Vous êtes sur la page 1sur 17

Universidad De San Carlos De Guatemala

Facultad de: Humanidades


Departamento de: Letras
Curso: Literatura Guatemalteca del Siglo XX
Licda. Dora Reyes Santa Cruz
Fecha: 27/07/2019

Tema: Aspectos relacionados con el contexto histórico, político y social de la


Literatura Guatemalteca del Siglo XX

Nombres Carné
Ruth Sarai Pérez Quinteros 201019828
Jennifer Michelle Guerrero López 201705659
Miriam Aguilar Bernardo 201608561
Evelyn Carolina Alvarado Mazariegos 200013501
Introducción

Durante el siglo XX la Literatura Guatemalteca fue evolucionando conforme a las


generaciones que surgían. La literatura Guatemalteca se dio durante el periodo de
la guerra civil, durante este siglo hubo problemas políticos como la dictadura del
gobierno de Manuel Estrada Cabrera y Jorge Ubico, surgieron varios grupos
llamados “Generaciones” ya que estos fueron los que vinieron a enfrentar a los
gobernantes, no solo con sus ideales sino que tambien con su literatura.

Contexto Histórico, Político y Social De La Literatura Guatemalteca


Del Siglo XX

¿Cuál es el contexto de la literatura?

Contexto Literario: referido al ambiente en el que se desarrolla una obra literaria.


Cuando nos referimos al contexto es todo lo que rodea al texto que poseemos

Siglo de cambios
El siglo XX ha supuesto una transformación constante y radical de las corrientes
ideológicas y de las tendencias artísticas heredadas del siglo XIX. Nunca, como en
este siglo XX, han evolucionado tan rápidamente las culturas, las ciencias, las
técnicas y las ideologías. El hombre contemporáneo ha sentido muy intensamente
la dependencia de los aconteceres históricos y de las transformaciones sociales y,
consecuentemente, se ha refugiado en su propio mundo interior, en un claro
proceso de individualización.

A ello ha contribuido el brusco relevo de los sistemas políticos: la crisis del


liberalismo burgués, la sucesión de regímenes totalitarios, el impulso revolucionario,
el fracaso real de las ideologías y los continuos enfrentamientos bélicos en todo el
mundo han provocado una viva incertidumbre internacional que se refleja en la
Literatura y el Arte al expresar generalmente la indefensión humana frente al medio.

Materialismo
La sociedad se ha encerrado en un materialismo que desdeña los valores
humanistas como consecuencia del progreso técnico y científico y ha desembocado
en un obsesivo consumismo. La acumulación de capitales y las progresivas
desigualdades entre los países han favorecido el aumento del subdesarrollo y el
hambre en vastas zonas del planeta y la marginación ciudadana en los países
industrializados, pero también el activismo de los sindicatos obreros y la aceleración
de los procesos revolucionarios contra el orden burgués establecido; recientes son
los movimientos protagonizados por los foros sociales en protesta por el mal reparto
de la riqueza mundial.

Pensamiento
El estado de crisis y malestar individual y social ha conducido al individuo
contemporáneo a un pensamiento existencial escéptico e indigente, a la conciencia
de su propio malestar vital. Por ello, la repercusión de las teorías psicoanalíticas de
Freud, que manifiestan la indefensión de la persona ante el exterior y ante las
fuerzas ocultas de su mente.

Arte y Literatura

En este contexto histórico y social, el Arte y la Literatura han evitado en general,


excepto las tendencias realistas, las referencias fieles a la realidad exterior. El
irracionalismo artístico (intensa subjetividad e intuición) combatió a principios de
siglo las normas académicas del arte burgués. El Arte y la Literatura en el siglo XX
se han caracterizado por la dificultad en su comprensión y la ambigüedad al
poblarse de símbolos, sensaciones ocultas y expresiones individuales de la
sensibilidad.

De todas formas, el Arte y la Literatura en el siglo XX se han desarrollado entre dos


posturas irreconciliables:

La tendencia a la vanguardia, irracionalista, que intenta el arte puro desconectado


de la realidad: Modernismo, Vanguardismo, Experimentalismo.

La tendencia al compromiso con la realidad, con los problemas sociales


contemporáneos: Existencialismo, Realismo social.

Literatura Guatemalteca del Siglo XX

En el siglo XX, la literatura de Guatemala alcanza un nivel comparable al de las


demás literaturas de Hispanoamérica, gracias a la aparición de varias generaciones
de escritores, y en especial a cuatro escritores fundamentales: el novelista Miguel
Ángel Asturias (Premio Nobel de Literatura en 1967), autor de novelas como El
Señor Presidente u Hombres de Maíz; el poeta Luis Cardoza y Aragón; el cuentista
y novelista Augusto Monterroso (Premio Príncipe de Asturias de las Letras en 2000)
y el dramaturgo Carlos Solórzano. En general, la literatura guatemalteca del siglo
XX tiene una fuerte influencia de la vida política, como prueba el hecho de que sus
principales autores debieran exiliarse durante las sucesivas dictaduras y guerras
civiles que sufrió Guatemala.

La décadas de la literatura en el siglo XX son:


Autores Modernistas
La generación de 1910 o "del Cometa"
La generación de 1920
La generación de 1930 o "Grupo Tepeus"
La generación de 1940 o "Grupo Acento"
El Grupo Saker-ti (1944-1954)
La "Generación comprometida" (después de 1954)
Grupo Nuevo Signo (1968-1970)

Esta actividad es la que más representantes ha tenido en nuestro mundo cultural,


ya que siempre hubo poetas, novelistas, cuentistas, dramaturgos y ensayistas,
aunque algunas de las obras escritas en la época de los dictadores sólo se
publicaron años después.
Al inicio del siglo XX el movimiento literario conocido como modernismo, tuvo dignos
representantes entre los escritores guatemaltecos. El más destacado de ellos fue
Rafael Arévalo Martínez. Otros notables literatos que descollaron en el decurso del
siglo fueron Máximo Soto Hall, Enrique Gómez Carrillo, Félix Calderón Ávila, Alberto
Velásquez, Luis Cardoza y Aragón, Angelina Acuña, Francisco Méndez, César
Brañas y otros que, como los citados, nacieron a finales del siglo XIX y a principios
del XX .
En las ramas de cuento, novela y aun de poesía, hubo escritores que siguieron la
corriente criollista. Algunos de ellos también escribieron novela indigenista, por
ejemplo, Flavio Herrera, Carlos Wyld Ospina, Mario Monteforte Toledo, Miguel
Ángel Asturias, Carlos Samayoa Chinchilla y otros más. Miguel Ángel Asturias es el
escritor guatemalteco más conocido, pues fue galardonado, en 1967, con el Premio
Nobel de Literatura.
La Revolución de octubre y los gobiernos que surgieron de ella marcaron un cambio
no sólo en lo político sino en todos los campos de la actividad cultural. Otros
escritores sé que dieron a conocer entonces fueron Ricardo Estrada, Augusto
Monterroso, Virgilio Rodríguez Macal, Huberto Alvarado Arellano, Otto Raúl
González, Enrique Juárez Toledo, Raúl Leiva, etcétera. En años más recientes han
surgido muchos escritores, algunos de los cuales siguen en plena actividad
productiva: Marco Antonio Flores, Mario Roberto Morales, Marco Augusto Quiroa,
Mario Alberto Carrera, Luz Méndez de la Vega, Margarita Carrera, Ana María
Rodas, Rafael Sosa y otros.
El teatro es una de las actividades literarias que tomó más impulso después de
1944. Los dramaturgos más conocidos, entre los que surgieron en este siglo, son
Manuel Galich, Manuel José Arce Leal, Hugo Carrillo y Miguel Ángel Asturias. En
1978 se finalizó la construcción del Centro Cultural Miguel Ángel Asturias, el cual
incluye el Gran Teatro Nacional y un Teatro de Cámara

Contexto Social de la Literatura guatemalteca del siglo XX

El contexto de producción es el mundo social que vive el autor de una obra en la


cual se ven reflejados los acontecimientos políticos, económicos, sociales,
culturales y religiosos. Este contexto si coincide con el lector. Un texto literario
siempre incluirá ciertas marcas que revelen su contexto.

Contexto político de la literatura guatemalteca del siglo XX


A principios del siglo XX, Guatemala estaba regida por una dictadura totalitaria, por
lo cual no existía un verdadero libre desarrollo cultural. A pesar de esto, hay
escritores representativos de su época por la difusión internacional de su obra, por
su estilo e ideología que los distinguen.
La Literatura Guatemalteca tiene una fuerte influencia de la vida política, como
prueba el hecho de que sus principales autores debieran exiliarse durante las
sucesivas dictaduras y guerras civiles que sufrió Guatemala.
La literatura guatemalteca del siglo XX estaba dividida por generaciones o décadas.
Las más importantes son:
● La generación de 1910 o “del Cometa”
● La generación de 1920
● La generación de 1930 o “Grupo Tepeus“
● La generación de 1940 o “Grupo Acento“
● El Grupo Saker-ti (1944-1954)
● La “Generación comprometida” (después de 1954).

La generación de 1910, se puede decir que fueron los padrinos de la “Generación


del 20”. En este año florece la producción literaria de los miembros de ésta
generación, los primeros intentos aparecen en las Revistas El Jardín y Electra.
Entre los principales colaboradores de éstas revistas encontramos a Rafael Arévalo
Martínez, una de las figuras literarias más sobresalientes de la literatura
guatemalteca.

Algunos autores ya tenían publicaciones antes del terremoto de 1917, como


señalamos anteriormente, la producción literaria era sumamente costosa por la
escasez de papél, las pocas imprentas, la falta de apoyo a la cultura y la mayoría
de la población analfabeta.
Se conocen como miembros de ésta generación a Carlos Rodríguez Cerna, Félix
Calderón Ávila, José Rodríguez Cerna, Adrián Recinos, Carlos H. Vela, Carlos H.
Martínez, Rafael Valle que lo llaman epílogo de la generación. En algunas ocasiones
se menciona a Flavio Herrera, que en su poesía tenía influencia de los poetas
españoles Machado y Reissing.
Los miembros de ésta generación nacen bajo el régimen liberal a finales del
gobierno de Justo Rufino Barrios. Guatemala estaba amenazada por el peligro de
la expansión de los Estados Unidos y la influencia de la Revolución Mexicana. De
la Generación del 10 dice don César Brañas “Fue una generación brillante, su obra
fue estimable producida con entusiasmo literario y vital, a pesar de estar dentro de
un régimen de tiranía.

La Generación de 1920, sus integrantes nacen con el siglo de las luces, bajo el
gobierno de Manuel Estrada Cabrera, que representaba el régimen liberal. Como
muchas generaciones literarias, la del 20 en Guatemala surgió motivada por un
movimiento político, con la finalidad de derrocar al gobierno dictatorial. Este
movimiento involucró a toda la población, hubo una integración total de personajes
representativos, en la política. También de la prensa, maestros, jefes de
agrupaciones obreras y damas de la sociedad.

Los jóvenes estudiantes y los jóvenes obreros, vieron la oportunidad de poder


expresarse contra el ambiente de opresión y limitaciones en que habían crecido.
Como las autoridades universitarias no tomaban en cuenta al estudiantado, los
líderes universitarios como Miguel Ángel Asturias, David Vela, Epaminondas
Quintana, Juan Olivero, entre otros pensaron formar la Asociación de Estudiantes
Universitarios (A.E.U) para tener voz y voto. Así se forja la Generación Literaria del
20. Tienen participación en diferentes actos que quedaron marcados en la historia
de nuestro país. El contenido ideológico, y el pensamiento de los miembros de esta
generación, los ideales, sus influencias y proyecciones, el material del cual están
formados, las inspiraciones que los motivaron a escribir además de la propia vena
de cada uno se enumera en la Revista Ensayos. Destacan en la Generación del 20:
● Miguel Ángel Asturias
● Ramón Aceña Duran
● César Brañas
● Luis Cardoza y Aragón
● Flavio Herrera
● Clemente Marroquín Rojas
● David Vela
● Carlos Wyld Ospina, entre otros.

Una de las características de éste grupo de escritores es el interés por el indio, no


como un ser distante, si no, como parte de nosotros mismos.

La Generación de 1930, fue una agrupación de escritores y artistas de vanguardia


guatemaltecos, fundada en 1930. También se lo conoció como Grupo Tepeus,
nombre que proviene del quiché tepeus, que significa los ancianos, los abuelos, los
precursores o los pioneros (Diccionario Histórico Biográfico, 2004).
La idea que le dio vida surgió en tertulias realizadas en casa de Juana V. de
Rodríguez, a donde concurrían también Clemencia Padilla y Laura Rubio de Robles,
Augusto Morales Pino, Xavier López Contreras, Rubén Barreda Ávila, Francisco
Méndez y Valentín Abascal. También integraron dicho grupo Julio Antonio Reyes
Cardona, Roberto Quezada, Luis Barrera Rodríguez, Augusto Meneses, Antonio
Morales Nadler y Carlos Samayoa Chinchilla.
El Florecimiento del interés por la temática criollista-indigenista en la literatura y la
estructura hermanó a turistas de diferentes áreas en dicha agrupación. Otras de sus
principales personalidades fueron Miguel Marsicovétere y Durán, Benjamín
Paniagua Santizo, Rodolfo Galeotti Torres, Jorge Luis Arriola, Gabriel Ángel
Castañeda y Enrique de León Cabrera.
Sus primeras publicaciones aparecieron en las revistas Proa, Vanguardia, Surco y
Jade. Posteriormente con la creación de la Editorial Mínima de 1932 a 1938,
por Oscar Mirón Álvarez y Miguel Marsicovétere y Durán, se editaron las
obras Canto de la sangre, de Mirón Álvarez, Lo que no sucedió, de Carlos Samayoa
Aguilar, Los dedos en el barro, de Francisco Méndez, Barajas, de Alfredo Balsells
Rivera, De regreso, de Manuel Galich, Poesía femenina, de Estela Márquez,
Angelina Acuña, Malín D’Echevers y otras poetisas, y Espejos, Flor de Tierra, y Las
manos vacías, de Miguel Marsicovétere y Durán (Diccionario Histórico Biográfico,
2004).
Análisis de Poema

Cantata - Miguel Ángel Asturias


1954

¡Patria de las perfectas luces, tuya


la ingenua, agraria y melodiosa fiesta,
campos que cubren hoy brazos de cruces!

¡Patria de los perfectos lagos, altos


espejos que tu mano acerca al cielo
para que vea Dios tantos estragos!

¡Patria de los perfectos montes, cauda


de verdes curvas imantando auroras,
hoy por cárcel te dan tus horizontes!

¡Patria de los perfectos días, horas


de pájaros, de flores, de silencio
que ahora, ¡oh dolor!, son agonías!

¡Patria de los perfectos cielos, dueña


de tardes de oro y noches de luceros,
alba y poniente que hoy visten tus duelos!

¡Patria de los perfectos valles, tienden


de volcán a volcán verdes hamacas
que escuchan hoy llorar casas y calles!
¡Patria de los perfectos frutos, pulpa
de paraíso en cáscara de luces,
agridulces ahora por tus lutos!

¡Patria del armadillo y la luciérnaga


del pavoazul y el pájaro esmeralda,
por la que llora sin cesar el grillo!

¡Patria del monaguillo de los monos,


el atel colilargo, los venados,
los tapires, el pájaro amarillo

y los cenzontles reales, fuego en plumas


del colibrí ligero, juego en voces
de la protesta de tus animales!

Loros de verde que a tu oído gritan


no ser del oro verde que ambicionan
los que la libertad, Patria, te quitan.

Guacamayas que son tu plusvalía


por el plumaje de oro, cielo y sangre,
proclamándote va su gritería...

¡Patria de las perfectas aves, libre


vive el quetzal y encarcelado muere,
la vida es libertad, Patria, lo sabes!
¡Patria de los perfectos mares, tuyos
de tu profundidad y ricas costas,
más salóbregos hoy por tus pesares!

¡Patria de las perfectas mieses, antes


que tuyas, júbilo del pueblo, gente
con la que ahora en el pesar te creces!

¡Patria de los perfectos goces, hechos


de sonido, color, sabor, aroma,
que ahora para quién no son atroces!

¡Patria de las perfectas mieles, llanto


salado hoy, llanto en copa de amargura,
no la apartes de mí, no me consueles!

¡Patria de las perfectas siembras, calzan


con hambre de maíz sus pies desnudos,
los que huyen hoy, tus machos y tus hembras!
Este poema fue escrito por Miguel Ángel Asturias cuando se encontraba en Buenos
Aires, en 1954. Desde un punto de vista estilístico, es dable observar las imágenes
fáciles de comprender, el vocabulario sencillo. No es un poema íntimo ni individual,
sino al contrario, busca adquirir una dimensión colectiva, bien sea como exaltación
o para revelación. Claramente, busca recoger la voz social, el sentir comunitario de
dolor, alegría o rebelión y alabar la naturaleza nacional.

Como un canto a su tierra, la nostalgia del poeta no se queda como una mera
melancolía. En su poesía hay denuncia, la tierra volcanes de lagos está y todavía
se encuentra amenazada por gobiernos déspotas. La tierra de aves que tenían un
vuelo libre, ahora su vuelo se encuentra limitado. Los verdes campos y la fertilidad
de la tierra, ya no es para producir frutos dulces sino un terreno de espinas y
esclavitud. La situación en nuestra país no ha cambiado, después de 65 años
Guatemala sigue siendo un país verde, pero sin esperanza en el corazón de los
guatemaltecos. Con una soberanía y libertad comprometidas por la ambición al
dinero.
Conclusión

Sabiendo que la política, alcanzo una gran fuerza de influencia en la literatura


guatemalteca, oprimiendo a personas decentes que se esfuerzan por sobrevivir
cada día. Así también, se anhela en la literatura expandir el buen pensar de los
políticos y expresar lo más sincero que desean para los ciudadanos. Forma en que
los habitantes evitarían recitaciones de rechazo en contra de falsos políticos. A
causa de sus malas propuestas durante sus discursos a la población estrechamente
necesitada.
Referencia Bibliográfica

 Fundación para la cultura y el Desarrollo. 2004. Diccionario histórico


biográfico de Guatemala. En Diccionario histórico biográfico de
Guatemala (975) Guatemala: Asociación de Amigos del País /Fundación
para la Cultura y el Desarrollo.
Anexos

Vous aimerez peut-être aussi