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Capítulo 10

“La Perfección de Dios” (Aiden Wilson Tozer)

Tozer comienza citando un versículo (Salmo 50:2) y señalando las tres


palabras prominentes del pasaje: perfección, hermosura y Dios. Más
adelante Tozer explicara este versículo.
Desde aquí rápidamente hace una crítica del cristianismo evangélico de
los últimos cincuenta años. ¿Qué tiene que ver esto con la perfección de
Dios?
Más adelante Tozer explicara cómo se relaciona con el tema principal.

Cabe destacar que Tozer habla a mediados de la década de 1950, de modo


que, para él, “los últimos cincuenta años” son la primera mitad del siglo
veinte.
Como cristianos del siglo veintiuno, debemos decidir si su crítica se aplica
también a nuestro pasado reciente

Nuestras ganancias y pérdidas


Ganancia
identifica varias positivas ganancias que hemos disfrutado los evangélicos,
incluyendo el incremento de la asistencia a la iglesia, más gente que se
identifica como cristiana, el incremento del número de escuelas,
universidades y seminarios, el drástico crecimiento de la literatura
cristiana, el aumento de la popularidad del evangelio, mejor comunicación
y grandes pasos en el evangelismo mundial.
Perdida
La causa de nuestras pérdidas es más profunda: es una falta de
reconocimiento de quién es Dios. “Creo que nunca podremos recobrar
nuestra gloria”, “hasta que volvamos a ser llevados a ver la terrible
perfección de Dios”.

Dios no conoce medida

Dios no está en la cumbre máxima de una siempre ascendente perfección


del ser, desde el gusano hacia arriba hasta que alcanzamos finalmente a
Dios.
Por el contrario, Dios es completamente diferente y separado, así que
Dios no conoce medida. Dios es simplemente Dios, una infinita
perfección de plenitud, y no podemos decir que Dios es un poco más o
un poco menos. “Más” y “menos” son palabras para las criaturas.
Podemos decir que un hombre tiene un poco más de fuerza hoy que ayer.
Podemos decir que un niño es un poquito más alto este año; él está
creciendo. Pero no se puede aplicar más o menos a Dios, pues Dios es el
Perfecto; sencillamente, es Dios.

¿Qué es la perfección?
Origen etimológico: (estudio de la palabra), origen latín deriva de la
palabra PERFECTIO.
-que puede traducirse como: la acción de dejar algo acabado
Se encuentra compuesto por 3 partes diferenciadas:
-el prefijo (per): equivalente a (por completo)
-el verbo (facere): sinónimo de hacer
-el sufijo (-cion): se usa para indicar (acción y efecto).
“el grado más elevado posible de excelencia”, ¿cómo puede aplicarse eso
a Dios si nada es imposible para Él? Perfecto significa tener todo lo que se
supone que debe tener
Ejemplos:
Un bebé es “perfecto” si tiene dos brazos, dos piernas, diez dedos en las
manos, diez dedos de los pies, etc.) y nada de lo que se supone que no debe
tener (¡ningún dedo extra en las manos o en los pies!). Pero, ¿cómo
podemos aplicarle eso a Dios, que es infinito?
“¿A qué, pues, me haréis semejante o me compararéis?” (Isaías
40:25). Dios es incomparable. Tozer sugiere que este puede ser el origen
del mandamiento contra forjar imágenes en Éxodo 20:4.

Jesús usó la misma palabra para perfecto tanto para Dios como para
nosotros, cuando dijo que debemos ser perfectos como nuestro Padre del
cielo (Mateo 5:48). ¿Por qué? Tozer dice: son las limitaciones del lenguaje
y el pensamiento humano que nos impiden concebir la plenitud y
completud absolutas de Dios.
Aclaración
Cuando decimos que un ser humano es perfecto, queremos decir que
hace lo mejor que un ser humano puede hacer. Pero cuando decimos que
Dios es perfecto, lo es sin restricción

Explicación primera parte:


Aquí Tozer retorna al pasaje de la Escritura con el que comenzó: “De Sion,
perfección de hermosura, Dios ha resplandecido” (Salmo 50:2). ¿Qué
hacía a Sion tan perfectamente hermosa? Era “el Dios resplandeciente que
moraba entre las alas de los querubines”. Porque la gloria Shejiná de Dios
estaba allí, Sion era hermosa. Todas las cosas son hermosas cuando se
acercan a Dios, y feas cuando se alejan.
Nota:
Shejiná: Un término hebreo aplicado a la manifestación visible de la
presencia de Dios.

Lo que honra a Dios es hermoso


Los cristianos modernos hemos permitido que el cielo nos sea “robado”
por las preocupaciones de este mundo. Finalmente Tozer nos conduce a
la suprema belleza: Cristo mismo
Porque Él mismo es Dios, la fuente de toda hermosura. Esta es una belleza
interna, no externa. El cielo es hermoso porque Jesús está allí. Y en el
extremo opuesto de la escala, el infierno debe de ser la máxima fealdad e
imperfección, porque está tan lejos de Dios.

Aquí hace una relación de lo hermoso

Conclusión
Nada que sea malo puede ser hermoso, Es posible que algo impuro sea
lindo o atractivo, hasta fascinante. Pero no es posible que sea hermoso.
Solamente lo que es santo puede ser básicamente hermoso.

Cristo vino a salvarnos de la fealdad del infierno y llevarnos al cielo, el


lugar de la perfección de la hermosura.
Es por eso que el mundo no tiene nada que ofrecernos, dice Tozer,
porque solamente Dios es hermoso y maravilloso. Gastamos demasiado
tiempo y esfuerzo en cosas mortales, cuando Dios quiere darnos su
presencia.

Termina este mensaje llamándonos a mejorar nuestro cristianismo


elevando nuestro concepto de Dios
El principal propósito al enseñar acerca de los atributos de Dios

Análisis
Si tengo un bajo concepto de Dios, mi religión solo puede ser un asunto
barato y diluido. Pero si mi concepto de Dios es digno de Dios, entonces
puede ser noble y digna; puede ser reverente, profunda, hermosa.

este estudio pueda ayudar a cada persona a tener un concepto más digno
de nuestro grande y maravilloso Dios
(Éxodo 15:11; Job 15:15; 25:5-6; Salmo 22:3; Proverbios 9:10; Isaías 6:3

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