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Tema: Reactivación de la discusión de la nueva ley de datos personales en el Senado, a raíz del
caso Facebook. Consideraciones sobre la ley de Protección de Datos.
Consideraciones:
La evolución de las TIC y la irrupción de internet han sido componentes que han
simplificado la vida de las personas, pero también han significado una vulnerabilidad a los
derechos de privacidad de los datos personales. Actualmente Chile no cuenta con una ley
acorde a los tiempos y ACTI ha criticado la demora del gobierno y del Congreso al no tener
premura en este aspecto, ya que resulta primordial que los chilenos tengan seguridad de
sus datos, y además porque la no actualización de esta ley significa incumplir tratados y
acuerdos con la OCDE.
En más de una ocasión hemos explicado que al no tener una política clara respecto a la
protección de los datos de las personas, Chile está perdiendo puntos del PIB y mientras
más se demoran en legislar, se seguirá con la pérdida. Hay que entender que Chile se
convierte en un país inseguro para las personas y para proveedores de servicios TI que
impliquen administrar datos de las personas, y se vuelve con grandes desventajas de
competitividad, como también afecta negativamente al propósito de aumentar la
exportación de servicios profesionales de Chile.
En este proceso es fundamental que todos nos involucremos. Tanto ciudadanos como
organizaciones, debemos comprender el valor que aporta la Ley de Protección de Datos y
no sólo desde la arista económica, de progreso o de cumplimiento de estándares
internacionales, sino que también desde el punto del derecho que tenemos todos de que
nuestra privacidad de datos sea amparada y protegida.
Punto aparte es el gobierno que debe vislumbrar y ser objetivo y entender que una ley
nunca cumplirá su finalidad si pretende ser parchada por medio de continuas reformas. Se
requiere de una revisión total sobre la moción, avanzando, a la vez, en la instauración de
una institucionalidad que proteja, promueva y contenga los desafíos presentes y futuros.
Es muy importante que a partir de esta reforma, se garantice a las personas naturales el
legítimo ejercicio de su derecho a la protección de su vida privada y un tratamiento
correcto de sus datos personales bajo estándares internacionales.
¿Cuáles son los datos más robados en Chile, desde cuándo? La vía de entrada de los
ciberdelitos principalmente se realiza mediante el correo electrónico, las redes sociales y
los Smartphones, dependiendo de cada uno de las aplicaciones utilizadas por las víctimas
la forma de ataque también es diferente. Por otro lado, los datos que más sufren de robo
de información personal y claves bancarias. Una cifra importante a considerar es la
información otorgada en la reciente Cumbre Latinoamericana de Analistas de Seguridad
que se desarrolló en septiembre pasado, que indicó que, entre agosto de 2015 y agosto de
2016, el continente Latinoamericano alcanzó una cantidad de un millón cien mil ataques
de malware al año, 12 por segundo.
¿Es suficiente el esfuerzo estatal por modificar la ley de privacidad de datos personales y
crear la comisión interministerial que se encarga del tema de ciberseguridad? Los
crímenes digitales son un problema que crece y evoluciona rápidamente, por ello, al
mismo tiempo las medidas de seguridad que se utilizan en las tecnologías de la
información deben mejorar constantemente. Chile en particular, se rige en materia digital
bajo una legislación que data del año 1993, lo que lamentablemente nos sitúa en una
postura muy desactualizada con respecto a los riesgos a los que hoy en día nos
enfrentamos. De todos modos, y gracias al creado comité interministerial de
ciberseguridad, vemos un interés por cambiar esta situación y de incluir a diferentes
sectores en la determinación de los procedimientos y pasos a seguir para comprender y
combatir el cibercrimen. Una de las gestiones positivas que hemos visto en relación a esto,
es la esperada unión al Convenio de Budapest, que esperamos sea pronto una realidad.
Esta permitiría ponernos al día en términos de amenazas digitales a nivel internacional y,
por ende, de incorporarlas en nuestra legislación. A pesar de celebrar este paso, creemos
que aún no es suficiente y debe haber legislaciones que apunten a sancionar o penalizar
este tipo de ciberataques en pro de darles seguridad a la ciudadanía.