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Monásticas
Introducción
Durante el siglo V y comienzos del siglo VI comenzó una época crítica para las
bibliotecas romanas. Los fundamentos del Imperio se tambaleaban e Italia sufría
el saqueo de los pueblos bárbaros. La literatura cristiana había comenzado a
estar presente junto a la griega y la latina, y en las iglesias se constituían
bibliotecas con textos bíblicos, y más tarde también los libros litúrgicos utilizados
en los servicios religiosos. Pero debido a las persecuciones de los cristianos
muchas bibliotecas fueron destruidas total o parcialmente..
El convento del Studion de Bizancio, en el siglo IX, dio normas de cómo debía
regirse el taller de copistas y la biblioteca. También deben mencionarse los
monasterios de la península de Athos, que alcanzaron su mayor auge durante
los siglos X al XV. Aún en la actualidad se encuentran en ellos unos 11.000
manuscritos de contenido teológico o musical. Del monasterio del Sinaí procede
el célebre manuscrito de la Biblia, Codex Sinaiticus, que hoy se encuentra en el
British Museum de Londres.
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Las bibliotecas de la Iglesia Romana.
Fue la Iglesia Romana la que llevó la iniciativa en el mundo del libro tras la caída
del Imperio Romano y el triunfo del cristianismo.
En extremo notable fue la actividad de los monjes irlandeses. Por alejada que
Irlanda se encontrase de los centros de la civilización antigua, llegó a ser a
comienzos de la edad Media el más importante refugio de la cultura clásica. La
isla fue convertida al cristianismo en el siglo V por San patricio, y un siglo más
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tarde existían unos 300 monasterios en Irlanda y escocia. Los monjes irlandeses
conocían el griego y fueron altamente eficientes en las artes de la escritura y
desarrollaron un auténtico estilo nacional, tanto de escritura como de decoración.
Durante los siglos IX y X, los vikingos destruyeron todos los monasterios de
Irlanda, pero también existieron monasterios irlandeses fundados en el
continente. Entre los más famosos cabe mencionar al monasterio de Luxeuil, en
Galia, el cual contó con una importante biblioteca. San Columbano fundó más
tarde en Italia el convento de Bobbio, y Galo fundó en Suiza el aún existente
monasterio de Saint-Gall, cuya biblioteca alcanzó más tarde gran fama. De
Luxeuil procedió otro famoso monasterio, el de Corbie, en picardía, del que a su
vez surgió el monasterio de Korvey, en Sajonia, en cuya biblioteca, en el siglo X,
Widukind escribió su crónica. De las casas madres obtenían las filiales una
colección de manuscritos como base de su biblioteca.
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entre los franciscanos. A fines del siglo XVI fueron enviados a no menos de 186
monasterios, cuestionarios relativos a sus fondos bibliográficos, y con las
respuestas se elaboró un Registrum Librorum Angliae (catálogo de los libros de
Inglaterra), que actualmente se encuentra en la Bodleian Library, en Oxford, y
que puede ser considerado como el intento más antiguo que se conoce de
redactar un catálogo general para un conjunto de bibliotecas con indicación de
en cuál de ellas se encontraba un determinado libro.
Los manuscritos.
Cuando el escriba había terminado el manuscrito, le daba fin con varias líneas,
llamadas suscripción o colofón. Allí se encontraba el título del libro, dónde y
cuándo se había realizado la obra, para quién, etc., así como también podía
mencionar su nombre para recuerdo de la posteridad.
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Decadencia de la cultura monástica.
Conclusión.
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Bibliografía.
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Índice
Pág.
Introducción …………………………………………………………………….. 1
Las bibliotecas Bizantinas …………………………………………………….. 1
Las bibliotecas de la iglesia Romana ………………………………………. 2
Los monjes benedictinos y los monjes irlandeses ………………………….. 2
Las bibliotecas de las nuevas órdenes monásticas ………………………… 3
Los manuscritos ………………………………………………………………… 4
Decadencia de la cultura monástica …………………………………………. 5
Conclusión ……………………………………………………………………… 5
Bibliografía ………………………………………………………………………. 6