la sucesión si el coheredero
era deudor del difunto, si no los devengaban ya con anterioridad, y desde el nacimiento de la deuda si ésta surge
en ocasión de la indivisión.

Art.2401.-Coheredero deudor y acreedor a la vez. Si el coheredero deudor es a la vez acreedor, aunque su crédito
no sea aún exigible al tiempo de la partición, hay compensación y sólo se colaciona el exceso de su deuda sobre su
crédito.

Art.2402.-Modo de hacer la colación. La colación de las deudas se hace deduciendo su importe de la porción del
deudor. Si la exceden, debe pagarlas en las condiciones y plazos establecidos para la obligación.

La imputación de la deuda al lote del coheredero deudor es oponible a sus acreedores.”

Al producirse la colación de la deuda, el heredero recibirá menos bienes hereditarios y esta situación no podrá ser
objetada por sus propios acreedores.
BOLILLA XXV: SUCESIÓN INTESTADA

1. Sucesión intestada: concepto, coexistencia con la sucesión testamentaria. Principios que la rigen. Órdenes
hereditarios. Grados de parentesco. Calidad u origen de los bienes hereditarios.

De acuerdo a lo establecido por el art.2277, la transmisión de la herencia se efectúa a favor de las personas llamadas
a suceder al causante por el testador o por ley. De allí que la sucesión intestada es aquella en la que la
determinación del heredero se realiza siguiendo los principios establecidos en la ley.
En nuestro sistema legal, la herencia puede deferirse en parte por voluntad del causante y en otra por disposición de
la ley, conforme resulta del art. 2277.
El llamamiento realizado por la ley queda determinado a los miembros de la familia que el legislador establezca, en
el orden y con las condiciones que de ella surjan.
La elección que hace la ley se basa en los afectos presuntos del causante de acuerdo a la naturaleza de las relaciones
de familia.

Casos en que tiene lugar: la forma que tiene el causante de excluir el llamamiento deferido de acuerdo a la ley es
hacer un testamento.
La sucesión se regirá por la ley cuando haya un testamento válido en el que se hubieran efectuado sólo legados u
otras disposiciones, pero sin instituir heredero, cuando en el testamento en el que han designado heredero haya
sido revocado antes del fallecimiento, cuando el testamento sea anulado con posterioridad a la muerte por no
cumplir con las solemnidades, por incapacidad, vicios del consentimiento, o cuando el heredero llamado en el
testamento renuncie a la herencia o sea declarado indigno.

Principios que rigen la sucesión intestada:

a) Órdenes hereditarios: el orden de preferencia significa que, los herederos de un orden preferente excluyan a los
de un orden posterior.
El orden de preferencia es el siguiente:
1°: orden de los descendientes
2°: orden de los ascendientes
3°: orden del cónyuge
4° orden de los colaterales hasta el cuarto grado.
La excepción se encuentra en el orden del cónyuge que concurre con los descendientes y con los ascendientes, no
siendo excluido por estos, pero excluye a los colaterales.
A falta de herederos, los bienes pasan al Estado en calidad de propietario de las cosas sin dueño.

Art.2424.-Heredero legítimo. Las sucesiones intestadas se defieren a los descendientes del causante, a sus
ascendientes, al cónyuge supérstite, y a los parientes colaterales dentro del cuarto grado inclusive, en el orden y
según las reglas establecidas en este Código.
A falta de herederos, los bienes corresponden al Estado nacional, provincial o a la Ciudad Autónoma de Buenos
Aires, según el lugar en que están situados.”

b) Prelación de grado: dentro de cada orden, el heredero de grado más próximo al causante excluy al de grado más
remoto, salvo el derecho de representación
Si una persona deja descendientes, estos se encuentran en el primer orden de preferencia, pero dentro de ese orden
pueden haber quedado hijos, nietos, bisnietos del causante. No todoso son llamados conjuntamente sino que, por la
prelación de grados, la herencia será recibida por los hijos salvo el derecho de representación.

c) Naturaleza y origen de los bienes: Art.2425: “En las sucesiones intestadas no se atiende a la naturaleza ni al
origen de los bienes que componen la herencia, excepto disposición legal expresa en contrario.”
Esto significa que los bienes del causante serán divididos entre los herederos sin tomar en cuenta si se trata de
bienes inmuebles, muebles registrables, muebles o derechos. Tampoco se debe considerar la causa o el titulo de su
adquisición.
Excepciones al principio:

-cuando el causante se encontraba casado bajo el régimen de comunidad y esta subsistía al tiempo de la muerte
(necesario distinguir bienes propios de gananciales).
-en la sucesión del adoptado simplemente, cuando el adoptante es llamado por la ley debido a que hay que
determinar si el adoptado ha recibido bienes de su familia de origen.
-cuando se ha transmitido por causa de muerte el derecho de opción y unos herederos deciden aceptar la herencia
original y otros renunciarla a ella pero no a la del actual causante, los que hubieran aceptado ambas herencias
adquieren la totalidad de los derechos y obligaciones que le corresponden al causante.
-en el caso de aceptación forzada de la herencia cuando ha habido ocultamiento o sustracción de bienes de la
herencia.

2. Derecho de representación. Concepto. Fundamento. Requisitos. Casos en que tiene lugar y órdenes en que
opera. Límites. Efectos.

La representación es una excepción al principio de prelación de grados. Mediante ésta, es posible que un heredero
de grado más lejano concurra con herederos de grados más próximos, no siendo excluidos por estos.
En nuestro ordenamiento jurídico se reconoce el derecho de representación en el orden de los descendientes .

(ARTICULO 2427.- Sucesión de los demás descendientes. Los demás descendientes heredan por derecho de
representación, sin limitación de grados.) y también en la línea colateral entre los descendientes de los hermanos
(ARTICULO 2439.- Orden. Los colaterales de grado más próximo excluyen a los de grado ulterior, excepto el derecho
de representación de los descendientes de los hermanos, hasta el cuarto grado en relación al causante. Los
hermanos y descendientes de hermanos desplazan a los demás colaterales.).
De estos enunciados deriva que la representación tiene lugar en la sucesión intestada, aunque puede haber casos de
representación en la sucesión testamentaria, cundo por ejemplo el testador expresamente lo ha establecido, o
cuando ha contemplado casos de sustitución permitida por el art.2491 a favor de los descendientes del instituido en
primer lugar para el caso que este no pueda o no quiera aceptar la herencia.

Según el art.2429 “la representación tiene lugar en caso de premoriencia, renuncia o indignidad del ascendiente…”.
Para que la representación pueda tener lugar es imprescindible que el representante sea hábil para heredar al
causante, es decir que tenga un llamamiento vigente y no esté contrariado por la renuncia y la indignidad, y también
que sea hábil para heredar al representado, aunque puede renunciar a la herencia de este e igualmente
representarlo.
El representante ocupa el lugar del representado con los mismos derechos y obligaciones que éste tenía en la
sucesión del causante.
El representante deberá colacionar el valor de la donación que el representado hubiera recibido del causante.
Cuando existe derecho de representación, la herencia se divide por estirpes, es decir, la que forma cada uno de los
hijos con relación a su padre.

Art. 2428.-Efectos de la representación. En caso de concurrir descendientes por representación, la sucesión se


divide por estirpes, como si el representado concurriera. Si la representación desciende más de un grado, la
subdivisión vuelve a hacerse por estirpe en cada rama.
Dentro de cada rama o subdivisión de rama, la división se hace por cabeza.”

Art. 2429.-Casos en que tiene lugar. La representación tiene lugar en caso de premoriencia, renuncia o indignidad
del ascendiente.
No la impide la renuncia a la herencia del ascendiente, pero sí la indignidad en la sucesión de éste.
Se aplica también en la sucesión testamentaria, si el testador se limita a confirmar la distribución a la herencia que
resulta de la ley.
3. Derechos hereditarios. Vocación de los descendientes, ascendientes y cónyuge supérstite. Modos de heredar y
concurrir. Vocación sucesoria en caso de adopción simple.

Vocación de los descendientes: es el primer orden, sin que exista ninguna diferencia de acuerdo a la naturaleza del
vínculo, ya que tienen idéntico derecho los descendientes matrimoniales, extramatrimoniales, y adoptivos, al igual
que los nacidos mediante TRHA.

El llamamiento de los descendientes tiene las siguientes características:

- Los descendientes Están protegidos por un llamamiento imperativo, ya que son legitimarios y su legítima es de dos
tercios
ARTICULO 2445.- Porciones legítimas. La porción legítima de los descendientes es de dos tercios, la de los
ascendientes de un medio y la del cónyuge de un medio. Dichas porciones se calculan sobre la suma del valor líquido
de la herencia al tiempo de la muerte del causante más el de los bienes donados computables para cada legitimario,
a la época de la partición según el estado del bien a la época de la donación. Para el cómputo de la porción de cada
descendiente sólo se toman en cuenta las donaciones colacionables o reducibles, efectuadas a partir de los
trescientos días anteriores a su nacimiento o, en su caso, al nacimiento del ascendiente a quien representa, y para el
del cónyuge, las hechas después del matrimonio.
Además gozan de la investidura de pleno derecho como herederos
ARTICULO 2337.- Investidura de pleno derecho. Si la sucesión tiene lugar entre ascendientes, descendientes y
cónyuge, el heredero queda investido de su calidad de tal desde el día de la muerte del causante, sin ninguna
formalidad o intervención de los jueces, aunque ignore la apertura de la sucesión y su llamamiento a la herencia.
Puede ejercer todas las acciones transmisibles que correspondían al causante. No obstante, a los fines de la
transferencia de los bienes registrables, su investidura debe ser reconocida mediante la declaratoria judicial de
herederos.

-Pueden ser sujetos activos y pasivos de la acción de colación.


Se ha diferenciado el llamamiento de los hijos respecto de los demás descendientes. Art.2426 “los hijos del causante
lo heredan por derecho propio y por partes iguales”. Al estar todos los hijos en igualdad de condiciones, la herencia
se divide entre ellos en partes iguales, es decir por cabeza.

Art.2427: “los demás descendientes heredan por derecho de representación, sin limitación de grados”.
Los descendientes excluyen a los ascendientes y a los colaterales, y concurren con el cónyuge supérstite.
Si estaba el causante casado bajo el régimen de comunidad, el cónyuge supérstite recibe la mitad de gananciales y la
otra mitad es heredada por los descendientes.
Respecto de los bienes propios o bien si estaban casados bajo el régimen de separación de bienes, el cónyuge
concurre en estos bienes como un hijo mas. ARTICULO 2433.- Concurrencia con descendientes. Si heredan los
descendientes, el cónyuge tiene en el acervo hereditario la misma parte que un hijo. En todos los casos en que el
viudo o viuda es llamado en concurrencia con descendientes, el cónyuge supérstite no tiene parte alguna en la
división de bienes gananciales que corresponden al cónyuge prefallecido.

Vocación de los ascendientes: el segundo orden corresponde a los descendientes del causante que tendrán su
llamamiento a la herencia en caso de no haber descendientes.
Los ascendientes tendrán los mismos derechos sin que tenga relevancia la naturaleza del vinculo, ya sea
matrimonial, extramatrimonial, adoptivo o el que se genera con las TRHA.

Características del llamamiento:

-Tienen como legitima un medio (Art.2445), y gozan de investidura de pleno derecho.


-No son sujetos activos ni pasivos de la colación y dentro de ese orden no existe el derecho de representación, por lo
que el ascendiente más cercano excluye al más lejano.
-Los ascendientes concurren con el cónyuge recibiendo este la mitad de la herencia, y la otra mitad se divide entre
aquellos.
-Los ascendientes excluyen a los colaterales. ARTICULO 2431.- Supuestos de procedencia. División. A falta de
descendientes, heredan los ascendientes más próximos en grado, quienes dividen la herencia por partes iguales.
Dentro del mismo grado los ascendientes heredan por cabeza y esto significa que cada uno de ellos recibirá una
parte de la herencia igual a la que le corresponde a los restantes coherederos.
Vocación del cónyuge supérstite: el tercero orden sucesorio corresponde al cónyuge supérstite.
Las características de este orden son:
-Es un legitimario
-Su legítima es la mitad de la herencia.
-Tiene la investidura en la calidad de heredero de pleno derecho y puede ser sujeto activo y pasivo de la acción de
colación.

Concurre con los ascendientes y descendientes, a falta de estos, recibe la totalidad de la herencia y excluye a los
colaterales.
Con los descendientes ocurre en lo establecido en el Art. 2433 “si heredan los descendientes, el cónyuge tiene en el
acervo hereditario la misma parte que un hijo. En todos los casos en que el viudo/a es llamado en concurrencia con
descendientes, cónyuge supérstite no tiene parte alguna en la división de los bienes gananciales que correspondan al
cónyuge prefallecido”
Cuando concurre con los ascendientes, la forma de dividir la herencia surge del Art.2434: “Si heredan los
ascendientes, al cónyuge le corresponde la mitad de la herencia.

Art.2435.-“A falta de descendientes y ascendientes, el cónyuge hereda la totalidad, con exclusión de los colaterales.”

Vocación sucesoria en caso de adopción simple:

Art.2430.-Caso de adopción. El adoptado y sus descendientes tienen los mismos derechos hereditarios que el hijo y
sus descendientes por naturaleza y mediante técnicas de reproducción humana asistida.
Art.2432: .-Parentesco por adopción. Los adoptantes son considerados ascendientes. Sin embargo, en la adopción
simple, ni los adoptantes heredan los bienes que el adoptado haya recibido a título gratuito de su familia de origen,
ni ésta hereda los bienes que el adoptado haya recibido a título gratuito de su familia de adopción. Estas exclusiones
no operan si, en su consecuencia, quedan bienes vacantes. En los demás bienes, los adoptantes excluyen a los
padres de origen.
La primera parte de la norma coloca en pie de igualdad a todos los adoptantes, cualquiera haya sido el tipo de
adopción, y la iguala con los ascendientes por naturaleza.
Luego establece que, cuando ha mediado la adopción simple, y el adoptado fallece sin dejar descendientes, la norma
les confiere el llamamiento intestado a los adoptantes, quedando excluidos los padres de origen.
También plantea el mismo caso si el adoptado ha recibido bienes a título gratuito de su familia de origen estos no
son heredados por el adoptante y serán heredados por la familia de sangre,
Cuando el adoptado recibió bienes a título gratuito de su familia adoptiva, serán heredados por los adoptantes.
Se ha contemplado el caso que se puede presentar si como consecuencia de las exclusiones señaladas no hubiera
otros miembros de la familia que pudieran heredar esos bienes. En tal situación, los bienes podrán ser heredados
por los adoptantes si fueron recibidos a título gratuito de la familia de origen, y por los padres de sangre si fueron
recibidos a título gratuito por la familia adoptiva.

Exclusión de la vocación sucesoria entre cónyuges. Matrimonio in extremis. Divorcio, separación de hecho y cese
de la convivencia resultante de una decisión judicial.

Puede suceder que los cónyuges se hayan casado bajo el régimen de comunidad y luego lo cambian por el de separación de
bienes. Cuando la comunidad a terminado y se han liquidado los bienes gananciales adjudicándoselos por mitad hay que
verificar si estos deben mantener su calificación como tales cuando se produce el fallecimiento de uno de los cónyuges.
La opinión mayoritaria de la doctrina era que no había que distinguir el origen de los bienes, y en consecuencia, heredara como
un hijo más, porque al estar liquidada la comunidad no existen bienes gananciales, sino bienes propios. El cónyuge supérstite
para mantener la vocación hereditaria tiene que haber convivido con el causante hasta su muerte.
En el caso de la comunidad disuelta pero no liquidada es diferente, porque los bienes gananciales permanecen indivisos, y por
ello no han perdido la condición de tal porque falta la adjudicación a los esposos. No cabe otra alternativa que dividirlos
conforme al art.2433, por lo que el conyugue será excluido por los descendientes de la mitad de los bienes gananciales que
correspondan al esposo fallecido.

Art.2436.-Matrimonio “in extremis”. La sucesión del cónyuge no tiene lugar si el causante muere dentro de los treinta días de
contraído el matrimonio a consecuencia de enfermedad existente en el momento de la celebración, conocida por el supérstite, y
de desenlace fatal previsible, excepto que el matrimonio sea precedido de una unión convivencial.
Art.2437.-Divorcio, separación de hecho y cese de la convivencia resultante de una decisión judicial. El divorcio, la separación
de hecho sin voluntad de unirse y la decisión judicial de cualquier tipo que implica cese de la convivencia, excluyen el derecho
hereditario entre cónyuges.

4. Vocación de los parientes colaterales: derecho de representación. Hermanos bilaterales y unilaterales.

Los parientes colaterales no tienen un llamamiento imperativo protegido por la legitima, sino que son llamados por la ley en
forma supletoria de la voluntad del causante. Si el causante ha redactado un testamento en el que exista institución de
herederos, los colaterales carecen de vocación hereditaria por cuando son excluidos por el heredero testamentario.
Los parientes colaterales deben obtener la investidura en la calidad de herederos en forma judicial, y al no ser legitimarios no
son sujetos activos ni pasivos del derecho de colación.

Art.2438.-Extensión. A falta de descendientes, ascendientes y cónyuge, heredan los parientes colaterales hasta el cuarto grado
inclusive”

Art. 2439.-Orden. Los colaterales de grado más próximo excluyen a los de grado ulterior, excepto el derecho de representación
de los descendientes de los hermanos, hasta el cuarto grado en relación al causante. Los hermanos y descendientes de
hermanos desplazan a los demás colaterales.”
El derecho de representación también tiene el límite del cuarto grado, por lo que no podría un colateral más remoto concurrir a
la herencia aunque lo pretendiera hacer en virtud de la representación.

Art.2440.-División. En la concurrencia entre hermanos bilaterales y hermanos unilaterales, cada uno de éstos hereda la mitad de
lo que hereda cada uno de aquéllos.
En los demás casos, los colaterales que concurren heredan por partes iguales.”
Los colaterales llamados en el mismo grado a la herencia la dividirán por cabeza porque no puede haber diferencias entre ellos.
La excepción a esta regla se encuentra en el caso que ante la muerte del causante sean llamados hermanos que tenían a ambos
progenitores en común con el fallecido, y al mismo tiempo otros hermanos con los que solo tengan un vínculo en común con el
muerto. En este caso, cada uno de los hermanos unilaterales recibirá la mitad de lo que le corresponde a cada uno de los
hermanos bilaterales.

5) Declaración de Vacancia. Procedimiento. Curador de bienes: funciones. Derechos de herederos presentados


tardíamente.

Cuando una persona ha fallecido sin que queden miembros de la familia con vocación hereditaria y sin que haya testamento
instituyendo heredero, o si estos existieron, han renunciado a la herencia o bien cuando n se han distribuido en el testamento
mediante legados todos los bienes del causante, nos encontramos ante una herencia vacante. Art.2424”… A falta de herederos,
los bienes corresponden al Estado nacional, provincial o a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, según el lugar en que están
situados.”

Art.2441.-Declaración de vacancia. A pedido de cualquier interesado o del Ministerio Público, se debe declarar vacante la
herencia si no hay herederos aceptantes ni el causante ha distribuido la totalidad de los bienes mediante legados.
Al declarar la vacancia, el juez debe designar un curador de los bienes.
La declaración de vacancia se inscribe en los registros que corresponden, por oficio judicial.

Art.2442.-Funciones del curador. El curador debe recibir los bienes bajo inventario. Debe proceder al pago de las deudas y
legados, previa autorización judicial. A tal efecto, a falta de dinero suficiente en la herencia, debe hacer tasar los bienes y
liquidarlos en la medida necesaria. Debe rendición de cuentas al Estado o a los Estados que reciben los bienes.
La rendición de cuentas de la gestión del curador debe ser efectuada al estado que recibe los bienes, ya que su actuación es la
que ha posibilitado esa adquisición.
Cuando se haya concluido con la gestión de pagar las deudas del causante y cumplir con los legados, debe darse por finalizada la
actuación del curador.

Art.2443.-Conclusión de la liquidación. Concluida la liquidación, el juez debe mandar entregar los bienes al Estado que
corresponde.
Quien reclama posteriormente derechos hereditarios debe promover la petición de herencia. En tal caso, debe tomar los bienes
en la situación en que se encuentran, y se considera al Estado como poseedor de buena fe.
En caso de aparecer un heredero tardío deberá promover la acción de petición de herencia y luego de acreditado su derecho
podrá requerir la entra de los bienes que existan todavía en el estado en que se encuentren.
BOLILLA XXVI: LEGÍTIMA.

1) Legítima. Concepto. Antecedentes históricos. Derecho comparado. Naturaleza jurídica. Caracteres. Nuevas tendencias.
Orden público y autonomía de la voluntad.

La institución de la legítima adquiere relevancia solamente en los casos en que el causante deja legitimarios y ha
hecho un testamento ya sea instituyendo herederos o efectuando legados o ha realizado donaciones en vida.
Cuando no hay legitimarios/ herederos forzosos, el causante puede disponer libremente de sus bienes, ya que no
existe protección de la legítima.
Cuando hay herederos forzosos y el causante no ha otorgado un testamento o no ha realizado donaciones en vida,
tampoco hay problemas de legitima, recibiendo los herederos la totalidad de la herencia. Por lo tanto, la legitima
adquiere relevancia jurudica cuando se presentan herederos forzosos y el fallecido ha hecho un testamento o ha
hecho donaciones.

Concepto: La legitima es la porcion de la herencia de la cual no pueden ser privados los herederos forzosos, salvo
justa causa de desheredacion. La legitima dependera del orden sucesorio llamado a esa herencia. La cuota
hereditaria dependera de la cantidad de herederos de ese orden que concurran a la herencia.

La legítima es la porción de la herencia de la cual no pueden ser privados los legitimarios.

Naturaleza jurídica: la discusión se plantea en torno a si es parte de la herencia, o parte de los bienes.

Según Azpiri la legítima es parte de la herencia, porque los derechos del heredero no se agotan con la recepción de
una determinada cantidad de bienes. Para recibir la legítima es preciso ser heredero.

En cuanto a la libertad de testar y la legítima, por una parte se entiende que la libertad de testar resguarda los
derechos de propiedad del titular de los bienes y por otra parte, que la legítima toma en consideración la protección
de la familia asegurándole que, ante el fallecimiento del propietario recibirán un parte sustancial de sus bienes.

La legítima encuentra su justificación en la solidaridad familiar existente entre el causante y sus parientes más
próximos y en que contribuye a una más justa división de la riqueza resultante del reparto del patrimonio del
causante entre los herederos.

2) Legitimarios. Cuotas etc…

Siguiendo los postulados mayoritarios de la doctrina más reciente, y del Proyecto de 1998, se reduce el monto de
las cuotas legítimas: de los descendientes, de 4/5, a 2/3; de los ascendientes, de 2/3 a un medio. Estas porciones se
calculan sobre el valor líquido de la herencia al tiempo de la muerte del causante, más el valor de los bienes donados
computables para cada legitimario, a la época de la partición según el estado del bien a la época de la donación.
Como se aprecia se toman en cuenta para la tasación dos épocas distintas: los bienes hereditarios se valúan al
tiempo de apertura de la sucesión, y los donados a la época de la partición, aunque sobre la base de su estado a la
época de la donación. Para solucionar esta discordancia cabe recurrir a la norma del art. 2418, según el cual la
valuación se ha de hacer con valores constantes, lo que significa con valores homogéneos de la misma época, que no
puede ser otra que la de la partición (arg. art. 2343, último párrafo).
Para el cómputo de la porción de cada descendiente sólo se toman en cuenta las donaciones colacionables o
reducibles efectuadas a partir de los trescientos días anteriores a su nacimiento, o, en su caso, al nacimiento del
ascendiente a quien representa, y para el cónyuge, las hechas después del matrimonio (art. 2445).
Con respecto al cómputo de la legítima de los descendientes al tomar en cuenta solo las donaciones efectuadas a
partir de los trescientos días anteriores a su nacimiento, plantea la desigualdad entre los hijos, pues algunos tendrán
una porción legítima mayor que la de los demás. Este tema se solucionaba en el Código derogado con la norma del
inc. 1° del art. 1832: La reducción de las donaciones puede ser demandada por los herederos forzosos que existían a
la época de la donación, empero si existieren descendientes que tuvieren derecho a ejercer la acción, también
competerá el derecho de obtener la reducción a los descendientes nacidos después de la donación.

Cálculo de la legítima: este procedimiento solo debe ser realizado cuando se trata de descendientes o del cónyuge
quedando fuera de consideración las donaciones que puedan haber efectuado cuando los llamados como
legitimarios son ascendientes.
En cuanto a las donaciones hechas a los descendientes, es correcto que los bienes que se deben tomar en cuenta se
refieran a la situación de cada legitimario, puesto que puede suceder que una donación haya sido realizada cuando
todavía no había sido concebido el heredero y, por tal motivo no podría perjudicarlo.

El momento a partir del cual se consideran las donaciones también es adecuado porque guarda relación con el plazo
máximo de duración del embarazo y de ese modo, se zanjan las cuestiones que pueden presentarse respecto de una
donación llevada a cabo cuando se conocía que la persona ya había sido concebida. También es pertinente tomar en
cuenta ese mismo plazo respecto del ascendiente a quien se representa y con relación al cónyuge determinar el
momento de la celebración de las nupcias.

Valuación de las donaciones, problemas: la herencia se valúa al tiempo de la muerte, mientras que las donaciones se
tasan a la época de la partición según el estado del bien a la época de la donación.
Quedan establecidos dos momentos en los cuales deben valuares los bienes que componen la masa de legitima, los
de la herencia liquida al momento del fallecimiento y las donaciones al momento de la partición.
La legítima debe ser calculada según los valores de los bienes al momento de la muerte que es cuando se
determinara si la misma ha sido respetada o no.

Masa de legítimas:

La masa de legitima se integra con los bienes que componen la herencia, menos las deudas y cargas, mas el valor de
las donaciones colacionables y reducibles.
En cuanto a la herencia hay que tener en cuenta que se compone con los bienes que existían dentro del patrimonio
del causante al dia de su fallecimiento menos los que se transmiten por causa de muerte.
A su vez dentro de los bienes que componen la herencia no deben ser computados los créditos incobrables, los
frutos devengados dsp de la muerte porque corresponden al los herederos y los bienes comunes que no tengan
valor patrimonial propio, como pueden ser los diplomas, etc.
De esta masa de bienes habrá que restar las deudas que dejo el causante y las cargas hereditarias.
Todas esas deudas y cargas deben ser deducidas de la herencia, porque el 2445 alude al valor líquido de la herencia.
Se deberá adicionar el valor de los bienes donados ya sea a legitimarios y que puedan ser objeto de la acción de
colación o bien a terceros que serán pasibles de la acción de reducción.
Hay que computar las donaciones efectuadas a partir de los 365 anterior al nacimiento del legitimario o al
nacimiento del ascendiente a quien representa y para el cónyuge las hechas después del matrimonio.
Respecto del momento hasta el que las donaciones deben tomarse en cuenta, es preciso tener presente que se
deberán considerar para el cálculo de la legítima solamente las donaciones en las que el donatario haya poseído el
bien donado menos de diez años de antigüedad a la muerte del causante.

No podrán incluirse las donaciones que hubieren perecido sin culpa del donatario
Todos estos bienes deben ser computados a los efectos de determinar la legítima global de esa sucesión en función
de los legitimarios que son llamados a la misma.
Además deberán ser integradas todas o algunas de esas donaciones cuando se quiera establecer la legítima
particular de un heredero porque puede suceder que tenga que ser computada con relación a algún legitimario
mientras que para otro no deberá ser considerada.

Porcion disponible

La legitima, es una porcion de la herencia, no la totalidad. Por ello siempre existe la posibilidad de que el causante
pueda entregar libremente la porcion restante.
La porcion disponible es la porcion de la herencia que puede ser entregada por el causante libremente mediante
disposiciones a titulo gratuito.

La legitima y la porcion disponible sumadas comprenden la totalidad de la herencia y cuando una aumenta la otra
disminuye.
Distincion entre porcion disponible y mejora: la porcion disponible se atribuye a terceros extraños, en cambio la
mejora tiene lugar cuando se entrega esa porcion de bienes a los propios herederos legitimos.

4) Mejora a favor del heredero con discapacidad:


El art.2448 establece la posibilidad de mejorar a descendientes o ascendientes con discapacidad en un tercio de las
porciones legítimas. “El causante puede disponer, por el medio que estime conveniente, incluso mediante un
fideicomiso, además de la porción disponible, de un tercio de las porciones legítimas para aplicarlas como mejora
estricta a descendientes o ascendientes con discapacidad. A estos efectos, se considera persona con discapacidad,
a toda persona que padece una alteración funcional permanente o prolongada, física o mental, que en relación a
su edad y medio social implica desventajas considerables para su integración familiar, social, educacional o
laboral.”

Determinada la masa de legítima y el orden de los legitimarios que son llamados a esa herencia, queda establecida la
legítima global.
El excedente de esa legítima será la porción disponible que en el presente caso y por medio del testamento debe ser
atribuida al legitimario con discapacidad. Debe disponerse expresamente que un tercio de la legítima sea atribuida a
dicho legitimario. La forma en la que debe instrumentarse dicha mejora es por testamento.

5. Protección de la legítima: normas imperativas. Transmisión de bienes a los legitimarios por actos entre vivos.
Presunción legal de gratuidad y de mejora: efectos, consentimiento de legitimarios.
Protección de la legítima:

art.2447: “el testador no puede imponer gravamen ni condición alguna a las porciones legitimas, si lo hace, se
tienen por no escritas”.

La forma típica que se encuadra en este artículo resulta del testamento mismo y no es posible que se le reconozca
validez a ninguna disposición que resulte contraria a la integralidad de la legítima.
Dentro de las normas protectoras de la legítima se encuentra también el art.2449 que establece “ es irrenunciable la
porción legitima de una sucesión aun no abierta”. Esta norma tiene a resguardar la integralidad de la legítima y se
agrega a un cumulo de disposiciones que persiguen ese fin.

Para que quede invalidada la renuncia a la legítima tiene que haber sido realizada antes del fallecimiento del
causante. Luego de ocurrido el fallecimiento el legitimario se encuentra en condiciones de decidir acerca de la
aceptación de la herencia o su renuncia a la misma o de su aceptación, pero renunciando a la legítima que le pueda
corresponder.

Acciones protectoras de la legítima: se han establecido como acciones protectoras de la legitima, la acción de
complemento y la acción de reducción.

Acción de complemento: Art. 2451 “el legitimario a quien el testador le ha dejado, por cualquier título, menos de
su porción legítima, sólo puede pedir su complemento.”

Mediante la acción de complemento se ataca la institución de herederos realizada en el testamento, mientras que
en la acción de reducción se cuestiona la institución de herederos de cuota o los legados que afecten la legítima.

Acción de reducción: Art.2452.-“Reducción de disposiciones testamentarias. A fin de recibir o complementar su


porción, el legitimario afectado puede pedir la reducción de las instituciones de herederos de cuota y de los
legados, en ese orden.

Los legados se reducen en el mismo orden establecido en el segundo párrafo del artículo 2358.” La acción de
reducción es el derecho que tiene un legitimario para atacar las instituciones como herederos de cuota y los
legados hechos por el causante en su testamento o las donaciones hechas en vida por el mismo, en la medida que
excedan la porción disponible. La acción requiere la actuación judicial del legitimario perjudicado.

6y 7) Acción de complemento: reducción de disposiciones testamentarias y de donaciones. Orden en la reducción.


Obligación de restituir el bien donado, distintos supuestos. Legitimación. Efectos. Prescripción. Comparación entre
las acciones de reducción y colación.
Acción de reducción.
Se la diversifica en cuatro tipo de acciones:
a) Acción por “entrega de la legítima”: dispone el art. 2450 que “El legitimario preterido tiene acción para que se le
entregue su porción legítima a título de heredero de cuota”. La circunstancia de que el testador en su testamento
haya instituido heredero omitiendo al heredero forzoso, no significa cambiarle a éste la naturaleza de su título, y
privarlo injustificadamente del derecho de acrecer o vocación a la universalidad (ver n° VI). En rigor técnico,
reclamará su legítima en calidad de heredero universal legitimario, y quien debería quedar en calidad de heredero
de cuota es el instituido, reducido a la porción disponible. El heredero forzoso siempre debería conservar su calidad
de tal, y su derecho de acrecer. Se lesiona su derecho hereditario protegido constitucionalmente(29). El segundo
párrafo de este art. 2450 sigue expresando que también el legitimario tiene la acción por entrega de la legítima
cuando el causante no deja bienes pero ha efectuado donaciones. Es decir, ahora se trata de la acción de reducción
del art. 2453.

b) Acción de complemento: el art. 2451 refiere al legitimario al cual el causante ha dejado por cualquier título
(donación o legado) menos de su porción legítima, entonces tiene la acción de complemente de la misma.

c) Acción de reducción de disposiciones testamentarias: el art. 2452 alude a la acción de reducción, limitándola al
caso de reducción de las instituciones de herederos de cuota y de los legados que han afectado la legítima del
heredero forzoso, reduciendo primero los legados de cuota y después los legados particulares.

d) Acción de reducción de donaciones: el art. 2453 se refiere a la reducción de donaciones inoficiosas. Corresponde
“cuando el difunto no deja bienes pero ha efectuado donaciones” (art. 2450 2° párr.). Y también cuando la reducción
de las disposiciones testamentarias no ha sido suficiente para cubrir la legítima, entonces se atacan las donaciones,
empezando por la última, y luego las demás en orden inverso a sus fechas hasta salvar la legítima (2° párr. art. 2453).

Legitimación activa y pasiva: la acción de reducción se concede a los legitimarios del causante
Cuando se trata de institución de herederos de cuota o de legados, para que el legitimario pueda demandar la
reducción tiene que ostentar ese carácter y para ello debe haber aceptado la herencia y mantener su llamamiento
vigente

Cuando mediante la acción se pretende atacar donaciones hechas por el causante, misma tendría que haber sido
efectuada a partir de los 365 días anteriores al nacimiento del legitimario, del nacimiento del ascendiente a quien se
representa o en el caso de que el accionante sea el cónyuge, después de las nupcias.
A su vez, al momento de la muerte del causante no tienen que haber transcurrido mas de diez años desde que se
tuvo la posesión del bien donado porque se aplicaría la prescripción adquisitiva.
Los acreedores personales de los legitimarios pueden demandar por reducción en virtud de la acción subrogatoria
que les corresponde, al igual que los herederos del legitimario y los cesionarios.

En cuanto a la legitimación pasiva, cabe acotar que de ella depende el acto que vulnere la legitima. Si lo que supera
la porción disponible fuesen instituciones de herederos de cuota o legados, la acción debe dirigirse contra los que se
encuentren en esa condición. En el caso que sea una donación la que afecte la legítima, la acción debe ser entablada
contra el donatario y eventualmente contra las personas que de él han recibido el bien donado.

Orden de la reducción: primero deben reducirse las instituciones de herederos de cuota y de los legados. Este orden
de reducción de los legados es supletorio de lo que el causante pueda haber establecido en su testamento, ya que si
este ha efectuado una disposición en la que expresamente dispusiese el orden de cumplimiento del que resulta
indirectamente el orden de las reducciones, hay que atenerse a él.

Cuando se han dejado sin efecto todos los legados y todavía se encuentra vulnerada la legítima, será necesario
reducir las donaciones. Se reducirán las donaciones conforme el art.2453 “Si la reducción de las disposiciones
testamentarias no es suficiente para que quede cubierta la porción legítima, el heredero legitimario puede pedir la
reducción de las donaciones hechas por el causante. Se reduce primero la última donación, y luego las demás en
orden inverso a sus fechas, hasta salvar el derecho del reclamante. Las de igual fecha se reducen a prorrata.”

Solo podrán ser reducidas las donaciones efectuadas a partir de los 365 días anteriores al nacimiento del legitimario
o del ascendiente a quien se representa, y ene l caso del cónyuge las que se hubieren hecho después del
matrimonio. Tampoco podrán ser reducidas las donaciones en las que el donatario haya tenido posesión del bien por
más de 10 años a la fecha del fallecimiento del causante.

En caso de que efectuando la reducción de la última donación no se alcance a cubrir la legítima, se retrocederá en el
tiempo dejando sin efecto las donaciones más recientes para luego ir sobre las anteriores.

El proceso de reducción continuara hasta que se resuelva la última donación que ha afectado la porción legítima.

Se descompone teóricamente la acción de reducción en distintos tipos de acciones, como si fuesen diferentes,
cuando en rigor de verdad es la misma acción que procede en todos estos casos: se reducen disposiciones
testamentarias y donaciones en la medida necesaria para cubrir o complementar la porción legítima lesionada.

Se mantiene en el art. 2458 el efecto reipersecutorio de la acción de reducción, que funciona con relación a todos
los bienes registrables (art. 2458; en el Código derogado solo procedía contra donaciones de inmuebles, art. 3955).

Asimismo, el efecto reipersecutorio se da contra el donatario y subadquirentes, y como no distingue debe


considerarse que procede aún contra subadquirentes de buena fe y a título oneroso, no siendo aplicable la regla
excepcional que los protege del art. 392 del nuevo Código, similar al antiguo art. 1051 CC, pues ambas normas sólo
se refiere a la nulidad del acto jurídico antecedente, y en este caso no se trata de nulidad sino de una vicisitud
distinta, la “resolución” de la donación por violar la legítima. El nuevo Código confirma esta solución, al apartarse de
la interpretación amplia del art. 1051 propiciada por prestigiosos civilistas (Mosset Iturraspe, Pérez Lasala), para los
cuales comprendía además de la nulidad, las otras vicisitudes que provocan la ineficacia del acto antecedente
(revocación, resolución, etc).

Prescripción adquisitiva: de acuerdo al art. 2459 el donatario o sus sucesores pueden oponerle al heredero forzoso
lesionado en su legítima por la donación, la prescripción adquisitiva breve de diez años del art. 1898, que empieza a
correr desde que aquellos entraron en posesión del bien.

La solución no puede ser más desacertada: el plazo empieza a correr en vida del donante, desde que el donatario
entró en posesión del bien donado, y no desde que obtuvo el justo título, como es la regla general (art. 1903); y
puede transcurrir íntegramente en vida del causante, en una época en que el futuro heredero todavía no es
heredero ni tiene acción para defenderse, contrariando así un principio jurídico elemental: el curso de la
prescripción nace con la acción.
Esto es: aunque el derecho exista, la prescripción no corre si no está abierta y expedita la acción del interesado al
cual se le va a oponer aquella prescripción.

Resulta claro, entonces, que con el arbitrio diseñado se lesiona el derecho de defensa del heredero forzoso
perjudicado por la donación del autor de la sucesión, pues en este caso la acción del heredero, al abrirse la sucesión,
ya nace muerta. Se le opone una prescripción cumplida antes de que él adquiera el título de heredero y la acción
para defender su derecho.

Además, se desconoce otra elemental noción sucesoria: el cálculo de la legítima recién se puede efectuar después de
fallecido el causante, sobre la masa de bienes que dejó en ese momento, menos las deudas, a cuyo resultado se
suman el valor de las donaciones que hizo en vida. Y es en esta oportunidad, y no en vida del causante, que podrá el
heredero forzoso determinar si su porción legítima ha sido o no violada por el acto liberal de su causante; y si
comprueba la lesión, entonces recién podrá ejercer la acción protectora, que es la de reducción.

Por consiguiente, desde una perspectiva jurídica y constitucional la única prescripción oponible al heredero forzoso
perjudicado en su legítima por la donación de su causante, es aquella que empieza a correr desde el fallecimiento de
éste último, porque recién en este momento nace su título hereditario y la acción defensiva de sus derechos.

Art.2454.-Efectos de la reducción de las donaciones. Si la reducción es total, la donación queda resuelta.


Si es parcial, por afectar sólo en parte la legítima, y el bien donado es divisible, se lo divide entre el legitimario y el
donatario. Si es indivisible, la cosa debe quedar para quien le corresponde una porción mayor, con un crédito a favor
de la otra parte por el valor de su derecho.
En todo caso, el donatario puede impedir la resolución entregando al legitimario la suma de dinero necesaria para
completar el valor de su porción legítima.
El donatario es deudor desde la notificación de la demanda, de los frutos o, en caso de formular la opción prevista en
el párrafo anterior, de intereses.”

Art.2455.-Perecimiento de lo donado. Si el bien donado perece por culpa del donatario, éste debe su valor. Si perece
sin su culpa, el valor de lo donado no se computa para el cálculo de la porción legítima.

Si perece parcialmente por su culpa, debe la diferencia de valor; y si perece parcialmente sin su culpa, se computa el
valor subsistente.

Art. 2456.-Insolvencia del donatario. En caso de insolvencia de alguno de los donatarios e imposibilidad de ejercer la
acción reipersecutoria a que se refiere el artículo 2458, la acción de reducción puede ser ejercida contra los
donatarios de fecha anterior.

Art.2457.-Derechos reales constituidos por el donatario. La reducción extingue, con relación al legitimario, los
derechos reales constituidos por el donatario o por sus sucesores.

Art.2458.-Acción reipersecutoria. El legitimario puede perseguir contra terceros adquirentes los bienes registrables.
El donatario y el subadquirente demandado, en su caso, pueden desinteresar al legitimario satisfaciendo en dinero el
perjuicio a la cuota legítima.

Prescripcion:
Art.2459.-Prescripción adquisitiva. La acción de reducción no procede contra el donatario ni contra el subadquirente
que han poseído la cosa donada durante diez años computados desde la adquisición de la posesión. Se aplica el
artículo 1901.

8) Art. 2450.-“Acción de entrega de la legítima. El legitimario preterido tiene acción para que se le entregue su
porción legítima, a título de heredero de cuota. También la tiene el legitimario cuando el difunto no deja bienes
pero ha efectuado donaciones”.

Habrá preterición cuando el causante ha omitido en su testamento a un legitimario y ha instituido como heredero a
otro.

Especies de preterición:
-voluntaria: cuando el causante conocía la existencia del legitimario y lo omite

-involuntaria: cuando, al tiempo de hacer el testamento, el causante no sabía acerca de la existencia del legitimario,
o bien este nace después de otorgado el testamento.

Derecho del legitimario preterido: por lo establecido en el art.2450, el heredero preterido tiene derecho a que se le
entregue su porción legítima en calidad de heredero de cuota (art.2488). Esto significa que el legitimario preterido
en su condición de heredero de la cuota que corresponde a su porción legítima no tiene vocación al todo de la
herencia.

Situación del heredero instituido: el heredero instituido recibirá un contenido hereditario equivalente a la porción
disponible, por lo que la condición de heredero instituido vendría a ser equivalente a la del heredero de cuota, y no
tendría vocación al todo de la herencia, y por ello, carecería de la posibilidad de acrecer si el legitimario por
cualquier causa no pudiera recibir su porción legitima.
La situación del heredero instituido puede variar entre la condición de heredero de cuota o heredero universal de
acuerdo al resto de las disposiciones que puedan existir en el testamento.

Acción de entrega de la legítima: corresponde al legitimario omitido y tendrá por objetivo que le sean entregados los
bienes hereditarios en cantidad suficiente como para que la protección legal resulte satisfecha.
La acción deberá ser entablada ante el mismo juez que interviene en el juicio sucesorio
La legitimación pasiva corresponde a los instituidos en el testamento ya que serán los que deberán sostener la
validez de su institución y eventualmente, satisfacer la legítima mediante la entrega de bienes hereditarios
La prescripción de la acción de preterición se opera a los cinco años de la muerte del causante.

9) Opción de los herederos legitimarios en caso de disposición gratuita entre vivos o legado de usufructo, uso,
habitación o renta vitalicia.

Usufructo, uso, habitación o renta vitalicia constituida por actos entre vivos o por legados:

Art.2460.-“Si la disposición gratuita entre vivos o el legado son de usufructo, uso, habitación, o renta vitalicia, el
legitimario o, en su caso, todos los legitimarios de común acuerdo, pueden optar entre cumplirlo o entregar al
beneficiario la porción disponible.”

Se requiere ahora el acuerdo entre los legitimarios para decidir sobre la opcion conferida por la disposicion.
El causante puede disponer de sus bienes en vida con total libertad y entre estos actos puede constituir diversos
derechos reales o el contrato de renta vitalicia y también puede hacerlo por testamento efectuando legados que
tengan esos mismos objetos.
La constitución de un usufructo, ya sea realizado en vida o por un legado, consiste en que el beneficiario podrá usar,
gozar y disponer judicialmente de un bien determinado mientras viva pasando la nuda propiedad luego del
fallecimiento de su titular al heredero o a otro legatario.
La renta vitalicia se concreta cuando se ha entregado un capital y a cambio el beneficiario recibirá una renta en
forma periódica mientras viva.
El legitimario no sabrá al fallecer el causante si estos actos realzados en vida o si los legados lesionaran su legitima al
superar la porción disponible o no. Frente a esta situación el CCCN, le confiere al legitimario una opción pudiendo
elegir entre cumplir con lo que dispuso el causante o liberarse de esa obligación entregando al beneficiario de la
disposición entre vivos o al legatario la porción disponible que es el máximo al que podía aspirar el destinatario de la
disposición.
O el legitimario asume el riesgo de cumplir con lo que el causante estableció en vida y acatar las disposiciones
testamentarias aun cuando supere la porción disponible, o acepta entregar esta que es lo que el causante podía
disponer.
Ante la existencia de varios legitimarios, la opción se concede cuando exista acuerdo entre ellos y así podrán decidir
entre cumplir con lo dispuesto por el causante o entregar la porción disponible.
Si los legitimarios no se ponen de acuerdo, la forma de dar una respuesta equitativa es considerar que en tal
supuesto los legatarios recibirán a prorrata los bienes que conforman la porción disponible.

10) Transmisión de bienes a los legitimarios:

Art. 2461-“Si por acto entre vivos a título oneroso el causante transmite a alguno de los legitimarios la propiedad
de bienes con reserva de usufructo, uso o habitación, o con la contraprestación de una renta vitalicia, se presume
sin admitir prueba en contrario la gratuidad del acto y la intención de mejorar al beneficiario. Sin embargo, se
deben deducir del valor de lo donado las sumas que el adquirente demuestre haber efectivamente pagado.
El valor de los bienes debe ser imputado a la porción disponible y el excedente es objeto de colación.
Esta imputación y esta colación no pueden ser demandadas por los legitimarios que consintieron en la
enajenación, sea onerosa o gratuita, con algunas de las modalidades indicadas.”

a)Requisitos: el código ha tenido especialmente en cuenta el caso en que el propietario de un bien lo transfiere en
vida a quienes serán luego sus legitimarios, reservándose el usufructo, uso, la habitación de por vida o constituyendo
a su favor una renta vitalicia.

En estos casos, el legitimario contratante no tendrá el dominio útil del bien sino hasta que se produzca el
fallecimiento del causante, momento en el cual se recompondrá en su cabeza la plena propiedad o se extinguirá la
obligación de cumplir con la renta vitalicia.

El acto tiene que haber sido oneroso, lo que descarta el supuesto de gratuidad, ya que en este caso caería dentro de
la acción de colación.
b) Presunciones: cuando se reúnen los recaudos que el articulo establece, la ley presume que se trata de un acto que
en apariencia es oneroso, pero que en realidad es gratuito. Si el acto es gratuito operara la obligación de colacionar
aunque se haya reservado el usufructo, uso, habitación o la renta vitalicia.

De allí surge la consecuencia de imputar su valor a la porción disponible.


- Todo contrato oneroso entre una persona y sus posibles legitimarios cuando se ha hecho con reserva de usufructo,
uso, habitación o renta vitalicia, es, en verdad, gratuito.
- La intención del causante ha sido beneficiar al legitimario en la medida de la porción disponible.
El valor excedente, deberá ser colacionado porque se trata de una donación que quiebra la igualdad entre los
herederos legitimarios. Habrá presunción de donación en la medida en que no se pueda demostrar la onerosidad del
acto.
Al presumirse la intención de mejorar, la imputación del valor de los bienes cuya onerosidad no se haya podido
demostrar se hará a la porción disponible y el excedente será objeto de colación y, falta decir, en la medida en que
los otros herederos lo demanden.

c) Consentimiento en la enajenación: la excepción se presenta cuando los otros legitimarios han consentido con la
enajenación. Aquellos que podrían resultar perjudicados por el acto, aceptan expresamente que el mismo se realice.
De esta manera están admitiendo que se trata efectivamente de un acto oneroso y que nada tienen ni tendrán que
objetar luego del fallecimiento del causante.
BOLILLA XXVII: TESTAMENTO

1. Testamento. Concepto. Fundamento.

El testamento es el instrumento al que el CCCN le atribuye la idoneidad para regular la sucesión por la voluntad del
causante.
Se trata de un acto jurídico porque encuadra en la definición que establece el art. 259 cuando lo define como “acto
voluntario licito que tiene por fin inmediato la adquisición, modificacion o extinción de relaciones y situaciones
jurídicas”, ya que es evidente que mediante el testamento se produce la adquisición de derechos con posterioridad
al fallecimiento del testador.

Art.2462.-“Testamento. Las personas humanas pueden disponer libremente de sus bienes para después de su
muerte, respetando las porciones legítimas establecidas en el Título X de este Libro, mediante testamento otorgado
con las solemnidades legales; ese acto también puede incluir disposiciones extrapatrimoniales.”

2) Libertad de testar. Limitaciones.

En la actualidad, la expresión de última voluntad podría plasmarse en grabaciones, videos, elementos informáticos,
pero no existe norma expresa que permita disponer de los bienes para después de la muerte por algunos de esos
medios.
El articulo parece incurrir en una contradicción al establecer que las personas pueden disponer libremente de sus
bienes pero luego impone limitaciones a esa libertad:

- Cuando existen legitimarios, la disposición de los bienes no es libre porque debe respetar sus legítimas
quedando la posibilidad de decir el destino solo de la porción disponible.

- La segunda limitación referida ya a todos los testamentos es que debe respetar las solemnidades
establecidos para la forma de testar que elija el causante, puesto que si no se cumpliera con ellas, el
testamento es nulo.

Se pueden incluir disposiciones de contenido extrapatrimonial como el reconocimiento de un hijo extramatrimonial,


la designación de tutor o curado, el nombramiento de albacea, entre otros.
El testamento como regla general, surtirá efectos después de la muerte del causante.

Se trata de un acto jurídico porque encuadra dentro del concepto que trae el art. 259 cuando lo define como el acto
voluntario licito que tiene por fin inmediato la adquisición, modificación o extinción de relaciones o situaciones
jurídicas ya que es evidente que mediante el testamento se produce la adquisición de derechos con posterioridad al
fallecimiento del testador.
Carácter personalísimo: el testamento instrumenta la voluntad del testador que regula la transmisión de sus bienes
para después de su muerte y es evidente que debe tratarse de la expresión de su propia voluntad sin que pueda
delegar su redacción en otra persona.
Así lo menciona el art. 2465 “las disposiciones testamentarias deben ser la expresión directa de la voluntad del
testador…la facultad de testar es indelegable. Las disposiciones testamentarias no puede dejarse al arbitrio de
tercero…”.

3) Caracteres del Testamento. Completividad del testamento.

Como todo acto juridico, el testamento presenta caracteres establecidos en el articulado del ccc:

a) Carácter personalísimo: El testamento instrumenta la voluntad del testador que regula la trasmisión de sus bienes
para después de su muerte y es evidente que debe tratarse de la expresión de su propia voluntad sin delegar su
redacccion a otra persona.
La única excepción a este carácter se encuentra en el legado alternativo ya que la opción del objeto legado puede
corresponder al heredero, o bien si así lo ha establecido de forma expresa el testador, al legatario, ya que resultan
aplicables a este tipo de legados las disposiciones referidas a las obligaciones alternativas, pusto que el art. 2494
remite a la aplicación de las normas referidas a las obligaciones en gral.
b) Especialidad del testamento: art.2465 “…las disposiciones testamentarias deben…bastarse a sí mismas”.
El contenido del testamento es el que regula la transmisión de los bienes y no resulta posible que la designación del
heredero o cualquier otra disposición surja de otro documento por más que así lo haya dispuesto el testador.

c) Unilateralidad: El testamento es un acto juridico unilateral puesto que se perfecciona con la sola voluntad del
testador.
*Prohibicion de testamentos conjuntos:
-art. 2465 “…no es válido el testamento otorgado conjuntamente por dos o más personas”.
Lo que la ley prohíbe es que el testamento sea conjunto. En el caso que un testamento conjunto haya sido otorgado
en un país que admite esta forma testamentario y luego debe ser ejecutado en nuestro país, resulta de aplicación el
art.2645 “El testamento otorgado en el extranjero es válido en la República según las formas exigidas por la ley del
lugar de su otorgamiento, por la ley del domicilio, de la residencia habitual, o de la nacionalidad del testador al
momento de testar o por las formas legales argentinas.”

d) Revocabilidad: el testamento es esencialmente revocable por voluntad del testador. No confiere a los instituidos
derecho alguno hasta la apertura de la sucesión (art.2511).

4) Art.2463.-“Reglas aplicables. Las reglas establecidas para los actos jurídicos se aplican a los testamentos en
cuanto no sean alteradas por las disposiciones de este Título.”

5) Capacidad para disponer por testamento. Momento en que debe existir. Etc

Como todo acto juridico, para otrgar el testamento en forma valida es preciso contar con la capacidad necesaria
para poder hacerlo.

El testador debe gozar de la capacidad requerida al momento de otorgar el testamento, ya que es en esa
oportunidad que el acto queda perfeccionado.
Por ello, las situaciones de incapacidad en las que pueda caer en un futuro, carecen de eficacia para poder invalidar
el acto.
En la actualidad, y dentro de las normas de derecho internacional privado, el art. 2647 establece “la capacidad para
otorgar testamento y revocarlo se rige por el dercho del domicilio del testador al tiempo de la realización del acto”.

Partiendo del supuesto de capacidad para testar, el ccc dispone los casos de incapacidad:

Incapacidades:

a) Por falta de la edad requerida: art. 2464 “pueden testar las personas mayores de edad al tiempo del acto”
La edad para testad es a los 18 años, momento en que se adquiere plena capacidad civil.

b) Por falta de razón: art.2467 inc. C “es nulo el testamento…que ha sido otorgado por persona privada de la razón
en el momento de testar.”
Art.2467 inc. D “es nulo el testamento…por haber sido otorgado por persona judicialmente declarada incapaz. Sin
embargo esta puede otorgar testamento en intervalos lucidos que sean suficientemente ciertos como para asegurar
que la enfermedad ha cesado por entonces”

c) Por la falta de aptitud para comunicarse: art.2467 inc. E “es nulo el testamento…por ser el testador una persona
que padece limitaciones en su aptitud para comunicarse en forma oral y además no saber leer ni escribir, excepto
que lo haga por escritura pública con la participación de un intérprete en el acto”.

5) Las causas de nulidad del testamento o de sus disposiciones se encuentran enumeradas en el art. 2467:

Nulidad del testamento y de disposiciones testamentarias. Es nulo el testamento o, en su caso, la disposición


testamentaria:
a) por violar una prohibición legal;
b) por defectos de forma;
c) por haber sido otorgado por persona privada de la razón en el momento de testar. La falta de razón debe ser
demostrada por quien impugna el acto;
d) por haber sido otorgado por persona judicialmente declarada incapaz. Sin embargo, ésta puede otorgar
testamento en intervalos lúcidos que sean suficientemente ciertos como para asegurar que la enfermedad ha cesado
por entonces;
e) por ser el testador una persona que padece limitaciones en su aptitud para comunicarse en forma oral y, además,
no saber leer ni escribir, excepto que lo haga por escritura pública, con la participación de un intérprete en el acto;
f) por haber sido otorgado con error, dolo o violencia;
g) por favorecer a persona incierta, a menos que por alguna circunstancia pueda llegar a ser cierta.

VICIOS.

*El error tiene que haber sido esencial. Puede recaer sobre la naturaleza del acto, o bien se trata de un error sobre
un bien de distinta especie o calidad a la que se quiso disponer, que haya existido una equivocación sobre la cualidad
sustancial del bien que haya sido determinante del acto, sobre los motivos personales relevantes que hayan sido
incorporados expresa o tácitamente o sobre la persona la persona a la cual se refiere el acto, si ella fue determinante
para su celebración.
El error que vicia el consentimiento testamentario tiene que haber sido esencial, grave, determinante del acto y no
excusable de acuerdo a las circunstancias del caso.
*El dolo se configura cuando ha habido una aserción de lo que es falso o disimulación de lo verdadero, cualquier
artificio, astucia o maquinación que se emplee para la celebración del acto.
Para viciar el consentimiento, el dolo tiene que haber sido grave, determinante del acto, excusable y que provoque
un daño y este último recaudo va ínsito en el acto testamentario porque es indudable que el mismo existirá en tanto
se pretenda hacer valer una disposición testamentaria obtenida de esa forma.
Una manera peculiar de configurar el dolo en materia testamentaria se presenta con la captación de la voluntad del
testador.
La captación de la voluntad del testador supone engaños sobre hechos o afectos que puedan inducir al causante
para que no exprese su voluntad real en el testamento.
Sera necesario evaluar las circunstancias personales del testador como su edad, salud física y mental, ya que sin
llegar a la incapacidad para testar puede resultar más fácil de influir. También habrá que observar el
comportamiento de quien resulta beneficiario del testamento para determinar si ha recurrido a conductas
reprochables o maniobras o alegaciones falaces, como la calumnia a determinados miembros de la familia, o ha
impedido el contacto de estos con el testador en los últimos momentos de su vida, no permitiendo las visitas o los
llamados telefónicos o interceptando cualquier contacto epistolar o de otra índole.
También será necesario distinguir si el dolo afecta todo el testamento o si solo se refiere a una disposición en
particular.
*La violencia comprenderá a la que se manifieste mediante la fuerza irresistible o a través de amenazas de generar
el temor de sufrir un mal grave e inminente que no se pueda contrarrestar.
Aquel que pretenda que un testamento ha sido efectuado bajo violencia deberá acreditar que este vicio subsistió
mientras el testador estuvo en condiciones físicas o mentales como para haberlo revocado.

Acción de impugnación: (art. 2469) la acción de nulidad de un testamento o de alguna disposición testamentaria
tiene que tramitar ante el mismo juez que interviene en el proceso sucesorio.
La legitimación activa para interponer la acción de nulidad la tiene cualquier interesado.
La legitimación pasiva se establece respecto de los beneficiarios del testamento ya sea porque han sido instituidos
herederos, herederos de cuota, legatarios particulares o beneficiarios de un cargo, inclusive la acción puede dirigirse
contra el albacea cuando se cuestione el testamento en el que ha sido designado.
La prueba deberá guardar relación con la causa de nulidad invocada y podrán ser ofrecidos todos los medios
procesales admisibles.
La sentencia que hace lugar a la nulidad, lo priva de efectos en forma total o bien, deja sin efecto la clausula cuya
nulidad haya sido declarada.
En caso de que ya hubiera sido ejecutado en todo en parte el testamento deberán restituirse los bienes afectados
por la declaración de nulidad a quien deba recibirlos como consecuencia de esa sentencia.
En el caso de tratarse de una causa de nulidad absoluta del testamento, la acción de nulidad es imprescriptible
En los casos de nulidad relativa, si se tratase de vicios del consentimiento la acción prescribe a los dos años, y en los
restantes se aplicara el plazo de prescripción genérico de cinco años.
6) Objeto del testamento. Interpretación de las disposiciones testamentarias.

El testamento tiene como objeto disponer de los bienes para después de la muerte del causante.
Cuando se interpreta el testamento, lo que se busca es desentrañar la voluntad real del causante.
Art.2470. “Interpretación. Las disposiciones testamentarias deben interpretarse adecuándolas a la voluntad real del
causante según el contexto total del acto. Las palabras empleadas deben ser entendidas en el sentido corriente,
excepto que surja claro que el testador quiso darles un sentido técnico. Se aplican, en cuanto sean compatibles, las
demás reglas de interpretación de los contratos”

7) Art. 2482.-Personas que no pueden suceder. No pueden suceder por testamento:


a) los tutores y curadores a sus pupilos, si éstos mueren durante la tutela o curatela o antes de ser aprobadas las
cuentas definitivas de la administración;
b) el escribano y los testigos ante quienes se haya otorgado el testamento, por el acto en el cual han intervenido;
c) los ministros de cualquier culto y los líderes o conductores espirituales que hayan asistido al causante en su última
enfermedad.

Art.2483.-Sanción. Las disposiciones testamentarias a favor de personas que no pueden suceder por testamento son
de ningún valor, aun cuando se hagan a nombre de personas interpuestas. Se reputan tales, sin admitir prueba en
contrario, los ascendientes, los descendientes, y el cónyuge o conviviente de la persona impedida de suceder.
El fraude a la ley puede ser probado por cualquier medio.
Los inhábiles para suceder por testamento que se encuentran en posesión de los bienes dejados por el testador son
considerados de mala fe.
BOLILLA XXVIII: FORMAS Y FORMALIDADES DEL TESTAMENTO.

1) Formas y formalidades. Concepto. Sancion en caso de inobservancia,,, etc

Cuando se analizo el concepto de testamento se hizo referencia al carácter formal y solemne del acto.
El carácter formal del testamento alude a las distintas especies de testamento que son contempladas en el ccc.

Las formalidades o solemnidades de cada forma de testar se encuentran expresamente especifica das al detallarse
los recaudos queso deben cumplir. Por ello, son los requisitos que se exigen para que constituyan una de las formas
testamentarias.

El art. 2473 del CCCN distingue claramente estos conceptos, aunque más adelante no mantiene ese criterio:
"El testamento puede otorgarse sólo en alguna de las formas previstas en este Código. Las formalidades
determinadas por la ley para una clase de testamento no pueden extenderse a las de otra especie.
La observancia de las solemnidades impuestas debe resultar del mismo testamento, sin que se pueda suplir por
prueba alguna"

Respecto de las formas reconocidas por el CCCN se establece el testamento ológrafo y el testamento por acto
público. Se han derogado el testamento cerrado y los testamentos especiales como el testamento militar y el
marítimo y los casos particulares de testamento por acto público como el hecho en los pueblos de campaña o en la
campaña o en caso de peste o epidemia.
Queda también el testamento consular previsto en el art. 2646 y el testamento aeronáutico contemplado en el art.
85 del CA que no ha sido derogado. Un ejemplo aclarará estas diferencias; una forma testamentaria es el testamento
ológrafo; una formalidad es que debe ser escrito de puño y letra del testador. La falta de forma, es decir, la
utilización de un testamento que no es admitido por la ley, trae aparejada la inexistencia de testamento. Las
solemnidades del testamento tienen que presentarse dentro del mismo testamento, ya que no podrá recurrirse a
prueba de ninguna naturaleza para pretender acreditar esos requisitos.

Sanción en caso de inobservancia de las formalidades

Por el contrario, la falta de cumplimiento de las formalidades de un testamento trae aparejada su nulidad porque se
trata de un acto solemne.
Así resulta del art. 2474 del CCCN: "La inobservancia de las formas requeridas para otorgar el testamento causa su
nulidad total; pero, satisfechas las formas legales, la nulidad de una o de varias cláusulas no perjudica las restantes
partes del acto. El empleo de formalidades sobreabundantes no vida el testamento'.

Llama la atención que después de haber distinguido claramente en el artículo anterior entre formas y formalidades
del testamento que, como se explicó, son conceptos diferentes, en esta norma se menciona a las formas cuando, en
realidad, se está aludiendo a las formalidades del testamento.
Sin perjuicio de ello, el contenido de la disposición es claro. Si no se ha cumplido con las formalidades el testamento
es nulo, pero si éstas han sido plasmadas como lo marca la ley, puede ser declarada la nulidad de una disposición sin
que queden afectadas las restantes

2) Ley aplicable a las formas y formalidades.

La ley vigente en el momento en que se redacta el testamento es la que determina su validez tanto respecto del tipo
de testamento elegido como del cumplimiento de sus solemnidades. Sin distinguir estos dos aspectos, el art. 2472
del CCCN dispone: "La ley vigente al tiempo de testar rige la forma del testamento.

Es preciso remarcar que también toma en consideración a las formalidades. Un testamento cerrado realizado
durante la vigencia del Código Civil derogado será válido aun cuando al tiempo de la muerte ya rija el CCCN que ha
eliminado esa forma de testar, porque se toma en cuenta la norma vigente en aquel momento.
Lo mismo podría suceder si cambian las formalidades de un testamento como sucederla si en el testamento por acto
público, que antes requería la presencia de tres testigos, luego se exigiera un número mayor.
No es el caso actual que ha disminuido la cantidad de testigos, pero esto indica que también las solemnidades de un
testamento se rigen por los requisitos que impone la ley vigente al tiempo de su otorgamiento. Ahora bien, la norma
no admite una solución de la que podría resultar beneficiado el testador. Ello podría ocurrir si al momento de testar
se omitió el cumplimiento de una formalidad y luego una nueva disposición elimina esa exigencia con lo que al
momento de la muerte el testamento cumple con los requisitos legales vigentes.

Confirmación del testamento nulo por inobservancia de las formalidades.

Art. 2475 “Confirmación del testamento nulo por inobservancia de las formalidades. El testador sólo puede
confirmar las disposiciones de un testamento nulo por inobservancia de las formalidades reproduciéndolas en otro
testamento otorgado con los requisitos formales pertinentes”.

La exigencia de la norma es que se haga un nuevo testamento que cumpla con las formalidades y que tenga un
contenido similar al anterior, con lo que valdra será la ultima disposición que no presenta irregularidad alguna.

*Firma: s una solemnidad exigida para plasmar la voluntad del testador.


El art 288 menciona que la firma debe consistir en el nombre del firmante o en un signo.
Como complemento se agrega el art. 2476 del CCCN exige: "Cuando en los testamentos se requiera la firma, debe
escribírsela tal como el autor de ella acostumbra firmar los instrumentos públicos o privados. Los errores de
ortografía o la omisión de letras no vician necesariamente la firma, quedando su validez librada a la apreciación
judicial".

El requisito de la firma por parte del testador es exigido estrictamente en el caso del testamento ológrafo, pero
cuando se testa por acto público, en determinados supuestos se permite la firma a ruego (art. 2480, CCCN).
Lo relevante será, entonces, que el testamento se encuentre firmado ya sea por el testador en forma personal o bien
por otra persona a ruego del testador.

3) Testamento Ológrafo: etc

El testamento ológrafo se encuentra definido en la primera parte del art. 2477 del CCCN: "El testamento ológrafo
debe ser íntegramente escrito con los caracte-res propios del idioma en que es otorgado, fechado y firmado por la
mano misma del testador ...".
De este concepto surgen las formalidades del testamento ológrafo que son la escritura de la mano del testador, la
fecha y su firma, además por supuesto de las disposiciones de bienes en cuanto a su contenido.
Como decía Vélez en la nota al art. 3639 no todo escrito, datado y firmado por su autor es un testamento válido, sino
que todo testamento escrito, datado y firmado por su autor será válido.

b) Ventajas e inconvenientes

VENTAJAS INCONVENIENTES

Se puede efectuar en cualquier Fácil destrucción por quien no


momento y sin otra intervención resulta ser beneficiario
que la del propio testador.
Posibilidad de la captación de la
voluntad al no intervenir
No tiene ningún costo.
profesionales ni terceros extraños
que puedan constatar la libre
El testador puede meditarlo todos
disponibilidad del testador.
los días, leerlo, estudiarlo y
rehacerlo cuando quiera.
puede ocasionar una redacción
deficiente de sus disposiciones, ya
que es posible que se dicte alguna
cláusula nula o bien de difícil
interpretación

Requisitos:
- Independencia intelectual.
- Escritura: íntegramente escrito con los caracteres propios del idioma en que es otorgado.
- Fecha: debe estar después de las disposiciones.
4) Testamento por acto público. Concepto etc

El testamento por acto público es el que se otorga ante un escribano público y con la presencia de dos testigos
hábiles.
Así resulta de la primera parte del art. 2479 del CCCN: "El testamento por acto público se otorga mediante escritura
pública, ante el escribano autorizante y dos testigos hábiles, cuyo nombre y domicilio se deben consignar en la
escritura ...".

Ventajas e inconvenientes

Ventajas*

Al testarse por acto público se asegura la conservación del testamento, ya que es prácticamente imposible la
destrucción de los protocolos notariales o su pérdida.
A ello cabe agregar que el escribano al tomar conocimiento de las disposiciones testamentarias podrá sugerir
precisiones técnicas que aclaren su contenido y eviten dificultades interpretativas o eventualmente su nulidad.
Debe ser registrado en el Registro de Actos de última voluntad en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires o en el
Registro de Testamentos en la provincia de Buenos Aires, según corresponda al escribano público que ha intervenido
en el acto.

*Inconvenientes

El testamento por acto público es precisamente que las disposiciones en él contenidas quedan expuestas al
conocimiento de terceros.
Debido a la intervención del escribano se toma oneroso, en contraposición al testamento ológrafo que por su
privacidad no requiere la intervención de terceros y, por lo tanto, no tiene costo alguno.

Requisitos: Art. 2479. El testamento por acto público se otorga


- mediante escritura pública,
- ante el escribano autorizante y nombre y domicilio se deben
- dos testigos hábiles, consignar en la escritura.

El testador puede dar al escribano sus disposiciones ya escritas o sólo darle por escrito o verbalmente las que el
testamento debe contener para que las redacte en la forma ordinaria. En ningún caso las instrucciones escritas
pueden ser invocadas contra el contenido de la escritura pública.
Concluida la redacción del testamento, se procede a su lectura y firma por los testigos y el testador. Los testigos
deben asistir desde el comienzo hasta el fin del acto sin interrupción, lo que debe hacer constar el escribano.

Habilidad del escribano: Debe actuar dentro de los limires de sus atribuciones respecto de la naturaleza del acto y la
escritura debe otorgarse dentro del territorio que se ha asignado para el ejercicio de sus funciones.

Como el testamento por acto público se concreta mediante la redacción de una escritura pública, debe reunir no
sólo los requisitos comunes a estos instrumentos que resultan del art. 305 del CCCN sino también los que se han
establecido de manera específica para esta forma de testar
En tal sentido debe consignarse el lugar y fecha de su otorgamiento. El lugar es trascendente porque fija la
competencia territorial del escribano y además determina la ley aplicable en cuanto a las formas de testar.
Debe consignar el nombre, apellido, documento de identidad, domicilio real, fecha de nacimiento y estado de familia
del otorgante del testador y si está casado, el nombre del cónyuge y si se trata de primeras o posteriores nupcias. Se
tiene que agregar también la naturaleza del acto que se realiza y, en el caso concreto, será la mención del
testamento por acto público y desarrollar las disposiciones tanto referidas a los bienes como a cuestiones
extrapatrimoniales que pueda realizar el testador. Además se debe individualizar los testigos de la misma manera
que se hace con el otorgante del testamento. Es frecuente que el escribano deje constancia que el otorgante se
encuentra en pleno uso de sus facultades mentales, pero no es su misión controlar ese requisito y tal expresión
tendrá tan sólo el alcance de una apreciación personal, pero no impide que en el futuro se pueda cuestionar la
aptitud mental del testador para otorgar el testamento.
La parte pertinente del art. 2479 del CCC establece: "... Concluida la redacción del testamento, se procede a su
lectura y firma por los testigos y el testador. Los testigos deben asistir desde el comienzo hasta el fin del acto sin
interrupción, lo que debe hacer constar el escribano ...".
Se ha eliminado la exigencia que traía la ley anterior de que los testigos debían ver al testador durante el desarrollo
del acto para constatar que no se encontraba sometido a violencia. En la noma transcripta no se menciona la firma
del escribano aunque es indudable que debe asentarla.

Firma a ruego.
Habitualmente el testador firmará la escritura por sí mismo. Sin embargo, pueden presentarse diversas situaciones
en las que otra persona tiene que firmar el testamento en su nombre.
- La primera alternativa es que el testador no sepa firmar en cuyo caso deberá ha-cerlo otra persona o un testigo en
su nombre.
- el testador sepa firmar, pero que no pueda hacerlo, en cuyo caso el escribano debe dejar constancia de la causa
que lo imposibilita.
- el testador sabe firmar pero manifiesta lo contrario; en este supuesto, el testamento es inválido aunque un tercero
o un testigo hubieran firmado a su ruego.

Testigos .
Una de las solemnidades del testamento por acto público es que sea otorgado en presencia de dos testigos. La
necesidad de los testigos se justifica porque aseveran la regularidad del acto y que el testador ha expresado
libremente su voluntad.

6) Testamento consular

El Código Civil anterior regulaba en sus arts. 3636 y 3637 la situación que ahora es contemplada de manera idéntica
por él art. 2646 del CCCN; "Es válido el testamento escrito hecho en país extranjero por un argentino o por un
extranjero domiciliado en el Estado, ante un ministro plenipotenciario de/Gobierno de/a República, un encargado de
negocios o un Cónsul y dos testigos domiciliados en el lugar donde se otorgue el testamento, teniendo el
instrumento la autenticación de la legación o consulado.
BOLILLA XXIX: DISPOSICIONES TESTAMENTARIAS.

1) CONTENIDO ETC

En el testamento se pueden efectuar disposiciones que tengan un contenido patrimonial y extrapatrimonial.

Modalidades de las disposiciones testamentarias

En el Código Civil derogado se establecían normas específicas referidas a las modalidades de las disposiciones
testamentarias, en algunos supuestos en consonancia con lo establecido respecto de los actos jurídicos y en otros en
forma contradictoria con la norma general.
La nueva redacción del CCCN no contiene una regulación especial de las modalidades testamentarias y como el
testamento es un acto jurídico, se aplican plena-mente las disposiciones que regulan dichas modalidades a partir del
art. 343 hasta el art. 357.
Por lo tanto, no existe un tratamiento peculiar de las modalidades testamentarias y cuando se analice un caso de
condición, plazo o cargo, deberán aplicarse las disposiciones generales de los actos jurídicos.

2) Institución de herederos. Concepto. etc

Se ha señalado ya que una de las formas que tiene el causante de disponer de sus bienes para después de su muerte
mediante un testamento es instituyendo herederos.

Habrá institución de heredero cuando el causante llama en su testamento a una o más personas para recibir la
herencia sin asignación de partes. Este concepto no incluye al llamado heredero de cuota que es regulado por el art.
2488 del CCCN porque tiene limitado su llamamiento a la porción de la herencia asignada por el testador.
La característica esencial del heredero es que al no tener una cuota designada que limita su llamamiento, tiene
vocación a todos los bienes de la herencia a los que el testador no haya dado un destino diferente (art. 2486, CCCN).

Forma de la designación

La institución de heredero sólo puede ser realizada por el causante mediante un testamento válido. Así lo establece
el art. 2484 del CCCN; "La institución de herederos y legatarios sólo pueede ser hecha en el testamento ...".
Esta forma de instituir heredero no puede ser confundida con el llamamiento que hace la ley en la sucesión intestada
a determinados miembros de la familia en calidad de herederos porque la fuente que da origen a esa condición es
diferente. En un caso dependerá de la voluntad del causante instrumentada en un testamento y en el otro proviene
de la ley.

Otro requisito que tiene la institución de heredero es que debe estar individualizada la persona llamada por el
testador en esa condición. El mismo art, 2484 en su parte final dispone: "... y no debe dejar dudas sobre la identidad
de/a persona instituida". Esta norma es concordante con la causa de nulidad de la disposición testamentaria hecha a
favor de persona incierta, a menos que por alguna circunstancia pueda llegar a ser cierta (art. 2467, inc. g, CCCN).

Instituciones especiales:

Institución de heredero a los parientes:

Puede suceder que el causante haya instituido heredero a "sus parientes" sin ninguna otra especificación. La
primera parte del art. 2485 del CCCN resuelve esta cuestión: "La institución a los parientes se entiende hecha a los
de grado más próximo, según el orden de la sucesión intestada y teniendo en cuenta el derecho de representación.
Si a la fecha del testamento hay un solo pariente en el grado más próximo, se entienden llamados al mismo tiempo
los del grado siguiente ..."

Institución a favor de simples asociaciones:


La segunda parte del art. 2485 del CCCN esta-blece: "...La institución a favor de simples asociaciones se entiende
hecha a favor de las autoridades superiores respectivas de/lugar del último domicilio del testador con cargo de
aplicar los bienes a los fines indicados por el causante ..."
Institución al alma del testador o de otras personas:

La última parte del art. 2485 del CCCN resuelve de manera similar esta cuestión aunque la amplía al mencionar a la
religión del testador: "... La institución a favor del alma de/testador o de otras personas se entiende hecha a la
autoridad superior de la religión a la cual pertenece el testador, con cargo de aplicar los bienes a sufragios y fines de
asistencia social".
Se ha incluido dentro de esta posibilidad no sólo que se designe heredero al alma del testador sino que éste también
podrá hacerlo respecto del alma de otras personas que serán las destinatarias de los sufragios a realizar.
Los bienes pasarán a poder de la autoridad religiosa que corresponda según las creencias del testador y deberán
dedicarse a cumplir con el objetivo que marca la ley; es decir, a realizar sufragios a la memoria del testador o de la
persona designada y a la asistencia social, esto es, a cubrir necesidades de personas carenciadas.

Derechos de los herederos universales

No existen diferencias esenciales entre los herederos instituidos en el testamento y los llamados por la ley. Sin
embargo, pueden presentarse algunas situaciones peculiares en las que hay un tratamiento diferente de acuerdo a
la naturaleza del llamamiento como hereddero.
La investidura de la calidad de heredero la tienen de pleno derecho los descendientes, los ascendientes y el
cónyuge, pero los restantes parientes colaterales hasta el cuarto grado y los herederos testamentarios deben
obtenerla en forma judicial. También los descendientes, ascendientes y el cónyuge se encuentran protegidos por la
legítima, mientras que el resto de los parientes y los instituidos en el testamento no gozan de ese resguardo legal. La
colación sólo es debida entre descendientes y el cónyuge y los herederos instituidos no podrán alegar la existencia
de donaciones que deban ser colacionadas.
En la sucesión intestada funciona el derecho de representación entre los descendientes y entre los descendientes de
los hermanos, mientras que en principio no hay derecho de representación en la sucesión testamentaria. Sólo este
derecho tendrá vigencia si el testador expresamente lo ha dispuesto o bien cuando designa heredero a los parientes.
Más allá de estas diferencias, los derechos de los herederos son idénticos ya sea que hayan sido llamados por la ley o
por el testador.

Herederos de cuota
Como se puede apreciar, el heredero de cuota tiene, en principio, limitado su derecho a la porción asignada por el
testador, sin posibilidad de acrecer. Sin embargo, este principio sufre dos importantes excepciones; es decir, dos
casos en los que el llamamiento del heredero de cuota no se encuentra limitado sino que tiene posibilidades de
incrementar su porción.
Uno de esos supuestos tiene lugar cuando de las disposiciones testamentarias pueda inferirse que ésa ha sido la
intención del testador para el caso en que no pueda cumplirse alguna de las restantes disposiciones. En esta
situación, el heredero de cuota puede acreecer.
El otro caso tiene lugar cuando el testador, luego de haber instituido herederos de cuota, no cubre con otras
disposiciones el resto de los bienes y la última parte del art. 2488 del CCCN considera que son llamados a este
remanente los herederos legítimos y si faltan, los herederos de cuota acrecen en proporción a su parte.

También, el heredero de cuota puede ser declarado indigno (art. 2284); puede ceder su cuota (art. 2302); puede
pedir la adopción de medidas necesarias para la conservación de los bienes indivisos (art. 2324); puede designar
administrador de la herencia y puede ser nombrado para ese cargo (art. 2346); y se encuentra facultado para
requerir la partición (art. 2364).

3) Sustitucion de herederos. Concepto. Especies. Etc

Hay sustitución de herederos cuando el testador instituye otro heredero para el caso de que el designado en primer
término no quiera o no pueda recibir la herencia. El Código Civil derogado, trataba en varios artículos la posibilidad
de establecer ese orden subsidiario, institución que también podía hacerse respecto de los legatarios conforme lo
dispuesto en el art. 3731 de ese ordenamiento.

Art. 2491. La facultad de instituir herederos o legatarios no importa el derecho de imponer un sucesor a los
instituidos. La disposición que viola esta prohibición no afecta la validez de la institución, y tiene eficacia si puede
valer en alguno de los dos casos del párrafo siguiente. El testador puede subrogar al instituido para el supuesto de
que éste no quiera o no pueda aceptar la herencia o el legado. La sustitución establecida para uno de esos casos vale
para el otro.
El heredero o legatario sustituto queda sujeto a las mismas cargas y condiciones impuestas al sustituido si no
aparece claramente que el testador quiso limitarlas al llamado en primer término.

*Sustitucion prohibida: La norma comienza con la prohibición de la llamada sustitución fideicomisaria que implica
que el heredero o legatario instituido en primer lugar debe mantener los bienes sin facultad de disponer de ellos
hasta su muerte y cuando eso ocurre dichos bienes no pasan a sus herederos legítimos ni a los que el instituido
podría haber designado en su testamento, sino al heredero o legatario sustituto nombrado en el testamento
original. Esta forma de sustitución provoca que la voluntad del testador mantenga su vigencia más allá de la muerte
del instituido y esto significa, por un lado, imponer la inmovilidad de los bienes durante la vida del instituido y, por
otro, nombrarle a éste su heredero.

*Sustitucion permitida: La parte siguiente del artículo que se comenta alude a la sustitución autorizada que no es
otra que la llamada sustitución vulgar; esto significa que será válida la sustitución cuando el instituido en primer
lugar no quiera o no pueda aceptar la herencia o el legado.
Los supuestos que ponen en acción la sustitución tienen lugar cuando ha mediado renuncia a la herencia o al legado
o cuando no puede recibirlo porque ha sido declarado indigno por cualquier otra causa que contraríe la vocación
sucesoria conyugal o bien la vocación sucesoria testamentaria. Cuando en la disposición se ha hecho referencia sólo
a uno de estos supuestos, la norma interpreta que la voluntad del testador ha sido incluir a ambas posibilidades.
Esto significa que si se ha hecho la sustitución para el caso de renuncia también debe considerarse que tendrá lugar
para el caso de imposibilidad de recibir fa herencia o el legado y viceversa.
Aunque la norma no lo prevé en forma expresa, como lo hacía la legislación anterior, pero tampoco lo excluye,
puede haber más de una sustitución y en el caso que cobre vigencia el llamamiento efectuado en último terminase
entiende qué ha sustituido al heredero o legatario nombrado en primer lugar.

4) Fideicomiso testamentario:

Desde la sanción de la ley 24.441 y ahora con la reforma, es posible que una persona constituya por contrato o por
testamento un fideicomiso conforme resulta de los arts. 1666 y 1699 del CCCN. En el fideicomiso aparecen
interviniendo distintas personas.

Partes:
-Fuduciante: tiene la propiedad y transmite los bienes.
-Fiduciaario: administra los bienes.
-Beneficiario: percibe los frutos del fideicomiso.

Es evidente que en el fideicomiso existe una especie de sustitución, porque el beneficiario recibe la renta de los
bienes durante un tiempo y cumplido el plazo o la condición pasaran al fideicomiso.
Es una sustitucion con características peculiares porque el beneficiario no es propietario de los bienes, ya que estos
se encuentran en cabeza del fiduciario.

Sin embargo, la posibilidad de disponer un fideicomiso testamentario no sólo surge del art 1699 del CCCN sino
también del art. 2493: "El testador puede disponer un fideicomiso sobre toda la herencia, una parte indivisa o bienes
determinados, y establecer instrucciones al heredero o legatario fiduciario, conforme a los recaudos establecidos en
la Sección 8a, Capitulo 30, Título IV de/Libro Tercero.
La constitución de fideicomiso no debe afectar la legitima de los herederos forzosos, excepto el caso previsto en el
art. 2448".
Surge claramente de la norma que el heredero o legatario puede ser el fiduciario, es decir, quien administra los
bienes fideicomitidos y, a su vez, puede ser beneficiario de las rentas que produzcan (art. 1673, CCCN), pero no
puede ser fideicomisario (art. 1672, CCCN) por lo que no podrá ser el que reciba los bienes al fin del fideicomiso.

5) Derecho de acrecer. Etc

El derecho de acrecer es el derecho que pertenece en virtud de la voluntad presunta del difunto a un heredero de
cuota o a un legatario, de aprovechar la parte de su coheredero o colegatario, cuando el derecho de éste se frustra o
caduca.
Este derecho es gozado sólo por los herederos de cuota o los legatarios, ya que el heredero universal, al no tener
limitación en su llamamiento, tiene siempre la vocación al todo de la herencia.
Por el contrario, el heredero de cuota y el legatario tienen su derecho limitado en el primer caso a la cuota asignada
por el testador y en el segundo, al objeto legado.

Para que pueda existir el derecho de acrecer es necesario que el testador haya llamado a varias personas a una
misma cuota o a un mismo bien.
Así resulta del art. 2489 del CCC/V: "Cuando el testador instituye a varios herederos en una misma cuota, o atribuye
un bien conjuntamente a varios legatarios, cada beneficiario aprovecha proporcionalmente de la parte
perteneciente al heredero o legatario cuyo derecho se frustra o caduca En consecuencia, el derecho de acrecer
requiere que exista una única disposición a favor de dos o más personas; ya sea para que reciban conjuntamente
una cuota de la herencia o un bien en particular.

Efectos del acrecimiento: Cuando ha operado el acrecimiento el coheredero de cuota o colegatario favorecido
tendrá los derechos, pero también las obligaciones y las cargas que pesaban sobre la parte acrecida, salvo, claro
está, que hubiera existido una obligación o carga de carácter personal de quien ha dejado su derecho sobre la cuota
hereditaria o sobre el bien legado.
Así resulta de la segunda parte del art. 2489 del CCCN:"... Los favorecidos por el acrecimiento quedan sujetos alas
obligaciones y cargas que pesaban sobre la par-te acrecida, excepto que sean de carácter personal...". Finalmente,
puede suceder que uno de los coherederos de cuota o colegatarios fallezca después de la muerte del causante; en
ese caso, transmite su derecho a sus propios herederos, tal como lo dispone la última parte del art. 2489:".., El
derecho de acrecer se transmite a los herederos".

Legado de usufructo:
Puede suceder que se haya hecho un legado de usufructo a favor de varias personas y luego de la muerte del
testador, fallece uno de los colegatarios. Al igual que lo establecido en el Código Civil anterior, el art. 2490 del CCCN
brinda una solución expresa a esta cuestión: "La muerte de/colegatario de usufructo, posterior a la del testador, no
produce el acrecimiento de/os otros colegatarios excepto disposición en contrario del testamento'

6) Legados. Concepto etcetc

Por la variedad de objetos sobre los que puede recaer una disposición testamentaria particular, es dificultoso
elaborar un concepto de legados.
Tal vez, ha sido Fassi el que se ha aproximado con mayor precisión al decir que es toda disposición testamentaria de
uno o más objetos singulares o universalidades de cosas, sea que existan en la herencia o deba adquirirlas el sucesor
universal para transferirlas al beneficiario.
El legado es una disposición testamentaria que tiene por objeto la transmisión de derechos reales sobre bienes que
eran de propiedad del testador o la imposición de obligaciones en favor de alguien denominado "legatario”. Los
legatarios son simples adquirentes de bienes (en sentido amplio), que el causante les atribuye o defiere en el
testamento. Son sucesores en los bienes y destinatarios de las liberalidades del causante.
En consecuencia, los herederos, como sucesores en la persona del causante, están obligados a cumplir con los
legados hechos por el testador. De esta manera, en materia de legados, es necesario considerar a tres sujetos: el
testador que a través de una disposición testamentaria instituye el legado y crea la vocación del legatario; los
herederos que deben cumplir con el legado; y finalmente, el legatario que es el llamado a recibir el bien que se le ha
legado.
El legado recae sobre bienes particulares que pasan aisladamente al legatario separándose de la universalidad del
acervo hereditario, y el legatario es propietario del derecho al legado desde la muerte del testador. Por otra parte, el
legado no puede pagarse hasta que estén pagadas todas las deudas, y constituye una carga de la sucesión.

Caracteres : Los legados se rigen por las O. en Gral.:

Art.724. La o es una relación jurídica en virtud de la cual el acreedor tiene el derecho a exigir del deudor una
prestación determinada destinada a satisfacer un interés licito y, ante el incumplimiento, a obtener forzadamente la
satisfacción de dicho interés.
Art. 725. Requisitos la prestación q constituye el objeto (cont. Patrimonial) debe ser material y jurídicamente
posible (crítica a “jurídicamente posible” se supone que si está regulado como requisito debe ser licito, está
implícito), licito, determinado o determinable (prohibición de indeterminabilidad, no se puede contratar sobre algo
que no existe), susceptible de valoración económica, y debe corresponder a in interés patrimonial o extrapatrimonial
del acreedor.

- El legado es un acto a título gratuito que realiza el causante a favor del legatario.
Como decía Vélez Sarsfield en la nota al art. 3787 del Código Civil derogado "El legado es un título de pura liberalidad
y se presume que siempre es hecho animus – donandi aun cuando sea a un acreedor del testador'

- lndelegabilidad del legado: Como ya se señaló al hacer referencia a las características del legado, el art. 2495
del CCCN prohibe que sea dejado al arbitrio de un tercero ni del heredero.
-
Distincion con otras figuras.

 Debido a que se trata de un acto de pura libertad, tiene cierta similitud ccon la donacion. Sin embargo las
diferencias son notables.
El legado solo puede ser por una disposición testamentaria, mientras que la donacion es un contrato entre vivos;
El legado produce efectos después de la muerte del causante, y la donacion desde el momento que se otorga;
El legado es un acto unilateral porque se otorga con el consentimineto del testador, la donacion es un contrato
bilateral;
El legado puede ser revocado por el testador hasta el mismo momento de su fallecimiento, en la la donacion existen
causas especificas por las cuales se puede revocar.

Legado y cargo debido: si bien los dos son hechos por el testador en beneficio de un tercero:
El legado es una disposición independiente, el cargo es una modalidad que afecta a otra disposición testamentaria;
El legado debe ser cumplido por todos los herederos, el cargo solo por la persona que resulta afectada;
Si se incumple el legado no hay mas sanción que la de ser compelido a cumplirla, el incumplimiento del cargo puede
hacer caducar la disposición testamentaria a la cual se impuso.

Distinción entre legatario y acreedores del causante: en ambos supuestos pueden reclamar tanto el cumplimiento
como el pago del crédito contra los herederos y a ello quedan afectados a los bienes hereditarios.
Los acreedores cobran antes que los legatarios porque tiene preferencia aquel a quien se le debe algo que aquel que
esta recibiendo una liberalidad.

Bienes que pueden ser legados

Se ha reunido en una sola norma los dos artículos del Código Civil anterior que se referían a estos temas.
En efecto, el art. 2497 del CCCN establece: "Pueden ser legados todos los bienes que están en el comercio, aun los
que no existan todavía pero que existirán después. El legatario de bienes determinados es propietario de ellos desde
la muerte del causante y puede ejercer todas las acciones de que aquel era titular"

Objeto del legado: cosas que están en el comercio.

Legado de cosa futura: El art. 2497 del CCCN permite que se leguen cosas que no existen todavía pero que existirán
después. Obviamente, para que el legado de cosa futura tenga validez es necesario que el objeto legado exista y se
incorpore al patrimonio del testador antes de su fallecimiento.

Legado de cosa cierta y determinada

El legado de cosa cierta y determinada se encuentra regulado por la última parte del art. 2497 del CCCN ya
transcripto y por los a rts. 2498 y 2499. Existen algunas diferencias entre las normas anteriores y la que se ha
implementado.
La primera de ellas consiste en que ahora se han refundido en una disposición ambas normas anteriores.
La otra modificación es que se incluye al administrador entre los sujetos obliga-dos a cumplir con los legados y, por
consiguiente, ante quien el legatario debe requerir la entrega.

Concepto de legado de cosa cierta y determinada


En tal sentido, la doctrina entiende que el legado de cosa cierta es aquel que tiene por objeto un bien material cierto
y determinado que debe pertenecer, en principio, al testador.
Se señala que en determinados supuestos es posible el legado de cosa ajena conforme lo autoriza el art. 2507 del
CCCN.
El legado de cosa cierta y determinada es el más frecuente de los legados y su objeto debe quedar individualizado
por el testador en su testamento para que encuadre dentro de esta especie de legado y el mismo sea válido:

Derechos del legatario de cosa cierta y determinada

La última parte del art. 2497 del CCCN dispone que: "... El legatario de bienes determinados es propietario de ellos
desde la muerte del causante y puede ejercer todas las acciones de que aquel era titular". Coinciden en este caso el
derecho al legado y el derecho al bien legado, ya que ambos se adquieren con la muerte del testador.

Sujetos del legado:


-testador
-legatario:sujeto llamado a recibir el legado. Debe tener capacidad para recibir, no tiene obligacion de responder por
las deudas, y en principio no acrecen.
-herederos: obligado a cumplir con el legado. Deben hacer la entrega del bien.
_prelegado: es el legado que hace el testador a favor de un heredero. Se hacen dos llamamientos: uno lgal y otro
como sucesor particular.

DETERMINACION: cuando se ha designado con precisión el destinatario del legado.

7) Adquisicion del objeto legado. Etcetc

En el régimen del Código Civil anterior no había una norma genérica que se refiriese a la adquisición del derecho al
legado. Tan sólo el art. 3766 se refería a que el legatario de cosas determinadas era propietario de ellas desde la
muerte del testador.
En cuanto al derecho al legado existía coincidencia autoral en considerarlo adquirido con la muerte del testador,
mientras que el derecho sobre el objeto legado se concretaba de manera diversa según la especie de legado
particular que se hubiese realizado.
Esta situación ha sido regulada de manera específica por el art. 2496 del CCCN: "El derecho al legado se adquiere a
partir de la muerte del testador o, en su caso, desde el cumplimiento de/a condición a que está sujeto. El legado con
cargo se rige por las disposiciones relativas a las donaciones sujetase esa modalidad".

La nueva norma precisa ahora en un enunciado específico que el derecho al legado se adquiere a partir de la muerte
del testador y ello es correcto porque con el fallecimiento se concreta el llamamiento que surge de la voluntad
instrumentada en el testamento. A partir de la muerte, entonces, el legatario tiene derecho a que se cumpla con ese
legado y, en consecuencia, a exigir de los herederos la entrega del bien. A su vez, cuando el legado se hubiera
supeditado al cumplimiento de una condición, después de ocurrido ese hecho futuro e incierto, se considera
adquirido el derecho al legado.

-legado de cosa cierta: desde la muerte del causante.


-legado de cosa indeterminada o fungible: nace un crédito para exigir el cumplimiento.
-Legado de liberación: la finalidad es liberar al deudor de su obligacion y sus efectos se producen con la muerte del
causante.
-legado de cosa cierta y determinada: el legatario puede reivindicarla, con citación del heredero. Los gastos están a
cargo de la sucesion.

Legado de liberación:

ARTICULO 2505.-Legado de crédito. Legado de liberación. El legado de un crédito o la liberación de una deuda
comprende la parte del crédito o de la deuda que subsiste a la muerte del testador y los intereses desde entonces. El
heredero debe entregar al legatario las constancias de la obligación que el testador tenía en su poder.
La liberación de deuda no comprende las obligaciones contraídas por el legatario con posterioridad a la fecha del
testamento.
Existe legado de crédito cuando el testador dispone, a título particular, de obligaciones patrimoniales en su favor
(créditos), transmisibles por sucesión. Este crédito comprende no solo lo debido al testador, sino también los
intereses vencidos a la apertura de la sucesión. El art. 2505 CCyC, en el caso de los legados de crédito, impone al
heredero la obligación de entregar todos los documentos que hubiere tenido el testador a fin de documentar dicha
obligación.
El legado de liberación es aquel que tiene por objeto extinguir la obligación del deudor (legatario), mediante la
remisión de la deuda que efectúa el testador en el testamento. Esta extinción lo es respecto de la deuda principal y
de los intereses que se hubieren devengado hasta la muerte del causante.

La liberación de deuda no comprende las obligaciones contraídas por el legatario con posterioridad a la fecha del
testamento, sino solamente las deudas contraídas antes de su otorgamiento.

Entrega del legado

Sujetos obligados :

La parte final del art. 2498 del CCCN establece la necesidad de requerir la entrega del legado:
"... Debe pedir su entrega al heredero, al administrador o al albacea, aunque la tenga en su poder por cualquier
título. Los gastos de entrega de/legado están a cargo de la sucesión".
Con esta disposición se procura evitar las vías de hecho que se podrían producir sí el legatario pudiera tomar
directamente el bien legado.
Por otra parte, en la nota al anterior art. 3767 Vélez explicaba claramente su contenido al sostener: "Una cosa es la
propiedad, otra la posesión de la cosa legada. Si la propiedad es adquirida desde el día de la muerte del testador, la
posesión es deferida hasta la entrega voluntaria o forzada que haga el heredero".
El obligado a entregar la cosa legada, era el heredero y el albacea testamentario, en su caso. Se ha agregado ahora
como sujeto obligado al administrador de la herencia.
Este deber surge en forma explícita del art. 2358 del CCCN que le impone al administrador la función de pagar a los
acreedores y luego cumplir con los legados.
A su vez, la obligación del albacea respecto del cumplimiento de los legados se encuentra impuesta por el art. 2526
del CCCN.
Antes de la reforma había sido reconocido que el legatario de cuota podía ser obligado a entregar la cosa legada, ya
que su derecho a una cuota ideal de la herencia lo hacía responsable de esta obligación. Idéntica apreciación cabe
hacer en la actualidad respecto del heredero de cuota, ya que su derecho a una porción ideal lo hace también
responsable del cumplimiento de los legados hechos por el causante.

Tiempo de entrega:

No existe una norma expresa que determine el tiempo en que un legado debe ser entregado por el obligado. Para
determinar el tiempo de la entrega del legado es necesario establecer primero si se trata de una disposición sujeta a
plazo o condición suspensiva o si no tiene ninguna de estas modalidades.

- En el primer caso, recién cuando se cumpla el plazo o la condición el legatario tendrá el derecho a pedir la
entrega.
- En el segundo supuesto, el legatario tiene ese derecho desde el momento mismo de la muerte del causante.

ARTÍCULO 2499. Entrega del legado


El heredero debe entregar la cosa legada en el estado en que se encuentra a la muerte del testador, con todos sus
accesorios.

El legatario de cosa cierta hace suyos los frutos naturales, industriales y civiles desde el momento mismo de la
muerte del causante (art. 754 CCyC, Libro Tercero, Título I), y tratándose de frutos civiles —es decir, de las rentas
que la cosa produce— el legatario será titular de las que se devenguen con posterioridad a la muerte del testador.

Orden en que deben pagarse:


Antes de cumplirse con los legados hay que pagar las dedudas del causante, incluyendo entre ellas las cargas de la
sucesion, y luego hayq eu determinar si esas disposiciones testamemtarias no afectan la legitima.

Llegado ese punto y si los bienes hereditarios alcanzan a cubrir todos los legados no existe ningún problema.

ARTÍCULO 2316. Preferencia Los acreedores por deudas del causante y por cargas de la sucesión, y los legatarios
tienen derecho al cobro de sus créditos y legados sobre los bienes de la herencia, con preferencia sobre los
acreedores de los herederos

ARTÍCULO 2317. Responsabilidad del heredero

El heredero queda obligado por las deudas y legados de la sucesión sólo hasta la concurrencia del valor de los bienes
hereditarios recibidos. En caso de pluralidad de herederos, éstos responden con la masa hereditaria indivisa.

El art. 2317 CCyC distingue entre:

a) El heredero. En el primer caso, el heredero queda obligado por las deudas y legados de la sucesión, solo hasta la
concurrencia del valor de los bienes que recibe en la sucesión.

El art. 2317 CCyC establece claramente y como principio la responsabilidad limitada o intra vires del heredero, quien
queda obligado por las deudas y legados de la sucesión solo hasta la concurrencia del valor de los bienes hereditarios
recibidos. Ya no se distingue entre aceptación pura y simple y aceptación beneficiaria; hay una sola aceptación (art.
2293 CCyC) que trae aparejada la responsabilidad limitada del heredero (art. 2317 CCyC). Por ser continuador de la
persona del causante, el heredero —sucesor universal— será siempre deudor personal de las deudas de la sucesión,
pero en proporción a su cuota en la herencia. También con esa limitación, no más allá del valor de los bienes
hereditarios, es que responderá por los legados que hubiera hecho el causante. En cuanto a la modalidad de la
responsabilidad limitada, se reitera que el art. 2280 CCyC, regulador de la “situación del heredero”, sienta el
principio general: la responsabilidad es cum viribus hereditatis, pudiendo transformarse en pro viribus en caso de
que los bienes hereditarios se hubieren enajenado. Destacamos que, en ciertas circunstancias, se consagra la
responsabilidad del heredero con sus propios bienes (arts. 2321, 2295 CCyC).

b) La pluralidad de herederos. En caso de existir pluralidad de herederos, estos responden con la masa hereditaria
indivisa. La garantía es, entonces, la totalidad de la masa. Se define la afectación de la masa al pago de las deudas y
cargas de la sucesión, pues el patrimonio hereditario en estado de indivisión es la prenda común de los acreedores,
quienes pueden ejecutar los bienes para cobrarse. Esto significa que mientras subsista la indivisión los acreedores
deben reclamar el cobro de sus créditos a la sucesión.

Si el legado es de una universalidad de bienes y deudas, el legatario sólo queda obligado al pago de las deudas
comprendidas en aquélla hasta el valor de los bienes recibidos, sin perjuicio de la acción subsidiaria de los
acreedores contra los herederos y los otros legatarios en caso de insuficiencia de los bienes de la universalidad.

Acciones y medios de Garantia:

El legatario tiene accion contra el heredero, contra el legatario a cuota y contra el albacea, en su caso, para exigir la
etrega del objeto legado.
En el caso del legado de cosa cierta, tiene además las acciones reales qie le correspondan sobre el objeto legado ya
que es propietario de este desde el momento de la muerte del causante.

Perdida y deterioro: Son por cuenta del legatario.

Esta solución no excluye a los casos de culpa o mora de los herederos, pues en tales supuestos deben asumir la
responsabilidad.
BOLILLA XXX: INEFICACIA DEL TESTAMENTO. NULIDAD. REVOCACION.

1. Ineficacia del testamento y de las disposiciones testamentarias etc

La ineficacia se produce solo cuando el legislador lo disponga expresamente, con sujeción al principio de cumplir en
cuando quepa la voluntad del testador.
Las dispocisiciones testamentarias pueden verse privadas de efectos por causas de distinta naturaleza:

- Nulidad: En los tetsamentos tratándose de clausulas separables la nulidad de una no afecta a otras.
- Caducidad: caducan por muerte del beneficiario anterior a la del causante, o al cumplimiento de la coddicion
suspensiva impuesta en el testamento, por incumplimiento de la condición, por perdida o destrucción del
objeto legado y por renuncia del beneficiario.
- Revocación: es un acto por el cual el testador deja sin efecto una disposición anterior.
Puede ser expresa o tácita. La primera resulta de una declaración de voluntad que asi lo dispone, debe estar
contenida en un testamento posterior.
La segunda presume la voluntad del testador de dejar sin efecto las disposiciones testamentarias. Ej: la
destrucción del testador, la enajenación de la cosa legada, el matrimonio posterior, etc.

2) Nulidades. Etc

ARTÍCULO 2467. Nulidad del testamento y de disposiciones testamentarias Es nulo el testamento o, en su caso, la
disposición testamentaria:
a) por violar una prohibición legal;
b) por defectos de forma;
c) por haber sido otorgado por persona privada de la razón en el momento de testar. La falta de razón debe ser
demostrada por quien impugna el acto;
d) por haber sido otorgado por persona judicialmente declarada incapaz. Sin embargo, ésta puede otorgar
testamento en intervalos lúcidos que sean suficientemente ciertos como para asegurar que la enfermedad ha cesado
por entonces;
e) por ser el testador una persona que padece limitaciones en su aptitud para comunicarse en forma oral y, además,
no saber leer ni escribir, excepto que lo haga por escritura pública, con la participación de un intérprete en el acto;
f) por haber sido otorgado con error, dolo o violencia;
g) por favorecer a persona incierta, a menos que por alguna circunstancia pueda llegar a ser cierta.

a) La nulidad del testamento es absoluta cuando contraviene el orden público, la moral o las buenas costumbres (art.
386 CCyC). Un ejemplo de nulidad absoluta es el otorgamiento de un testamento con una forma diversa a las
contempladas en el CCyC. En este supuesto, la nulidad puede ser declarada por el juez, aun sin mediar petición de
parte, si es manifiesta en el momento de dictar sentencia. También la nulidad puede ser peticionada por el
Ministerio Público y por cualquier interesado, excepto por la parte que invoque la propia torpeza para lograr un
provecho. Esta nulidad absoluta no puede sanearse por la confirmación del acto ni por la prescripción (art. 387
CCyC).

b) La nulidad relativa en cambio responde a la protección del interés de ciertas personas. Por ejemplo, el testamento
otorgado por una persona que padece una enfermedad mental, o el testamento otorgado en estado de ebriedad, o
bajo violencia. En este supuesto, la nulidad relativa solo puede declararse a instancia de las personas en cuyo
beneficio se establece, y excepcionalmente puede invocarla la otra parte si es de buena fe y hubiera experimentado
un perjuicio importante. Esta nulidad relativa puede sanearse por la confirmación del acto y por la prescripción de la
acción. Asimismo, la parte que obró con ausencia de capacidad de ejercicio para el acto, no puede alegarla si obró
con dolo (art. 388 CCyC).

c) La nulidad puede afectar todo el testamento o solamente una o alguna de sus disposiciones o cláusulas, por lo cual
el resultado será su nulidad total o parcial (art. 389 CCyC).
3) REVOCACION
El art. 2511 del CCCN establece: "EL testamento es revocable a voluntad del testador y no confiere a los instituidos
derecho alguno hasta la apertura de la sucesión. La facultad de revocar el testamento o modificar sus disposiciones
es irrenunciable e irrestringible".
Ya se ha señalado que el testamento recién adquiere vigencia jurídica a partir de la muerte del testador, ya que sus
efectos se desencadenan a partir de ese hecho jurídico.
La única excepción que se reconoce al efecto post mortem tiene lugar cuando en el testamento se ha efectuado el
reconocimiento de un hijo extramatrimonial y la razón de ser de esa característica peculiar es que el reconocimiento
puede instrumentarse mediante cualquier documento público o privado con lo cual, el testamento tendrá esa
consecuencia inmediata sin tener que esperar a la muerte del causante. La norma también pone de manifiesto que
la posibilidad de dejar sin efecto o modificar las disposiciones de un testamento no puede sufrir ninguna restricción

Aunque no se mencione en forma expresa, la revocación puede ser total o parcial. Será total cuando queda sin
efecto en forMa íntegra todo el testamento y será parcial cuando se plasma el cambio de voluntad respecto de
alguna de las disposiciones testamentarias.

Revocación expresa
Será expresa cuando un nuevo acto revestido de las formas testamentarias dispone que revoca un testamento
anterior y será tácita o presunta cuando la ley le confiere ese efecto a determinados actos o hechos del testador.
El art. 2512 del CCCN señala los recaudos que requiere la revocación expresa:
La revocación expresa debe ajustarse a las formalidades propias de los testamentos". Por lo tanto, un nuevo
testamento debe ser efectuado y en él el testador debe manifestar en forma clara y termina nte su voluntad de dejar
sin efecto el testamento anterior.
En el nuevo testamento por el que se revoca en forma expresa el anterior no es necesario que se realice una nueva
disposición de bienes sino que es suficiente que se ajuste a las formalidades propias de los testamentos. En tal
supuesto, la sucesión será deferida de acuerdo a la ley.

Revocación tácita por testamento posterior : Sobre este punto es esclarecedor detallar someramente la evolución
legislativa. En el régimen originario del Código, de acuerdo al art. 3828, el testamento posterior anulaba el anterior
en todas sus partes si no contenía la confirmación del primero.

El art. 2513 del CCCN adopta en el tema de la revocación por el testamento posterior una solución parecida, con
algunas excepciones, a la del Código Civil original: "El testamento posterior revoca al anterior si no contiene su
confirmación ex-presa, excepto que de las disposiciones del segundo resulte la voluntad del testador de mantener
las del primero en todo o en parte”.

Revocación tácita por matrimonio: Otro de los casos de revocación tácita del testamento tiene lugar cuando el
testador celebra un matrimonio con posterioridad a haber otorgado la disposición de última voluntad.

Al tratar este tema el art. 2514 del CCCN dispone: "El matrimonio contraído por el testador revoca el testamento
anteriormente otorgado, excepto que en éste se instituya heredero al cónyuge o que de sus disposiciones resulta la
voluntad de mantenerlas después del matrimonio". La regla general se mantiene de manera idéntica a la anterior; es
decir, que el matrimonio provoca la revocación del testamento anterior

4) Cancelación o destrucción del testamento ológrafo

Caso del ejemplar único: Cuando un testamento ológrafo es cancelado o destruido por su autor o por otra persona
que sigue sus directivas, es evidente que existe una clara intención del testador de dejarlo sin efecto. Así surge de la
primera parte del art. 2515 del CCCN: "El testamento ológrafo es revocado por su cancelación o destrucción hecha
por el testador o por orden suya ...". Incidencias del CCCN. Derecho sucesorio 365 En esta parte se alude
fundamentalmente al supuesto en que haya un solo ejemplar del testamento ológrafo.

Caso en que existe más de un ejemplar: En el caso que exista más de un ejemplar del testamento ológrafo será
necesario que se cancelen o destruyan todos los testamentos similares.
El art. 2515 del CCCN en su parte pertinente establece esta solución y al mismo tiempo contempla una situación de
excepción: "... Cuando existen varios ejemplares del testamento, éste queda revocado por la cancelación o
destrucción de todos los originales, y también cuando ha quedado algún ejemplar sin ser cancelado o destruido por
error, dolo o violencia sufridos por el testador... La cancelación destrucción de todos los ejemplares pone en
evidencia la intención de revocar sus disposiciones.

Se exceptúa el caso en que pueda haber quedado algún ejemplar y sin embargo quedará revocado cuando la
permanencia del testamento que no ha sido cancelado se ha debido a un vicio del consentimiento sufrido por el
testador. Ello ocurrirá, por ejemplo, si ha sido engañado haciéndole creer que ya habían quedado cancelados todos
los ejemplares del testamento.

Forma de la cancelación o destrucción: La cancelación o destrucción ocurre, como lo afirman Hernández y ligarte'',
cuando se le prende fuego, se rompe el papel donde esté escrito en varios trozos, se lave completamente, se tracen
barras o rayas en su texto completo, en su firma o cualquier otro acto equivalente. Un tercero puede recibir un
mandato para destruir o cancelar un testamento y obra legítimamente en la medida en que pueda demostrar que se
ha ajustado a las instrucciones recibidas.

Esta actuación del mandatario tiene que haberse producido en vida del causante, pues su fallecimiento implica el fin
del mandato conforme resulta del art. 1329, inc. e) del CCCN.

Cancelación parcial: Para determinar si ha existido una cancelación parcial del testamento es preciso evaluar el
alcance de la tachadura o rotura. Si estos hechos se circunscriben a una parte limitada del testamento sin 'afectar
sus elementos esenciales, habrá tenido lugar una cancelación parcial. Pero en el caso que la destrucción o tachadura
abarquen formalidades que la ley exige en el testamento ológrafo bajo pena de nulidad, éste carecerá de efecto
jurídico en forma íntegra.

Presunción de la autoría:

En el art. 2515 del CCCN también se establece una presunción de la autoría de la cancelación o destrucción: "... Si el
testamento se encuentra total o parcialmente destruido o cancelado en casa del testador, se presume que la
destrucción o cancelación es obra suya, mientras no se pruebe lo contrario...".

Se trata de una presunción iuris tantum porque admite prueba en contrario que estará a cargo de quien sostenga la
validez del testamento porque ha actuado un tercero sin instrucciones del testador. La pauta objetiva que se ha
establecido a ese fin ---que el testamento cancelado o destruido se encuentre en la casa del testador—tiene
fundamental importancia para determinar si ha existido la voluntad de revocar el testamento por parte del testador.
La expresión que ya utilizaba la legislación anterior, referida a la casa del testador, ha sido interpretada por
extensión como todo lugar que quede reservado al control exclusivo del testador, como puede ser una caja de
seguridad bancaria.

Alteraciones por accidente o por hechos de terceros:

No se puede interpretar que el testador ha tenido la voluntad de revocar el testamento cuando la cancelación o la
destrucción ha tenido lugar en forma accidental o proviene del accionar de un tercero que no ha obrado siguiendo
instrucciones del testador.

El mismo art. 2515 del CCCN en su penúltimo párrafo establece: "... Las alteraciones casuales o provenientes de un
extraño no afectan la eficacia del testamento con tal de que pueda identificarse la voluntad del testador por el
testamento mismo ... ".

Por lo tanto, en la medida en que a pesar del accidente o de la acción del tercero sea posible establecer en forma
fehaciente el contenido de las disposiciones testamentarias, dicho testamento tendrá plena vigencia. No se podrá
alegar prueba extraña al testamento en este caso, como en ningún otro, para establecer el contenido de las
disposiciones testamentarias. Sin embargo, hay que tener en cuenta que si el testador tiene conocimiento de las a
iteraciones accidentales o por el hecho del tercero, ante el riesgo de q ue sus dis-posiciones no puedan ser
reproducidas, debería realizar uno nuevo a fin de que se haga efectiva su última voluntad.

Destrucción por caso fortuito

La última parte del art. 2515 contempla esta situación: "... No se admite prueba alguna tendiente a demostrar las
disposiciones de un testamento destruido antes de la muerte del testador, aunque la destrucción se haya debido a
caso fortuito".

Se ha mejorado la redacción anterior al fijarse el tiempo en que tiene que haber ocurrido la destrucción; es decir que
debe haber sucedido antes de la muerte del Incidencias del CCCN. Derecho sucesorio 367 testador, ya que si la
destrucción es posterior no puede entenderse que ha habido revocación, pues en nada ha intervenido ni siquiera en
forma tácita la voluntad del testador y en este caso podría acreditarse su contenido.

También se ha eliminado la referencia que traía el art. 3837 del Código Civil derogado en el que se incluía a la fuerza
mayor junto al caso fortuito.

La revocación tiene lugar porque sí el testador conocía la destrucción del testamento y no hizo uno nuevo, está
aceptando que quede sin efecto la voluntad en él expresada. Por el contrario, si se pudiera demostrar que el
testador no tuvo conocimiento de la destrucción no puede deducirse de ese desconocimiento una implicancia tan
importante como la revocación del testamento. En este caso, debería admitirse la posibilidad de probar su
contenido.

5) Revocacion del legado: enajenación de la cosa legada. Actos que comprende. Etc

Revocación expresa: Resulta evidente que el testador puede en cualquier momento antes de su muerte revocar un
legado manifestando esa voluntad en forma expresa en otro testamento. Como lo que debe prevalecer es la última
voluntad del causante, en la medida en que el cambio de decisión se haya plasmado dentro de un testamento y allí
conste la manifestación de dejar sin efecto un legado efectuado en un testamento anterior, se habrá concretado su
revocación expresa.
Revocación tácita: Pero también esa intención de revocar el legado puede surgir en forma implícita de determinados
actos del propio testador o bien imponérsele al legatario como consecuencia de su conducta.

Revocación por transmisión de la cosa legada:

En la normativa anterior se aludía a la enajenación de la cosa legada, mientras que el actual art. 2516 del CCCN hace
referencia a su transmisión con lo que se ha ampliado el espectro de actos que ponen de manifiesto la revocación:
"La transmi-sión de la cosa legada revoca el legado, aunque el acto no sea válido por defecto de forma o la cosa
vuelva al dominio de/ testador ...".
La decisión de transmitir a otra persona el bien que se ha legado en un testamento anterior pone de manifiesto que
ya no se mantiene la voluntad de beneficiar al legatario. Se ha atenuado el rigor que traía la norma anterior que
consideraba revocado el legado aunque la enajenación resultara nula.

Actos de los que resulta:


Quedan revocados los legados cuando el testador ha transmitido el bien legado a título oneroso y el legatario no
podrá redamar ni el precio percibido ni el saldo del precio que podía encontrarse impago al momento del
fallecimiento.

En el caso que se hubiera transmitido el bien legado, sometiendo el acto a una condición suspensiva o resolutoria,
igualmente se produce la revocación, ya que se pone de manifiesto la intención de darle otro destino. Esto es así,
aun en el caso de la condición resolutoria que, cumplida, provocaría la vuelta del bien a poder del testador, porque
ya ha quedado plasmada la voluntad de dejar sin efecto el legado.
La misma interpretación cabe hacer cuando el bien ha sido transmitido y como consecuencia de un patio de
retroventa vuelve a poder del testador.
El art. 2516 del CCCN menciona, además de la transmisión, a los siguientes actos: "... El mismo efecto produce la
promesa bilateral de compraventa, aunque el acto sea simulado. La subasta dispuesta judicialmente y la
expropiación implican revocación del legado, excepto que la cosa vuelva a ser propiedad del testador ...".

Mediante la suscripción de un boleto de compraventa no se produce la transmisión del bien, pero se obliga a otorgar
la escritura traslativa de dominio que perfecciona esa transferencia. Por lo tanto es acertada su inclusión expresa en
el texto del art. 2516 como supuesto de revocación del legado.

Los casos de subasta judicial y expropiación del bien legado tienen características peculiares porque en ambos
supuestos no ha mediado voluntariedad del testa-doren la transmisión sino que ella ha sido resultado de una
sentencia o de una ley que dispuso la expropiación.

Revocación de/legado por ingratitud o incumplimiento de cargos

El legado también puede ser revocado por causas imputables al legatario. En estos casos, la revocación debe ser
solicitada por los herederos universales y por los herederos de cuota que serán quienes resulten beneficiarios en
caso de que quede sin efecto el legado. También podría ser demandada por el albacea, ya que es parte en todo juicio
en el que se cuestionen las disposiciones testamentarias (art. 2529, CCCN).

Ello puede ocurrir por ingratitud del legatario o por la inejecución de los cargos impuestos al legado. El art. 2520 del
CCCN regula estas situaciones: "Los legados pueden ser revoca-dos, a instancia de/os interesados:

a) por ingratitud del legatario que, después de haber entrado en el goce de los bienes legados, injuria gravemente la
memoria del causante;
b) por incumplimiento de los cargos impuestos por el testador si son la causa final de/a disposición. En estécó.Ió
herederos quedan obligados al cumplimiento de los cargos".

Respecto de la injuria cabe señalar que como el legado es un acto de pura libe-ralidad no es éticamente posible
mantenerlo cuando el beneficiario ha afectado gravemente la memoria del testador. Se han limitado los
comportamientos ofensivos en los que pueda haber incurrido el legatario que estaban contemplados en la
legislación anterior porque ahora pueden encuadrar en las causales de indignidad previstas por el art. 2281, incs. a),
b) e O del CCCN que remite a la revocación de la donación por ingratitud que estatuye el art. 1571.
La fórmula que emplea la norma al referirse a la grave afectación de la memoria del testador es muy amplia y
dependerá de las circunstancias del caso su encuadre para justificar la revocación del legado. En cuanto a la
inejecución de los cargos habrá que interpretar la voluntad del causante para establecer si la modalidad impuesta ha
sido o no la causa final del legado.

6) Caducidad

Ya se trate de una institución de heredero universal, de heredero de cuota o de un legado, si se produce el


fallecimiento del beneficiario antes que el testador, la disposición caduca.
Esta solución se encuentra en el art. 2518 del CCCN: "La institución de heredero o legatario caduca cuando el
instituido muere antes que el testador o antes del cumplimiento de la condición de la que depende la adquisición
de/a herencia o el legado".
Ya desde el concepto de sucesión por causa de muerte se imponía como requisito de la transmisión sucesoria que el
beneficiario debía sobrevivir al causante (art. 2279, CCC/V). Por lo tanto, el artículo que se comenta no es más que
una aplicación de ese principio.
Lo mismo sucede cuando el fallecimiento del beneficiario ha tenido lugar antes de que se cumpliera la condición a la
que se había sujetado la adquisición del derecho hereditario.
No se ha reproducido la norma del art. 3802 del Código Civil derogado en la que se subordinaba la institución de
heredero o el legado a un plazo incierto. Sin embargo, si se produce el fallecimiento del beneficiario antes de que
éste venza, la disposición caduca.

Caducidad del legado por perecimiento transformación de la cosa


Es evidente que la cosa legada puede perecer y que en este supuesto el legado caduca.
Así lo resuelve el art. 2519 del CCCN: "El legado de cosa cierta y determinada caduca cuando ésta perece totalmente,
por cualquier causa, antes de la apertura de la sucesión o del cumplimiento de la condición suspensiva a que estaba
sometido, también cuando perece por caso fortuito, después de la apertura de la sucesión o del cumplimiento de la
condición.
Si la cosa legada perece parcialmente, el legado subsiste por la parte que se conserva. El legado caduca por la
transformación de la cosa por causa ajena a la voluntad del testador, anterior a la muerte de éste o al cumplimiento
de la condición suspensiva".
La caducidad opera sólo respecto de los legados de cosa cierta y determinada porque si se tratase de legados de
género o cantidades de cosas debería obtenerse una equivalente. Si el perecimiento se produce después de la
muerte del causante y el legado no estaba sujeto a condición, el legatario habrá ya adquirido el objeto legado y
sufrirá sus consecuencias, teniendo la posibilidad de accionar contra los responsables del perecimiento, en su caso.
Por lo tanto, si la cosa legada perece antes de la muerte o del cumplimiento de la condición, el legado caduca.

RENUNCIA.

El art. 2521 del CCCN pone de manifiesto este criterio diferente: "El legatario puede renunciar al legado en tanto no
lo haya aceptado. Cualquier interesado puede pedir al juez la fijación de un plazo para que el instituido se pronuncie,
bajo apercibimiento de tenerlo por renunciante.
Por lo tanto, caduca el derecho a renunciar al legado cuando el legatario lo ha aceptado.

A diferencia de lo establecido en el art. 2299 del CCCN respecto de la renuncia de la herencia que debe
instrumentarse en escritura pública o bien en acta judicial en el expediente siempre que el sistema informático
asegure la inalterabilidad del instrumento, no hay norma expresa que se refiera a la renuncia al legado.
El art. 2494 del CCCN remite a lo dispuesto en las obligaciones en general y el art. 949 establece que la renuncia no
está sujeta a formas especiales, aun cuando se refiera al derecho que constan en un instrumento público, por lo que
cabe interpretar en forma amplia la forma de renuncia.

La renuncia al legado puede efectuarse desde la apertura de la sucesión, pues una renuncia anterior sería inválida. A
partir de ese momento, la renuncia puede hacerse en todo tiempo, y una vez realizada podrá ser retractada
mediante una manifestación de voluntad expresa en sentido contrario.
BOLILLA XXXI: ALBACEAS.

1) ALBACEAS. CONCEPTO. NAT JU…. ETC

No existe una definición legal de albacea, pero la doctrina ha elaborado la siguiente:


El albacea es la persona designada por el causante en su testamento que tiene corno función hacer cumplir las
disposiciones testamentarias.

De este concepto se pueden extraer algunas de las características del albacea:


Una de ellas es que tiene que haber sido designado por el testador y, obviamente, ese nombramiento tiene que
haber sido hecho en un testamento.
Otra de esas características es que su función es la de ejecutar la última voluntad del causante o bien controlar su
cumplimiento. De allí que el albacea también sea conocido como el ejecutor testamentario, haciendo referencia a la
etimología de su nombre que proviene del árabe y que significa precisamente ejecutor.

Se ha asimilado la esencia jurídica del albaceazgo con la del mandato, ya que en el Código Civil anterior, en la nota al
art. 3844 se lo designaba como un mandatario post mortem.
A pesar de esa semejanza, también existen diferencias porque el albacea debe ser nombrado en el testamento,
mientras que el mandato puede ser escrito o verbal, expreso o tácito.
A su vez, el mandatario puede ser incapaz (art. 1323, CCCN), mientras que el albacea tiene que ser plenamente
capaz (art 2524, CCCN).
El albacea debe aceptar voluntariamente ese cargo y no puede delegar sus funciones, ya que se trata de una
designación hecha intuitu personae (art. 2525, CCCN). Por esa función el albacea tiene derecho a una retribución por
lo que el cargo será oneroso (art. 2530, CCC/V).

Atribuciones: el art. 2523 del CCCN ha regulado lo siguiente: "Las atribuciones del albacea designado en el
testamento son las conferidas por el testador y, en defecto de ello, las que según las circunstancias son necesarias
para lograr el cumplimiento de su voluntad. El testador no puede dispensar al albacea de los deberes de inventariar
los bienes y de rendir cuentas. Si el testador designa varios albaceas, el cargo es ejercido por cada uno de ellos en el
orden en que están nombrados, excepto que el testador disponga el desempeño de todos conjuntamente. En tal
caso, las decisiones deben ser tomadas por mayoría de albaceas y, faltando ésta, por el juez".

Forma de la designación. Capacidad para ser albacea

La forma de la designación y la capacidad que deben ostentar para ejercer el albaceazgo han quedado establecidas
en el art. 2524 del CCCN:
"El nombramiento del albacea debe ajustarse a las formas testamentarias, aunque no se realice en el testamento
cuya ejecución se encomienda. Pueden ser albaceas las personas humanas plenamente capaces al momento en que
deben desempeñar el cargo, las personas jurídicas, y los organismos de la administración pública centralizada o
descentralizada. Cuando se nombra a un funcionario público, la designación se estimada ligada a la función,
cualquiera que sea la persona que la sirve".

No se exigen fórmulas sacramentales para el nombramiento de un albacea; tan sólo se requiere que revista la forma
de un testamento.
Tampoco tiene importancia si el testamento en el que es designado contiene las disposiciones que deben ser
cumplidas por el albacea, ya que es posible encomendarle esa función en un testamento y las disposiciones haber
sido establecidas en otro.
La persona designada debe ser cierta y si surgieran dudas acerca de quién ha sido nombrado, tal disposición carecerá
de eficacia.

Se requiere que el albacea sea plenamente capaz al tiempo de ejercer el cargo, lo que significa que no es necesario
que tenga tal aptitud en el momento en que se hizo el testamento sino que deberá ostentarla luego de la muerte del
causante. No podrán ser albacea los que al momento del fallecimiento sean menores, incapaces o con capacidad
restringida y los pródigos, ya que tienen limitaciones para realizar actos jurídicos y la norma exige la plena capacidad.
2) Facultades y derechos del albacea…

Se han detallado los deberes y facultades del albacea en el art. 2526:

"El albacea debe poner en seguridad el caudal hereditario y practicar el inventario de los bienes con citación de los
interesados. Debe pagar los legados con conocimiento de los herederos y reservar los bienes de la herencia
suficientes para proveer a las disposiciones del testador dándoles oportunamente el destino adecuado.
Debe demandara los herederos y legatarios por el cumplimiento de los cargos que el testador/es haya impuesto.
La oposición de los herederos o de alguno de ellos al pago de/os legados, sus-pende su ejecución hasta la resolución
de la controversia entre los herederos y los legatarios afectados. El albacea está obligado a rendir cuentas de su
gestión a los herederos",
El inventario de los bienes hereditarios debe ser realizado en todos los casos por el albacea, ya que no puede ser
liberado de esa obligación por el testador. Para llevarlo a cabo debe citar a los herederos universales, herederos de
cuota, legatarios y eventualmente a otros interesados. '
Puede requerir al juez la adopción de todas las medidas que sean idóneas para asegurar la integridad de los bienes
hereditarios, ya que es responsable frente a los herederos y legatarios por los daños que les cause por el
incumplimiento de sus deberes.
Además, en tal caso podría ser destituido de su cargo por mal desempeño, conforme lo estipula el art. 2351 del
CCCN.

Las funciones del albacea varían según que existan herederos o no por lo que las facultades que le otorga el art.
2526 del CCCN dependen en gran medida de esa otra circunstancia.
Además deberá reservar bienes para que puedan ser cumplidas las disposiciones hechas por el testador.

El albacea es quien debe velar porque los cargos que impuso el testador se cumplan, ya sea que pesen sobre los
herederos o los legatarios y, en su caso, exigir su cumplimiento.
Otro de los pleitos en que debe intervenir el albacea en calidad de parte es el que tiene por objeto cuestionar la
validez del testamento, ya sea que se trate de aquel en el que ha sido designado como el que contenga las
disposiciones que deben ser cumplidas (art. 2529, CCCN).
El albacea podrá promover el juicio sucesorio cuando exista una necesidad impostergable de cumplir con alguna
disposición testamentaria.
Si el albacea tiene título de abogado y patrocina a los herederos o legatarios puede darse un conflicto de intereses
entre ambas funciones cuando debe reclamar el cumplimiento de sus funciones, la insolvencia del albacea en cuyo
caso resulta cumplimiento de las disposiciones testamentarias. Por ese motivo, no debe admitirse su actuación en
ambas funciones.

ARTICULO 2529.-Supuesto de inexistencia de herederos.

Cuando no hay herederos o cuando los legados insumen la totalidad del haber sucesorio y no hay derecho a acrecer
entre los legatarios, el albacea es el representante de la sucesión, debiendo hacer inventario judicial de los bienes
recibidos e intervenir en todos los juicios en que la sucesión es parte. Le compete la administración de los bienes
sucesorios conforme a lo establecido para el curador de la herencia vacante. Está facultado para proceder, con
intervención del juez, a la transmisión de los bienes que sea indispensable para cumplir la voluntad del causante.

Siempre que se cuestione la validez del testamento o el alcance de sus disposiciones, el albacea es parte en el juicio
aun cuando haya herederos instituidos.

3) Obligaciones del albacea:

ARTICULO 2526.-Deberes y facultades del albacea. El albacea debe poner en seguridad el caudal hereditario y
practicar el inventario de los bienes con citación de los interesados.
Debe pagar los legados con conocimiento de los herederos y reservar los bienes de la herencia suficientes para
proveer a las disposiciones del testador dándoles oportunamente el destino adecuado. Debe demandar a los
herederos y legatarios por el cumplimiento de los cargos que el testador les haya impuesto. La oposición de los
herederos o de alguno de ellos al pago de los legados, suspende su ejecución hasta la resolución de la controversia
entre los herederos y los legatarios afectados. El albacea está obligado a rendir cuentas de su gestión a los
herederos.

ARTICULO 2527.-Responsabilidad. El albacea responde por los daños que el incumplimiento de sus deberes cause
a herederos y legatarios.

5) Retribución del albacea La forma de retribuirla

La labor del albacea resulta de lo estipulado en el art. 2530 del CCCN: "El albacea debe percibir la remuneración
fijada en el testamento o, en su defecto, la que el juez le asigna, conforme a la importancia de los bienes legados ya
la naturaleza y eficacia de los trabajos realizados.
Si el albacea es un legatario, se entiende que el desempeño de la función constituye un cargo del legado, sin que
corresponda otra remuneración excepto que deba entenderse, según las circunstancias, que era otra la voluntad del
testador.

Deben reembolsarse al albacea los gastos en que incurra para llenar su cometido y pagársele por separado los
honorarios ola remuneración que le corresponden por trabajos de utilidad para la sucesión que haya efectuado en
ejercicio de una profesión".

Puede suceder que el propio testador haya fijado en el testamento los honorarios del albacea. En ese caso, debe
estarse a esa retribución sin que los herederos ni el propio albacea puedan impugnarla. Los herederos sólo se
encuentran facultados para cuestionar la remuneración si pudiera resultar afectada la legítima y el albacea si no le
resulta adecuada dicha retribución podrá no aceptar el cargo.
Si el testador nada ha especificado en ese tema, la retribución la fija el juez tomando corno pautas la importancia de
los bienes legados y los trabajos realizados por el albacea.

Obviamente los gastos en los que ha incurrido el albacea para el cumplimiento de su cometido constituyen una carga
de la sucesión y deben ser solventados con bienes hereditarios. Es por ello que si el albacea ha anticipado fondos
propios para cubrir esos gastos, le deben ser reembolsados.

Fin del albaceazgo

Las funciones del albacea deben encaminarse a cumplir con las disposiciones testamentarias y cuando ha llevado a
cabo enteramente ese cometido debe cesar el albaceazgo. Este es el modo habitual en que termina esa función, sin
perjuicio de que puede haber otros motivos que están enumerados en el art. 2531 del CCCN:
"El albaceazgo concluye por la ejecución completa del testamento, por el vencimiento del plazo fijado por el testador
y por la muerte, incapacidad sobreviniente, renuncia o destitución del albacea. Cuando por cualquier causa cesa el
albacea designado y subsiste la necesidad de llenare! cargo vacante, lo provee el juez con audiencia de los herederos
y legatarios”.

El testador puede haber fijado un plazo prudencial para el cumplimiento de las disposiciones testamentarias y si el
albacea no ha concluido con su labor antes de esa fecha, cesará el albaceazgo.
Podría, eventualmente, argumentar el albacea que ha existido una imposibilidad de hecho de agotar las
disposiciones testamentarias a pesar de haber obrado con la debida diligencia y reclamar la ampliación judicial de
dicho plazo. La incapacidad sobreviniente y la muerte del albacea hacen imposible que se continúe en el desempeño
del cargo y lo mismo sucede cuando es por decisión del propio albacea mediante la renuncia a dicha designación.

La destitución puede tener lugar a instancia de los herederos por incapacidad sobreviniente, negligencia, insolvencia
o mala conducta, según surge del art. 2528 del CCCN.

La reiteración de la incapacidad es injustificada, ya que si ella ha tenido lugar, con su simple constatación finaliza el
albaceazgo sin que sea necesario requerir la destitución.
La negligencia ocurre por la demora injustificada en el cumplimiento de sus funciones y deberá ser acreditada
judicialmente.
La insolvencia puede resultar de la presentación en concurso de acreedores o en la declaración de la quiebra del
albacea y para su demostración es suficiente acompañar copia certificada de la resolución respectiva.
La mala conducta se refiere al accionar doloso o culposo del albacea que demo-ra, obstaculiza o realiza de manera
ineficiente las disposiciones testamentarias.

A pesar de que el art. 2528 del CCCN refiere que la destitución puede ser demandada por los herederos, es preciso
aclarar que no se requiere la unanimidad sino que por lo menos uno de ellos alegue y pruebe la causal invocada. Por
otra parte, también pueden tener un interés legítimo en la destitución del albacea, los legatarios, los acreedores y el
Fisco.
Por último, cuando queden pendientes disposiciones testamentarias por cumplir, haya cesado el albacea y en el
testamento no se encuentre designado un sustituto, el juez deberá nombrar un nuevo albacea, previa audiencia con
los herederos y legatarios.

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