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COLOMBIANO
2019
Uno de los delitos producto del conflicto que durante varias décadas hemos vivido es el
lavado de activos, entendiéndose a este como el proceso por medio del cual se busca
incluir dineros obtenidos de manera ilegal al sistema financiero, para luego volver a ser
utilizado en otros crímenes, como sería la financiación a grupos terroristas dentro o
fuera del país. En ese sentido, el gobierno nacional a partir de la promulgación de la
Carta Constitucional de 1991 ha facultado a varios organismos para que regulen y
minimicen el posible impacto que esta conducta atípica, antijurídica y punible, pueda
ocasionar, no solo al sistema financiero colombiano, sino a todo el esquema social.
Es así como llegamos a uno de los puntos esenciales de este escrito, que no es otro
que las sanciones que dichos organismos ponen a las personas que se encuentran
incurso en este tipo de conductas punibles.
Pero recordemos que este delito no solo es cometido por personas naturales, sino que
también puede ser imputable a personas jurídicas, en cuyo caso se amplía el espectro
sancionatorio, esto en el entendido que ya entraran los demás órganos de control a
hacer el estudio respectivo. Es por eso que adicional a las tres sanciones previas,
encontramos otras de carácter administrativo, como serian el cierre temporal o
definitivo de los establecimientos y a la cancelación de la matricula mercantil de las
personas jurídicas que se vean inmersas en lavado de activos.
A modo de resumen en este acápite, vemos que tanto para las personas naturales
como jurídicas existen sanciones que, dependiendo de la trazabilidad que dé el juez u
organismo de control, puede ser prisión, sanciones económicas, comerciales y
mercantiles.
Por otro lado, y acudiendo al segundo tema que nos acoge en estudio, vemos que en
Colombia el tratamiento de los datos de cada persona se encuentran protegidos por la
Constitución en los artículos 15 y 20 subsecuentemente, y en desarrollo legal por la ley
1581 de 2012, conocida como la ley de protección de datos, la cual estipula que los
datos que ellos como entidad han obtenido, deben ser manejados con extrema
prudencia, evitando que los mismos sean usados de un modo incorrecto, limitando su
uso para los fines establecidos, aclarando que ellos, como sistema que unifica datos
financieros, que pueden ser usados por muchos organismos ajenos, su responsabilidad
se limita, dejando de lado los usos que los demás organismos den a los mismos.
Para finalizar vemos que, dentro del ámbito jurídico colombiano, tanto el tipo penal del
lavado de activos, como el tratamiento de datos personales, responden a principios
constitucionales, han tenido un desarrollo legal particular, y permite que la UIAF, los
organismos de control y el gobierno establezcan unos lineamientos que permita limitar
el abuso en ambos sentidos.