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INTRODUCCIÓN

El ser humano por excelencia es un ser relacionable, es por ello que


TEORÍA GENERAL DE LA RESPONSABILIDAD CIVIL

HISTORIA:

RESPONSABILIDAD CIVIL

La responsabilidad civil es aquella institución por la cual el ordenamiento jurídico hace de cargo
de una persona el deber de resarcimiento de daño ocasionado a otro, como consecuencia de la
violación de una situación jurídica. En consecuencia, garantiza la integridad de las situaciones
jurídicas, al determinar que los perjuicios causados de manera ilegítima sean asumidos y
resarcidos por alguien.

Etimológicamente la palabra responsabilidad se remonta al latín “respondere”, que viene a ser


el movimiento inverso de “spondere”, cuya raíz lleva en sí la idea de rito, solemnidad y con ello,
el de la formación de un determinado equilibrio, de un determinado orden con carácter de
solemnidad, así “respondere” presupone la ruptura de tal equilibrio u orden y se expresa la idea
de la supuesta reparadora de la ruptura.

Según el Diccionario Enciclopédico de Derecho Usual, la responsabilidad es la obligación de


reparar y satisfacer por uno mismo, o en ocasiones especiales por otro, la pérdida causada, el
mal inferido o el daño originado.

Para Jorge Adame, la palabra “responsabilidad” deriva del verbo “responder”. Como primera
noción explica que la responsabilidad ocurre cuando una persona, dueña de sus acciones, ha de
dar cuentas a otras personas por el incumplimiento de sus deberes y las consecuencias que
tienen de ello.

Para Reglero, en su obra Lecciones de responsabilidad civil, la “responsabilidad es imputación”,


porque el sujeto es responsable cuando incumple con un deber, una obligación o cuando causa
un daño, pero siempre que el incumplimiento o el daño le sea imputable.

Por su parte, Trigo Represas comenta que la responsabilidad jurídica consiste en “la obligación
de reparar el daño causado a otro por un acto contrario al ordenamiento jurídico”.

Teniendo en cuenta estas definiciones de responsabilidad civil podemos decir que es una
obligación de reparar (resarcir un daño al bien jurídico de otro) como resultado de una conducta
ilícita o negligente.

Por todo ello podemos apreciar que la responsabilidad civil es una institución referida al aspecto
de indemnizar los daños ocasionados en la vida de relación de los particulares, ya sean daños
producidos a consecuencia del incumplimiento de una obligación voluntaria, como la
contractual, por ejemplo, o bien se trate de daños que son el resultado de una conducta sin que
medie un vínculo de orden obligacional.

SISTEMAS DE RESPONSABILIDAD CIVIL

Puede ser contractual o extracontractual:

Nuestra legislación adopta el sistema binario de responsabilidad civil por cuanto contempla
tanto la responsabilidad contractual y la responsabilidad extracontractual.

La responsabilidad civil contractual es una sanción convenida por las partes para el caso de que
una de ellas incumpla sus obligaciones.
El concepto de responsabilidad extracontractual es más amplio, ya que incluye las
indemnizaciones derivadas de daños o lesiones que el perjudicado no tuviera el deber de
soportar. En el derecho comunitario se conoce como responsabilidad cuasi delictual, término
que ayuda a entender el concepto. Así, la indemnización de un accidente de tráfico es de este
tipo ya que, aunque no hay ningún contrato, el responsable debe indemnizar a la víctima por los
daños y perjuicios que le ha causado.

LOS HECHOS, ACTOS JURÍDICOS, CONTRATO Y LA OBLIGACIÓN COMO FUENTE DE LA


RESPONSABILIDAD CIVIL

A efectos de poder entender lo que es la responsabilidad civil, se requiere tener conocimiento


previo o básico, como son los hechos jurídicos, el acto jurídico, el contrato, etc., para ello vamos
a definir aquellos conceptos esenciales.

LOS HECHOS JURÍDICOS

Citando a Fernando Vidal Ramírez, dice: “La noción doctrinaria del hecho jurídico se remonta a
Savigny, para quien es el hecho que produce un adquisición, modificación, transferencia o
extinción de derechos. De ahí, la generalizada noción de que el hecho jurídico es todo hecho que
produce una consecuencia de derecho…”

En este entender, el hecho en general, es todo acontecimiento histórico generado con o sin
intervención del hombre, los mismos que pueden o como no pueden producir consecuencias
jurídicas; ahora el hecho es jurídico siempre en cuando que el derecho lo califique como tal.

EL ACTO JURÍDICO

Que, en nuestro ordenamiento jurídico el Acto Jurídico es concebido como la manifestación de


voluntad que está destinado a crear, regular, modificar y extinguir relaciones jurídicas esta es la
concepción clásica; el cual ha sido plasmado en el Art. 140 del Código Civil de 1984 vigente en la
actualidad.
RESPONSABILIDAD MORAL, PENAL y CIVIL:

Responsabilidad moral:

Ser responsable moralmente es responder ante Dios y ante la propia conciencia.

Dios y la conciencia no reprochan nada a quien obra de buena fe. Por eso, la responsabilidad
moral es una noción puramente subjetiva: para saber si una persona es moralmente
responsable, hay que examinar su estado espiritual; el mismo acto empeñará la responsabilidad
moral de uno y no la de otro

La responsabilidad moral, como la obligación de asumir las consecuencias de un acto o hecho


que lesiona conceptos morales, intimidad que generalmente no trascienden del fuero interno
de la persona. La responsabilidad ética cuando se desconocen o violentan pautas que regulan
una actividad, una profesión, se resientes o perturban esas relaciones profesionales en forma
tal que se deben asumirlas consecuencias que esa misma profesión, esa misma actividad, ha
establecido para quien irrespete o desconozca esos principios mínimos que la regulan

Responsabilidad penal:

Para que exista responsabilidad civil, y asimismo para que haya responsabilidad penal, se
necesita una acción o una abstención: el pensamiento debe exteriorizarse. Y, en ambos casos,
esa acción o abstención debe haber causado un perjuicio. Pero en unas ocasiones, el daño afecta
a la sociedad: existe entonces responsabilidad penal; en otras afecta a una persona
determinada: existe entonces responsabilidad civil.

La responsabilidad penal surge de un delito, es decir, de un hecho considerado reprobable y


sancionable por la ley penal, es informado por el principio de la tipicidad del ilícito.

FUNDAMENTOS DE LA RESPONSABILIDAD CIVIL

para el profesor del Chicago-Kent College of Law, Richard Wrigth, dos son las grandes teorías
monistas que inspiran al derecho de daños.

Una la teoría utilitaria, derivada principalmente de las enseñanzas de Jeremías Benthan y Stuart
Mill, para quienes la norma principal de maximizar el bienestar social agregado (aggregate social
welfare) se aplica al derecho de daños imponiéndole como fin la eficiente compensación y
disuasión (compensation and deterrence). Para los utilitaristas el bienestar individual puede y
debe ser sacrificado cuando haciéndolo se produzca una suma total de más alto bienestar
agregado.

El claro ejemplo de estas teorías lo encontramos en las limitaciones de responsabilidad para


ciertas actividades sumamente riesgosas, p. ej. Navegación aeronáutica, en las que se realiza un
cálculo según el cual quienes sufran daños por estas actividades deben percibir una
indemnización no integral. De no ser así esas actividades directamente pueden no desarrollarse
y esto trae aún mayores inconvenientes que la indemnización no integral. En estos casos la
merma de indemnización que sufren estas personas se justifica solamente por la suma de
bienestar general que se produce por los beneficios del desarrollo de estas actividades. Funciona
en estos casos la responsabilidad civil como un instrumento de redistribución de riqueza, como
un seguro.

La otra gran teoría para Wrigth es la teoría aristotélico kantiana del derecho o la justicia, que se
basa en la igual libertad de todos los hombres. Para esta teoría el derecho de daños tiene como
fin no una eficiente compensación, sino una “justa” compensación y disuasión (just
compensation and deterrence).

LA RESPONSABILIDAD CIVIL EN EL CODIGO CIVIL PERUANO:

Se encuentra la figura de la responsabilidad civil en el Libro VII Fuentes de las Obligaciones, en


la Sección Sexta con el título de “Responsabilidad extracontractual”, cogiendo los artículos 1969
- 1988.

La codificación civil peruana de la actualidad ha incorporado de manera clara y precisa el sistema


subjetivo dela responsabilidad extracontractual y esta adopción tiene, como factor de
atribución, la idea de la culpa, intencional o simplemente culpa, imputable en base al
discernimiento, y que requiere de un nexo de causalidad entre el daño y el obligado a repararlo.
La responsabilidad extracontractual está estructurada pero que hay de la responsabilidad
contractual, la podemos encontrar en el artículo 1321(Indemnización por dolo: Culpa leve e
inexcusable), en el Libro VI “Las Obligaciones”, y el artículo 1322 Indemnización por Daño Moral.

ELEMENTOS DE LA RESPONSABILIDAD CIVIL

Para que se pueda configurar la responsabilidad civil es necesario que exista elementos
estructurales, como lo son el daño, la antijuricidad, la relación causal y la imputabilidad.

EL DAÑO
A) DEFINICION
En una sociedad donde se un avance tecnológico los riesgos se incrementan y por tanto
los daños también, en diversas modalidades. La noción ontológica de daño no se ha
identificado con la noción jurídica, sobre la relación daño-elemento y estructura de la
responsabilidad.
Es necesario que haya un daño: Para que hay una responsabilidad civil contractual o
extracontractual, es preciso que el demandante haya sufrido un daño. El simple hecho
del comportamiento culposo del agente no genera por sí solo la responsabilidad civil. En
ese orden, el daño sufrido paso a constituirse en el fundamento y lógico prius de la
responsabilidad civil y consecuentemente, la reacción adecuada a él, se erigió, en la
temática actual de la responsabilidad civil, en uno de los problemas más graves a
resolver. La tendencia actual, en esa dirección, se demuestra tan acentuada que,
preocupada sustancialmente por el quid del rol preponderante asignada al daño, tiende
a desvincular el fenómeno resarcitorio del problema de la ilicitud por daño civilmente
indemnizable informar la estructura del ilícito y que es causado entendemos el
menoscabo a las facultades jurídicas que tiene una persona para disfrutar un bien
patrimonial o extramatrimonial. Ese daño es indispensable cuando en forma ilícita es
causado por alguien diferente de la víctima. Los daños pueden ser patrimoniales o
extramatrimoniales.
Los primeros son el atentado al patrimonio económico de la víctima, mientras que los
segundos están referidos a la lesión de bienes protegidos por el Ordenamiento Jurídico,
pero que no tienen valor pecuniario.
Desde la perspectiva ontológica él es daño es la lesión a un interés protegido y la noción
jurídica se configura en términos de daño injusto dentro del contexto de la terminología
o el lenguaje de la doctrina italiana, así entendido, el daño es, necesariamente, un
elemento del ilícito, porque el elemento, en cuanto tal, comporta la lesión de un interés
protegido, en suma, el daño es un menoscabo efectivamente sufrido por la víctima. Y en
nuestro Código Civil en el Art. 1969 hace referencia al daño empero las demás normas
de nuestro código hacen referencia al termino perjuicio, es decir a las consecuencias,
que este lenguaje debe de unificarse, para un mejor tratamiento de la responsabilidad
civil, además desde una perspectiva ontológica, el daño implica una lesión a situación
jurídica y ello también alude a las consecuencias de un acontecimiento que produce
efectos negativos o desfavorables.
El Código Civil el termino daño hace referencia a veces a perjuicio, es todo menoscabo
material o moral causado contraviniendo una norma jurídica, que sufre una persona y
del cual haya de responder otra. No solo comprende la disminución de los bienes
patrimoniales existentes (damnum emergens), sino también las ganancias que se dejan
de obtener (lucrum cessans)
José Lovón Sánchez
El daño para configurarse requiere-efectivamente - lesionar un bien jurídicamente
tutelado y que revista significación para el Derecho. Cualquier alteración del orden no
ocasionar un daño.
Para LIZARDO TABOADA, el daño es menoscabo a los intereses delos individuos en su
relación a su vida social, que el derecho a considerado merecedores de tutela legal. y
más adelante señala a una forma de clasificación desde una perspectiva alemana; de
esta forma queda claramente demostrado que en el sistema jurídico nacional el daño
patrimonial comprende las dos categorías, lucro cesante y daño emergente, bien se
trate del ámbito extracontractual y contractual, teniendo en ambos casos el mismo
significado.
B) CARACTERÍSTICAS:
Para jurista nacional José Lovón Sánchez existen dos características:
Cierto. -
El daño cualquiera sea su naturaleza, debe ser cierto si quiere aspirar a una reparación;
presente o a futuro, pero cierto. No puede ser eventual o hipotético. El simple peligro
no puede dar lugar a indemnización, tiene que materializarse el daño”. Su certeza tiene
que ser fáctica y lógica.
El daño cierto es aquel, estados de cosas, que se lesiona materialmente, o existe un
incremento de riesgo jurídicamente que potencialmente pueda lesionar el interés, y que
aspira ser reparado y no puede ser eventual, y no puede.
Cuando hablamos de daño directo, este término tiende a oscurecer la definición de
daños en cuando que hace referencia al daño extra patrimonial frente a daños
patrimoniales, y otras veces hace referencia a las consecuencias posteriores del daño, o
como sinónimos de lucro cesante, por ello no es recomendable utilizar este término,
porque el daño tiene muchas connotaciones, y no solo comprende el efecto inmediato
sino también sus efectos, y además debe estar plenamente probado, y por estas razones
no se debe de tampoco de daño futuro, porque el daño es todo un estados de cosas.
Probable. -
Si bien es cierto que para la existencia de un daño este debe ser probado, pero no todo
lo cierto es probable, por ello se tiene que tener en cuenta según, Trazegnies “los
diferentes grados de convicción que permiten tener por probado un daño”. De esta
forma nuestra legislación la probanza del daño por el actor es una regla general, que se
aplica, aunque funcione la presunción de culpa.
C) CLSIFICACION DEL DAÑO
La clasificación de los daños está en función a cada ordenamiento jurídico y el desarrollo
que realizan la jurisprudencia de cada país, como es el caso más resaltante de la
tendencia alemana, italiana y francesa, dentro de ello una forma clásica de clasificación
y que ha influido mucho en el pensamiento jurídico es la tendencia alemana que
clasifica, daño patrimonial y daño no patrimonial proviene del lenguaje alemán
(Vermogensschaden y nicht vermogensschaden, precisando que en el derecho alemán
los daños patrimoniales tienen numerus clausus, es decir un sistema donde solo se
resarce aquellos que la ley señala cuales deben de resarcirse.
DAÑO MATERIAL
(como préjudice matériel), y daño inmaterial o moral y en el derecho italiano, se habla
como un fusión , es decir el daño patrimonial, daño moral y el daño existencial, empero
existe una eclosión de daños, como en la experiencia italiana, de habla de daño
biológico, daño psicofísico, daño estético y últimamente el daño existencial y el daño
hedonístico; y en el derecho argentino producto de pensar con europeamente, y los
textos argentinos señalan al daño a la diva en relación, al daño psicológico, al daño
psíquico, etc.
Otro problema en la clasificación de los daños, es como limitar los daños existentes al
momento del resarcimiento cuando teniendo en cuenta en muchos casos de los daños,
se tutela de diferente perspectiva un mismo interés, y además en este conflicto se
encuentra el daño a la persona y el daño moral, quien subsume a quien, es como el caso
del daño a la persona en italiana se subsume en el daño patrimonial. La doctrina es
unánime al clasificar por su naturaleza en dos rubros.
DAÑO PATRIMONIAL
Consiste en la lesión de derechos de naturaleza económica, que debe ser reparada y
precisando que es clasificación es de origen alemán y que encuentra legislada en el Art.
1969 del C.c. Este a su vez se clasifica en:
A) Daño Emergente. -
Damnun emergens, “Es la pérdida que sobreviene en el patrimonio del sujeto afectado
por el incumplimiento de un contrato o por haber sido perjudicado por un acto ilícito”,
o como sostienen un sector autorizado de la doctrina italiana, “la disminución de la
esfera patrimonial” del daño, en este daño importa un empobrecimiento.
B) Lucro Cesante. -
Se manifiesta por el no incremento en el patrimonio del dañado (seas por el
incumplimiento de un contrato por un acto ilícito. Es “la ganancia patrimonial neta
dejada de percibir” En una apreciación uniforme a la cita anterior, Puig Brutau compara
el daño emergente con el lucro cesante “el daño emergente es una pérdida real y
efectiva; el lucro cesante, en cambio, es de momento una pérdida invisible que “se
apoya en la presunción de cómo se habría sucedido los acontecimientos en caso de no
haberte nido lugar el acontecimiento dañoso” Ambos elementos, daño emergente y
lucro cesante, ha de ser tenidos en cuenta si se quiere que el derecho de daños cumpla
su finalidad de reponer al perjudicado en la situación en la que se hallaría si el daño no
se hubiese producido”.
C) Otros tipos de Daños Patrimoniales. -
En la doctrina se ha señalado la pérdida de chance, y la indemnización punitiva. En caso
de la perdida, según la doctrina hace referencia que es un parecido al lucro cesante,
empero es cuando se repara el daño que se produce, cuando el acto dañino ha frustrado
la posibilidad de obtener una cierta ventaja patrimonial. Y doctrina ha señalado que no
solo es una posibilidad cualquiera sino, que debe ser una posibilidad medida
matemáticamente.
Y cuanto a la indemnización punitiva, que este tipo de indemnización de viene del
derecho anglosajón, y con la perspectiva comparatista del derecho existieron estudios
con la finalidad de querer asimilarlo al derecho common law, y teniendo la finalidad de
la responsabilidad civil señaladas
Daño Extramatrimonial. -
En el caso de Diez Picazo y Antonio Gullón el lesionar los bienes y derechos de la
persona “se indemnizarán prescindiendo que un ataque a aquellos bienes y derechos
tenga también repercusión en el patrimonio”
Es el que lesiona a la persona en sí misma, estimada como un valor espiritual,
psicológico, inmaterial” se encuentran inmersos: “El ansia, la angustia, los sufrimientos
físicos y síquicos, etc.”; padecimientos por la víctima, que tienen el carácter de “efímeros
no duraderos”. Dentro de la actual sistemática de nuestro Código Civil, la categoría de
daño extra patrimonial o subjetivo (comprende como daño no patrimonial a los sujetos
de derecho) comprende el daño a la persona, entendido como lesión a los derechos
existenciales o no patrimoniales de la persona y al daño moral, definido como “el ansia,
la angustia, los sufrimientos físicos o psíquicos, etc.”, y precisa Juan Espinoza, como debe
entenderse el daño a la persona, en mi opinión, el daño a la persona deber ser entendido
como aquel que lesiona los derechos o legítimos intereses de naturaleza no patrimonial,
tanto de las personas naturales como de las personas jurídicas.
Daño a la persona y daño moral. -
La doctrina tiene diferentes posiciones a las diferencias entre ambos, y la discusión tiene
por objeto cuál de ellos especie o género, empero son idénticos en cuanto al contenido
extra patrimonial y la discusión no se centra en el objeto de protección sino en la
denominación, por otro lado, entienden al daño extra patrimonial al resarcimiento de
los daños indirectos patrimoniales. El daños a la persona lo entienden como la lesión a
interés o derechos personales, por ello un sector de la doctrina afirman que se debe
denominar daño subjetivo, históricamente no ha sido legislado en los Códigos anteriores
recién se conoce a partir de nuestro Código vigente, Taboada señala desde nuestro
punto de vista, la formula integral que hemos planteado nos parece lo más razonable y
lógica para entender la noción del daño a la persona, por cuanto la persona no es
únicamente un cuerpo sino también una mente y en muchos casos supone un proyecto
de vida evidenciado por hechos y conductas concretas.
Este tipo de daño, se ha incorporado por la Comisión revisora del Código Civil de 1984,
y de allí se ha discutido cual es el género y cuál es la especie entre el daño moral y el
daño a la persona, y que aún se discute, para nosotros tomamos partida de que el daño
a la persona es el género porque el daño moral es cuando lesiona la integridad psíquica
es decir parte del derecho a la integridad que tutela los derechos personales y cuando
se lesiona es daño a la persona.
Daño Psíquico o Psicológico. -
Es te daño no es patrimonial ni extra patrimonial, empero si puede tener reflejos o
efectos, cuando la víctima sufra perdidas en su ingreso debido a su trastorno psíquico,
y la diferencia con el daño moral, pues este daño no es las consecuencias del daño físico
propio o ajeno, sino que este comprometida la salud psíquica con carácter temporal o
definitivo, y Leysser León define, el daño psíquico es, entonces, el que compromete la
integridad de la persona.
Es la alteración psicosomática del individuo, de sus condiciones mentales. La voz griega
“psique” tiene el significado de “alma humana”, pero en su acepción técnica vale por el
conjunto de fenómenos y funciones que permite al individuo conformar una idea de si
mismo y del mundo, y desenvolverse según dicha idea.
Daño Contractual. -
“Es la no ejecución de una obligación preexistente entre las partes y el comportamiento
dañoso de un deudor que viola el derecho del acreedor”
Daño Extracontractual. –
“Es el daño que se causa con un comportamiento ilícito o antijurídico que contraviene a
las normas imperativas, la diferencia con el daño contractual es que no hubo una
relación preexistente, sino que esta se configura a partir del daño causado”
Hay otras clasificaciones en la doctrina extranjera como en el caso italiana, que clasifica
el daño patrimonial, moral y daños existencial, a este último se da cuando se quiere la
expectativa relación o peyorativa, y que es desarrollada por la jurisprudencia italiana en
función a los regímenes donde no se puede tutelar lo contractual o extra contractual, y
darle mayor tutela a la persona dentro de la tutela de la constitución italiana.
2.-LA ANTIJURICIDAD.
Parte de la doctrina entienden a la antijuricidad como uno de los elementos
fundamentales de la responsabilidad civil en general, pudiendo se esta contractual o
extra contractual, ya que se entiende que esta nace la obligación de indemnizar cuando
se causa un daño a otros u otros mediante un comportamiento contrario al
ordenamiento jurídico. Por contravenir una norma imperativa, los principios que
conforman el orden público o las reglas de convivencia social que constituyen las buenas
costumbres, en tal sentido, por más que exista daño, si es que la conducta no es
contraria al ordenamiento jurídico o si es que se actuó dentro de los límites permisibles
no hay lugar para la responsabilidad civil. Por tanto, queda claro que la antijuricidad es
parte fundamental de la estructura de los hechos jurídicos ilícitos que originan una
responsabilidad civil.
LA ANTIJURICIDAD TIPICA Y ATÍPICA.
La antijuricidad típica, se confunde muchas veces con la comisión de un delito, en la cual
todas aquellas conductas prohibitivas están prescritas por una norma calificadas como
delito, entonces hablamos de responsabilidad penal; empero existen hechos prohibidos
que no están comprendidas como delito, reguladas por normas de derecho privado que
directamente prohíben determinadas conductas, como por ejemplo en el caso del Art.
1095 del Código Civil. Pues de esta manera queda claro los supuestos de hechos jurídicos
ilícitos tipificados legalmente, que han determinado un supuesto de responsabilidad
civil.
Pero también existen hechos jurídicos antijurídicos no prescritos por una norma, si no
que estas nacen del incumplimiento de un deber genérico de no causar daño a los
demás, estos son los atípicos por que no están prescritos por una norma. Otra figura que
merece especial atención, es establecer las diferencias que existen entre la
responsabilidad civil y la responsabilidad penal; pues la responsabilidad penal tiene
como objetivo el resarcimiento de un daño causado a la víctima o a sus familiares;
mientras que la naturaleza u objetivo de la responsabilidad penal es la represión del
delito, quedando claro de esta manera la diferencia que existe entre ambas figuras, ya
que muchas veces se confunden estas dos figuras.
3.-LA RELACIÓN DE CAUSALIDAD O NEXO CAUSAL
La relación de causalidad es un elemento estructural de la responsabilidad civil, pues
este elemento es considerado como la relación que existe entre causa y efecto, entre la
conducta antijurídica y el daño causado a la víctima, pues delo contrario no existiría
responsabilidad civil extra contractual y no nacerá la obligación de indemnizar. En
consecuencia, podemos decir que el daño causado debe ser a consecuencia de la
conducta antijurídica del autor para que se configure un supuesto de responsabilidad
civil extra contractual, sucediendo los mismo en el campo de la responsabilidad civil
contractual, ya que el daño causado al acreedor debe ser a consecuencia inmediata y
directa del incumplimiento absoluto o relativo de la prestación debida por parte del
autor.
La diferencia reside en que en el campo de la responsabilidad civil extracontractual la
relación de causalidad debe entenderse según el criterio de la causa adecuada, y en el
ámbito contractual la misma deberá entenderse bajo la óptica de la causa inmediata y
directa.
3.1. Concepto:
Como su nombre lo indica nexo de causalidad es la relación, el vínculo, que debe existir
entre el hecho y el correspondiente daño. Si no hay nexo causal no surge la
responsabilidad civil.
Para los cultores de la teoría subjetivista, de la culpa como elemento determinante de
la responsabilidad, el nexo de causalidad debe darse entre la culpa y el daño. Para los
partidarios de las teorías objetivas o de las de riesgo, el nexo de causalidad debe darse
entre el hecho y el daño. La necesaria relación de causalidad entre el hecho y el daño,
es más complicado de lo que parece. Y todavía más difícil para los defensores de la teoría
de la culpa pues ese fenómeno subjetivo debe relacionarse directa y específicamente
con el daño. Muchas veces se confunden los conceptos de culpa y causa o se mezclan
en forma tal que se hace difícil su separación.
Han sido los alemanes los abanderados de los estudios del nexo de causalidad, y más en
el campo de la responsabilidad penal que en el campo de la responsabilidad civil. Por
eso en muchos casos, las doctrinas y jurisprudencias civiles tienen que acudir o prestar
al campo penal muchas de sus teorías o conceptos. El daño puede tener como causa un
solo hecho y en ese campo no se presentan muchas dificultades. Ellas empiezan cuando
el daño puede ser originado por diferentes hechos. Es lo que se ha conocido como
pluralidad de causas.
3.2. Teorías Causales:
3.2.1 Teoría de la causa próxima:
La teoría de la causa próxima presenta problemas porque tiende a echar una cortina de
humo que hace invisible la responsabilidad de quienes se encuentran detrás del agente
inmediato del daño.
Por ejemplo, si un automovilista atropella a un peatón porque la reparación que le
hicieron de sus frenos era defectuosa, ese peatón debería tener acción tanto contra el
automovilista como contra el taller que hizo la reparación negligentemente. Sin
embargo, dentro de la teoría de la causa próxima podría sostenerse que el peatón sólo
tiene acción contra el automovilista (quien responde objetivamente por riesgo),
mientras que el taller quedaría inaccesible por productos defectuosos y haría
excesivamente estrecho y muchas veces injusto el campo de la causalidad.
3.2.2 Teoría de la causa preponderante o Teoría de la equivalencia de las condiciones
o de la conditio sinequa non:
Esta teoría mal llamada también “teoría eficiente” (lo que desvirtúa el sentido clásico,
de origen aristotélico, de esa expresión) se opone a la indiferencia de causas planteadas
por el análisis de la conditionum sine quan non y trata de encontrar una causa de
carácter preponderante.
Los autores han intentado operacional izar el concepto de preponderancia de diversas
maneras. Unos han hablado de la “causa más activa”.
Por ejemplo, dicen, si Juan le proporciona a Pedro los fósforos y éste último quien
incendia la casa, no puede negarse que tanto el acto de Juan como el de Pedro son
conditiones sine que non; pero la causa del incendio no es el acto de Juan sino el de
Pedro, porque el acto de éste último es la condición más efectiva. Otros como Binding,
hablan de “la causa próxima a la que antes hemos referido y pueden ser objetadas con
argumentos similares a los que cuestionan el análisis de la proximidad”.
Que propugna porque cualquier causa que intervenga en el resultado origina
responsabilidad. Es decir que si el demandado participó con una de las causas o
concausas es suficiente para ser responsabilizado. Se llama equivalencia de condiciones
porque según sus teorizantes todas las condiciones, es decir, los fenómenos,
circunstancias o hechos, que intervienen en el resultado, adquieren la categoría de
causas, hace responsable a todo aquél que ha puesto una condición en el resultado.
Extiende en forma notoria el concepto de causa y por lo tanto el campo de
responsabilidad.
3.2.3. Teoría de la causa adecuada:
Los alemanes han logrado imponer últimamente, que sostiene que no todas las causas
o condiciones que concurren a un resultado originan responsabilidad. Hay que separar,
escoger, aquellas que realmente sean determinantes. Quienes hayan originado esas
causas determinantes serán responsabilizados civilmente. A esta tesis se le han
acomodado algunas variantes como la de la “causa próxima” que sostiene que la causa
determinante es la más próxima en el tiempo; la de “causa eficiente” según la cual debe
escogerse una sola que haya sido suficiente para darse el resultado; la “de la causa
determinante”, una variable de la anterior pero que pretende encontrar la solución en
la causa desencadenante del resultado, así no sea la más próxima. Esta teoría
desarrollada en 1888 no por un jurista sino por un filósofo, j. Von Kries, parte de una
observación empírica: se trata de saber qué causas normalmente producen un tal
resultado.
De esta manera, frente a un daño, se trata de saber cuáles las causas, dentro de la
universalidad de causas que encarna cada situación, que conduce usualmente el
resultado dañino. Por ejemplo, que una persona le entregue inocentemente un martillo
a otra, no conduce a un crimen; en cambio, que una persona golpee con un martillo a la
cabeza de otra lleva a un homicidio o, cuando menos, a lesiones.
Por consiguiente, si Catalina mata Mario con un martillo que le había entregado
Fernando, el acto de Catalina es Causa de la muerte de Mario; pero la entrega inocente
del martillo por Fernando no es “causa”; porque tal acto no conduce usualmente al daño
en cuestión: podría haber llevado sencillamente a que Catalina se construya una nueva
mesa de trabajo.
4. LA IMPUTABILIDAD
Es el último de los elementos de la responsabilidad civil y se resume en la pregunta ¿a
título de que es responsable? Viene a ser el fundamento del deber de indemnizar;
existen los sistemas de responsabilidad: el sistema subjetivo y el sistema objetivo, cada
uno de ellos fundamentados en distintos factores de atribución, denominados factores
de atribución subjetivos y objetivos.
a) Sistema Subjetivo
El dolo: se entiende enroló como la voluntad o el ánimo deliberado de la persona de
causar el daño.
La culpa: es la creación de un riesgo injustificado, la culpa es el fundamento del sistema
subjetivo de responsabilidad civil (fluye claramente el Artículo 1969º).
b) Sistema Objetivo
Riesgo creado: Para la doctrina en riesgo creado viene a ser el riesgo adicional al
ordinario, tales como: los automotores, los artefactos eléctricos, las cocinas de gas,
ascensores, los diferentes tipos de armas de fuego, los medicamentos, las actividades
industriales. En todo este tipo de bienes y actividades no será necesario examinar la
culpabilidad del autor, pues deberá bastar con acreditar el daño producido.
SUPUESTOS ESPECIALES DE RESPONSABILIDAD CIVIL
a) Responsabilidad civil indirecta
La responsabilidad civil indirecta es aquella que se genera por mandato de la Ley, aun
cuando el sujeto no haya causado daño alguno, siempre y cuando se cumplan
determinados requisitos legales exigidos para el nacimiento de dicho supuesto de
responsabilidad civil.
b) Responsabilidad por daños ocasionados por denuncia calumniosa.
La denuncia calumniosa es entendida como la denuncia ante una autoridad de un hecho
punible que no ha sido cometido por el denunciado, con el objeto de perjudicarlo. El
derecho que se tutela es el del honor, entendido como un juicio de valor que se hace de
una persona.
c) Alcances de la responsabilidad del asegurador.
El artículo 1987º establece un supuesto especial no exactamente de responsabilidad
sino de asunción de los costos de la reparación.
Este artículo supone que, bajo circunstancias especiales, como la existencia de un
contrato de seguro de responsabilidad civil a favor del agresor en que el daño esté
previsto como siniestro, el asegurador está obligado a reparar directamente a la víctima.
En otras palabras, el artículo 1987º del código civil resulta inútil para la víctima si su
agresor no se encuentra asegurado, o si el seguro no es por responsabilidad civil.
LA IMPUTABILIDAD EN LA RESPONSABILIDAD CIVIL
Se entiende por imputar, atribuir a una persona un delito o una acción u omisión
contrarias a la Ley, con el objeto de hacer a aquella responsable de las consecuencias (si
se dan generalmente otras condiciones). Nos referimos a la imputabilidad como
elemento de la responsabilidad, es decir omnicomprensiva tanto de la culpa cuanto del
dolo; o según la definición de Florián "la determinación de la condición mínima necesaria
para que un hecho pueda ser referido y atribuido a alguien como autor del mismo a
objeto de que deba soportar sus consecuencias", esto es, una atribución a los fines de
la punibilidad. En un sentido coincidente se ha definido la imputabilidad como el
conjunto de las condiciones naturales (psicofísicas) exigidas a una persona común para
que pueda ser pasible de las consecuencias que producen sus actos, o, en otras palabras,
se trata de la capacidad delictual o aptitudes de la persona para comprender sus
acciones y dirigir sus actos.
La inimputabilidad de aquellos privados de capacidad, por sus condiciones naturales
(sordo mudos, ciego sordos, ciego mudos, o menores de edad, falta de discernimiento,
etc.), puede generar un conflicto dentro del derecho penal pero sin embargo ello no
ocurre en la responsabilidad civil, especialmente en aquella que ha regulado el artículo
1975 del Código Civil; la capacidad de discernimiento o de entender y de querer, es la
capacidad natural del sujeto que por su desarrollo psico-físico le permite distinguir entre
el bien y el mal, entre lo licito y lo ilícito.
Tradicionalmente, se ha entendido que, en sentido estricto, la responsabilidad
concierne al deber de reparar el daño jurídicamente atribuible causado por el
incumplimiento, tanto de una obligación preexistente como del deber genérico de no
dañar a otro, significando que debe existir una sanción reparadora como consecuencia
de un factor determinado al incumplimiento de la expresión de voluntad, o a la conducta
inexcusable dolosa o culposa.
https://www.conceptosjuridicos.com/responsabilidad-civil/

https://andrescusi.blogspot.com/2015/09/la-responsabilidad-civil-andres-cusi.html

https://www.academia.edu/24543093/TEORIA_DE_LA_RESPONSABILIDAD_CIVIL

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