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2008
CONTRALORÍA GENERAL DE LA REPÚBLICA
DIVISIÓN DE COORDINACIÓN E INFORMACIÓN JURÍDICA
Estatuto Administrativo
Interpretado, Concordado y Comentado
LEY No 18.834
Santiago - Chile
2008
Es propiedad de los Autores
Este trabajo ha tenido por objeto recopilar, ordenar, sistematizar y comentar la jurisprudencia
administrativa de mayor aplicación y significado doctrinal que emana de los dictámenes de la Contrataría
General de la República, en el cumplimiento de la facultad que le asiste, de interpretar el Estatuto
Administrativo aprobado por la ley N' 18.834, cuyo texto refundido, coordinado y sistematizado fue
fijado por el decreto con fuerza de ley N' 29, de 2004, del Ministerio de Hacienda.
La necesidad de elaborar un nuevo texto actualizado de este libro, nace de las diversas
modificaciones que se han introducido a la ley N' 18.834 con posterioridad a la edición del año 2002,
tales como las relativas a nombramientos, promociones y ascensos, permisos por nacimiento y
muerte y adecuaciones al principio de probidad en el ejercicio de la función pública, materias respecto
de las cuales se han fijado criterios de interpretación que deben ser conocidos por la Administración
y la ciudadanía.
Estamos convencidos que la obra que aquí presentamos será de gran utilidad para el
desarrollo del Derecho Administrativo y para una mejor gestión en las materias de que trata el
Estatuto Administrativo.
'
RAMIRO MEN!f'OZA 9UÑIGA
CONTRALOR GENER~~LA REPUBLICA
LA JURISPRUDENCIA ADMINISTRATIVA
DE LA CONTRALORÍA GENERAL DE LA REPÚBLICA
Los dictámenes son actos jurídicos administrativos-asilo reconoce el artículo 3°, inciso sexto,
de la ley W 19.880, que establece Bases de los Procedimientos Administrativos que rigen los actos
de los órganos de la Administración del Estado- que se encuentran afectos a un régimen especial de
derecho que los circunscribe a una función interpretativa de la ley administrativa y, cuando ellos fijan
el sentido y alcance de las disposiciones, pasan a constituir en un momento determinado, un todo
obligatorio con esas reglas para la autoridad y para las personas que se acogen a ellos, rigiendo, en
general, desde la fecha de vigencia de la ley interpretada, esto es, con efecto retroactivo (58073/68
y 55600/78). Ello, en virtud del carácter declarativo que tiene la jurisprudencia administrativa,
circunstancia que implica afirmar que la interpretación que confiere a los preceptos del ordenamiento
jurídico, es el alcance que esos preceptos siempre tuvieron desde la fecha en que entraron en vigor
(5483/03), su jerarquía será análoga a la preceptiva que interpreta y formará parte integrante de ella
(21510/92).
Los dictámenes que emite la Contraloria General revisten fuerza obligatoria para los órganos
de la Administración, de modo que su falta de aplicación significa tanto el incumplimiento de lo alli
resuelto como la transgresión del articulo 9 de la ley W 10.336, actuaciones ambas que pueden
hacer incurrir a la autoridad renuente a su acatamiento en responsabilidad administrativa (17870/06,
51534/07).
La interposición de acciones judiciales por parte de los servicios públicos que a la Contraloria
General le compete fiscalizar, con posterioridad a la emisión de sus dictámenes, no le impide ejercer
las facultades que el ordenamiento jurídico le confiere para exigir el acatamiento de éstos (33790/00,
39570/00, 11752/03). La existencia de un juicio ordinario de resolución de contrato con indemnización
de perjuicios inhibe la potestad dictaminadora de este Organismo de Control, pero no sus facultades
de inspección y auditoría (21 05/08).
ABREVIATURAS USADAS EN ESTA OBRA
D.F.L. Núm. 29.- Santiago, 16 de junio de 2004.- Visto: Lo dispuesto en el articulo 61 de la Constitución
Política de la República y la facultad que me ha conferido el articulo décimo transitorio de la ley
w 19.882.
Fijase el siguiente texto refundido, coordinado y sistematizado del Estatuto Administrativo, aprobado
por la ley W 18.834.
C) E! articulo décimo transitorio de la Ley N" 19.882. que regula nueva pol1tica de personal a los funcionarios
públicos que indica. facultó al Presidente de la Repllblica para que, mediante un decreto con fuerza de ley, fijara
el texto refundido, coordinado y sistematizado de la Ley N" 18.834. sobre Estatuto Administrativo, lo que se
efectuó a través del Decreto con Fuerza de Ley N', 29. de 2004, del Ministerio de Hacienda.
ÍNDICE
TÍTULO 1 Página
TÍTULO 11
DE LA CARRERA FUNCIONARIA 91
TÍTULO 111
TÍTULO IV
Párrafo 1" Normas generales ... ......... . ..... (Arts. 89 a 92) 341
Parrafo 2" De las remuneraciones y asignaciones. . .. (Arts. 93 a 101) 369
Párrafo 3' De los feriados.. . .......... .. . . (Arts 102 a 107) 411
Párrafo 4" De los permrsos ...... (Arts. 108 a 110) 430
Párrafo 5'.. De las licencias médicas.. . .... (Arts. 111 a 113) 440
Párrafo 6" De las prestaciones sociales. ................ (Arts. 114 a 118) 450
TÍTULO V Página
TÍTULO VI
TÍTULO VIl
TÍTULO FINAL
T{t1.llo J ·.·
.
Normas Generales
Título 1 Normas Generales 13
ARTICULO 1°.- Las relaciones entre el Estado y el personal de los Ley 18.834, Art. 1".
Ministerios, Intendencias, Gobernaciones y de los servicios públicos
centralizados y descentralizados creados para el cumplimiento de
la función administrativa, se regularán por las normas del presente
Estatuto Administrativo, con las excepciones que establece el inciso
segundo del articulo 21 de la ley W 18575 (*).
Interpretación:
El artículo 1 de la ley 18834 al regular las relaciones entre el Estado y el personal que indica, "con
las excepciones que establece el inciso segundo del artículo 18 (actual inciso segundo del articulo
21) de la ley 18575", no tiene otro alcance que señalar el ámbito natural de aplicación del nuevo
Estatuto Administrativo, de acuerdo con lo previsto en el artículo 45 (actual artículo 43) de la ley
18575, en relación con el inciso primero del artículo 18 (actual inciso primero del artículo 21) de esa
ley, lo que no determina, en modo alguno, que las leyes orgánicas constitucionales de las entidades
que menciona el inciso segundo de esta última norma, estén impedidas de someter a su personal
al régimen que estimen pertinente y que puede ser, por cierto, las disposiciones de la ley 18834
(28614189, 33872189, 21248193).
En las instituciones del sector público cuyo personal se rige por el Código del Trabajo, dicho
ordenamiento tiene el carácter de disposiciones estatutarias de Derecho Público y constituyen
mandatos imperativos para la autoridad administrativa, razón por la cual ésta no se encuentra facultada
para otorgar beneficios que no estén previstos en dicha normativa (1246197, 13152102). El Código
del Trabajo debe aplicarse, en el caso de trabajadores del sector público, con las adecuaciones que
que se trate (44971102, 47583102). La Contraloria General tiene competencia para fiscalizar el
cumplimiento de las normas laborales de los funcionarios públicos sometidos al Código del Trabajo,
(*) El DFL. N" 1-19653, de 2000, del Ministerio Secretaría General de la Presidencia, publicado en el Diario
Oficial de 17 de noviembre de 2001, fijó el texto refundido, coordinado y sistematizado de la Ley N" 18.575,
Orgánica Constituc1ona\ de Bases Generales de !a Administración del Estado.
La circunstancia de que determinados empleados de instituciones estatales estén afectos a las normas
de derecho privado, no significa que pierdan su calidad de servidores públicos, sino que, en su caso,
el Código del Trabajo constituye el estatuto administrativo propio de ese personal, correspondiendo
a la Contraloria General su interpretación y aplicación, atendidas las atribuciones privativas que le
entrega la ley 10336, respecto de los organismos públicos y sus funcionarios (5116/08).
De acuerdo con el articulo único de la ley 19263 las disposiciones del Estatuto Administrativo no
se aplican al personal de las Corporaciones de Asistencia Judicial, creadas en conformidad con lo
dispuesto en las leyes 17995 y 18632, el que se ha regido y continuará rigiéndose exclusivamente
por los respectivos contratos de trabajo y las normas aplicables al sector privado, en virtud de lo
prescrito en los citados cuerpos legales. Las Corporaciones de Asistencia Judicial, por tener su
origen en la ley, en razón de sus fines, de la naturaleza de sus recursos y del régimen jurídico
especial a que están afectas, tienen la condición de servicios públicos descentralizados y, por ende,
integran la Administración del Estado (7480/95, 14871/00). Así entonces, los trabajadores de tales
entidades revisten la calidad de funcionarios públicos, ya que se desempeñan en organismos que
forman parte de la Administración, sin que ello se vea alterado por la circunstancia de que se rijan por
las normas aplicables al sector privado, según lo ordenado en la ley 19263, ya que este mandato no
tiene otro alcance que fijar el régimen jurídico que regula el vinculo laboral de dicho personal, pero
no altera la condición de servidores públicos que ellos poseen (55344/06).
El personal de la Contraloria General de la República se rige por las normas de su Ley Orgánica,
10336, y en lo no previsto por ésta, por el EstatutoAdministrativo aprobado por la ley 18834 (28614/89,
853/91 ).
Atendida su naturaleza de texto legal de derecho público, el Estatuto Administrativo rige "in actum",
dado que en él no se establece una fecha especial de vigencia, por lo que se aplica a partir de
su publicación en el Diario Oficial, esto es, desde el 23 de septiembre de 1989, sin perjuicio de
lo establecido en algunas de sus disposiciones transitorias. El anterior Estatuto, contenido en el
DFL 338, de 1960, fue derogado expresamente por el articulo 157, inciso primero, de la ley 18834
(28614/89, 29922/89,17816/90,9396/91, 21351/92).
El Estatuto Administrativo regula, en general, las relaciones laborales de la Administración del Estado
con el personal de la dotación de los Servicios que la integran, salvo respecto de los funcionarios
regidos por estatutos especiales. De acuerdo con los artículos 45 (actual articulo 43) de la ley
18575, 1 y 156 (actual articulo 162) de la ley 18834, esos estatutos especiales no se aplican a
todo el personal del respectivo Servicio, sino que solamente a los funcionarios que desempeñan
las profesiones o actividades que menciona esta última disposición (29976/92, 2532/93, 25950/93).
Por ejemplo, el personal de Gendarmería de Chile está sometido a las normas de la ley 18834, con
excepción de los Oficiales y Vigilantes Penitenciarios, que se rigen por sus estatutos especiales
(articulo 156 -actual articulo 162-), letra d) (5466/91). Los funcionarios del Servicio de Impuestos
Internos se rigen por la ley 18834, con excepción del personal que cumple funciones fiscalizadoras,
el cual está afecto a estatutos especiales (articulo 156 -actuaL articulo 162-, letra e) (24378/90).
El personal no académico de las instituciones de educación superior estatales están sujetos a la ley
18834. No obstante, de acuerdo con el articulo 45 (actual articulo 43) de la ley 18575, conservan su
vigencia las disposiciones de los estatutos orgánicos de esos servidores, relativas al nombramiento
y remoción del rector y demás funcionarios superiores (4580/91, 7203/91, 20644/92).
La ley 18834 no contempla la posibilidad de contratar personas conforme al Código del Trabajo
(7203/91, 9283/92, 30867/92).
Los funcionarios públicos pueden estar sujetos en lo laboral al Estatuto Administrativo y, a la vez,
a regímenes de remuneraciones, salud y previsión distintos de la generalidad de los servidores
adscritos a la ley 18834, porque ésta no contiene un régimen de remuneraciones ni disposiciones
relativas a prestaciones de salud, excepto los derechos a licencias médicas y los derivados de las
prestaciones médicas por accidente en acto de servicio y enfermedad producida a consecuencia del
desempeño de la función (29856/92, 26964/93).
El personal de las Subsecretarias del Ministerio de Defensa Nacional se rige por la ley 18834,
porque según el inciso primero del articulo 18 (actual inciso primero del articulo 21) de la ley 18575,
la organización básica de los Ministerios es la establecida en su Titulo 11, que comprende a las
Subsecretarias, con excepción de las entidades mencionadas en el inciso segundo del mismo
precepto. Entre las normas de ese Titulo 11 se encuentra el articulo 45 (actual articulo 43), en cuya
virtud el personal de los organismos señalados en el citado inciso primero del articulo 18 (actual
inciso primero del articulo 21) se rige por el Estatuto Administrativo (25950/93, 19515/94, 93/96,
17106/96).
El personal de la Dirección de Previsión de Carabineros se rige actualmente por la ley 18834, por
tratarse de una de las entidades aludidas en el inciso primero del articulo 18 (actual inciso primero
del articulo 21) de la ley 18575 y no estar comprendida entre las excepciones referidas en el inciso
segundo de esta norma, sin que pueda estimarse que el DL 844, de 1975, constituya un estatuto
especial para algunos de sus funcionarios, en virtud de lo señalado en el articulo 156 (actual articulo
162) de la citada ley 18834 (33137/94, 6764/97).
El personal C:e la C:::ja de Previsión de la Defensa Nacional se encuentra afecto 3 la ley 18834, por
cuanto dicha Caja es un servicio público descentralizado del Estado, creado para el cumplimiento de
la función administrativa y, por ende, comprendido entre los organismos mencionados en el articulo
1 de esa ley (5090/97).
Concordancias: Arts. 38 de la CP de laR; 15 al19, 21, 22, 24, 27, 28,29 y 43 al 51 de la LOCBGAE;
162 y 163 del EA; 1 del EAM.
Comentarios:
El problema jurídico derivado del concepto de Estatuto Administrativo se planteó en la doctrina el año
1948, a propósito de la negativa del Ministerio de Defensa Nacional de dar respuesta a un informe
pedido por la Contraloria General de la República sobre su reiterado rechazo a reconocer un reajuste
de pensión jubilatoria a un ex Jefe de Maestranza del Ferrocarril Militar de Puente Alto a El Volcán.
Pronunciándose sobre la solicitud del interesado, mediante el dictamen 15412, de 1948, la Contraloria
General desarrolló la tesis jurisprudencia!, que desde entonces ha sido su posición oficial, conforme
a la cual el Estatuto Administrativo tiene autonomía conceptual y no se halla referido a una ley
determinada, sino que configura un concepto jurídico de rango constitucional con un sentido y
alcance propios.
Al respecto, el dictamen aludido señaló que "la expresión Estatuto Administrativo, aunque empleada
en singular por la Constitución -se refería al articulo 72 N"s. 7, 8 y 9 de la Carta Política de 1925- es
comprensiva de los varios ordenamientos parciales, ya civiles o militares, sobre la materia de las
garantías de estabilidad, ascenso y haberes pasivos de los servidores del Estado", y que "aunque el
legislador no haya denominado Estatuto Administrativo a cada una de las leyes dispersas sobre el
tema indicado, no por eso dichas leyes en conjunto dejan de constituir Estatutos u Ordenamientos
Administrativos".
El artículo 1 del Estatuto Administrativo determina su campo de aplicación. Esta norma, relacionada
con los artículos 43, inciso primero, y 21, inciso primero, de la Ley Orgánica Constitucional de Bases
Generales de la Administración del Estado, se encarga de señalar que el Estatuto Administrativo
se aplica directamente al personal de los Ministerios, de las Intendencias, de las Gobernaciones y
los servicios públicos centralizados y descentralizados creados para el cumplimiento de la función
administrativa.
Conforme a ese mismo articulo 1, por el contrario, el Estatuto Administrativo no se aplica a las
instituciones que menciona el inciso segundo del artículo 21 de la citada ley 18575, esto es, a la
Contraloría General de la República, al Banco Central, a las Fuerzas Armadas y a las Fuerzas de
Orden y Seguridad Pública, a los Gobiernos Regionales, a las Municipalidades, al Consejo Nacional
de Televisión y a las empresas públicas creadas por ley. Estos Organismos e Instituciones se rigen
por las normas constitucionales pertinentes y por sus respectivas leyes orgánicas constitucionales o
de quórum calificado, según corresponda.
El Estatuto Administrativo, de acuerdo con su artículo 162, en concordancia con el inciso segundo del
artículo 43 de la Ley Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración del Estado,
rige supletoriamente a aquellos funcionarios que ejercen profesiones y actividades a los cuales se
les aplican estatutos especiales, en todas las materias no reguladas por estos cuerpos estatutarios.
Hay también aplicación supletoria del Estatuto Administrativo, cuando leyes especiales así lo
determinan, como por ejemplo, el artículo 21 del DFL 7, de 1980, del Ministerio de Hacienda, Ley
Orgánica del Servicio de Impuestos Internos, el cual señala que las relaciones jurídicas que vinculan
al Estado con los funcionarios de ese Servicio, se regularán por las normas contenidas en dicha Ley
Orgánica y supletoriamente por el DFL 338, de 1960, o por la legislación que lo reemplace.
Respecto del Código del Trabajo, el Estatuto Administrativo no consulta disposición alguna que
permita a los organismos sujetos a sus normas contratar personal conforme a dicho Código, sin
perjuicio de lo cual, la jurisprudencia administrativa ha reconocido que como la ley 18834 sólo derogó
el DFL 338, de 1960, mantuvo vigentes aquellas leyes especiales que aplican las normas del Código
Laboral a servidores de la Administración del Estado.
ARTICULO 2•.- Los cargos de planta o a contrata sólo podrán Ley 18.834, Art. 2•.
corresponder a funciones propias que deban realizar las
instituciones referidas en el articulo. 1 •. Respecto de las demás
actividades, aquéllas deberán procurar que su prestación se·
efectúe por el sector privado.
Interpretación:
·La autorización que el articulo 34 (actual articulo 37) de la ley 18575 y la ley 18803 dan a las
instituciones del sector público para entregar la ejecuCión de acciones de apoyo a sus funciones
a entidades de derecho privado a través de contratos, no puede, de acuerdo con los principios
básicos .del Derecho Administrativo, recaer en actividades correspondientes al desarrollo de tareas
propias, pues con ello se estaría confiriendo a particulares competencia para realizar funciones
que el organismo público se encuentra ol)ligado a cumplir y que, conforme con el articulo 60 (actual
artículo 63), W 14, de la Constitución Política, en relación con el artículo 62 (actual articulo 65),
inciso cuarto, W 2, de la Carta Fundamental, sólo pueden determinarse porvi'a legislativa (22540190,
25987190, 26965196, 30147196).
Para precisar la función principal del empleado dentro de las tareas que se le encomiendan, ha de
estarse al mayor o menor tiempo que le demanda el dese'mpeño de ellas durante el mes calendario
(26932194).
Las funciones propias que la ley ha radicado en cada uno de los servicios públicos deben desarrollarlas
sus propios empleados, sean éstos de planta o a contraía y, excepcionalmente, por las personas
contratadas sobre la base de honorarios (23325198).
Sólo pueden ser objeto de los convenios a que se refiere el artículo 1 de la ley 18803, aquellas
funciones o tareas que sean auxiliares o complementarias para el ejercicio de las potestades públicas
del organismo respectivo, de manera tal que la ejecución de las labores encomendadas no puede
significar que la entidad contratada asuma el desarrollo de las potestades públicas que la ley entrega
a los órganos de la Administración del Estado. En este sentido, de acuerdo con el articulo 2 de
la ley 18834, todas las labores que por su naturaleza son inherentes a la función pública, deben
desarrollarse por los servidores de planta o a contrata del respectivo organismo y, excepcionalmente,
por personas contratadas a honorarios, según lo establecido en el artículo 10 (actual-artículo 11) de
ese cuerpo legal. Por ello, respecto de la situación planteada por la Unidad de Análisis Financiero,
resulta necesario señalar que los servicios que se pretende contratar, esto es, la administración de
personal y la contabilidad del organismo, no constituyen acciones de apoyo de aquéllas a que se
refiere la ley 18803, toda vez que esas labores importan el desarrollo de potestades públicas· que
el ordenamiento legal encarga al organismo ocurrente. A mayor abundamiento, conforme con lo
dispuesto en el artículo 31 de la ley 18575 se desprende que la administración de cada servicio
público, aspecto que abarca, entre otras materias, tanto el personal como la contabilidad, es una
potestad inherente a cada organismo de la Administración del Estado, que debe ser desarrollada por
intermedio de sus servidores (7023/05).
Concordancias: Arts. 9 y 37 de la LOCBGAE; Ley 18803, que autoriza a los Servicios Públicos que
indica para contratar acciones de apoyo a sus funciones que no correspondan al ejercicio mismo de
sus potestades, y su Reglamento fijado por el Decreto 21, de 1990, del Ministerio de Hacienda; inciso
segundo del Art. 34 de la ley 19886, Ley de Bases sobre Contratos Administrativos de Suministros
y Prestación de Servicios y Arts. 105 a 107 del Reglamento de esta ley, fijado por Decreto 250, de
2004, del Ministerio de Hacienda, disposiciones que regulan los Convenios para la prestación de
servicios personales con personas juridicas, y Art. 108, los Convenios con personas naturales; Art.
16 del Dl. 1.608, de 1976, y Arts. 4 y 1O del EA; 2, inciso primero, del EAM.
Comentarios:
El Informe Técnico del Ministerio del Interior que se acompaña al Mensaje del proyecto, expresa que
sólo las labores propias de la respectiva institución pueden corresponder a los empleos de planta o
a contrata, por lo que aquellas actividades consideradas no esenciales para el directo cumplimiento
de las funciones del servicio debe procurarse que se lleven a cabo por el sector privado, cuyas
relaciones laborales se regirán por el Código del Trabajo.
La determinación de las "funciones propias" a que se refiere la norma, según señala el Informe de
la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno y que constituye el ejercicio mismo de la función
pública, corresponde establecerla a la ley orgánica de cada institución, las cuales no podrán ser
desempeñadas por el sector privado.
ARTICULO 3•.- Para los efectos de este Estatuto el significado legal Ley 18.834, Art. 3°.
de los términos que a continuación se indican será el siguiente:
a) Cargo público:
Es aquél que se contempla en las plantas o como empleos a
contrata en las instituciones señaladas en el artículo 1 ', a través
del cual se realiza una función administrativa.
b) Planta de personal:
Es el conjunto de cargos permanentes asignados por la ley a cada
institución, que se conformará de acuerdo a lo establecido en el
artículo s·.
e) Empleo a contrata:
Es aquél de carácter transitorio que se consulta en la dotación de
una institución.
d) Sueldo:
Es la retribución pecuniaria, de carácter fijo y por períodos iguales,
asignada a un empleo público de acuerdo con el nivel o grado en
que se encuentra clasificado.
e) Remuneración:
Es cualquier contraprestación en dinero que el funcionario tenga
derecho a percibir en razón de su empleo o función, como, por
ejemplo, sueldo, asignación de zona, asignación profesional y
otras.
f) Carrera funcionaria:
Es un sistema integral de regulaciór del empleo público, aplicable
al personal titular de planta, fundado en principios jerárquicos,
profesionales y técnicos, que garantiza la igualdad de oportunidades
para el ingreso, la dignidad de la función pública, la capacitación
y el ascenso, la estabilidad en el empleo, y la objetividad en las
calificaciones en función del mérito y de la antigüedad.
Interpretación:
Letra a)
Los cargos públicos se ubican en las respectivas plantas según la jerarquía y funciones a ellos
asignados y a los requisitos exigidos para su desempeño, correspondiéndoles el grado que posee
un sueldo determinado (25389195).
Concordancias: Arts. 4, 5, 6, 9, 10, 12, 14 y ss., 17 y ss. del EA; 5, letra a), del EAM.
Letra b)
El mecanismo de subrogación opera únicamente respecto de cargos existentes, por lo que no puede
delegarse el ejercicio de funciones en calidad de subrogante a quien reemplaza un cargo de jefatura
que no está contemplado en la planta del servicio, debiendo considerarse ese desempeño sólo como
un cometido funcionario. (24544/93, 19524/96, 1810/97).
Para acceder al programa especial de becas Presidente de la República para estudios de postgrado
del artículo 27 de la ley 19595, se requiere poseer la calidad de funcionario de planta de un servicio,
puesto que al emplear esa ley la expresión "cargos de las plantas o escalafones", se refiere a quienes
ocupan empleos permanentes en las plantas del servicio respectivo, sin que proceda incluir a. los
empleados a contrata (24902/99).
Concordancias: Arts. 4, 5, 6 y 7 del EA; 2, inciso primero; 5, letra b), del EAM; Ley de Transparencia
de la Función Pública y de Acceso a la Información de la Administración del Estado, aprobada por el
articulo primero de la ley 20285, sobre Acceso a la Información Pública. El artículo transitorio de la
ley 20285 dispone que este texto legal entrará en vigencia ocho meses después de su publicación
en el Diario Oficial, hecho que aconteció el 20 de agosto de 2008.
Letra e)
La finalidad del empleo a contrata es complementar los cargos permanentes que conforman la planta
de personal de un servicio segÚn sus-necesidades y duran hasta el 31 de diciembre de cada año,
salvo que se prorroguen con treinta días de anticipación a lo menos (32115/89, 10929/90, 680/91,
15040/91,24121/91, 28375/92).
Los empleos a contrata son por esencia de carácter transitorio y los funcionarios que los sirven en
esta calidad carecen del derecho al ascenso del que disfruta el personal de planta (9287/90).
No pueden asignarse funciones de jefatura a los contratados, ya que éstas deben ser desempeñadas
por funcionarios de planta y no por quienes prestan servicios transitorios sin pertenecer a la
organización estable de la entidad (6131/91, 50170/99). ·
Excepcionalmente, cuando los servidores contratados están facultados, por mandato legal, para
desarrollar tareas de jefatura propias de los cargos de más alta jerarquía, no existe inconveniente
para que, cuando las circunstancias lo hagan necesario, integren las Juntas Calificadoras (35400/00,
28828/01).
Los funcionarios a contrata no pueden ser destinados, puesto que el inciso segundo del artículo
67 (actual artículo 73) de la ley 18834 alude expresamente a la observancia de la jerarquía en las
destinaciones que se ordenen y dichos servidores están marginados del ordenamiento permanente
del personal del servicio y de su estructura orgánica, factores que determinan la jerarquía o vínculo
jurídico que une a órganos en relación de superior a inferior (24374/90, 29644/90, 1770/97).
Concordancias: Arts. 9, 1O, 146, letra f), y 153 del EA; 2, incisos segundo, tercero, cuarto, quinto y
sexto; 5, letra f), del EAM.
Letra d)
La ley 18834 distingue entre sueldo y remuneración. Entiende por sueldo la retribución pecuniaria de
carácter fijo y por períodos iguales asignada a un empleo público según el.nivel o grado en que
El sueldo debe pagarse por mensualidades iguales y vencidas cualquiera sea la cantidad de días
que tenga el mes, debiendo considerarse cada período como una unidad permanente de 30 días
(6591/96).
Conforme a los artículos 89 (actual artículo 94) de la ley 18834 y 10 de la ley 10336, Jos empleados de
la Administración del Estado únicamente tienen derecho al sueldo y demás remuneraciones, desde el
instante en que se les comunica la total tramitación del decreto o resolución de nombramiento. Sólo
desde ese momento es posible proceder al pago retroactivo de Jos estipendios que correspondan
(16343/91, 20428/98, 17671/01 ).
A contar de la vigencia de la ley 18834, por mandato de su artículo 157 (actual artículo 163), ha
quedado derogado el DFL 338, de 1960, dejando así de regir la incompatibilidad entre sueldo y
pensión contenida en el artículo 172 de este último ordenamiento (28035/89, 31715/89, 1091/90).
Las sumas pagadas por planilla suplementaria constituyen una remuneración accesoria y, por
ende, no forman parte del sueldo del grado en el que se encuentra ubicado el empleado (23394/99,
24285/01).
No procede que la medida disciplinaria de multa se aplique únicamente en relación al sueldo del
afectado, porque dicha sanción se extiende a todos los emolumentos que el servidor percibe en
razón del cargo que ejerce (5636/90).
Conforme a los artículos 76 y 77 (actuales artículos 82 y 83) de la ley 18834, el subrogante tendrá
sólo derecho al sueldo del cargo que subroga cuando éste se encontrare vacante, si el titular del
mismo por cualquier motivo no gozare de él o la subrogación dure más de un mes, manteniendo
las demás remuneraciones asignadas a su propio empleo titular. La expresión "dicha remuneración"
que emplea el mencionado artículo 76 (actual artículo 82), debe entenderse necesariamente referida
al "sueldo" del empleo subrogado, como quiera que el término remuneración, según este articulo
3, letras d) y e), es un concepto genérico comprensivo del sueldo (14604/90, 19617/90, 6745/92,
10586/93, 5439/95).
Letra e)
Los nombramientos con asunción inmediata de funciones, según el articulo 14 (actual articulo 16),
inciso segundo, de la ley 18834, dan derecho al pago de remuneraciones desde el primer mes de
trabajo (13848/92).
Los funcionarios públicos, mientras gozan de licencias médicas o maternales, tienen derecho a
percibir el total de sus remuneraciones de cargo del empleador (20020/91, 5461/94, 6555/02).
Los servicios públicos pueden encomendar a una institución bancaria el pago de las remuneraciones
de su personal, mediante la celebración de un convenio por el cual se pondrían a disposición de
esta última los fondos respectivos, a través de un cheque o vale vista, recursos que, a su turno, la
misma entidad contratante ingresaría a cuentas corrientes o cuentas a la vista que cada funcionario,
voluntariamente, abriría también en ella, quienes podrían girar a través de cajeros automáticos o
directamente en las cajas del banco. Tampoco existe inconveniente en adoptar el mecanismo de
emisión del cheque por la misma entidad contratante en la medida que se trate de encomendarle a
ésta también un mero servicio para que cumpla el pago de las remuneraciones, expidiendo dicho
documento a favor de los servidores que en definitiva no accedan al sistema de apertura de cuenta
corriente o cuenta de ahorro en el ente bancario. En esta alternativa, el funcionario continuaría
recibiendo el pago de sus estipendios mediante cheque. Procede también que, en reemplazo del
cheque, el banco, dentro del cumplimiento de la prestación de servicios aludida, emita un vale vista
nominativo por el monto de la renta correspondiente, puesto que éste es un medio de pago utilizado
comúnmente en el ámbito bancario, instrumento que tiene el carácter de un verdadero pagaré a la
vista (27090/94, 18289/96,25712/96, 37441/96).
A diferencia de lo que ocurre con la subrogación, y de conformidad con el articulo 4 de la ley 18834,
se ha reconocido al suplente, cuando corresponde, el derecho a la remuneración asignada al cargo
(14604/90, 2868/98).
El concepto de remuneraciones que utiliza el articulo 93 (actual articulo 98), letra d), de la ley 18834,
sobre asignación por cambio de residencia, comprende todos aquellos emolumentos propios del cargo
que se asumirá o, en su caso, del empleo que sirve el funcionario objeto de una nueva destinación,
incluyéndose en ellos, cuando proceda, las bonificaciones de salud y pensiones establecidas por
las leyes 18566 y 18675, por cuanto constituyen remuneraciones propias del grado que posee un
servidor (26384/90, 13362/92).
El incremento previsional regulado por el articulo 2 del DL 3501, de 1980, si bien constituye una
remuneración ha sido establecido por el legislador con una finalidad muy especifica y limitada, cual
es compensar la mayor carga impositiva que afectó a los trabajadores dependientes del sector
público que continuaron afiliados a las antiguas cajas de previsión, permitiéndoles mantener el monto
liquido de sus rentas y servir de base para aplicar las cotizaciones pertinentes. Por consiguiente,
el aludido incremento, salvo norma expresa en contrario, debe ser excluido de la base de cálculo
de cualquier beneficio de origen legal que se determine en relación con las remuneraciones del
empleado (15898/89, 14977/91, 22611/03).
Los funcionarios que pasan a desempeñar un cargo de exclusiva confianza conservando la propiedad
de aquél de que sean titulares y, conforme al articulo 82 (actual articulo 88), inciso tercero, de la ley
18834, optan por las remuneraciones de este último, debe pagárseles la que está contemplada por
la ley respecto de dicha plaza, la cual es de cargo del Servicio donde se encuentra considerado el
respectivo empleo. Ello, porque es a esa institución a la que se le entregaron por la vi a presupuestaria
los recursos correspondientes, de modo que la remuneración de opción no puede pagarla un
organismo distinto (327/91, 25772/94).
Procede pagar remuneraciones a un funcionario que luego del cese de funciones continúa prestando
servicios con conocimiento y anuencia de la autoridad, en razón del principio retributivo que caracteriza
el desempeño de cualquier función pública, cuya vulneración significaría un enriquecimiento sin
causa para la Administración (18672/91, 30697/94).
Según la jurisprudencia administrativa recaída en el articulo 57 del DFL 338, de 1960, norma
semejante a la del artículo 91 (actual artículo 96) de ley 18834, existen tres tipos de descuentos a
las remuneraciones: los ordenados por ley, los autorizados por una norma de rango legal y los que
el interesado solicita por escrito, sujetos estos últimos a la conformidad de la jefatura e impedidos de
exceder del15% de la remuneración (24999/91, 29053/92).
Las horas extraordinarias, la asignación por cambio de residencia y los viáticos no constituyen
remuneración, porque no son emolumentos que se paguen en forma habitual y permanente
(24999/91, 39591/97, 42051/99).
Los fondos reservados constituyen recursos previstos en el presupuesto y que se ponen a disposición
de los Servicios para su inversión en fines de carácter público, no pudiendo entenderse, por ende,
incorporados en las remuneraciones que como retribución de sus funciones recibe un servidor, pues
no poseen tal carácter (8717/93 ).
La bonificación del artículo 3 de la ley 19490, es propiamente una remuneración. El hecho que se
pague cada tres meses y que no sea base de cálculo para ningún otro beneficio pecuniario no la
priva de ese carácter (17505/01 ).
Letra f)
La definición sobre carrera funcionaria que consulta esta norma, está limitada por el artículo 6 de
la ley 18834, según el cual dicha carrera se inicia con el ingreso en calidad de titular a un cargo de
la planta, y se extiende hasta los cargos de jerarquía inmediatamente inferior a los de exclusiva
confianza establecidos en el artículo 7 de ese mismo texto (18297/90, 26043/00).
La carrera funcionaria que se recorre normalmente por la vía del ascenso (a partir del 23 de junio de
2003, fecha de vigencia de la ley 19882, la regla general ha pasado a ser la promoción), se relaciona
con las plantas de los Servicios, las cuales contienen el conjunto de cargos permanentes asignados
a cada institución, sin que resulte relevante el lugar o establecimiento en que el personal cumple sus
labores (3323/92, 21639/01 ).
Es improcedente designar en una función de jefatura a un funcionario que posee una jerarquía
inferior a otro, que como consecuencia de ello, quedaría bajo su mando, porque si bien es posible
asignar funciones de jefatura al empleado que se considera más idóneo para cumplirlas, tratándose
de cargos que no son de planta, dicha designación debe respetar siempre el principio jerárquico,
conforme al cual un servidor que ocupe una plaza en determinado nivel según su categoría o grado,
no debe quedar sometido a otro de menor jerarquía, la que debe estar determinada por la respectiva
posición en el correspondiente escalafón (28845/92, 21938/93, 25963/94).
Los contratados se encuentran marginados de la carrera funcionaria, pues este precepto indica que
esa carrera es un sistema integral de regulación del empleo público aplicable al personal titular de
planta (29914/99).
Los cargos de exclusiva confianza de un servicio pueden proveerse por el jefe superior del mismo
sin sujeción a las normas que regulan la carrera funcionaria, toda vez que no se comprenden en ella
(26043/00).
Comentarios:
El propósito de esta disposición es definir algunos términos empleados con frecuencia por el Estatuto
Administrativo. También otras de sus normas precisan el significado o la naturaleza de diversas
figuras jurídicas como son los artículos 4, 26, 42, 43, 54, 102, 108, 111, 115, 122, 123, 124, 125,
147, a las que, en su caso, el intérprete debe atenerse por mandato del artículo 20 del Código Civil,
cuyo texto refundido, coordinado y sistematizado fue fijado por el DFL 1, de 2000, del Ministerio de
Justicia.
De acuerdo con los artículos 63 Ws. 4, 14 y 20, y 65, inciso cuarto, Ws. 2 y 4, de la Constitución
Política de la República, todas las materias a que se refiere el artículo 3 del Estatuto Administrativo,
deben ser reguladas mediante preceptos de rango legal, de iniciativa exclusiva del Presidente de la
República.
Fluye de la definición de "cargo público", que tanto los empleos de planta como a contrata, no
obstante su diversa naturaleza jurídica, suponen el ejercicio de funciones públicas.
Las plantas de personal, por mandato del artículo 5 del Estatuto Administrativo, han quedado
circunscritas a cinco categorías, dentro de las cuales la ley ordena los cargos permanentes que
asigna a cada institución.
Los "empleos a contrata", a diferencia de los de planta, suponen transitoriedad de la función, pero su
ejercicio implica someterse a todas las normas generales aplicables a los funcionarios públicos.
Las remuneraciones pueden clasificarse desde distintos puntos de vista: según sus causales de
procedencia, en personales y del cargo; según su imponibilidad, en imponibles y no imponibles;
La definición de "carrera funcionaria", que se consulta en la letra f) del articulo 3, es amplia, pero debe
entenderse limitada por el articulo 6 del Estatuto Administrativo, el cual establece que se iniciará con
el ingreso en calidad de titular a un cargo de planta, y se extenderá hasta los cargos de jerarquía
inmediatamente inferior a los de exclusiva confianza, como asimismo, por el articulo 5 del Estatuto,
disposición que previene que para los efectos de la carrera funcionaria, cada institución sólo podrá
tener las plantas de personal que indica.
Se desprende de los artículos 3, letra f), 6 y 7 de la ley 18834 y 49 de la ley 18575, las diferencias
entre los cargos de carrera y los de exclusiva confianza, tales como la estabilidad en el empleo y el
derecho a ser promovido, características que estos últimos no poseen.
Con respecto al derecho a ser promovido conviene destacar lo expresado en el Rol W 239, de
1996, considerando 8°, por el Tribunal Constitucional, en el sentido que la carrera funcionaria en
la Administración del Estado, es un derecho fundamental de los funcionarios públicos, e "implica
para que sea operativa, según lo dispone la propia Carta Fundamental, la estabilidad en la función
o empleo; la promoción, es decir, la posibilidad de ir ascendiendo, grado a grado, en ese cursus
honorium que es la carrera funcionaria, y que conlleva el derecho a que se respeten las reglas
del ascenso; la calificación en el desempeño de sus cargos, que hace posible la promoción; y la
capacitación y perfeccionamiento, que permiten un mejor desempeño en la función, una mejor
calificación funcionaria y la consecuencia! posibilidad de promoción".
ARTICULO 4•.- Las personas que desempeñen cargos de planta Ley 18.834, Art 4•.
podrán tener la calidad de titulares, suplentes o subrogantes.
Son suplentes aquellos funcionarios designados en esa calidad Ley 19.154, Art. 2•, 1.
en los cargos que se encuentren vacantes y en aquellos que por
cualquier circunstancia no sean desempeñados por el titular,
durante un lapso no inferior a 15 dias.
El suplente tendrá derecho a percibir la remuneración asignada al Ley 19.154, Art. 2•, 1.
cargo que sirva en tal calidad en el caso que éste se encontrare
vacante; cuando el titular del mismo por cualquier motivo no goce
de dicha remuneración, o cuando el titular haga uso de licencia
médica. Con todo, en el caso de licencias maternales y licencias
médicas que excedan de 30 dias, la designación podrá efectuarse
con la remuneración correspondiente a un grado inferior al del
cargo que se suple.
En el caso que la suplencia corresponda a un cargo vacante, ésta Ley 18.834, Art. 4•.
no podrá extenderse a más de seis meses, al término de los cuales
deberá necesariamente proveerse con un titular.
Siempre que el financiamiento se enmarque dentro de los recursos Ley 18.959, Art. 6·.
presupuestarios asignados al respectivo Servicio, no regirán Ley 19.154, Art. z•, 1.
las limitaciones que establecen los incisos tercero y cuarto de
este articulo, respecto de las suplencias que se dispongan en
unidades unipersonales; ni en aquellos servicios que realizan
sus actividades ininterrumpidamente durante las 24 horas del dia,
incluso sábados, domingos y festivos.
El nombramiento del suplente sólo estará sujeto a las normas de Ley 18.834, Art. 4•.
este Título.
Interpretación:
Inciso 1•
De acuerdo con esta norma, los empleos de planta sólo pueden servirse como titulares, suplentes
o subrogantes, de manera que, desde la entrada en vigencia del Estatuto Administrativo, esto es,
a partir del 23 de septiembre de 1989, han quedado suprimidos los cargos interinos (15394190,
2033197' 24811198).
Inciso 2°
Cuando la ley que ordena un encasillamiento no señala el procedimiento para determinar qué
funcionarios deben ser nombrados en las plantas en el caso que existan más contratados y
contratados a honorarios asimilados a grado que cargos vacantes, la autoridad llamada a hacer
esas designaciones puede decidir libremente a quien nombra, con la sola salvedad de observar las
reglas en cuanto a grado y requisitos exigidos para su desempeño (3670/90).
Una funcionaria a contrata designada previo concurso, para servir como titular un cargo de grado
inferior, no tiene derecho a que se le pague por planilla suplementaria la diferencia de remuneraciones
que se le produce, porque al haber aceptado el aludido cargo titular, perfeccionó legalmente esa
designación (32053/89).
Inciso 3"
El requisito de 15 di as a que alude esta norma concierne al tiempo de ausencia del titular y no al de
duración de la suplencia, de modo que nada obsta para la designación de personal como suplente
por periodos inferiores a 15 di as, siempre que la ausencia del titular sea por esos 15 di as o más
(30194/94).
Como los cargos adscritos consultados en el articulo 20 transitorio del Estatuto Administrativo
(derogado por el articulo septuagésimo de la ley 19882) se extinguen de pleno derecho cuando sus
titulares dejan de servirlos, no procede respecto de ellos la suplencia de cargos (31277/92).
El servidor que ha sido destinado al extranjero, no ocupa por esa circunstancia un cargo diverso ni
deja de servir la plaza para la cual fue nombrado, por cuanto, aun cuando se le asignen en el exterior
funciones especificas distintas de las que efectuaba en el país, por aplicación de lo dispuesto en
el inciso tercero del articulo 46 de la ley 18575, Orgánica Constitucional de Bases Generales de la
Administración del Estado, debe entenderse que tales empleados han sido destinados a cumplir
funciones propias del empleo para el cual han sido designados -sea directivo, profesional o técnico-,
dentro del órgano o servicio público correspondiente. Por ende, no encontrándose vacante la
plaza de que se trata, ni impedido su titular de desempeñarla por más de 15 días, no corresponde
el nombramiento en aquélla de una persona en calidad de suplente, no obstante que las labores
especificas que desarrolle efectivamente en el exterior sean diferentes. Respecto de la situación
de hecho que se produciría al destinarse personal al extranjero y, por consiguiente, reducirse el
número de personas que sirven sus cargos en el país, con el eventual riesgo a la observancia del
principio de continuidad del servicio público, las tareas que los empleados destinados al extranjero
-sean directivos, profesionales o técnicos- dejan de desarrollar en el país, pueden ser asignadas
a otros servidores del mismo organismo, por la vía de la encomendación de funciones (32357/02
-complementado por el 80/03-).
Inciso 4"
La suplencia puede ser servida por un funcionario del Servicio, en cuyo caso tendrá derecho a percibir
la remuneración del cargo que suple si éste se encuentra vacante, cuando el titular del mismo no
goce de dicha remuneración, o cuando éste haga uso de licencia médica. De lo contrario, únicamente
accederá a las rentas propias de la plaza de la que es titular. También tiene derecho a mantener este
último empleo. En cambio, si una persona ajena a la Administración ejerce en calidad de suplente,
para lo cual requiere cumplir con los requisitos de ingreso previstos en el articulo 11 (actual articulo
12) de la ley 18834, tiene derecho a tales estipendios sin condicionamiento alguno, en virtud del
principio de enriquecimiento sin causa (13483/92, 17846/96, 27525/97,36480/97, 24232/04).
El funcionario que es nombrado como suplente percibirá las remuneraciones del empleo que
desempeña en tal calidad conforme a los artículos 4 y 82 (actual artículo 88) de la ley 18834, siempre
que esos emolumentos sean superiores a los que le corresponden en su cargo titular (17027/91,
25772/94).
Si la persona que se desempeña como suplente reúne los requisitos de la ley 19553, tendrá derecho
a percibir las asignaciones contempladas en dicha norma (28529/04).
Las funciones de reemplazo transitorio implican ejercer el empleo de que se trate en calidad de
suplente en los términos del artículo 4 de la ley 18834. Una designación de esta naturaleza supone
un vínculo esencialmente transitorio con la Administración, habida cuenta que únicamente procede
en ausencia temporal del titular de un cargo, o mientras éste se provee, de manera, pues, que
entender que una nominación como suplente puede extenderse más allá del plazo correspondiente,
aún en el caso de una situación de embarazo, conllevaría otorgar a la funcionaria una calidad que el
legislador no ha previsto. En otras palabras, no obstante que las reglas de protección a la maternidad
alcanzan a las funcionarias suplentes, la inamovilidad por tal motivo se mantendrá mientras dura
dicho desempeño, ya que en el supuesto de terminar la causa que impide a la titular reasumir el
ejercicio de la plaza correspondiente, debe entenderse que es la propia ley la que pone término a
las labores de la suplente. El criterio analizado descansa en el principio de que los ceses de servicio
que dispone la ley, como es el caso de los personales que se desempeñan como suplentes, operan
con prescindencia de las normas de inamovilidad en el empleo contenidas en textos estatutarios o en
otros preceptos legales, generales o especiales, como quiera que esas reglas sobre estabilidad solo
juegan en lo que atañe a la eventual facultad de poner término a funciones actuales, pero no tienen
cabida en los casos en que, como se ha señalado, el alejamiento del servidor está regulado en la ley.
Por ello, la funcionaria que se encuentra en estas condiciones no está amparada por la inamovilidad
derivada del fuero maternal y no le ha asistido el derecho a gozar de inamovilidad más allá del
plazo fijado para dicho desempeño en la calidad indicada, de modo, entonces, que el empleador
no se encontró en el imperativo de mantener el vínculo laboral (28823/92, 40934/95, 41945/97,
5218/00, 120/03, 2203/05 -complementado por el 32531/05- 55424/07).
Inciso 5•
Cuando la suplencia corresponda a un cargo vacante, éste no podrá extenderse a más de seis meses,
al término de los cuales deberá necesariamente proveerse con un titular, toda vez que transcurrido
dicho lapso se agota la posibilidad de otra designación en esa calidad (32029/93).
En la suplencia la autoridad que hace la designación no tiene atribuciones para disponer su prórroga,
pues, ya sea que aquélla opere por vacancia del cargo o por impedimento del titular, el nombramiento
en propiedad de un servidor o el reintegro del impedido, determina que no haya cargo que
desempeñar, extinguiéndose de hecho la suplencia. No obstante, nada impide que una vez concluida
una suplencia, el servidor que la ha desempeñado pueda ser nombrado en el mismo carácter, en
otro empleo también vacante, pues el inciso quinto del artículo 4 de la ley 18834 sólo restringe el
período en que un determinado empleo pueda permanecer sin ser provisto necesariamente con un
titular (41268/07).
Inciso 6"
Inciso 7"
Los suplentes tienen derecho, concurriendo los requisitos y formalidades pertinentes, a disfrutar de
feriado y permisos administrativos, porque dichos servidores, en cuanto a nombramiento, se rigen
por las disposiciones del Titulo 1 de la ley 18834, lo que no obsta a la aplicación de las normas sobre
tales-beneficios contenidas en su Titulo IV, como quiera que aquellos derechos funcionarios, al igual
que las obligaciones, son inherentes al desempeño de todo cargo público regulado por el Estatuto
Administrativo (9662/91, 41002/96, 10698/05).
El nombramiento del personal suplente sólo está sujeto a los preceptos del Titulo 1 del Estatuto
Administrativo, en los cuales no se establece un periodo máximo para servir una suplencia cuando
esa designación se ordena para un cargo que por cualquier circunstancia no sea desempeñado por
el titular durante un lapso no inferior a 15 días, por lo que la misma puede disponerse mientras dure
esa ausencia o por un periodo determinado, o mientras sean necesarios los servicios de quien se
designa, pudiendo en el evento de estas dos últimas alternativas, efectuarse un nuevo nombramiento
en dicha calidad para mantener la continuidad de la función pública (27997/93, 28561/00). En la
especie, la recurrente fue nombrada mientras fueran necesarios sus servicios o mientras dure la
ausencia del titular y, en tales condiciones, el Servicio podía válidamente, para los efectos de su cese,
ejercer cualquiera de ambas opciones, resolviendo en definitiva aplicar la primera de ellas, actuación
que se ajusta a derecho. Cuanc:l se dispone el término de funciones porque la autGridad estima
que los servicios del empleado no son necesarios, el alejamiento de éste debe producirse a contar
de la notificación del total trámite del documento que lo haya prescrito. Luego, si la toma de razón
de la resolución que puso término a su nombramiento ocurrió el 2 de julio de 2003, procede que la
recurrente sea notificada de tal circunstancia, debiéndose producir legalmente su desvinculación
del Servicio en el momento en que tenga lugar dicha circunstancia, sin que pueda estimarse como
idónea para estos fines la carta que, según el Servicio, se le enviara a la afectada con fecha 26 de
mayo de 2003, comunicándole que se había decidido poner término a su nombramiento a contar
del 1 de junio del mismo año. Si bien el Servicio actuó dentro de sus atribuciones al disponer el
término de los desempeños como suplente de la interesada, debe proceder a arbitrar las medidas
tendientes a pagar las remuneraciones de la peticionaria por el lapso comprendido entre el1 de junio
de 2003, data en que fue alejada físicamente de su trabajo, y la fecha en que sea notificada de la
total tramitación de la resolución que dispuso su cese de funciones (46693/03).
La persona designada suplente cesa de pleno derecho y por el solo ministerio de la ley al reasumir
el titular del empleo que suple, sin que sea necesario un acto formal de la autoridad disponiendo el
cese (6584/04).
Inciso 8°
Existe subrogación cuando el funcionario que asume las labores del servidor ausente pertenece
al mismo escalafón, pero si los cargos integran escalafones diversos, se produce solamente una
asignación de funciones, lo que no da derecho a diferencia alguna de sueldo (25442/91).
Comentarios:
El articulo 4 se refiere a las distintas calidades que pueden tener quienes se desempeñan en cargos
de planta. El legislador optó por suprimir la figura del interinato que consultaba el articulo 7 del
anterior Estatuto Administrativo, cuyos supuestos fueron incluidos en la suplencia. Sólo el personal
titular puede ocupar y mantener en propiedad un cargo público.
Cuando el suplente es una persona ajená a laAdministración, sólo tiene derecho a las remuneraciones
del cargo que suple.
La suplencia no procede con efecto retroactivo, salvo que se hubiere ordenado la asunción inmediata
por motivos de buen servicio. Tampoco se aplica en los cargos o empleos a contrata.
La autoridad puede designar, en cualquier momento, al titular del cargo vacante que esté siendo
servido por un suplente y poner término a los servicios de este último, a menos que su nombramiento
haya sido por un período determinado.
La subrogación también es un medio para mantener la continuidad del servicio público, y consiste en
el reemplazo que se provee en forma automática de los funcionarios de planta, titulares o suplentes,
que se encuentren ausentes temporal o definitivamente.
Esta modalidad de reemplazo opera sin orden previa de autoridad, dentro del mismo Servicio,
respetando la jerarquía de los funcionarios y constituye un deber para el empleado, quien asume
la plenitud de las atribuciones del cargo del titular ausente o impedido de desempeñarlo. No existe
disposición alguna que autorice a un funcionario subrogar a otro que se desempeñe en un organismo
diverso.
Las causas que pueden dar lugar a la subrogación son, por ejemplo, el feriado legal, las licencias,
los permisos, las comisiones de servicio, el cometido funcionario o que se trate de un asunto en que
el empleado no deba intervenir por mandato legal.
El subrogante no tiene derecho al sueldo del cargo que desempeña en calidad de tal, a menos
que éste se encontrare vacante o si el titular no goza de él, en cuyo caso mantendrá las demás
remuneraciones del empleo de que es titular. No procede la subrogación de cargos que no sean de
planta.
ARTICULO 5".- Para los efectos de la carrera funcionaria, cada Ley 18.834, Art. 5".
institución sólo podrá tener las siguientes plantas de personal:
de Directivos, de Profesionales, de Técnicos, de Administrativos
y de Auxiliares.
Interpretación:
Este articulo reconoce, para los fines de la carrera funcionaria, sólo las cinco plantas genéricas
que indica, estableciendo respecto de ellas un orden jerárquico, pero sin instaurar requisitos ni fijar
posiciones relativas en razón de determinadas profesiones u oficios (18647192, 6764197).
Los escalafones definidos en este precepto estatutario consisten en una agrupación objetiva y
abstracta de los diversos empleos que conforman la planta de personal de un determinado servicio,
constituyendo una linea jerárquica de promoción, a través de la cual se hace efectivo el sistema de
ascenso (35677102).
Conforme a los incisos tercero y cuarto del articulo 1 transitorio del Estatuto Administrativo, tratándose
de plantas y escalafones que no hayan sido fijados por ley, la autoridad respectiva debe adecuarlos
a lo dispuesto en el articulo 5, y mientras ello no se efectúe, los actuales escalafones se mantendrán
vigentes (40352194, 2753199).
El proceso de adecuación de plantas de los servicios a que ha dado lugar este precepto, sólo ha
podido significar que los .cargos de los antiguos escalafones se incorporen a las nuevas plantas
según la naturaleza que invistan, sin que puedan introducirse modificaciones en cuanto a su número
y grado, ni crear nuevas plazas (31461190).
El orden jerárquico que este precepto establece en relación con las plantas que consulta, obliga a
que cuando exista igualdad de grado remuneratorio entre dos o más funcionarios, deba preferirse,
para integrar la Junta Calificadora, a quien ocupe un cargo en la planta directiva (29803101).
Esta disposición no precisa qué labores deben desarrollar los funcionarios de las plantas que
establece ni describe sus funciones como tampoco las identifica con un oficio o especialidad, como
acontecía con el DFL 90, de 1977, del Ministerio de Hacienda, cuyo texto refundido, coordinado y
sistematizado fuera fijado por el decreto (DFL) 305, de 1980, de esa Secretaria de Estado. Por tal
motivo, quienes se encuentran adscritos a la planta de auxiliares solo pueden desempeñar tareas de
orden subalterno o de servicios menores, es decir, trabajos que por su naturaleza no correspondan
a los funcionarios pertenecientes a los demás escalafones previstos en aquella normativa. Resulta
necesario anotar que la función, esto es, el contenido del empleo, la actividad o labor que en él debe
desarrollarse, se vincula a la competencia u órbita de atribuciones que corresponde a cada servidor
público, la cual, en la práctica, se traduce en la denominación que tenga el cargo que ocupa en la
planta institucional, sea en calidad de titular o a contrata (29953193, 262195, 33788101, 52685103,
47633106).
Comentarios:
Esta disposición establece cinco plantas genéricas de personal con el objeto de "facilitar la promoción
en toda la linea del ordenamiento respectivo y no como ocurría antes de dictarse el nuevo Estatuto
Administrativo, que los ascensos se limitaban a un reducido número de cargos en cada escalafón de
especialidad" (Informe de la Secretaria de Legislación de la Junta de Gobierno).
ARTICULO 6°.- La carrera funcionaria se iniciará con el ingreso Ley 18.834, Art. 6°.
en calidad de titular a un cargo de la planta, y se extenderá hasta
Jos cargos de jerarquía inmediatamente inferior a Jos de exclusiva
confianza.
Interpretación:
La carrera funcionaria, definida en términos amplios por el articulo 3, letra f), del Estatuto Administrativo,
se encuentra delimitada por este artículo 6, según el cual aquélla se inicia con el ingreso en calidad de
titular a un cargo de planta, extendiéndose hasta los puestos de jerarquía inmediatamente inferior a
los de exclusiva confianza establecidos en el articulo 7 del mismo texto legal (18297/90, 26043/00).
Concordancias: Arts. 43 y ss. de la LOCBGAE; 3, letra f), 4, 5, 7, 14 y 17 y ss. del EA; 8° del
EAM.
Comentarios:
La norma del artículo 6 del Estatuto Administrativo determina la extensión de la carrera funcionaria,
cuyo contenido permitirá, a través del perfeccionamiento y esfuerzo, que el funcionario que ingrese
a los grados y especialidades inferiores pueda alcanzar las posiciones más elevadas y de mayor
responsabilidad en una institución (Informe Técnico del Ministerio del Interior, acompañado al
Mensaje del Ejecutivo).
De acuerdo con los artículos 14 y 53 del Estatuto Administrativo la provisión de los cargos se
efectuará mediante nombramiento o promoción. La promoción se efectuará por concurso interno
en las plantas de directivos de carrera, profesionales, fiscalizadores y técnicos y por ascenso en las
plantas de administrativos y de auxiliares.
ARTICULO 7°.- Serán cargos de la exclusiva confianza del Ley 19.154, Art. 2", 2.
Presidente. de la República o de la autoridad facultada para Ley 18.834, Art. 7".
efectuar el nombramiento:
b) En Jos Ministerios, Jos Secretarios Regionales Ministeriales Ley 19.882, Art. vigésimo
y Jos Jefes de División o Jefaturas de niveles jerárquicos . si!ptimo 1) a).
equivalentes o superiores a dichas jefaturas, existentes en la
estructura ministerial, cualquiera sea su denominación; ·
e) En Jos servicios públicos; /os jefes superiores de Jos servicios,· Ley 19.154, Art. 2", 2.
Jos subdirectores, Jos directores regionales o jefaturas de Ley 19.882, Art. vigésimo
niveles jerárquicos equivalentes o superiores a dichas jefaturas, séptimo 1) b).
existentes en la estructura del servicio, cualquiera sea su
denominación.
Se exceptúan los rectores de las Instituciones de Educación Ley 19.154, Art. 2", 2.
Superior de carácter estatal, los que se regirán por la Ley
Orgánica Constitucional de Enseñanza y los estatutos orgánicos
propios de cada institución.
Interpretación:
Aun cuando la ley otorgue a la autoridad una facultad privativa y excluyente, es decir, discrecional para
poner término a los servicios de un funcionario público, los actos administrativqs en que se traduce su
ejercicio deben cumplir con la exigencia derivada del principio de juridicidad( en un .concepto amplio
y moderno, de tener una motivación, esto es, contener las circunstancias, el fundamento y ·raciocinio
que justifica la adopción de dicha medida, y no obedezcan al mero capricho de esa autoridad, pues
en tal caso resultarían arbitrarios y, por ende, ilegítimos. Además, la necesidad jurídica en que
se encuentra la Administración de motivar los actos que corresponden al ejercicio de potestades
discrecionales, tiene por objeto asegurar que sus actos no se desvíen del fin considerado por la
normativa que confiere las respectivas atribuciones, que cuenten con un fundamento racional y se
encuentren plenamente ajustados a las disposiciones constitucionales y legales vigentes, lo cual
impide establecer diferencias arbitrarias entre personas que se encuentran en una misma siíuación,
cautelándose de este modo el principio de igualdad ante la ley previsto en el articulo 19, w· 2, de la
Constitución Política (23114/07. Reconsidera toda jurisprudencia en contrario).
·Inciso 1°
las normas sobre responsabilidad administrativa, ya que las leyes 10336 y 18834 no los excluyen de
ella (28710/90, 15461/91, 3679/92,5141/97, 3837/01).
Los articulas 2 transitorio de la ley 18972 y 20 transitorio del Estatuto Administrativo (actualmente
derogados por el artículo septuagésimo de la ley 19882), contemplaban el derecho de opción para
continuar desempeñándose en un cargo del mismo grado, en extinción (cargo adscrito), o cesar
en funciones y recibir una indemnización, para aquellos servidores de planta que, con motivo de la
modificación introducida a los artículos 51 (actual articulo 49) de la ley 18575 y 7 de la ley 18834,
pasaron a tener la calidad de exclusiva confianza a partir del 1O de marzo de 1990 . No conserva
este derecho el funcionario que posteriormente es designado o encasillado en otra plaza del mismo
servicio, aun cuando esta última sea a su vez de exclusiva confianza, o si el cargo que ocupaba a
la fecha de la modificación tenia esa calidad con anterioridad a ella (8570/91, 31931/96, 43126/00,
20042/01).
En virtud de lo dispuesto en el articulo septuagésimo de la ley 19882 quienes servían una plaza que
había adquirido la condición de exclusiva confianza y tenían la expectativa de optar por un cargo
adscrito o una indemnización al momento de solicitárseles su renuncia, han perdido tal prerrogativa
a contar desde el 23 de junio de 2003, data de entrada en vigor de la derogación de las normas que
contemplaban tal opción, esto es, los artículos 2 transitorio de la ley 18972 y 20 transitorio del texto
original del Estatuto Administrativo (15841/04, 24389/04, 27855/06).
El funcionario que sirve un empleo de exclusiva confianza y es designado en otro del mismo carácter,
mantiene la propiedad del primero, en virtud de la aplicación de los artículos 81, letra e) (actual
articulo 87, letra e), y 82 (actual artículo 88) del Estatuto Administrativo (318/96).
Los funcionarios de exclusiva confianza deben ser calificados anualmente, puesto que no se encuentran
expresamente exceptuados de dicha evaluación y, además, porque el mecanismo de calificación no
sólo está orientado a regular la carrera funcionaria sino que apunta a evaluar el desempeño y las
aptitudes de cada funcionario para decidir sobre los estímulos y sobre su permanencia en el servicio
(25716/96).
Según se infiere de los artículos 51 (actual artículo 49) de la ley 18575 y 6, 142 (actual artículo 148)
y 144 (actual artículo 150), letra d), de la ley 18834, Jos funcionarios que ocupan cargos de exclusiva
confianza se mantienen en los mismos mientras cuentan con aquélla, dependiendo su remoción de la
voluntad de la autoridad facultada para efectuar el nombramiento. El otorgamiento de potestades a la
autoridad administrativa en materia de nombramientos y remociones de Jos empleados de exclusiva
confianza, no significa que pueda actuar arbitrariamente, sino sólo tiene por objeto permitirle contar
con Jos medios jurídicos idóneos para administrar adecuadamente el organismo bajo su dependencia,
cuya finalidad última es satisfacer el interés general. Por consiguiente, cuando ejerce una de sus
atribuciones con un objetivo distinto del considerado por el legislador al concederle un poder de
apreciación discrecional, la decisión adoptada queda afectada por una desviación de poder y viciado
el acto administrativo que la contiene. Las consideráciones precedentes deben tenerlas presentes
las autoridades administrativas cuando, con el objeto de crear causales de jubilación prematuras
o mejorar significativamente el monto de la pensión sin que guarde relación con las imposiciones
efectuadas durante la carrera funcionaria, nombran en cargos de exclusiva confianza a servidores que
ostentan grados jerárquicos medios o bajos, a Jos que Juego se les solicita la renuncia no voluntaria,
y en algunos casos incluso, una vez resuelta su remoción, se les contrata en empleos similares a los
que desempeñaban primitivamente (3837/01 ).
Según lo dispuesto en el articulo 160 de la ley 10336, a los funcionarios que con arreglo a la
Constitución Política, tienen la calidad de servidores de la exclusiva confianza del Presidente de la
República, esto es, los mencionados en los Ws. 9 y 1O (actuales Ws. 7 y 8) del articulo 32 de la
Carta Fundamental, no se les aplican las restricciones relativas a decretarse medidas disciplinarias
expulsivas en su contra, traslados o comisiones de serVicio, a que se refieren los artículos 156 y
siguientes de la citada ley 10336, en época de elecciones presidenciales o parlamentarias, pero si
alcanzan a los empleados de exclusiva confianza del Jefe de Estado que tienen ese carácter en
virtud de disposiciones legales. Tales limitaciones tampoco rigen para el personal del Ministerio de
Relaciones Exteriores y de la Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales, aludido
en el articulo 2 de los DFL. Ws. 33 y 105, de 1979, de esa Secretaria de Estado (30157/05).
Los funcionarios de exclusiva confianza no tienen derecho a obtener la bonificación por retiro a que
se refieren los artículos séptimo y siguientes de la ley 19882 (49355/03, 49189/03, 135/04).
El articulo vigésimo séptimo, W 1, letras a) y b), de la ley 19882, modificó el articulo 7 del Estatuto
Administrativo, eliminando como cargos de "exclusiva confianza" de la autoridad facultada para
efectuar el nombramiento, a los empleos de jefes de departamento, y los cargos de niveles de
jefaturas jerárquicos equivalentes, modificación que entró en vigencia el día primero del mes siguiente
al de la publicación de los correspondientes decretos con fuerza de ley que señalarían los cargos
que pasarían a tener la calidad prevista en el articulo 7 bis (actual articulo 8) de la ley 18834: Estas
modificaciones se refieren solo a aquellos organismos de la Administración del Estado cuyas plantas
son fijadas por ley, y no a aquellas entidades en que, como ocurre con las universidades estatales,
y en particular la Universidad de Chile, dichos ordenamientos son determinados por las propias
autoridades del establecimiento (45151/04, 55931/04).
Los funcionarios que actualmente ocupan cargos de jefes de departamento no tienen derecho a
obtener la bonificación por retiro contemplada en el artículo séptimo de la ley 19882, impedimento
que subsistirá respecto de estos servidores aun cuando el empleo que desempeñen haya perdido
su calidad de cargo de exclusiva confianza, dado que conforme al inciso cuarto del artículo séptimo
transitorio de aquel texto legal, mientras continúen en el ejercicio de esos cargos, conservarán su
carácter de funcionarios de exclusiva confianza (47481/03, 49355/03, 19930/04, 27899/05).
Letra a)
De acuerdo con la sustitución efectuada al artículo 7 de la ley 18834 por el W 2 del artículo 2 de la
ley 19154, los cargos de planta de la Presidencia de la República adquirieron la calidad de exclusiva
confianza a contar del 3 de agosto de 1992, fecha de entrada en vigencia de esta última ley (7621/95,
13557/96).
Letra b)
En los Ministerios, los cargos de exclusiva confianza, además de los Secretarios Regionales
Ministeriales, son los de Jefe de División o Jefaturas de niveles jerárquicos equivalentes o
superiores a dichas jefaturas (y los de Jefe de Departamento o sus equivalentes, cualquiera sea
su denominación, antes de la entrada en vigencia del artículo vigésimo séptimo, W 1, letra a), de
la ley 19882). En conformidad con el articulo 13 transitorio (actual artículo 12 transitorio) de la ley
18834, esta norma sólo se aplica desde la fecha en que se produzca la adecuación de las plantas
en las respectivas Secretarias de Estado, debiendo materializarse la designación en esas plazas por
resolución ministerial (14000/90, 13969/90, 14937/90,2046/91, 55931/04).
Conforme con el artículo 51 (actual artículo 49) de la ley 18575, la ley puede otorgar a determinados
empleos el carácter de cargos de la exclusiva confianza del Jefe del Estado o de la autoridad facultada
para efectuar el nombramiento, calidad que sólo podrá conferir a empleos que pertenezcan a los tres
primeros niveles jerárquicos del respectivo órgano o servicio, excluidos los contemplados en los
números 9 y 1O del artículo 32 de la Constitución Política, y en el caso de los Ministerios, uno de los
niveles jerárquicos corresponde a los Secretarios Regionales Ministeriales (11160/93).
Letra e)
De acuerdo con el artículo 29 (actual artículo 32) de la ley 18575, en la organización interna de
los servicios públicos, sólo pueden establecerse los niveles jerárquicos de Dirección Nacional,
Direcciones Regionales, Departamento, Subdepartamento, Sección y Oficina, sin perjuicio
que, excepcionalmente, la ley pueda establecer otros niveles distintos o adicionales, así como
denominaciones diferentes. En tales servicios, los empleos que corresponden a los tres primeros
niveles jerárquicos son: los Jefes Superiores, los Subdirectores, los Directores Regionales y Jefes
de Departamento o Jefaturas de niveles jerárquicos equivalentes o superiores a dichas jefaturas,
existentes en la estructura del organismo, cualquiera sea su denominación. A partir de la vigencia del
artículo vigésimo séptimo, W 1, letra b), de la ley 19882, de esos tres, sólo los dos primeros niveles
continúan teniendo la calidad de exclusiva confianza. Los Subdirectores y Directores Regionales
conforman un mismo nivel jerárquico, por lo que los Jefes de Departamento o Jefaturas de niveles
jerárquicos equivalentes o superiores a dichas jefaturas, constituyen el tercer nivel en el caso de
servicios que contemplan cargos de subdirectores o directores regionales, y el segundo, si no cuenta
con ellos (11160/93, 35096/93, 14299/94, 5141/97,37057/00, 55931/04).
Los directivos de las universidades estatales que no se rigen por la normativa especial contenida
en sus estatutos orgánicos, están afectos a las normas del Estatuto Administrativo,· por lo que les
es aplicable el régimen de exclusiva confianza establecido en este artículo 7 hasta la entrada en
vigencia del articulo vigésimo séptimo, W 1, letra b), de la ley 19882, han tenido ese carácter los
Jefes de Departamento o sus equivalentes, entendiéndose por tales jefaturas los empleos cuyas
funciones consisten en dirigir una unidad que, por su importancia en la organización interna de la
universidad, se asimile al nivel de Departamento (22647/90, 30997/90, 31232/92, 210/94, 5141/97,
55931/04).
Inciso 2•
Comentarios:
De acuerdo con el articulo 49, inciso final, de la Ley Orgánica Constitucional de Bases Generales
de la Administración del Estado, N" 18.575, se entiende por funcionarios de exclusiva confianza
aquellos sujetos a la libre designación y remoción del Presidente de la República o de la autoridad
facultada para disponer el nombramiento.
De la definición anterior fluye que si la ley autoriza a algunos jefes superiores para proveer libremente
determinados cargos de planta o para remover a funcionarios de determinado nivel jerárquico,
ello no transforma a esos cargos en empleos de exclusiva confianza, porque en estos casos no
concurren los dos requisitos copulativos que establece esa norma, esto es, poseer facultades de
libre designación y de remoción.
Los cargos de exclusiva confianza pueden proveerse con servidores de la Administración o con
personas ajenas a ella, por nombramiento, promoción o ascenso, según el caso.
Los funcionarios que han sido designados en un cargo de exclusiva confianza permanecerán en
él mientras cuenten con la confianza del Presidente de la República o de la autoridad llamada a
efectuar el nombramiento, de cuya voluntad dependerá su remoción y, en tal calidad, se encuentran
sujetos al mismo régimen jurídico que es aplicable a los servidores públicos con algunas salvedades
especiales.
De acuerdo con los artículos 6, 87, letra e), y 88, incisos segundo y tercero, del Estatuto Administrativo,
los empleos de exclusiva confianza están al margen de la carrera funcionaria y son compatibles
con el desempeño de Jos cargos a que se refiere el Estatuto. En estos casos, se confieren dos
derechos a los interesados: 1) el de mantener el empleo de que son titulares, y 2) el de optar entre
las remuneraciones propias del cargo de exclusiva confianza y las del empleo cuya propiedad
conserva.
El primitivo articulo 20 transitorio de la ley 18834, agregado por el articulo 2, N" 9, de la ley 19154,
tuvo como propósito proteger, por la pérdida de estabilidad en sus empleos, a Jos funcionarios que a
la fecha de entrada en vigor de esta última norma -3 de agosto de 1992- desempeñaban cargos de
carrera que luego pasaron a ser de exclusiva confianza y debieron abandonarlos por pedírseles la
renuncia. Esta protección consistía en conferirles el derecho de optar por continuar desempeñando
un cargo en extinción de igual grado y remuneración, adscrito a la repartición, o cesar en funciones y
recibir una indemnización equivalente a un mes de la última remuneración por cada año de servicios
en la Administración con un tope de ocho meses. Dicho articulo 20 transitorio fue derogado por
el articulo septuagésimo de la ley 19882, que regula nueva política de personal a los funcionarios
públicos que indica.
El Mensaje con que el Presidente de la República dio inicio a la tramitación legislativa de la ley 19882,
expresa que uno de los objetivos del proyecto de ley del nuevo trato laboral para los funcionarios de
la Administración del Estado, es la ampliación de la carrera funcionaria hasta el tercer nivel jerárquico
de las instituciones públicas, reduciendo en consecuencia el personal de exclusiva confianza sólo
a los dos primeros niveles, lo que se produce mediante la eliminación de los cargos de jefe de
departamento.
Se procura, junto a otras medidas que establece esa ley, la modernización y profesionalización de
la carrera funcionaria.
Corresponderá a la Dirección Nacional del Servicio C.ivil, organismo creado por el articulo vigésimo
sexto de esa misma ley, asesoraren materias de personal a las autoridades de gobierno, subsecretarios
y jefes de servicio, y la realización de acciones para asegurar su eficiente y eficaz funcionamiento.
El articulo trigésimo octavo de la ley 19882 señala que no podrán ser calificados como altos directivos
públicos quienes desempeñen cargos de intendentes, gobernadores y embajadores. Tampoco se
aplicará este Sistema a aquellos cargos que tienen como requisito el ser servidos exclusivamente
por oficiales en servicio activo de las Fuerzas Armadas, Carabineros de Chile o la Policía de
Investigaciones de Chile. Por su parte, el articulo trigésimo noveno de dicha ley expresa que en
lo no previsto por ella y en cuanto no sea contradictorio con la misma, el Sistema de Alta Dirección
Pública se regulará supletoria mente por las normas de la ley 18834, sobre Estatuto Administrativo.
En todo caso, no les serán aplicables a los altos directivos públicos las disposiciones contenidas en
su Titulo 11, de la Carrera Funcionaria.
ARTICULO 8'.- Los cargos de jefes de departamento y Jos de Ley 19,882, Art. vigesíma
niveles de jefaturas jerárquicos equivalentes de Jos ministerios y sép!imu, 2,
servicios públicos, serán de carrera y se someterán a las reglas Ley 111,834, Art. 7" bis.
especiales que se pasan a expresar:
Interpretación:
La ley 19882, articulo vigésimo séptimo, W 2, incorporó al Estatuto Administrativo un nuevo articulo
7 bis (actual articulo 8), el que establece que las plazas de jefes de departamento y los cargos
de niveles de jefaturas jerárquicos equivalentes de los ministerios y servicios públicos, serán "de
carrera" y se someterán a las reglas especiales que se contemplan en esa disposición y que regulan
un procedimiento concursa! para la provisión de tales empleos. No obstante, conforme a lo señalado
en el inciso tercero del articulo séptimo transitorio de la ley 19882, la mencionada modificación
respecto de cada Ministerio y Servicio, entrará en vigencia el día primero del mes siguiente al de la
publicación del correspondiente decreto con fuerza de ley a que se refiere el inciso primero de dicho
articulo séptimo transitorio, el cual faculta al Presidente de la República para que, dentro del plazo
de un año contado desde la fecha de publicación de la ley 19882, mediante uno o más decretos con
fuerza de ley, determine separadamente para cada uno de los ministerios y servicios regidos por el
Estatuto Administrativo, los actuales cargos que pasarán a tener la calidad prevista en el articulo 7
bis (actual articulo 8) de este último texto legal (55931/04).
En el caso de los servidores que ocupaban cargos de jefes de departamento antes de la modificación
prevista por la ley 19882, cuyos cargos poseían la calidad de exclusiva confianza, continuarán
teniendo dicha calidad jurídica, aún después de dictarse los decretos con fuerza de ley a que se
refiere el inciso primero del articulo séptimo transitorio de esa ley, dado que tales cargos siguen
rigiéndose por las disposiciones vigentes a la época de sus respectivas designaciones, de acuerdo
con el inciso final de la mencionada disposición (50049/04).
Los funcionarios a contrata pueden participar en los concursos para proveer los cargos de jefes de
departamento o aquellos de niveles equivalentes, para lo cual deben haberse desempeñado en forma
ininterrumpida en algún servicio regido por la ley 18834, durante a lo menos, los tres años continuos
inmediatamente anteriores al respectivo certamen. Ello constituye un beneficio especial otorgado a
tales servidores, ya que, no obstante su calidad de servidores transitorios, se les permite concursar
conjuntamente con los funcionarios de planta a los cargos antes mencionados. En estos casos,
la intención del legislador fue que postulasen a esos cargos un número. importante de empleados
públicos, por lo que se permite que servidores que no están sujetos a la carrera funcionaria, puedan
concursar, como ocurre con los empleos a contrata, por lo que el acceso a dichos cargos no es
exclusivo de los funcionarios titulares. Asimismo, quienes sirven cargos de planta de exclusiva
confianza o en calidad de suplentes pueden participar en dichos certámenes (5922/06, 9662/06,
44557/06). .
Los funcionarios que no son calificados, pero que, conforme a los artículos 34 y 40 de la ley 18834
y 25 de la ley 19296, conservan la evaluación del año anterior, podrán participar en concursos
de promoción y en aquellos para proveer plazas de jefes de departamento y niveles de jefaturas
jerárquicas equivalentes, siempre que la evaluación anterior corresponda a una lista que los habilite
para postular a esos procesos de selección y cumplan los demás requisitos legales. Tratándose
de servidores que nunca han sido calificados, salvo los delegados de personal y directores de
asociaciones de funcionarios, la ley no les otorga la posibilidad de ser evaluados, de modo que no
podrán cumplir con una de las condiciones exigidas por los artículos 8 y 55 de la ley 18834 y 27 del
decreto 69, de 2004, del Ministerio de Hacienda, para participar en los certámenes (28982/05).
El hecho que el nuevo sistema de concursos de promoción y aquellos para proveer los cargos
que se ha indicado, incorporado a la ley 18834 por la ley 19882, se base en el mérito e idoneidad
de los servidores, no se ve alterado porque los postulantes no tengan calificación, pues la norma
que en sus casos permite conservar la evaluación anterior no se limita a determinados fines, sino
·que les permite hacer valer sus calificaciones, las que se mantienen para todos los efectos legales
(28982/05).
Podrán participar en los concursos, los miembros de los hospitales de los Servicios de Salud, que
integren las Juntas Calificadoras, pese a carecer de calificaciones, pues no puede estimarse que la
ley, al imponer a dichos servidores la obligación de integrar las Juntas y que, como consecuencia de
ello los privó de su derecho a ser evaluados, haya tenido por finalidad excluir o limitar su participación
en estos concursos (2680/06).
A los cargos de jefe de departamento de las universidades estatales, no se les aplican las
modificaciones que introdujo la ley 19882 a la ley 18834, dado que dichas plazas mantuvieron la
condición de empleos de exclusiva confianza, pues del contexto del articulo séptimo transitorio de la
ley 19882, fluye que el legislador se refirió sólo a los organismos de la Administración del Estado en
que las plantas respectivas se fijan por ley (55931/04).
Concordancias: Arts. 7, 21 y 55 del EA; séptimo transitorio de la ley 19882; decreto 69, de 2004, del
Ministerio de Hacienda, que aprueba Reglamento sobre Concursos del Estatuto Administrativo; 1O
de la ley 20232, de Presupuesto del Sector Público para el año 2008.
Comentarios:
El articulo 8 del Estatuto Administrativo es una consecuencia directa de la modificación introducida
al articulo anterior por la ley 19882, que estableció un nuevo trato laboral para los funcionarios de la
Administración del Estado, la que tuvo como objetivo, entre otros, el extender la carrera funcionaria,
por norma general, hasta el tercer nivel jerárquico de las instituciones públicas, reduciendo el personal
de exclusiva confianza y aplicando los mecanismos de evaluación del desempeño a estos altos
funcionarios. Como consecuencia de lo anterior, se instituyó un procedimiento para la provisión de
los cargos de jefe de departamento y de niveles de jefaturas jerárquicos equivalentes de ministerios
y servicios públicos, los que serán de carrera y se proveerán mediante los concursos internos que
regulá esta disposición.
Un comité de selección propondra a la autoridad entre tres y cinco candidatos con .los mejores
puntajes, pertenecientes a la planta del ministerio o servicio que realice el concurso, para proveer los
cargos correspondientes, mientras que en el evento que no haya número suficiente de candidatos
de planta idóneos para completar las ternas, éstas se completaran con los cargos a contrata y los
pertenecientes a otras entidades, y, en la eventualidad que no hubiese postulantes idóneos, debera
llamarse a concurso público.
ARTICULO 9'.- Todo cargo público necesariamente deberá tener Ley 18.834, Art. 8,.
asignado un grado de acuerdo con la importancia de la función
que se desempeñe y, en consecuencia, le corresponderá el
sueldo de ese grado y las demás remuneraciones a que tenga
derecho el funcionario.
Interpretación:
El nivel jerárquico de los funcionarios está determinado por el grado o nivel remuneratorio que la ley
ha asignado al cargo que sirven en la respectiva planta, de acuerdo con la importancia de su función
(32455193, 35096193, 13673194,21408104, 63197104, 46839106).
Los empleos se encuentran en cada planta ordenados en forma piramidal de mayor a menor según el
grado remuneratorio que la ley ha asignado a cada cargo, elemento que determina el nivel jerárquico
del funcionario (13673194, 35568195, 8572199,44175199,47597100, 23241105, 46839106).
Siempre debe existir una correspondencia entre la antigüedad en el cargo y en el grado, sólo en
forma excepcional puede ser distinta. Esto último ocurre cuando a un funcionario se le nombra en
una planta diferente pero con igual grado, caso en el cual tendrá menos antigüedad en el cargo que
en el grado (9594193, 32167193 -aclarado por el13671194-, 26567194,38695198, 29615101).
Comentarios:
El articulo 9 es una de las disposiciones del Estatuto Administrativo que reconoce el carácter
jerarquizado de la función pública.
La jerarquía es un vinculo jurídico que establece una relación de superior a inferior entre las
autoridades y los funcionarios de su dependencia, de manera que aquéllas mandan y éstos se
encuentran en el deber de obedecer la orden impartida. Está configurada por el grado atribuido al
cargo que se ocupa y por la posición que el funcionario tiene asignada dentro de la organización del
servicio a que pertenece (dictamen 7535/92).
ARTICULO 10.- Los empleos a contrata durarán, como max1mo, Ley 18.834, Art. 9'.
sólo hasta el 31 de diciembre de cada año y los empleados que
los sirvan expirarán en sus funciones en esa fecha, por el solo
ministerio de fa ley, salvo que hubiere sido propuesta la prórroga
con treinta días de anticipación a lo menos.
Los grados de las escalas de remuneraciones que se asignen a Ley 19.154, Art. 2', 3.
los empleos a contrata no podrán exceder el tope máximo que
se contempla para el personal de fas plantas de Profesionales,
de Técnicos, de Administrativos y de Auxiliares en el respectivo
órgano o servicio, según sea fa función que se encomiende. En
aquellos órganos o servicios en que no existan algunas de las
plantas mencionadas, los empleos a contrata no podrán tener un
grado superior al máximo asignado a la planta respectiva, en los
otros órganos o servicios regidos por fa misma escala de sueldos.
Interpretación:
Los contratados, además de reunir los requisitos generales para ingresar a la Administración, están
obligados a cumplir con las exigencias especiales que la ley señala para el desempeño de la función
que les corresponde desarrollar (35295/90, 1293191,30065/92, 30614194).
El personal contratado carece del derecho al ascenso, pues no integra la planta ni forma parte del
escalafón del Servicio, dada la naturaleza transitoria de estos desempeños (9287/90, 12696193).
De acuerdo con los artículos 3, letra e), y 9 (actual artículo 1O) del Estatuto Administrativo, los
funcionarios contratados están al margen de las plantas de los ordenamientos permanentes de
personal de los Servicios de que se trate, que son los factores que determinan la jerarquía o vínculo
jurídico que une a los funcionarios en relación de superior a inferior. Por tal motivo, es improcedente
destinar al personal a contrata, porque si bien el artículo 67 (actual artículo 73) de la ley 18834, que
regula esta materia, se refiere a "funcionarios", y su artículo 3 define el cargo público como aquél
que se contempla en las plantas o como empleos a contrata en las instituciones a que alude, el inciso
segundo de ese mismo artículo 67 (actual artículo 73) es categórico al establecer que la destinación
implica prestar servicios en un empleo de la misma "jerarquía". (23342/90, 23931190, 25528/92,
35097/93, 10372/95).
más idóneas (24517/92, 47954/99, 2785/00, 22466/01, 38116/04). Si opta por esta vi a, debe ceñir
su actuación a la misma metodología utilizada para proveer cargos de planta (19333/08).
La regla de excepción sobre limite de plazo que en materia de comisiones de servicio establece el
inciso segundo del articulo 70 (actual articulo 76) de la ley 18834, modificado por el articulo 6 de la
ley 19056, es susceptible de aplicarse al personal a contrata, siempre que la comisión de estudios
tenga una duración que no exceda el periodo de contratación (21271/91).
Los contratados pueden ser incluidos en el orden de subrogación que la autoridad determine conforme
al articulo 75 (actual articulo 81) de la ley 18834, con la salvedad de que no pueden subrogar cargos
de jefatura (24159/91, 21676/95, 15/96, 22406/00).
El concepto ""funciones de jefatura"" utilizado por la doctrina y la jurisprudencia, impide a los servidores
a contrata desempeñar cargos de esa naturaleza o labores de carácter resolutivo, decisorio o
ejecutivo, toda vez que comprenden tanto aquellas tareas asignadas a un empleo jerárquico previsto
en la planta respectiva, cuyo es el caso, por ejemplo, de Jefes de Departamento, Subdepartamento
o Sección, como funciones de jefaturas propias de plazas no contempladas específicamente en la
respectiva planta, pero que por su denominación o naturaleza implican labores de carácter resolutivo,
decisorio o ejecutivo. Las mencionadas tareas corresponden exclusivamente a cargos que forman
parte de la organización estable del Servicio, esto es, empleos de planta, y no a los que se consultan
en forma transitoria (21719/91, 42629/99). Por ende, no puede aceptarse que un servicio sustente
la decisión de designar personal a contrata en cargos de jefatura, esto es, para atender factores
de mayores y más complejas funciones que deberían cumplirse (30614/04). Ello es así, a menos
que un precepto legal autorice a los contratados a realizar funciones de jefatura, cuyo fue el caso,
por ejemplo, de la ley 19842, de Presupuestos del Sector Público para el año 2003, que de manera
expresa facultó a la superioridad del Servicio Nacional de Menores encomendar funciones de jefatura
a personal, cuya calidad jurídica haya sido la de contratado (52676/03).
La ley 18834 no contempla la posibilidad de contratar personas con arreglo a las disposiciones del
Código del Trabajo, de modo que los funcionarios contratados según ese Código, desde la vigencia
del nuevo Estatuto Administrativo, tienen el carácter de empleados a contrata y no de planta, dado
que la primera de esas figuras, contenida en dicha ley 18834, es la que más se aviene con las
características del contrato propio del ordenamiento laboral (7203/91, 31931/96).
La finalidad del empleo a contrata es complementar el conjunto de cargos permanentes que forman
la planta de personal de un Servicio, según lo requieran las necesidades de éste (15040/91).
Podrá ser contratada en el Servicio Nacional de la Mujer una extranjera de nacionalidad sueca,
cuando no exista otro postulante idóneo de nacionalidad chilena y se fundamente la nominación
por la autoridad, especificándose su especialidad y acompañando el certificado o titulo reconocido,
revalidado o convalidado en conformidad a la ley (10992/01).
Es improcedente contratar a extranjero como auxiliar en un Centro de Referencia de Salud, dado que,
además de no cumplir con los requisitos del artículo 11 (actual artículo 12), letra a) de la ley 18834,
configura la norma de excepción que faculta a la autoridad llamada a efectuar el nombramiento, para
designar en empleos a contrata, a extranjeros que posean conocimientos científicos o de caracter
especial, mediante una resolución fundada que especifique la especialidad requerida para el empleo
y el título (31400/04).
Los contratados están afectos a calificación, porque de acuerdo con los artículos 28 (actual artículo
33) y 29 (actual artículo 34) de la ley 18834, únicamente están excluidos de evaluación el Jefe
Superior de la institución, su subrogante legal, los miembros de la Junta Calificadora Central y los
delegados del personal (7136/93).
Nada obsta para que los empleados a contrata sean evaluados por la Junta Calificadora aunque sus
integrantes tengan un nivel remuneratorio inferior, ya que aquel personal carece de jerarquía dentro
de la institución a que pertenece (26042/92).
El personal contratado no puede integrar una Junta Calificadora, porque la mención que hace el
artículo 30 (actual artículo 35) de la ley 18834 a los cinco funcionarios de más alto nivel jerarquice,
se refiere a aquellos que sirven cargos de jefatura de mayor nivel dentro del Servicio, y por su
naturaleza transitoria, los contratados no pueden ocupar tales plazas. Sin embargo, si por mandato
legal se permite delegar en contratados el ejercicio de funciones directivas, pueden excepcionalmente
integrar tales cuerpos colegiados, cuando las circunstancias lo hagan necesario (17770/93, 19218/93,
36295/93, 35400/00, 47593/00).
Adolece de vicios de legalidad la calificación efectuada a funcionario que fue precalificado por uno
contratado, pues conforme·al artículo 36 (actual artículo 41) de la ley 18834 la precalificación debe
ser realizada por el Jefe Directo del dependiente a evaluar y los empleados a contrata no pueden
desempeñar cargos de jefatura (36295/93, 16879/94, 18302/94).
El beneficio del artículo 146 (actual articulo 152) de la ley 18834, que permite a los funcionarios a
quienes se les ha declarado su salud irrecuperable quedar liberados de trabajar durante seis meses
con derecho a todas sus remuneraciones de cargo del empleador, es aplicable a los contratados,
debiendo en tal caso mantenerse el vínculo jurídico con el servidor renovando su contratación por el
aludido lapso si ello fuere necesario (24532/93, 12572/01).
El personal contratado no tiene derecho a jubilar según la especial norma de cálculo contenida en
el artículo 132 del DFL 338, de 1960, a menos que hayan servido, durante un lapso mínimo de un
año, un cargo asimilado a una de las cinco primeras categcrrias que dicho precepto indica (12324/94,
15354/94, 13004/96, 13942/04).
Procede aplicar las normas sobre capacitación funcionaria de la ley 18834, Titulo 11, Párrafo 2 (actual
párrafo 3), al personal a contrata asimilado a grado, salvo la concerniente a capacitación para el
ascenso regulada en el articulo 22 (actual artículo 27), letra a), de ese Estatuto, la que alcanza
únicamente a funcionarios de planta (22338/94).
Los servidores a contrata pueden postular al cargo de representante del personal ante la Junta
Calificadora (15517/97).
El artículo 56 (actual artículo 54), letra b), de la ley 18575, que prohibe ingresar a cargos de la
Administración del Estado a quienes estan ligados por vinculo de parentesco con ciertas jefaturas,
no se aplica a las prórrogas de nombramiento a contrata, porque esa norma no afecta a quienes se
desempeñaban en un determinado Servicio, considerando que la prórroga significa una renovación
de la contratación. No obstante, según el articulo 79 (actual artículo 85) del Estatuto Administrativo el
funcionario no puede quedar bajo la dependencia del jefe con el cual esta relacionado, procediendo su
destinación a otra función en que tal circunstancia no se produzca, ya que si bien no puede destinarse
a los contratados, prima en esta situación el mandato imperativo de este artículo 56 (actual artículo
54), cuyo fin es proteger el deber de probidad al cual es tan obligados todos los servidores de planta
o a contrata conforme al artículo 54 (actual artículo 52) de la ley 18575 (36749/00, 44892/00).
El Jefe Superior de un Servicio debe destinar a funcionaria a una dependencia diferente de la que
actualmente se desempeña dentro del servicio y en la misma localidad, de modo que no exista
entre ella y su cónyuge una relación jerarquica, no siendo óbice para ello su calidad de empleada a
contrata, pues si bien en principio no procede la destinación del personal contratado, en este caso
se trata de dar cumplimiento a un mandato legal imperativo de jerarquía organica constitucional, que
tiene por finalidad proteger el deber fundamental de probidad dentro de la Administración y a cuya
estricta observancia están obligados todos los servidores estatales, sean de planta o a contrata,
según el artículo 54 (actual artículo 52) de la ley 18575 (44892/00).
Inciso 1'
La vigencia temporal de los desempeños a contrata se determina por la Jefatura Superior del Servicio
en el respectivo instrumento de nombramiento, es decir, aquélla esta supeditada al tiempo fijado en
la resolución de designación, con la limitante que, según lo dispuesto por el inciso primero del artículo
10 del Estatuto Administrativo, no puede exceder del 31 de diciembre de cada año (30295/08).
Cuando una designación a contrata ha sido dispuesta con la fórmula "mientras sean necesarios sus
servicios" la autoridad puede poner término a la relación laboral en el momento que estime conveniente,
sin que para tal efecto se requiera aceptación del afectado, como tampoco procede que la Contraloría
General pondere las razones que tuvo en cuenta dicha autoridad administrativa para determinar el
cese de funciones. En tal caso, el término de los servicios se producira desde la notificación ·al
afectado de la total tramitación del decreto o resolución que así lo disponga, correspondiendo a
la autoridad administrativa -no a la Contraloría General- calificar las necesidades del servicio, que
justifiquen el término de los mismos, sin que pueda hacerse efectivo su alejamiento con anterioridad
a esa fecha. Lo mismo ocurre si se ha utilizado las expresiones "estimarse innecesarios los servicios",
que son equivalentes a la fórmula antes aludida. La referida notificación debe hacerse en forma
personal, en cuyo caso constara en la respectiva acta suscrita por el notificado y, en el evento de que
éste se negare a firmarla, hará fe de ello y de la notificación el testimonio que al respecto estampe
el empleado que la practique, o por carta certificada dirigida al domicilio que el funcionario tenga
registrado en el Servicio (680/91, 2811/92, 6902/92, 17292/97, 42666/00, 41044/01, 39562/05).
La cláusula "mientras sean necesarios sus servicios", que tiene su fundamento en los artículos 3,
letra e), y 9 (actual artículo 1O) de la ley 18834, sobre Estatuto Administrativo, puede incorporarse en los
Quienes se desempeñan a contrata tienen derecho a permanecer en sus empleos mientras no concurra
alguna de las causas de expiración de funciones, salvo cuando dicha designación ha sido dispuesta
bajo la fórmula "mientras sean necesarios sus servicios" u otra similar, caso en el cual la autoridad
administrativa tiene la facultad de ponerle término en el momento que estime conveniente. Por ende,
la causa invocada por la autoridad para el cese de funciones, disponiendo el término anticipado de la
contrata "por razones de buen servicio", así establecida en la resolución correspondiente, es similar
a la expresión "por no ser necesarios sus servicios", constituyendo fundamento suficiente para tal
medida (12769/08).
Los funcionarios contratados gozan del dE;lrecho a la estabilidad en el empleo, pero con las limitaciones
propias emanadas dei carácter transitorio de sus designaciones, de modo que la seguridad en sus
cargos que le garantiza la ley, se relaciona con la circunstancia de que la expiración de funciones
no está entregada a la discrecionalidad de la autoridad sino que sólo procede por causas legales, a
menos que el contrato haya sido dispuesto bajo la fórmula "mientras sean necesarios sus servicios"
(15040/91, 29914/99, 39562/05).
Las contrataciones deben materializarse por decretos afectos a toma de"razón, pero no las prórrogas
(13261/92, 1796/94, 3861/94).
Los empleados a contrata expiran en sus funciones el 31 de diciembre de cada año por el solo
ministerio de la ley, cuando no se ha señalado un plazo determinado dentro del año, por lo que
la autoridad administrativa no está obligada a emitir un documento formal de cese ni a notificar a
los afectados la no renovación de sus contratos, salvo que hubiere sido propuesta la prórroga con
treinta días de anticipación a lo menos. Los treinta días de antelación a que alude esta disposición
constituyen el periodo requerido para la prórroga y no para notificar la no renovación del contrato
(1932/93, 29969/94,7670/00,21026/00,22209/03, 31470/04, 17866/08).
El solo vencimiento del plazo produce el término de los servicios del empleado a contrata, sin que
para ello sea necesaria una manifestación expresa de voluntad por parte de la autoridad, en orden
a señalar su decisión de no prorrogarla, y por ende, tampoco existe la obligación de expresar las
razones tenidas en consideración para ello. Frente a la falta de un pronunciamiento de la superioridad
en cuanto a la eventual prórroga de una determinada contrata, la ley se preocupó de señalar el efecto
que tal silencio ocasiona, sin exigir que se manifiesten las motivaciones que aquélla pudo tener para
no pronunciarse, lo cual implica que el legislador no ha estimado necesario que se conozcan y, por
consiguiente, que se ponderen o revisen tales consideraciones (10953/07, 14299/08).
De acuerdo con los artículos 140 (actual articulo 146), letra f), y 147 (actual articulo 153) de la
ley 18834, son causales de cese de funciones el término del periodo legal de la designación y
el cumplimiento del plazo de contratación. No corresponde a la Contraloria General ponderar los
fundamentos o razones considerados por la jefatura de un Servicio para prorrogar o no un contrato,
porque tal decisión importa el ejercicio de una facultad privativa de la autoridad administrativa
(14120/93, 12752/97' 45794/98, 9998/99, 49574/99, 5305/00, 32412/00).
La causa de término de la relación laboral "por no ser necesarios sus servicios" no se encuentra
contemplada en el articulo 25 de la ley 19296, como una excepción a la inamovilidad de que goza
un funcionario en su calidad de dirigente gremial, por lo que está amparado por el fuero que regula
esa disposición (21367/08).
De acuerdo con los artículos 174 y 201 del Código del Trabajo -disposiciones que conservaron su
numeración en el texto refundido, coordinado y sistematizado de dicho Código, fijado por el DFL
1, de 2002, del Ministerio del Trabajo y Previsión Social, Subsecretaria del Trabajo- y 83 (actual
articulo 89) de la ley 18834, durante el periodo en el que la mujer se encuentra embarazada y hasta
un año después de expirado el descanso de maternidad, la trabajadora está amparada por el fuero
laboral, cualquiera sea el estatuto al que se encuentre afecta en el desempeño de sus funciones y
con independencia, asimismo, de la calidad jurídica en que esté prestando sus servicios. Luego,
es improcedente poner término al contrato de una funcionaria amparada por fuero maternal por la
causal de vencimiento del plazo convenido, debiendo renovarse la contratación por todo el lapso
de inamovilidad, salvo que exista autorización expresa del Juez competente (7899/89, 16506/90,
28456/92, 2963/99, 15843/00, 17783/00, 47550/05).
Funcionaria embarazada a contrata para reemplazar a otra funcionaria de igual naturaleza impedida
de ejercer el cargo, está amparada por el fuero laboral, no resultando posible a la autoridad poner
término a la relación funcionaria por propia voluntad o por la llegada del plazo, sino que debe
renovar el nombramiento por todo el tiempo que dure el beneficio de la inamovilidad, a menos que
estime necesario para poner término a sus servicios, requerir la autorización judicial que permita la
remoción. Lo anterior no se altera por la circunstancia de que el motivo de la contratación haya sido
reemplazar a otra funcionaria a contrata impedida de ejercer el cargo, pues al constituir las contratas
designaciones que no ocupan cargos especificas señalados en la planta de la respectiva institución,
la autoridad ad ministrativa se encuentra facultada para designar a dos o más personas asimiladas
a un empleo de la misma planta, aun cuando deban efectuar labores de igual naturaleza (62201/06,
17284/07' 34236/07' 44815/07).
La autoridad administrativa puede poner término al contrato de una funcionaria que sufrió un aborto,
ya que con ello se ha producido la interrupción de su estado de embarazo, que es lo que fundamenta
el beneficio del fuero maternal (8026/96).
Es improcedente poner término al contrato de una funcionaria que presenta un parto prematuro
inducido por muerte fetal durante la gestación, porque el fuero maternal no sólo está referido al
periodo de embarazo y a la protección y salud del niño, sino que también protege a la madre.
Además, la ley al establecer este beneficio, no ha exceptuado la circunstancia que el recién nacido
no sobreviva (32269/93).
El plazo para reclamar por el derecho a fuero maternal es de sesenta di as contado desde la fecha
de expiración del periodo a que se refiere el articulo 201 del Código del Trabajo, de acuerdo con lo
establecido en el artículo 207 de ese mismo Código (11163/94).
La licencia por enfermedad no impide que los servicios de los contratados cesen por la llegada del
plazo indicado en la ley o en el decreto o resolución pertinente, ni tampoco obliga a la autoridad
a renovar una contratación, por cuanto el goce de licencia médica no confiere inamovilidad en el
empleo (25351/90,15577/92, 31424/94, 28365/95, 35069/97, 42239/00).
El hecho de encontrarse el empleado haciendo uso de feriado legal no impide que se le ponga
término a sus funciones, sea por la llegada del plazo indicado en la ley o el decreto o resolución
correspondiente, o por decisión de la autoridad competente cuando los servicios ya no sean
necesarios, por cuanto el goce de ese beneficio estatutario no confiere inamovilidad en el empleo
(35069/97, 23019/00).
El personal a contrata de un servicio público, que cese en funciones por no ser renovados sus
contratos o por haberse puesto término anticipado a ellos, están en condiciones de impetrar el
subsidio de cesantía si cumplen las.demás exigencias legales (32115/89, 28375/92, 26866/93).
El término de un contrato no permite impetrar el pago por vacaciones, pues la ley 18834 no contempla
tal beneficio. La expiración de funciones de los empleados a contrata implica para éstos la pérdida
del feriado pendiente, sin que en caso alguno corresponda compensarlos pecuniariamente cuando
no hayan hecho uso de esa franquicia en su oportunidad (680/91, 7289/91, 28375/92, 35069/97).
motivado en la circunstancia de no ser necesarios los servicios que cada uno de ellos prestaba,
sino que tal cese deriva de la pérdida de confianza indispensable para el desempeño del empleo,
dada la naturaleza de éstos, circunstancia que implica una "renuncia no voluntaria" que otorga el
derecho a jubilar a los afectados si cumplen los requisitos del artículo 12 del decreto ley 2448, de
1978 (1491/91).
Los dirigentes gremiales, ya sea que posean la calidad de funcionarios de planta o a contrata gozan de
inamovilidad y por ello no pueden ser separados del cargo por simple determinación de la autoridad,
salvo que una norma legal disponga expresamente el cese de aquéllos. La inamovilidad en el cargo
prevista en el artículo 25 de la ley 19296, no puede alterarse por la sola circunstancia de producirse
el vencimiento del plazo de la contratación, por lo que los Jefes Superiores de los servicios públicos
deben respetar el fuero gremial disponiendo la renovación de la contrata de los dirigentes gremiales,
mientras se encuentren amparados por la referida protección (27087/96, 45814/01, 39432/04,
20669/07).
Inciso 2'
Los empleados a contrata, aun cuando conserven la propiedad de sus empleos titulares, deben
considerarse para la limitación del número de funcionarios a contrata de una institución, porque del
tenor literal de esta norma aparece la relación entre personas contratadas y plazas permanentes
de la planta de la entidad de que se trate, con prescindencia que ellas se encuentren vacantes o
provistas, o no estén siendo efectivamente servidas por quienes las ocupan (754/91).
Inciso 3'
La norma de este inciso y la del artículo 59 (actual artículo 65), inciso segundo, de la ley 18834,
permiten efectuar nombramientos por jornadas parciales, sin alterar o modificar aquella para la cual
el funcionario ha sido nombrado o contratado (6927/91, 43588/99).
Inciso 4'
Los empleos a contrata no tienen una categoría o grado específico en la planta, de modo que la
autoridad administrativa competente, al disponer la contratación determinará, según la importancia
de las funciones, un grado o categoría en el escalafón correspondiente, sin que dichos empleos,
en cuanto a su ubicación, se relacionen con la planta sino únicamente con la escala de sueldos
del escalafón respectivo. El personal así contratado, queda comprendido en la dotación máxima
autorizada (30342/94, 36001/00, 45836/01).
Conforme al artículo 8 (actual artículo 9) de la ley 18834, la autoridad puede asignar al personal
contratado cualquier grado de la escala de sueldos vigente en la entidad, aunque éste no se contemple
en la extensión jerárquica de la planta del Servicio y siempre que no exceda el grado máximo de ésta
(6669/91 -reconsiderado parcialmente por el15712/92-, 4130/91, 11465/92, 17212/99).
Procede contratar personal asimilado a la planta de técnicos en grados inferiores al mínimo que
para ese estamento señala la ley 19185, artículo 13, porque este inciso indica que los grados de
las escalas de remuneraciones que se asignen a los empleos a contrata no podrán exceder el tope
máximo contemplado para el personal de las plantas de profesionales, de técnicos, de administrativos
y de auxiliares, pero no se refiere a un límite mínimo. Así, los referidos grados mínimos no rigen
respecto de quienes se desempeñan como contratados, a diferencia de lo que sucede con los que
ocupan empleos de planta (11257/93).
Concordancias: Arts. 3°, letra e), 9°, 12, 13, 14, 33, 34, 65, 146, letra f), 153 y 6 y 19 transitorios
del EA; 27 y 40 de la ley 19269; 2°, incisos segundo y ss. del EAM; 10 y 11 de la ley 20232, de
Presupuestos del Sector Público para el año 2008.
Comentarios:
Los empleos a contrata son aquellos de carácter transitorio que se consultan en la dotación de una
institución, siendo su finalidad complementar los cargos permanentes que conforman la planta de
personal de un servicio según sus necesidades. Duran como máximo hasta el 31 de diciembre de
cada año, y quienes los sirven cesan en sus funciones en esa fecha por el solo ministerio de la ley,
salvo que hubiere sido propuesta su prórroga con 30 días de anticipación.
Los funcionarios a contrata tienen derecho a permanecer en sus empleos mientras no opere alguna
de las causas de expiración de funciones, salvo que la contratación hubiere sido dispuesta bajo la
fórmula "mientras sean necesarios sus servicios", caso en el cual la autoridad puede poner término
a ellos en el momento que estime conveniente, produciéndose los efectos de tal acto desde la
notificación al afectado de la total tramitación del decreto o resolución que disponga esa medida.
El personal a contrata no integra planta alguna dentro del respectivo Servicio, carece de la propiedad
del cargo que desempeña y se encuentra sometido, como todos los empleados públicos, al régimen
de obligaciones, incompatibilidades, prohibiciones y responsabilidades previsto en el Estatuto
Administrativo.
Los empleos a contrata se vinculan con la escala de sueldos del respectivo organismo, toda vez que
los grados de esa escala que a ellos se asignen, dependerán de la función que se encomiende a los
servidores de que se trate, cuyo tope estará constituido por el grado más alto de la planta.
Los cargos a contrata pueden proveerse directamente por la autoridad o por concurso, debiendo, en
ambos casos, darse cabal cumplimiento a los requisitos de ingreso.
Los funcionarios a contrata no pueden exceder del 20% del total de los cargos de planta.
En lo que se refiere al fuero maternal y al fuero gremial, estas figuras jurídicas impiden, en general,
poner término a los servicios de los empleados contratados aunque su vinculación con el Servicio
haya sido dispuesta bajo la fórmula "mientras sean necesarios sus servicios".
Atendido el carácter transitorio de sus designaciones, los funcionarios contratados no están habilitados
para ejercer cargos de jefatura, salvo que una norma legal los autorice expresamente para ello. Por
ejemplo, han sido las Leyes de Presupuestos para el Sector Público, de los años 2005, 2006 y 2007,
que en las Glosas 03, 02 y 03, respectivamente, de las Partidas correspondientes al Ministerio de Salud,
han otorgado la autorización de que se trata, al disponer que: "El personal a contrata de los Servicios
de esta partida regido por las normas remuneracionales del DL 249, de 1973, podrá desempeñar las
funciones de carácter directivo que se le asignen o deleguen mediante resolución fundada del Jefe
del Servicio, en la que deberá precisarse, en cada caso, las referidas funciones", estableciéndose
para cada año un tope de 2900 funcionarios a contrata para el conjunto de los organismos de la
partida, cantidad que sera distribuida entre éstos por una o mas resoluciones del Ministerio de Salud.
También la ley W 20232, de Presupuestos del Sector Público para el año 2008, en la Partida 13,
Capitulo 01, Programa 01, Subtitulo 21, en la Glosa W 2, letra a), autorizó, entre otros casos, por
ejemplo, que el personal a contrata de la Subsecretaria de Agricultura podra desempeñar funciones
de carácter directivo que se le asignen o deleguen mediante resolución fundada del jefe de servicio,
en la que deben precisarse las referidas funciones, señalándose, además, que dicho personal no
podrá exceder de cuatro funcionarios. Ello ha permitido, que mediante resoluciones exentas, se
confiera o delegue en servidores a contrata de los Servicios de Salud, o de esa Subsecretaria, el
ejercicio de facultades de jefatura de dependencias del servicio o directivas expresas, por ejemplo,
para precalificar a los funcionarios de la sección o unidad correspondiente.
A su vez, el articulo 11 de la ley 20232, sobre Presupuestos del Sector Público para el año 2008,
señaló que "Los órganos y servicios públicos podrán contratar personal que reemplace a funcionarios
contratados que, por cualquier razón, se encuentren imposibilitados para desempeñar sus cargos
por un periodo superior a 30 dias corridos. Dichas contrataciones no se imputarán a la respectiva
dotación máxima de personal y sólo podrán efectuarse si la entidad cuenta con disponibilidad de
recursos para tal efecto, lo que deberá ser certificado por la autoridad superior de la institución, sobre
la base del informe de su unidad de finanzas. Tal certificación se acompañará al respectivo acto
administrativo".
Proyecto de Ley:
A la fecha de edición de este libro se encontraba en trámite legislativo un proyecto de ley que tuvo
su origen en una moción que "Modifica el sistema para prorrogar empleos a contrata en el sector
público" (Boletín W 5281-06), mediante el cual se introducían enmiendas a las leyes Ws. 18834 y
18883.
"Los empleos a contrata deberán señalar el plazo de duración, el que no podrá exceder del 31 de
diciembre del año en que hubieren sido contratados y se entenderán automáticamente prorrogados,
por el solo ministerio de la ley, hasta el siguiente 31 de diciembre y así sucesivamente a menos que
con un plazo no inferior a treinta días de anticipación se notifique de su no renovación".".
ARTICULO 11.- Podrá contratarse sobre la base de honorarios Ley 18.834, Art. 10.
a profesionales y técnicos de educación superior o expertos en
determinadas materias, cuando deban realizarse labores accidentales
y que no sean las habituales de la institución, mediante resolución de la
autoridad correspondiente. Del mismo modo se podrá contratar, sobre
la base de honorarios, a extranjeros que posean titulo correspondiente
a la especialidad que se requiera.
Interpretación:
Las labores cumplidas sobre la base de honorarios constituyen una modalidad de prestación de
servicios particulares a la Administración, que no confiere a quien los efectúa la calidad de funcionario
público. Los derechos que asisten a las personas que prestan servicios especializados en estas
condiciones no s0.1 sino los que establece el respectivo contrato y que cunsistbl, básicamente, en el
derecho a exigir el pago de un honorario (11862/90).
Los contratos que se celebren con personas naturales, que involucren la prestación de servicios
personales, deben sujetarse a lo preceptuado en el artículo 2 del decreto 98, de 1991, del Ministerio
de Hacienda, que previene que aquéllos deberán conformarse a las normas del artículo 1O (actual
artículo 11) de la ley 18834 y 33 del decreto ley 249, de 1973, o del artículo 13 del decreto
ley 1608, de 1976, en cuanto a que los montos de los honorarios deben ajustarse a las rentas
de la Escala Única de Sueldos (25652/91, 4659/96, 22650196 -complementado por el 27604/97-,
39565/99).
En cuanto al alcance de la excepción contenida en la letra a) del artículo 3, de la ley 19886 -Ley de
Bases sobre Contratos Administrativos de Suministro y Prestación de Servicios-, tratándose de los
convenios a honorarios que la Administración celebre con personas naturales, cabe señalar que
el Mensaje de la citada ley, al referirse a sus contenidos fundamentales, definió como ámbito de
aplicación del mismo, a los contratos que celebre la Administración del Estado para el suministro de
bienes muebles y la prestación de los servicios necesarios para apoyar el desarrollo de sus funciones,
y luego agrega que "excluye, sin embargo, una serie de contratos que, por un lado no tienen que
ver con el suministro de bienes o la prestación de servicios o, por otro, son incompatibles con los
procesos de licitación". En este sentido, la excepción del artículo 3, letra a), al aludir a "los contratos
a honorarios que se celebren con personas naturales", encuentra su sustento en la circunstancia
particular de calificación profesional o técnica del sujeto a quien se le encarga determinado servicio,
generalmente asociada a la entrega de conocimiento o información, de modo que por su naturaleza
dicho tipo de convenios resulta incompatible con los procesos de licitación establecidos en la ley
19886. Por el contrario, no se advierte la referida incompatibilidad respecto de aquellas contrataciones
de servicios en que la Administración requiere convocar a un proceso de selección a un número
indeterminado de interesados, sean personas naturales o jurídicas, con la finalidad de evaluar la
capacidad profesional, técnica y financiera de los potenciales contratantes que permita asegurar
la calidad de la ejecución de la prestación a convenir. Lo anterior, por lo demás, es concordante
con el principio de idoneidad del contratante que resulta inherente a la actividad contractual de la
Administración, el cual le impone el deber -acorde a lo expresado en el Mensaje de la citada
ley 19886- "de garantizar y velar que los sujetos que contraten con ella sean dignos de confianza
y tengan la experiencia necesaria". En ese contexto, es dable manifestar que el Subtítulo 22 del
Clasificador Presupuestario, denominado "Bienes y Servicios de Consumo", comprende los gastos
por adquisiciones de bienes de consumo y servicios no personales necesarios para el cumplimiento
de las funciones y actividades de los organismos del sector público, dentro de los que se encuentran,
los servicios indicados en el ítem 06 "Mantenimiento y Reparaciones", en el ítem 07 "Publicidad
y Difusión", el ítem 08 "Servicios Generales"; o aquellos contemplados en las asignaciones 003
"Servicios Informáticos" y 999 "Otros", respecto de los cuales pueden ser realizados indistintamente
por personas naturales o jurídicas. Por consiguiente, acorde con el criterio expuesto, se infiere que
la Administración deberá estarse a las disposiciones de la ley 19886, para la realización de los
procedimientos licitatorios tendientes a seleccionar al contratante que deberá ejecutar los servicios
mencionados, sin perjuicio, claro está, de la aplicación de las normas especiales que regulen en
particular, la convención de que se trate. En cuanto a los "Servicios Técnicos y Profesionales", a que
alude el Subtítulo 22, en su ítem 11, refiriéndose en la asignación 001 a "Estudios e Investigaciones",
en la que deben consultarse los recursos para sufragar "los gastos por concepto de contrataciones
de investigaciones sociales, estadísticas, científicas, técnicas, económicas y otros análogos, que
correspondan a aquellos inherentes a la institución que plantea el estudio", se advierte del propio
tenor de dicha asignación, que solamente alude a los contratos suscritos con personas jurídicas al
expresar que "con este ítem no se podrán pagar honorarios a suma alzada, a personas naturales";
luego, no procede excluir este tipo de convenios del régimen de contratación de la ley 19886, en
todo aquello que no sea inconciliable con la regulación particular contenida en el Capítulo XII, del
decreto 250, de 2004, del Ministerio de Hacienda, reglamento de la ley 19886, en conformidad con
el artículo 34 de la aludida ley. Por último, es posible observar que tratándose de los contratos a
honorarios suscritos con personas naturales, se contempla expresamente en el Subtítulo 21 del
Clasificador Presupuestario, que los "Gastos en Personal", comprende en su ítem 03, asignación
001 "Honorarios a Suma Alzada - Personas Naturales", los gastos por concepto de honorarios
a profesionales, técnicos o expertos en determinadas materias y/o labores de asesoría altamente
calificada de acuerdo a las disposiciones vigentes, y en la asignación 002, los "Honorarios Asimilados
a Grado". Siendo ello así, tratándose de los contratos precedentemente mencionados, es posible
concluir que en su celebración, la Administración no queda sujeta a las disposiciones de la ley 19886,
en conformidad a su artículo 3, letra a) (7241/07).
Las contrataciones a honorarios de personas naturales no pueden efectuarse acorde a la ley 18803,
preceptiva que permite a los servicios públicos regidos por el Título 11 de la ley 18575, encomendar
las acciones que indica, mediante la celebración de contratos, a las municipalidades o entidades de
derecho privado. Ello porque las contrataciones a honorarios de personas naturales, han de efectuarse
conforme al artículo 10 (actual artículo 11) de la ley 18834, complementado por el artículo 16 del
decreto ley 1608, de 1976, reglamentado por el decreto 98, de 1991, del Ministerio de Hacienda, cuyo
artículo 2, inciso segundo, permite contratar sobre la base de honorarios consistentes en una suma
alzada u otro sistema y por decreto supremo fundado del Ministerio correspondiente, a profesionales,
técnicos o expertos, de alta especialización para labores que por su naturaleza, no sean susceptibles
de asimilarse a posiciones de la Escala Única de Sueldos. Dicho precepto constituye una excepción
a la exigencia de contratar asimilado a grados de la EUS, pero no libera a la Administración de la
necesidad de ceñirse a las exigencias generales de que la contratación debe versar sobre labores
accidentales y no habituales de la institución, salvo que se trate de cometidos específicos. Tienen
la calidad de expertos quienes poseen un especial conocimiento de una determinada materia,
dada su práctica, habilidad o experiencia en la misma, situación que debe acreditarse mediante
documentación fidedigna (21358/03).
En los organismos centralizados, cuyo Jefe Superior no tiene la representación del Fisco, los
convenios a honorarios deben aprobarse por decreto supremo (32671/89 -complementado por
el13840/94 y el 21900/98-).
Por razones de índole presupuestario, los contratos a honorarios no pueden pactarse más allá del 31
de diciembre de cada año (15417/98).
No ha correspondido que una persona contratada a honorarios diera su visto bueno, mediante su
firma, a los documentos por los cuales se otorgaban los días administrativos, feriados, licencias u
otro tipo de derechos estatutarios, porque el articulo 11 de la ley 18834, establece que el contrato a
honorarios sólo procede para labores accidentales y, excepcionalmente, para cometidos específicos,
propios de las tareas habituales del servicio, pero no pueden desarrollar tareas que corresponden a
cargos de jefaturas, dada la transitoriedad de sus empleos, que se contrapone con la permanencia
y habitualidad que caracteriza a las labores directivas, sumado a que no poseen la calidad de
funcionarios públicos y, por ende, carecen de responsabilidad administrativa (8148/94, 2095/98,
34663/04, 23006/06).
Los contratos a honorarios con personas naturales que se paguen por mensualidades, se encuentran
sometidos al trámite de toma de razón ante la Contraloría General, en el caso de que éstos excedan
de 50 unidades tributarias mensuales, de acuerdo con lo dispuesto en el inciso segundo del numeral
séptimo del articulo 1 de la Resolución 520, de 1996, del Organismo Contralor, o al trámite de registro.
en el caso de que dichas mensualidades sean por un monto igual o inferior al indicado, según se
establece en el inciso segundo del numeral tercero del artículo 1O del mismo texto reglamentario.
salvo en los casos expresamente reconocidos por la jurisprudencia administrativa. en especial, en
el dictamen 14616, de 1991, y en los cuales puede prescindirse de la formalidad de celebrar un
convenio a honorarios, específicamente para los trabajos de gasfitería, electricidad, cerrajería y
lavandería y con la tarea de controlar la rendición de la Prueba de Aptitud Académica (actual Prueba
de Selección Universitaria- PSU) (14620/08).
Conforme a lo señalado en el inciso octavo del artículo 5 de la ley 19896, las normas sobre
inhabilidades e incompatibilidades administrativas establecidas en los artículos 54, 55 y 56 de la
ley 18575, Orgánica Constitucional sobre Bases Generales de la Administración del Estado, serán
aplicables a las personas contratadas a honorarios por los órganos o servicios públicos, debiendo
dejarse constancia en los contratos respectivos de una cláusula que así lo disponga. Luego, una
persona contratada a honorarios por la Defensoría Penal Pública, no puede, en el ejercicio libre de su
profesión de abogado, representar a los querellantes particulares en una causa en que dicha entidad
ejerce la defensa penal del imputado, ya que aquel servidor se encuentra afecto a la incompatibilidad
contemplada en el artículo 56 de la ley 18575 (54476/05).
de cualquiera de esas entidades o cuando sus propios intereses personales puedan pugnar con los
de algunas de ellas (18196/00, 41188/00, 12862/07).
Las prohibiciones de ingreso contempladas en el artículo 56 (actual artículo 54) de la ley 18575,
resultan aplicables a las personas contratadas a honorarios, no obstante que el cargo directivo con el
cual existe incompatibilidad sea desempeñado como subrogante, por cuanto quien subroga asume
en plenitud, con sus derechos, deberes, inhabilidades e incompatibilidades, salvo texto legal expreso
en contrario (40173/00).
Los contratos a honorarios que se celebren en diversos organismos públicos no son incompatibles,
cuando las cláusulas de tales convenios, no contemplen sujeción a horario o jornada de trabajo en
ninguna de las entidades (4289/07).
Si un mandato legal exige dedicación exclusiva para el desempeño de un cargo o función pública,
es improcedente que sus titulares puedan, además, prestar servicios sobre la base de honorarios
(32949/02, 4745/03).
Los certámenes que se ordenan o disponen por la autoridad administrativa para seleccionar a
personas que se desempeñarán en virtud de un contrato a honorarios, no se encuentran regulados
por la preceptiva que rige los procedimientos concursales llevados a cabo para seleccionar al
personal de la Administración Pública. Lo anterior, teniendo en cuenta que quienes sirven un empleo
de esa naturaleza no tienen la calidad de funcionarios públicos y se rigen sólo por las disposiciones
contenidas en sus respectivos contratos. Tratándose de contrataciones de prestación de servicios
personales sobre la base de honorarios, no es legalmente necesario convocar a un certamen para
tales efectos, pero cuando se opta por llamar a concurso, la medida obedece solamente a garantizar
con la mayor transparencia la selección adecuada de la persona que preste los servicios que se
requieren (35077/99, 14319/08, 19983/08).
Las personas contratadas a honorarios no pueden conducir vehículos estatales, salvo que una norma
de rango legal se los permita, dado que conforme al articulo 2 del decreto ley 799, de 1974, sólo
tendrán derecho a usar los vehículos para el desempeño de las funciones inherentes a sus cargos,
los funcionarios de los servicios públicos, por lo que tanto la conducción como el uso de esos bienes,
sólo puede corresponder a quienes tengan la calidad de funcionarios de las respectivas entidades.
Reafirma lo anterior la circunstancia que diversas leyes de presupuesto han previsto expresamente
la posibilidad que contratados a honorarios conduzcan vehículos estatales, entre otros, respecto del
Servicio Agrícola y Ganadero y del Instituto de Desarrollo Agropecuario, disposiciones que carecerían
de razón de ser si se entendiera que para ello es suficiente con lo establecido en el mencionado
decreto ley 799 (32204/95, 22379/99, 46248/04).
Corresponde pagar a una persona natural los honorarios correspondientes a servicios efectivos
realizados entre el 9 de noviembre de 2006 y el 4 de diciembre de 2006, aun cuando el contrato
respectivo no fue aprobado administrativamente. Ello, porque los honorarios pactados constituyen
la contraprestación al desempeño efectivo de las funciones asignadas al prestador en el contrato.
La circunstancia de no haberse dictado la respectiva resolución de nombramiento no constituye
fundamento suficiente para que el servicio se excepcione de pagar los estipendios correspondientes
al lapso en que la afectada prestó efectivamente servicios, más aún, si se considera que ésta asumió
de inmediato sus funciones por autorización expresa de la autoridad administrativa, antes de dictarse
dicha resolución (38146/07).
Es improcedente efectuar descuentos por concepto de previsión y salud en los estipendios que se
pagan a las personas que se desempeñan sobre la base de honorarios (4346/90, 30091/92).
Las personas contratadas a honorarios no gozan, de conformidad a las normas de la ley 19345, que
dispone la aplicación de la ley 16744, sobre Seguro Social contra Riesgos de Accidentes del Trabajo
y Enfermedades Profesionales, a los trabajadores del sector público que indica, de la protección
que otorga esta última ley. Ello, porque la delimitación que efectúa el articulo 11 de la ley 19345
respecto del alcance de la voz "trabajador" que emplea, tiene por único y exclusivo objeto aclarar
que aquella expresión alude únicamente a las personas que quedan comprendidas en el artículo 1
de la ley 19345, esto es, todos aquellos servidores que según los diversos estatutos funcionarios que
los pueden regir (Estatuto Administrativo, Estatuto Administrativo de los Funcionarios Municipales,
Código del Trabajo, etc.), tienen la calidad de trabajadores, personal y funcionarios de las entidades
referidas en aquel artículo 1 (48505/06).
No procede entender que han servido empleos a contrata las personas a honorarios durante extensos
períodos en una entidad, a quienes se les ha encarg-ado atender, a través de cometidos específicos,
labores habituales del servicio. Lo expuesto, por cuanto en el ordenamiento jurídico existe una clara
y manifiesta distinción entre la situación en que se encuentra quien ocupa un cargo público, sea de
planta o a contrata y aquellos que trabajan recibiendo honorarios. En consecuencia, una asimilación
como la reseñada únicamente resultaría procedente si una norma legal la permitiera (20045/03).
Las inasistencias al trabajo de personas contratadas a honorarios por causa de enfermedad, deben
entenderse justificadas, de conformidad con el articulo 45 del Código Civil, por tratarse de un
imprevisto al que no es posible resistir, debiendo acreditarse la inasistencia con el certificado médico
correspondiente. En consecuencia, resulta improcedente que se le haya deducido de sus honorarios,
las sumas correspondientes a los períodos en que registró dichas inasistencias, debiendo por tanto
el servicio reintegrarle el valor de los honorarios correspondientes a los períodos en que se encontró
ausente con licencia médica, y sin derecho a percibir subsidios por la respectiva entidad previsional
(62903/72, 8494/83, 2122/94, 21810/04).
No corresponde otorgar a los contratados a honorarios facilidades de pago o condonar las sumas que
adeuden por concepto de beneficios pecuniarios percibidos indebidamente, conforme al artículo
De acuerdo con el articulo 61 de la ley 20000, los abogados contratados a honorarios en los servicios
o instituciones de la Administraciqn del Estado no pueden patrocinar ni actuar como apoderados o
mandatarios de imputados por crímenes, simples delitos o faltas por tráfico ilícito de estupefacientes
o sustancias sicotrópicas. Corresponderá a la autoridad administrativa sancionar a quien vulnere
estas obligaciones. Como a las personas contratadas sobre la base de honorarios no se les
aplica el Estatuto Administrativo, las infracciones que ellos cometan no pueden ser investigadas ni
sancionadas conforme a esa normativa. Sin embargo, y con el objeto de acreditar la existencia de
la supuesta infracción que pueda haber cometido un abogado contratado a honorarios en un servicio
público, y de respetar los principios del debido proceso a que se encuentran afectos todos quienes
prestan servicios a un organismo del Estado, será necesario que se efectúe una breve investigación
en la que el imputado pueda no sólo conocer los hechos de que se le acusa, sino que, además, hacer
uso de su derecho a defensa. Luego, los servicios públicos se encuentran obligados a efectuar el
indicado procedimiento sumarial para disponer el término del contrato de un abogado que presta sus
servicios a honorarios y que habría incurrido en alguna de las prohibiciones previstas en el articulo
61 de la ley 20000 (52088/07).
Inciso 1•
Se entiende por labores accidentales y no habituales del Servicio, aquellas que siendo propias del
organismo, son ocasionales, es decir, circunstanciales y distintas de las realizadas por el personal
de planta o a contrata (25095/94 ).
La frase "resolución de la autoridad correspondiente" utilizada por el inciso primero del artículo 1O
(actual artículo 11) del Estatuto Administrativo, es el acto administrativo que emana de un órgano con
facultad para hacer el nombramiento (32671/89 -complementado por el13840/94 y el 21900/98-,
14913/90).
Por regla general, la contratación a honorarios sólo procede para realizar tareas accidentales y,
excepcionalmente, para efectuar labores habituales cuando se trata de cometidos específicos,
claramente determinados e individualizados, sin que lo anterior signifique que una entidad pública
pueda llegar a desarrollar sus funciones permanentes a través de este procedimiento (25333/90,
27604/97, 2095/98, 40021/98, 20045/03).
No procede que a una persona contratada a honorarios como experto para desarrollar funciones
específicas se le encomienden otras distintas, ya que el artículo 1O (actual articulo 11) de la ley
18834, permite contratar bajo esa modalidad a profesionales y técnicos de educación superior o
expertos en determinadas materias cuando deben realizarse labores accidentales y no habituales
(8284/04).
Cuando los convenios a honorarios son celebrados entre organismos descentralizados y personas
naturales, deben ser aprobados por una resolución de la autoridad correspondiente, cualquiera sea
la modalidad de pago que se pacte, esto es, asimilado a grado, por una suma alzada o de acuerdo
a otro sistema. Lo anterior es válido tanto cuando el convenio dice relación con la realización de
funciones accidentales y que no sean las habituales de la institución, como de los que se celebren
para la realización de cometidos específicos (32671/89 -complementado por el 13840/94 y el
21900/98-, 39565/99).
Sólo puede contratarse sobre la base de honorarios consistentes en una suma alzada u otro sistema
cuando se trate de profesionales, técnicos o expertos, cuyas labores, por su naturaleza, no sean
susceptibles de ser asimiladas a posiciones de la Escala Única de Sueldos (27604/97).
Respecto a los extranjeros, según lo dispone expresamente el inciso primero del articulo 10 (actual
articulo 11) del Estatuto Administrativo, para poder ser contratados a honorarios conforme a ese
precepto estatutario, deben encontrarse en posesión de un titulo profesional, reconocido, revalidado
o convalidado por la Universidad de Chile, o habilitante según tratados internacionales, relacionado
con la naturaleza de los servicios que prestarán y no es posible contratarlos en calidad de expertos,
a diferencia de lo que ocurre en el caso especial del articulo 2 del decreto 98, de 1991, del Ministerio
de Hacienda, precepto que establece una modalidad especial consistente en la fijación de honorarios
a suma alzada, que no hace distinción entre naturales del país o extranjeros, y que resulta aplicable,
por ende, a ambas clases de personas (18347/04).
Inciso 2•
Esta norma faculta excepcionalmente contratar a personas naturales a honorarios para la realización
de cometidos específicos propios de las tareas habituales del servicio, entendiéndose por cometidos
específicos las labores puntuales, claramente determinadas e individualizadas (822/95, 36610/01).
Sólo pueden efectuarse contrataciones para labores habituales, cuando se trate de cometidos
específicos según el artículo 1O (actual articulo 11 ), inciso segundo, de la ley 18834, que autoriza
aquéllas tratándose de labores puntuales, claramente determinadas e individualizadas y sin que
pueda significar que un servicio llegue a desarrollar sus funciones permanentes a través de ese
procedimiento (22650/96, 27604/97, 7301/02, 23572/04, 55757/04).
Según la norma contenida en el inciso segundo del articulo 11 de la ley 18834, puede contratarse a
honorarios la prestación de servicios para cometidos especificas conforme a las reglas generales,
esto es, labores puntuales, claramente individualizadas y determinadas en el tiempo, los que
pueden consistir en funciones propias y habituales de la institución. Pero ello no puede significar
que, mediante esa modalidad, un ente público llegue a desarrollar sus labores permanentes, pues
ello vulneraria el Estatuto Administrativo y las bases mismas de la organización del Estado. Además,
esta prestación de servicios personales debe ser excepcional y eminentemente transitoria, puesto
que la condición de cometido especifico se pierde con su reiteración en el tiempo, en que pasa a
transformarse en una labor permanente y, por lo tanto, habitual. La reiteración periódica de estos
cometidos específicos desvirtua la existencia misma de la excepción y, finalmente, conlleva una
desviación de facultades. Es así como la atribución de contratar personal a honorarios no puede
significar que el órgano público llegue a desarrollar indefinidamente sus labores habituales,
utilizando los servicios de personas contratadas conforme a esa modalidad, pues para tales fines
el ordenamiento jurídico contempla las dotaciones de personal de planta y los empleos a contrata.
No constituye un cometido especifico la simple enumeración de labores a desarrollar, sobre todo
cuando éstas conforman la totalidad de las tareas propias de la función que se encomienda y se
prolongan en el tiempo. Tampoco se configuran cometidos específicos si se contrata por periodos
cortos, reiterados sucesivamente. La circunstancia de registrarse contratos anteriores similares, no
obsta a que la Contraloria General modifique su criterio si un nuevo estudio o las situaciones del
caso lo ameritan, especialmente si se observa distorsión en la aplicación de las normas. Así, si una
entidad pública necesita recurrir a los contratos a honorarios por la inadecuada composición de
su planta de personal y por el incremento del volumen y complejidad de tareas que han llegado a
ser permanentes, le corresponde gestionar las modificaciones estatutarias o de presupuesto que
requiera su funcionamiento (20045/03, 57217/05).
Los contratados a honorarios según este inciso, deben reunir algunas de las calidades a que alude
el inciso primero de este mismo articulo 1O (actual articulo 11 ), esto es, poseer la condición de
profesionales y técnicos de educación superior o expertos. Los expertos no requieren tener la
calidad de profesionales o técnicos, sólo es necesario que posean un especial conocimiento de una
determinada materia, dada su práctica, habilidad o experiencia en la misma, situación que debe ser
acreditada por el interesado mediante documentación fidedigna (44597/99).
El fundamento legal de las contrataciones a honorarios, es una norma especial a la regla general
establecida en el Estatuto Administrativo, debiendo interpretarse restrictivamente, de tal modo que
sólo puede emplearse esa modalidad cuando deban realizarse labores accidentales que no sean las
habituales del organismo, o la prestación de servicios para cometidos específicos, esto es, tareas
puntuales que deben individualizarse de forma precisa, determinada y circunscrita a un objetivo
especial, siendo imposible encomendar el desarrollo de cometidos genéricos. Enseguida, y según
el Diccionario de la Real Academia, el término "asesorar", empleado en un contrato a honorarios, no
cumple las características de precisión y determinación exigidas por la ley, pues se define como dar
consejo o dictamen, tomar consejo del letrado asesor o consultar su dictamen; tomar consejo una
persona de otra o ilustrarse con su parecer. Así, un cometido funcionario en términos de "asesoría
de" es una expresión amplia y ambigua, y fuera de la ley, por cuanto dependiendo de la conducta
del asesor, la asesoría puede abarcar cometidos genéricos e indeterminados o la no realización de
ninguna labor en particular, dado que el acto de "asesorar" no satisface el requisito de especificidad
y precisión establecido por el legislador (45711/01).
Inciso 3•
Si bien las personas contratadas a honorarios no se rigen por las leyes 18834 o 18883, Estatuto
Administrativo y Estatuto Administrativo para Funcionarios Municipales, respectivamente, sino por las
estipulaciones de sus correspondientes acuerdos de voluntades, es posible concederles análogos
derechos o beneficios que los establecidos para los servidores a quienes si se aplican esos textos
legales, como feriados, licencias, permisos, horas extraordinarias, cursos de capacitación y otros.
Para ello, es menester que se trate de beneficios económicos o estatutarios semejantes a los que se
reconocen a los funcionarios públicos en los mencionados cuerpos legales, siempre que respecto de
los contratados a honorarios se cumplan las mismas condiciones y requisitos que los que se exigen
para que los funcionarios públicos impetren tales franquicias, todo ello, por cierto, en la medida
que tales beneficios se hayan expresamente acordado en el respectivo contrato. En todo caso,
estos beneficios no pueden ir más allá de los que la ley establece para quienes tienen la calidad de
funcionarios públicos (12304/96, 28235/01,52135/02,29501/03, 14471/04).
El pacto por el cual la Administración contrata a honorarios los servicios de una persona, no sólo
constituye el marco de los derechos y obligaciones de quien presta los servicios, sino que también
de quien los requiere. La circunstancia de no aplicarse a estos servidores las normas del Estatuto
Administrativo, y que se rijan, en cambio, por las reglas que establece el acuerdo respectivo, es
plenamente concordante con el articulo 1545 del Código Civil, que obliga a los contratantes a ceñirse
la Constitución Política, reiterado por el artículo 2 de la ley 18575, Orgánica Constitucional de Bases ~
OJ
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Generales de la Administración del Estado, y a la garantía contemplada en el artículo 19, W 24, de OJ
la Carta Fundamental, sobre derecho de propiedad. A contrario sensu, si la mencionada facultad se Cl
incluye expresamente en los respectivos convenios, la Administración podrá poner término anticipado -"'
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a los servicios prestados a honorarios (12473/02, 153/04, 45126/07). :::!
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Los contratos a honorarios deben regirse por las reglas contempladas en los respectivos convenios,
cuyos contenidos deben necesariamente ajustarse al carácter público que posee la parte que
requiere de los servicios que se prestarán, lo que obliga a la autoridad administrativa a considerar y
respetar los principios que rigen su accionar, entre los cuales, y para estos efectos, tienen especial
importancia los de probidad, eficiencia y el respeto a la igualdad ante la ley. En otras palabras, si
bien las personas contratadas a honorarios no se rigen por el Estatuto Administrativo, ello no obsta a
que se les hayan hecho aplicables ciertos principios rectores de la función pública, como son los ya
mencionados, atendido que desarrollan labores públicas, aun cuando no son funcionarios públicos
ni ejercen un cargo de tal naturaleza (8233/01, 129/04,25694/05, 14396/08).
Admitir una aplicación rigurosa del principio de libertad contractual en la celebración de los pactos a
honorarios importaría debilitar notablemente otros principios vigentes en el ámbito de la Administración
del Estado y que, por el interés público que persiguen, deben tener preponderancia respecto de
aquellos que gobiernan la contratación privada. En este contexto, permitir que en virtud de la libertad
contractual que se reconoce respecto de los contratos a honorarios, pueda pactarse toda clase de
beneficios -como, por ejemplo, indemnización por años de servicios al término del plazo acordado
en el respectivo contrato- afectaría potencialmente el principio de probidad administrativa, toda vez
que, atendido que no existirían límites precisos para esos acuerdos, fácilmente se verían debilitados
los intereses públicos existentes en la contratación de las labores de que se trata, en beneficio de
los intereses particulares del prestador de los servicios; y en desmedro de los intereses estatales
(25694/05, 37454/05). En ausencia de parámetros objetivos que permitan restringir los beneficios
que se acuerden, lo anterior podría implicar también un severo daño a la eficiencia con que la
Administración del Estado debe gestionar sus recursos financieros, según se ordena en los artículos 3
y 5 de la ley 18575, toda vez que por esta vía pueden otorgarse derechos excesivos que menoscaben
su patrimonio de una manera que no guarde relación con las contraprestaciones pactadas. Aún
más, la aplicación irrestricta de la libertad contractual en los pactos a honorarios que celebren los
órganos administrativos, importaría vulnerar el principio de igualdad ante la ley, conforme al cual,
en lo que interesa, y según lo dispone el artículo 19, W 2, de la Constitución Política, la autoridad
administrativa se encuentra impedida de efectuar diferencias arbitrarias (25694/05).
No resulta lógico entender que quienes excepcionalmente son llamados a prestar funciones para
la Administración del Estado, sin integrarla, tengan derechos que el ordenamiento jurídico no otorga
a quienes pertenecen a ella y que, por mandato legal, están naturalmente destinados a ejecutar las
tareas propias de la institución respectiva. Reconocer a las autoridades administrativas la facultad de
celebrar contratos a honorarios con la posiblidad de pactar beneficios que exceden en su naturaleza
y cuantía a los que el ordenamiento concede a los funcionarios públicos o, más aún, franquicias
que ni siquiera se contemplan para estos últimos, como la indemnización por años de servicio,
constituye una diferencia que discrimina arbitrariamente en perjuicio de los empleados de planta y a
contrata, quienes no gozan de un derecho a ser indemnizados pecuniariamente por la circunstancia
de cumplirse los plazos de nombramiento o contratación. Desde el punto de vista de la jerarquía
normativa, el permitir que en los contratos a honorarios se contemplen beneficios que no se conceden
a los empleados de planta o a contrata, o que sean superiores a los que si se les reconocen a estos
últimos, constituiría también una diferencia arbitraria, pues, de conformidad con lo señalado en el
articulo 62 (actual articulo 65) N's. 4 y 6 de la Constitución Política, en relación con el articulo 60
(actual articulo 63) N' 14, de esa Carta Fundamental, el otorgamiento a los funcionarios públicos de
beneficios económicos o de seguridad social, requiere de una disposición legal que asilo establezca,
en cambio, para las personas contratadas a honorarios bastaría el solo acuerdo de voluntades entre
éstos y la autoridad administrativa correspondiente para concederles la indemnización de que se
trata (25694/05).
Las personas contratadas a honorarios sólo podran ser objeto de una investigación y de una sanción
cuando hayan pactado expresamente tal posibilidad. No corresponde someter al trámite de toma de
razón las resoluciones que impongan castigos a quienes tengan esa condición (4611/98). Lo anterior
es un corolario que se deriva de la circunstancia de que dichas personas carecen de responsabilidad
administrativa (50013/00, 12420/03).
Para que las contratadas a honorarios tengan derecho a los beneficios sobre protección a la
maternidad, ellos deben quedar establecidos expresamente en el respectivo contrato, puesto que
tal beneficio sólo corresponde a las funcionarias de planta y a contrata, calidad jurídica que aquéllas
no revisten, y tienen como única norma reguladora de sus relaciones con la Administración el
respectivo acuerdo, de modo que sólo poseen los beneficios estipulados en dicho pacto. Además, la
Convención sobre Derechos del Niño y la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de
Discriminación contra la Mujer, no consagran de manera especifica el derecho de la mujer trabajadora
para amamantar o alimentar a sus hijos menores de edad, sino que se limitan a establecer preceptos
de carácter general a favor de aquéllos y constituyen obligaciones para los Estados Partes, quienes
deben adoptar las medidas legislativas, administrativas o de otra índole, para hacerlas efectivas. En
el evento que en los respectivos convenios a honorarios se hubiere pactado el derecho a licencias
médicas (que abarcan las maternales), las interesadas tienen derecho al pago de las mismas sólo
durante el periodo de vigencia del contrato, el que no puede renovarse en virtud del aludido fuero
(25704/91, 2122/94, 18465/96, 1983/97,47927/06, 46985/07).
Dado que en nuestra legislación no existe nungún requisito relacionado con la salud que impida
prestar servicios en un organismo del Estado en virtud de un contrato a honorarios -a diferencia de
lo que ocurre para desempeñar un cargo público, en que se requiere salud compatible, de acuerdo
a lo establecido en el articulo 12, letra e), de la ley 18834-, no resulta procedente hacer extensiva tal
exigencia a quienes cesaron en funciones en la Administración por haberles sido declarada su salud
irrecuperable y sean posteriormente contratados sobre la base de honorarios, toda vez que éstos
no se rigen por el referido Estatuto. Tampoco se encuentran sujetos a la limitación contenida en el
articulo 113 del citado texto legal, pues ella dice relación, exclusivamente, con la reincorporación a
la Administración del Estado, es decir, constituye una inhabilidad referida únicamente al ingreso a
un cargo o empleo público, ya sea en calidad de planta o a contrata, razón por la cual, no resulta
procedente hacerla extensiva a las contrataciones que sobre la base de honorarios efectuén los
servicios públicos. Tales conclusiones se conforman, además, con lo dispuesto en la Constitución
Política en su artículo 19, N' 16, en cuanto asegura a todas las personas la libertad de trabajo y
su protección. No obstante lo anterior, las autoridades respectivas deberán ponderar si, en cada
caso, las condiciones de salud que motivaron la declaración de irrecuperabilidad, constituyen un
impedimento para la prestación efectiva y oportuna de los servicios que se requiere contratar sobre
la base de honorarios (14396/08. Reconsidera toda jurisprudencia administrativa contraria).
personal de una entidad pública, condición que no reúne quien presta servicios en virtud de ese tipo
de acuerdo de voluntades (8238/01 ).
Los contratados a honorarios no tienen derecho a las compensaciones y beneficios que otorga la
ley 19699 a los estudiantes de carreras técnicas de nivel superior, porque los mismos proceden sólo "'
(])
respecto de quienes revisten la calidad de funcionarios públicos, requisito que no reúnen quienes ~
Ql
e
se desempeñen a honorarios en la Administracion. Ello, por cuanto, sus derechos y obligaciones (])
serán aquellos estipulados en los respectivos contratos y no se regirán por las normas del Estatuto G
aplicable al servicio en que laboren, careciendo de los derechos que rigen para los empleados -"'
o ro
públicos (17538/01). ,:; E
¡=~
Es improcedente pactar en un contrato a honorarios cláusulas que modifiquen lo establecido en las
leyes previsionales, aun cuando ello fuere en beneficio del contratado, por cuanto implicaría vulnerar
el artículo 60 (actual artículo 63), N"s. 4 y 14, en relación con el 62 (actual artículo 65), inciso cuarto,
N' 6, de la Constitución Política de la República, que dispone que todo lo referente al régimen
previsional y de seguridad social debe ser materia de ley, lo cual incluye las prestaciones que derivan
de las licencias médicas (26264/85).
Los contratados a honorarios pueden ser comisionados al extranjero, aplicarse a su respecto las
disposiciones protectoras de la maternidad, usar la casa habitación destinada al Servicio, concurrir
a cursos de capacitación y gozar de feriados, licencias médicas y permisos, siempre que ello se
estipule en los correspondientes convenios (13403/92, 21345/99, 32214/00, 32423/00).
Es improcedente fijar en los contratos a honorarios una jornada extraordinaria propiamente tal, pues
esa es una modalidad de desempeño específica de los funcionarios, cuya jornada no emana de un
contrato sino directamente de la ley. No obstante, en el evento de pactarse una jornada completa, no
existen impedimentos legales par¡:¡ pagar un honorario adicional por trabajos a realizarse más allá
de dicha jornada (22355/93).
En caso de incumplimiento por parte del prestador del servicio, el pago del honorario carece de
causa, por lo que, si se hubiere efectuado, procede su reintegro, ya que la infracción contractual que
lo hace procedente origina un crédito en favor del Fisco o de la entidad descentralizada de que se
trate, el cual sólo se extinguirá cuando hubiere transcurrido el plazo general de prescripción de las
obligaciones contemplado en el artículo 2515 del Código Civil, esto es, cinco años contados desde
su exigibilidad (31209/02).
La circunstancia que se incluyan cláusulas que contemplen derechos y obligaciones similares a los
previstos en el Estatuto Administrativo, no autoriza para considerar a los contratados a honorarios
como funcionarios públicos (39451/97).
Los contratados a honorarios están impedidos para desempeñar la función de fiscal instructor de un
sumario, porque no se rigen por el Estatuto Administrativo (29537/89, 5156/91).
Interior, Reglamento de Extranjería; 1545 del Código Civil; 22 de la ley 20232, de Presupuestos del
Sector Público para el año 2008; decreto 854, de 2004, del Ministerio de Hacienda, que Determina
Clasificaciones Presupuestarias y Oficios Circulares N"s 78, de 2002 y 3, de 2003, ambos del
Ministerio de Hacienda, que establecen las modalidades a que deberán ajustarse las contrataciones
a honorarios.
Comentarios:
El contrato a honorarios si bien no lo define esta disposición, se encuentra regulado en ella de
manera pormenorizada de la misma forma como lo hacía el artículo 8 del anterior Estatuto, contenido
en el DFL 338, de 1960. En este sentido puede afirmarse que el contrato a honorarios constituye
un mecanismo de prestación de servicios que permite a la Administración contar con asesoría de
especialistas en determinadas materias, cuando deban realizarse funciones propias del respectivo
Servicio que presenten un carácter ocasional, especifico, puntual y no habitual. La contratación a
honorarios procederá cuando exista una imposibilidad de ejecución directa de la prestación por
parte de una institución pública, de tal forma que con sus recursos humanos propios no tenga la
capacidad técnica o la disponibilidad temporal para ejecutar eficiente y oportunamente los trabajos
encomendados. La labor que se contrate debe ser útil a la institución, por lo que su omisión o su
deficiente cumplimiento han de acarrear un perjuicio al logro de sus fines y tareas.
El artículo 11 del Estatuto Administrativo regula dos tipos de contratos a honorarios, a saber:
1) En general, cuando se trata de cumplir labores accidentales y que no sean las habituales de la
institución, entendiéndose por labores accidentales y no habituales, aquellas que siendo propias del
mismo, son ocasionales, es decir, circunstanciales y distintas de las realizadas por el personal de
planta o a contrata. Las tareas habituales del Servicio deben efectuarse por el respectivo personal del
organismo público. En este caso puede contratarse a honorarios a profesionales, técnicos o expertos,
sean éstos chilenos o extranjeros, entendiéndose que reúnen las dos primeras calidades quienes
poseen los títulos respectivos de acuerdo con el artículo 35 de la ley 18962, Orgánica Constitucional
de Enseñanza, y por expertos, quienes sin ostentar necesariamente tales títulos, poseen especial
conocimiento de una materia, dada su práctica, habilidad o experiencia en la misma, la que debe
acreditarse mediante documentación fidedigna.
2) Excepcionalmente, se permite la contratación a honorarios para desarrollar cometidos específicos
propios de las tareas habituales y permanentes del Servicio, entendiéndose por tales, labores
puntuales, determinadas, individualizadas y precisas.
De acuerdo con el artículo 108 del decreto 250, de 2004, del Ministerio de Hacienda, reglamento de
la ley 19886, los convenios que se celebren con personas naturales, que involucren la prestación
de servicios personales del contratante, deberán ajustarse a las normas del decreto supremo 98, de
1991, del Ministerio de Hacienda, los artículos 1O (actual artículo 11) de la ley 18834, en su caso, y 33
del decreto ley 249, de 1973, o del artículo 13 del decreto ley 1608, de 1976, y demás disposiciones
que complementan o reglamentan dichos textos legales.
La contratación a honorarios debe efectuarse por la autoridad facultada para hacer el nombramiento,
quien no podrá ponerle término anticipado, salvo que exista una cláusula de reserva en tal sentido,
en el respectivo convenio.
carácter de servidores estatales. Excepcionalmente, a los contratados a honorarios a los que las
leyes de presupuestos les han dado el carácter de "agentes públicos", les afecta la responsabilidad
administrativa en los mismos términos que a los funcionarios.
lj)
En cuanto a las modalidades de pago que se pacten, el articulo 11 del Estatuto Administrativo
no hace distingos. Ello supone que a su amparo es posible celebrar cualquier tipo de contratos ~"'
a honorarios, esto es, asimilados a grados, por una suma alzada o de acuerdo a otro sistema. "'e:
El decreto o resolución que disponga una contratación a honorarios deberá identificar la fuente "'
(!)
-W
presupuestaria que la financie, la que puede provenir del Subtitulo 21 ajustado al limite de la Glosa o"'
correspondiente, Subtítulos de Transferencias para la administración de programas o Subtítulo de 'S-É
---d
Inversión cuando guarden relación directa, necesaria e integral con los requerimientos propios que i=z
demanda la ejecución física del proyecto de inversión respectivo.
De acuerdo con el precepto en comento, es posible contratar sobre la base de honorarios a personas
naturales y también a funcionarios públicos, pero el desempeño en dicha calidad de estos últimos,
sólo puede realizarse fuera de la jornada habitual de trabajo.
Cabe tener presente que, según lo ordena el articulo 5 de la ley 19896, los decretos o resoluciones
que aprueben la contratación de personas naturales a honorarios, en los organismos y servicios
públicos incluidos en la Ley de Presupuestos, cualquiera que sea el ítem de imputación, deberán
contar con la visación del Ministerio correspondiente, para lo cual se acompañará un certificado
emanado del órgano o servicio respectivo en que conste que el monto comprometido se ajusta a
la disponibilidad presupuestaria y, en su caso, a la autorización máxima otorgada en la referida ley
para la anualidad respectiva. El procedimiento señalado se aplicará igualmente a las contrataciones
en el mismo servicio con aplicación de lo dispuesto en la letra d) del artículo 87 de la ley 18834.
Las personas contratadas a honorarios, bajo cualquier forma que se exprese el pago, deberán
informar al o los Jefes del Servicio respectivo, a través de la unidad correspondiente, mediante
una declaración jurada simple, si prestan servicios en cualquier calidad jurídica en otra repartición
pública. En tal caso, deberán individualizar al otro Servicio, especificando la calidad jurídica con que
laboran en él, el monto de los emolumentos correspondientes, las tareas contratadas y la duración
de la prestación de sus servicios. Copia de los antecedentes mencionados deberá ser remitida a la
Contraloría General de la República. Al momento de suscribirse un contrato a honorarios, el Servicio
correspondiente tendrá la obligación de requerir la información señalada en el inciso tercero del
artículo 5 de la referida ley 19896, debiendo el Jefe de Servicio constatar que no se produzca un
actual o eventual conflicto de intereses por el cumplimiento de las funciones contratadas, y certificar
tal circunstancia. Se entenderá que hay conflicto de intereses cuando las labores encomendadas en
los diversos organismos pongan a la persona a quien se le ha encomendado tareas en ambos, en
situación de lesionar los objetivos de cualquiera de esas entidades o cuando sus propios intereses
personales puedan pugnar con los de alguna de ellas. En el caso que una persona tenga más
de un contrato a honorarios en entidades públicas, requerirá de la visación previa, en el acto
administrativo correspondiente, del ministro respectivo. La misma visación será exigible cuando la
persona contratada a honorarios tenga, además, un contrato con proveedores o contratistas o con
instituciones privadas que tengan convenios para ejecución de proyectos o se le hayan otorgado
transferencias, en relación con la repartición en que presta servicios. Se exceptúan de estas normas
las labores de docencia que dichas personas desarrollen en instituciones de educación superior.
En relación con las exigencias mencionadas, la Contraloría General ha precisado que ellas rigen
sólo respecto de los organismos incluidos en la Ley de Presupuestos y no se aplican a las entidades
que gozan de autonomía constitucional.
Luego, los incisos octavo y noveno del mencionado artículo 5 de la ley 19896, que sí son aplicables a
todos los organismos de la Administración del Estado, disponen que las normas sobre inhabilidades
Por último, es importante señalar que los convenios para la prestación de servicios personales por
personas jurídicas, a los organismos e instituciones regidos por el decreto ley 249, de 1973, que no
se relacionen con la construcción de obras, no se rigen por el articulo 11 del Estatuto Administrativo,
sino que por los artículos 34 de la ley 19886; 16 del decreto ley 1608, de 1976; 105 a 107 del decreto
250, de 2004, del Ministerio de Hacienda.
ARTICULO 12.- Para ingresar a la Administración del Estado será Ley 18.834, Art. 11.
necesario cumplir los siguientes requisitos:
b} Haber cumplido con la ley de reclutamiento y movilización, cuando Ley 18.834, Art. 11.
fuere procedente;
f) No estar inhabilitado para el ejercicio de funciones o cargos Ley 19.653, Art. so, 1.
públicos, ni hallarse condenado por crimen o simple delito.
Interpretación:
Letra a)
No es posible contratar en la Administración del Estado a una persona que no cumple el requisito
de edad mínima que para ingresar a ella establece esta norma. Tampoco existe una disposición
que permita a la Contraloría General de la República eximir del cumplimiento de dicha exigencia
(15881194).
Podrá ser contratada en el Servicio Nacional de la Mujer una extranjera de nacionalidad sueca,
cuando no exista otro postulante idóneo de nacionalidad chilena y se fundamente la nominación
por la autoridad, especificándose su especialidad y acompañando el certificado o titulo reconocido,
revalidado o convalidado en conformidad a la ley (10992/01).
Es improcedente contratar a extranjero como auxiliar en un Centro de Referencia de Salud, dado que,
además de no cumplir con los requisitos del artículo 11 (actual artículo 12), letra a) de la ley 18834,
configura la norma de excepción que faculta a la autoridad llamada a efectuar el nombramiento, para
designar en empleos a contrata, a extranjeros que posean conocimientos científicos o de carácter
especial, mediante una resolución fundada que especifique la especialidad requerida para el empleo
y el título (31400/04).
Letra b)
Letra e)
Letra d)
El requisito de poseer el nivel educacional o el título profesional o técnico que por la naturaleza
del empleo exija la ley, constituye una referencia del legislador a los requerimientos especiales
contemplados en los diversos ordenamientos de los servicios que conforman la Administración del
Estado, que son los que deben cumplir quienes deseen ingresar a dichos organismos (32781/96,
23855/99, 28722/01, 12815/02).
Los requisitos de estudio que la ley 18834 establece para ingresar a la Administración Pública,
deben ser cumplidos tanto por los funcionarios de planta como por los a contrata (35295/90, 6669/91
-reconsiderado parcialmente por el15712/92-, 25525/91, 32781/96).
Una persona que sólo acredita sexto año primario o sexta preparatoria no satisface la exigencia
de haber aprobado la educación básica, cuya duración es de ocho años (6669/91, 21222/94,
32117/01).
<1)
Corresponde a la Universidad de Chile revalidar los títulos profesionales obtenidos en el extranjero, (!)
-¡¡;¡
sin perjuicio de lo dispuesto en los tratados internacionales (27107/90, 11914/92,2881/93,25421/94, :;;
35358/00). e
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(!)
-Ul
La ley 19074 habilita a los chilenos que salieron del pais antes del11 de marzo de 1990 por razones
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E:
de fuerza mayor y que regresan con titulas profesionales o técnicos otorgados por Universidades :~o
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extranjeras, para ejercer en Chile en la forma y condiciones que señala, con los mismos beneficios y 1-Z
as.ignaciones establecidos o que se establezcan en la ley para quienes poseen diplomas de entidades
de enseñanza superior reconocidas por el Estado (26635/93).
La exigencia de un titulo profesional de una carrera de a lo menos diez semestres para ocupar
un cargo en la Administración, sólo se cumple con un diploma de alguna carrera, indeterminada,
de esa duración. En el evento que un titulo de una carrera de diez semestres se obtenga en otra
Universidad o Institución de enseñanza superior en un menor tiempo, por ejemplo ocho semestres,
el diploma otorgado por esta última no habilita para acceder a la mencionada plaza. En cambio,
tratándose de un titulo conferido por una institución de educación superior que modificó el plan
de estudios, aumentando de seis a ocho los semestres que comprende la carrera, los diplomas
concedidos cuando el respectivo currículo contaba únicamente con seis, permiten a quienes los
poseen ingresar a un empleo para el que se requiere uno de una carrera de ocho semestres (7532/93,
9995/93, 13402/93).
Las personas que de acuerdo con el articulo 1 transitorio de la ley 12851, se inscribieron en
su oportunidad en el Colegio de Ingenieros, conservan y mantienen la calidad habilitante para
ser designadas en cualquier cargo de la Administración Pública que exija el titulo de ingeniero
(3005/95).
Letra e)
Un ex servidor que cesó en actividad por haber sido sancionado con una medida disciplinaria
expulsiva no puede acceder a un cargo público, salvo que se haya cumplido el plazo de cinco
años a que alude esta norma y dictado el correspondiente decreto supremo de rehabilitación. Esta
última exigencia debe satisfacerse pese a que en la ley 18834 no se hace mención a ella, dado
lo dispuesto en el articulo 38, letra f), de la ley 10336, precepto que tiene amplio alcance, siendo
aplicable a todos los ex funcionarios destituidos o separados de sus empleos, cualquiera sea la
naturaleza jurídica del Servicio al que pretendan reincorporarse y sin que resulte relevante que
las leyes orgánicas o estatutos de personal correspondientes, contemplen o no un procedimiento
especifico de rehabilitación (12074/97).
La rehabilitación es un trámite administrativo que únicamente tiene por objeto restituir el requisito
de idoneidad moral al ex servidor afectado por una medida expulsiva. El interesado debe pedirla al
Presidente de la República, a quien corresponde privativamente la facultad de rehabilitar, a través
del Ministerio del que depende o con el cual se relaciona el organismo al que pertenecía. Con todo,
la rehabilitación no exime al ex funcionario favorecido de cumplir los restantes requisitos de ingreso a
la Administración. Tampoco confiere el derecho a reclamar la reincorporación como obligatoria, sino
únicamente a pedirla, encontrándose la autoridad llamada a hacer el nombramiento, facultada para
aceptar o rechazar tal solicitud (254/90, 5869/95, 2321/97, 12074/97, 3300/04).
Un ex empleado que se alejó de la Administración por calificación deficiente sólo puede reingresar
a ella cuando hayan transcurrido cinco años, contados desde la fecha de expiración de funciones
y siempre que cumpla los demás requisitos legales. En su caso no es necesaria la rehabilitación
(30088/90, 22439/00).
El beneficio del DL 409, de 1932, consistente en considerar como si nunca se hubiera delinquido
para todos los fines legales y administrativos, no permite a un ex empleado destituido reingresar a la
Administración, salvo que haya transcurrido el plazo de cinco años a que alude el articulo 11 (actual
articulo 12), letra e), de la ley 18834 y dictado el decreto de rehabilitación (20000/97).
Letra f)
Una persona condenada por crimen o simple delito de acción pública y posteriormente indultada, no
puede ingresar a un empleo en la Administración del Estado, pues el indulto no quita al favorecido el
carácter de condenado para los fines que determinen las leyes (25082/94).
No existe impedimento legal para nombrar en un cargo público a una persona que está siendo
procesada por hurto. La idoneidad moral que requiere una persona para ingresar y permanecer en
la Administración, se pierde, entre otras razones, cuando el funcionario incurre en actos tipificados
como delitos por la ley, sean éstos inherentes o no a la función pública, y siempre que haya sido
condenado por sentencia definitiva en causa criminal, resultando irrelevante que esté cumpliendo o
haya cumplido la pena impuesta (40806/00, 23882/01).
Las personas condenadas o implicadas en un proceso por cuasidelito están habilitadas para optar y
desempeñar cargos en la Administración, ya que estas infracciones penales no son constitutivas de
crímenes o simples delitos (45122/99, 22923/01).
Una persona que aparece con un registro de dos condenas, ambas cumplidas con el beneficio de la
remisión condicional de la pena, no puede acceder a un empleo público. La imposibilidad de ingresar
a la Administración del Estado por hallarse condenado por crimen o simple delito alcanza a todas
aquellas personas en contra de las cuales se haya dictado un fallo de ese tipo en causa criminal, sea
que se encuentren cumpliendo o hayan cumplido ya las penas impuestas. El afectado sólo puede
eliminar sus antecedentes penales acogiéndose a las disposiciones del articulo 1 del DL 409, de
1932, que establece que toda persona que haya sufrido cualquier clase de condena y reúna las
condiciones que allí se indican, tiene derecho después de dos años de haber cumplido su pena, si
es la primera, y de cinco, si se le ha condenado dos o más veces, a que por decreto confidencial,
se le considere como si nunca hubiera delinquido para todos los fines legales y administrativos y se
le indulten las penas accesorias impuestas (13779/01).
De acuerdo con los artículos 54, letra e), y 64 de la ley 18575, las inhabilidades especiales que
consulta la primera de esas normas se aplican tanto respecto del ingreso a la Administración como
a la permanencia del funcionario, cuyo alejamiento una vez condenado por crimen o simple delito,
debe efectuarse en la forma prevista por el segundo precepto mencionado (37945/04, 15616/06).
Las faltas son una especie de delito que en su especialidad no están comprendidas en el supuesto
que contempla dicho articulo 54, letra e), de la ley 18575, de modo tal que el funcionario que sea
condenado por una falta, no se encuentra afectado por las inhabilidades de ingreso ni sobreviniente
(15616/06). El carácter de crimen, simple delito o falta, distinciones que formula el articulo 21 del
Código Penal, depende de la gravedad de la pena asignada por la ley al hecho punible en abstracto
y no a la magnitud de la pena impuesta al condenado (16755/86). Sin embargo, como de acuerdo
con ese mismo precepto la pena de multa es común a los crímenes, simples delitos y faltas para
hacer ese distingo, cuando se aplica, es necesario tener presente lo dispuesto en el inciso sexto del
artículo 25 del referido Código, el cual, atendiendo a la cuantía de la multa, establece que en el caso
de las faltas, su penalidad no puede exceder de cuatro unidades tributarias mensuales (42132/05).
La condena por crimen o simple delito impide ingresar a la Administración del Estado y configura una
causal sobreviniente para continuar ejerciendo labores de funcionario público, dado que involucra
la inexistencia o pérdida de idoneidad moral, respectivamente, condición indispensable para el
desempeño del cargo en la Administración. Estos delitos pueden ser inherentes o no a la función
pública, la condena debe ser impuesta por sentencia definitiva en causa criminal y la inhabilidad
operará esté cumpliendo o haya cumplido la pena impuesta (40806/00). La inhabilidad sobreviniente
obliga al funcionario afectado a presentar su renuncia al cargo, la cual debe ser aceptada por la
autoridad llamada a efectuar el nombramiento para que opere su cese de funciones. En caso de
no presentar la renuncia, previo sumario administrativo, debe ser destituido (63000/04, 15616/06).
El otorgamiento por sentencia ejecutoriada de alguno de los beneficios previstos en el artículo 29
de la ley 18216 -remisión condicional de la pena, libertad vigilada o reclusión nocturna-, supone
considerar al favorecido como si no hubiese sufrido condena alguna en lo referente al cumplimiento
de los requisitos de ingreso o permanencia en la Administración.· Luego, en este último caso, no se
encuentra obligado a declarar la inhabilidad ni presentar su renuncia en los términos expresados por
el artículo 64 de la ley 18575, así como tampoco procede la aplicación de la medida disciplinaria de
destitución en su contra por omisión de dichas obligaciones (16593/04, 36773/06). En relación al
cumplimiento de la pena accesoria de suspensión de cargo u oficio público, la Contraloria General
es incompetente para determinar su efecto cuando ha habido remisión de una sanción principal
(12671/98, 12060/07).
Concordancias: Arts. 10, 13 y 19, W 17, de la CP de laR; 15, 16, 43, 44, 54, 55, 55 bis, 57 y ss, y
63 y 64 de la LOCBGAE; 2 de la ley 18556, Orgánica Constitucional sobre Sistema de Inscripciones
Electorales y Servicio Electoral; Ley 19074, que autoriza ejercicio profesional a personas que señala
que obtuvieron títulos o grados en el extranjero; 220 del CP; 48 del DL 1094, de 1975, que establece
normas sobre Extranjeros; DL 2306, de 1978, que legisla sobre Reclutamiento y Movilización de
las Fuerzas Armadas; Ley 6174, sobre Medicina Preventiva; 12, N" 9, del DFL 1, de 2005, del
Ministerio de Salud; 38, letra f), y 68 de la LOCGR; 6, 10, 13, 31, inciso tercero, 85, 86, 87, 88, 150,
151, 152 y 7 transitorio del EA; Decreto 64, de 1960, del Ministerio de Justicia, sobre Prontuarios
Penales y Certificados de Antecedentes; Art. 1O del EAM. Ley 20000, que sanciona el Tráfico Ilícito
de Estupefacientes y Sustancias Sicotrópicas.
Comentarios:
El artículo 12 consulta los requisitos básicos que se exigen para ingresar a la Administración del
Estado, los cuales son también condiciones para el desempeño funcionario, de manera que deben
mantenerse durante toda su vinculación con la Administración.
Lo anterior se extiende, además, a todos quienes, en cualquier calidad, desempeñan una función
pública.
La mencionada norma estatutaria armoniza con el articulo 19, N"s. 2 y 17, de la Carta Fundamental,
preceptos que, respectivamente, aseguran a todas las personas la igualdad ante la ley y la admisión
a todas las funciones y empleos públicos, sin otros requisitos que los que impongan la Constitución
y las leyes. Estas disposiciones constitucionales impiden a la autoridad administrativa liberar a una
persona del cumplimiento de las exigencias de ingreso a la Administración del Estado.
En caso que se designe para el desempeño de una función pública a una persona que no reúne los
requisitos de ingreso previstos en la ley, la autoridad que lo nombró debe proceder a dejar sin efecto
el correspondiente acto administrativo de nombramiento por la vía de la invalidación.
Las señaladas prohibiciones tienen por objeto, en general, impedir que presten servicios en la
Administración del Estado personas que puedan verse afectadas por un conflicto de intereses en el
ejercicio de un determinado empleo público, propósitos que igualmente persigue el articulo 85 de la
ley 18834. Estas inhabilidades son aplicables a los personales de planta, a contrata y también a los
contratados sobre la base de honorarios, pues todos ellos revisten la calidad de servidores públicos.
La única excepción a este impedimento se encuentra contemplada en el inciso final del articulo 85
de la ley 18834, en cuanto establece que no rige entre los Ministros de Estado y los funcionarios de
su dependencia.
ARTICULO 13.- Los requisitos señalados en las letras a), b) y d) del Ley 18.834, Art. 12.
articulo anterior, deberán ser acreditados mediante documentos o
certificados oficiales auténticos.
Interpretación:
Los instrumentos que acreditan los requisitos de ingreso a la Administración del Estado y que
deben acompañarse en original o fotocopia debidamente autorizada por la misma autoridad a la
que compete emitir el correspondiente certificado, son: el certificado de nacimiento, para acreditar
la ciudadania; certificado otorgado por la Dirección General de Movilización Nacional, para acreditar
el cumplimiento de la Ley de Reclutamiento; certificado de salud compatible con el desempeño
del cargo, expedido por la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez del respectivo Servicio de
Salud; Diploma de Licencia Básica o Secundaria, expedido por el Ministerio de Educación, o el
titulo profesional que corresponda, en su caso; declaración jurada simple respecto del requisito del
articulo 11 (actual articulo 12) letra e) de la ley 18834, y certificado del Servicio de Registro Civil e
Identificación, tratándose de la exigencia de la letra f) del mencionado articulo 11 (actual articulo 12)
(23931/90).
Conforme a los articules 12 (actual articulo 13) del Estatuto Administrativo y 10 de la ley 16436,
por regla general, los documentos acompañados al decreto o resolución de nombramiento quedan
archivados en la Contraloria General de la República por el periodo de dos años. No obstante, no hay
inconveniente legal para que esos antecedentes se devuelvan antes de transcurrido el referido plazo
a los interesados que dejaron de pertenecer a la Administración. A su vez, aquellos antecedentes
que no se hubieren retirado, pueden enviarse a los respectivos Ministerios o Servicios después de
transcurridos los dos años, para que éstos los devuelvan a quien corresponda (10588/94).
Es improcedente que el cumplimiento del requisito de la letra e) del artículo 11 (actual artículo 12)
se acredite mediante certificado médico acompañado de exámenes practicados en un laboratorio
particular. El nivel educacional o título profesional o técnico se acredita con la exhibición de
documentos originales o copias debidamente autorizadas por el funcionario competente para otorgar
el documento original o para certificar sobre el contenido de éste, conforme al artículo 1698 del
Código Civil, no teniendo validez la autorización notarial o protocolización de esos documentos para
estos fines, pues ella sólo se refiere a la existencia material del título o diploma copiado o fotocopiado,
pero no al hecho de haber sido emitido por la autoridad que lo suscribe, pues no es un documento en
cuyo otorgamiento participe el notario. El cumplimiento de la Ley de Reclutamiento se acredita con el
documento de situación militar expedido por el cantón de reclutamiento correspondiente al domicilio
del interesado (4829/00).
Inciso 2•
El requisito de salud compatible con el desempeño del cargo es una exigencia para el ingreso
a la Administración del Estado, establecida por el Estatuto Administrativo, texto que a su vez ha
encomendado al Servicio de Salud respectivo la función de comprobar dicha circunstancia. Por tal
motivo, es dable entender que el otorgamiento de la certificación correspondiente, constituye una
obligación que la ley ha impuesto directamente a ese organismo, de manera que resulta improcedente
que a las personas que requieran esa prestación, se les exija el pago de una suma por tal concepto,
toda ve¡ que el artículo 12 (actual artículo 13) del Estatuto no contempla una obligación pecuniaria
en ese sentido. Esta última disposición al exigir la certificación del estado de salud del interesado no
distingue sobre el procedimiento que debe practicarse para tales efectos, por lo que todos aquellos
exámenes que el Servicio de Salud estime pertinente solicitar en orden a cumplir con dicha exigencia
legal, deberán ser asumidos con cargo a su presupuesto. Ello tiene su fundamento, además, en
el principio de gratuidad de la función pública, en cuya virtud los organismos estatales no pueden
cobrar por las funciones que en conformidad con el ordenamiento jurídico deben cumplir, salvo que
la ley expresamente los autorice para ello (4986/93).
Compete a los Servicios de Salud correspondientes establecer y realizar los exámenes que permitan
acreditar una salud compatible para ingresar a la Administración, no existiendo una normativa legal
que exija o impida, en el caso de las mujeres, la realización de exámenes específicos no solicitados
a los varones (54839/03).
Inciso 4•
Inciso s•
La simple comunicación que emite el Servicio de Registro Civil e Identificación, que acredita el
cumplimiento del requisito establecido en el artículo 11 (actual artículo 12), letra f), del Estatuto, ha
reemplazado el certificado de antecedentes clase B previsto en el artículo 12 del decreto 64, de 1960,
de Justicia, que exigía el DFL 338, de 1960, en su artículo 13. Ello significa que en la comunicación
del aludido Servicio, deben expresarse u omitirse, según corresponda, las anotaciones que eran
propias del indicado certificado (31609/90 -reconsiderado parcialmente por el12671/98-).
Concordancias: Arts. 1698 y ss del CC; 210 del CP; 12, 20, inciso tercero, y 22 del EA; 11 del
EAM; 1O de la ley 16436, que señala que los antecedentes administrativos que no hayan ingresado
al Archivo Nacional y que justifican los nombramientos del personal, podran ser devueltos a los
interesados después de cumplidos dos años de la fecha de la designación, dejandose constancia de
haber sido retirados.
Comentarios:
Todas las personas interesadas en incorporarse a un empleo público regido por el Estatuto Adminis-
trativo deben acreditar el cumplimiento de los requisitos de ingreso que en él se contemplan.
Para los efectos del examen de legalidad del acto administrativo de nombramiento ante la Contra-
loria General de la República, deben acompañarse todos los documentos que acrediten el cumpli-
miento de los requisitos de ingreso a la Administración.
ARTICULO 14.- La provisión de los cargos se efectuará mediante Ley 19.882, Art.
nombramiento o promoción. vigésimo séptimo, 3, a).
Ley 18.834, Art. 13.
El nombramiento o promoción se resolverá por los Ministros,
Intendentes o Gobernadores, respecto de los empleos de su
dependencia, y por tos jefes superiores en los servicios públicos
regidos por este Estatuto, con excepción del nombramiento en los
cargos de la exclusiva confianza del Presidente de la República.
Cuando no sea posible aplicar la promoción en los cargos de Ley 19.882, Art.
carrera, procederá aplicar las normas sobre nombramiento. vigésimo séptimo, 3, b).
En Jos casos en que se origine la creación de nuevos cargos de Ley 19.154, Art. 2°, 5.
carrera, se fijen nuevas plantas de personal que los incluyan o se Ley 19.882, Art.
autoricen reestructuraciones o fusiones que den lugar a nuevos vigésimo séptimo, 3, e}.
cargos de esa naturaleza, la primera provisión de dichos empleos
se hará siempre por concurso público.
Interpretación:
Inciso 1•
El nombramiento inviste a una persona de una determinada calidad juridica. El cambio de calidad
juridica de un funcionario implica efectuar un nuevo nombramiento, medida que ejercerá privativa y
facultativamente la misma autoridad llamada a extenderlo (31226/89).
Las normas sobre ascensos contenidas en esta norma, rigen desde el 23 de septiembre de 1989
(y hasta la entrada en vigor de la ley 19882) y se aplicarán según los escalafones existentes en la
época en que se produce la vacante, considerándose que los ordenamientos anteriores a esa data
continuaron vigentes mientras no se adecuaran las plantas a la nueva normativa. Si la vacante se
provee por ascenso, deben observarse los requisitos del cargo exigibles al producirse la misma, pero
si la provisión se realiza por nombramiento, los requisitos del cargo deberán reunirse a la época de
dictarse el acto administrativo de designación. De esta manera, el servidor ascendido a una plaza
(*) El artículo vigésimo séptimo, W 3, letras a) y b) de la ley 19882, sustituyeron en el artículo 13 (actual
artículo 14) del Estatuto Administrativo, la palabra "ascenso" por ''promoción". De esta manera, la provisión de
los cargos a partir de la fecha de vigencia de esa ley -23 de junio de 2003- ha pasado a efectuarse mediante
·nombramiento o promoción. Por .su parte, de acuerdo con el artículo 53 de dicho Estatuto, la promoción se
efectuará por concurso interno en las plantas de directivos de carrera, profesionales, fiscalizadores y técnicos
y por ascenso en las plantas de administrativos y de auxiliares. Luego, lo declarado en aquellos dictámenes,
respecto de estas materias, rige las situaciones consolidadas Con anterioridad a la vigencia de la ley 19882.
vacante, debe tener la calidad de funcionario activo a la época de la dictación del acto que ordena
el ascenso y si ello no sucede o no existen empleados en condiciones de ascender, la plaza
vacante debe proveerse necesariamente por concurso público de antecedentes (19020/90, 9479/93,
25925/95, 5119/00, 47749/00) (*).
Inciso 2°
El Director Nacional del Instituto de Desarrollo Agropecuario puede delegar en los Directores
Regionales la facultad de contratar a funcionarios y designar al personal de planta, para lo cual
debe observar los requisitos exigidos por la ley 18575 en materia de delegación del ejercicio de las
atribuciones y facultades (31544/01 ).
Inciso 3°
El nombramiento es una forma de designación especial que procede cuando no es posible aplicar las
disposiciones que regulan los ascensos en los cargos de carrera, como ocurre cuando no existen en
el escalafón servidores que cumplan con las respectivas exigencias (36935/95, 6885/96, 22112/98,
21639/01) (*).
Las vacantes en los cargos de directivos de carrera, profesionales y técnicos de un servicio, que
se produzcan a partir del 21 de diciembre de 2003, y que no correspondan al último grado de cada
uno de los escalafones, deben proveerse mediante concurso interno, sin desmedro que si éste
es declarado desierto, pueda convocarse a otro certamen, esta vez, público. Asimismo, un mismo
concurso podrá convocarse para proveer cargos vacantes y a quienes tengan interés en integrar
una lista de postulantes elegibles, conforme a lo indicado en el artículo 21 de la ley que
imponen a los órganos de la Administración los artículos 3 y 5 de la ley 18575 y 9 de la ley 19880.
El hecho que el artículo 21, inciso final, mencionado; establezca que la confección de esa lista
tiene por objeto atender futuras necesidades de "ingreso", no significa que corresponda efectuarla
18834, procedimiento que tiene su fundamento en los principios de eficiencia y economía procesal
únicamente cuando se trata de proveer una plaza del último grado de un determinado escalafón,
pues también resulta útil en el caso de un cargo de grado superior que no pudo llenarse conforme
a las reglas propias de la promoción, toda vez que de los artículos 14, inciso tercero, y 53, inciso
segundo, de la ley 18834, se infiere que cuando no se pueden aplicar las normas sobre promoción,
debe estarse a las que regulan el ingreso, entre las cuales se halla la relativa a la confección del
listado de postulantes elegibles (16165/05).
De acuerdo con el artículo 14 de la ley 18834, la provisión de los cargos se efectuará mediante
nombramiento o promoción, no obstante lo cual, cuando no sea posible aplicar la promoción en los
cargos de carrera, procederá aplicar las normas sobre nombramiento. Dicha promoción, conforme al
artículo 53 del Estatuto Administrativo, se realizará por concurso interno en las plantas de directivos
de carrera, profesionales, fiscalizadores y técnicos y por ascenso en el respectivo escalafón en las
plantas de administrativos y de auxiliares, o en las equivalentes a las enunciadas. Así, en las
(') El articulo vigésimo séptimo, W 3, letras a) y b), de la ley 19882, sustituyeron en el articulo 13 (actual articulo 14) del
Estatuto Administrativo, la palabra "ascenso" por "promoción". Luego, lo declarado en aquellos dictámenes, respecto
de estas materias, rige las situaciones consolidadas con anterioridad a la vigencia de la ley 19882.
plantas de técnicos la forma habitual de provisión de los empleos de carrera es a través del mecanismo
de promoción, en cuya virtud el servidor que cumpla los requisitos legales exigidos podrá participar
del concurso interno y, en caso de ser seleccionado, podrá ser promovido a un cargo dentro de
dicha planta o de otra distinta, siempre que no le afecte una causal de inhabilidad (15394/04).
Inciso 4°
Los nuevos empleos que queden vacantes en un servicio luego del encasillamiento de su personal
en una nueva planta que ha tenido su origen en la reestructuración o fusión de servicios, deben
proveerse por concurso (3978/95).
Se ajustó a derecho llamado a concurso para proveer cargos de fiscalizadores de la Dirección del
Trabajo, toda vez que, conforme el articulo 14, inciso cuarto, de la ley 18834, en los casos en que se
origine la creación de nuevos cargos de carrera, se fijen nuevas plantas de personal que los incluyan
o se autoricen reestructuraciones o fusiones que den lugar a nuevos cargos de esa naturaleza,
la primera provisión de dichos empleos se hará siempre por concurso público. La legislación no
restringe a determinadas épocas del año las facultades privativas de la autoridad administrativa para
convocar a un concurso público, de manera que no configura un vicio que el concurso se haya hecho
efectivo en una época del año en que varios funcionarios de un servicio se encuentren haciendo uso
de su feriado legal (45289/04).
Concordancias: Arts. 15, 16, 43 y ss. de la LOCBGAE; 16, 17 a 24, 53 a 59 y 1O transitorio del EA;
13 del EAM.
Comentarios:
El nombramiento es una de las formas de proveer los cargos públicos que se materializa mediante
decretos o resoluciones que designan personal en calidad de titulares, suplentes o a contrata, y que
procede cuando no es posible aplicar las normas sobre promoción.
La promoción se realiza por concurso interno en las plantas de directivos de carrera, profesionales,
fiscalizadores y técnicos y por ascenso en las plantas de administrativos y auxiliares.
Los actos administrativos que disponen nombramientos o promociones deben dictarse por
los Ministros, Intendentes, Gobernadores o el Jefe Superior de Servicio, en la forma y con las
solemnidades prescritas por la ley.
Su notificación es un requisito de eficacia jurídica del respectivo proceso, por lo que mientras
los interesados no hayan sido válidamente notificados, dichos actos no producen efecto alguno,
siéndoles a éstos inoponibles.
Los encasillamientos, por otra parte, son procedimientos generales de provisión de empleos públicos,
que se rigen por las disposiciones que los ordenan, debiendo la autoridad competente sujetarse a
ellas al dictar los actos administrativos que los llevan a efecto. Esta modalidad de provisión de
cargos se encuentra regulada en el articulo 14, inciso final, del Estatuto Administrativo, y en algunas
de sus normas transitorias.
ARTICULO 15.- Salvo disposición en contrario, en Jos procesos Ley 19.882, Art. vigésimo
de encasillamiento del personal que se originen en la fijación séptimo, 4.
o modificación de plantas de personal, se seguirán las normas Ley 18.834, Art. 13 bis.
siguientes: (/)
(J)
~
a) Los funcionarios de las plantas de directivos de carrera,
profesionales, fiscalizadores y técnicos y en las equivalentes a "'e
(J)
(!)
éstas, se encasillarán en cargos de igual grado al que detentaban
a la fecha del encasillamiento, manteniendo el orden del escalafón -"'
..2~
de mérito. Si en las nuevas plantas no existieren Jos grados que : :::S
~o
l-.
tenían los funcionarios, por haber variado Jos grados de ingreso :1- z
a ellas, estos se encasillarán en el último grado que se consulte
en la nueva planta.
Interpretación:
Aun cuando procede que Director del Servicio de Salud Ñuble, encomiende a un empleado las
funciones de Director de un Hospital en establecimientos que no cuentan con dicha plaza, se requiere
que ese servidor satisfaga los requisitos educacionales especificas vigentes para tales cargos a la
fecha en que se hará dicha encomendación, esto es, los titulas de médico cirujano, cirujano dentista,
ingeniero civil industrial, ingeniero comercial o administrador público. Ello, porque la circunstancia
que el nuevo articulo 25c del DL 2763, de 1979 (actual articulo 33 del DFL 1, de 2005, del Ministerio
de Salud, que fijó el texto refundido, coordinado y sistematizado del DL 2763, de 1979, y de las leyes
18933 y 18469), contenga una norma más amplia en materia de requisitos para desempeñar una
plaza de Director en un Hospital, demuestra que únicamente corresponde al legislador establecer
y modificar las caracteristicas personales necesarias para el ejercicio de un empleo. Además, el
aludido articulo 25c solo entró en vigencia el 1 de enero de 2005, de modo que lo alli dispuesto
no puede justificar una decisión anterior a esa data. Por otra parte, el articulo vigésimo segundo
transitorio letra i) de la ley 19937, que faculta al Presidente de la República para dictar las normas
complementarias al articulo 15 de ley 18834, permitiéndole, por ende, fijar requisitos a los cargos, no
puede servir de fundamento para eximir a un servidor, que debe desempeñar las labores de Director
de un Hospital, de las exigencias vigentes a la época en que se encomendaron (47701/04).
Comentarios:
En los procesos de encasillamiento del personal en un determinado servicio de la Administración
del Estado, originados en la fijación o modificación de plantas, deben seguirse las normas que esta
disposición señala, salvo que se hubiere previsto un procedimiento diverso.
ARTICULO 16.- El nombramiento regirá desde la fecha indicada Ley 18.834. Art. 14.
en el respectivo decreto o resolución o desde cuando éste quede
totalmente tramitado por la Contra/aria General de la República.
Interpretación:
Inciso 1•
El vinculo jurídico que une al funcionario con el Estado es de naturaleza legal y reglamentaria, de
modo que el acto por medio del cual se provee un empleo público debe contenerse en un decreto o
resolución de la autoridad competente, produciendo sus efectos, por regla general, una vez notificado
por escrito al interesado el hecho de la total tramitación de ese documento, sin perjuicio que pueda
surtir efectos inmediatos, desde la fecha en que se dictó, si la autoridad así lo ordena por razones
impostergables de buen servicio (25954/94, 16480/99).
El contenido de los oficios que cursan con alcance los actos administrativos en el trámite de toma de
razón, debe entenderse incorporado al texto del respectivo documento para todos los efectos legales
(53762/03).
Los alcances que formula la Contraloría General al pronunciarse sobre la juridicidad de un acto
administrativo, si bien no tienen como origen una norma expresa que la faculte para ello, provienen
de la necesidad de dejar constancia, entre otros aspectos, de los errores de que éstos puedan
adolec<?,r, sin que se requier¡;¡ objetarlo o hacerlo corregir, dentro de la facultad .~onstitucional que
posee de tomar razón del mismo o representarlo. Estos alcances forman parte, para todos los
efectos legales, del acto administrativo a que ellos se refieren (26180/99, 46197/05).
Si una resolución de nombramiento ha sido devuelta sin tramitar por la Contraloría General, es
del todo irregular el procedimiento empleado por el respectivo Servicio en el sentido de rehacerla,
modificando sustancialmente su texto o tarjando nombres de funcionarios, y conservando, sin
embargo, el mismo número y fecha primitivamente utilizados. Por ello, si los reparos formulados
por el Organismo Contralor hacen imperativo alterar en esencia la totalidad o gran parte de su texto,
ese Servicio debe proceder a dictar una nueva resolución con el número y fecha correspondientes,
dejando sin efecto la primitiva, e invocando, para este último acto administrativo, el oficio con que
la Contraloria General procedió a devolver sin tramitar la respectiva resolución (28976/96, 4501/97,
1594/03).
La Contraloria General carece de competencia para dejar sin efecto la toma de razón de un decreto
o de una resolución, no pudiendo, una vez producido ese pronunciamiento, modificarlo, revocarlo o
invalidarlo, en razón de su particular naturaleza. Con arreglo a lo prevenido en el articulo 1O de la
ley 10336, la calificación de constitucionalidad y legalidad de los actos administrativos que incumbe
practicar al Organismo Contralor cuando esas decisiones le son remitidas con tal objeto, se realiza
precisamente en esa única oportunidad y no requiere, por ende, reiterarse para que los decretos y
resoluciones que han sido objeto de ese trámite sean ejecutados o mantengan su eficacia, según
el caso. No obstante lo anterior, la toma de razón de un decreto o resolución no impide que dichos
actos administrativos puedan ser invalidados si más tarde se comprueba que adolecían de defectos
de legalidad o que se fundaron en presupuestos irregulares. Pero esa invalidación debe ser resuelta
por la misma autoridad que dispuso la medida afectada, a través de un nuevo decreto o resolución
que ordene dejarla sin efecto para corregir, por esa vía, la irregularidad derivada de una determinación
ilegitima, siempre, por cierto, que la invalidación sea procedente y los errores fehacientemente
acreditados (14058/69, 92080/71,8099/73, 30117/93,25768/95, 11724/04, 24417/07, 48326/07).
De acuerdo con el articulo 1, inciso segundo, de la ley 19880, que establece Bases del Procedimiento
Administrativo que rige los actos de los Órganos de la Administración del Estado, el trámite de toma
de razón no está sujeto a este cuerpo legal, sino por lo dispuesto en la Constitución Política de la
República y la Ley Orgánica Constitucional de la Contraloria General (48326/07).
Inciso 2°
El pago de remuneraciones a una persona designada con asunción inmediata de funciones, cuyo
nombramiento es objetado por la Contraloria General, sólo procederá, tratándose de un suplente, en el
caso que a éste le asistiera el derecho a gozar de tales estipendios según esta norma (30539/90).
En los casos en que la Contraloría General devuelva un decreto o resolución porque el nombramiento
debió efectuarse en un grado inferior, el afectado deberá reintegrar las diferencias de remuneraciones
percibidas, sin desmedro de acogerse a las franquicias establecidas en el articulo 67 de la ley 10336
(13848/92).
desempeños por obtención de una jubilación, y no obstante ello, continuó prestando servicios en la
entidad respectiva, aun cuando la autoridad le había declarado vacante el cargo con el propósito
de precisar la data en la cual se produjo el término de sus funciones (19530/03). El funcionario
de hecho debe percibir retribución por su labor, pues el desempeño de una función pública tiene U)
())
legalmente consultado el pago de una remuneración, que es la contraprestación a que tiene derecho
quien ejerce dichas funciones, en virtud del principio retributivo, el que de vulnerarse originaria un "'(¡¡e:
enriquecimiento sin causa a favor de la Administración, contraviniendo el principio de la equidad ())
(.')
(31164/92, 22805/93).
. U)
-
m
.E. E
El pago de las remuneraciones a que tienen derecho los funcionarios de hecho debe efectuarse con ~o
::1 ~
Quienes han desempeñado labores como funcionario de hecho no tienen la calidad de agentes
públicos, pues el acto o titulo por el cual poseen el empleo adolece de ilegalidad, careciendo de los
derechos, prerrogativas y beneficios propios de los funcionarios públicos con nombramiento legal, de
modo que el lapso que aquéllos han servido no es computable para establecer la antigüedad en la
Administración ni para fines previsionales o de desahucio (2917/94, 25954/94, 22039/95, 23890/97,
19530/03).
Las actuaciones de los funcionarios de hecho, por regla general, tienen plena validez (19530/03).
Inciso 3•
Una persona adquiere la calidad de funcionario público desde el di a en que se le notifica el decreto
o resolución de nombramiento y ha asumido el cargo respectivo. La asunción de funciones es el
elemento de hecho que perfecciona la relación de empleo público (33016/75, 65326/78).
Si un cargo no se asume dentro de tercero día contado desde la fecha que corresponda, el
nombramiento queda sin efecto por el solo ministerio de la ley, debiendo la autoridad correspondiente
comunicar tal circunstancia a la Contraloría General. Este criterio se aplica solamente a las personas
designadas en empleos de planta o a contrata en la Administración y no a los contratados a honorarios,
quienes se rigen por las normas especificas de sus contratos (32056/90, 8513/96).
Para que un cargo vacante resulte adecuadamente provisto, es preciso que exista un acto
administrativo de designación, el que adquiere plena validez una vez tramitado por la Contraloria
General y luego de asumirse efectivamente las labores por el funcionario. Esta última exigencia
constituye un requisito sine qua non para adquirir la condición de empleado público y tener derecho a
remuneración, careciendo de valor para estos fines un documento que avale la intención de aceptar
el cargo, dado que éste sólo constituye una declaración de voluntad que por sí misma no basta
para otorgar eficacia al acto jurídico del nombramiento, el cual se perfecciona con la toma formal de
posesión del cargo (31335/96, 43029/98).
Concordancias: Arts. 98 y 99 CP de laR; 10 LOCGR; 72, 94 y 97 del EA; 14 del EAM; 53 LOCM;
Resolución 55, de 1992, de la CGR, que establece normas sobre exención del trámite de toma de
razón, cuyo texto refundido, coordinado y sistematizado fue fijado por la Resolución 520, de 1996,
de la CGR.
Comentarios:
La Comisión Conjunta estuvo de acuerdo en mantener la idea original del Ejecutivo, que sin duda es
una innovación en la materia, al reconocer que la asunción inmediata de funciones ya no constituye
una excepción sino que ha pasado a transformarse en la regla general y de común aplicación.
Debido a esto, el texto sustitutivo establece, en su inciso primero, que el nombramiento regirá desde
·la fecha indicada en el respectivo decreto o resolución, lo que podrá ser en una fecha anterior a
aquélla en que quede totalmente tramitado el respectivo decreto o resolución, o bien, esta última
(Informe de la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno, recaído en el proyecto de ley sobre
Estatuto Administrativo).
Resulta útil destacar que esa misma jurisprudencia otorga validez a las actuaciones de una persona
que reviste la condición de funcionario de hecho, vale decir, a aquél que, sin título o con un título
irregular, aparece ejerciendo funciones públicas, reconociéndole, además, el derecho a todas las
remuneraciones que dieron origen a este desempeño. Con ello da integral aplicación al principio
retributivo, el que de vulnerarse originaría un enriquecimiento sin causa en favor de la Administración,
contraviniendo, a su vez, el principio de equidad.
Asimismo, y aun cuando Jos actos de la Administración deben ser invalidados cuando sean contrarios
a derecho con arreglo a lo dispuesto en el artículo 53 de la ley 19880, que establece Bases de Jos
Procedimientos Administrativos, esta potestad reconoce como límite aquellas situaciones jurídicas
consolidadas sobre la base de la confianza de Jos particulares en la Administración, puesto que la
seguridad jurídica de tal relación amerita su amparo. De otro modo, podrían presentarse daños
irreparables e injustos, al margen de que por haber producido sus efectos, la nulidad del acto írrito
afectaría derechos de terceros, quienes legítimamente Jos han incorporado a sus patrimonios
(24337/02, 500/05).
Es importante destacar que el Tribunal Constitucional ha declarado que el artículo 14 (actual artículo
16) de la ley 18834, en cuanto versa sobre las func·lones y atribuciones de la Contraloría General de la
República, comprende materias que el constituyente ha reservado a la ley orgánica constitucional de
ese Organismo (Sentencia del Tribunal Constitucional, de 12 de septiembre de 1989, considerandos
9 y 10. Rol W 79).
Es oportuno recordar, en relación con Jos actos administrativos que disponen el nombramiento de
Jos funcionarios públicos, que la Contraloría General de la República realiza fundamentalmente dos
trámites simultáneos, por una parte, debe tomar razón de Jos mismos y, a su vez, debe proceder
a su registro en el sistema computacional que, en conformidad a la ley, le corresponde llevar al
efecto. En virtud de la toma de razón, el Organismo Contralor efectúa un estudio acerca de la
constitucionalidad y legalidad del acto de nombramiento, lo que se traduce en un juicio de contenido
y efectos jurídicos vinculantes para la Administración, pudiendo tomar razón sin observaciones por
considerar que se ajusta a derecho, devolverlo sin tramitar cuando lo estima contrario a derecho, o
cursarlo con alcance, esto es, formular ciertas precisiones o aclaraciones sobre aspectos formales
o errores no esenciales. Sin perjuicio de lo anterior, los decretos o resoluciones de nombramiento
deben remitirse a la Contraloria General para su registro, trámite que, a diferencia de la toma de (J)
razón, sólo consiste en una mera anotación material, en la que se deja constancia de la dictación de
un acto y no constituye, en esencia, un control de legalidad del mismo. ~"'
"'e:
Cabe precisar que las resoluciones que dictan las Municipalidades conforme a lo dispuesto en el "'
(.!)
articulo 53 de la ley 18695, Ley Orgánica Constitucional de Municipalidades, cuyo texto refundido,
coordinado y sistematizado fue fijado por el DFL 1, de 2006, del Ministerio del Interior, Subsecretaria
de Desarrollo Regional y Administrativo, están exentas del trámite de toma de razón, pero sujetas
al trámite de registro, cuando afectan a funcionarios municipales. Para tales fines, en la Contraloria
General se lleva un registro del personal municipal en la forma y condiciones en que lo hace para el
resto del sector público, debiendo las entidades edilicias remitir los antecedentes que el Organismo
Contralor les solicite. Conforme a los articulas 98 de la Constitución Política de la República y 51 y
52 de la ley 18695, las Municipalidades se encuentran sujetas a la fiscalización de dicha Entidad de
Control, por lo que, en el ejercicio de las facultades que le confieren esas disposiciones, le compete
ejercer el control de legalidad de los actos administrativos municipales, pudiendo emitir dictámenes
jurídicos sobre todas las materias sujetas a su fiscalización, entre las cuales se encuentra la de velar
por el cumplimiento de la ley 18883, Estatuto Administrativo para Funcionarios Municipales, estando
así obligada a hacer presente la constatación de la existencia de una infracción legal, en los decretos
alcaldicios sometidos al trámite de registro.
TítuloH
De la Carrera
< ' / d ' ' ' ' ' '
Funcionaria
TÍTULO 11 De la Carrera Funcionaria 93
Párrafo 1°
Del ingreso
ARTICULO 17.- El ingreso a los cargos de carrera en calidad de Ley 19.882, Art. vigésimo
titular se hará por concurso público y procederá en el último grado séptimo, 5, a).
de la planta respectiva, salvo que existan vacantes de grados Ley 18.834, Art. 15.
superiores a éste que no hubieren podido proveerse mediante
promociones.
Prohibese todo acto de discriminación que se traduzca en Ley 19.882, Art. vigésimo
exclusiones o preferencias basadas en motivos de raza, color, séptimo, 5, b).
sexo, edad, estado civil, sindicación, religión, opinión política,
ascendencia nacional u origen social que tengan por objeto anular
o alterar la igualdad de oportunidades o trato en el empleo.
Interpretación:
Inciso 1°
El ingreso a los cargos de carrera en calidad de titular se hará por concurso público, preparado
y realizado por un comité de selección, el que con los resultados del certamen, propondrá a la
autoridad facultada para efectuar el nombramiento, los nombres de los candidatos que hubieren
obtenido los mejores puntajes (29529190).
Conforme el articulo 17 del Estatuto Administrativo, el ingreso a los empleos de carrera en, calidad de
titular, se lleva a cabo a través de concurso público y en el último grado de la planta respectiva, salvo
que existan vacantes de grados superiores que no hubieren podido proveerse mediante promociones
(39454104, 48912104, 16165105).
Inciso 2°
La amplitud de la facultad de la autoridad para fijar las pautas de evaluación, no puede llegar a
impedir que participen en el concurso quienes reúnen los requisitos que la ley exige, como ocurriría
al agregarse exigencias no consideradas por aquélla, puesto que ello vulneraria los Ws. 2 y 17
del articulo 19 de la Constitución Política, preceptos que, respectivamente, no permiten establecer
diferencias arbitrarias y asegura la admisión a todas las funciones públicas sin otros requisitos que
los fijados por la Carta Política y las leyes (25451/00).
Las personas que han postulado a un cargo público, cumpliendo los requisitos legales, tienen
derecho a ser consideradas en la provisión de ese empleo, ya que la realización de un concurso
origina un vinculo jurídico que la autoridad administrativa por su mera voluntad no está facultada
para extinguir. Por el contrario, la coloca en el deber de resolverlo entre aquellas personas que
fueron seleccionadas, puesto que ellas, al momento de concursar, cumplían los requisitos legales, y
luego, en el certamen, acreditaron idoneidad para su desempeño. En virtud del principio de libertad
de la autoridad administrativa, a ésta compete determinar las bases y condiciones que delimitan
los concursos y fijar el procedimiento mediante el cual se evaluarán los requisitos y mérito de los
postulantes, pautas que la obligan a proceder conforme a ellas y a aplicarlas sin discriminación a
todos los postulantes (16981/90, 26304/90).
La autoridad del Servicio tiene facultades privativas para designar al postulante seleccionado que,
por sus méritos estime conveniente para la institución, con la sola limitación de que éste cumpla con
los requisitos de ingreso exigidos por la ley (40084/98).
En concurso convocado en la Universidad de Chile, para proveer cargos docentes, no procede incluir
como requisito en el llamado a concurso, aparte de la posesión de un titulo profesional o grado
académico de Licenciado, Magíster o Doctor, la experiencia académica comprobada con cursos, o
especialización en un determinado campo del conocimiento, o experiencia en docencia universitaria,
dado que con ello la autoridad ha fijado exigencias de postulación adicionales a las establecidas en
los Reglamentos de Carrera Académica y de Concursos de dicha Casa de Estudios, marginando
ilegítimamente del certamen a quienes no pudieron satisfacer plenamente esas exigencias, pese
a cumplir con los requisitos enunciados en los Reglamentos respectivos, vulnerándose, de esta
manera, el articulo 19, Ws. 2 y 17, de la Constitución Política, que impiden a la autoridad establecer
diferencias arbitrarias, el primero, y asegurar la admisión a todas las funciones o empleos públicos,
sin otros requisitos que los que impongan la Carta Fundamental y las leyes, el segundo. Además, en
las bases del mencionado concurso, se establecen otros requisitos, a saber, el "dominio de idiomas"
y uno referido a la "edad", exigencias que dispuestas en la calidad de requisitos, como ha ocurrido en
este caso, y no como factores en los que es posible indicar requerimientos deseables o preferibles,
configuran también actos de discriminación que alteran la igualdad de condiciones de los postulantes,
vulnerándose tanto el articulo 19, W 16, inciso tercero, de la Constitución Política, como el articulo
17, en sus incisos segundo y tercero, del Estatuto Administrativo (48870/05).
Comentarios:
Aun cuando el Estatuto Administrativo no consulta normas precisas acerca de cómo deben llevarse
a cabo los concursos para la provisión de los cargos de carrera en la Administración, ha concedido
amplias facultades a los Jefes de Servicio para determinar las bases de los mismos. Con la
modificación a esta norma introducida por la ley 19882, se ha querido dar especial protección a
quienes participan en un concurso público para el ingreso a la Administración del Estado, reiterando
los principios que la Carta Fundamental ha establecido en materias de no discriminación.
En cada concurso deberán considerarse a lo menos, Jos Ley 19.882, Art. vigésimo
siguientes factores: los estudios y cursos de formación séptimo, 6.
educacional y de capacitación; la experiencia laboral, y las
aptitudes específicas para el desempeño de la función. La
institución Jos determinará previamente y establecerá la forma
en que ellos serán ponderados y el puntaje mínimo para ser
considerado postulante idóneo, Jo que deberá ser informado a
Jos candidatos que postulen, antes de iniciarse el proceso de
selección, junto con el puntaje mínimo para ser considerado
postulante idóneo.
Interpretación:
Inciso 1°
El procedimiento que consulta esta disposición utilizado para la selección del personal que se
propondrá a la autoridad facultada para hacer el nombramiento, se orienta a proveer cargos de carrera
en calidad de titular, lo cual no obsta para que ésta, si lo estima conveniente, y con el fin de otorgar
una mayor transparencia al sistema de elección, escoja la misma metodología para seleccionar al
personal a contrata, en cuyo caso se encuentra obligada a observar similares formalidades a las
contempladas en el Estatuto Administrativo, para los concursos destinados a proveer empleos de
planta (49714/03). En otras palabras, si opta por este mecanismo, en virtud del principio de libertad
que le asiste, compete a dicha superioridad determinar tanto las bases como las condiciones en que
deben realizarse los concursos, debiendo ajustarse estrictamente a las normas del Título 11 Párrafo
1° de la ley 18834, especialmente a sus artículos 16, 17 y 18 (actuales artículos 18, 20 y 21), y
a las pautas fijadas en la respectiva convocatoria, las que deben aplicarse con irrestricto respeto
al principio de igualdad de los participantes y su no discriminación (11829/97, 47954/99, 2785/00,
38116/04).
El Estatuto Administrativo no contiene reglas expresas en cuanto a la forma en que deben desarrollarse
los concursos para proveer empleos públicos, por lo cual debe entenderse que compete a la
propia autoridad administrativa determinar las bases y condiciones en que han de realizarse dichos
certámenes, pautas que si bien pueden preestablecerse libremente y acorde con lo que estime
más adecuado para el mejor desenvolvimiento del proceso, obligan a la autoridad que las fija a
proceder conforme a ellas y aplicarlas en forma general a todos los candidatos (12893/90, 16981/90,
26304/90, 21640/01).
objeto permitir la elección de los mejores para los cargos que se concursan, sino que señalan las
condiciones que deben reunir los postulantes idóneos, constituyendo parte del marco jurídico que
asegura que en el certamen se respeten los principios de objetividad, transparencia e igualdad de
los participantes (51929/03, 16613/04, 40366/04).
Nada obsta al establecimiento de una segunda instancia a la que puedan ocurrir los postulantes
que se hallen disconformes con el puntaje total que se les haya asignado, porque si bien dicho
trámite no está previsto en el Estatuto Administrativo, armoniza con el principio de libertad de la
autoridad administrativa para determinar las condiciones y pautas según las cuales se desarrollan
dichos certámenes (16981/90).
La publicación del llamado a concurso debe señalar las características del cargo y fijar el día en que
éste se resolverá (13652/92).
En aquellos empleos que por mandato legal deben ser provistos mediante concurso, no podrán
fijarse a los postulantes otros requisitos que los que esas disposiciones establezcan para el ingreso
al Servicio (37833/97).
En aquellos casos en que el cargo que se quiera proveer no integre la estructura organizacional de
un servicio, no existe la obligación legal de realizar un concurso para escoger a quien lo servirá. Con
todo, al optarse por ese mecanismo, la autoridad debe ceñir su actuación a las mismas formalidades
establecidas para proveer cargos de carrera. Asimismo, será absolutamente optativo para el jefe
superior de un servicio recurrir al mecanismo del concurso para seleccionar al personal que se
desempeñará a contrata, pero si opta por esa vía, debe ceñirse a las reglas que regulan la materia
(38116/04, 40366/04).
No procede que la autoridad invalide un concurso que ha sido convocado y resuelto en conformidad
con las bases acordadas para llevarlo a efecto, dado que aquéllos constituyen actos reglados en
sus efectos, que una vez resueltos válidamente crean, por una parte, el derecho de las personas
que postularon para ser seleccionadas y designadas en cada uno de los puestos concursados, y,
por otra, la obligación de la autoridad administrativa de proveer el cargo vacante con uno de los
oponentes al certamen (28874/04, 48870/05).
Inciso 2°
El procedimiento de selección debe contener los factores de evaluación de los diferentes rubros que
considere, como también la forma en que se ponderarán los antecedentes. De esta manera, aquellos
factores que no son susceptibles de ser evaluados sobre la base de pautas rígidas por su variedad
y naturaleza, podrán ponderarse "en. conciencia" (15864/90).
Conforme al inciso segundo del articulo 16 (actual artículo 18) en cada concurso deben considerarse
a lo menos los factores de estudios y cursos de formación educacional y de capacitación, experiencia
laboral y las aptitudes específicas para el desempeño de la función, debiendo la institución determinar
en forma previa a la selección de los oponentes, como mínimo, cada uno de los factores que allí
se indican, respecto de los concursos a que convoque, establecer la forma en que ellos serán
ponderados y el puntaje mínimo para ser considerado postulante idóneo (11829/97, 15721/02). Ello
no supone la exigencia de un detalle pormenorizado de los diversos rubros a evaluar dentro de cada
uno de los diferentes factores, sino que basta con que respecto de éstos se establezca la valoración
porcentual que se les atribuye respecto del puntaje final y, además, se determine el mínimo para ser
considerado postulante idóneo. Por ende, vulnera esta norma, la resolución que convocó al certamen
pero no establece los porcentajes que corresponde asignar a los distintos rubros de evaluación ni
fija el puntaje mínimo para ser considerado postulante idóneo, factores que necesariamente deben
concurrir en todos los procesos de esta naturaleza (15721/02).
En los concursos a que se refiere el artículo 18 del Estatuto Administrativo y conforme al principio de
la libertad de la autoridad administrativa, a ésta compete determinar las bases con las condiciones
en que deben realizarse los concursos, ajustándose a lo señalado en la ley 18834, bases que serán
obligatorias para el servicio que convoca el certamen y que deben aplicarse, sin discriminaciones, a
todos los postulantes. En dichos concursos debe considerarse, a lo menos, los factores de estudios y
cursos de formación educacional y de capacitación, como asimismo; la experiencia laboral, aspectos
éstos que serán determinados previamente por la institución, estableciendo la forma en que ellos
serán ponderados y el puntaje mínimo para ser considerado postulante idóneo, lo que deberá
informarse a los candidatos que postulen antes de iniciarse el proceso de selección (33501/04,
40366/04).
Es posible considerar en las bases de un concurso una entrevista psicológica a los participantes, con
el fin de determinar sus características y aptitudes para el cargo, siempre que se aplique a todos
ellos (33472/00).
Corresponde a la Constitución Política y a la ley fijar los requisitos o condiciones que deben
satisfacer los interesados para ejercer un empleo público, exigencias que han de ser generales y
No es posible dejar sin efecto un concurso resuelto válidamente, porque crea para los postulantes el
derecho a ser seleccionados y designados en él, e imponen a la autoridad administrativa la obligación
de proveer el cargo vacante con alguno de los oponentes al certamen (18869/93).
Concordancias: Arts. 19, N' 16 de la CP de la R; 17 al 24 del EA; ley 19880, que establece Bases
de los Procedimientos Administrativos que rigen los actos de los órganos de la Administración del
Estado; 16 del EAM.
Comentarios:
El concurso es un procedimiento reglado que necesariamente debe observar la autoridad
administrativa, el cual constituye una forma de ingreso a los cargos de carrera de la Administración.
Para ser designado en un cargo público, los requisitos de ingreso deben estar cumplidos al cierre
del concurso y a la fecha de emisión del acto administrativo de nombramiento, ya que éste tiene el
carácter de acto terminal del proceso de selección iniciado con el concurso.
Las bases, condiciones y pautas que rigen el concurso deben proponerse por el comité de selección,
y ser aprobadas mediante una resolución que las contenga, emanada de la autoridad llamada a
hacer el nombramiento.
Por otra parte, siendo el concurso un procedimiento reglado, las normas de la ley 19880, que
establece las Bases de los Procedimientos Administrativos que rigen los actos de los órganos de la
Administración del Estado, se aplicarán con carácter supletorio, de acuerdo con el mandato de su
articulo 1.
ARTICULO 19.- En los concursos se mantendrá en secreto la Ley 19.882, Art. vigésimo
identidad de cada candidato para /os efectos de la evaluación de séptimo, 7.
/as pruebas y otros instrumentos de selección en que ello sea Ley 18.834, Art. 16 bis.
posible.
Interpretación:
Inciso 1•
El inciso primero del artículo 19 del Estatuto Administrativo no prohíbe a la autoridad convocante
de un concurso público exigir antecedentes completos sobre la identidad del candidato, sino que,
por el contrario, puede y debe hacerlo, ya que conforme a ese precepto, lo que se debe mantener
en reserva es la identidad, de lo cual aparece que ésta debe ser solicitada, dado que no es
posible obligar a mantener reserva de algo que no se conoce. El recto sentido de dicha norma es
mantener tales antecedentes en secreto sólo durante el tiempo que tome la completa resolución
de la convocatoria, evitando así que durante el desarrollo del certamen pueda producirse alguna
forma de discriminación en beneficio o perjuicio de algún oponente, particularmente durante la fase
de evaluación de las exigencias a que ha sido sometido. En materia de concursos de ingreso o
promoción son determinantes las competencias y destrezas que debe reunir cada candidato, cuya
idónea acreditación exige, necesariamente, la comprobación de su identidad, de los antecedentes
sobre su experiencia laboral, certificados de capacitación, de título profesional o de estudios de
post título, de manera que es imposible extender el secreto a todas las instancias del proceso,
especialmente a la etapa de postulación. Luego, no es posible sostener que afecte la legalidad del
concurso la circunstancia que la autoridad administrativa haya exigido una fotocopia de la cédula de
identidad de los partícipes, lo cual no es motivo suficiente para sostener que se ha vulnerado esta
norma estatutaria, en lo que se refiere al mantenimiento del secreto de la identidad de cada candidato,
pues de ello no se desprende que tales antecedentes hayan sido divulgados o mal utilizados por
dicha autoridad, o por la consultora externa (24697/08).
Inciso z•
No vicia un concurso la circunstancia de no haberse informado a los participantes del mismo que no
fueron seleccionados para pasar a una etapa posterior, no obstante lo indicado en el inciso segundo
del artículo 19 de la ley 18834, que establece la obligación de comunicar a los concursantes el
resultado final del proceso (53797105).
Comentarios:
Con miras a mejorar el sistema de concursos, en cuanto a fortalecer la transparencia, objetividad
y no discriminación en el actuar de la Administración, es que se ha incluido por la ley 19882 la
obligación de notificar a los concursantes el resultado final de cada certamen.
ARTICULO 20.- La autoridad facultada para hacer el nombra- Ley 18.834, Art. 17.
miento publicará un aviso con las bases del concurso en el Dia-
rio Oficial, los días 1• o 15 de cada mes o el primer día hábil
siguiente si aquellos fueren feriado, sin perjuicio de las demás
medidas de difusión que estime conveniente adoptar. Entre la
publicación en el Diario Oficial y la fecha de presentación de an-
tecedentes no podrá mediar un lapso inferior a ocho días.
Interpretación:
Inciso 1•
Los actos administrativos sólo producen sus efectos desde el momento en que se encuentran
totalmente tramitados, lo que ocurre, por regla general, cuando se notifican o publican, según
corresponda. La publicación de un acto administrativo en el Diario Oficial no es un requisito de validez
sino de eficacia, lo que significa que su omisión se traduce en que éste es plenamente válido, pero
ineficaz. La publicación en el Diario Oficial constituye un trámite necesario en los siguientes casos: 1)
cuando la ley expresamente la ordena; 2) cuando el decreto o resolución afecta indeterminadamente
a los particulares; 3) cuando se trata de decretos reglamentarios o reglamentos, y 4) cuando el
Presidente de la República, en uso de su potestad ejecutiva, así lo ordena expresamente atendida
la trascendencia que asigne al decreto de que se trate. En todos estos casos, de acuerdo con el
decreto 271 O, de 1942, del Ministerio del Interior, la publicación en el Diario Oficial es un trámite
esencial (61403161, 8077189, 23516193, 13978102).
Inciso 2•
En consideración a la extensión que tienen las bases de un concurso, el inciso segundo del articulo
20 del Estatuto Administrativo determinó expresamente aquellos elementos que no pueden faltar
en el aviso publicado en el diario oficial, por lo que en el señalado anuncio sólo podrán omitirse los
antecedentes cuya publicación no es obligatoria (44557/06).
Los errores en un aviso que llama a un concurso deben rectificarse a través de una publicación en el
mismo medio usado originalmente y utilizando iguales formalidades (11550/00).
Inciso 3•
Las personas que han postulado a un cargo público, cumpliendo los requisitos legales, tienen
derecho a ser considerados en la provisión de ese empleo, ya que la realización de un concurso
origina un vinculo jurídico que la autoridad administrativa por su mera voluntad no está facultada
para extinguir. Por el contrario, dicha autoridad, en tal circunstancia, tiene el deber de resolver
el concurso entre aquellas personas que fueron seleccionadas, puesto que ellas, al momento de
concursar, cumplían los requisitos legales, y luego, en el certamen, acreditaron idoneidad para su
desempeño (26304/90).
No satisface el requisito contemplado en la letra b) del articulo 11 (actual articulo 12) de la ley
18834, un certificado de la Dirección General de Movilización Nacional que se limita a señalar que
el interesado solicitó su reinscripción en los registros de reclutamiento (35596/94).
Comentarios:
El articulo 20 del Estatuto Administrativo exige publicar un aviso en el Diario Oficial, los días 1
á 15 de cada mes o el primer día hábil siguiente si aquellos fueren feriados, con las bases del
concurso. Ello supone que cualquier aviso relativo a concursos convocados para proveer empleos
públicos, debe efectuarse en la forma señalada, constituyendo, de esta manera, un trámite esencial
del procedimiento.
Esos avisos deberán contener, a lo menos, todas las menciones indicadas en el inciso segundo de
dicha norma. Por lo tanto, vicia el llamado a concurso el hecho que la publicación no señale las
características del cargo ni fije el día en que se resolverá el certamen. En cambio, no vicia el llamado
a concurso los errores evidentes o fáciles de subsanar mediante consulta al Servicio.
A partir del 29 de mayo de 2003, fecha en que entró en vigencia la ley 19880, que estableció las
Bases de los Procedimientos Administrativos que rigen los actos de los órganos de la Administración
del Estado, su articulo 48 obliga a publicar en el Diario Oficial los siguientes actos administrativos: a)
los que contengan normas de general aplicación o que miren al interés general; b) los que interesen
a un número indeterminado de personas; e) los que afectaren a personas cuyo paradero fuere
ignorado, de conformidad con el articulo 45, en cuyo caso la publicación deberá efectuarse los días
1 o 15 de cada mes o al día siguiente, si fuese inhábil: d) los que ordenare publicar el Presidente de
la República, y e) los actos respecto de los cuales la ley ordenare especialmente este trámite. El
articulo 49 de esa ley señala que los actos publicados en el Diario Oficial se tendrán como auténticos
y oficialmente notificados, obligando desde esa fecha a su integro y cabal cumplimiento, salvo que
se establecieren reglas diferentes sobre la data en que hayan de entrar en vigencia.
ARTICULO 21.- El concurso será preparado y realizado por un Ley 18.834, Art. 18.
comité de selección, conformado por el jefe o encargado de
personal y por quienes integran la junta central o regional a que
se refiere el artículo 35, según corresponda, con excepción del
representante de personal.
No podrán integrar el comité las personas que tengan los Ley 19.882, Art. vigésimo
parentescos o calidades que señalan la letra b) del artículo 54 séptimo, 8, a).
de la Ley N' 18.575.
Como resultado del concurso el comité de selección propondrá Ley 18.834, Art. 18.
a la autoridad facultada para efectuar el nombramiento, los
nombres de los candidatos que hubieren obtenido los mejores
puntajes, con un máximo de tres, respecto de cada cargo a
proveer.
Interpretación:
El Estatuto Administrativo no contiene normas precisas en cuanto a la forma en que deben llevarse
a cabo los concursos para proveer empleos públicos, por lo que la autoridad administrativa podrá
determinar libremente las bases y condiciones de los mismos y fijar el procedimiento mediante el
cual se evaluarán los requisitos y méritos de los postulantes. Con todo, una vez establecidas por la
autoridad, las pautas bajo las cuales se llevarán a cabo aquellos certámenes, éstas son obligatorias,
debiendo actuarse conforme a ellas y aplicarse sin discriminación en forma general a todos los
participantes (16613104, 40366104).
En cada concurso, deberá informarse a los postulantes, antes de iniciarse el proceso de selección,
el puntaje minimo para ser considerado postulante idóneo (33501104).
Si la Junta de Selección en un concurso observa un vicio que conlleva la declaración de nulidad del
mismo, está limitada por la necesidad de mantener las situaciones juridicas creadas a su amparo,
cuando aquéllas alcanzan a terceros de buena fe y se han originado bajo la presunción de legitimidad,
derivada de la competencia del órgano respectivo (15662104).
Si el Jefe Superior del Servicio de que se trate debe reemplazar a algún miembro del comité de
selección, dicha actuación se realizará ajustándose a lo previsto en el articulo 4, letra e), del decreto
69, de 2004, del Ministerio de Hacienda, Reglamento de Concursos de los Servicios afectos al Estatuto
Administrativo. Lo anterior, no puede significar que se altere el número de representantes del personal
que integrará el comité de selección, o que alguno de éstos pueda conformar simultáneamente la
Junta Calificadora, pues no existe norma que permita que ambos cometidos los ejerza una misma
persona, convirtiéndose en juez y parte en el proceso de selección (51351/05). Dicho comité de
selección, tiene que integrarse por funcionarios que tengan un nivel jerárquico superior al de la
vacante a proveer. Si no existen plazas que cumplan con ese requisito, el Jefe Superior del Servicio
solicitará al Ministro del ramo que designe los funcionarios necesarios para integrar los respectivos
comités de selección (9662/06).
Los dos representantes del personal que integran los comités de selección de los concursos internos
de promoción en los servicios públicos, no deben, necesariamente, formar parte del estamento al
cual, a su vez, pertenece el cargo que se proveerá mediante dicho sistema. Para tales fines será
suficiente pertenecer a alguna de las plantas cuyas promociones se efectúan a través de concursos
internos, esto es, de directivos de éarrera, profesionales, fiscalizadores o técnicos, a diferencia de lo
que ocurre en la conformación de las Juntas Calificadoras, en cuyo caso expresamente se dispone
que éstas deben estar integradas, entre otros, por un representante del personal elegido por éste,
según el estamento a calificar (2672/06).
El comité de selección puede funcionar con más del cincuenta por ciento de sus integrantes, sin
incluir al jefe o encargado de personal para determinar aquel porcentaje (15688/06).
En un mismo certamen podrá convocarse tanto a quienes estén interesados en proveer cargos
vacantes, como a quienes lo estén en integrar una lista de postulantes elegibles, ya que el inciso
final del artículo 21 de la ley 18834, referido a los concursos destinados a disponer de un conjunto
de postulantes elegibles, evaluados y seleccionados como idóneos, se colige que su finalidad es
mantener un listado de personas a la cual recurrir con el objeto de proveer futuros empleos vacantes,
sin necesidad de iniciar nuevos procesos de selección. Así, resultaría contrario a ese propósito exigir
un certamen especial para la confección de aquella nómina, diverso del convocado con el fin de
proveer una vacante. Además, los principios de eficiencia y economía procesal que imponen a los
órganos de la Administración del Estado, los artículos 3 y 5 de la ley 18575 y 9 de la ley 19880,
obligan a concluir que conviene aprovechar los procesos de selección de personal destinados a
proveer vacantes, para llamar a la confección de una lista de postulantes elegibles. Por su parte, el
artículo 13, inciso segundo, del decreto 69, de 2004, del Ministerio de Hacienda, relativo al aviso de
un concurso público de ingreso, señala que tiene que especificarse si éste se encuentra destinado
a la elaboración de una lista de postulantes elegibles para futuras provisiones. El hecho que el
citado artículo 21 predicho, establezca que la confección de esa lista tiene por objeto atender futuras
necesidades de "ingreso", no significa que corresponda efectuarla únicamente cuando se trata de
proveer una plaza del último grado de un determinado escalafón, también resulta útil en el caso de
un cargo de grado superior que no pudo llenarse conforme a las reglas propias de la promoción, toda
vez que de los artículos 14, inciso tercero, y 53, inciso segundo, de la ley 18834, se infiere que cuando
no se pueden aplicar las normas sobre la promoción, debe estarse a las que regulan el ingreso,
entre las cuales se halla la relativa a la confección del listado de postulantes elegibles. No obstante,
la existencia de esa lista no permite a la autoridad omitir el cumplimiento de las disposiciones que
regulan la promoción, de modo que si se produce una vacante en una plaza que no corresponde
. al último grado de un escalafón, debe primero llamarse a concurso interno, o proveerse la vacante
mediante asce>nso, según el caso. Solamente en el evento de que no sea posible lo anterior, ha. de
hacerse uso de la nómina antedicha, sin necesidad de llamar a concurso público (16165/05);
Inciso 1•
La referencia que el inciso primero del artículo 18 (actual articulo 21) hace al artículo42 (actual
articulo 47) debe entenderse formulada al artículo 30 (<Jctual articulo 35) del Estatuto Administrativo.
Este error tuvo su origen en la sustitución introducida por la ley 19165 al Párrafo 3 (actual Párrafo 4)
del Titulo 11 de la ley 18834, relativo a las Calificaciones, que cambió el texto primitivo del artículo 42
(actual artículo 47), sin adecuar la norma en comento. No puede, por ende, sostenerse que la falta
ro
·;::
de correspondencia entre las mencionadas disposiciones estatutarias ha afectado la integración del ro
comité de selección de concursos, ya que es evidente que la remisión al articulo 42 (actual artículo . e
o
·¡¡
47) debe entenderse hecha al articulo 30 (actual artículo 35) (9112/93). e
::>
LL
El. concurs.o debe ser preparado y realizado por un comité de selección conformado por el jefe o ~
director de personal y por quienes integran la junta calificadora, esto es, por los tres funcionarios ~
de mayor jerarquía, excluido el Jefe Superior del Servicio y el representante del personal, sin que -"'
-u
corresponda hacer distinciones de planta ni exigir el desarrollo de determinadas funciones (15864/90, '..2
:::~
ro
27400/91 ). ~ w
t-0
La ley no ha definido lo que debe entenderse por "jefe o encargado de personal", por lo que, de
acuerdo con las normas de hermenéutica, es aquel funcionario que en su calidad de autoridad,
manda o dirige al personal del respectivo organismo. La función de jefe o encargado de personal,
que siempre debe integrar el comité de selección, debe ser ejercida por un funcionario distinto de
aquellos que integran ese cuerpo colegiado, de modo que es improcedente que el Jefe de la División
de Administración y Finanzas haya integrado dicho comité en razón de ostentar una de las tres más
altas jerarquías del Servicio, y,· además, como Jefe de Personal, puesto que éste forma parte de
dicho órgano por der<>cho ¡:;'opio y al margen de los integrantes propiamente tal¡,s·. En. .:)ste caso,
correspondió integrar ese comité al subrogante legal del Jefe de la División de Administración y
Finanzas (44559/06, 48011/07). ·
las bases y condiciones de un concurso pueden ser establecidas libremente por la autoridad
llamada a hacer el nombramiento, sin vulnerar las normas del Párrafo 1 del Título 11 del Estatuto
Administrativo, especialmente sus artículos 16, 17 y 18 (actuales artículos 18, 20 y 21). Ellas son
obligatorias para el Servicio que convoca el concurso y deben aplicarse sin discriminación a todos
los postulantes (16981/90, 20401/91).
Las decisiones que adopten los distintos comités ·de selección constituyen meras proposiciones
para la autoridad llamada a hacer el nombramiento (19020/90).
La entrevista contemplada en las bases del concurso tiene que realizarla el comité de selección a
que se refiere el artículo 18 (actual artículo 21) de la ley 18834 y no uno o alguno de sus miembros.
Por lo tanto, vicia el procedimiento respectivo el hecho que la entrevista personal a los postulantes
se iealice sin la asistencia de uno de sus miembros, como quiera que la ley ha encomendado su
realización a un órgano colegiado (33472/00).
Inciso 2•
Si sólo dos postulantes alcanzan el puntaje mínimo, no hay inconveniente para que ellos sean
propuestos, ya que la ley no formula exigencias en cuanto al mínimo de candidatos, limitándose
a señalar que la proposición no puede contener más de tres candidatos por cargo a proveer
(1 0731/91 ).
Para efectos de proceder a la designación de una persona es menester adjuntar el resultado del
concurso con los nombres de los candidatos que hubieren obtenido los mejores puntajes, con un
máx'1mo de tres, respecto del cargo que se provee (12994/90).
La autoridad administrativa está obligada a resolver un concurso entre las personas seleccionadas
(18869/93).
La expresión "mejores puntajes" que la ley emplea, está referida a aquellos candidatos que sin tener
igual puntaje, han obtenido, a lo menos, el mínimo definido para el respectivo concurso y que, por
ende, tienen la calidad de idóneos, por lo que han quedado preseleccionados para ser propuestos
a la autoridad (35270/96).
Inciso 3°
La facultad para declarar desierto un certamen sólo procede por falta de postulantes idóneos,
entendiéndose que existe tal circunstancia cuando ninguno alcance el puntaje mínimo definido por
el respectivo concurso, declaración que compete efectuar a la autoridad que convocó al certamen
(10731/91).
Comentarios:
El artículo 21 del Estatuto Administrativo establece que el comité de selección, conformado de
la manera que expresa, deberá preparar y realizar el concurso. Por lo tanto, le corresponderá
ponderar los factores relativos al nivel de estudio, desempeño profesional, años de servicio, cursos
de perfeccionamiento de los postulantes, entre otros.
Luego, deberá evaluar los factores que se han incluido en el concurso, lo que determinará el perfil
de quien deba desempeñar el cargo concursado y que han sido previamente fijados en las bases del
certamen. Estos factores deben ser puestos en conocimiento de los participantes del concurso.
Este artículo contempla la posibilidad de conformar una lista de postulantes elegibles en los mismos
certámenes que sean convocados para llenar vacantes en los Servicios.
ARTICULO 22.- La autoridad facultada para hacer el nombramiento Ley 18.834, Art. 19.
seleccionará a una de las personas propuestas y notificará
personalmente o por carta certificada al interesado, quien deberá
manifestar su aceptación del cargo y acompañar, en original o en
copia autentificada ante Notario, los documentos probatorios de los
requisitos de ingreso señalados en el artículo 13 dentro del plazo
que se le indique. Si así no lo hiciere, la autoridad deberá nombrar a
alguno de los otros postulantes propuestos.
Interpretación:
Las personas que han postulado a un cargo público, cumpliendo los requisitos legales, tienen
derecho a ser considerados en la provisión de ese empleo, ya que la realización de un concurso
origina un vínculo jurídico que la autoridad administrativa por su mera voluntad no está facultada
para extinguir. Por el contrario, dicha autoridad, en tal circunstancia, tiene el deber de resolver
el concurso entre aquellas personas que fueron seleccionadas, puesto que ellas, al momento de
concursar, cumplían los requisitos legales, y luego, en el certamen, acreditaron idoneidad para su
desempeño (26304190).
La evaluación de los méritos de los postulantes o el mejor derecho de alguno de ellos para ser
designado en determinado cargo, son materias de competencia propia de la autoridad administrativa,
la que puede nombrar a cualquiera de las personas que sean incluidas en la terna respectiva, y no
necesariamente, a la que ocupe el primer lugar en esa nómina, pues las decisiones que adoptan
los comités de selección, constituyen meras proposiciones para la autoridad llamada a hacer el
nombramiento (32274193, 33172195).
En virtud del principio de igualdad de condiciones de los postulantes, un concurso debe resolverse por
la autoridad atendiendo a las consideraciones estipuladas en las bases del mismo, esto es, mediante
la aplicación de las normas técnicas de evaluación que culminen con la elección del seleccionado
(39&35194).
Cuando existen varios postulantes idóneos, la proposición que efectúe el comité de selección tendrá
que contener, a lo menos, el nombre de dos de ellos por cada cargo a proveer, de entre los cuales
la autoridad correspondiente deberá seleccionar a una de las personas propuestas. Tratándose
de un concurso en que deben proveerse una serie de cargos con varios postulantes idóneos
preseleccionados pero de distinto puntaje, es improcedente que se integren las proposiciones a la
autoridad con los nombres de los candidatos que hubieren obtenido solamente puntajes iguales, toda
vez que de esa forma se perjudica a quienes siendo también idóneos, tienen puntajes inferiores. Tal
conclusión se ve reafirmada si se considera que la autoridad facultada para nombrar no se encuentra
obligada a escoger al que tenga el puntaje más alto de la respectiva proposición (35270196).
No procede que la autoridad administrativa declare desierto un concurso para proveer un cargo de
planta al cual se presentaron oponentes que reunían los requisitos para ser nombrados, debiendo
resolverse conforme a las bases del certamen y la propuesta del comité de selección (11099100).
Concordancias: Arts. 11 y 13 de la LOCBGAE; 16 de la LBPA; 13, 17 al24 del EA; 20 del EAM.
Comentarios:
Según se desprende del artículo 22 del Estatuto Administrativo, la comunicación a los postulantes
no seleccionados en un concurso público, puede hacerse por cualquier medio idóneo, por lo que se
ajusta a derecho emplear el correo ordinario para informar acerca de sus resultados.
ARTICULO 23.- No obstante Jo dispuesto en Jos artículos anteriores, Ley 19.882, Art. vigésimo
las instituciones podrán contratar servicios de asesorías externas séptimo, 9.
con el fin de contar con asistencia técnica en la preparación Ley 18.834, Art. 19 bis.
y ejecución de Jos concursos, o en la preparación y realízacíón
directa de Jos mismos, pudiendo en este último caso llegar en ellos
hasta la etapa de informar a la autoridad de los puntajes obtenidos
por los postulantes.
Interpretación:
Concordancias: Art. 9 de la LOCBGAE; decreto 1258, de 2003, del Ministerio de Hacienda, que
aprueba el Reglamento que regula modalidades de licitaciones del inciso segundo, del artículo 19
bis (actual inciso segundo, del artículo 23) de la ley 18834.
Comentarios:
Esta disposición, que fuera incorporada por el W 9 del articulo vigésimo séptimo de la ley 19882
al Estatuto Administrativo, contempla la posibilidad de contratar los servicios de asesorías técnicas
externas para la preparación y ejecución de los concursos, considerando que uno de los objetivos de la
citada ley modificatoria, fue el mejoramiento del sistema de concursos dentro de la Administración.
Las asesorías que sean requeridas en estos certámenes serán contratadas mediante el sistema de
licitación.
ARTICULO 24.- Una vez aceptado el cargo, la persona seleccionada Ley 18.834, Art. 20.
será designada titular en el cargo correspondiente.
Interpretación:
Una funcionaria a contrata quien previo concurso fuera designada para servir como titular en un
grado inferior, ha perfeccionado legalmente esa designación al haberla aceptado, por lo que no tiene
derecho a que se le pague por planilla suplementaria la diferencia de sueldo existente entre ambos
empleos, pues tal protección esta prevista para los casos en que el perjuicio económico que irroga un
nombramiento al patrimonio del empleado obedezca a la sola decisión de la autoridad competente,
lo que no ocurre en este caso (32053189). ro
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Las designaciones de personal deben disponerse desde la fecha del total tramite del acto e
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administrativo que las disponga o de una posterior a ésta, en su caso, a menos que se ordenen con e
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asunción inmediata de funciones, la cual, de ningún modo, puede corresponder a una data anterior LL
a la de emisión del respectivo decreto o resolución según corresponda (25656191). ~
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Debe emitirse un acto formal de nombramiento por la autoridad competente, respecto de unfuncionario -"'
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público que se ha desempeñado como titular durante un determinado periodo (32901193), ::s-
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La Contraloria General es incompetente para pronunciarse respecto a la evaluación que efectúa la
autoridad pertinente sobre los méritos de los postulantes, y acerca del derecho que pueda invocar una
persona para ser designada en determinado cargo, pues son materias propias de la Administración
activa (32274193, 20373194, 34578194).
Comentarios:
Fluye de los 2rticulo~ 14, 22 y 24 del Estatuto Administrativo la obligación de 'a autoridad administrativa
de nombrar a una de las personas seleccionadas en el concurso. Esta última disposición regula "los
efectos de la aceptación del cargo, esto es, que la persona seleccionada sera designada titular en el
cargo correspondiente" (Informe de la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno).
ARTICULO 25.- Establécese un sistema de empleo a prueba Ley 18.834, Art. 20 bis.
como parte del proceso de selección para el ingreso del personal
a que se refiere el articulo 17, cuya aplicación será optativa para
el jefe superior del servicio respectivo. En caso de emplearse
este instrumento, este hecho se informará a los postulantes
antes de iniciarse el proceso de selección.
Interpretación:
Devuelve resolución del Ministerio de Hacienda por la que se contratá a persona que indica en
el cargo de jefe de departamento, por el plazo de seis meses, en el sistema de empleo a prueba.
Ello, porque la provisión de empleos fue regulada en forma especial en el articulo 8 del Estatuto
Administrativo, y en lo no previsto en dicho precepto legal, se permitió recurrir a las normas del
Párrafo 1 del Titulo 11 de este Estatuto. Los aspectos no previstos en el aludido artículo 8, y que
son pertinentes al proceso de selección que en dicho artículo se contiene, son los relacionados con
el concurso propiamente tal. Por su parte, la regulación del empleo a prueba está contenida en el
artículo 25 de la ley 18834, dentro del Párrafo 2 del Titulo 11, y no en el mencionado Párrafo 1, por
lo cual, acorde con lo establecido en la letra f) del artículo 8, el referido sistema no es aplicable a la
provisión de cargos de jefes de departamento, ya que, según el artículo 7 de la Constitución Política,
los órganos del Estado solo pueden hacer aquello que está expresamente permitido. El hecho de ,~
que el articulo 25 de la ley 18834, señale que el sistema de empleo a prueba es parte del proceso
de selección a que se refiere el artículo 17 del mismo texto, el cual puede ser aplicado a la provisión
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de los cargos de jefes de departamento conforme a la citada letra f) del articulo 8, puesto que ;:¡
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dicho sistema puede utilizarse en concursos de ingreso a la Administración Pública, ello no procede
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tratándose de procedimientos de selección de jefes de departamento, ya que el articulo 25 no lo ~
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ha considerado. Además, la figura del empleo a prueba, que contempla un período de entre 3 a 6
meses en esa calidad, es incompatible con la provisión de los cargos aludidos en el artículo 8 de la
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ley 18834, puesto que en la letra d) del referido precepto legal, se fijó expresamente un periodo de :~ (J}
Concordancias: Arts. 17 y ss. del EA; 20 a 25 del decreto 69, de 2004, del Ministerio de Hacienda,
que aprueba el Reglamento sobre Concursos de Selección de Personal afecto al Estatuto
Administrativo.
Comentarios:
Esta disposición contempla una novedad en materia de contratación dentro de la Administración, al
introducir el empleo a prueba como una posibilidad de ingreso distinta a la titularidad, la contrata y los
cargos a honorarios. Lo anterior debe considerarse como parte integrante del sistema de selección
de personal, y como una manera de eleg1r a los más idóneos para servir los cargos y aqu'ellos que
reúnan las mejores condiciones para desempeñarse dentro de cada Servicio.
Con todo, esta modalidad será facultativa para el Jefe de Servicio, debiendo procederse de acuerdo
a lo que esta norma establece.
Interpretación:
Cada institución es responsable de la capacitación de sus dependientes, la que debe solventar con
sus propios recursos presupuestarios (21897/92).
Procede que a las personas contratadas a honorarios se les paguen cursos de capacitación cuando
ese beneficio ha sido estipulado expresamente en el respectivo contrato (16511/91).
En materia de capacitación de los funcionarios deben entenderse comprendidos tanto los cursos de
inglés como los de uso y manejo de equipos computacionales y procesadores de textos, considerados
indispensables para el cumplimiento de las funciones del Servicio (13674/94).
La capacitación está concebida para todos los funcionarios regidos por la ley 18834, incluyendo
a los empleados a contrata, los que tienen derecho a la capacitación de perfeccionamiento y a
la capacitación voluntaria pese al carácter transitorio de sus desempeños y estar al margen de
la carrera funcionaria. La capacitación para el ascenso alcanza únicamente a los funcionarios de
planta, porque los habilita para asumir cargos superiores (22338/94).
Deben considerarse accidentes del trabajo los ocurridos durante los cursos de capacitación voluntaria
efectuados durante la jornada laboral (19040/00).
La autorización para efectuar actividades docentes durante la jornada de trabajo por parte de los
funcionarios públicos que contempla el articulo 8 de la ley 19863, se refiere a aquellas acciones
de diagnóstico, planificación, ejecución y evaluación de las actividades de enseñanza que se
Concordancias: Arts. 38, inciso primero, CP de la R.; 20, 48 y 51 de la LOCBGAE; 27 al 31 del EA;
22 del EAM.
Comentarios:
La capacitación del personal de la Administración del Estado ha sido prevista en la Constitución Política
de la República, articulo 38, inciso primero, que remite a una ley orgánica constitucional (que es la ley
18575) la determinación de la organización básica de la Administración Pública, encomendándole,
especialmente, asegurar "la capacitación y el perfeccionamiento de sus integrantes". Dicha ley
18575, en su articulo 48, establece las normas sobre capacitación, las que, a su vez, desarrolla el
Párrafo 3° del Titulo JI del Estatuto Administrativo, en los artículos 26 y siguientes.
La concepción integral de capacitación que contempla el articulo 26, se relaciona de manera directa
con el sistema de carrera funcionaria que regula el Estatuto Administrativo, el cual se caracteriza
por ofrecer en el ejercicio de la función pública una línea ascendente de desempeño funcionario que
comienza en el último grado del escalafón y termina en el tope de éste.
Al respecto, resulta relevante lo expresado en el inciso tercero del artículo 48 de la citada ley 18575,
en cuanto a que "La ley podrá exigir como requisito de promoción o ascenso el haber cumplido
determinadas actividades de capacitación o perfeccionamiento".
Cabe señalar, en otro orden de ideas, que en el sector privado rige la ley 19518, que fija el nuevo
Estatuto de Capacitación y Empleo, de manera preferente, cuyo reglamento fue establecido por el
decreto 98, de 1997, del Ministerio del Trabajo y Previsión Social, Subsecretaria del Trabajo. Estas
normas deben entenderse concordadas con los artículos 179 a 183 bis del Código del Trabajo, que
se contemplan en el Titulo VI del Libro 1 denominado "De la Capacitación Ocupacional".
ARTICULO 27.- Existirán Jos siguientes tipos de capacitación, Ley 18.834, Art. 22.
que tendrán el orden de preferencia que a continuación se
señala:
a) La capacitación para la promoción que corresponde a aquella Ley 19.882, Art. vigésimo
que habilita a Jos funcionarios para asumir cargos superiores. séptimo, 11.
La selección de Jos postulantes se hará estrictamente de
acuerdo al escalafón. No obstante, será voluntaria y, por ende,
la negativa a participar en Jos respectivos cursos no influirá en
la calificación del funcionario;
b) La capacitación de perfeccionamiento, que tiene por objeto Ley 18.834, Art. 22.
mejorar el desempeño del funcionario en el cargo que ocupa. La
selección del personal que se capacitará, se realizará mediante
concurso, y
Interpretación:
El articulo 22 (actual articulo 27) del Estatuto Administrativo establece tres tipos de capacitación: la
·que habilita para el ascenso (actualmente denominada promoción), en la que los funcionarios deben
ser seleccionados estrictamente de acuerdo al escalafón; la de perfeccionamiento y la voluntaria de
interés para la institución, en las que la selección del personal que participará debe efectuarse por
concurso. Únicamente estas tres actividades pueden estar autorizadas y financiadas por la respectiva
institución (24870/96 -reconsiderado parcialmente por el40247/96-).
capacitación programadas por el Hospital Clinico de dicha Universidad para sus empleados, en los
términos contemplados en el articulo 27 de la ley 18834, capacitación que debe programarse por la
autoridad administrativa en conjunto con el Departamento de Capacitación, tomando en consideración
las necesidades del servicio. Así, cabe concluir que compete a la autoridad administrativa, en uso de
sus facultades generales de dirección y administración, establecer las actividades que, en cada año,
se incorporarán en el programa de perfeccionamiento de la respectiva entidad, como también fijar
prioridades y condiciones para el desarrollo de las mismas (28901/05).
El articulo 27 de la ley 18834, al definir la capacitación para la promoción, sólo señala que
corresponde a aquélla que habilita a los funcionarios para asumir cargos superiores, pero no entrega
ningún elemento semántico que permita precisar el contenido de esa capacitación, por lo que dicha
definición legal debe complementarse con lo indicado en el articulo 37 del decreto 69, de 2004, del
Ministerio de Hacienda (47497/04).
Letra a)
Letra b)
La omisión del Servicio al no llamar a concurso para seleccionar a los postulantes interesados en
participar en la capacitación de perfeccionamiento, atenta contra la garantía de otorgar igualdad de
oportunidades para acceder a esa capacitación (31197/90).
Letra e)
Concordancias: Arts. 26 al 31 del EA; 23 del EAM; 10 y 11 de la ley 19518, nuevo Estatuto de
Capacitación y Empleo, cuyo Reglamento fue establecido por el decreto 98, de 1997, del Ministerio
del Trabajo y Previsión Social, Subsecretaria del Trabajo.
Comentarios:
De acuerdo con el Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua, se entiende por
"capacitar", hacer a uno apto, habilitarlo para alguna cosa.
El articulo 27 del Estatuto Administrativo consulta los diversos tipos de capacitación, los cuales
tendrán el orden de preferencia que en él se indica.
El Informe de la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno expresa que el propósito de esta norma
es orientar a cada institución en el sentido de que contando con recursos para estos efectos, y
estableciendo la ley orgánica del servicio los casos en que la capacitación para la promoción o ascenso
será obligatoria, conforme lo autoriza el inciso tercero del articulo 50 (actual inciso tercero del artículo
48) de la ley 18575, tendrá siempre la primera prioridad sobre las demás, y así sucesivamente.
Agrega el Informe, en relación con su letra a), atingente a la capacitación para el ascenso (actual
capacitación para la promoción), que se consideró necesario establecer, dada su voluntariedad, que
la negativa de un funcionario a participar en los respectivos cursos no influirá en su calificación pero,
lógicamente, impedirá el ascenso o promodón que pudiere corresponderle.
Se expresa asimismo que en la letra b), se suprimió la discrecionalidad con que contaba la jefatura
para seleccionar a quienes se capacitarán, estableciéndose que la selección se hará mediante
concurso, al igual como lo proponía el Ejecutivo para la capacitación voluntaria.
El articulo 27 del Estatuto Administrativo contempla los diversos tipos de capacitación, agregando
conforme lo indicado por el artículo vigésimo séptimo de la ley 19882, en primer lugar, la capacitación
para la promoción, entendiéndose por tal, aquella que habilita a los funcionarios para asumir cargos
superiores.
Lo anterior concuerda con uno de los objetivos del precitado texto modificatorio, cual es, la promoción
de programas de capacitación funcionaria.
Con todo, considerando que la capacitación para la promoción es voluntaria, se estimó pertinente
precisar que la negativa del funcionario de concurrir a ésta no influirá en su calificación, pero impedirá
su promoción.
Finalmente, en el Mensaje de la ley 19882, se expresa específicamente que se desea promover una
mayor inversión de los serviciasen programas de capacitación funcionaria que permitan continuamente
elevar y actualizar las capacidades y habilidades laborales del personal de la Administración.
ARTICULO 28.- Los estudios de educación básica, media o superior Ley 18.834, Art. 23.
y los cursos de post-grado conducentes a la obtención de un grado
académico, no se considerarán actividades de capacitación y de
responsabilidad de la institución.
Aquellas actividades que sólo exijan asistencia y las que tengan una
extensión inferior a veinte horas pedagógicas, se tomarán en cuenta
sólo para Jos efectos de la capacitación voluntaria.
Interpretación:
estudios por el Gobierno Regional de Aysén, ya que no ha correspondido que se les haya sometido a
obligaciones no establecidas expresamente en la ley 18834. El Estatuto Administrativo al no permitir
que los organismos sujetos a sus disposiciones se hagan responsables del costo de los estudios
conducentes a un grado académico, tampoco regula las obligaciones a que se encontrarían afectos
los funcionarios designados para cursarlos y, por ende, no contempla sanciones para los servidores
que, de cualquier forma, no cumplan con las obligaciones impuestas por el respectivo organismo o
bien que no finalicen los estudios de que se trate. Luego, no ha sido procedente que el Gobierno
Regional de Aysén haya sometido a determinados funcionarios a un régimen de obligaciones no
previstos en la ley 18834, por lo que dicho organismo no se encuentra facultado para exigirles
el pleno cumplimiento de los estudios de magíster a que se refiere la consulta o cualquier otro
compromiso derivado de los mismos, como tampoco la restitución de los gastos que ellos puedan
haber implicado (3901/07. Deja sin efecto toda jurisprudencia contraria, 54502/07).
La capacitación concebida como una actividad que alcanza a todos los funcionarios, concierne a
cursos que tengan por objetivo contribuir al perfeccionamiento y actualización de los conocimientos
que los servidores requieren para el eficiente desempeño de sus funciones, permitiendo que la
respectiva entidad empleadora pague dichos cursos, pero no es comprensiva de los estudios que
indica el artículo 23 (actual artículo 28), los cuales no pueden ser financiados por el Servicio. Por
ello, el curso "Elementos de Organización e Introducción a la Administración Pública" impartido por
una universidad como parte de la carrera de Ingeniería de Ejecución en Administración Pública, no
es un curso de capacitación de acuerdo con el referido artículo del Estatuto Administrativo, toda vez
que implica la realización de estudios de educación superior, situación que no se plantea, en cambio,
cuando se trata de cursos de nivel superior pero que no forman parte de un programa que conduce
a la obtención de un título profesional. Sostener un criterio diverso significaría aceptar que por la vía
de acceder a distintos módulos que forman parte de una carrera, los funcionarios puedan obtener un
diploma, objetivo distinto del perseguido por el legislador al establecer las normas sobre capacitación
(13922/96).
Los Servicios pueden contribuir a mejorar los conocimientos de sus funcionarios a través de programas
de capacitación, pero esto no significa que por dicha vía y utilizando fondos de la Institución, se les
pueda proporcionar una carrera profesional (29718/93).
Concordancias: Arts. 26 al 31 del EA; ley 18962, Orgánica Constitucional de Enseñanza; 24 del
EAM.
Comentarios:
· La capacitación en el Estatuto Administrativo está concebida como una actividad que alcanza a todos
los funcionarios, concierne a cursos que tengan por objeto contribuir, en definitiva, al perfeccionamiento
y actualización de los conocimientos que los servidores requieren para el eficiente desempeño de
sus funciones, permitiendo que la respectiva entidad empleadora pague dichos cursos, pero no es
comprensiva de los estudios que indica su artículo 28, los cuales no pueden ser financiados por el
Servicio.
ARTICULO 29.- Las instituciones deberán distribuir los fondos que les Ley 18.834, Art. 24.
sean asignados en programas de capacitación nacionales, regionales
o locales, de acuerdo con las necesidades y características de las
correspondientes funciones y siguiendo el orden de preferencia
señalado en el artículo 27.
Interpretación:
La capacitación efectuada al amparo de la ley 18834 debe financiarse con los recursos considerados
genéricamente por la ley anual de presupuestos, con fines de capacitación (21 009195).
La forma de remunerar a los instructores que impartan cursos de capacitación, sólo está referida
a la posibilidad de celebrar convenios con organismos públicos o privados. De esta manera, si la
capacitación se contrata con terceros ajenos al Servicio, debe materializarse en la forma establecida
por el decreto 98, de 1991, de Hacienda, dictado de acuerdo con el artículo 16 del DL 1608, de 1976,
pues ella involucra la celebración de convenios que significan la prestación de servicios personales
relacionados con tareas indispensables para la ejecución eficiente de las funciones propias del
organismo (40656195).
Concordancias: Arts. 48 de la LOCBGAE; 26 al31 del EA; Ley 20141, de Presupuestos del Sector
Público para el año 2007, Subtitulo 22, "Capacitación y Perfeccionamiento ley 18575"; Arts. 25,
incisos segundo y tercero, y 28 del EAM.
Comentarios:
El articulo 29 del Estatuto Administrativo derogó tácitamente las normas que exigían autorización
de la Subsecretaria de Desarrollo Regional y Administrativo para desarrollar cursos de capacitación,
confiriendo autonomía a los Servicios, para la distribución de los fondos y ejecución de los programas
respectivos. Además, las instituciones podrán celebrar convenios con organismos públicos o
privados, nacionales, extranjeros o internacionales, para la realizac·lón de cursos de capacitación.
Esta nueva normativa estatutaria se funda en el articulo 48 de la ley 18575, que no somete a la
aprobación de un determinado organismo los programas de capacitación que desee efectuar un
Servicio regido por la ley 18834.
ARTICULO 30.- En los casos en que la capacitación impida al Ley 18.834, Art. 25.
funcionario desempeñar las labores de su cargo, conservará éste el
derecho a percibir las remuneraciones correspondientes.
Interpretación:
Inciso 1°
No procede otorgar becas para cumplir programas de capacitación dispuestos por el Servicio. Los
funcionarios que asistan a dichos programas conservarán el derecho a percibir sus remuneraciones,
cuando se vean impedidos de ejercer las labores propias de sus cargos durante la jornada ordinaria
(31911194).
Inciso 2°
El descanso complementario del inciso segundo del artículo 30 del Estatuto Administrativo,
alcanza a todas aquellas personas seleccionadas para asistir a los cursos a que alude el artículo
31, correspondan éstos a capacitación para la promoción, de perfeccionamiento o voluntaria, sin
distinción alguna, toda vez que la asistencia a ellos tiene el carácter de obligatoria para el personal
seleccionado. Por ende, tratándose de charlas o cursos que se extienden más allá de la jornada
ordinaria de trabajo y que no cumplan con las características del artículo 27, la asistencia a ellos
en horario que exceda a dicha jornada, es meramente voluntaria y no da derecho al descanso
complementario correspondiente (36294106).
Es improcedente otorgar el descanso comp'ement'!rio a que se refiere esta norma, cuando se trata
de charlas o cursos a los que asiste voluntariamente el funcionario fuera de la jornada ordinaria de
trabajo, que no reúnen las características de cursos de capacitación de acuerdo con el Estatuto
Administrativo (31197190, 11458192,43030194, 14297197,29520197, 32042100).
Comentarios:
El artículo 30 del Estatuto Administrativo señala que si la capacitación impide al funcionario
desempeñar sus labores, conserva el derecho a percibir las remuneraciones correspondientes. Si
la concurrencia a dichos cursos tiene lugar fuera de la jornada ordinaria, este precepto ha dispuesto
como compensación el otorgamiento de un descanso complementario a los servidores que hubieren
participado en ellos, no siendo procedente el pago de horas extraordinarias.
ARTICULO 31.- Los funcionarios seleccionados para seguir cursos Ley 18.834. Art. 26.
de capacitación· tendrán la obligación de asistir a éstos, desde
el momento en que hayan sido seleccionados, y los resultados
obtenidos deberán considerarse en sus calificaciones.
Interpretación:
Inciso 1°
Los resultados de la capacitación de los funcionarios deben anotarse en sus hojas de vida, sin
distinguir el carácter de esa capacitación, incluyéndose el resultado de todos los cursos indicados
en el articulo 22 (actual articulo 27) de este Estatuto. Como la normativa no precisa el factor de las
calificaciones en que deben ser considerados tales resultados, ellos deberán ser ponderados en el
factor "preparación y eficiencia funcionaria" (10731191).
Inciso 2°
Ex académico de una universidad estatal, quien luego de efectuar un curso de capacitación con
derecho a remuneraciones, pago de matrícula y aranceles, y liberación horaria, renunciara a su
cargo ingresando a otra universidad estatal, debe devolver a la primera casa de estudios el total
de las sumas por el gasto incurrido durante la referida capacitación. Ello, porque de acuerdo con
el inciso segundo del artículo 45 (actual artículo 43) de la ley 18575 y artículo 156 (actual artículo
162), letra a), de la ley 18834, los académicos de las instituciones de educación superior se rigen por
estatutos de carácter especial, aplicándose supletoriamente las normas de la ley 18834. Como los
cursos de capacitación de la universidad a que pertenecía el interesado se rigen por una resolución
que establece la obligación del académico favorecido de permanecer en ella por un período igual al
doble de aquél por el que percibió remuneraciones y gozó de liberación horaria, deber que termina
si devuelve al plantel universitario las sumas que éste le hubiere entregado a cualquier título durante
ese lapso, no procede aplicar este inciso segundo que libera del pago si se continúa el desempeño
en la respectiva institución o en otra entidad de la Administración del Estado (26843/90).
Los fiscalizadores del Servicio de Impuestos Internos favorecidos con cursos de capacitación dentro
o fuera del organismo, deben garantizar la obligación de permanencia en el Servicio rindiendo
caución sólo si el Director así lo dispone de acuerdo con el artículo 39 del DFL 7, de 1980, de
Hacienda, ordenamiento por el cual se rigen dichos funcionarios conforme a los artículos 156 (actual
artículo 162) y 4 transitorio de la ley 18834, sin desmedro de la aplicación supletoria del Estatuto
Administrativo en los aspectos o materias no reguladas por esa preceptiva especial. Como el citado
artículo 39 y la ley 18834 no se refieren al monto y tipo de garantía, debe estarse a los artículos 68
al 84 de la ley 10336 (30770/97).
Inciso 3•
Un funcionario contratado que realizó un curso de formación básica necesaria para el desempeño
del cargo, no está obligado a reembolsar la suma de dinero correspondiente al gasto en que el
Servicio incurriera por su participación en dicho curso, porque la obligación de reembolso se refiere a
quienes, siendo funcionarios, son seleccionados para seguir los cursos de capacitación (1888/90).
Es improcedente hacer efectiva una póliza de fianza contratada por un ex funcionario para garantizar
la permanencia en el Servicio después del término de un curso de perfeccionamiento, porque el
empleado que asiste a un curso de capacitación no está obligado a rendir caución para garantizar
esa permanencia, pues el incumplimiento de este deber tiene previsto como sanción la de restituir
a la institución que autorizó el respectivo perfeccionamiento, las sumas gastadas por tal motivo
(35772/94, 41565/94, 30770/97).
Comentarios:
En lo sustancial, el Informe de la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno, expresó, con respecto al
artículo 26 (actual artículo 31), inciso primero, que éste establece la obligatoriedad de los funcionarios
seleccionados de asistir a los cursos de capacitaCión. Se agrega que por la circunstancia de haberse
previsto en el artículo 22 (actual artículo 27) que toda capacitación es voluntaria, los resultados
de ella deberán necesariamente influir en la calificación de los funcionarios, haciendo a éstos
responsables de la decisión que adopten, y asi no desvirtuar la seriedad e importancia que al interior
de la Administración debe tener la formación del funcionario.
segundo del articulo 31 de la ley 18834. Al respecto, debe señalarse que la sanción que contempla
el inciso tercero de esta misma disposición, en cuya virtud la persona que no da cumplimiento a la
obligación anotada debe reembolsar a la institución que corresponda todo gasto en que ésta hubiere
incurrido con motivo de la capacitación, no parece ser suficiente para obtener su cumplimiento,
pues el afectado puede no efectuar ese reembolso, caso en el cual y mientras no lo haga, sólo se
encuentra inhabilitado para ingresar a la Administración del Estado.
ARTICULO 32.- El sistema de calificación tendrá Ley 19.882, Art. vigésimo séptimo, 12.
por objeto evaluar el desempeño y las aptitudes Ley 18.834, Art. 27.
de cada funcionario, atendidas las exigencias y
características de su cargo, y servirá de base para
la promoción, los estímulos y la eliminación del
servicio.
Interpretación:
La calificación tiene por objeto evaluar el desempeño y aptitudes de cada funcionario, comprendiendo
esa evaluación aspectos relacionados con la cantidad y calidad de la labor realizada, grado de
conocimiento de la actividad desempeñada y responsabilidad y cumplimiento de normas, materias que
por su naturaleza deben ponderarse exclusivamente por el respectivo Servicio, no correspondiendo
a la Contraloria General actuación alguna relacionada con conceptos y notas que merezcan esos
factores, pudiendo solamente pronunciarse sobre los vicios de legalidad que afecten a dicho proceso
(33736/93, 25237/05, 13651/06, 10924/07).
La facultad de la Contraloria General para revisar los procesos evaluatorios de los funcionarios
públicos dice relación con la posible existencia de arbitrariedades o vicios de legalidad que pudieran
presentarse en sus diferentes etapas, en contravención a las leyes y reglamento que rigen la materia,
y no sobre el mérito y desempeño de los funcionarios, respecto de los cuales sustenta en definitiva
su determinación la Junta Calificadora, ya que dicho ente calificador tiene plena facultad para evaluar
el comportamiento y eficiencia de los empleados, sin perjuicio de las atribuciones que sobre esta
materia recaen en el jefe superior del servicio (27132/02, 39653/07).
En consideración al objeto de la calificación, establecido por el articulo 27 (actual articulo 32) del
Estatuto Administrativo, no procede establecer en un reglamento especial de calificaciones de
un servicio que los factores y subfactores de evaluación comprendan mayoritariamente para los
estamentos pertinentes, las labores de dirección, jefatura o supervisión, omitiendo otros aspectos
del desempeño funcionario, tales como el cumplimiento de normas e instrucciones, asistencia y
puntualidad, puesto que estos últimos también deben ser cumplidos por quienes se desempeñan
como directivos, jefes o supervisores (27003/04).
Si bien es cierto que al evaluar el desempeño de un funcionario, se emite un juicio valórico objetivo
sobre aspectos específicos, la Junta de Calificaciones debe considerar las especiales circunstancias
que afecten a un determinado servidor (21214/05).
Los funcionarios deben ser evaluados atendidas las exigencias y características de su cargo. Por
tal motivo, el proceso calificatorio desarrollado sobre la base de evaluar funciones ajenas al empleo
adolece de vicio de legalidad insubsanable (31259/99, 20552/00, 13651/06, 40638/07).
Concordancias: Arts. 45, 46 y 47 de la LOCBGAE; 18, incisos primero y tercero, de la ley 19880,
que establece Bases del Procedimiento Administrativo que rige los Actos de los órganos de la
Administración del Estado; 33 al 52 del EA; 18 del decreto 1825, de 1998, del Ministerio del Interior,
que aprobó el Reglamento de Calificaciones del personal afecto al Estatuto Administrativo. El artículo
42 de estedecreto derogó expresamente el decreto 1229, de 1992, de esa Secretaría de Estado,
que regulaba esta materia respecto de algunos funcionarios de la Administración, el cual mantuvo su
vigencia para determinados personales en las condiciones que indica, de acuerdo con el artículo 3
transitorio de dicho decreto 1825; Art. 29 del EAM.
Comentarios:
La Comisión Conjunta de la Junta de Gobi~rno según expresa en su Informe, consideró indispensable
consagrar un sistema integral de calificaciones del personal de la Administración Pública, lo
más objetivo posible, a fin que sirva de base para la carrera funcionaria, su profesionalización y
eficiencia.
El Mensaje enviado a la Cámara de Diputados por el Presidente de la República, que dio inicio
al trámite de la ley 19882, estableció como uno de los propósitos del proyecto, la modificación,
entre otros textos legales, del Estatuía Administrativo, en relación con la carrera funcionaria y el
perfeccionamiento del sistema de calificaciones, en el entendido de mantener su imparcialidad y
objetividad, para que sirva de base a la carrera funcionaria, su profesionalización y eficiencia.
El sistema de calificaciones es un procedimiento reglado, por lo que las normas de la ley 19880,
que establece Bases del Procedimiento Adm-Inistrativo que rige los Actos de los órganos de la
Administración del Estado, se aplican con carácter supletorio, de acuerdo con el mandato de su
artículo 1.
ARTICULO 33.- Todos los funcionarios, incluido el personal a contrata, Ley 19.165, Art. 1°.
deben ser calificados anualmente, en alguna de las siguientes listas: Ley 18.834, Art. 28.
Lista N" 1, de Distinción; Lista N° 2, Buena; Lista N• 3, Condicional;
Lista N" 4, de Eliminación.
Interpretación:
Inciso 1•
Los servidores que ocupan cargos de las más altas jerarquías del Servicio pero que no integran
las Juntas Calificadoras deben ser evaluados y la precalificación efectuada por sus jefes directos,
puesto que no están expresamente exceptuados de la aplicación de este articulo. Lo mismo ha
ocurrido respecto de quienes ocuparon cargos adscritos en conformidad con el artículo 2 transitorio
de la ley 18972 (norma derogada por el articulo septuagésimo de la ley 19882) (113193, 17236199,
17947199).
Los funcionarios que ocupan cargos de exclusiva confianza no están liberados del régimen de
calificaciones contemplado en la ley 18834. Ello, por cuanto de la interpretación armónica de los
articules 27, 28, 29 y 35 (actuales articules 32, 33, 34 y 40) de dicho ordenamiento, se desprende
que tienen que ser calificados anualmente todos los empleados regidos por el aludido Estatuto,
salvo aquellos que expresamente exceptúa, entre los cuales no se encuentran los de exclusiva
confianza. Además, porque el mecanismo de calificaciones consultado en esa ley, no sólo está
orientado a regular la carrera funcionaria sino que apunta a un objetivo más amplio, cual es, "evaluar
el desempeño y las aptitudes de cada funcionario", para decidir acerca de los estimules y sobre su
permanencia en el Servicio (25716196).
La circunstancia que determinados funcionarios del Servicio se rijan por el Código del Trabajo no
impide que puedan ser calificados conforme al régimen previsto en el Estatuto Administrativo, dado
que el legislador no los excluyó del proceso de evaluación (31324192 -reconsiderado parcialmente
por el 21 054193-).
Los Decanos de Universidades deben ser calificados anualmente porque tales cargos no tienen
la condición de empleos académicos que permiten a quienes los ocupan regirse por estatutos
especiales, conforme al articulo 156 (actual articulo 162), letra a), de la ley 18834, aun cuando
tengan responsabilidades relativas a la enseñanza e investigación de la unidad respectiva, pues lo
caracteristico de sus funciones es la dirección y administración de las facullades (25167193).
Inciso 2•
Corresponde al Jefe Superior de cada Servicio y no a la Contraloria General fijar los criterios y
objetivos para efectuar las calificacio.nes de los funcionarios regidos por la ley 18834 (30254193).
Concordancias: Arts. 32 al 52 del EA; 25 de la ley 19296, que establece normas sobre Asociaciones
de Funcionarios de la Administración del Estado; 2, 15 y 38 del decreto 1825, de 1998. del Ministerio
del Interior; Art. 30 del EAM; Art. septuagésimo de la ley 19882, que regula nueva política de personal
a los funcionarios públicos que indica.
Comentarios:
Los artículos 34 y 40 de la ley 18834 y 25 de la ley 19296, constituyen excepciones a la regla que
establece el articulo 33 del Estatuto Administrativo. En efecto, de acuerdo con estas disposiciones
no serán calificados el Jefe Superior de la institución, su subrogante legal, los miembros de la Junta
Calificadora Central, los delegados del personal, los dirigentes gremiales que integran el directorio
de una asociación gremial -salvo en estos dos últimos casos que soliciten ser calificados- y los
funcionarios que por cualquier motivo hubieren desempeñado efectivamente sus funciones por un
lapso inferior a seis meses, ya sea en forma continua o discontinua dentro del respectivo periodo de
calificaciones
ARTICULO 34.- No serán calificados el Jefe Superior de la institución, Ley 19.165, Art. 1".
su subrogante legal, los miembros de la Junta Calificadora Central y Ley 18.834, Art. 29.
los delegados del personal, quienes conservarán la calificación del
año anterior, cuando corresponda.
Interpretación:
Inciso 1•
Todos los funcionarios de la Administración del Estado, incluidos los contratados, deben ser calificados
anualmente, quedando expresamente al margen de dicha evaluación sólo el Jefe Superior de la
institución, su subrogante legal, los miembros de la Junta Calificadora Central y los delegados del
personal (7136/93).
Abogado integrante y Presidente del Consejo de Defensa del Estado, quien conforme al articulo
9 del DL 2573, de 1979 -cuyo texto actual se contiene en el artículo 18 del DFL 1, de 1993, del
Ministerio de Hacienda- es el Jefe Superior del Servicio, está excluido del proceso calificatorio, al
igual que su subrogante legal, pero los demás abogados del referido Consejo que no forman parte
de la Junta Calificadora Central, deben ser evaluados, porque no poseen ninguna de las calidades
que establece este articulo para quedar al margen de la calificación (31192/92).
Los funcionarios que no pueden integrar una Junta Calificadora por encontrarse suspendidos de sus
empleos por orden judicial, están liberados de calificación aunque no cumplan efectivamente esa
función. Lo mismo ocurre con sus subrogantes o suplentes ante dicho órgano colegiado, debido a la
posición jerárquica que ostentan (27127/92, 12646/97).
La referencia que este articulo 29 (actual articulo 34) hace a los delegados del personal, alcanza a
los representantes elegidos por los funcionarios para integrar las Juntas Calificadoras pero si no se
hubiere efectuado esa elección, al funcionario más antiguo, a quien compete actuar en esa condición
(38385/96).
Los representantes del personal ante los Comités Paritarios de Higiene y Seguridad a que alude el
articulo 6 de la ley 19345, están sujetos a calificación (4994/02).
Los servidores que deben integrar la Junta Calificadora están liberados de evaluación, sea que
ejerzan efectivamente su cometido o que se encuentren impedidos de hacerlo cualquiera sea la
causa que origine el impedimento, como ocurre cuando se encuentran gozando de licencia médica
o desempeñando una comisión de servicios (11592/99, 47139/01).
Quienes integran las Juntas Calificadoras y, por ende, carecen de calificación, pueden presentarse a
los concursos para proveer los cargos de jefes de departamento o de niveles de jefatura jerárquicos
equivalentes, porque no ha sido la intención del legislador inhabilitarlos para participar en esos
certámenes como consecuencia del cumplimiento de un mandato que el mismo les ha impuesto,
conforme a lo prescrito en los artículos 34 y 35 del Estatuto Administrativo (2680/06).
Los funcionarios que conservan la calificación del año anterior, pueden participar en concursos
de promoción y en aquellos para proveer plazas de jefes de departamento y niveles de jefatura
jerárquicos equivalentes, siempre que la evaluación anterior corresponda a una lista que los habilite
para postular a esos procesos de selección y cumplan los demás requisitos legales (28982/05).
Inciso 2•
Al delegado del personal no se le califica, salvo que lo pida expresamente, conservando la evaluación
del año anterior, cuando corresponda, lo cual pretende garantizar que su actuación en defensa
de los empleados durante el proceso calificatorio, no lo perjudique en su carrera funcionaria, pero
no significa que goce de fuero, concepto que evoca la idea de inamovilidad (46909/99, 15878/01,
23594/05).
El delegado del personal, sea titular o suplente, sólo queda excluido de la calificación en la medida
que haya desempeñado efectivamente sus labores de representación, cualquiera que haya sido el
iiempo durante el cual cumplió con esas funciones en el periodo respectivo (29966/72, 63047/04).
Los funcionarios excluidos del proceso evaluatorio, como ocurre con los representantes del personal
ante la Junta Calificadora, tienen derecho a conservar su calificación, lo que les permite mantener
el puntaje que hayan obtenido en procesos anteriores, el cual produce los mismos efectos que el
de los empleados que han sido objeto de evaluac-Ión. Esto, con el fin de evitar que quien posea la
calidad de representante pueda verse afectado, como ocurriría en el caso de impedirles participar
en los concursos llamados por la institución para la promoción de cargos, por no ser calificados en el
periodo inmediatamente anterior (23594/05).
Los delegados del personal que integran la Junta Calificadora, deben poseer calificación para poder
presentarse a los concursos convocados para proveer los cargos de jefes de departamento y de
niveles de jefatura jerárquicos equivalentes. Ello, porque tales delegados, pueden ser calificados
cuando así lo solicitaren, esto es, no existe un impedimento legal para que tales empleados posean
calificación a diferencia de los demás integrantes de la Junta, ya que el no poseer evaluación es
un hecho que deriva de su propia voluntad y, por consiguiente, las consecuencias de tal decisión,
cualquiera sean ellas, no obedecen a un impedimento de carácter legal, sino que tienen su origen en
una decisión libre del respectivo funcionario (2680/06).
Los delegados del personal que no son calificados y conservan la evaluación del año anterior, no
tienen derecho a mantener el lugar en el nuevo escalafón, y la posición que en éste ocupen será la
consecuencia del puntaje conservado y de la aplicación de la normativa vigente sobre la materia,
según la cual, a los funcionarios de un mismo grado debe ubicárseles en orden decreciente conforme
al puntaje obtenido. Con todo, si en la época en que se realizó la evaluación que se mantiene hubiera
existido una tabla o escala de notas o puntajes distinta de la vigente al momento de determinar su
Jugar en el escalafón, el puntaje que se conserva ha de convertirse a un guarismo que, dentro del
tramo consultado para la nueva escala, represente fidedigna y consistentemente lo que la antigua
cifra significaba dentro de la escala que perdió su vigor (44543/99, 11683/01).
Concordancias: Arts. 32 al 52 del EA; 1, 20 y 25 de la ley 19296, que establece normas sobre
Asociaciones de Funcionarios de la Administración del Estado; 5 del decreto 1825, de 1998, del
Ministerio del interior; 31 del EAM.
Comentarios:
El articulo 34 del Estatuto Administrativo excluye expresamente de la calificación a los servidores de la
Administración que indica, quienes conservarán la evaluación del año anterior, cuando corresponda.
No obstante, si el delegado del personal lo solicita, será calificado por su Jefe Directo.
En concordancia con la norma anteriormente citada, debe tenerse presente que de acuerdo con
el articulo 25, inciso tercero, de la ley 19296, los dirigentes gremiales de las Asociaciones de
Funcionarios no son calificados durante su desempeño como tales, conservando su calificación
anterior para todos los efectos legales, salvo que expresamente soliciten ser evaluados (41108/94,
36095/96, 2248/98, 1773/00, 22339/01 '19941/04).
Según el artículo 25, inciso tercero, de la ley 19296, los directores de las Asociaciones de Funcionarios
de la Administración del Estado no serán objeto de calificación anual desde la fecha de su elección y
hasta seis meses después de haber cesado su mandato, salvo que hubieren solicitado ser evaluados.
Esta norma no está concebida en relación al período que es objeto de evaluación, sino que al hecho
de tenerse esa calidad durante el lapso en que se desarrolla el proceso calificatorio (61411/04).
Los informes de desempeño individual sólo proceden respecto de los directores gremiales cuando
éstos manifiesten su intención de ser calificados, lo que además debe ser comunicado en forma
expresa y oportuna, esto es, antes de la fecha cuando termina el período de desempeño que debe
comprender el primer informe y se inicia, a su vez, el cómputo del lapso que el precalificador posee
para notificarlo (31884/99).
La ubicación en el escalafón que corresponde a dirigente gremial que al ascender pasa a ocupar
el último lugar en su nuevo grado en el que ha tenido un desempeño superior a seis meses, es
aquella que proceda según la evaluación que obtenga en el respectivo proceso calificatorio si ha
solicitado que se le califique o conforme a la que ha conservado. Ello, porque el artículo 25 de la ley
19296, que exceptúa de calificación a los dirigentes gremiales, salvo que expresamente lo soliciten,
agregando que de no pedirla rige su última evaluación para todos los fines legales, es una norma
de carácter especial que prima sobre el artículo 46 (actual artículo 51), inciso tercero, de la ley
18834, que establece que quien asciende pasa a ocupar, en el nuevo grado el último lugar, hasta
que una calificación en ese nuevo grado, por un desempeño no inferior a seis meses, determine una
ubicación distinta (28062/00).
Los dirigentes gremiales que soliciten ser calificados, pueden desistirse de tal requerimiento, pero
sólo hasta antes de que le sea notificado el primer informe de desempeño (11934/00).
ARTICULO 35.- La calificación se hará por la Junta Ley 19.165, Art. 1,.
Calificadora. Ley 18.834, Art. 30.
Las Juntas Calificadoras Regionales estarán integradas por los Ley 19.882, Art vigésimo
tres funcionarios de más alto nivel jerárquico de la institución séptimo, 13, a).
en la ,respectiva región y por un representante del personal
elegido por éste, según el estamento a calificar.
Con todo, en los servicios descentralizados regionales habrá Ley 19.165, Art. 1'.
Junta Calificadora integrada en la forma que se establece en
el inciso precedente. No obstante, tratándose de los Servicios
de Salud existirá una Junta Calificadora en cada uno de los
hospitales que lo integran.
Los reglamentos especiales propios de cada institución podrán Ley 19.882, Art. vigésimo
establecer normas distintas respecto de la existencia y número séptimo, 13, b).
de juntas calificadoras, teniendo en consideración el número
de funcionarios a calificar y/o su distribución geográfica.
Estas juntas serán integradas conforme a lo que establezca el
reglamento, debiendo respetarse para estos efectos los más
altos niveles jerárquicos del universo de funcionarios a calificar.
Los integrantes de estas juntas serán calificados por la junta
calificadora central.
Interpretación:
En lo no previsto por la ley 18834, respecto del procedimiento calificatorio, rige en plenitud la
supletoriedad que caracteriza a las normas de la ley 19880, que establece Bases del Procedimiento
Administrativo, incluso produciendo la derogación de aquellos preceptos del decreto 1825, de 1998,
del Ministerio del Interior, que aprobó el reglamento de calificaciones del personal afecto al Estatuto
Administrativo, cuando sean incompatibles con las disposiciones de este cuerpo legal, en virtud
de la aplicación del principio de jerarquía normativa (42639/07. Reconsidera toda jurisprudencia
contraria).
Inciso 1•
La calificación se hace por la Junta Calificadora, la que debe integrarse por los funcionarios de más
alto nivel jerárquico de la institución, variando el número de sus miembros según se trate de Juntas
Calificadoras Regionales o de la Central. La jerarquía funcionaria está señalada de un modo genérico
en el Estatuto Administrativo, de manera que para fijar la composición de la Junta respectiva debe
considerarse únicamente el grado o nivel remuneratorio correspondiente, sin distinguir con relación a
plantas, funciones o la calidad en que se sirvan los cargos respectivos. En otras palabras, el Estatuto
Administrativo no formula exigencias para determinar la jerarquía funcionaria respecto de la calidad
en que se sirven los cargos correspondientes a esos niveles ni tampoco atiende a las funciones
especificas que ellos desarrollan (26042/92, 7136/93). De este modo, pueden integrar las Juntas
Calificadoras los empleados suplentes de planta (47111/01). Asimismo, si excepcionalmente la ley
autoriza a servidores a contrata ejercer cargos de jefatura, no existe inconveniente que también
integren las Juntas Calificadoras (21351/04). En este sentido, debe precisarse que cuando por
expresa autorización legal, se ha delegado el ejercicio de facultades directivas en un funcionario a
contrata, ello no significa que también se delegue la facultad para integrar una junta calificadora, sino
que la función directiva que.aquél se encuentra desarrollando, lo habilita para poder integrarla, pero
ello dependerá, en definitiva, del grado o nivel remuneratorio que posea el cargo desempeñado por
ese servidor. Luego, el derecho a formar parte del referido cuerpo colegiado emana, precisamente,
del desempeño de un empleo que, de acuerdo con su nivel remuneratorio, corresponde a alguno de
aq~ellos :;ue, según lo prescrito en el articulo 30 (actual articu:o 35) c!3 la ley 18834, debe integrar
dicho órgano evaluador (21351/04, 45022104).
La calificación se hará por un órgano colegiado que es la respectiva Junta Calificadora, y no por una
persona en particular, por lo que su integración por un funcionario de jerarquía inferior, circunstancia
de posible ocurrencia por el juego de disposiciones legales y reglamentarias que regulan el proceso,
no puede, de modo alguno, constituir impedimento para efectuar evaluaciones (19590/94).
Las Juntas Calificadoras de los Servicios deben funcionar con la totalidad de los miembros requeridos
por la normativa vigente sobre la materia (17351/95, 16292/05).
Según el articulo 30 del decreto 1825, de 1998, la forma de llevar a cabo las votaciones en la
Junta Calificadora es por mayoría de votos, lo que implica que, concluidas las deliberaciones, cada
miembro de la Junta debe emitir su voto por una nota y la que registre más menciones ha de ser
la nota que, en definitiva, se adjudique al funcionario en el respectivo subfactor. La aplicación de
una fórmula de votación basada en el promedio de notas, nunca daría lugar al voto dirimente del
Presidente de la Junta, pues no se producirían empates, situación que la norma ha previsto y
regulado expresamente, estableciendo, precisamente, que ellos deben ser decididos por el aludido
Presidente. Además, el indicado articulo 30, al emplear la expresión mayoría, alude, conforme al
diccionario de la Real Academia Española, al "mayor número de votos conformes", y si la intención
del legislador hubiera sido considerar un promedio de las notas asignadas por cada miembro de la
Junta, lo habría establecido así de manera explicita (23757/03).
No procede que los miembros de las Juntas Calificadoras expresen anticipadamente alguna
observación sobre las calificaciones de un funcionario, ya que tal actuación constituye un vicio de
procedimiento (7064/06).
No existe norma legal o reglamentaria que contemple causales de inhabilitación o recusación respecto
de los integrantes de las Juntas Calificadoras, pero en resguardo de la objetividad e imparcialidad
que debe imperar en el proceso calificatorio, existiendo situaciones como la relación jerárquica o
vinculo de parentesco, el miembro de ese cuerpo colegiado debe abstenerse de participar en el
acuerdo que se adopte respecto del empleado con quien lo una alguna de esas vinculaciones
(25141/93, 781/99, 12869/02, 13651/06).
La función de Secretario de la Junta Calificadora debe ejercerla un servidor distinto de los que
integran dicho cuerpo colegiado, porque las labores del Secretario, de acuerdo con el Reglamento
General de Calificaciones, son diversas. De esta manera, corresponde al Secretario asesorar
técnicamente a la Junta, llevar el libro de actas y la hoja de calificaciones de los funcionarios, anotar
los acuerdos de aquélla y sus fundamentos, levantar actas de cada sesión, notificar la evaluación
obtenida. En cambio, los miembros de la Junta Calificadora tendrán las funciones de efectuar la
calificación misma, considerando la precalificación y las anotaciones en la hoja de vida del servidor,
y participar en las deliberaciones y votaciones pertinentes (10740/98, 16292/05).
Inciso 2°
Inciso 3°
No corresponde que funcione la Junta Calificadora Central para la Región Metropolitana en el caso
del Servicio de Gobierno Interior, por cuanto a dicho cuerpo colegiado este precepto le asigna,
aparte de la calificación del personal de esa región, la evaluación de los empleados de otras regiones
en que, por tener menos de 15 funcionarios, no procede constituir Junta Calificadora Regional, y la
de los miembros de estas últimas, cuyos integrantes, por ser Intendentes y Gobernadores, no están
afectos a calificación. Además, en todas las regiones del país, el referido Servicio debe constituir
Juntas Calificadoras Regionales. De esta manera, corresponde que se forme igualmente en la
Región Metropolitana, la respectiva Junta Calificadora Regional (2579/93, 17587/99, 32718/06).
Los miembros de las Juntas Calificadoras Regionales deben participar en la elección del representante
del personal ante la Junta Calificadora Central al ser evaluados por esta última (49426/03).
Inciso 4°
Corresponde que integre la Junta Calificadora Regional, en calidad de representante del personal
de un determinado estamento, el único funcionario en la región que pertenece a aquél, ya que si
se entendiera que dicho representante no debe integrar dicha Junta, conforme a lo ordenado por el
artículo 35, inciso cuarto, de la ley 18834, traería como consecuencia la nulidad de las decisiones
adoptadas por ella. En este caso, el mencionado órgano colegiado deberá constituirse para el sólo
fin de dejar establecido que no existen servidores que tengan que ser calificados en el escalafón
pertinente (14244/05).
Inciso 5o
Las Juntas Calificadoras deben funcionar con la totalidad de sus integrantes, esto es, tratándose
de las Centrales con los cinco servidores de mayor nivel jerárquico del organismo, excepto el jefe
superior, y con un representante del personal elegido por éste según el estamento a calificar,
pudiendo intervenir, además, un delegado con derecho a voz de la asociación de funcionarios con
mayor representación (16292/05).
El elemento que determina el nivel jerárquico del servidor es el grado asignado al cargo, cualquiera
sea la planta o escalafón en que el empleo se ubique, careciendo de relevancia para este objeto, la
estructura interna de los organismos públicos, el desarrollo de determinadas funciones o el hecho
El jefe de personal cuando es uno de los cinco servidores de mayor nivel jerárquico del organismo,
excluido el jefe superior, debe integrar la junta calificadora como miembro de ésta, con preferencia
a la calidad de secretario de la misma que le corresponde de acuerdo con el articulo 46 de la ley
18834 (16292/05).
Corresponde integrar las Juntas Calificadoras Centrales a los servidores cuyo grado remuneratorio los
deja ubicados entre los cinco funcionarios de mayor jerarquía, sin desmedro de las exclusiones que
prevé la ley, debiendo presidirla aquel integrante que ostente el más alto de esos grados, elemento
básico que fija la composición y presidencia de las Juntas Calificadoras, sin necesidad de formular
distingos con relación a la planta ni vincular la calidad de miembro de ese órgano al desarrollo
de determinadas funciones. Tampoco se exige a esos servidores estar afectos a un determinado
régimen estatutario (26044/92, 27127/92, 30346/92, 47593/00).
Los cinco empleados del más alto nivel jerárquico que integran las Juntas Calificadoras Centrales
se determinan considerando únicamente el grado o nivel remuneratorio respectivo, sin distinguir la
planta, las funciones específicas de~arrolladas o la calidad en que sirven los cargos (58315/05).
La Junta Calificadora no puede estar integrada por personal a contrata, puesto que la mención a los
cinco funcionarios de más alto nivel jerárquico se refiere a aquéllos que sirven cargos de jefatura
de mayor nivel dentro del Servicio, por lo que, como los desempeños de esos empleados no se
relacionan con un grado o categoría de la planta y por su naturaleza son transitorios," no pueden
ocupar tales plazas" Sin embargo, si mediante disposiciones legales especiales se permite delegar
en contratados el ejercicio de funciones directivas, pueden, de modo excepcional, integrar tales
cuerpos colegiados, cuando las circunstancias lo hagan necesario (17770/93, 19218/93, 36295/93,
35400/00, 47593/00).
Para determinar la integración de las Juntas Calificadoras es menester tener en cuenta que la
normativa legal alude al concepto de jerarquía funcionaria de un modo genérico, por lo que únicamente
debe considerarse el grado remuneratorio asignado al cargo como el elemento que la determina,
dado que éstos se encuentran ordenados en forma piramidal, de mayor a menor, según su nivel de
rentas, sin distinguir en cuanto a la planta, ni atender a las funciones específicas que se desarrollen
o a la calidad en que se sirven los cargos correspondientes a esos niveles, debiendo agregarse que
la jerarquía de un funcionario no se ve alterada por la circunstancia de que perciba una determinada
asignación, pues aquélla dependerá del grado o nivel remuneratorio que posea el respectivo servidor
(29134/99, 26085/01' 47139/01).
Las Juntas Calificadoras deben integrarse con los servidores de mayor jerarquía de cada institución,
pero en caso de haber más de un empleado en el nivel correspondiente, debe recurrirse al orden de
antigüedad señalado en el artículo 51 de este Estatuto (9666/06).
Inciso 6°
La regla de excepción que establece la existencia de Juntas Calificadoras en cada uno de los
hospitales que integran los Servicios de Salud, determina que éstas sólo pueden evaluar al personal
que se desempeñe en dichos hospitales y no a aquél que labora en otras dependencias que no
tienen ese carácter, caso en el cual debe calificar la Junta Central (28309/93, 19309/01).
El articulo 83 de la ley 19937 ha establecido que las Juntas Calificadoras de los establecimientos
hospitalarios estarán integradas por los tres funcionarios de más alto nivel jerárquico, a excepción
del Director del Hospital, y por un representante del personal elegido por éste. Si bien este precepto
nada señala respecto a designar a un suplente, ello debe realizarse de acuerdo con el inciso noveno
del articulo 30 (actual articulo 35) de la ley 18834 (12677/05).
El precepto del inciso sexto según el cual tratándose de los Servicios de Salud existirá una Junta
Calificadora en cada uno de los hospitales que lo integran, tiene que interpretarse restrictivamente
atendido su carácter excepcional, de modo que no resulta aplicable a un centro de referencia de
salud. Los hospitales constituyen de acuerdo con los artículos 4, W 11; 20, letra a); 21A; 78 y 83 del
DL 2763, de 1979, modificado por la ley 19937 (actuales artículos 4, W 11; 23, letra a); 25; 100 y 105,
respectivamente, del DFL 1, de 2005, del Ministerio de Salud, que fijó el texto retundido, coordinado y
sistematizado del DL2763, de 1979, y de las leyes 18933, y 18469) una categoría de establecimientos
de salud que poseen una individualidad explícitamente reconocida por dicha normativa, con una
naturaleza particular que los distingue, entre otros, de ese tipo de centros (54290/05).
Inciso 7°
No existe impedimento para que los organismos reduzcan el número de Juntas Calificadoras
Regionales actualmente existentes, introduciendo las modificaciones pertinentes a sus reglamentos
calificatorios especiales, ordenamientos estos últimos que pueden fijar reglas relativas a esos cuerpos
colegiados diversas a las del Estatuto Administrativo (21582/04).
Inciso 8°
Las Juntas Regionales de calificación de los funcionarios del Servicio de Gobierno Interior que deben
constituirse en todas las regiones del país por existir en cada una de éstas más de 15 empleados,
han de estar integradas por el Intendente y dos Gobernadores de la respectiva región a quienes
corresponda conforme al orden de antigüedad de la ley 18834, artículo 46 (actual artículo 51),
aplicable cuando existe más de un empleado en el nivel respectivo y, además, por el representante
del personal (2579/93).
Cuando existen dos funcionarios que ocupan cargos de igual nivel desde una misma fecha siendo,
por ende, su antigüedad en ambos casos idéntica, para determinar a aquél que integrará la Junta
Calificadora, será necesario recurrir a los demás elementos que para dirimir esa igualdad prevé
el artículo 46 (actual artículo 51) de la ley 18834, esto es, la antigüedad en la institución, en la
Administración y, finalmente, en el caso de mantenerse la concordancia, decidirá el Jefe Superior de
la institución (32167/93, 13671/94).
Existiendo igualdad de grado remuneratorio entre dos o más funcionarios, se preferirá, para integrar
la Junta Calificadora, a quien ocupe un cargo en la planta directiva, porque el artículo 5 de la ley
18834, en armonía con los artículos 7 y 14 (actual artículo 17) de la ley 18575, establece un orden
jerárquico al señalar las plantas de cada institución, esto es, directivos, profesionales, técnicos,
administrativos y auxiliares (29803/01).
Inciso 9°
El procedimiento para elegir al representante del personal que integra la Junta Calificadora, tanto
titular como suplente, está reglado en el decreto 1229, de 1992, del Ministerio del Interior, artículo
22 (actual articulo 23 del decreto 1825, de 1998, de esa Secretaría de Estado), norma de derecho
público que debe ejecutarse conforme a la ley, sin alterar su contenido. Ese artículo 22 no contempla
la posibilidad de incluir candidatos una vez vencido el término legal previsto para la inscripción
correspondiente, sin que pueda entenderse que autorizaría hacerlo la circunstancia de contarse con
la anuencia de los demás funcionarios (34439/93).
Procede elegir representante del personal ante la Junta Calificadora, aún en el caso de haberse
cometido un error al extender el plazo para inscribir a los funcionarios propuestos para ese cargo,
porque el término de 1O días fijado por el artículo 22 del decreto 1229, de 1992, del Ministerio del
Interior (actual articulo 23 del decreto 1825, de 1998, de esa Secretaría de Estado), es de días
hábiles y no corridos, circunstancia que no vicia la elección por haber tenido un efecto extensivo a la
generalidad del personal, de modo que no se afectaron los derechos de los funcionarios en relación
con el proceso de presentación y designación de postulantes al aludido acto eleccionario, el cual,
además, tuvo la debida publicidad (5617/96).
Los representantes del personal han de formar parte del estamento al cual pertenecen los servidores
que se van a calificar. Tal obligación tiene por objeto asegurar que los derechos de los funcionarios
sean representados por quienes mejor conocen las exigencias y circunstancias que conlleva ejercer
alguno de los empleos del respectivo escalafón, permitiéndoles decidir con fundado conocimiento
sobre su desempeño laboral (2672/06).
Aunque exista sólo un candidato que postule a desempeñarse como representante del personal
ante la Junta Calificadora, la autoridad carece de facultades para suspender la elección de estos
servidores designando al funcionario más antiguo de la repartición en tal calidad, porque este artículo
30 (actual artículo 35) y el artículo 22 del decreto 1229, de 1992, del Ministerio del Interior (actual
artículo 23 del decreto 1825, "de 1998, de esa Secretaría de Estado), no establecen exigencia alguna
en cuanto al número de candidatos requeridos para que pueda realizarse la elección respectiva,
procediendo que ésta se lleve a cabo con ese candidato (34010/96, 33915/97, 3765/03).
Los dirigentes de las Asociaciones de Funcionarios de la Administración del Estado tienen derecho
a participar en la elección del representante del personal ante la respectiva Junta de Calificaciones,
porque de la interpretación armónica y sistemática de este artículo 30 (actual artículo 35) y del
artículo 22, inciso tercero, del decreto 1229, de 1992, del Ministerio del Interior (actual artículo 23
del decreto 1825, de 1998, de la misma Secretaría de Estado), aparece que para participar en esa
elección sólo se requiere ser funcionario. Además, el inciso tercero del artículo 25 de la ley 19296,
exime a los dirigentes de la calificación anual, salvo que expresamente soliciten ser evaluados, pero
si ello no ocurre, regirá su última calificación para todos los fines legales, entre ellos, participar en la
elección indicada (29025/97).
No corresponde que un funcionario regido por la ley 15076 forme parte, como representante del
personal, de alguna de las Juntas Calificadoras del artículo 30 (actual artículo 35) del Estatuto
Administrativo, porque aquella ley contempla en su Título IV, el sistema de calificaciones propio de
los profesionales funcionarios, motivo por el cual en esta materia no les son aplicables las normas de
la ley 18834, uno de cuyos preceptos otorga el derecho al representante aludido a no ser calificado,
lo que no está permitido en la referida ley 15076 (30527/97).
No existe inconveniente para que asuma como representante del personal, el funcionario que
en la respectiva elección obtuvo la segunda mayoría, si quien obtuvo la primera no se encuentra
posibilitado para ser electo (30527/97).
Es improcedente elección de representante del personal ante la Junta Calificadora en la que votaron
servidores no afectos a calificación, por contar con menos de seis meses de desempeño, dado
su rec1ente ingreso a la repartición. Ello, porque según el artículo 35 (actual artículo 40) de la ley
18834, los empleados que no han ejercido sus labores durante a lo menos un período superior a
seis meses, cualquiera sea la fecha de su ingreso, no poseen las condiciones que permiten ser
evaluados y, además, el artículo 23 del decreto 1825, de 1998, del Ministerio del Interior, en armonía
con el artículo 5 del mismo texto, establece que el representante aludido será elegido por todos los
funcionarios sujetos a calificación (39135/00).
Los establecimientos hospitalarios deben, tratándose del representante del personal que integra
las Juntas Calificadoras, elegir a un suplente ante la respectiva Junta para que aquél integre dicho
órgano en el evento que el titular se encuentre impedido de ejercer sus funciones. Ello, por cuanto, si
bien la ley 19937, artículo 83, no hizo referencia al representante que tendrá el carácter de suplente,
corresponde aplicar lo prescrito en el inciso noveno del artículo 35 de la ley 18834 (12677/05).
Inciso 10
Si en la Junta Calificadora falta el representante del personal, debe actuar como tal el funcionario
más antiguo de la repartición, mientras no se proceda a la elección de uno nuevo. Lo anterior,
considerando el principio de continuidad del servicio público y el hecho que la función no puede
interrumpirse por falta de una persona (27176/98).
Constituye una obligación para el servidor más antiguo desempeñarse como representante del
personal, salvo que se encuentre impedido por una causa legal, porque esta norma está redactada
en términos imperativos (49237/99).
Inciso 11
Corresponde designar delegado a la Asociación de Funcionarios que cuente con el mayor número de
afiliados regidos por la ley 18834 y, por ende, sujetos a calificación, si en el respectivo Servicio existen
varias organizaciones de esa naturaleza. El'~. porf!'Je este inciso no se refiere a la agrupación
que posea una mayor cantidad de afiliados, sino a aquella que sea la más representativa de los
funcionarios sometidos al régimen de calificaciones previsto en el Estatuto Administrativo (34408/97
-complementado por el48303/01-, 38387/97, 3881/01).
En ausencia de una norma legal o reglamentaria que señale una fecha determinada para requerir a
la pertinente Asociación de Funcionarios que designe al delegado ante la Junta Calificadora, procede
hacerlo durante cualquiera de los primeros 10 días del mes de agosto de cada año, que según el
inciso tercero del artículo 22 del decreto 1229, de 1992, del Ministerio del Interior (actual artículo
23 del decreto 1825, de 1998, de la misma Secretaría de Estado), es el lapso dentro del cual el
Jefe Superior del nivel nacional o regional, según corresponda, debe convocar para la elección del
representante del personal, pues ello permite que la Asociación cuente con tiempo para resolver sobre
el particular y comunique oportunamente su determinación a la autoridad, esto es, antes del primero
de septiembre de cada año, que es la fecha de inicio del proceso de calificaciones (38387/97).
El delegado de una Asociación de Funcionarios ante la Junta Calificadora sólo tiene derecho a voz
(8032/99, 41744/01).
No procede designar suplente del delegado de la asociación de funcionarios ante la Junta Calificadora,
porque la normativa legal y reglamentaria no contempla la posibilidad de nominar un suplente, como
si lo hace tratándose de los representantes del personal, donde permite la elección de un suplente
cuando el titular este impedido de ejercer sus funciones (41744/01).
Concordancias: Arts. 32 al 52 del EA; 25 de la ley 19296; 22, 23, 26 y 28 del decreto 1825, de
1998, del Ministerio del Interior; 32 del EAM; ley 19880, que establece Bases de los Procedimientos
Administrativos que rigen los actos de los Órganos de la Administración del Estado.
Comentarios:
El articulo 35 establece que la calificación se hará por la Junta Calificadora, señala sus diversos
tipos y quienes las integran. El articulo 28 del Reglamento regula la oportunidad en que deberán
constituirse dichas Juntas Calificadoras.
Interpretación:
Inciso 1"
La Presidencia de la Junta Calificadora corresponde al integrante que ostente el más alto grado
remuneratorio que es el que determina la jerarquía, sin que deban formularse otros distingos
(26042192, 27127192, 30346192, 36404100).
En caso de empate en las deliberaciones que adopte la Junta Calificadora, decidirá el voto del
Presidente de la misma (23757103, 21214105).
Inciso 2"
La Junta Calificadora debe integrarse necesariamente con todos Jos miembros que le ha fijado la
ley, y si alguno de ellos está impedido de conformarla, ese titular debe ser reemplazado por el
funcionario que siga en el respectivo orden jerárquico, puesto que Jo contrario llevaria al absurdo que
frente al aludido impedimento, la Junta tendría que desempeñar sus tareas sólo con Jos integrantes
posibilitados para hacerlo, o no funcionar, Jo que se aparta de toda lógica jurídica como también de
Concordancias: Arts. 32 al 52 del EA; 26 del decreto 1825, de 1998, del Ministerio del Interior; 33
del EAM.
Comentarios:
El artículo 36 expresa que la Junta Calificadora deberá ser presidida por el funcionario de más alto
nivel jerárquico que la integre. Este se determina por el grado o nivel remuneratorio o por el orden
de antigüedad, en su caso.
Su inciso segundo establece el procedimiento que debe aplicarse en caso de impedimento transitorio
de algún miembro de la Junta para el desarrollo de sus funciones, en cuyo caso se seguirá el orden
previsto en el artículo 35.
ARTICULO 37.- Las normas de este párrafo servirán de base para la Ley 19.165, Art. r.
dictación del o de los reglamentos de calificaciones a que se refiere Ley 18.834, Art. 32.
el inciso primero del articulo 47 de la ley N" 18.575.
Interpretación:
Conforme al artículo 49 (actual artículo 47) de la ley 18575, los servicios públicos pueden contar con
un reglamento de calificaciones propio, ordenamiento que, en todo caso, debe ceñirse a las normas
de la ley 18834, contenidas en el Título 11, Párrafo 3 (actual Párrafo 4) (25141193).
Concordancias: Arts. 47 de la LOCBGAE; 32 al 52 del EA; decreto 1825, de 1998, del Ministerio del
Interior, que aprobó el Reglamento de Calificaciones del Personal afecto al Estatuto Administrativo.
Comentarios:
El inciso primero del artículo 47 de la ley 18575, expresa que para los efectos de la calificación del
desempeño de los funcionarios públicos, un reglamento establecerá un procedimiento de carácter
general, que asegure su objetividad e imparcialidad, sin perjuicio de las reglamentaciones especiales
que pudieran dictarse de acuerdo con las características de determinados organismos o servicios
públicos.
Por su parte, el artículo 6 del decreto 1825, de 1998, del Ministerio del interior, señala que "se entenderá
para todos los efectos que las normas relacionadas con la calificación que estén establecidas en el
respectivo reglamento especial, primarán sobre las del Reglamento General, el que tendrá la calidad
de supletorio respecto a aquellas instituciones que cuenten con reglamento especial y sólo respecto
de las materias no tratadas por éste".
ARTICULO 38.- La calificación evaluará los doce meses de dese m- Ley 19.165, Art. 1'".
peño funcionario comprendidos entre el1" de septiembre de un año Ley 18.834, Art. 33.
y el 31 de agosto del año siguiente.
Con todo, los reglamentos especiales propios de cada institución Ley 19.882, Art.
podrán establecer otras fechas de inicio y término del periodo anual vigésimo séptimo, 14.
de desempeño a calificar.
Interpretación:
Inciso 1•
Es improcedente considerar en un periodo calificatorio los hechos acaecidos antes o después de ese
lapso (42913198, 7554101).
No existe impedimento legal para calificar el desempeño de un funcionario, cuyo proceso evaluatorio
anterior se encuentra pendiente al haber acogido la Contraloria General un recurso que éste dedujo
en su oportunidad. Ello, porque el sistema de calificaciones tiene por objeto evaluar las actividades
desarrolladas por un empleado durante un lapso determinado, por lo que las calificaciones de los
diversos períodos son independientes entre sí y no obligan a la autoridad competente a asignar
al servidor un cierto puntaje y una Lista en relación con los resultados obtenidos en calificaciones
precedentes (14129199, 45121106). En otras palabras, el hecho de que un funcionario haya sido
calificado anteriormente en Lista 1, de Distinción, no es óbice para que posteriormente lo sea en
otra lista, toda vez que se trata de otro período evaluatorio, no obstante lo cual debe existir cierta
racionalidad y proporcionalidad entre las calificaciones (42484198, 42235100, 12141104, 26973106,
41640107).
Inciso 2•
Los reglamentos especiales propios de cada institución deben garantizar los principios de
imparcialidad y objetividad destacados en los artículos 45, indso segundo, y 47 de la ley 18575
(31601106).
Conforme el articulo 38, inciso segundo, y articulo 39 de la ley 18834, se podrán dictar por los
servicios reglamentos calificatorios especiales que contemplen fechas distintas a las que fija dicha
ley para el periodo evaluatorio previsto en el inciso primero del articulo 38 predtado, en lo que
dice relación con el inicio y término de los procesos de calificación, siempre que esas resoluciones
señalen disposiciones transitorias que regularicen la falta de adecuación temporal entre el nuevo y
el antiguo sistema de evaluación, así como los otros elementos que constituyen su complemento
necesario, como los informes de desempeño, constitución de las juntas calificadoras e inscripción
de los representantes del personal ante los órganos colegiados. Así, no hay inconveniente en que
tal modificación establezca transitoriamente dos periodos calificatorios de nueve meses cada uno.
Podrá incorporarse en el reglamento, por ejemplo, una norma transitoria que precise que el escalafón
de mérito de un determinado año se confeccionará con los resultados del primer período calíficatorio
transitorio de los meses de junio a febrero del año siguiente, siempre que no se altere la fecha de
inicio y término que fija el a_rtículo 52 de la ley 18834 (14806/04, 25114/05).
Concordancias: Arts. 45, inciso segundo, y 47 de la LOCBGAE; 32 al 52 del EA; 3 y 1 transitorio del
decreto 1825, de 1998, del Ministerio del Interior; 34 del EAM.
Comentarios:
Esta disposición establece en su inciso primero, como principio general, que el proceso calificatorio
tiene por objeto valorar el desempeño laboral de un empleado por un tiempo determinado. Como
corolario, no resulta posible evaluar hechos acaecidos fuera de ese lapso. Las calificaciones
correspondientes a períodos diversos son independientes entre sí y no obligan a la autoridad
competente a asignarle al funcionario un puntaje y ubicación en una determinada lista, en función de
los resultados obtenidos en evaluaciones anteriores.
Por su parte, el inciso segundo, agregado por el W 14 del artículo vigésimo séptimo de la ley 19882,
autorizó la posibilidad de consultar en los reglamentos especiales propios de cada institución otras
fechas de inicio y término del período anual de calificaciones, según la carga de trabajo de cada
servicio y su estacionalidad, como se señaló en la historia fidedigna de su establecimiento.
Con todo, los reglamentos especiales propios de cada Ley 19.882, Art.
institución podrán establecer otras fechas de inicio y vigésimo séptimo, 15.
término del proceso de calificación.
Interpretación:
Inciso 1°
Las actuaciones de la Junta Calificadora realizadas con posterioridad al vencimiento del plazo
establecido en esta norma, son válidas y eficaces, porque los plazos que fijan las leyes a la
Administración no son fatales, sin desmedro de la responsabilidad disciplinaria que pudiere afectar a
los agentes públicos por su incumplimiento (11 016101, 53493105).
El proceso calificatorio debe estar afinado dentro del lapso comprendido entre el 1 de septiembre
y el 30 de noviembre, pese a que los plazos no son fatales para la Administración al tratarse de un
procedimiento reglado que comprende diversas etapas: precalificación, calificación y, eventualmente,
apelación y reclamo ante la Contraloria General, del cual se derivan consecuencias directas para la
carrera funcionaria. Con el resultado de las calificaciones ejecutoriadas se confecciona el escalafón
que rige desde el 1 de enero de cada año, cuya vigencia es de doce meses, lapso en que se
efectúan las promociones y eliminaciones que correspondan (47271103).
Un funcionario que fuera electo Director de su asociación gremial en septiembre de 1997, quedó
eximido de ser calificado por el periodo 1996- 1997, a menos que lo hubiere solicitado, porque según
el articulo 20 de la ley 19296, los funcionarios candidatos al directorio que reúnan los requisitos para
ser electos, gozan del fuero del articulo 25 de esa misma ley desde que se comunique por escrito a la
Jefatura Superior de la repartición la fecha de la elección y hasta esta última o desde la presentación
de la candidatura (11951198).
Inciso 2°
Los reglamentos calificatorios especiales pueden contemplar fechas distintas a las que fija la ley,
en cuanto al inicio y término de los procesos de evaluación, siempre que señalen disposiciones
transitorias que regularicen la inadecuación temporal entre las nuevas datas y las primitivas, como
asimismo los otros elementos que constituyen su complemento necesario: informes de desempeño,
constitución de las juntas e inscripción de los representantes del personal ante los órganos colegiados
(25114105).
Concordancias: Arts. 32 al 52 del EA; 3 del decreto 1825, de 1998, del Ministerio del Interior; 35
del EAM.
Comentarios:
El W 15 del articulo vigésimo séptimo de la ley 19882 agregó un inciso segundo al artículo 39, que
permite establecer en los reglamentos propios de cada institución otras fechas de inicio y término
del proceso de calificación, según la carga de trabajo de cada servicio y su estacionalidad, como se
señaló en la historia fidedigna de su establecimiento.
ARTICULO 40.- No serán calificados los funcionarios que Ley 19.165, Art. 1".
por cualquier motivo hubieren desempeñado efectivamente Ley 18.834, Art. 35.
sus funciones por un lapso inferior a seis meses, ya sea en
forma continua o discontinua dentro del respectivo periodo de
calificaciones, caso en el cual conservarán la calificación del
año anterior.
Interpretación:
Un profesional que durante los primeros ocho meses del periodo calificatorio subrogó al Jefe Superior
del Servicio, no puede ser evaluado por su desempeño como profesional por los cuatro meses
restantes, toda vez que lo impide el articulo 35 (actual articulo 40) del Estatuto Administrativo, motivo
por el cual, si corresponde, conservará la calificación del año anterior (19686195).
Los funcionarios ascendidos deben ser objeto de calificación, aunque en el nuevo grado no cuenten
con un desempeño igual o superior a seis meses, considerando que el articulo 46 (actual articulo 51)
de la ley 18834 no establece expresamente lo contrario como lo hacía el artículo 50 del DFL 338, de
1960. Ello, entre otras razones, porque la calificación de que sean objeto los servidores ascendidos,
no tiene la virtud de alterar su ubicación en el respectivo escalafón, ya que para ello es necesario
que ésta obedezca a un desempeño, en el nuevo grado, no inferior a seis meses (37154195, 5511198,
33395199, 1773100).
Los beneficios contemplados en los artículos 29 y 35 (actuales artículos 34 y 40) del Estatuto
Administrativo, que permiten mantener la calificación anterior en las situaciones que indican, en
modo alguno admiten su aplicación por analogía a otros casos que no son los regulados por esos
preceptos (33022196, 4994102).
Los funcionarios de planta que han sido designados para servir en forma paralela otra plaza en
calidad de exclusiva confianza o bien a contrata o como suplentes, de acuerdo con los artículos 81
(actual artículo 87), letras d) y e), y 82 (actual artículo 88) de la ley 18834, conservan su empleo
titular. Si los referidos servidores han quedado sin calificación en el cargo que mantienen, ello se
ha debido a que dicho empleo lo han desempeñado por un lapso inferior a seis meses dentro del
respectivo período de calificaciones. En estos casos, conforme al artículo 35 (actual artículo 40)
del Estatuto Administrativo, al empleado le corresponderá la calificación del año anterior, siendo
dable agregar que como conserva la propiedad del cargo, el lapso durante el cual aquéllo suceda,
debe ser tenido en cuenta para determinar su antigüedad en el mismo (8289193 -reconsiderado
parcialmente por el 44543199-).
Para el cómputo del plazo de desempeño efectivo contemplado en el artículo 35 (actual artículo
40) del Estatuto Administrativo, resulta irrelevante que las respectivas licencias médicas se hayan
otorgado fraccionadas en medios días o no, debiendo ellas considerarse, para estos fines, como
de días completos, por cuanto no existe norma alguna que permita distinguir en esta materia
(1803197).
La condición de dirigente gremial no los exime del cumplimiento de sus deberes funcionarios, sino
que solamente les otorga, de acuerdo con el articulo 31 de la ley 19296, el derecho a los permisos
necesarios para ausentarse de sus labores con el objeto de cumplir sus funciones por los lapsos
que la misma disposición señala. Este derecho no se extiende al periodo de prolongación del fuero
luego de haber cesado en la calidad de dirigente, durante el cual se encuentra cabalmente afecto
al cumplimiento de la obligación estatutaria de desempeño de su cargo. Por tal motivo, conforme
al inciso tercero del articulo 25 de la citada ley 19296, un ex dirigente gremial, cuyo fuero, luego del
término de su periodo de desempeño como tal, abarca más de seis meses del proceso calificatorio,
debe ser calificado al tenor de las reglas generales, por lo que no le es aplicable el articulo 35 (actual
articulo 40) de la ley 18834 (28159/98, 26946/99).
Concordancias: Arts. 32 al 52 del EA; decreto 1825, de 1998, del Ministerio del Interior; Art. 36 del
EAM.
Comentarios:
El articulo 33 del Estatuto Administrativo consulta la regla general relativa a que todos los funcionarios
deben ser anualmente calificados. La excepción se encuentra regulada en los artículos 34 y 40 del
referido ordenamiento, que impiden que determinados empleados sean calificados. Por lo tanto, de
acuerdo con este último precepto, quienes han desempeñado efectivamente sus funciones durante
seis meses o más deben ser calificados; en cambio, aquéllos que por cualquier motivo se ausenten
en el ejercicio de su cargo por más de seis meses, durante el periodo calificatorio, no deberán ser
evaluados.
ARTICULO 41.- La Junta Calificadora adoptará sus resoluciones Ley 19.165, Art. r.
teniendo en consideración, necesariamente, la precalificación del Ley 18.834, Art. 36.
funcionario hecha por su Jefe Directo, la que estará constituida por
los conceptos, notas y antecedentes que éste deberá proporcionar por
escrito. Entre los antecedentes, se considerarán las anotaciones de
mérito o de demérito que se hayan efectuado dentro del período anual
de calificaciones, en la hoja de vida que llevará la oficina encargada del
personal para cada funcionario.
Interpretación:
Inciso 1°
Conforme al artículo 41 del Estatuto Administrativo, la Junta Calificadora, para adoptar sus
resoluciones, debe considerar la precalificación del funcionario emanada del Jefe Directo. Por su
parte, el artículo 19 del Reglamento de Calificaciones, establece ciertas normas a las que debe
ajustarse el actuar de los precalificadores en el cumplimiento de su cometido, entre otras, los
períodos que comprenden los informes de desempeño y el plazo para ponerlos en conocimiento del
funcionario interesado. Este plazo es de diez días hábiles, por consiguiente, no deben considerarse
para su cómputo los días sábado, domingo y festivos. Ello, porque en lo no previsto por la ley 18834,
en lo que se refiere al procedimiento calificatorio, rigen las normas de la ley 19880, cuyo artículo
25 señala que los plazos de días establecidos en esta ley son de días hábiles. Así, tratándose de
procedimientos contemplados en disposiciones reglamentarias, como es el caso del decreto 1825,
de 1998, del Ministerio del Interior, que aprueba dicho Reglamento, la ley 19880 rige en plenitud,
incluso produciendo la derogación de aquellos preceptos del referido texto reglamentario que sean
incompatibles con las disposiciones de este cuerpo legal, en virtud de la aplicación del principio de
jerarquía normativa. Reconsidera toda jurisprudencia contraria (42639107).
La Junta Calificadora puede recabar los antecedentes y ordenar las diligencias que estime necesarias
para resolver sobre el rendimiento y condiciones personales de los empleados a evaluar, de manera
que bien puede citar, con ese objeto, al o a los jefes directos de éstos (5202/98). Sin embargo, no
procede que aquélla, al evaluar a un funcionario efectúe un interrogatorio a éstos, para desvirtuar o
cuestionar los informes de desempeño que se han emitido (37568/01 ).
No procede que la Junta Calificadora considere la existencia de notas de mérito como uno de los
elementos necesarios e indispensables para aplicar el máximo de puntaje de calificación, puesto que
si se entendiera que una anotación de mérito o de demérito obliga a calificar al funcionario en una
determinada lista o asignarle cierto puntaje, o impide que un servidor sea calificado en cierta lista,
se llegaría al absurdo que tanto el precalificador como la Junta Calificadora verían coartadas sus
potestades, ya que bastaría con verificar que respecto de un funcionario existe alguna de aquellas
anotaciones para que automáticamente deba ser calificado o excluido de una lista, lo cual impediría
evaluar con el máximo de puntaje a quien no registre una nota de mérito, no obstante tratarse de un
excelente funcionario (22049/05).
El acuerdo de la Junta Calificadora debe ser siempre fundado, entendiéndose que lo es, cuando
se refiere, circunstanciadamente, por ejemplo, a las causas de una rebaja sobre el máximo de
calificación, no siendo suficiente una apreciación de índole general. La exigencia de fundamento
referida tiene por finalidad que el interesado pueda basar una reclamación, pero también que sea
posible inferir cuáles han sido los rubros o elementos afectados con la calificación, lo que será de
gran utilidad para que pueda enmendarse la conducta funcionaria (11471/93, 23946/96, 550/00,
12587/07, 40675/07).
La precalificación del personal debe ser realizada por los Jefes Directos, debiendo considerarse
como tales a los funcionarios de planta con mayor jerarquía y potestad de mando que tienen a su
cargo la tuición inmediata del calificado (32155/93, 19605/96, 34663/04).
Los funcionarios a contrata no pueden efectuar precalificación, pues en esta materia sólo tienen
competencia aquellos servidores de planta que se encuentran, respecto de los calificados, en una
relación jerárquica inmediata o directa de superior a inferior (19218/93, 34663/04, 44143/04).
Los funcionarios del Ministerio de Educación que se desempeñan en las Bases Antárticas e Isla
de Pascua, deben ser precalificados por los Secretarios Regionales Ministeriales de Educación
respectivos, por cuanto, para los fines del proceso calificatorio, el Jefe Directo es aquel funcionario
de mayor jerarquía y con potestad de mando que tiene la tuición inmediata sobre los calificados, aun
cuando ésta no se ejerza permanentemente de modo inmediato y directo (32155/93).
Los funcionarios que prestan servicios por encomendación de funciones y que tienen la calidad
de Jefes Directos, pueden efectuar la precalificación de sus subalternos, porque están en mejores
condiciones de conocer el desempeño de éstos (19605/96).
No procede que un hecho negativo efectuado por un funcionario durante el período a calificar,
aparezca señalado en los dos informes cuatrimestrales de desempeño, porque el mismo debe
constar sólo en el informe correspondiente a la época en que ocurrió (22403/99).
Inciso 2'
No constituye vicio del proceso calificatorio, el que el funcionario no haya sido notificado personalmente
por su Jefe Directo de la precalificación, sino por otro funcionario, puesto que al usar la expresión
"personalmente" el inciso tercero del artículo 19 del decreto 1825, de 1998, del Ministerio del Interior,
que aprobó el Reglamento de Calificaciones del personal afecto al Estatuto Administrativo, sólo
puede referirse al notificado y no a la exigencia de que sea el Jefe Directo quien realice la diligencia.
De esta manera, el propósito de la notificación se cumple plenamente si permite el conocimiento del
afectado de aquello que se le comunica, no importando quien la efectúe (8561/00, 10924/07).
Los jefes precalificadores no pueden delegar esa función puesto que son, por expreso mandato de
esta norma, responsables de las calificaciones que efectúen respecto de sus subalternos (19605/96,
23946/96).
La Junta Calificadora no puede cuestionar la precalificación de los jefes directos ni pretender que
dejen sin efecto sus dichos, sin desmedro que si se estima que éstos no han realizado adecuadamente
su función, pueda considerarse en su propia calificación y en la responsabilidad que eventualmente
a su respecto se hiciere efectiva (37568/01 ).
No se ajusta a derecho que la calificación de un funcionario se realice sin que el precalificador que
lo ha evaluado haya requerido el informe del anterior Jefe Directo que le correspondiera durante el
período calificatorio, pues ello vulnera el artículo 21, inciso segundo, del decreto 1825, de 1998, del
Ministerio del Interior, que expresamente así lo determina (13866/04).
Aunque la precalificación del personal deben efectuarla los jefes directos, por ser éstos los que
están en mejores condiciones para conocer su desempeño, no existiendo norma que contemple
causales de inhabilidad o de recusación al respecto, ante las discrepancias y desencuentros de
público conocimiento entre el Jefe Directo y el funcionario calificado, corresponde que esa jefatura
se abstenga de seguir evaluando a su subordinado, en resguardo de la necesaria objetividad e
imparcialidad que debe imperar en los procesos calificatorios, debiendo considerarse, asimismo, que
el inciso segundo del N' 6 del artículo 62 de la ley 18575, los obliga a inhibirse de actuar cuando se
configuran situaciones que les reste imparcialidad (13651/06).
Inciso 3'
Constituye vicio del procedimiento calificatorio el que a una funcionaria no se le haya confeccionado
una hoja de vida (11545/96).
Los informes cuatrimestrales son parte integrante de la hoja de vida, por lo que la falta de uno de
ellos o de ambos afecta la validez del procedimiento calificatorio (21413/99, 11016/01, 28574/05).
Inciso 4°
Concordancias: Arts. 47 de la LOCBGAE; 32 al 52, 122 y 123 del EA; 3, 4, 7 a 13, 14, 19, 20, 21,
22, 27, 29, 31, 32 y 33 del decreto 1825, de 1998, del Ministerio del Interior, Reglamento General de
Calificaciones; 37 del EAM.
Comentarios:
El artículo 41 del Estatuto Administrativo regula la manera en que la Junta Calificadora adoptará
sus resoluciones, señalando que siempre deberá considerar la precalificación del funcionario que
efectúe su Jefe Directo.
Se entenderá por Jefe Directo el funcionario de quien depende en forma inmediata la persona a
calificar, de acuerdo con el artículo 21, inciso primero, del decreto 1825, de 1998, del Ministerio del
Interior, Reglamento General de Calificaciones.
La precalificación está constituida por los conceptos y notas, debidamente fundados, y antecedentes
que el Jefe Directo proporcionará por escrito a la Junta Calificadora, considerando las anotaciones
consignadas en la hoja de vida del funcionario durante el respectivo período.
De acuerdo con los artículos 8, 1O y 11 del Reglamento General de Calificaciones, la hoja de vida es
el documento en que se anotarán todas las actuaciones del empleado que impliquen una conducta
o desempeño destacado o reprochable, esto es, las anotaciones de mérito o de demérito, que se
hayan efectuado dentro del período anual de calificaciones.
Por su parte, el articulo 12 del aludido Reglamento, previene que la hoja de calificaciones es el
documento en el cual la Junta Calificadora, o el Jefe Directo en la situación prevista en el inciso
segundo del articulo 29 (actual articulo 34) del Estatuto Administrativo, resume y valora anualmente
el desempeño de cada funcionario en relación con los factores de calificación que establece el
Reglamento y deja constancia de la lista en que quedó calificado.
La hoja de vida y la hoja de calificación son elementos básicos del sistema de calificaciones.
Los precalificadores deberán emitir dos informes de desempeño del personal de su dependencia en
el respectivo periodo de calificaciones que indica el articulo 19 del Reglamento. El objeto de ellos es
agregar información complementaria respecto del desempeño del funcionario, los cuales tendrán el
carácter de meras recomendaciones para la Junta Calificadora, que es el organismo encargado de
evaluar a los empleados públicos.
Los mencionados informes es uno de los elementos que debe tener en consideración la Junta
Calificadora para proceder a la evaluación del personal, por lo que la falta de uno de ellos, implica la
existencia de un vicio en la calificación de que se trate. Al respecto, la jurisprudencia administrativa
-dictámenes 21413/99, 11016/01 y 28574/05, entre otros- ha señalado que la falta de un informe de
desempeño, afecta la validez del procedimiento, toda vez que si la Junta Calificadora no cuenta con
esos antecedentes, se verá imposibilitada de cumplir cabalmente con su función evaluadora. En
este caso, el proceso evaluatorio deberá retrotraerse al estado de emitirse ese informe.
En el evento que no pueda volverse a ese estado, ya sea porque la persona que ocupaba la jefatura
a esa época no pertenezca a la Administración Pública, o por cualquier otra causa que lo haga
imposible, se deberá asignar en reemplazo del informe de desempeño faltante, el puntaje y las
observaciones obtenidas en aquél que se emitió (13796/94 y 34152/99).
ARTICULO 42.- Son anotaciones de mérito aquéllas destinadas a Ley 19.165, Art. 1°,
dejar constancia de cualquier acción del empleado que implique una Ley 18.834, Art. 37.
conducta o desempeño funcionario destacado.
Interpretación:
Inciso 1°
El Jefe Directo posee las facultades para disponer por escrito las anotaciones de mérito y de demérito
que considere pertinentes, lo cual debe efectuarse de acuerdo con el procedimiento previsto en
el Reglamento General de Calificaciones. Aunque no invalida la anotación el incumplimiento del
plazo de notificación al empleado, para que una anotación de demérito pueda ser considerada
posteriormente dentro de un proceso calificatorio, es indispensable que se cumplan las formalidades
previstas en dicho procedimiento, de tal modo que además de poner en conocimiento la anotación
correspondiente dentro del periodo calificatorio, el funcionario debe poder ejercer los recursos que le
confiere dicho Reglamento para defenderse (20501195, 26389101, 51167104).
Conforme al articulo 8 inciso final del decreto 1229, de 1992, del Ministerio del interior, reemplazado
por el decreto 1281, de 1993, de esa Secretaria de Estado -norma que actualmente corresponde a los
incisos cuarto y quinto del articulo 9 del decreto 1825, de 1998, de ese mismo origen- si un funcionario
solicita que se efectúen anotaciones de mérito, el Jefe Directo puede rechazarlo comunicándolo por
escrito dentro del plazo de 5 dias a la unidad de personal, con los fundamentos de su rechazo, y si
no se produjere tal comunicación, se entenderá aceptada la solicitud del interesado (29632194).
Resulta procedente que el Jefe Directo de un empleado estime que las labores invocadas para
la obtención de una anotación de mérito no constituyen antecedente suficiente para ese fin, en
atención a que tales acciones condicen con lo que cualquier funcionario público debe realizar en el
cumplimiento de sus funciones (43027198, 44239100).
Corresponde exclusivamente al Jefe Directo la facultad de solicitar por escrito a la unidad de personal
las anotaciones de mérito que estime pertinentes, sea por conocimiento directo de los hechos o a
petición del funcionario de su dependencia, sin perjuicio que otra autoridad proporcione antecedentes
que hagan procedente tales anotaciones (43027198, 26389101 ).
Inciso 2°
Procede que a un funcionario de la Dirección General de Aguas se le registren en su hoja de vida dos
anotaciones de mérito, una, por haber aprobado el curso de capacitación denominado "Curso de
Hidrología de Crecidas", y otra, por haber efectuado tareas propias de otros servidores cuando ello
fue indispensable, excediendo su labor habitual, habiéndose acogido la solicitud formulada respecto
de la primera de ellas sin que existiera un pronunciamiento de su jefatura en torno a la segunda como
lo establece el reglamento (29632194).
Comentarios:
La norma del articulo 42 define lo que se entiende por anotaciones de mérito, enuncia, por vía
ejemplar, algunas situaciones que pueden llegar a configurarla y determina los efectos que producen.
Entre estos últimos, la mencionada disposición legal precisa que tales anotaciones constituirán un
antecedente favorable para la selección a cursos de capacitación.
ARTICULO 43.- Son anotaciones de demérito aquéllas destinadas a Ley 19.165. Art. 1".
dejar constancia de cualquier acción u omisión del empleado que Ley 18.834, Arl. 38.
implique una conducta o desempeño funcionario reprochable.
Interpretación:
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Inciso 1' .Q
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La anotación de demérito debe registrarse en la hoja de vida funcLonaria y será ponderada en el LL
proceso calificatorio correspondiente. Su incidencia en la calificación definitiva dependerá de la ¡;¡
evaluación que efectúe la Junta Calificadora del Servicio. La medida disciplinaria, en cambio, es ~
una sanción administrativa que emana del incumplimiento de normas estatutarias por parte de un -"'
-o
empleado, y que se configura a través de la respectiva investigación. Luego, como la exclusión de .2ro
:::::1'-,
~(!)
pago de la asignación de experiencia y desempeño funcionario prevista en la letra f) del articulo 1 de 1-0
la ley 19490, se refiere a la aplicación de alguna medida disciplinaria contemplada en el articulo 116
(actual articulo 121) de la ley 18834, como consecuencia de un sumario, la anotación de demérito
no se encuentra considerada entre los presupuestos que impiden percibir dicha asignación, toda vez
que no constituye medida disciplinaria (13248198).
Las anotaciones de demérito producirán sus efectos en la calificación del funcionario, en la medida que
formen parte del proceso calificatorio. Este proceso tiene por objeto evaluare! desempeño funcionario,
a diferencia del sumario administrativo que tiene por finalidad establecer responsabilidades por faltas
cometidas, aplicando las sanciones que correspondan. Por ello, resulta plenamente válido que un
servidor pueda experimentar una rebaja en sus calificaciones a consecuencia de una anotación
de demérito y que, por el mismo hecho que dio origen a ésta, sea sancionado con una medida
disciplinaria. No obstante, una determinada falta no da origen, necesariamente, a ambas medidas
(16312196, 38275198, 19126101,44945103, 30952105).
Corresponde a los órganos calificadores privativamente determinar, en lo que atañe a las anotaciones
de mérito y de demérito, si existen actuaciones o conductas que la justifiquen, pues su ponderación
implica el ejercicio de facultades evaluadoras del desempeño funcionario de un empleado (4093192,
31383194).
La anotación de demérito en la hoja de vida de un servidor no constituye una materia sujeta a toma
de razón (26470193).
Es improcedente que la anotación de demérito sea realizada por un empleado a contrata que ejerce
labores de jefatura, porque esas tareas no pueden ser desempeñadas por quienes ostentan esa
calidad, atendida la naturaleza transitoria de sus cargos, y porque no están facultados para ordenar
anotaciones de ese tipo (27304193, 23264/97, 12921199, 45397102).
Inciso 2°
No procede efectuar una anotación de demérito en la hoja de vida por presentación de licencia
médica de una funcionaria de un hospital, regularmente extendida, pues ello no puede considerarse
infracción a los deberes funcionarios, sino que, por el contrario, constituye el ejercicio de un derecho
estatutario. En consecuencia, la anotación debe eliminarse ya que no es posible que la misma sea
considerada al evaluar a la afectada (28456/98).
El Subdirector Médico de un hospital actuó conforme a derecho al dejar constancia mediante una
anotación de demérito al médico Jefe del Servicio de Cirugía Cardiovascular del establecimiento, por
la falta de respuesta a dos m¡¡morándum que le enviara, con el objeto que informara sobre su poca
actividad quirúrgica en un determinado periodo (1 0661/00).
Concordancias: Arts. 47 LOCBGAE; 32 al 52, 119, 122 y 123 del EA; 7, 8, 9 y 11 del decreto 1825,
de 1998, del Ministerio del Interior, Reglamento; 39 del EAM.
Comentarios:
El articulo 43 define lo que son las anotaciones de demérito y señala de manera no taxativa diversos
comportamientos que implican una conducta o desempeño funcionario reprochable. Esto último
significa que la respectiva Jefatura puede disponer la anotación de cualquier otro tipo de conductas
que supongan un manifiesto incumplimiento de las obligaciones funcionarias.
ARTICULO 44.- Las anotaciones deberán referirse sólo al período Ley 19.165, Art. 1".
que se califica, y serán realizadas por la unidad encargada del Ley 18.834, Att. 39.
personal a petición escrita del Jefe Directo del funcionario.
Interpretación:
Inciso 1°
La inobservancia de los plazos establecidos tanto para efectuar las anotaciones de mérito y de
demérito como para notificar al funcionario acerca de su contenido y circunstancia de la conducta
que da origen a ellas, no afecta la legalidad de la anotación, porque los plazos conferidos a la
Administración para emitir actos o adoptar ciertas medidas no son fatales. Por tal motivo, nada
impide que dichos actos se dicten y cumplan válidamente en un periodo posterior, sin desmedro de
la responsabilidad administrativa que pueda asistir a la autoridad administrativa por sus actuaciones
extemporáneas (11201/91).
La notificación de una anotación de demérito debe efectuarse dentro del periodo evaluatorio y
en circunstancia que el afectado pueda oportunamente ejercitar los recursos que le confiere el
reglamento de calificaciones, a fin de no quedar en indefensión dentro del proceso calificatorio. La
Contraloria General es incompetente para evaluar el desempeño laboral de los funcionarios y, por
ende, no puede pronunciarse sobre el contenido de las anotaciones de mérito y de demérito que se
hayan consignado en su hoja de vida (20501/95).
Corresponde exclusivamente al Jefe Directo la facultad de solicitar por escrito a la unidad de personal
las anotaciones de mérito que estime pertinentes, sea por conocimiento directo de los hechos o a
petición del funcionario de su dependencia, sin perjuicio que otra autoridad proporcione antecedentes
que hagan procedente tales anotaciones (18829/98, 43027/98,26389/01, 51167/04).
Inciso 2°
Si no se comunica la determinación que se adopte ante una solicitud de un funcionario para que se
le efectúen anotaciones de mérito o, en caso de un reclamo, en contra de anotaciones de demérito,
debe entenderse que fue aceptada por parte de la autoridad la petición del interesado de practicar la
anotación de mérito o de invalidar la de demérito (9466/95).
Inciso 3°
deje sin efecto o que se deje constancia de las circunstancias atenuantes que concurran en cada
caso, debiendo, conforme al articulo 45 de la ley 18834, dejarse constancia de los fundamentos del
rechazo a dicha petición (13185/06).
Sólo pueden impugnarse ante la Contraloria General las anotaciones de demérito una vez que
los afectados se encuentren notificados del fallo de la apelación a su calificación, porque tales
anotaciones y las solicitudes de que éstas sean objeto forman parte del procedimiento de evaluación
anual del desempeño de cada servidor (42792/00, 41296/01,37599/04, 44050/07).
Inciso 4•
No corresponde registrar en favor de los funcionarios las anotaciones de mérito solicitadas por una
autoridad distinta del Jefe Directo (44239/00).
Comentarios:
Los articulas 41 y 44 del Estatuto Administrativo facultan al Jefe Directo para efectuar anotaciones de
mérito o de demérito, para lo cual debe darse cumplimiento al procedimiento que consulta el articulo
9 del Reglamento General de Calificaciones.
Conforme a esta disposición reglamentaria el Jefe Directo deberá notificar por escrito al respectivo
funcionario acerca del contenido y circunstancia de la conducta que da origen a la anotación de
demérito, dentro del plazo de tres dfas de ocurrida. El empleado, por su parte, a contar de dicha
notificación, dispondrá de cinco días para solicitar al Jefe Directo que se deje sin efecto la anotación
de demérito o se deje constancia de las circunstancias atenuantes que concurran en su caso. La
orden de anotación que realice el Jefe Directo, deberá emitirse dentro de los cinco días siguientes al
cumplimiento de los plazos anteriormente mencionados.
El funcionario podrá solicitar a su Jefe Directo que se efectúen las anotaciones de mérito que a su
juicio sean procedentes.
En el evento que el Jefe Directo rechace las solicitudes del funcionario, deberá comunicarlo por
escrito en el plazo de cinco días a la Unidad de Personal acompañando los fundamentos de su
rechazo, pero si .no se produce tal comunicación se entenderá aceptada la solicitud del funcionario.
Este último aspecto hace excepción a la regla general de que los plazos fijados a la Administración
no son fatales y pueden cumplirse válidamente más allá de su fecha de término, puesto que en este
caso se regula expresamente el silencio de la Administración.
ARTICULO 45.- Si el Jefe Directo rechazare las solicitudes del Ley 19.165,Art.1".
funcionario, deberá dejarse constancia de los fundamentos de su Ley 18.834, Art. 40.
rechazo, agregando a la hoja de vida tales solicitudes.
Interpretación:
De acuerdo con los articules 39 (actual articulo 44), incisos primero y cuarto, y 40 (actual artículo 45)
del Estatuto Administrativo, corresponde al Jefe Directo del respectivo servidor solicitar por escrito a
la unidad encargada del personal, las anotaciones de mérito y de demérito que estime procedentes.
Fluye de esas disposiciones, además, que esa jefatura debe dejar constancia de los fundamentos
de su decisión en caso de rechazar las solicitudes del funcionario destinadas a que una anotación
de demérito sea dejada sin efecto, o de agregar a la hoja de vida anotaciones de mérito, cuyo
incumplimiento afectará a la validez de la decisión adoptada (18829198).
Si se reclama por parte de un funcionario una anotación de demérito ante el Jefe Directo, éste tiene
la obligación de pronunciarse sobre ella. Si no se obtiene respuesta alguna, de acuerdo con el
inciso quinto del articulo 8 del decreto 1229, de 1992, del Ministerio del Interior (actual inciso quinto
del articulo 9 del decreto 1825, de 1998, de esa misma Secretaria de Estado), debe entenderse
aceptada la reclamación formulada por el afectado en orden a dejar sin efecto la correspondiente
anotación de demérito (9466195, 44909102).
No procede la interposición del recurso jerárquico ante Contraloria General en contra de la decisión
de la autoridad administrativa de no realizar una anotación de mérito en la hoja de vida de funcionario.
Ello, porque los procesos calificatorios del personal se rigen por la ley 18834 y por el decreto 1825,
de 1998, del Ministerio del Interior, los cuales contienen procedimientos formales respecto de las
anotaciones de mérito y de demérito. Así, dado el carácter supletorio de la ley 19880, la procedencia
del recurso jerárquico se encontrará condicionado a la mayor o menor regulación de una delerminada
materia, de manera que no resultará procedente cuando se invoque respecto de procedimientos
especiales previstos en la ley que contemplen instancias particulares de revisión (47984106).
Las anotaciones de demérito efectuadas dentro del periodo calificatorio constituyen antecedentes
que deben constar en la hoja de vida del funcionario, al igual que de las solicitudes de éste destinadas
a que se efectúen o se dejen sin efecto dichas anotaciones, antecedentes que la Junta Calificadora
deberá considerar para adoptar sus resoluciones, ya que forman parte del procedimiento de
evaluación anual del desempeño de cada funcionario. El articulo 34 del decreto 1825, de 1998, del
Ministerio del Interior, permite interponer reclamos por anotaciones de demérito ante la Contraloria
General, lo que procederá una vez practicada la notificación del fallo de la apelación de la calificación
respectiva (42792100, 46359103,34113104, 44050107).
Concordancias: Arts. 32 al 52 del EA; 9 del decreto 1825, de 1998, del Ministerio del Interior; 41
del EAM.
Comentarios:
En conformidad con el articulo 45 del Estatuto Administrativo, si no se fundamenta el rechazo de
una solicitud presentada por el afectado para que se deje sin efecto una anotación de demérito
ni se adjunta esta petición a la hoja de vida del funcionario, corresponde que se emita un nuevo
pronunciamiento sobre tal requerimiento, debidamente fundado, de acuerdo a lo que dispone la
citada norma estatutaria.
ARTICULO 46.- Los acuerdos de la Junta deberán ser siempre Ley 19.165, Art. 1°.
fundados y se anotarán en las Actas de Calificaciones que, en Ley 18.834, Art. 41.
calidad de Ministro de Fe, llevará el Secretario de la misma, que
lo será el Jefe de Personal o quien haga sus veces.
Interpretación:
De acuerdo con el articulo 8, inciso segundo, de la Constitución Política, procede que las Actas de
las Juntas Calificadoras en que consten las deliberaciones, votaciones y acuerdos sean puestas en
conocimiento de los servidores evaluados si estos así lo solicitaren, lo que puede hacerse mediante
la entrega de una copia de la misma, pues son documentos públicos. Así, dicha norma, conforme a
los principios de supremacía constitucional y de vinculación directa de los preceptos constitucionales,
tiene plena vigencia en relación con el carácter público que le confiere tanto a los actos y resoluciones
de las entidades de la Administración del Estado, como a sus fundamentos y procedimientos,
entendiéndose estos últimos como aquellos definidos por el articulo 18 de la ley 19880. Como la
calificación del desempeño funcionario regulada por la ley 18834 contempla etapas destinadas a
formar la decisión que, en primera instancia, debe adoptar la Junta Calificadora, las sesiones de
tal Junta y, por ende, las deliberaciones y votaciones que en su interior se produzcan, y que deben
constar en las Actas respectivas, constituyen parte del procedimiento administrativo de evaluación.
La publicidad de las Actas no afecta lo ordenado en los artículos 48 de la ley 18834 y 31 del decreto
1825, de 1998, del Ministerio del Interior, que establecen la obligación del Secretario de la Junta de
entregar, junto con la notificación de la resolución de ese órgano colegiado, copia autorizada del
acuerdo respectivo, ni tales disposiciones se contraponen con el citado articulo 8, inciso segundo, de
la Carta Fundamental. No obstante, el Secretario de la Junta no tiene la obligación de proporcionar,
conjuntamente con la notificación, copia del Acta en que consten las deliberaciones y votaciones de
la Junta Calificadora, sino sólo la del respectivo acuerdo y sus fundamentos, ya que una copia de tal
Acta sólo puede ser proporcionada a solicitud del servidor de que se trate (39268/06).
La resolución de la Junta Calificadora debe estar suficientemente fundada, para que los calificados
puedan asumir adecuadamente su defensa por la vía de interponer los recursos que franquea la ley
y para que puedan mejorar su comportamiento laboral en el siguiente periodo, en aquellos aspectos
que le han significado una disminución en su evaluación (16292/05).
No poner en conocimiento del afectado los fundamentos del acuerdo de una Junta Calificadora
constituye un vicio de procedimiento, pues vulnera el derecho a su defensa y le impide aducir con la
precisión que el caso demande las alegaciones que estimare conducentes (17878/93).
El acuerdo de la Junta Calificadora debe ser siempre fundado, entendiéndose que lo es, cuando
se refiere, circunstanciadamente, por ejemplo, a las causas de una rebaja sobre el máximo de
calificación, no siendo suficiente una apreciación de indole general. La exigencia de fundamento
referida tiene por finalidad que el interesado pueda basar una reclamación, pero también que sea
posible inferir cuáles han sido los rubros o elementos afectados con la calificación, lo que será de
gran utilidad para que pueda enmendarse la conducta funcionaria (11471/93, 23946/96, 550/00,
12587/07, 40675/07).
Las expresiones genéricas tales como "comportamiento deshonesto del funcionario", haber calificado
al empleado "sobre la base de los fundamentos dados por el precalificador" o en atención a existir
hechos "de la mayor gravedad que afectan el prestigio del Servicio", sin especificarlos, no constituyen
fundamentos concretos de la calificación (16812/93, 32611/94, 9525/96, 9649/06).
Es improcedente que la Junta Calificadora se base, para evaluara un funcionario, en una precalificación
que no le ha sido notificada, pues ello lo ha dejado en la indefensión (29610/01).
No se ajusta a derecho el que la Junta Calificadora haya fundado su evaluación en aspectos relativos
al carácter del servidor sin expresar las circunstancias precisas y objetivas acaecidas dentro del
período a evaluar, que habrian causado una rebaja de la misma (9649/06).
No constituye fundamento los términos utilizados por la autoridad evaluadora en cuanto a que
el desempeño del calificado no se compadece con su condición profesional, ni su experiencia y
antigüedad en el servicio y que su trabajo no refleja seguridad, pues ellos no satisfacen los requisitos
previstos por los artículos 46 de la ley 18834 y 29 del decreto N" 1825, de 1998, del Ministerio del
Interior, en el sentido que los acuerdos deben ser siempre fundados (14500/06).
La contradicción entre las razones expresadas por la Junta Calificadora, la Directora Regional y los
Jefes Directos de un funcionario para incluirlo en lista de eliminación, obliga a la Junta a formular un
nuevo acuerdo (23616/96).
No procede que el Secretario sea miembro de la Junta Calificadora con derecho a voz y voto, pues
los miembros de dicho cuerpo colegiado no pueden desempeñar al mismo tiempo funciones de
Secretario por carecer éste de facultades decisorias. No obstante, si éste ocupa una de las cinco
primeras categorías del servicio, excluido el jefe superior del mismo, integrará el cuerpo evaluador
como miembro, con preferencia al desempeño de su calidad de Secretario, ya que de esta manera
tendrá derecho a voz y voto (16292/05).
Concordancias: Arts. 8, inciso segundo de la CP de la R.; 32 al 52 del EA; 25, 27 y 29 del decreto
1825, de 1998, del Ministerio del Interior; 42 y 43 del EAM.
Comentarios:
La fundamentación de los acuerdos de las Juntas Calificadoras que exige el articulo 46 del Estatuto
Administrativo, persigue evitar la indefensión del funcionario, posibilitándole el ejercicio real y efectivo
de su derecho a defensa por la vía del recurso de apelación.
En efecto, la jurisprudencia administrativa ha reconocido que tal exigencia implica que en los
acuerdos los órganos evaluadores deben claramente indicar los antecedentes objetivos, los motivos
concretos y las causas especificas que han servido de base para asignar a un empleado determinada
calificación, lo cual permite poner en su conocimiento las consideraciones que ha tenido en cuenta la
Junta Calificadora para evaluar su labor funcionaria, darle la oportunidad de una adecuada defensa
y servirle de orientación para que pueda enmendar su desempeño laboral en el futuro.· Por último,
permite precisar, conforme a lo establecido en el articulo 3" del Reglamento General de Calificaciones,
si se trata de un hecho ocurrido dentro o fuera del periodo de la calificación respectiva.
En lo que atañe al Secretario de la Junta, por otra parte, resulta indispensable destacar que no
integra la Junta Calificadora del Servicio en calidad de miembro, con derecho a voz y voto, sino que
es solamente su ministro de fe.
Artículo 47.- Los factores de evaluación y su ponderación Ley 19.165, Art. 1'.
se fijarán en Jos reglamentos respectivos a que se refiere el Ley 18.834, Art. 42.
articulo 37.
Interpretación:
Los servicios públicos pueden contar con un reglamento de calificaciones propio, ordenamiento que,
en todo caso, debe ceñirse a las normas de la ley 18834, contenidas en el Titulo 11, Párrafo 3 (actual
Párrafo 4) (25141/93).
De acuerdo con el inciso segundo del articulo 13 del decreto 1229, de 1992, del Ministerio del Interior
(actual inciso segundo del articulo 14 del Reglamento General de Calificaciones), la nota de cada
factor que integra la calificación del funcionario corresponde al promedio aritmético de las notas
asignadas a los subfactores respectivos, las que deberán expresarse en enteros, sin decimales. Las
notas asignadas a los factores se multiplicarán por el coeficiente que se establece para cada uno de
ellos, lo que dará el número de puntos de cada factor, y la suma de los mismos dará el puntaje final
y la lista de calificación que corresponda al empleado (6813/95).
No se ajusta a derecho un reglamento especial de calificaciones que establece que los factores y
subfactores para evaluar a los estamentos superiores de la institución, comprenden mayoritariamente
labores de dirección, jefatura o supervisión, omitiéndose otros aspectos del desempeño funcionario,
tales como el cumplimiento de normas e instrucciones, asistencia y puntualidad, deberes a que
también están obligados los directivos y jefaturas (27003/04).
Concordancias: Arts. 47 de la LOCBGAE; 32 al 52 del EA; 14, 15, 16 y 17 del decreto 1825, de
1998, del Ministerio del Interior; 44 del EAM.
Comentarios:
El articulo 47 del Estatuto Administrativo remite al Reglamento General de Calificaciones o a los
reglamentos especiales que pudieren dictarse de acuerdo con las características de determinados
organismos o servicios públicos, los factores de evaluación y su ponderación.
Al respecto, el Titulo 11 "Del Proceso Calificatorio", Párrafo 2' "Los Factores de Calificación", del
decreto 1825, de 1998, del Ministerio del Interior, que aprobó el Reglamento de Calificaciones del
personal afecto al Estatuto Administrativo, establece los factores y subfactores que evaluará la
calificación, mediante un procedimiento que culmina con la ubicación de los funcionarios en alguna
de las listas de calificaciones que indica, según el puntaje que en cada caso éstos obtengan.
ARTICULO 48.- Elfuncionario tendrá derecho a apelar de la resolución Ley 19.165, Art. 1°.
de la Junta Calificadora o de la del Jefe Directo en la situación prevista Ley 18.834, Art. 43.
en el inciso segundo del articulo 34. De este recurso conocerá el
Subsecretario o el Jefe Superior del Servicio, según corresponda. La
notificación de la resolución de la Junta Calificadora se practicará al
empleado por el Secretario de ésta o por el funcionario que la Junta
designe, quien deberá entregar copia autorizada del acuerdo respectivo
de la Junta Calificadora y exigir la firma de aquél o dejar constancia
de su negativa a firmar. En el mismo acto o dentro del plazo de cinco
días, el funcionario podrá deducir apelación. En casos excepcionales,
calificados por la Junta, el plazo para apelar podrá ser de hasta diez
días contados desde la fecha de la notificación. La apelación deberá
ser resuelta en el plazo de 15 días contado desde su presentación.
Los plazos de días a que se refiere este articulo serán de días hábíles.
Interpretación:
Inciso 1•
El recurso de apelación debe ser resuelto por la autoridad competente cualquiera sea la calidad en
que esté desempeñando el cargo, mediante un acto formal (21093/65, 7856/66).
La resolución del recurso de apelación ha de ser siempre fundada, esto es, que debe indicar los
antecedentes objetivos, causas especificas y circunstancias precisas consideradas para calificar a
un funcionario, evitando su indefensión y posibilitándole el ejercicio real y efectivo de su derecho a
defensa. Aun cuando la ley no lo exige, ese requisito debe satisfacerse para no vulnerar lo dispuesto
en los artículos 1 y 19, W 2, de la Constitución Política de la República (19080/96, 5202/98, 18242/99,
10183/07).
La circunstancia que la autoridad actúe como precalificador no la inhabilita para conocer del recurso
de apelación (23711/93, 3491/99, 10830/06).
El que un funcionario que ha actuado como miembro de la Junta Calificadora, conozca y falle, en
calidad de subrogante del Jefe Superior del Servicio, la apelación deducida por un empleado en
contra de la resolución de la Junta emitida a su respecto, constituye una irregularidad, porque ello
vulnera el principio de instancias diferenciadas que inspira los procesos administrativos, en especial el
calificatorio, de acuerdo con el cual la autoridad que intervino en una etapa de éste, debe abstenerse
de participar en la siguiente fase que signifique adoptar una decisión acerca de la resolución anterior,
a fin de evitar que una misma persona tenga facultades decisorias en dos instancias del proceso
evaluatorio (18839/94, 16642/98, 28931/98, 8036/99, 31020/03).
Según se infiere del DFL 22, de 1959 y del DFL 60-18834, de 1990, del Ministerio del Interior, el
Servicio de Gobierno Interior depende de esa Secretaria de Estado, pero carece de Jefe Superior,
por lo que para el solo fin de las apelaciones de las calificaciones, corresponde conocerlas al
Subsecretario del Interior (2579/93).
El hecho que el fallo de la apelación de un funcionario haya sido firmado por el Jefe de Servicio
Subrogante, cuyo nombramiento fue declarado improcedente por la Contraloría General, constituye
un vicio de legalidad de dicho fallo (7880/06).
Es improcedente que la Junta Calificadora revise la calificación del afectado, quien se encuentra
amparado por el beneficio del fuero de acuerdo con la ley 19296, otorgándole el carácter de apelación
a la petición de nulidad que dedujo en contra de lo resuelto por ella, ya que mediante su interposición
no se pretendió hacer variar el criterio manifestado por la referida Junta en lo concerniente a las notas
y puntaje final que se le asignaron al empleado, sino que dejar sin efecto la evaluación practicada,
por cuanto aquél gozaba de fuero (17403/98, 49947/00,22339/01, 19941/04).
Según lo ordenado por los artículos 48 y 49 de la ley 18834, y 31 y 34 del decreto 1825, de 1998, del
Ministerio del Interior, el Secretario de la Junta Calificadora o el funcionario que ella designe, deberá
entregar al interesado copia autorizada del acuerdo respectivo de ese órgano colegiado o del fallo de
la apelación, y exigir la firma de aquél o dejar constancia de su negativa a firmar, de lo cual aparece
que la notificación de las calificaciones debe efectuarse en forma personal, con el fin de que conste
de manera fehaciente que el afectado ha podido tomar conocimiento a cabalidad de su evaluación, lo
que no ocurre cuando aquélla se realiza a través de medios electrónicos que no permiten satisfacer
dicha exigencia (41270/07).
Aunque un funcionario no haya sido notificado de acuerdo a lo ordenado por este precepto, en el
evento que interponga, dentro de plazo, los recursos que la ley le franquea respecto de cada uno de
los actos administrativos involucrados en el proceso evaluatorio, hace suponer inequívocamente que
tuvo conocimiento de ellos y de su contenido, debiendo entenderse que, por tal motivo, ha operado
la notificación tácita. No obstante, que la ley 18834 no regula este tipo de notificación, debe estarse,
conforme al artículo 1 de la ley 19880, a lo previsto en el artículo 47 de este mismo texto, que se
refiere a ella (38309/07).
Las Actas de las Juntas Calificadoras pueden ser conocidas por los servidores evaluados si éstos así
lo solicitan, entregándoles una copia de las mismas. Ello, de conformidad con el principio de publicidad
de los actos emanados de los órganos públicos consagrado en el artículo 8, inciso segundo, de la
Constitución Política, calidad que tienen dichas Actas al tenor del artículo 18 de la ley 19880, por ser
El que la Junta Calificadora haya excedido todos los plazos establecidos para el proceso calificatorio,
no constituye una irregularidad que vicie el citado procedimiento, sin perjuicio de la responsabilidad
que, eventualmente, pudiere afectar a los causantes del denunciado retardo, por cuanto los términos
fijados en las normas respectivas a que deben sujetarse las autoridades administrativas, no tienen
el carácter de fatales, por lo que sus actuaciones pueden cumplirse válidamente en un período
posterior (7880/06, 49415/06).
El plazo de cinco días para apelar del acuerdo de la Junta Calificadora ante el Subsecretario o el
Jefe Superior del Servicio, debe contarse desde el momento en que materialmente se hace entrega
al funcionario afectado de copia a!-ltorizada del acuerdo impugnado (64729/76).
Inciso 2•
La Junta Calificadora debe tener en cuenta necesariamente la precalificación, la hoja de vida y los
informes de desempeño del funcionario al adoptar sus resoluciones, pero dichos antecedentes no
son obligatorios, pues constituyen solo parte de los elementos que debe ponderar al ejercer su labor
evaluadora, de modo que su contenido no limita la independencia y autonomía de la Junta al apreciar
el comportamiento funcionario (7880/06, 10830/06).
El Subsecretario del ramo o el Jefe Superior del Servicio, para resolver los recursos de apelación
interpuestos por los empleados en contra de su calificación, pueden solicitar, como un antecedente
adicional a los señalados expresamente en el artículo 48, esto es, la hoja de vida, la precalificación
y la calificación, copia de las Actas de la Junta Calificadora (39268/06).
Comentarios:
Resulta de interés destacar el criterio que la Contraloría General ha sostenido en su jurisprudencia
administrativa, en cuanto a que la resolución de la apelación en el procedimiento calificatorio debe
ser siempre fundada, aun cuando esta exigencia no se contemple expresamente en las normas que
regulan la materia.
Este predicamento se sustenta en la circunstancia de que tal decisión incide en la carrera funcionaria
del servidor de que se trata, la cual, conforme al artículo 45, inciso segundo, de la ley 18575,
Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración del Estado, se funda en el mérito,
la antigüedad y la idoneidad de los empleados, lo que impone a la autoridad, ante cualquier situación
que se relacione con alguno de esos elementos, la obligación de motivar su actuación, y como ocurre
que la resolución que recae en la apelación del acuerdo de la Junta Calificadora afecta a dicha
carrera, aquélla tiene que estar adecuadamente fundada y obedecer a razones que la justifiquen,
pues de lo contrario puede encubrir una arbitrariedad que vulneraría los artículos 1 y 19, N" 2, de la
Carta Fundamental.
El articulo 48 del Estatuto Administrativo expresa que las autoridades encargadas de conocer el
recurso de apelación serán, en su caso, el Subsecretario o el Jefe Superior del Servicio.
El precepto regula, además, la forma de notificar la resolución de la Junta Calificadora, señala los
plazos para deducir el mencionado recurso y el término en que éste deberá ser resuelto.
Por último, la norma expresa que los plazos de dias para interponer y resolver el recurso de apelación
"serán de días hábiles", lo cual es comprensivo de todos aquellos días durante los cuales se distribuye
la jornada ordinaria de trabajo. Ello, armoniza con lo previsto en el articulo 25 de la ley 19880, sobre
cómputo de los plazos del procedimiento administrativo, disposición que entiende que son inhábiles
los días sábados, los domingos y los festivos.
ARTICULO 49.- El fallo de la apelación será notificado en la Ley 19.165, Art. 1".
forma señalada en el artículo anterior. Practicada la notificación, Ley 18.834, Art. 44.
el funcionario sólo podrá reclamar directamente a la Contra/aria
General de la República, de acuerdo con lo dispuesto en el
articulo 160 de este Estatuto.
Interpretación:
El Jefe Superior del Servicio, como órgano de alzada, está obligado a ajustarse al Estatuto
Administrativo y al Reglamento General de Calificaciones, por lo que carece de facultades para
pedir un nuevo informe complementario del precalificador, ni éste tiene competencia para emitirlo.
Dicha petición, que puede emanar del órgano de apelación o del interesado, constituye un trámite
no previsto por la ley, en un procedimiento que tiene las características de reglado. Por lo tanto,
una participación no autorizada del Jefe Directo en tal sentido, significaría vulnerar el espíritu que el
Estatuto atribuye al recurso de apelación dentro del proceso calificatorio, cual es que lo conozca y
falle una jerarquía superior con independencia de cualquier funcionario u órgano que haya intervenido
en etapas anteriores (25750/93).
No procede que Contraloria General revise genéricamente los procesos calificatorios del personal
de un servicio, atendido que las reclamaciones respecto de ellos deben efectuarlas personal y
directamente los funcionarios afectados o representados por una Asociación Gremial, invocando
las causales que puedan significar infracción legal o reglamentaria en el proceso (37599/04,
44910/07).
La Contraloria General sólo puede pronunciarse, de oficio o a petición de parte, sobre el proceso
calificatorio cuando se hubiere incurrido en algún vicio de procedimiento que infrinja la ley o el
reglamento, pero no respecto del fondo de las apreciaciones vertidas sobre un funcionario en dicha
evaluación. Por lo tanto, esta Entidad Fiscalizadora carece de atribuciones para pronunciarse sobre
la ponderación de los méritos funcionarios o de las notas de los factores en que se basa la calificación.
Ello, porque la valoración de las condiciones de desempeño de un empleado es facultad exclusiva
de las autoridades calificadoras respectivas, las que adoptan sus decisiones en forma soberana
(1932/93, 8953/93, 13796/94, 7919/96, 30739/98, 18242/99, 5704/01, 25237/05).
Debe ponerse personalmente en conocimiento del empleado su evaluación funcionaria por parte
del Secretario de la Junta Calificadora o por un funcionario que ésta designe, siendo admisible
la notificación por carta certificada cuando concurre una causal de fuerza mayor que no le sea
imputable, para evitar la paralización del proceso o dilación del mismo (41466/00).
El articulo 44 (actual articulo 49) del Estatuto Administrativo delimita expresamente la oportunidad
en la cual, en materia de calificación de personal, puede interponerse el reclamo de que trata su
articulo 154 (actual articulo 160), refiriéndola específicamente al momento posterior a la notificación
de la resolución que falla el recurso de apelación deducido en contra de la determinación de la Junta
Calificadora (8132/93, 17214/97,42792/00, 6889/01, 53640/02, 13185/06, 44050/07).
El plazo para interponer el reclamo ante la Contraloria General de la República es de diez días
hábiles, contado desde la notificación del fallo de apelación, por lo que no cabe considerar los di as
sábados (25750/93).
Los eventuales vicios de procedimiento que pudieren afectar a un proceso calificatorio, deben
reclamarse ante la Contraloria General en un solo acto, no siendo procedente que se interpongan
en presentaciones sucesivas ni que se pidan informes a un servicio público sobre "nuevos" vicios de
legalidad que alega el ocurrente (20224/93, 25593/93, 36038/01).
Constituyen vicios de procedimiento que infringen la ley o el reglamento que regulan el proceso
calificatorio, reclamables ante la Contraloria General, en conformidad con el artículo 154 (actual
artículo 160) del Estatuto Administrativo, por ejemplo, no haber entregado al funcionario copia
autorizada del acuerdo de la Junta Calificadora al momento de notificarle su calificación, que
los acuerdos de dicha Junta carezcan de fundamentos, o que se hayan omitido las razones
o motivos respecto de los subfactores en que mantuvo la nota de precalificación (13860/93,
14859/93, 14999/93).
No constituye vicio de procedimiento la circunstancia que quien notificara a una funcionaria del
Ministerio de Educación del fallo de la apelación que interpuso en contra de su calificación fuera el
Secretario de la Junta Evaluadora y no el Ministro quien la resolvió, porque el artículo 33 del decreto
1229, de 1992, del Ministerio del Interior (actual artículo 34 del decreto 1825, de 1998, de esa
misma Secretaría de Estado), establece que ese trámite se efectuará en la forma y plazo señalado
en el artículo 30 (actual artículo 31) del Reglamento de Calificaciones, contado desde la fecha de
la respectiva resolución, precepto este último que hace recaer en el mencionado Secretario o el
empleado que esa Junta designe, el deber de practicar la notificación pertinente (16538/95).
No existe norma legal o reglamentaria que contemple causales de recusación respecto del Contralor
General, con el objeto de inhabilitarlo para pronunciarse sobre los reclamos que interpongan los
funcionarios en contra de sus calificaciones (8197/98).
Concordancias: Arts. 47 de la LOCBGAE; 32 al 52 y 160 del EA; 31, 34 y 35 del decreto 1825, de
1998, del Ministerio del Interior; 47 del EAM.
Comentarios:
La interposición del reclamo ante la Contraloría General de la República a que se refiere el artículo
160 del Estatuto Administrativo, suspende los efectos del proceso calificatorio, de manera que la
En caso que la calificación sea confirmada por haber sido rechazado el recurso, la calificación queda
ejecutoriada desde el día siguiente a aquél en que el Jefe Superior del Servicio reciba el oficio
respuesta de la Entidad de Control. Si de ello se deriva que el funcionario es ubicado en lista de
eliminación, la autoridad administrativa debe proceder inmediatamente a declarar vacante el cargo
del empleado, a contar del día siguiente a aquél en que el afectado sea notificado del dictamen
denegatorio.
ARTICULO 50.- El funcionario calificado por resolución ejecutoriada Ley 19.165, Art. 1°.
en lista 4 o por dos años consecutivos en lista 3, deberá retirarse Ley 18.834, Art. 45.
del servicio dentro de los 15 dias hábiles siguientes al término de
la calificación. Si así no lo hiciere se le declarará vacante el empleo
a contar desde el día siguiente a esa fecha. Se entenderá que la
resolución queda ejecutoriada desde que venza el plazo para reclamar
o desde que sea notificada la resolución de la Contraloria General de
la República que falla el reclamo.
Interpretación:
Inciso 1°
La declaración de vacancia por calificación insuficiente puede notificarse al afectado por medio de
un simple oficio interno, pero luego debe traducirse en un documento formal, sujeto a toma de razón
(8168190, 30027103).
El decreto de declaración de vacancia derivada de calificación insuficiente, surte sus efectos a contar
de la fecha precisa que señala la ley, esto es, desde el di a siguiente al vencimiento del plazo dentro
del cual debe alejarse del Servicio el empleado afectado por esa medida, perdiendo en esa fecha su
calidad de funcionario. Ello constituye una excepción a la regla general sobre la eficacia de los actos
administrativos en cuanto éstos rigen desde su total tramitación y notificación al afectado (45763198,
4058103).
La declaración de vacancia por calificación insuficiente debe surtir efectos desde el día siguiente al
vencimiento del plazo dentro del cual el empleado debe retirarse del Servicio, por lo que éste pierde,
en esa fecha, su calidad de funcionario no pudiendo, por tanto, continuar percibiendo las rentas
asignadas al empleo, aunque la medida se disponga y notifique en una época posterior (31307190,
602196, 43766199).
El servidor que es calificado por resolución ejecutoriada en lista 4, de eliminación, o por dos años
consecutivos en lista 3, condicional, deberá retirarse del servicio, sin derecho a indemnización, pues,
en estos casos, dicho beneficio no se contempla en el Estatuto Administrativo (24711105).
Procede declarar vacante el cargo servido por una funcionaria por calificación insuficiente por
segundo año consecutivo, pese a encontrarse embarazada, porque los ceses de servicios que tienen
como fundamento un precepto legal determinado, operan con prescindencia de las normas sobre
inamovilidad en el empleo contenidas en textos estatutarios o en otros preceptos legales generales
o especiales, ya que esas normas de estabilidad sólo proceden en relación con la eventual facultad
que tiene la autoridad de poner término a funciones, pero no cabe cuando es la ley la que ordena el
alejamiento del Servicio como ocurre en este caso (31309190, 19755199).
El documento que declara vacante un cargo por calificación de eliminación es un acto reglado en
cuanto al procedimiento y a sus efectos y no puede, por ende, revocarse discrecionalmente por la
autoridad, a menos que concurra a su respecto algún vicio de legalidad (23644/93).
Además del plazo de quince días a que alude esta norma, deben considerarse los cinco y diez dias,
respectivamente, que asisten al calificado para apelar ante el Jefe Superior de la entidad y reclamar
ante la Contraloría General, aunque no recurra a dichas instancias (10099/94).
Un funcionario a quien se le declaró vacante el cargo por calificación deficiente, sólo podrá ingresar
nuevamente a la Administración después que hayan transcurrido más de cinco años desde la fecha
de su expiración en funciones, conforme al artículo 11 (actual artículo 12), letra e), del Estatuto
Administrativo, sin perjuicio que a la época de producirse su reingreso deba cumplir los demás
requisitos previstos en esa disposición, y aquéllos que se exijan para desempeñar el cargo de que
se trate (24338/90).
Procede pagar la asignación por cambio de residencia cuando el término de funciones se debe a
calificación insuficiente o a la aplicación de la medida disciplinaria de destitución, pues el Estatuto
Administrativo no hace distingos, en su artículo 93 (actual artículo 98), letra d), en cuanto a la causal
de dicho cese (28910/95, 19755/99).
El empleado que goza de licencia por salud irrecuperable puede ser alejado de su cargo antes del
vencimiento del plazo de seis meses de licencia, cuando ocurra alguna causal legal de expiración
de funciones, como es la declaración de vacancia por calificación en lista 4, ello, por cuanto tal
circunstancia no confiere inamovilidad al funcionario (12692/96, 3082/97, 28339/01 ).
No resultan aplicables las normas de inamovilidad funcionaria previstas en los artículos 156 y 157
de la ley 10336, Orgánica de la Contraloría General, en períodos de elecciones, ya que ellas sólo
rigen tratándose de abandonos obligados del Servicio derivados de la aplicación de una medida
disciplinaria expulsiva, pero no cuando la desvinculación de la Administración del Estado responde a
una calificación deficiente (34114/89, 19435/94, 44895/00).
Procede dejar sin efecto una resolución tomada razón que declaró vacante el cargo de un funcionario
por habérsele calificado en lista 3 dos veces consecutivas, encontrándose pendiente un reclamo
del afectado interpuesto ante la Contraloría General en contra de su última evaluación, porque la
circunstancia de que la entidad fiscalizadora no se hubiera pronunciado sobre la materia, impidió
computar el plazo de 15 días establecido en esta norma para su aplicación (49073/98).
El artículo 45, inciso primero (actual artículo 50, inciso primero) de la ley 18834, al mencionar la
"resolución" de la Contraloría General que falla el reclamo, se refiere al dictamen mediante el cual
emite un pronunciamiento o decisión sobre el respectivo reclamo de calificación, acogiéndolo o
denegándolo, y no a un acto administrativo formal emanado de ella (30027/03).
Concordancias: Arts. 47 de la LOCBGAE; 121etra e), 32 al 52 y 150, letra e), del EA; 37 del decreto
1825, de 1998, del Ministerio del Interior; 48 del EAM.
Comentarios:
Complementando lo expresado respecto del articulo 49, la resolución que califica a un funcionario
debe entenderse ejecutoriada, si ha mediado apelación, luego de vencido el plazo para reclamar
ante la Contraloria General, de acuerdo con el articulo 160 del Estatuto Administrativo, o desde que
es notificada la resolución del Organismo Contralor que resuelve el reclamo.
Por otra parte, en relación con el inciso segundo del articulo 45 (actual articulo 50), el Informe de la
Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno expresó que "tiene por objeto evitar que quien mantenga
una calificación de condicional por no haber sido calificado de acuerdo con el articulo 35 (actual
articulo 40), no se le declarará vacante el cargo, ya que la mantención de esa calificación no le es
imputable".
Interpretación:
Inciso 1°
La expresión "mayor puntaje" usada por el articulo 51 (actual articulo 56) de la ley 18834, relacionada
con el artículo 46 (actual artículo 51), se refiere a los resultados del proceso de calificación del
personal, para fines de confeccionar los respectivos escalafones, puesto que los servidores de cada
planta y grado deben ordenarse según el puntaje obten.ldo al término del correspondiente proceso
calificatorio. Ello se efectúa mediante un procedimiento de comparación que debe realizarse
considerando los puntajes definitivos de evaluación obtenidos por los funcionarios de cada planta y
grado en el proceso calificador pertinente. Este elemento diferenciador permitirá, concurriendo los
demás requisitos indicados en aquella norma, disponer la modalidad de promoción que ésta autoriza
(28736/93).
Inciso 2°
El sentido de la expresión "antigüedad en el cargo" empleada por este precepto es, fundamentalmente,
para dirimir la ubicación en el escalafón en caso de producirse empate en los puntajes de calificación
de los funcionarios, de modo de permitir que se establezca una diferencia en aquellos casos en que
un funcionario ha sido nombrado en la misma planta con un nuevo grado, o en una planta distinta,
pero con igual grado, evento en el cual tendrá menos antigüedad en el cargo que los servidores que
ya ocupaban empleos en el grado y planta a que accedió (8289/93, 9594/93, 25395/97, 38695/98,
146/04).
Cargo y función son conceptos diversos, siendo el cargo aquél que se contempla en las plantas o
como empleos a contrata en la institución, mientras que la función se encuentra conformada por el
conjunto de tareas que le corresponde realizar al funcionario, asignadas a un cargo o empleo, de
acuerdo con la importancia de las mismas. Ellas se diferencian según el estamento al que pertenece
el empleado, esto es, auxiliar, administrativo, técnico, profesional o directivo. Por lo tanto, resulta
posible que un empleado ascienda en el escalafón y por ende acceda a un nuevo cargo, y no se
alteren sus funciones, ya que éstas se mantienen acordes al estamento o planta a la que el servidor
pertenece (55216/04).
Por regla general, siempre hay correspondencia entre antigüedad en el cargo y antigüedad en el
grado, de modo que normalmente es la misma, lo cual se desprende del articulo 8 (actual articulo 9)
del Estatuto Administrativo, en cuya virtud todo cargo público necesariamente debe tener asignado
un grado de acuerdo con la importancia de la función que se desempeñe. Reafirma lo anterior la
definición de cargo público que contempla el articulo 3, letra a), del Estatuto Administrativo, del cual
también fluye que, tratándose del mismo escalafón, son congruentes la antigüedad entre uno y otro
(22395/99).
No existe un ascenso en el cargo, por una parte, y en el grado, por otra, de manera que uno pueda
tener lugar en forma independiente del otro; así, cuando opera el ascenso se pasa a ocupar un cargo
público distinto del anterior, aunque tenga eventualmente la misma denominación y pueda o no
implicar un cambio de funciones, por lo que su antigüedad necesariamente es la fecha de vigencia
del ascenso. En este sentido, cabe precisar que el concepto de "antigüedad en la planta" no tiene
existencia legal, pues tal antigüedad no ha sido considerada en forma independiente por la ley como
un elemento diferenciador (17244/02, 146/04).
Se producirá diferencia de antigüedad entre el cargo y el grado, cuando el funcionario sea nombrado
en una planta distinta, con igual grado. En estos casos, si se produce un empate en las calificaciones,
el escalafón se confeccionará ubicando, primero, a los funcionarios que tengan mayor antigüedad
en el cargo y, a continuación, en orden decreciente, aquéllos con mayor antigüedad en el grado,
conforme a la fecha de los respectivos decretos de nombramiento, ascenso o encasillamiento
(3475/93, 9594/93, 26567/94, 47334/04).
La antigüedad en el grado debe contarse desde la fecha que emane del decreto o resolución de
nombramiento. Si esos actos no tienen señalada una fecha, desde el día en que se asumieron las
labores del cargo (34011/67, 11427/91, 9542/92, 40235/05) •.
De conformidad a los artículos 16 del DL 2306, de 1978, sobre Reclutamiento y Movilización de las
Fuerzas Armadas, único de la ley 11133 y 100 de la ley 18834, el tiempo de conscripción militar se
considera como antigüedad en la Administración del Estado para efectos del escalafón de mérito
en el caso de funcionarios que, al momento de desempeñar un cargo en la Administración, hayan
sido llamados a cumplir con dicha carga pública y también para quienes se incorporen a ella, con
posterioridad al término de dicha conscripción (27779/07).
El pago de imposiciones previsionales por determinado periodo por parte de un servicio, no es útil para
computarlo en el factor antigüedad en la institución, toda vez que para ese fin se requiere acreditar
permanencia efectiva, considerando solo las prestaciones de servicios realmente desempeñadas, no
siendo válidos los periodos de interrupción del vinculo existente entre el organismo y la funcionaria
aunque puedan estar cubiertos con tales cotizaciones (40235/05).
cuenta, en cambio, para establecer su antigüedad en el grado. Así, en el caso de dos funcionarios
designados en el mismo grado, habiéndose desempeñado uno de ellos como titular y el otro en
calidad de contratado, debe asignarse al primero el lugar preferente en el escalafón (1 0292/92,
28908/92, 40776/96, 23968/03).
Para determinar la antigüedad en la Administración del Estado, deben considerarse los servicios
prestados efectivamente en cualquiera repartición pública, al margen del régimen jurídico que sea
aplicable a su personal, siempre que éste le reconozca a la persona de que se trata la calidad de
empleado público. Los servicios prestados en calidad de titular, suplente, subrogante o a contrata,
son computables para determinar la antigüedad analizada, no así el tiempo servido a jornal ni el
tiempo reconocido para mantener la continuidad en la previsión (28200/92, 28908/92, 2822/93,
19813/93, 40235/05).
Cuando dos personas ingresan al mismo tiempo a la Administración en la planta del Servicio, sin tener
tiempo previo que acredite desempeños en ella, la ubicación en el escalafón queda determinada por
el orden dado en el decreto o la resolución de nombramiento (40776/96).
Los funcionarios que de acuerdo con esta norma y los artículos 29 (actual artículo 34) de la ley
18834 y 25 de la ley 19296, no son calificados y conservan la evaluación del año anterior, no tienen
derecho a mantener el lugar en el nuevo escalafón, puesto que de esas disposiciones aparece que
los servidores que allí se indican, que por excepción se excluyen del proceso calificatorio, sólo tienen
derecho a conservar el puntaje obtenido en procesos precedentes, ya que de haberse querido otorgar
un efecto adicional, se habría señalado expresamente, como ocurrió con el artículo 1O del decreto
2245, de 1963, del Ministerio del Interior, Reglamento del articulo 43 del DFL 338, de 1960, que
establecía que al representante del personal, por el hecho de ser miembro de la Junta Calificadora
no podía evaluársele, manteniendo su última calificación y "su ubicación" en el escalafón (44543/99,
1773/00, 11683/01).
Los encasillamientos que por mandato legal deban realizarse por orden de antigüedad, deben
ajustarse al articulo 46 (actual artículo 51) del Estatuto Administrativo. Pero en caso que no exista
escalafón de antigüedad, corresponde ubicar al personal de acuerdo con las reglas de formación
de escalafones que esa disposición consulta, por lo que deberá designarse, en primer lugar, en los
grados de mayor jerarquía a quienes ocupen los grados más altos de entre quienes tienen derecho
a ser encasillados (20664/92, 16441/93).
Las instituciones públicas afectas a la ley 18834 confeccionan anualmente sus escalafones de mérito
conforme a lo establecido en este precepto. No obstante, esta norma no resulta aplicable luego de
un encasillamiento, caso en el cual ante una igualdad de calificaciones debe estarse a la posición
jerárquica que los servidores poseían antes de aquél. Esta regla rige hasta que se produzca un
cambio en el nivel jerárquico de uno de los empleados, instante en que uno de ellos adquiere una
antigüedad en el cargo o grado distinta de la proveniente del encasilla miento y a partir del cual debe
estarse a lo establecido en este artículo 46 (actual articulo 51) (31248/94, 32511/95, 27609/03,
40352/03).
Inciso 3•
La norma del inciso tercero del artículo 46 (actual artículo 51), en cuanto dispone que el funcionario
que asciende pasa a ocupar en el nuevo grado, el último lugar, hasta que una evaluación en él, por
un desempeño no inferior a seis meses, determine una ubicación distinta, confirma que el empleado
recién ascendido debe ser calificado cualquiera que sea el tiempo que acredite en el nuevo grado.
Esta disposición tiene por finalidad establecer que la calificación de que sean objeto los servidores
ascendidos, no altera su ubicación en el respectivo· escalafón, esto es, el último lugar que han pasado
a ocupar en el nuevo grado, ya que para ello es necesario que ésta obedezca a un desempeño, en
él, no inferior a seis meses, sin desmedro de que debe tenerse en cuenta para los otros fines que se
persigue con la calificación (37154/95, 5511/98,33395/99, 1773/00, 26024/01).
El inciso segundo del articulo 51 consulta los diversos factores dirimentes en caso de producirse un
empate en el puntaje obtenido por dos o más funcionarios, que impida la confección del respectivo
escalafón. Dichos factores se refieren a la antigüedad, primero en el cargo, luego en el grado,
después en la institución, a continuación en la Administración del Estado, y finalmente, si aún se
mantiene la concordancia, decide el Jefe Superior de la institución.
El Informe de la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno expresa que fue sustituido el término
"escalafón de mérito" que contenía el proyecto original por "escalafón", por estimarse más propio, ya
que en él se contienen también aquellos funcionarios que no han obtenido calificaciones meritorias.
ARTICULO 52.- El escalafón comenzará a regir a contar desde el Ley 19.165, Art. 1°.
t• de enero de cada año y durará doce meses. Ley 18.834, AH:. 47.
Interpretación:
Inciso 1°
Conforme el articulo 38, inciso segundo, y articulo 39 de la ley 18834, se podrán dictar por los
servicios reglamentos calificatorios especiales que contemplen fechas distintas a las que fija dicha
ley para el periodo evaluatorio previsto en el inciso primero del articulo 38 precitado, en lo que
dice relación con el inicio y término de los procesos de calificación, siempre que esas resoluciones
señalen disposiciones transitorias que regularicen la falta de adecuación temporal entre el nuevo y
el antiguo sistema de evaluación, así como los otros elementos que constituyen su complemento
necesario, como los informes de desempeño, constitución de las juntas calificadoras e inscripción
de los representantes del personal ante los órganos colegiados. Así, no hay inconveniente en que
tal modificación establezca transitoriamente dos periodos calificatorios de nueve meses cada uno.
Podrá incorporarse en el reglamento, por ejemplo, una norma transitoria que precise que el escalafón
de mérito de un determinado año se confeccionará con Jos resultados del primer periodo calificatorio
transitorio de Jos meses de junio a febrero del año siguiente, siempre que no se altere la fecha de
inicio y término que fija el articulo 52 de la ley 18834 (25114/05).
Inciso 2°
La publicidad de Jos escalafones de las diferentes plantas de Jos Servicios, tiene por finalidad que el
personal conozca su ubicación en dichos ordenamientos, para Jo cual conviene que se exhiban en
Jugares en que Jos funcionarios puedan estudiarlos sin contratiempos ni molestias, debiendo situarse
copias de aquéllos, cuando se trata de Servicios que funcionan en muchos edificios o unidades, en
cada uno de los locales (22381/95).
La autoridad debe poner en conocimiento de los funcionarios Jos escalafones para que éstos puedan
apreciar si la ubicación asignada en él corresponde realmente a sus antecedentes y formular las
observaciones o reclamos, según el caso (16807/92).
Inciso 3°
Es improcedente rectificar o modificar de oficio los escalafones de mérito cuando se han hecho públicos,
pudiendo solamente enmendarse como consecuencia de las reclamaciones que oportunamente
formulen Jos funcionarios, conforme a las normas pertinentes, o bien a causa del pronunciamiento
que emita la Contraloria General sobre los reclamos de calificación que le sean sometidos, luego de
lo cual éstos adquieren el carácter de inamovibles, sin perjuicio de la responsabilidad administrativa
que pueda asistir a los empleados cuyo actuar determinó su confección incorrecta y sin que ello
obste, además, para que en el escalafón siguiente se repare la irregularidad cometida (34332/93,
23375/99).
No procede la invalidación de actos administrativos irregulares cuando han producido todos sus
efectos legales respecto de terceros, como ocurre con los ascensos, más aún si se considera que
una vez confeccionados y vencido el plazo para impugnarlos, los escalafones adquieren el carácter
de inamovibles y que la invalidación de actos administrativos reglados por mandato legal tiene límites
en la necesidad de mantener las situaciones jurídicas constituidas a su amparo (22221/67, 35846/76,
16923/93, 2572/99).
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La autoridad administrativa debe rectificar el escalafón de mérito en el cual se ha incurrido e
o
involuntariamente en simples errores de hecho respecto de la ubicación de ciertos funcionarios, "{)'
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tanto respecto de aquellos que hubieren reclamado de la situación como de los que no lo hicieren. :::J
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Ello, porque el artículo 62 de la ley 19880 faculta a dicha autoridad para que de oficio o a petición ¡;>
del interesado, rectifique los errores de copia, de referencia, de cálculos numéricos y, en general, ['!
los puramente materiales o de hecho que aparecieren de manifiesto en un acto administrativo -~
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(34524/07). ,2, ro
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Concordancias: Arts. 45 y 47 de la LOCBGAE; 3, letra a), 5, 32 al 51, 53 al 59, 160 y 1 transitorio 1-0
del EA; 1 de la ley 19001, modificado por el artículo único de la ley 19075; 39, 40 y 41 del decreto
1825, de 1998, del Ministerio del Interior; 50 del EAM.
Comentarios:
Los actos administrativos, cuyos efectos se encuentran reglados por la ley, deben ser invalidados por
la misma autoridad que los emitió, cuando en ellos se ha incurrido en ilegitimidad o descansan en
presupuestos irregulares. La doctrina que sustentó la Contraloría General hasta antes de dictarse
la ley 19880, reconocía como límites naturales de la potestad de invalidación, fundamentalmente,
el transcurso del tiempo y la consolidación de las situaciones jurídicas constituidas al amparo
de actos irregulares, toda vez que, sobre la base de los principios de seguridad jurídica y de las
finalidades esenciales del Derecho, tal predicamento procuraba, por una parte, proteger la buena fe
de los administrados que actuaban en la certeza de que una medida administrativa que ha regido
sin observaciones por un largo tiempo, es un acto ajustado a derecho y, por otra, que no podía
desconocerse los efectos derivados de esos actos, especialmente cuando ellos alcanzan derechos
de terceros.
El artículo 53, inciso primero, de la ley 19880, vino a solucionar el problema de los limites de la
potestad invalidatoria al establecer que la "autoridad administrativa podrá, de oficio o a petición de
parte, invalidar los actos contrarios a derecho, previa audiencia del interesado, siempre que lo haga
dentro de los dos años contados desde la notificación o publicación del acto".
ARTICULO 53.- La promoción se efectuará por concurso interno en Ley 19.882, Art. vigésimo
las plantas de directivos de carrera, profesionales, fiscalizadores séptimo, 16.
y técnicos y por ascenso en el respectivo escalafón en las plantas Ley 18.834, Art. 48.
de administrativos y de auxiliares, o en las equivalentes a las
antes enumeradas.
Interpretación:
De acuerdo con la modificación introducida por el W 16 del artículo vigésimo séptimo de la ley 19882
al artículo 48 de la ley 18834 (actual artículo 53), las promociones se efectuarán por concurso interno
en las plantas de directivos de carrera, profesionales, fiscalizadores y técnicos y por ascenso en el
respectivo escalafón en las plantas de administrativos y de auxiliares. Considerando que las normas
de derecho público rigen in actum, las nuevas disposiciones sobre promociones han entrado a regir
a contar del 21 de diciembre de 2003. ~uego, todas las promociones que se dispongan a partir de
esa fecha se encuentran reguladas por la indicada norma estatutaria, sin importar que el hecho que
las motiva se haya generado con anterioridad a la referida data (59542103, 31581105).
Por regla general, la provisión de empleos y la carrera funcionaria operan en líneas jerárquicas de
promoción atingentes a cada escalafón, constituyendo cargo tope el de mayor grado de cada planta,
exceptuándose los ordenamientos encabezados por cargos de exclusiva confianza donde el tope lo
constituyen los empleos de jerarquía inmediatamente inferior a la de tales plazas, ya que en ellos
culmina la carrera funcionaria (6764197).
De conformidad con los artículos 53 y siguientes de la ley 18834, 1, letra b) y 26 y siguientes del Decreto
69, de 2004, del Ministerio de Hacienda, Reglamento de Concursos del Estatuto Administrativo, la
promoción es una modalidad diversa de acceso a un cargo público que consiste en la posibilidad
que tiene todo servidor que ocupe, en calidad de titular, un empleo de carrera, para -por la vi a del
concurso interno o del ascenso, según corresponda- acceder, en idéntica calidad, a una plaza de
grado superior en la línea jerárquica de la respectiva planta (16165105).
El articulo sexagésimo séptimo de la ley 19882 sólo dice relación con la sustitución de las normas
vigentes en materia de provisión de "cargos de promoción" en las plantas de directivos de carrera,
profesionales, fiscalizadores y técnicos o equivalentes por aquéllas contenidas en el artículo 53 y
siguientes, con las excepciones que señala, de modo que mantienen su vigencia las disposiciones
que regulan el ingreso a una planta determinada en el último grado (15550104, 39454104).
Inciso 1•
La promoción se efectúa por concurso interno en las plantas de directivos de carrera, profesionales,
fiscalizadores y técnicos y por ascenso en el respectivo escalafón en las plantas de administrativos
y de auxiliares, o en las equivalentes a las antes enumeradas (31718/06).
Los certámenes de promoción tienen por finalidad dar cumplimiento, en lo que corresponde a los
funcionarios de planta, a lo dispuesto en el articulo 38 de la Constitución Politica y en los articules 43
y siguientes de la ley N• 18.575, Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración
del Estado, que garantizan la carrera funcionaria, esto es, la posibilidad que tiene todo servidor, que
cumpla los requisitos establecidos en la ley y no le afecte alguna causal de inhabilidad, para ocupar
el cargo vacante de grado superior, en la planta del organismo de que se trate (38897/06).
La figura del ascenso opera sólo respecto de los funcionarios que conforman las plantas de servidores
administrativos y auxiliares de la Administración del Estado, por lo que los empleos a contrata, que
son por esencia de carácter transitorio y los funcionarios que los sirven en esta calidad carecen del
derecho al ascenso (9287/90, 12696/93, 19874/05, 22006/07).
El articulo 22 de la ley 19646 ha autorizado para que en los concursos de promoción a un cargo de
carrera participen los servidores a contrata de la Dirección de Presupuestos, inclusive aquellos que
ocupan los tres grados superiores de las plantas de administrativos y auxiliares, lo que constituye un
beneficio especial dada su calidad de funcionarios transitorios que se encuentran fuera de la carrera
funcionaria. Asi, si un funcionario a contrata de esa Dirección participa en ese tipo de certámenes
convocados para proveer plazas vacantes en las plantas concursables del servicio de igual o inferior
grado al que tiene asignado dicho servidor, nada impide que éste acepte ocupar un empleo de
estas categorias, ya que debe considerarse que, en estos casos, el funcionario será promovido,
entendiendo que con ello mejora sus condiciones de trabajo al obtener una mayor estabilidad en el
empleo de que se trate (38897/06).
La referencia a las plantas "equivalentes" a las recién nombradas que hace este articulo 53, inciso
primero, de la ley 18834, alude a aquellos ordenamientos que, no obstante lo establecido en los
articules 5 y 1 transitorio del Estatuto Administrativo no fueron adecuados a los escalafones antes
aludidos y, en consecuencia, mantienen otras denominaciones, pero cuyos servidores se rigen por
el citado estatuto administrativo y no por estatutos especiales. Así, en ningún caso tal equivalencia
permite hacer aplicable esas normas a la promoción que debe efectuarse en otras plantas que,
en virtud de la autorización contenida en el inciso segundo del artículo 43 de ley 18575 y en el
articulo 162 del Estatuto Administrativo, se establecen y regulan en estatutos especiales (127/04,
20987/05).
El ascenso es la forma normal de proveer los empleos de carrera y consiste en el derecho que tiene
un servidor público que se encuentra en el lugar preferente de su escalafón, para acceder al cargo
del grado superior que se halle vacante, siempre que cumpla los requisitos generales y especiales
que exige el desempeño de éste y no le afecte alguna causal de inhabilidad para ocuparlo (19020/90,
3323/92, 12029/92).
No es posible, en un procedimiento reglado, aceptar una forma de designación diferente, pese a las
circunstancias de hecho que puedan concurrir, toda vez que las excepciones a una normativa sólo
pueden emanar de un texto legal expreso que las autorice. Por ende, si un cargo debe proveerse
por ascenso y no por concurso es imperativa la provisión por ese medio, sin que pueda considerarse
para justificar una alternativa distinta, la especialidad profesional que posea la persona que, según
el escalafón, está habilitada para ascender (30740/90, 21639/01).
Inciso 2•
Inciso 3°
Según los artículos 21, 35 y 53 de la ley 18834 y 4, 30 y 31 del decreto 69, de 2004, del Ministerio
de Hacienda, el comité de selección que se constituye para los concursos de promoción internos
del personal en los servicios, debe estar conformado siempre por los tres funcionarios de más alto
nivel jerárquico de la institución de la respectiva región o por los cinco funcionarios del más alto
nivel jerárquico de la misma, con excepción del jefe superior o encargado de personal, y en ambos
casos, por dos representantes del personal elegidos por éste. El inciso tercero del articulo 53 de la
ley 18834, a diferencia de lo que ocurre con el articulo 35, no exige al representante del personal
pertenecer al estamento en que ha de efectuarse la promoción. Así, para tales fines resulta suficiente
integrar alguna de las plantas cuyas promociones se realizan a través de concursos internos los que
no deben, necesariamente, formar parte del estamento al cual pertenece el cargo que se proveerá.
Lo anterior es sin desmedro de que el comité pueda funcionar con más del 50 por ciento de sus
integrantes, sin incluir al jefe o encargado de personal para fines de determinar ese porcentaje
(2672/06, 15688/06, 44967/06).
El hecho de que representantes del personal que integran el comité de selección, participen al mismo
tiempo como postulantes en el certamen concursa!, constituye una infracción al principio de probidad
administrativa, toda vez que incurre en la conducta contemplada en los artículos 84, letra b), de la ley
18834 y 62, N' 6, de la ley 18575, esto es, intervenir en razón de sus funciones en asuntos en que
tenga un interés personal (7662/07).
el inciso tercero del articulo 53 del Estatuto Administrativo. Por ende, para constituir el comité de
selección debe considerarse como Jefe Superior del Servicio de Gobierno Interior al Subsecretario
del Interior. En consecuencia, dicho comité se integrará por el jefe o encargado de personal y los
cinco funcionarios de mas alto nivel jerarquice de esa Secretaria de Estado, pertenecientes a la
planta de la Secretaria y Administración General, con excepción del Subsecretario del Interior y por
dos representantes del personal del Servicio de Gobierno Interior elegidos por éste (32718/06).
Inciso 4•
Sólo constituye una infracción formal de menor entidad que no afecta la validez del concurso interno de
promoción, la circunstancia de que en sus bases se estableciera un curso de capacitación señalando
únicamente las materias, duración, lugar a desarrollar, sistema de evaluación y procedimientos de
corrección y recorrección de pruebas, sin especificar la fecha o época en que el mismo tendría lugar
(57871/05).
Toda persona que postule a un empleo público o sea promovido dentro de un mismo escalafón o a
otro distinto, se encuentra en el imperativo de satisfacer los requisitos generales y educacionales
establecidos para el respectivo empleo por la legislación vigente (37925/94, 41420/05).
El nuevo sistema de promoción en las plantas de profesionales vía concurso interno, no afecta la
vigencia de los requisitos educacionales especiales fijados por el ordenamiento jurídico respecto
de determinados cargos de ese estamento, sino que deja expresa constancia de la necesidad de
cumplir con tales requisitos para acceder, por aquélla vía, a dichos empleos. Los funcionarios deben
acreditar que cuentan con tales requisitos a la fecha en que se ha producido la vacante respectiva
(20894/93, 55722/05).
El hecho de existir títulos con una formación académica similar no puede servir como antecedente que
habilite para ocupar un cargo para el cual la ley ha exigido expresamente encontrarse en posesión
de un tifulo profesional especifico (36281/06).
Procede no considerar la profesión de abogado como apta para cumplir el requisito especifico fijado
para acceder al cargo de Coordinador Administrativo por tratarse de una carrera que no forma parte
del area de la "Administración". Ello, porque las carreras profesionales que integran dicha area del
conocimiento, tienen en común que su formación principal incluye todo el quehacer comercial y el
mercado de capitales, nacional e internacional y la administración del sector, su desarrollo, gestión
y el apoyo a la misma; mientras que las carreras del área del "Derecho", se caracterizan porque
su formación esta referida al estudio y desarrollo de la teoría e historia del derecho y todo lo que
signifique apoyo o asesoría a esta area, de manera que ambos títulos corresponden a ambitos del
conocimiento completamente disimiles y orientados a fines diversos (10927/07).
Las licencia médica otorgada en razón de alguna enfermedad que afecte al funcionario, supone
para éste la exigencia de descansar de manera efectiva para reestablecer su salud. En el caso
del descanso por la licencia que tiene como causa la enfermedad grave del hijo menor de un año,
si bien el funcionario no está enfermo, el beneficio descansa en la hipótesis de un hijo a tal grado
comprometido en su salud que requiere la plena dedicación del empleado al cuidado del infante.
Por ello, en tales circunstancias, la participación del servidor en un concurso de promoción interna
aparece como inconciliable con tales propósitos, razón por la cual, los Servicios, en ejercicio de sus
deberes de control, deberán imperativamente y tan pronto tomen conocimiento que el funcionario ha
vulnerado el descanso ordenado, comunicar tal infracción al organismo de salud competente con el
objeto de proceder a la invalidación de la licencia médica, obtener el correspondiente reembolso de
lo indebidamente percibido a titulo de remuneración por parte del funcionario y adoptar las medidas
disciplinarias que sean procedentes (57871/05, 6221/07).
El que una mujer funcionaria sea madre de un lactante no puede constituirse en un impedimento o
traba para el libre ejercicio del derecho a participar con igualdad de oportunidades en un concurso
que le permita acceder a un cargo o función pública o ser promovida en él. Tampoco obsta al ejercicio
de ese derecho el que una funcionaria, acorde con lo dispuesto en el articulo 89 de la ley 18834, se
encuentre en actual goce del descanso de maternidad que la legislación le reconoce. Ello, porque
al tenor de los artículos 195 y 197 del Código del Trabajo y 6 del decreto 3, de 1984, del Ministerio
d~ Sal~::!. el descanso maternal confiere. a la beneficiaria ún:camer.•e el derecho irrenunciable de
ausentarse de su trabajo, pero no faculta a extender la prohibición de trabajar a otros efectos no
previstos expresamente por el legislador, como seria, por ejemplo, restringir la libertad de postular
en igualdad de condiciones a un cargo o función pública (58507/06, 6221/07).
Los funcionarios que se hallan haciendo uso de feriado pueden participar en los concursos internos
de promoción, pues no existe en el ordenamiento jurídico norma alguna que impida a un servidor,
durante el tiempo en que goza de ese derecho, realizar una actividad como la participación en un
certamen de promoción, aunque éste implique etapas o instrumentos de evaluación que requieren su
intervención presencial como pruebas, entrevistas, examenes y cursos de capacitación. Lo señalado,
no importa una renuncia al goce de dicho beneficio, ya que tal circunstancia sólo se verificaría en la
medida que el respectivo servidor deje de hacer uso del mismo para desarrollar labores propias del
cargo que ocupa, o bien, del servicio en el cual se desempeña (57871/05).
Los funcionarios a quienes no se les califica, pero que conservan la evaluación del año anterior,
pueden participar en los concursos de promoción que regulan los artículos 53 y siguientes de la
ley 18834, en la medida que satisfagan los demas requisitos legales. El puntaje que conservan
produce los mismos efectos que el de los empleados que fueron objeto de calificación y a aquél debe
atenderse para establecer si cumplen la exigencia prevista en la letra b) del inciso quinto del citado
articulo 53 (20987/05, 23594/05).
Los empleados a los que, por cualquier causa, nunca se les ha calificado y, en consecuencia, no
poseen una evaluación que mantener y a quienes la ley no les otorga como a los delegados de
personal y directores de asociaciones de funcionarios la opción de solicitar serlo, no pueden cumplir
con el requisito señalado en la letra b) del inciso quinto del articulo 53 para participar en los concursos
internos de promoción (28982/05).
Los funcionarios a contrata no pueden participar en los concursos de promoción, porque al tenor del
artículo 53, inciso primero, de la ley 18834, en relación con lo establecido en la letra e), del inciso
quinto, del mismo precepto, sólo pueden hacerlo aquellos empleados que se encuentren nombrados
en las plantas de directivos de carrera, profesionales, fiscalizadores y técnicos (22006/07).
El requisito de encontrarse en "los tres grados inferiores al de la vacante convocada", cuando se trata
de postulantes de la misma planta o escalafón, debe entenderse que se trata de los tres que están
inmediatamente por debajo del cargo a proveer, aun cuando no sean consecutivos, constituyéndose el
último de ellos en el que fija el límite para los interesados de otras plantas o escalafones (127/04).
Pueden participar en los concursos internos de promoción de un servicio sólo los funcionarios
nombrados en los tres grados inferiores al de la vacante convocada de la misma planta o de otra
diversa, siempre que se trate de una de aquéllas reconocidas por el artículo 5 de la ley 18834. En
ningún caso resulta posible que lo hagan los empleados que perteneciendo al mismo organismo,
integran plantas especiales regidas por estatutos distintos (20987/05).
Los postulantes de un concurso interno de promoción de un servicio que cuenta con planta nacional
y regional deben pertenecer al estamento en que existe la vacante. De esta manera, sólo pueden
participar en un certamen para proveer un cargo de directivo de carrera, profesional, fiscalizador
o técnico de la planta nacional, funcionarios pertenecientes a ésta. Por el contrario, tratándose de
un concurso para ocupar un empleo de la planta regional únicamente puede postular personal de
dicho estamento. La expresión "a la misma planta" que utiliza la letra e) del inciso quinto del artículo
53, ha de entenderse referida a los estamentos de directivos de carrera, profesionales, técnicos,
pero sólo en relación con la planta nacional o regional, según sea en la que se produjo la vacante
(64096/04).
De acuerdo con lo previsto en las letras a), b) y e) del inciso quinto del artículo 53, en los concursos
internos podrán participar los funcionarios que estén en posesión de los requisitos exigidos para el
respectivo cargo, que se encuentren calificados en lista de distinción o buena y que estén nombrados
en los tres o cuatro grados inferiores al de la vacante convocada, según sea el caso. De lo anterior
fluye que cualquier servidor que mantenga la titularidad de un cargo en la planta, y que desempeñe
una plaza de exclusiva confianza, se encuentre en calidad de contrata o de suplente, puede participar
en los concursos de promoción a que se refiere esa disposición, siempre que además cumpla con los
otros requisitos que el mencionado precepto exige (44557/06).
Los concursos internos de promoción se inician con la convocatoria y finalizan con la designación
del o de los participantes que hubieren obtenido los más altos puntajes, en orden decreciente, según
se trate de proveer uno o más empleos vacantes, medida que rige a partir de la fecha en que quede
totalmente tramitado por la Contraloria General, el acto administrativo que la dispone, oportunidad
ésta en que el concurso se agota para todos sus efectos jurídicos (24559/94, 41375/98, 46013/04, "'ro
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Los concursos de promoción finalizan con la designación del o de los participantes que obtuvieron los ¡g
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oportunidad en que el concurso agota todos sus efectos jurídicos (31335/96, 47188/06). :~
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Según los artículos 102 y 103 del DFL 1, de 2005, del Ministerio de Salud, las promociones de
funcionarios de los Servicios de Salud, no rigen desde la fecha en que quede totalmente tramitado
el acto administrativo que lo dispone, ya que, por mandato del señalado DFL, en aquéllas no resulta
aplicable lo ordenado en el articulo 53 de la ley 18834. La resolución de la autoridad de tales
servicios, al disponer las promociones desde una fecha determinada y antes de la total tramitación
del respectivo acto administrativo, confiere a los funcionarios promovidos un beneficio sin que con
ello se cause un perjuicio a derechos de terceros, lo cual permite configurar una excepción al principio
de irretroactividad, conforme a lo señalado en el articulo 52 de la ley 19880 (39584/07).
Concordancias: Arts. 44, 45 y 47 de la LOCBGAE; 3, letra a), 14 y 54 al 59 del EA; 51 del EAM;
Decreto 69, de 2004, del Ministerio de Hacienda, Reglamento sobre Concursos del Estatuto
Administrativo.
Comentarios:
La figura de la promoción a que se refieren los artículos 53 y siguientes del Estatuto Administrativo,
luego de las modificaciones que a ese texto introdujera la ley 19882, ha mantenido su carácter
genérico en el sentido que tenia anteriormente y conforme al cual ella significa el acceso de los
funcionarios de carrera a un cargo de grado superior siempre que reúnan los requisitos legales
exigidos para ocupar dicha plaza y no les afecte para ello inhabilidad alguna.
El W 16 del articulo vigésimo séptimo de la citada ley 19882 introduce, con un carácter especifico,
la promoción por concurso interno aplicable a los directivos de carrera, profesionales, técnicos o
fiscalizadores, mecanismo en el cual se consideran los factores de capacitación pertinente, evaluación
de desempeño, experiencia calificada y aptitud para el cargo, con lo cual se persigue tener una
nueva carrera funcionaria que promueva al personal destacado y meritorio.
Por otra parte, se mantiene la promoción a través de la vía del ascenso, que es el derecho de un
funcionario a acceder a un cargo superior en la linea jerárquica de la planta pertinente, con sujeción
al escalafón.
Para ambos casos, y en el evento de no ser posible llenar las vacantes por esos dos medios, se
establece el mecanismo del concurso público.
Interpretación:
Aunque las normas contenidas en el Párrafo 5" del Titulo 11 de la ley 18834, antes de las modificaciones
que le introdujera el articulo vigésimo séptimo de la ley 19882, establecían que el personal de la
Administración del Estado tiene derecho al ascenso, éste constituye una mera expectativa mientras
no se materialice a través del respectivo acto que lo disponga y esté totalmente tramitado, para lo
cual la autoridad no tiene plazo (56794/04).
Los ascensos deben efectuarse siguiendo el orden decreciente establecido sobre la base de las
calificaciones para cada grado dentro de la respectiva planta (16013/90).
El ascenso rige a partir de la fecha en que se produzca la vacante, de modo que las promociones
que se efectúen por esta vía deben retrotraerse necesariamente al día en que ellas se originaron
independientemente de la data en que la autoridad dicta el acto administrativo que las dispone.
Así, cualquiera sea la fecha en que se ordene un ascenso, sus efectos siempre se retrotraen al
momento en que se produjo la vacante del cargo a que se asciende, pero el instante en que debe
materializarse ese derecho constituye un acto discrecional, ya que no está sometido a plazo alguno
dentro del sistema de promociones, debiendo sujetarse, en todo caso, a las normas y escalafones
vigentes ese día (27431/90, 407/91,6343/91, 17682/97,46840/99, 8915/04).
Si bien Jos ascensos deben disponerse desde la fecha en que se producen las vacantes y, por lo
tanto, deben sujetarse a las normas y escalafones vigentes ese día, las promociones como medio
de provisión de los empleos públicos sólo pueden favorecer a quienes conservan la calidad de
funcionarios en servicio activo a la época de la dictación del acto que ordena el ascenso (21739/90,
9479/93, 26839/94, 33176/95).
La provisión de empleos por la vía del ascenso no puede operar si el interesado no cumple, a la
fecha en que se produjo la vacante respectiva, los requisitos que la ley ha establecido para ocuparlos
(17100/92).
El funcionario promovido tiene derecho a percibir las remuneraciones del nuevo cargo, una vez que
el acto que dispone el ascenso esté totalmente tramitado, o sea, desde la notificación al interesado,
momento a partir del cual es posible proceder al pago retroactivo de Jos estipendios que correspondan
desde la época en que se produzca la vacante, cualquiera sea la fecha en que éste se materializa
(17682/97, 8915/04).
La figura del ascenso opera sólo respecto de los funcionarios que conforman las plantas de servidores
administrativos y auxiliares de la Administración del Estado, por lo que Jos empleos a contrata, que
son por esencia de carácter transitorio, suponen para los funcionarios que sirven en esta calidad, la
imposibilidad de tener derecho al ascenso (9287/90, 12696/93, 19874/05, 22006/07).
El hecho que los ascensos se rijan por la normativa y escalafones vigentes a la fecha de producirse
la vacante, es una consecuencia del efecto retroactivo que establece el artículo 54 de la ley 18834, lo
cual se relaciona con la normativa que regula los ascensos en materias tales como las inhabilidades
para gozar de tal derecho y los requisitos para acceder a un cargo de mayor jerarquía, así como a la
forma en que ha de determinarse al servidor que tiene la preferencia para ocupar el empleo vacante
(56794/04).
La circunstancia de que en virtud del articulo 54 de la ley 18834, los efectos del ascenso se retrotraigan
a la fecha en que se produjo la vacante no·significa que el servidor haya teni·do ilicorporado en
su patrimonio desde esa data el derecho a ocupar el cargo, de modo que frente a un cambio de
legislación que· suprima esa modalidad de promoción y la reemplace por el concurso interno, el
empleado pueda exigir que se ordene el ascenso (53768/04, 56794/04).
No procede disponer el ascenso de un funcionario a una plaza, cuya vacancia se produjo antes de la
d·ata de su ingreso al servicio. Ello, pórque el ascenso es un derecho de los funcionarios, de manera
que éste sólo asiste a quienes revisten la calidad de empleados de una determinada repartición a la
data en que se genera la vacante que origina la promoción por esta vía, y que reúna los requisitos
legales pertinentes (4381/02, 9225/05).
La circunstancia que la ley no establezca un plazo dentro del cual deban proveerse tos cargos
vacantes, no significa que la autoridad pueda suspender indefinidamente la materialización dé una
promoción, porque ello atenta contra la carrera funcionaria consagrada en la Constitución Política
y en la ley 18575, uno de cuyos elementos básicos lo constituye el derecho. al ascenso que la
estructura y sustenta. Por lo tanto, el retardo en disponer un ascenso debe obedecer. a causas
fundadas y la dilación no puede prolongarse más allá de un plazo razonable y prudente (5040197,
31892/01' 21660/02).
El servidor que se encuentra en lugar preferente, tiene derecho a ascender al cargo de grado superior
que se halle vacante, siempre que cumpla los requisitos legales y no le afecte alguna causal de
inhabilidad para ocuparlo, derecho que asiste, sucesivamente: a los funcionarios que le siguen en el
respectivo estamento, y sólo en el caso que no resulte aplicable la norma de ascenso para proveer
un cargo de carrera, procede hacerlo mediante nombramiento (18290/92).
No se ajusta a derecho disponer ascensos dejando vacante cargos intermedios porque, previamente,
deben ordenarse las promociones en esas plazas, a contar de la fecha en que se produjo la vacante
(24267/94).
La. ubicación en la escala única de sueldos fijada por el OL 249, de 1973, de los cargos de los
personales afectos a sus disposiciones, no ha significado para ningún efecto legal, estatutario,. ni
previsional, la alteración o modificación de las plantas, escalafones, situación jerárquica, cate·gorias
y grados de los respectivos servicios o entidades regidas por dicho cuerpo legal. En consecuencia,
. los ascensos deben seguir operando en la estructura jerárquica interna de los servicios, determinada
por los escalafones, y no a través de la escala única de sueldos, que no es más que la expresión
remuneratoria de esas estructuras, aun cuando estos ascensos impliquen el desplazamiento de los
beneficiados a grados superiores de la mencionada escala (32715175).
Los actos administrativos que disponen ascensos deben señalar en los "Vistos" del documento las
normas vigentes relativas a las materias de que trata, y además indicar las vacantes que originan los
ascensos (28130/89).
Los escalafones que importan para fines del ascenso son los vigentes a la época en que se produce
la vacante y siempre que en aquella data el funcionario respectivo hubiera cumplido todos los
requisitos exigidos por la ley para la procedencia de la promoción. Cualquiera sea la fecha del acto
administrativo a· través del cual la autoridad disponga el ascenso, éste rige a contar desde el origen
de la vacante (22112198, 5119100, 4381102).
Los cargos de la planta que han quedado vacantes luego de concluido el proceso de encasillamiento.
corresponde proveerlos de acuerdo con las reglas generales previstas en el Estatuto Administrativo.
esto es, mediante ascenso del personal, en conformidad con sus artículos 48 y 49 (actuales articulas
53 y 54) (34869/94).
Los funcionarios ascendidos deben ser objeto de calificación, aunque en el nuevo grado no cuenten
con un desempeño igual o superior a seis meses (37154/95, 1773/00).
Antes que el proceso calificatorio respectivo quede ejecutoriado y se pueda confeccionar el escalafón
de mérito para disponer los ascensos que correspondan, los empleados sólo tienen una mera
expectativa de ser promovidos (5119/00).
El derecho al ascenso es renunciable de acuerdo con los principios generales del derecho y lo
previsto en el articulo 12 del Código Civil, toda vez que dicho beneficio se encuentra exclusivamente
establecido en favor del funcionario (22275/76, 10438/02, 22389/04).
El empleado puede renunciar al ascenso, puesto que el legislador reconoce la existencia y legitimidad
de tal decisión, pero ella no puede significar menoscabo de los derechos remuneratorios y beneficios
previsionales vigentes a la época de adoptarla (26540/68).
Los decretos o resoluciones que disponen ascensos deben dejar constancia expresa en su parte
considerativa, del hecho de haberse rechazado la promoción por el funcionario a quien le correspondía
ascender, sin perjuicio de que entre los antecedentes deban figurar los instrumentos a través de los
cuales se haya hecho efectivo el rechazo al ascenso (29673/64).
La ley 19937, que sustituyó el artículo 80 del DL 2763, de 1979 (actual artículo 102 del DFL 1, de 2005,
del Ministerio de Salud), en relación con su artículo undécimo transitorio, incisos primero y segundo,
modificó el régimen de promoción en las plantas de administrativos y auxiliares de las Subsecretarías
del Ministerio de Salud, Instituto de Salud Pública, Central de Abastecimiento del Sistema Nacional
de Servicios de Salud y de los Servicios de Salud regidos por la ley 18834 y el DL 249, de 1973,
sustrayendo a ese personal del sistema de ascenso en el escalafón confeccionado conforme a
las calificaciones que regula el Estatuto Administrativo, dejándolo afecto a un procedimiento de
acreditación fijado en el mencionado artículo 80 (22267/06).
Concordancias: Arts. 44, 45 y 47 de la LOCBGAE; 3, letra a), 5, 14 y 53 al 59 del EA; 52 del EAM.
Comentarios:
El artículo 54 conceptualiza el ascenso al precisar que es el derecho de un funcionario de acceder
ARTICULO 55.- Serán ínhábíles para ser promovidos los funcío- Ley 19.882, Art. vigésimo
naríos que: séptimo, 17.
Ley 18.834, Art. 50.
a) No hubieren sido calificados en lista de distinción o buena en Ley 19.165, Art. 3', a).
el período inmediatamente anterior;
b) No hubieren sido calificados durante dos períodos Ley 18.834, Art. 50.
consecutivos;
Interpretación:
Las disposiciones que establecen inhabilidades constituyen normas de carácter excepcional, las
que, por su naturaleza, tienen un alcance restrictivo, por lo que resulta improcedente extenderlas a
situaciones que no han sido contempladas en ellas (73690179, 25514101,29566103, 15483104 bis).
El articulo 7 transitorio del Estatuto Administrativo contempla una norma de protección en favor de
los funcionarios en servicio al 23 de septiembre de 1989 -fecha de su entrada en vigor- en virtud de
la cual dichos servidores pueden continuar ocupando sus cargos, aunque no posean las exigencias
previstas por la ley para desempeñarlos. Esta protección no habilita a ese personal para acceder, por
la vi a del ascenso, a plazas donde no cumple los requisitos establecidos para servirlas (24767190).
Es improcedente promover a empleos de un grado superior dentro de la misma planta, por la vía
del ascenso, a funcionarios que no acreditan los requisitos legales para desempeñarlos, los cuales
fueron encasillados en sus actuales cargos, conforme al artículo 1 transitorio de la ley 18834, sin dar
cumplimiento a las exigencias para ejercerlos (38842195).
Una funcionaria que fue destituida de su empleo al término de un sumario administrativo, siendo luego
sobreseída, debe ser reincorporada al Servicio en el mismo cargo que desempeñaba al momento
de su desvinculación o en otro de igual jerarquía, sin que ello signifique tener que considerar los
ascensos que pudiere hipotéticamente haber alcanzado en el tiempo intermedio, como si hubiera
permanecido en actividad. Lo anterior, tiene su fundamento en que para la procedencia del derecho
al ascenso se requiere haber cumplido determinados requisitos a la fecha en que se ha producido
la vacante respectiva, y bien pudo no haber estado en condiciones de ascender por concurrir otros
elementos que la habrían inhabilitado para ello (7184195).
Letra a)
La expresión "período inmediatamente anterior" empleada por la letra a), se refiere al período
calificatorio inmediatamente anterior a la época de la promoción (39361194).
Letra b)
Procede ascender, en su caso, a delegado del personal ubicado en un lugar preferente en el escalafón
respectivo, aunque dada esa calidad, no fue calificado en dos periodos consecutivos, siempre que
cumpla los requisitos para ocupar esa plaza. Ello, porque entre los empleados exceptuados del
proceso evaluatorio, se encuentran los delegados del personal, quienes conservan la calificación
del año anterior cuando corresponda, lo que demuestra que tienen una evaluación. Por ende, no
configuran la causal de inhabilidad para el ascenso prevista en la letra b) del artículo 50 (actual
artículo 55) aquellos funcionarios que se encuentran en las situaciones contempladas en los artículos
29 y 35 (actuales artículos 34 y 40) del Estatuto Administrativo (36095/96).
No está inhabilitada para ascender una funcionaria que registra dos periodos consecutivos sin
calificación en su cargo de planta debido a la falta de desempeño en él, por encontrarse sirviendo un
empleo a contrata en la misma repartición conforme al artículo 81 (actual artículo 87), letra d), de la
ley 18834. Tal conclusión se fundamenta en la circunstancia de que si bien no procede ascender a
quienes no han sido evaluados durante dos períodos seguidos, la interesada posee una calificación.
Al respecto, el artículo 35 (actual articulo 40) del citado Estatuto Administrativo establece que no se
evaluará a quienes por cualquier motivo hubieren desempeñado efectivamente sus funciones por
un lapso inferior a seis meses, sea en forma continua o discontinua, situación en que se encuentra
la interesada. No obstante, el mismo precepto agrega que dicho personal mantendrá la calificación
del año anterior (1258/97).
Los dirigentes gremiales que no son calificados conservan su última calificación "para todos los
efectos legales", de acuerdo con el artículo 25 de la ley 19296, sobre Asociaciones de Funcionarios
de la Administración del Estado. Uno de esos efectos es que dicha evaluación sirve de base para
los ascensos, por lo que si mediante ella pasan a ocupar un lugar preferente dentro del escalafón, la
autoridad pertinente debe proceder a efectuar la promoción (786/99).
Los servidores que, en virtud de lo dispuesto en los artículos 34 y 40 de la ley 18834 y 25 de la ley
19296, no son calificados, pero conservan s:J eval~-3ción anterior, no incurren en la inhabilidad que
contempla la letra b) de este artículo 55, que impide la promoción de quienes no han sido calificados
durante dos períodos consecutivos (20987/05).
Letra d)
La inhabilidad para ascender por haber sido sancionado un funcionario con la medida disciplinaria
de multa, sólo comprende el período de doce meses contados hacia atrás a partir de la fecha en
que se ha producido la vacante, debiendo considerarse que las normas sobre cómputo de plazos
del artículo 48 del Código Civil no se aplican a los fijados por la ley administrativa respecto de los
derechos y obligaciones de los funcionarios públicos, los que se rigen por las reglas especiales
emanadas del DL 1263, de 1975, Ley Orgánica de la Administración Financiera del Estado, según
las cuales el año fiscal empieza el1 de enero y termina el 31 de diciembre y cada mes se extiende
desde el primero al último día del mismo. (9342/92):
Las inhabilidades para ascender se producen desde la fecha de dictación del decreto o resolución
que impone la sanción y hasta por un año contado desde la misma (9342/92, 35610/99 -aclarado
por ei14759/00-, 4066/00).
Comentarios:
El articulo 55 del Estatuto Administrativo establece diversas inhabilidades que impiden ejercer a
los funcionarios el derecho a ser promovido. Dichas inhabilidades poseen, en lo sustancial, los
siguientes atributos:
a) Están contenidas en disposiciones prohibitivas;
b) Como consecuencia de lo anterior, y en la medida que las inhabilidades limitan el ejercicio normal
de un derecho estatutario, revisten el carácter de excepcional;
e) Son de derecho estricto, esto es, que sólo operan por mención expresa de ley, y
d) Son de interpretación restrictiva, como quiera que no procede respecto de ellas aplicación en
forma supletoria o por analogía, ni cabe extenderlas a situaciones no consultadas expresamente.
El W 17 del articulo vigésimo séptimo de la ley 19882, reemplazó en el encabezamiento del artículo
55 la palabra "ascender" por los vocablos "ser promovidos", con el objeto de mantener la debida
concordancia con el artículo 53 del Estatuto Administrativo.
ARTICULO 56.- Un funcionario de la Planta de Auxiliares tendrá Ley 19.882, Art. vigésimo
derecho a ascender a un cargo de la Planta de Administrativos, séptimo, 18.
gozando de preferencia respecto de los funcionarios de ésta,
cuando se encuentre en el tope de su planta, reúna los requisitos
para ocupar el cargo y tenga un mayor puntaje en el escalafón que
los funcionarios de la planta a la cual accede.
Este derecho corresponderá al funcionario que, cumpliendo las Ley 18.834, Art. 51.
mismas exigencias del inciso anterior, ocupe el siguiente lugar en
el escalafón, en el mismo grado, si el primer funcionario renunciare
a él.
Interpretación:
Inciso 1'
Un funcionario puede ascender a un cargo de una planta inmediatamente superior, prefiriendo a los
empleados de ésta, cuando se encuentre en el tope de su planta, reúna los requisitos para ocupar el
cargo y tenga un mayor puntaje en el escalafón que los dependientes del ordenamiento esquemático
al que accede. Lo anterior supone respetar el orden jerárquico de las plantas contemplado en el
articulo 5 del Estatuto Administrativo -esto es, las de administrativos y de auxiliares- como quiera que
la promoción que se disponga es a un cargo de una planta "inmediatamente superior" (24833194,
34543194, 16786103, 44187105).
La posibilidad de ascender a un cargo vacante de una planta diferente, sólo podrá tener lugar si los
escalafones están estructurados conforme a las plantas indicadas en el articulo 5 de la ley 18834
(19020190, 5119100, 4381102).
La expresión "mayor puntaje en el escalafón" que utiliza esta norma y que otorga el derecho a
ascender a un cargo de una planta inmediatamente superior, gozando de preferencia respecto de los
funcionarios de ésta, alude a los resultados del proceso de calificación del personal, lo que significa
que tanto el empleado a quien se asciende como los funcionarios que integran la planta donde se ha
originado la vacante, tengan una calificación asignada y que el puntaje del primero sea superior al
de los otros empleados. El articulo 51 (actual articulo 56) de la ley 18834 que contiene esta norma
es similar al contemplado en el articulo 29 del DFL 338, de 1960, por lo que es plenamente aplicable
la jurisprudencia emitida en torno a este último precepto (30565190, 6943191 ).
La expresión "mayor puntaje en el escalafón" utilizada por el articulo 51 (actual articulo 56), se refiere
a los resultados del proceso de calificación del personal, careciendo de relevancia el hecho de que
existan coeficientes diferentes respecto de cada planta. Por ende, el procedimiento de comparación
debe realizarse considerando los puntajes definitivos de evaluación obtenidos por los funcionarios
de cada planta y grado en el correspondiente proceso calificatorio. Este elemento diferenciador
permitirá, concurriendo los demás requisitos indicados, disponer la modalidad especial de ascenso
que autoriza este articulo (28736193).
Dada las exigencias que consulta el articulo 51 (actual articulo 56) del Estatuto Administrativo, el
mecanismo especial de ascenso que este precepto establece no puede aplicarse a los empleados a
contrata, que por su grado de asimilación a un cargo de planta están fuera de la carrera funcionaria
y carecen del derecho al ascenso (1997194).
Procede que un cargo vacante se provea por la vía del nombramiento, con arreglo al inciso tercero
del articulo 13 (actual articulo 14) del Estatuto Administrativo, cuando no existen funcionarios que
cumplan los requisitos para ejercer el derecho al ascenso normal previsto en el articulo 49 (actual
articulo 54) o el del mecanismo especial del articulo 51 (actual articulo 56) (6885/96).
La Contraloria General no tiene competencia para disponer ascensos bajo la modalidad contemplada
en el articulo 51 (actual articulo 56) del Estatuto Administrativo, pues esa materia corresponde
privativamente a la Administración activa, la que, por lo tanto, decide en qué oportunidad ordena las
respectivas promociones (34420/90).
A los funcionarios que ocupan cargos de la planta de auxiliares en calidad de titulares se les puede
promover por la vía del ascenso a la de administrativos, pero bajo ninguna circunstancia a la de
técnicos (19874/05).
Concordancias: Arts. 44, 45, 47 y 54 de la LOCBGAE; 3, letra a), 5, 14, 51, 53 al 59 del EA; 54 del
EAM.
Comentarios:
El articulo 56 regula una modalidad especial de ascenso, que se caracteriza por establecer
un mecanismo que permite acceder de un cargo de la Planta de Auxiliares a uno de la de
Administrativos.
El Informe de la Secretaria de Legislación de la Junta de Gobierno expresa que esta norma "se
asemeja al articulo 29 del DFL 338, de 1960, pero se diferencia de éste en que confiere un derecho
para ascender a un cargo de un escalafón inmediatamente superior, en las condiciones que señala,
en tanto que la norma estatutaria vigente dispone que los empleados en similar situación "podrán ser
ascendidos", vale decir, no le da al ascenso el carácter de un derecho, como ocurre en la norma del
proyecto". Ello suponía que al amparo del referido articulo 29, la Administración tenia una facultad
privativa, de hacer o no uso de esa prerrogativa, lo cual el articulo 56 transforma en un deber.
El W 18 del artículo vigésimo séptimo de la ley 19882, sustituyó en el inciso primero del articulo 56
la frase inicial "Un funcionario tendrá derecho a ascender a un cargo de una planta inmediatamente
superior" por "Un funcionario de la Planta de Auxiliares tendrá derecho a ascender a un cargo de
la Planta de Administrativos", con el fin de mantener la debida concordancia con el articulo 53 del
Estatuto Administrativo.
ARTICULO 57.- Los funcionarios, al llegar al grado inmediatamente Ley 18.834, A1t. 52.
inferior al inicio de otra planta en que existan cargos de ingreso
vacantes, gozarán de preferencia para el nombramiento, en caso de
igualdad de condiciones, en el respectivo concurso.
Concordancias: Arts. 44, 45, 47 y 54 de la LOCBGAE; 3, letra a), 5, 14, 53 al 59 del EA; 55 del
EAM.
Comentarios:
El Informe de la Secretaria de Legislación de la Junta de Gobierno expresa que esta disposición
"consagra un derecho de preferencia para el nombramiento en igualdad de condiciones, respecto de
los funcionarios que hubieren llegado al grado inmediatamente inferior al inicio de otro escalafón en "'e
·¡;:
ro
que existan cargos de ingreso vacantes. o
·¡¡
e
:0
El efecto jurídico de lo anterior significa que el ascenso a un escalafón distinto opera como un lJ..
derecho respecto de los funcionarios del escalafón inmediatamente inferior, cumplidos los requisitos !'.!
pertinentes del artículo 47 (referencia que debe entenderse hecha al proyecto y que corresponde al
_ro
~-
actual artículo 56 del Estatuto Administrativo) en relación con la provisión de un cargo que sea el de .,..o
inicio del escalafón superior. ..2
:~
ro
=:m
1-0
En este último evento, vale decir, tratándose del cargo del último nivel del escalafón superior, los
funcionarios del escalafón inferior no tienen derecho a ascender, pero gozan de preferencia para el
nombramiento en igualdad de condiciones en el respectivo concurso".
Salvo el reemplazo de la palabra "escalafón" por "planta", que encuentra su justificación en la unidad
conceptual que contemplan los artículos 5, 14, 17, 54 y 56 del Estatuto Administrativo, entre otros,
la norma que contiene el artículo 57 en comento, mantuvo durante su tramitación, la redacción
propuesta por la disposición original que se acompañó al Mensaje del Ejecutivo.
ARTICULO 58.- Para hacer efectivo el derecho que establece el Ley 18.834, Art. 53.
artículo precedente, los funcionarios deberán reunir los requisitos
del cargo vacante a que se postula y no estar sujetos a las
inhabilidades contempladas en el artículo 55.
Concordancias: Arts. 44, 45, 47 y 54 de la LOCBGAE; 3, letra a), 5, 14, 53 al 59 del EA; 56 del
EAM.
Comentarios:
Esta disposición consulta los requisitos que deben reunir los funcionarios para que opere el derecho
de preferencia para el nombramiento a que se refiere el artículo 57.
ARTICULO 59.- El ascenso regirá a partir de la fecha en que se Ley 18.834. Art. 54.
produzca la vacante.
Interpretación:
El ascenso regirá a partir de la fecha en que se produzca la vacante, de modo que las promociones
que se efectúen por esta vía deben retrotraerse necesariamente al día en que ellas se originaron
(6966190, 12029192, 42414106).
El ascenso no puede operar si el interesado no cumple, a la fecha en que se produce la vacante, los
requisitos que la ley ha establecido para el desempeño del cargo (11880190, 19020190, 4381102).
La legislación que rige la provisión de los empleos por la vía del ascenso es aquella que se encontraba
vigente a la época en que éstos se disponen (13475190, 18135191).
El ascenso, en cuanto medio de provisión de empleos públicos, sólo puede favorecer a quienes
conserven la calidad de funcionarios en servicio activo a la época en que se dicte el acto que lo ordena,
aunque los ascensos deban regir a partir de la fecha en que se ha producido la vacante. La doctrina
indicada es de general aplicación y, por tanto, extensiva a todo el personal de la Administración del
Estado, sea civil, militar o de orden y seguridad pública, ya que se trata de un principio esencial
de la institución del ascenso, independiente del régimen estatutario de que se trate y, por ende, su
contenido y alcance comprende a toda la legislación que regula esta materia, sea especial, v.gr., el
DFL 2, de 1968, del Ministerio del interior, Estatuto del Personal de Carabineros de Chile, o general,
como, por ejemplo, la ley 18834 (45702100, 11018101, 45787104).
De acuerdo con el articulo 54 (actual articulo 59) un funcionario tiene derecho a percibir el sueldo y
las diferencias de remuneraciones derivadas de ascensos dispuestos retroactivamente, los cuales
regirán a partir de la fecha en que se produzca la vacante, cualquiera sea la oportunidad en que se
materializa (407191, 13223193, 8915104).
La ley 18834 no contempla plazo alguno dentro del cual debe materializarse el ascenso, siendo, por
ende, en este aspecto, un acto discrecional, sin desmedro que, cualquiera sea la fecha en que se
disponga, éste debe ordenarse desde la data en que se produzca la vacante (5086191 ).
La circunstancia que la ley no establezca un plazo dentro del cual deban proveerse los cargos
vacantes, no significa que la autoridad pueda suspender indefinidamente la materialización de una
promoción, porque ello atenta contra la carrera funcionaria consagrada en la Constitución Política
y en la ley 18575, uno de cuyos elementos básicos lo constituye el derecho al ascenso que la
estructura y sustenta. Por lo tanto, el retardo en disponer un ascenso debe obedecer a causas
fundadas y la dilación no puede prolongarse más allá de un plazo razonable y prudente (5040197,
31892101' 21660102).
Si bien los ascensos pueden excepcionalmente ser invalidados por la misma autoridad que los
dispuso cuando adolecen de vicios de legalidad o descansan en antecedentes irregulares, no pueden
dejarse sin efecto ni aún por esas causas cuando ellos han producido todas sus consecuencias
legales respecto de terceros, ya que la invalidación de los actos reglados tiene una limitación en la
necesidad de mantener las situaciones jurídicas originadas a su amparo (11408191, 44230105).
Antes de disponerse los ascensos es necesario ordenar las promociones en las plazas vacantes de
cargos intermedios a contar de la fecha en que se produjeron (24267194).
Procede llamar a conC!Jrso público para proveer vacantes que no pudieron llenarse mediante
ascenso, al no existir al momento de producirse aquéllas funcionarios que cumplieran los requisitos,
considerando que cualquiera sea la fecha en que se disponga el ascenso, éste debe ordenarse a
partir de la data en que se originó la vacante, con sujeción al escalafón y legislación vigente a esa
época (98/98, 14793/03).
Corresponde dictar una resolución rectificadora que enmiende un error en la fecha a partir de la
cual ha debido regir un ascenso, y adecue aquellos dispuestos con anterioridad, con el objeto de
conservar su estricto orden en la planta respectiva (9832/95).
Concordancias: Arts. 44, 45, 47 y 54 de la LOCBGAE; 3, letra a), 5, 14 y 53 al 58 del EA; 57 del
EAM.
Comentarios:
El artículo 59 contempla una ficción en cuya virtud los efectos del ascenso se retrotraen al momento
en que se produjo la vacante, cualquiera sea la oportunidad en que éstos se dispongan. Esta norma,
sin embargo, no es aplicable a otras modalidades de provisión de empleos, como ocurre, por ejemplo,
con los decretos y resoluciones que disponen nombramientos, los cuales sólo surten efectos hacia el
futuro, de acuerdo con las disposiciones que regulan la eficacia de esos actos administrativos.
ARTICULO 60.- Un Reglamento contendrá las normas Ley 19.882, Art. vigésimo
complementarias orientadas a asegurar la objetividad, séptimo, 19.
transparencia, no discriminación, calidad técnica y operación Ley 18.834, Art. 54 bis.
de los concursos para el ingreso, para la promoción y para
cualquiera otra finalidad con que éstos se realicen.
Interpretación:
La circunstancia de que en el comité de selección a que se refiere el artículo 12 del decreto W 69,
de 2004, del Ministerio de Hacienda, que aprueba el Reglamento sobre Concursos de Selección
del personal afecto al Estatuto Administrativo, no participe un representante del personal no implica
necesariamente que no se asegure la objetividad y transparencia de los respectivos procesos de
selección, como lo ordena el articulo 54 bis (actual articulo 60) de dicho cuerpo estatutario, puesto que
aquellas condiciones han quedado garantizadas por la normativa que regula el procedimiento común
a los concursos, contenida en el Párrafo 2° del Titulo 1 del mencionado reglamento. Allí se contienen
·diversas normas que permiten entender cumplida la aludida exigencia de garantía, como, por ejemplo,
aquellas que reiteran el carácter objetivo y técnico del proceso de selección; la obligación de que los
instrumentos de selección que se apliquen consideren una evaluación cuantificable y estandarizada,
que permita resultados comparables entre los postulantes, los que deberán contenerse en una pauta
escrita; la de establecer un sistema de puntajes para las evaluaciones e instrumentos aplicados y
de adoptar las medidas pertinentes para asegurar la objetividad, transparencia, no discriminación
e igualdad de condiciones entre los postulantes y el carácter técnico del certamen; así como el
establecimiento de inhabilidades para integrar el comité de selección (47497104).
Aunque el articulo 11 del decreto 69, de 2004, del Ministerio de Hacienda, Reglamento sobre
Concursos de Selección de Personal afecto al Estatuto Administrativo, señala que en cada concurso
deberán considerarse a lo menos los factores de estudios y cursos de formación educacional y de
capacitación; la experiencia laboral, y las aptitudes especificas para el desempeño de la función,
determinados previamente por la instituciñn, como asimismo, la forma en que serán ponderados
y el puntaje mínimo para ser considerado postulante idóneo, dicha latitud de la autoridad para fijar
las pautas de evaluación de los postulantes, no puede llegar a impedir, previamente, la opción al
certamen de quienes se encuentren en posesión de los requisitos que la ley define para el desempeño
del cargo, como ocurriría, por ejemplo, al establecerse requisitos no considerados por la legislación
vigente (48499106).
La autoridad administrativa, al imponer exigencias adicionales en los concursos, vulnera las garantías
individuales contempladas en el artículo 19, W 2, inciso segundo, y W 17 de la Constitución Política,
que impiden establecer diferencias arbitrarias, y aseguran la admisión a todas las funciones o
empleos públicos, sin otras exigencias que las que impongan la Carta Fundamental y las leyes,
como asimismo, el principio de juridicidad consagrado en los artículos 6 y 7 de la Ley Suprema. No
obstante, dicha autoridad sí está facultada para, al precisar los factores a ponderar, atribuir valoración
a aquellas circunstancias, características o aptitudes que respondan a las necesidades de las plazas
de que se trata, pero sin que llegue a configurarse la fijación de requisitos adicionales o diversos de
los previstos por el legislador (15951101, 48870105, 48499106).
Concordancias: Arts. 8, 17 al 23 y 53 al 59 del EA; decreto 69, de 2004, del Ministerio de Hacienda,
que aprueba Reglamento sobre Concursos del Estatuto Administrativo.
Comentarios:
El W 19 del articulo vigésimo séptimo de la ley 19882, agregó este nuevo articulo, relativo al
reglamento que debe contener las normas complementarias orientadas a asegurar el cumplimiento
de los aspectos que allí se señalan de los concursos para el ingreso, la promoción y cualquiera otra
finalidad con que éstos se realicen.
Título 111
De las O.bligaciones
Funcionarias
TÍTULO 111 De las Obligaciones Funcionarias 209
Párrafo 1°
Normas generales
ARTICULO 61.- Serán obligaciones de cada funcionario: Ley 18.834, Art. 55.
g) Observar estrictamente el principio de la probidad administrativa Ley 19.653, Art. s•, 2).
regulado por la ley 18.575 y demás disposiciones especiales;(*)(**)
k) Denunciar ante el Ministerio Público o ante la policía si no hubiere Ley 19.806, Art. 24.
fiscalía en el fugaren que el funcionario presta servicios, con la debida Ley 20.205, Art. 1•, 1).
prontitud, Jos crímenes o simples delitos y a la autoridad competente
Jos hechos de carácter irregular, especialmente de aquéllos que
contravienen el principio de probidad administrativa regulado por la
ley N" 18.575;
(*)El DFL 1/19653, de 2000, del Ministerio Secretaria General de la Presidencia, fijó el texto refundido, coordinado
y sistematizado de la ley 18575, Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración del Estado.
(**) Debe tenerse presente que esta letra fue corregida como aparece en el texto, conforme a lo ordenado por
el dictamen W 31.250, de 2005.
Interpretación:
Letra a)
Ausentarse del Servicio, sin causa justificada, constituye una grave infracción a los deberes. que
corresponde cumplir a todo funcionario público y una transgresión a la obligación de desempeñar el
empleo en forma permanente (30302/89, 15349/01, 32669/05).
Es improcedente ordenar que los servidores públicos desempeñen funciones que no sean propias del
cargo que ocupan, a menos que se trate de comisiones de servicios o encomendaciones especiales,
debiendo analizarse el cumplimiento de esta exigencia en cada caso en particular (17440/93,
47944/06, 46645/07).
El desarrollo de la curaduría de un menor que el Juez de Familia puede encargar a algún abogado de
un organismo de la Administración del Estado en virtu<J del articulo 19 de la ley 19968, no constituye
el desempeño de labores propias del cargo público para el cual dicho servidor fue contratado o
designado. Por tanto, las funciones que la ley ha entregado al Servicio Nacional de Menores, y que
pueden significar la representación de un menor ante los Tribunales de Justicia, deben ser asignadas
al funcionario en particular por el propio Servicio, y sólo en ese caso el desarrollo de tales funciones
por parte del servidor, puede considerarse como una función propia del cargo público que aquél
ocupa (43513/06).
Para que los servidores públicos cumplan sus funciones y desempeñen personalmente el cargo
en forma regular y continua, es indispensable que el empleador provea las condiciones materiales,
laborales y humanas necesarias para su desarrollo (28477/06).
Constituye un vicio de legalidad insubsanable, que impide otorgar validez al proceso calificatorio de
un funcionario, la circunstancia que aquél se haya desarrollado sobre la base de evaluar desempeños
ajenos a las funciones del cargo (31259/99, 20552/00, 13651/06).
Las facultades objeto de la delegación deben ser determinadas y específicas, como lo dispone
expresamente la letra a) del artículo 43 (actual artículo 41) de la ley 18575. El acto de delegación del
ejercicio de las atribuciones, por consiguiente, debe fijar con precisión las materias que se trasladan
a otra u otras autoridades (15745/82, 20338/87).
Conforme al articulo 43 (actual articulo 41 ), letra d), de la ley 18575, la responsabilidad del delegado
es sin perjuicio de la del delegante, por negligencia en el cumplimiento de sus obligaciones de
dirección o fiscalización (38125/88).
Un servidor no puede delegar la totalidad del ejercicio de sus atribuciones, pues contravendría la
obligación que tiene cada funcionario de desempeñar en forma personal las tareas que le corresponde
ejecutar (2575/05).
Es improcedente disponer en el acto de delegación que los delegatarios estarán autorizados para
delegar el ejercicio de las atribuciones que se les encomiendan, toda vez que de acuerdo con los
artículos 32 y 43 (actuales artículos 35 y 41) de la ley 18575, las facultades ejercidas por aquéllos no
son susceptibles de ser delegadas (18516/87, 19184/88).
Según la Resolución 520, de 1996, de la Contraloria General, están afectas a toma de razón sólo
aquellas delegaciones del ejercicio de atribuciones o de firma que incidan en materias sometidas
a dicho trámite, por lo que procede la delegación mediante resoluciones exentas, en la medida
que ellas no digan relación eón materias que se encuentran afectas al control previo de legalidad
(2575/05).
Concordancias: Arts. 5, inciso primero, 7, 11, 35, 41 y 46, inciso tercero, y 62, N" 4, de la LOCBGAE;
65, 73, 74, 75, 76, 77 y 78 del EA.
Letra b)
Cada empleado, junto con cumplir a cabalidad las tareas que son propias del cargo que desempeña,
debe también orientar el desarrollo de sus labores al cumplimiento de los objetivos que la ley impone
a la respectiva institución a que pertenece y a la mejor prestación de los servicios que a ésta le
corresponden. De esta manera, procede que la Jefatura Superior disponga que algunos de sus
funcionarios asistan a la ceremonia institucional que se ha organizado con motivo de su aniversario,
toda vez que ella comprende actividades que dicen relación con el conocimiento integral de las
funciones de la entidad. No obstante, atendido el principio de la continuidad del servicio público,
es improcedente obligar a todos los empleados de la institución a asistir a los actos señalados,
puesto que según ese principio, las prestaciones que deben otorgar los organismos públicos en el
cumplimiento de sus fines, deben ser permanentes e ininterrumpidas, lo que se veria afectado si se
dispone que todos los servidores asistan simultáneamente a una determinada ceremonia durante la
jornada de trabajo (19951/95).
Para que los servidores públicos den cumplimiento a los objetivos institucionales y a la mejor
prestación de los servicios, el empleador debe proveer las condiciones materiales, laborales y
humanas necesarias para el desempeño de sus labores (28477/06).
Letra e)
La información errónea proporcionada por una matrona acerca del resultado de un examen de
sangre que practicara en una institución hospitalaria, al expresar verbalmente al interesado que
correspondía a VIH (Sida) positivo, en circunstancias que éste arrojó positivo para Hepatitis C,
constituye un hecho de marcada gravedad, por cuanto con ello no sólo se ha transgredido el artículo
55 (actual artículo 61), letra e), del Estatuto Administrativo, al no realizar sus labores con esmero,
dedicación y eficiencia, sino que hubo un serio perjuicio a la imagen del Servicio y un evidente daño
psicológico al afectado. Tal conducta debe ser sancionada con una medida disciplinaria drástica, que
guarde proporción con el daño provocado (35532/00).
Para que los servidores públicos cumplan sus labores con esmero, dedicación y eficiencia, el empleador
debe proveer las condiciones materiales, laborales y humanas necesarias para desempeñar el cargo
(28477/06).
Concordancias: Arts. 3, 53 y 62, W 8, de la LOCBGAE; 84, letra e), del EA; decreto 680, de 1990, del
Ministerio del Interior, que aprueba instrucciones para el establecimiento de oficinas de información
para el público usuario en la Administración del Estado.
Letra d)
Corresponde a las Jefaturas de los Servicios Públicos, con la asesoría de la oficina de personal
correspondiente, establecer los sistemas de control horario que estimen necesarios respecto del
personal de su dependencia, para verificar las inasistencias o atrasos (2989/67, 30490/89, 20401/93,
19197/99, 10587/01, 41762/06).
Los funcionarios deben desarrollar una jornada de trabajo de 44 horas semanales, distribuidas de
lunes a viernes. Luego, el día sábado es inhábil para los efectos del Estatuto Administrativo, y por
ende, el trabajo efectuado en ese día tiene el carácter de extraordinario. Es inhábil, asimismo,
para el otorgamiento de los permisos con goce de remuneraciones (31726/89, 26384/90, 8718/91,
26693/91 ).
Para que los servidores públicos den cumplimiento a la jornada de trabajo y a los trabajos
extraordinarios que se ordenen, el empleador debe proveer las condiciones materiales, laborales y
humanas necesarias para el desempeño de sus labores (28477/06).
No se ajusta a derecho que un Jefe de Servicio establezca una jornada semanal de trabajo de martes
a sábado, ya que ella ha sido expresamente establecida en la ley, de lunes a viernes (208/94).
Es improcedente que el jefe de un servicio distribuya la jornada de trabajo desde las 8:30 a 13:00 y
de 14:15 a 17:45 horas, durante cinco días de la semana, ya que el sistema de jornada única de
trabajo sólo permite imputar a aquélla la interrupción de 30 minutos para tomar alimentos, en las
ciudades y actividades aludidas en el decreto 1897, de 1965, del Ministerio del Interior. De este
modo, el personal de ese servicio sólo trabaja 8 horas 30 minutos al día, en circunstancias que,
conforme al artículo 59 (actual artículo 65) de la ley 18834, la jornada diaria debe ser de 8 horas
con 48 minutos, treinta de los cuales, corresponden al tiempo otorgado para que los funcionarios
tomen su colación, por lo que, forman parte integrante de dicha jornada y son de cargo del respectivo
empleador (22123/94).
Conforme a los artículos 55 (actual artículo 61 ), letra d), y 66 (actual artículo 72) de la ley 18834, es
obligación de los funcionarios cumplir el horario de trabajo, pudiendo su inobservancia castigarse
con la medida disciplinaria de destitución en caso que esta fuere injustificada, procediendo además
el descuento de las remuneraciones por el tiempo no trabajado. De este modo, el funcionario que
desempeña efectivamente sus servicios dentro del horario determinado por la superioridad y no
obstante ello no cumple los sistemas de control horario fijados para ese fin, no infringe las obligaciones
contenidas en las normas citadas y, por ende, no procede efectuarle descuentos ya que éste es
aplicable sólo por el tiempo no trabajado. Con todo, el incumplimiento de los sistemas de controles
horarios fijados por la autoridad, aun cuando se desempeñe la jornada habitual completa, constituye
una infracción a la obligación del artículo 55 (actual artículo 61 ), letra f), del Estatuto Administrativo,
esto es, obedecer las órdenes impartidas por el superior jerárquico, la cual puede sancionarse,
conforme a los artículos 114 (actual artículo 119) y siguientes de este mismo ordenamiento, con el
propósito de hacer efectiva la responsabilidad administrativa que corresponda (15458/92, 19550/01,
30677/02, 29928/05).
No se advierte inconveniente jurídico alguno para que un Servicio implemente un sistema de control de
asistencia biométrico del cual queden excluidos ciertos funcionarios, los que, en todo caso, deberán
regirse por otro mecanismo de fiscalización horaria. Ello, porque corresponde a las jefaturas de los
organismos públicos determinar el método que estimen conveniente para verificar el cumplimiento
de la jornada de trabajo de sus empleados. Tal atribución permite a la autoridad superior fijar diversos
sistemas de control de asistencia y también precisar las distintas categorías de empleados que,
atendida la naturaleza de las funciones que desempeñan, han de quedar incluidos en uno u otro. Por
ello, debe establecerse otro mecanismo objetivo de registro de asistencia para el personal marginado
del sistema de control biométrico en razón del carácter de sus tareas, no únicamente de la jerarquía
que poseen. Lo anterior, considerando que no es posible aplicar un mecanismo de control horario
al que quede sujeto sólo un grupo de servidores, eximiendo de todo tipo de fiscalización a otros,
ya que ello constituiría una discriminación arbitraria, pues todos los funcionarios se encuentran en
la obligación de cumplir la jornada de trabajo y de ejercer permanentemente su cargo (9506/97,
37191/00, 20246/01' 29928/05).
Concordancias: Arts. 62, W 4, de la LOCBGAE; 61, letra f), 65, 66, 67, 68, 69, 70, 71, 72, 84, letra
g), 88 y 98, letra e), del EA.
Letra e)
Según los artículos 61, letra e), y 73 de la ley 18834 y 46 de la ley 18575, las autoridades están
facultadas para destinar a los funcionarios de su dependencia, a cualquier unidad u oficina de la
institución, siempre que se trate de funciones propias del cargo que ocupan y de igual jerarquía, sin
que tal decisión pueda ser revisada por la Contraloria General de la República (2125/07).
La comisión de servicio, de conformidad con lo previsto por los artículos 61, letra e), y 75, de la ley
18834, constituye una obligación del empleado mediante la cual se desempeñan funciones ajenas
al cargo (36762/06).
Un funcionario no puede excusarse de cumplir una destinación ordenada por la Jefatura del Servicio
si ésta cumple con las condiciones que la hacen procedente, encontrándose obligado a asumir las
nuevas funciones (1897/01, 12154/01, 27803/06).
Una funcionaria debe cumplir la destinación dispuesta en otra dependencia del organismo, en la que
no se produzca relación jerárquica directa o indirecta con su hermano ingresado al Servicio como
su superior jerárquico, sin que a ello obste el que deba cambiar su residencia (9173/01, 4996/02,
8481/03).
Los funcionarios públicos pueden ser designados en comisiones de servicio, siempre que aquéllas
no signifiquen el desempeño de funciones de inferior jerarquía a las del cargo, o ajenas a los
conocimientos que éste requiere o al servicio público (34009/94, 12674/96, 52397/04, 54287/05).
Un empleado no puede quedar, en virtud de una comisión de servicio, bajo la dependencia de otro
de inferior jerarquía, toda vez que ello además de infringir el articulo 75 del Estatuto Administrativo,
vulnera el principio de la jerarquía funcionaria, que constituye la base fundamental en que descansa la
organización y funcionamiento de los servicios públicos (27422/99, 47387/99, 21046/05, 54287/05).
Dado que es una obligación funcionaria cumplir las destinaciones que disponga la autoridad
competente, si un servidor se niega a desempeñar las tareas inherentes al empleo en el cual ha
sido designado o lo hace incumpliendo sus deberes y obligaciones, debe investigarse y hacerse
efectiva la responsabilidad administrativa que de ello se derive, mediante la instrucción del respectivo
procedimiento disciplinario (20552/00).
La autoridad administrativa está facultada para disponer, una vez provistos los empleos por las
vías legales pertinentes, ciertas medidas que fijen y especifiquen el lugar en que deben ejercer o
continuar ejerciendo sus cargos los servidores de su dependencia, ya sea de manera permanente o
transitoria. Tales actos administrativos pueden conllevar el desplazamiento de los empleados de la
oficina en que se desempeñan habitualmente o bien la obligación de efectuar ciertas labores, dando
origen a las destinaciones, comisiones y cometidos funcionarios (26031/01, 54287/05).
Concordancias: Arts. 46, 54, letra b), y 64 de la LOCBGAE; 73, 74, 75, 76, 77 y 78 del EA; 25 de
la Ley 19296, que estableció normas sobre Asociaciones de Funcionarios de la Administración del
Estado.
Letra f)
De acuerdo con el articulo 56 (actual articulo 62) del Estatuto Administrativo, es obligación de un
funcionario público obedecer las órdenes emanadas de un superior jerárquico y si aquél estima
que es ilegal un mandato impartido por éste, debe representarlo por escrito y si el superior reitera
la orden en igual forma, el funcionario deberá cumplirla, quedando exento de toda responsabilidad,
la cual recaerá por entero en el superior que la hubiere insistido. Copias de las comunicaciones
que representen la orden como de la que la reitera, deberán ser enviadas a la Jefatura Superior
respectiva dentro del plazo de cinco días contado desde la fecha de esta última comunicación
(21719/99, 12154/01' 958/02).
Los funcionarios que no asistan a una actividad realizada con motivo del aniversario del Servicio
habiéndolo dispuesto la autoridad pertinente, pueden ser sancionados de la misma forma en que
lo serian por el incumplimiento de cualquier otra obligación que emane de su calidad de servidores
públicos (19951/95).
El funcionario que desempeña efectivamente sus servicios dentro del horario determinado por la
superioridad y no obstante ello no cumple los sistemas de control horario fijados para ese fin, no
infringe las obligaciones del articulo 55 (actual articulo 61), letra d), y 66 (actual articulo 72) del
Estatuto Administrativo. Sin embargo, esa conducta vulnera la obligación de obedecer las órdenes
impartidas por el superior jerárquico, pudiendo sancionarse conforme a los artículos 114 (actual
articulo 119) y siguientes, para hacer efectiva la responsabilidad administrativa correspondiente
(15458/92, 26782/99,47959/99,5902/00, 19550/01, 22374/04, 29928/05).
Los auxiliares que desempeñan labores de portería en un hospital, deben cuidar no sólo los bienes
pertenecientes al Servicio sino que también los vehículos particulares, de directivos y médicos del
establecimiento asistencial, mientras estén estacionados en el área destinada a ese fin en el recinto.
Así, en la medida que los vehículos de los trabajadores estén dentro del recinto institucional, en virtud
de una autorización expresa del Jefe Superior, los servidores que por su cargo estén al cuidado del
lugar, velarán por la integridad de los bienes, pues ello implica el cumplimiento de labores propias
de su empleo, como es el evitar la ocurrencia de hechos indebidos en dependencias de la entidad
(28849/00).
Letra g)
Los profesionales funcionarios que integran las Comisiones de Medicina Preventiva e Invalidez
pueden ejercer privadamente su profesión al no existir en la normativa que fija las atribuciones de
aquéllas precepto alguno que se los impida, pero están inhabilitados para formar parte de tales
cuerpos colegiados cuando éstos deban pronunciarse respecto de las licencias emitidas por sus
miembros como médicos tratantes en el ejercicio particular. Ello, porque las Comisiones de Medicina
Preventiva e Invalidez tienen autonomía para emitir resoluciones, dictámenes e informes en los
asuntos de su competencia, independencia que no existiría si los médicos que las integran se
pronunciaran sobre las licencias emitidas por ellos mismos en el ejercicio privado de la profesión.
Mas aun, dicha circunstancia estaría reñida con el principio de probidad administrativa, el cual exige
que el servidor haga prevalecer el interés publico sobre el particular (16526/90, 26154/98).
Procede aplicar la medida disciplinaria de destitución a una funcionaria que solicitó y obtuvo una
cédula de identidad con fecha e inscripción de nacimiento incorrectas, basandose en antecedentes
falsos, documento que utilizó a sabiendas por más de tres años sin efectuar gestión alguna para
subsanar la irregularidad. Ello vulnera el principio de probidad administrativa, por cuanto no ha
habido en este caso una conducta funcionaria intachable ni un desempeño honesto y leal de la
función o cargo (25346/91 ).
Corresponde que se sancione con la medida de destitución a un funcionario del Servicio de Impuestos
Internos a quien, en el respectivo sumario administrativo, se le ha comprobado que registró más
de 50.000 consultas al Sistema de Información Integrada del Contribuyente (SIIC), lo que no dice
relación con las funciones que cumple en el Servicio de Bienestar, dependiente de la Subdirección
de Recursos Humanos (47561/06, 1422/07).
Los funcionarios públicos pueden prestar servicios a honorarios en otros entes estatales de acuerdo
con la norma contenida en el articulo 81 (actual articulo 87), letra b), de la ley 18834, siempre que
esos desempeños no afecten el principio de probidad administrativa (4456/92, 31379/97).
La conducta del Contralor Interno de una universidad estatal, quien modificara frase de resolución
emanada del Rector aprobatoria de un acuerdo de la Junta Directiva, acción que redundaría en su
beneficio personal, por cuanto quedó en condiciones de ser encasillado en la planta del personal
académico, transgrede el principio de probidad administrativa y, por ende, amerita la medida
disciplinaria de destitución (14420/93).
principio de probidad administrativa, que se aplica cualquiera sea el vinculo jurídico que una a los
servidores públicos con la Administración (29309/94, 36050/95).
De acuerdo con el articulo 5 de la ley 19296, el desempeño de un empleo público no puede verse
afectado por la calidad de Director de una Asociación de Funcionarios que posea la persona que
lo ocupa y sólo se producirá una vulneración al principio de probidad administrativa si ese servidor,
con su conducta, incurre en las acciones a que alude el articulo 55 (actual articulo 61), letra g), en
armonía con el articulo 7 (actuales artículos 13 y 52 y siguientes) de la ley 18575. De este modo,
si en el cumplimiento de la función pública un dirigente gremial tiene el convencimiento que puede
producirse un conflicto de intereses, debe dar preeminencia con su conducta al interés público por
sobre el organismo gremial al que pertenece (24156/96, 23541/00).
Corresponde solicitar los antecedentes comerciales y financieros de los funcionarios públicos para
considerarlos en el proceso de calificaciones, puesto que la probidad administrativa que deben
observar aquéllos se relaciona con el cumplimiento de las obligaciones económicas (13388/96,
11964/98).
El deber del Estado de estar al servicio de la persona humana y de promover el bien común, contenido
en el inciso cuarto del articulo 1 de la Constitución Política, debe ser cumplido sobre la base, entre
otros, del principio de probidad. El deber de probidad es de aplicación general, por cuanto afecta a
todas las conductas funcionarias que puedan ocasionar perjuicio al Estado o que de una manera u
otra permitan que el interés individual o particular prime por sobre el de la sociedad o comunidad.
Por consiguiente, ciertas actividades particulares relacionadas con el ejercicio de la profesión de
arquitecto, no pueden ser desarrolladas por quienes se desempeñan en una Unidad de Desarrollo
Urbano e Infraestructura de una Secretaria Regional Ministerial de Vivienda, dentro del territorio en
que esta última ejerce sus competencias, pues ello afecta el principio de probidad administrativa, en
la medida que las funciones de esa Unidad se relacionan con la supervigilancia de organismos que,
a su vez, tienen injerencia en la resolución de materias propias del ejercicio privado de la aludida
profesión (44468/98, 4771/99, 28417/99).
De acuerdo con el principio de probidad administrativa, los funcionarios públicos no pueden adquirir
bienes de la entidad a la que pertenecen cuando se trata de ventas que tienen un carácter habitual y
de orden masivo, autorizadas por leyes especiales, pues ello podría significar la preeminencia de los
intereses personales de estos servidores por sobre los intereses del Fisco (40839/99).
Es improcedente alegar que las disposiciones sobre probidad administrativa, incorporadas por la
ley 19653 a la ley 18575, no se aplican a conductas realizadas con anterioridad a su vigencia,
puesto que el principio de probidad administrativa estaba contemplado tanto en la citada ley 18575,
desde su dictación, como en el decreto con fuerza de ley 338, de 1960, y en la ley 18834, anterior
y actual Estatuto Administrativo, respectivamente. De esta manera, la ley 19653, sólo sistematizó y
generalizó ese principio en la Ley Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración
del Estado (7859/01).
La aplicación de la medida disciplinaria de multa del veinte por ciento de sus remuneraciones a un
funcionario que se apropió de dineros entregados por estudiantes extranjeros para su matricula en
una universidad nacional, no resulta proporcional a la gravedad de las faltas imputadas, ya que
ellas constituyen no sólo una falta a la probidad administrativa, sino que a la vez un delito ministerial
(34372/93).
La aplicación de la medida disciplinaria de suspensión del empleo, con goce del cincuenta por
ciento de su remuneración a un funcionario que valiéndose de su cargo obtuvo subsidios sin reunir
los requisitos exigidos para su otorgamiento, irregularidad agravada por la circunstancia de haber
liberado fondos desde la agencia bajo su dependencia y traspasados a otra con el fin de asegurarse
el pago del citado beneficio, no guarda relación con la gravedad de los hechos objeto del sumario
administrativo, ya que su conducta transgredió gravemente el principio de probidad administrativa.
Este obliga a los servidores públicos, en el ejercicio de sus funciones, a priorizar en todo momento el
interés público por sobre el privado, desempeñándose con objetividad, imparcialidad y transparencia
en su gestión y evitando que sus prerrogativas o esferas de influencia se proyecten en su ámbito
particular (7859/01 ).
Un Juez de Policía Local en el ejercicio libre de su profesión de abogado debe observar el principio
de probidad administrativa en su calidad de funcionario público, no pudiendo tener participación en
asuntos que deban ser resueltos por el Servicio a que pertenece o sujetos a su fiscalización. No es
licito tampoco que defienda causas ante los Tribunales Ordinarios o Administrativos en que exista la
posibilidad que se condene pecuniariamente a un organismo público, o en las que la contraparte sea
un Servicio de la Administración (6960/86, 32498/94,34377/99, 19133/00).
Una funcionaria de una Universidad estatal está inhabilitada para oponerse a la licitación a que ésta
llamara para entregar la administración de una cafetería. Ello, porque la libertad para ejercer las
actividades de que trata el articulo 87 de la ley 18834 (precepto actualmente derogado, pero cuyo
contenido fue reproducido en el articulo 56 de la ley 18575), se encuentra limitada por el amplio
principio de la probidad administrativa contemplado en los artículos 7 (actuales artículos 13 y 52 y
siguientes) de la ley 18575 y 55 (actual artículo 61), letra g), de la citada ley 18834, disposiciones
que imponen a los funcionarios públicos el deber de evitar que sus prerrogativas o esferas de
influencias se proyecten en sus intereses particulares, lo que puede darse con facilidad cuando estas
últimas se relacionan directa o indirectamente con facultades propias o anexas de la repartición a
la cual pertenece el servidor. Así, la circunstancia que dicha servidora haya desarrollado labores
profesionales en el casino central de la Universidad y, posteriormente, se le asignara la jefatura de la
sección casino, constituye un factor que puede atentar contra la imparcialidad y objetividad que debe
imperar en los procesos que sirven de base a una licitación, al poder afectarse la independencia con
que la autoridad debe resolverlas (28267/96).
Existe incompatibilidad entre el cargo de Jefe de Departamento de Técnica Tributaria del Servicio
de Impuestos Internos y la contratación a honorarios en el Comité de Inversiones Extranjeras, ya
que este Comité puede requerir el pronunciamiento de ese Servicio acerca de materias tributarias
aplicables a los inversionistas extranjeros, lo que implica que las actuaciones del interesado pueden
quedar sometidas a la revisión o resolución de dicho Comité, existiendo una estrecha vinculación
entre las funciones de ambas entidades, produciéndose un conflicto potencial de intereses que
alteraría la imparcialidad e independencia del servidor en su función pública (7775/00).
Procede aplicar la medida disciplinaria de destitución a un funcionario del Servicio de Registro Civil
e Identificación, que sometía a tramitación innecesaria documentos de eliminación de antecedentes,
cobrando por ello (30036/00).
Los funcionarios del Servicio Agrícola y Ganadero, del Instituto de Desarrollo Agropecuario y del
Ministerio de Agricultura no pueden postular a la franquicia pecuniaria consistente en una bonificación
estatal contemplada en el sistema de incentivos para la recuperación de suelos degradados, cuya
aprobación les corresponde de acuerdo con el DFL 235, de 1999, del Ministerio de Agricultura, ya
que el derecho al libre ejercicio de toda profesión, industria, comercio u oficio, establecido en el
artículo 58 (actual artículo 56), inciso primero, de la ley 18575, está limitado por la incompatibilidad
que existe entre el ejercicio de la función pública y las actividades particulares de las autoridades
o empleados referidas a materias específicas o casos concretos que deban analizar, informar o
resolver ellos o el organismo a que pertenecen, consultada en el inciso tercero de esa misma norma,
en otras palabras, por el principio de probidad administrativa (45287/00, 10890/01).
Es improcedente que los examinadores internos del Departamento de Propiedad Industrial del
Ministerio de Economía, Fomento y Reconstrucción, actúen en la tramitación de las solicitudes
de privilegios industriales requeridos a esa entidad, como peritos externos, elaborando informes
remunerados por el interesado. Lo anterior, por cuanto el principio de probidad administrativa obliga
a todo funcionario a priorizar el interés público por sobre el privado, actuando con objetividad,
imparcialidad y transparencia en su gestión. El desarrollo de la labor de examinador interno y perito
externo respecto de solicitudes de privilegio industrial, vulnera aquella máxima, pues ambas labores
inciden en solicitudes tramitadas en la misma unidad, careciendo de la debida independencia quien
cumple ambas funciones. Ello lo confirma el legislador, quien en estos casos previó la participación
de personas diversas a fin de obtener opiniones independientes (761/99, 34591/99).
Ha procedido aplicar la medida disciplinaria de destitución a funcionarias del Servicio de Registro Civil
e Identificación al haberse demostrado que suministraron a otra empleada del servicio, información
reservada contenida en fichas índices para ser entregada a un tercero ajeno a la institución, sin estar
autorizadas para ello, por tratarse de conductas que vulneran el principio de probidad administrativa
(35198/05).
La destitución debe aplicarse también por la comisión de infracciones administrativas que afecten
gravemente el principio de probidad administrativa consagrado en los artículos 62 de la ley 18575
y 55 (actual articulo 61) letra g) de la ley 18834, aunque el Tribunal de Garantía haya decretado
el sobreseimiento definitivo de la causa y la extinción de la responsabilidad penal del imputado
(16115/04).
No procede aplicar la medida disciplinaria de multa a funcionario por haber adulterado una boleta de
compraventa, pues dicha falta constituye una manifiesta contravención al deber de probidad, según
lo establece el articulo 61, letra g), de la ley 18834 y, además, porque podría constituir un delito
(33503/05).
Concordancias: Art. 8, inciso primero, de la CP de laR; 13 y Título 111 de la LOCBGAE; 61, letra k),
90A, 908, 125, inciso segundo, y 139, inciso final del EA; ley 19653, que establece normas sobre
probidad administrativa aplicables a los órganos de la Administración del Estado; ley 19645, que
modifica disposiciones del Código Penal que sancionan delitos de corrupción; Dtos. 1215, de 2006,
del Ministerio del Interior, que aprueba el reglamento que establece normas que regulan las medidas
de prevención del consumo de drogas en los Órganos de la Administración del Estado, así como
el procedimiento de control de consumo aplicable a las personas que indica; 1879, de 1998, del
Ministerio de Relaciones Exteriores, Promulga la Convención lnteramericana contra la Corrupción;
375, de 2006, del Ministerio de Relaciones Exteriores, Promulga la Convención de las Naciones
Unidas contra la Corrupción; 496, de 2001, del Ministerio de Relaciones Exteriores, Promulga la
Convención para Combatir el Cohecho a Funcionarios Públicos Extranjeros en Transacciones
Comerciales Internacionales y su Anexo.
Letra h)
otros pronunciamientos en favor de esa empresa. Ello, porque conforme al artículo 11 bis (actual
artículo 13) de la ley 18575, la función publica debe ejercerse con transparencia, promoviendo y
permitiendo el conocimiento de los procedimientos, contenidos y fundamentos de las decisiones
adoptadas en su ejercicio. Si bien una petición de dictamen o de reconsideración ante el referido
Organismo Contralor no es un acto administrativo decisorio, ello no significa que con arreglo a esa
norma los demás actos de la Administración sean secretos, pues no puede entenderse, en el marco
del principio de transparencia, que la finalidad de la ley haya sido dar tal carácter a los restantes
actos de la Administración. Además ese principio no se circunscribe exclusivamente a los actos
administrativos, sino que afecta a toda la gestión administrativa. La Administración activa está
obligada a entregar copia de documentos a un particular que lo requiera, siempre que éstos no se
refieran a asuntos reservados, dado que acorde con el artículo 55 (actual artículo 61), letra h), los
funcionarios publicas deben guardar secreto en los asuntos calificados de reservados de acuerdo
con la ley, el reglamento, su naturaleza o por instrucciones especiales, y que la información contenida
en el antecedente solicitado afecte directamente al particular o se vincule con situaciones fácticas
concretas en que le corresponda intervenir (35259/00, 49883/04, 15643/07).
Conforme a la ley 17374, artículos 29 y 30, el secreto estadístico alcanza a los organismos
fiscales, empresas del Estado y a cada uno de sus respectivos funcionarios (30790/89, 49492/99,
13693/06).
La obligación de los funcionarios de guardar secreto que exige este precepto, rige plenamente
respecto del cometido de los miembros de la Junta Calificadora, conforme a las disposiciones que la
norman (28977/93, 550/00).
Las normas de los artículos 29 de la ley 17374 y 181, letra e), del decreto 42, de 1986, del Ministerio
de Salud (decreto que fue derogado por el decreto 140, de 2004, del Ministerio de Salud) y Resolución
Exenta 926, de 1989, de esa Secretaría de Estado, confieren el carácter de confidencial a los datos
contenidos en las fichas médicas de pacientes de hospitales y constituyen una manifestación de la
garantía constitucional sobre derecho a la honra y a la vida privada de la persona y de su familia,
establecida en el artículo 19, N' 4, de la Constitución Política (30822/98).
La obligación de reserva del Servicio Médico Legal respecto de las pericias que realice, no se vulnera
por la entrega a un instructor de una investigación sumaria efectuada por uso indebido de vehículo
fiscal, del informe de alcoholemia del funcionario que conducía el móvil, dado que segun los artículos
55 (actual artículo 61) letra h), y 131 (actual artículo 137) de la ley 18834, quienes sustancien una
investigación sumaria por infracción al decreto ley 799, de 1974, deben guardar la debida reserva
(14754/00).
El Fondo Nacional de Salud, dentro de la labor de fiscalización que le es propia, puede exigir a los
profesionales o entidades inscritos en la modalidad de libre elección la presentación de información
técnica o administrativa en respaldo del otorgamiento de las prestaciones y que le permitan
verificar que aquéllas fueron realizadas por los profesionales que requieren su pago, incluidas la
información reservada contenida en fichas médicas, siempre que sea necesario y manteniéndose la
confidencialidad respecto de la información por el funcionario fiscalizador (8531/01, 26108/02).
Letra i)
Observar una vida social acorde con la dignidad del cargo significa que la calidad de servidor público
no sólo obliga al correcto desempeño de las actividades propias del respectivo empleo y de aquellas
a que se acceda en virtud de tal calidad, sino que también afecta al comportamiento privado que
pudiere significar, entre otras consecuencias, desprestigio del Servicio o faltar a la lealtad debida a
sus jefaturas, a sus compañeros y a la comunidad (10086/00, 599/04).
Este precepto no regula la conducta estrictamente privada de los funcionarios públicos ni los
efectos que este comportamiento pudiera tener en su vida individual o famHiar, salvo cuando ellas
afecten o trasciendan a la vida social y entren a comprometer el prestigio del Servicio, por lo que
tales comportamientos no pueden por sí solos ser considerados como fuentes de responsabHidad
administrativa ni afectar la evaluación funcionaria (11964/98).
Constituye una infracción al artículo 154 del DFL 338, de 1960 (que corresponde a la letra i) del
articulo 55 (actual articulo 61) de la ley 18834), el no pago oportuno de las deudas contraídas por un
funcionario público (60148/70).
Concordancias: Art. 19, W 4, de la CP de la R; ley 20005, que tipifica y sanciona el acoso sexual;
ley 20066, que establece la Ley de Violencia lntrafamiliar.
Letra j)
Si bien los organismos públicos pueden solicitar determinados antecedentes a sus empleados, el
ejercicio de tal potestad debe estar vinculada al cumplimiento de las finalidades de la institución
respectiva y, en particular, al principio de probidad establecido en el artículo 8 de la Constitución
Política, que autoriza a losorganismosde laAdministración para requerir información a sus funcionarios
siempre que ella sea necesaria para resguardar dicho principio. Refuerza lo anterior, lo ordenado en
el articulo 61, letraj), de la ley 18834, por lo que, conforme a lo previsto en esta disposición legal, en
el mencionado precepto constitucional y de conformidad con el artículo 41 del DFL 7, de 1980, del
Ministerio de Hacienda, el Servicio de Impuestos Internos puede solicitar a sus funcionarios, cuando
existan antecedentes que lo ameriten, información relativa a su patrimonio y que no sea de aquella
a que se alude en el articulo 60 C de la ley 18575'(1 0083/00, 54442/03, 37762/07).
La norma consagrada en el artículo 41 del DFL 7, de 1980, del Ministerio de Hacienda, sobre
declaración de patrimonio de quienes ingresen al Servicio de Impuestos Internos, debe entenderse
complementada con la normativa que establece la declaración patrimonial a que se encuentran
afectos determinados funcionarios de la Administración y que está contenida en el Título 111 de la ley
18575. Considerando que dicho articulo 41 obliga a todos los funcionarios del Servicio de Impuestos
Internos, a efectuar la declaración referida, sin distingo alguno en cuanto al cargo que ellos ocupan, y
que la citada ley 18575, articulo 60 A, impone ese deber a determinadas autoridades y funcionarios,
según su jerarquía, sus disposiciones no resultan inconciliables con la norma indicada en primer
término y, por lo tanto, no se observa impedimento para exigir a los empleados del servicio ocurrente
la presentación de ambas declaraciones, de acuerdo con el cargo que posean. Asimismo, el aludido
articulo 41 no señala el contenido de la declaración a que él se refiere, por lo que en esta materia se
debe recurrir a lo que, sobre el particular, se dispone en el articulo 60 C de la mencionada ley 18575
(37762/07).
Letra k)
Corresponde a la superioridad del servicio arbitrar las medidas destinadas a poner en conocimiento
del Ministerio Público o ante la policía en su caso, los crímenes o simples delitos y a la autoridad
competente las hechos de carácter irregular, de acuerdo con la obligación impuesta en el artículo
61, letra k), del Estatuto Administrativo. Lo anterior es sin perjuicio de lo previsto en el inciso final
del artículo 139 del mismo cuerpo normativo, conforme al cual, cuando los hechos investigados y
acreditados en un sumario administrativo pudieren importar la perpetración de delitos, el informe
o vista fiscal deberá contener, también, la petición de que se remitan los antecedentes a la justicia
ordinaria (21394/90, 25149/91, 6241/93, 9181/95, 46031/98, 25965/00, 42027/00, 17063/01,
28771104, 48033/05, 1748/07).
Deben denunciarse al Ministerio Público los hechos investigados en un proceso disciplinario que
revistan caracteres de delito, siendo dicha diligencia obligatoria según lo dispuesto en los ·artículos
61, letra k) y 139, inciso final, de la ley 18834, independientemente que los afectados hayan reparado
el daño causado, correspondiendo a la instancia judicial, exclusivamente, calificar dicha materia
(38647/05).
Si un funcionario estima que las autoridades administrativas han cometido hechos que revisten
caracteres de delito, en lo que concierne a su situación funcionaria, debe recurrir directamente ante
los Tribunales de Justicia en la forma y condiciones prescritas por las normas que rigen esta materia
(19810/69).
De acuerdo con los artículos 139 de la ley 10.336, 175, letra b), del Código Procesal Penal y 55 (actual
articulo 61) letra k), del Estatuto Administrativo, en aquellos casos en que sea procedente, debe
efectuarse la denuncia correspondiente ante el respectivo fiscal del Ministerio Público, ya que con
ello se cumple con la obligación legal de efectuarla a la justicia ordinaria, finalizando la intervención
de la Contraloría General, toda vez que el respectivo procedimiento debe continuar ante el Ministerio
Público (27915/03, 18712/05).
Letra 1)
Por aplicación del artículo 68 de la ley 10336, es obligación de todo empleado que en razón de
sus funciones, se le ha entregado la recaudación, administración o custodia de fondos o bienes
del Estado, que componen el patrimonio del servicio, de rendir caución para asegurar el correcto
cumplimiento de sus deberes y obligaciones, sea que se desempeñe en calidad de titular, suplente
o subrogante (11308/92, 29536/07).
La caución dispuesta en el artículo 68 de la ley 10336 es una obligación de carácter general que
debe ser soportada en el patrimonio de todas aquellas personas que realicen a cualquier título y
en forma directa las tareas de manejo de recursos públicos descritas en dicho precepto legal, sin
importar si poseen o no la calidad de funcionarios públicos e inclusive, independientemente de que
perciban remuneración, dado que no está establecida en atención a la calidad de las personas,
sino que en forma exclusiva en consideración a la naturaleza de la función, esto es, en relación con
la ejecución de las tareas de recaudación, administración o custodia de bienes y fondos estatales
(12915/84, 28939/84,21978/85,23830/85,2510/88, 4821/90). Lo anterior, atendido que la finalidad
de dicha caución es propender eficientemente al resguardo del patrimonio del Estado frente a
eventuales perjuicios que aquél pueda sufrir como consecuencia de conductas dolosas o negligentes
del empleado a quien, en razón de sus funciones, se le ha entregado la custodia, administración o
recaudación de fondos o bienes que lo conforman, mediante un mecanismo que permite reparar
a la brevedad el daño ocasionado. Para hacer efectiva la caución basta que se haya producido
un menoscabo al patrimonio estatal (26835/86, 23469/91, 162/92, 7076/95, 48294/04, 26020/06,
29536/07, 7873/08). La jurisprudencia administrativa ha precisado las situaciones en las cuales
corresponde asumir el cumplimiento de la caución referida. Así, por ejemplo, a propósito del alcance
Las fianzas de fidelidad funcionaria que obedecen al fin especifico de asegurar el correcto desempeño
del personal en la custodia de los fondos o bienes confiados a su cuidado, sólo pueden hacerse
efectivas si en un sumario administrativo o investigación sumaria se sanciona al empleado por
infringir sus deberes sobre la materia (15044/97).
Concordancias: Arts. 68 y siguientes de la ley 10336, que fijó el texto refundido de la Ley de
Organización y Atribuciones de la Contraloria General de la República.
Letra m)
Es una obligación de cada funcionario justificarse ante el superior jerárquico de los cargos que se
le formulen con publicidad, dentro del plazo que éste le fije, atendidas las circunstancias del caso
(287/94).
Comentarios:
El Informe de la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno expresa que el texto de esta norma
contenido en el proyecto original del Ejecutivo se reordenó y perfeccionó desde el punto de vista de
una correcta técnica legislativa. De estas modificaciones se destacan las siguientes:
1) En su letra d), se agregó la obligación del funcionario de realizar los trabajos extraordinarios que
ordene el superior jerárquico.
2) Su letra g), se perfeccionó teniendo en cuenta lo dispuesto por el articulo 7 (actual articulo 52) de
la ley 18575.
3) Se agregó una letra i), que obliga al funcionario a observar una vida social acorde con la dignidad
del cargo, teniendo como antecedente lo señalado por el articulo 154 del DFL 338, de 1960, anterior
Estatuto Administrativo.
4) En su letra 1), se indicó que la fianza que debe rendir el funcionario en los casos que indica, se
haga "de conformidad con la Ley Orgánica Constitucional de la Contraloria General de la República",
a fin de dejar claramente establecido que se debe cumplir lo que dicha ley indique al respecto.
5) La Comisión Conjunta no consideró necesario incluir una norma que obligara al empleado a
atender esmerada y cortésmente al público en general, por estimar que ella se exige a través de las
letras e) y g) del texto que se propone.
Cabe destacar, en otro orden de ideas, que el énfasis en esta norma está puesto en el deber de ejercer
personalmente la función, obligación que debe realizarse en forma regular, continua y permanente
durante la jornada de trabajo. Estas obligaciones se proyectan a toda la vida del funcionario, desde
que está totalmente tramitado el decreto administrativo de nombramiento -o desde antes de esa
fecha en los casos excepcionales en que está permitida la asunción inmediata de funciones- hasta
la ocurrencia de una causal de cesación de funciones.
La jurisprudencia administrativa ha señalado que las obligaciones de los funcionarios se aplican por
igual a todos los empleados públicos.
ARTICULO 62.- En el caso a que se refiere la letra f) del artículo anterior, Ley 18.834, Art. 56.
si el funcionario estimare ilegal una orden deberá representarla por
escrito, y sí el superior la reitera en igual forma, aquél deberá cumplirla,
quedando exento de toda responsabilidad, la cual recaerá por entero
en el superior que hubiere insistido en la orden. Tanto el funcionario
que representare la orden, como el superior que la reiterare, enviarán
copia de las comunicaciones mencionadas a la jefatura superior
correspondiente, dentro de Jos cinco días siguientes contados desde
la fecha de la última de estas comunicaciones.
Interpretación:
Chofer de un servicio público debió representar por escrito la orden de su superior, cuyo cumplimiento
estimaba que le significaría incurrir en una infracción a las leyes del tránsito, dando origen a los
correspondientes partes. Ello, porque aunque el artículo 61, letra f), de la ley 18834 establece que
los funcionarios tienen la obligación de obedecer las órdenes impartidas por su superior jerárquico, el
artículo 62 del mismo texto, complementando ese imperativo, dispone que si el servidor estima ilegal
una orden ha de representarla por escrito y si el superior la reitera de igual forma tiene el deber de
cumplirla, pero queda exento de toda responsabilidad (39624/03).
Es improcedente acoger el rec 1amo el'> un funcionario en contra de las medidas disciplin2~ias dE'
separación y baja por mala conducta, aplicadas en un sumario administrativo por no haber cumplido
con dedicación y debido interés sus labores el día en que falleció en el cuartel de la institución un
delincuente habitual, permitiendo su inhumación al dar cumplimiento a una orden de características
ilegales, no obstante haber tenido la alternativa de representar su no comisión por escrito al superior
jerárquico directo (44385/94).
Los funcionarios deben cumplir las destinaciones, comisiones y cometidos funcionarios ordenados
por la autoridad conforme a lo señalado en los artículos 61, letras e) y f), de la ley 18834 y en los
principios generales que informan la gestión de los servicios públicos, según los cuales, corresponde
a dicha autoridad apreciar las circunstancias o razones que justifican una medida, siempre que ello
no signifique una arbitrariedad. En todo caso, si los afectados estiman ilegales dichas medidas,
deben representarlas por escrito, y si el superior la reitera en igual forma, deben cumplirla quedando
exentos de toda responsabilidad, la que recae íntegramente en el superior que insistió en la misma
(26031/01 ).
No procede reclamo de una funcionaria en contra de la rebaja de calificación de que fuera objeto por
no cumplir una orden de la superioridad en el sentido de asumir determinadas funciones, ya que si
estimó que esa orden no se ajustaba a derecho, debió representarla por escrito (12154/01).
Se ajusta a derecho registro de una anotación de demérito en la hoja de vida de funcionaria por
negarse a asumir las nuevas funciones que le fueron encomendadas en su Servicio, en razón de que
tales labores le producirían una excesiva carga de trabajo, puesto que no representó dicha orden
conforme a este articulo 62 (38764/06).
Concordancias: Arts. 7 y 11 de la LOCBGAE; 61, letra f), del EA; 59 del EAM.
Comentarios:
Este articulo, que se relaciona con la letra f) del articulo 61, el cual establece la obligación de
obediencia que pesa sobre todo funcionario público respecto de las órdenes que imparta su superior
jerárquico, consagra el principio de la obediencia reflexiva, según el cual el funcionario que estimare
ilegal una orden deberá representarla por escrito, en términos tales que si el superior la reitera en
igual forma, aquél deberá cumplirla, quedando en este caso exento de toda responsabilidad, la que
recaerá por entero en el superior que hubiere insistido en ella.
El sistema que contempla el articulo 62 del Estatuto Administrativo consulta requisitos formales y
de fondo. Los primeros se encuentran contenidos en las exigencias de que tanto la orden que se
reitera como la representación que se formula, deben ser escritas, y por el envio de las respectivas
comunicaciones a la autoridad que esa norma señala. Los requisitos de fondo, por su parte, consisten
en los fundamentos jurídicos de los hechos y de las conductas asumidas tanto por el empleado como
por su superior jerárquico.
ARTICULO 63.- En la situación contemplada en la letra m) del artículo Ley 18.834, Art. 57.
61 si los cargos fueren de tal naturaleza que se comprometiere el
prestigio de la institución, el superior jerárquico deberá ordenar
al inculpado que publique sus descargos en el mismo órgano de
comunicación en que aquellos se formularon, haciendo uso del
derecho de rectificación y respuesta que confiere la ley respectiva.
Interpretación:
Es obligación de cada funcionario justificarse ante el superior jerárquico de los cargos que se le
formulen con publicidad, dentro del plazo que éste le fije, atendidas las circunstancias del caso
(287194).
Concordancias: Arts. 19, N' 12, de la CP de la R.; 61, letra m), del EA; 60 del EAM; ley 19733, sobre
libertades de opinión e información y ejercicio del periodismo.
Comentarios:
Para que el superior jerárquico pueda obligar a un funcionario de su dependencia a formular sus
descargos en el mismo órgano de comunicación no basta que al inculpado se le hayan formulado
cargos con publicidad, sino que es necesario además que esos cargos comprometan el prestigio de
la institución.
Interpretación:
El legislador no ha precisado el alcance de la expresión "autoridades del Servicio", por lo que, conforme
a lo previsto en el artículo 20 del Código Civil, corresponde atender al significado que tiene la palabra
autoridad en el Diccionario de la Lengua de la Real Academia Española, según el cual, entre otras
acepciones, significa "carácter o representación de una persona por su empleo, mérito o nacimiento"
y "persona revestida de algún poder, mando o magistratura". Por tal motivo, el Jefe de la Sección
Bienestar de un Servicio Público es una autoridad, por cuanto ejerce la administración de dicha
dependencia, lo que implica el ejercicio de labores de representación y de dirección (45537/80).
El Jefe Superior de Servicio es el funcionario que tiene la tuición superior y la vigilancia del organismo
que dirige y, como tal, es y debe ser responsable de la marcha del mismo. Su responsabilidad podrá
ser directa cuando se acredite de parte suya una absoluta falta de idoneidad técnica y administrativa
para llevar esa dirección superior. Será indirecta, hasta llegar a desaparecer, cuando las actuaciones
o hechos que originen una contravención, sean obra de subalternos que prescindieron de esa política
directiva o simplemente aprovecharon la complejidad del Servicio Público para actuar en forma de
impedir que la jefatura pudiera tener conocimiento de tales hechos y ponerles pronto remedio a las
mencionadas contravenciones. En este sentido, no es posible dejar de considerar que la estructura
piramidal de los Servicios hace que siempre existan jefaturas de nivel inferior al máximo de cada
organismo a las cuales se ha confiado la realización de parte de la función pública como delegatoria
del Jefe Superior (64748/61, 28477/06).
Letra a)
Ante la ausencia de norma legal expresa que fije el control de asistencia de los empleados, corresponde
a las Jefaturas de los organismos públicos implementar el método que estimen conveniente para
verificar el cumplimiento de la jornada de trabajo, atribución que le permite determinar diversos
sistemas para realizar ese control y precisar las distintas categorías de funcionarios que, atendida
la naturaleza de las funciones que desempeñan, han de quedar incluidos en uno u otro. En todo
caso, todos los dependientes deben .estar afectos a un mecanismo de fiscalización horaria, sin que
ello signifique otorgar ventajas a determinados empleados (2989/67, 45251/73, 2493/80, 21735/90,
6796/92,36682/94, 9506/97,43842/99, 20246/01, 29928/05).
Los Jefes de Servicio pueden impartir instrucciones para que las jefaturas dependientes de éstos
actúen con un criterio uniforme en la evaluación de los funcionarios, sin que ellos puedan, en todo
caso, vulnerar la normativa sobre la materia (19626/91, 9654/96, 16895/00).
Han procedido las instrucciones de la Jefatura de una entidad pública para que se abran y desocupen
diversos muebles que utilizaba un funcionario, designado en comisión de servicio a otra localidad,
donde mantenía bienes de su propiedad, como también documentos de la institución, sin el
conocimiento formal del interesado, pues es facultad de esa autoridad dirigir y coordinar las labores
del Servicio y adoptar las medidas conducentes para el adecuado funcionamiento administrativo de
la entidad, entre las cuales se encuentra disponer del mobiliario (24257/94).
El cumplimiento de las obligaciones de carácter genérico que corresponden a una unidad dentro de
un Servicio, son de responsabilidad de su Jefatura, correspondiendo a ésta impartir las instrucciones
precisas para su materialización y la asignación de las labores que debe cumplir el personal de
su dependencia. No es licito imputar a ese personal la falta del correcto funcionamiento del
departamento o unidad en la que prestan sus servicios, salvo en aquellas funciones que le han sido
encomendadas, o que le corresponden por la naturaleza de su empleo (21309/96).
No se ajusta a derecho el que la Jefatura de un Servicio disponga que cada director de una
asociación de funcionarios debe informar por escrito los días y horarios en que se ausentará de su
lugar de trabajo en uso de los permisos semanales a que alude la ley 19296, artículo 31, pues esa
norma no establece que ha de darse aviso para ejercer el derecho de los dirigentes gremiales a los
permisos de que se trata, salvo que se pretenda acumularlos o cederlos, casos en que la ley ordena
que la comunicación pertinente tiene que ser previa y por escrito. No obstante, los directores de
asociaciones deben dar aviso a la autoridad, verbalmente o por escrito, en forma oportuna que harán
uso de sus permisos semanales, vale decir, con la antelación suficiente para no entorpecer el normal
desarrollo de las funciones propias del organismo (30980/99, 47716/99, 33054/00).
Letra b)
No existe disposición legal alguna que obligue a las ex jefaturas de los Servicios Públicos a
confeccionar actas de entrega. Dichos actos corresponden a decisiones de carácter administrativo
que se adoptan al amparo de la responsabilidad de los jefes de cada una de las unidades operativas.
El Director de un Servicio puede, para delimitar responsabilidades, disponer una revisión de esas
actas conjuntamente con ordenar se practiquen inventarios a los bienes existentes en la institución
al momento de asumir su cargo (20629/90).
Letra e)
La falta de una política de cobro judicial de letras suscritas por alumnos para el pago de aranceles
universitarios, aprobada por el Consejo Superior de una Universidad estatal, como asimismo la
carencia de instrucciones claras y precisas que determinen los procedimientos a seguir en la materia,
carece de importancia para los fines de establecer la responsabilidad administrativa del Vicerrector
de Administración y Finanzas de la misma, pues los órganos, a través de sus autoridades, deben
administrar en forma eficiente e idónea los bienes y recursos públicos, encontrándose obligados a
adoptar, en el ámbito patrimonial, todas las medidas conducentes para aquello (14640/01).
Concordancias: Arts. 98, inciso primero, de la CP de la R.; 5, 10, 11, 12, 17 y 61, incisos tercero y
cuarto, de la LOCBGAE, estos últimos, agregados por el artículo 68, N" 3, de la ley 20000, que obliga
a la autoridad superior de los organismos de la Administración del Estado a prevenir el consumo
indebido de sustancias o drogas estupefacientes o sicotrópicas. Oto. 1215, de 2006, del Ministerio
del Interior, que aprueba el reglamento que establece normas que regulan las medidas de prevención
del consumo de drogas en los Órganos de la Administración del Estado, así como el procedimiento
de control de consumo aplicable a las personas que indica. Art. 61 del EAM; 52 de la LOAFE; 3, 4,
7, 1O y Ss. de la Ley de Transparencia de la Función Pública y de Acceso a la Información de la
Administración del Estado, aprobada por el artículo primero de la ley 20285, sobre Acceso a la
Información Pública. El articulo transitorio de la ley 20285 dispone que este texto legal entrará en
vigencia ocho meses después de su publicación en el Diario Oficial, hecho que aconteció el 20 de
agosto de 2008.
Comentarios:
Estas obligaciones se relacionan con el deber que el articulo 11 de la ley 18575 impone a las
autoridades y jefaturas, dentro del ámbito de su competencia y en los niveles que corresponda, de
ejercer un control jerárquico permanente del funcionamiento de los organismos y de la actuación del
personal de su dependencia. El hecho que este control se extienda tanto a la eficiencia y eficacia
en el cumplimiento de los fines y objetivos establecidos, como a la legalidad y oportunidad de las
actuaciones, permite concluir que él incluye los controles jurídico, de mérito y de gestión.
Párrafo 2'
De la jornada de trabajo
ARTICULO 65.- La jornada ordinaria de trabajo de los funciona- Ley 18.834, Art. 59.
ríos será de cuarenta y cuatro horas semanales distribuidas de
lunes a viernes, no pudiendo exceder de nueve horas diarias.
Interpretación:
El artículo 10 del DL 1608, de 1976, dispuso, en sus incisos segundo y tercero, que un reglamento,
sancionado por el Ministerio de Hacienda, establecería las causales que permitirían ordenar los
trabajos extraordinarios a continuación de la jornada; modalidad de cálculo y pago de dicho trabajo;
máximo de horas extraordinarias que podrán realizarse; sistemas de control de los trabajos efectuados
en dichas horas, y demás normas que fuesen necesarias, como así también, modificar la modalidad
de cálculo y pago de los trabajos extraordinarios nocturnos o en días festivos regidos por el Párrafo 9
del Titulo JI del DFL 338, de 1960. En virtud de la facultad concedida por dicho precepto, se dictó el
DFL 1046, de 1977, del Ministerio de Hacienda, que reglamentó el régimen de trabajo extraordinario
en los servicios, instituciones y empresas regidos por los artículos 1 y 2 del DL 249, de 1973. El
citado DFL no está vigente luego de la entrada en vigor de las normas del Título 111, Párrafo 2 de la
ley 18834, salvo en lo que respecta a las normas que se refieren a las asignaciones adicionales que
deben considerarse en la base de cálculo para obtener el valor de la hora diaria de trabajo y aplicar
el recargo correspondiente, materias que se encuentran contempladas en los artículos 8 y 1O del
mencionado decreto con fuerza de ley, ya que estas disposiciones armonizan y complementan lo
dispuesto en los artículos 62 y 63 (actuales artículos 68 y 69) del Estatuto Administrativo (31726189,
27662190, 58328103).
Inciso 1'
El legislador sólo ha regulado la duración de la jornada semanal y el límite máximo de la jornada diaria
de los funcionarios regidos por el Estatuto Administrativo, por lo que, conforme a las facultades que
el artículo 31 de la ley 18575 reconoce a los Jefes Superiores de los Servicios para dirigir, organizar
y administrar el correspondiente organismo, compete a dichas autoridades fijar la hora de ingreso y
de término de la jornada laboral del personal de su dependencia (19197199, 10587101, 41762106).
No se ajusta a derecho que un Servicio establezca una jornada semanal de trabajo de martes a
sábado, ya que ella ha sido expresamente establecida en la ley, de lunes a viernes (208194).
Los funcionarios deben desarrollar una jornada de trabajo de 44 horas semanales, distribuidas de
lunes a viernes. Luego, el día sábado es inhábil para los efectos del Estatuto Administrativo, y
por ende, el trabajo efectuado en ese día tiene el caracter de extraordinario (31726/89, 26384/90,
8718/91, 26693/91 ).
No se ajusta al artículo 59 (actual artículo 65) una jornada de trabajo distribuida de 8:30 a 13:00
y de 14:15 a 17:45 horas, durante cinco días a la semana, establecida en un Servicio, ya que el
sistema de jornada única de trabajo sólo permite imputar a aquélla la interrupción de 30 minutos para
tomar alimentos, en las ciudades y actividades aludidas en el decreto 1897, de 1965, del Ministerio
del Interior. De este modo, el personal de ese Servicio sólo trabaja 8 horas 30 minutos al día, en
circunstancias que, conforme al artículo 59 (actual artículo 65), la jornada diaria debe ser de 8 horas
con 48 minutos, treinta de los cuales, corresponden al tiempo otorgado para que los funcionarios
tomen su colación, esto es, forman parte integrante de dicha jornada y son de cargo del respectivo
empleador (22123/94 ).
Procede que la autoridad fije un período de tolerancia para el ingreso de los funcionarios en la
medida que ese tiempo sea restituido el mismo día en que el trabajador haga uso de tal beneficio,
para que cumpliendo con el total de la jornada diaria que le corresponde, se respete la jornada
semanal de cuarenta y cuatro horas. Lo anterior, siempre que ello no afecte el normal funcionamiento
de la entidad (41762/06).
A falta de una norma expresa sobre jornada de trabajo, los funcionarios públicos que se rigen por
estatutos especiales estan obligados a desempeñar su empleo en forma permanente, de acuerdo
con el artículo 59 (actual articulo 65) del Estatuto Administrativo, el cual en estos casos se les aplica
supletoriamente (3673/90).
Para compensar horas no trabajadas en un empleo, por cumplir funciones inherentes a otro
compatible, no cabe sino prolongar la jornada en la que se ha inasistido, en un sistema de horario
adicional, a fin de completar el horario fijado por el legislador en el articulo 65, inciso primero, de
la ley 18834. En el evento de no cumplir con el deber de compensar el horario no trabajado de
tal jornada, el empleado debe ser objeto de deducciones de sus emolumentos por los lapsos no
desempeñados efectivamente (38182/05).
Las facilidades que un Servicio debe conceder a un funcionario de su dependencia que es Concejal,
consistentes en establecer los mecanismos administrativos que le permitan ausentarse de sus tareas
y recuperar el tiempo ocupado en cumplir esa función pública, no significan que tales funcionarios
puedan sustraerse del cumplimiento del número de horas que conforman la jornada ordinaria de
trabajo (19480/93, 45874/99).
La autoridad podrá establecer el o los sistemas que considere adecuados para el control de asistencia
de los funcionarios de su dependencia y señalar, según las tareas que cada estamento desempeñe,
los servidores que quedaran sujetos a uno u otro, y su fijación debera formalizarse mediante un
documento emitido con tal objeto (28804/99, 37191/00, 10587/01,20246/01, 29928/05).
no cumplan íntegramente su jornada laboral, por cuanto ello importaría establecer una ventaja
arbitraria en su favor. Por tal motivo, los sistemas de control deben implementarse con el objeto que
aseguren tanto la asistencia al trabajo como su permanencia en él, lo cual debe alcanzar a todos los
trabajadores, sin que se originen ventajas o privilegios para un sector determinado (11748/00).
A funcionario que fue autorizado para realizar labores docentes en una universidad privada los días
lunes y miércoles desde las 17:00 horas, mediante resolución del Servicio, se le fijó un horario
especial de modo de compensar las horas no trabajadas. Sin embargo, no corresponde que se le
discrimine fijándole un horario distinto de los otros funcionarios, respecto de los días cuyo ingreso a la
Institución ocurre en horario habitual, ya que de esta manera se está efectuando una diferencia que
no tiene ninguna base legal y que, por lo tanto, infringe el principio de igualdad que debe respetar la
autoridad administrativa, al tomar decisiones que afecten a los empleados a su cargo. De este modo,
no se ajusta a derecho la medida adoptada por la Jefatura del Servicio, en cuanto hace inaplicable a
dicho funcionario el horario fijado para el resto del personal del Servicio, mediante circular, en la cual
se establece un tiempo de tolerancia para la hora de ingreso al Servicio, de 15 minutos, es decir, a
las 9:00 horas. Debe, en consecuencia, aplicarse al recurrente el mismo horario que al resto de los
funcionarios, en los días que entra y sale del Servicio en el horario habitual, considerando que en el
horario especial que se dispuso en los otros días, se encuentran compensadas las horas que dedica
a la docencia en los términos señalados en el articulo 8 de la ley 19863 (28990/05).
Inciso 2°
La regla de excepción de la ley 18834, articulo 80 (actual articulo 86), inciso tercero, permite que
un funcionario desempeñe dos empleos de jornada parcial que, en conjunto, no excedan de 44
horas semanales, siempre que los horarios inherentes a ellos no coincidan total o parcialmente,
puesto que en tal caso existiría una incompatibilidad física para su desempeño. Por ende, no existe
incompatibilidad para ejercer dos empleos si la suma de la jornada de ambas plazas no supera ese
limite. La jornada parcial es aquella inferior a la normal de 44 horas para los trabajadores afectos al
Estatuto Administrativo (1551/90, 12201/92, 1430/03).
Dado que los empleados con jornadas parciales no pueden ejecutar labores extraordinarias
remuneradas, el inciso segundo del artículo 59 (actual articulo 65) les impide tanto percibir estipendios
en dinero como disfrutar de descansos complementarios por la realización de las mencionadas
tareas, ya que la citada disposición establece la prohibición de efectuar ese tipo de trabajos sin
formular precisión alguna en cuanto a la modalidad de retribución de tales servicios (1803/97).
La Contraloria General carece de atribuciones para calificar las razones que determinen un
nombramiento con jornada parcial, ya que la ley entrega tal decisión a la autoridad facultada para
efectuar la designación, a la que, por tanto, compete ponderar la conveniencia de qué empleos que
llevan implícitas funciones de dirección y supervigilancia permanentes, deben ser servidos bajo esa
modalidad, para lo cual evaluará si el desempeño en esa forma influye en el cumplimiento de las
tareas propias del cargo (35298/90).
Procede que a funcionarios del Hospital Clínico de la Universidad de Chile se les distribuya su
jornada parcial de trabajo en un solo día o en algunos días a la semana. Ello, porque la distribución
de la jornada semanal de trabajo, estructurada de lunes a viernes, está establecida sólo para la
jornada ordinaria de 44 horas y respecto de las jornadas parciales, dicho estatuto no estableció
normas relativas a su distribución semanal, de manera que ésta debe ser dispuesta por la autoridad
facultada para efectuar el nombramiento o la contratación, teniendo en consideración para ello las
necesidades y conveniencias del respectivo organismo (49502/05).
Inciso 3•
Concordancias: Arts. 56 de la LOCBGAE; 8 de la ley 19863; 61, letra a), 71,72 del EA; 62 del EAM; ley
17246, que establece la redistribución de la jornada de trabajo del personal de la Contraloria General
de la República, de los Servicios fiscales, semifiscales, de administración autónoma y municipales,
entre los días lunes y viernes, ambos inclusive; decreto 1615, de 1969, del Ministerio del Interior, que
reglamenta la aplicación del inciso segundo del articulo 1 de la citada ley 17246; decreto 1897, de
1965, del Ministerio del Interior, reglamenta implantación de jornada única o continua de trabajo.
Comentarios:
La importancia que el ordenamiento jurídico asigna al cumplimiento de la jornada de trabajo ha
quedado demostrada con lo preceptuado por el articulo 56 de la ley 18575, incorporado por la ley
19653, sobre Probidad Administrativa, disposición que confiere a los funcionarios el derecho a
ejercer libremente cualquier profesión, industria, comercio u oficio conciliable con su posición en la
Administración del Estado, siempre que con ello no se perturbe el fiel y oportuno cumplimiento de sus
deberes funcionarios, sin perjuicio de las prohibiciones o limitaciones establecidas por la ley. Dicha
norma señala que estas actividades deberán desarrollarse siempre fuera de la jornada de trabajo y
con recursos privados.
Por tal motivo, la misma Ley Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración del
Estado agrega que son incompatibles con la función pública las actividades particulares cuyo ejercicio
deba realizarse en horarios que coincidan total o parcialmente con la jornada de trabajo que se tenga
asignada, y además, por la circunstancia de que dicho cuerpo normativo contempla en su articulo
62, N" 4, como una infracción especial al principio de probidad administrativa, el ocupar tiempo de la
jornada de trabajo en beneficio propio o para fines ajenos a los institucionales.
La norma legal antes transcrita permite colegir que el derecho que en ella se contempla, no es
absoluto, dado que se desarrollará acorde con las modalidades que determine el Jefe del Servicio, y
atendido el carácter excepcional de la norma, aquél debe velar por hacer conciliar el referido derecho
con los intereses públicos superiores contenidos en la ley 18575, Orgánica Constitucional de Bases
Generales de la Administración del Estado, relativos al ejercicio de la función pública, como son el
cabal cumplimiento de los principios de continuidad y permanencia del servicio público, de eficiencia
y de coordinación, de manera que no afecte el oportuno desempeño de las labores del respectivo
organismo.
De este modo, la autoridad administrativa podrá establecer modalidades o pautas generales para el
desarrollo de las actividades docentes que deban realizarse durante la jornada de trabajo, las que
pueden implicar, por ejemplo, la fijación de horarios o días de la semana en los cuales sea factible
ejercer o no la docencia, asi como también, la manera como deberá ser restituido el tiempo que se
ocupe, dentro del horario de trabajo para ejercer las referidas labores docentes.
En este sentido, si bien la autoridad debe velar porque se dé fiel cumplimiento al horario de trabajo, y
decidir la manera como se restituirá el tiempo de la jornada laboral utilizado para ejercer la docencia,
a fin de resguardar el interés general de la Administración, por sobre los intereses de carácter
privado, también la superioridad del servicio debe velar para que dentro de la institución a su cargo
no se provoque desigualdad o inequidad al determinar estas pautas generales en la fijación horaria,
a los empleados que ejercen una labor docente en los términos contenidos en el articulo 8 de la ley
19863.
En suma, las medidas que adopte la autoridad administrativa deben respetar los derechos de los
funcionarios, y hacer que sus normas e instrucciones sean aplicadas a todos los empleados en
igualdad de condiciones, a fin de salvaguardar y hacer efectiva la garantía constitucional contemplada
en el articulo 19, W 2, de la Constitución Política de la República.
ARTICULO 66.- El jefe superior de la institución, el Secretario Ley 18.834, Art. 60.
Regional Ministerial o el Director Regional de servicios nacionales
desconcentrados, según corresponda, podrá ordenar trabajos
extraordinarios a continuación de la jornada ordinaria, de noche
o en dias sábado, domingo y festivos, cuando hayan de cumplirse
tareas impostergables.
Interpretación:
Inciso 1°
Los trabajos extraordinarios proceden y otorgan los derechos correlativos -compensación con
descanso complementario o pago- cuando concurren tres requisitos copulativos esenciales, esto es,
que hayan de cumplirse tareas impostergables, que exista orden del Jefe Superior del Servicio y que
los trabajos respectivos se realicen a continuación de la jornada ordinaria, de noche o en di as sábado,
domingo o festivos. Por ende, no pueden configurarse horas extraordinarias si un servidor manifiesta
que su jornada de trabajo normal comenzaba antes que la del resto de los funcionarios, sin que
existiera autorización escrita de la autoridad, la cual es la única que puede ordenar la alteración de la
jornada laboral de sus dependientes por motivos de buen servicio (13088192, 12215199, 41431100).
Del inciso primero del articulo 60 (actual articulo 66) se desprende que el legislador ha considerado
como trabajo extraordinario el realizado a continuación de la jornada ordinaria; de noche, entre las
21:00 horas de un día y las 07:00 horas del día siguiente, o en días sábado, domingo y festivos. Luego,
cabe concluir que no resulta proce¡jente que se considere jornada extraordinaria la desempeñada
con antelación al inicio de la jornada laboral ordinaria, por no existir norma alguna que lo permita
(64670104, 3849105).
Las horas extraordinarias deben autorizarse mediante actos administrativos exentos de toma de
razón, los que deben dictarse antes de la realización de aquéllas, porque éstos sólo rigen para
el futuro, a menos que exista una disposición expresa en contrario. En dichos actos tiene que
individualizarse al personal que las desarrollará, el número de horas a efectuar y el periodo que
abarca la autorización. No obstante, procede el pago de los trabajos extraordinarios dispuestos por la
autoridad, sin cumplir con las formalidades legales, cuando han sido realizados efectivamente por los
funcionarios, pues de lo contrario, se produciría un enriquecimiento sin causa para la Administración
(20685191, 36359196,42095196,9324199, 10542100, 43198106).
La encomendación de labores más allá de la jornada ordinaria de trabajo está entregada por ley a
la autoridad administrativa, sin que se requiera autorización o consentimiento del funcionario para
aceptar su realización (25079101 ).
Las horas extraordinarias obedecen a una decisión de la autoridad, la que, para ello debe determinar
tanto su oportunidad como las condiciones de su desarrollo, de modo que corresponde considerar,
en relación con estas últimas, como periodos en que el funcionario ha estado a disposición del
empleador, todos aquellos lapsos comprendidos en el horario habilitado para la realización de tales
horas extraordinarias, aunque en ellas no exista desempeño efectivo por razones ajenas a la voluntad
del empleado (21889196).
Procede reliquidar la asignación por trabajos extraordinarios de los funcionarios cuyas remuneraciones
aumentaron retroac~vamente como consecuencia de un ascenso (promoción) o del reconocimiento
de la asignación de antigüedad, ya que si el sueldo base se modifica retroactivamente por ascenso (o
promoción), el monto de la asignación por trabajos extraordinarios, no obstante su caracter accidental,
debe reliquidarse considerando el estipendio base del cargo de ascenso o promoción, pues es el
que corresponde al empleo del beneficiario al momento que se devenga la asignación en comento.
Del mismo modo, si la remuneración aumenta por el reconocimiento de la asignación de antigüedad
o asignación profesional con efecto retroactivo, debera variar la base de calculo para el pago de las
horas extraordinarias desde la data en que se otorgaron las mencionadas asignaciones (4313/94,
36731/02). Por el contrario, no corresponde reliquidar las horas extraordinarias efectuadas en el
tiempo intermedio cuando las leyes han dispuesto mejoramientos de grados en forma retroactiva
(5274/94).
Corresponde pagar las horas extraordinarias conjuntamente con las remuneraciones en la fecha
de pago establecida para el Servicio correspondiente de acuerdo con el artículo 89 (actual artículo
94) de la ley 18834, por razones de economía, tiempo y mejor aprovechamiento de los recursos
humanos, ya que el artículo 60 (actual articulo 66) no ha establecido expresamente una fecha para
dicho pago (22876/99).
No existe disposición legal alguna que autorice gastos por refrigerios o alimentación en favor de los
funcionarios que desempeñan horas extraordinarias (11483/92, 33488/99).
No corresponde aplicar a los funcionarios regidos por el Estatuto Administrativo el artículo 31 (actual
artículo 32) del Código del Trabajo, que señala que se consideraran horas extraordinarias, a falta
de pacto escrito, las que se trabajen en exceso de la jornada convenida, con conocimiento del
empleador, porque de acuerdo con el artículo 60 (actual artículo 66) de la ley 18834, para que se
configure el derecho a compensación o pago por ese tiempo extraordinario, es necesario que éste
haya sido dispuesto formalmente por el Jefe Superior del Servicio o Director Regional de servicios
nacionales desconcentrados (27662/90).
Tratándose de comisiones de servicios que se cumplen en un organismo distinto al que pertenecen los
servidores, la institución que los ha recibido puede disponer que ellos realicen trabajos extraordinarios,
en cuyo caso tienen derecho a los estipendios correspondientes, siempre que, ademas, se cumplan
los requisitos exigidos por las normas reguladoras de tales trabajos (51032/66, 1673/90).
El personal contratado sobre la base de honorarios carece en principio del derecho a percibir horas
extraordinarias, ya que ellas constituyen una modalidad de desempeño prevista específicamente
para los funcionarios cuya jornada de trabajo no emana de un contrato sino que directamente de la
ley. No obstante, en dichos contratos puede pactarse un honorario adicional por trabajos a realizarse
más allá del horario habitual (4636/90, 2137/91, 6710/93, 26724/94).
Las labores ejecutadas en día sabado, con cargo a horas de la jornada ordinaria por el personal
regido por la ley 18834, tienen el caracter de trabajos extraordinarios por el sólo hecho de ejecutarse
ese día (26384/90, 33710/90, 8718/91,26693/91,24770/95, 31857/07).
Cuando la orden de servicio que dispone Ías horas extraordinarias exige el desempeño de una o dos
horas diarias completas, procede computar los minutos trabajados en exceso por sobre la jornada
ordinaria los que sumados serán útiles para configurar una o más de las horas extraordinarias
ordenadas. Ello, por cuanto éstas obedecen a una decisión de la autoridad, la que debe determinar
tanto su oportunidad como las condiciones de su desarrollo, de modo que corresponde considerar
como periodos en que el funcionario ha estado a disposición del empleador, todos aquellos lapsos
comprendidos en el horario habilitado para la realización de tales horas extraordinarias. Lo indicado
está condicionado a que el servicio cuente con un sistema de control horario que permita establecer
con precisión esos minutos (34968/04).
La circunstancia de que un funcionario público de un servicio sea designado por el Juez de Familia
como curador ad litem de un menor conforme al articulo 19 de la ley 19968, involucra que está
cumpliendo un mandato legal, que no dice relación con el desempeño de sus cargos, por lo que no
procede que dicho servicio le pague horas extraordinarias o le otorgue descanso complementario
por los turnos que los tribunales de familia les asignan (43513/06).
Las trabajadoras que se desempeñan en horario nocturno, tienen derecho al beneficio de sala cuna,
del mismo modo que aquéllas que cumplen horario diurno (38661/95, 57317/06).
Según el articulo 202 del Código del Trabajo, durante el periodo de embarazo, a la trabajadora
ocupada habitualmente en tareas consideradas por la autoridad como perjudiciales para su salud, debe
trasladársele sin reducción de sus remuneraciones a otra labor, entendiéndose como especialmente
perjudiciales, todo trabajo que: a) obligue a levantar, arrastrar o empujar grandes pesos; b) exija
esfuerzo físico, incluido el permanecer de pie largo tiempo; e) se ejecute en horario nocturno; d) se
realice en horas extraordinarias, y e) la autoridad competente lo declare inconveniente para el estado
de gravidez (11034/01, 6704/03, 31284/06).
Es improcedente pagar horas extraordinarias a los funcionarios que realicen labores propias de
una carga pública cuando sean requeridos para esos fines, como participar en un censo nacional,
aun cuando las labores se lleven a cabo en un día declarado feriado legal, ya que esas tareas no
se enmarcan dentro de los conceptos de jornada ordinaria y trabajos extraordinarios. Además, las
actividades que ese personal debe obligatoriamente realizar no atañen específicamente al Servicio
del que forman parte, sino que dicen relación con fines de interés común, al margen del quehacer
normal de los organismos involucrados (9313/92, 9119/94).
Tienen derecho al beneficio de horas extraordinarias los funcionarios que laboran en lugares
apartados como la Isla de Pascua o la Antártica, no obstante la dificultad en delimitar el inicio y
término de la jornada (42095/96, 41006/99, 3667/00).
Los funcionarios no académicos de una universidad estatal se rigen por la ley 18834, por lo que
les son aplicables las disposiciones sobre trabajos extraordinarios contempladas en este Estatuto
(27451/91).
El tiempo ocupado en el traslado hacia y desde el lugar en que se debe cumplir un cometido
funcionario, no constituye trabajo extraordinario, porque según el artículo 72 (actual artículo 78) de la
ley 18834, el servidor a quien se le encomiende un cometido funcionario esta obligado a cumplirlo,
aún fuera del lugar de desempeño habitual de sus labores, sea que deba realizarlo durante la jornada
ordinaria de trabajo o a continuación de ella (30253/93, 10242/95, 21889/96,21447/03, 11962/06).
Según el articulo 71 (actual artículo 77) de la ley 18834, los funcionarios que desempeñan comisiones
de servicio en el extranjero continúan sujetos a las normas estatutarias y de remuneraciones que
los rigen como dependientes del Servicio a que pertenecen, por lo que tienen derecho al pago de
horas extraordinarias cuando efectivamente las realicen durante tales comisiones y se cumplan a su
respecto los supuestos establecidos para su procedencia (11699/94).
La conducción de vehículos de un Servicio se regula por las normas generales sobre la materia, con
las limitaciones establecidas por la ley respecto a la locomoción colectiva o particular. En cuanto al
descanso, luego de una conducción prolongada, se aplican los preceptos estatutarios referidos a la
jornada laboral ordinaria y al cumplimiento de trabajos extraordinarios a continuación de la misma y
al correspondiente descanso complementario del Estatuto Administrativo (14276/98).
Es improcedente marginar a los dirigentes gremiales, por su condición de tal, del sistema de turnos
y del pago de horas extraordinarias a que tenían derecho antes de entrar a servir sus cargos de
representación, pues ello contraviene lo dispuesto en el artículo 25 de la ley 19296, que establece la
inamovilidad de tales dirigentes (31568/00, 28171/04).
Las horas extraordinarias para los trabajadores del sector público, no estan afectas a cotizaciones
para el financiamiento de los beneficios de pensiones que establece el sistema previsional antiguo ni
en el del DL 3500, de 1980 (26389/01, 39100/01, 28472/06).
Los funcionarios que cumplen horas extraordinarias en servicios o dependencias que por la naturaleza
de las labores que desarrollan exijan obligadamente que se trabaje en jornada extraordinaria, en forma
regular y permanente, tienen derecho a conservar, durante el uso de feriados, licencias y permisos,
las remuneraciones correspondientes a horas extraordinarias. Por trabajo extraordinario regular y
permanente debe entenderse aquél que realizan los trabajadores, en virtud del régimen especial
a que se hallan sujetos por la naturaleza de sus labores, en horas o días no comprendidos en la
jornada habitual, no siendo en todo caso necesario que el organismo o dependencia de que se trate
funcione las veinticuatro horas del día. Debe tratarse de establecimientos que, por la naturaleza de
sus funciones, no pueden paralizarse (59114/73, 4107/93,34682/93, 901/94,23353/94,37969/94,
8019/95, 24770/95, 17909/97, 26161/97, 30791/97, 4967/98, 43863/98, 8386/99, 12057/00, 62/01,
24305/01' 7345/02, 33073/06).
Existen distintas alternativas de desempeño de las funciones ordinarias o extraordinarias, las que
podrán ser realizadas a través de sistemas de turnos y efectuarse en días hábiles o inhábiles, o en
horas diurnas o nocturnas, debiendo entenderse que, para los sistemas de turnos, todos los días del
año deben considerarse como hábiles. La compensación adicional por labores nocturnas o en di as
sábado, domingo y festivos, varia según si dichas labores se ejecutan con cargo al número de horas
comprendido en la jornada normal, o en exceso de ella. En el primer caso, esa retribución, ya sea
otorgada bajo la modalidad de descanso o de dinero, sólo debe comprender el aumento del 50 por
ciento, porque el estipendio correspondiente a las horas mismas de desempeño está considerado
en el sueldo mensual. Por el contrario, si las tareas referidas se desarrollan cuando el servidor ha
cumplido en su totalidad dicha jornada, la compensación, en descanso o abono, debe corresponder
a las horas trabajadas más un aumento del 50 por ciento (31857/07).
Al momento de fijar turnos en los servicios la autoridad debe tener en cuenta tanto la posibilidad real
de que el empleado se encuentre en condiciones de efectuar adecuadamente las tareas que se le
encomiendan, como el hecho de que la extensión horaria de los mismos no le signifique un esfuerzo
físico o intelectual que, por su intensidad, pueda afectar su salud (31726/89, 19514/99, 46117/99,
2660/01' 35204/01' 19028/02, 51849/04 ).
El artículo 1 de la ley 19538 estableció una asignación por turno para el personal de Oficiales
y Vigilantes Penitenciarios de Gendarmería de Chile, así como para el personal a contrata que
cumpla funciones de tales, cuyos montos son establecidos por la misma disposición, destinada a
retribuir pecuniariamente al referido personal el desempeño de jornadas de trabajo en horarios total
o parcialmente diferentes de la jornada ordinaria de funcionamiento del Servicio, incluso en horario
nocturno y en días sábado, domingo y festivos, según lo demanden las necesidades de la
Institución. Estos turnos pueden comprender un número de horas superior a la jornada ordinaria de
trabajo del funcionario, la que será incompatible con el desempeño de horas extraordinarias, salvo
que el Director del Servicio lo autorice, mediante resolución fundada, cuando las circunstancias lo
justifiquen (14083/98, 26389/01, 51849/04, 44114/05).
La asignación de nivelación penitenciara, que el artículo 4 de la ley 19538 estableció para los
funcionarios de planta de Gendarmería de Chile no comprendidos en el articulo 1 de la misma ley,
que se refiere a los Oficiales y Vigilantes Penitenciarios, es incompatible con la asignación de turno
establecida en esta última disposición, y con la asignación contemplada en la letra e) del articulo 93
(actual artículo 98) de la ley 18834, esto es, con las horas extraordinarias. Por ello, Gendarmería de
Chile no puede otorgar ambos beneficios, salvo, cuando en casos debidamente calificados, el Director
Nacional autorice mediante resolución fundada, el desempeño de horas extraordinarias, las que se
compensarán según lo dispuesto en los artículos 68 ó 69 del mencionado Estatuto Administrativo,
según corresponda (10877/04, 31200/04, 7665/07).
La asignación de turno establecida por el articulo 97 del DFL. 1, de 2005, del Ministerio de Salud,
que fijó el texto refundido, coordinado y sistematizado del DL. 2. 763, de 1979, y de las leyes 18933
y 18469, para el personal de planta o a contrata de los Servicios de Salud regidos por la ley 18834 y
el DL 249, de 1973, reemplazó el sistema de pago de horas extraordinarias en dichos servicios. Esta
asignación corresponde a quienes se encuentren formalmente destinados a trabajar en horarios
total o parcialmente diferentes de la jornada ordinaria, incluso en horario nocturno y en días sábado,
domingo y festivos, acorde con las necesidades de los establecimientos de salud, y mantienen el
derecho a percibirla durante los periodos de ausencia ·con goce de remuneraciones originados por
permisos, licencias y feriado legal. Asimismo, según el citado articulo 97, las horas extraordinarias
que perciban los funcionarios de planta y a contrata de los Servicios de Salud, cualquiera que sea
el motivo de su origen, no constituyen remuneraciones permanentes para ningún efecto legal y
consecuentemente, no pueden percibirse durante los feriados, licencias y permisos con goce de
remuneraciones (33073/06).
Por regla general, no es procedente establecer turnos de llamado que importen la obligación de
permanencia en un lugar determinado para acudir a prestar servicios, pues esa modalidad no
se contempla en la ley 18834, y si bien la autoridad administrativa está facultada para disponer
el cumplimiento de turnos por el personal cuando sea necesario para la ejecución de tareas
indispensables del Servicio, debe respetar las normas estatutarias que sobre la materia rijan a los
servidores que las desarrollan (25118/85, 3647/90,3351/93, 21991/94, 50853/05).
Inciso 2"
Los trabajos extraordinarios deben compensarse con un descanso complementario y, si ello no fuere
posible por razones de buen servicio, con un recargo en las remuneraciones (1673/90, 21151/91,
26534/93, 17290/97,40752/99, 28162/00).
Si el Jefe Superior del Servicio ordena turnos a sus funcionarios para que se encuentren disponibles
en cualquier lugar y dispuestos a concurrir al servicio cuando son llamados para cumplir tareas de
emergencia, lo que les significa estar disponibles fuera del horario hábil y también sábado, domingo
y festivos, el tiempo efectivamente trabajado debe compensarse con descanso complementario y
si ello no fuere posible por razones de buen servicio, se debe compensar con el recargo en las
remuneraciones que establece la ley, pues de lo contrario se produce un enriquecimiento sin causa
para la Administración (27896/02, 11962/06).
No puede otorgarse compensación por horas extraordinarias por periodos anteriores a la fecha
en que éstas fueron autorizadas, ya que según el articulo 60 (actual articulo 66) ellas deben ser
previamente ordenadas por la autoridad (26534/93, 7420/96, 2815/00).
No existe disposición legal alguna que autorice gastos por refrigerios o alimentación en favor de los
funcionarios que desempeñan horas extraordinarias (11483/92, 33488/99).
El plazo para impetrar el beneficio del descanso complementario es el contemplado en el articulo 155
(actual articulo 161) de la ley 18834, esto es, de dos años contados desde la fecha en que se hizo
exigible, pues este último precepto se aplica a todos los beneficios que no sean las asignaciones
referidas en el artículo 94 (actual artículo 99) del mismo Estatuto (1280/92 -complementado por el
24428/96-, 1286/92,26339/94,37617/96, 2815/00,46051/00,29636/01,3107/02, 38978/05).
El plazo para impetrar el pago de las horas extraordinarias es de seis meses, contados desde la
fecha en que dichos emolumentos se hicieron exigibles, de acuerdo con la regla del articulo 94
(actual artículo 99) (1280/92, 14158/94 -complementados por el 24428/96-, 26339/94, 37060/99,
2815/00,46051/00,38978/05, 29071/08).
Las horas que comprende el descanso complementario no pueden acumularse pasados los dos
años de plazo que establece el artículo 155 (actual artículo 161) de la ley 18834, porque no existe
disposición legal que así lo permita (35652/98).
Las sumas adeudadas a un funcionario por concepto de horas extraordinarias, deben pagarse al
valor fijado a la fecha en que hubo de materializarse su pago, ya que las obligaciones cuya fuente
directa es la ley sólo pueden reajustarse y generar intereses si una disposición legal asi lo establece
expresamente. A su vez, en los artículos 60 (actual articulo 66) y siguientes y 93 (actual articulo 98),
letra e), de la ley 18834, que regulan las horas extraordinarias, no existe disposición alguna que
contemple su reajustabilidad y pago de intereses (40085/98).
Procede reliquidar la asignación por trabajos extraordinarios de los funcionarios cuyas remuneraciones
aumentaron retroactivamente como consecuencia de un ascenso o del reconocimiento de la
No corresponde reliquidar las horas extraordinarias efectuadas en el tiempo intermedio cuando las
leyes han dispuesto mejoramientos de grados en forma retroactiva (5274/94).
Procede pagar las horas extraordinarias conjuntamente con las remuneraciones en la fecha de pago
establecida para el Servicio correspondiente de acuerdo con el articulo 89 (actual artículo 94) de la
ley 18834, por razones de economía, tiempo y mejor aprovechamiento de los recursos humanos, ya
que el artículo 60 (actual artículo 66) no ha establecido expresamente una fecha para dicho pago
(22876/99).
Es improcedente pagar horas extraordinarias a los funcionarios que realizan cursos obligatorios de
capacitación fuera de la jornada ordinaria, porque conforme al artículo 25 (actual artículo 30) de la
ley 18834, la compensación en estos casos consiste en un descanso complementario. Tratándose
de los estudios no establecidos como capacitación contemplados en el artículo 23 (actual articulo
28), esto es, los de educación básica, media o superior y los cursos de post grado conducentes a la
obtención de un grado académico, no corresponde pagar horas extraordinarias, ya que si la ley no
ha previsto a su respecto el otorgamiento de descanso complementario, menos puede estimarse que
proceda el pago de remuneraciones (11458/92, 43030/94).
Los funcionarios que se desempeñan como instructores en cursos de capacitación de la ley 18834,
tienen derecho a horas extraordinarias si tales cursos se desarrollan fuera de la jornada de trabajo,
las que pueden compensarse con descanso o pago de acuerdo con el artículo 60 (actual artículo 66)
(7053/95, 8322/00).
La compensación adicional por labores nocturnas o en días sábado, domingo y festivos, varía según
si dichas labores se ejecutan con cargo al número de horas comprendido en la jornada normal, o en
exceso de ella. En el primer caso, esa retribución, ya sea otorgada bajo la modalidad de descanso
o de dinero, sólo debe comprender el aumento del 50%, porque el estipendio correspondiente a
las horas mismas de desempeño está considerado en el sueldo mensual. Por el contrario, si las
tareas referidas se desarrollan cuando el servidor ha cumplido en su totalidad dicha jornada, la
compensación, en descanso o abono, debe corresponder a las horas así trabajadas más un aumento
del 50% (62153/77, 31726/89,21151/91, 16805/92,5751/95,43856/98,45204/98, 31857/07).
Los funcionarios de Servicios de Salud que trabajan en sistemas rotativos de tercer o cuarto turno
conforme al artículo 94 del DL 2763, de 1979, en su texto refundido contenido en el DFL. 1, de
2005, del Ministerio de Salud, no tienen derecho al pago de horas extraordinarias por las horas
trabajadas en exceso en la entrega de esos turnos. Ello, porque tales dependientes tienen derecho
a la asignación de turno del DFL 1, de 2005, del Ministerio de Salud, la cual es incompatible con la
asignación establecida en la letra e) del articulo 98 de la ley 18834. Además, el articulo 95 de aquel
texto legal dispone que estos funcionarios no podrán realizar trabajos extraordinarios de ningún tipo,
salvo en casos excepcionales, cuando se trate de imprevistos motivados por emergencias sanitarias
o necesidades impostergables de atención a pacientes, los que deberán ser calificados por el Director
del establecimiento, por resolución fundada, caso en el cual le es aplicable el inciso segundo del
articulo 66 del Estatuto Administrativo, debiendo ser compensados con descanso y, si ello no fuere
posible, con un recargo en las remuneraciones. Por ende, los Directores de los Servicios deben
estructurar los sistemas de turno de modo que la jornada no exceda de 12 horas diarias, como lo
establece el artículo 94 del DFL indicado, norma que es obligatoria para los Jefes de los Servicios de
Salud, sin que pueda alterarse por motivo alguno (7077/06, 25157/06, 38738/06).
El personal de los Servicios de Salud integrante del sistema de turnos nocturnos rotativos cubiertos
por tres o cuatro funcionarios conforme al artículo 94 del DL 2763, de 1979, en su texto refundido
contenido en el DFL. 1, de 2005, del Ministerio de Salud, seleccionados para concurrir, fuera
de la jornada ordinaria de trabajo, a cursos de capacitación conforme al artículo 27 del Estatuto
Administrativo, tienen derecho al descanso complementario equivalente al tiempo efectivo de
asistencia a clases. Ello, porque según dicho artículo 94, la asignación por turno es incompatible
con las horas extraordinarias, salvo tratándose de trabajos imprevistos originados en emergencias
sanitarias o necesidades impostergables de atención de pacientes, según calificación por resolución
fundada del Director del establecimiento y, además, los funcionarios seleccionados para seguir
cursos de capacitación están obligados a asistir a éstos desde el momento de su selección, debiendo
considerarse en sus calificaciones los resultados obtenidos. El artículo 30, inciso segundo, de la ley
18834, establece que la asistencia a cursos obligatorios fuera de la jornada ordinaria de trabajo, da
derecho a un descanso complementario igual al tiempo efectivo de asistencia a clases (36294/06).
De acuerdo con el inciso segundo del artículo 95 del DFL. 1, de 2005, del Ministerio de Salud, es
posible colegir que las reuniones efectuadas fuera de la jornada ordinaria de trabajo por el personal
que se desempeña en tercer o cuarto turno nocturno rotativo, confieren a éstos el derecho a percibir
asignación por horas extraordinarias, en la medida que tales reuniones u otras actividades de
naturaleza semejante, se encuentren comprendidas dentro de las acciones o trabajos motivados
por emergencias sanitarias o necesidades impostergables de atención a pacientes calificadas por
el Director del establecimiento de salud correspondiente mediante resolución fundada. De ello se
sigue, entonces, que el Servicio de Salud debe adoptar las medidas necesarias conducentes a
evitar la realización de reuniones fuera de la jornada de trabajo, de modo de propender a que tales
actividades se desarrollen dentro de la jornada, en la medida que no se alteren o interrumpan las
funciones propias de la unidad o establecimiento de salud correspondiente (36294/06).
Los funcionarios de los Servicios de Salud que no se desempeñen en sistemas de turno cubiertos por
cuatro o tres funcionarios, y que realicen trabajos extraordinarios en cualquier otra modalidad, sólo
tienen derecho al pago de las horas extraordinarias con las limitaciones establecidas por el artículo
97 del DFL. 1, de 2005, del Ministerio de Salud. De este modo, no pueden percibirlas durante los
feriados, licencias y permisos con goce de remuneraciones, toda vez que este derecho de carácter
excepcional ha perdido eficacia jurídica luego de la vigencia de la normativa que rige la materia en
los Servicios de Salud, correspondiendo aplicar a sus funcionarios lo dispuesto en el citado articulo
97 (25157/06, 38738/06).
Concordancias: Arts. 10 del DL 1608, de 1976; 7 del DL 1953, de 1977; DFL 1046, de 1977, del
Ministerio de Hacienda, que reglamentó el régimen de trabajos extraordinarios en los servicios,
instituciones y empresas regidas por los artículos 1 y 2 del DL 249, de 1973. El citado DFL no está
vigente luego de la entrada en vigor de las normas del Título 111, Párrafo 2°, de la ley 18834,
salvo en lo que respecta a las normas que se refieren a las asignaciones adicionales que deben
considerarse en la base de cálculo para obtener el valor de la hora diaria de trabajo y aplicar el recargo
correspondiente, materias que ·se encuentran contempladas en los artículos 8 y 1O del mencionado
DFL, ya que estas disposiciones armonizan y complementan lo dispuesto en los artículos 62 (actual
artículo 68) y 63 (actual artículo 69) del Estatuto Administrativo (31726/89 y 27662/90). Arts. 9 de
la ley 191 04; 67, 69, 98, letra e), del EA; 63 del EAM, 94 al 97 del DFL 1, de 2005, del Ministerio de
Salud; 202 y 206 del C. del T.
Comentarios:
El Informe de la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno expresa que el inciso primero de esta
norma se modificó, eliminando la visación previa que establecía el proyecto del Ejecutivo. Agrega
que este trámite se consideró innecesario por estimarse que al tener la jefatura superior la atribución
de ordenar estos trabajos, lo hará ajustándose al presupuesto con que cuenta y en los casos
excepcionales que este precepto indica.
Añade el Informe que su inciso segundo es nuevo y establece que los trabajos extraordinarios se
compensarán con descanso complementario, señalándose asimismo, que lo serán con un recargo
en las remuneraciones si lo anterior no fuere posible. Ello recoge una práctica que se ha hecho usual
dentro de la Administración.
Tradicionalmente las Leyes de Presupuesto del Sector Público contemplaban una norma según la
cual el número de horas extraordinarias-año afectas a pago, fijado en los presupuestos de cada
Servicio Público, constituía el máximo que regía para el respectivo Servicio.
Preceptuaban esas leyes que sólo previa autorización del Ministerio de Hacienda, los Jefes de
Servicios podían disponer la realización de trabajos extraordinarios pagados por un número de horas
que excediera del consultado en el presupuesto correspondiente.
Sin embargo, ya en las leyes 19702 y 19774, que aprobaron el presupuesto del sector público para
los años 2001 y 2002, respectivamente, esta norma se eliminó.
En otro orden de ideas, es dable destacar que el Estatuto Administrativo no consulta disposiciones que
autoricen al Director de un Servicio para disponer turnos de su personal en la modalidad denominada
"de llamada". No obstante, ello no puede entrabar el cumplimiento de los fines y objetivos que el
ordenamiento jurídico ha asignado a un organismo de la Administración del Estado que está destinado
a cumplir funciones de especial naturaleza, como es la Oficina Nacional de Emergencia dependiente
del Ministerio del Interior, entidad que por mandato del DL 369, de 1974, está encargada durante
situaciones de emergencia, sismos o calamidades públicas, de la coordinación de las actividades
de cualquier entidad, pública o privada, relacionada con la solución de los problemas derivados de
tales situaciones.
Además, en conformidad con el articulo 3, inciso primero, de la ley 18575, la Administración está
al servicio de la comunidad, atendiendo las necesidades públicas en forma continua y permanente,
por lo que dicha institución debe establecer un sistema de trabajo que permita satisfacer de manera
eficaz y eficiente su labor de ente coordinador de situaciones de emergencia. Por tal motivo, respecto
de este Servicio en particular, resulta procedente contemplar el régimen de turnos de llamada, el cual
no constituye una decisión arbitraria o ilegal de su Director, sino que se funda en el cumplimiento de
la obligación que le ha entregado la ley.
sistema de turnos fue que éste se transformara en la forma habitual de cumplimiento de aquellas
labores que, por la naturaleza misma de las funciones que debe cumplir dicho Servicio, se extienden
más allá de la jornada habitual de funciones. Asi, el desempeño de horas extraordinarias ha pasado
a ser absolutamente excepcional cuando circunstancias especiales lo justifiquen, para atender
determinadas emergencias o tareas impostergables para la institución que, de no llevarse a cabo
pudieran ocasionar un perjuicio para las labores que el ordenamiento juridico le ha encomendado,
para lo cual se requiere, además, de una resolución fundada del Jefe Superior del Servicio que las
autorice.
Asimismo, la ley 19937 también ha creado una asignación de turno para los servidores de los Servicios
de Salud, cuyo fin ha sido transparentar el pago de los turnos realizados en dichos Servicios. Lo
anterior, con el fin de suprimir la práctica que existia en tales Servicios de pagar hasta 90 horas por
concepto de trabajos extraordinarios al personal que se desempeñaba en sistemas de turnos de 24
horas al dia, durante todo el año calendario, lo que producia una significativa recarga de trabajo que
redundaba, consecuentemente, en un alto ausentismo laboral. Asi, dicha asignación ha reemplazado
el sistema de pago de horas extraordinarias regido por el Estatuto Administrativo, por una retribución
pecuniaria imponible de carácter fija y permanente, la que se mantiene para los beneficiarios durante
los periodos de ausencia con goce de remuneraciones originados por permisos, licencias y feriado
legal.
ARTICULO 67.- Se entenderá por trabajo nocturno el que se Ley 18.834, Art. 61.
realiza entre las veintiuna horas de un día y las siete horas del
día siguiente.
Interpretación:
Se entiende por trabajo nocturno el que se realiza entre las veintiuna horas de un día y las siete
horas del día siguiente. La compensación adicional por labores nocturnas varia según si dichas
labores se ejecutan con cargo al número de horas comprendido en la jornada normal, o en exceso
de ella, pues en el primer caso esa retribución, ya sea otorgada bajo la modalidad de descanso o de
dinero, sólo debe comprender el aumento del cincuenta por ciento trabajado, porque el estipendio
correspondiente a las horas mismas de desempeño está considerado en el sueldo mensual. Por el
contrario, si las tareas referidas se desarrollan cuando el servidor ha cumplido en su totalidad dicha
jornada, la compensación, en descanso o abono, debe corresponder a las horas así trabajadas más
un aumento del cincuenta por ciento (62153177, 31726189,32375189, 21151191, 16805192,5751195,
43856198,45204198,39190100,31284106, 31857107).
Desde el momento en que una funcionaria se encuentra embarazada, no puede ser obligada a
desempeñar trabajos que se ejecuten en horario nocturno, conforme lo establece el inciso segundo,
letra e), del articulo 202 del Código del Trabajo, debiendo ser trasladada a cumplir labores en la
jornada compatible con su estado sin reducción de sus remuneraciones (31284106).
Las trabajadoras que desempeñen turnos de noche tienen derecho al beneficio de sala cuna igual
que aquellas que cumplen horario diurno, pues el Código del Trabajo no formula ninguna distinción
en cuanto al horario de funcionamiento de las salas cunas, ni de desempeño de las funcionarias, por
lo que el empleador está obligado a adoptar las medidas que permitan proveerles del servicio de sala
cuna en alguna de las formas que expresamente ha previsto la ley (38661195, 57317106).
Concordancias: Arts. 69 del EA; 64 del EAM, 202, inciso segundo, letra e), del C del T.
Comentarios:
Dada la naturaleza de los trabajos nocturnos, se les ha asignado una retribución especial más elevada
que la prevista para los trabajos extraordinarios a continuación de la jornada ordinaria, consistente
en una compensación con descanso complementario según el tiempo trabajado más un aumento de
un cincuenta por ciento o, en caso de no ser posible, con un recargo del cincuenta por ciento sobre
el valor de la hora de trabajo calculada según el articulo 68.
ARTICULO 68.- El descanso complementario destinado a campen- Ley 18.834, Art. 67.
sar Jos trabajos extraordinarios realizados a continuación de la
jornada, será igual al tiempo trabajado más un aumento del veinti-
cinco por ciento.
Interpretación:
Si el Jefe Superior del Servicio ordena turnos a sus funcionarios para que se encuentren disponibles
en cualquier lugar· y con la obligación de concurrir al Servicio cuando son llamados para cumplir
tareas de emergencia, fuera del horario hábil y también durante los días sábado, domingo y
festivos, el tiempo efectivamente trabajado debe compensarse con descanso complementario, y
si ello no fuere posible por razones de buen servicio, se deberá compensar con el recargo en las
remuneraciones que establece la ley, pues de lo contrario se produciría un enriquecimiento sin causa
para la Administración (27896/02, 11962/06).
Conforme al articulo 71 de la ley 18834, el trabajo ejecutado en las tardes de los días 17 de septiembre
y 24 y 31 de diciembre debe considerarse como extraordinario, el que se compensa con descanso
complementario igual al tiempo servido más un aumento de un veinticinco por ciento, o bien pagarse
con un recargo también del veinticinco por ciento sobre el valor de la hora ordinaria. Si esos días
son sábado o domingo, el trabajo extraordinario efectuado en ellos deberá compensarse con un
descanso igual al tiempo trabajado más un cincuenta por ciento o con un recargo del cincuenta por
ciento sobre la hora ordinaria (12722/91, 11435/02, 17212/05).
Inciso 1•
Los trabajos nocturnos o ejecutados en días sábado, domingo o festivo, dan derecho a un descanso
complementario igual al tiempo trabajado más un aumento de un cincuenta por ciento O; en su caso,
a un recargo de igual porcentaje sobre el valor de la hora ordinaria de trabajo (31726/89, 37060/99,
62/01 ).
El plazo para impetrar el beneficio del descanso complementario es el contemplado en el articulo 155
(actual articulo 161) de la ley 18834, esto es, de dos años contados desde la fecha en que se hizo
exigible, pues este precepto se aplica a todos los beneficios que no sean las asignaciones referidas
en el articulo 94 (actual articulo 99) del mismo Estatuto. Tratándose de la asignación compensatoria
por horas extraordinarias, el derecho al cobro de las mismas prescribe en el plazo de seis meses,
en conformidad con los artículos 93 (actual articulo 98), letra e), y 94 (actual articulo 99) del Estatuto
Administrativo (1280/92 -complementado por el24428/96-, 1286/92, 26339/94, 37617/96, 2815/00,
46051/00, 29636/01' 31 07/02).
No existe plazo para compensar con descanso complementario o con un recargo en las remuneraciones
las horas extraordinarias, al contrario de lo que ocurre con el régimen que establece el Código del
Trabajo, en que esas horas extras deben liquidarse y pagarse conjuntamente con las remuneraciones
ordinarias del respectivo periodo (27386/96).
Inciso 2°
La compensación a través del pago de horas extraordinarias procede cuando no sea posible otorgar
el derecho principal que es el descanso compensatorio (26534/93, 2312/95, 42095/96, 28162/00).
Para el cálculo de la retribución en dinero por las labores extraordinarias, el valor de la hora diaria
de trabajo ordinario será el cuociente que se obtenga de dividir por 190 el sueldo, más la asignación
de antigüedad y profesional cuando procedan (31726/89, 8876/98, 34388/99, 62/01, 19258/06,
38486/06).
Esta disposición no establece cuáles son las demás asignaciones que junto con el sueldo deben
considerarse para determinar el valor de la hora diaria de trabajo, remitiéndose a las que determine
la ley, por lo que será necesario atender a lo que establezca la normativa pertinente (17309/90,
13894/91,26681/97, 62/01, 19258/06).
Desde la vigencia de la ley 18834, el DFL 1046, de 1977, del Ministerio de Hacienda, reglamentario
de los regimenes de trabajos extraordinarios, dictado conforme a la facultad otorgada por el DL 1608,
de 1976, articulo 1O, incisos segundo y tercero, ya no se encuentra vigente, salvo en lo que respecta
a las normas referidas a las asignaciones adicionales que deben considerarse en la base de cálculo
para obtener el valor de la hora diaria de trabajo del personal afecto a la Escala Única del DL 249,
de 1973, contenidas en los articulas 8 y 1O de dicho decreto con fuerza de ley (27662/90, 26339/94,
58328/03).
Las sumas adeudadas a un funcionario por concepto de horas extraordinarias, deben pagarse al
valor fijado a la fecha en que hubo de materializarse su pago, ya que las obligaciones cuya fuente
directa es la ley sólo pueden reajustarse y generar intereses si una disposición legal asi lo establece
expresamente. A su vez, en los articulas 60 (actual articulo 66) y siguientes y 93 (actual articulo 98),
letra e), de la ley 18834, que regulan las horas extraordinarias, no existe disposición alguna que
contemple su reajustabilidad y pago de intereses (40085/98).
Es improcedente calcular las horas extraordinarias a que tiene derecho un funcionario, considerando
la planilla suplementaria que disfruta por haber sido encasillado en un grado inferior al que poseia,
pues esa planilla sólo persigue, por regla general, compensar la disminución de remuneraciones y
no garantiza la mantención en los mayores grados que aquéllos ocupaban, por el hecho de percibir
la diferencia de rentas (32658/89, 30766/92, 36749/95).
Habiéndose establecido que el personal de un servicio tiene derecho al pago de horas extraordinarias
efectuadas, éste no puede transar con algunos de ellos para rebajar el monto que por ese concepto
les corresponde, debiendo pagarse lo que legalmente procede. Asimismo, el descuento en las
remuneraciones de aquellos empleados que no cumplen las labores ordinarias, debe considerar el
valor de la hora normal de trabajo y no la que sirve de base para el calculo de las horas extraordinarias
(10843/99).
Conforme al articulo 6 del decreto 7, de 1978, del Ministerio de Hacienda, los funcionarios designados
en cargos de instructores o en otros en cuyas funciones esté considerada la actividad docente de
~apacitación, asimilados a un grado de la Escala Única de Sueldos, fuera de su jornada habitual,
no se remuneran por horas de clases, sino que. cuando corresponda, por el sistema de trabajos
extraordinarios (7053/95, 40412/98, 8322/00).
El cálculo de las horas extraordinarias cuando existe un sistema de turnos mensuales depende de
si éstas se desempeñan en forma fija o variable. Tratándose de horas extraordinarias fijas, debe
considerarse el desempeño extraordinario realizado por el servidor durante el mes inmediatamente
anterior a aquél en que comienza a hacer uso del beneficio respectivo; en tanto que, en el caso
que los trabajos extraordinarios sean variables, se pagará en relación con el promedio de horas
extraordinarias que haya realizado en los últimos doce meses anteriores a aquél en que comience
a hacer uso de la aludida franquicia (29193/81, 5680/85, 6167/91, 4107/93, 16113/93, 6112/94,
24305/01, 3862/02, 45867/04).
Cuando en el sistema de turnos es necesario determinar la remuneración media diaria para lapsos
inferiores a un mes, basta dividir por 30 la remuneración media mensual. Esta regla procede,
además, en el caso de los funcionarios que si bien no desempeñan turnos, están adscritos a un
sistema estable de cumplimiento de sus tareas a través del sistema de horas extraordinarias, al
margen de la jornada ordinaria de trabajo que deben cumplir, si ellas son de carácter variable. Por el
contrario, si las horas extraordinarias permanentes son invariables, debe considerarse, para pagar
remuneraciones durante permisos, licencias o feriados, el desempeño realizado por el interesado,
a titulo de trabajos extraordinarios, durante el mes inmediatamente anterior a aquél en que se
comienza a hacer uso del beneficio respectivo (17909/97, 24305/01, 3862/02, 45867/04).
Concordancias: Arts. 66 y 98, letra e), del EA; Arts. 1O del DL 1608, de 1976; 7 del DL 1953, ¡(¡
de 1977; DFL 1046, de 1977, del Ministerio de Hacienda, que reglamentó el régimen de trabajos "t=a
e
extraordinarios en los servicios, instituciones y empresas regidas por los articulas 1 y 2 del DL 249, o
·¡¡
de 1973. El citado DFL, no está vigente luego de la entrada en vigor de las normas del Titulo 111, e
Párrafo 2°, de la ley 18834, salvo en lo que respecta a las normas que se refieren a las asignaciones
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e
adicionales que deben considerarse en la base de cálculo para obtener el valor de la hora diaria o
·¡¡
de trabajo y aplicar el recargo correspondiente, materias que se encuentran contempladas en los
articulas 8 y 1O del mencionado DFL, ya que estas disposiciones armonizan y complementan lo =:a
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·º'
dispuesto en los artículos 62 (actual articulo 68) y 63 (actual articulo 69) del Estatuto Administrativo
-o
' .!2 (/)
(31726/89 y 27662/90); 65 del EAM. ::1.!1!
'.:'!::::: Q.J
1-0
Comentarios:
De acuerdo con este articulo, la forma normal de retribuir la realización de horas extraordinarias a
continuación de la jornada ordinaria es con descanso complementario y sólo si ello no fuera posible,
con una asignación que incluye un recargo en el valor de la hora diaria de trabajo.
ARTICULO 69.- Los empleados que deban realizar trabajos nocturnos Ley 18.834, Art. 63.
o en días sábado, domingo y festivos deberán ser compensados
con un descanso complementario igual al tiempo trabajado más un
aumento de cincuenta por ciento.
Interpretación:
Los trabajos extraordinarios deben compensarse con un descanso complementario y, si ello no fuere
posible por razones de buen servicio, con un recargo en las remuneraciones (1673190, 21151191,
26534193, 17290197,40752199, 28162100).
Inciso 1•
Las labores ejecutadas en dia sábado, con cargo a horas de la jornada ordinaria por el personal
regido conforme a la ley 18834, tienen el carácter de trabajos extraordinarios por el sólo hecho
de ejecutarse ese día, considerado inhábil de acuerdo con el Estatuto Administrativo (26384190,
33710190, 8718191' 26693191' 24770195, 39190100).
La norma contenida en el inciso segundo del articulo 1 de la ley 17246, reglamentada por el decreto
1615, de 1969, del Ministerio del Interior, que permitía extender la jornada de trabajo hasta el
día sábado, no es aplicable a los trabajadores afectos al Estatuto Administrativo desde el 23 de
septiembre de 1989 (31726189, 21151191).
No corresponde aplicar a los funcionarios regidos por el Estatuto Administrativo el articulo 31 (actual
artículo 32) del Código del Trabajo, que señala que se considerarán horas extraordinarias, a falta
de pacto escrito, las que se trabajen en exceso de la jornada convenida, con conocimiento del
empleador, porque de acuerdo con el articulo 60 (actual artículo 66) de la ley 18834, para que se
configure el derecho a compensación o pago por ese tiempo extraordinario, es necesario que éste
haya sido dispuesto formalmente por el Jefe Superior del Servicio o Director Regional de servicios
nacionales desconcentrados (27662190).
La compensación adicional por labores nocturnas o en días sábado, domingo y festivos, varia según
si dichas labores se ejecutan con cargo al número de horas comprendido en la jornada normal, o en
exceso de ella. En el primer caso, esa retribución, ya sea otorgada bajo la modalidad de descanso o
de dinero, sólo debe comprender el aumento del cincuenta por ciento trabajado, porque el estipendio
correspondiente a las horas mismas de desempeño está considerado en el sueldo mensual. Por el
contrario, si las tareas referidas se desarrollan cuando el servidor ha cumplido en su totalidad dicha
jornada, evento en el cual la compensación -en descanso o abono-, debe corresponder a las horas
así trabajadas más un aumento del cincuenta por ciento (62153177, 31726189, 32375189, 21151191,
16805192,5751195, 31857107).
No puede otorgarse compensación por horas extraordinarias en periodos anteriores a la fecha en que
éstas fueron autorizadas, ya que según el articulo 60 (actual articulo 66) ellas deben ser previamente
ordenadas por la autoridad (26534193, 7420196, 2815100).
Las labores desempeñadas los días sabado, domingo o festivos son de naturaleza extraordinaria
y, en consecuencia, el tiempo destinado a colación en esa jornada, al no satisfacer los requisitos
específicos que en esta materia exige el decreto 1897, de 1965, del Ministerio del Interior, debe
necesariamente descontarse del cómputo de las horas extraordinarias. De acuerdo con ese decreto,
el tiempo destinado a colación es de cargo del empleador cuando las labores se desempeñan de
manera ordinaria y en alguna de las localidades afectas al sistema de jornada continua implantado
por esa normativa (30253/93, 20504/94, 33102/94).
Las trabajadoras que se desempeñan en horario nocturno, tienen derecho al beneficio de sala cuna,
del mismo modo que aquéllas que cumplen horario diurno (38661/95, 57317/06).
Según el artículo 202 del Código del Trabajo, durante el período de embarazo, a la trabajadora
ocupada habitualmente en tareas consideradas por la autoridad como perjudiciales para su salud, debe
trasladarsele sin reducción de sus remuneraciones a otra labor, entendiéndose como especialmente
perjudiciales, todo trabajo que: a) obligue a levantar, arrastrar o empujar grandes pesos; b) exija
esfuerzo físico, incluido el permanecer de pie largo tiempo; e) se ejecute en horario nocturno, d) se
realice en horas extraordinarias, y e) la autoridad competente lo declare inconveniente para el estado
de gravidez (11034/01, 6704/03, 31284/06).
El plazo para impetrar el beneficio del descanso complementario es el contemplado en el artículo 155
(actual artículo 161) de la ley 18834, esto es, de dos años contados desde la fecha en que se hizo
exigible, pues este último precepto se aplica a todos los beneficios que no sean las asignaciones
referidas en el artículo 94 (actual artículo 99) del mismo Estatuto (1280/92 -complementado por el
24428/96-, 1286/92, 26339/94, 37617/96, 2815/00,46051/00,29636/01,3107/02, 54297/05).
El plazo para impetrar el pago de las horas extraordinarias es de seis meses, contados desde la
fecha en que dichos emolumentos se hicieron exigibles, de acuerdo con la regla del artículo 94
(actual artículo 99) (1280/92, 14158/94 -complementados por el24428/96-, 26339/94, 37060/99,
2815/00,46051/00, 21643/03, 38978/05).
Las horas que comprende el descanso complementario no pueden acumularse transcurridos los dos
años de plazo que establece el artículo 155 (actual artículo 161) de la ley 18834, porque no existe
disposición legal que así lo permita (35652/98).
Las sumas adeudadas a un funcionario por concepto de horas extraordinarias, deben pagarse al
valor fijado a la fecha en que hubo de materializarse su pago, ya que las obligaciones cuya fuente
c;lirecta es la ley sólo pueden reajustarse y generar intereses si una disposición legal así lo establece
expresamente. A su vez, en los artículos 60 (actual artículo 66) y siguientes y 93 (actual artículo 98),
letra e), de la ley 18834, que regulan las horas extraordinarias, no existe disposición alguna que
contemple su reajustabilidad y pago de intereses (40085/98).
Habiéndose establecido que el personal de un servicio tiene derecho a percibir horas extraordinarias
por haber sido ya efectuadas, éste no puede transar con algunos de ellos para rebajar el monto
que por ese concepto les corresponde, debiendo pagarse lo que legalmente procede. Asimismo, el
descuento en las remuneraciones de aquellos empleados que no cumplen las labores ordinarias,
debe considerar el valor de la hora normal de trabajo y no la que sirve de base para el cálculo de las
horas extraordinarias (1 0843/99).
El articulo 1 de la ley 19538 estableció una asignación por turno para el personal de Oficiales
y Vigilantes Penitenciarios de Gendarmería de Chile, así como para el personal a contrata que
cumpla funciones de tales, cuyos montos son establecidos por la misma disposición, destinada
a retribuir pecuniariamente al referido personal el desempeño de jornadas de trabajo en horarios
total o parcialmente diferentes de la jornada ordinaria de funcionamiento del Servicio, incluso en
horario nocturno y en días sábado, domingo y festivos, según lo demanden las necesidades de la
Institución. Estos turnos pueden comprender un número de horas superior a la jornada ordinaria de
trabajo del funcionario, la que será incompatible con el desempeño de horas extraordinarias, salvo
que el Director del Servicio lo autorice, mediante resolución fundada, cuando las circunstancias lo
justifiquen (14083/98, 26389/01, 51849/04, 44114/05).
La asignación de turno establecida por el articulo 97 del DFL. 1, de 2005, del Ministerio de Salud,
que fijó el texto refundido, coordinado y sistematizado del DL. 2. 763, de 1979, y de las leyes 18933
y 18469, para el personal de planta o a contrata de los Servicios de Salud regidos por la ley 18834 y
el DL 249, de 1973, reemplazó el sistema de pago de horas extraordinarias en esos Servicios. Dicha
asignación corresponde a quienes se encuentren formalmente destinados a trabajar en horarios
total o parcialmente diferentes de la jornada ordinaria, incluso en horario nocturno y en días sábado,
domingo y festivos, acorde con las necesidades de los establecimientos de salud, y mantienen el
derecho a percibirla durante los periodos de ausencia con goce de remuneraciones originados por
permisos, licencias y feriado legal. Asimismo, según el citado articulo 97, las horas extraordinarias
que perciban los funcionarios de planta y a contrata de los Servicios de Salud, cualquiera que sea
el motivo de su origen, no constituyen remuneraciones permanentes para ningún efecto legal y
consecuentemente, no pueden percibirse durante los feriados, licencias y permisos con goce de
remuneraciones (33073/06).
Inciso 2•
La jornada ordinaria nocturna se remunera de manera extraordinaria, con el recargo del cincuenta
por ciento, sólo si excede las 44 horas semanales. El único factor a considerar para el cálculo del
beneficio es de 190 y no los 189 ó 198, según se trate de 30 á 31 días que compongan el mes en
cuestión, ya que dicho factor es único y se aplica todos los meses independientemente que éstos
tengan 28, 29, 30 á 31 días (21151/91, 16805/92, 42697/98).
Concordancias: Arts. 66, 99 y 161 del EA; 66 del EAM; decreto 1897, de 1965, del Ministerio del
Interior, que reglamenta la implantación de la jornada única o continua de trabajo.
Comentarios:
Al igual que el articulo anterior, la forma normal de retribuir la realización de labores extraordinarias
nocturnas o en días sábado, domingo y festivos es con un descanso complementario igual al tiempo
trabajado más un aumento de cincuenta por ciento, y sólo si ello no fuere posible, con una asignación
que incluye un recargo en el valor de la hora diaria de trabajo en igual porcentaje.
ARTICULO 70.- El jefe superior de la institución, el Secretario Ley 18.834, Art. 64.
Regional Ministerial o el Director Regional de servicios nacionales
desconcentrados, según corresponda, ordenarán Jos turnos pertinentes
entre su personal y fijarán los descansos complementarios que
correspondan.
Interpretación:
Corresponde a la autoridad administrativa disponer la realización de turnos por parte del personal,
cuando ello sea necesario para la ejecución de determinadas tareas que sean indispensables para
el desempeño adecuado de las funciones del Servicio, los cuales pueden abarcar parte de la
jornada normal de trabajo e implicar, ademas, el cumplimiento de horas extraordinarias, respetando
las normas estatutarias pertinentes (31726/89, 9954/91, 1280/92, 16805/92, 13243/01, 20036/01,
50853/05).
El sistema de turnos que se reconoce en el articulo 70 de la ley 18834, se refiere únicamente a una
particular forma de distribución de la jornada diaria de trabajo, conforme a la cual, los empleados
afectos a tal sistema deben desarrollar, de una manera personal y continua, en un horario especial,
las labores que le impone el empleo que ocupan (50853/05).
Los turnos que el Jefe Superior, el Secretario Regional Ministerial o el Director Regional de servicios
nacionales desconcentrados pueden ordenar fijando los descansos pertinentes que procedan,
pueden abarcar parte de la jornada normal de trabajo y significar, ademas, el desempeño de labores
en dias sábado, domingo y festivos y el trabajo en horas nocturnas (16805/92, 5751/95, 43856/98,
46117/99, 8740/05).
Los sistemas de turnos deben ser regulares y permanentes para efectos de determinar si es o
no procedente el pago de horas extraordinarias. Asi, corresponde considerar las horas diurnas
trabajadas, es decir, entre las 07:00 y las 21:00 horas, en dias habiles y aquéllas desempeñadas en
jornadas nocturnas, en sabado, domingo y festivos, sin importar si éstas se llevaron a cabo dentro
del horario fijado o es producto de un reforzamiento. Por ello, no pueden existir horas extraordinarias
a continuación de la jornada laboral con un recargo de un 25%. Para calcular horas extraordinarias
que procedan, primero debe establecerse el número de horas ordinarias y extraordinarias que
efectuó el trabajador. Luego, si no se han completado las horas ordinarias mensuales que obliga el
cargo, se imputarán como tallas horas extraordinarias que se requieran, porque en la remuneración
ordinaria, se cancela el total de la jornada mensual, por lo que de no efectuarse dicha imputación,
corresponderia devolver lo pagado por tal concepto (31857/07).
Al momento de fijar turnos en Servicios cuyas funciones no pueden paralizarse, la autoridad debe
tener en cuenta tanto la posibilidad real de que el empleado se encuentre en condiciones de efectuar
adecuadamente las tareas que se le encomiendan, como el hecho que la extensión horaria de los
mismos no le signifique un esfuerzo fisico o intelectual que, por su intensidad, pueda afectar su salud
(31726/89, 19514/99,46117/99, 2660/01, 35204/01, 19028/02, 51849/04).
El establecimiento de turnos entre el personal, dispuestos por el Jefe Superior de una Institución, no
puede significar la fijación de una jornada de trabajo inferior a 44 horas semanales, salvo que se trate
de plazas provistas con jornada parcial (37833/00, 44215/00).
18834. Si bien la autoridad administrativa está facultada para disponer el cumplimiento de turnos
por el personal cuando sea necesario para la ejecución de tareas indispensables del Servicio, debe
respetar las normas estatutarias que sobre la materia rijan a los servidores que las desarrollan
(25118/85, 3647/90,3351/93,21991/94, 50853/05).
Si el Jefe Superior del Servicio ordena turnos a sus funcionarios para que se encuentren disponibles
en cualquier lugar y con la obligación de concurrir al Servicio cuando son llamados para cumplir
tareas de emergencia, fuera del horario hábil y también durante los días sábado, domingo y
festivos, el tiempo efectivamente trabajado debe compensarse con descanso complementario, y
si ello no fuere posible por razones de buen servicio, se deberá compensar con el recargo en las
remuneraciones que establece la ley, pues de lo contrario se produciría un enriquecimiento sin causa
para la Administración (27896/02, 11962/06).
Las trabajadoras que se desempeñan en horario nocturno, tienen derecho al beneficio de sala cuna,
del mismo modo que aquéllas que cumplen horario diurno (38661/95, 57317/06).
El feriado de los funcionarios que laboren en sistemas de turnos se otorga por día y no en relación
con las horas diarias en que deba desempeñar sus funciones según la especial distribución de la
jornada semanal de trabajo que puede efectuar la superioridad del Servicio conforme al articulo 70
del Estatuto Administrativo (48207/07).
Es improcedente marginar a los dirigentes gremiales, por su condición de tal, del sistema de turnos
y del pago de horas extraordinarias a que tenían derecho antes de entrar a servir sus cargos de
representación, pues ello contraviene lo dispuesto en el articulo 25 de la ley 19296, que establece la
inamovilidad de tales dirigentes (31568/00, 28171/04).
El articulo 1 de la ley 19538 estableció una asignación por turno para el personal de Oficiales
y Vigilantes Penitenciarios de Gendarmería de Chile, asi como para el personal a contrata que
cumpla funciones de tales, cuyos montos son establecidos por la misma disposición, destinada
La asignación de nivelación penitenciara que el articulo 4 de la ley 19538 estableció para los
funcionarios de planta de Gendarmería de Chile no comprendidos en el articulo 1 de la misma ley,
que se refiere a los Oficiales y Vigilantes Penitenciarios, es incompatible con la asignación de turno
establecida en esta última disposición, y con la asignación contemplada en la letra e) del articulo 93
(actual articulo 98) de la ley 18834, esto es, con las horas extraordinarias. Por ello, Gendarmería
no puede otorgar ambos beneficios, salvo, cuando en casos debidamente calificados, el Director
Nacional, autorice mediante resolución fundada, el desempeño de horas extraordinarias, las que se
compensarán según lo dispuesto en los artículos 68 ó 69 del mencionado Estatuto Administrativo,
según corresponda (10877/04, 31200/04, 7665/07).
La asignación de turno establecida por el articulo 97 del DFL. 1, de 2005, del Ministerio de Salud,
que fijó el texto refundido, coordinado y sistematizado del DL 2. 763, de 1979, y de las leyes 18933 y
18469, para el personal de planta o a contrata de los Servicios de Salud regidos por la ley 18834 y el
DL 249, de 1973, reemplazó el sistema de pago de horas extraordinarias en dichos servicios. Dicha
asignación corresponde a quienes se encuentren formalmente destinados a trabajar en horarios
total o parcialmente diferentes de la jornada ordinaria, incluso en horario nocturno y en días sábado,
domingo y festivos, acorde con las necesidades de los establecimientos de salud, y mantienen el
derecho a percibirla durante los periodos de ausencia con goce de remuneraciones originados por
permisos, licencias y feriado legal. Asimismo, según el citado articulo 97, las horas extraordinarias
que perciban los funcionarios de planta y a contrata de los Servicios de Salud, cualquiera que sea
el motivo de su origen, no constituyen remuneraciones permanentes para ningún efecto legal y
consecuentemente, no pueden percibirse durante los feriados, licencias y permisos con goce de
remuneraciones (33073/06),
Concordancias: Arts. 28 y 31 de la LOCBGAE; 65, 66 y 69 del EA; 67 del EAM, 94 al 97 del DFL. 1,
de 2005, del Ministerio de Salud; 202 del C del T.
Comentarios:
La facultad de las autoridades superiores de establecer turnos entre su personal se relaciona con
la obligación que recae sobre los Servicios Públicos, sean centralizados o descentralizados, de
satisfacer las necesidades colectivas de manera regular y continua, a fin de dar cumplimiento al
principio de servicialidad que el articulo 1 de la Constitución Política asigna al Estado.
ARTICULO 71.- Los funcionarios no estarán obligados a trabajar Ley 18.834. Art. 65.
las tardes de los días 17 de septiembre y 24 y 31 de diciembre de
cada año, sin perjuicio de lo dispuesto en el articulo 66.
Interpretación:
La palabra "tarde" empleada en este artículo, comprende el tiempo que hay desde el mediodía
hasta el anochecer. La jornada ordinaria de trabajo en los di as a que se refiere el artículo 71 de la
ley 18834, sólo puede extenderse hasta las 12 horas, y los funcionarios que trabajan durante esas
tardes, tienen derecho a percibir horas extraordinarias, que deben ser asimiladas para su pago a las
realizadas a continuación de la jornada de trabajo, porque esos lapsos jurídicamente no son festivos,
esto es, deben compensarse con un descanso complementario igual al tiempo laborado más un
aumento del veinticinco por ciento o pagado con un recargo del veinticinco por ciento sobre el valor
de la hora ordinaria, calculada ésta en la forma prevista en el inciso final del artículo 62 (actual
artículo 68) de la ley 18834 (12722191, 11435102,31387104, 17212105).
Para efectos del feriado legal, los di as que menciona este precepto deben computarse como hábiles
y cabales (4899194).
Los permisos administrativos que de conformidad con el artículo 104 (actual artículo 109) se conceden
los días 17 de septiembre y 24 y 31 de diciembre, deben considerarse otorgados por medio día y
no por el día completo, ya que la jornada ordinaria en esos días sólo puede extenderse hasta las 12
horas, con prescindencia del hecho de que ese lapso sea inferior al que comprende la respectiva
media jornada laboral. Esto, por cuanto según el diccionario de la Real Academia de la Lengua
Española, la palabra "tarde", empleada por el artículo 65 (actual articulo 71) comprende el tiempo
que hay desde el mediodía hasta el anochecer (26384190).
ARTICULO 72.- Por el tiempo durante el cual no se hubiere Ley 18.834, Art. 66.
efectivamente trabajado no podrán percibirse remuneraciones,
salvo que se trate de feriados, licencias o permisos con goce
de remuneraciones, previstos en el presente Estatuto, de la
suspensión preventiva contemplada en el artículo 136, de caso
fortuito o de fuerza mayor. Mensualmente deberá descontarse por
los pagadores, a requerimiento escrito del jefe inmediato, el tiempo
no trabajado por Jos empleados, considerando que la remuneración
correspondiente a un día, medio día o una hora de trabajo, será el
cuociente que se obtenga de dividir la remuneración mensual por
treinta, sesenta y ciento noventa, respectivamente.
Interpretación:
Inciso 1•
Quien ingresa a la Administración del Estado o desea permanecer en ella debe someterse a los
deberes y prohibiciones que contempla el ordenamiento jurídico y en este sentido están obligados
a cumplir la jornada de trabajo. El desempeño de una función pública tendiente a colaborar en
la satisfacción de necesidades colectivas tiene previsto el pago de una remuneración, que es la
contraprestación a que tiene derecho toda persona que ejerce funciones, lo cual responde al principio
retributivo que sustenta toda relación laboral, esto es, que por el trabajo realizado corresponde el
pago de la remuneración respectiva, en tanto que ésta no procede si ello no ocurre. Si no existe
la obligación de cumplir la jornada tampoco resulta procedente pagar estipendios a los servidores
públicos por desempeños que no hayan sido efectivamente realizados, salvo causa legal que los
autorice, entre las cuales no se cuenta la participación en huelgas, interrupción o paralización
ilegal de actividades. La paralización de actividades es una infracción al artículo 19, W 16, de la
Constitución Política, dado que dicha disposición constitucional establece expresamente que no
podrán declararse en huelga los funcionarios del Estado ni de las municipalidades, limitación que se
impone en concordancia con el principio de que los servicios públicos por su propia naturaleza deben
satisfacer necesidades colectivas de modo regular y continuo (16973/99, 4981/04).
De acuerdo con el principio retributivo que sustenta toda relación de trabajo, por el tiempo durante el
cual no se hubiere efectivamente trabajado no podrán percibirse remuneraciones, salvo que se trate
de feriados, licencias, permisos con goce de remuneraciones, suspensión preventiva contemplada
en el artículo 130 (actual artículo 136) del Estatuto Administrativo, caso fortuito o fuerza mayor
(48789/00).
Como es un deber estatutario desempeñar el cargo en forma permanente, procede descontar de las
remuneraciones de un funcionario las horas que no cumplió con su jornada de trabajo (36318169,
32209190, 28707/95, 38182/05).
El descuento de remuneraciones contemplado en el articulo 66 (actual articulo 72) tiene lugar no sólo
en casos de inasistencias al empleo por parte de los funcionarios afectados, sino también cuando
ellos se abstienen de desarrollar labores, aunque hayan concurrido al Servicio durante la jornada
normal de asistencia del personal (11503/80, 10503/96,52681/04, 11107/05).
Cuando los funcionarios falten al trabajo por haber adherido voluntariamente a huelgas, interrupciones
o paralizaciones de labores, el valor del tiempo no trabajado debe descontarse de sus remuneraciones,
porque en esos casos no se configura ninguna causal legal de justificación (27479/91, 29295/91,
7542/92, 1104/93, 20494/93, 3464/94, 15522/96, 16973/99, 4981/04).
La paralización de actividades por parte del estudiantado de una universidad estatal, constituye un
caso de fuerza mayor que habilita a los funcionarios para percibir remuneraciones, no obstante no
haber trabajado, y legitima el pago parcializado de las mismas (42835/00).
Conforme a los artículos 55 (actual articulo 61), letra d), y 66 (actual articulo 72) de la ley 18834, es
obligación de los funcionarios cumplir el horario de trabajo, pudiendo su inobservancia, en caso de ser
injustificada, sancionarse con la medida disciplinaria de destitución, procediendo además descuentos
de remuneraciones por el tiempo no trabajado. De este modo, el funcionario que desempeña
efectivamente sus servicios dentro del horario determinado por la superioridad y, no obstante ello, no
cumple los sistemas de control horario fijados para ese fin, no infringe las obligaciones contenidas
en las normas citadas y, por ende, no procede efectuarle descuentos, ya que éste es aplicable sólo
por el tiempo no trabajado. Sin embargo, el incumplimiento del control horario infringe la obligación
de obedecer las órdenes impartidas por el superior jerárquico, pudiendo sancionarse conforme a los
artículos 114 (actual articulo 119) y siguientes, para hacer efectiva la responsabilidad administrativa
correspondiente (15458/92, 26782/99,47959/99,5902/00,19550/01, 22374/04, 13981/06).
Si bien es posible que el uso de medicamentos que producen gran somnolencia y recetados a
raíz de un accidente en acto de servicio justifique los atrasos de un funcionario, eximiéndolo de
responsabilidad administrativa, no lo libera de los descuentos por aquéllos. Esto, porque de acuerdo
con los articulo 59 (actual articulo 65), inciso tercero, y 66 (actual articulo 72), inciso primero, el
personal sólo tiene derecho a remuneraciones por el lapso en que realmente desempeñó el cargo que
sirve, salvo que se trate de feriados, licencias, permisos con goce de remuneraciones, suspensión
preventiva, caso fortuito o fuerza mayor. Por lo tanto, al empleado que no ejerce sus funciones por
causales diversas debe descontársele el tiempo no trabajado (33174/94).
No puede estimarse justificada la inasistencia en que incurre un empleado por haber ignorado que
su solicitud de permiso con goce de remuneraciones había sido rechazada, lo que es válido también
cuando no ha habido resolución de la autoridad, porque antes de ausentarse debió consultar si el
permiso se le había o no concedido (10633/93, 48314/01, 21646/03).
Para aplicar la regla contenida en el articulo 66 (actual articulo 72) de la ley 18834 y, específicamente,
respecto de los funcionarios suspendidos con ocasión de un sumario administrativo es necesario
distinguir entre remuneraciones permanentes u ordinarias, que son aquéllas que se fijan por la ley en
relación con el desempeño normal de un cargo, y las remuneraciones eventuales o accidentales, que
sólo se pagan cuando se cumplen ciertas condiciones como acontece con las horas extraordinarias,
las que constituyen una retribución por el desarrollo de labores fuera de la jornada ordinaria de
trabajo. Sólo durante los periodos de licencia, feriado o permisos con goce de remuneraciones de los
funcionarios que se desempeñan habitualmente fuera del horario normal de trabajo en los Servicios
que funcionan permanentemente, procede pagar las horas extraordinarias, ya que el funcionario
se encuentra ejerciendo beneficios estatutarios que lo autorizan para ausentarse de sus funciones,
y cuando no concurren dichas circunstancias, no procede el pago de dichas horas extraordinarias
por períodos durante las cuales éstas no han sido trabajadas, como ocurre precisamente con los
funcionarios que han sido objeto de suspensión durante un sumario administrativo, la que constituye
una medida de resguardo en favor de la Administración y no un beneficio estatutario (13776/95,
30741/98).
No procede ordenar restitución de la parte de las remuneraciones de la cual fue privado un funcionario
por aplicación de la medida de suspensión preventiva dispuesta en el sumario que se instruyó en
su contra, pues no concurre ninguno de los supuestos indicados en el artículo 136 del Estatuto
Administrativo, en el sentido que la restitución retroactiva opera si en definitiva fuere absuelto o se
le aplicara una medida disciplinaria inferior a la de destitución, ya que consta que se le sancionó al
término de dicho proceso con la medida de destitución (1 0932/07).
Para compensar horas no trabajadas en un empleo, por cumplir funciones inherentes a otro
compatible, en conformidad con el artículo 88 del Estatuto Administrativo, no cabe sino prolongar la
jornada en la que se ha inasistido, en un sistema de horario adicional, a fin de completar el horario
fijado por el legislador en el artículo 65, inciso primero, de la ley 18834. En el evento de no cumplir
con el deber de compensar el horario no trabajado de tal jornada, el empleado debe ser objeto de
deducciones de sus emolumentos por los lapsos no desempeñados efectivamente (38182/05).
Licencia médica
El rechazo de una licencia médica invalida el fundamento que justifica la inasistencia laboral, debiendo
procederse al descuento de las remuneraciones por el período no trabajado, sin perjuicio que la
misma constituya una prueba cierta de la enfermedad del funcionario y un principio de justificación de
las ausencias pertinentes (19575/90, 2648/92, 38850/95, 14242/96, 15228/99, 37765/00, 49994/03,
17134/04, 27674/07).
El incumplimiento de la jornada de trabajo puede aparecer justificado por fuerza mayor, como ocurre
cuando la autoridad administrativa decide recurrir a la fuerza pública para impedir el acceso del
personal a sus lugares de trabajo (36318/69).
Un funcionario no tiene derecho a obtener el pago de las remuneraciones que dejó de percibir
por el periodo que no estuvo trabajando con motivo del cese de funciones que le afectó como
consecuencia de su solicitud de jubilación, de la cual posteriormente se desistiera, reasumiendo
sus funciones con posterioridad en virtud del decreto anulatorio del beneficio previsional, por cuanto
la fuerza mayor, en los términos del articulo 45 del Código Civil, tiene lugar en el caso que un
funcionario público, por acto de autoridad, haya sido indebidamente privado del desempeño de su
empleo, evento en el cual tiene derecho a sus remuneraciones a pesar de no haber desempeñado
efectivamente sus funciones. Sin embargo, en el caso analizado, el cese de funciones decretado
por la autoridad respectiva con sujeción a las normas pertinentes, tuvo lugar a instancias de la
solicitud de jubilación presentada por el propio interesado, de la cual se desistió posteriormente,
de modo que no está probada la fuerza mayor, ya que para que ésta haya tenido lugar habría sido
necesario, además, que el ocurrente hubiese reclamado oportunamente de la medida que entrababa
su desempeño funcionario (15964/90).
Las ausencias de un funcionario a su lugar de trabajo motivada por el temporal de lluvia que provocó
el anegamiento de su vivienda, deben considerarse justificadas por tratarse de un caso fortuito,
siendo improcedente descontarle esos días no trabajados de sus remuneraciones (48789/00).
Para que se configure la fuerz8 mayor como causal de impedimento para prestar funciones p0r el
tiempo durante el cual no se hubiere efectivamente trabajado en virtud de una aceptación de renuncia
o de una destitución que no se ajustaron a derecho, no basta que exista una orden ilegitima o ilegal
de la autoridad que impida ejercer las mismas, sino que además, debe constar en forma inequívoca
que el afectado con la medida reclamó por todos los medios a su alcance de esa situación anómala
(7833/91, 10279/91, 16212/91, 30541/98, 49679/05).
Según el articulo 45 del Código Civil, la fuerza mayor o caso fortuito es el imprevisto imposible de
resistir, es decir, se exige que el hecho que ocasiona tal situación impida el accionar oportuno y
que sea irresistible. Así, una situacion de fuerza mayor no puede mantenerse indefinidamente en el
tiempo, dado que perdería su naturaleza de imprevista e irresistible (38081/02).
La circunstancia de que un funcionario público esté impedido de cumplir la jornada de trabajo por
haber sido designado por el Juez de Familia como curador ad litem de un menor, constituye un caso
de fuerza mayor, puesto que se trata de una imposición que, mediante resolución judicial fundada en
el articulo 19 de la ley 19968 afecta al aludido empleado, lo que no depende de su voluntad sino que
de la del magistrado. Por lo tanto, no procede que aquél extienda su jornada laboral para recuperar
aquella parte que debió emplear en cumplir sus tareas como curador ad litem, debiendo entonces
~Suspensión preventiva
Tie~en, dere8ho?al; pc¡go: de i'horas,extraordinariasc durante los 'feriados,' licencias'. o permisos con
:goee de: ren:mneradones,c lose funcionarios:que·realizan horas,extraordinarias en: forma permanente,
:emunidadescque: pon,la: naturaleza .de: las tareascquei lesccorresponden,: no: pueden paralizare sus
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eestán :_ejerciendo :beneficios 'estatutarios •. que, los,autorizan ,para .causentarse ,,de 'SUS labores.: Sin
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re mba ¡go¡ quienes'esténcsusp.end idos preventivamente por. un sumario ad mi nistrativor de coriform idad
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36226/03).
:Es ::irl)~rocedente cel .. descuento :del cBincuenta: por .Biento de las, remuneraciones e de, un -servidor
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, coriformídad.,con•el.artículo '1:30'. (actual:artículo '136). no priva al.'afectado del derecho a percibir. sus
,emolumentos por·el tiempo que ella: dure (30851/92).
, Resulta i8justificada Y' da lugar,•a los descuentos-correspondientes la inasistencia en. que :incurre un
, empleado que hace uso de feriado legal antes de conocersi éste le ha sido concedido por la autoridad
:·corres~ondiente,'.considerando.que no basta con que ese permiso haya sido solicitado formalmente,
ya que,además.tal: petición,: debe, inter~onerse anticipada; Y· oportunamente: a fin· de que: la• jefatura
•competente,' teniendo en cuenta' las necesidadescdei:Servido, se: pronuncie sobre' la posibilidad de
cautorizarlo.y•adopte las medidas tendientes a no interrumpir la función pública (51765/05).
,.Descuentos
'El procedimiento .de descuento que contempla-:eLartículo 66 (actual artículo 72) de la' ley 18834
cse,caplica cen' la medídacque: la infracción. al, deber: de desempeñar personalmente las, laborescen
i forma:regular:y continua, puedaconstatarsecde,.una• manera palmaria,ccomo: lo es, porcejemplo, •el
Si bien los descuentos por el tiempo no trabajado deben efectuarse en el mes en que éste se
produce, también se ajustan a derecho aquéllos que se realizan en los meses posteriores, por cuanto
la infracción que los hace procedente origina un crédito en favor del Fisco, que sólo se extingue
cuando opera el plazo general de prescripción de las obligaciones contemplado en el articulo 2515
del Código Civil (25906/98, 41250/99, 24790/07).
Es obligatorio para la autoridad ordenar que se realicen los descuentos de remuneraciones por el
periodo en que los funcionarios no cumplieron su jornada de trabajo (27479/91, 29295/91, 12289/92,
25490/92, 7259/07).
La atribución de pronunciarse sobre las licencias médicasse encuentra radicada en las Comisiones
de Medicina Preventiva e Invalidez, organismos que pueden rechazarlas, aprobarlas o bien reducir o
ampliar los periodos de reposo. Para velar por la certeza de la juridicidad de las relaciones jurídicas
y la racionalidad de las actuaciones de la autoridad, existe un procedimiento de reclamación para
oponerse al rechazo o modificación de las licencias médicas, lo cual supone la obligatoriedad de
atender a la resolución del organismo competente en materia de reclamaciones -la Superintendencia
de Seguridad Social- o esperar el término del plazo otorgado para su formulación antes de hacer
efectivo el descuento de remuneraciones por las sumas indebidamente percibidas (48847/99,
3069/04).
Un funcionario autorizado para hacer uso de diez días de permiso sin goce de remuneraciones,
conforme al articulo 105 (actual articulo 11 0), tiene derecho a percibir su remuneración por el mes
respectivo, con un descuento equivalente a la suma que resulta de multiplicar el número de días no
trabajados por la renta correspondiente a un día de labores, el que a su vez es el cuociente que se
obtuvo de dividir la remuneración mensual por treinta, siendo irrelevante para tales fines que el mes
tenga 28, 29, 30 ó 31 días (27102/90, 29010/92, 6591/96, 51765/05).
En el cálculo de los descuentos por atrasos, una vez determinado el total de tiempo no trabajado en
el mes, sólo deben estimarse las horas completas, despreciando los minutos (32888/94).
Inciso 2°
La norma contenida en el inciso segundo opera solamente cuando la ausencia o el atraso tiene
lugar durante un periodo breve de tiempo, esto es, cuando no abarca la totalidad del mes de que
se trate, puesto que en dicho caso no procede efectuar las cotizaciones ni ningún otro descuento
(2041 0/90).
Los descuentos por inasistencias o atrasos injustificados no afectan el monto de las cotizaciones y
demás descuentos legales, por lo que las imposiciones previsionales deben efectuarse sobre el total
de las remuneraciones, aunque el monto que perciba el funcionario resulte menor por causa de los
descuentos por atrasos o inasistencias (15836/92, 24561/97).
Inciso 3°
Tratándose de infracciones administrativas que conllevan una sanción disciplinaria especifica como
ocurre con la destitución por atrasos sin causa justificada, previa investigación sumaria, el Jefe
Superior del Servicio puede rebajar ese castigo, pero su decisión debe ser fundada en el texto
del documento que materializa la medida que en definitiva se decide aplicar (16622/85, 35083/90,
14711/91,16180/91,1613/92,9926/93,19413/96,5411/99, 33152/04).
Es improcedente aplicar, en una investigación sumaria, una sanción a un funcionario que incurriera en
inasistencias por más de tres días consecutivos, por cuanto no está probado que dichas inasistencias
fueren efectivamente injustificadas, ya que el rechazo de la licencia médica presentada por parte del
organismo de salud competente impide al afectado gozar de las remuneraciones o subsidios por
el periodo en que no concurrió a trabajar, pero constituye una prueba cierta de su enfermedad y
un principio de justificación de las ausencias laborales (19575/90, 12821/91, 13087/92, 15477/93,
13424/94, 30243/94, 12974/00,37765/00, 26083/05).
Tratándose tanto de las ausencias ininterrumpidas, contempladas en este precepto, como de las
inasistencias en días .discontinuos, prevista en el articulo 119 (actual articulo 125), letra a), para
perseguir la responsabilidad de los funcionarios infractores, resulta aplicable la investigación sumaria
prevista en el inciso final del articulo 66 (actual articulo 72) (30830/94).
La destitución previa investigación sumaria sólo puede aplicarse en los casos de varios atrasos y
ausencias reiterados sin causa justificada. Por tal motivo, la investigación sumaria que se instruya en
contra de un funcionario afectado por un estado depresivo o que padecía alcoholismo a la fecha en
que acontecieron los hechos investigados, previamente a la aplicación de una medida disciplinaria,
debe requerirse el pronunciamiento de la Comisión Médica de Medicina Preventiva e Invalidez
correspondiente, para que ésta emita un pronunciamiento sobre el estado de salud del inculpado,
que permita decidir sobre su imputabilidad, puesto que no es posible sancionar administrativamente
a un funcionario respecto de quien la autoridad médica competente haya declarado que padece una
enfermedad mental o alcoholismo y, por ende, no puede ser objeto de imputación de culpabilidad
si en esta circunstancia infringe sus deberes funcionarios (3631/91, 6147/92, 6431/95, 42217/02,
6858/05).
Concordancias:. Arts. 62, W 4, de la LOCBGAE; 61, letras a) y d), 65, 68, 69, 84, letra i), 93, 96,
inciso primero, 102 a 113, 125, letra a), 126, inciso sexto, 152, inciso segundo, del EA; 69 del EAM;
45 del Código Civil; 25, 31, inciso primero, 32 y 33 de la ley 19296, que establece normas sobre
Asociaciones de Funcionarios de la Administración del Estado.
Comentarios:
Este articulo establece un principio esencial en toda relación laboral remunerada, cual es, la
reciprocidad, vale decir, se paga la remuneración si se cumple con la obligación de trabajar. Asimismo,
esta disposición determina los casos en que las ausencias del funcionario son justificadas y, en tal
virtud, no impiden la percepción de remuneraciones. Sin perjuicio de ello, el articulo 152, inciso
segundo, del Estatuto Administrativo contempla otra situación en que un funcionario no está obligado
a trabajar; ello ocurre cuando a éste se le hubiere declarado irrecuperable su salud y por el plazo de
seis meses desde la fecha de la notificación de dicha declaración, vencido los cuales, aquél deberá
retirarse de la Administración. También constituye una excepción el descanso complementario por
trabajos extraordinarios previsto en los artículos 68, inciso primero y 69, inciso primero.
Párrafo 3°
De las destinaciones, comisiones de servicio
y cometidos funcionarios
ARTICULO 73.- Los funcionarios sólo podrán ser destinados Ley 18.834, Alt. 67.
a desempeñar funciones propias del cargo para el que han
sido designados dentro de la institución correspondiente. Las
destinaciones ,deberán ser ordenadas por el jefe superior de la
respectiva institución.
Interpretación:
Inciso 1•
Desde la vigencia del Estatuto Administrativo consultado en la ley 18834, esto es, a contar del 23 de
septiembre de 1989, no pueden disponerse destinaciones a una entidad distinta de aquella a la que
pertenece el funcionario, porque en el nuevo Estatuto Administrativo no se contempla la destinación
especial que establecía el articulo 35, inciso segundo, del decreto con fuerza de ley 338, de 1960
(24360190).
Es atribución privativa de la autoridad máxima de un Servicio ordenar las destinaciones del personal
de su dependencia, decidiendo discrecionalmente cómo distribuir y ubicar a los funcionarios, según lo
requieran las necesidades de la repartición que dirige, con la sola limitación de que las funciones que
deba cumplir el empleado sean las propias del cargo para el cual ha sido nombrado y que el empleo
al que es destinado sea de la misma institución y jerarquía. Asimismo, de acuerdo con los principios
generales que informan la gestión pública, corresponde a las autoridades de la Administración
apreciar las circunstancias y razones que justifican la destinación de un funcionario, como, por
ejemplo, el mejor aprovechamiento del personal calificado, basándose, además, en la profesión del
interesado, permitiendo potenciar y reactivar su quehacer, siempre que la adopción de la medida
no implique una actuación arbitraria y que las funciones que deberá cumplir en su nuevo destino no
sean ajenas al cargo para el cual fue designado (25468190, 16468191, 17188193, 35940194, 51199,
31738101, 43301104). La destinación de un funcionario debe disponerse formalmente por el Jefe
Superior del Servicio, notificándose al empleado la medida adoptada. sea personalmente o mediante
carta certificada dirigida al domicilio registrado en el servicio, en caso de no poder realizarse en
esa forma. Ello, no obstante que el legislador no ha establecido ningún procedimiento para llevar
a cabo esa diligencia. En tales condiciones, el empleado no podrá excusarse de cumplir la nueva
destinación asignada, encontrándose obligado a asumir las nuevas funciones, por mandato de la
letra e) del articulo 55 (actual articulo 61) del Estatuto Administrativo (5630191, 38429197, 1897101,
55088103).
Deben considerarse como funciones "propias" del cargo, las asignadas a una determinada planta,
de manera que la destinación sólo corresponde efectuarla en cargos contemplados dentro de una
misma planta (33268/93, 37917/96, 29455/98).
La doctrina general en materia de destinaciones ha declarado que no es admisible que por la vía de esta
figura jurídica, se pretenda efectuar un nombramiento, por cuanto aquélla supone necesariamente la
mantención de la titularidad del cargo que ha desempeñado el funcionario en la repartición de origen,
de modo que resulta improcedente la asunción de aquél en propiedad, en el cargo al cual ha sido
destinado. La destinación sólo puede tener carácter de transitoria, ya que no significa un cambio del
cargo del afectado, sino que constituye una mera encomendación de funciones (87860/72, 2880/93,
-653/07). Reafirma lo expuesto, la circunstancia que el empleado tenga derecho, como retribución
por sus servicios, al sueldo asignado a la categoría o grado que corresponda al empleo respecto del
cual tiene nombramiento vigente, sin que la destinación sea un medio para proveer un cargo de la
planta de un servicio, ya sea que éste se encuentre vacante o que, sin estarlo, su titular se encuentre
impedido por cualquier causa para desempeñarlo (61981/77, 653/07).
El goce de licencias médicas no obsta a que se disponga la destinación del afectado, puesto que el
ejercicio de ese derecho sólo permite al servidor ausentarse del Servicio con el objeto de atender
al restablecimiento de su salud, sin que suspenda su calidad de empleado público. Las licencias
maternales tampoco configuran un impedimento para que la funcionaria sea destinada, ya que este
permiso no otorga inamovilidad (25468/90,17188/93, 3146/99).
Los servidores públicos que han sido objeto de una destinación formal, pero que no han asumido
efectivamente las funciones correspondientes a su nuevo destino por encontrarse haciendo uso
de feriado o licencia médica, tienen derecho a conservar los beneficios inherentes a su antiguo
desempeño (18908/72, 16933/73, 26565/04 -complementado por el 7308/05).
Los desplazamientos a que pueda dar lugar una destinación deben efectuarse de manera que se
respete la posición jerárquica y se procure que los empleados desarrollen tareas de la misma índole
de las que corresponden al cargo en que fue nombrado, por lo que, tratándose de empleos de
Los empleos de denominación específica limitan, cuando no impiden, una destinación, ya que esta
medida no puede alterar las funciones propias del cargo que se ocupa, según la denominación
indicada en la ley, en el presupuesto, en las plantas o reglamentos del Servicio. Si bien la legislación
estatutaria faculta a la Jefaturas Superiores para distribuir a los personales de su dependencia,
por vía de destinación, a fin de ubicarlos en una determinada unidad dentro del Servicio, tales
desplazamientos deben respetar la jerarquía de los funcionarios y efectuarse en forma tal que los
servidores desarrollen tareas de la misma índole que aquellas para las cuales se les nombró en la
repartición a que pertenecen (6070/92, 28603/92, 14525/93).
La medida disciplinaria y la anotación de demérito impuestas a quien fuera destinado sin cumplir
las labores que exigen un titulo profesional del que no se estaba en posesión, no pueden tener
fundamento en el incumplimiento de las obligaciones que derivaron directamente de tal destinación,
circunstancia que necesariamente debe considerarse para los fines de ponderar y evaluar la
procedencia de aplicar tales medidas (31936/07).
Inciso 2°
funcionario con el Estado, sino que, por el contrario, descansa forzosamente en la existencia previa
de ese vinculo jurídico (26565/04 -complementado por el 7308/05-).
Si bien no resulta legalmente procedente destinar a los contratados conforme a este articulo, la
autoridad administrativa se encuentra facultada para asignarles el lugar en que deben desarrollar
sus labores, de acuerdo con las necesidades del Servicio, especialmente tratándose del personal
cuyo contrato es para cumplir tareas genéricas (19870/97).
Es improcedente destinar a otra localidad a un funcionario amparado por el fuero gremial del articulo
25 de la ley 19296 (14876/97).
El inciso segundo del articulo 25 de la ley 19296, que impide trasladar de localidad y función,
sin su autorización por escrito, a un dirigente gremial desde la fecha de su elección y hasta seis
meses después de haber cesado en su mandato, es un precepto especial que debe interpretarse
restrictivamente, no siendo posible extender ese beneficio a quien no posee esa calidad. De este
modo, dicha prerrogativa no impide que el cónyuge sea objeto de destinaciones (30980/99).
Procede redistribuir a los dirigentes gremiales dentro de las oficinas de la entidad aunque éstas se
ubiquen en distintos edificios, pero dentro de la misma localidad, porque el fuero de que ellos gozan
no puede afectar el ejercicio de las atribuciones de las autoridades para disponer su adecuación o
reorganización, cuando las circunstancias así lo exijan, toda vez que el beneficio señalado consiste
en el derecho a no ser cambiados de localidad. La expresión "localidad" no se asimila al vocablo
comuna, sino que es sinónimo de ciudad en la cual se desempeñan los dirigentes al momento de
ser elegidos, puesto que no siempre el cambio de una comuna a otra significará afectar el bien
protegido por el fuero, ya que ello dependerá esencialmente de la ubicación geográfica que ambas
posean, situación que es distinta a la que ocurriría si uno de esos servidores es trasladado de la
ciudad en que desarrolla sus labores al ser elegido, a otra diversa (15661/99 -complementado por
el 34792/00).
El fuero establecido en el inciso segundo del articulo 25 de la ley 19296, otorga a los dirigentes
de las asociaciones de funcionarios el derecho a continuar desarrollando las mismas tareas que
cumplían al momento de su elección. Ello, porque esa norma establece una protección para los
mencionados dirigentes, puesto que el término "función" empleado por el aludido inciso segundo,
no puede entenderse comprensivo de cualquier labor que sea compatible con el cargo que ocupa
el dirigente de que se trate, ya que ello significaría que el fuero establecido en dicho precepto no
tendría ningún efecto jurídico, toda vez que un servidor público siempre debe desempeñar funciones
propias de su empleo (20166/98 -aclarado por el 49693/00-).
Conforme al articulo 56 (actual articulo 54), letra b), de la ley 18575, una funcionaria cuyo hermano
fue nombrado como Director del Servicio en que labora, puede seguir ejerciendo sus funciones, si
es destinada a una dependencia de ese mismo organismo donde no se produzca relación jerárquica
directa o indirecta con aquél, lo que no obsta que la recurrente deba cambiar su residencia a otra
localidad, dado que conforme a lo prescrito en el articulo 55 (actual articulo 61), letra e), de la
ley 18834, los empleados públicos están obligados a cumplir las destinaciones que disponga la
autoridad competente. Además, la destinación implica, para los funcionarios regidos por el Estatuto
Administrativo, la obligación de prestar servicios "en cualquier localidad", lo cual demuestra que
pueden ver alterada su residencia en virtud de dicha medida, lo que resulta especialmente procedente
si ella deriva de la aplicación de una norma legal, como en este caso ocurre (9173/01).
Según los artículos 156, incisos segundo y tercero, y 157 de la ley 10336, los funcionarios públicos
no pueden ser trasladados o designados en comisión de servicio fuera del lugar en que ejercen
sus funciones desde 30 días antes de las elecciones de Presidente de la República o de aquellas
ordinarias o extraordinarias que se realicen dentro de las respectivas circunscripciones electorales.
Igualmente, quedarán suspendidas todas las comisiones que se estuvieren desempeñando. Esa
limitación afecta tanto a la destinación dispuesta por iniciativa del Servicio como a la ordenada a
solicitud del interesado (28780/93, 19597/94,40803/01,30157/05, 18205/08).
Concordancias: Arts. 46, inciso tercero, 54 y 64 de la LOCBGAE; 3 transitorio de la ley 19653; 61,
letra e), y 136 del EA; 156 a 162 de la ley 10336; 25 de la ley 19296, que establece normas sobre
Asociaciones de Funcionarios de la Administración del Estado; 42 del DFL 1, de 1996, del Ministerio
de Educación, que fijó el texto refundido, coordinado y sistematizado de la ley 19070, que aprobó el
Estatuto de los Profesionales de la Educación, y de las leyes que la complementan y modifican; Art.
70 del EAM.
Comentarios:
La autoridad administrativa está facultada para disponer ciertas medidas que fijan el lugar en que
debe desempeñarse el cargo, o bien que ordenan al empleado desplazarse transitoriamente de la
oficina en que trabaja dentro del Servicio o cumplir algunas labores especiales, dando origen a las
destinaciones, comisiones de servicio y a los cometidos funcionales.
La comisión de servicio, es el ejercicio de ciertas funciones ajenas al empleo que se ocupa, y que se
pueden desempeñar tanto en el propio organismo en que trabaja el empleado o en otro de la
Administración del Estado, dentro del territorio nacional como en el extranjero, durante un lapso
determinado.
Es útil tener en cuenta, en lo que se refiere a la figura de la destinación, que el articulo 46, inciso
tercero, de la ley 18575, ordena que los funcionarios públicos sólo pueden ser destinados a funciones
propias del empleo para el cual han sido designados, dentro del organismo o servicio público
correspondiente, destacándose de esta manera por el legislador su principal característica.
Asimismo, hay que tener presente que además de la destinación que analiza este articulo, también
existe una destinación transitoria, contemplada en el articulo 130 del Estatuto Administrativo, que
es aquella medida que puede adoptar el fiscal, como medida preventiva, en contra de un inculpado
durante el curso de un sumario administrativo.
ARTICULO 74.- Cuando la destinación implique un cambio de su Ley 18.834, Art. 68.
residencia habitual, deberá notificarse al funcionario con treinta
dias de anticipación, a lo menos, de la fecha en que deba asumir
sus nuevas labores.
Interpretación:
Inciso 1•
Cuando la destinación signifique un cambio de residencia, debe ella notificarse al afectado con 30
días de anticipación, a lo menos, de la fecha en que deba asumir sus nuevas labores. Sin embargo,
la circunstancia que se te notifique sin esa antelación, no obsta a su legalidad, pues la asunción de
funciones en la fecha indicada por la autoridad perfeccionó el correspondiente acto administrativo.
Ello tiene por objeto permitir al funcionario adoptar con la debida anticipación, las medidas necesarias
para solucionar sus asuntos personales (8261193, 11864193, 17188193, 35940194). El cumplimiento
extemporáneo de dicha formalidad no acarrea la nulidad de la destinación y únicamente releva al
.funcionario de la obligación de asumir el día a .contar del cual se ordenaba la medida, pudiendo
hacerlo, sin incurrir en responsabilidad administrativa, dentro del plazo señalado contado desde la
fecha de la notificación (46561101 ).
Inciso 2•
El articulo 133 del Código Civil, señala que "ambos cónyuges tienen el derecho y el deber de vivir
en el hogar común" reconociendo, implícitamente, la obligación del marido y de la mujer de seguirse
recíprocamente al lugar donde uno u otro deba fijar su residencia, salvo que a alguno de ellos te
asistan razones graves para no hacerlo, lo que es corroborado por esta norma que tiende a evitar
que los cónyuges funcionarios regidos por la ley 18834, con residencia en una misma localidad, sean
separados por un acto de la autoridad administrativa, sin su respectiva aceptación, a menos que
ambos sean destinados a un mismo punto simultáneamente (31118191, 27175196, 27376102).
El articulo 68, inciso segundo (actual articulo 74, inciso segundo) contempla la posibilidad que tos
cónyuges funcionarios rechacen una destinación con cambio de residencia dispuesta por la autoridad
respecto de uno de ellos, cuando ambos se rigen por el Estatuto Administrativo y residen en la misma
localidad. No seria este el caso si uno se rige por la ley 18834 y su cónyuge es funcionario de las
Fuerzas Armadas. Esta disposición no autoriza en esta situación a uno de tos cónyuges a exigir una
destinación a una localidad diversa para reunirse con su marido o mujer (13125103).
Si bien conforme al artículo 79 (actual artículo 85) de la ley 18834, modificado por la ley 19653,
no podrán en una misma institución desempeñarse personas ligadas entre sí por los grados de
parentesco que menciona o por matrimonio, cuando entre ellas se produzca relación jerárquica,
aún indirecta, no puede entenderse que la intención del legislador de la citada ley 19653 haya sido
perturbar los matrimonios existentes a la época de su vigencia, en la cual también ya existía el
vinculo de jerarquía. De acuerdo con el artículo 1 de la Constitución Política, la familia es el núcleo
fundamental de la sociedad y es deber del Estado protegerla, mientras que el artículo 68 (actual
artículo 74) de la ley W 18834 dispone que tratándose de cónyuges regidos por este Estatuto con
residencia en una misma localidad, uno de ellos no podrá ser destinado a un empleo con residencia
distinta, sin su aceptación, quedando amparado el derecho establecido en el artículo 133 del Código
Civil, y que asiste a ambos cónyuges, para vivir en el hogar común (24288/02, 29134/06).
Corresponde destinar a una funcionaria cuando no acredita que su cónyuge sea también un
empleado público regido por el Estatuto Administrativo y ambos con residencia en una misma
localidad (25468/90, 17188/93).
Es improcedente aplicar el inciso segundo de este precepto a médicos becarios, marido y mujer,
contratados por la Subsecretaría de Salud, porque a la fecha de su destinación no tenían la calidad
de funcio,arios públicos requerida por esta disposición. Para adquirir tal carácter no basta el
nombramiento mediante el pertinente acto administrativo tramitado por la Contraloría General, sino
que se precisa, además, la asunción efectiva al cargo dentro del plazo que indica la ley, vale decir,
que el interesado tome posesión material del empleo en que fue designado, o realice actos que
permitan suponer, inequívocamente, su voluntad de desempeñarlo, lo cual no ha ocurrido en este
caso. Esto, ya que la cónyuge presentó certificados médicos destinados a justificar su ausencia y no
consta que después se hiciera cargo del empleo, de todo lo cual puede inferirse que la presentación
de aquéllos no constituye, una manifestación indubitable de la voluntad de asumir la función. Por
otra parte, aun cuando lo hubiera hecho en tiempo y forma, adquiriendo de este modo el carácter de
servidora pública esta sola circunstancia no le habría permitido acogerse a la indicada norma, dado
que por su designación debía comenzar a cumplir sus tareas en una localidad distinta a la de su
marido, no satisfaciéndose, por ende, uno de los requisitos exigidos, cual es, que ambos, teniendo la
calidad de funcionarios públicos, posean igual residencia (13401/96, 29660/96).
Concordancias: Arts. 98, letra d), del EA; 133 del CC; 71 del EAM.
Comentarios:
El derecho que reconoce este articulo está concedido a los cónyuges que sean funcionarios regidos
por el Estatuto Administrativo y que residan en la misma localidad.
ARTICULO 75.- Los funcionarios públicos podrán ser designados Ley 18.834, Art. 69.
por el jefe superior de la respectiva institución, en comisión de
servicio para el desempeño de funciones ajenas al cargo, en el
mismo órgano o servicio público o en otro distinto, tanto en el
territorio nacional como en el extranjero. En caso alguno estas
comisiones podrán significar el desempeño de funciones de
inferior jerarquía a las del cargo, o ajenas a los conocimientos
que éste requiere o a la institución.
Interpretación:
Sólo en virtud de una comisión de servicio pueden desarrollarse labores ajenas al empleo y, además,
en una entidad distinta, ya que tanto la destinación como el cometido funcionario importan el desarrollo
de tareas propias del empleo que ocupan los servidores públicos y en la institución a la cual ellos
pertenecen (22522104).
Inciso 1'
La comisión de servicio involucra el ejercicio de ciertas funciones ajenas al empleo y para las cuales
el funcionario posee conocimientos que lo habilitan para realizarlas adecuadamente. Las funciones
que ejerza el comisionado deben determinarse específicamente (29535193, 35255100).
Las resoluciones exentas que emitan las autoridades facultadas para disponer las comisiones de
servicios y los cometidos funcionarios con derecho al pago de viático deberán dictarse, como norma
general, con anterioridad a la realización de las labores encomendadas y, en todo caso, antes de que
se curse la planilla de rendición correspondiente. En dicha resolución se dejará constancia de las
fechas de iniciación y de término de la comisión o cometido, indicándose al mismo tiempo la localidad
en que habrá de cumplirse y la imputación presupuestaria del gasto respectivo. Excepcionalmente,
si por razones de buen servicio el funcionario debe alejarse del lugar de su desempeño habitual
intempestivamente, se podrá dictar la resolución con posterioridad, dejando establecida esa
circunstancia en el texto del documento (43890174, 37493177).
Como la comisión de servicio significa el desarrollo de tareas ajenas al cargo, los dirigentes gremiales
no pueden ser objeto de dicha medida, de acuerdo con lo dispuesto en el inciso segundo del artículo
25 de la ley 19296 (37850198, 1013100).
de este último, pues ello importaria infringir el principio de la jerarquía funcionaria, debiendo, para
fines administrativos de control interno, quedar sujeto a la dependencia de un jefe de igual o superior
jerarquía. Por otra parte, el hecho de que el comisionado sirva en una institución especializada en la
que le corresponde realizar intervenciones quirúrgicas de alta complejidad, atendida su condición de
neurocirujano, no obsta para que se le asigne, en virtud de una com(sión de servicios, el cumplimiento
de labores de otra índole, siempre que no sean de menor nivel o categoría en razón del cargo de
que es titular (21 046/05).
No puede ordenarse una comisión de servicio a una institución particular aun cuando sea de utilidad
pública y reciba subvenciones del Estado, por cuanto no forma parte de la Administración del Estado,
cual es el caso, por ejemplo, de la Universidad Austral de Chile (68344/60, 19241/85, 28741/95).
Un funcionario público enviado en comisión de servicio al extranjero, puede hacer uso de su feriado
anual una vez terminada aquélla, prolongando su estadía en el exterior, porque el servidor, al
desempeñar tal comisión, conserva su calidad de funcionario del Servicio correspondiente, como
también el goce de todos los beneficios estatutarios que en tal calidad le asisten, entre ellos el
derecho a impetrar el goce del feriado anual. No se vulnera, en esta situación, el principio de probidad
administrativa, porque lqs gastos producidos por la indicada prolongación de la estadía en el exterior
no son de cargo del Servicio sino del interesado (31114/01).
Las comisiones de servicio en el extranjero, cuyos viáticos son financiados total o parcialmente por
entidades externas, tiene·n que señalar claramente la fuente legal a la que debe imputarse el gasto,
entendiendo por tal, la indicación precisa del organismo que paga dicho beneficio (2978/96).
Las comisiones de "estudio constituyen una especie de comisión de servicio, en atención a que
son obligaciones que se imponen al funcionario con respecto a labores de perfeccionamiento o
capacitación relácionadas con la naturaleza y fines del organismo que las ordena y con las funciones
que el empleado debe desarrollar según su nombramiento. Esta comisión de servicio corresponde
al ejercicio del"cargo y, por ende, no obsta a que el empleado sea calificado (9039/72, 25406/92,
13037/93, 10317/99, 19999/99) . .
Una comisión de servicio, como quiera que obliga al empleado a desempeñar funciones ajenas al
cargo de que es titular, justifica la subrogación en éste en la medida que aquélla impida aLfuncionario
ejercer el empleo que sirve en propiedad (50761/68, 81494/68).
No es necesario disponer una comisión de servicio para que un funcionario se desempeñe como
Subsecretario subrogante, ya que tratándose de cargos de la exclusiva confianza del Presidente de
la República, éste puede designar como subrogante a un funcionario que integre la misma planta u
otra distinta e incluso que forme parte de otra repartición o institución, con tal que éstas dependan o
se relacionen con el mismo Ministerio al cual se vincula el empleado subrogado (17612/90).
Los sueldos y demás remuneraciones del empleado que se encuentra en comisión de servicio son
de cargo de la institución a que pertenece (51032/66, 13874/91).
Es improcedente disponer una comisión de servicio sin goce de remuneraciones, ya que durante su
desempeño, el funcionario conserva sus derechos en materia remuneracional. Además no procede
que los gastos de traslado y estadía sean solventados por el interesado, pues dichos beneficios
constituyen derechos de carácter público, lo que les otorga la calidad de irrenunciables (5313/91,
5917/93).
Tiene derecho a viático el funcionario que debe cumplir una comisión de servicio que lo obliga a
ausentarse del lugar de su desempeño habitual e incurrir en gastos de alojamiento y alimentación
(31070/91' 22378/95, 21447/03).
Tratándose de comisiones que se cumplen en un organismo distinto al que pertenecen ·los servidores,
la institución que los ha recibido puede disponer que ellos realicen trabajos extraordinarios, en cuyo
caso tienen derecho a los estipendios correspondientes pagados por esta última (1673/90).
Un funcionario que durante el cumplimiento de una comisión de servicio se acoge a licencia médica
por enfermedad tiene derecho a percibir viáticos, en la medida que con ocasión de dicha licencia
no haya regresado a su lugar de residencia habitual, toda vez que a raíz de su enfermedad ha
continuado incurriendo en gastos para su alojamiento y alimentación en el lugar de la comisión. Ello
se funda en que los viáticos han sido establecidos como la compensación a que tiene derecho el
trabajador que por disposición de la autoridad competente debe incurrir en gastos extraordinarios de
alimentación y alojamiento, y en la circunstancia de que la concesión de la licencia por enfermedad
no desvirtúa aquella razón, excepto en el señalado supuesto de que con ocasión de la licencia el
beneficiario retorne a su lugar de residencia habitual (15214/75).
Un funcionario en comisión de servicio que sufre un accidente mientras desarrolla sus tareas no está
al margen de las normas sobre accidentes en actos de servicio, porque durante tal comisión subsiste
integralmente respecto de dicho servidor el vínculo laboral que lo une al Estado, pues se encuentra
cumpliendo una medida ordenada por el Jefe Superior del organismo a que pertenece. Los gastos
que origine un accidente en actos de servicio que sufre el personal que se encuentra desarrollando
una comisión de servicio en otro organismo de la Administración del Estado, debe pagarlos la entidad
que ordenó tal comisión. En cambio, cuando este accidente se produce en el desempeño de labores
asignadas por la institución en que se encuentra comisionado el funcionario, es esta última la que
deberá pagar los referidos gastos (2899/78, 12300/92).
Si la causa que originó la licencia médica es un accidente en actos de serviCIO, lo que debe
establecerse previamente mediante el respectivo sumario administrativo, deben deducirse de los
mon.tos que corresponda pagar al beneficiario por concepto de prestaciones a que tenga derecho
por dicho accidente, las sumas ya canceladas por capítulo de viáticos, toda vez que, en este caso,
el· funcionario no incurre en gastos extraordinarios de alimentación y alojamiento, ya que ellos
corresponde que sean solventados por el respectivo Servicio, especialmente si el afectado ha sido
internado en establecimientos asistenciales (17374/75).
La circunstancia que un funcionario desarrolle una comisión de servicio no lo margina del s·ervicio a
que pertenece, ni obsta a su derecho a ser ascendido (62270/68).
Habida consideración que el artículo 69 (actual articulo 75) del Estatuto Administrativo faculta a los
Jefes Superiores de Servicio para disponer comisiones de servicio en el extranjero y el artículo 71
(actual artículo 77) de este mismo ordenamiento, por su parte, radica esta facultad en el Presidente
de la República, exigiendo determinadas formalidades, la Contraloría General estima que no existe
armonía entre ambas disposiciones. Sobre la base de aplicar el principio de especialidad, las
comisiones de servicio en el extranjero deben efectuarse de acuerdo con la última de las disposiciones
citadas, esto es, que para disponerlas se requiere de un decreto supremo emanado del respectivo
Ministerio y, además, suscrito por el Ministro de Relaciones Exteriores (31879/89, 32466/94).
Los Intendentes Regionales se encuentran autorizados para disponer comisiones de servicio respecto
de cualquier funcionario público en el territorio de su jurisdicción. Por tal motivo, si el empleado
comisionado se rige por el Código del Trabajo, igualmente estará sujeto a los límites de tiempo que
el Estatuto Administrativo fija para los funcionarios sujetos a sus disposiciones en cuanto a que las
comisiones de servicio no pueden disponerse po'r tiempo indefinido, más aún si se considera que el
Código del Trabajo nada señala sobre la materia (5759/91, 680/92).
No se ajusta a derecho una comisión de servicios ordenada por una municipalidad, respecto de un
funcionario de su dependencia, para desempeñarse en otra repartición, puesto que las comisiones
del personal municipal están reguladas por la ley 18883, que las restringe de modo que solo tengan
lugar en el mismo municipio, a diferencia de la ley 18884, cuyo artículo 69 (actual artículo 75), al
tratar de las comisiones de servicio de los funcionarios públicos, permite que éstos sean designados
para el desempeño de funciones ajenas al cargo, en el mismo servicio o en otro distinto (6194/04).
Tanto el Servicio de Gobierno Interior como el Gobierno Regional son organismos públicos distintos,
integrantes de la Administración del Estado, pero que poseen un mismo jefe superior, cual es el
Intendente, que los administra según la normativa aplicable a cada uno de ellos. Én lo que concierne
a las atribuciones que le asistirían para disponer que los funcionarios pasen a desempeñarse en un
servicio distinto al que pertenecen, cabe aplicar los articulas 67 al 72 (actuales artículos 73 a 78)
(~} Ei'DFL 1, de 1997, del Ministerio de Defensa Nacional, Subsecretaría de Guerra, establece el Estatuto del
Personal de las Fuerzas Armadas. Su -Titulo Segundo, Capítulo VI, '·De los Derechos del Personar·, P8.rrafo
1","Disposiciones Generales sobre Sueldo y de_más Remuneraciones" y Párrafo 5<', ''Oereci1os del Personal en
Comisión-de Servicio en el Extranjero", articulas 167 y siguientes y 196 y siguientes. respectivamente, regulan
actualmente !as mate rías a que se refiere el. extracto.
de la ley 18834, acorde con los cuales el Intendente Regional, como jefe superior de ambos servicios,
está dotado de atribuciones para ordenar libremente, respecto del personal que se desempeña en
ellos, las destinaciones, comisiones de servicio o cometidos funcionarios que sean necesarios para
el desarrollo de las funciones de dichos organismos (22522/04).
De acuerdo con el articulo septuagésimo tercero de la ley 19882, la asignación por desempeño de
funciones criticas tiene un carácter personal, pues se otorga específicamente a un determinado
funcionario, que no puede ser otro que el titular del cargo que tiene asignada la función calificada
como tal. Según el articulo 75 de la ley 18834, el funcionario en comisión de servicio cumple una
medida ordenada por la autoridad de la Institución a que pertenece, que significa el ejercicio de
funciones ajenas al cargo que ocupa. Por ende, no procede pagar la señalada asignación a un
funcionario que realiza tal comisión, puesto que no se encuentra en ninguna de las situaciones a que
alude la citada norma de la ley 19882, al desempeñar un cargo de su servicio de origen y que no
puede, en el servicio de destino, tener asignada una función calificada como critica (22332/07).
De acuerdo con los artículos 156 y 157 de la ley 10336, Orgánica de la Contraloria General, treinta
días antes de las elecciones presidenciales, parlamentarias y municipales, los funcionarios no
pueden ser designados en comisión de servicio fuera del lugar en que ejercen sus funciones, como
asimismo, desde esa data se suspenderán las que estuvieren desempeñando en esas condiciones,
debiendo reintegrarse a las funciones para cuyo desempeño están nombrados (28780/93, 36358/99,
40803/01). Las limitaciones señaladas no rigen respecto de las comisiones de servicio o de estudio
que se cumplen en el extranjero, ni alcanzan a los simples cometidos, es decir, a la ejecución de
tareas inherentes a las funciones del empleo de que es titular el servidor, aun cuando ellas lo obliguen
a desplazarse fuera del lugar de su desempeño, pero siempre que esta actividad corresponda al
ejercicio normal y habitual de determinados cargos (26510/96, 30157/05).
Inciso 2'
Los Directores Regionales están facultados para disponer comisiones de servicio y cometidos
funcionarios respecto del personal a su cargo (21676/90).
Los decretos que disponen comisiones de servicio al extranjero de los Secretarios Regionales
Ministeriales deben ser suscritos por el Presidente de la República y por el Ministro de Relaciones
Exteriores, pues los cargos de Secretarios Regionales Ministeriales son de la exclusiva confianza
del Jefe del Estado, respecto de los cuales la figura de la delegación de firma resulta inaplicable
(3211 0/93, 33324/94).
Concordancias: Arts. 46, inciso cuarto, de la LOCBGAE; 61, letra e), 98, letra e), del EA; 156 y 157
de la ley 10336, Orgánica de la Contraloria General de la República; DFL 262, de 1977, del Ministerio
de Hacienda, que fija viáticos para comisiones de servicio en el territorio nacional; Decreto 1, de
1991, del Ministerio de Hacienda, fija monto de viáticos en dólares para el personal del sector público
que debe cumplir comisiones de servicio en el extranjero; Art. 72 del EAM.
Comentarios:
Cabe advertir que el articulo 46, inciso cuarto, de la ley 18575, contempla los elementos esenciales
que configuran la comisión de servicio, a saber: 1) deben ser ordenadas por la autoridad para que
los servidores públicos desempeñen funciones ajenas al cargo; 2) estas funciones pueden ser
desarrolladas en el mismo organismo a que pertenecen o en otro distinto de la Administración del
Estado; 3) dichas comisiones podrán realizarse tanto en el territorio nacional como en el extranjero;
4) son esencialmente transitorias, y 5) no pueden significar el desempeño de funciones de inferior
jerarquía a las del cargo, o ajenas a los conocimientos que éste requiere o al servicio público.
Por tal motivo, la jurisprudencia administrativa ha declarado que la comisión de servicio constituye
una figura jurídica que supone el cambio de funciones del empleado por orden de la autoridad, a
fin que realice una labor distinta de la que le corresponde desarrollar de acuerdo con su acto de
nombramiento. Esta característica esencial la distingue de otras medidas como la destinación y los
cometidos funcionarios.
ARTICULO 76.- Los funcionarios no podrán ser designados en Ley 18.834, Art. 70.
comisión de servicio, durante más de tres meses, en cada año Ley 19.154, Art. 2°, 6).
calendario, tanto en el territorio nacional como en el extranjero. No
obstante, las comisiones podrán ser renovadas por iguales períodos
pero no más allá de un año. En casos calificados, por decreto supremo
fundado, el Presidente de la República podrá extender el período
de las comisiones de servicio hasta un plazo máximo de 2 años.
Vencidos estos plazos los funcionarios no podrán ser designados
nuevamente en comisión de servicio, hasta que transcurra el plazo
mínimo de un año.
El/imite señalado en el inciso anterior, no será aplicable en el caso Ley 19.056, Art. 6°.
de funcionarios designados en comisión de servicio para realizar
estudios en el país o en el extranjero hayan sido o no hayan sido
beneficiados con una beca. Con todo, dicha comisión no podrá
exceder de tres años, a menos que el funcionario estuviere realizando
estudios de posgrado conducentes al grado académico de Doctor,
caso en el cual podrá extenderse por el plazo necesario para
terminar dichos estudios, siempre que el plazo total no exceda de
cinco años. El Jefe superior del servicio sólo podrá disponer estas
comisiones, siempre que los estudios se encuentren relacionados
con las funciones que deba cumplir la respectiva institución.
Interpretación:
Los funcionarios públicos pueden ser designados en comisión de servicio, hasta tres meses en cada
año calendario, tanto en el territorio nacional como en el extranjero, sin desmedro de su renovación por
iguales períodos, pero no más allá de un año. La autoridad administrativa está facultada para poner
término anticipado a dicha comisión, en cualquier momento, por razones de servicio (26592/01 ).
En casos calificados, por decreto supremo fundado, el Presidente de la República puede extender
las comisiones de servicio hasta dos años, con excepción de los empleados comisionados para
estudiar en el país o en el extranjero (34582195).
No corresponde aplicar al personal del Servicio Exterior el plazo establecido en esta norma para
las comisiones de servicio, porque estos funcionarios se rigen por las disposiciones del DFL 33, de
1979, del Ministerio de Relaciones Exteriores, según lo ordena la ley 18834, artículo 156 (actual
artículo 162), letra e), no obstante que quede sujeto a las normas del Estatuto Administrativo en
aquellos aspectos o materias no regulados expresamente por ese estatuto especial (31879189).
Con arreglo a lo dispuesto en los artículos 75 y 76 del Estatuto Administrativo, los funcionarios
públicos podrán ser designados por el jefe superior de la institución, en comisión de servicio, para el
desempeño de funciones ajenas al cargo, en el mismo organismo o servicio público o en otro distinto,
tanto en el territorio nacional como en el extranjero, la que no podrá durar más tres meses, pudiendo
ser renovadas por iguales períodos pero no más allá de un año. Por su parte el artículo 78 del mismo
texto legal previene que los funcionarios públicos pueden cumplir cometidos que los obliguen a
desplazarse dentro o fuera de su lugar de desempeño habitual para realizar labores específicas
inherentes al cargo que sirven. Estos cometidos no requieren ser ordenados formalmente, salvo
que originen gastos para la institución, tales como pasajes, viáticos u otros análogos, en cuyo
caso se dictará la respectiva resolución o decreto. En este contexto, el cometido funcionario puede
significar tanto el desarrollo de todas las labores inherentes a un empleo como también de funciones
especificas, pero "siempre por un lapso definido de tiempo"; en cambio la comisión de servicio implica
el ejercicio de ciertas funciones ajenas al empleo, para las cuales el servidor posee conocimientos
que lo habilitan para desempeñarlas en forma y por un plazo no superior a tres meses ( 29535/93,
40233/05).
Inciso 2•
Las comisiones de estudio constituyen una especie de comisión de servicio, en atención a que
son obligaciones que se imponen al funcionario con respecto a labores de perfeccionamiento o
capacitación relacionadas con la naturaleza y fines del organismo que las ordena y con las funciones
que el empleado debe desarrollar según su nombramiento. Esta comisión de servicio corresponde
al ejercicio del cargo y, por ende, no obsta a que el empleado sea calificado (9039/72, 25406/92,
13037/93, 10317/99, 19999/99).
Los artículos 21 y 23 (actuales artículos 26 y 28) del Estatuto Administrativo configuran la regla general
en materia de capacitación, circunscribiéndola a aquellas actividades permanentes, organizadas
y sistemáticas que se refieren al desarrollo, complemento, perfeccionamiento o actualización de
conocimientos y destrezas relativos al cargo que se ocupa o función que se desempeña, excluyendo
los estudios regulares de la enseñanza básica, media, superior y los cursos de post grado conducentes
a la obtención de un grado académico. El inciso segundo del articulo 70 (actual articulo 76) de la ley
18834, constituye una excepción a esa regla general, en cuanto permite que mediante la comisión
de servicio puedan autorizarse la realización de estudios de post grado en el país o en el extranjero
de funcionarios que hayan sido o no beneficiados con una beca, siempre que se trate de materias
relacionadas con las funciones del Servicio que ordena la comisión y que se respeten los plazos
establecidos en este precepto (12728/95, 42848/01).
La regla de excepción sobre limite de plazo que en materia de comisiones de servicio prevé este
inciso segundo, puede aplicarse al personal a contrata, siempre que la comisión de estudios tenga
una duración que quede comprendida dentro del lapso que abarca el contrato, siendo inaplicable, en
cambio, si aquel término excede el periodo de contratación (21271/91 ).
El pago de los gastos a que de origen una comisión de servicio corresponderá al organismo que
adopta dicha medida, por cuanto ella ha sido establecida en exclusivo interés institucional, pero
cuando la comisión se establece, además, en beneficio del funcionario, como es el caso de las
comisiones de estudios, el principio general mencionado admite excepciones, considerando que el
inciso segundo de esta norma se refiere a las designaciones en comisión de servicio para realizar
estudios, tanto si los interesados han sido o no beneficiados con una beca. La disposición que
se analiza exige únicamente que los estudios se relacionen con las funciones del Servicio y no
que se vinculen exclusivamente con el desempeño funcionario, de modo que un servidor puede
solicitar una comisión de servicio para realizar estudios en beneficio de su interés personal y la
jefatura aceptarla por ser conveniente para la repartición y existir relación con las funciones que
ésta presta. La institución no está obligada a solventar los pasajes si existe un interés funcionario
preponderante y, en tal evento, el gasto pertinente recaerá en el patrimonio del funcionario, situación
en que la comisión de servicio sólo podrá disponerse si el interesado acepta formal y voluntariamente
hacerse cargo de los referidos egresos, lo que deberá constar fehacientemente en el acto pertinente
(33037/96, 15415/97).
El pago de los gastos que irrogue una com1s1on de serv1c1o dispuesta en el exclusivo interés
institucional, entre los que se encuentra el derecho a percibir viático, serán de cargo de la entidad que
la ordena, beneficio éste que dado su caracter público es irrenunciable, y aun cuando el funcionario
haga presente su intención de no impetrarlo, tal manifestación de voluntad carece de todo efecto
legal (3261/84, 33037/96, 20879/08).
Es improcedente exigir garantía a los funcionarios que cumplen una comisión de servicio en el
extranjero para realizar estudios, con el objeto de asegurar su permanencia en la institución al
término de ella. Los artículos 70 y 71 (actuales artículos 76 y 77) del Estatuto Administrativo no
establecen dichas exigencias, ni tampoco obligan a devolver las sumas percibidas durante el goce de
esa franquicia en el evento que el empleado resuelva retirarse voluntariamente de la Administración
(9396/91, 28176/92, 28227/92).
El jefe de servicio ha podido disponer una comisión de servicios respecto de un funcionario, para que
realice estudios que se desarrollan en horario vespertino, distinto al de la jornada de trabajo, ya que,
en su opinión, tales estudios son necesarios para el mejor desarrollo de su cargo y que, además, el
deber de exigencia del mismo así lo amerita. Lo anterior puesto que, conforme al artículo 76 de la
ley 18834, es posible disponer una comisión de servicio para la realización de estudios, tanto en el
país como en el extranjero, siempre que ellos estén vinculados con las funciones de la institución.
La comisión de estudios es una clase de comisión de servicio, puesto que es una obligación que se
impone al funcionario en orden al cumplimiento de labores de perfeccionamiento, relacionadas con
la naturaleza y fines del organismo que las ordena y con labores que el empleado debe desarrollar
acorde a su cargo. Asimismo, la autoridad está investida, en materia de comisiones de servicios, de
atribuciones amplias, que le permiten otorgarlas, establecer condiciones teniendo en cuenta el nivel
de exigencias del programa, disponer prórrogas o denegarlas e, incluso, ponerles término anticipado
por razones de servicio (59554/05, 7817/06).
Concordancias: Arts. 75, 77 y 18 transitorio del EA; 1 transitorio de la ley 19056; 156 a 161 de la
LOCGR; 73 del EAM.
Comentarios:
El texto original de esta disposición estableció, como regla general, que los funcionarios no podrán
ser designados en comisión de servicio, durante más de tres meses, en cada año calendario, tanto
en el territorio nacional como en el extranjero.
Posteriormente, el artículo 63, letra a), de la ley 18899, agregó un inciso segundo al artículo 70
(actual artículo 76), que exceptuó de la aplicación del límite de tiempo previsto en su inciso primero,
a los empleados designados en comisión de servicio para realizar estudios dispuestos de acuerdo
con el reglamento.
El artículo 6 de la ley 19056, reemplazó ese inciso segundo con tres propósitos: primero, precisar que
el límite de tiempo consultado en el inciso primero, no rige en el caso de funcionarios designados en
comisión de servicio para realizar estudios en el país o en el extranjero, hayan sido o no beneficiados
con una beca; segundo, establecer que dichas comisiones no podrán exceder de tres años, salvo
tratándose de estudios conaucentco al grado académico de Doctor, en cuyo caso el plazo oe
extenderá por el lapso necesario para terminar esos estudios, siempre que no sea superior a cinco
años, y tercera, contemplar como requisito para disponer estas comisiones, que los estudios estén
relacionados con las funciones que deba cumplir la respectiva institución.
Por último, el artículo 2, N" 6, de la ley 19154, agregó al inciso primero la facultad de renovar las
comisiones de servicio por períodos iguales de tres meses, con tope de un año, y sólo en casos
calificados, mediante decreto supremo fundado, el Presidente de la República podrá extender el
período hasta por el plazo de dos años, vencido el cual, los servidores no podrán ser designados
nuevamente en comisión de servicio hasta que transcurra al menos un año.
ARTICULO 77.- Cuando la comisión deba efectuarse en el extranjero, Ley 18.834, Art. 71.
el decreto que así lo disponga deberá ser fundado, determinando la Ley 19.154, Art. 2', 7).
naturaleza de ésta y las razones de interés público que la justifican, Ley 18.834, Art. 71.
a menos de tratarse de misiones de carácter reservado, en que será
suficiente establecer que el funcionario se designa en misión de
confianza. En todo caso, el decreto especificará si el funcionario
seguirá ganando en su totalidad o en parte de ellas las remuneraciones
asignadas a su cargo u otras adicionales, en moneda nacional o
extranjera, debiendo indicarse la fuente legal a que deba imputarse
el gasto y el plazo de duración de la comisión. El decreto llevará,
además, la firma del Ministro de Relaciones Exteriores.
Interpretación:
El acto eficaz para disponer una comisión de servicio en el extranjero, es el decreto supremo emitido
por el respectivo Ministerio y suscrito, además, por el Ministro de Relaciones Exteriores, decreto
que debe ser fundado, determinando la naturaleza y las razones de interés público que la justifican
(31879/89, 13998190, 28492192, 32466194).
Los decretos que disponen comisiones de serv1c1o al extranjero de los Secretarios Regionales
Ministeriales deben ser suscritos por el Presidente de la República y por el Ministro de Relaciones
Exteriores, pues los cargos de Secretarios Regionales Ministeriales son de la exclusiva confianza
del Jefe del Estado, respecto de los cuales la figura de la delegación de firma resulta inaplicable
(3211 0/93, 33324194).
Las universidades estatales pueden dictar normas especiales reguladoras de las comisiones de
servicio en el extranjero del personal académico, porque los articulas 45 de la ley 18575 (actual
articulo 43) y 156 (actual artículo 162), letra a), de la ley 18834, indican que la relación jurídica entre
esas instituciones y sus académicos puede normarse por estatutos especiales y supletoriamente
por la ley 18834. En cambio, las comisiones de servicio en el extranjero de los funcionarios no
académicos requiere de decreto supremo suscrito además por el Ministro de Relaciones Exteriores.
Con respecto a las comisiones de.servicio que los Rectores de esas Universidades cumplan fuera del
pais, no requieren autorización por decreto, pues conforme a los artículos 75 y 84 (actuales articulas
79 y 88) de la ley 18962, Ley Orgánica Constitucional de Enseñanza, las universidades gozan de
autonomía académica, económica y administrativa, la que se alteraría si los Rectores tuvieran que
someterse al articulo 71 (actual articulo 77) del Estatuto Administrativo (4580/91, 28875198).
Es improcedente exigir alguna garantía a los funcionarios que cumplen una comisión de servicio
en el extranjero para realizar estudios, con el objeto de asegurar su permanencia en la institución
al término de ella. Los articulas 70 y 71 (actuales articulas 76 y 77) del Estatuto Administrativo no
establecen dichas exigencias, ni tampoco obligan a devolver las sumas percibidas durante el goce de
esa franquicia en el evento que el empleado resuelva retirarse voluntariamente de la Administración
(9396191' 28176192, 28227192).
dependientes del Servicio al que pertenecen y, por ende, no existe razón alguna para que pueda
negarse el cumplimiento de tales normas por el hecho de haber desempeñado dichos servicios en
el exterior (11699/94).
Un funcionario de un Gobierno Regional que se encuentra haciendo uso de una comisión de servicio
en el extranjero para cursar estudios, no tiene derecho a percibir sus remuneraciones durante la misma
si así se ha ordenado, ya que el articulo 77 del Estatuto Administrativo señala que el decreto que
disponga la comisión indicará si el funcionario seguirá ganando todo o parte de las remuneraciones
asignadas a su cargo u otras adicionales, en moneda nacional o extranjera, debiendo precisarse la
fuente legal a que debe imputarse el gasto y el plazo de duración de la comisión. Por tal motivo, se
ajusta a derecho el acto administrativo que señala que el interesado conservará la propiedad de su
cargo sin goce de remuneraciones (33559/00).
Como el articulo 69 (actual articulo 75) del Estatuto Administrativo faculta a los Jefes Superiores de
Servicio para disponer comisiones de servicio en el extranjero, y el articulo 71 (actual articulo 77)
de este mismo ordenamiento, por su parte, radica esta facultad en el Presidente de la República,
exigiendo determinadas formalidades, la Contraloria General estima que no existe armonía entre
ambas disposiciones. Sobre la base de aplicar el principio de especialidad, las comisiones de servicio
en el extranjero deben efectuarse de acuerdo con la última de las disposiciones citadas, esto es, que
para disponerlas se requiere de un decreto supremo emitido por el respectivo Ministerio y suscrito,
además, por el Ministerio de Relaciones Exteriores (31879/89).
La modificación de los tramos establecidos para los efectos de la bonificación de estimulo de la ley
19490, una vez qua se encuentra ejecutoriado tal procedimiento, soio proced" cuando se produce
un cupo motivado por el cese de funciones del beneficiario, presupuesto que no se cumple con la
destinación, la comisión de servicio o el cometido funcionario (38745/06).
Concordancias: Arts. 75 y 76 del EA; 156 a 161 de la LOCGR; 3 del decreto 1, de 1991, del Ministerio
de Hacienda, que fija monto de viáticos en dólares para el personal que debe cumplir comisiones
de servicio en el extranjero; decreto 252, de 2007, del Ministerio de Relaciones Exteriores, que
determina coeficiente del costo de vida en que deben reajustarse los sueldos de los funcionarios de
la planta "A" del Servicio Exterior de Chile, que se desempeñan en paises que señala (rige a contar
del1 de enero de 2008); 74 del EAM.
Comentarios:
La modificación prevista por el articulo 2, W 7, de la ley 19154 al articulo 71 (actual articulo 77)
del Estatuto Administrativo, tuvo por objeto establecer que el decreto que disponga la comisión de
servicio en el extranjero, deberá especificar si el funcionario seguirá ganando en su totalidad o en
partes de ellas las remuneraciones asignadas a su cargo.
ARTICULO 78.- Los funcionarios públicos pueden cumplir Ley 18.834, Art. 72.
cometidos funcionarios que los obliguen a desplazarse dentro
o fuera de su lugar de desempeño habitual para realizar labores
específicas inherentes al cargo que sirven. Estos cometidos no
requieren ser ordenados formalmente, salvo que originen gastos
para la institución, tales como pasajes, viáticos u otros análogos,
en cuyo caso se dictará la respectiva resolución o decreto.
Interpretación:
El cometido funcionario puede significar tanto el desarrollo de todas las labores inherentes a un
empleo, como el de funciones específicas, pero siempre por un lapso definido de tiempo (29535193,
5376195, 35255100).
La figura del cometido funcionario supone el cumplimiento de labores inherentes al cargo de planta
o a contrata que se ocupa (4126190).
Conforme con el artículo 72 (actual artículo 78) de la ley 18834, los funcionarios públicos pueden
cumplir cometidos que los obliguen a desplazarse dentro o fuera de su lugar de desempeño habitual
para realizar labores específicas inherentes al cargo que sirven, los que no requieren ser ordenados
formalmente, salvo que originen gastos para la institución, tales como pasajes, viáticos u otros, en
que se dictará una resolución o decreto para establecer el monto de las compensaciones que por
esos motivos tendrá derecho un funcionario en estos casos, sin que puedan incluirse otros que no
sean así determinados (12539102).
Una orden verbal recibida por el funcionario de un servicio para trasladarse desde una ciudad a otra,
no ha constituido un cometido funcionario de aquellos a que se refiere el artículo 78 de la ley 18834,
puesto que tal cometido puede significar tanto el desarrollo de todas las labores inherentes a un
empleo como también de funciones específicas propias del mismo, pero siempre por un lapso definido
de tiempo y, cuando genera gastos para la Administración, debe disponerse mediante resolución u
orden interna formal, prevía a la ejecución del cometido. Tampoco dicho traslado ha configurado una
comisión de servicios, pues éstas, de acuerdo con los artículos 75 y 76 del mismo texto estatutario,
deben disponerse para el desempeño de funciones ajenas al cargo, en el mismo órgano o servicio
o en otro distinto, sin que puedan durar más de tres meses, pudiendo ser renovadas por períodos
iguales pero no más allá de un año (40233105).
El cometido funcionario es una figura jurídica que por su naturaleza descansa sobre la base de
una extensión limitada en el tiempo, al referirse al cumplimiento transitorio de labores específicas.
De esta manera, entonces, debe evitarse que se transforme en una asignación permanente de
funciones, separando a los funcionarios que lo desempeñen, de los cargos para los cuales fueron
nombrados. Si bien los cometidos funcionarios no transgreden el principio relativo al derecho a la
función, el cual implica el legitimo derecho que posee todo servidor público de ejercer las funciones
del cargo para el cual fue nombrado, dado su establecimiento legal y su naturaleza precaria, puede,
al no tener una duración definida, mediante una extensión excesivamente prolongada, transformarse
en un instrumento que, arbitrariamente esté destinado a impedir a un funcionario el cumplimiento de
las labores inherentes a su cargo y consecuencialmente afectar al principio relativo al derecho a la
función, especialmente si se trata de cargos con denominación específica en la planta respectiva,
cuyas funciones se encuentran fijadas por ley. Luego, el requisito de la temporalidad del cometido
funcionario no estará cumplido si a un empleado se le encomienda desempeñarlo durante casi
todo un año para que lo continúe todo el año siguiente, por cuanto, de este modo, se afectará la
continuidad de las actividades inherentes al cargo que le corresponde ejercer (29333/04, 25621/07,
27504/07).
Los Directores Regionales están facultados para disponer respecto del personal a su cargo comisiones
de servicio y cometidos funcionarios (21676/90),
Las resoluciones exentas que emitan las autoridades facultadas para disponer las comisiones de
servicios y los cometidos funcionarios con derecho al pago de viático deberán dictarse, como norma
general, con anterioridad a la realización de las labores encomendadas y, en todo caso, antes de que
se curse la planilla de rendición correspondiente. En dicha resolución se dejará constancia de las
fechas de iniciación y de término de la comisión o cometido, indicándose al mismo tiempo la localidad
en que habrá de cumplirse y la imputación presupuestaria del gasto respectivo. Excepcionalmente,
si por razones de buen servicio el funcionario debe alejarse del lugar de su desempeño habitual
intempestivamente, se podrá dictar la resolución con posterioridad, dejando establecida dicha
circunstancia en el texto del documento (43890/74, 37493/77).
Las limitaciones que afectan a las comisiones de servicio, de acuerdo con el articulo 156 de la ley
10336, no alcanzan a los simples cometidos funcionarios, esto es, a las tareas inherentes a las
funciones del empleo de que es titular el servidor, aun cuando ellas lo obliguen a desplazarse fuera
del lugar de su desempeño habitual (29014/89 -aclarado por el 11672/90-, 2388/90, 40803/01,
52439/04).
Los cometidos func:onarics ordenados en virtud de esta norma, que originen gas!::>s para la
institución, tales como pasajes, viáticos u otros análogos, deben disponerse formalmente a través
de resoluciones exentas u orden interna formal previa a la ejecución del cometido o al menos de los
giros que ordenen el pago del beneficio (10918/93, 3592/98,42785/98, 34086/04).
No hay inconveniente para que la asistencia de los funcionarios de una institución, a actividades
de capacitación, que se encuentren dentro de las que la autoridad administrativa en uso de sus
facultades legales incorpora cada año al programa de perfeccionamiento de la respectiva entidad,
sea dispuesta a través de un cometido funcionario, toda vez que la capacitación y perfeccionamiento
del personal, en las condiciones antes anotadas, constituye una actividadad regulada legalmente,
que se debe armonizar con las necesidades del servicio y las facultades de la respectiva autoridad
administrativa para organizar los recursos disponibles para la consecución de sus fines (28901/05).
Es improcedente compensar o pagar horas extraordinarias por el tiempo que los funcionarios emplean
en trasladarse al lugar en que deben cumplir los cometidos funcionarios o por los lapsos de espera en
el lugar donde corresponde su desempeño, ya que tales periodos no constituyen la realización de las
horas extraordinarias a que se refiere el Estatuto Administrativo (10242/95, 21889/96, 14297/97).
La expresión "otros análogos", contemplada en la segunda parte de este articulo, sobre gastos en
pasajes o viáticos que procedan cuando se cumplen cometidos funcionarios, puede comprender
transporte de efectos de trabajo o movilización, entre otros (26384/90).
Los paises miembros del Convenio Schengen exigen, a contar de junio de 2004, que los extranjeros
que ingresen a ellos acrediten poseer un seguro de viaje individual o colectivo, con una cobertura
mínima de treinta mil euros, que cubra aquellos gastos que pudiera ocasionar su repatriación por
razones médicas, una asistencia médica de urgencia o una atención hospitalaria de urgencia durante
su estancia en el territorio de dichos Estados. Este seguro es obligatorio para todos los ciudadanos
no residentes de Europa y no portarlo puede significar la deportación. Los funcionarios públicos que
son enviados a desempeñar cometidos funcionarios a Europa, tienen derecho a que el servicio les
costee o reembolse el valor del seguro médico que exige el Convenio Schengen como requisito de
ingreso a los paises europeos suscriptores del mismo. Ello, porque la Administración debe asumir
todos aquellos gastos que deriven directamente del cumplimiento de un cometido funcionario, puesto
que si éstos fueran de cargo del empleado, habría un enriquecimiento sin causa para el Fisco, ya que
dichos desembolsos son la consecuencia del cumplimiento de una función pública y no de un acto
personal y voluntario del afectado (43947/07).
Tanto el Servicio de Gobierno Interior como el Gobierno Regional son organismos públicos distintos,
integrantes de la Administración del Estado, pero que poseen un mismo jefe superior, cual es el
Intendente, que los administra según la normativa aplicable a cada uno de ellos. En lo que concierne
a las atribuciones que le asistirían para disponer que los funcionarios pasen a desempeñarse en un
servicio distinto al que pertenecen, cabe aplicar los artículos 67 al 72 (actuales articulas 73 a 78) de
la ley 18834, acorde con los cuales el Intendente Regional, como jefe superior de ambos servicios,
está dotado de atribuciones para ordenar libremente, respecto del personal que se desempeña en
ellos, las destinaciones, comisiones de servicio o cometidos funcionarios que sean necesarios para
el desarrollo de las funciones de dichos organismos. Sin embargo, está impedido de disponer, a
través de "destinaciones" o "cometidos funcionarios", que un empleado perteneciente a alguna de
las referidas instituciones pase a desempeñar funciones ajenas a su cargo en el mismo servicio u
otro distinto (22522/04).
El articulo 78 de la ley 18834 dispone que los funcionarios pueden cumplir cometidos que los obliguen
a desplazarse fuera de su lugar de desempeño habitual para realizar labores especificas inherentes
a su cargo, en tanto que el articulo 7 del DL 249, de 1973, previene que el trabajador que, para el
desempeño de su empleo, se ve obligado a residir en una provincia o territorio que reúna condiciones
especiales derivadas del aislamiento o del costo de vida, tendrá derecho a recibir asignación de
zona, la que es un beneficio compensatorio y adicional, el que corresponde a los servidores que, en
virtud de un cometido, se encuentran en la situación descrita (60269/06).
Concordancias: Arts. 98, letra e), del EA; 156 de la LOCGR; 75 del EAM.
Comentarios:
Los elementos que configuran el cometido funcionario son los siguientes: 1) puede significar tanto el
desarrollo de todas las labores inherentes a un empleo como el de funciones especificas; 2) suponen
el desplazamiento dentro o fuera del lugar de desempeño habitual del empleado; 3) pueden realizarse
Párrafo 4°
De la subrogación
ARTICULO 79.- La subrogación de un cargo procederá cuando no esté Ley 18.834, Art. 73.
desempeñado efectivamente por el titular o suplente.
Interpretación:
Esta forma de desempeño, atendida la especial naturaleza jurídica que reviste, debe operar en toda
circunstancia en que exista una causa plausible y de relativa permanencia que justifique la asunción
de funciones del subrogante, lo que obliga a concluir, que también procede tratándose de cargos que
se encuentren vacantes (19020190, 5836192, 46852106)
La subrogación permite al subrogante, por el solo ministerio de la ley, ejercer la totalidad de las
facultades, derechos, deberes y obligaciones del cargo. Por tal motivo, su horario de trabajo deberá
ser el mismo que cumplía el funcionario a quien se subroga (72387171, 6065197). Tiene la obligación
de suscribir los actos administrativos pertinentes, dejando constancia expresa de la calidad con que
actúa (32251104).
El subrogante goza de todas las atribuciones que son inherentes al cargo que ejerce en tal condición.
No obstante, esta transmisión de atribuciones o facultades no opera respecto de aquéllas que
hayan sido conferidas o delegadas en el funcionario que ha de ser subrogado, en consideración
a la persona que ejerce el cargo, por cuanto estas últimas sólo podrán quedar radicadas en el
subrogante mediante la respectiva resolución emanada de la misma autoridad que las delegó en el
subrogado (77396176).
Si el subrogante de un Juez de Policía Local es un abogado afecto a la ley 18834, sólo tiene
derecho a percibir las rentas de ese empleo, conforme al articulo 76 (actual articulo 82) del Estatuto
Administrativo. Si quien subroga es un abogado particular, como puede ocurrir con la subrogación
de esos magistrados, tendrá derecho a percibir el sueldo del cargo que desempeña más todas las
rentas accesorias correspondientes, ya que de lo contrario se produciría un enriquecimiento sin
causa para la Administración y la figura de la subrogación pasaría a constituir una carga pública
(6065197).
La subrogación se encuentra concebida en relación con los cargos contemplados en los respectivos
escalafones o plantas, por lo que no resulta factible aplicarla en aquellos casos que no se refieren a
un cargo sino que a reemplazar una función (31209190, 669199).
Comentarios:
De acuerdo con el articulo 4, inciso final, del Estatuto Administrativo, son subrogantes aquellos
funcionarios que entran a desempeñar el empleo titular o suplente por el solo ministerio de la ley,
cuando éstos se encuentren impedidos de desempeñarlo por cualquier causa. De este modo, la
subrogación es, junto con la titularidad y la suplencia, una de las tres formas como se puede servir
un cargo de planta.
La subrogación opera de manera automática, a fin de proveer las ausencias temporales o definitivas
que se produzcan en la planta de una institución y está destinada a garantizar el principio de continuidad
de la función pública establecido en la ley 18575. La jurisprudencia administrativa ha declarado que
en ausencia de normas que la regulen, es necesario remitirse a los principios generales que informan
esta figura jurídica y que se hallan contenidos en el Estatuto Administrativo.
ARTICULO '80.- En los casos de subrogación asumirá las Ley 18.834, Art. 74.
respectivas funciones, por el solo ministerio de la ley, el funcionario
de la misma unidad que siga en el orden jerárquico, que reúna los
requisitos para el desempeño del cargo.
Interpretación:
Para determinar el orden de subrogación en un Servicio, debe atenderse al orden o mejor nivel o
posición jerárquica que se ocupe en la dotación de la institución, considerando en el lugar preferente
a quien posee un mayor grado, sea en el escalafón específico de que se trate o, en su defecto, en
la planta general del Servicio. Ello es así, porque para que opere la subrogación debe atenderse al
principio de jerarquía inherente a la función pública, entendiendo como jerarquía el vínculo jurídico
que une a órganos y funcionarios en relación de superior a inferior, y quien se encuentra en una
posición jerárquica de un mayor nivel, está dotado de potestad de mando sobre sus subordinados.
La organización interna de cada Servicio y la estructura de su planta son los factores que permiten
establecer la jerarquía de ciertos funcionarios por sobre otros, correspondiendo a la Jefatura Superior
de cada repartición velar porque dicho ordenamiento se mantenga, ya que permite el normal ejercicio
de las respectivas funciones (9206190).
Para determinar el "orden jerárquico" deberá observarse el orden de prelación de los factores
indicados en el inciso segundo del artículo 51 de la ley 18834, esto es, la antigüedad, primero en el
cargo, luego en el grado, después en la institución, a continuación en la Administración del Estado
y, finalmente, en el caso de mantenerse la concordancia, decidirá el Jefe Superior de la Institución
(19020190, 43108101, 46852106). Sin embargo, tratándose de cargos de exclusiva confianza del
Presidente de la República esta autoridad podrá alterar, conforme al artículo 81, letra a), del Estatuto
Administrativo, el orden de subrogación. Ello requerirá de un acto administrativo que así lo disponga
y que, por consiguiente, modificará la regla general establecida en el artículo 80 del Estatuto
(27803106, 46852106).
La subrogación opera por el solo ministerio de la ley, esto es, de pleno derecho, correspondiendo
asumir el empleo al funcionario de la misma unidad que siga en el orden jerárquico -salvo los dos
casos autorizados en el artículo 75 (actual artículo 81 )- y que tenga los requisitos exigidos para
ocupar ese cargo en propiedad. Ello, con el objeto de mantener la continuidad de la prestación de la
función pública. Lo anterior armoniza con el principio que establece que los empleados no pueden
realizar funciones de inferior jerarquía a las que corresponden a los cargos de su nombramiento
(6177191, 4643192, 8157194, 17769194, 23303195).
Es improcedente que un Consejero Regional subrogue al Intendente como Jefe Superior del
Gobierno Regional y Presidente del Consejo Regional en una sesión de éste. Al no existir una norma
que regule esta materia, es necesario atenerse al orden de subrogación previsto en el Estatuto
Administrativo, el cual establece que cuando un cargo no esté siendo desempeñado efectivamente
por el titular o el suplente, ha de asumir el ejercicio de la respectiva función, de pleno derecho, quien
le siga en orden jerárquico dentro de la respectiva unidad de trabajo, en la medida que acredite
poseer los requisitos para desempeñar el empleo en que debe subrogar (25220/96).
La plaza de Subjefe constituye una regla especial de subrogación que prevalece sobre la general
dispuesta en el Estatuto Administrativo, toda vez que un cargo de esta naturaleza lleva implícito la
subrogación de la jefatura superior, aun cuando quien lo desempeñe no reúna los requisitos para
ejercerlo (86971/76, 70212/79).
El subrogante asume la plenitud de las funciones asignadas al titular, sin necesidad de orden de
autoridad alguna (4928/90, 5836/92, 9719/95, 23303/95).
La ley no ha fijado un plazo máximo de subrogación, la que opera en toda circunstancia existiendo
una causal plausible y de relativa permanencia que la justifique (24062/91 ).
El término "unidad" utilizado por esta norma tiene una acepción amplia, pues se refiere a cualquier
dependencia orgánica de la estructura interna del Servicio y alude en términos genéricos al
funcionario de la misma unidad que siga en orden jerárquico, sin hacer distinción de plantas, ni exigir
la pertenencia a determinados estamentos (181/91, 21151/91).
Quienes ocupaban cargos adscritos (los cuales fueron suprimidos por el solo ministerio de la ley a
contar del 1 de julio de 2006, por mandato del articulo septuagésimo de la ley 19882) no pudieron
desempeñar otras plazas por la vía de la subrogación en los términos del presente articulo, por
cuanto, si bien tales cargos estaban sujetos a la dependencia de una respectiva jefatura, éstos se
encontraban al margen de las plantas de los Servicios, cuyas estructuras constituyen uno de los
elementos que determinan la jerarquía y fijan la forma en que opera este sistema de reemplazo
automático (24159/91, 25467/94, 41 011/97).
Considerando que de acuerdo con este precepto, en los casos de subrogación asumirá las respectivas
funciones, por el solo ministerio de la ley, el funcionario de la misma unidad que siga en el orden
jerárquico, que reúna los requisitos para el desempeño del cargo, bajo ningún aspecto puede pasar
a ejercer un empleo en carácter de subrogante quien se desempeña como contratado, pues éstos
carecen de jerarquía. (24159/91, 24090/94, 37512/96, 59929/05).
Es improcedente que los funcionarios contratados del Servicio Nacional de Menores subroguen a
los Directores de los Centros de Administración Directa de ese Servicio, cuando éstos se encuentren
vacantes o si el titular por cualquier motivo está impedido para desempeñarlo. Ello, porque la glosa
2 de la partida 10/07/02/21 de la ley 20083, autoriza expresamente al personal contratado de ese
organismo para ejercer como directores de los mencionados centros, de modo que no se advierte
inconveniente para que se deleguen funciones directivas en ese tipo de servidores. No obstante,
de los artículos 4, 51, 79 y 80 de la ley 18834, aparece que la subrogación es un sistema común y
reglado que se basa en el principio de la jerarquía funcionaria, pudiendo actuar como subrogantes
sólo personal de planta del mismo servicio, pues el articulo 81 del mismo texto legal unicamente
permitiría fijar otro orden de subrogación, pero con sujeción a los principios que regulan la subrogación
jerarquizada. Con todo, en el articulo único del DFL 8, de 1990, del Ministerio de Justicia, que adecua
las plantas y escalafones del personal del Servicio Nacional de Menores, no se contempla como
empleos a los Directores de Centros de Administración Directa, los cuales constituyen sólo una mera
asignación de funciones, sin que en dicho caso sea procedente la aplicación de la subrogación, ya
que un elemento esencial para que se constituya esta figura legal, es la existencia de un "cargo de
planta" que no esté desempeñado por su titular o suplente. Así, ante la ausencia del servidor a quien
se le hubieren asignado tales funciones, es posible la designación de otro en su lugar, con el objeto
de mantener la continuidad del servicio (61177/06).
Ha procedido que la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas no pague a una funcionaria que
desempeñó el cargo de Director Regional, luego de la renuncia del titular, el sueldo correspondiente
a dicho cargo, por cuanto, si un funcionario ha servido como reemplazante en un empleo para el cual
no reúne los requisitos, ello no ha constituido una subrogación, sino una asignación de funciones, la
cual no otorga derecho a diferencia de remuneraciones (18881/07).
La falta de un funcionario de similar jerarquía del que se requiera reemplazar no impide la plena
aplicación de la norma general de subrogación, puesto que en estos casos asumirá las funciones
el servidor de la misma unidad que siga en orden jerárquico y que reúna los requisitos del cargo,
sin que sea necesario que el subrogante posea similar jerarquía a la del funcionario subrogado
(22237/95).
Quien es designado como Subsecretario titular pasa a ocupar un cargo que integra la planta de la
respectiva Subsecretaría y, por ende, adquiere una determinada jerarquía dentro de la estructura
del Servicio y lo faculta para desarrollar funciones de carácter resolutivo, decisorias o ejecutivas.
Por ello, dicho funcionario sólo se diferencia de los demás servidores que desempeñen cargos en
la misma planta y que no son de exclusiva confianza, por la forma de su designación y remoción.
En este contexto, cabe entender que la persona que subrogue a dicha autoridad debe poseer, a lo
menos, la misma calidad jurídica que el titular, esto es, ser un funcionario de planta. Lo anterior, no
significa limitar o condicionar la norma del artículo 32, W 9 (actual artículo 32 N" 7), de la Constitución
Política ni el artículo 42 (actual artículo 40) de la ley 18575, ya que estas disposiciones se refieren a
la designación de un Subsecretario en calidad de titular, vale decir, que tratándose del nombramiento
de alguna de esas autoridades en esa condición, habrá que estarse a lo en ellas dispuesto, pero no
así cuando se trata de un subrogante, ya que en este caso la situación no es la misma y, por lo tanto,
la normativa aplicable no es aquélla, desde el momento en que la figura jurídica de la subrogación
se encuentra regulada en la ley 18834, debiendo en esta materia aplicarse las disposiciones que al
respecto contempla este cuerpo legal (37512/96).
Comentarios:
El Informe de la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno expresa que en esta disposición se
eliminó el término "escalafón de mérito" al que aludía el proyecto original, por estimarse que la
subrogación opera según el orden jerárquico, y dado que el "escalafón de mérito", que el texto
sustitutivo aprobado por esa Comisión denomina "escalafón", no dice relación con la institución que
se regula en esta norma.
En cuanto al término "unidad" que contiene esta disposición y la siguiente del proyecto, cabe
señalar que tiene una acepción genérica, en cuanto se refiere a cualquier dependencia orgánica
de la estructura interna de cada Ministerio o Servicio Público. Asi, por ejemplo, en este último caso
lo serian la Dirección Nacional_, la Dirección Regional, el Departamento, el Subdepartamento, la
Sección y la Oficina.
ARTICULO 81.- No obstante, la autoridad facultada para efectuar Ley 18.834, Art. 75.
el nombramiento podrá determinar otro orden de subrogación, en
los siguientes casos:
Interpretación:
La ley 18834 entrega la atribución de establecer otro orden de subrogación a "la autoridad facultada
para efectuar el nombramiento", lo cual significa que esta autoridad sólo puede incluir en dicho
orden a funcionarios respecto de los cuales está en condiciones de ejercer la facultad de nombrar
(18662/90, 21864/90).
Letra a)
Esta norma se refiere al orden de subrogación de los directivos de exclusiva confianza que
desempeñan jefaturas de unidades orgánicas de un Servicio, de modo que no es aplicable respecto
de los miembros de la Junta de Calificaciones, cuyo reemplazo está regulado en el reglamento de
calificaciones respectivo (30209/93, 30210/93).
La letra a) del artículo 75 (actual artículo 81) de la ley 18834 permite a la autoridad administrativa
correspondiente alterar el orden jerárquico de subrogación, que establece como exigencia de carácter
general el artículo 74 (actual artículo 80), mediante un decreto o resolución que así lo disponga, acto
administrativo que estará afecto a toma de razón (23397/93, 18160/03).
El artículo séptimo transitorio de la ley 19882 facultó al Presidente de la República, por el plazo de un
año, para determinar, mediante decretos con fuerza de ley, respecto de los organismos regidos por
la ley 18834, los cargos que serán de carrera, según los artículos 7 y 7 bis (actual artículo 8) de ese
texto estatutario. El inciso segundo de dicho artículo transitorio permite no incluir en tal determinación
a los cargos de jefes de departamento o jefaturas de niveles jerárquicos equivalentes cuando
correspondan al segundo nivel de jerarquía del respectivo Servicio, los que mantendrán la calidad
de empleos de la exclusiva confianza de la autoridad competente. Los funcionarios que tienen esa
calidad son aquellos sujetos a la libre designación y remoción del Presidente de la República o de la
autoridad facultada para disponer el nombramiento, pudiendo así ser apartado-s de sus cargos según
lo determine la autoridad pertinente, y son aquellos a que se refiere, para efecto de la subrogación,
la letra a) del articulo 81 del mencionado Estatuto (27803/06).
confianza. Por lo tanto, aun cuando el articulo 81 de la ley 18834 faculta a la autoridad administrativa
para alterar el orden de subrogación establecido en su articulo 80, el que opera de pleno derecho, tal
prerrogativa no significa que en dichos cargos pueda incluirse al personal a contrata (59929/05).
Si bien quienes ocupaban cargos adscritos (los cuales fueron suprimidos por el solo ministerio de
la ley a contar del 1 de julio de 2006, por mandato del articulo septuagésimo de la ley 19882) no
podían desempeñar otras plazas por subrogación, de acuerdo con el articulo 75 (actual articulo
81) del Estatuto Administrativo, era posible incluirlos en el orden de subrogación que la autoridad
determinaba, referido a los cargos de exclusiva confianza y siempre que no existieran en la unidad
respectiva funcionarios que reunieran los requisitos para realizar las labores correspondientes. Lo
señalado en la letra a) del mencionado articulo 75 (actual articulo 81), que faculta a la autoridad para
determinar otro orden de subrogación en el caso de cargos de exclusiva confianza, no significa que
se pueda prescindir totalmente de las normas y principios que regulan la subrogación y, por ende,
incorporar como posibles subrogantes a personas contratadas -salvo que lo autorice un precepto
legal expreso-, toda vez que dicha disposición únicamente permite alterar el orden jerárquico de
subrogación (33069/94, 22406/00).
Quien es designado como Subsecretario titular pasa a ocupar un cargo que integra la planta de la
respectiva Subsecretaria y, por ende, adquiere una determinada jerarquía dentro de la estructura
del Servicio y lo faculta para desarrollar funciones de carácter resolutivo, decisorias o ejecutivas.
Por ello, dicho funcionario sólo se diferencia de los demás servidores que desempeñen cargos en
la misma planta y que no son de exclusiva confianza, por la forma de su designación y remoción.
En este contexto, cabe entender que la persona que subrogue a dicha autoridad debe poseer, a lo
menos, la misma calidad jurídica que el titular, esto es, ser un funcionario de planta. Lo anterior, no
significa limitar o condicionar la norma del articulo 32, W 9 (actual articulo 32 W 7), de la Constitución
Política ni el articulo 42 (actual articulo 40) de la ley 18575, ya que estas disposiciones se refieren a
la designación de un Subsecretario en calidad de titular, vale decir, que tratándose del nombramiento
de alguna de esas autoridades en esa condición, habrá que estarse a lo en ellas dispuesto, pero no
así cuando se trata de un subrogante, ya que en este caso la situación no es la misma y, por lo tanto,
la normativa aplicable no es aquélla, desde el momento en que la figura jurídica de la subrogación
se encuentra regulada en la ley 18834, debiendo en esta materia aplicarse las disposiciones que al
respecto contempla este cuerpo legal (37512/96).
Se ajusta a derecho decreto supremo del Ministerio de Salud, dictado por orden del Presidente de
la República, que modifica el orden de subrogación del Director del Instituto de Salud Pública, por
cuanto el articulo 7, letra e), de la ley 18834, faculta al Jefe del Estado para nombrar al Director y
para establecer a su respecto un orden de subrogación especial. A su vez, dicho decreto tiene el
carácter de supremo, ya que ha sido firmado por el Ministro de Salud bajo la fórmula "por orden del
Presidente de la República", en virtud de la delegación de firma que efectuara el Primer Mandatario
en sus ministros respecto de determinadas materias, como ocurre en la especie. Por otra parte, el
funcionario subrogante del Director de ese Servicio se encuentra inhabilitado para conocer de los
reclamos que se le formulen en materias que le ha correspondido resolver en su condición de Jefe de
Departamento de Control Nacional, toda vez que se vería vulnerada la garantía de los derechos de los
particulares frente al Estado, especialmente porque quedaría sin aplicación el principio de instancias
diferenciadas, que es propio de los procesos administrativos, que contemplan una segunda revisión
por un superior jerárquico (43113/04).
El orden de subrogación del Abogado Procurador Fiscal de Santiago, está expresamente establecido
en una norma especial de la Ley Orgánica del Consejo de Defensa del Estado, por lo que no procede
que el Presidente del citado organismo fije, respecto de aquellos funcionarios una determinada forma
de subrogación (23283/93).
Letra b)
Los servidores que ocupaban cargos adscritos (los cuales fueron suprimidos por el solo ministerio
de la ley a contar del 1 de julio de 2006, por mandato del artículo septuagésimo de la ley 19882)
no podían desempeñar otras plazas por subrogación, ya que esos empleos estaban al margen de
las plantas de los Servicios, pero era factible incluirlos en el orden de subrogación que la autoridad
determinaba siempre que no existieran en la unidad funcionarios que reunieran los requisitos para
realizar las labores respectivas (33069/94).
Si bien la subrogación dispuesta por este articulo opera por el solo ministerio de la ley respecto
del funcionario de la misma unidad que siga en el orden jerárquico y que reúna los requisitos para
desempeñar el cargo correspondiente, en el caso de no existir empleados que cumplan con esas
exigencias, la autoridad facultada para efectuar el nombramiento puede determinar otro orden de
subrogación (33697/94).
El término "unidad" utilizado por esta norma tiene una acepción genérica, refiriéndose a cualquier
dependencia orgánica de la estructura interna del Servicio, como lo son la Dirección Nacional, las
Direcciones Regionales, los Departamentos, los Subdepartamentos, las Secciones y las Oficinas, lo
que armoniza con los niveles de organización interna de los servicios públicos previsto en el articulo
29 (actual articulo 32) de la ley 18575 (21151/91 ).
Comentarios:
La subrogación es un mecanismo de reemplazo inmediato y de pleno derecho de un empleo de
planta, en caso de ausencia temporal o definitiva de quien lo sirve, con el objeto de mantener la
continuidad de la función pública. No obstante, el legislador ha establecido dos excepciones a esta
regla general al facultar a la autoridad que nombra para fijar un orden de subrogación distinto del
normal, en el caso de cargos de exclusiva confianza y cuando no existan en la unidad funcionarios
que reúnan los requisitos para desempeñar las labores correspondientes.
La facultad de la autoridad para disponer un orden de subrogación distinto al que prevé el articulo
80 es concordante con lo dispuesto por el articulo 25 de la ley 18575, según el cual el Ministro será
subrogado por el respectivo Subsecretario y, en caso de existir más de uno, por el de más antigua
designación, salvo que el Presidente de la República nombre a otro Secretario de Estado o que la
ley establezca para Ministerios determinados otra forma de subrogación.
ARTICULO 82.- El funcionario subrogante no tendrá derecho al Ley 18.834, Art. 76.
sueldo del cargo que desempeñe en calidad de tal, salvo si éste se
encontrare vacante o si el titular del mismo por cualquier motivo no
gozare de dicha remuneración.
Interpretación:
El derecho que asiste al funcionario que subroga cuando se configuran las situaciones descritas en este
precepto, se relaciona solamente con el "sueldo" del cargo subrogado y no con las remuneraciones,
siendo dable agregar que la expresión "dicha remuneración" que emplea este articulo 76 (actual
articulo 82), debe entenderse referida necesariamente al sueldo de ese empleo, como quiera que el
término remuneración constituye un concepto genérico comprensivo del sueldo, según así se infiere
de lo dispuesto en las letras d) y e) del articulo 3 de la ley 18834 (14604190, 19617190, 26384190,
31665190, 9841191, 6745192, 8502192, 10586193, 15360195, 33398102). Lo anterior implica que
cuando un funcionario subroga en un cargo vacante, sin perjuicio de mantener la totalidad de las
remuneraciones asignadas al empleo del cual es titular, tiene derecho, adicionalmente, a la cantidad
que corresponda a la diferencia que exista entre el "sueldo" de su cargo y el "sueldo" del cargo que
subroga, durante el periodo de subrogación (23276104).
Para que se configure la subrogación y se tenga derecho a percibir, ya sea la diferencia de sueldos
entre el cargo que se posee y el que se subroga o el sueldo del empleo que se sirve en tal calidad,
cuando fuere procedente, es necesario que se trate del desempeño de un cargo contemplado en
escalafones o plantas, no siendo factible subrogar una función, en que el empleo no existe y, por
ende, no tiene asignada una remuneración alternativa (31209190, 669199, 33499104).
Si bien en las entidades que se rigen en sus relaciones con el personal por el Código del Trabajo, se
utiliza como modalidad de desempeño la subrogación, ello lo ha sido solamente en atención a que
la misma constituye, según principios generales de la Administración, un mecanismo de reemplazo
que tiene por objeto garantizar la continuidad de la función pública. Sin embargo, ello no ha podido
significar que a ese personal le sea aplicable la figura de la subrogación tal como se contempla en el
Estatuto Administrativo, porque el régimen que este ordenamiento consulta al respecto no es propio
de los trabajadores regidos por el Código aludido y, por ende, no procede que se aplique la norma
sobre pago de sueldo del cargo subrogado (17807190).
El pago del sueldo del cargo en que se subroga prescribe en el plazo de dos años contado desde
que el derecho se hizo exigible, conforme a lo previsto en el articulo 155 (actual articulo 161) del
Estatuto Administrativo. Es inaplicable, al respecto, el lapso de seis meses consultado en el articulo
94 (actual articulo 99) de este Estatuto, toda vez que el plazo a que se refiere esta norma sólo rige
en relación con las asignaciones previstas en el articulo 93 (actual articulo 98) (18582195).
y que conserva, y no al estamento que integra o al grado que tiene asignado el cargo que subroga
(14582/05).
Comentarios:
Según la historia de la ley 18834, el proyecto primitivo no concedía al subrogante derecho al sueldo,
situación que se modificó a instancias de la Contraloria General. En el respectivo Informe de la
Cuarta Comisión Legislativa se dejó establecida la necesidad de recoger en este caso el mismo
principio remuneratorio que rige para la suplencia, otorgando al subrogante el derecho a sueldo,
cuando se cumplen determinadas condiciones.
El derecho que otorga el articulo 82 al subrogante, si se configuran las situaciones que describe, es
al "sueldo del cargo" que subroga, pero no a las remuneraciones que éste tenga asignadas, de lo
cual se desprende que durante la subrogación el funcionario que es subrogado mantiene las demás
remuneraciones a que tiene derecho en el cargo de que es titular. La expresión "dicha remuneración"
que emplea luego este precepto, debe entenderse referida, necesariamente, al sueldo del empleo
subrogado, como quiera que el término remuneración es un concepto genérico, comprensivo del
sueldo, conforme al articulo 3, letras d) y e), de la ley 18834.
ARTICULO 83.- El derecho contemplado en el artículo precedente Ley 18.834, Art. 77.
sólo procederá sí la subrogación tiene una duración superior a
un mes.
Interpretación:
Para que se configure la subrogación y el derecho a percibir ya sea la diferencia de sueldo entre
el cargo que se posee y el que se subroga o el sueldo del empleo que se sirve en tal calidad, es
necesario que se trate del desempeño de un cargo y no de una función, pues ésta no tiene asignada
una remuneración determinada (31209190, 669199).
De acuerdo con los artículos 4, 76 y 77 (actuales artículos 4, 82 y 83) del Estatuto Administrativo,
la subrogación constituye una sola figura jurídica, cualquiera sea la causa que la determine. Para
acceder al sueldo del cargo en que se subroga, la ley exige que el empleo se encuentre vacante o
que el titular del mismo por cualquier causa no goce de ese estipendio y, además, que la subrogación
tenga una duración ininterrumpida superior a un mes. Este último requisito se refiere exclusivamente
al plazo total de duración de la subrogación, pero no implica una exigencia adicional que condicione
la procedencia del pago del sueldo al subrogante, en el sentido de que el sueldo también haya dejado
de percibirse por otra persona por un lapso superior al indicado (29955192, 15360195, 32391106).
El derecho que asiste al funcionario que subroga dice relación solamente con el sueldo del titular,
esto es, con la retribución pecuniaria de carácter fijo y por periodos iguales, asignada a un empleo
público de acuerdo con el nivel o grado en que se encuentra clasificado (10586193).
Comentarios:
Esta disposición fue incorporada por la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno, la cual establece
una limitación al derecho contemplado en el artículo 76 (actual artículo 82).
Párrafo 5°
De las prohibiciones
ARTICULO 84.- El funcionario estará afecto a las siguientes Ley 18.834, Art. 78.
prohibiciones:
e) Actuar enjuicio ejerciendo acciones civiles en contra de los intereses Ley 19.653, Art. s•,
del Estado o de las instituciones que de él formen parte, salvo que 3).
se trate de un derecho que ataña directamente al funcionario, a su
cónyuge o a sus parientes hasta el tercer grado de consanguinidad
o por afinidad hasta el segundo grado y las personas ligadas a él por
adopción;
d) Intervenir ante los tribunales de justicia como parte, testigo o perito, Ley 18.834, Art. 78.
respecto de hechos de que hubiere tomado conocimiento en el ejercicio
de sus funciones, o declarar en juicio en que tenga interés el Estado o
sus organismos, sin previa comunicación a su superior jerárquico;
1) Realizar cualquier acto atentatorio a la dignidad de los demás Ley 20.005, Art 2', letra
funcionarios. Se considerará como una acción de este tipo el ) 3.,
a' ~·
acoso sexual, entendido según los términos del articulo 2•, inciso
segundo, del Código del Trabajo. (*)
Interpretación:
Letra a)
De acuerdo con un principio básico de derecho público, la autoridad y sus órganos no pueden
ejecutar otros actos que aquellos para los cuales las leyes los hayan expresamente facultado o,
en su defecto, en virtud de un acto administrativo emanado de autoridad competente que haya
delegado el ejercicio de las pertinentes facultades o atribuciones. Este principio lo recogen dos
disposiciones legales: el articulo 161 del DFL 338, de 1960 -articulo 78 (actual articulo 84), letra a),
de la ley 18834-, según el cual ningún funcionario puede tomar la representación del Fisco o del
Servicio a que pertenece para ejecutar actos o celebrar contratos que excedan sus atribuciones o
que comprometan el erario nacional, salvo que una norma legal o una orden de autoridad competente
lo hubiere facultado para ello, y el articulo 63 de la ley 10336, Orgánica de la Contra lo ría General
de la República, el cual expresa que "ningún funcionario podrá contraer deudas o compromisos de
cualquiera naturaleza, que puedan afectar la responsabilidad fiscal, sin que previamente haya sido
autorizado por decreto supremo tramitado con las formalidades legales". De estas disposiciones se
desprende que para la validez de cualquier acto que signifique contraer deudas o compromisos que
afecten la responsabilidad fiscal, es necesario que exista una disposición legal expresa que así lo
permita o bien que, previamente, se haya conferido al empleado la respectiva autorización mediante
el acto administrativo correspondiente (32306178, 53243178).
Los funcionarios públicos están sujetos a una serie de prohibiciones en el ejercicio de su cargo, es así
como esta norma establece que éstos no podrán ejercer facultades, atribuciones o representaciones
de las que no estén legalmente investidos o no les hayan sido delegadas (3555101 ).
(') Las modificaciones que introduce el articulo 2' de la ley 20.005, que tipifica y sanciona el acoso sexual,
al articulo 78 de la ley 18.834, debe entenderse hecha al articulo 84 del DFL 29, de 2004, del Ministerio de
Hacienda, que fijó el texto refundido, coordinado y sistematizado del Estatuto Administrativo.
o representación de las que no estén legalmente investidos o no les hayan sido delegadas.
Por ende, dicha Jefatura Superior al actuar en tal sentido vulneró el principio de legalidad contenido
en los artículos 6 y 7 de la Constitución Política y 2 de la ley 18575, lo que ha originado como
consecuencia, la nulidad de la carta aludida y las responsabilidades y sanciones que la ley indica
(2120/97).
Letra b)
El vocablo "interés" que emplea el articulo 162 del DFL 338, de 1960 -articulo 78 (actual articulo
84), letra b), de la ley 18834- dice relación con beneficios de cualquier orden que pueda obtener
del asunto de que se trata el empleado o sus parientes próximos, de modo que el funcionario debe
abstenerse de intervenir o de participar en actos que puedan reportar a él o a sus familiares alguna
ventaja, entre las que, obviamente, se encuentra el goce de los estipendios inherentes al ejercicio de
un empleo determinado por un hermano (58952/62, 53474/79, 7276/82).
El concepto de la frase "en asuntos en que tenga interés", contenido en el articulo 162 del DFL 338,
de 1960 -articulo 78 (actual articulo 84), letra b), de la ley 18834- debe ser interpretado en el sentido
que comprende no sólo situaciones en que tenga lugar el uso de una potestad discrecional del
funcionario, especialmente en materias de tipo económico, que pueda implicar un beneficio directo
para el tercero que contrata con la institución, sino, en general, de todas aquéllas que representan un
beneficio de cualquier orden para las personas que en ella se indican (58952/62, 21941/64).
Los empleados públicos no pueden intervenir, en razón de sus funciones, en asuntos en que tengan
interés él, su cónyuge, sus parientes consanguíneos hasta el tercer grado inclusive o por afinidad
hasta el segundo grado y las personas ligadas por adopción. No dar cumplimiento a esta prohibición
significa, además, contravenir gravemente el principio de probidad administrativa que debe guiar
todas las actividades de los servidores de la Administración (9685/93, 3737/99).
Es improcedente que el Jefe Superior de un Servicio contrate como Coordinador de los Servicios de
Educación que tiene a su cargo, a su hermano paterno, toda vez que vulnera el articulo 162 del DFL
338, de 1960 -articulo 78 (actual articulo 84), letra b), de la ley 18834- norma respecto de la cual
fluye, considerando lo dispuesto en los artículos 27 y siguientes del Código Civil, que los hermanos
están en segundo grado de consanguinidad en linea colateral, regla que no exige que éstos deban
necesariamente serlo de padre y madre (7276/82).
Un funcionario público puede concurrir como simple particular a una propuesta, siempre que no le
corresponda ninguna actuación directa o indirecta en la resolución de ella o en los trámites, informes
o actuaciones relacionados con la materia (66135/61, 81250/68).
Los empleados públicos pueden interesarse por la adquisición de materiales en desuso y útiles
dados de baja del Servicio al cual pertenecen o de otro distinto, siempre que no concurran las
circunstancias previstas en los artículos 162 y 163 del DFL 338, de 1960 -articulo 78 (actual articulo
84), letras b) y e), de la ley 18834, respectivamente- (40100/62).
Los servicios públicos no pueden celebrar contratos de arrendamiento de inmuebles con funcionarios
de su dependencia, ya que tales actos se encuentran afectos a la prohibición que establece el articulo
162 del DFL 338, de 1960 -articulo 78 (actual articulo 84), letra b), de la ley 18834- (83831/64).
Es improcedente arrendar el vehículo de propiedad del empleado para que éste, haciendo uso de él,
desempeñe una comisión de servicio o un cometido funcionario. Ello es, sin perjuicio que el
funcionario pueda usar su automóvil en labores propias del Servicio que le ordene realizar la Jefatura
Superior, y que en tal caso se le reembolsen los gastos de combustible y lubricantes, debidamente
acreditados, en que haya incurrido, al haber utilizado un vehículo de su propiedad para desempeñar
dicha comisión o cometido (40156/61, 60193/61,22110/64, 56475/69).
Tanto el Rector de una universidad estatal como su cónyuge, docente de la misma, pueden ser
contratados a honorarios por esa casa de estudios para efectuar labores fuera de la jornada de
trabajo y en días sábado y domingo. No obstante, en estas contrataciones deberá considerarse lo
dispuesto en el artículo 78 (actual artículo 84), letra b), de la ley 18834, al cual se encuentra afecto el
Rector, y que establece la prohibición para los funcionarios de intervenir, en razón de sus funciones,
en asuntos en que tengan interés él, su cónyuge y demás parientes que el precepto señala. Por
ello, no resultan objeta bies, por esta última razón, los convenios suscritos por autoridades de dicha
universidad, distintas del Rector, mediante los cuales se contrató a honorarios a éste y a su cónyuge.
En cambio, sí deben repararse aquéllos que celebró el Rector, a través de los cuales se contrató a
honorarios a su cónyuge, en los que además de transgredirse el artículo 78 (actual artículo 84), letra
b), se atenta contra el principio de probidad administrativa. (31379/97).
El Delegado Provincial del Servicio de Vivienda y Urbanización no puede realizar funciones de revisor
independiente de obras de construcción en aquellos casos que le corresponde intervenir al Servicio
del que forma parte. Ello, porque si bien éste no se encuentra sujeto a la inhabilitación prevista en
el Reglamento del Registro Nacional de Revisores Independientes de Obras de Construcción, se
le aplica lo dispuesto en el artículo 78 (actual artículo 84), letra b), de la ley 18834, que prohibe a
los empleados públicos intervenir, en razón de sus funciones, en asuntos en que él tenga interés
(42479/00).
Los funcionarios públicos, especialmente los afectos a las leyes 18834 y 18883, pueden elaborar
proyectos, informes·, estudios y análisis sobre materias, obras o trabajos del mismo organismo en que
se desempeñan, para otros entes de la Administración del Estado, en los que se inviertan o deban
invertirse caudales públicos tanto fiscales como municipales, e incluso de servicios autónomos, sea
a través de sociedades o en su calidad de personas naturales, siempre que no se vulneren diversas
normas que establecen condiciones para tal fin y, en especial, el principio de probidad administrativa.
Es así como dichos servidores no pueden infringir este último principio, que se encuentra contemplado
en la ley 18575 y artículos 55 (actual artículo 61), letra g), de la ley 18834, y 58, letra g), de la
ley 18883, que los obliga en el ejercicio de sus funciones, a priorizar en todo momento el interés
público por sobre el privado, actuando con objetividad, imparcialidad y transparencia en su gestión y
evitando que sus prerrogativas o esferas de influencia se proyecten en su actividad particular. Esto
puede ocurrir fácilmente cuando el quehacer privado incide o se relaciona directa o indirectamente
con el cargo que se ocupa en un Servicio determinado y, obviamente, ha de ponderarse en cada
ocasión de acuerdo con las circunstancias y con la naturaleza del empleo en la Administración.
Tampoco pueden contravenir disposiciones que constituyen una expresión y aplicación del citado
principio, entre otras, los artículos 78 (actual artículo 84), letra b), de la ley 18834 y 82, letra b), de la
ley 18883, que impiden al empleado intervenir, en razón de sus funciones en asuntos en que tenga
interés él o alguna de las personas allí indicadas, y los artículos 80 y 81 (actuales artículos 86 y 87),
letra b), del Estatuto Administrativo y 84 y 85, letra b), del Estatuto Administrativo para Funcionarios
Municipales, que se refieren a las incompatibilidades entre los cargos y sus excepciones. Lo anterior,
es sin perjuicio de las distintas prohibiciones y limitaciones establecidas en las leyes o reglamentos
orgánicos de los servicios (28721/99).
Es improcedente que los funcionarios del Servicio Agrícola y Ganadero que intervienen en los
procedimientos de enajenación de sitios y casas de una reserva CORA, puedan adquirir dichos
inmuebles, porque ello contraviene el articulo 78 (actual articulo 84), letra b), de la ley 18834
(28912/91 ).
Es improcedente establecer mediante una norma reglamentaria que los funcionarios de la Dirección
General del Crédito Prendario, cualquiera sea la unidad, departamento, sección u oficina en
que presten sus servicios, puedan contratar préstamos en las condiciones establecidas, previa
autorización escrita del jefe de la unidad o de la Dirección General en su caso. Ello, porque una
disposición de esta naturaleza permitiría celebrar mutuos pignoraticios entre la Dirección mencionada
y los empleados de la misma, quienes en el desempeño de sus cargos deben realizar las distintas
labores inherentes al perfeccionamiento y ejecución de tales contratos, lo cual vulnera el articulo 78
(actual articulo 84), letra b), de la ley 18834, que prohibe a los funcionarios públicos intervenir, en
razón de sus funciones, en asuntos en que ellos tengan interés (18661/91 ).
Concordancias: Arts. 13 y 52 y siguientes de la LOCBGAE; 61, letra g), del EA; 27 y ss. del CC;
240 del CP.
Letra e)
La jurisprudencia administrativa sobre la base de lo dispuesto en el articulo 163 del DFL 338, de
1960 -articulo 78 (actual articulo 84), letra e), de la ley 18834- ha señalado que la frase "los intereses
del Estado o de las instituciones que de él formen parte", son intereses de carácter pecuniario, de
manera que los abogados funcionarios están facultados para patrocinar todo tipo de gestiones y
presentaciones ante las autoridades administrativas, con excepción de aquéllas en las que exista la
posibilidad que se condene pecuniariamente a un organismo público y en aquellas representaciones
de personas que deban concurrir a los Tribunales Ordinarios en materias litigiosas de índole
patrimonial, en que la contraparte sea un Servicio de la Administración. En el proceso penal, el
más alto interés del Estado radica en obtener una sentencia justa, sea condenatoria o absolutoria,
por lo cual no puede contrariar dicho interés superior la actividad profesional del abogado, en la
medida en que ella está precisamente destinada a auxiliar a los Tribunales en la obtención de dicho
pronunciamiento (79705/66, 40022/71, 25575/75).
Los abogados que prestan servicios a la Administración del Estado, sea como titulares, contratados
o por convenios a honorarios, están habilitados para representar a inculpados, reos o condenados
en delitos por manejo en estado de ebriedad, porque el artículo 58 (actual artículo 56) de la ley
18575, reconoce a los servidores públicos el derecho a desarrollar cualquier profesión, industria,
comercio u oficio, pero los obliga a evitar que sus prerrogativas o esferas de influencia se proyecten
en su actividad particular, aunque la posibilidad de conflicto sea sólo potencial. Fundamentan
también la anterior conclusión, las letras e) de los artículos 78 (actual artículo 84) y 82 de las leyes
18834 y 18883, respectivamente, que prohiben a los funcionarios públicos actuar en juicio ejerciendo
"acciones civiles" en contra de los intereses del Estado o instituciones que de él son parte, salvo
tratándose de derechos que los afecten directamente, a su cónyuge o parientes hasta el tercer grado
de consanguinidad o afinidad hasta el segundo grado y los adoptados. De esta manera, las referidas
disposiciones de dichos ordenamientos estatutarios son similares al artículo 58 (actual artículo 56)
de la ley 18575, que establece una limitación en los mismos términos, pero que atendido su alcance
se aplica a todos los servidores de la Administración del Estado, independientemente de su régimen
estatutario, incluidos quienes se desempeñen a honorarios. A mayor abundamiento, la prohibición del
articulo 58 (actual artículo 56) de la ley 18575, se refiere a causas civiles, esto es, materias litigiosas
de índole patrimonial en que la contraparte sea un organismo de la Administración del Estado. El
manejo en estado de ebriedad, en cambio, posee el carácter de acción penal, lo que corrobora
la historia fidedigna del artículo 58 (actual artículo 56) citado, que señala que con la prohibición
funcionaria de actuar en causas civiles en contra de los intereses del Estado se aclara en la ley el
sentido y alcance de esta prohibición, recogiendo la interpretación de la Contraloría General, en
cuanto a que para contravenir este deber de abstención, debe existir contienda jurisdiccional en que
pueda resultar comprometido el interés pecuniario del Estado o las entidades integrantes del sector
público. Tratándose de conductas delictivas por manejo en estado de ebriedad no existe la posibilidad
de condenar pecuniariamente a entidades públicas, como tampoco su naturaleza es la de un asunto
litigioso patrimonial, a lo cual no obsta, por cierto, la condena en costas o aplicación de multas, pues
si bien ambas tienen connotación económica, por una parte, las costas, según lo prescrito en el
artículo 24 del Código Penal, son una obligación envuelta en toda sentencia condenatoria criminal
con el objeto de reembolsar los gastos originados por el litigio, y, por otra, la multa, conforme a los
artículos 21 del citado Código y 121 de la ley 17105 (ley derogada por el artículo primero, artículo
58 de la ley 19925), es una modalidad de la pena, por lo que tiene carácter sancionatorio, siendo
insuficientes para atribuirle al delito que nos ocupa el carácter de "acciones civiles" (7083/01 ).
Las actividades particulares desarrolladas por el Director Ejecutivo y por el Jefe de Laboratorio de
una entidad estatal, consistentes en labores similares o paralelas a las propias de ese organismo,
y que no han estado dirigidas específicamente contra los intereses del Estado o sus instituciones,
no quedan comprendidas en la prohibición que, al respecto, contempla este precepto. No obstante,
la conducta de los citados empleados podría significar una vulneración del principio de probidad
administrativa, según el cual los servidores públicos deben observar una conducta funcionaria
moralmente intachable y una entrega honesta y leal al desempeño de su cargo, con preeminencia del
interés público sobre el privado, lo que debe ser determinado en el pertinente sumario administrativo
(28808/95).
El articulo 61 de la ley 20000 señala que el Juez de Garantía o el Ministerio Público, deben:. informar
a la Contraloria General de la República sobre la identidad de los abogados que se desempeñen
como funcionarios o empleados contratados a cualquier titulo en los servicios de la Administración
del Estado o en Instituciones o servicios descentralizados, territorial o funcionalmente que patrocinen
o actúen como apoderados o mandatarios de imputados por crímenes, simples delitos o faltas
contempladas en esa ley. Con tal propósito, el Organismo Contralor mantiene una base de datos
actualizada con la identidad de aquellos profesionales que infrinjan esa ley, en lo relativo a las
actuaciones sobre crímenes o simples delitos conforme a la información que sobre el particular,
proporcionen los organismos competentes, la que debe sujetarse a la normativa constitucional y
legal existente sobre la materia, especialmente, a las regulaciones contenidas en la ley 19628, sobre
protección de datos de carácter personal (41280/06).
Comentarios:
La jurisprudencia administrativa ha declarado que el articulo 163 del DFL 338, de 1960 (actual articulo
84, letra e), de la ley 18834) no puede limitarse al sólo sentido de la frase "intereses del Estado" que
él emplea, ya que de atenerse a esa sóla frase seria forzoso concluir que los funcionarios públicos
estarían impedidos de actuaren todo asunto en que existiere de por medio una decisión administrativa,
en circunstancias que dentro de una interpretación sistemática y finalista del ordenamiento jurídico
no puede admitirse que éste, que comienza garantizando el libre ejercicio de toda profesión, oficio,
industria o comercio, pueda por otra parte impedir el desarrollo de una profesión por el sólo hecho de
darse la presencia del Estado o de un ente público cualquiera como segundo sujeto de una relación
de derecho. i"or ello, el exacto sentido y alcance de dicha norma debe bus~arse en la prohibición de
actuar contra los intereses del Estado, porque proceder contra los intereses de alguien, desde luego,
implica la idea de una posibilidad de perjuicio, y para que esa posibilidad exista es necesario que se
trate de una materia de índole patrimonial y que haya un Tribunal con atribuciones para obligar a los
organismos administrativos a dar cumplimiento a la decisión que puede causar este perjuicio. En
consecuencia, para transgredir el deber de abstención que prescribe dicho articulo 163 (actual articulo
78 -actual articulo 84-, letra e), de la ley 18834) es menester que haya una contienda jurisdiccional en
que pueda resultar comprometido el interés pecuniario del Estado o de las entidades que integran el
sector público, por lo que los abogados funcionarios están obligados a inhibirse de patrocinar causas
civiles en las cuales exista la posibilidad de una condena pecuniaria que afecte a un organismo
público o de asumir la defensa de personas que deben concurrir a estrados jurisdiccionales, teniendo
como contraparte a un Servicio de la Administración del Estado, en un asunto litigioso de naturaleza
patrimonial.
La modificación introducida a la letra e) de este articulo 78 (actual articulo 84) por el articulo 5, W 3,
de la ley 19653, tuvo por objeto recoger la doctrina sentada en la materia por la Contraloria General
de la República, al establecer que la conducta prohibida por el Estatuto Administrativo sólo se refiere
a la actuación directa en juicio ejerciendo acciones civiles, quedando de esta manera circunscrita
dicha prohibición al eliminarse la expresión "indirectamente" que consultaba el texto original de esa
letra e), y a acciones civiles, lo cual supone excluir de ella toda acción de otra naturaleza.
ese deber de abstención "es menester que haya una contienda jurisdiccional en que pueda resultar
comprometido el interés pecuniario del Estado o de las entidades que integran el sector público".
Letra d)
Los funcionarios públicos pueden intervenir ante los Tribunales de Justicia, actuando como parte,
testigo o peritos, respecto de hechos de que hubieren tomado conocimiento en el ejercicio de sus
funciones, como asimis'mo declarar en un proceso en que tenga interés el Estado, pero siempre que
hayan comunicado oportunamente de esta situación a su superior jerárquico (11737/99, 36081/01).
Letra e)
Letra f)
No es posible que folletos sobre divulgación de una Asociación Gremial del sector público, puedan
ser financiados con avisos económicos colocados por la empresa privada, porque ello implicaría
transgredir el artículo 156 del DFL 338, de 1960 (actual artículo 78 (actual artículo 84), letra f), de la
ley 18834) (75758/60).
Infringe el artículo 156 del DFL 338, de 1960 (actual artículo 78 -actual artículo 84-, letra f), de la ley
18834), el funcionario público que solicita préstamos en dinero a sus subordinados (60192/69).
Transgrede el artículo 156 del DFL 338, de 1960 (actual artículo 78 -actual artículo 84-, letra f), de la ley
18834), el abogado de una entidad pública que, mediante honorarios, ofreció a un particular prestar
servicios profesionales respecto de una gestión interna del Servicio a que pertenece, no obstante
que para obtener el beneficio respectivo no se requería intervención de abogado (19280/70).
No resulta legalmente posible que los servidores públicos acepten por motivo alguno especies u
otros elementos de entidades ajenas al sector público, menos aún cuando éstos han participado en
las respectivas licitaciones (21233/01).
Un empleado que cobró honorarios a un particular por efectuarle trabajos relacionados con la función
pública que desempeña, los cuales se realizaron durante la jornada de trabajo y con recursos de
la institución, infringió, entre otras disposiciones, el artículo 78 (actual artículo 84), letra f), de la ley
18834. Dicha conducta contravino, asimismo, una Circular de esa entidad, relacionada con la ley
19653, que prohibe captar clientela particular en sus dependencias, con ocasión de la atención que
se presta a los usuarios que concurren a gestionar asuntos en el Servicio (5959/02).
Concordancias: Arts. 248, 248 bis, 249, 250 y 251 del CP.
Letra g)
La utilización de personal o material de la entidad para fines ajenos a los institucionales, constituye
una prohibición a que están afectos los funcionarios públicos de acuerdo con este precepto, cuya
Letra h)
Los inmuebles del Estado destinados a casa habitación de los funcionarios públicos no pueden
utilizarse en actividades de propaganda política como seria el caso de la exhibición de afiches en favor
de una determinada candidatura electoral. Ello, porque los bienes estatales sólo pueden usarse para
el logro de los fines que la ley encomienda a los servicios públicos, siendo ajeno a tales propósitos la
utilización de aquéllos en actividades de proselitismo o propaganda política (32259/93).
El articulo 16 (actual articulo 19) de la ley 18575 establece que el personal de la Administración del
Estado estará impedido de realizar cualquier actividad política dentro de la Administración, norma
que en términos similares repite el articulo 78 (actual articulo 84), letra h), de la ley 18834. Por tal
motivo, en el desempeño de la función pública los servidores que se encuentran regidos por tales
preceptos, cualquiera sea su jerarquía, están impedidos de realizar actividades de carácter político
contingente, de hacer proselitismo o propaganda política, apoyar candidaturas políticas, promover o
intervenir en campañas o participar en reuniones o proclamaciones para tales fines, ejercer coacción
sobre los empleados o los administrados con el mismo objeto y, en general, valerse de la autoridad
o cargo para favorecer o perjudicar, por cualquier medio, tendencias o partidos políticos. En cambio,
tratándose de actividades políticas desarrolladas al margen del desempeño del cargo, el empleado
en su calidad de ciudadano, se encuentra plenamente habilitado para ejercer los derechos políticos
contemplados en el articulo 13 de la Carta Fundamental, pudiendo emitir libremente sus opiniones
en materias políticas y realizar actividades de esta naturaleza, sin perjuicio de la existencia de
prohibiciones especiales, como las contenidas en el articulo 97 de la ley 18556, relativa al personal
del Servicio Electoral, y las del articulo 18 de la ley 18603, que impide afiliarse a un partido político a
los empleados públicos que indica (10315/92, 17161/99, 42662/00).
Los servidores de la Administración Civil del Estado pueden inscribirse como candidatos a un cargo
de elección popular porque al margen del desempeño de su cargo, el empleado, en su calidad
de ciudadano, se halla plenamente habilitado para ejercer los derechos políticos consultados en
el articulo 13 del Texto Fundamental, uno de los cuales es optar a cargos de elección popular,
salvo las excepciones previstas en el propio ordenamiento constitucional, respecto de determinadas
Letra i)
Los funcionarios públicos de los servicios centralizados y descentralizados del Estado, no pueden
dirigir, promover o participar en huelgas, interrupción o paralización de actividades, totales o parciales
y en otros actos que perturben el normal funcionamiento de los órganos de la Administración estatal.
Tales limitaciones se imponen en concordancia con el principio que los servicios públicos, por su
propia naturaleza, deben satisfacer las necesidades colectivas de modo regular y continuo (23895/90,
24766/90, 8699/93, 20494/93).
La paralización de actividades es una infracción al artículo 19, W 16, de la Constitución Política, dado
que dicha disposición constitucional establece expresamente que no podrán declararse en huelga
los funcionarios del Estado ni de las municipalidades, limitación que se impone en concordancia
con el principio de que los servicios públicos por su propia naturaleza deben satisfacer necesidades
colectivas de modo regular y continuo (16973/99, 4981/04).
La prohibición que establece esta disposición para los funcionarios regidos por el Estatuto
Administrativo de organizar o pertenecer a sindicatos, no ha obstado para que antes de la dictación
de la ley 19296, dichos servidores constituyeran asociaciones o agrupaciones destinadas, entre otros
fines, a obtener el ejercicio efectivo de sus derechos funcionarios, en conformidad con las reglas y
principios generales del ordenamiento jurídico vigente, de modo que no ha existido impedimento legal
alguno para que los referidos empleados hayan organizado entidades de esa naturaleza, aunque la
ley 18834 no contenga normas sobre fuero gremial (8764/95).
De acuerdo con el artículo 212 del Código del Trabajo el derecho a constituir sindicatos sólo se
reconoce a los trabajadores del sector privado y de las empresas del Estado. Por tal motivo, el
personal de un liceo particular -tanto el docente que se rige por la ley 19070 y supletoria mente por
el Código del Trabajo, como el no docente, que se encuentra afecto enteramente a este último texto
legal- no puede continuar en el sindicato al cual pertenecía una vez que la Universidad Metropolitana
de Ciencias de la Educación, que es un Servicio del Estado, asumió su administración. Ello, sin
perjuicio del derecho que les confiere la ley 19296 a constituir una asociación de funcionarios o
integrarse a una ya existente en la citada Casa de Estudios Superiores (36605/95).
Procede descontar de las remuneraciones del personal de un hospital tanto los estipendios de los
días hábiles no trabajados en razón de la huelga como aquéllos de los días sábado, domingo y
festivos comprendidos en el período que duró la paralización de actividades. Para la deducción de
remuneraciones que corresponde efectuar con motivo de dichas paralizaciones debe considerarse
todo el tiempo de duración del movimiento huelguístico, es decir, el lapso que media entre el momento
en que éste se hace efectivo y el instante en que se reanudan normalmente las labores. Ello, porque
la huelga obedece a una decisión concertada de los trabajadores de suspender colectivamente sus
funciones, que se mantiene, sin solución de continuidad, mientras dura dicho movimiento, lapso
en que los empleados incurren, ininterrumpidamente, en un comportamiento ilegítimo (3464/94,
7207/07).
Empleados de la Dirección General de Crédito Prendario están sujetos a las normas de la ley 18834
y del Código del Trabajo, en su caso. Por lo tanto, no procede que el personal de vigilantes privados
contratado se sindicalice, como tampoco tienen derecho a negociación colectiva, puesto que conforme
al articulo 84, letra i), del Estatuto Administrativo, al ser aquéllos considerados servidores públicos,
dichas actividades no pueden tener lugar en servicios de la Administración del Estado, calidad que
tiene la entidad mencionada, conforme al artículo 1 del DFL 16, de 1986, del Ministerio del Trabajo y
Previsión Social, Subsecretaría del Trabajo (7798/06).
Los trabajadores de las empresas del Estado, cualquiera sea su calidad jurídica, tienen derecho a
constituir sindicatos, con la sola condición de sujetarse a la ley y a los estatutos de los mismos, de
acuerdo con lo previsto en el artículo 212 del Código del Trabajo (8140/93).
Concordancias: Arts. 19, W 16, inciso sexto, de la CP de la R.; 72, 125, letra b), del EA; 212 del
C del T; 4 de la ley 19886, de Bases sobre Contratos Administrativos de Suministro y Prestación de
Servicios, modificado por la letra a) del artículo único de la ley 20238.
Letra j)
Letra k)
Concordancias: Arts. 17 de la LOCBGAE; 125, inciso segundo, letra e), del EA; Ley 20.005, que
tipifica y sanciona el acoso sexual; Arts. 2, inciso segundo, del C. del T., que establece qué se
entiende por acoso sexual; 82, letra 1), del EAM.
Concordancias generales: Arts. 13, 52 y 62 de la LOCBGAE; 61 del EA; 82 del EAM; Ley 20000,
que sanciona el Tráfico Ilícito de Estupefacientes y Sustancias Sicotrópicas.
Comentarios:
El régimen general de prohibiciones establecido por este artículo consiste en deberes de tipo
negativo, esto es, dispone una serie de conductas que el funcionario está obligado a abstenerse de
realizar. Estas prohibiciones deben entenderse sin perjuicio de aquellas específicas contempladas
en leyes particulares.
Al respecto, resulta interesante destacar lo que establece el artículo 2, inciso segundo, del Código
del Trabajo, en relación con los artículos 84, letra 1), y 125, inciso segundo, letra e), del Estatuto
Administrativo, en cuanto señala que "las relaciones laborales deberán siempre fundarse en un
trato compatible can la dignidad de la persona. Es contrario a ella, entre otras conductas, el acoso
sexual, entendiéndose por tal el que una persona realice en forma indebida, por cualquier medio,
requerimientos de carácter sexual, no consentidos por quien los recibe y que amenacen o perjudiquen
su situación laboral o sus oportunidades en el empleo".
Párrafo 6°
De las incompatibilidades
ARTICULO 85.- En una misma institución no podrán desempe- Ley 19.653, Art. 5°, 4).
ñarse personas ligadas entre si por matrimonio, por parentesco
de consanguinidad hasta el tercer grado inclusive, de afinidad
hasta el segundo grado, o adopción, cuando entre ellas se pro-
duzca relación jerárquica.
Si respecto de funcionarios con relación jerárquica entre si, se Ley 19.653, Art. 5°, 4).
produjera alguno de los vínculos que se indican en el inciso
anterior, el subalterno deberá ser destinado a otra función en
que esa relación no se produzca.
Esta incompatibilidad no regirá entre los Ministros de Estado y Ley 18.834, Art. 79.
los funcionarios de su dependencia.
Interpretación:
lnci::o 1°
La ley 19653 al incorporar el artículo 56 (actual artículo 54) a la ley 18575 y modificar el artículo 79
(actual artículo 85) de la ley 18834, amplió la inhabilidad por parentesco a todos los casos de relación
jerárquica, directa o indirecta, pues antes tal inhabilidad sólo afectaba a los servidores vinculados por
parentesco en la medida que, además, tuvieran relación jerárquica directa (16408101 ).
Los articulas 56 y 66 (actuales artículos 54 y 64, respectivamente) de la ley 18575, incorporados por
la ley 19653, establecen la inhabilidad por parentesco que en términos similares se contempla en
el artículo 79 (actual artículo 85) de la ley 18834, de manera que ambas normativas tienen análoga
finalidad, esto es, impedir que personas ligadas por el vínculo de parentesco que indican, puedan
desempeñar funciones para un organismo del Estado, cuando entre ellas se produzca una relación
jerárquica. La incorporación de las citadas disposiciones de la ley 18575 ha hecho extensiva la
inhabilidad por parentesco a todo el personal de la Administración, ampliándola a los casos en que
exista relación jerárquica, directa o indirecta (15664100).
La incompatibilidad de esta norma comprende toda situación de dependencia que se produzca entre
funcionarios ligados por matrimonio o por los grados de parentesco que señala, cualquiera que sea
la condición en que desempeñen sus cargos, sea como titular, suplente, subrogante o a contrata. El
artículo 79 (actual artículo 85) prohibe "la relación jerárquica", con prescindencia de la calidad que
invistan los funcionarios a quienes afecta (10787193, 9295196, 42447100).
Para que se configure la inhabilidad a que se refiere esta disposición, deben reunirse dos requisitos
esenciales, esto es, que exista alguno de los vínculos de parentesco a que alude, y que entre las
personas ligadas por aquél se produzca relación jerárquica (58125/05).
La prórroga de los empleos a contrata que de acuerdo con el artículo 9 (actual artículo 10), inciso
primero, de la ley 18834, supone una renovación de ellos, cuyo efecto es que el funcionario mantenga
la plaza que servía en el organismo, así como el vínculo con éste, si bien no puede estimarse como
ingreso a la Administración, exige, en cambio, respetar el artículo 79 (actual artículo 85) del Estatuto
Administrativo, que ordena que en la institución no podrán desempeñarse personas ligadas entre sí
por los vínculos de parentesco que indica, cuando entre éstas exista relación jerárquica, por lo que
el empleado a contrata no puede quedar bajo la dependencia de alguno de los servidores con los
que está relacionado, debiendo, en tal caso, disponerse su destinación a otra función donde ella no
se produzca (36749/00).
Inciso 2•
El empleado subalterno que tenga algunos de los vínculos a que alude el inciso primero del articulo
79 (actual artículo 85) con su superior jerárquico, debe ser destinado a cumplir otra función en la que
esa relación no se configure, pues es la relación jerárquica la que constituye el elemento que motiva
la prohibición de que trata dicho inciso (10787/93, 34792/00).
Un médico que se desempeña como jefe de turno de la unidad de emergencia de un hospital tiene,
de acuerdo con el articulo 132 del decreto 42, de 1986, del Ministerio de Salud (norma actualmente
derogada por el decreto 140, de 2004, del Ministerio de Salud), un mando directo sobre todos quienes
prestan servicios en el sistema de turnos, independiente de la unidad, profesión o especialidad,
por lo que se produce una situación de jerarquía entre él y su cónyuge, que se desempeña como
odontóloga en el servicio dental y en la atención odontológica de emergencia prestada en el mismo
establecimiento, configurándose la incompatibilidad del artículo 79 (actual articulo 85) de la ley
18834, aplicable supletoriamente conforme al artículo 1 de la ley 15076 (2941/00,10541/00).
Aunque como regla general no corresponde aplicar la figura de la destinación respecto del personal
a contrata, puede esta medida adoptarse con el objeto que no exista relación de jerarquía entre
parientes. Ello procederá excepcionalmente para dar cumplimiento al mandato del articulo 56, letra
b) (actual artículo 54, letra b), de la ley 18575, cuya finalidad es proteger el deber fundamental de
probidad dentro de la Administración, al que están obligados todos los servidores estatales, sean de
planta o a contrata (44892/00).
Inciso 3'
No existe incompatibilidad entre una funcionaria de una Subsecretaría de Estado, pariente por
afinidad en primer grado con el Ministro de la misma cartera, dado que esta norma señala que la
regla general del inciso primero no regirá entre los Ministros de Estado y los funcionarios de su
dependencia, disposición que se tuvo presente durante la tramitación de la ley 19653, que modificó
el articulo 79 (actual articulo 85) del Estatuto Administrativo, según consta de la historia fidedigna de
su establecimiento (15664/00).
Comentarios:
En el Segundo Informe de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento dél
Senado, quedó establecido que el sentido de la modificación introducida en los incisos primero y
¡(j
segundo del articulo 79 (actual artículo 85), consistente en suprimir la palabra "directa" que sucede
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a la expresión "relación jerárquica", fue "el de ampliar la incompatibilidad a todos los casos en que o
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exista relación jerárquica, sea directa o indirecta". e
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Al respecto, la Comisión dejó expresa constancia que la relación jerárquica que prohibe esta norma :ll
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no se refiere sólo al hecho que en la respectiva planta o escalafón uno de esos familiares se encuentre ,'ü'
en un lugar inferior a otro que está en un lugar superior, sino a que medie en la relación de trabajo "'
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autoriciad y dependencia, en forma correlativa, entre ambos iuncionarios. -o
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Es útil hacer notar, por último, que este precepto no exige que el funcionario con el cual se pueda ·-"'o
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producir el vínculo de parentesco posea un determinado nivel o jerarquía, directa o no, entre
dos empleados sujetos a dicho cuerpo legal, de manera que esta norma, debe entenderse como
complementaria respecto de las inhabilidades que se consultan en los articulas 54 y 64 de la ley
18575.
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~~ ~.
ARTICULO 86.- Todos Jos empleos a que se refiere el presente Ley 18.834, Art 80.
Estatuto serán incompatibles entre si. Lo serán también con todo otro
empleo o toda otra función que se preste al Estado, aun cuando Jos
empleados o funcionarios de que se trate se encuentren regidos por
normas distintas de las contenidas en este Estatuto. Se incluyen en
esta incompatibilidad las funciones o cargos de elección popular.
Interpretación:
Los artículos 80 a 82 (actuales artículos 86 a 88) de la ley 18834 consultan normas generales de
incompatibilidad similares a las que establecía el DFL 338, de 1960, en sus artículos 169 y siguientes
(12623/90).
Inciso 1•
El vocablo "Estado" usado por el articulo 169 del DFL 338, de 1960 (actual articulo 80 -actual articulo
86-, inciso primero, de la ley 18834), al referirse a las incompatibilidades de los empleos o de toda
otra función que se preste al mismo, ha sido empleado por el legislador en su sentido más amplio,
de modo que comprende a todo organismo estatal, incluso las Municipalidades, aun cuando Jos
respectivos servidores se encuentren regidos por normas distintas de las contenidas en el Estatuto
Administrativo (58800/69).
Un empleado puede ser nombrado para servir una plaza incompatible, en cuyo caso al asumir
el nuevo empleo, cesará por el solo ministerio de la ley en el cargo anterior (30444/89, 32470/90,
35637/96, 3674/01 ).
De acuerdo con el articulo 80 (actual articulo 86) de la ley 18834, todos los empleos a que se refiere
son incompatibles entre si, salvo las excepciones contempladas en el articulo 81 (actual articulo
87). Po(Jo tanto, el empleado a contrata que es designado suplente, in compatibiliza su desempeño
anterior, cesando en la contrata por el solo ministerio de la ley (35637/96).
conceda un permiso de esa naturaleza al titular de un determinado cargo, éste mantiene el vinculo
jurídico que lo une con el Servicio, no pudiendo ser designado en una función incompatible, sin antes
cesar en aquél (11779/90, 35038/90, 25465/92, 4259/93, 17909/94, 29303/95, 4125/96).
Este articulo no prevé una incompatibilidad entre cargos de la Administración del Estado y empleos
de entidades del sector privado, por lo cual cobra plena aplicación el principio de la libertad de trabajo
contemplado en el articulo 19, W 16, inciso cuarto, de la Constitución Política. Los funcionarios
públicos pueden desempeñarse en el sector privado, siempre que cumplan las obligaciones que
tienen en su caracter de tales, entre ellas, las de prestar sus servicios durante toda la jornada de
trabajo y respetar el principio de probidad administrativa (28009/95, 1473/98).
Aun cuando el funcionario que postula a un nuevo cargo manifieste su aceptación al mismo y se curse
el respectivo acto de nombramiento, si en definitiva no toma posesión de ese cargo dentro del plazo
legal -"dentro de tercero día", según el articulo 14 (actual articulo 16), inciso tercero, de la ley 18834-
tal persona no llega a investir la condición de funcionario en el nuevo empleo, la designación queda
sin efecto por el solo ministerio de la ley. En tal situación, no se produce la cesación automatica en
el cargo anterior, por cuanto ésta se halla esencialmente vinculada al hecho de que el interesado
adquiera la calidad de funcionario en la nueva plaza (79330/70, 6904/71).
La incompatibilidad de empleos a que se refiere este articulo incluye todos los cargos o funciones que
se presten al Estado, entre ellos, los de elección popular. Sin embargo, no se aplica a quienes ocupen
un cargo de planta o a contrata en algún servicio público y que son elegidos como concejales de
una municipalidad, ya que el articulo 62 de la ley 18695, Organica Constitucional de Municipalidades
(actual articulo 75 del DFL 1, de 2006, de la Subsecretaria de Desarrollo Regional y Administrativo del
Ministerio del interior, que fijó el texto refundido, coordinado y sistematizado de dicha ley) establece
que a los concejales no les sera aplicable la incompatibilidad prevista en el inciso primero del articulo
80 (actual articulo 86) de la ley 18834 (31759/92).
La incompatibilidad que consulta el inciso primero del articulo 80 (actual articulo 86) se aplica a
todo empleo público o función que se preste al Estado. Por lo tanto, ella se extiende también a las
personas contratadas sobre la base de honorarios, en la medida que tienen también la calidad de
agentes públicos (10193/96).
La incompatibilidad establecida en este articulo se aplica también a los funcionarios chilenos con
permiso sin goce de remuneraciones, que asumen funciones en las representaciones diplomaticas de
Chile en el extranjero. Ello, por cuanto tales trabajadores no rompen el vinculo con la Administración,
aun cuando se rijan por normas distintas de las contenidas en el Estatuto Administrativo. En efecto,
estos funcionarios se rigen por las leyes chilenas y tienen la calidad de empleados particulares
remunerados con fondos fiscales que el Gobierno de Chile pone a disposición de la respectiva
misión diplomatica y estan sometidos a la normativa laboral propia de esa clase de personal, esto
es, el Código del Trabajo (4125/96).
Inciso 2•
En la situación a que se refiere este precepto, el funcionario al aceptar el nuevo cargo incompatible,
tacitamente manifiesta su voluntad de dejar el o los empleos anteriores que sirve, por lo que no cabe
sino entender que ese cese significa una renuncia voluntaria a esa o esas plazas (8788/95).
de funciones. Por ende, para que este personal pueda ser nombrado en un cargo incompatible debe
acreditar el cese de funciones en el anterior empleo, de acuerdo con el Estatuto del Personal de esas
Instituciones (15811/92).
Inciso 3•
No existe incompatibilidad para ejercer cargos de jornada parcial si la suma de las jornadas de esos
empleos no supera las 44 horas semanales. Nada obsta para que uno de ellos de jornada parcial
esté regido por un estatuto jurídico distinto a la ley 18834, evento en el que, para analizar si ese
empleo es de jornada parcial, deben examinarse en cada caso, las normas sobre jornada de trabajo
contenidas en el respectivo ordenamiento (1551/90, 12201/92).
Los cargos de Oficial de Justicia de Carabineros y de Juez de Policía Local son incompatibles, salvo
que se desempeñen en jornadas parciales que en conjunto no excedan de 44 horas semanales.
Ello, porque de acuerdo con el articulo 66 del DFL 2, de 1968, del Ministerio del Interior, al personal
de dicha Institución Policial se le aplican las mismas disposiciones que rigen a la Administración Civil
del Estado, en lo referente a las incompatibilidades de remuneraciones (19133/00).
Comentarios:
Este precepto regula la incompatibilidad en el empleo, que es distinta de las incompatibilidades
personales y de remuneraciones que previene este mismo Estatuto, las que deben entenderse sin
perjuicio de las previstas en leyes especiales.
Proyecto de Ley:
A la fecha de edición de este libro se encontraba en trámite legislativo un proyecto de ley que tuvo
su origen en una moción que "Establece incompatibilidades para el cargo de consejero regional"
(Boletín W 4634-06), mediante el cual se introduce una enmienda a la ley W 18834, en los siguientes
términos:
"Articulo 2" lncorpórase en el inciso 1• del articulo 86 de la ley N" 18834, que aprueba el Estatuto
Administrativo, eliminando el punto final, la siguiente frase: "y las que se desempeñen en virtud
de lo establecido en la ley W 19175, Orgánica Constitucional sobre Gobierno y Administración
Regional"."
ARTICULO 87.- No obstante lo dispuesto en el articulo anterior, Ley 18.834. Art. 81.
el desempeño de los cargos a que se refiere el presente Estatuto
será compatible:
e) Con los cargos que tengan la calidad de exclusiva confianza Ley 18.899, Art. 63, b).
y con aquellos cuyo nombramiento sea por plazos legalmente
determinados;
f) Con Jos cargos de directivos superiores de Jos establecimientos Ley 19.154, Art. 2', 7), a).
de educación superior del Estado, entendiéndose por tales los
que señalan los estatutos orgánicos de cada uno de ellos.
Interpretación:
El artículo 81 (actual artículo 87) del Estatuto Administrativo contempla las excepciones legales
a la incompatibilidad de empleos y funciones establecidas en el artículo 80 (actual artículo 86),
permitiendo el ejercicio simultáneo de los que indica en sus letras a) a la f). Tales excepciones se
aplican tanto a empleos afectos a la ley 18834 como a aquéllos regidos por una normativa diferente,
siempre y cuando la causal que posibilita la compatibilidad esté contemplada en cada uno de los
ordenamientos reguladores de los respectivos desempeños (30802/96, 34238/96).
Letra a)
La disposición del artículo 81 (actual artículo 87), letra a), de la ley 18834, se encuentra plenamente
vigente, puesto que no existe norma legal que la haya modificado o derogado, por lo que la
compatibilidad que ella misma prevé, continúa siendo aplicable respecto de los funcionarios regidos
por dicha norma estatutaria (35758/01 ).
Un funcionario que ocupa un empleo de aquellos a que se refiere el Estatuto Docente -ley 19070-
únicamente podría mantener la titularidad de éste al pasar a servir una plaza regida por la ley 18834,
si continúa cumpliendo esas labores por un máximo de 12 horas semanales, siempre que renuncie
al exceso de dichas horas cronológicas. Ello, por cuanto la mencionada ley 19070, en su articulo
76, permite a los profesionales afectos a este ordenamiento renunciar a un número de horas de
su jornada y de este modo desarrollar una docencia de aula menor a la que servían, y el articulo
81 (actual articulo 87), letra a), del Estatuto Administrativo, a su vez, hace compatible el desarrollo
de cargos reglados por este ordenamiento con empleos docentes de hasta 12 horas semanales
(5314/98, 26419/98, 3689/01).
La compatibilidad establecida por esta letra se relaciona con cargos docentes, carácter que no tiene
la actividad destinada a impartir capacitación funcionaria por los empleados que se desempeñan
como instructores en virtud de comisiones de servicio, por lo cual los contratos que para esos fines
se dispongan, deben serlo en armonía con los decretos 98, de 1991, y 7, de 1978, del Ministerio de
Hacienda (7053/95, 8322/00).
El artículo 8 de la ley 19863, establece que las actividades docentes deben desarrollarse "de acuerdo
a las modalidades que determine el jefe de servicio", lo que denota la idea de que el derecho que
allí se consagra no es absoluto, sino que queda sujeto a las restricciones que, fundada mente, pueda
imponer la autoridad correspondiente. Lo anterior, toda vez que, en la especie, y atendido el carácter
excepcional de la prerrogativa que se consagra en el mencionado artículo 8 -esto es, permitir el
desarrollo de una determinada actividad particular durante la jornada de trabajo que se debe cumplir
en virtud de un cargo público-, el jefe de servicio respectivo debe velar por hacer conciliar el referido
derecho con los intereses públicos superiores consagrados en la ley 18575, cuales son los principios
Las actividades de docencia importan, en lo que interesa, la transmisión, con fines didácticos, de
un saber en un área determinada del conocimiento, de manera tal que las materias que se abordan
a través de ellas, si bien pueden coincidir con aquellas que deben ser analizadas, informadas o
resueltas por los mismos docentes en el desempeño de su cargo público, o por el organismo en
el que laboran -como ocurre, por ejemplo, tratándose de las funciones que cumple la Dirección del
Trabajo, relativas a la determinación del sentido y alcance de la legislación laboral-, dichas materias
son analizadas y expuestas en la cátedra desde una perspectiva teórica o dogmática, sin tener, por
ende, el carácter de asesorías sobre un asunto que deba ser sometido al conocimiento y resolución
del servicio público respectivo. Luego, las labores docentes que puedan desarrollar los funcionarios
públicos no constituyen una actividad incompatible per se con el cargo público que ejercen, aun
cuando aquéllas se refieran a materias que conoce· el organismo respectivo en el cumplimiento de
sus funciones, atendido el diverso ámbito en que ambas se ejecutan, esto es, el didáctico, propio de
la docencia, y el del ejercicio de la función administrativa, propio del servicio (27895/04).
Letra b)
Los car,;Jos a <:¡Je se refiere este Estatuto, sean de planta o a contráta, resJitan compatibles con el
ejercicio de funciones a honorarios, que pueden cumplirse tanto en un municipio como en cualquier
otra entidad pública o privada, siempre que se efectúen fuera de la jornada de trabajo y que sean
posibles de desempeñar. física y materialmente, considerando para ello factores de distancia
geográfica entre los Jugares en que deben ejercerse (49286/99, 3256/00).
Si un mandato legal exige dedicación exclusiva para el desempeño de un cargo o función pública,
como es el caso de los empleos de Director del instituto de Salud Pública de Chile, de profesionales
universitarios de los Departamentos de Control Nacional y de Salud Ocupacional y Contaminación
Ambiental de dicho Instituto, entre otros, a que se refiere el articulo 17 del DL 3477, de 1980, es
improcedente que sus titulares puedan, además, prestar servicios sobre la base de honorarios
(32949/02).
de este Servicio, fuera de su jornada laboral. Ello, porque si bien de acuerdo con esta disposición,
los cargos a que se refiere el Estatuto Administrativo son compatibles con el ejercicio de funciones
a honorarios, siempre que éstos se efectúen fuera de la jornada ordinaria de trabajo, en este caso,
podría ocurrir que el interesado al desempeñar simultáneamente estas labores quede como jefe
directo o superior jerárquico de si mismo, o sujeto a la dependencia jerárquica de un servidor que,
a su vez, en su calidad de empleado de la repartición, es subalterno suyo, nada de lo cual se
aviene con la correcta configuración y aplicación del principio de jerarquía al que están afectos
todos los servidores públicos conforme lo establecen los artículos 7 y 1O (actual articulo 11) de la ley
18575. No obsta a lo expuesto el hecho que quienes desarrollan sus labores en virtud de un contrato
a honorarios no ocupan empleos públicos, pues éstos igualmente ejercen una función pública y
además, en conformidad con la ley 18834 tienen la obligación de cumplir la tarea para la cual han
sido contratados, lo cual debe ser fiscalizado por el Jefe Superior del Servicio, circunstancia que, en
este caso, se estaría dando simultáneamente en una misma persona, contraviniendo así el principio
de probidad administrativa (37117/01).
Tanto el Rector de una universidad estatal como su cónyuge, docente de la misma, pueden ser
contratados a honorarios por dicha casa de estudios para efectuar labores fuera de la jornada de
trabajo y en días sábado y domingo. Ello, porque su Estatuto Orgánico faculta a esa Institución
para celebrar convenios a honorarios destinados a satisfacer sus requerimientos propios. A su vez,
como el Rector se encuentra afecto a la ley 18834, articulo 81 (actual articulo 87), letra b), nada
impide que junto con desempeñar ese empleo realice trabajos sobre la base de honorarios para la
universidad. Lo anterior, también resulta aplicable a su cónyuge en conformidad con el articulo 156
(actual articulo 162), inciso final, de este último ordenamiento, en la medida, por cierto, que en los
estatutos especiales que rijan a los académicos de esa entidad de educación superior no se regulen
las incompatibilidades o compatibilidades a que tales servidores se hallan sujetos, caso en el cual ha
de estarse a lo allí dispuesto (31379/97).
Letra e)
Aunque no existe prohibición expresa para que los funcionarios de la Corporación Nacional de
Desarrollo Indígena, sean propuestos como candidatos por las comunidades y asociaciones indígenas
en representación de las respectivas etnias, para ocupar cargos en el Consejo de la Entidad, no
corresponde que un servidor de la Corporación ejerza, además, funciones de Consejero, por lo que
en el evento de aceptar la designación como tal, deberá renunciar a su cargo en la Corporación.
Ello, porque el Consejo desarrolla funciones fiscalizadoras, entre éstas, velar por la forma en que
se ejecutan las políticas diseñadas por la institución, lo que significa observar la manera en que
desempeñan sus cargos y cumplen con sus obligaciones todos sus empleados, incluido el Director
Nacional, lo que exige que los miembros del cuerpo colegiado cuenten con independencia para el
desarrollo eficaz de las labores, independencia que no concurre respecto de un Consejero que tiene
la calidad de funcionario, al estar sujeto a los poderes jerárquicos o de control del Director u otras
jefaturas, por lo que la condición de miembro del Consejo es incompatible con la de funcionario del
mismo. No obsta a ello, el que el articulo 81 (actual articulo 87), letra e), de la ley 18834, permita
el desempeño de los cargos referidos en el Estatuto, con el máximo de dos cargos de miembros
de Consejos o Juntas Directivas de organismos estatales, pues en armonía con lo anterior, debe
entenderse que dicha disposición supone que los cargos o funciones se servirán en instituciones
distintas (4771 0/99).
Letra d)
Los servidores a contrata pueden ser designados en otro cargo como suplentes siempre que cesen
en el primero de ellos, pues todos los empleos de la ley 18834 son incompatibles entre sí, salvo las
excepciones de su artículo 81 (actual artículo 87), entre las que no se encuentra el desempeño
de una plaza como contratado y otra como suplente. El artículo 81 (actual articulo 87), letra d),
al establecer la compatibilidad entre los cargos a que se refiere el Estatuto con la calidad de
subrogante, suplente o a contrata, permite que el titular de un cargo pueda desempeñarse en alguna
de esas tres condiciones, situación en la cual el inciso segundo del articulo 82 (actual artículo 88) del
Estatuto Administrativo previene que los funcionarios designados en alguna de esas modalidades
"conservarán la propiedad del cargo o empleo de que sean titulares", agregando el inciso cuarto
de esa misma norma, que la remuneración que se perciba "será exclusivamente la del empleo que
desempeñe a contrata" (22237/95).
Los funcionarios regidos por la ley 18834 que sean contratados en el Ministerio Público, no están
amparados por esta norma de compatibilidad, porque para determinar si dos o más cargos son o
no compatibles, deben considerarse las normas que regulan el desempeño de cada uno de ellos,
de modo que sólo si los preceptos estatutarios a que estén afectos los diferentes empleos permiten
su ejercicio simultáneo, el desarrollo de las respectivas plazas será compatible. Así, de acuerdo con
el artículo 62 de la ley 19640, las funciones de los fiscales del Ministerio Público son de dedicación
exclusiva, e incompatibles con toda otra función o empleo remunerado con fondos públicos o privados,
pudiendo únicamente desempeñar cargos docentes de hasta seis horas semanales, en cuyo caso
deberán prolongar su jornada compensando las horas no trabajadas por causa del ejercicio del
empleo compatible, norma que regirá respecto de los demás funcionarios del Ministerio Público.
Sólo excepcionalmente, en conformidad con el inciso segundo del artículo 65 de esta última ley, no
se aplicará a los administrativos y auxiliares. Por ende, la norma contempla una incompatibilidad que
salvo la señalada excepción, no permite que los funcionarios contratados por ese organismo y que
ocupaban empleos regidos por la ley 18834, conserven este último cargo, según la letra d) del artículo
81 (actual artículo 87) del Estatuto Administrativo. Finalmente, los funcionarios del Ministerio Público
tampoco pueden regirse por las normas que sobre compatibilidad o incompatibilidad establece la
ley 18834, pues a tales servidores sólo le son aplicables supletoriamente los artículos de este texto
legal que expresamente indica el artículo 66, W 1, de la ley 19640, entre los cuales no están los que
regulan la referida materia (30562/00).
Los empleados a contrata aun cuando conserven la propiedad de sus cargos, deben ser tenidos
en cuenta para fines de la limitación del número de funcionarios a contrata de una institución, que
establece el inciso segundo del articulo 9 (actual artículo 1O) de la ley 18834. Ello, porque del tenor
literal de dicha disposición aparece que ésta contiene una relación entre personas contratadas y las
plazas permanentes previstas en la planta de la entidad de que se trate, con prescindencia que
ellas se encuentren vacantes o provistas, o no estén siendo efectivamente servidas por quienes las
ocupan (754/91).
Concordancias: Arts. 3, letra e), 4, 10, 79 y ss. del EA; incisos segundo y tercero de los artículos
13 de las leyes 19702 y 19774, de Presupuestos del Sector Público para los años 2001 y 2002,
respectivamente.
Letra e)
Es improcedente que el Jefe Superior del Servicio dicte una resolución autorizando a un funcionario
de su dependencia para mantener el empleo que éste sirve en propiedad, mientras desempeña un
cargo de exclusiva confianza, pues para ello sólo basta que el interesado dirija a esa superioridad
una carta de deferencia en que le comunica haber aceptado esta última plaza. En este caso,
resultan aplicables las normas del articulo 81 (actual articulo 87), letra e), de la ley 18834, que hace
compatibles los cargos a que alude el Estatuto Administrativo con los de exclusiva confianza, y las
de este inciso, que permite al funcionario que ocupa un empleo de planta y que es designado en
otro de exclusiva confianza, conservar la propiedad del primero (48853/61, 12367/90, 27997/93,
15156/02).
Esta norma opera en la medida que el empleo de exclusiva confianza regido por una legislación
distinta a la del Estatuto Administrativo, admita, a su vez, la compatibilidad, lo que no tiene aplicación
en un cargo de exclusiva confianza en una municipalidad, ya que ello no acontece tratándose del
Estatuto Administrativo para los Funcionarios Municipales, ley 18883. Por lo tanto, el Secretario
Municipal, actual Alcalde subrogante, no puede acogerse al articulo 81 (actual articulo 87), letra
e), para desempeñarse como subrogante de un Secretario Regional Ministerial de Justicia, como
tampoco un funcionario público para hacerlo en un cargo de exclusiva confianza del Alcalde
(21864/90, 30750/92, 22083/93,30802/96, 3674/01).
La compatibilidad a que alude esta letra puede mantenerse por tiempo ilimitado, porque la ley no ha
señalado ningún plazo para su duración. Por lo tanto, un funcionario de planta puede ser nombrado
conforme al articulo 81 (actual articulo 87), letra e), en un cargo de exclusiva confianza, sin que
pierda la propiedad de aquél, como lo establece el articulo 82 (actual articulo 88), inciso segundo,
del Estatuto Administrativo, indefinidamente en el tiempo (27997/93, 28561/00).
Son compatibles los cargos referidos en el Estatuto Administrativo con aquéllos de exclusiva confianza
y con aquéllos cuyo nombramiento sea por plazos legalmente determinados, lo que permite a los
funcionarios conservar la propiedad del empleo del que sean titulares, debiendo optar, al asumir
la plaza compatible, entre las remuneraciones propias de ésta y las del cargo cuya propiedad
conservan, de acuerdo con los incisos segundo y tercero del articulo 82 (actual articulo 88) de la ley
18834 (23679/99).
Esta norma y la contenida en el articulo 82 (actual artículo 88) de la ley 18834, no formulan distinciones
sobre la condición del cargo cuya propiedad se conserva, por lo que un empleado que sirve una plaza
de exclusiva confianza, puede ser designado en otro del mismo carácter manteniendo la propiedad
del primero, debiendo optar, al momento de asumir el nuevo cargo, por la remuneración de uno u
otro (21725/90, 18137/91, 318/96).
designación de quien lo ocupa en otro cargo de la misma condición, al amparo del articulo 81 (actual
articulo 87), letra e), de la ley 18834 (12724/94).
Un funcionario que desempeña un cargo adscrito o en extinción tiene derecho a mantener dicha
plaza cuando es designado en un empleo de exclusiva confianza. Ello, porque la alusión que el
encabezamiento del articulo 81 (actual articulo 87) hace es a "los cargos a que se refiere el presente
Estatuto", y no sólo a los contemplados en el articulo 4 del mismo, de modo que tal mención debe
entenderse en relación con las diversas formas de servir un cargo que se regulan a través de todo el
aludido cuerpo estatutario, incluso en sus artículos transitorios. En todo caso, la expresión comentada
debe analizarse en concordancia con el articulo 1 de la ley 18834, que fija el ámbito de aplicación
del Estatuto Administrativo respecto de los servicios que señala, creados para el cumplimiento de
la función administrativa, con las excepciones que allí se establecen, entre las cuales no se
encuentran los cargos adscritos o en extinción (39724/98). (*)
Letra f)
Son compatibles los empleos regidos por el Estatuto Administrativo con los cargos de directivos
superiores de los establecimientos de educación superior del Estado, entendiéndose por tales los
señalados en sus respectivos Estatutos Orgánicos, regla de la que se infiere que la ley no considera
dichas plazas como de exclusiva confianza, pues la compatibilidad con esa clase de empleos ya está
prevista en la letra e) de este articulo (31232/92, 210/94, 5035/94).
Comentarios:
El articulo 87 del Estatuto Administrativo consulta excepciones a la incompatibilidad de funciones
prevista en su articulo 86, al autorizar el desempeño paralelo y la percepción de las rentas pertinentes,
de cargos regidos por este ordenamiento, con cargos docentes de hasta un máximo de doce horas
semanales; con el ejercicio de funciones a honorarios, y con el ejercicio máximo de dos cargos
de miembro de consejos o juntas directivas de organismos estatales (articulo 87, letras a), b) y e),
respectivamente).
Cabe señalar que la aplicación de la letra d) del articulo 81 (actual articulo 87) del Estatuto
Administrativo fue suspendida desde el año 1992 hasta el año 2000 inclusive, por las leyes 19103,
articulo 17; 19182, articulo 17; 19259, articulo 18; 19356, articulo 18; 19430, articulo 18; 19486,
articulo 18; 19540, articulo 18; 19596, articulo 18, y 19651, articulo 17.
A partir del año 2001, la referida letra d) del articulo 81 (actual articulo 87), ha pasado a regir
integralmente al no existir disposiciones que limiten su aplicación.
("') El artículo 20 transitorio del Estatuto Administrativo, que se refería a la creación de los cargos adscritos, fue
derogado por el articulo septuagésimo de la ley 19882, conjuntamente con los artículos 2 transitorios de las
leyes 18575 y 18972, respectivamente.
En los casos de /as letras d), e) y f) del artículo anterior, no se aplicará Ley 19.154, Art. 2', 7b.
lo dispuesto en el inciso precedente, y los funcionarios conservarán
la propiedad del cargo o empleo de que sean titulares.
Tratándose de los nombramientos a que se refieren las dos últimas Ley 19.154, Art. 2", 7b.
letras del artículo anterior, el funcionario, al asumir el cargo, deberá
optar entre las remuneraciones propias de éste y las del empleo
cuya propiedad conserva.
Interpretación:
Inciso 1'
Corresponde otorgar a un funcionario, quien además es Concejal, las facilidades necesarias para
desempeñar estas últimas labores, estableciendo los mecanismos administrativos que le permitan
ausentarse de sus tareas en el Servicio y recuperar el tiempo ocupado en cumplir esas funciones,
correspondiendo rebajar de sus remuneraciones el valor del tiempo no trabajado. La ley 18695,
Orgánica Constitucional de Municipalidades -cuyo texto refundido, coordinado y sistematizado
actualmente se encuentra fijado por el DFL 1, de 2006, del Ministerio del Interior, Subsecretaria de
Desarrollo Regional y Administrativo-, faculta para ausentarse transitoriamente del desempeño del
cargo compatible, pero esta autorización no significa que tales funcionarios puedan sustraerse del
cumplimiento del número de horas de trabajo que conforman la jornada ordinaria, como asimismo,
el tiempo que ellos dediquen a la función municipal no puede estimarse como trabajado para
computar la jornada del otro cargo, por no existir norma que lo autorice, considerando que, según
el inciso primero del articulo 82 (actual articulo 88) del Estatuto Administrativo, la compatibilidad de
remuneraciones no libera al funcionario de las obligaciones propias de su cargo, debiendo prolongar
su jornada para compensar las horas no trabajadas por causa del desempeño de empleos
compatibles. De este modo, las autoridades respectivas, además de permitir que los Concejales
se ausenten del Servicio, deben posibilitarles la recuperación de la inasistencia estableciendo un
sistema de horario adicional dentro del cual efectúen las labores no ejecutadas (19480/93). ~
La compensación sólo puede ser de "horas" diarias, no pudiendo extenderse a días completos
(40413/60).
Inciso 2•
Es improcedente que el Jefe Superior del Servicio dicte una resolución autorizando a un funcionario
de su dependencia para mantener el empleo que éste sirve en propiedad, mientras desempeña un
cargo de exclusiva confianza, pues para ello sólo basta que el interesado dirija a esa superioridad
una carta de deferencia en que le comunica haber aceptado esta última plaza. En este caso,
resultan aplicables las normas del articulo 81 (actual articulo 87), letra e), de la ley 18834, que hace
compatibles los cargos a que alude el Estatuto Administrativo con los de exclusiva confianza, y las
de este inciso, que permite al funcionario que ocupa un empleo de planta y que es designado en
otro de exclusiva confianza, conservar la propiedad del primero (48853/61, 12367/90, 27997/93,
15156/02).
La compatibilidad dispuesta en los articulas 81 (actual articulo 87), letra e), y 82 (actual articulo
88), inciso segundo, de la ley 18834, opera en la medida que el empleo de exclusiva confianza
regido por una legislación distinta a la del Estatuto Administrativo, admita, a su vez, la compatibilidad
mencionada. Ello no ocurre en el caso de los funcionarios de un servicio público regido por el
EstatutoAdministrativo, que son nombrados en un cargo de exclusiva confianza en una Municipalidad,
porque las disposiciones que hacen compatibles los empleos a que se refiere este Estatuto con los
de exclusiva confianza y permiten mantener la propiedad del cargo de que es titular, operan en la
medida que el empleo de exclusiva confianza regido por una legislación distinta a la de la ley 18834,
admita, a su vez, la compatibilidad mencionada, lo que no acontece tratándose de la ley 18883,
aprobatoria del Estatuto Administrativo para los Funcionarios Municipales (30750/92, 3674/01).
Un funcionario que fue contratado sin solución de continuidad como fiscalizador en el Servicio de
Impuestos Internos, manteniendo la propiedad del cargo de vigilante que servía en Gendarmería,
tiene derecho a hacer uso en el primero de los Servicios mencionados, del feriado correspondiente a
1991, cuya acumulación con el de 1992 fuera autorizada por la superioridad de Gendarmería en su
oportunidad. Ello, porque el empleado a quien se le ha otorgado la acumulación de feriados en un
Servicio, pasando posteriormente a cumplir funciones en otra repartición sin solución de continuidad,
como ha ocurrido en este caso, puede disfrutar del feriado acumulado, porque mientras no se
produzca interrupción de su desempeño funcionario en la Administración, ese servidor mantiene
todos sus derechos estatutarios (30357/92).
Es improcedente estimar que las personas designadas como Decanos en diversas facultades de
una universidad estatal conserven la propiedad de sus empleos académicos, ya que los cargos de
Decanos no están sujetos al régimen de exclusiva confianza de la ley 18834, porque los estatutos
orgánicos de estas universidades contemplan un sistema especial de nombramiento y remoción
del Rector y demás funcionarios superiores, el que determina que dichas autoridades se rigen
exclusivamente por esa preceptiva (22647/90, 27087/90, 4464/91 ).
empleo cuya propiedad mantiene, porque ella optó por los emolumentos correspondientes al empleo
de exclusiva confianza, renunciando así a las del cargo directivo (318/96, 4008/98).
Un abogado de la Contraloria General de la República que conservó la titularidad del empleo al ser
nombrado en un cargo de exclusiva confianza en otra entidad, ha continuado afecto a la prohibición
consultada en el inciso segundo del articulo 47 de la ley 10336. Ello, porque en los casos en que,
de acuerdo con el articulo 82 (actual artículo 88) de la ley 18834, un servidor deja de desempeñar el
empleo de que es titular, pero mantiene su propiedad, subsiste el vínculo que lo liga con el Servicio al
que pertenece la plaza. De esta manera, mientras dicho servidor no renuncie al empleo en propiedad,
continúa sujeto al estatuto jurídico de ese cargo y por lo mismo afecto a las prohibiciones, derechos
y obligaciones propias de aquél (18255/01).
Los empleados a contrata aun cuando conserven la propiedad de sus cargos, deben ser tenidos
en cuenta para determinar el número de funcionarios a contrata de una institución, de acuerdo con
el límite establecido al respecto en el inciso segundo del artículo 9 (actual artículo 1O) de la ley
18834. Ello, porque del tenor literal de dicha disposición aparece que ésta consulta una relación
entre personas contratadas y las plazas permanentes previstas en la planta de la entidad de que se
trate, con prescindencia que se encuentren vacantes o provistas, o no estén siendo efectivamente
servidas por quienes las ocupan (754/91 ).
Las personas designadas a contrata sólo pueden conservar la propiedad de otro empleo siempre
que lo desempeñen en calidad de titular, de manera que la regla de compatibilidad no alcanza a
quien sirve un cargo en el carácter de suplente (19373/92, 21631/92).
Conforme al articulo 81 (actual articulo 87), letra e), de la ley 18834, son compatibles los empleos a
que se refiere el Estatuto Administrativo con los cargos que tengan la calidad de exclusiva confianza.
El funcionario designado en alguna de estas últimas plazas, conserva la propiedad de aquélla de
que sea titular, debiendo optar, al momento de asumir el nuevo empleo, entre la remuneración
correspondiente a éste o la de aquel cargo. Tanto el artículo 81 (actual artículo 87), letra e), como
el artículo 82 (actual artículo 88) del Estatuto Administrativo, no distinguen en cuanto a la condición
del cargo cuya propiedad se conserva, por lo que un empleado que sirve una plaza de exclusiva
confianza, puede ser designado en otro del mismo carácter manteniendo la propiedad del primero.
En todo caso, el funcionario puede mantener la propiedad de su cargo titular sólo mientras no sea
removido por la autoridad competente, puesto que las atribuciones de ésta respecto de ese empleo
de exclusiva confianza para pedir la renuncia no voluntaria de quien lo sirve, de ningún modo se
restringen por la designación de titular en otro cargo, al amparo de esta regla de compatibilidad
(21725/90, 853/91, 21320/91, 12724/94, 318/96).
Inciso 3"
El derecho de opción que asiste a un funcionario para elegir entre el goce de una u otra franquicia o
régimen cuando tiene derecho a más de uno, incompatibles entre si, no se agota en el tiempo ni con
su primer ejercicio, sino que, por el contrario, la opción inicial puede ser posterior y sucesivamente
alterada por el beneficiario en cuyo interés se haya establecido, a menos que un precepto legal
limite esta facultad de modo expreso. Tal derecho constituye una facultad que requiere ser ejecutada
mediante una declaración de voluntad expresamente formulada por el interesado, de manera que no
haya dudas acerca del sistema o beneficio escogido. Para determinarla época desde la que comenzará
a producir sus efectos la franquicia elegida por el beneficiario, debe distinguirse entre el derecho inicial
de opción que en un momento dado posee una persona y la reopción u opciones que pueda hacer
valer posteriormente. Así, tratándose de la opción primitiva, sus consecuencias económicas tendrán
lugar desde el instante mismo en que se origine la incompatibilidad, que normalmente coincide con el
de la delación o concesión de un nuevo beneficio. Por su parte, tratándose de la reopción u opciones
posteriores, en que el beneficiario, luego de haber expresado su voluntad en determinado sentido,
varia de criterio y decide elegir otra franquicia, basado en el principio que, por regla general, el
derecho de opción no se agota con su primer ejercicio, el beneficio por el que reopta se empezará
a gozar sólo desde esta nueva declaración de voluntad del interesado, no correspondiendo revisar o
reliquidar lo ya devengado, porque en este caso lo percibido ha sido en virtud de un acto plenamente
válido, cual es la anterior opción del beneficiario, la que, por lo mismo, ha surtido todos sus efectos
mientras no se ejerció la nueva opción (204/91, 20103/91 ).
establecido para los empleados de Tesorerías. Ello, por cuanto sólo tiene derecho a la referida .g
e
asignación, el personal que se encuentre en servicio a la respectiva fecha de pago, esto es, que
esté ejerciendo efectivamente sus funciones en alguna de las entidades señaladas en ese cuerpo
.r
legal a la data indicada, lo que no sucede en el caso examinado, ya que el interesado no está ~
o
·¡¡
desempeñando funciones en el Servicio de Tesorerías. Con todo, el ejercicio de la opción a que
se refiere el inciso tercero del articulo 82 (actual articulo 88) de la ley 18834, entre la remuneración =:a
"'
·º'
-o
.,S!.,
de un cargo de exclusiva confianza y la del empleo cuya propiedad se mantiene, no impide que
:s.!:l
se pueda hacer uso de dicha opción nuevamente con posterioridad, respecto de remuneraciones ~m
1-0
futuras y que, en la especie, si se volviese a optar por la asignada al cargo del Servicio de Tesorerías,
tampoco asiste el derecho a percibir la asignación del articulo 12 de la ley 19041, porque, como se
señaló, es indispensable servir efectivamente el cargo a la fecha de pago para percibir este beneficio
(27938/94).
Un funcionario que está sirviendo un empleo como suplente o a contrata o un cargo de exclusiva
confianza en el mismo Servicio u otro, conservando la propiedad del que es titular de acuerdo con
los artículos 81 y 82 (actuales artículos 87 y 88) de la ley 18834, puede computar, para fines de la
asignación de antigüedad, el periodo desempeñado en esas calidades, cuando el empleo que así
ocupa habilita también para el goce de la franquicia aludida, en cuyo caso si bien el estipendio se
calcula en relación con la remuneración de éste, para determinar el número de bienios se suma
el tiempo al que ya tiene en la plaza de que es titular, operando las normas sobre absorción de
bienios en el evento de que tales servidores sean ascendidos en su cargo titular o sean designados
en propiedad en el cargo que pasaron a servir como suplentes o a contrata. Iguales efectos se
producen si el funcionario renuncia a su cargo titular, en el cual se le reconoció el tiempo servido para
gozar de la asignación analizada. Tratándose del funcionario nombrado en un cargo de exclusiva
confianza en el mismo Servicio al que pertenece o en otro distinto y que opte por la remuneración
que corresponde a éste, tal servidor conserva su porcentaje de asignación de antigüedad reconocido
en el cargo de que es titular, aplicado sobre el sueldo base del cargo de exclusiva confianza en que
ha sido nombrado, siempre que ambas plazas estén afectas al DL 249, de 1973. Si se cumple un
nuevo bienio durante el lapso en que se desempeña en el cargo de exclusiva confianza, procede que
se le reconozca dicho beneficio. El funcionario que deja el cargo de exclusiva confianza y vuelve al
empleo del que es titular, conserva los bienios que tenia con anterioridad y se le computa el tiempo
que sirvió en el cargo de exclusiva confianza, el cual es válido para estos fines (17027/91).
Inciso 4°
En caso de suplencia, la remuneración del empleado será sólo la de la plaza que desempeñe en
esta calidad y siempre que ella "sea superior" a la del cargo que conserva en propiedad, de manera
que si no concurre este supuesto, el interesado debe, por mandato legal y no por opción, continuar
percibiendo las remuneraciones de su empleo titular. Por ende, en este caso, carece del derecho
a optar entre ambas remuneraciones. En cambio, seguirá percibiendo esta última -la que es de
cargo del respectivo organismo- en el evento que la renta del empleo de suplente resulte inferior
(25772/94, 21844/96).
Conforme a este precepto al servidor que desempeña una plaza en calidad de suplente le asiste el
derecho a percibir la remuneración del cargo que ocupa en tal carácter, siempre que el titular del
mismo por cualquier motivo no goce de esa renta (11162/00).
La renta pagada por planilla suplementaria por desempeño en iguales funciones es considerada
como remuneración permanente, dejando de ser un beneficio personal anexo, al que, por lo tanto,
puede acceder el suplente que perciba la remuneración del titular que se halle en esa situación
(7213/92).
Un funcionario que ocupa un cargo de planta puede ser nombrado en otro de exclusiva confianza,
sin perder la propiedad de aquél, compatibilidad que puede mantenerse por tiempo ilimitado porque
la ley no señala ningún plazo para su duración (27997/93, 28561/00).
En la comunicación que un funcionario de planta dirija al Jefe Superior del Servicio -carta de
deferencia-, informándole que ha aceptado la designación en un cargo de exclusiva confianza
conforme a las normas de los articulas 81 (actual articulo 87), letra e), y 82 (actual articulo 88),
inciso segundo, de la ley 18834, se señalará la opción respecto de las rentas que le permiten esos
preceptos (12367/90).
Inciso so
Para que proceda un nombramiento en calidad de suplente o a contrata en otra institución, es
requisito fundamental que el funcionario público designado cuente con la aprobación del Jefe
Superior del organismo donde se desempeña, la cual debe ser acompañada a los respectivos actos
administrativos de nombramiento (24829/90, 9000/93).
Esta disposición no hace exigible la obligación que el funcionario cuente con la aprobación del Jefe
Superior del organismo en el cual ocupa un cargo de planta, cuando es designado, de acuerdo con
la letra e) del articulo 81 (actual articulo 87) de la ley 18834, para ocupar un empleo de exclusiva
confianza, pues aquel precepto sólo rige tratándose de suplencias y contratas (27997/93).
Comentarios:
A diferencia del articulo 87, que establece en sus letras a), b) y e), situaciones de compatibilidad
de funciones y de remuneraciones, como excepción a la regla de incompatibilidad de empleos, el
articulo 88 contempla sólo casos de compatibilidad de funciones, las cuales se relacionan con las
descripciones de empleos previstas en las letras d), e) y f) de la primera di~posición mencionada.
Ello ocurre cuando el titular de un empleo pasa a servir otro en calidad de subrogante, suplente o a
contrata, o bien, uno que tenga el caracter de exclusiva confianza, o tenga una duración determinada
por la ley, o se trate de cargos de directivos superiores de establecimientos de educación superior
del Estado.
En cualquiera de estos casos el empleado sólo ejerce el cargo paralelo, conservando la propiedad
del cargo de que es titular.
Con respecto a las remuneraciones, si los cargos paralelos son de exclusiva confianza o cuyo
nombramiento es por plazo determinado o son empleos directivos superiores de establecimientos de
educación superior del Estado, al momento de asumir alguna de estas plazas el interesado debera
optar entre las rentas propias de éstas y las del empleo cuya propiedad conserva (inciso tercero del
articulo 88). Cuando el cargo paralelo se sirve a contrata, el funcionario sólo recibe la renta del empleo
que desempeña en esta calidad; y en el evento de la subrogancia o la suplencia, recibira, cuando
proceda, únicamente la renta correspondiente a esas designaciones, siempre que la remuneración
sea superior a la que corresponda al cargo titular que conserva (inciso cuarto del articulo 88).
Títu16 IV
De1Jos Derechos
Funcionarios
TÍTULO IV De los Derechos Funcionarios 341
Párrafo 1°
Normas generales
ARTICULO 89.- Todo funcionario tendrá derecho a gozar Ley 18.834, Art. 83.
de estabilidad en el empleo y a ascender en el respectivo
escalafón, salvo Jos cargos de exclusiva confianza; participar
en los concursos; hacer uso de feriados, permisos y licencias;
recibir asistencia en caso de accidente en actos de servicio o de
enfermedad contraida a consecuencia del desempeño de sus
funciones, y a participar en las acciones de capacitación, de
conformidad con las normas del presente Estatuto.
Interpretación:
Inciso 1°
El derecho a la estabilidad en el empleo que establece esta norma consiste en la imposibilidad jurídica
de ser alejado del cargo sino en virtud de alguna de las causas legales de expiración de funciones
que contempla el Estatuto Administrativo, las que para tener eficacia requieren ser aplicadas por la
autoridad competente, previo cumplimiento de las formalidades que en cada caso procedan. En otras
palabras, esta disposición consulta el derecho a la función, que confiere al empleado legalmente
investido en un cargo público, a permanecer en él y a desempeñarlo conforme a los principios que
rigen su ejercicio (559/84, 25346/91,19049/92,25877/94,7034/96, 41429/03).
El derecho que consulta el articulo 83 (actual artículo 89) de la ley 18834 de estabilidad en el empleo,
conlleva el de ejercer las funciones propias del cargo para el cual ha sido nombrado, lo que significa
que los funcionarios no pueden ser separados de esas funciones sin que una causa legal lo permita,
por lo que la autoridad administrativa no puede, legítimamente, impedirles el desempeño de las
mismas en forma arbitraria, sin perjuicio de las facultades que el artículo 67 (actual artículo 73) del
Estatuto Administrativo otorga a la Jefatura Superior de poder destinar al personal de su dependencia,
siempre que tal desplazamiento respete la jerarquía de los servidores y que el funcionario pueda
desarrollar tareas propias del cargo para el cual fue designado (1897/01, 31600/03, 24336/04,
7958/07' 40661/07).
Una persona adquiere la calidad de funcionario público desde el día en que se le notifica el decreto
o resolución de nombramiento y ha asumido el cargo respectivo. La asunción de funciones es el
elemento de hecho que perfecciona la relación de empleo público (33016/75, 65326/78).
El DFL 1, de 2002, del Ministerio del Trabajo y Previsión Social, Subsecretaria del Trabajo. fijó el texto refundido,
coordinado y sistematizado del Código del Trabajo.
Quienes sirven empleos de exclusiva confianza no están amparados por el derecho a la función
contemplado en esta norma, por lo que se mantienen en sus puestos mientras cuenten con la
confianza de la autoridad llamada a hacer el nombramiento, dependiendo su remoción de la sola
voluntad de ella (2871 0/90, 853/91, 27371/93, 8312/95, 25928/96, 23244/00 -complementado por
el48314/01-, 19588/04, 50049/04, 34325/06).
El hecho de que una funcionaria de exclusiva confianza sea beneficiaria de la beca Presidente de la
República para estudios de post grado en universidades chilenas, no impide que pueda ser removida
de su cargo, ya que, acorde con el articulo 7, letra e), de la ley 18834, en relación con el articulo 51
de la ley 18575 (actual articulo 53), quienes poseen tal calidad no se encuentran amparados por el
derecho a la función contemplado en el articulo 83 (actual articulo 89) de ley 18834. Lo expuesto
es, sin desmedro de ~que la normativa en que la ocurrente funda su peticion no resulta aplicable a
los empleados de exclusiva confianza, por cuanto el articulo 8 del DFL 1, de 1999, del Ministerio de
Planificación, señala que el personal beneficiado con la beca de que se trata, excepto el de exclusiva
confianza, mantiene la propiedad de sus cargos du.rante todo el periodo de esa y hasta 2 años de
terminada, salvo en los casos de destitucion o de calificacion insuficiente, que signifique alejamiento
del servicio (28121/01).
Los funcionarios a contrata gozan del derecho a la estabilidad en el empleo, pero ello con las
limitaciones propias que emanan del carácter transitorio de sus designaciones, de modo que la
seguridad en sus cargos que les garantiza la ley estatutaria se relaciona con la circunstancia que su
expiración de funciones no está entregada a la discrecionalidad de la autoridad, sino que procede
por alguna de las causales legales que ella consulta. El Estatuto Administrativo ha marginado del
régimen de carrera funcionaria al personal a contrata, al establecer en su articulo 3, letra f), que
esa carrera es "un sistema integral de regulación del empleo público, aplicable al personal titular
de planta". El articulo 9 (actual articulo 1O) del mencionado Estatuto señala en su inciso primero,
que "los empleos a contrata durarán, como máximo, sólo hasta el 31 de diciembre de cada año y
los empleados que los sirvan expirarán en sus funciones en esa fecha, por el solo ministerio de
la ley, salvo que hubiere sido propuesta la prórroga con treinta días de anticipación a lo menos".
Corresponde a la autoridad que nombra al funcionario calificar tanto la conveniencia de prorrogar
una contrata como de ponerle término cuando ella ha sido extend.ida bajo la formula "mientras sean
necesarios sus servicios", decisión que se ajustará a derecho en la medida que sea adoptada dentro
del ámbito de su competencia y en la forma indicada por la ley (29914/99, 748/03, 36029/05).
Los ceses de servicio que ordena la ley, tales como términos de suplencias o reemplazos o por
inhabilidades sobrevinientes, operan con prescindencia de las normas de inamovilidad en el empleo
contenidas en textos estatutarios o en otros preceptos legales generales o especiales, ya que
esas normas de estabilidad sólo juegan en relación con la eventual facultad de poner término a las
funciones, pero no tienen cabida en las situaciones en que la ley ordena el alejamiento del servidor
(27540/91, 40934/95,5218/00, 10189/01, 120/03,43458/03, 60897/06, 41268/07).
El cometido funcionario es una figura jurídica que por su naturaleza descansa sobre la base de
una extensión limitada en el tiempo, al referirse al cumplimiento transitorio de labores especificas.
De esta manera, entonces, debe evitarse que se transforme en una asignación permanente de
funciones, separando a los funcionarios que lo desempeñen, de los cargos para los cuales fueron
nombrados. Si bien los cometidos funcionarios no transgreden el principio relativo al derecho a la
función, el cual implica el legitimo derecho que posee todo servidor público de ejercer las funciones
del cargo para el cual fue nombrado, dado su establecimiento legal y su naturaleza precaria, puede,
al no tener una duración definida, mediante una extensión excesivamente prolongada, transformarse
en un instrumento que, arbitrariamente esté destinado a impedir a un funcionario el cumplimiento de
Inciso 2•
De acuerdo con el inciso segundo del articulo 89 , durante el periodo de embarazo y hasta un
año después de expirado el descanso de maternidad, la trabajadora está amparada por el fuero
maternal, cualquiera sea el estatuto al que esté afecta en el desempeño de sus funciones y con
independencia, asimismo, de la calidad jurídica en que se encuentre prestando servicios. En
consecuencia, para poner término a una contrata por la causal de vencimiento del plazo convenido,
se requiere necesariamente de autorización judicial de conformidad a la ley, aun cuando hubiere
servido por el término de un mes, al cabo del cual se comprobó que se encontraba en estado de
gravidez (30523/05, 47550/05).
No obstante que las reglas de protección a la maternidad alcanzan a las funcionarias suplentes, la
inamovilidad se mantiene mientras dura dicho desempeño, ya que en el supuesto de terminar la
causa que impide a la titular reasumir el ejercicio de la plaza correspondiente, debe entenderse que
es la propia ley la que pone término a la suplencia. Este criterio descansa en el principio de que
los ceses de servicio que dispone la ley, como es el caso de los personales que se desempeñan
como suplentes, operan con prescindencia de las normas de inamovilidad en el empleo contenidas
en textos estatutarios o en otros preceptos legales o especiales, como quiera que esas reglas
sobre estabilidad sólo juegan en lo que atañe a la eventual facultad de poner término a funciones
actuales, pero no tiene cabida en los casos en que, como se ha señalado, el alejamiento del servidor
está regulado en la ley. Por ello, la funcionaria que se encuentra en estas condiciones no está
amparada por la inamovilidad derivada del fuero maternal y no le ha asistido el derecho a gozar de
la protección que impetra más allá del plazo fijado para dicho desempeño en la calidad indicada, de
modo, entonces, que el empleador no se encontró en el imperativo de mantener el vinculo laboral
(28823/92, 40934/95, 41945/97, 5218/00, 120/03, 2203/05 -complementado por el 32531/05-,
41268/07).
Funcionaria a contrata que se encuentra embarazada está amparada por el fuero laboral previsto en
el articulo 201 del Código del Trabajo, no resultando posible a la autoridad poner término a la relación
funcionaria por propia voluntad o por la llegada del plazo, sino que debe renovar el nombramiento
por todo el tiempo que dure el beneficio de la inamovilidad, a menos que estime necesario, para
poner término a sus servicios, requerir la autorización judicial que permita la remoción, conforme
al articulo 174 del Código del Trabajo. No cabe aplicar respecto de las empleadas a contrata lo
relativo al término de los servicios de las funcionarias embarazadas que se desempeñan en calidad
de suplentes según el articulo 4 de la ley 18834, quienes, pese al fuero maternal de que puedan
gozar, sólo pueden desempeñar el empleo mientras dure el impedimento del servidor titular o se
mantenga la vacancia de la plaza que ocupan. Además, según el ya citado articulo 201 en su inciso
cuarto, si por ignorancia del embarazo, se dispone el término del contrato en contravención a ese
precepto, la medida ha de quedar sin efecto y la trabajadora volver a sus labores, para lo cual basta
la sola presentación del correspondiente certificado médico o de la matrona (15220/82, 17427/82,
13310/87,2963/99, 21345/99 -aclarado por 32284/99-,47550/05, 59401/05, 27807/06).
Funcionaria embarazada a contrata para reemplazar a otra funcionaria de igual naturaleza impedida
de ejercer el cargo, está amparada por el fuero laboral, no resultando posible a la autoridad poner
término a la relación funcionaria por propia voluntad o por la llegada del plazo, sino que debe
renovar el nombramiento por todo el tiempo que dure el beneficio de la inamovilidad, a menos que
estime necesario para poner término a sus servicios, requerir la autorización judicial que permita la
remoción. Lo anterior no se altera por la circunstancia de que el motivo de la contratación haya sido
reemplazar a otra funcionaria a contrata impedida de ejercer el cargo, pues al constituir las contratas
designaciones que no ocupan cargos especificas señalados en la planta de la respectiva institución,
la autoridad administrativa se encuentra facultada para designar a dos o más personas asimiladas
a un empleo de la misma planta, aun cuando deban efectuar labores de igual naturaleza (62201/06,
17284/07,34236/07,44815/07, 8767/08, 23671/08).
Para que las contratadas a honorarios tengan derecho a los beneficios sobre protección a la
maternidad, ellos deben quedar establecidos expresamente en el respectivo contrato, por cuanto
dichos trabajadores no revisten la calidad de funcionarios públicos y tienen como única norma
reguladora de sus relaciones con la Administración el respectivo acuerdo, de modo que sólo
poseen los beneficios estipulados en dicho pacto. Además, la Convención sobre Derechos del Niño
y la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, no
consagran de manera específica el derecho de la mujer trabajadora para amamantar o alimentar a
sus hijos menores de edad, sino que se limitan a establecer preceptos de carácter general a favor
de aquéllos y constituyen obligaciones para los Estados Partes, quienes deben adoptar las medidas
legislativas, administrativas o de otra índole, para hacerlas efectivas (28235/01, 46985/07).
El que una funcionaria sea madre de un lactante no puede constituirse en un impedimento para
el libre ejercicio del derecho a participar con igualdad de oportunidades en un concurso que le
permita acceder a un cargo o función pública o ser promovida en él. Tampoco obsta al ejercicio de
ese derecho el que una funcionaria, acorde con lo dispuesto en el articulo 89 de la ley 18834, se
encuentre en actual goce del descanso de maternidad que la legislación le reconoce. Ello, porque
al tenor de los artículos 195 y 197 del Código del Trabajo y 6 del decreto 3, de 1984, del Ministerio
de Salud, el descanso maternal confiere a la beneficiaria únicamente el derecho irrenunciable de
ausentarse de su trabajo, pero no faculta a extender la prohibición de trabajar a otros efectos no
previstos expresamente por el legislador, como seria, por ejemplo, restringir la libertad de postular
en igualdad de condiciones a un cargo o función pública (58507/06, 6221/07).
El articulo 203 del Código del Trabajo, que contempla el beneficio de sala cuna, es un precepto que
se encuentra inserto en el Titulo 11 del Libro 11 "De la Protección a la Maternidad" -modificado por
la ley 20166- aplicable a los servicios de la Administración Pública de acuerdo con lo prescrito en
los articulas 194 del citado Código y 89 del Estatuto Administrativo. Dicho artículo 203 establece la
obligación de los servicios públicos de otorgar a sus funcionarias el beneficio de sala cuna, a través
de salas anexas e independientes del local de trabajo, en donde éstas puedan dar alimento a sus
hijos menores de dos años de edad y dejarlos mientras están en el trabajo, o bien, pagando el gasto
respectivo directamente al establecimiento de la localidad al que la funcionaria lleve a sus hijos
menores de dos años (40551/05, 57317/06, 4680/07). Luego, debe entenderse que los organismos
públicos dan cumplimiento a tal disposición cuando habilitan una sala cuna institucional y otorgan el
servicio de transporte particular, para facilitar el traslado de los hijos de las funcionarias beneficiarias.
Sin embargo, atendido que el bien jurídico cautelado por esa norma es la integridad física y psíquica
del menor, su objeto es velar por la debida protección y seguridad de aquél, procurando su adecuado
desarrollo, por lo que el mencionado articulo 203 constituye una disposición integrante del sistema
de seguridad social, precepto que, en consecuencia, debe interpretarse considerando siempre el
adecuado resguardo del niño, ya que de no ser así, se contravendría el espíritu y finalidad de la ley.
En armonía con lo expuesto, dable es entender que si por prescripción médica el menor necesita
contar con la presencia cercana de su madre, por razones de salud -cuyo es el caso de un menor
de dos años, que por certificado de médico pediatra presenta reflujo grado tres en tratamiento y
relativamente controlado, debiendo, hasta que cumpla un año de edad estar cerca del trabajo de
su madre para que ésta pueda asistirlo en caso de emergencia-, el otorgamiento del beneficio en
referencia, esto es, el pago de una sala cuna cercana al lugar de trabajo se enmarca dentro del
propósito de protección de los menores que tuvo en cuenta el legislador al establecer el derecho
contemplado en el articulo 203 del Código Laboral, de tal forma que procedería, por excepción su
otorgamiento, pese a que la repartición de que se trate posea una sala cuna para sus trabajadoras
(27102/03, 25083/08).
En conformidad con el articulo 203 del Código del Trabajo, las empresas que ocupen 20 o más
trabajadoras de cualquier edad o estado civil, deberán tener salas anexas e independientes del
local de trabajo, en donde las mujeres puedan dar alimento a sus hijos menores de dos años y
dejarlos mientras trabajan, normas que son aplicables a las funcionarias de la Administradón del
Estado, de acuerdo con los artículos 83 (actual articulo 89) de la ley 18834 y 33 de la ley 17301. No
procede conceder el beneficio de sala cuna en forma voluntaria mientras no se cumpla el mínimo
de 20 trabajadoras establecido en el citado articulo 203 del Código del Trabajo, aun cuando en el
presupuesto del servicio se contemplen recursos destinados genéricamente al rubro "salas cunas y
jardines intantiles", por cuanto tales fondos sólo pueden utilizarse en la medida que se cumplan los
requisitos legales que justifiquen el respectivo gasto, (34068/01, 10700/05).
Una funcionaria tiene derecho a percibir el pago de sala cuna por una menor que se encuentra bajo
su tuición, de acuerdo con el articulo 203 del Código del Trabajo, en relación con el inciso segundo
del articulo 83 (actual articulo 89) de la ley 18834. Ello, porque si bien la citada disposición del
Código del Trabajo contempla ese beneficio para que las madres puedan alimentar a sus "hijos"
menores de dos años y dejarlos mientras estén en el trabajo, ella debe ser interpretada y aplicada en
el contexto de la legislación destinada a proteger la integridad, la salud y el adecuado desarrollo de
los menores y, por ende, alcanzar su atención y cuidado durante los periodos en los cuales quienes
los tienen legalmente a su cargo cumplen sus deberes laborales. Así, al tenor del articulo 255 del
Código Civil, a los titulares de tuición corresponde el cuidado personal de los menores que no pueden
valerse por si mismos, con el objeto de darles la protección debida, de modo, entonces, que este
imperativo debe satisfacerse en forma permanente y, en lo que interesa, aun cuando quien lo cumple
desarrolle una jornada laboral. Por tanto, es improcedente inferir, para los fines estudiados, que por
la circunstancia que el articulo 203 del Código del Trabajo aluda concretamente a los "hijos menores
de dos años", puedan quedar excluidos de la franquicia referida quienes se hallan bajo tuición si,
como se indica, en el marco de la legislación vigente, todos los menores poseen análogos derechos
en lo que atañe a su atención y cuidado (27252/97, 25787/99, 35424/00).
Aun cuando la norma del articulo 203 del Código del Trabajo hace referencia en forma expresa a las
"trabajadoras" y "mujeres" como beneficiarias del derecho a sala cuna por sus hijos menores de
dos años, esto es, aludiendo a la madre, no se puede limitar este derecho sólo a ella, sino que ha de
extenderse a todo trabajador, incluso al padre, que tenga bajo su cuidado personal a un menor, como
seria en el caso de la adopción o tuición conferida judicialmente (25787/99, 16738/03, 12980/08).
No procede sustituir el beneficio legal de sala cuna por una suma de dinero, para contratar una persona
idónea a fin de que cuide, en su hogar, al hijo menor de una funcionaria que cumple turnos nocturnos
en un hospital, pues no existe norma legal que así lo faculte. La ley ha sido expresa en señalar las
formas como es posible cumplir la obligación de proporcionar sala cuna, a saber, implementando por
parte del empleador salas anexas e independientes del local de trabajo, o construyendo o habilitando
y manteniendo servicios comunes de salas cunas para la atención de los niños de las trabajadoras
de todos los establecimientos de los servicios que se encuentren en una misma área geográfica
o, finalmente, pagando los gastos de sala cuna directamente al establecimiento al que la mujer
trabajadora lleve sus hijos menores de dos años, todo ello, según el artículo 203 del Código del
Trabajo. Las trabajadoras que desempeñen turnos de noche tienen derecho al beneficio de sala cuna
igual que aquellas que cumplen horario diurno, pues el Código Laboral no formula ninguna distinción
en cuanto al horario de funcionamiento de las salas cunas, ni de desempeño de las funcionarias, por
lo que el empleador está obligado a adoptar las medidas que permitan proveer del servicio de sala
cuna en alguna de las formas que expresamente ha previsto la ley, a las servidoras que laboran en
horario nocturno (42270/04, 57317/06).
El otorgamiento del servicio de sala cuna y jardín infantil a personas ajenas a la institución pública de
que se trate previo pago de matricula y de la correspondiente mensualidad, constituye un proceder
contrario a derecho, en la medida que se carece de autorización legal expresa que así lo permita. Ello,
porque acorde con los artículos 89 de la ley 18834, 194 y 203 del Código del Trabajo, la obligación
de proveer el servicio de sala cuna, sea mediante salas anexas e independientes del local de trabajo,
construyendo o habilitando y manteniendo servicios comunes de salas cunas para la atención de
los niños de las trabajadoras de un conjunto de servicios ubicados en una misma área geográfica
o, finalmente, pagando los gastos de sala cuna directamente al establecimiento al que la mujer
trabajadora lleve sus hijos menores, constituyen una prestación destinada exclusivamente a favor
de las trabajadoras que laboran en la entidad otorgante del beneficio, sin que ello permita entender,
en caso alguno, que se autoriza a los órganos de la Administración del Estado para prestar dicho
servicio, a particulares. Los jardines infantiles constituyen prestaciones de seguridad social a las
que pueden acceder los niños hasta la edad de su ingreso a la educación general básica y, aunque
no existe un mandato legal que obligue a los entes estatales a considerar el beneficio de jardín
infantil para los hijos de su personal, es facultativo para ellos otorgarlo dentro del ámbito de sus
disponibilidades presupuestarias, siendo necesario agregar que, una vez acordado por el empleador,
debe extenderse a todos los menores de edad de gozar del beneficio, sin discriminaciones, conforme
a reglas de carácter objetivo, no pudiendo excluirse a ninguno de ellos (14554/07).
Una funcionaria no tiene derecho al pago de los pasajes por el transporte que emplee para el viaje
de ida y vuelta entre su oficina y el jardín infantil al que concurre su hijo. Ello, porque conforme al
inciso segundo del articulo 83 (actual articulo 89) de la ley 18834, los funcionarios gozarán de las
prestaciones y beneficios que contemplen los sistemas de previsión y bienestar social de acuerdo
con la ley y las normas de protección a la maternidad consultadas en el Titulo 11 del Libro 11 del Código
del Trabajo, cuyo articulo 203 establece el derecho a pasajes sólo en relación con viajes a salas
cunas (39029/99).
En tanto el Servicio no provea de una sala cuna que satisfaga los requerimientos de los niños
menores de dos años de edad, hijos de funcionarias, procede que la institución autorice a las madres
a alimentarlos en su propio domicilio, otorgándoles el tiempo necesario para dichos fines y el valor de
los pasajes de la locomoción colectiva. Ello, por cuanto el articulo 206 del Código del Trabajo faculta
a la madre para alimentar a sus hijos durante la jornada de trabajo, sin establecer que debe hacerlo
en salas cunas, lo cual obliga a inferir que tal derecho puede ejercerse en el domicilio de la madre
cuando el servicio o establecimiento en que la madre labora no cuenta con sala cuna. Además, el
permiso que le asiste a la madre para alimentar a su hijo en su domicilio, ya sea porque el menor no
puede concurrir a la sala cuna del servicio o porque no existe dicha dependencia, debe ampliarse en
el tiempo necesario para el viaje de ida y vuelta a su casa. El concepto de "alimentar" es amplio y no
se limita sólo al amamantamiento, sino que comprende la entrega de cualquier sustancia que nutra
mediante la absorcion y asimilacion, por lo que el ejercicio de la franquicia no debe subordinarse solo
a la duración del periodo de lactancia (26748/94, 32788/96, 3801/95, 34028/04).
El beneficio que el articulo 206 del Código del Trabajo otorga a cada madre para dar alimento a
sus hijos menores de dos años, por un lapso máximo de una hora al día, dividido en dos porciones
de tiempo, debe entenderse concedido por cada hijo que se tenga en esa condición, como sucede
con aquellos nacidos de un parto múltiple. Ello, porque la circunstancia de que una madre tenga
más de un hijo en edad de ser atendido en su alimentación, lo que incluye a los mellizos menores
de dos años, significa necesariamente que ésta se encuentra en una situación diversa de aquella
que sólo tiene un menor en esa condición, pues, como es obvio, se requiere de mayor tiempo para
alimentar a dos o más hijos que a uno solo, de manera tal que una interpretación distinta constituye
una discriminación arbitraria tanto respecto de la madre funcionaria como de los hijos, todo lo cual
concuerda con el articulo 19 N"s. 1 y 2 de la Constitución Política y con el articulo 2 de la Convención
sobre los Derechos del Niño, ratificada por Chile y promulgada como ley de la República mediante
decreto 830, de 1990, del Ministerio de Relaciones Exteriores. Este criterio es coincidente con el
dictamen 3362, de 2003, de la Dirección del Trabajo (59795/06).
Al incorporarse por mandato del articulo único de la ley 20047, un nuevo inciso segundo al articulo
195 del Código del Trabajo, esto es, dentro de las normas de protección a la maternidad, el permiso
paternal de cuatro días (actualmente "cinco", de acuerdo con la modificación introducida por el
articulo 1, N" 2, letra b), de ley 20137) en caso de nacimiento de un hijo que aquella norma consagra,
ha pasado a integrar el conjunto de derechos funcionarios que benefician a los servidores regidos
tanto por la ley 18834 -Estatuto Administrativo- como por la ley 18883 -Estatuto Administrativo para
Funcionarios Municipales-. De las actas legislativas fluye de manera inequívoca la intención de
considerar como beneficiarios de este derecho a los servidores públicos, tal como aparece del
segundo informe de la Comisión de Trabajo y Previsión Social del Senado, elaborado durante la
discusión del respectivo proyecto de ley, conforme al cual, una indicación expresa en tal sentido
resultaba innecesaria, toda vez que la legislación que rige a las entidades y funcionarios a que aludía
la indicación rechazada, ya sea directa o indirectamente, por la vía de la remisión o la supletoriedad,
hace aplicable al personal en cuestión las disposiciones sobre protección a la maternidad contenidas
en el Código del Trabajo (44236/05).
El permiso paternal establecido en el inciso segundo del articulo 195 del Código del Trabajo, permite
al trabajador ausentarse con goce de remuneraciones, por un lapso de cuatro días (hoy "cinco",
conforme a la modificación expresada en el dictamen anterior), los cuales pueden ser utilizados como
días corridos a contar del momento del parto o distribuidos dentro del primer mes desde la fecha del
nacimiento del hijo, todo ello a elección del funcionario. La jornada semanal, que según el articulo 65
del Estatuto Administrativo se distribuye de lunes a viernes, ha sido concentrada, sin embargo, por
así permitirlo la Ley Orgánica del "Hospital Padre Alberto Hurtado", respecto de aquellos funcionarios
que prestan servicios mediante el sistema de turnos rotativos durante todo el año, en un solo día
de la semana, razón por la cual, cabe entender que es con cargo a dicha distribución horaria que
debe ser cumplido el descanso paternal de que se trata, puesto que precisamente en aquel día
de labores se cumple la jornada semanal de trabajo y no en otros días respecto de los cuales el
funcionario no tiene la obligación de asistir. Luego, es procedente aplicar en estos casos un criterio
de proporcionalidad, en que, para efectos del otorgamiento del permiso, corresponderá dividir la
jornada de 28 horas que el funcionario de que se trata cumple una vez por semana en una rotativa de
turnos cada seis días, considerándose cada fracción de 5,6 horas resultante de esta división, como
equivalente a una jornada diaria de trabajo. De esta manera, cada día de permiso paternal equivaldrá
a dicha fracción de 5,6 horas, por lo que al concederse al interesado un turno completo de permiso,
se satisfizo plenamente respecto del funcionario la exigencia del derecho a uso de permiso paternal
por el equivalente a cuatro (cinco) días. Tal criterio encuentra su fundamento en la circunstancia
que al referir el Código del Trabajo que el permiso paternal equivale a cuatro (actualmente "cinco")
días, supone la autorizacón para ausentarse del lugar de trabajo durante cuatro (cinco) jornadas
laborales diarias, lo que unido a que conforme al Estatuto Administrativo -aplicable supletoriamente
en esta materia a los funcionarios del Hospital Padre Alberto Hurtado- la jornada semanal se divide
en cinco días (de lunes a viernes), lleva a concluir que si la jornada semanal ha sido concentrada en
un sólo día, lo mismo ha sucedido con las jornadas diarias de trabajo. En suma, es precisamente
en aquel día de turno fijado para el cumplimiento de la jornada semanal, con cargo al cual debe
hacerse efectivo el derecho al descanso paternal establecido en el inciso segundo del articulo 195
del Código del Trabajo, para lo cual es menester que el número de horas contratadas sea dividido
por el número de días en que de conformidad al articulo 65 de la ley 18834, se distribuye la jornada
semanal de trabajo de los funcionarios públicos, vale decir, cinco. De esta forma, la fracción de
tiempo resultante equivaldrá a un día de trabajo para los efectos del permiso de que se trata; fracción
de tiempo que el funcionario podrá, a su arbitrio, elegir acumular en su integridad e imputarlo de
una sola vez al turno más inmediato que le corresponda curnplir o, en su defecto, distribuir dichas
parcialidades, aplicándolas a cualquiera de los turnos en que cumpla su jornada semanal, siempre
que estos turnos queden comprendidos dentro del mes siguiente al nacimiento del hijo causante del
beneficio (55925/06).
especial que prevalecen sobre aquellos contemplados en los articulas 66 y siguientes del Libro 1
Titulo 1 Capitulo VIl del Código del Trabajo, razón por la cual esta normativa no resulta aplicable
a los servidores públicos regidos por dicho Estatuto. La aplicación de ambos beneficios solo será
posible, tratándose de personal del sector público, en la medida que su estatuto sea precisamente
ese Código Laboral (5957/06, 6253/06, 6446/06, 30148/06).
Por su parte, el artículo 46 de la ley 18575 previene que el personal de la Administración del Estado
gozará de estabilidad en el empleo y sólo podrá cesar en él por alguna de las causas que indica,
disposición que debe entenderse relacionada de manera directa con el articulo 146 del Estatuto
Administrativo, que precisa las causales por las cuales cesan en el cargo los servidores públicos
sujetos a sus normas.
Especial comentario merece lo dispuesto en la parte final del inciso segundo, que hace aplicable
de manera integral el Titulo 11 del Libro 11 del Código del Trabajo a los funcionarios a quienes se
aplica la ley 18834, con lo cual el legislador reafirma el concepto institucional o amplio de Estatuto
Administrativo que la jurisprudencia de la Contraloria General ha venido considerando desde hace
ya más de sesenta años.
ARTICULO 90.- Los funcionarios tendrán derecho, además, a Ley 18.834, Art. 84.
ser defendidos y a exigir que la institución a que pertenezcan
persiga la responsabilidad civil y criminal de las personas que
atenten contra su vida o su integridad corporal, con motivo del
desempeño de sus funciones, o que, por dicho motivo, los injurien
o calumnien en cualquier forma.
Interpretación:
Inciso 1'
El articulo 100, inciso primero, del DFL 338, de 1960 (actual artículo 90, de la ley 18834) supone
que un tercero, incurriendo en responsabilidad civil o penal, injurie, calumnie o lesione, en cualquier
forma, a un empleado, o atente contra su vida, con motivo del desempeño de sus funciones, de modo
que no se aplica en los casos en que un funcionario es demandado judicialmente por un particular
para reclamar el pago de perjuicios por un accidente del tránsito (6523168).
El artículo 100, inciso primero, del DFL 338, de 1960 (actual artículo 90, de la ley 18834) amplió el
precepto del artículo 20 del Código de Procedimiento Penal, que dispone que las injurias y calumnias
contra funcionarios públicos formuladas en su carácter de tales deben ser perseguidas por el Ministerio
Público, a requerimiento de la persona ofendida, y con el manifiesto fin de velar por la respetabilidad
de la función pública, ha regulado para estos casos un procedimiento especial con el propósito de
poner en marcha a la justicia. Por lo tanto, este articulo no se aplica cuando ha sido el funcionario
quien ha incurrido en un hecho que puede comprometer eventualmente su responsabilidad penal y
civil (18758166, 57259177).
Para que opere el derecho consultado en esta disposición debe mediar la acción agraviante de
un tercero en contra del empleado de que se trate, el atentado debe ser cometido con motivo del
desempeño de sus funciones y es necesario que el servidor agraviado no haya cometido un hecho
que, al menos presuntivamente, implique la infracción de sus deberes funcionarios (46926199,
6015100, 52198102).
El Servicio Nacional de Aduanas se encuentra facultado para proporcionar asesoría y defensa legal
a sus empleados frente a la interposición de acciones judiciales en contra de éstos, por actuaciones
desarrolladas en el ejercicio de sus funciones, como ha sucedido con el juez y secretario aduanero
afectados por una querella interpuesta por el Fiscal de la Corte de Apelaciones, por presunta
infracción al artículo 148 del Código Penal, en razón de haber decretado una orden de detención
ilegal en contra de un abogado durante la tramitación de un antejuicio por fraude aduanero. La referida
situación se originó en un recurso de amparo deducido por el afectado ante dicho tribunal superior
de justicia en contra de los citados funcionarios, el cual no solo fue acogido, sino que, además, en la
respectiva sentencia se ordenó la remisión de Jos antecedentes al Ministerio Público a objeto de que
interpusiera una querella. Ese servicio cuenta con atribuciones suficientes para asumir la defensa
de sus funcionarios en la situación mencionada, atendido que, por una parte, el cuestionamiento de
su actuación significa, en último término, afectar sus propias atribuciones, y por otra, que se está en
presencia de una acción deducida contra algunos funcionarios en virtud del ejercicio de potestades
propias de esa entidad (14763/98).
Superintendencia de Quiebras debe asumir la defensa del jefe superior de ese organismo en la
querella que, en su contra, interpusiera el Síndico de Concepción al considerar injurioso un oficio que
aquél le remitiera en el ejercicio de las facultades que le confiere la ley 18175. Ello, porque el artículo
84 (actual artículo 90) de la ley 18834 contempla el derecho que tiene todo funcionario público a ser
defendido por el servicio al cual pertenece, siempre que su actuación se haya enmarcado dentro
de sus atribuciones. Los gastos específicos en que, con motivo de la defensa, se incurra ha de
asumirlos el propio servicio con cargo a su presupuesto, debiendo imputarse los desembolsos por
viáticos y por pasajes según Jos términos definidos en las clasificaciones presupuestarias (46080/03.
Deja sin efecto toda jurisprudencia en contrario).
Ministerio debe asumir la defensa y Jos gastos consecuentes en que se incurra, en el caso de una
funcionaria en contra de la cual un empleado del mismo organismo, interpuso una demanda civil de
indemnización por los perjuicios que le habría ocasionado su actuación en calidad de jefa directa al
no asignarle el puntaje máximo, lo que le impidió ascender. Lo anterior, porque la servidora de que
se trata fue demandada como consecuencia del cumplimiento de sus labores de jefatura, las cuales
constituían una obligación para ella. Enseguida, aun cuando la situación que afecta a la ocurrente no
es precisamente la que establece el artículo 84 (actual artículo 90) de la ley 18834, no resulta posible
desconocer que este precepto consulta el derecho de todo funcionario público a ser defendido por el
órgano al que pertenece, siempre que su actuación se haya enmarcado dentro de sus atribuciones
(14763/98, 49547/04).
Un servicio público debe asumir la defensa y Jos gastos consecuentes en que incurra, en el caso
del director de una escuela dependiente de ella, en el cual un tercero interpuso en su contra un
juicio civil por indemnización de perjuicios, que tiene su origen en actuaciones propias de su función
pública, que inciden en la obligación de dar protección a Jos alumnos de la escuela que dirige. Ello,
porque, el derecho de un funcionario a ser defendido en juicio por el servicio al cual pertenece, se
basa fundamentalmente en el hecho de que éste actúe en el marco de las atribuciones que la ley le
asigna en el ejercicio de una función pública, de manera que su accionar se encuentre regido, entre
otros, por el principio de juridicidad y el de probidad administrativa, aun cuando la situación que
afecta al ocurrente no es precisamente la que establece el artículo 84 (actual artículo 90) de la ley
18834. Lo anterior, por cuanto todo acto de un empleado público realizado legítimamente, vale decir,
dentro de su competencia, representa una actuación propia de su servicio. Por ende, corresponde a
. este último otorgarle la defensa que requiera para evitar que sufra personalmente las consecuencias
derivadas del ejercicio de la función pública (22233/06).
El derecho a ser defendidos por el Servicio que otorga a los empleados públicos el articulo 90 de la
ley 18834, no ampara a quienes han infringido sus obligaciones funcionarias, en cuyo caso deben
responder frente a la Administración, sino que supone que hayan sido victimas de actos que atenten
contra su vida o integridad corporal, con motivo del desempeño de sus funciones, o que, por esta
causa se le haya injuriado o calumniado en cualquier forma. La posibilidad para que opere el derecho
estatutario a defensa cabe sólo una vez finalizada la investigación pertinente y según sus resultados,
puesto que de lo contrario, la autoridad administrativa apareceria amparando infracciones cometidas
por sus empleados y en cierta medida, involucrándose en ellas. Por ello, no procede la celebración
de un convenio de prestación de servicios para asumir la defensa de funcionarios de un servicio
en el sumario administrativo ordenado instruir por la Contraloria General (37076/96, 46926/99,
47283/07).
Inciso 2°
Corresponde a los Jefes Superiores de Servicio o a los Ministros de Estado, en su caso, calificar
la procedencia de deducir las acciones judiciales que prevé la disposición, a requerimiento del
funcionario afectado. La jurisprudencia administrativa ha declarado que la incorporación de esta
norma al texto de la ley estatutaria responde al espiritu del legislador de velar por la respetabilidad de
la función pública, ·instituyendo para ello un procedimiento especial de acción en aquellos casos en
que se injurie, calumnie, lesione o se atente contra la vida del funcionario "con motivo del desempeño
de sus funciones", situación en la cual éste tiene el derecho de acudir formalmente ante su Jefe
Superior o el Ministro del ramo, según proceda, a fin que se denuncie el hecho ante los Tribunales
de Justicia (18758/66, 37965/73).
Conforme al articulo 84 (actual articulo 90), incisos primero y segundo, de la ley 18834, compete
privativamente al jefe superior de la institución, a solicitud escrita del funcionario, o al Ministro de
Estado cuando el afectado sea dicho jefe superior, realizar las denuncias pertinentes al respectivo
tribunal, en resguardo de la responsabilidad de la función pública. Ello, porque los funcionarios tendrán
derecho a ser defendidos y a exigir que la institución a que pertenezcan persiga la responsabilidad civil
y criminal de las personas que con motivo del desempeño de sus funciones los injurien o calumnien
en cualquier forma (52130/02).
Comentarios:
Este derecho tiene como propósito proteger a los servidores públicos que, como consecuencia del
ejercicio de sus funciones, se ven afectados, ya sea en su integridad fisica, inclusive su vida, o en
su honra por ser objetos de injurias o calumnias. Se fundamenta en el supuesto que el funcionario
legalmente investido actúa en el marco de atribuciones que la ley le asigna en el ejercicio de una
función pública, de manera que su accionar se encuentra amparado, entre otros, por el principio de
juridicidad y el de probidad administrativa, por lo que todo acto de un empleado público realizado
legitimamente, vale decir, dentro de su competencia y con apego estricto al ordenamiento juridico,
representa una actuación propia del Estado, con las potestades que le otorga el ejercicio· de la
soberania, tal como aparece especialmente de los articulas 5, inciso primero, y 7 de la Carta
Fundamental. Por ende, corresponde a aquél otorgarle la defensa que requiera para evitar que sufra
personalmente las consecuencias derivadas del ejercicio de la función pública, pues cuando se
ataca a un servidor público, que no ha hecho sino cumplir con su deber, lo que se está cuestionando
es el poder del Estado, frente a lo cual, éste tiene el legitimo derecho de defenderse y de hacer lo
mismo respecto de sus agentes.
En ningún caso este beneficio puede ser utilizado para amparar la impunidad por los abusos o
excesos que cometan esos funcionarios, ni para defender intereses particulares que puedan
confundirse con el interés público que conlleva esta norma en su esencia, lo cual importaría una
desviación de poder, una torcida interpretación de su verdadero sentido y alcance y el uso indebido
de recursos públicos.
Se trata, pues, de un instrumento de resguardo de la respetabilidad de la función pública con que está
revestido el legitimo actuar de los órganos estatales, para que así el ejercicio de la soberanía que
la Nación ha depositado en las autoridades que la Constitución Política y las leyes establecen, sea
verdaderamente eficaz, ya que, en último término, las instituciones públicas, son entes ficticios que
actúan a través de las personas naturales que las representan, esto es, los funcionarios investidos
de esas potestades acorde al ordenamiento jurídico imperante.
ARTICULO 90 A.- Los funcionarios que ejerzan las acciones a que se Ley 20.205, Art. 1, 2.
refiere la letra k) del artículo 61 tendrán Jos siguientes derechos:
Interpretación:
Las personas contratadas a honorarios no tienen los derechos establecidos en el articulo 90A de
la ley 18834, toda vez que aquéllos han sido previstos exclusivamente en favor de los funcionarios
públicos (59230/07, 2466/08).
Concordancias: Arts. 62, W 9, de la LOCBGAE; 61 letra k), 908 y 125, inciso segundo, letra d), del
EA; 58, letra k), 88A, 888 y 123, inciso segundo, letra e), del EAM; disposiciones agregadas por la
ley 20205, que protege al funcionario que denuncia irregularidades y faltas al principio de probidad;
175 C Procesal P.
Comentarios:
En el Mensaje del Presidente de la República que dio origen a la ley 20205 -que, en lo que aqui
interesa, modificó la letra k) del articulo 61, incorporó los nuevos articulas 90A y 908 y agregó una
nueva letra e) al inciso segundo del articulo 125, todos de la ley 18834, y agregó un número 9 al
articulo 62 de la ley 18575, Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración del
Estado-, se señala que nuestro actual ordenamiento establece la obligación de los funcionarios
públicos de denunciar los delitos de que tomen conocimiento. Asimismo, consulta la obligación de
comunicar a la autoridad competente, los hechos de carácter irregular de que tome conocimiento
(articulo 61, letra k), del DFL. 29, de 2004, del Ministerio de Hacienda; articulo 58, letra k), de la
ley 18883 y articulo 175, del Código Procesal Penal). Como es posible advertir, desde este punto
de vista, nuestro ordenamiento jurídico regula de manera pormenorizada el tema de la probidad
administrativa y su vinculación con la función pública.
Debe hacerse presente que, el articulo 11, Ws. 8 y 9, del Código Penal, considera como atenuantes
de responsabilidad penal las denuncias útiles formuladas por quienes hayan tenido participación
punible. Por su parte, el articulo 308 del Código Procesal Penal establece normas aplicables a la
protección de los testigos; y el articulo 109, letra a), del mismo Código, establece protección a la
víctima y a su familia.
Lo que hace falta -agrega el Mensaje- porque no hay regulación, es la protección al denunciante
de buena fe de irregularidades, dentro de la propia Administración. No hay un sistema que le de
suficiente garantía. Tampoco hay sanciones para el denunciante irresponsable, o que no respeta
los conductos regulares. Es en ese ámbito donde se concentra el presente proyecto de ley. Para
este efecto, se modifican el Estatuto Administrativo, que es norma supletoria respecto de todos los
estatutos especiales; el Estatuto Administrativo para Funcionarios Municipales, que es una norma
particular, y la Ley Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración del Estado.
Así, entonces, la idea matriz del proyecto ha sido la de proteger a los funcionarios de la Administración
del Estado que denuncian ante quien corresponda la comisión de actos que constituyen un delito o
una falta a la probidad de parte de un agente público, y, como contrapartida, establecer una sanción
drástica en contra de quienes efectúen denuncias irresponsables o de mala fe.
Lo anterior tiene su fundamento en que para resguardar y hacer efectivo el cumplimiento del principio
de la probidad administrativa, se requiere contar con medios eficaces para denunciar los hechos
irregulares de que se tenga conocimiento, sin temor a venganzas ni represalias por parte de los
afectados por tales denuncias.
ARTICULO 90 8.- La denuncia a que se refiere el artículo precedente Ley 20.205. Art. 1, 3.
deberá ser fundada y cumplir los siguientes requisitos:
Concordancias: Arts. 61, letra k), 90A y 125, inciso segundo, letra d), del EA, disposiciones
agregadas por el artículo 1 de la ley.20205, que protege al funcionario que denuncia irregularidades
y faltas al principio de probidad; Art. 175 C Procesal P. Ver Sentencia del Tribunal Constitucional,
Rol W 799-2007.
Comentarios:
En relación con este articulo 908, cabe remitirse a los comentarios expresados respecto de los
artículos 90A y 125.
ARTICULO 91.- El funcionario tendrá derecho a ocupar con su Ley 18.834, Art. 85.
familia, gratuitamente, la vivienda que exista en el lugar en que
funcione la institución, cuando la naturaleza de sus labores sea la
mantención o vigilancia permanente del recinto y esté obligado a
vivir en él.
Interpretación:
Inciso 1"
El funcionario tendrá derecho a ocupar con su familia, gratuitamente, la vivienda que exista en el
Jugar en que funcione la institución cuando por la naturaleza de sus labores se encuentre obligado
a vivir en ella, como por ejemplo, en el caso de labores de mantención o vigilancia del recinto. Ese
sería el caso de las funciones de mayordomo. Por Jo tanto, al desaparecer esta condición por el
traslado de la institución a otro Jugar, no le asiste ningún derecho compensatorio. Este beneficio
deberá regularizarse mediante acto formal y no conlleva gratuidad para Jos consumos básicos de
agua, luz, gas o teléfono, que deben ser solventados por quien Jos utiliza y aprovecha (1 0562190,
3012192, 20260197, 19197199).
El derecho a ocupar casa habitación consultado en el artículo 85 (actual articulo 91) del Estatuto
Administrativo requiere como supuesto previo que exista en el Servicio un inmueble destinado a ser
ocupado por Jos funcionarios, ocupación que según sea la naturaleza de las funciones prestadas por
el empleado, será gratuita o sujeta al pago de renta. Conforme al inciso primero de este artículo para
que el funcionario tenga derecho a ocupar gratuitamente el inmueble con su familia es indispensable
que su labor consista en la realización de funciones de mantención y vigilancia permanente del
recinto. En consecuencia, la limitación que señala su inciso tercero, que afecta al empleado que es
propietario él o su cónyuge de una vivienda en la localidad en que presta sus servicios, no alcanza
al personal referido en el inciso primero, pues de aplicársele resultaría imposible cumplir el deber de
vivir en el recinto cuya mantención o vigilancia le compete efectuar (15706190).
Auxiliar de Servicio de Salud no tiene derecho a percibir, además de las remuneraciones de ese cargo,
emolumentos por la labor de cuidadora de jardín infantil del mismo organismo que, en su opinión,
cumple al vivir en dicho recinto. Ello, porque pese a que la interesada no se encontraba en ninguna
de las dos situaciones previstas en el artículo 85 (actual artículo 91) de la ley 18834, que otorga a Jos
funcionarios un eventual derecho a ocupar vivienda fiscal, se le permitió, atendida su difícil situación
económica, vivir en ese Jugar sin pagar renta ni consumos básicos, pero en ningún momento se le
asignaron tareas como cuidadora del mismo. Sin desmedro de lo anterior, el señalado Servicio de
Salud ha de ceñirse, a futuro, al ya citado artículo al asignar inmuebles fiscales (44943/03).
No procede restituir a funcionario suma alguna de aquellas que le fueron descontadas de su sueldo
por el uso de vivienda fiscal en el período comprendido entre el 1 enero de 1991 y el 30 de junio de
2005, fecha de su cese de funciones. Ello, por cuanto de los antecedentes aparece que mientras
existió el motivo que permitió ocupar gratuitamente el referido inmueble conforme al artículo 91
de la ley 18834, esto es, como cuidador de taller y bodega de la Dirección de Arquitectura, siendo
responsable de la mantención y vigilancia de los bienes fiscales que permanecían en dicho recinto,
no se le efectuó descuento alguno, y sólo se le exigió el diez por ciento que dispone la misma norma
desde el momento que dejó la función de cuidador desde el citado 1 de enero de 1991 (20123/06).
Prohibición del artículo 9 de la ley 19702, de Presupuesto de 2001, no afecta a los arriendos de
inmuebles destinados a centros de apoyo a la seguridad de los establecimientos penitenciarios de
Gendarmería, un sector de los cuales ha de utilizarse como casa habitación del empleado responsable
de asegurar su operatividad en función de la finalidad principal. Ello, porque el citado precepto,
prohibe a los organismos y servicios públicos, entre otros actos, arrendar edificios para destinarlos
exclusivamente a casa habitación de su personal. Así, la prohibición de que se trata requiere que
el arrendamiento tenga por objeto específico y determinado la destinación exclusiva del bien raíz
a casa habitación. de los funcionarios, no resultando procedente extender la misma a casos no
contemplados expresamente en aquélla, como seria la situación en análisis. En el caso en estudio
ha de tenerse presente que acorde con el artículo 85 (actual artículo 91) inciso primero, de la ley
18834, al servidor le asiste el derecho a ocupar con su familia, gratuitamente, la vivienda que existe
en el lugar en que funciona la institución, cuando la naturaleza de sus labores sea la mantención o
vigilancia permanente del recinto y esté obligado a vivir en él (7052/01).
Inciso 2•
Un funcionario debe hacer dejación de la casa que ocupa cuando ésta pasa a ser de propiedad de
otro Servicio (65909/75).
El criterio que emplea el artículo 85 (actual articulo 91 ), inciso segundo, para otorgar el derecho a
habitar una casa destinada al Servicio, es la "jerarquía funcionaria", que es el elemento que fija el
orden sucesivo y excluyente en que concurrirán las peticiones formuladas para obtener el beneficio
(24229/90).
Para el otorgamiento del derecho a ocupar casa habitación debe observarse la jerarquía del
empleado, de modo que una vez asignado el bien raíz, el derecho a seguir ocupándolo no puede
verse alterado en razón de este vínculo jurídico, pues la ley establece expresamente que este
elemento no permite dejar sin efecto la asignación dispuesta. Para gozar de este derecho, carece de
·relevancia la composición del grupo familiar de cada funcionario, ya que este inciso sólo contempla
el factor de jerarquía en el empleo para resolver el uso de las viviendas (27331/91).
Si bien el derecho a ocupar una vivienda, de acuerdo con el artículo 85 (actual artículo 91 ), inciso
segundo, debe ejercerse de manera excluyente por los empleados que residan en la localidad
Para que un empleado tenga derecho a ocupar casa fiscal, debe trabajar en la localidad en que
ésta exista. Este derecho podrá ser exigido, sucesiva y excluyentemente, por los funcionarios que
residan en la localidad, entendiendo como tal, aquélla donde desempeña su labor habitual, por
lo que para poder ocupar una casa habitación destinada al Servicio mediante el pago de la renta
correspondiente, es exigencia especial que el empleado resida y preste sus servicios en la localidad
respectiva (27328/91 ).
Los inmuebles del Estado destinados a casa habitación de funcionarios públicos no pueden utilizarse
en actividades de propaganda politica, porque sus bienes sólo pueden usarse para el logro de los
fines que la ley encomienda a los servicios públicos, debiendo, en este caso, servir exclusivamente
de vivienda a los empleados (32259/93, 40803/01 ).
La renta equivalente al 10% del sueldo asignado al cargo del funcionario que deba pagar como
contraprestación por la ocupación de una vivienda que le ha sido asignada por el Servicio, tiene el
carácter de única obligación exigible. Por tal motivo, es improcedente que el funcionario ocupante
de un inmueble de esta naturaleza, además, pague una prima de seguro de la vivienda en favor
del Servicio, toda vez que la obligación de pago de dichas primas debe ser de cargo del Servicio
contratante del seguro (42981/80).
Las rentas de arrendamiento de las viviendas o casas habitación proporcionadas por los Servicios a
sus empleados, constituyen ingresos propios de esos organismos, de acuerdo con el articulo 14 del
DL 3001, de 1979 (10533/86).
El uso de un inmueble fiscal por parte de un servicio público descentralizado con patrimonio distinto
del Fisco, debe formalizarse mediante el otorgamiento de la concesión pertinente, conforme al
articulo 57 del DL 1939, de 1977, para poder asignarlo a un funcionario con el propósito que lo
ocupe como vivienda, si éste cumple las exigencias que para ese fin dispone este articulo 85 (actual
articulo 91) (13357/92).
La cesión de un inmueble destinado a la habitación hace surgir entre el empleado y el Estado una
relación jurídica patrimonial relativa al bien de que se trata, cuya fuente directa es la propia ley. De
este modo, dicho vínculo no ha podido verse modificado o extinguido por el poder de revocación de
los actos administrativos que por regla general asiste a los órganos del Estado que los han emitido,
por cuanto el Estatuto Administrativo ·al establecer ese derecho no ha contemplado dicha forma
de extinción del acto de cesión, no existiendo tampoco norma legal alguna que faculte resolver la
extinción de ese beneficio (29223/92).
No corresponde que una institución fije plazos a sus funcionarios para la ocupación de viviendas
fiscales atendida su posible venta, porque este artículo 85 (actual artículo 91 ), sólo exige que en el
Servicio exista un inmueble para ser usado por alguno de sus empleados, que en su otorgamiento se
observe la jerarquía y que el beneficiado o su cónyuge no sean propietarios de una casa habitación
en la localidad de que se trate, no pudiendo el empleador imponer otras obligaciones o modalidades
(20547/90, 19550/94).
Según el DL 3001, de 1979, las reparaciones de las viviendas o casa habitaciones facilitadas por el
Estado a sus empleados, aun cuando se proporcionen a título gratuito, son de cargo del ocupante
en los mismos términos en que el Código Civil y el ordenamiento jurídico lo establecen para el
arrendatario. Por lo tanto, los arrendatarios deben sufragar las reparaciones locativas, esto es, las
que conforme a la costumbre del país son de cargo de aquéllos y, en general, las de esas especies
de deterioros que ordinariamente se producen por culpa de los arrendatarios o sus dependientes y
que respecto de las casas se reducen a mantener el edificio en el estado en que se recibió, salvo
que se trate de desperfectos provenientes del tiempo y del uso legítimo o de circunstancias que
no les sean imputables. Por su parte, los arrendadores están obligados a realizar a su costa las
reparaciones no locativas, vale decir, las indispensables para mantener la cosa arrendada en estado
de servir, a menos que el arrendatario las haya hecho necesarias por su culpa. La instalación de
un elemento de seguridad para los moradores, como es un portero eléctrico, constituye una mejora
útil que no posee el carácter de locativa o no locativa, sin la cual la vivienda continúa en estado de
servir, no origina para el Servicio una obligación pecuniaria y el arrendatario puede llevársela si
resulta posible separarla sin menoscabo del inmueble, debiendo solventar los gastos que origine su
instalación (6223/92, 37674/95).
El derecho a gozar del beneficio de ocupar casa habitación subsiste mientras se mantengan las
condiciones que dieron lugar a su otorgamiento y únicamente cesa si el servidor es destinado a
otra localidad o se desvincula del respectivo organismo, sin perjuicio que el funcionario siga
desempeñándose en la Administración, él o su cónyuge sean propietarios de una vivienda en el lugar
en que el primero trabaja, o bien, que la repartición no cuente con los recursos presupuestarios para
solventar los gastos de arrendamiento de un inmueble para que ocupen sus funcionarios, debiendo
en este caso ser una decisión debidamente ponderada y suficientemente fundada (42411/94,
44652/00).
Los funcionarios a contrata pueden ocupar un inmueble fiscal destinado a la institución correspondiente,
en la medida que tal beneficio haya operado en relación con un bien raíz desocupado y respecto
del cual no hayan funcionarios de planta reclamando el derecho a habitarlo. La ley reconoce
en esta materia una preferencia en favor de los funcionarios de planta cuando éstos concurren
simultáneamente con los contratados a solicitar que se les asigne el uso de determinado inmueble
(42042/96).
El derecho a ocupar vivienda destinada a la habitación emana del hecho de poseer el empleado la
calidad de funcionario público, cuya condición se mantiene durante el período en que hace uso de
un permiso sin goce de remuneraciones, por lo que sus titulares tienen derecho a continuar gozando
de ese beneficio (1998/87, 21415/92).
Un funcionario que optó por continuar en un cargo del mismo grado en extinción, adscrito al Servicio,
tiene derecho a seguir ocupando la casa habitación destinada a la institución en la cual vive, porque
a ese funcionario no lo afecta ninguna de las tres causales por las cuales cesa ese beneficio, esto
es, no se ha desvinculado del organismo, no ha sido destinado a otra localidad y ni el ni su cónyuge
son propietarios de una vivienda en la localidad en que aquél cumple sus funciones (31627/92,
23827/93).
El cese de funciones es causal de término del beneficio de uso de casa fiscal establecido en el
artículo 85 (actual artículo 91) de la ley 18834, aun cuando los funcionarios hayan sido recontratados
por la institución que les otorgó dicho beneficio en el período que ellos aún no hacían devolución de
las respectivas casas habitaciones (42411/94, 9830/03).
Una institución no puede asignar una vivienda de su propiedad que se encuentra desocupada a una
persona contratada a honorarios, porque éstos no tienen la calidad de funcionarios públicos, que
es la que habilita para ocupar la casa habitación destinada al Servicio respectivo, salvo que este
beneficio se haya pactado en el correspondiente convenio (26861/90).
Las viviendas fiscales mantenidas por una Contraloría Regional, estan afectas al pago por derecho
de aseo domiciliario, de acuerdo con la ley 19388, siendo responsable directo de ello el funcionario
a quien se asigne el respectivo inmueble (29070/96).
Funcionario de la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas tiene derecho a ocupar, pagando una
renta igual al diez por ciento de su sueldo, el inmueble fiscal entregado en concesión de uso a
título oneroso por el Ministerio de Bienes Nacionales a dicho organismo empleador, con el fin de
destinarlo a su personal en calidad de arriendo, mientras esa concesión se mantenga vigente. Ello,
porque acorde al artículo 85 (actual artículo 91) inciso segundo, de la ley 18834, sólo puede cobrarse
una renta equivalente a ese porcentaje al empleado que, pese a no encontrarse obligado por sus
funciones a ocupar la casa habitación destinada al servicio, se le cede ésta para que viva con su
familia. Así, no procede que se le haga pagar más o, como ocurre en el caso en análisis, la totalidad
de la renta que JUNAEB se obligó a pagar por el uso de ese bien raíz, luego de desahuciar, por
motivos estrictamente presupuestarios el contrato de arrendamiento con el ocurrente. Por otra parte,
el derecho a gozar de la franquicia en comento subsiste mientras se mantengan las condiciones que
dieron lugar a su otorgamiento y únicamente cesa si el servidor es destinado a otra localidad, se
desvincula del respectivo organismo o él o su cónyuge son propietarios de una vivienda en el lugar
en que el primero trabaja (22659/98).
El articulo 8 de la ley 20083, de Presupuestos del Sector Público para el 2006, al igual como lo
estableciera la ley 19986 por el año anterior, prohibe a los órganos y servicios públicos arrendar edificios
para destinarlos a casas habitación de su personal, no rigiendo tal prohibición, excepcionalmente,
respecto de los programas sobre esta materia incorporados en los presupuestos, entre otros, del
Ministerio de Defensa Nacional, al que pertenece la Dirección General de Aeronáutica Civil. Por otra
parte, existe la posibilidad que la autoridad pueda reconocer a varios funcionarios el uso simultáneo
de una misma casa habitación destinada al servicio (10590/06).
Prohibición que pesa sobre los órganos y servicios públicos para arrendar edificios para destinarlos
exclusivamente a casa habitación de su personal, contemplado en las leyes de Presupuesto, no se
aplica a los municipios, primando el carácter autónomo de éstos, los que quedan sujetos al DL 1263,
de 1975 y a la ley 18695 (3684/03).
No procede exigir a funcionario el pago de renta por la vivienda fiscal de que hacia uso, fundado
en la circunstancia de crecimiento demográfico de la localidad, toda vez que sólo son causales de
cese del uso de casa fiscal aquellas expresamente señaladas en el articulo 91 del citado estatuto
administrativo, esto es, la destinación del servidor a otra localidad, su desvinculación con el servicio
pertinente y la circunstancia que el interesado o su cónyuge sean propietarios de una vivienda en la
localidad en que aquél presta sus servicios (22782/05).
Funcionario Administrativo grado 15, tiene derecho a la vivienda fiscal que solicitó y no se le asignó,
por habérsela asignado a otro funcionario, Administrativo grado 21, porque la ley 18834, en su articulo
91, determina las condiciones requeridas para ocupar la vivienda fiscal existente en el lugar en que
funciona la institución, y señala que este derecho podrá ser exigido, sucesiva y excluyentemente,
por los servidores que residan en la localidad respectiva, según su orden de jerarquía funcionaria,
cuyo nivel se determina por el grado o nivel remuneratorio que tiene asignado todo cargo público.
Así, procede dejar sin efecto la asignación de hecho que benefició al funcionario de menor jerarquía,
en desmedro del recurrente (46839/06).
Inciso 3•
La limitación para ocupar casa fiscal que afecta al empleado que es propietario él o su cónyuge de
una vivienda en la localidad donde presta sus servicios, no alcanza al personal cuyas labores son
las de mantención o vigilancia permanente del recinto y por lo cual se encuentra obligado a ocupar
la vivienda que existe en el lugar en que funciona la institución. Esta limitación sólo ha podido ser
establecida con el objeto que la franquicia favorezca a los dependientes que carecen de vivienda en
el lugar en que desempeñan sus funciones, pero teniendo en cuenta, al mismo tiempo, que el bien
raíz de que sean propietarios ellos o sus cónyuges, se encuentre efectivamente en condiciones de
ser usado como casa habitación. La regla estatutaria no formula exigencias en cuanto al uso que
verdaderamente se dé al bien raíz, sino que atiende a la naturaleza del mismo, esto es, que sirva
para vivienda, de modo que no procede alegar, para obviar la limitación, la aplicación del inmueble
a fines distintos de la habitación. "Casa", de acuerdo con el Diccionario de la Lengua de la Real
Academia Española, es definida como el "edificio para habitar" o el "piso o parte de una casa en
que vive un individuo o una familia", y la palabra "vivienda", como "morada" o "habitación", de modo
que, el inciso final del articulo 85 (actual articulo 91) de la ley 18834, al limitar el derecho a arriendo
de una casa del Servicio, lo hace en relación a quienes sean propietarios de un inmueble que sirva
efectivamente para ser habitado (15706/90, 24229/90, 29695/90).
Para que un funcionario sea privado del derecho a vivienda fiscal es necesario que él o su cónyuge
sean dueños de una "vivienda" en la localidad, es decir, de un inmueble que, atendida su naturaleza
o aptitud, sirva como casa habitación a sus propietarios y su núcleo familiar (29695/90, 13393/93).
El derecho a disfrutar del beneficio de casa fiscal no se ve afectado, en el caso que el funcionario
a titulo personal o, en su defecto, su cónyuge, adquiera en la respectiva localidad un bien raíz
cuyo destino, según conste en la documentación pertinente, no sea habitacional, sino comercial
(44083/04).
El inciso tercero del articulo 85 (actual articulo 91) priva de la franquicia a los funcionarios que son
propietarios, ellos o sus cónyuges de una casa habitación en la localidad en que prestan servicios,
pero no señala qué se entiende por localidad, por lo cual se deben considerar otros cuerpos
normativos como en su oportunidad lo establecían los decretos 393, de 1977, 1192, de 1990 y 843,
de 1991, todos del Ministerio de Hacienda, al igual que lo hace la reglamentación actualmente
vigente, contenida en el decreto 115, de 1992, de ese mismo Ministerio, que define qué es lo que
constituye una misma localidad en la regiones que indica para los efectos del pago de viáticos,
fundándose en la circunstancia de que por la cercanía y facilidades de traslado que existe entre las
diversas comunas, la movilización entre ellas puede realizarse en forma normal y fluida sin incurrir
en gastos extraordinarios de traslado, alojamiento o alimentación. Lo anterior obliga a concluir, que
las comunas allí mencionadas no pueden estimarse localidades distintas para los fines estatutarios
como el que se señala (3937/91, 3992/96 -reconsiderado parcialmente por el12779/96 y aclarado
por el 44083/04-).
Una funcionaria tiene derecho a continuar disfrutando del beneficio de casa fiscal consultado en
este articulo, aunque su cónyuge sea propietario en comunidad de una vivienda en la localidad en
que presta sus servicios. Ello, porque si bien la referida norma establece que no corresponde el
derecho a habitar en una casa fiscal cuando el funcionario o su cónyuge sean propietarios de una
vivienda en la localidad donde laboran, tal limitación sólo ha podido ser establecida con el objeto
de que la franquicia analizada favorezca a los dependientes que carecen de vivienda en el lugar en
que desempeñan sus labores, pero teniendo en cuenta, al mismo tiempo, que el bien raíz de que
sean propietarios ellos o sus cónyuges, se encuentre efectivamente en condiciones de ser usado
como casa habitación, y en este caso, del informe sanitario del Servicio de Salud, aparece que la
propiedad respecto de la cual el marido de la interesada es dueño de derechos, carece actualmente
de las condiciones necesarias para servir de vivienda (13393/93).
Los Intendentes y Gobernadores tienen derecho a que se les arriende una casa habitación con cargo
al Fisco, aun cuando ellos o sus cónyuges sean propietarios de una vivienda en la localidad en que
ejercen sus funciones, porque según el artículo 90 del DFL 22, de 1959, del Ministerio del Interior,
precepto que atendida su especialidad prevalece sobre el artículo 85 (actual artículo 91) del Estatuto
Administrativo, resulta obligatorio entregar viviendas a esas autoridades, sean de propiedad del
Fisco o arrendadas por éste, no conteniendo ninguna prohibición que impida gozar de este derecho
a dichos funcionarios públicos (24101/95, 15577/01).
Concordancias: Leyes de Presupuestos del Sector Público; Arts. 26, letra f) y 90 del DFL 22, de
1959, del Ministerio del Interior, que fija el texto de la Ley Orgánica del Servicio de Gobierno Interior
de la República; 57 del DL 1939, de 1977, que establece normas sobre Adquisición, Administración
y Disposiciones de Bienes del Estado; 8" transitorio del EA; 89 del EAM; decreto 115, de 1992, del
Ministerio de Hacienda, que define qué es lo que constituye "una misma localidad" para los efectos
del pago de viáticos.
Comentarios:
A contar de la Ley de Presupuestos del Sector Público del año 2000 (ley 19651, artículo 9) incluida la
Ley de Presupuestos para el año 2008 (ley 20232, artículo 8), se ha prohibido de manera expresa
a los organismos y Servicios Públicos, arrendar -además de adquirir y construir- edificios para
destinarlos exclusivamente a casa habitación de su personal, prohibición que no rige respecto de los
programas sobre esta materia incorporados en los presupuestos del Poder Judicial, del Ministerio
de Defensa Nacional y en los de inversión regional de los Gobiernos Regionales en lo que respecta
a viviendas para personal de educación y de salud en las zonas apartadas y localidades rurales. En
las anteriores Leyes de Presupuesto, la prohibición se refería sólo a "la adquisición o construcción"
de tales edificios, pero no impedía el arrendamiento de viviendas para esos fines. El propósito de
esas normas presupuestarias ha sido evitar que los organismos públicos destinen los recursos de
su presupuesto a solventar los gastos derivados del cumplimiento de tales contratos, sin perjuicio de
las situaciones de excepción que indican. Cabe señalar que lo expresado en los dictámenes 7052
y 38291, ambos de 2001, y 10590, de 2006, que se citan a raíz de la interpretación de los incisos
primero y segundo del artículo 91, respecto a la prohibición de organismos y servicios públicos
para adquirir, construir o arrendar edificios para destinarlos exclusivamente a casa habitación de
su personal, con las excepciones que se indican, es igualmente aplicable a las actuales Leyes de
Presupuestos para el Sector Público.
ARTICULO 92.- Los funcionarios tendrán derecho a solicitar la permuta Ley 18.834, Art. 86.
de sus cargos, siempre que no sean de exclusiva confianza. La permuta
consistirá en el cambio voluntario de sus respectivos cargos entre dos
funcionarios titulares de igual grado de la respectiva planta, siempre
que posean los requisitos legales y reglamentarios para ocupar los
respectivos empleos, y la aceptación de las autoridades facultadas
para hacer los nombramientos.
Interpretación:
La permuta, por su naturaleza, es una forma de provisión de un cargo de planta en calidad de titular.
Quien permuta, adquiere los derechos y está afecto a las obligaciones que son propios del empleo
que por esta vía pasa a desempeñar, correspondiéndole percibir las remuneraciones asignadas al
nuevo cargo, según lo que disponga la legislación vigente, con prescindencia de las que perciba en
el empleo de origen (3462161, 16762161, 57050162, 5834164, 19157170).
La permuta es una forma de nombramiento que se rige por el articulo 139 del DFL 338, de 1960
(actual articulo 16 de la ley 18834), de modo que tal designación sólo producirá efectos a contar de la
fecha de total tramitación del decreto o resolución respectiva, por lo que los funcionarios permutantes
deberán asumir sus funciones en la época en que les sea notificado el hecho de haberse tomado
razón de ese acto administrativo. Sin embargo, si el nombramiento dispone la asunción inmediata de
funciones, fundándose en razones impostergables de buen servicio, los permutantes deberán hacerse
cargo de sus nuevas funciones desde la fecha en que se les notifica la circunstancia de haberse
expedido el decreto o la resolución, sin perjuicio del trámite de toma de razón que ese documento
deberá cumplir con posterioridad ante la Contraloria General. Ahora bien, no es procedente que en
esta forma de designación la autoridad administrativa, ordene que la asunción inmediata se lleve
a efecto en una época posterior, puesto que de esa manera se estaría desvirtuando la naturaleza
misma de esta modalidad excepcional de nombramiento y la finalidad con que el legislador la
estableció. En consecuencia, el acto que dispone una permuta puede ordenar que los empleados
asuman func·lones en una fecha especifica, siempre que ésta sea posterior a la total tramitación del
decreto o resolución (40476172).
Sólo pueden permutarse los cargos de planta, por los titulares de esos empleos, y siempre que
ambos cargos se hallen regidos por el Estatuto Administrativo (29945171).
Para que proceda la permuta, los interesados deben poseer los requisitos legales, entre ellos, los de
estudio, para ocupar los respectivos empleos y ser titulares de cargos de igual grado y de la misma
planta (28588191 ).
La permuta es por esencia un acto administrativo que no importa cese de funciones y que sólo habilita
para adquirir derechos y obligaciones del empleo que pasa a desempeñar desde la fecha de toma de
razón de la resolución que la ordenó (80993176 -reconsiderado parcialmente por 14863177-).
La permuta de empleo no constituye un acto jurídico que se perfeccione por el sólo consentimiento de
los funcionarios interesados, sino que es un acto formal que requiere la aceptación de las autoridades
facultadas para hacer los nombramientos, además del acuerdo de voluntades de aquéllos. En estas
Devuelve resolución de un Servicio de Salud que acepta una permuta, por cuanto siendo esta
institución una forma de provisión de un empleo, no procede que el o los permutantes le den el
carácter de condicional, ya que la peticionaria viene dejando constancia en su solicitud que se trata
de·una permuta temporal por dos años, por los motivos que señala (17433/85).
Comentarios:
Según el criterio sustentado por la Contraloría General de la República, la permuta es por su
naturaleza una forma de provisión de empleos de la planta de un Servicio en calidad de titular,
siempre que no sean de exclusiva confianza, adquiriendo el funcionario que ha accedido a ella los
derechos y obligaciones del cargo que por esta vía pasa a desempeñar.
Como la permuta es una forma de nombramiento, de acuerdo con el artículo 16 del Estatuto
Administrativo, dicha designación sólo producirá efectos a contar de la fecha de tramitación del
respectivo decreto o resolución que la materializa, y los funcionarios permutantes deberán asumir
sus funciones en la época en que les sea notificado el hecho de encontrarse totalmente tramitados
esos actos administrativos, salvo que se disponga con asunción inmediata de funciones, al igual que
el nombramiento.
Con todo, es fundamental tener en consideración que, para que la permuta pueda llevarse a efecto,
se requiere la aceptación expresa de las autoridades facultadas para hacer los nombramientos, lo
que lo hace un acto complejo, al requerir la concurrencia de las voluntades de cuatro funcionarios, y
de características discrecionales. Como ello supone que el acto respectivo no sea arbitrario, deberá
ser motivado, señalándose en éste las circunstancias y el raciocinio que justifica la adopción de dicha
medida. Ello, porque el principio de juridicidad, en un concepto amplio y moderno, conlleva la exigencia
de que los actos administrativos tengan una motivación y un fundamento racional y no obedezcan
a un mero capricho de la autoridad, pues en tal caso, resultarían arbitrarios y por ende, ilegítimos.
Además, la dictación de los actos que corresponden al ejercicio de potestades discrecionales, exigen
un especial y cuidadoso cumplimiento de la necesidad jurídica en que se encuentra la Administración
en orden a motivar sus actos, exigencia que tiene por objeto asegurar que éstos no se desvíen
del fin considerado por la normativa que confiere las respectivas atribuciones, que cuenten con
un fundamento racional y se encuentren plenamente ajustados a los preceptos constitucionales y
legales vigentes, lo cual impide, por cierto, establecer diferencias arbitrarias entre personas que se
encuentran en una misma situación, cautelándose de este modo el principio de igualdad ante la ley
consagrado en el articulo 19, N• 2, de la Constitución Política de la República.
Párrafo 2°
De las remuneraciones y asignaciones
ARTICULO 93.- Los funcionarios tendrán derecho a percibir por Ley 18.834, Art. 88
sus servicios las remuneraciones y demás asignaciones adicio-
nales que establezca la ley, en forma regular y completa.
Interpretación:
El sistema de remuneraciones del sector público está concebido sobre bases diferentes de las que
rigen para el sector privado. En el primero de ellos. las respectivas asignaciones o estipendios son
beneficios especificas, fijados y regulados por el legislador en forma previa a la incorporación de un
funcionario al sistema público, el que, por lo demás, está estructurado y ordenado en escalafones
y grados. En el sector privado estas características no existen, ya que las remuneraciones se
determinan en consideración a la naturaleza de los servicios realizados, en la medida que constituyen
la contraprestación de los mismos, lo que permite a las partes acordar el pago de las asignaciones
que estimen conveniente (8415/83).
Para pagar un determinado estipendio en el sector público se requiere una ley vigente que lo instituya
y autorice su pago, los servidores tienen derecho a impetrar únicamente las franquicias que les
conceden los textos legales y por los periodos que éstos contemplen (33891/98).
De acuerdo con el articulo 3, letras a), d) y e) del Estatuto Administrativo, las remuneraciones de
los empleados públicos deben ser fijadas en relación con los cargos que éstos ocupan, los cuales
deben encontrarse establecidos en la respectiva planta de personal, guardando relación con el orden
jerárquico asignado a esos empleos (25389/95).
Las escalas de sueldos fijadas por ley, contemplan el sueldo base y las asignaciones especiales, tales
como las de antigüedad, profesional, de fiscalización, municipal, de zona, por trabajos nocturnos y
en días festivos, viáticos, etc. Para reajustar estas rentas se requiere de ley, la que normalmente
se dicta en el mes de diciembre de cada año. Este reajuste se basa, generalmente, en la variación
experimentada durante el año por el índice de precios al consumidor (20132/92).
Tratándose de obligaciones en dinero cuyo título directo es la ley, su pago debe atenerse a lo que
ésta disponga, de modo que si en ella no se consultan normas expresas sobre su actualización o el
pago de intereses, corresponde pagarlas en sus valores originarios, lo que se aplica tanto respecto de
las obligaciones de los particulares para con las entidades estatales, como de éstas en relación con
aquéllos. Las sumas adeudadas a un funcionario público por concepto de remuneraciones deben
pagarse al valor fijado a la fecha en que hubo de materializarse su pago, por cuanto las obligaciones
cuya fuente directa es la ley sólo pueden reajustarse y generar intereses si una disposición legal así
lo establece expresamente (40085/98, 9603/99, 24467/03).
El principio del enriquecimiento sin causa impide a la Administración del Estado beneficiarse de
la labor desarrollada por un funcionario o persona sin que medie la correspondiente retribución
pecuniaria (17846/96).
El funcionario de hecho, cualquiera sea la forma en que se adquiere esa calidad, debe percibir
retribución por su labor, pues el desempeño de una función pública tiene legalmente consultado
el pago de una remuneración, que es la contraprestación a que tiene derecho quien ejerce dichas
funciones, en virtud del principio retributivo, el que de vulnerarse originaría un enriquecimiento sin
El pago de las remuneraciones a que tienen derecho los funcionarios de hecho debe efectuarse
con cargo al ítem "imprevistos" del presupuesto de cada Servicio (30838/92, 7935/93, 15127/03,
52731/03).
Procede pagar las remuneraciones a un ex funcionario que, habiendo cesado en su cargo, continuó
prestando servicios con conocimiento de la autoridad respectiva y sin que se le objetara su desempeño,
con provecho para la Administración, pasando a tener, por lo tanto, la calidad de funcionario de
hecho. Tales labores, en consecuencia, no pueden considerarse como una prolongación indebida de
funciones, a las cuales, pese a su precariedad, debe aplicárseles el principio retributivo que caracteriza
el desempeño de cualquier función pública, cuya vulneración significaría un enriquecimiento sin causa
para la Administración. De ello se desprende que las funciones de hecho deben ser remuneradas
y que todo gasto que se origine en el desempeño de la función pública debe ser indemnizado
(18672/91, 22805/93,30697/94, 16029/96, 14896/97, 36618/97, 1929/99).
Corresponde que un ex funcionario de una institución perciba sus remuneraciones por el período en el
cual ha debido también percibir pensión de vejez, por cuanto continuó desempeñando efectivamente
sus labores, sin saber la fecha en que le correspondía cesar en funciones. De este modo, no procede
exigirle el reintegro de dichos estipendios, pues entonces se produciría un enriquecimiento sin una
causa justa para la Administración (9826/91, 5865/92, 1075/93, 29975/94, 5247/95).
El hecho de no dictarse el acto administrativo que formalice una designación, debido a que el
interesado no cumple con alguno de los requisitos exigidos para el desempeño de la función pública,
no constituye fundamento suficiente para que el organismo público se excepcione de pagar los
estipendios que correspondan al lapso en que efectivamente se prestaron servicios, más aún si se
considera que el interesado entró a ocupar un empleo por expresa determinación de la autoridad
administrativa, la que dispuso que el afectado asumiera de inmediato funciones antes de dictarse el
pertinente acto administrativo (30838/92, 7935/93).
Es improcedente disponer una comisión de servicio sin goce de remuneraciones, ya que durante
el desempeño de ésta, el funcionario conserva sus derechos en materia remuneracional (5313/91).
Una vez devengadas las remuneraciones, no puede el Servicio ofrecer una transacción a sus
funcionarios para pagarles sólo una parte de ellas, pues la Administración está obligada a pagar
lo que corresponde según lo prescrito por la ley. De la misma manera, no es admisible que la
Administración invoque dificultades destinadas a desconocer los requisitos que hacen procedente
un estipendio o argumente la falta de recursos como excusa para dejar de pagar una remuneración
(20287/96, 10843/99).
Los fondos públicos destinados al pago de remuneraciones de los funcionarios mantienen la condición
de tales hasta el instante en que son percibidos por sus beneficiarios (81139/60).
No existe impedimento legal para que una institución encomiende a una determinada entidad
bancaria, mediante la celebración de un convenio, pagar las remuneraciones de su personal, para lo
cual pondría a disposición de ésta los fondos correspondientes, sea girando un cheque o tomando a
su favor un vale vista, fondos que a su turno, la entidad contratante ingresaría a las cuentas corrientes
o a la vista que cada funcionario interesado abriría también en ella, debiendo la autoridad adoptar
los resguardos que aseguren la correcta utilización de los fondos puestos a disposición de la entidad
financiera prestadora del servicio. Este mecanismo de pago debe convenirse en relación con los
empleados que accedan voluntariamente al mismo, de manera que quienes no quieran acogerse a
él continuarán percibiendo sus emolumentos mediante el cheque pertinente, predicamento aplicable
también en el caso de aquéllos que deseen retirarse (27090/94, 37801/94, 18289/96, 25712/96,
37441/96, 43853/99, 4458/02, 28978/02).
Es procedente externalizar el pago de remuneraciones del personal a través de una entidad bancaria
distinta del Banco del Estado, en la medida que, previamente, acorde al artículo 24, inciso primero,
del DL 3001, de 1979, se le exima de mantener sus recursos en la cuenta única fiscal, porque no
existe inconveniente jurídico alguno para que los organismos del sector público encomienden a
una institución bancaria el pago de remuneraciones de sus funcionarios, mediante un convenio en
virtud del cual se pongan a disposición de la última los respectivos fondos, que ésta, a su vez, ha de
ingresar a las cuentas corrientes, a la vista o de ahorro que cada servidor abra allí. Esto no significa
alterar el régimen legal que regula el manejo de los recursos públicos, pues los fondos destinados
al pago de remuneraciones se giran, precisamente, de la cuenta corriente del respectivo servicio,
y la entidad bancaria contratante se limita solamente a realizar el pago de tales emolumentos en la
forma señalada. Lo anterior no significa en caso alguno que los correspondientes haberes pierdan su
carácter de públicos, de modo que los mismos continúan afectos a la regla del artículo 54 de la ley
10336, según la cual compete a Contraloría General autorizar la apertura de las cuentas corrientes
bancarias que manejan los funcionarios públicos, norma que, atendido su carácter general, tiene que
aplicarse sea que los recursos estatales se encuentren depositados en la cuenta única fiscal o en
cuentas abiertas en bancos comerciales (39391/04).
Un Servicio puede celebrar con el Banco del Estado un convenio para que este último se encargue
de enterar a los funcionarios del primero, el monto de los viáticos que les correspondan y a las
instituciones proveedoras de servicios de jardines infantiles, salas cunas u otros, el valor de ellos,
mediante el traspaso de los recursos pertinentes a las cuentas corrientes o a la vista que mantengan,
respectivamente, ese personal y las aludidas entidades. Con todo, el sistema de pago en comento
ha de operar sólo respecto de los empleados que manifiesten su voluntad de aceptarlo, debiendo
precisarse en el convenio correspondiente las prestaciones especificas que se encomiendan a
la institución financiera y adoptarse los resguardos necesarios tendientes a asegurar de parte de
esta última la correcta utilización de los fondos puestos a su disposición para los fines reseñados
(33184/02).
determinar las condiciones en que procede, hay que atenerse a lo establecido en esa ley (21552/93,
19868/01, 7596/02).
La planilla suplementaria , en general, tiene como propósito mantener el nivel de las remuneraciones
de los funcionarios que pudieran verse afectados por traspasos u otras modificaciones, esto es,
constituye un resguardo frente a toda merma remuneratoria derivada de tales medidas sin que pueda,
en el futuro, conducir a un aumento de ellas, lo cual se produciría en el evento que, de benef·iciarse
el afectado con un posterior incremento de asignaciones o remuneraciones, pudiera asimismo
conservar la aludida planilla. Por lo tanto, debe entenderse que, aun cuando la ley respectiva no lo
consagre expresamente, ésta es absorbible por los aumentos de rentas que se experimenten en el
futuro, atendida la naturaleza estrictamente protectiva del mencionado instrumento (8633/08).
Las remuneraciones imponibles están constituidas por aquellos estipendios que por expreso mandato
legal se hallan afectos a cotizaciones previsionales de acuerdo con el régimen remuneratorio a que
se encuentre sujeto el funcionario público. Las cotizaciones previsionales son, según el articulo 1
del DL 3501, de 1980, de cargo de los trabajadores, recayendo sobre el empleador sólo la obligación
de deducirlas y enterarlas en la institución previsional respectiva (14600/92).
La normativa general sobre imponibilidad de las rentas de los funcionarios públicos y específicamente
de sus asignaciones, se contiene en el articulo 9 de la ley 18675, que desde el 1 de enero de 1988
sujetó a cotizaciones previsionales las remuneraciones que anteriormente eran no imponibles. Para
calcular las imposiciones de este nuevo régimen, el articulo 14 del DL 3500, de 1980, entiende como
remuneración la definida por el articulo 41 del Código del Trabajo. La ley 19200 modificó la ley
18675 legislando, en general, sobre materias relativas a imponibilidad para beneficios de pensiones,
reemplazando, desde la fecha de su vigencia, determinadas disposiciones de aquella ley (20132/92,
25169/93).
Los beneficios remuneratorios adicionales que establezcan las leyes, han de percibirse en la fecha
de pago total de las remuneraciones del funcionario (39975/98, 13214/00).
De acuerdo con el artículo 41 del Código del Trabajo, en relación con el artículo 5, inciso primero,
del mismo ordenamiento, el derecho al sueldo y otros beneficios pecuniarios es irrenunciable. Sin
embargo, ello no obsta a que una vez devengadas tales franquicias, el funcionario pueda renunciar
a las mismas. De este modo, lo que el trabajador no puede es .renunciar a~ticipadamente a las
remuneraciones que le corresponde percibir (33531/01 ).
El Código del Trabajo, en su artículo 1, inciso segundo, excluyó de su ámbito de aplicación a los
funcionarios de la Administración del Estado, centralizada y descentralizada, del Congreso Nacional
y del Poder Judicial, y a los trabajadores de las empresas o instituciones del Estado o de aquéllas
en que éste tenga aportes, participación o representación, siempre que dichos funcionarios o
trabajadores se encuentren sometidos por ley a un estatuto especial. Encontrándose reguladas en
el Estatuto Administrativo las remuneraciones y asignaciones que pueden percibir los funcionarios
de los Servicios afectos a sus normas, en materia remuneratoria no cabe aplicar las disposiciones
del Código del Trabajo (76401/79).
Una universidad estatal se ajustó a derecho al pagar parcializadamente las remuneraciones de un mes
a su personal, por cuanto, aun cuando conforme al artículo 88 (actual artículo 93) de la ley 18834, los
funcionarios tendrán derecho a percibir por sus servicios las remuneraciones y demás asignaciones
adicionales que establezca la ley, en forma regular y completa, en este caso la paralización de
actividades por parte del estudiantado impidió su normal funcionamiento administrativo, lo que
produjo una merma en sus ingresos, lo cual constituye un caso de fuerza mayor que habilita a los
funcionarios para percibir remuneraciones, no obstante no haber trabajado, acorde al artículo 66
(actual artículo 72) de aquel texto, y legitima el pago parcializado de las mismas (42835/00).
Comentarios:
La jurisprudencia administrativa ha declarado que la regla general es que los empleos públicos
sean remunerados, por lo que excepcionalmente, y siempre que una ley lo autorice, procederá la
designación de funcionarios ad honorem. El precepto en comento consagra el denominado principio
retributivo que marca la relación estatutaria.
De acuerdo con lo dispuesto en el artículo 65, inciso cuarto, W 4, de la Constitución Política, las
remuneraciones del sector público deben ser fijadas por ley, cuya iniciativa exclusiva corresponde al
Presidente de la República.
o modalidades que estimulen el ejercicio de determinadas funciones por parte de los empleados o
premien la idoneidad de su desempeño, sin perjuicio de la aplicación de las escalas generales de
sueldos y del principio de que a funciones análogas, que importen responsabilidades semejantes
y se ejerzan en condiciones similares, se les asignen iguales retribuciones y demás beneficios
económicos.
ARTICULO 94.- Las remuneraciones se devengarán desde el día en Ley 18.834, Art. 89.
que el funcionario asuma el cargo y se pagarán por mensualidades
iguales y vencidas. Las fechas efectivas de pago podrán ser distintas
para cada organismo, cuando así lo disponga el Presidente de la
República.
Interpretación:
Conforme a este articulo, en relación con el articulo 92 (actual articulo 97) de la ley 18834, las
remuneraciones del personal de planta y a contrata de la Administración se devengarán desde el
día en que éste asuma el cargo y se pagarán por mensualidades iguales y vencidas, pudiendo ser
las fechas diversas para cada organismo, según lo disponga el Presidente de la República y no
podrá anticiparse la remuneración por causa alguna, ni siquiera en parcialidades. Asimismo, dichos
empleados tienen derecho al 'sueldo y demás remuneraciones, en forma regular y completa desde
que se les comunica la total tramitación del decreto o resolución de nombramiento, y sólo desde ese
instante procede el pago retroactivo de los estipendios correspondientes. No obstante, de acuerdo
con el articulo 14 (actual articulo 16) de la ley 18834, la autoridad puede disponer una designación
con asunción inmediata de funciones, en cuyo caso el funcionario tiene derecho a las remuneraciones
desde que asuma efectivamente el cargo, aun cuando el acto administrativo correspondiente no esté
tramitado (16343191, 17671101).
Sólo las personas que han sido objeto de nombramiento extendido por autoridad competente y
que han asumido funciones para cuyo ejercicio se les designa, adquieren la naturaleza jurídica de
funcionarios públicos. Por ello, una persona que falleció antes que quedara totalmente tramitada la
resolución que lo designaba en un Servicio Público, vale decir, sin haber asumido el empleo en que
se le nombraba, no corresponde pagarle remuneraciones (9364169).
Las remuneraciones se pagan en dinero y por mensualidades vencidas, esto es, por meses completos
o por la fracción que corresponda en caso que el desempeño sea inferior a ese lapso (22876199).
Las remuneraciones deben pagarse en su valor nominal, no existiendo disposición alguna que
establezca su reajustabilidad o el pago de intereses o multas por su no pago oportuno, sin perjuicio
de las responsabilidades administrativas que en su caso haya lugar (1280192).
Procede pagar las horas extraordinarias conjuntamente con las remuneraciones en la fecha de pago
establecida para el Servicio correspondiente (22876199).
En tanto la Contraloria General no verifique que un titulo profesional cumple con los requisitos de
semestres y de horas de clases exigidos por el articulo 3 del DL 479, de 1974, el Servicio no podrá
pagar la asignación profesional a los funcionarios que la soliciten. Además, el pago de la citada
asignación profesional corresponde desde que esta Entidad de Control se pronuncie al respecto
(15260/96, 54185/06,46380/07, 54919/07).
De los artículos 88 y 89 (actuales articulas 93 y 94) de la ley 18834, se infiere que los Servicios no
están facultados para pagar sólo parte de las remuneraciones de los funcionarios de reemplazo, las
que deben ser enteradas por mensualidades vencidas, aun cuando la política del establecimiento
en relación con ese personal sea pagarles con fecha de corte, al día de pago para el sector público
(17671/01, 7660/03).
Concordancias: Arts. 16, 72, 93, 97, 98, letra d), del EA; 93 del EAM; decreto 159, de 1982, del
Ministerio de Hacienda, que fija fechas de pago para el personal de la Administración del Estado.
Comentarios:
La jurisprudencia administrativa ha señalado, en suma: 1) que sólo las personas designadas de
acuerdo con la ley para desempeñar cargos o funciones públicas, y que las hayan efectivamente
asumido, adquieren la calidad de funcionarios, lo cual los habilita para percibir las remuneraciones
correspondientes; 2) que dichas remuneraciones se devengan por servicios efectivos, salvo que
por acto de autoridad el empleado no haya podido ejercer sus funciones y hubiere reclamado de
ello en forma diligente y oportuna; 3) que las remuneraciones deben pagarse en dinero y por meses
completos o por la fracción que corresponda cuando el desempeño sea inferior a ese lapso, y 4)
que la variación del día de pago de las remuneraciones, pero dentro del mismo mes, no constituye
irregularidad administrativa.
ARTICULO 95.- Las remuneraciones son embargables hasta Ley 18.834, Art. 90.
en un cincuenta por ciento, por resolución judicial ejecutoriada
dictada enjuicio de alimentos o a requerimiento del Fisco o de la
institución a que pertenezca el funcionario, para hacer efectiva
la responsabilidad civil proveniente de /os actos realizados por
éste en contravención a sus obligaciones funcionarias.
Interpretación:
En todos aquellos casos en que el Servicio aplica retención judicial sobre remuneraciones y el
afectado considera que exceden lo dispuesto en la sentencia, corresponde que este último solicite al
respeciivo Tribunal un pronunciamiento sobre la materia (88417/73, 30070/92).
Los descuentos efectuados en virtud de un convenio extrajudicial para otorgar pensión alimenticia,
que no fue aprobado por el Juez de Menores respectivo conforme al artículo 2451 del Código Civil,
carece de obligatoriedad para la Administración, debiendo considerársele como un simple descuento
voluntario autorizado por el mismo funcionario, de modo que podrá ponérsele término por la sola
voluntad de una de las partes. Ello, porque las transacciones sobre alimentos a las personas a
quienes se deban por ley, no valen sin la aprobación judicial. pero una vez adquirida esta última,
poseen el mismo valor y fuerza obligatoria de una sentencia emanada de un Tribunal (26930/99).
Los Jefes Superiores de Servicio se encuentran inhabilitados para disponer la retención provisoria
de remuneraciones de un funcionario, cuando consideran dudosa la efectividad de la causal
invocada para ausentarse del Servicio, como ocurre en el caso de las licencias médicas que éste
hubiere presentado. Ello, sin perjuicio de las deducciones que procedan por la vía del reintegro, una
vez seguido los procedimientos legales pertinentes o las verificaciones que corresponda realizar
(5621/74).
La responsabilidad civil por perjuicios causados en bienes públicos o fiscales no puede hacerse
efectiva en forma directa por la Administración activa, sino que por medio de los Tribunales con
potestad ju"risdiccional, sean ésios de la Justicia Ordinaria o el Tribunal de Cuentas de la Contraloría
General (41835/88, 14991/89).
Gendarmería no está facultada para descontar directamente de las remuneraciones de una funcionaria
las sumas que, por su negligencia establecida en un sumario administrativo, se descontaron
indebidamente del sueldo de otro servidor en beneficio de un tercero ajeno al servicio. Ello, porque
conforme al articulo 90 (actual articulo 95) de ley 18834, las remuneraciones son embargables hasta
un cincuenta por ciento por resolución ejecutoriada en juicio de alimentos o a requerimiento fiscal
o de la institución del empleado, para hacer efectiva su responsabilidad civil en actos realizados
en contravención a sus obligaciones funcionarias. A su vez, el articulo 91 (actual articulo 96) de
aquel texto, prohibe deducir de las remuneraciones, sino los conceptos que menciona. Por ende,
corresponde a Gendarmería restituir al afectado las sumas de que se trata, dado que la actuación
negligente de quien le causó perjuicio, fue en su calidad de funcionaria pública y en el ejercicio de
sus labores, que son propias de la Administración. Finalmente, y a consecuencia de lo anterior,
atendido que la devolución de dineros dañará el patrimonio institucional, la autoridad administrativa
debe iniciar las acciones judiciales para hacer efectiva la responsabilidad civil de la funcionaria
involucrada, proveniente de actos realizados en contravención a sus obligaciones, según se acreditó
en el proceso sumarial respectivo. Con anterioridad, la negativa de esta Contraloria General a iniciar
el juicio de cuentas luego de afinado ese sumario, se debió a que en esa oportunidad no se había
acreditado el perjuicio al patrimonio fiscal (45218/98).
Concordancias: Arts. 4, 18 y 42 de la LOCBGAE, 93 a 101 y 120 del EA; 94 del EAM; 67, 68 a 82
y 107 a 130 de la LOCGR; Resolución 118, de 1962, de la Contraloria General; 158 del CPC.; 7 del
DFL. 1, de 2000, del Ministerio de Justicia, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado de
la ley 14908, sobre Abandono de Familia y Pago de Pensiones Alimenticias; ley 19947 que establece
Nueva Ley de Matrimonio Civil; ley 19968 que Crea los Tribunales de Familia.
Comentarios:
El articulo 95 del Estatuto Administrativo contiene el principio de inembargabilidad de las
remuneraciones, al reconocer sólo dos excepciones, las que se encuentran afectas al limite del
cincuenta por ciento de las mismas, esto es, por resolución judicial ejecutoriada dictada en juicio de
alimentos, o a requerimiento del Fisco o de la institución a que pertenezca el funcionario para hacer
efectiva la responsabilidad civil proveniente de los actos realizados por éste en contravención a sus
obligaciones fUncionarias. En el primer caso, debe estarse a lo que resuelva el Tribunal de Familia,
en conformidad al procedimiento previsto en la ley 14908; en tanto que en el segundo caso, procede
solicitar a la Contraloria General que inicie un juicio de cuentas, emita una orden de reintegro o
proceda a liquidar la póliza de garantía para que se haga efectiva la fianza de fidelidad funcionaria
cuando corresponda, lo cual no obsta a que el Fisco; a través del Consejo de Defensa del Estado o
la propía institución descentralizada inicie las acciones judiciales que procedan para hacer efectiva
la responsabilidad civil del funcionario.
Ello armoniza con .el principio que también es'e ordenamiento consulta en su artículo 96, en cuanto
a que las remuneraciones no admiten más deducciones que aquellas expresamente autorizadas por
la ley, por lo que la Administración carece de facultades para practicar otros descuentos que los que
se hallen previstos por ésta.
ARTICULO 96.- Queda prohibido deducir de las remuneraciones del Ley 18.834, Art. 91.
funcionario otras cantidades que las correspondientes al pago de
impuestos, cotizaciones de seguridad social y demás establecidas
expresamente por las leyes.
Interpretación:
La norma del artículo 96 de la ley 18834, sobre descuentos de las remuneraciones, tiene como
propósito proteger las remuneraciones de los servidores públicos al disponer que no se puede practicar
a su respecto otros descuentos que los previstos expresamente en las leyes. Ello, considerando el
carácter protector que el ordenamiento jurídico otorga a las disposiciones referentes a descuentos por
planilla, pues sólo las deducciones originadas en expresos mandatos legales pueden ser practicadas
en dichas rentas. Tanto los descuentos ordenados por los servicios de bienestar originados en los
aportes de los interesados, como los derivados del otorgamiento de beneficios contemplados en los
respectivos reglamentos, tienen el carácter de legales, debiendo considerarse entre los previstos en
el inciso primero del citado articulo 96, no encontrándose sujetos a la limitación establecida en este
precepto. No obstante, deben tenerse en cuenta para reducir al máximo a que pueden llegar las
deducciones voluntarias. Con todo, tratándose de descuentos ordenados por la ley, el monto a que
ellos deben ascender, debe ser el señalado por dicha ley y no otro, aún si el interesado está conforme
con un monto diverso. En el caso de los funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores, por
expreso mandato de su reglamento de bienestar, las deducciones por cuotas adeudadas a este
último, no pueden exceder del quince por ciento de la remuneración imponible del interesado, por
lo que el descuento efectuado a una funcionaria por pago de préstamos médicos otorgados por
ese bienestar, no procede al ser equivalente a un 24,05 por ciento de su renta, encontrándose
la autoridad pertinente obligada a respetar el citado reglamento conforme a los artículos 6 y 7 de
la Constitución Política y 2 de la ley 18575. De acuerdo con el artículo 72 de la ley 18834, por el
tiempo durante el cual no se trabaje efectivamente, no pueden percibirse remuneraciones, salvo
tratándose de feriados, licencias o permisos con goce de remuneraciones, previstos en dicha ley, de
la suspensión preventiva contemplada en el artículo 136 o de caso fortuito o fuerza mayor. Agrega
el precepto que, mensualmente deberá descontarse por los pagadores, a requerimiento escrito del
jefe inmediato, el tiempo no trabajado por los empleados, como es aquel computado como atrasos o
inasistencias (8331/90, 1346/91, 24999/91, 2084/92, 50002/00, 7810/01, 56069/05).
Las deducciones que la ley autoriza practicar de las remuneraciones de los funcionarios no están
limitadas a un determinado monto de sus estipendios, salvo que la misma ley disponga otra cosa. Por
lo tanto, dichas deducciones pueden eventualmente llegar a cubrir la totalidad de las remuneraciones
del empleado (82588/69).
Los descuentos autorizados por la ley y los ordenados por ésta no están limitados por el máximo de
15% de la remuneración. Los descuentos autorizados por la ley y los ordenados por ésta sólo se
diferencian en que estos últimos gozan de preferencia para su pago. El articulo 164 de la ley 14171,
modificado por el articulo 16 de la ley 15364, autoriza deducir de los sueldos de los empleados las
deudas contraídas, entre otros, con las asociaciones de empleados, entre los que cabe incluir todos
los que sean practicados a favor de esas organizaciones, sea que se trate de cuotas ordinarias o
extraordinarias o descuentos debidamente, autorizados por el respectivo funcionario, como son los
compromisos adquiridos por éstos con terceros a través de dichas asociaciones. Para que procedan
los descuentos a favor de las asociaciones de funcionarios, el articulo 164 de la ley 14171 exige que
éstos manifiesten su aceptación por escrito. Estos descuentos por estar autorizados en una ley no
se encuentran sujetos al limite de 15% que establece el articulo 91 (actual artículo 96) del Estatuto
Administrativo. Sólo las deducciones voluntarias están afectas a dicho limite porcentual (57945/03,
27248/04, 4115/08).
No son contradictorios los dictamenes 27248, de 2004 y 16240, de 2005, de esta Contraloria
General, relativos a los descuentos a las remuneraciones de los empleados, solicitados por las
correspondientes asociaciones de funcionarios. Ello, porque efectivamente, el primero de dichos
pronunciamientos señala que las deducciones en favor de tales entidades están autorizados por ley
y, en consecuencia, no se hallan afectas al limite del quince por ciento contemplado en el articulo
96 de la ley 18834, aplicable sólo a los descuentos voluntarios. A su vez, el dictamen 16240, de
2005, que se funda en el articulo 95 de la ley 18883, Estatuto Administrativo para los Funcionarios
Municipales, expresa que las deducciones en favor de asociaciones de funcionarios municipales,
salvo las excepciones que indica, son voluntarias, sujetas al limite del quince por ciento establecido
en la mencionada disposición. No obstante, la diferencia de criterios entre ambos pronunciamientos
en ningún caso puede estimarse una contradicción, pues deriva de las diversas fuentes legales que
regulan las deducciones de que se trata. Lo anterior, por cuanto en el caso del personal regido por la
ley 18834 los descuentos aludidos siempre tienen el carácter de legales, ya que el articulo 164 de la
ley 14171, incluye entre las deducciones autorizadas a los sueldos de los empleados a que se refiere
el articulo 57 del DFL 338/60 -antiguo Estatuto Administrativo reemplazado por la ley 18834-, aquellas
por deudas contraídas con las asociaciones de funcionarios de la Administración Civil del Estado. En
cambio, respecto del personal municipal no hay una norma que expresamente otorgue a todos los
descuentos en favor de las entidades gremiales el carácter de legales. Así, excepto determinadas
deducciones, indicadas expresamente por la ley, como son las cuotas ordinarias y extraordinarias
que se pagan a esas organizaciones, las restantes deben considerarse como voluntarias y, por lo
tanto afectas al limite del quince por ciento (55059/05).
Conforme a los artículos 43, 44 y 45 de la ley 19296, las cotizaciones a las organizaciones de
funcionarios de la Administración del Estado serán obligatorias, tratándose de las cuotas
extraordinarias, cuando cumplan el requisito de haberse impuesto por la asamblea a los afiliados de
una asociación, pues de lo contrario, se estará en presencia de aportes voluntarios, sujetos al limite
del 15% (8257/98).
Las deducciones de las remuneraciones de los funcionarios públicos deben hacerse practicando, en
primer lugar, los descuentos generales y obligatorios, tales como los previsionales, los tributarios, los
de seguridad social y otros semejantes; deben realizarse, en segundo lugar, los de carácter judicial, y
aplicar, por último, los que derivan de compromisos contraídos por el empleado en instituciones cuyos
créditos la ley autoriza descontar de esas remuneraciones. Respecto de estos dos últimos grupos de
deducciones, esto es, los de carácter judicial y los voluntarios, su determinación constituye más bien
una cuestión de hecho, porque su concurrencia es el resultado paulatino y gradual de obligaciones
contraídas por el afectado al ejercer ciertos derechos o de obligaciones que le son impuestas por
sentencia judicial. Si hay concurrencia de varias deducciones, deben aplicarse preferentemente los
descuentos legales, luego los de carácter judicial, y después los restantes en el orden de las fechas
en que fueron presentados al Servicio, aun cuando ello determine que algunas no puedan realizarse
o que no resulte un alcance liquido en favor del funcionario (16998/68, 34803/71, 11119/02).
Las deducciones que correspondan al pago de impuestos o imposiciones de seguridad social, así
como aquéllas que obedezcan a órdenes impartidas por la Contraloria General de la República en
uso de las facultades que le confiere la ley 10336, deben practicarse con preferencia a todo otro
descuento, ya que emanando directamente de la ley, no pueden subordinarse a créditos de carácter
voluntario que pueden hacerse valer en contra de un empleado público. En lo que se refiere a los
créditos que abarcan las demás deducciones, cabe aplicar las conclusiones del dictamen 11070, de
1964, puesto que se basan en vínculos de carácter personal que unen a un empleado con terceros,
y a los que la ley no atribuye ninguna especial preferencia (29393/64).
A falta de norma legal o reglamentaria que establezca el orden de prelación en que deben efectuarse
los descuentos por créditos otorgados a los funcionarios, debe estarse a la fecha en que los respectivos
descuentos fueron comunicados al habilitado del Servicio. De este modo, tendrá siempre preferencia
el crédito más antiguo. Dicha conclusión resulta de la aplicación de los principios generales que
rigen en materia de prelación de créditos en el régimen jurídico chileno (36646/82).
Si el monto de una deducción en las remuneraciones de los funcionarios está expresamente señalado
en la ley, éste debe ser el que ella señala y no uno superior. En consecuencia, no procede que la
autoridad ordene un descuento por un monto mayor (27234/90, 34155/90,1346/91, 5743/91).
Las normas relativas a descuentos que pueden realizarse sobre las remuneraciones de los
funcionarios sólo son aplicables al personal en servicio activo (4684/93).
No pueden efectuarse otros descuentos en las remuneraciones de los funcionarios que los
contemplados en el articulo 91 (actual artículo 96) del Estatuto Administrativo (45218/98).
De acuerdo con el artículo 40, inciso segundo, del Código Penal, los efectos de la suspensión judicial
de sus empleos sólo alcanzan al 50% del sueldo base del cargo que desempeña el funcionario
afectado, sin que pueda extenderse al resto de las remuneraciones que pudieren corresponderle, ni
afectar las cotizaciones previsionales, las que en todo caso deben efectuarse considerando el total
de las rentas imponibles (18922/93).
La autoridad administrativa no puede negar su autorización a los préstamos otorgados por la Caja
de Ahorros de los Empleados Públicos en favor de sus funcionarios, argumentando que no se
puede descontar más del quince por ciento de la remuneración mensual. Ello, porque el artículo
164 de la ley 14171, modificado por el artículo 16 de la ley 15364, autoriza a esa Caja para que se
efectúen descuentos de las remuneraciones de los empleados por préstamos, fianzas, seguros u
otros servicios de la institución, siempre que la voluntad del funcionario sea manifestada por escrito.
Así, las deducciones de que se trata efectuadas en favor de la citada Caja, revisten el carácter de
descuentos legales y por tanto, no están afectas al limite del quince por ciento a que alude el artículo
96 de la ley 18834 (38781/06).
Según los artículos 19, NO 16, inciso quinto, de la Constitución Política, 84, letra i), y 72 de la ley
18834, en el evento que funcionarios de un Servicio de Salud se hayan ausentado efectivamente
del trabajo a causa de una paralización de actividades, independientemente que hayan registrado
o no su entrada y salida de la jornada, procede que dicho Servicio haya dispuesto los descuentos
correspondientes y no haya ordenado la recuperación de las horas no trabajadas, puesto que no
existe una obligación para el Servicio en tal sentido. Si algu~os funcionarios efectuaron turnos durante
la paralización, sin que conste fehacientemente cuáles días trabajaron y qué días se ausentaron, la
autoridad debe disponer la instrucción de una investigación sumaria con el objeto que se determinen
indubitadamente los días no trabajados, para proceder a los descuentos pertinentes. Conforme al
artículo 96 de la ley 18834, los descuentos autorizados por ley y los ordenados por ésta no están
limitados por el máximo del quince por ciento a que alude dicha norma, aplicable en este caso dado
el perentorio alcance de lo establecido en el artículo 72 de dicha ley en orden a que "por el tiempo
durante el cual no se hubiere efectivamente trabajado no podrán percibirse remuneraciones", lo
cual reviste el carácter de una prohibición, de modo que si dichas remuneraciones son percibidas
en el mismo mes en que se produce la ausencia injustificada, éstas deben ser descontadas de
la remuneración mensual inmediatamente siguiente, sin encontrarse afectas a ningún límite y con
preferencia a las deducciones voluntarias a que se haya comprometido el funcionario (7207/07).
No están afectos a la limitación del inciso segundo los descuentos a favor de los Servicios de Bienestar
que tienen fuente legal, sean éstos originados en los aportes de los interesados o derivados del
otorgamiento de beneficios contemplados en los correspondientes reglamentos. Estas deducciones
deben considerarse entre aquéllas que permite efectuar el inciso primero de esta norma. De esta
manera, si bien los descuentos ordenados por los Servicios de Bienestar no están sujetos al limite del
15%, dichas deducciones tienen el efecto de reducir el porcentaje máximo a que pueden ascender
los descuentos voluntarios (24999/91, 30524/97, 7810/01).
No están afectos a la limitación del inciso segundo del artículo 91 (actual artículo 96) los descuentos
a favor de los Servicios de Bienestar aunque éstos no posean personalidad jurídica propia. Las
deducciones que ordenen los Servicios de Bienestar reducen el limite del quince por ciento de la
remuneración que permite disponer al empleado (2084/92).
La limitación prevista en el inciso segundo de este articulo, en cuanto establece que los descuentos
no pueden exceder el quince por ciento de la remuneración, sólo se relaciona con los descuentos
netamente voluntarios que el funcionario, con la aprobación del Jefe Superior del Servicio, estima
del caso deducir de sus rentas, no encontrándose por ello afectos a esa restricción las deducciones
para la cuenta de ahorro voluntario que mantienen las Administradoras de Fondos de Pensiones, la
cotización adicional para la salud, los atrasos, la rendición de fianzas y los préstamos de la Caja de
Ahorros de Empleados Públicos (29053/92, 14074/96).
Los descuentos hechos a funcionarios regidos por el Código del Trabajo, se deben sujetar a lo
dispuesto en el articulo 58 de dicho Código, que establece que sólo con acuerdo del empleador
y el trabajador, que conste por escrito, resulta posible deducir de sus remuneraciones sumas o
porcentajes determinados destinados a pagos de cualquier naturaleza, los que en conjunto no
pueden ser superiores al quince por ciento de su remuneración total (18371/99).
No procede que los Servicios Públicos autoricen descuento voluntario alguno de las remuneraciones
de los funcionarios públicos en favor de candidaturas políticas, pues ello implicaría directa intervención
de la Administración del Estado y su personal en el ámbito de las actividades políticas (34684/99).
En cuanto a la base de cálculo del referido quince por ciento, cumple indicar que dicho tope de
la remuneración para los descuentos voluntarios, se calcula sobre la base del monto total de la
remuneración del funcionario, esto es, sin que se hayan practicado aún los descuentos legales,
teniendo presente, sin embargo, que si existieren deducciones ordenadas por el sistema de bienestar,
la cantidad así determinada, debe reducirse en el monto que representen aquéllas (27407/03,
40654/05).
Aun cuando exista una diferencia de remuneraciones indebidamente pagadas a una funcionaria, esa
diferencia no puede ser retenida unilateralmente por el Servicio. Sólo compete al Contralor General
de la República ordenar el descuento de remuneraciones de los funcionarios de los organismos y
servicios que controla, por beneficios pecuniarios percibidos indebidamente (4065/99).
Concordancias: Arts.72, 93 a 101, 117, 123 y 124 del EA; 95 del EAM; 43 a 45 de la ley 19296, sobre
Asociaciones de Funcionarios de la Administración del Estado; 164 de la ley 14171, modificada
por el articulo 16 de la ley 15364; 67 de la ley 10336, LOCGR; 58 del C del T; 23 del DL 249,
de 1973, sobre Escala Unica de Sueldos; 11 del DL 2545, de 1979, que establece normas sobre
cotización y recaudación de cuotas sindicales y gremiales; ley 18689, que fusiona en el Instituto
de Normalización Previsional las instituciones previsionales que indica; Arts. 53, 54, 63 y décimo
sexto y vigésimo transitorios, todos de la ley 20255, que establece Reforma Previsional, disponen
la creación del Instituto de Previsión Social, el cual será considerado para todos los efectos sucesor
y continuador legal del Instituto de Normalización Previsional, 97 de esa misma ley, que sanciona
el incumplimiento de la obligación de efectuar los aportes previsionales que correspondan a sumas
descontadas con tal propósito a las remuneraciones de los funcionarios públicos. De acuerdo con
el articulo 63 de la mencionada ley 20255, a contar de la fecha en que entre en funciones el Instituto
de Previsión Social, el Instituto de Normalización Previsional, creado por el decreto ley 3502, de
1980, se denominará "Instituto de Seguridad Laboral". DFL 1340 bis, de 1930, Ley Orgánica de la
ex Caja Nacional de Empleados Públicos y Periodistas; DL 3500, de 1980, establece Nuevo Sistema
de Pensiones; Decreto 57, de 1990, del Ministerio del Trabajo y Previsión Social, Subsecretaria
de Previsión Social, Reglamento del DL 3500, de 1980; DL 3501, de 1980, que establece Nuevo
Sistema de Cotizaciones Previsionales; DFL 1, de 2005, del Ministerio de Salud, que fija el texto
refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley 2763, de 1979 y de las leyes 18933 y 18469,
en relación con FONASA e ISAPRE; DL 824, de 1974, sobre Impuesto a la Renta.
Comentarios:
Esta disposición tiene como finalidad proteger las remuneraciones de los servidores públicos
al disponer que no es posible practicar respecto de ellas otros descuentos que los previstos
expresamente en las leyes. De este modo, de no existir autorización que legitime un descuento no
procede efectuar deducción alguna.
El criterio reseñado tiene como corolario el caracter protector que el ordenamiento juridico otorga a
las normas referente a descuentos por planilla, las cuales permiten afirmar que sólo las deducciones
que tengan su origen en expresos mandatos de ley habilitan para efectuarlas de las remuneraciones
de los empleados de cualquier organismo de la Administración del Estado.
En este contexto, resulta útil expresar que existen tres órdenes de deducciones posibles de
efectuar sobre las remuneraciones de los funcionarios. El primero esta constituido por aquellos
descuentos establecidos u ordenados por la ley, los que gozan de preferencia para su pago. En
segundo lugar, estan los meramente autorizados por una disposición legal, y por último, los que
no han sido ordenados ni autorizados por ley y que el interesado puede solicitar se le deduzcan
de sus remuneraciones quedando éstos sujetos, ademas, a la autorización del Jefe Superior de la
institución y con la restricción de no poder exceder del quince por ciento de la remuneración. Ahora
bien, la importancia de esta distinción radica en que las deducciones que han sido simplemente
autorizadas por el funcionario en conformidad a la ley no gozan de preferencia para su deducción y
deben efectuarse a continuación de los descuentos obligatorios.
Interpretación:
No es posible conceder anticipo de remuneraciones sin que exista norma legal que lo permita, pues
para que se devengue la remuneración es requisito esencial que, previamente, el trabajador preste
los servicios correspondientes (653190).
Conforme al articulo 89 (actual articulo 94) en relación con el articulo 92 (actual articulo 97) de la ley
18834, las remuneraciones del personal de planta y a contrata de la Administración se devengarán
desde el di a en que éste asuma el cargo y se pagarán por mensualidades iguales y vencidas, pudiendo,
las fechas, ser diversas para cada organismo, según lo disponga el Presidente de la República y no
podrá anticiparse la remuneración por causa alguna, ni siquiera en parcialidades. Asimismo, dichos
empleados sólo tienen derecho al sueldo y demás remuneraciones, en forma regular y completa
·desde que se les comunica la total tramitación del decreto o resolución de nombramiento, y sólo
desde ese instante procede el pago retroactivo de los estipendios correspondientes, dado que por el
tiempo no trabajado, no pueden percibirse remuneraciones, salvo tratándose de feriados, licencias
o permisos con goce de remuneraciones, suspensión preventiva o caso fortuito o fuerza mayor
(17671101).
La circunstancia que la ocupación ilegal de la casa central de una universidad estatal haya impedido
confeccionar oportunamente las planillas de pago del personal, no autoriza a su Jefatura Superior
para otorgarles un anticipo de remuneraciones, ya que tal medida contraviene lo dispuesto en el
articulo 58 del DFL 338, de 1960 (actual articulo 97 de la ley 18834) (69910167).
Comentarios:
El mandato contenido en esta norma, relacionado con la oportunidad del pago de las remuneraciones,
armoniza con lo previsto en el articulo 72, precepto según el cual durante el tiempo que no se hubiere
efectivamente trabajado no pueden ellas percibirse, sin perjuicio de las excepciones legales. Es del
caso destacar que el articulo 94, inciso segundo, del Estatuto, contempla un caso en que se permite
anticipar la remuneración, al disponer que si el funcionario para asumir sus funciones necesitare
trasladarse a un lugar distinto del de su residencia, la remuneración se devengará desde el di a en
que éste emprenda viaje, y si fuere a desempeñar un empleo en el extranjero, desde quince dias
antes del viaje.
ARTICULO 98.- Los funcionarios tendrán derecho a percibir las Ley 18.834. Art. 93.
siguientes asignaciones:
Interpretación:
Letra a)
La asignación por pérdida de caja corresponde exclusivamente a quienes, como función principal
y en razón de sus cargos, tienen manejo de dinero efectivo que implica riesgos en el cálculo de las
cantidades, salvo que la institución contrate un sistema de seguros para estos efectos (8368/90,
8371/90, 13103/90, 14411/91, 26932/94, 26461/97, 18858/00).
Para determinar la función principal que a un servidor le compete dentro del ámbito de las tareas
encomendadas, debe atenderse al mayor o menor tiempo que le demanda el desempeño de esas
funciones durante el mes calendario (14411/91, 26932/94, 18858/00,1075/05, 19379/05).
La expresión "manejo de dinero efectivo" debe entenderse como sinónimo de moneda corriente o
real, excluyéndose todos los valores o documentos representativos de dinero, cuyo es el caso de los
cheques u otros instrumentos que no constituyen moneda corriente. Dicha exigencia es una situación
de hecho que corresponde verificar a la propia Administración (651 09/76, 8371/90, 19379/05).
Manejar dinero efectivo supone realizar operaciones que implican riesgo en el cálculo de las
cantidades correspondientes y no simple traslado físico de dinero, puesto que en este caso no
hay dicho manejo en los términos legales y reglamentarios. Por lo tanto, carece del derecho a la
asignación por pérdida de caja el empleado cuya labor principal consiste en un mero traslado físico
de dinero desde el Servicio a distintas instituciones financieras (57506/71, 8371/90, 18858/00).
No tienen derecho a la asignación por pérdida de caja aquellos funcionarios que por vía accesoria
a sus propias atribuciones tuvieren la responsabilidad en el manejo, aunque directo, de fondos de
dinero. La expresión "sólo" que utiliza la letra a) del articulo 93 (actual articulo 98) de la ley 18834,
significa que se ha excluido de la franquicia a quienes no cumplen los requisitos antes señalados, con
lo que se ha modificado sustancialmente la concesión de tal asignación en relación a los términos en
que la establecía el articulo 77 del antiguo Estatuto Administrativo, contenido en el DFL 338, de 1960
(8368/90, 13103/90, 1487/91, 14411/91,28016/91, 6357/92,4111/94, 26932/94, 19379/05).
La letra a) del articulo 93 (actual articulo 98) limitó el goce de la asignación por pérdida de caja
sólo a los servidores que en razón de sus cargos manejan dinero efectivo como función principal,
alterando sustancialmente lo dispuesto sobre la materia por el articulo 77 del antiguo Estatuto
Administrativo, contenido en el DFL 338, de 1960. Ello ha significado que muchos empleados que
durante la vigencia del antiguo Estatuto Administrativo percibían el mencionado beneficio, dejaron de
recibirlo al no cumplir con la indicada exigencia. Estos servidores, no obstante, han tenido derecho
a que las remuneraciones que percibían por ese concepto les fueran compensadas mediante planilla
suplementaria en virtud de la norma de protección contemplada en el articulo 3 transitorio de la ley
18834. La referida planilla debe mantenerse vigente mientras los aludidos funcionarios continúen
desempeñando las mismas labores que le dieron derecho al estipendio de que se trata durante
la vigencia del citado decreto con fuerza de ley (1487/91, 4944/91, 5278/91, 14403/91, 14411/91,
20386/91,28016/91, 6357/92,24721/92, 4111/94).
La asignación por pérdida de caja tiene por objeto estimular la responsabilidad del servidor y
compensarlo por las posibles faltas de dinero que pueda sufrir con ocasión del ejercicio de su función
principal, que es el manejo de aquél (8371/90, 26020/06).
Si bien el pago de la asignación por pérdida de caja se suspende durante los feriados, licencias,
permisos o comisiones de servicio, dicho emolumento constituye una remuneración permanente,
no accidental, pues se concede por el desempeño de ciertos cargos que conllevan el desarrollo de
actividades que lo generan y mientras se permanezca en el ejercicio de aquéllos (8327/91 ).
En cuanto a la fecha desde la que tiene derecho el funcionario a percibir la asignación por pérdida
de caja, es aquélla en que el empleado asume efectivamente el cargo que genera el beneficio,
puesto que lo adquiere de pleno derecho en ese momento, incorporándolo automáticamente a su
patrimonio y no a partir de la fecha de la resolución que lo concede, ya que ésta sólo tiene por
objeto declarar que se han cumplido las condiciones exigidas para acceder a ese derecho (6838/67,
8103/78, 26020/06).
El articulo 93 (actual articulo 98) del Estatuto Administrativo no señala el monto de la asignación por
pérdida de caja. Por tal motivo, corresponde remitirse al artículo 8 del DL 249, de 1973, sustituido
por el articulo 6 del DL 479, de 1974, y modificado por los articulas 1 del DL 1607, de 1976, y 3 del
DL 2072, de 1977, disposiciones según las cuales esta asignación no puede sobrepasar el15% del
grado 31 de la Escala Única de Sueldos. En todos los aspectos que no se contrapongan con la letra
a) de este articulo 93 (actual artículo 98), sigue vigente el Decreto 10559, de 1960, del Ministerio de
Hacienda (19020/90).
Concordancias: Arts. 7, 8, 10 y 11 del Decreto 10559, de 1960, del Ministerio de Hacienda, que
aprueba el reglamento sobre pago de asignaciones de movilización, de máquinas y por pérdida de
caja en que incurran los funcionarios fiscales y de las instituciones semifiscales que gozan de este
beneficio; 26 de la ley 19269, que otorgó el derecho a percibir la asignación establecida en la letra
a) del artículo 93 (actual artículo 98) del EA, al personal de la Dirección de Crédito Prendario que
cumpla funciones de depositario de garantías prendarias.
Letra b)
Sólo tienen derecho a la asignación de movilización Jos funcionarios que por la naturaleza de su cargo
deban realizar visitas domiciliarias o labores inspectivas fuera de la oficina en que se desempeñan
habitualmente, pero dentro de la misma ciudad, salvo que la respectiva institución les proporcione
Jos medios correspondientes (7743/90, 16334/90 -reconsiderado parcialmente por el 6899/91-,
25725/90, 9756/96).
El desplazamiento de un servidor fuera de la oficina para cumplir sus funciones no constituye "visitas
domiciliarias o labores inspectivas" y, por Jo tanto, no da derecho de acuerdo con esta norma a percibir
la asignación de movilización, es posible, no obstante, que el funcionario solicite el reembolso de Jos
gastos en que incurre, ya que esas expensas han sido necesarias para cumplir sus labores. De lo
contrario, se produciría un enriquecimiento ilícito para la Administración (67203/68, 9756/96).
Si bien el pago de la asignación de movilización se suspende durante los feriados, licencias, permisos
o comisiones de servicio, dicho emolumento constituye una remuneración permanente, no accidental,
pues se concede por el desempeño de ciertos cargos que conllevan el desarrollo de actividades que
lo generan y mientras el funcionario permanezca en el ejercicio de aquéllos (8327/91).
Como el objeto de la asignación de movilización es resarcir los gastos en que incurre el funcionario
en el cumplimiento de las visitas domiciliarias o labores inspectivas fuera de su oficina, inherentes a
su cargo, su pago se suspende durante los feriados, licencias, permisos o comisiones de servicio.
Por ello, en el caso del empleado que hace uso de una licencia médica parcial, la suma a pagar en
razón de tal emolumento ha de reducirse proporcionalmente en relación a su jornada (27335/90).
La suspensión del pago de la asignación de movilización debe hacerse efectiva respecto de cada
empleado, por todo el periodo que corre desde el cese del desempeño efectivo hasta el día del
reintegro a sus funciones, procediéndose al descuento proporcional correspondiente (10831/63).
Los funcionarios que realizan en el ejercicio habitual de sus funciones labores inspectivas o visitas
domiciliarias, tienen derecho a percibir la asignación de movilización desde que comenzaron a
desempeñar las tareas que habilitan para su percepción, aunque la resolución que les reconozca el
derecho se dicte con posterioridad (6899/91 ).
Corresponde al Jefe Superior del Servicio ponderar, en cada caso, las circunstancias de hecho
para determinar si un empleado realiza labores de aquéllas que dan derecho a la asignación de
movilización (19798/67, 37790/80).
La asignación de movilización debe efectuarse por resolución del Jefe Superior del Servicio, fundada
en informes técnicos escritos, acto administrativo que se halla exento del trámite de toma de razón.
Atendido su carácter permanente, subsiste mientras se mantengan las causas que la originaron, por
lo que no es necesario que su goce sea prorrogado año a año (6838/67).
El articulo 93 (actual articulo 98) del Estatuto Administrativo no señala el monto de la asignación
de movilización. Por tal motivo, corresponde remitirse al articulo 8 del DL 249, de 1973, sustituido
por el articulo 6 del DL 479, de 1974, y modificado por los artículos 1 del DL 1607, de 1976 y 3 del
DL 2072, de 1977, disposiciones según las cuales esta asignación no puede sobrepasar el 40% del
grado 31 de la Escala Única de Sueldos. En todos los aspectos que no se contrapongan con la letra
b) de este articulo 93 (actual articulo 98), sigue vigente el Decreto 10559, de 1960, del Ministerio de
Hacienda (19020/90). ·
Procede emitir un documento formal que ponga término al goce de la asignación de movilización,
sujeto a los mismos trámites del acto administrativo que la concede, cuando desaparecen los
presupuestos que sirvieron de base a su otorgamiento (73624/76).
Concordancias: Arts. 2, 4, 1O y 11 del Decreto 10559, de 1960, del Ministerio de Hacienda, que
aprueba el reglamento sobre pago de asignaciones de movilización, de máquinas y por pérdida de
caja en que incurran los funcionarios fiscales y de las instituciones semifiscales que gozan de este
beneficio.
Letra e)
Procede pagar las horas extraordinarias conjuntamente con las remuneraciones en la fecha de pago
establecida para el Servicio correspondiente de acuerdo con el artículo 89 (actual artículo 94) de la
ley 18834, por razones de economía, tiempo y mejor aprovechamiento de los recursos humanos, ya
que el artículo 60 (actual artículo 66) no ha establecido expresamente una fecha para dicho pago
(22876/99).
Los trabajos ejecutados por los servidores en las tardes de los días 17 de septiembre y 24 y 31
de diciembre, esto es, entre el mediodía y el anochecer de los mismos, deben compensarse con
un descanso complementario igual al tiempo laborado más un aumento del 25% o con un recargo
del 25% sobre el valor de la hora ordinaria, pues tales labores deben asimilarse a los trabajos
extraordinarios a continuación de la jornada ordinaria (12722/91, 4899/94).
Las horas extraordinarias deben autorizarse mediante actos administrativos exentos de toma de razón,
los que deben dictarse antes de la realización de aquéllas, porque éstos sólo rigen para el futuro, a
menos que exista una disposición expresa en contrario. En dichos actos tiene que individualizarse al
personal que las desarrollará, el número de horas a efectuar y el período que abarca la autorización.
No obstante, procede el pago de los trabajos extraordinarios dispuestos por la autoridad, sin cumplir
con las formalidades legales, cuando han sido realizados efectivamente por los funcionarios, pues de
lo contrario, se produciría un enriquecimiento sin causa para la Administración (20685/91, 36359/96,
42095/96, 9324/99, 1 0542/00).
Los funcionarios que cumplen horas extraordinarias en Servicios o dependencias, que por la naturaleza
de las labores que desarrollan exijan obligadamente que se trabaje en jornada extraordinaria, en
forma regular y permanente, tienen derecho a conservar, durante el uso de feriados, licencias y
permisos, las remuneraciones correspondientes a horas extraordinarias. Por trabajo extraordinario
regular y permanente debe entenderse aquél que realizan los empleados, en virtud del régimen
especial a que se hallan sujetos por la naturaleza de sus labores, en horas o días no comprendidos
en la jornada habitual. Debe tratarse de establecimientos que, por la naturaleza de sus funciones,
éstas no pueden paralizarse (59114/73, 25233/90,4107/93,34682/93,23353/94,37969/94,8019/95,
30791/97, 43863/98, 8386/99, 12057/00 -reconsiderado parcialmente por el 36226/03-, 62/01,
24305/01).
Es improcedente pagar horas extraordinarias a los funcionarios que realizan cursos obligatorios
de capacitación fuera de la jornada ordinaria. La compensación en estos casos consiste en un
descanso complementario. Tratándose de las actividades contempladas en el artículo 23 (actual
artículo 28) de la ley 18834 -estudios de educación básica, media o superior y los cursos de post
grado conducentes a la obtención de un grado académico- que no se consideran capacitación,
tampoco corresponde pagar horas extraordinarias, ya que si la ley no ha previsto a su respecto
el otorgamiento de descanso complementario, menos puede estimarse que proceda el pago de
remuneraciones (11458/92, 43030/94).
El personal contratado sobre la base de honorarios asimilados a grado carece del derecho a percibir
horas extraordinarias. Es improcedente incorporar en las contrataciones a honorarios una jornada
extraordinaria propiamente tal. Lo que corresponde es fijar en el respectivo convenio un honorario
adicional por trabajos a realizarse más allá del horario habitual (4636/90, 2137/91, 6710/93, 22355/93,
26724/94).
El tiempo ocupado en el traslado hacia y desde ellugaren que se debe cumplir un cometido funcionario,
no constituye trabajo extraordinario, al no corresponder al lapso durante el cual el empleado ha de
desempeñar sus tareas por orden de la autoridad (30253/93, 10242/95, 21889/96).
Procede reliquidarla asignación por trabajos extraordinarios de los funcionarios cuyas remuneraciones
aumentaron retroactivamente como consecuencia de un ascenso o del reconocimiento de la
asignación de antigüedad, pese al carácter accidental de aquélla (4313/94).
No corresponde reliquidar las horas extraordinarias efectuadas en el tiempo intermedio cuando las
leyes han dispuesto mejoramientos de grados en forma retroactiva (5274/94).
El plazo para impetrar el pago de las horas extraordinarias es de seis meses, contados desde la
fecha en que dichos emolumentos se hicieron exigibles, de acuerdo con la regla del artículo 94
(actual artículo 99) (1280/92, 14158/94 -complementados por el 24428/96-, 26339/94, 37060/99,
2815/00, 46051/00).
Las sumas adeudadas a un funcionario en razón de horas extraordinarias, deben pagarse al valor
fijado a la fecha en que hubo de materializarse su pago. Las obligaciones cuya fuente directa es la ley
sólo pueden reajustarse y generar intereses si una disposición legal así lo establece expresamente,
lo cual no ocurre en estos casos (40085/98).
Es improcedente pagar horas extraordinarias a los funcionarios que realicen labores propias de
una carga pública cuando sean requeridos para esos fines, como participar en un censo nacional,
aun cuando las labores se lleven a cabo en un día declarado feriado legal, ya que esas tareas no
se enmarcan dentro de los conceptos de jornada ordinaria y trabajos extraordinarios. Además, las
actividades que ese personal debe obligatoriamente realizar no atañen específicamente al Servicio
del que forman parte, sino que dicen relación con fines de interés común, al margen del quehacer
normal de los organismos involucrados (9313/92, 9119/94).
El inciso primero de la letra d), regula los beneficios que corresponden a los empleados titulares
que están obligados a cambiar su residencia para asumir el cargo o dar cumplimiento a una nueva
destinación, y al que una vez terminadas sus funciones vuelva al lugar en que residía antes de
ser nombrado, y el inciso segundo, determina los derechos que asisten a quienes ingresan, se
reincorporan o cesan en la Administración, e igualmente se refiere sólo a funcionarios titulares
(26384/90, 35204/03, 33200/07).
El derecho que otorga este inciso, corresponde tanto a quienes desempeñando un cargo en propiedad
deben cumplir una nueva destinación en un lugar distinto de su residencia habitual, como también a
aquellos que ocupan un cargo a contrata y tienen que asumir un empleo en propiedad y para lo cual
se ven obligados a cambiar su residencia habitual (18306/91 ).
Para determinar si corresponde otorgar esta asignación debe examinarse la efectividad del cambio
de residencia del funcionario que lo solicita, pues ella tiene un carácter indemnizatorio, siendo su
objeto auxiliar económicamente al empleado que para asumir un cargo debe cambiar su residencia
habitual, trasladando a la nueva ciudad su alojamiento permanente (35847/03, 40962/04). De
conformidad con lo dispuesto en el Dicccionario de la Real Academia de la Lengua Española,
"residencia" es acción o efecto de residir y este último vocablo importa "estar establecido en un
lugar", de lo que se infiere que constituye residencia habitual, en los términos que indica la normativa
que se analiza, la permanencia razonable y repetida dentro de una ciudad en la que el empleado vive
o habita con su familia, desarrollando una estrecha vinculación con la zona (33172/02, 40962/04).
Luego, los profesionales funcionarios pertenecientes a la Etapa de Destinación y Formación que, en
virtud de una comisión de estudios, deban incorporarse a un programa de especialización que los
obligue a cambiar su residencia habitual en razón de ella, les asiste·el derecho a percibir el beneficio
establecido en el articulo 29 de la ley 15076, en relación con el articulo 93 (actual articulo 98), letra
d), de la ley 18834 (40962/04).
La expresión "al lugar en que residía antes de ser nombrado", utilizada en este inciso, ha de
entenderse referida a la localidad de origen del respectivo empleado, vale decir, aquella en que
ingresó a la institución y desde la cual se vio obligado a desplazarse para asumir su cargo o cumplir
una nueva destinación (27557/90, 34297/90, 4594/01 ).
Para que proceda el beneficio de asignación por cambio de residencia se requiere que al funcionario
se le envíe a prestar servicios a un lugar distinto, ya sea para asumir un cargo o cumplir con una
nueva destinación y que, en consideración a ello, se vea en la obligación de cambiar su residencia
habitual, esto es, debe existir un desplazamiento físico del servidor para cumplir las tareas que la
autoridad le ha encomendado. Una vez que ha cesado en funciones, puede volver al lugar en que
residía antes de ser nombrado, y en este caso, tiene derecho al goce de la asignación, esto es,
pasajes y flete (17306/90, 16208/95, 5188/97).
La asignación por cambio de residencia exige que los funcionarios al asumir sus cargos hayan debido
cambiar su residencia habitual y que al cesar en ellos deban retornar a la misma. Por tal motivo,
es improcedente pagar este beneficio al trabajador que deja de desempeñar el cargo que servia y
decide permanecer en el lugar donde desarrollaba sus funciones, porque no se ha configurado un
desplazamiento físico de retorno hacia el lugar en que residía antes de ser nombrado (17306/90,
30870/94, 21392/96, 23263/98).
Carece del derecho a la asignación por cambio de residencia el empleado destinado a una localidad
determinada que diariamente viaja desde su domicilio familiar al lugar de trabajo. Para que la
Administración solvente el pago de este beneficio se requiere que el traslado del funcionario a la
ciudad de destino implique el cambio efectivo de su residencia primitiva a la nueva de destinación
(35660/79).
El interesado puede acreditar el cambio de residencia con un certificado de residencia emitido por la
unidad de Carabineros que corresponda (20916/98).
El concepto de "remuneraciones" utilizado por la letra d) del articulo 93 (actual articulo 98), se
extiende a todos aquellos emolumentos propios del cargo que se asumirá o, en su caso, del empleo
que sirve el funcionario objeto de una nueva destinación. Este concepto incluye las bonificaciones
de salud y de pensiones previstas en las leyes 18566 y 18675, y comprende también la bonificación
única tributable de la ley 18717, pero no el incremento del DL 3501, de 1980, por tener una finalidad
específicamente compensatoria de imponibilidad y no revestir propiamente el carácter de una
contraprestación (15501/90 -complementado y reconsiderado parcialmente por el 22591/91-,
26384/90, 13362/92 -complementado por el13940/93-).
El fin perseguido por el legislador al otorgar la asignación por cambio de residencia es compensar
los gastos que supone un traslado, tales como pasajes y flete del menaje y efectos personales.
Atendido este propósito, un funcionario destinado a otra región por el Servicio que no impetró el
pago de pasajes que le reconoce esta norma, sino que utilizó su vehículo particular para efectuar
el traslado, lo cual le significó incurrir en gastos de bencina y peajes, tiene derecho al reembolso
de los gastos efectivos en que hubiere incurrido hasta un tope equivalente al valor de los pasajes
que hubiere debido solventar el Servicio, para el empleado y las personas que lo acompañaron, en
cuanto por ellas perciba asignación familiar. En el evento de no efectuarse la referida devolución se
produciría un enriquecimiento sin causa para la Administración (34211/98).
El derecho a pasajes requiere que las personas que acompañen al empleado a su nuevo destino
sean causantes de asignación familiar a la fecha de realizar el viaje. Sin embargo, si la cónyuge
también es funcionaria pública, el derecho a pasaje por su destinación debe ejercerlo ella respecto
del Servicio al cual pertenece, una vez que se formalice dicha medida (40310/79).
El pago de flete que contempla el Estatuto Administrativo no cubre los gastos de exceso de equipaje
-efectos personales-, porque este gasto no forma parte de los costos de traslado de los viajeros,
sino que es un recargo en que voluntariamente incurren los interesados al embarcarse. Tampoco
procede imputar dicho pago a los gastos en que se incurra por concepto de flete como compensación
de carga no utilizada (3126/79).
El pago de flete no incluye los gastos derivados del embalaje de las especies, por cuanto según
el Código de Comercio el flete constituye el precio que el cargador o fletador debe pagar por la
conducción de determinadas mercaderías. La asignación de traslado que se otorga al funcionario
tiene por objeto compensarlo de los gastos que dicho traslado le irrogue, como serán aquellos en
que incurra por el embalaje de sus enseres y efectos personales (90582/74).
El automóvil de propiedad del empleado que cambia de residencia para asumir funciones de titular
en otro punto del territorio nacional, está incluido entre los objetos que pueden ser transportados con
cargo al flete que consulta esta disposición, dentro del limite de peso que ella contempla. El Servicio
debe reembolsar al funcionario aquellos gastos anexos inherentes al transporte, siempre que éstos
sean indispensables para hacerlo efectivo, de modo que si el seguro de los bienes no es necesario
para su traslado ni exigido por el transportista, su importe no puede ser reembolsado (20410/70
-aclarado por el 22632/72, 78963/72 y 55384/73-).
Los empleados a contrata no pueden ser objeto de destinación. Ello tiene su fundamento en el inciso
segundo del artículo 67 (actual artículo 73) del Estatuto Administrativo, que establece expresamente
que la destinación debe ser a un empleo de la misma "jerarquía", y en los artículos 3, letra e), y 9
(actual artículo 1O) de ese mismo cuerpo legal, de acuerdo con los cuales los empleados a contrata
están al margen de las plantas de los ordenamientos permanentes de personal del Servicio de que
se trate, que son los factores que determinan la jerarquía o vínculo jurídico que une a los funcionarios
en una relación de superior a inferior. Por tal motivo, y atendido que la destinación constituye uno de
los presupuestos de la asignación por cambio de residencia, no tieQen derecho a este estipendio los
empleados a contrata (37071/82, 23931/90,24374/90,29644/90, 23215/92,3342/93, 1770/97).
La asignación por cambio de residencia tiene un carácter indemnizatorio, siendo su objeto auxiliar
económicamente al funcionario que para asumir su cargo debe cambiar su residencia habitual,
compensando los gastos irrogados con ocasión de esta circunstancia originada por su nueva
destinación (16997/90 -complementado por el9514/91-, 30853/92, 20916/98).
Corresponde a la autoridad el derecho a elegir, por razones de economía, entre las empresas que
pueden efectuar el transporte con menos costo para el Servicio. No obstante, si el funcionario ha
suscrito un contrato privado con una empresa sin contar con autorización previa del Servicio por
un monto superior al presupuesto más bajo obtenido por la repartición estatal, corresponde que se
le pague esa suma al interesado, a fin que cumpla en parte su obligación, pues de otro modo se
produciría un enriquecimiento sin causa para la Administración (38738/96, 10178/01).
Procede que en aquellos casos en que funcionarios del Estado tienen derecho a que se les conceda
asignación por cambio de residencia, se utilicen vehículos del Servicio para hacer el traslado, siempre
que deban viajar por razones de servicio al lugar de destinación del empleado o a otro más lejano
y en la medida que signifique una disminución de los gastos. No sería lícito autorizar viajes para
traslado exclusivo de enseres del personal, pues ello significaría dar a los vehículos un uso diferente
del que en derecho corresponde (28177/74).
La finalidad general que persigue la ley es optar por el menor costo para la Administración, lo que se
cumple pagando al interesado el presupuesto de traslado de menor valor que obtenga la institución
por los servicios correspondientes (17854/97).
El incremento previsional regulado por el articulo zo del DL 3501, de 1980, no se incluye en el cálculo
de la asignación por cambio de residencia (26384/90, 38972/95).
El plazo de prescripción de seis meses establecido en la ley 18834, articulo 94 (actual articulo 99),
para cobrar la asignación por cambio de residencia, tratándose de traslado por destinación o para
hacerse cargo de un nuevo empleo, se cuenta desde la fecha en que se asume efectivamente el
nuevo empleo (28750/92, 5188/97, 20916/98).
La prescripción del derecho a pago de flete por enseres de un funcionario de una empresa estatal
no se rige por el articulo 453, inciso segundo -actual artículo 480- del Código del Trabajo, pues
dicho texto no contempla la asignación por cambio de residencia y la norma citada está referida a
las acciones provenientes de los actos y contratos regulados por ese Código. Tampoco rige esta
situación la prescripción de la ley 18834, porque si bien el Estatuto Administrativo es aplicable
en algunas materias a los trabajadores de las empresa del Estado, entre ellas no se encuentra
el señalado beneficio. Por lo tanto, al no existir normas especiales acerca de la prescripción del
derecho referido, corresponde aplicar el articulo 2515 del Código Civil (23121/92).
Procede pagar la asignación por cambio de residencia en la medida que el funcionario, al cesar en
funciones, haya vuelto al lugar donde residía al ingresar al Servicio y desde el cual debió desplazarse
para asumir el cargo o cumplir la nueva destinación (1602/91 ).
La norma del inciso segundo de esta letra permite pagar la asignación por cambio de residencia al
personal que cesa en funciones y vuelve al lugar en que vivía antes de ser nombrado, sin formular
distingos sobre la causa de dicho término (19799/90 -complementado por el 27557/90-,
30870/94, 5188/97). De este modo, procede pagar esta asignación en los casos de renuncia
voluntaria (4479/90); renuncia no voluntaria (23048/90, 1602/91); cuando el cese de funciones se
produce por el solo ministerio de la ley (15336/90); y, en las situaciones de calificación insuficiente
o aplicación de la medida disciplinaria de destitución (32671189 -complementado por el 21900/98-,
28910/95).
disposición legal ni a razones de salud, su traslado a una determinada localidad, distinta de aquélla
de su residencia habitual, lo que es acogido favorablemente por la autoridad competente (6890/97).
Tampoco tiene derecho a ese beneficio el servidor que solicita el traslado a una ciudad determinada
y la autoridad lo dispone, aunque a otra distinta, ya que ello no desvirtúa el carácter voluntario del
traslado (30656/00).
La frase "un mes de remuneraciones correspondientes al nuevo empleo" a que alude el inciso segundo
de esta letra, significa que tienen que considerarse todas las rentas que se pagan con carácter
habitual y permanente y que son propias de la plaza que se asume o va a servir el dependiente
objeto de una destinaCión. Deben excluirse aquellos estipendios que tienen carácter transitorio,
eventuales o accidentales, como por ejemplo, los viáticos y las horas extraordinarias, siempre que
estas últimas no sean de las que se efectúan de modo permanente por requerirlo así el desempeño
de los respectivos cargos (17144/90, 11204/91, 13362/92 -complementado por el 13940/93-,
8854/95, 13200/95, 39345/97).
Los servidores que, con motivo de acompañar a sus cónyuges funcionarios a un nuevo lugar de
destino, soliciten su traslado a esa localidad, tienen derecho a percibir la asignación por cambio de
residencia, ya que si bien lo pidieron, esa solicitud obedece al cumplimiento de una obligación legal.
En efecto, el actual texto del articulo 133 del Código Civil, al señalar que "ambos cónyuges tienen
el derecho y el deber de vivir en el hogar común", reconoce implícitamente la obligación del marido
y de la mujer de seguirse recíprocamente al lugar donde uno u otro deba fijar su residencia, salvo
que a alguno de ellos le asistan razones graves para no hacerlo. Corrobora lo anterior, el articulo 68
(actual articulo 74) de la ley 18834, el cual se preocupa expresamente de evitar que los cónyuges
funcionarios regidos por sus disposiciones, con residencia en una misma localidad, sean separados
por un acto de la autoridad, sin su respectiva aceptación, a menos que ambos sean destinados a un
mismo punto simultáneamente (31118/91, 25298/92, 34273/94).
Es posible pagar la asignación por cambio de residencia a un funcionario que solicita el cambio de
destinación por la enfermedad de un hijo menor, debidamente acreditada por la autoridad de salud
respectiva. Tal solicitud de traslado no tiene el carácter voluntario que, de acuerdo con el inciso
segundo de la letra d), hace improcedente su pago, por cuanto es obligación de los padres el cuidado
de sus hijos menores, correspondiéndoles adoptar las medidas tendientes a precaver su normal
desarrollo y dar cumplimiento a las órdenes médicas, incluso alterando su vida cotidiana (16998/95).
También tiene derecho a esta asignación el servidor que pide expresamente su destinación por
motivos de salud calificados por el organismo competente en la materia (6890/97, 27303/97,
30656/00). En cambio, el funcionario que fue objeto de destinación por su expresa solicitud, debido
a motivos de salud, carecerá del derecho a percibir la asignación por cambio de residencia si la
licencia médica no ha sido autorizada por el Servicio de Salud (27303/97).
El empleado que debió trasladarse de localidad para asumir el cargo que ganó en un concurso tiene
derecho a la asignación por cambio de residencia. La opción a una plaza a través de un certamen no
puede considerarse una solicitud de traslado (9514/91, 13264/93, 20418/97).
Corresponde al organismo que otorga el beneficio determinar si efectivamente los servidores volverán
a los lugares correspondientes, según los antecedentes que existan en su poder. Si lo anterior no
fuera posible puede recurrirse a cualquier otro medio que permita verificar fehacientemente el lugar
en que dichos funcionarios poseían su residencia al ingresar a la repartición y la efectividad de su
retorno a él (27557/90).
El derecho a la asignación por cambio de residencia no opera de pleno derecho sino que es necesario
que en cada oportunidad se conceda por el Jefe Superior del Servicio mediante una resolución
que declare y reconozca el beneficio. No hay inconveniente para que en una misma resolución se
nombre, destine y reconozca el derecho a esta asignación (62912/60).
Comentarios:
De acuerdo con el articulo 78 del DFL 338, de 1960, anterior texto que contenía el Estatuto
Administrativo, la asignación por cambio de residencia era un beneficio establecido en favor de
los empleados que para asumir funciones debían cambiar su residencia habitual, pero no estaba
previsto para quienes regresaran a ella con motivo del término de las mismas, como ocurre en la
actualidad con el articulo 93 (actual articulo 98}, letra d}, de la ley 18834.
Letra e)
De acuerdo con los articulo 93 (actual articulo 98), letra e), de la ley 18834, y 1 y 3 del DFL 262,
de 1977, del Ministerio de Hacienda, Reglamento de Viáticos para el personal de la Administración
Pública, el viático es un beneficio económico consistente en un subsidio a que tienen derecho
los trabajadores del sector público, para compensar los mayores gastos en que deben incurrir,
cuando por razones de servicio y en cumplimiento de cometidos o comisiones administrativas, les
corresponde pernoctar o alimentarse fuera del lugar de su desempeño habitual, dentro del territorio
de la República. Este estipendio no será considerado sueldo para ningún efecto legal. Por derivar
precisamente del cumplimiento de esas funciones, debe ser de cargo del Servicio y no del empleado.
Lo que determina la procedencia de la asignación de viático no es el desplazamiento obligado del
funcionario fuera del lugar de su residencia habitual, sino la circunstancia de que en el cumplimiento
de la resolución respectiva, deba incurrirse en gastos de alojamiento o alimentación (22378/95,
34108/01,30208/02,55364/05, 2767/07).
El viático -sea pagado en dólares o en moneda nacional- es una asignación a que tienen derecho
los funcionarios públicos por haberse ordenado una comisión de servicio o un cometido funcionario
y que, por ese motivo, deben trasladarse del lugar habitual donde ejercen sus funciones (30064/90,
8162/93,27448/94, 2239/01, 19864/01).
Si el empleado no solventa los gastos derivados de la comisión de servicio o del cometido funcionario
porque el propio Servicio le proporciona alojamiento y alimentación, no tiene derecho al viático
(8162/93, 10918/93, 33316/95, 2239/01, 19864/01). Tampoco le asiste este beneficio cuando esos
gastos son de cargo de una institución diversa a la que pertenece el trabajador (30064/90, 27448/94,
19864/01); o si están incluidos en el costo del pasaje respectivo, como ocurre si pernocta en trenes,
buques o aeronaves u otro medio de transporte (30064/90, 27448/94, 19864/01). En todos estos
casos no corresponde conceder esta remuneración compensatoria, pues no existe causa que así lo
permita, lo que también alcanza a los viáticos en dólares (30208/02).
El funcionario que con motivo de una invitación efectuada al Servicio viaja al extranjero con los
gastos de alojamiento y alimentación pagados, tiene derecho, según los principios generales, al
reembolso de aquellos gastos efectuados con motivo de la comisión de servicio que por concepto
de movilización hubo de efectuar de su propio peculio y que no fueron sufragados por el país o
entidad anfitrión, siempre que presenta las facturas, boletas o comprobantes del referido gasto.
Ello se funda en el hecho que al existir gastos efectuados por un servidor público con motivo del
cumplimiento de sus labores, esto es, desembolsos que no son consecuencia de un acto personal
y voluntario, si no se reembolsan, constituye un enriquecimiento sin causa para el Fisco (11023/98,
2239/01, 55364/05). En relación a las tasas de embarque de los aeropuertos, el funcionario público
tiene derecho al reintegro de los fondos utilizados en el pago de las tasas de embarque aéreo con
ocasión de una comisión de servicios al extranjero (33476/97, 55364/05).
No tienen derecho a recibir viáticos aquellos funcionarios que, mientras estaban comisionados en
la sede central del organismo para efectuar un curso, dejaron de asistir a éste, adhiriendo a un
paro de actividades dispuesto por la Asociación de Empleados respectiva. Ello tiene su fundamento
porque el viático se creó como un beneficio compensatorio a que tiene derecho el servidor cuando,
por razones de servicio, efectivamente incurre en gastos de alimentación y alojamiento, y ha debido
desplazarse del lugar de su desempeño habitual, elementos que determinan el otorgamiento de la
referida franquicia previa calificación de la autoridad a la cual corresponde ordenar el respectivo
cometido funcionario (8699/93).
Los gastos en que incurra un Consejero Regional para cumplir las actuaciones que le ha encargado
el Consejo Regional fuera del lugar habitual de su residencia, deben ser pagados por dicho cuerpo
colegiado, mediante el reembolso de sumas que el interesado acredite haber empleado en el
cumplimiento de su cometido oficial (3771194).
Es improcedente pagar viático a un funcionario que fue invitado por una Subsecretaría de Estado, en
su calidad de dirigente de una agrupación gremial, para el desempeño de las labores de representación
que inviste, por cuanto en este caso no ha existido un cometido funcionario que lo habilite para tener
derecho a ese beneficio (30140/08).
Los viáticos se pagan en relación a las rentas percibidas al momento en que aquéllos se devengan,
sin posteriores modificaciones, a menos que expresamente lo ordene la ley (48886/78, 43106/00).
De esta manera, sólo corresponde pagar el viático cuando concurren los requisitos que lo determinan,
en relación a la remuneración que se percibía al momento de devengarse dicho beneficio. En otras
palabras, siendo el derecho al mismo esencialmente transitorio, pues se agota por el sólo hecho
de percibirlo bajo las circunstancias que lo condicionan, de ello se sigue que, cuando el viático se
devenga bajo la vigencia de una determinada remuneración, el monto de ésta fija definitivamente su
La fijación de mayores remuneraciones dispuesta por la ley, con efecto retroactivo, únicamente dice
relación con los beneficios pecuniarios generales y permanentes previstos en un determinado régimen
de rentas, de modo que tales modificaciones no pueden alcanzar a las retribuciones originadas por
desempeños ocasionales efectuados en el periodo intermedio, como son, por ejemplo, las horas
extraordinarias y los viáticos. Por lo tanto, tales incrementos no afectan los pagos efectuados en
relación con dichos desempeños ocasionales, los cuales han debido ajustarse a los sueldos vigentes
al momento en que se efectuaron las labores correspondientes (12738/94).
Si con motivo del ejercicio del cargo de suplente, el funcionario debe ausentarse del lugar donde
desarrolla dicha suplencia generando el derecho a viáticos, éste deberá pagarse conforme a la
remuneración asignada al cargo desem·peñado en esa calidad, siempre que se cumplan los supuestos
señalados en el articulo 4 de la ley 18834, ya que en caso contrario, deberá estarse a los estipendios
correspondientes al cargo de que se es titular (2767/07).
La amplitud de los términos en que está concebida la norma de esta letra, al referirse a "otros
análogos", hace posible reembolsar los gastos de combustible y lubricantes en que incurre el
empleado para cumplir una comisión de servicio o cometido funcionario cuando utiliza su vehículo
particular. En caso contrario, se produciría un enriquecimiento sin causa para la Administración
(7743/90, 28541/90,32982/90, 11095/92, 10918/93, 7192/99).
Es improcedente reembolsar con viáticos Jos gastos en que incurren Jos funcionarios cuando la función
que les corresponde desarrollar se encuentra establecida como una carga pública (32982/90),
Según el articulo 3 del DFL 262, de 1977, del Ministerio de Hacienda, Reglamento de Viáticos para
el Personal de la Administración Pública, se entiende, para esos efectos, por Jugar de desempeño
habitual del trabajador, la localidad en que se encuentren ubicadas las oficinas de la entidad donde
presta servicios el empleado, atendida su destinación, agregando que constituyen una misma
localidad, para estos fines, los conglomerados urbanos y suburbanos inmediatamente adyacentes
que cuenten con sistemas de movilización colectiva que Jos intercomuniquen o sirvan en conjunto, las
distintas comunas que Jos integren. Por decreto 1192, de 1990, del Ministerio de Hacienda (decreto
actualmente derogado por el decreto 115, de 1992, de esa Secretaria de Estado), se define cuáles
de estos conglomerados constituyen una misma localidad, otorgándose viático por gastos originados
por el traslado de uno de ellos a otro, no así dentro de la localidad, correspondiendo al Jefe Superior
del Servicio ponderar situaciones de hecho que se presenten, atendidas las características propias de
las localidades a que se traslade el funcionario, cuando se trate de conglomerados no comprendidos
en este decreto (10918/93).
El cometido funcionario que genere gastos debe disponerse por resolución u orden interna formal,
previa a su ejecución o al menos de los giros que ordenen el pago del beneficio (10918/93,
42785/98).
Una vez ordenada una comisión de servicio o un cometido funcionario el viático se devenga por el
solo ministerio de la ley (42785/98).
El pago de los gastos que irrogue una com1s1on de serviCIO dispuesta en el exclusivo interés
institucional, entre los que se encuentra el derecho a percibir viático, serán de cargo de la entidad que
la ordena, beneficio éste que dado su carácter público es irrenunciable, y aun cuando el funcionario
haga presente su intención de no impretrarlo, tal manifestación de voluntad carece de todo efecto
legal (3261/84, 33037/96, 20879/08).
La omisión de la autoridad de dar curso regular y completo al acto administrativo que otorga
determinados beneficios, como por ejemplo, viáticos y pagos de tasas de embarque, no es imputable
al interesado, y en esta virtud, no es dable oponer prescripción (27738/96). Ello, porque las personas
actúan sobre la base del proceder regular de la Administración en la confianza y expectativa que
su situación se consolidará como en derecho corresponde, principio doctrinario éste que tiene su
fundamento en los valores y principios que emanan de la propia Constitución Política (1761/00).
Luego, un beneficio reclamado oportunamente, pero no perfeccionado por falta de pronunciamiento
de la autoridad, interrumpe indefinidamente la prescripción extintiva y, por ende, no afecta la vigencia
de la franquicia, sin desmedro de las correspondientes responsabilidades por el retardo. Sostener lo
contrario, atentaría contra la equidad natural, perjudicando a quien fue victima del error u omisión de
la Administración, sin tener responsabilidad o participación alguna (33539/96, 39052/99, 5181/02).
Si un empleado es ascendido a un grado superior tiene derecho a percibir diferencia por viáticos que
se le otorgaron al enviarlo a cumplir un cometido funcionario, cuando, atendida la naturaleza de esas
funciones, sólo pudo ser cumplido por el interesado precisamente en el nuevo grado (26924/93).
Debe aprobarse la rendición de viáticos presentada por algunos funcionarios que cumplieron un
cometido en el extranjero, que incluye los gastos realizados en una ciudad no considerada en el
decreto que ordenó la comisión de servicio, con el fin que lo's interesados asistieran a actividades
de desarrollo y capacitación, y cuya visita fue dispuesta por las autoridades extranjeras, por haberse
realizado dentro del mismo período considerado inicialmente, lo que no afectó el número de días
contemplados para la ejecución total de esos desempeños ni el lapso cubierto con el viático. Resulta
contrario a derecho y pugna con los principios generales, el que existan gastos efectuados por
funcionarios, en razón de las labores que deben ejercer, que no sean reembolsados, pues ello
involucraría un enriquecimiento sin causa para la Administración (11023/98).
Las personas contratadas a honorarios asimiladas a un grado de la Escala Onica de Sueldos pueden
percibir viáticos en la medida que así se haya establecido en el respectivo convenio. Dicho beneficio
no constituye un viático propiamente tal sino un honorario adicional al principalmente pactado
(25095/94, 18250/00).
Para que proceda el pago del "viático de faena" que regula el articulo 7 del DFL 262, de 1977, del
Ministerio de Hacienda, se requiere la concurrencia de los siguientes requisitos copulativos: a) que el
trabajador deba trasladarse a un lugar alejado de los centros urbanos, calificado como tal por el jefe
superior del servicio, b) que dicho traslado se efectúe para el ejercicio de labores habituales y e) que
este desplazamiento se produzca diariamente (2774/99, 4424/05). Con respecto al primer requisito,
es necesario que el jefe superior del servicio, institución o empresa califique si el lugar específico a
que debe trasladarse diariamente el funcionario para cumplir sus labores habituales se encuentra
alejado de un centro urbano, facultad que la autoridad debe ejercerla teniendo en consideración la
normativa que regula la materia (74663/77, 5338/97, 32675/99). Luego, para los efectos del pago
de la remuneración indicada a aquellos funcionarios que deben trasladarse diariamente para cumplir
sus labores habituales a lugares que se encuentran alejados de un centro urbano, esa jefatura en
forma previa, mediante una resolución, deberá calificar "los lugares alejados de un centro urbano",
teniendo en consideración para ello las normas que sobre la materia se contienen en el respectivo Plan
Regulador (15048/03). No resulta aplicable a las situaciones de que se trata el articulo 1, letra C) del
decreto 115, de 1992, del Ministerio de Hacienda, pues el citado precepto tiene por objeto determinar
los conglomerados urbanos o suburbanos que constituyen el "lugar de desempeño habitual" del
trabajador para los fmes del viático cuando éste se ausenta de esa localidad (15048/03).
El viático de faena es una clase de viático que, por ende, tiene carácterindemnizatorio y eminentemente
transitorio, cuyo pago sólo es procedente, una vez que la autoridad ordene la comisión o cometido
funcionario y siempre que reúna los demás requisitos establecidos en el articulo 7 del DFL 262,
de 1977, del Ministerio de Hacienda. El jefe superior del servicio, en ejercicio de una potestad
discrecional, califica, tanto la procedencia de otorgar este beneficio, como, si las circunstancias así lo
ameritan, de ordenar su suspensión. Las remuneraciones adicionales que se otorgan por concepto
de estos viáticos, por su naturaleza compensatoria, no tienen el carácter de imponible, por lo cual, su
no percepción, no tiene incidencia alguna en el cálculo de las futuras pensiones (4424/05).
Concordancias: Arts. 75, 76, 77 y 78 del EA; DFL 262, de 1977, del Ministerio de Hacienda,
Reglamento de Viáticos para el personal de la Administración Pública; Decreto 115, de 1992, del
Ministerio de Hacienda, define localidades para los efectos del pago de viáticos; 16 de la ley 19479,
establece el viático de frontera, su monto diario lo regula el Decreto 898, de 1997, de Hacienda;
Decreto 1, de 1991, del Ministerio de Hacienda, que fija el monto de viáticos en dólares para el
personal del sector público que debe cumplir comisiones de servicio en el extranjero; Decreto 252,
de 2007, del Ministerio de Relaciones Exteriores, que establece determinación del coeficiente del
. Costo de Vida en que deben reajustarse los sueldos de los funcionarios de la Planta "A" del Servicio
Exterior de la República de Chile, aplicable a los viáticos en moneda extranjera.
· Letra f)
Las asignaciones a que se refiere esta letra prescriben, de acuerdo con lo dispuesto en el articulo
94 (actual articulo 99) de la ley 18834, en el plazo de seis meses contado desde la fecha en que se
hacen exigibles (13377/90, 20029/91,34597/93,30099/95,31284/95,27024/96,4804/99,26495/99,
9208/00).
Derecho a la asignación profesional se devenga desde que se acredite poseer un titulo profesional
habílitante para percibir tal estipendio, esto es, desde la data en que se comunicó al servicio el titulo
respectivo, y no desde la fecha en que Contraloria se pronunció sobre la calidad del referido diploma.
En este último caso no tendría aplicación el articulo 99 de la ley 18834, en cuanto a que el derecho
al cobro de las asignaciones que establece el articulo anterior -entre ellas la citada asignación, en
virtud de lo dispuesto en el articulo 98, letra f), del mismo texto legal, que hace referencia a las demás
asignaciones contempladas en leyes especiales-, prescribe en el plazo de seis meses contado desde
la fecha en que se hicieron exigibles. Ello, porque el hecho que un beneficio económico solicitado
oportunamente no se perfeccione por falta de diligencia de la autoridad interrumpe indefinidamente
la prescripción extintiva, pues aquélla se encuentra obligada a ejercer su potestad y, por ende, la
tardanza en resolver la petición no afecta la vigencia de tal derecho. Lo contrario, perjudicaría a
quien fue víctima del error u omisión, sin tener responsabilidad o participación alguna (31871/07).
Comentarios:
Según se desprende de la letra f), la enumeración que realiza este articulo no es taxativa, por lo que no
excluye la posibilidad que los funcionarios públicos puedan percibir otros beneficios remuneratorios
previstos en leyes especiales.
Comentarios generales:
Los funcionarios públicos pueden impetrar el pago de los beneficios previstos en el articulo 98 del
Estatuto Administrativo, dentro del plazo de seis meses que consulta su articulo 99, contado desde
la fecha en que se hubieren hecho exigibles.
ARTICULO 99.- El derecho al cobro de las asignaciones que Ley 18.834, Art. 94.
establece el articulo anterior, prescribirá en el plazo de seis
meses contado desde la fecha en que se hicieron exigibles.
Interpretación:
La prescripción extintiva es una institución de orden público cuyo objeto es evitar que las relaciones
jurídicas se mantengan por largo tiempo en una situación de incertidumbre, constituyendo además
una sanción para el acreedor negligente en el ejercicio de sus derechos (24888193).
La prescripción ha sido establecida como una forma de dar certeza a las situaciones jurídicas,
sancionando con la extinción del derecho correspondiente a quien no lo ha ejercido en la oportunidad
que le brinda la ley, lo cual en este caso ocurrirá después de seis meses contado desde la fecha en
que la respectiva asignación se hizo exigible. En suma, para que opere la prescripción se requiere:
que haya una obligación pendiente, que transcurra un determinado lapso y que haya inactividad por
parte del acreedor (1347193, 1532198, 28032198).
El plazo de prescripción de seis meses previsto en el artículo 94 (actual artículo 99) del Estatuto
Administrativo se cuenta desde el día en que conforme al artículo 89 (actual artículo 94) se pagan
periódicamente las remuneraciones. Esta es la fecha precisa en que se hace exigible la obligación de
pago de remuneraciones para la Administración por parte del empleado (1280192 -complementado
por el24428196-, 25350195 -complementado por el 25983196-, 27024196).
Las asignaciones a que se refiere el artículo 94 (actual artículo 99) del Estatuto Administrativo se
hacen exigibles desde el momento en que se devengan, esto es, desde que se han verificado
las condiciones que establece la ley para el pago de las mismas, pues en ese instante nace el
derecho a percibir las sumas respectivas (36052195 -complementado por el 26264196-, 47081199,
14463102).
La prescripción a que se refiere el artículo 94 (actual artículo 99) no se aplica a los sueldos, los
que están sujetos a la de dos años prevista en el artículo 155 (actual artículo 161) de la ley 18834
(18582195, 9208100, 30135104).
La prescripción de los dos años que establece el articulo 155 (actual artículo 161) del Estatuto
Administrativo, regula la de los derechos estatutarios de los funcionarios en forma amplia, esto es,
tanto los contemplados en el mencionado Estatuto como en otros cuerpos legales, pero no alcanza a
las asignaciones referidas en el artículo 94 (actual articulo 99) de ese ordenamiento, como tampoco
se rige por la prescripción del artículo 2515 del Código Civil (30135/04).
El plazo para solicitar el pago de las siguientes asignaciones prescribe en seis meses, contado
desde la fecha en que los respectivos emolumentos se hicieron exigibles: movilización (6899/91);
horas extraordinarias (26339/94, 37060/99, 2815/00, 46051/00); cambio de residencia (9559/92,
28750/92); viáticos (30728/90, 3929/00); las contempladas en leyes especiales, conforme a la letra
f) del artículo 93 (actual articulo 98) (13377/90, 20029/91,34597/93,30099/95,31284/95,27024/96,
4804/99, 26495/99, 9208/00).
Este articulo no alcanza a los derechos que tiene el Fisco por las sumas mal percibidas por los
servidores estatales. De este modo, Jos créditos que el Fisco tiene en contra de los funcionarios
públicos por estipendios indebidamente percibidos se rigen por el artículo 2515 del Código Civil, que
establece un plazo de prescripción de cinco años (1347/93, 25110/95, 33203/07).
El "prescribiente" es aquel que se ve favorecido con el transcurso del plazo de prescripción a que se
refiere el articulo 94 (actual artículo 99) del Estatuto Administrativo, esto es, el deudor (1347/93).
La prescripción se interrumpe por vía administrativa desde el momento que se presenta la solicitud
en que se pide el reconocimiento del respectivo derecho, sin necesidad de alegaría ante Jos
Tribunales de Justicia. Además, la Contraloría General de la República puede declararla por
sí sola (13377/90, 1280/92,14158/94 -complementado por el 24428/96-, 27024/96, 28032/98,
60697/05, 10679/06).
Normalmente interrumpe la prescripción la solicitud del interesado hecha valer ante la autoridad que
debe reconocer el beneficio o los actos que tienen el carácter ~e reclamaciones y que involucran el
ejercicio de la acción pertinente, Jo que ocurre cuando los interesados y los beneficios que solicitan
se individualizan a través de documentos que fomalizan ante la autoridad correspondiente. Si un
beneficio reclamado oportunamente no se perfecciona por falta de pronunciamiento de la autoridad,
la cual está obligada a ejercer su potestad, también interrumpe indefinidamente la prescripción
extintiva y, por ende, no afecta la vigencia de la franquicia, sin desmedro de las correspondientes
responsabilidades por el retardo, pues lo contrario atenta contra la equidad, perjudicando a quien
fue víctima del error u omisión, sin tener responsabilidad o participación alguna. Luego, la falta de
diligencia de la autoridad para dar curso regular y completo al procedimiento para el reconocimiento
y pago de un beneficio no ha podido afectar al interesado que actuó en forma diligente y de buena
fe, razón por la cual no le afecta prescripción alguna. Sostener lo contrario, implicaría castigar
al recurrente por la inactividad de la Administración, vulnerando además el principio de confianza
legítima fundado en el actuar de la Administración y la expectativa de que su situación se consolidaría
como en derecho corresponde, principios que emanan de la propia Constitución (25183/06).
A partir de la vigencia del Estatuto Administrativo, esto es, desde el 23 de septiembre de 1989, el
derecho al cobro de las asignaciones establecidas en el articulo 93 (actual articulo 98) prescribe
en el plazo de seis meses contado hacia atrás desde la fecha en que se hicieron exigibles. En
consecuencia, todas las solicitudes de pago de beneficios económicos que se presenten con
posterioridad a esa fecha, se rigen por este plazo (14062/90).
La prescripción contemplada en este articulo opera respecto de las sumas del periodo que excede
los seis meses contados hacia atrás desde la fecha de la presentación de la solicitud en que se pide
el pago de la franquicia adeudada (1347/93, 29812/99).
De acuerdo con el principio de legalidad, la autoridad administrativa no puede renunciar a hacer valer
la prescripción extintiva, a menos que exista una autorización legal expresa (20250/91, 16560/01 ).
La solicitud de condonación no impide que pueda aplicarse la prescripción, cuando se han configurado
sus tres elementos constitutivos, esto es, obligación pendiente, transcurso del plazo e inactividad del
acreedor. En todo caso, la prescripción opera únicamente respecto de las deudas pendientes y no
se extiende a la parte que se haya pagado con motivo del otorgamiento de facilidades por parte de
la Contraloria General de la República (1347/93).
El derecho de determinados funcionarios del Ministerio Secretaria General de Gobierno para cobrar
la asignación de dirección superior no pagada en su oportunidad, está afectado por el transcurso del
lapso de prescripción de seis meses del articulo 99, contado desde la data en que dichos estipendios
se hicieron exigibles, de modo que, no habiendo sido requeridos oportunamente por aquéllos, la
aludida Secretaria de Estado no ha podido dejar de reconocer los supuestos que hacen procedente
la institución jurídica referida que ha operado en su favor, debiendo abstenerse de efectuar los
pagos respectivos, puesto que siempre podrá oponer la prescripción extintiva a cualquier acción de
cobro de los estipendios indicados intentada por los interesados. Razones de buena administración
aconsejan que si dicho Ministerio adeuda asignaciones a sus funcionarios y paralelamente tiene
con esos mismos servidores acreencias de estipendios pagados en exceso, luego de aplicar la
prescripción extintiva a las primeras, con el objeto de precisar lo actualmente debido por tal rubro, se
descuenten estos montos de los aludidos créditos. En otras palabras, procede imputar las deudas
originadas con ocasión de las asignaciones de dirección superior no pagadas en su oportunidad a las
autoridades respectivas, y que sean actualmente exigibles, a las cantidades pagadas en exceso por
concepto de asignación de modernización a los mismos funcionarios, requiriendo, si correspondiera,
el reintegro del saldo favorable al Fisco (33203/07).
El plazo de prescripción de seis meses a que se refiere el articulo 94 (actual articulo 99), tratándose
de la asignación por trabajos extraordinarios, se cuenta desde el día en que periódicamente se pagan
las remuneraciones,· por mensualidades iguales y vencidas. En cambio, las horas extraordinarias
que se pagan con descanso complementario prescriben en el plazo de dos años desde que se
hubieren hecho exigibles, o sea, a contar de la fecha en que se dictó el decreto o resolución que fijó
los descansos suplementarios (14158/94 -compl!lmentado por el24428/96-).
El plazo de prescripción de seis meses contemplado en el articulo 94 (actual articulo 99) de la ley
18834, para cobrar la asignación por cambio de residencia regulada por el articulo 93 (actual articulo
98), letra d), de esa misma ley, tratándose de traslado por destinación o para hacerse cargo de un
nuevo empleo, se cuenta desde la fecha en que se asumen efectivamente los nuevos desempeños
(28750/92, 20916/98).
El derecho al pago de la asignación por cambio de residencia devengado bajo la vigencia del DFL
338, de 1960, sin que alcanzara a completar los cinco años de prescripción establecidos en ese
cuerpo estatutario al entrar en vigencia la ley 18834, confiere al Servicio respectivo, esto es, al
prescribiente, el derecho del articulo 25 de la Ley sobre Efecto Retroactivo de las Leyes, según el
cual puede escoger entre una y otra norma de prescripción, pero en caso de elegir la del artí.9ulo 94
(actual articulo 99) de la ley 18834, la prescripción deberá contarse a partir de la vigencia del nuevo
Estatuto Administrativo (18465/90).
Concordancias: Arts. 98 y 161 del EA; 2515 del Código Civil; 25 de la Ley sobre Efecto Retroactivo
de las Leyes, de 7 de octubre de 1861; 98 del EAM.
Comentarios:
Por regla general, los derechos de los funcionarios públicos pueden solicitarse y hacerse efectivos
en cualquier momento mientras no prescriban.
La prescripción es una sanción que la ley impone a la inactividad del titular de un derecho por no
haberlo ejercido durante un determinado lapso. Esta institución se ha establecido como una forma
de dar certeza a las situaciones jurídicas, castigando a quienes no han ejercido sus derechos en la
oportunidad prevista por la ley.
La prescripción debe ser alegada por los respectivos interesados, quienes deben hacerla valer
formalmente para que la Administración pueda aplicarla, no siendo factible que sus organismos la
declaren o reconozcan de oficio. La jurisprudencia administrativa no ha exigido que la alegación
de la prescripción deba hacerse ante los Tribunales de Justicia o previo su pronunciamiento. Por
el contrario, la Contraloria General ha aplicado y aplica habitualmente, por si sola, la institución de
la prescripción, tanto respecto de los derechos previsionales como de los remuneracionales, cuyo
conocimiento le corresponde de acuerdo con las facultades que le confiere el articulo 6 de la ley
10336.
Esa misma jurisprudencia ha establecido que la autoridad administrativa puede declarar o reconocer
la prescripción que le haya sido alegada o invocada respecto de cualquier tipo de obligación que
sea de su competencia o incumbencia, sin intervención de la judicatura ordinaria y aunque no exista
norma expresa que la autorice para ello.
Si no se alega la prescripción en tiempo y forma, procede exigir al interesado, por ejemplo, el reintegro
de las sumas que adeude a la Administración.
El articulo 99 del Estatuto Administrativo establece una prescripción extintiva de caracter especial
del derecho al cobro de determinadas asignaciones previstas en su articulo 98, a que puede tener
derecho el personal de la Administración.
ARTICULO 100.- El funcionario conservará la propiedad de su cargo, Ley 18.834, Art. 95.
sin derecho a remuneración, mientras hiciere el servicio militar o
formare parte de las reservas nacionales movilizadas o llamadas a
instrucción. Lo anterior no interrumpirá la antigüedad del funcionario
para todos los efectos legales.
Interpretación:
De acuerdo con el articulo 16 del decreto ley 2306, de 1978, que dicta normas sobre Reclutamiento
y Movilización de las Fuerzas Armadas, toda persona acuartelada para hacer el servicio militar
obligatorio o que sea llamado al servicio activo o movilizada de acuerdo con las disposiciones
de este decreto ley, retendrá los derechos inherentes a su función, empleo o trabajo incluida la
antigüedad para el ascenso, como si continuara en su desempeño. Teniendo en cuenta, además,
lo previsto en el artículo 100 del Estatuto Administrativo, se colige que el tiempo de conscripción
militar es considerado como antigüedad en la Administración del Estado para efectos del escalafón
de mérito, esto es, para el ascenso, en el caso de funcionarios que, al momento de desempeñar un
cargo en la Administración, hayan sido llamados a cumplir con dicha carga pública. Luego, si para
un funcionario que tenia esa calidad antes de su periodo de conscripción militar es computable este
tiempo para efectos de la antigüedad en la Administración del Estado, no se divisa razón para que un
servidor que se incorpore a ella con posterioridad al término de la conscripción, no pueda hacer valer
dicho lapso, pues lo contrario derivaría en una discriminación arbitraria respecto de personas que
se encuentren en una situación similar, esto es, la de un funcionario público que reclame, para los
efectos de que se trata, el reconocimiento del tiempo ocupado en la conscripción militar, con la única
diferencia de que cumplió con dicho deber antes de adquirir la calidad de servidor público. Dicha
conclusión se corrobora con lo previsto en el articulo único de la ley 11133, según el cual al personal
de la Administración fiscal, semifiscal, beneficencia pública y de la Empresa de los Ferrocarriles del
Estado se les reconocerá y abonará, para todos los efectos legales, el tiémpo servido en cumplimiento
de la Ley sobre Servicio Militar Obligatorio (27779107).
Concordancias: Arts. 22 de la CP de laR; 99 del EAM; único de la ley 11133; DL 2306, de 1978,
legisla sobre reclutamiento y movilización de las Fuerzas Armadas.
ARTICULO 101.- El funcionario que usare indebidamente los derechos Ley 18.834, Art. 96.
a que se refiere este párrafo, estará obligado a reintegrar Jos valores
percibidos, sin perjuicio de su responsabilidad disciplinaria.
Interpretación:
Quienes ingresan a la Administración tienen derecho al pago de una remuneración por aplicación
del principio retributivo. No obstante, cuando su percepción por parte del funcionario es errónea, se
produce un enriquecimiento ilícito en favor de éstos, surgiendo la obligación de reintegrar las sumas
mal percibidas. En estos casos, los organismos públicos están obligados a hacer efectivo los créditos
de que sean titulares y adoptar los resguardos pertinentes para obtener el resarcimiento de los
perjuicios ocasionados por la percepción indebida de tales remuneraciones. Para el cumplimiento de
lo anterior, el artículo 67 de la ley 10336 faculta al Contralor General para ordenar que se descuenten
de las remuneraciones de los funcionarios de la Administración, las sumas que éstos adeuden
conforme a lo señalado, mientras que por resolución fundada podrá liberar total o parcialmente
la restitución de las remuneraciones indebidamente pagadas, cuando, a su juicio, hubiere habido
buena fe o justa causa de error (41301/05).
Concordancias: Arts. 93 a 100 del EA; 100 del EAM; 67 de la ley 10336.
Párrafo 3'
De Jos feriados
ARTICULO 102.- Se entiende por feriado el descanso a que tiene Ley 18.834, Art. 97.
derecho el funcionario, con el goce de todas las remuneraciones
durante el tiempo y bajo las condiciones que más adelante se
establecen.
Interpretación:
Una de las características esenciales del feriado es su continuidad, por lo que, una vez concedido,
ya sea que se haga efectivo en forma total o parcial no es procedente su interrupción ni aún por la
ocurrencia de otro beneficio estatutario de naturaleza diferente. De esta manera, si un funcionario
comenzó a hacer uso de su feriado legal no tiene derecho a que éste sea suspendido por habérsele
concedido una licencia médica durante ese periodo, debiendo entenderse cumplidos ambos beneficios
en forma simultánea (16737/91, 3824/92, 6113/94, 36754/97,18490/98). Excepcionalmente, y en
oportunidades debidamente calificadas, debe reconocerse a la autoridad atribuciones para suspender
el feriado de un servidor afectado por una enfermedad grave por el tiempo que ésta dure, ya que,
en ese evento, el feriado no cumpliría con su principal objetivo, cual es el descanso del trabajador,
por lo que resulta válido justificar su ausencia sólo con la licencia que reconoce dicha dolencia. Esa
facultad debe ejercerse con criterios racionales y fundamentada, evitando incurrir en diferencias
arbitrarias, ya que tal decisión es excepcional (8990/00, 28755/00, 45874/04).
Los funcionarios que con motivo de licencias médicas se ven impedidos de gozar del feriado, no
pueden impetrar la franquicia al año siguiente, pues tienen que hacer uso de ella dentro del respectivo
año calendario (24921/92, 14089/94, 30471/97).
El feriado es un beneficio estatutario irrenunciable. Por lo tanto, el hecho que la Jefatura Superior fije
los periodos en que se debe hacer uso de los feriados, no significa que aquellos servidores que no
puedan gozar de él durante esos lapsos pierdan el derecho a éste, toda vez que ese procedimiento
no tiene más alcance que establecer el orden que el Servicio considera conveniente para hacer
uso del derecho en términos que su funcionamiento no se vea afectado por la ausencia de un
determinado número de personal (9091/92).
El feriado es "el descanso a que tiene derecho el funcionario", de modo que este beneficio sólo
aprovecha a los servidores públicos regidos por el Estatuto Administrativo mientras invistan la calidad
de tal. De esta manera, cuando los funcionarios cesan en funciones pierden el feriado pendiente que
puedan tener, a menos que se reincorporen a la Administración el mismo año de su alejamiento, al
recuperar esa calidad y los derechos inherentes a dicha condición (140/98).
De acuerdo con este precepto, la única manera de disfrutar el beneficio del feriado, cuya finalidad
es que el funcionario se recupere del desgaste físico que ha sufrido como consecuencia del trabajo,
es en la forma y condiciones que establecen los articulas 97 y siguientes (actuales articulas 102 y
ss.). De este modo, si por cualquier motivo el servidor no puede hacer uso de él en el tiempo a que
se refiere el Estatuto Administrativo, el derecho a impetrarlo se extingue, no siendo posible exigir su
compensación en dinero, toda vez que dicho Estatuto no lo permite (43906/73, 27961/96).
El número de días de feriado que corresponde a un empleado queda fijado por la fecha en que éste
se inicia conforme a la resolución que lo concede, de modo que la duración del mismo depende de los
años de servicio que tenga al momento de ejercer dicho beneficio, sin que pueda completar el feriado
a que habría tenido derecho, si lo hubiere solicitado en una época posterior que le habilitara para
reunir una antigüedad que le permitiera gozar de un mayor número de días feriados. Ello, a menos
que el interesado compruebe fehacientemente que no acreditó oportunamente el tiempo de que se
trata por error o causas ajenas a su voluntad, en cuyo caso podrá hacer uso de los días adicionales
que le correspondan (12348/63, 3542/69, 6082/90, 24357/94, 26367/00, 12806/01, 63851/04).
Los funcionarios que se hallan haciendo uso de feriado pueden participar en los concursos internos
de promoción a que se refiere el articulo 53 del Estatuto Administrativo, pues no existe en el
ordenamiento jurídico norma alguna que impida a un servidor, durante el tiempo en que goza de
ese derecho, realizar una actividad como la participación en un certamen de promoción, aunque
éste implique etapas o instrumentos de evaluación que requieren su intervención presencial como
pruebas, entrevistas, exámenes y cursos de capacitación. Lo señalado, no importa una renuncia al
goce de dicho beneficio, ya que tal circunstancia sólo se verificaría en la medida que el respectivo
servidor deje de hacer uso del mismo para desarrollar labores propias del cargo que ocupa, o bien,
del servicio en el cual se desempeña (57871/05).
El personal suplente sólo tiene derecho a percibir la remuneración asignada al cargo que sirve en
esa calidad cuando el titular del mismo, por cualquier motivo, no goza de ese emolumento, lo que no
ocurre tratándose del feriado, ya que mientras el titular goza de ese beneficio, continúa percibiendo
íntegramente su renta (3590/90).
Los funcionarios suplentes de empleos de planta tienen derecho a disfrutar de feriado. La circunstancia
que dichos servidores, en cuanto al nombramiento, sólo se rigen por las disposiciones del Titulo 1
de la ley 18834, no obsta a la aplicación de las normas sobre permisos y feriados contenidas en el
Titulo IV de la misma, como quiera que aquellos derechos funcionarios al igual que las obligaciones,
son inherentes al desempeño de todo cargo público regulado por el Estatuto Administrativo (9662/91,
41002/96).
El feriado no está regido por más regulaciones que aquellas previstas en los artículos 97 y siguientes
(actuales artículos 102 y ss.) del Estatuto Administrativo. Por tal motivo, su otorgamiento no está·
condicionado a plazo alguno que obligue a separarlo del goce del descanso complementario de diez
días hábiles previsto en el W 1 del articulo 3 de la ley 19264, para los funcionarios de la salud. De
esta manera, es posible requerir el feriado a continuación del descanso complementario, pero no
pedir éste a continuación del feriado, pues esta última disposición legal previene que el goce del
beneficio especial de diez días a que tiene derecho ese personal, no puede acumularse al feriado,
estableciendo, además, que debe estar separado de él por un periodo no inferior a tres meses
(20896/97).
Es improcedente notificar la calificación mediante carta certificada a una funcionaria que se encuentra
haciendo uso de su feriado legal, porque el uso de ese medio sólo es admisible en caso de concurrir
una causal de fuerza mayor para evitar la paralización del proceso, lo que no ocurre en este caso,
por lo que debió esperarse a que finalizara el feriado de la afectada para cumplir con este trámite
(18494/98).
Conforme a los artículos 66 (actual articulo 72) y 97 (actual artículo 102) de la ley 18834, durante los
feriados los funcionarios gozan de todas sus remuneraciones, las que se fijan por mensualidades,
incluyendo en su monto los días festivos (20132/92).
Los funcionarios que cumplen horas extraordinarias en Servicios o dependencias que por la naturaleza
de las labores que desarrollan, exijan obligadamente que se trabaje en jornada extraordinaria, en
forma regular y permanente, tienen derecho a conservar, durante el uso de feriados, licencias y
permisos, las remuneraciones correspondientes a esas horas extras (71132/67, 29193/81,4107/93,
37969/94, 21222/95, 4998/97, 30791/97).
A un funcionario al que se le declaró vacante el cargo que servía mientras hacia uso de feriado, le
asiste el derecho a gozar de los días que le faltaron para completar el respectivo periodo, al acogerse
un recurso de protección que declaró improcedente dicha declaración de vacancia, reponiéndolo
en su cargo. Esta circunstancia implica que en este caso ha operado en contra del servidor una
decisión de autoridad constitutiva de fuerza mayor, de acuerdo con el articulo 45 del Código Civil, de
manera que la causa por la que no hizo uso de los días de feriado no le es imputable (16085/90).
Las funcionarias afectas a la ley 19070, Estatuto de los Profesionales de la Educación, que se
encuentran con licencia maternal durante el periodo de interrupción de las actividades escolares
que fija como feriado para esos servidores el articulo 37 (actual articulo 41 del DFL 1, de 1996, del
Ministerio de Educación), no pueden luego de terminada dicha licencia, disfrutar de tal feriado en
una época distinta a la señalada. El feriado regulado por referido articulo 37 (actual articulo 41) no
ha sido concebido como un descanso del que se pueda gozar indistintamente en cualquier etapa del
año, sino que está previsto en relación con un periodo determinado que la misma norma contempla.
Por ello, ese beneficio se diferencia del consultado por las leyes 18834, 18883 y el Código del
Trabajo, en los cuales dicha franquicia, por regla general, corresponde a un cierto número de días y
se hace efectiva de manera continua o fraccionada en una época que se fija para cada trabajador en
particular a solicitud del mismo (32493/94).
Concordancias: Arts. 103 y 104 del EA; 101 del EAM.
Comentarios:
El feriado es un descanso remunerado a que tiene derecho todo servidor público. Su finalidad
es la recuperación del desgaste físico sufrido por el trabajador durante el año calendario, como
consecuencia de sus diarios desempeños.
De esta manera, si bien el feriado se encuentra, en principio, establecido en favor del empleado,
interesa también al Servicio del cual depende, porque tiene por objeto la recuperación de las energías
gastadas por éste durante un año de trabajo y, por ende, ello incidíra en el buen rendimiento del
servidor para el cabal cumplimiento de sus funciones.
Por tal motivo, es dable entender que las normas que lo regulan constituyen un mandato de orden
público que debe ser cumplido en la forma prevista por el legislador, de donde se infiere que la
autoridad no puede disponer ni aceptar el goce del feriado en una forma distinta a la prescrita por las
reglas que le son aplicables.
ARTICULO 103.- El feriado corresponderá a cada año calendario Ley 18.834, Art. 98.
y será de quince días hábiles para Jos funcionarios con menos
de quince años de servicios, de veinte días hábiles para los
funcionarios con quince o más años de servicios y menos de veinte,
y de veinticinco días hábiles para Jos funcionarios con veinte o más
años de servicio.
Interpretación:
Inciso 1•
El feriado constituye un derecho que se devenga anualmente, esto es, cada feriado dice relación
directa con el respectivo año calendario. Luego, si el Jefe Superior de Servicio no toma conocimiento
durante el respectivo año de una solicitud de acumulación presentada por el funcionario conforme al
inciso segundo del articulo 99, el peticionario carece del derecho a acumular el feriado correspondiente
(19270/99).
Los funcionarios que cumplen un año de servicios efectivos en una fecha próxima al término del año
calendario, tienen derecho a hacer uso del feriado por ese año, durante el periodo comprendido entre
la data que cumplen dicho tiempo y el 31 de diciembre del mismo año, aunque no quede incluido en
ese lapso todo el tiempo de duración del beneficio. En este caso, es improcedente postergar su goce
cuando el feriado no queda comprendido dentro del año calendario respectivo, lo que determina,
además, que tampoco procederá su acumulación con el feriado correspondiente al año siguiente
(768/93, 13586/93, 18710/95).
El número de días de feriado que corresponden a un empleado queda fijado por la fecha en que éste
se inicia, conforme a la resolución que lo concede, cuya duración dependerá de los años de servicio
trabajados como dependientes en el sector público o privado, que tenga al momento de ejercer el
derecho a ese beneficio. Una vez que éste ha sido solicitado no procede aumentar posteriormente
el feriado con el mayor número de dias a que habría tenido derecho de haberlo pedido en la época
en que, por acreditar más antigüedad, podría haber gozado de descanso por un lapso superior. Por
excepción, si se comprueba de manera fehaciente por el empleado que no acreditó oportunamente
los años por error o por causas ajenas a su voluntad, cabe reconocerle su derecho a un mayor
feriado (6082/90, 22128/91,24357/94, 27705/94,43042/94, 26367/00, 12806/01, 63851/04).
El funcionario que se reincorpora a la Administración del Estado no "ingresa" para los efectos del
feriado, porque ese hecho se produjo la primera vez que entró a ella a prestar sus servicios. En
este caso, no tiene aplicación el articulo 102 (actual articulo 107) de la ley 18834, que se refiere
al servidor "que ingrese a la Administración del Estado", sino que la norma general del articulo 98
(actual artículo 103) del Estatuto Administrativo, en cuya virtud el beneficio "corresponderá a cada
año calendario". De esta manera, cuando tales servidores cesan en funciones, pierden el feriado
pendiente que pudieren tener, porque han dejado de poseer la condición de funcionarios, a menos
que se reincorporen a la Administración en el respectivo año, lo que les hace recuperar dicha calidad,
teniendo derecho a todos los beneficios que ello implica, como ocurre con el resto del feriado que no
pudieron gozar (8779/91, 140198, 40873/01).
Los contratados sobre la base de honorarios pueden tener derecho a feriado si así se estipula en su
contrato, pero tal beneficio no es posible que se extienda más allá del que la ley regula para quienes
invisten la calidad de funcionarios públicos, como seria el hecho de otorgarles veintinueve días de
feriado (12304/96).
La norma del articulo 2, inciso segundo, de la ley 16441, que señala que los personales que indica
que sean destinados a la Isla de Pascua, que procedan del continente, gozarán de un feriado anual
de cuarenta días hábiles, el cual podrá acumularse hasta por cinco periodos consecutivos, está
tácitamente derogada por las disposiciones que sobre la materia contiene la ley 18834, especialmente
su articulo 98 (actual articulo 103) (24191/97, 2528/01).
El articulo 65 (actual articulo 71) de la ley 18834, que faculta a los funcionarios públicos para no
trabajar las tardes de los días 17 de septiembre, 24 y 31 de diciembre, no puede entenderse que
otorga a tales lapsos el carácter de festivos o inhábiles, ya que conforme con la legislación vigente,
sólo los días enteros o cabales pueden ser hábiles o inhábiles. Así, para los efectos del feriado legal,
los días que señala el mencionado articulo 65 (actual articulo 71) deben computarse como hábiles
y cabales (4899/94).
Inciso 2•
La cantidad de días de feriado a que tiene derecho un servidor, depende del número de años que
hasta el momento de hacer uso del beneficio se hayan destinado a trabajar de manera dependiente.
En consecuencia, al alcanzar cierto tiempo de desempeño en esas condiciones, la legislación prevé
el incremento progresivo de la duración del descanso anual del modo que indica el articulo 103 del
Estatuto Administrativo. El legislador se ha encargado de precisar que para esos efectos basta
haber prestado labores como "dependiente" durante dichos periodos, entendiéndose por tales,
aquellas labores que suponen una actividad desarrollada por cuenta ajena, ya sea en virtud de una
designación de la autoridad pública o bajo las órdenes o el control de un empleador (12461/72,
22638/05, 23685/08).
Los periodos servidos en el sector privado son computables para el feriado si se acredita, mediante
certificación expedida por la institución previsional respectiva, los años efectivamente trabajados y el
hecho de que ellos corresponden a labores efectuadas como dependiente (22128/91).
La exigencia de comprobar los periodos trabajados como dependiente en cualquier calidad jurídica,
sea en el sector público o privado, ha de cumplirse mediante certificación otorgada por la entidad
previsional correspondiente en la cual conste el tiempo de afiliación por dichos desempeños. La
certificación que emite el organismo previsional no es exigible respecto del tiempo laborado por el
funcionario en la repartición a que pertenece, pues de ello debe existir constancia en el propio Servicio,
al cual, por ende, le corresponde expedir la correspondiente certificación (23358/91, 40567/00).
La duración del feriado no depende de los años de servicio sino que de la existencia de un vinculo
de trabajo entre el funcionario y su empleador, en cualquier calidad jurídica, sea en el sector público
o privado. Por tal motivo, pueden computarse para los efectos del feriado todos los años de servicio,
incluyendo los permisos sin goce de remuneraciones que haya obtenido el trabajador. No obstante,
sólo cabe considerar los años efectivamente trabajados, de modo que no es útil el tiempo que
éste haya permanecido inactivo, aun cuando hubiere reconocido como válidos para los efectos de
continuidad de la previsión determinados periodos intermedios de desafiliación, por cuanto en dichos
lapsos no ha hábido vinculo laboral alguno y el Estatuto Administrativo exige que los años trabajados
lo hayan sido "como dependiente" (46613/77).
El lapso servido sobre la base de un contrato a honorarios no es útil para fines del feriado, aunque en
relación con estas actividades se hubieren efectuado cotizaciones previsionales (20956/94).
Para el feriado progresivo a que tiene derecho un funcionario se requiere que el tiempo servido
corresponda a trabajos prestados en carácter de "dependiente", cualquiera sea su calidad jurídica,
por lo que no resultan útiles de computar las labores efectuadas como trabajadores independientes
o las afiliaciones previsionales como imponente voluntario (7125/97).
Es improcedente considerar el abono de tiempo concedido por gracia a los exonerados políticos
conforme a la ley 19234, para determinar la duración del feriado, pues dicha ley constituye una
preceptiva de derecho público, inserta en un contexto normativo destinado a otorgar beneficios
previsionales excepcionales, esto es, abonos de años de afiliación y pensiones no contributivas
por gracia, dé modo que sus disposiciones no se extienden a franquicias de naturaleza diversa de
aquéllas (30737/98, 8015/01).
Si bien el tiempo servido en cumplimiento de la ley sobre Servicio Militar Obligatorio, es computable
para los efectos de calcular la duración del feriado legal, de acuerdo con lo previsto en el articulo
único de la ley 11133, no es posible utilizar ese periodo para cumplir el lapso efectivo de un año de
servicio tras su ingreso a la Administración del Estado, según lo exige el articulo 102 del Estatuto
Administrativo, pues esta disposición, que regula este aspecto del beneficio, no lo autoriza (21522/72,
36371/04).
El lapso de instrucción en la Escuela del Servicio Auxiliar Femenino del Ejército no es válido para los
fines del cómputo de años de servicios del feriado progresivo, porque dicho periodo no corresponde
a un desempeño laboral en los términos que determina el articulo 98 (actual articulo 103) del Estatuto
Administrativo, que exige precisamente haber trabajado como dependiente, en cualquier calidad
jurídica, sea en el sector público o privado (12645/81, 47127/98).
No procede disfrutar dos veces del feriado en un mismo periodo, aunque se hubieren desempeñado
funciones para distintos empleadores (7838/00).
El inciso segundo del articulo 103 del Estatuto Administrativo no hace distinción alguna respecto
de la naturaleza del empleador al que se hayan prestado las labores dependientes, como tampoco ,
respecto de la calidad jurídica o el régimen normativo por el cual se hayan regido. No especifica si
los años computables para estos fines deben haber sido desempeñados en el territorio nacional o en
el extranjero, con sujeción a la legislación chilena o a un ordenamiento jurídico foráneo. El beneficio
consistente en el aumento del feriado de quince a veinte .o a veinticinco días hábiles, según sea
el caso, tiene como única exigencia legal haber completado la cantidad de años trabajados como
dependiente, puesto que el feriado progresivo está establecido en consideración a la persona del
servidor y al tiempo que éste lleva prestando servicios en dicha condición. Luego, es computable
el tiempo durante el cual el funcionario se hubiere desempeñado como dependiente, ya sea, en el
sector público o privado, cualquiera sea el territorio en que se hayan prestado dichas labores, lapsos
que deberán ser acreditados a través de la certificación de la correspondiente entidad previsional,
que dé cuenta de los periodos de cotizaciones como dependiente, documentación que, por ser
extranjera, debe encontrarse, además, debidamente autentificada (23685/08. Reconsidera toda
jurisprudencia contraria).
Comentarios:
El artículo 103 reconoce dos principios básicos: la anualidad del feriado y la progresividad del mismo.
El primero de ellos aparece reiterado en el artículo 107, al señalar que el funcionario que ingrese a
la Administración del Estado no tendrá derecho a hacer uso del feriado en tanto no haya cumplido
efectivamente un año de servicio. La progresividad del feriado, por su parte, consiste en que el
periodo de descanso que la ley concede aumenta en la medida que el funcionario va cumpliendo
más años de servicios, de acuerdo con la progresividad que la propia norma establece.
ARTICULO 104.- El funcionario solicitará su feriado indicando la Ley 18.834, Art. 99.
fecha en que hará uso de este derecho, el cual no podrá en ningún
caso ser denegado discrecionalmente.
Sí el funcionario no hubiese hecho uso del período acumulado en Ley 19.269, Art. 20.
/os términos señalados en el inciso anterior, podrá autorizarse la
acumulación al año siguiente, de la fracción pendiente de dicho
feriado, siempre que ello no implique exceder en conjunto de un
total de 30, 40 o 50 días hábiles, según el caso.
Interpretación:
Inciso 1°
La autoridad no puede, invocando "las necesidades del servicio", denegar la petición de feriado,
ni inducir o imponer una modificación en sus términos, encontrándose solamente facultada para
anticipar o postergar el uso del mismo, ya sea total o en forma fraccionada (33268/98, 7670/00).
Los feriados y permisos deben ser concedidos por el Jefe Superior de la institución (7907/99).
Inciso 2°
Cada feriado dice relación directa con el respectivo año calendario, de modo que esta norma, por
la cual los servidores pueden "hacer uso conjunto" de su feriado acumulado (lo que no obsta a su
Para que los servidores públicos puedan hacer uso conjunto de su feriado acumulado, la autoridad
llamada a pronunciarse sobre ese beneficio, debe resolver, por razones de buen servicio, anticipar
o postergar la época de su goce, y el empleado, ante esa decisión, solicitar formal y expresamente
la acumulación, trámites que han de efectuarse dentro de la respectiva anualidad en la cual,
normalmente, debería disfrutarse el feriado. Luego, si la autoridad no ha conocido de la solicitud
de acumulación durante el año calendario, el funcionario carece del derecho a acumular el feriado
(17524/90, 20678/92, 25213/92, 18256/99).
Los empleados públicos que cumplen un año de servicios efectivos en una fecha próxima al
término del año calendario, tienen derecho a hacer uso del feriado por ese año, durante el periodo
comprendido entre la data que cumplen dicho tiempo y el31 de diciembre del mismo año, aunque no
quede incluido en ese lapso todo el tiempo de duración del beneficio. En este caso, es improcedente
postergar su goce cuando el feriado no quede comprendido dentro del año calendario respectivo, lo
que determina, además, que tampoco procede su acumulación con el feriado correspondiente al año
siguiente (38434/82, 768/93).
No resulta procedente conceder el beneficio de acumulación del feriado legal para el año siguiente a
un funcionario que se vio impedido de hacer uso de aquél, por encontrarse a la época en que debió
gozarlo, suspendido de su empleo, en virtud de una medida disciplinaria (14528/02).
Procede que la autoridad administrativa postergue el goce de feriado legal solicitado por un
funcionario, indicando otra fecha de inicio del mismo, cuando esa decisión se adopta por razones
de buen servicio, enmarcándose dentro de la facultad que le confiere este precepto (33398/97,
40994/99).
Una de las características esenciales del Servicio Público es su continuidad, por lo que no se ajusta
a derecho el receso de actividades dispuesto por la Jefatura en determinado período del año, por
feriado legal de su personal (6624/02).
Las normas contenidas en la ley 18834, no facultan para disponer la interrupción o suspensión del
feriado ya iniciado de un trabajador por el hecho de habérsele otorgado una licencia médica. La
única atribución de la autoridad, una vez que le ha sido solicitado el feriado, es la de anticiparlo o
postergarlo, pero no suspenderlo durante su goce. Si se permitiera interrumpir el feriado por alguna
causal como la analizada, también se podría suspender su goce por cualquier motivo de interés del
organismo de que se trate, lo que no sólo significaría un daño para el empleado, sino que, asimismo,
transgredir una de sus características fundamentales, cual es su continuidad. De aceptarse la tesis
contraria, también deberían interrumpirse los permisos con o sin goce de remuneraciones, lo que
evidentemente carece de todo fundamento. El lapso en que hacen uso de su feriado cada uno de
los funcionarios de un Servicio, debe ser consecuencia de una programación estudiada y destinada,
por una parte, a no perjudicar la continuidad y eficiencia de la entidad y, por otra, a permitir que
todos los servidores puedan gozar de ese derecho ·en la época de mayor demanda para ello. Si
se permitiera suspender el feriado de uno o más empleados a consecuencia de licencias médicas,
los demás funcionarios podrían ver alterado el derecho a gozar de su feriado en la oportunidad
requerida. Lo anterior, porque las autoridades se verían obligadas a postergar la época en que
disfrutarían del mismo los servidores que aún no han hecho uso de la franquicia para no afectar
los principios de continuidad y eficiencia a que están sujetos los organismos de la Administración
conforme al artículo 3 de la ley 18575. En casos excepcionales y debidamente justificados, conforme
a las atribuciones generales de los Jefes Superiores de las reparticiones de la Administración del
Estado, otorgadas por el artículo 31 de la ley 18575, la autoridad administrativa puede ponderar la
procedencia de suspender el feriado de un servidor que se ve afectado por una enfermedad grave,
durante el transcurso del mismo, ya que, en tal evento, el feriado no cumpliría manifiestamente
con su principal objetivo, cual es el descanso del trabajador. Dicha facultad ha de ejercerse con
criterios racionalmente fundamentados, evitando incurrir en diferencias arbitrarias y analizando los
antecedentes de cada situación, pues tal decisión tiene un carácter excepcional (36754/97, 8990/00,
28755/00, 52182/02, 45874/04).
Como el derecho a feriado favorece sólo a quienes invisten la calidad de empleados y mientras
mantengan este carácter, si este beneficio es pedido por un funcionario a contrata y es postergado
para una fecha posterior al cese de sus funciones, la autoridad debe reconsiderar su decisión y fijarlo
para una época que quede dentro de la vigencia de la contrata (9387/82, 5869/87).
La anticipación o postergación del feriado debe contenerse en una resolución formal que indique la
época en que se iniciará el goce del beneficio (44039/65).
Nada obsta para que un empleado pueda desistirse del uso de su feriado legal, si tal manifestación
de voluntad la exterioriza antes de la época de inicio de la franquicia. Son los funcionarios que
han entrado en el goce de dicho beneficio los que no pueden interrumpirlo por la concurrencia de
circunstancias sobrevinientes. No impide el desistimiento el hecho que se haya otorgado el feriado
mediante un acto administrativo formal, ya que el reconocimiento de ese derecho no implica su
ejercicio obligatorio, de modo que mientras el funcionario no inicie su goce, bien puede modificarse
la época en que será disfrutado, tanto por razones de servicio como por la concurrencia de otros
motivos plausibles (73619/67, 27164/91).
Inciso 3°
Cuando el funcionario no hace uso del lapso acumulado del modo señalado en el inciso segundo de
esta norma, puede autorizarse la acumulación al año siguiente de la fracción pendiente del feriado,
siempre que no signifique exceder en conjunto de un total de 30, 40 o 50 días hábiles, según el caso.
Esta acumulación opera de manera independiente cada año, siendo posible entonces acumular
todo o parte de un feriado con el del año siguiente, y así sucesivamente. Lo que no está permitido
es acumular los feriados de dos años con el del tercer año, para gozar de todos durante este último,
juntando tres periodos (19270/99, 2683/00).
Inciso 4°
Los funcionarios pueden solicitar en forma fraccionada su feriado, pero uno de los periodos no podrá
ser inferior a diez días (42056/96, 48207/07).
Un funcionario puede hacer uso de su feriado por parcialidades, pero el derecho a gozar de él
queda determinado en la resolución que le otorgó inicialmente el beneficio, de tal manera que si el
empleado entre una y otra fracción de feriado cumple un número de años de servicio que le permite
disfrutar de un mayor número de días, no tiene derecho al aumento respectivo (35649/82).
Esta norma faculta al empleado para hacer uso de su feriado en forma fraccionada, en el número de
parcialidades que indique, con la única limitación que "una de las fracciones no podrá ser inferior a
diez días". El fraccionamiento del feriado es una modalidad prevista por el legislador en beneficio de
los funcionarios, de modo que no permite a la autoridad interrumpir su goce, ya sea que el empleado
esté disfrutando de la totalidad del feriado o de una de las fracciones de éste (6557/87).
Concordancias: Arts. 102, 103, 105, 106 y 107 del EA; 103 del EAM.
Comentarios:
El Informe de la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno, expresa que en el inciso primero
se estableció que el funcionario solicitará su feriado, sin que éste pueda ser denegado en forma
discrecional, eliminándose la referencia a las diferentes autoridades ante las cuales debia presentarse
la solicitud, pues de acuerdo con el inciso segundo, le corresponde a la Jefatura Superior pronunciarse
sobre la misma.
Añade dicho Informe que en el inciso segundo, se agregó una frase final, con la prohibición de
acumular más de dos períodos consecutivos de feriado, con el fin de evitar ausencias de los
trabajadores demasiado extensas.
Por último, es dable destacar que la jurisprudencia administrativa relativa al inciso segundo de este
precepto fue modificada mediante el dictamen 19270, de 26 de mayo de 1999, el cual precisó que
esa disposición sólo tiene por objeto fijar el límite de descansos anuales que se pueden acumular en
un máximo de dos períodos, pero no prohibe efectuar acumulaciones sucesivas, que no excedan de
dicho límite, concurriendo los demás supuestos legales para que ello sea procedente.
ARTICULO 104 bis.- Todo funcionario tendrá derecho a gozar Ley 20.137, Art. 2".
de los permisos contemplados en el articulo 66 del Código del
Trabajo. (*)
Concordancias: Arts. 38 de la CP de la R.; 43 de la LOCBGAE; 89, inciso segundo del EA; 108 bis
del EAM; 1, 2 y 3 de la ley 20137, que otorga permiso laboral por muerte y nacimiento de parientes
que indica; ley 20047, establece un permiso paternal en el Código del Trabajo; 66 y 195, inciso
segundo, del e del T.
Comentarios:
Esta disposición fue agregada al Estatuto Administrativo por mandato del artículo 2 de la ley 20137,
que se remite al artículo 66 del Código del Trabajo, para otorgar a todo funcionario el derecho a
gozar de los permisos que en él se contemplan, norma esta última que, a su vez, fue reemplazada
por el articulo 1 de la ley citada. Tales derechos consisten en los permisos que tienen lugar en los
casos de muerte de un hijo, aún en periodo de gestación, del cónyuge, del padre o de la madre del
trabajador.
Estos nuevos permisos han venido a complementar los que se otorgan al padre en caso de nacimiento
o adopción de un hijo, conforme al articulo 195 del Código del Trabajo, texto que fue modificado por
los artículos único de la ley 20047 y 1, W 2, letras a) y b) de la ley 20137, los que ya correspondían
a los funcionarios públicos de acuerdo con el inciso segundo del artículo 89 de la ley 18834, como
lo ha reconocido la jurisprudencia administrativa, por ejemplo, en los dictámenes 44.236, de 2005 y
55.925, de 2006.
(*)El articulo 66 del Código del Trabajo expresa que: "En el caso de muerte de un hijo así como en el de muerte
del cónyuge, todo trabajador tendrá derecho a siete días corridos de permiso pagado, adicional al feriado anual,
independientemente del tiempo de servicio.
Igual permiso se aplicará por tres días hábiles en el caso de muerte de un hijo en periodo de gestación así como
en el de muerte del padre o de la madre del trabajador.
Estos permisos deberán hacerse efectivos a partir del día del respectivo fallecimiento. No obstante, tratándose
de una defunción fetal, el permiso se hará efectivo desde el momento de acreditarse la muerte, con el respectivo
certificado de defunción fetaL
El trabajador al que se refiere el inciso primero gozará de fuero laboral por un mes, a contar del respectivo
fallecimiento. Sin embargo, tratándose de trabajadores cuyos contratos de trabajo sean a plazo fijo o por obra o
servicio determinado, el fuero los amparará sólo durante la vigencia del respectivo contrato si éste fuera menor
a un mes, sin que se requiera solicitar su desafuero al término de cada uno de ellos.
Los días de permiso consagrados en este artículo no podr8n ser compensados en dinero.".
ARTICULO 105.- Los funcionarios que se desempeñen en Ley 18.834. Art. 100.
instituciones que dejen de funcionar por un lapso superior a veinte
días dentro de cada año, no gozarán del derecho a feriado, pero
podrán completar el que les correspondiere según sus años de
servicios. No regirá esta disposición para los funcionarios que, no
obstante la suspensión del funcionamiento de la institución deban
por cualquier causa trabajar durante ese periodo.
Interpretación:
Los empleados a que se refiere este artículo no gozan del derecho a feriado, sino que a un descanso.
Por tal motivo, cuando los Servicios dejan de funcionar, tienen derecho a disfrutar de ese descanso
durante ese lapso sin necesidad de acreditar los requisitos que hacen procedente el feriado, a
menos que soliciten el que les correspondiere según sus años de servicio. Luego, los empleados
que se desempeñan en organismos que dejan de funcionar por mas de veinte días dentro de cada
año, no gozan de derecho a feriado, sino de un descanso obligatorio anual durante el lapso en que
se encuentran interrumpidas las labores en la entidad. Con todo, ese personal puede completar el
feriado que le corresponde según sus años de servicios (4042175, 3940192).
Las instituciones que no funcionan por un período superior a veinte días cada año y cuyos empleados
hicieron uso del descanso que les corresponde anualmente durante el cierre respectivo, no pueden
establecer un sistema de turnos de trabajo de su personal en otra época. Lo anterior significaría el no
cumplimiento del deber de asistencia sin causa justificada, lo que obligaría a efectuar los descuentos
señalados en el artículo 66 (actual artículo 72) de la ley 18834. Ademas, ello implicaría que una
parte del personal no trabaje, en circunstancias que el artículo 59 (actual artículo 65) del Estatuto
Administrativo establece el deber de éstos de desempeñar personalmente el cargo durante toda la
jornada de trabajo (41802195).
Sí bien el artículo 100 (actual artículo 105) establece una excepción a la regla general contemplada en
el artículo 99 (actual artículo 104), ello no implica que los trabajadores a que se refiere se encuentren
privados de su derecho a feriado, sino que en relación con dicho beneficio aquel precepto solo ha
impuesto una limitación respecto de la oportunidad en que los trabajadores pueden hacer uso del
mismo. Por ello, los servidores a que se refiere el artículo 100 (actual artículo 105) se encuentran
obligados a gozar de su descanso anual durante el período de cierre o suspensión de actividades de
las instituciones a que esa disposición alude, salvo que se trate de funcionarios que tengan derecho
a un mayor número de días de feriado que aquellos durante los cuales el respectivo organismo
permanece sin funcionar. Ahora, en el caso de la Universidad de la Frontera que deja de funcionar
durante los meses de enero y febrero por un período de veinte días y, ademas, en el invierno y en el
receso adicional del mes de septiembre, el cese de actividades de esa institución excede el período de
veinticinco días de feriado que le corresponde a los funcionarios no académicos que tienen derecho
a esos días hábiles de descanso, por lo que debe entenderse que el feriado de estos funcionarios
se ha consumido en su totalidad en los períodos en que la aludida entidad suspende sus actividades
durante la respectiva anualidad, con lo cual, aquéllos gozan incluso de un descanso superior a
los veinticinco días habiles. Por tal motivo, los funcionarios no académicos de las instituciones de
educación superior de caracter estatal, que tienen derecho a 25 días hábiles de feriado de acuerdo
con la ley 18834, no tienen derecho a completarlos en los términos que señala el artículo 100 (actual
artículo 105), cuando el respectivo período de descanso que les corresponde es menor que el lapso
de cese de actividades que en el año tiene la institución en que se desempeñan (25181104).
Quienes se encuentren gozando de licencia médica o maternal antes de que se suspendan las
actividades del servicio a que pertenecen por un periodo que se extiende mas alla de la fecha de
inicio del lapso de interrupción, conservan su derecho a feriado pudiendo impetrar el beneficio con
posterioridad a la expiración de la licencia. Si ésta termina en una fecha anterior a la de reanudación
de labores, el feriado debe ineludiblemente computarse desde el dia siguiente a aquella data y
disfrutarse ininterrumpidamente hasta agotar los di as correspondientes. Si la expiración de la licencia
ocurre, en cambio, simultanea o posteriormente a la fecha de reiniciación de ·actividades rigen
plenamente las normas generales sobre feriado, previstas en el Estatuto Administrativo. Tal criterio
se fundamenta en el hecho de que el inciso tercero del artículo 89 del DFL 338, de 1960 (actual
articulo 105 de la ley 18834), estuvo destinado a regular adecuadamente el descanso anual a que
tiene derecho el trabajador, tratandose de servicios que por la naturaleza de sus actividades dejan
de funcionar por un determinado lapso, a fin de evitar situaciones excepcionales como ocurriría si
se permitiera agregar al feriado el beneficio que supone -desde el punto de vista del descanso- la
interrupción de las labores durante ciertos períodos, configurando, al efecto, un beneficio sustitutivo
del feriado ordinario que prevé el señalado cuerpo legal (28313/84, 9182/89, 25181/04, 51390/06).
Comentarios:
De acuerdo con esta norma, los funcionarios que trabajan en instituciones que dejen de funcionar
por un lapso superior a veinte dias, como ocurre con las universidades estatales, no tienen derecho
a feriado, sino que a un descanso por el tiempo que la institución no funciona. Sin embargo, si por
efecto de la progresividad del feriado, el empleado, atendido los años de servicio, tuviere derecho a
un feriado superior al período de inactividad de la institución, puede completar la diferencia.
ARTICULO 106.- El funcionario que desempeñe sus funciones en Ley 18.834, Art. 101.
las comunas de Isla de Pascua, de Juan Fernández y de la Antártica,
tendrá derecho a que su feriado se aumente en el tiempo que le
demande el viaje de ida al continente y regreso a sus funciones.
Los funcionarios que residan en las regiones de Tarapacá, Antofagasta, Ley 19.921, Art. 1'.
Aisén del General Carlos lbáñez del Campo, y de Magallanes y de la
Antártica Chilena, y en las provincias de Chiloé y Palena de la Región
de Los Lagos, tendrán derecho a gozar de su feriado aumentado en
cinco días hábiles, siempre que se trasladen a una región distinta de
aquélla en la que se encuentren prestando servicios o hacia fuera del
país.
Interpretación:
Inciso 1'
La ley 18834 establece preceptos especiales sobre feriado para aquellos funcionarios que laboran
en las comunas de Isla de Pascua, de Juan Fernández y de la Antártica, en cuanto a condiciones,
modalidades y progresión, disposiciones que, por tal motivo, deben aplicarse con prescindencia de
cualquier otra normativa (24191197, 2528101 ).
El aumento de feriado no puede contabilizarse dentro de la fracción de diez días a que se refiere el
artículo 99 (actual artículo 104) de la ley 18834. Se trata de un beneficio extraordinario que no posee
la misma naturaleza que el feriado regular a que tiene derecho un funcionario. El feriado aumentado
tiene carácter accesorio respecto del beneficio regular, sea fraccionado o continuo, de modo que, en
caso de dividirse, el empleado debe indicar a qué parte desea se agreguen los días adicionales que
le corresponden (58327103).
El artículo 106 es una disposición de aplicación general a los servidores de la Administración del
Estado y no se contraviene con la normativa sobre feriados contenida en el Código del Trabajo, de
modo que no existe inconveniente para que la superioridad de un organismo público, en uso de sus
facultades, pueda incluir el feriado aumentado que contempla en los contratos que suscriba con
aquel personal que se rige por el citado ordenamiento laboral (40390103).
Inciso 2'
El objeto de este beneficio es otorgar días adicionales a trabajadores residentes en lugares situados
en los extremos del país, a quienes les demanda mayor tiempo movilizarse a zonas más centrales
en sus vacaciones, por la particular configuración geográfica del territorio nacional (4351193).
Los cinco días hábiles de aumento a que alude el inciso segundo del artículo 101 (actual artículo
106) proceden ya sea durante todo o parte del período que comprende el feriado. Este beneficio es
excepcional, y opera por una sola vez respecto de cada feriado anual, sea que se use en forma
continua o fraccionada. Lo mismo ocurre cuando el funcionario disfruta de feriados correspondientes
a años anteriores y que han sido acumulados. En cambio, si se desplaza fuera de la localidad en
que se desempeña por cada uno de sus feriados que ha acumulado -lo que implica que luego de
salir de la región regresa a la misma y, posteriormente, luego de cumplido el período de duración
del primer beneficio, sale nuevamente mientras goza de su otro feriado, circunstancias que deberá
acreditar- le asiste el derecho a gozar de un aumento equivalente a cinco di as hábiles por cada una
de las franquicias, ya que, en este caso, ha existido un real desplazamiento a otra región por cada
feriado, elemento éste que la ley exige para conferir el aumento de que se trata. Los cinco días
de feriado adicional no son susceptibles de fraccionarse, sino que deben otorgarse en su totalidad
respecto del feriado completo o de aquella parte en que se produzca el desplazamiento a otra región
(11158/93, 24807/93, 31824/99 -los anteriores dictámenes fueron reconsiderados parcialmente
por el 50352/02-).
Con respecto al beneficio consultado en el inciso séptimo del artículo 88 del DFL 338, de 1960
(similar al que establece el inciso segundo del artículo 106 de la ley 18834), el legislador no ha
exigido para gozar del derecho al incremento especial del feriado previsto en esa norma que el
funcionario permanezca todo el período que comprende el feriado fuera del lugar de su desempeño,
por lo que dicho aumento no está condicionado al tiempo de permanencia fuera del territorio de la
región (18253/70, 34302/77).
Concordancias: Arts. 126 bis y vigesimosegunda transitoria de la CP de laR; 105 del EAM.
Comentarios:
A partir de la entrada en vigencia de la ley 18834, quedaron tácitamente derogadas las reglas
contenidas en el artículo 2 de la ley 16441, que consultaba normas especiales sobre feriado para los
funcionarios del continente destinados a la Isla de Pascua.
El inciso primero del artículo 106 regula un feriado especial en favor de quienes desempeñan sus
labores en lugares alejados -Isla de Pascua, Juan Fernández y la Antártica- consistente en aumentar
el tiempo que demore el viaje del funcionario de ida al continente y regreso a sus funciones.
Si los empleados residen en alguna de las zonas extremas que menciona el inciso segundo del
artículo 106, el feriado se incrementa en cinco días hábiles, siempre que éstos se trasladen desde la
región donde laboran a una distinta.
El artículo 1 de la ley 19921, agregó al final del inciso segundo del artículo 106, que se refiere al
feriado aumentado de los funcionarios que se desempeñan en los lugares que indica, la frase "o
hacia fuera del país".
ARTICULO 107.· El funcionario que ingrese a la Administración Ley 18.834, Art. 102.
del Estado no tendrá derecho a hacer uso de feriado en tanto no
haya cumplido efectivamente un año de servicio.
Interpretación:
Una vez cumplido un año de servicios efectivos, el funcionario puede en los años sucesivos gozar
del beneficio del feriado en cualquier periodo dentro del respectivo año calendario. En cambio, el
empleado que recién ingresa a la Administración sólo puede ejercer ese derecho después de haber
cumplido efectivamente un año de labores (12543176, 25073189, 2332102).
El funcionario que se reincorpora a la Administración del Estado no "ingresa" para efectos del feriado,
porque ese hecho se produjo la primera vez que entró a ella a prestar servicios. En este caso, no
tiene aplicación el artículo 102 (actual artículo 107) de la ley 18834, que se refiere al servidor "que
ingrese a la Administración del Estado", sino que la norma general del artículo 98 (actual artículo 103)
del Estatuto Administrativo, en cuya virtud el beneficio "corresponderá a cada año calendario". De
esta manera, cuando tales servidores cesan en funciones, pierden el feriado pendiente que pudieren
tener, porque han dejado de poseer la condición de funcionarios, a menos que se reincorporen a
la Administración en el respectivo año, lo que les hace recuperar dicha calidad, teniendo derecho
a todos los beneficios que ello implica, como ocurre con el resto del feriado que no pudieron gozar
(8779191, 3986195, 140198,40873101,30297105, 35252105).
El cómputo del año de servicios necesario para acceder al feriado legal por parte de funcionarios
recién ingresados a la Administración, no debe comprender aquellos días de permiso sin goce de
remuneraciones que se le otorgaron durante ese periodo, por no revestir el carácter de efectivos que
exige la ley (46613177, 13586193).
El tiempo trabajado sobre la base de honorarios no puede considerarse para determinar los días de
feriado a que tienen derecho los funcionarios públicos, ya que en conformidad con lo dispuesto por
el artículo 98 (actual articulo 103) de la ley 18834, para conceder dicho beneficio al referido personal
sólo son útiles los desempeños en los sectores público o privado efectuados como "dependientes",
carácter que no poseen las labores remuneradas a honorarios (196810Z).
Comentarios:
El beneficio del feriado se encuentra sujeto a modalidades diversas, dependiendo de si el funcionario
es un empleado antiguo o recién ingresado a la Administración. En este último caso, el interesado
debe cumplir efectivamente un año de servicio para tener derecho a feriado. Para ello, son válidos
todos los desempeños anteriores, continuos o discontinuos, que se hayan prestado a la Administración
del Estado.
El artículo 107 del Estatuto Administrativo al reconocer la norma expuesta aplica el principio de la
anualidad del feriado que a su vez recoge el artículo 103 del Estatuto, precepto que armoniza con lo
dispuesto en el artículo 67 del Código del Trabajo, el cual también exige más de un año de servicio
para que proceda el feriado, pero no establece que se trate de servicios efectivos, sino que basta el
simple tiempo de permanencia.
Párrafo 4°
De los permisos
ARTICULO 108.- Se entiende por permiso la ausencia transitoria Ley 18.834, Art. 103.
de la institución por parte de un funcionario en los casos y
condiciones que más adelante se indican.
Interpretación:
Inciso 1°
Los funcionarios que hacen uso de permisos mantienen su condición de tales, como quiera que se
encuentran ejerciendo un derecho estatutario (16140191, 6204192, 25273198).
No puede estimarse justificada la inasistencia en que incurre un empleado por haber ignorado que su
solicitud de permiso había sido rechazada, lo que es válido también cuando no ha habido resolución
de la autoridad, porque antes de ausentarse debió consultar si el permiso se le había concedido o no
(10633193 -complementado por el48314101-, 28731199).
Las normas sobre permisos y feriados previstas en el Titulo IV de la ley 18834, corresponden a
derechos funcionarios, que al igual que las obligaciones, son inherentes al desempeño de todo cargo
público regulado por el citado cuerpo estatutario, por lo que se aplican al personal nombrado en
calidad de suplente (9662191, 41002196).
Inciso 2°
El otorgamiento de los permisos administrativos corresponde al Jefe Superior del Servicio, funciones
éstas que pueden delegarse, de acuerdo con el articulo 43 (actual articulo 41) de la ley 18575
(7907199). La facultad de solicitar a la autoridad administrativa hacer uso de permisos con o sin
goce de remuneraciones supone el mantenimiento de la calidad de empleado en servicio activo
(39219103).
Concordancias: Arts. 72, 104 bis, 109 y 11 O del EA; 107 del EAM; 1, 25, 31, 32 y 33 de la ley 19296,
sobre Asociaciones de Funcionarios de la Administración del Estado (permisos a dirigentes de las
asociaciones de funcionarios); 66, 195, 199, 199 bis y 200 del C. del T. (permisos en los casos de
muerte de un hijo, aún en periodo de gestación, del cónyuge, del padre o de la madre del trabajador;
los que se otorgan al padre en caso de nacimiento o adopción de un hijo; para el cuidado de menores
de un año con motivo de enfermedad grave); 74 de la ley 19712 (permisos deportivos).
Comentarios:
El Párrafo 4" del Titulo IV del Estatuto Administrativo reconoce dos tipos de permisos: con goce
de remuneraciones (articulo 109) y sin goce de remuneraciones (artículo 11 0). La autoridad
administrativa tiene la facultad discrecional de conceder o denegar estos permisos, lo que implica
que los funcionarios están obligados a consultar al Servicio si las Jefaturas pertinentes han acogido
o rechazado su petición, pues de otro modo se podria configurar un incumplimiento de la jornada
de trabajo que obliga al Servicio a realizar los descuentos de remuneraciones y, eventualmente, a
perseguir la responsabilidad administrativa.
ARTICULO 109.- Los funcionarios podrán solicitar permisos para Ley 18.834. Art. 104.
ausentarse de sus labores por motivos particulares hasta por seis
días hábiles en el año calendario, con goce de remuneraciones. Estos
permisos podrán fraccionarse por días o medios días.
Podrán, asimismo, solicitar que los días hábiles insertos entre dos Ley 19.920, Art. 2°.
feriados, o un feriado y un día sábado o domingo, según el caso, puedan
ser de descanso, con goce de remuneraciones, en tanto se recuperen
con otra jornada u horas de trabajo, realizadas con anterioridad o
posterioridad al feriado respectivo.
Interpretación:
Inciso 1°
El inciso segundo del articulo 91 del DFL 338, de 1960 (actual articulo 109 de la ley 18834), sólo
contempla como medio legitimo para que el funcionario público pueda ausentarse del Servicio, con
goce de remuneraciones, un permiso de seis días hábiles en cada año calendario, a fin de atender
asuntos particulares, que puede conceder el Jefe Superior del Servicio siempre que circunstancias
especiales lo justifiquen (14180168, 21785101).
El permiso administrativo a que se refiere esta norma es un beneficio estatutario, cuyo otorgamiento
es facultativo para la autoridad, que permite al empleado ausentarse de las labores por motivos
particulares, por un periodo de hasta seis días hábiles en el año calendario, con goce de
remuneraciones. Si el funcionario no goza del permiso durante el referido periodo, lo pierde, toda
vez que no es posible su acumulación ni compensación en dinero, por cuanto al establecerse como
una ausencia remunerada, no puede ser concedido en otras condiciones que las expresamente
señaladas por las disposiciones del Estatuto Administrativo que lo rigen, las cuales no contemplan
dichas modalidades (34238107).
Este permiso sólo aprovecha a quienes invisten la condición de funcionarios y mientras la mantengan,
de manera que si antes de gozar de este beneficio el empleado cesa en su cargo, éste no puede
reclamar su derecho a hacer uso de él (4730104).
La facultad del empleador para denegar o autorizar el permiso con goce de remuneraciones, está
concebida por el legislador en función o según las necesidades del Servicio respectivo, esto es, la
oportunidad y continuidad a la que está obligado, por lo que no pueden utilizarse como pretexto para
impedir el ejercicio de ese derecho circunstancias ajenas o desvinculadas a la normativa que regula
la petición y otorgamiento de esos permisos (15078102).
sea que ésta se cumpla de lunes a viernes o bajo un sistema de turnos -como ocurre en el caso de
los Servicios de Salud o Gendarmería de Chile-, cuando éstos sean el modo habitual de desempeño
del empleo, ya que la expresión "días" usada por este articulo 104 (actual articulo 109) es sinónimo
de jornada de trabajo. Luego, el fraccionamiento de los permisos con goce de remuneraciones en
"medios días" que consulta esta disposición, debe entenderse referido al periodo equivalente a
media jornada diaria de trabajo, cualquiera que sea la duración de ésta, según el cumplimiento de
la jornada semanal ordinaria. Los permisos que se concedan los días 1T de septiembre y 24 y 31
de diciembre, deben considerarse otorgados por medio día y no por día completo, por cuanto la
jornada ordinaria en esos días sólo puede extenderse hasta las 12:00 horas, con prescindencia del
hecho que ese lapso sea inferior al que comprende la respectiva media jornada laboral (25831/90,
26384/90, 4948/91' 29010/92, 5147/96, 51849/04).
Es improcedente considerar el día sábado como hábil para el cálculo de los permisos con goce de
remuneraciones, pues ese día dejó de tener la calidad de hábil o de trabajo, desde el momento que
la jornada ordinaria de 44 horas semanales se distribuyó de lunes a viernes, conforme al articulo
59 (actual articulo 65) de la ley 18834. Esta conclusión se encuentra confirmada por el articulo 60
(actual articulo 66), que considera como trabajo extraordinario, y no normal, el que se desarrolla
en día sábado. Además, el articulo 104 (actual articulo 109) al establecer que los permisos que
consulta son para "ausentarse de sus labores", está precisando que para su cómputo, día hábil es
sinónimo de día de trabajo (26384/90, 27872/90). No obstante, podrán justificarse con permisos
con goce de remuneraciones las ausencias del Servicio en días sábado, domingo o festivo, cuan<;lo
los funcionarios deban concurrir a la institución en esos días, por tratarse de entidades en que el
sistema de turnos constituye la modalidad habitual de desempeño (30008/91, 23353/94, 21222/95,
24770/95,4998/97, 51849/04).
Los suplentes de empleados de planta tienen derecho a disfrutar de los permisos establecidos en la
ley 18834, porque los derechos y obligaciones funcionarios son inherentes al desempeño de todo
cargo público regulado por esta ley (9662/91).
Los funcionarios públicos regidos por el Código del Trabajo pueden disfrutar de permisos con goce
de remuneraciones, en la medida que ello quede establecido en el contrato que celebren con la
Administración de acuerdo con lo previsto en ese Código. Con todo, dicho beneficio no podrá ser
diverso del establecido en la ley 18834 (24823/02).
Si bien el permiso que contempla esta disposición debe solicitarse éon anterioridad a su uso, la
aplicación normal del beneficio previsto en el inciso segundo del articulo 91 del DFL 338, de 1960
(actual articulo 109 de la ley 18834), puede verse perturbada por la concurrencia de causas de
fuerza mayor que impidan obtener previamente la resolución de la aútoridad que concede el permiso
con goce de remuneraciones, circunstancias éstas que obstan a la normalidad de los procedimientos
que lo perfeccionan. En estos casos, no existe otra alternativa para el afectado que regularizar,
a la brevedad, la situación anómala que se ha producido contra su voluntad, quedando a criterio
del Jefe Superior del Servicio ponderar la naturaleza del impedimento y la procedencia de otorgar
o denegar, discrecionalmente, el permiso. En el primer evento, la autorización posterior, basada
expresamente en la fuerza mayor, viene a subsanar la situación de hecho que no seria imputable al
funcionario; en tanto que, en el segundo caso, cuando no se acepta la causal de fuerza mayor que
impidió solicitar oportunamente el permiso y obtener su concesión, puede estimarse justificada la
inasistencia para efectos disciplinarios, esto es, que ésta no ha llegado a constituir infracción a las
obligaciones estatutarias, sin perjuicio de dar lugar, en todo caso, al descuento de remuneraciones
que corresponda practicar (45985/70, 15522/96).
No puede estimarse justificada la inasistencia en que incurre un funcionario por haber ignorado
que su solicitud de permiso había sido rechazada, lo que es válido también cuando no ha habido
resolución de la autoridad (10633/93).
Los permisos administrativos que señala esta norma no pueden fraccionarse por horas, ya que el
artículo 104 (actual articulo 109) no contempla esa posibilidad al referirse expresamente a "di as o
medios días". Tampoco procede utilizar e~ta franquicia para justificar atrasos (16987/93).
En las elecciones previstas en el reglamento de una Universidad estatal, pueden sufragar quienes se
encuentren haciendo uso de permisos administrativos, porque las exigencias para votar, contenidas
en ese reglamento, están establecidas en relación con la posesión de determinadas calidades y no
con el ejercicio efectivo de las funciones propias del cargo (24701/93).
Es improcedente aplicar a los funcionarios públicos las normas sobre permisos del artículo 1, W 22,
de la ley 19250, modificatoria del Código del Trabajo, porque ellos están regidos, en esta materia, por
los artículos 103 y siguientes (actuales artículos 108 y ss.) de la ley 18834, normativa especial que
debe prevalecer respecto de la contenida en el aludido Código (37974/94).
No corresponde aplicar supletoria mente este artículo al personal regido por la ley 15076, que permite
fraccionar por medios días los permisos administrativos, porque el artículo 25 de dicha ley regula
expresamente el otorgamiento de los aludidos permisos respecto de los empleados afectos a sus
disposiciones y dicha norma no contempla tal posibilidad (42633/94) (*).
Los funcionarios que laboran en sistemas de turnos rotativos tienen derecho a gozar de los días libres
por rotación de turnos, después de haber hecho uso de permisos con goce de remuneraciones, pues
esta norma otorga autorización para ausentarse de sus labores hasta por seis días hábiles en el año
calendario, sin formular distingos (12926/97).
El viático de faena previsto en los artículos 7 y 1O del DFL 262, de 1977, del Ministerio de Hacienda,
se devenga por el solo hecho de tener el trabajador la obligación de trasladarse diariamente a lugares
alejados de centros urbanos para realizar sus labores habituales, por lo que le asiste el derecho
a percibir este beneficio, aun cuando haya hecho uso de medio día de permiso administrativo
(17351/04).
Inciso 2•
La aplicación del inciso segundo del articulo 109 de la ley 18834 debe compatibilizarse con el
principio de continuidad y permanencia del servicio público, consagrado en el artículo 3 de la ley
18575, el que se vería gravemente afectado si se permite que la gran mayoría o todos los servidores
del organismo público se acojan simultáneamente al beneficio. El sistema de compensación de la
jornada no trabajada lo ha de establecer el Jefe del Servicio considerando el aludido principio y los
relativos a la eficiencia y coordinación con que deben ejercerse las funciones públicas, sin afectar
su oportuno y cabal desempeño (3688/04).
Concordancias: Arts. 3, letra e), 72 y 108 del EA; 108 del EAM.
(*) El DFL 1, de 2001, del Ministerio de Salud, fijó el texto refundido, coordinado y sistematizado de la ley 15076,
sobre Estatuto para los Profesionales Funcionarios.
Comentarios:
Estos permisos consisten en el derecho que tienen los funcionarios de ausentarse transitoriamente
del Servicio por motivos particulares con autorización de la jefatura pertinente, conservando la
remuneración que les corresponde.
El articulo 109 no establece ninguna exigencia en el sentido que el funcionario deba exponer los
motivos particulares por los que solicita ejercer este derecho, en armonía con la garantía constitucional
contenida en el N" 4 del articulo 19 de la Carta Fundamental, que asegura el respeto y protección a
la vida privada y pública de las personas.
El articulo 91 del DFL 338, de 1960 -anterior Estatuto Administrativo- permitía conceder permisos
con o sin goce de remuneraciones, estableciendo que los primeros, de hasta seis días hábiles en
cada año calendario, podían otorgarse en forma fraccionada y continua, señalando respecto de
los segundos, sólo su duración máxima de seis meses en dicho año por motivos particulares, y de
dos años para trasladarse al extranjero. Respecto de esta norma, la jurisprudencia administrativa
concluyó que no existían impedimentos legales para otorgar permisos sin goce de remuneraciones
por medios días, sin perjuicio, por cierto, de la facultad que asistía a la autoridad para denegar la
respectiva solicitud.
El mencionado articulo 109 de la ley 18834, previene que los permisos con goce de remuneraciones
"podrán fraccionarse por días o medios días", sin consultar la misma posibilidad tratándose de
aquéllos durante los cuales no se perciben emolumentos. Luego, no procede conceder permisos
por medios días cuando ellos son sin goce de remuneraciones.
El articulo 2 de la ley 19920, agregó un inciso segundo, que permite al personal solicitar los días
hábiles insertos entre dos feriados, o un feriado y un sábado o domingo, como de descanso con goce
de remuneraciones, siempre que se recupere con otra jornada u horas de trabajo.
ARTICULO 110.- El funcionario podrá solicitar permiso sin goce de Ley 19.154, Art. 2", 8).
remuneraciones:
El/imite señalado en el inciso anterior, no será aplicable en el caso Ley 18.834, Art. 105.
de funcionarios que obtengan becas otorgadas de acuerdo a la
legislación vigente.
Interpretación:
Inciso 1•
El permiso sin goce de remuneraciones no desvincula al funcionario del Servicio a que pertenece,
por lo que mantiene su condición de tal, sujeto al cumplimiento de las normas que rigen su relación
laboral con la Administración del Estado, encontrándose sólo liberado de la obligación de concurrir
a desempeñar el cargo. Por tal motivo, la circunstancia que el empleado esté gozando de dicho
beneficio no impide hacer efectiva la responsabilidad administrativa que pueda afectarle, aplicándole
la medida disciplinaria que en derecho corresponda (4325190). Asimismo, el tiempo durante el cual
hace uso del referido permiso no se le considera como servido efectivamente, siendo improcedente,
por ende, que pueda acceder a beneficios que requieren un desempeño real (30704189, 14756100).
A su vez, el hecho que el trabajador esté disfrutando de esta clase de permisos no impide aplicarle los
preceptos sobre incompatibilidad entre empleos públicos, de manera que la facultad de ausentarse
de su lugar de trabajo no lo autoriza para desempeñar durante el período que ellos comprenden un
cargo incompatible en otro Servicio, por lo que, si tal circunstancia ocurre, deberá cesar en el primero
de ellos (2127193, 30802196).
El funcionario que está haciendo uso de un permiso sin goce de remuneraciones se encuentra
inhabilitado para percibir estipendios durante el tiempo que abarca el permiso (18068174), salvo
aquellos que tienen el carácter de no remuneratorios que les concede la ley, como, por ejemplo,
los "aguinaldos" (7532106), o aquellos que se denominan "bonos", por no reunir las condiciones
de habitualidad y permanencia inherentes a las remuneraciones. De este modo, acceden a éstos
quienes se encuentran haciendo uso de permisos sin goce de remuneraciones, pues se exige que a
la fecha del pago tengan la calidad de funcionarios del Servicio de que se trata. Este es el caso, por
ejemplo, del bono compensatorio del artículo 3 de la ley 19432 (29411196), o los bonos especiales
establecidos por las leyes 19554 (25728198), y 19819 (3210103).
Procede la suspensión del pago del incentivo por desempeño colectivo de la ley 19553, por el
período que se hace uso de un permiso sin goce de remuneraciones, conforme al artículo 110 de
la ley 18834. Ello, porque de los artículos 1, inciso segundo, 3, letra e), y 7 de dicha ley y 32,
inciso primero, del decreto 983, de 2003, del Ministerio de Hacienda, fluye que tienen derecho a.esa
asignación "los funcionarios en servicio a la fecha de pago", y cada cuota es equivalente al "valor
acumulado en el trimestre respectivo, como resultado de la aplicación mensual de esta asignación",
de lo cual se desprende que este emolumento se devenga mes a mes durante el año de pago de la
asignación, época en que el servidor debe encontrarse en funciones, razón por la cual, las labores
desempeñadas en el año anterior, por más que se hubieren cumplido las metas correspondientes,
sólo configuran una mera expectativa de percibir tal beneficio (38134104, 6076107, 22609108).
Los funcionarios de un hospital que depende de un Servicio de Salud tienen derecho a percibir la
asignación de experiencia y desempeño funcionario de la ley 19490, sólo por los meses efectivamente
trabajados antes de comenzar a hacer uso del permiso sin goce de remuneraciones (7532/06).
Los permisos sin goce de remuneraciones pueden otorgarse por días, pero no por medios días
(12311/90, 28871/94, 21070/96).
El derecho a solicitar permiso sin goce de remuneraciones es un beneficio que debe ser ejercido
exclusiva, espontánea y libremente por el empleado, sin otra injerencia por parte de la autoridad que
su pronunciamiento afirmativo o negativo. Luego, el Jefe Superior del Servicio no puede orientar a
un subordinado para que requiera ese derecho en lugar de otro (69771/64, 31131/68).
La remuneración de un funcionario que ha hecho uso del permiso que regula el articulo 105 (actual
articulo 11 O) del Estatuto Administrativo, se determina descontando de la renta mensual, la suma
que resulta de multiplicar el número de días no trabajados por la remuneración diaria. Esta última se
obtiene luego de dividir la renta mensual primitiva por 30, siendo irrelevante para tales fines que el
mes tenga 28, 29, 30 o 31 días. Lo anterior, considerando que las remuneraciones deben pagarse
por mensualidades iguales y vencidas, cualquiera sea la cantidad de días del mes (27102/90,
6591/96).
Un permiso sin goce de remuneraciones de tres meses debe extenderse desde el11 de junio de un
año al10 de septiembre del mismo, no hasta el11 de este último mes. En el cómputo de los plazos
respecto de los servicios prestados en la Administración Pública no rige la norma general del articulo
48 del Código Civil. El año va desde el1 de enero al 31 de diciembre y cada mes se extiende entre
el primero y el último día del mismo. Luego, un mes vence antes· de igual día del mes siguiente
(26745/91).
Procede otorgar permisos sin goce de remuneraciones al personal de la Administración regido por
el Código del Trabajo, por cuanto el otorgamiento de estos permisos no significan desembolsos de
dinero para el Servicio a que esos funcionarios pertenecen. En estos casos, la autoridad administrativa
puede conceder los señalados permisos de acuerdo con las facultades inherentes a sus potestades
jerárquicas, aun cuando tales beneficios no estén reconocidos en la legislación estatutaria que les
es aplicable. Ello, no supone sentar un precedente en cuanto a que tales jefaturas pueden otorgar
beneficios no consultados en la ley, sino que significa aplicar solamente el principio jerárquico a un
caso particular en que es procedente hacerlo (6237/92, 12956/92).
A los servidores que hacen uso de permiso sin goce de remuneraciones no puede concedérseles
licencia médica (31446/99).
Procede otorgar permisos sin goce de remuneraciones a funcionarios estatales regidos por el Código
del Trabajo para que se ausenten de sus funciones por el tiempo que la autoridad lo determine, pero
durante ese lapso dichos servidores no podrán percibir remuneraciones, puesto que dicho cuerpo
legal no contiene disposiciones que permitan lo contrario (26612/99 -reconsiderado parcialmente
por el 24823/02-).
Los funcionarios con permiso sin goce de remuneraciones pueden ser contratados sobre la base de
honorarios (28646/91, 31523/93).
El permiso sin goce de remuneraciones concedido con efecto retroactivo no legitima la infracción
administrativa ya acreditada en contra de un funcionario sumariado por inasistencias injustificadas,
sino que sólo impide el descuento de remuneraciones que debía practicársele por el periodo no
trabajado, de acuerdo con lo prescrito por el articulo 144 del DFL 338, de 1960 (actual articulo 72 de
la ley 18834) (94298/64).
Procede aplicar la medida disciplinaria expulsiva contemplada en la letra a) del articulo 187 del
DFL 338, de 1960 (actual letra a) del articulo 125 de la ley 18834), al funcionario que hizo uso de un
permiso sin goce de remuneraciones y que posteriormente no reasumió las funciones inherentes a
su cargo (95430/64).
Teniendo en consideración que a los funcionarios a quienes se otorga permiso sin goce de
remuneraciones mantienen el vinculo estatutario que los liga con la Administración del Estado,
no corresponde otorgar un permiso sin goce de remuneraciones a los empleados del Ministerio
de Relaciones Exteriores con el objeto de que viajen al extranjero a asumir funciones en las
representaciones Diplomáticas de Chile, por cuanto el otorgamiento de ese beneficio significaría
vulnerar el articulo 80 (actual articulo 86) del Estatuto Administrativo, según el cual todos los cargos
públicos a que se refiere este Estatuto son incompatibles entre si (4125/96, 30802/96).
Los fondos presupuestarios liberados por el personal con permiso sin goce de remuneraciones
deben ingresar a Rentas Generales de la Nación y no pueden pasar a formar parte de los recursos
propios del respectivo organismo. La letra f) del articulo 14 del DFL 1340 bis, de 1930, según la
cual, los mencionados fondos constituían ingresos de la ex Caja Nacional de Empleados Públicos
y Periodistas, fue derogada por el DL 2341, de 1978, y no se indicó destino especifico para esas
sumas, ni existen disposiciones que le otorguen el carácter de recursos propios de los Servicios
(25586/92).
Los empleados afectos a la ley 18834, que sean elegidos alcaldes, tienen derecho a que se les otorgue
permiso sin goce de remuneraciones respecto de los cargos que sirven en calidad de titulares, por
todo el tiempo que comprenda su desempeño como autoridad edilicia (28192/94, 31752/94).
Es improcedente otorgar un primer permiso sin goce de remuneraciones por dos años a contar del
1 de marzo de 1993 y un segundo por el mismo tiempo desde el1 de marzo de 1995. Para conceder
el mencionado beneficio en más de una ocasión se requiere una interrupción entre ambos, de modo
que el segundo que se otorgue no sea la prolongación del primero y se exceda así el tiempo máximo
que fija la ley (4125/96).
Inciso 2•
La expresión "de acuerdo a la legislación vigente", utilizada en el inciso segundo del articulo 105
(actual articulo 11 0), no puede tener otro alcance que dejar establecido que no cualquier beca
concede el derecho a exceder el límite de tiempo señalado en su inciso primero, para hacer uso de
un permiso sin goce de remuneraciones, sino que debe tratarse de una que posea, por razones de
certeza y seriedad, el respaldo o fundamento en una norma jurídica (43164/97).
Concordancias: Arts. 3, letra e), 72, 76, inciso segundo, 108 y 109 del EA; 109 del EAM.
Comentarios:
Durante el permiso sin goce de remuneraciones el empleado mantiene su condición de funcionario
público, pero es liberado por la autoridad administrativa de la obligación de desempeñar el cargo
que sirve, suspendiéndose como contrapartida, el derecho a percibir las. remuneraciones que le
correspondan.
Párrafo 5°
De las licencias médicas
ARTICULO 111.- Se entiende por licencia médica el derecho que tiene 18.834, Art. 106.
el funcionario de ausentarse o reducir su jornada de trabajo durante
un determinado lapso, con el fin de atender al restablecimiento de su
salud, en cumplimiento de una prescripción profesional certificada por
un médico cirujano, cirujano dentista o matrona, según corresponda,
autorizada por el competente Servicio de Salud o Institución de Salud
Previsiona/1 en su caso. Durante su vigencia el funcionario continuará
gozando del total de sus remuneraciones.
Interpretación:
El único efecto de una licencia médica es el ausentarse o reducir la jornada de trabajo. La calidad de
funcionario y los derechos y deberes que de elia derivan no se enervan ni suspenden por el goce de
ese beneficio, salvo el de cumplir con la obligación de desempeño efectivo (16872193, 39856199).
Las licencias médicas implican un alejamiento provisorio del funcionario en el desempeño de su cargo,
originado por el ejercicio de un derecho que la ley franquea, sin que exista a su respecto la suspensión
absoluta de la relación laboral, por lo que esas licencias deben considerarse para el cómputo del
tiempo servido para la percepción de la asignación de antigüedad (30704189, 13215193).
Las licencias comprenden las de carácter médico para acogerse a reposo preventivo total o parcial,
las concedidas por causas de enfermedad y las que corresponden a permisos pre y post natal.
Durante el período en que se hace uso de estos beneficios, los funcionarios regidos por el Estatuto
Administrativo tienen derecho a percibir la totalidad de sus remuneraciones, de cargo del empleador
(75805168, 1889190, 44729199, 15016101 ).
Puesto que durante los períodos en que hacen uso de licencias médicas los funcionarios continúan
gozando del total de sus remuneraciones, cualquiera sea su régimen previsional, deben practicárseles
todos los descuentos por concepto de cotizaciones para pensiones y salud (23922192).
La licencia médica no es eficaz para impedir la notificación al empleado de sus calificaciones laborales
(16872193, 3082197).
Aun cuando no es posible que un suplente reciba la remuneración asignada al cargo que suple si el
titular hace uso de licencias médicas, conforme al inciso sexto del artículo 4 de la ley 18834, precepto
intercalado por el artículo 6 de la ley 18959, procede designar suplentes de funcionarias con licencia
maternal con una remuneración correspondiente al grado inferior al del cargo que se suple, siempre
que el financiamiento esté dentro de los recursos presupuestarios asignados al Servicio (19303/90,
30539/90, 20985/98).
La anotación del facultativo en el formulario de licencia médica respecto del lugar de reposo del
empleado debe interpretarse en concordancia con la enfermedad diagnosticada y con las demás
circunstancias de cada caso, de manera que no contradiga los principios terapéuticos, la lógica,
la equidad o el natural sentido común, que en último término gobierna la práctica administrativa.
Cuando se establece como lugar de reposo "su casa", no significa que deba efectuarse en el recinto
cerrado del hogar, sino que supone, como lo indica el Colegio Médico de Chile, que no es necesario
hospitalizar al enfermo. Por tal motivo, un funcionario con depresión nerviosa, neurosis de angustia
o cualquier enfermedad, cuyo tratamiento no requiera el reposo en cama, no hace uso indebido de
la licencia médica si se ausenta por unos días de su casa (72185/77, 2058/78).
El artículo 72 del Estatuto Administrativo, ordena que por el tiempo durante el cual no se hubiere
efectivamente trabajado no podrán percibirse remuneraciones, salvo que se trate de feriados, licencias
o permisos con goce de remuneraciones, de la suspensión preventiva contemplada en el artículo
136, de caso fortuito o de fuerza mayor. Agrega este precepto legal, que mensualmente deberá
descontarse por los pagadores, a requerimiento escrito del jefe inmediato, el tiempo no trabajado por
los empleados, calculado en la forma que allí se indica. A su vez, el artículo 63 del decreto N" 3, de
1984, del Ministerio de Salud, Reglamento de Autorización de Licencias Médicas por las Comisiones
de Medicina Preventiva e Invalidez e Instituciones de Salud Previsional, dispone que la devolución
o reintegro de las remuneraciones o subsidios indebidamente percibidos por el beneficiario de una
licencia no autorizada, rechazada o invalidada, es obligatorio, y que, sin perjuicio de lo anterior, el
empleador deberá adoptar las medidas conducentes al inmediato reintegro por parte del trabajador,
de las remuneraciones o subsidios indebidamente percibidos. De acuerdo con estas disposiciones
tratándose de inasistencias al trabajo derivadas de licencias médicas reducidas o rechazadas por las
respectivas instituciones de salud previsional, procede el descuento o retención de las remuneraciones
correspondientes, u obligan a la devolución de las sumas percibidas indebidamente, por tratarse de
ausencias injustificadas a las labores (38850/95, 10627/03, 24790/07). La tardanza del Servicio en
descontar de las remuneraciones los días no trabajados en el mes siguiente que corresponde, no es
un obstáculo para que se efectúe en los meses posteriores, por cuanto se trata de un crédito a favor
del Fisco afecto al plazo general de prescripción de cinco años conforme al artículo 2515 del Código
Civil y, por ende, tampoco es óbice al deber que le asiste a la funcionaria de devolver el monto
adeudado (25906/98, 41250/99, 24790/07).
El rechazo de una licencia médica por parte de los Servicios de Salud o de las Instituciones de Salud
Previsional, en su caso, invalida el fundamento que justifica la inasistencia laboral. En este evento,
debe procederse al descuento de las remuneraciones por el período no trabajado, sin perjuicio que la
licencia constituya una prueba cierta de la enfermedad del funcionario y un principio de justificación
de las ausencias pertinentes para efectos disciplinarios (19575/90, 2648/92, 38850/95, 14242/96,
15228/99, 37765/00, 24790/07).
Los empleados que hacen uso de una licencia médica por enfermedad, reposo preventivo o por
salud irrecuperable no están al margen de la responsabilidad administrativa en razón de las faltas en
que hayan incurrido en el cumplimiento de sus deberes funcionarios y, por ende, a la aplicación de
una medida disciplinaria (9524/62, 674/66, 61815/67, 14512/89).
Se ajusta a derecho la negativa de la autoridad administrativa de permitir que una funcionaria continúe
su tratamiento de rehabilitación dentro de las horas de trabajo, ya que aceptar su solicitud vulneraria
el deber de los empleados públicos de desempeñar su cargo en forma permanente durante toda
la jornada de trabajo. Esta autorización sólo puede darse cuando la receta médica recomienda
expresamente la reducción o ausencia parcial de la jornada para atender la recuperación de la salud
del empleado (33174/94).
Una de las caracteristicas esenciales del feriado es su continuidad y, por ende, una vez concedido
no puede interrumpirse por la concurrencia de otro beneficio estatutario de naturaleza diferente.
Por ello, el funcionario que inició el goce de sus vacaciones no tiene derecho a que se suspenda su
feriado a causa del otorgamiento posterior de una licencia médica, debiendo entenderse cumplidos
ambos beneficios en forma simultánea (16737/91, 3824/92,29897/92,6113/94, 36754/97, 18490/98).
Excepcionalmente y en oportunidades debidamente calificadas, debe reconocerse a la autoridad
administrativa atribuciones para suspender el feriado de un servidor afectado por una enfermedad
grave durante el transcurso del mismo, ya que en ese evento el feriado no cumpliria su objetivo
(8990/00, 28755/00).
Quienes gozan de una licencia médica, sea ésta común, maternal o por enfermedad grave del hijo
menor de un año, no pueden renunciar a tal beneficio y se encuentran obligados a mantener el
reposo ordenado en la respectiva prescripción del profesional autorizado para extenderla. Tales
prohibiciones se consultan, por ejemplo, en los articules 195 y 199 del Código del Trabajo, y 50,
51, 55 y 57 del decreto 3, de 1984, del Ministerio de Salud. En este sentido, atendida la finalidad
del derecho en análisis, esto es, la recuperación de la salud del trabajador o la atención del menor
gravemente enfermo, asi como el cuidado de la madre y del hijo durante el embarazo y el puerperio y,
además, en consideración a los términos amplios de las prohibiciones impuestas tanto al trabajador
como al empleador, este último se encuentra obligado no sólo a impedir que el servidor que hace
uso de una licencia médica realice las labores para las cuales fue nombrado o contratado, sino
que también, dentro del marco de sus facultades de control respecto de sus funcionarios, debe
velar porque éstos no efectúen alguna actividad que implique el quebrantamiento del reposo que
impone ese beneficio. En otras palabras, no procede que el trabajador incumpla el reposo prescrito
y, menos aún que labore en el lapso que dure la licencia médica (28488/91, 57871/05). Si bien las
normas sobre concursos de promociones dispuestas en los artículos 53 y siguientes del Estatuto
Administrativo, no prohiben la participación en esos certámenes de servidores que se encuentren
haciendo uso de una licencia médica, cualquiera sea el tipo de éstas, tales beneficios impiden,
tanto a los trabajadores como a los empleadores, que aquéllos ejecuten alguna actividad durante
la vigencia de tal beneficio, sea propiamente laboral o vinculada con el cargo que ocupan, como
sería, por ejemplo, la participación en un proceso de selección de personal que pueda significar
el incumplimiento del reposo dispuesto en una licencia. Luego, los funcionarios que gozan de
una licencia médica, sea ésta común, maternal o por enfermedad grave del hijo menor de un año,
no pueden participar o continuar participando, según sea el caso, en un concurso de promoción
que contenga etapas o instrumentos de evaluación que importen el desarrollo de una actividad
que vulnere el descanso que ordena el señalado beneficio, como sucedería, por ejemplo, con las
entrevistas personales, la rendición de pruebas, exámenes psicológicos o el desarrollo de cursos de
capacitación insertos en un proceso de selección para proveer un cargo de promoción (57871/05).
Es improcedente el otorgamiento de una licencia médica a un funcionario que está haciendo uso
de un permiso sin goce de remuneraciones. Con todo, en caso que se conceda ese beneficio a
un empleado que disfrutaba de aquel permiso, dicha licencia sólo comprenderá los días que falten
para completarla, una vez que haya expirado el permiso sin goce de remuneraciones (31446/99,
48852/99).
El funcionario que se encuentra en comisión de servicio y que le fue otorgada una licencia médica
por enfermedad, tiene derecho a percibir viáticos durante dicha licencia, siempre que con motivo de
ella no haya regresado al lugar de su desempeño habitual (57659/78).
Los funcionarios que cumplen trabajos extraordinarios, de noche, o en días sábados, domingos y
festivos, en Servicios o dependencias que por la naturaleza de las labores que desarrollan exijan
obligadamente que se trabaje en jornada extraordinaria en forma regular y permanente, tienen derecho
a conservar, durante el uso de feriados, licencias y permisos, las remuneraciones correspondientes
a esos trabajos extraordinarios. Por trabajo extraordinario regular y permanente debe entenderse
aquel que realizan los trabajadores en virtud del régimen especial a que se hallan sujetos por la
naturaleza de sus labores, en horas o días no comprendidos en la jornada habitual, no siendo en
todo caso necesario que el organismo o dependencia de que se trate funcione las 24 horas del día.
Debe tratarse de establecimientos que, por la naturaleza de sus funciones, no pueden paralizar
(59114/73, 25233/90, 4107/93, 34682/93, 901/94 -reconsiderado parcialmente por el23764/94-,
23353/94, 37969/94, 8019/95, 24770/95, 26161/97, 30791/97, 43863/98, 8386/99, 12057/00, 62/01,
24305/01).
El funcionario que goza de gratificación o asignación de zona no pierde su derecho a percibir este
beneficio por el hecho de acogerse a licencia médica, aunque durante ese tiempo no permanezca
efectivamente en la zona (57634/75, 13778/84, 20879/85).
Las licencias médicas no confieren inamovilidad en el empleo, por lo que procede el cese de funciones
de los empleados que se encuentran gozando de tales permisos médicos, cuando respecto de ellos
se produce una causal legal que pone término a sus labores. Luego, la licencia por enfermedad
no impide que los servicios de los contratados, con arreglo al artículo 9 (actual artículo 1O) del
Estatuto Administrativo, cesen por la llegada del plazo indicado en la ley o en el decreto o resolución
pertinente, ni tampoco obliga a la autoridad a renovar una contratación. En este caso, la cesación
de funciones también pone término a la licencia. Por tal motivo, debe entenderse que el derecho
a percibir el total de las remuneraciones durante el goce de una licencia médica será procedente
en tanto el funcionario mantenga su calidad de tal. No existe disposición alguna que autorice a
un funcionario para percibir remuneraciones con posterioridad a la fecha de expiración de sus
servicios, aun cuando la causal de término de éstos se haya producido durante el goce de licencias
médicas continuas (31660/87, 25351/90, 9055/92, 28540/94,31424/94, 8217/95, 28365/95,3082/97,
11802/97, 35069/97, 42239/00, 6555/02).
Las funcionarias públicas no pueden ser removidas de sus cargos mientras hacen uso de una
licencia maternal, a menos que concurra una justa causa calificada por el Juez. Se entiende por
"justa causa" aquella expresamente contemplada en la ley, que obliga a la autoridad a poner término
a los servicios de la empleada durante el período de inamovilidad (61322/78). No obstante, tanto
las normas sobre inamovilidad como las del fuero maternal, priman en los casos en que el término
de funciones no dependen imperativamente de la ley, sino de las facultades de la autoridad para
disponer el alejamiento del Servicio (5459/00).
De acuerdo con los artículos 194 y siguientes del Código del Trabajo, no procede terminar contrato de
funcionaria amparada por fuero maternal por la causal de vencimiento del plazo convenido sino con
expresa autorización judicial, debiendo renovarse la contratación por todo el lapso de inamovilidad.
En estos casos, carece de relevancia que el contrato tenga plazo fijo o indefinido, porque la ley no ha
distinguido al respecto (7899/89, 16090/90, 16506/90,25276/90, 15454/92,32269/93, 21345/99).
Si indebidamente se pone término a la relación laboral de una funcionaria que hacía uso de su derecho
a licencia maternal, debe ser reincorporada a su cargo, correspondiendo que le sea reconocido
como efectivamente trabajado todo el período cubierto por la inamovilidad, procediendo el pago de
sus remuneraciones como si hubiera estado en servicio (25558/87, 5744/90, 8475/98).
Como el objeto de la asignación de movilización es resarcir los gastos en que incurre el funcionario
cuando debe realizar visitas domiciliarias o labores inspectivas fuera de su oficina, inherentes a
su cargo, su pago se suspende durante los feriados, licencias, permisos o comisiones de servicio.
Por tal motivo, en el caso del empleado que hace uso de una licencia médica parcial, la suma que
corresponde pagar por ese concepto debe reducirse proporcionalmente en relación a su jornada
laboral (27335/90).
Los funcionarios que se desempeñan como subrogantes en cargos que causan el pago de gastos
de representación contemplados en el articulo 3 del DL 773, de 1974, tienen derecho a percibir tal
beneficio en el caso que su titular se encuentre con licencia médica, pues ese decreto ley se limita
a enumerar los empleos que autorizan para disfrutarlo cuando éstos se ejercen efectivamente, sin
distinguir en cuanto a la calidad o condición jurídica en que ellos se sirven (31665/90).
Conforme a los artículos 29 y 32 del decreto 3, de 1984, del Ministerio de Salud, Reglamento de
autorización de licencias médicas por los Servicios de Salud e Instituciones de Salud Previsional,
los referidos organismos tienen las funciones de estudiar y aprobar las licencias médicas, por lo que
al resolver en la materia, actúan dentro de sus atribuciones y en el ejercicio de las obligaciones que
le han sido encomendadas. La función de autorización de las licencias no tiene por objeto revisar
el diagnóstico o tratamiento indicado, sino que precisar su cumplimiento y el correcto ejercicio de
los derechos laborales del enfermo, sin perjuicio de la responsabilidad funcionaria fehacientemente
acreditada. Los artículos 39 y 40 de ese decreto consultan una instancia de reclamo ante la Comisión
de Medicina Preventiva e Invalidez del Servicio de Salud pertinente (29298/91, 31218/91, 1777/93).
La licencia médica otorgada a un funcionario que no ha sido autorizada por el organismo de salud
competente, no puede considerarse para estimar al empleado como afectado con salud incompatible
para el desempeño del cargo (19473/92).
Los empleados que con motivo de licencias médicas se ven impedidos de gozar del feriado, no
pueden impetrarlo al año siguiente, salvo que medie acumulación, beneficio que deberá solicitarse
dentro del respectivo año calendario (24921/92, 25213/92, 14089/94, 36215/96, 18256/99).
Es improcedente fijar horarios especiales para la recuperación del tiempo no trabajado por funcionarios
que deben usar parte del horario correspondiente a su jornada en recibir tratamientos médicos, como
ocurre con quienes deben someterse a diálisis durante algunos días de la semana, ya que si bien el
afectado no puede dar cumplimiento en su totalidad a la jornada que le corresponde durante el lapso
en que coinciden el tratamiento médico y su jornada laboral, el servidor tiene derecho a licencia médica
de acuerdo con el articulo 106 (actual articulo 111) de la ley 18834. No obsta a esta conclusión el que
el decreto 3, de 1984, del Ministerio de Salud, Reglamento de autorización de licencias médicas por
los Servicios de Salud e Instituciones de Salud Previsional, no regule expresamente las modalidades
para el otorgamiento de esos permisos por días discontinuos o por determinado número de horas en
un di a, puesto que en esa situación se configura lo previsto por este articulo 106 (actual articulo 111)
para que el trabajador tenga derecho a ese beneficio (20907/93).
Las personas contratadas sobre la base de honorarios pueden, si así se estipula en los respectivos
convenios, gozar de beneficios análogos a las licencias médicas, sin que ello implique hacerles
aplicables a esos trabajadores los preceptos del Estatuto Administrativo (7179/95, 29163/99).
En el caso de una mujer contratada sobre la base de honorarios, ésta podrá gozar de licencia médica
maternal, en la medida que así se estipule en el respectivo convenio, pero sólo durante su vigencia
(1983/97, 29163/99, 32423/00).
a desempeñar sus funciones, aunque le haya sido concedida una nueva licencia a partir del lunes
siguiente. Ello se fundamenta en el hecho que las licencias médicas se conceden por días corridos
y en relación con la circunstancia de cada una de ellas. De este modo, el reposo que ordena el
profesional competente debe corresponder al tiempo que estime necesario para el restablecimiento de
la salud del funcionario, sin que esté obligado a otorgarlo por más días de los que crea convenientes,
por lo que no es imperativo a través de este mecanismo justificar periodos durante los cuales el
empleado no está obligado a desempeñar su cargo (18375/97).
No corresponde estampar una anotación de demérito en la hoja de vida de los funcionarios por haber
presentado una licencia médica sin tener en cuenta los trastornos que su ausencia ocasionarla
en el Servicio, porque las licencias médicas no pueden considerarse una infracción a los deberes
funcionarios, sino que, por el contrario, constituyen el ejercicio de un derecho o beneficio estatutario
(28456/98).
Es improcedente exigir a las madres funcionarias el reintegro de las sumas pagadas por un organismo
público a un establecimiento no institucional que presta servicios de sala cuna, por el hecho que
utilizaron dicha sala cuna durante períodos en que estuvieron acogidas a licencia médica, porque
conforme a los artículos 188 y 190 (actuales artículos 203 y 205) del Código del Trabajo, la obligación
de mantener salas anexas e independientes del local de trabajo donde las mujeres trabajadoras
puedan alimentar a sus hijos menores de dos años y dejarlos mientras estén laborando, constituye
una obligación que la ley impone al empleador, siendo éste un beneficio gratuito para las beneficiarias.
Por lo tanto, la circunstancia que el referido Código permita cumplir la señalada obligación a través
de un tercero, celebrando para ello un convenio, no puede alterar en forma alguna las características
propias de esta franquicia. Esa relación contractual sólo afecta a las partes que la acordaron, esto
es, a la entidad empleadora y al tercero que se obliga a prestar el respectivo servicio, pero en ningún
caso a la funcionaria misma. De esta manera, los pagos que el empleador efectúe en favor del
tercero aludido, se originan en las estipulaciones del contrato que así lo establecen, a los cuales son
ajenas las beneficiarias, debiendo resolverse las divergencias que puedan producirse en razón del
uso del servicio de sala cuna entre aquellos contratantes (30646/92).
La licencia maternal tiene una naturaleza eminentemente protectiva. Por tal motivo, la ley
reconoce, en estos casos, a la respectiva funcionaria como efectivamente trabajado todo el periodo
correspondiente, de manera que el amparo integral que se les confiere a través de esta institución,
que está destinada a cautelar valores superiores, debe primar, como regla interpretativa, por sobre
los conceptos técnicos (6332/98, 35643/00).
Los Servicios Públicos deben solicitar al Fondo Nacional de Salud o a la Institución de Salud
Previsional, según el caso, el reembolso de los subsidios por incapacidad laboral correspondiente
a las licencias médicas de sus funcionarios, en el plazo de seis meses desde que expiraron las
licencias o la última prórroga. Vencido este plazo, según el artículo 24 de la ley 18469, modificado
por la letra b) del articulo 25 de la ley 18681 (actual artículo 155 del DFL 1, de 2005, del Ministerio de
Salud), prescribe el derecho a reembolso (6028/95).
De acuerdo con el artículo 11 de la ley 18768, los Servicios e instituciones del sector público,
centralizados y descentralizados, regidos por el DL 1263, de 1975, están obligados a integrar a Rentas
Generales de la Nación, las recuperaciones de fondos provenientes de los pagos que les hagan los
Servicios de Salud o las Instituciones de Salud Previsional, según corresponda, por concepto de
pagos de licencias por enfermedad o subsidio por reposos maternales y permisos por enfermedad
del hijo menor de edad, de que hayan hecho uso los empleados, dentro del mismo mes en que se
perciban dichas devoluciones. A su vez, la historia fidedigna del establecimiento de la primera de
las leyes mencionadas, señala que tanto los subsidios maternales como los por enfermedad del hijo
menor, son cubiertos enteramente con los recursos del Fondo Unico de Prestaciones Familiares y
Subsidios de Cesantía que se financia exclusivamente con aporte fiscal, de modo que al integrarse
esos dineros a Rentas Generales de la Nación, se evita el doble pago fiscal (4776/95).
Concordancias: Arts. 19, N" 9, de la CP de la R; 72 y 151 del EA; 194 y ss. del C del T; 110 del
EAM; 22 de la ley 18469, que Regula el ejercicio del derecho constitucional a la protección de la
salud y crea un régimen de prestaciones de salud; Decreto 3, de 1984, del Ministerio de Salud,
Reglamento de Autorización de Licencias Médicas por los Servicios de Salud e Instituciones de
Salud Previsional; 12y 13 del DFL 1, de 2005, del Ministerio de Salud, que fijó el texto refundido,
coordinado y sistematizado del DL 2763, de 1979 y de las leyes 18933 y 18469.
Comentarios:
El reposo preventivo, las licencias médicas comunes, y el reposo pre y post natal, son beneficios
propios del campo de la seguridad social, cuya regulación es diversa en el ordenamiento jurídico
nacional, según se trate de empleados afectos al régimen del sector público o al del sector privado.
El artículo 89, inciso segundo, de la ley 18834, hizo aplicables todas las prestaciones y beneficios
sobre protección a la maternidad que contemplan las normas laborales generales que establecen los
artículos 194 y siguientes del Código del Trabajo, a las mujeres funcionarias.
Los empleados públicos regidos por el Estatuto Administrativo tienen derecho a percibir el total de sus
remuneraciones durante las licencias médicas, las que son de cargo de la entidad empleadora, sea
un Servicio centralizado o descentralizado del Estado, sin perjuicio de que ésta reciba del pertinente
organismo de salud la compensación económica que corresponda.
Interpretación:
Concordancias: Arts. 150, letra a), del EA; 11 del DL 3500, de 1980, que establece nuevo Sistema
de Pensiones; 111 del EAM.
Comentarios:
La jurisprudencia administrativa ha declarado que los artículos 112 de la ley 18834 y 111 de la ley 18883,
al prevenir que corresponde a las Comisiones Médicas competentes declarar la irrecuperabilidad de
los servidores adscritos a las Administradoras de Fondos de Pensiones, incurrieron en una imprecisión
al emplear el término "irrecuperabilidad", que es de orden estatutario, en vez de "invalidez", que es el
que utiliza la normativa del DL 3500, de 1980, especialmente cuando establece el derecho a pensión
de invalidez a los afiliados que sufran un menoscabo en su capacidad de trabajo a consecuencia de
una enfermedad o debilitamiento de sus fuerzas físicas o intelectuales (artículos 4 y 11 ).
ARTICULO 113.- La declaración de irrecuperabilidad afectará a todos Ley 18.834, Art. 108.
los empleos compatibles que desempeñe el funcionario y le impedirá
reincorporarse a la Administración del Estado.
Interpretación:
El articulo 108 (actual artículo 113) del Estatuto Administrativo es aplicable tanto a los funcionarios
afiliados a una Administradora de Fondos de Pensiones como a los que están en el sistema previsional
antiguo, ya que la ley no distinguió entre los distintos regímenes previsionales para determinar su
aplicación (20418/92, 41389196).
El funcionario con derecho a percibir pensión por invalidez parcial de acuerdo con el artículo 38 de
la ley 16744, no puede seguir desempeñándose en otras labores conforme al artículo 71 de ese
mismo ordenamiento, por cuanto el artículo 146 (actual artículo 152) de la ley 18834, es categórico
en señalar que declarada la irrecuperabilidad, dentro del plazo de seis meses contado desde la
fecha en que se le notifique la resolución que la disponga debe el afectado retirarse, no distinguiendo
tal precepto, si la enfermedad produce disminución total o parcial de la capacidad de ganancia
(30257/96).
Concordancias: Arts. 150 y 152 del EA; 112 del EAM; 38 y ss. de la ley 16744, sobre Accidentes del
Trabajo y Enfermedades Profesionales.
Comentarios:
La declaración de irrecuperabilidad es un pronunciamiento esencialmente técnico que corresponde
a las Comisiones Médicas competentes, las cuales califican si el estado de salud del funcionario es
compatible con el desempeño del cargo. Atendida su naturaleza de examen médico especializado,
no pueden ser ponderadas o revisadas por la autoridad administrativa.
Párrafo 6"
De las prestaciones sociales
ARTICULO 114.- En caso de que un funcionario fallezca, el cónyuge Ley 18.834, A1t. 109.
sobreviviente, los hijos o los padres, en el orden señalado, tendrán
derecho a percibir la remuneración que a éste correspondiere, hasta
el último día del mes en que ocurriere el deceso.
Interpretación:
El beneficio que esta norma establece es aplicable a todo el personal que ingresa a la Administración
a partir de la vigencia de la ley 18834, esté o no afiliado a una Administradora de Fondos de Pensiones.
A los funcionarios que continúan regidos por las normas previsionales consultadas en el DFL 338,
de 1960, se les sigue aplicando el artículo 109 de este ordenamiento, en cuanto a los beneficiarios
de la franquicia (14604190, 8934192, 14150193).
El sentido de este artículo 109' (actual artículo 114) es establecer una prestación social para los
familiares del funcionario que fallece, por lo cual no es posible entender que en virtud de este precepto
su vínculo con el Servicio se prolongue más allá del día de su muerte (8571193).
La circunstancia que se reconozca al cónyuge sobreviviente, a los hijos o a los padres del funcionario
que fallece en servicio activo el derecho a percibir la remuneración del causante hasta el último
día del mes en que ocurra el deceso, no significa que la causal de cesación de funciones del
empleado, prevista en el Estatuto Administrativo, deba considerarse consumada el primero del mes
siguiente a ese deceso, ya que el artículo 109 (actual artículo 114) de la ley 18834 no altera las
reglas que gobiernan la expiración de funciones, ni tampoco las que rigen la provisión de la plaza
correspondiente. Por tal motivo, el pago que este precepto ordena debe hacerse con cargo al ítem
imprevistos del presupuesto del respectivo Servicio (87229164, 12591/89).
El beneficio económico que el artículo 109 (actual artículo 114) del Estatuto Administrativo otorga a
determinados parientes del funcionario que fallece en actividad, no es susceptible de descuentos por
concepto de cotizaciones previsionales, de impuestos u otros que establezcan las leyes, los cuales
sólo se podrán efectuar hasta el día en que fallezca el empleado, habida consideración que las sumas
concedidas a partir de la fecha del deceso y hasta el último día del mes no son sino una franquicia
especial otorgada a esos parientes que no reviste el carácter de remuneración (12591/89).
El cónyuge sobreviviente de un empleado fallecido a quien se puso término a sus funciones por
no asistir a sus labores habituales sin causa justificada, tiene derecho al beneficio de esta norma,
porque la medida de cese se adoptó sin haberse realizado una investigación sumaria o sumario
administrativo, situación que no puede regularizarse después del fallecimiento del afectado, por
cuanto ese hecho extinguió su responsabilidad administrativa, la cual es eminentemente personal.
Por tal motivo, el funcionario a su deceso mantuvo el vínculo que lo ligaba con la Administración y,
por ende, los derechos inherentes al cargo que servía (27789/92).
El artículo 114 del Estatuto Administrativo permite, a las personas que indica, percibir las
remuneraciones del mes en que ocurre el deceso del funcionario, lo cual supone el pago íntegro de
los estipendios del período que señala, monto que incluye los de los días posteriores al fallecimiento,
si este ha ocurrido antes del último día del mes. Atendida su especialidad, esta norma debe
aplicarse preferentemente para los efectos del pago de cualquiera remuneración que le habría
correspondido percibir al funcionario fallecido hasta el último dia del mes en que ocurrió el deceso.
De esta manera, tratándose de la asignación de modernización, igualmente deberá aplicarse esta
disposición, prevaleciendo sobre la regulación que en esta materia ha establecido el articulo 1 de
la ley 19553, razón por la cual, para los efectos del pago de ese beneficio, el cálculo de la cuota
trimestral correspondiente debe hacerse considerando como íntegramente trabajado el mes en que
falleció el funcionario (26659/06).
Comentarios:
El articulo 114 del Estatuto Administrativo permite cobrar todas las remuneraciones del funcionario
que fallece en servicio activo, durante el mes completo en que ocurre su deceso, lo cual supone el
pago por los días posteriores a éste.
Los derechos que establece esta disposición no alcanzan a las rentas insolutas anteriores al mes
en que se produce el deceso, a los reajustes impagos de éstas y a las diferencias pendientes de
remuneraciones, por lo que, encontrándose incorporados estos derechos al patrimonio del causante,
deben transmitirse conforme a las reglas previstas en el Código Civil, que regulan el derecho de
herencia. Lo mismo acontece, tratándose del sueldo y demás remuneraciones correspondientes al
último mes de desempeño cuando no existen los beneficiarios a que se refiere el precepto, esto es,
cónyuge sobreviviente, hijos o padres, en cuyo caso, las sumas pertinentes devengadas hasta el día
del fallecimiento del funcionario se transmiten integradas a la masa hereditaria (3054/94).
ARTICULO 115.- El funcionario que se accidentare en actos Ley 18.834. Art. 110.
de servicio o se enfermare a consecuencia o con ocasión del
desempeño de sus funciones · tendrá derecho a obtener la
asistencia médica correspondiente hasta su total recuperación.
Interpretación:
Desde la vigencia del Estatuto Administrativo, esto es, desde el 23 de septiembre de 1989, los
servidores estatales sujetos a sus disposiciones pasaron a regirse por las normas de los articulas
11 Oy 111 (actuales articulas 115 y 116) de ese Estatuto, en lo que se refiere a accidentes del trabajo
y enfermedades profesionales, con excepción de aquel personal que pertenecía a Servicios que con
anterioridad se les aplicaba el Código del Trabajo y que, por ende, en tales aspectos continuaron
protegidos por el sistema de cobertura de la ley 16744. A contar de la entrada en vigor de la ley 19345,
que sometiera a los empleados de la Administración Civil del Estado, centralizada y descentralizada
y demás entidades que indica, al seguro contra riesgos de accidentes del trabajo y enfermedades
profesionales de la ley 16744, o sea, a partirdel1 de marzo de 1995, han perdido su eficacia jurídica
los mencionados artículos 110 y 111 (actuales artículos 115 y 116) de la ley 18834 respecto de los
señalados funcionarios. Por tal motivo, tratándose de este tipo de accidentes y enfermedades que
afecten a los mencionados trabajadores, deben observarse las formalidades contenidas en la citada
ley 16744, con exclusión de toda otra normativa (40774/95, 41045/95,4816/96,23135/96,30257/96,
7694/97' 22402/01 ).
Las instituciones no sometidas a la ley 19345, continúan regidas por los artículos 110 y 111 (actuales
artículos 115 y 116) del Estatuto Administrativo o por sus disposiciones especiales (40774/95,
23135/96).
Si el accidente en acto de servicio ocurre al amparo de los artículos 110 y 111 (actuales artículos 115
y 116) de la ley 18834, y los procedimientos de verificación por vía del pertinente proceso sumarial se
han iniciado igualmente en esa época, pero culminan durante la vigencia de la ley 19345, emitiéndose
luego el informe de la Comisión Médica que evalúa la naturaleza de las lesiones sufridas por los
afectados, procede que dicha Comisión aplique los referidos artículos 110 y 111 (actuales artículos
115 y 116). Ello tiene su fundamento en el principio de la unidad de procedimiento, que garantiza
al funcionario que bajo unas mismas reglas quedarán determinados sus derechos, tanto respecto
de las franquicias de seguridad social que puedan favorecerle como los que se deriven del término
eventual de su carrera funcionaria, y además, porque la citada ley 19345 no tiene efecto retroactivo
ni contiene normas transitorias que regulen esta situación (30257/96).
A contar de la vigencia de la ley 19345, los organismos del Estado cuyo personal pasó a regirse en
materia de accidentes del trabajo y enfermedades profesionales por la ley 16744, se encuentran
obligados a pagar, además de la cotización básica, la adicional, en las condiciones que determina
esta ley. Al respecto, su artículo 15 establece que el financiamiento del seguro de accidentes del
trabajo y enfermedades profesionales provendrá de una cotización básica general del 0,90% de
las remuneraciones imponibles, de cargo del empleador, y de una adicional diferenciada que se
fija en función de la actividad y riesgo de la empresa o entidad empleadora, de acuerdo con las
calificaciones que se hacen en los términos de los decretos 110, de 1968, y 173, de 1970, ambos
del Ministerio del Trabajo y Previsión Social, Subsecretaría de Previsión Social (este último en la
actualidad se encuentra derogado por el decreto 67, de 1999, de esa misma Secretaría de Estado),
la que será determinada por el Presidente de la República y no podrá exceder de un 3,4% de las
rentas imponibles, y que también será de cargo del empleador (34016/96).
De acuerdo con el articulo 11 O (actual articulo 115) del Estatuto Administrativo, corresponde en
forma exclusiva y excluyente a la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez del Servicio de Salud
pertinente (actualmente de la respectiva Secretaria Regional Ministerial de Salud), determinar las
circunstancias en que se producen los accidentes en actos de servicio y calificar la procedencia de
los tratamientos y gastos que éstos originen, tratándose del personal Auxiliar de Gendarmería de
Chile, cuya decisión debe cumplirse sin más trámite, siendo improcedente entender que puedan
satisfacerse por otros medios (44660/98, 9603/99).
Concordancias: Arts. 116 del EA y 114 del EAM; ley 19345, dispone aplicación de la ley 16744
a trabajadores del Sector Público que señala; ley 16744, estableció normas sobre Accidentes del
Trabajo y Enfermedades Profe~ionales; decretos del Ministerio del Trabajo y Previsión Social,
Subsecretaria de Previsión Social: 101, de 1968, Reglamento para la aplicación de la ley 16744; 109,
de 1968, Reglamento para la Calificación y Evaluación de los Accidentes del Trabajo y Enfermedades
Profesionales; 11 O, de 1968, fija escala para la determinación de la cotización adicional diferenciada
a que se refiere la letra b) del articulo 15 de la ley 16744; 120, de 1968, estableció normas para la
determinación de las cotizaciones y distribución de los excedentes que señala, en conformidad con
lo dispuesto en los artículos 14, 15, 19, 21, 24, 72 y 1 transitorio de la ley 16744; 208, de 1968,
Reglamento para la aplicación del articulo 1 transitorio de la ley 16744; 285, de 1968, aprobó el Estatuto
Orgánico de Mutualidades de Empleadores, de acuerdo con lo establecido en el articulo 13 de la ley
16744; 40, de 1969, Reglamento para la aplicación del Titulo VIl de la ley 16744, sobre Prevención
de Riesgos Profesionales y demás disposiciones sobre la materia; 54, de 1969, Reglamento para la
constitución y funcionamiento de los Comités Paritarios de Higiene y Seguridad, de acuerdo con lo
dispuesto en el articulo 66 de la ley 16744; 84, de 1969, Reglamento del Departamento de Accidentes
del Trabajo y Enfermedades Profesionales del Servicio de Seguro Social, ex Caja de Accidentes del
Trabajo, de acuerdo con lo dispuesto en el inciso tercero del articulo 9 de la ley 16744; 102, de
1969, Reglamento para la aplicación de las letras b) y e) del articulo 2 de la ley 16744; 168, de 1995,
Reglamenta constitución y funcionamiento de los Comités Paritarios de Higiene y Seguridad en las
entidades empleadoras a que se refiere el articulo 1 de la ley 19345; 67, de 1999, aprobó, a contar
del1 de julio de 2001, el Reglamento para la aplicación de los artículos 15 y 16 de la ley 16744.
Decretos del Ministerio de Salud, 821, de 1971, Reglamento para la aplicación del articulo 24 de la
ley 16744; 313, de 1972, Reglamento sobre Seguro Escolar contemplado en el articulo 3 de la ley
16744; 594, de 1999, Reglamento sobre condiciones sanitarias y ambientales básicas en los lugares
de trabajo, en conformidad con lo dispuesto en los artículos 65 y 68 de la ley 16744. Decreto 283, de
2001, del Ministerio de Educación, creó la Comisión Nacional de Seguridad Escolar, en conformidad
con lo dispuesto en la ley 16744. El articulo 19 de la ley 20096, que establece mecanismos de
control aplicables a las sustancias agotadoras de la capa de ozono, señala que los empleadores de
los funcionarios regidos por las leyes 18834 y 18883, en lo que fuere pertinente, deberán adoptar las
medidas necesarias para protegerlos eficazmente cuando puedan estar expuestos, en el ejercicio de
sus funciones, a radiación ultravioleta.
Comentarios:
La doctrina nacional considera que la necesidad de regular la prevención en el campo laboral ha
La ley 16744 -cuyo sistema de cobertura se aplica integralmente a la mayoría de los servidores
estatales que se rigen por la ley 18834- consulta diversos objetivos de prevención, los cuales se
manifiestan en las siguientes medidas:
A) Recargos, rebajas y exenciones de la cotización adicional, mecanismos estos dos últimos que
ofrecen notables estímulos económicos (artículos 15 y 16 de la ley 16744 y decretos 110, de 1968,
y 67, de 1999, ambos del Ministerio del Trabajo y Previsión Social, Subsecretaría de Previsión
Social);
B) Obligación de las empresas de actualizar los Reglamentos Internos y de implantar las medidas
de higiene y seguridad en el trabajo que prescriban los Servicios de Salud o el respectivo organismo
administrador (artículos 67 y 68 de la ley 16744);
C) Obligación de toda empresa que ocupe más de cien personas de tener un Departamento de
Prevención de Riesgos Profesionales, dirigido por un experto en prevención (artículo 66 de la ley
16744);
D) Obligación de toda industria o faena donde trabajen más de veinticinco personas de crear uno o más
Comités Paritarios de Higiene y Seguridad, con las siguientes funciones: 1) asesorar o instruir a los
trabajadores para la correcta utilización de los instrumentos de protección; 2) vigilar el cumplimiento,
tanto por parte de las empresas como de los trabajadores, de las medidas de prevención, higiene y
seguridad; 3) investigar las causas de los accidentes del trabajo y enfermedades profesionales que
se produzcan en la empresa; 4) indicar la adopción de todas las medidas de higiene y seguridad que
sirvan para la prevención de los riesgos profesionales, y 5) cumplir las demás funciones o misiones
que le encomiende el organismo administrador respectivo (artículo 66 de la ley 16744).
En el amplio margen de la seguridad social, las contingencias cubiertas por la ley 16744, sobre
Accidentes del Trabajo y Enfermedades Profesionales, aparecen como formas particulares de la
enfermedad, la invalidez, la muerte y la supervivencia. Básicamente estas contingencias son las
siguientes:
A) Los accidentes del trabajo, entendiéndose por tales, las lesiones que sufra una persona a causa
o con ocasión del trabajo, y que le produzcan incapacidad o muerte; los ocurridos en el trayecto
directo, de ida o regreso, entre la habitación y el lugar de trabajo, y los sufridos por dirigentes de
instituciones sindicales a causa o con ocasión del desempeño de sus cometidos gremiales. Se
exceptúan los accidentes debidos a fuerza mayor extraña que no tenga relación alguna con el trabajo
y los producidos intencionalmente por la víctima (artículo 5).
B) Las enfermedades profesionales, esto es, las causadas de una manera directa por el ejercicio de
la profesión o el trabajo que realice una persona y que le produzca incapacidad o muerte, siempre
que se encuentren entre aquellas que enumera el Reglamento. Con todo, los afiliados pueden
acreditar ante el respectivo organismo administrador el carácter profesional de alguna enfermedad
no enumerada en dicho Reglamento conforme a un procedimiento especial (artículo 7).
La administración del seguro estará a cargo del Instituto de Normalización Previsional, de los
Servicios de Salud y de las Mutualidades de Empleadores (artículo 8). Con todo, conforme a lo
dispuesto en el artículo 63, en relación con el artículo vigésimo transitorio, ambos de la ley 20255,
que establece Reforma Previsional, a contar de la fecha que indica, el Instituto de Normalización
Previsional, para los efectos de las funciones a que se refiere la ley 16744, se denominará Instituto
de Seguridad Laboral.
El seguro de accidentes del trabajo y enfermedades profesionales se financiará con los siguientes
recursos: 1) con una cotización básica general del 0,90% de las remuneraciones imponibles, de cargo
del empleador; 2) con una cotización adicional diferenciada en función de la actividad y riesgo de la
empresa o entidad empleadora, la que sera determinada por el Presidente de la República y no podra
exceder de un 3,4% de las remuneraciones imponibles, que también sera de cargo del empleador,
y que se fijara sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 16; 3) con el producto de las multas que
cada organismo administrador aplique en conformidad a esta ley; 4) con las utilidades o rentas
que produzca la inversión de los fondos de reserva, y 5) con las cantidades que les corresponda
a los organismos administradores por el ejercicio del derecho a repetir que tienen en contra de las
entidades empleadoras en caso de retardo en el pago de las cotizaciones o cuando el accidente o
enfermedad se deba a culpa o dolo de éstas o de un tercero, de acuerdo con los artículos 56 y 69,
respectivamente (artículo 15).
Las prestaciones de subsidios, pensión y cuota mortuoria que establece esta ley, son incompatibles
con las que contemplan los diversos regímenes previsionales, por lo que los beneficiarios deberán
optar entre aquéllas y éstas en el momento en que se les haga el llamamiento legal (artículo 52).
El pensionado por accidente del trabajo o enfermedad profesional que cumpla la edad para tener
derecho a pensión dentro del correspondiente régimen previsional, esto es, ya sea en el sistema
antiguo o en el de las Administradoras de Fondos de Pensiones, entrará en el goce de esta última
de acuerdo con las normas generales pertinentes, dejando de percibir la pensión de que disfrutaba
con arreglo a la ley 16744. En ningún caso, la nueva pensión podrá ser inferior al monto de la que
percibía, ni al 80% del sueldo base que sirvió para calcular la pensión anterior, amplificado en la
forma que señalan los artículos 26 y 41, y su pago se hará con cargo a los recursos que la respectiva
institución de previsión social debe destinar al pago de las pensiones de vejez (artículo 53).
ARTICULO 116.- Si se declarare la irrecuperabilidad del funcionario Ley 18.834, Art. 111.
con motivo de un accidente en acto de servicio o por una enfermedad
producida por el desempeño de sus funciones, éste tendrá derecho,
cualquiera sea el tiempo servido, a una pensión equivalente a aquella
que hubiere percibido en las mismas circunstancias de encontrarse
cotizando en el Instituto de Normalización Previsional.
Interpretación:
Desde la vigencia del Estatuto Administrativo, esto es, desde el 23 de septiembre de 1989, los
servidores estatales sujetos a sus disposiciones pasaron a regirse por las normas de los artículos
110 y 111 (actuales artículos 115 y 116) de ese Estatuto, en lo que se refiere a accidentes del trabajo
. y enfermedades profesionales, con excepción de aquel personal que pertenecía a Servicios que con
anterioridad se les aplicaba el Código del Trabajo y que, por ende, en tales aspectos continuaron
protegidos por el sistema de cobertura de la ley 16744. A contar de la entrada en vigor de la ley 19345,
que sometiera a los empleados de la Administración Civil del Estado, centralizada y descentralizada
y demás entidades que indica, al seguro contra riesgos de accidentes del trabajo y enfermedades
profesionales de la ley 16744, o sea, a partir del1 de marzo de 1995, han perdido su eficacia jurídica
los mencionados artículos 110 y 111 (actuales artículos 115 y 116) de la ley 18834 respecto de los
señalados funcionarios. Por tal motivo, tratándose de este tipo de accidentes y enfermedades que
afecten a los mencionados trabajadores, deben observarse las formalidades contenidas en la citada
ley 16744, con exclusión de toda otra normativa (40774/95, 41045/95,4816/96,23135/96,30257/96,
7694/97, 22402/01 ).
Aunque a partir de la entrada en vigor de la ley 19345 han perdido su vigencia los artículos 11 O y
111 (actuales artículos 115 y 116) del Estatuto Administrativo, los funcionarios a quienes se les ha
declarado su salud irrecuperable por la respectiva Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez,
tienen derecho a continuar percibiendo sus remuneraciones durante seis meses contados desde
la fecha en que se les notifique esa irrecuperabilidad, sin obligación de trabajar, de acuerdo con el
artículo 146 (actual artículo 152) de la ley 18834, disposición ésta que por su carácter especial debe
aplicarse en todos aquellos casos de salud irrecuperable, incluido el originado por una enfermedad
profesional o accidente en acto de servicio, con independencia de las prestaciones consultadas en
el seguro social regulado por la ley 16744. Por tal motivo, desde el día siguiente al vencimiento
del referido lapso de seis meses, y conforme a los artículos 140 (actual artículo 146), letra b), y 143
(actual articulo 149), del Estatuto Administrativo, procede que se otorgue al afectado pensión de
invalidez total o parcial en los términos de dicha ley 16744, la cual constituye causal de cesación
de funciones del empleado. En estos casos, el trabajador no puede seguir desempeñándose en
la Administración Pública, ya que por expresa disposición del artículo 146 (actual artículo 152) del
Estatuto, deberá retirarse de ella, agregando su artículo 108 (actual artículo 113), que la declaración
de irrecuperabilidad afectará a todos los empleos compatibles que desempeñe el funcionario,
impidiéndole cualquier reincorporación posterior (23135/96, 30257/96). Ello, a menos que dicho
pronunciamiento sea revocado por la autoridad, cuando existan antecedentes que justifiquen la
variación de los supuestos que sirvieron de fundamento para dictarlo (27053/01).
Si el accidente en acto de servicio ocurre al amparo de los artículos 110 y 111 (actuales artículos 115
y 116) de la ley 18834, y los procedimientos de verificación por vía del pertinente proceso sumarial se
han iniciado igualmente en esa época, pero culminan durante la vigencia de la ley 19345, emitiéndose
luego el informe de la Comisión Médica que evalúa la naturaleza de las lesiones sufridas por los
afectados, procede que dicha Comisión aplique los referidos artículos 110 y 111 (actuales artículos
115 y 116). Ello tiene su fundamento en el principio de la unidad de procedimiento que garantiza al
funcionario que bajo unas mismas reglas quedarán determinados sus derechos, y además, porque la
citada ley 19345 no tiene efecto retroactivo ni contiene normas transitorias que regulen esta situación
(30257/96).
Concordancias:Arts. 115 y 152 del EA; 115 del EAM; ley 19345, dispone aplicación de la ley 16744
a los trabajadores del Sector Público que señala; ley 16744, estableció normas sobre Accidentes
del Trabajo y Enfermedades Profesionales; Reglamentos Complementarios de la ley 16744 (ver
concordancias del artículo 115).
Comentarios:
Conforme a lo dispuesto en los artículos 53 y 54, en relación con los artículos décimo sexto y vigésimo
transitorios de la ley 20255, que establece Reforma Previsional, las referencias que las normas
jurídicas hagan al Instituto de Normalización Previsional con respecto a sus funciones, con excepción
de aquéllas relativas a la ley 16744, sobre Accidentes del Trabajo y Enfermedades Profesionales,
se entenderán efectuadas al Instituto de Previsión Social, que es considerado en este ámbito, su
sucesor y continuador legal, una vez que se constituya e inicie sus actividades según lo disponga
el Presidente de la República. A contar del 17 de marzo de 2008, fecha de publicación de la citada
ley 20255, el Instituto de Normalización Previsional ejercerá las competencias que correspondan al
Instituto de Previsión Social hasta la fecha en que esta última institución entre en funciones.
De acuerdo con el articulo 63 de la mencionada ley 20255, a contar de la fecha en que entre en
funciones el Instituto de Previsión Social, el Instituto de Normalización Previsional, creado por el
decreto ley 3502, de 1980, se denominara "Instituto de Seguridad Laboral".
ARTICULO 117.- Los funcionarios tendrán derecho a afiliarse a los Ley 18.834, Art. 112.
Servicios de Bienestar, en los casos y condiciones que establezcan
sus estatutos. Los organismos de la Administración del Estado
efectuarán los aportes de bienestar respecto de cada funcionario,
sin sobrepasar el máximo legal de los mismos.
Interpretación:
Conforme al articulo 112 (actual articulo 117) del Estatuto Administrativo, los organismos de la
Administración del Estado deben consultar fondos en sus respectivos presupuestos, con el objeto de
dar cumplimiento a la obligación que les impone esta norma de integrar los aportes para bienestar
respecto de cada funcionario. La forma verbal "efectuarán" que utiliza dicho precepto descarta
cualquier discrecionalidad de la autoridad, en cuanto a efectuar o no los mencionados aportes
(17670196, 934/97).
Es improcedente que un Intendente Regional, en su calidad de órgano ejecutivo del Gobierno Regional,
entregue a la Asociación de Funcionarios de ese organismo, el aporte establecido a favor de los
Servicios de Bienestar por el artículo 23 del DL 249, de 1973, porque este aporte está destinado por
ley a ser traspasado específicamente a las entidades que tengan el carácter de "servicios u oficinas
de bienestar", constituidos con sujeción a las normas legales y reglamentarias correspondientes,
mientras que esa Asociación es un organismo privado que no ha sido constituido conforme a la
preceptiva que regula a los mencionados servicios u oficinas de bienestar (40329100).
Concordancias: Arts. 134 de la ley 11764 y 24 de la ley 16395, sobre Organización y Atribuciones de
la Superintendencia de Seguridad Social, sujetan a la fiscalización de esta Entidad los Departamentos
u Oficinas de Bienestar que funcionen en los organismos de la Administración del Estado que indica;
23 del DL 249, de 1973, establece aporte de entidades estatales a Servicios de Bienestar que
funcionen en ella; 116 del EAM; ley 17538, dispone que los Servicios de Bienestar que funcionen en
los organismos del Estado, extenderán sus beneficios a los funcionarios jubilados de los mismos;
decreto 28, de 1994, del Ministerio del Trabajo y Previsión Social, Subsecretaria de Previsión Social,
aprueba Reglamento General para los Servicios de Bienestar fiscalizados por la Superintendencia
de Seguridad Social.
ARTICULO 118.- El funcionario tendrá derecho a asignaciones Ley 18.834, Art. 113.
familiares y maternal, de acuerdo con la legislación vigente.
Interpretación:
La prescripción del artículo 94 (actual artículo 99) de la ley 18834, que integra el Titulo IV "De los
Derechos Funcionarios", Párrafo 2 "Remuneraciones y Asignaciones", no se aplica a la asignación
familiar porque no tiene carácter remuneratorio, sino que constituye un beneficio de seguridad social
que el Estatuto Administrativo regula separadamente en el Párrafo 6 "De las Prestaciones Sociales",
de ese mismo Titulo. Sin perjuicio de lo anterior, si bien en conformidad con el DFL 150, de
1981, del Ministerio del Trabajo y Previsión Social, la facultad de impetrar la asignación familiar
es imprescriptible, las sumas que debieron pagarse desde el momento en que se cumplieron los
requisitos señalados por la ley para generar la franquicia y que no fueron percibidas oportunamente
por el beneficiario están afectas a prescripción, de acuerdo con lo previsto en el artículo 2515 del
Código Civil, porque en el citado DFL 150, no existen disposiciones que determinen el plazo en que
se extinguen las obligaciones de pago de esta asignación (13259190, 31171192, 34464197).
Concordancias: Art. 89, inciso segundo, del EA; DFL 150, de 1981, del Ministerio del Trabajo y
Previsión Social, Subsecretaría de Previsión Social, fija el texto refundido, coordinado y sistematizado
de las normas sobre Sistema Único de Prestaciones Familiares y Sistema de Subsidios de Cesantía
para los trabajadores de los sectores público y privado; Arts. 194 y ss. del C. del T.; 117 del EAM.
Comentarios:
El artículo 6 del DFL 150, de 1981, del Ministerio del Trabajo y Previsión Social, Subsecretaría
de Previsión Social, establece el principio de la singularidad de las cargas de familia al prevenir
que los causantes no darán derecho a más de una asignación familiar, aun cuando el beneficiario
estuviere acogido a diversos regímenes previsionales y desempeñare trabajos diferentes y pese a
que pudieren ser invocados en dicha calidad por dos o más personas.
El artículo 7 de ese mismo ordenamiento, precisa que corresponderá percibir el pago de las
asignaciones familiar y maternal, por regla general, al beneficiario a cuyas expensas viva el causante.
Las asignaciones familiares causadas por hijos menores se pagarán directamente a la madre con la
cual vivan, si ésta lo solicitare. Igualmente procederá el pago directo a la cónyuge, a los causantes
mayores de edad o a la persona a cuyo cargo se encuentre el causante, siempre que lo soliciten.
Título V·
De la :Responsabilidad
Administrativa
TÍTULO V De la RespOnsabilidad-Administrativa 465
ARTICULO 119.~ 'El empleado que infringiere sus obligaciones o Ley 1$.834, Art. 114.
deberes funcionarios podrá ser objeto de anotaciones de demérito
en su hoja de vida o de medidas disciplinarías.
. Interpretación:
Conforme al articulo 12 (actual artículo 15) de la ley 18575, Orgánica Constitucional de Bases
Generales de la Administración del Estado, las normas estatutarias que rijan la relación jurídica entre
la Administración y sus funcionarios, contendrán disposiciones que regulen su responsabilidad, por lo
que el personal de los servicios públicos está sujeto a responsabilidad administrativa, reconociendo,
. en consecuencia, las potestádes disciplinarias de la Administración (26608198).
Las materias administrativas, y en particular las que regulan aspectos disciplinarios, se encuentran
sometidas a reglas y procedimientos propios derivados de sus especiales circunstancias, las cuales
se contienen en los respectivos ordenamientos legales y reglamentarios. En estos casos, sólo resulta
posible la aplicación por analogía de instituciones correspondientes a otras ramas del Derecho para
resolver situaciones no regladas en forma expresa, pero de ningún modo ello será procedente en
contra de un texto legal claro e inequívoco (39447194).
Inciso 1'
Un funcionario que ha sido objeto de una anotación de demérito, puede serlo también de una medida
disciplinaria por igual causa que la que originó aquélla (16312/96, 38275/98).
Resulta plenamente válido que un servidor puedá experimentar una rebaja en sus calificaciones
a consecuencia de una anotación de demérito y que, por el mismo hecho que dio origen a ésta,
sea sancionado con una medida disciplinaria. No obstante, una determinada falta no da origen,
necesariamente, a ambas medidas (16312/96).
Es improcedente que la anotación de demérito sea realizada por un empleado a contrata que ejerce
labores de jefatura, porque esas tareas no pueden ser desempeñadas por quienes ostentan esa
calidad, atendida la naturaleza transitoria de sus cargos, y porque no están facultados para ordenar
anotaciones de ese tipo (27304/93, 23264/97).
Inciso 2•
Los Ministros de Estado, por su rol de colaboradores directos del Presidente de la República, no están
subordinados a las disposiciones sobre responsabilidad administrativa contenidas en la ley 18834,
sin perjuicio de su responsabilidad civil, penal y política. El principio de probidad administrativa es de
general aplicación y, por ende, las autoridades, como es el caso de los Ministros de Estado, deben
ejercer su cargo dentro de un marco de probidad y de estricta imparcialidad, por lo que se encuentran
impedidos de tomar decisiones cuando se puedan vulnerar dichos principios (44672/99).
No existe disposición legal alguna que obligue a hacer entrega de un cargo público mediante un "acta
de entrega". Dichos actos corresponden a decisiones de carácter administrativo que se realizan al
amparo de la responsabilidad de los respectivos Jefes, pero no limitan la responsabilidad que por
mandato legal pueda afectarles. Por ello, nada impide que el Jefe de Servicio al momento de asumir
su cargo disponga una revisión de dichas actas conjuntamente con ordenar que se practiquen
nuevos inventarios de los bienes existentes en el Servicio. Ello es sin perjuicio de la información que
pueda proporcionarle la Contraloria General a través de las revisiones y auditorías que se estimen
necesarias para cumplir los programas anuales de fiscalización (20629/90).
Quienes se desempeñan en entidades que son filiales de una institución estatal, como ocurre con
las empresas filiales de la Corporación de Fomento de la Producción, creadas conforme a la ley
6640, y que tienen la naturaleza jurídica de sociedades anónimas o sociedades de responsabilidad
limitada, no adquieren por ese hecho la calidad de funcionarios públicos, y por ende, carecen de
responsabilidad administrativa, toda vez que ellas se han organizado como entidades privadas,
sujetas en sus vinculaciones al derecho común, aunque en su formación hayan concurrido capitales
y personeros del Estado (14067/92).
La medida disciplinaria expulsiva que afecta a un funcionario público alcanza a todos los empleos
que ejerce, cuando las irregularidades sancionadas revelan falta de idoneidad moral del empleado
para mantenerse en la Administración del Estado, como sucede en el caso de hechos que, por
aparecer revestidos de un carácter delictivo, comprometen su responsabilidad penal (4718/92).
El cargo formulado a un funcionario de no estar atento a las condiciones del tránsito del momento,
constituye una infracción cuyo conocimiento es de competencia del correspondiente Juzgado
de Policía Local, sin que la autoridad administrativa esté facultada para evaluar, a través de un
procedimiento sumarial, una eventual infracción a la ley de tránsito, y tampoco puede ser invocada
como antecedente suficiente para aplicar una medida disciplinaria. Por lo tanto, en este caso, debe
decretarse la reapertura de la investigación sumaria para que se formulen los cargos sobre la base
de los hechos concretos que impliquen de parte del empleado incumplimiento de sus deberes u
obligaciones funcionarias (25181/90, 21369/91).
El Director del Servicio de Registro Civil e Identificación posee facultades para instruir procedimientos
disciplinarios y sancionar a los servidores de su dependencia. No obstante, en aquellos casos en
que un Oficial Civil actúa en calidad de Notario no procede que dicha entidad le aplique una medida
disciplinaria, porque en esta materia los Notarios están sometidos a la superintendencia de la Corte
de Apelaciones respectiva, de acuerdo con los artículos 539 y 440 a 445 del Código Orgánico de
Tribunales. En consecuencia, en este caso, el Servicio debe remitir todos los antecedentes al
Tribunal de Alzada (10494/90, 52513/04).
Los empleados que hacen uso de una licencia médica por enfermedad, reposo preventivo o por
salud irrecuperable no se encuentran al margen de la responsabilidad administrativa en razón de
las faltas en que hayan incurrido en el cumplimiento de sus deberes funcionarios y, por ende, de la
aplicación de una medida disciplinaria (9524/62, 674/66, 61815/67, 13227/93).
La expresión "sumario administrativo", empleada en el inciso final del articulo 141 (actual articulo
147) de la ley 18834, es genérica, e incluye a la investigación sumaria. Ello, porque de acuerdo con
el articulo 114 (actual articulo 119) de esa ley, ambos procesos disciplinarios constituyen los medios
idóneos con que cuenta la Administración para hacer efectiva la responsabilidad del empleado que
infringe sus obligaciones y deberes funcionarios (31599/90, 6036/94).
Si el nuevo empleo del funcionario se encuentra afecto a un estatuto jurídico diferente y la sanción
que resuelva aplicar el Servicio en que se cometieron las faltas no sea posible de ser decretada
por la autoridad del nuevo empleo en que el servidor se desempeña, porque dicho castigo no se
encuentra contemplado en el Reglamento que le es aplicable, resulta necesario y obligatorio para
esta última autoridad que asimile el castigo propuesto, sobre la base de los hechos en que se funda
y la gravedad que invisten, a otra medida equivalente que pueda contemplar el estatuto a que se
encuentra ahora afecto (16817/65, 2023/03, 15339/04).
sumarial respecto de personal que presta serv1c1os sobre la base de honorarios, corresponde
absolverlo. Ello es sin perjuicio que si dichas personas incurren en actos que contravengan las
normas o estipulaciones contenidas en el instrumento de su contratación, la autoridad administrativa
competente ponga término a ese contrato, y si las circunstancias lo ameritan, se recurra a los
Tribunales Ordinarios de Justicia para perseguir las responsabilidades que en derecho correspondan
(14/96, 47066/00, 50013/00, 12420/03). Las personas contratadas a honorarios sólo podrán ser
objeto de una investigación y de una sanción cuando hayan pactado expresamente tal posibilidad.
No corresponde someter a trámite de toma de razón las resoluciones que impongan castigos a
quienes tengan esa condición (4611/98).
Es improcedente aplicar las medidas disciplinarias del Estatuto Administrativo al personal regido por el
Código del Trabajo. Corresponde poner término al contrato de trabajo, sin derecho a indemnización,
cuando el empleador invoque alguna de las causales del articulo 160 del Código del Trabajo, previa
formulación de cargos, para asegurar le debida defensa del trabajador. Si la falta de éste no es tan
grave, cabe aplicar las sanciones previstas en el articulo 154, W 1O, de dicho Código, siempre y
cuando ellas estén contempladas en el reglamento interno de la organización, de acuerdo con el
procedimiento a que se refiere el N' 11 de esta última disposición legal (30018/93, 7945/01 ).
Si bien el control de asistencia del empleado en comisión de servicios corresponde a las autoridades
de la repartición donde se desarrolla la comisión, las solicitudes relativas a permisos, licencias y
feriados, en cambio, deben ser resueltas por las autoridades competentes de su Servicio de origen,
debiendo estas mismas autoridades pronunciarse sobre la responsabilidad administrativa de los
comisionados, por faltas cometidas en el desempeño de la comisión (54298/69).
Los funcionarios de exclusiva confianza pueden ser marginados de sus empleos por medida
disciplinaria, previo sumario o investigación sumaria, en caso de incurrir en infracciones a sus
obligaciones o deberes funcionarios, por cuanto, sin desmedro de lo relacionado con su nombramiento
o remoción, dichos servidores se encuentran sujetos al mismo régimen estatutario que alcanza al
resto de los empleados públicos (15461/91).
Los actos administrativos en cuya virtud se aplican medidas disciplinarias son irrevocables una vez
que se dictan y alcanzan su total tramitación, ya que son actos terminales de un proceso reglado.
No obstante, los decretos o resoluciones que las contienen, pueden invalidarse si se comprueba
que existe un vicio de legalidad o que aquéllas fueron impuestas con el mérito de antecedentes
irregulares (8148/93, 199/94).
No corresponde considerar como abandono de funciones el periodo de ausencia que está cubierto
por licencias médicas rechazadas, porque ellas constituyen una prueba cierta de la enfermedad del
funcionario y un principio de justificación de las inasistencias laborales, aunque fuera rechazada por
razones de forma, debiendo examinarse si la causa del rechazo es imputable al trabajador, lo que
de ser así, no puede derivar en la aplicación de una medida expulsiva, salvo que se trate de una
actuación abiertamente incorrecta o fraudulenta de parte del empleado (13424/94, 12974/00).
Es improcedente sobreseer al inculpado por haber hecho uso indebido de teléfono celular del Servicio,
por el solo hecho de que el mismo se allane a devolver el costo que significó dicho uso mediante
facilidades que le otorgue la autoridad, pues este aspecto se refiere únicamente a la responsabilidad
civil derivada de esa inconducta administrativa que debe perseguirse a través del juicio de cuentas o
los Tribunales Ordinarios de Justicia (36523/01 ).
Conforme a este principio debe aplicarse alguna de las cuatro medidas disciplinarias
contempladas en el Estatuto Administrativo y la resolución o decreto que la contenga debe
ser tomado razón por la Contraloría General de la República (Art. 121 del EA).
El sistema jurídico institucional chileno descansa en una premisa básica de derecho público: la
legalidad o juridicidad. El gobierno republicano y democrático representativo proviene de la soberanía,
radicada en la Nación, cuyo ejercicio ésta delega en las autoridades previstas en la Constitución. De
ahí que ni las personas, ni grupos de ellas, pueden usar el nombre o su representación, arrogarse
sus derechos ni hacer peticiones en su nombre, como lo dispone la Constitución. La igualdad ante la
ley es una garantía constitucional asegurada a todos los habitantes del país y las relaciones jurídicas
que vinculan al Estado con los funcionarios se regulan por las normas del Estatuto Administrativo
que garantiza esa igualdad, obliga que en el ejercicio del desempeño público se cumplan los
deberes y las obligaciones, se respeten las prohibiciones instituidas, y entre esos deberes se exige
al empleado "comportarse con dignidad en el desempeño de su cargo", lo que equivale, esencial
y fundamentalmente, a respetar y obedecer los mandatos de las leyes. De ello proviene la norma
sobre responsabilidad administrativa que consagraba el articulo 175 del DFL 338, de 1960, (actual
articulo 119 de la ley 18834). Este principio de subordinación a la ley -en sentido amplio- constituye el
pilar fundamental en que descansa la disciplina social. Sin él, no sólo se engendraría el caos, sino que
Conforme al principio de legalidad no pueden aplicarse otras sanciones administrativas que las
expresamente contempladas en el Estatuto Administrativo. Por ello, la enumeración de las medidas
disciplinarias que contempla dicho Estatuto es de carácter taxativo, las que deberán respetarse en
forma estricta (26518/70, 30733/00).
El articulo 19, N" 2, de la Constitución Política consagra este principio al señalar, en su inciso
segundo, que "Ni la ley ni autoridad alguna podrán establecer diferencias arbitrarias". Esto significa
que la autoridad administrativa, en el ejercicio de sus facultades, no puede efectuar discriminaciones
o distinciones arbitrarias, lo que ocurre con aquellos actos que no tienen fundamento jurídico o
carecen de una motivación o fundamento racional (37191/00, 38859/06, 4168/08).
De acuerdo con este principio, para aplicar una medida disciplinaria es necesario que la
autoridad sancionadora se sujete a un procedimiento disciplinario: investigación sumaria o
sumario administrativo, debidamente tramitado, incluida la toma de razón de la Contraloría
General de la República, del decreto o resolución respectivo (Arts. 19, N' 3, inciso quinto,
de la CP de la R., y 119, inciso segundo, del EA; 8 del decreto 873, de 1990, del Ministerio
de Relaciones Exteriores, que aprueba la Convención Americana sobre Derechos Humanos,
denominada "Pacto de San José de Costa Rica").
Según el principio del debido proceso o del debido juzgamiento el ejerc1c1o de la potestad
sancionadora que asiste a los órganos administrativos, debe someterse, a lo menos, a ciertas reglas
procedimentales que garanticen la defensa de la persona a quien se imputa la perpetración de un
hecho sancionable, salvo que ese hecho por su naturaleza sea susceplible de ser acreditado en
forma objetiva mediante certificados o simple verificación (56160/69).
Dentro de las variadas atribuciones de índole administrativa que posee el titular de un órgano
administrador. el ejercicio de poderes sancionadores que afectan a particulares debe conformarse a
las ritualidades mini mas de los procesos, tales como oír al inculpado, ponderar los hechos y resolver
conforme a derecho y al mérito de autos. Estas ritualidades mínimas que garantizan el legítimo
proceso emanan de la Constitución Política y se aplican a todo acto de naturaleza puniliva, aun
cuando éste no tenga consultada específicamente una regulación o procedimientos propios. Luego,
es violatoria de tales normas toda decisión sancionadora carente de esta ritualidad esencial. En
este orden de ideas, cabe considerar ilegítima, tanto la determinación de una sanción o castigo sin
ceñirse a los procedimientos mínimos, como el archivo sin justificación de las causas que están
sometidas al conocimiento y fallo de la autoridad pública (73748/70).
De acuerdo con las reglas generales de derecho, previo a la aplicación de las sanciones que consulta
la ley, deberá instruirse un sumario administrativo o una investigación sumaria con el objeto de reunir
los elementos de juicio que determinan la aplicación de una sanción. En dicho proceso indagatorio,
deberá darse audiencia al inculpado, oportunidad de justificarse de los cargos que en definitiva se le
formulen, y en la primera citación deberá apercibírsele para que señale su domicilio, notificándosele
por carta certificada a la respectiva oficina de correos, si no lo hiciere. Una vez realizado el sumario y
acreditado los hechos que implican infracciones a los deberes del funcionario respectivo, la autoridad
aplicará alguna de las sanciones que la ley contempla (48844/60).
Las normas que regulan la tramitación de los procedimientos disciplinarios en el Estatuto Administrativo
contienen todos los elemenlos necesarios para configurar un debido proceso y asegurar la adecuada
defensa de los inculpados, cuyo cumplimiento debe ser fiscalizado por la Contraloría General al
efectuar el trámite de toma de razón del documento que aplica la sanción (7034/96).
Supone que la medida disciplinaria aplicada debe guardar relación y ajustarse a los hechos
imputados. Corresponde aplicar las sanciones con ecuánime severidad, tomando en
consideración las circunstancias atenuantes y agravantes que concurran en los hechos (Art.
121, inciso segundo, del EA). Ello, sin perjuicio que deba aplicarse una medida disciplinaria
específica, cuando la ley expresamente la consulte como sanción de determinados hechos
que se encuentran establecidos en el respectivo proceso disciplinario.
No obstante que la Administración activa no está en el imperativo de aplicar las medidas disciplinarias
propuestas por la Contraloría General en los sumarios administrativos instruidos por ella, al ejercer
su potestad sancionadora debe atenerse al mérito del proceso e imponer una sanción proporcional
con éste, y si su ponderación de los hechos determina la aplicación de una medida diversa de
la propuesta por el Organismo Contralor, ello debe señalarse fundadamente en la resolución de
término, dado que lo contrario configuraría una arbitrariedad y una infracción al principio de legalidad
por la autoridad administrativa, por cuyo respeto velará la Contraloría, de acuerdo con las normas
constitucionales y legales que la rigen (43507/00, 8013/01). Al momento de sancionar, la autoridad
debe velar porque exista la debida proporcionalidad entre la infracción administrativa, los hechos
establecidos fehacientemente y la magnitud de la sanción impuesta (21978/04).
La potestad disciplinaria de que se encuentra investida la autoridad administrativa, debe ser ejercida
sobre la base de criterios de racionalidad, lo cual supone, básicamente, que la sanción impuesta sea
proporcional a la gravedad de la falta que se ha imputado (29869/97, 13338/00).
La autoridad debe imponer a los funcionarios inculpados en un sumario administrativo una sanción
que sea proporcional a la efectiva magnitud y alcance de las faltas cometidas, a fin de que se
configure un procedimiento racional y justo, como lo exige el artículo 18 de la ley 18575, Orgánica
Constitucional de Bases Generales de la Administración del Estado, uno de cuyos componentes
esenciales es la referida proporcionalidad que debe existir entre la irregularidad en que incurre el
servidor y la medida disciplinaria que se le impone por ello (4978/04).
por lo que, tal decisión resulta desproporcionada, lo que impide que se configure un procedimiento
racional y justo, como lo exige el articulo 18 de la ley 18575, uno de cuyos componentes esenciales
es el cumplimiento del principio de proporcionalidad que debe existir entre la irregularidad en que
incurre el servidor y la sanción que se le impone. Por ello, además, resulta necesario considerar
que tampoco consta en autos, que la autoridad administrativa haya adoptado alguna medida con
anterioridad, de modo de ser resueltas en su oportunidad y asi otorgar a la inculpada la posibilidad
de modificar su conducta (38122/04).
Infringe el principio de proporcionalidad sancionar con destitución a un funcionario por haber bebido
alcohol en horario de trabajo, toda vez que ese hecho no reúne caracteres de gravedad suficientes
que justifiquen su aplicación como tampoco con ello se ha vulnerado gravemente el principio de
probidad administrativa, al no haberse producido un perjuicio a los intereses de la institución ni se ha
afectado su prestigio (26502/04).
La jurisprudencia administrativa ha establecido que el principio pro reo que rige en materia
penal, también es aplicable en el ámbito sancionador administrativo.
Son aplicables las medidas disciplinarias establecidas de acuerdo con la ley vigente al momento
de la comisión de la infracción, conclusión que fluye del principio de irretroactividad de la ley y en
especial de las normas sancionadoras. Excepcionalmente podrá aplicarse una ley posterior que
contenga una sanción más benigna, salvo disposición expresa en contrario, considerando que los
principios pro reo y de irretroactividad en materia penal operan del mismo modo en el procedimiento
disciplinario administrativo. Los principios aludidos se extienden no sólo a la pena, sino que también
a su monto y modo de cumplirla (45905/76, 33127/82, 20991/84, 25961/00, 38075/02).
G) Principio de la lnexcusabilidad.
El articulo 115 (actual articulo 120) del Estatuto Administrativo establece como regla general que
la sanción administrativa es independiente de la responsabilidad civil y penal, no excluyendo, por
ende, la condena, el sobreseimiento o la absolución judicial, la posibilidad de aplicar al empleado
una medida disciplinaria sobre los mismos hechos. Este principio consiste en que uno y otro tipo
de responsabilidades obedecen a fundamentaciones y circunstancias disimiles y que la finalidad
perseguida con la aplicación de unas u otras es diferente, es decir, que cada una de ellas posee
diversa configuración jurídica. La responsabilidad y la consiguiente sanción, en general, son
consecuencia de una infracción a la norma, pero las motivaciones y propósitos para hacerlas efectivas
son distintos en cada caso. Es así como en la responsabilidad civil son el perjuicio y la consiguiente
indemnización del daño causado; tratándose de la penal, la ocurrencia de una conducta funcionaria
constitutiva de un acto u omisión que la ley configura como delito y que consecuentemente sanciona;
y en la responsabilidad administrativa, una infracción a las obligaciones funcionarias que importan
una sanción que responde al interés público concretado mediante la acción de la Administración
(2450/82 -aclarado por ei48799/00-, 311/00, 22258/01, 56567/03, 47058/04).
1) Principio de Tipicidad.
K) Principio de Universalidad.
Concordancias: Arts. 6, 7, 19, N' 3, inciso quinto, 24, 38, inciso segundo, de la CP de la R.; 3, inciso
segundo, 4, 15, 18, 42, 46, inciso segundo, y 61 de la LOCBGAE; Título IV "Responsabilidad de los
Funcionarios", Arts. 60 y ss. de la LOCCGR; 61 y ss., 120 a 145, 157, 158, 159 y 9 transitorio del
EA; 118 del EAM; 11 de la Ley de Transparencia de la Función Pública y de Acceso a la Información
de la Administración del Estado, aprobada por el articulo primero de la ley 20285, sobre Acceso a la
Información Pública, precepto que reconoce diversos principios relativos al derecho de acceso a la
información de los Órganos de la Administración.del Estado. El artículo transitorio de la ley 2028S
dispone que este texto legal entrará en vigencia ocho meses después de su publicación en el Diario
Oficial, hecho que aconteció el 20 de agosto de 2008. Arts. 7 y ss. del decreto 1825, de 1998, del
Ministerio del Interior, Reglamento de Calificaciones del Personal afecto al Estatuto Administrativo;
resolución 236, de 1998, de la Contraloría General de la República, Reglamento de Sumarios
instruidos por este Organismo Contralor; Art. 27, inciso segundo, de la ley 19712, que aprueba la Ley
del Deporte, faculta al Director Nacional del Instituto Nacional de Deportes de Chile para contratar
personal sujeto al Código del Trabajo, al que le serán aplicables las normas sobre responsabilidad
administrativa del Titulo V de la ley 18834; decreto 873, de 1990, del Ministerio de Relaciones
Exteriores, que promulgó la Convención Americana sobre Derechos Humanos denominad·a "Pacto
de San José de Costa Rica", cuyo articulo 8 establece las garantias de un debido proceso.
Comentarios:
Los articulas 6, inciso final, 7, inciso final y 38, inciso segundo, de la Carta Fundamental, en relación
con los articulas 3, inciso segundo, 4, 18,42 y 61 y siguientes de la ley 18575, Orgánica Constitucional
de Bases Generales de la Administración del Estado, y 119 y siguientes de la ley 18834, consagran
el principio de la responsabilidad administrativa, en virtud del cual los funcionarios públicos que han
incumplido sus deberes y obligaciones estatutarias en el ámbito de la Administración del Estado,
están obligados a soportar una medida disciplinaria como consecuencia de la investigación sumaria
o de un sumario administrativo que se haya instruido en su contra, sin perjuicio de la responsabilidad
civil y penal que les pudiera afectar, siendo obligación de la autoridad velar porque la misma se haga
efectiva mediante un procedimiento y una investigación racionales y justos.
De acuerdo con los articulas 119 y siguientes del Estatuto Administrativo, acreditada una infracción
a los deberes y obligaciones en el proceso sumarial respectivo, se configura la responsabilidad
administrativa, la que debe dar lugar a la aplicación de una medida disciplinaria. Es decir, la
discrecionalidad que tiene la autoridad en la cual se radica la potestad disciplinaria no consiste en que
pueda libremente determinar si aplica una sanción o absuelve, no obstante estar fehacientemente
acreditada la falta, sino que ello dice relación con la decisión a adoptar, pero atendiendo al mérito del
proceso y a las circunstancias atenuantes y agravantes que concurran.
Corrobora lo anterior, lo dispuesto en el articulo 62, N" 8, de la citada Ley Orgánica Constitucional,
en cuanto señala que infringe especialmente el principio de la probidad administrativa, entre otras
conductas, contravenir el deber de legalidad que rige el desempeño de los cargos públicos, legalidad
que está constituida por la diversidad de preceptos que se han reseñado y que imponen a la autoridad
depositaria de las facultades disciplinarias, el deber de hacerlas efectivas.
En ese mismo sentido, debe tenerse presente lo previsto en el artículo 8 del decreto 873, de 1990,
del Ministerio de Relaciones Exteriores, que promulgó la Convención Americana sobre Derechos
Humanos denominada "Pacto de San José de Costa Rica", que en sus diversos números establecen
"Garantías Judiciales" para toda persona inculpada, principios que la jurisprudencia administrativa
ha hecho extensivo a los procedimientos disciplinarios contemplados en el Estatuto Administrativo.
En Jos demás casos de sobreseimiento definitivo o sentencia Ley 18.834, An. 115.
absolutoria, podrá pedir la reapertura del sumario administrativo y, si
en éste también se le absolviere, procederá la reincorporación en los
términos antes señalados.
Interpretación:
La jurisprudencia administrativa recaida en el articulo 176 del DFL 338, de 1960, actualmente debe
entenderse referida al articulo 120 de la ley 18834, por contener ambas disposiciones preceptos
similares (60/96).
Inciso 1•
El articulo 115 (actual articulo 120) de la ley 18834, establece como regla general que la sanción
administrativa es independiente de la responsabilidad civil y penal, y, en consecuencia, las actuaciones
o resoluciones referidas a ésta, tales como el archivo provisional, la aplicación del principio de
oportunidad, la suspensión condicional del procedimiento, los acuerdos reparatorios, la condena, el
sobreseimiento o la absolución judicial no excluyen la posibilidad de aplicar al empleado una medida
disciplinaria por los mismos hechos. El principio de independencia de las sanciones consiste en que
uno y otro tipo de responsabilidades obedecen a fundamentaciones y circunstancias disimiles y que
la finalidad perseguida con la aplicación de unas y otras es diferente, es decir, que cada una de ellas
posee diversa configuración jurídica. De este modo, la responsabilidad y la consiguiente sanción, en
general, son consecuencia de una infracción a una norma, pero las motivaciones y propósitos para
hacerlas efectivas son distintas en cada caso. En efecto, en la responsabilidad civil son el perjuicio y
la consiguiente _indemnización del daño causado; tratándose de la penal, la ocurrencia de un acto u
omisión que la ley configura como delito y que consecuentemente sanciona, y en la responsabilidad
administrativa, una infracción a las obligaciones funcionarias que importan una sanción que responde
al interés público concretado mediante la acción de la Administración (56567/03).
el cuerpo del delito, no se ajusta al beneficio previsto en el inciso primero del referido articulo 115
(actual articulo 120), por cuanto en la especie no se absolvió al funcionario "por no constituir delito
los hechos denunciados", como expresamente lo exige esta norma (11868/95, 23810/95, 8281/01).
En caso de delito cometido en el ejercicio de las funciones (delito ministerial), puede aplicarse la
sanción expulsiva tan pronto se acredite en el respectivo sumario la perpetración de los hechos, siendo
innecesario esperar la dictación de la sentencia judicial de término que condena al funcionario por la
misma infracción (10195/90, 12243/90, 32220/90, 4158/92, 2599/97 -reconsiderado parcialmente
por el 43507/00-, 22738/01 ).
Para que proceda la reincorporación a que se refiere el inciso primero del articulo 115 (actual articulo
120) del Estatuto Administrativo, esto es, para enervar la decisión de la autoridad adoptada en el
sumario, se exigen dos requisitos copulativos: a) que el empleado haya sido sancionado con la
medida disciplinaria de destitución como consecuencia exclusiva de hechos que revisten caracteres
de delito, y b) que en el proceso penal el funcionario sea absuelto o sobreseído definitivamente, por
no constituir delito esos mismos hechos que se han denunciado (6362/90).
Esta disposición distingue dos situaciones diversas relativas a la reincorporación, las que, a su vez,
requieren la concurrencia de requisitos distintos para su cumplimiento. La reincorporación de que
trata el inciso primero, es obligatoria para el Servicio, como se desprende del vocablo "deberá",
requiere como requisito esencial, que en el juicio criminal respectivo, la persona haya sido absuelta
o sobreseída definitivamente por no constituir delito los hechos denunciados. En cambio, aquella a
que alude el inciso segundo, exige que se solicite previamente por los interesados la reapertura del
proceso sumarial, y si como consecuencia de esa reapertura se produce la absolución administrativa,
procederá la reincorporación o, si transcurridos seis meses ello no es posible, el pago de la
indemnización contemplada en el inciso final. La autoridad administrativa tiene la facultad discrecional
de decidir si la reapertura procede o no, conforme al mérito de los antecedentes, atendido el principio
de independencia de las responsabilidades, en la medida que el afectado hubiere sido sancionado
disciplinariamente por hechos de carácter delictual y por otras faltas administrativas, puesto que, si
en el proceso sumarial fue castigado únicamente por hechos que revestian tal carácter, corresponde
disponer la reapertura si es solicitada (47058/04).
La reincorporación contemplada en los incisos primero y segundo de este articulo 115 (actual articulo
120), no favorece a quienes han cesado por una causal distinta de la destitución, como lo es el
término del periodo de nombramiento, aunque el sumario, continuado en virtud de lo establecido en
el inciso final del articulo 141 (actual articulo 147) de la ley 18834, concluyera con dicha sanción,
y en el juicio criminal instruido por los mismos hechos se hubiere dictado sentencia absolutoria
(24941/94).
Las reglas que regulan la reincorporación en los casos de los incisos primero y segundo del articulo
115 (actual articulo 120) del Estatuto Administrativo, son las mismas, esto es, que si no es posible
efectuar la reincorporación en el plazo de seis meses contado desde la absolución administrativa o la
aplicación de la sanción disciplinaria, el empleado tiene derecho a exigir, como única indemnización
por los daños y perjuicios que la medida disciplinaria de destitución le hubiere irrogado, el pago de
la remuneración que le habría correspondido percibir en su cargo durante el tiempo que hubiere
permanecido alejado de la Administración, hasta un máximo de tres años (25560/75).
Procede reabrir y revisar el proceso administrativo que culminó con la destitución de un funcionario
al que la Justicia Ordinaria sobreseyera conociendo de los mismos hechos por estar prescrita
la acción penal, para determinar si subsiste la responsabilidad que se le imputa en razón de las
mismas actuaciones que lo motivaron o si corresponde absolver al afectado y, consecuencialmente,
reincorporarlo de acuerdo con los incisos segundo y tercero del artículo 115 (actual articulo 120) de
la ley 18834. Los eventuales beneficios remuneratorios e indemnizatorios que asistan al interesado,
dependerán directamente de los resultados a que se arribe al término de la reapertura del sumario
que lo sancionó con la destitución (16330/90).
Para acceder a los derechos a que se refiere la última parte del inciso primero del artículo 115 (actual
artículo 120) del Estatuto Administrativo, es menester acreditar ante la autoridad administrativa que
aplicó la medida disciplinaria expulsiva sólo la sentencia ejecutoriada dictada en causa criminal que
lo absuelve o sobresee definitivamente, no siendo válido, para estos fines, ningún otro antecedente
(21802/96).
El indulto no priva al favorecido del carácter de condenado para los demás efectos que determinan las
leyes, lo que en sentido amplio debe entenderse comprensivo de aquellos de orden administrativo,
que en la especie suponen la aplicación. de la sanción que corresponda (27229/83).
El indulto concedido a un funcionario condenado por crimen o simple delito de acción pública, sólo
remite o conmuta la pena conforme al artículo 93, W 4, del Código Penal, vale decir, que lo libera
del cumplimiento de la pena principal y de la accesoria, según corresponda, pero no impide a la
Administración que pueda proceder en su contra si se considera que la sanción de destitución provino
de hechos que la ley castiga con esa medida disciplinaria (20976/80).
No procede asimilar la institución de los acuerdos reparatorios que regulan los artículos 241, 242 y
243 del Código Procesal Penal, aprobado por la ley 19696, a una transacción judicial, toda vez que
dichos acuerdos tienen una naturaleza y regulación diversa, que conllevan la extinción definitiva,
total o parcial, de la responsabilidad penal, situación que no se puede configurar en una transacción,
xpues de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 2449 del Código Civil, la transacción puede recaer
sobre la acción civil que nace de un delito, pero ello es sin perjuicio de la acción criminal (5736/04).
Inciso 2•
Un sumario administrativo que se encuentra afinado sólo puede reabrirse: a) cuando se acredita
fehacientemente que en él se incurrió en un error de hecho esencial al momento de aplicarse la
sanción, b) cuando se alegan, fundadamente, nuevos antecedentes que de haber sido conocidos
en su oportunidad pudieron haber hecho variar la medida disciplinaria aplicada, como consecuencia
de los hechos investigados, y e) cuando se comprueba la comisión de ilegalidades que afectan la
validez de lo actuado en ese sumario. Todos estos antecedentes deben ser ponderados por la
autoridad competente, la que determinará si tienen o no mérito suficiente para reabrir el sumario
(2190/95, 20697/97, 24320/99).
La mera absolución o sobreseimiento definitivo en el proceso criminal, por causas que no sean el
no constituir delito los hechos denunciados, no confiere derecho a un ex funcionario destituido a
ser reincorporado, pero puede pedir la reapertura del sumario respectivo, a fin de que la autoridad
administrativa pondere este nuevo antecedente y, si al término de la reapertura, se le absuelve
también administrativamente, o se modifica su sanción, corresponde la reincorporación en el mismo
empleo o en otro de igual jerarquía, pero sin derecho a impetrar los beneficios legales y previsionales
a que alude el inciso primero de esta norma (31442/89, 11868/95, 15844/02).
Un funcionario destituido y absuelto por la Justicia Ordinaria, por una causal diferente a la de no
constituir delito los hechos denunciados, y reincorporado a laAdministración por haber sido igualmente
absuelto de responsabilidad administrativa tras la reapertura del sumario correspondiente, tiene
derecho a las remuneraciones devengadas por el periodo en que permaneció alejado del Servicio,
en conformidad con lo previsto en los incisos primero y segundo de este articulo 115 (actual articulo
120), las que deberán percibirse sin reajuste alguno, por cuanto las obligaciones entre el Fisco y los
particulares, y viceversa, que tengan como titulo la ley, sólo admiten dicho mecanismo de incremento
cuando ésta así lo disponga, lo que no ocurre en los preceptos indicados (16985/91).
Inciso 3•
Para determinar el monto de la indemnización contemplada en el inciso tercero del articulo 115 (actual
articulo 120) de la ley 18834, debe atenderse a las remuneraciones que le habrían correspondido al
funcionario en su cargo durante los treinta y seis meses precedentes a aquél en que se efectúe el
pago (1303/88, 2048/96).
La extinción de la pena y todos sus efectos que implica la amnistia que concede el DL 2191, de
1978, opera desde la fecha de su vigencia, pero no tiene efecto retroactivo. Por lo tanto, si bien
este beneficio hace desaparecer la condena impuesta y sus efectos hacia el futuro, ello no ocurre,
en cambio, tratándose de los efectos de la condena hacia atrás, así como tampoco suprime la
destitución del afectado que se hubiere producido antes de entrar en vigor la amnistia. Por lo tanto,
sólo tiene derecho a percibir remuneraciones desde la fecha en que se le notificó su sobreseimiento
administrativo (12339/79).
Concordancias: Arts. 18 de la LOCBGAE; 408, W 2, del CPP; 93, W 4, del CP; 11, 119 a 145 del
EA; 119 del EAM.
Comentarios:
El principio que consulta el artículo 120 del Estatuto Administrativo, consiste en que las responsabi-
lidades administrativas, civil y penal son independientes entre sí y, por ende, también lo son las san-
ciones que origina cada una de ellas. En el ámbito de la función pública ello significa que aplicada
una medida disciplinaria a un funcionario público por determinados actos, hechos u omisiones, nada
obsta a que por los mismos pueda hacerse efectiva la correspondiente responsabilidad civil y penal,
en su caso.
La regla general precedentemente descrita sG>Io contempla una excepción, que es la que concierne
al empleado destituido exclusivamente por hechos que revisten caracteres de delito y que ha
sido absuelto o sobreseído definitivamente en el juicio criminal, por no constituir delito los hechos
denunciados.
Dándose este último supuesto, el funcionario debe ser reincorporado a su cargo como si nunca se
hubiera alejado de él, con derecho al pago de todas sus remuneraciones intermedias y al integro de
las pertinentes cotizaciones previsionales. Si en el lapso de seis meses no es reincorporado, tendrá
derecho a exigir el pago de una indemnización por los daños y perjuicios que la medida disciplinaria
le hubiere irrogado, ascendente al monto total devengado durante su alejamiento, hasta un máximo
de tres años.
En los demás casos de sentencia absolutoria o sobreseimiento definitivo, el funcionario sólo tiene
derecho a solicitar la reapertura del sumario. Si en esta reapertura también se le absuelve, procederá
la reincorporación en los términos anteriormente descritos.
ARTICULO 121.- Los funcionarios podrán ser objeto de las siguientes Ley 18.834, Art. 116.
medidas disciplinarias:
a) Censura;
b) Multa;
e) Suspensión del empleo desde treinta días a tres meses, y Ley 19.653, Art. 5', 6).
d) Destitución.
Interpretación:
Inciso 1°
Conforme al prmc1p1o de legalidad, no pueden aplicarse otras medidas disciplinarias que las
expresamente contempladas en el Estatuto Administrativo, cuyo carácter es taxativo (26518/70,
30733/00).
Las medidas disciplinarias son los medios que la ley contempla para castigar al funcionario que
infringe su régimen de deberes -obligaciones y prohibiciones- entre las cuales la autoridad, con
potestad sancionadora, puede optar al término de un proceso formal destinado a establecer su
responsabilidad administrativa (29382/93).
El Estatuto Administrátivo no describe tipos penales ni asigna sanciones a cada infracción cometida
por los funcionarios públicos, sino que señala un conjunto de obligaciones que éstos deben cumplir
tanto dentro como fuera de la institución. Excepcionalmente, el artículo 119 (actual artículo 125) de
dicho cuerpo legal describe conductas que necesariamente deben sancionarse con la destitución,
ya que quienes incurren en ella, por su gravedad, no pueden continuar desempeñándose en la
Administración del Estado (3838/97).
Los decretos y resoluciones que aplican una sanción disciplinaria sólo rigen desde la fecha en que
se notifique al afectado la total tramitación de esos actos administrativos (31891/90).
El acto administrativo que aplique una medida disciplinaria debe indicar la fuente legal en que se
basa. Si impone la medida disciplinaria de destitución deberá señalar la causal por la que se aplica
(27925/64).
La medida disciplinaria impuesta a un servidor público no puede ser modificada una vez tomado razón
el acto administrativo que la materializa, a menos que, previa reapertura del correspondiente proceso
sumarial, se acredite en forma inequívoca que al momento de emitirse dicho documento se incurrió
en un vicio de legalidad, o bien, que existen hechos nuevos, no conocidos en el curso del proceso, y
cuya magnitud es tal que permiten alterar sustancialmente lo resuelto por la autoridad sancionadora
(2098/02, 12961/04). Aceptar un criterio diverso, implicaría alterar el principio de permanencia de las
decisiones que aplican medidas disciplinarias, pues se estaría permitiendo que ellas sean modificadas
no por existir vicios de legalidad que afecten la decisión adoptada o por acreditarse fehacientemente la
concurrencia de antecedentes sustanciales con influencia determinante cuya existencia se ignoraba,
sino por el procedimiento de efectuar una nueva ponderación de los hechos con un criterio distinto o
por razones de mérito (35242/76, 29710/80, 20598/83, 28737/86, 2098/02).
Es improcedente dar curso regular a una resolución que impone a un funcionario la medida disciplinaria
de amonestación, porque esa sanción no esta prevista en el Estatuto Administrativo aprobado por la
ley 18834, vigente desde el 23 de septiembre de 1989 (29653/89).
Por regla general, la sanción administrativa debe. hacerse ef~ctiva en el empleo en que se cometió la
falta, toda vez que los servidores públicos regidos por el Estatuto Administrativo es tan protegidos por
el derecho a la función en cada cargo, y sólo podran expirar por una causal legal que concurra para
cada uno de ellos. De esta manera, si las infracciones dicen relación con las obligaciones de todos
los cargos servidos, en cada uno de ellos procede aplicar la sanción adecuada, la cual podra ser
distinta para cada cargo de acuerdo con la gravedad de la infracción cometida en su desempeño. No
obstante, el ambito de aplicación de la medida disciplinaria de destitución puede alcanzar a todos los
empleos, cuando las irregularidades sancionadas comprometen las normas de probidad o idoneidad
moral del empleado, como es el caso de hechos que por aparecer revestidos de un caracter delictivo
afectan su responsabilidad penal (5960/62, 4718/92).
Procede la aplicación de sendas medidas disciplinarias con motivo de dos procesos coetaneos,
siempre que· las irregularidades imputadas al inculpado se refieran a materias diferentes. En
cambio, si las contravenciones versan sobre el mismo tema corresponde ordenar que se acumulen
los procedimientos administrativos y, por ende, aplicar una sola sanción por la totalidad de las
imputaciones establecidas en su contra (20185/93).
La resolución que dispone el retiro temporal de un funcionario con arreglo al artículo 114 del DFL 2,
de 1968, del Ministerio del Interior, no constituye la aplicación de una medida disciplinaria, sino que el
ejercicio de una facultad por la cual el Director Nacional de Gendarmería de Chile puede seleccionar
al personal de la institución (34817/96).
El delegante no puede ejercer la competencia delegada sin que, previamente, revoque la delegación.
Si ello no ha ocurrido, la resolución que aplica una sanción impuesta por la autoridad que delegó
el ejercicio de dicha competencia no puede sanearse con la convalidación, ya que el referido acto
administrativo tiene la naturaleza de acto terminal de un sumario, el cual necesariamente debe
emitirse con sujeción estricta a la ley (17790/90, 13009/96).
Las medidas disciplinarias descritas en este artículo, no son recurribles ante la Contraloría General,
toda vez que, tanto la reposición como el recurso de apelación, deben ser entablados ante las
autoridades que expresamente señalan las letras a) y b) del artículo 135 (actual artículo 141) de la
ley 18834 (18239/90).
Las medidas disciplinarias que corresponde aplicar por infracciones al decreto ley 799, de 1974,
que fija normas sobre uso y circulación de vehículos estatales, son las contempladas en el Estatuto
Administrativo, cualquiera que sea el régimen jurídico al que estén sometidos los respectivos
empleados (25215/91).
Letra a)
La Contraloría General debe observar el acto administrativo que aplica la medida disciplinaria de
"censura por escrito" a un funcionario, por cuanto el articulo 116 (actual artículo 121), letra a), del
Estatuto Administrativo, denomina a la pertinente sanción únicamente como "censura" (32919/95).
Letra b)
Las penas de multa equivalen a la privación de un porcentaje de la remuneración mensual, por lo que
deben materializarse descontando aquél que corresponda de cualquier contraprestación en dinero
que el empleado sancionado tenga derecho a percibir en razón de su empleo o función, como por
ejemplo, sueldo, asignación de zona, asignación profesional u otras (5636/90, 8776/92).
No puede aplicarse adicionalmente a la sanción de multa un descuento, por constituir éste una
medida no contemplada en el Estatuto Administrativo. Sólo es posible establecer la responsabilidad
pecuniaria por daños causados, a través de los Tribunales Ordinarios de Justicia o el Juzgado de
Cuentas de la Contraloria General (30410/95). ·
Letra e)
La medida disciplinaria de suspensión del empleo desde treinta días a tres meses significa una
interrupción del vínculo existente entre la Administración y el funcionario afectado, circunstancia que
lo inhabilita, durante el período respectivo, para ejercer los derechos que emanan del desempeño
de su cargo y de su condición de funcionario público. Sin embargo, esta medida disciplinaria no
impide al trabajador seguir cotizando en su sistema de seguridad social, le permite mantener su
afiliación a los respectivos fondos de pensiones y de salud y, por lo mismo, conserva su derecho a
las prestaciones propias de esos regímenes (30012/00).
La regla especial de cómputo de los plazos en días hábiles que establece el artículo 139 (actual
articulo 145) de la ley 18834, no es aplicable al plazo que fija el artículo 116 (actual articulo 121 ), letra
e), del mismo texto legal para la medida disciplinaria de suspensión del empleo, desde treinta días a
tres meses, término que debe computarse conforme a las reglas generales, en días corridos. Ello,
por cuanto esta norma establece una sanción y, por lo tanto, no tiene el carácter de una disposición
regulatoria del procedimiento (29734/04, 50967/04).
Procede admitir a trámite y autorizar las licencias médicas presentadas por un funcionario, mientras
se encuentra vigente a su respecto la aplicación de la medida disciplinaria de suspensión del empleo,
con goce del 50% de su remuneración, contemplada en los artículos 116 y 118A (actuales artículos
121 y 124) de la ley 18834, puesto que desde la dictación de la ley 17902, ninguna sanción puede
significar la privación de las prerrogativas de seguridad social, entre las que se encuentran los
beneficios que se otorgan por dichas licencias (22112/03).
Letra d)
Si bien el Jefe Superior del Servicio puede rebajar una medida disciplinaria específica, como
ocurre con la destitución, en el caso previsto en el artículo 66 (actual artículo 72) de la ley 18834,
el documento que aplica la sanción inferior debe contener las consideraciones que fundamentan tal
determinación (35083/90, 16180/91, 23003/00).
El hecho que una funcionaria se encuentre gozando de fuero maternal no impide aplicarle la medida
disciplinaria de destitución, porque los ceses de servicios que dispone la ley operan con prescindencia
Servidor que cesó en funciones por destitución puede ser objeto nuevamente de esa sanción por
hechos distintos investigados en otro sumario administrativo, de acuerdo con el articulo 141 (actual
articulo 147), inciso final, de la ley 18834 (15083/91 bis).
Inciso 2•
La potestad disciplinaria de que se encuentra investida la autoridad administrativa, debe ser ejercida
sobre la base de criterios de racionalidad, lo cual supone, básicamente, que la sanción impuesta sea
proporcional a la gravedad de la falta que se ha imputado (29869/97, 13338/00).
El articulo 121 sólo rige para las infracciones que pueden ser sancionadas con cualquiera de las
medidas disciplinarias que establece, pero no respecto de aquellas sanciones especificas fijadas
por la ley (47561/06).
Procede que la autoría de una contravención administrativa pueda ser determinada mediante
presunciones fundadas, múltiples, precisas, directas, graves y concordantes (18462/92).
Conforme al inciso segundo del artículo 116 (actual articulo 121) del Estatuto Administrativo, las
medidas disciplinarias se aplicarán tomando en cuenta la gravedad de la falta cometida y las circuns-
tancias atenuantes o agravantes que arroje el mérito de los antecedentes, pero si las infracciones
ameritan una sanción superior a la que se ha impuesto, debe ella aplicarse. En todo caso, si existen
en autos indicios de in imputabilidad que podrían influir decisivamente en la responsabilidad adminis-
trativa, es necesario que antes de aplicar una sanción se remitan los antecedentes a la Comisión de
Medicina Preventiva e Invalidez competente, a fin que emita un informe acerca del estado de salud
mental del inculpado durante la época en que incurrió en las irregularidades materia de cargos y la
influencia que aquél haya podido tener en su facultad de obrar con el suficiente juicio y discernimien-
to (6147/92, 1669/92, 28391/94, 22927/04, 4388/07). En el evento que la mencionada Comisión
determine la inimputabilidad de la afectada, procederá su sobreseimiento. En caso contrario, si con-
cluye que las anomalías que cometiera le son imputables, corresponde continuar el procedimiento y
aplicar la medida disciplinaria que corresponda. Si los hechos investigados revisten caracteres de
delito, corresponde que ellos sean debidamente denunciados a la justicia ordinaria con arreglo a lo
dispuesto en el artículo 133 (actual artículo 139), inciso final del Estatuto Administrativo, en relación
con el articulo 55 (actual articulo 61) letra k), del mismo cuerpo legal (22927/04, 4388/06).
La autoridad administrativa deberá ordenar la reapertura del proceso sumarial, con el objeto de
que se solicite a la Comisión Médica respectiva un dictamen que determine si a la época en que se
cometieron las faltas, la afectada poseía el suficiente juicio y discernimiento como para imputarle
responsabilidad en los cargos formulados. Del mismo modo, será menester que ese organismo
médico se pronuncie si su estado de salud es o no recuperable (4379/04).
No pueden considerarse como circunstancias atenuantes: a) los daños que una medida disciplinaria
provoque a la familia del inculpado; b) el menoscabo económico que eventualmente pueda significar
la sanción que se le imponga, y e) las argumentaciones aducidas por éste, en el sentido que no
existiría perjuicio fiscal alguno por haber reintegrado oportunamente las sumas de dinero cuya
apropiación indebida se le imputa (9697/67, 2182/90, 9042/99).
El proceso disciplinario concluye con la dictación de un acto formal que absuelve o aplica la sanción
correspondiente. Una vez notificada la absolución o la medida disciplinaria impuesta, en su caso,
y resueltos los recursos correspondientes, debe remitirse el proceso administrativo, con todos
sus antecedentes, a la Contraloria General para la toma de razón del aludido acto administrativo
(16893/90).
La toma de razón de la resolución por la que se impone una medida disciplinaria sólo constituye una
presunción de legalidad que puede dejarse sin efecto si se comprueba más tarde que se sustentó en
fundamentos irregulares (6511/90).
Tratándose de sumarios administrativos instruidos por la Contraloria General, y propuesta por ésta
una medida disciplinaria, la autoridad titular de la potestad sancionadora considerará la concurrencia
de circunstancias atenuantes o agravantes u otros antecedentes del proceso, y deberá analizarlos
racional y objetivamente en el marco de la legalidad aplicable. De esta manera puede dicha autoridad
llegar a una conclusión diversa de la proposición formulada por esta Entidad de Control, traducida
incluso en la absolución o sobreseimiento del inculpado, pero siempre acorde con el mérito de los
antecedentes y por razones fundadas, y no por una mera apreciación subjetiva, correspondiendo al
Organismo Contralor o a las Contralorias Regionales, el control de juridicidad de las resoluciones
adoptadas por la autoridad administrativa, control que comprende la verificación de la responsabilidad
y el recto ejercicio de la potestad disciplinaria (43507/00).
Concordancias: Arts. 119 a 145, 9 transitorio del EA; 120 del EAM; Titulo VI, "Infracciones
y Sanciones", Arts. 45 a 49 de la Ley de Transparencia de la Función Pública y de Acceso a la
Información de la Administración del Estado, aprobada por el articulo primero de la ley 20285, sobre
Acceso a la Información Pública. El articulo transitorio de la ley 20285 dispone que este texto legal
entrará en vigencia ocho meses después de su publicación en el Diario Oficial, hecho que aconteció
el 20 de agosto de 2008.
Comentarios:
Cuando en el ejercicio de su cargo el empleado público incurre en un acto u om1S1on, o en un
hecho que configure contravención al ordenamiento administrativo, vale decir, al régimen de deberes
estatutarios preestablecidos, se genera para éste una responsabilidad administrativa.
1
~
El principio de universalidad de la responsabilidad administrativa significa que todo funcionario está
afecto a responsabilidad como consecuencia del ejercicio de sus funciones. En otras palabras, en
·"~E
un régimen de Estado de Derecho no hay personas administrativamente irresponsables al servicio
del Estado. Constituyen excepciones las diversas situaciones analizadas por la jurisprudencia
administrativa, que pueden conducir a la inimputabilidad (dictámenes 3631/91, 1669/92, 26576/92,
i¡g
o
2887/93, 28391/94, 6431/95, 15712/99). >g.
Las sanciones o medidas disciplinarias estan sometidas a los siguientes principios que son
reconocidos por el régimen normativo nacional:
a) Las sanciones deben estar expresamente establecidas por la ley, en forma previa a su
aplicación;
b) Como consecuencia del principio de indivisibilidad de la responsabilidad administrativa, sólo cabe
aplicar una sanción al funcionario en relación con el conjunto de hechos investigados;
e) Las medidas disciplinarias, una vez que han sido aplicadas y han causado todos sus efectos, se
tornan en irrevocables para la autoridad administrativa. Ello, por cuanto las sanciones se contienen
en actos terminales que finiquitan el respectivo procedimiento administrativo de caracter reglado;
d) La sanción debe ser aplicada por el jerarca administrativo, quien ostenta por mandato legal la
potestad disciplinaria;
e) Para imponer una medida disciplinaria el jerarca se encuentra en la obligación de ponderar
las circunstancias atenuantes y agravantes que pueden concurrir a la apreciación de los hechos
investigados;
f) La aplicación de una medida disciplinaria deb~ ser siempre fundada. Ello significa que la autoridad
con potestad sancionadora esta obligada a expresar en el acto administrativo terminal que la contenga
cuáles son las razones o motivos en que se basa, impidiendo así toda arbitrariedad;
g) Como la sanción es consecuencia de un procedimiento reglado, la medida disciplinaria no puede
ser aplicada retroactivamente;
h) La sanción administrativa sólo podrá aplicarse previa sustanciación del respectivo procedimiento
disciplinario;
i) La medida disciplinaria debe ser aplicada al funcionario siempre que haya tenido un estado físico
y psíquico normal al momento de producirse las conductas contravencionales.
En suma, la potestad disciplinaria ha de ejercerse en la forma que señala la legislación vigente y sin
arbitrariedad, lo que significa que la decisión que se adopte por la autoridad sea racional, desprovista
de discriminación y proporcional a la falta y al mérito de los antecedentes. De esta manera, el
ejercicio de esa potestad debera ser motivada y fundamentada, a fin que no conlleve una actuación
caprichosa. Así, quien debiendo ejercer la indicada potestad no lo hace o bien lo efectúa sin el
suficiente apego a la normativa vigente, no sólo ampara o encubre al empleado infractor, sino que
incurre en una grave omisión y torcida utilización de sus facultades, lo cual trae aparejada una falta
de probidad (59707/03).
ARTICULO 122.- La censura consiste en la reprensión por escrito Ley 18.834, Art. 117.
que se hace al funcionario, de la cual se dejará constancia en su
hoja de vida, mediante una anotación de demérito de dos puntos
en el factor de calificación correspondiente.
Interpretación:
Concordancias: Arts. 41, incisos tercero y cuarto, 43, 119 a 145 del EA; 7 y ss .. 14 y ss. del decreto
1825. de 1998, del Ministerio del Interior, Reglamento General de Calificaciones; 121 del EAM.
Comentarios:
La Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno, según expresa en su Informe, acordó agregar la frase
final que consulta la disposición, con el propósito que "de la aplicación de la medida disciplinaria de
censura se deje constancia en la hoja de vida del funcionario, mediante una anotación de demérito
de dos puntos en el factor de calificación correspondiente", como una forma de regular el efecto de
esta sanción.
ARTICULO 123.- La multa consiste en la privación de un porcentaje Ley 18.834, Art. 118.
de la remuneración mensual, la que no podrá ser inferior a un cinco
por ciento ni superior a un veinte por ciento de ésta. El funcionario
en todo caso mantendrá su obligación de servir el cargo.
Interpretación:
Las penas de multa deben materializarse descontando el porcentaje que corresponda de las
contraprestaciones en dinero que el empleado sancionado tenga derecho a percibir en razón de su
empleo o función, como por ejemplo, sueldo, asignación de zona, asignación profesional u otras, por
una sola mensualidad (5636190, 8776192).
Es improcedente que la medida de multa se imponga sólo en relación a un porcentaje del sueldo
del afectado, y no de su remuneración, porque dicha sanción se extiende también a todos los
emolumentos que el servidor percibe en razón del cargo que ejerce (37347195, 35175103).
No se ajusta a derecho aplicar la medida disciplinaria de multa equivalente a dos días de sueldo,
porque conforme al artículo 118 (actual artículo 123) del Estatuto Administrativo, la multa debe fijarse,
entre los márgenes que indica, en un "porcentaje de la remuneración mensual" (33156189).
Es improcedente otorgar facilidades al sancionado con la medida disciplinaria de multa, debiendo ésta
aplicarse por una sola vez en la remuneración mensual del empleado. Por ello, no corresponde que
la resolución que impone la medida disciplinaria de multa considere un pago prorrateado en cuotas
mensuales, a contar del total trámite del respectivo documento de término (64199167, 22310190,
6597196, 29179197).
No puede aplicarse adicionalmente a la sanción de multa un descuento, por constituir una medida no
contemplada en el Estatuto Administrativo. La responsabilidad pecuniaria de un funcionario público
por el daño que hubiere causado a la Administración sólo puede hacerse efectiva ante los Tribunales
Ordinarios o el Juzgado de Cuentas de la Contraloría General (30410195).
Dictada la resolución que aplica la medida disciplinaria de multa, corresponde notificar de ella al
afectado y dejar constancia en el acta de notificación de la fecha en que se efectuó dicha diligencia,
elemento indispensable para determinar si al inculpado se le concedió el plazo para impugnar esa
medida a través de los pertinentes recursos (7628193).
La medida disciplinaria de multa sólo puede hacerse efectiva desde el día en que se notifique al
funcionario sancionado el decreto o resolución tramitado por la Contraloría General. Luego, no
puede imponerse la multa desde la fecha de notificación del acto administrativo que la dispone
(734/92).
Cuando al término del proceso disciplinario que lleva a cabo la institución, se aplique la sanción de
multa, ésta debe ser comunicada al habilitado del organismo donde se desempeña el encausado, a
fin que proceda a materializar dicha sanción, considerando las remuneraciones de que gozaba el día
en que se le notificó la resolución que impone la multa totalmente tramitada (28137/77).
La facultad que compete al Contralor General de la República para condonar cantidades percibidas
indebidamente por los funcionarios públicos o para conceder facilidades en el reintegro de esas
sumas, no puede ejercerse respecto de una multa que se haya impuesto en el carácter de medida
disciplinaria (19649/66, 6597/96).
Concordancias: Arts. 3, letra e), 41, incisos tercero y cuarto, 119 a 145 del EA; 7 y ss., 14 y ss. del
decreto 1825, de 1998, del Ministerio del interior; 122 del EAM.
Comentarios:
La Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno señaló en su Informe la conveniencia de establecer
un rango para imponer la medida disciplinaria de multa, con el objeto de flexibilizar su aplicación.
Enseguida, expresa lo siguiente: "Además se agrega un nuevo inciso segundo, en el cual se establece
una escala para la aplicación de la multa, e indica el valor de puntuación que va de 2 a 4 puntos, que
podrá darse a la anotación de demérito a que dé lugar dicha sanción, dependiendo del valor de la
multa, de lo cual deberá dejarse constancia en la hoja de vida del funcionario".
ARTICULO 124.- La suspensión consiste en la privación temporal Ley 19.653, Art. 5', 7).
del empleo con goce de un cincuenta a un setenta por ciento Ley 18.834, Art. 118A.
de las remuneraciones y sin poder hacer uso de los derechos y
prerrogativas inherentes al cargo.
Interpretación:
La medida disciplinaria de suspensión del empleo contemplada en el articulo 118 A (actual articulo
124) del Estatuto Administrativo, significa una interrupción del vínculo existente entre la Administración
y el funcionario afectado, circunstancia que lo inhabilita, durante el periodo respectivo, para ejercer
los derechos que emanan del desempeño de su cargo y de su condición de funcionario público.
Sin embargo, esta medida disciplinaria no impide al trabajador seguir cotizando en su sistema de
seguridad social, le permite mantener su afiliación a los respectivos fondos de pensiones y de salud
y, por lo mismo, conserva su derecho a las prestaciones propias de esos regímenes (30012100).
Procede admitir a trámite y autorizar las licencias médicas presentadas por un funcionario, mientras
se encuentra vigente a su respecto la aplicación de la medida disciplinaria de suspensión del empleo,
con goce del 50% de su remuneración, contemplada en los artículos 116 y 118A (actuales articulas
121 y 124) de la ley 18834, puesto que desde la dictación de la ley 17902, ninguna sanción puede
significar la privación de las prerrogativas de seguridad social, entre las que se encuentran los
beneficios que se otorgan por dichas licencias (22112103).
Concordancias: Arts. 3, letras d) y e), 72, 119 a 145 del EA; 7 y ss., 14 y ss. del decreto 1825, de
1998, del Ministerio del Interior; 122Adel EAM.
Comentarios:
Los artículos 65, inciso cuarto, N" 2, de la Constitución Política; 50 de la ley 18575; 3, letras d)
y e), y 72 de la ley 18834, configuran el principio retributivo, según el cual el desempeño de los
cargos públicos debe ser remunerado en dinero. El principal efecto de la aplicación de la sanción
de suspensión del empleo, es la pérdida de las remuneraciones que el afectado tendría derecho a
percibir en caso de haberse desempeñado en él.
La medida disciplinaria de destitución procederá sólo cuando Ley 19.653, Art. 5", 8).
los hechos constitutivos de la infracción vulneren gravemente el
principio de probidad administrativa, y en /os siguientes casos:
e) Infringir lo dispuesto en la letra /) del articulo 84; (*) Ley 20.005, Art. 2", b).
Interpretación
Inciso 1"
El Estatuto Administrativo no describe tipos penales, ni asigna sanciones a cada infracción cometida
por funcionarios públicos, sino que señala un conjunto de obligaciones que éstos deben cumplir tanto
dentro como fuera de la institución. Excepcionalmente el artículo 119 (actual artículo 125) configura
conductas que deben sancionarse necesariamente con la destitución, de manera que quien incurre
en ellas no puede, por la entidad de las mismas, continuar vinculado a la Administración del Estado
(3838/97).
En los casos de infracciones administrativas que conllevan una sanción disciplinaria específica, el
Jefe Superior del Servicio puede rebajarla, pero para ello es menester que su decisión sea fundada
en el texto del documento que materialice la medida disciplinaria que en definitiva se aplicará a los
inculpados (35083/90, 16180/91, 23003/00).
(*) Las modificaciones que introduce el articulo 2" de la ley 20005, que tipifica y sanciona el acoso sexual, al
articulo 119 de la ley 18834, debe entenderse hecha al articulo 125 del DFL 29, de 2004, del Ministerio de
Hacienda. que fijó el texto refundido, coordinado y sistematizado del Estatuto Administrativo.
Los ceses de servicios que dispone la ley se aplican con prescindencia de las normas de inamovilidad
en el empleo contenidas en textos estatutarios o en otros preceptos legales, generales o especiales,
pues dichas normas de estabilidad sólo operan en relación con la eventual facultad de poner término
a las funciones, pero no tienen cabida en los casos en que la ley ordene el alejamiento del servidor,
tratándose de una medida disciplinaria expulsiva como es la destitución (7734/91, 31462/93,
41023/01).
El hecho que una funcionaria se encuentre gozando de fuero maternal o haciendo uso de una
licencia médica, no es impedimento para que se le instruya una investigación sumaria o un sumario
administrativo, ni para que se le aplique la medida disciplinaria de destitución, porque los ceses de
funciones que emanan de la potestad sancionadora priman sobre cualquier clase de inamovilidad
que pueda favorecer en un momento determinado a un servidor público. Asi, entonces, la medida
disciplinaria de destitución configura una justa causa para proceder a exonerar de sus funciones a
las empleadas de la Administración del Estado que estén amparadas por fuero maternal, ya que
los castigos disciplinarios derivan de procedimientos administrativos que tienen por objeto indagar
y acreditar las infracciones cometidas, por lo que la sanción de destitución del cargo no consiste en
una causal discrecional de expiración de funciones, sino que se funda en antecedentes debidamente
comprobados, que justifican la imposición de aquella medida (7734/91, 31462/93, 11938/00,
41023/01).
En cuanto al momento en que debe hacerse efectiva la medida disciplinaria expulsiva para que
produzca la desvinculación del Servicio de las funcionarias acogidas a fuero maternal, es necesario
señalar que las medidas disciplinarias rigen desde la fecha en que se notifica a las afectadas la total
tramitación del decreto o resolución respectivo, lo que ocurre luego que la Contraloria General toma
razón de esos documentos. Por lo tanto, una vez notificadas de la destitución cesan automáticamente
en el desempeño de sus cargos (7734/91, 41023/01 ).
Inciso 2'
letras a), b) y e) del articulo 125) de la ley 18834, o con el articulo 101 del Código Tributario, y 2) en
forma genérica, en las situaciones a que alude el inciso segundo del mencionado articulo 119 (actual
articulo 125), esto es, sólo cuando los "hechos constitutivos de la infracción vulneren gravemente el
principio de probidad administrativa", como es el caso de aquellas conductas descritas en el articulo·
62 de la ley 18575, Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración del Estado,
cuyo texto refundido, coordinado y sistematizado fue fijado por el DFL 1-19653, de 2000, del
Ministerio Secretaria General de la Presidencia (56567/03).
La modificación que a este articulo 119 (actual articulo 125) introdujera el articulo 5, W 8, de la ley
19653, ha determinado la aplicación de la destitución "sólo" en las situaciones previstas expresamente
en este precepto, esto es, le ha otorgado el carácter de taxativo. La mención que el inciso segundo
del citado articulo 119 (actual articulo 125) hace en cuanto a que la medida disciplinaria de destitución
procederá "cuando los hechos constitutivos de la infracción vulneren gravemente el principio de
probidad administrativa", tiene por objeto describir una conducta reprochable que admite diversas
modalidades de ejecución, las que, en todo caso, deben tener la calidad de graves para poder
ser castigadas con destitución. Por tal .motivo, esta sanción puede ser aplicada por la comisión de
distintas faltas que afecten al señalado principio, siempre que ellas signifiquen una transgresión
grave al mismo (30733/00, 32339/00).
Cuando la ley asigna una medida disciplinaria especifica para determinada infracción la autoridad
administrativa está obligada a aplicarla, no pudiendo ejercer las atribuciones privativas que le
permiten determinar aquélla que, a su juicio, merecería el comportamiento anómalo observado por
el afectado, ni menos ponderar circunstancias que podrían aminorar su responsabilidad. Si el Jefe
Superior del Servicio estima que los hechos acreditados en el sumario no constituyen falta grave
al principio de probidad administrativa, puede, ejerciendo su potestad sancionadora, no aplicar la
sanción de destitución, pero tal decisión debe fundarla en el acto administrativo que materialice la
medida disciplinaria que decida aplicar, estableciendo los motivos o las razones por las cuales, en su
opinión, no se vulnera gravemente el referido principio (2890/07).
Desde treinta días antes y hasta sesenta días después de una elección presidencial y desde treinta
días antes de la realización de una elección ordinaria o extraordinaria dentro de las respectivas
circunscripciones, el personal de la Administración del Estado se encuentra amparado por la
inamovilidad funcionaria a que se refieren los artículos 156 y 157 de la Ley Orgánica de la Contraloria
General de la República, en el sentido que no puede decretarse en su contra la medida disciplinaria
de destitución, salvo que el sumario haya sido instruido por el Organismo Contralor. Por lo tanto, en
estos casos, la autoridad administrativa no puede sancionar con una medida expulsiva dentro de
los periodos a que se refieren las aludidas disposiciones (28780/93, 41363/97, 40803/01, 30157/05,
18205/08).
Infringe el principio de proporcionalidad sancionar con destitución a un funcionario por haber bebido
alcohol en horario de trabajo, toda vez que ese hecho no reúne caracteres de gravedad suficientes
que justifiquen su aplicación como tampoco con ello se ha vulnerado gravemente el principio de
probidad administrativa, al no haberse producido un perjuicio a los intereses de la' institución ni se ha
afectado su prestigio (26502/04).
La sustracción de la tarjeta bancaria por parte de una funcionaria a otra y su uso indebido al utilizarla
para retirar dinero, si bien revestiría caracteres de delito, no configura un delito ministerial, al no
haber sido cometido en el ejercicio de las funciones, constituyendo ésta una actuación de carácter
privado que no ha perjudicado al servicio en términos patrimoniales. No obstante, como estos hechos
vulneran gravemente el principio de probidad administrativa procede aplicar la medida disciplinaria
de destitución (16115/04).
Letra a)
Procede aplicar la medida disciplinaria de destitución a un funcionario por haber quedado demostrado
en el respectivo sumario administrativo que se ausentó por más de tres di as consecutivos sin causa
justificada, ya que luego de hacer uso de feriado legal y de seis días de permiso administrativo,
se limitó a comunicar a su jefatura que se acogería a permiso sin goce de remuneraciones por un
plazo de seis meses, manteniendo su inasistencia al trabajo al margen de toda resolución de la
autoridad competente, esto es, sin esperar conocer la resolución que se lo otorgara. Esta conducta
es susceptible de castigarse con dicha medida expulsiva, porque constituye falta grave el hecho
que un empleado se anticipe a gozar de permisos que no han sido autorizados por la Jefatura del
Servicio (2621/93).
Es improcedente restituir sumas de dinero que fueron descontadas a un funcionario por los días en que
no trabajó efectivamente, basado en el hecho de haber sido sobreseído en un sumario administrativo
ordenado instruir precisamente con el objeto de establecer la responsabilidad administrativa que le
asistiría por esas ausencias, ya que el Estatuto Administrativo sólo contempla que aquellas ausencias
derivadas de licencias médicas o permisos autorizados conforme a su normativa, autorizan para
percibir remuneraciones por esas inasistencias (82362/72).
No configura ausencia injustificada aquélla que deriva de la retención indebida por parte del Jefe de
Servicio de la renuncia presentada por un funcionario, a contar de una fecha cierta y determinada,
con anterioridad a sus ausencias laborales. Por lo tanto, si bien el Servicio actuó prontamente
al disponer el sumario en su contra, adoptó una pasividad injustificada en la aceptación de su
renuncia que resultó decisiva en la situación funcionaria del afectado. En efecto, si la resolución
de aceptación de la renuncia se hubiere dictado oportunamente, podría haberse evitado que el
funcionario incurriera en dichas ausencias al desvincularse del Servicio antes que transcurrieran
los tres días de inasistencias injustificadas que permiten aplicar la señalada sanción expulsiva. La
actuación de la Jefatura implicó, además, una transgresión al principio de eficiencia consagrado
en el articulo 5, inciso primero, y 8, inciso segundo, de la ley 18575, que obliga a las autoridades a
tramitar con rapidez, agilidad y expedición los asuntos sometidos a su conocimiento y decisión. Por
lo tanto, corresponde que la autoridad acepte la renuncia voluntaria de un funcionario sometido a
investigación sumaria o sumario administrativo por ausencias injustificadas, por haber transcurrido
en exceso el plazo durante el cual esa dimisión pudo ser retenida de acuerdo con el articulo 141
(actual articulo 147) inciso final de la ley 18834 (32514/90, 37683/95).
Para determinar si la ausencia de un empleado a sus labores por encontrarse sujeto a alguna
medida cautelar decretada por la Justicia Ordinaria, configura la causal del inciso segundo, letra a),
del articulo 119 (actual articulo 125) del Estatuto Administrativo, es necesario esperar el resultado
del juicio, el cual deberá declarar si la situación le es o no imputable, según si es condenado o
absuelto, resultado del que dependerá si las inasistencias registradas se deben a un hecho suyo o
a fuerza mayor. La sola circunstancia que un funcionario público tenga la condición de procesado
o formalizado por la Justicia Ordinaria, no autoriza para proceder administrativamente en su contra,
atendida la naturaleza esencialmente transitoria de la resolución que la dispone (50847/64, 9191/82,
37140/82, 1519/96, 13676/06).
Tratándose de infracciones administrativas que conllevan una sanción disciplinaria específica como
ocurre con la destitución por atrasos sin causa justificada, previa investigación sumaría, contenida
en el artículo 66 (actual artículo 72), inciso final, de la ley 18834, el Jefe Superior del Servicio puede
rebajar ese castigo, pero su decisión debe ser fundada en el texto del documento que materialice la
medida (35083/90).
Es improcedente sancionar a un funcionario que incurriera en inasistencias por más de tres días
consecutivos, cuando la licencia médica presentada por éste ha sido rechazada por el organismo de
salud competente, por cuanto ello sólo impide al afectado gozar de las remuneraciones o subsidios
por el período en que no concurrió a trabajar, pero constituye una prueba cierta de su enfermedad
y un principio de justificación de las ausencias laborales (15477/93, 30243/94, 12974/00, 16458/01,
21005/02, 26083/05).
Procede aplicar la medida disciplinaria de destitución fundada en el artículo 119 (actual artículo 125),
inciso segundo, letra a), del Estatuto Administrativo, a un funcionario que se ausentó de la institución,
sin causa justificada, por más de tres días consecutivos. Con todo, la superioridad del Servicio
puede aplicar al afectado una sanción de menor drastícidad, siempre que la resolución de término
que la contenga justifique debidamente dichas inasistencias (27085/90).
No procede tomar razón de un acto administrativo que aplica la medida disciplinaria de destitución
a funcionario al término de una investigación sumaria, por cuanto el cargo que se formula, esto es,
"haber faltado a su trabajo sin causa justificada", configura la causal prevista en la letra a) del inciso
segundo del artículo 125 de la ley 18834, transgresión que debió investigarse a través de un sumario
y no de una investigación sumaria. Por ende, debe ordenarse la reapertura de dicha investigación,
con el propósito que la misma se eleve a sumario, retrotrayendo el proceso a la instancia de formular
el respectivo cargo, sin desmedro de los demás trámites que correspondan (57176/06).
Letra b)
Concordancias: Arts. 19, W 16 de la CP de laR; 84, letras i), j) y k) del EA; 82, letras i), j) y k), del
EAM; 212 y 304 del C. del T.
Letra e)
Procede aplicar la medida disciplinaria de destitución a un empleado público, por haberse acreditado
en un sumario administrativo que éste hizo uso de su posición jerárquica para presionar a distintas
Concordancias: Art. 84, letra 1) del EA; Ley 20.005, que tipifica y sanciona el acoso sexual; Arts. 2,
inciso segundo, del C. del T., que establece qué se entiende por acoso sexual; 82, letra 1) y 123 del
EAM.
Letra d)
Concordancias: Arts. 61, letra k), 90A y 908 del EA, disposiciones agregadas por el articulo 1
de la ley 20.205, que protege al funcionario que denuncia irregularidades y faltas al principio de
probidad.
Letra e)
Esta sanción expulsiva, además de justificarse por su gravedad, resulta concordante con el articulo 11,
letra f) (actual articulo 12, letra f), del Estatuto Administrativo, en cuanto exige para ingresar a la
Administración del Estado no hallarse condenado por crimen o simple delito, con el articulo 54,
letra e), de la ley 18575, que preceptúa que no podrán ingresar a cargos de la Administración del
Estado, entre otras, las personas que se hallen condenadas por crimen o simple delito, y en el caso
de que la condena afecte a una persona que ya ingresó a la Administración y que tiene, por tanto,
la calidad de funcionario, el articulo 64 de esta última ley, dispone, en general, que las inhabilidades
sobrevinientes deberán ser declaradas por el funcionario afectado a su superior jerárquico dentro de
los diez días siguientes a la configuración de alguna de las causales señaladas en el articulo 54 y,
en el mismo acto, deberá presentar su renuncia al cargo o función, agregando que el incumplimiento
de esta norma será sancionado con la medida disciplinaria de destitución del infractor. Luego, la
condena por crimen o simple delito constituye un aspecto relacionado con la idoneidad moral de
una persona, que le impide tanto ingresar a la Administración del Estado -ya que la ausencia de una
condena de esa naturaleza es un requisito de ingreso a la misma-, como permanecer en ella -toda
vez que su ocurrencia produce como consecuencia su salida de la institución en la que se desempeña
(40806/00, 16677/02, 16760/02, 63000/04). El principio de idoneidad moral es consustancial al
ingreso y permanencia en la Administración, de modo que tal idoneidad se pierde cuando el afectado
es condenado por crímenes o simples delitos por una sentencia definitiva en causa criminal, resultando
irrelevante que esté cumpliendo o haya cumplido la pena impuesta (40806/00, 23882/01 ).
La calidad de condenado de una persona tiene carácter permanente, condición que impide ingresar
a la Administración a menos que obtenga alguno de los beneficios contemplados en el articulo 29 de
la ley 18216. Por lo mismo, si esa inhabilidad se produce con posterioridad al ingreso, no es posible
que empiece a correr ningún plazo de prescripción que impida hacerla efectiva. Ello, por cuanto la
prescripción de la acción disciplinaria tiene por objeto inhibir, después de cierto tiempo, la posibilidad
de hacer efectiva la responsabilidad administrativa de un empleado que ha infringido sus obligaciones
y deberes funcionarios, no pudiendo entenderse que opere respecto de la pérdida de un requisito de
idoneidad para mantenerse en la Administración del Estado, como es la inhabilidad sobreviniente,
dada la especial característica de objetividad y permanencia de esa causal de destitución. No obsta
a lo expresado, los artículos 54, letra e) y 64 de la ley 18575, que obligan al funcionario afectado
con la inhabilidad sobrevíniente de que se trata a declararla a su superior jerárquico y presentar la
·renuncia a su cargo, dentro de los diez días siguientes a la configuración de esa inhabilidad, ya que la
circunstancia de que el legislador haya señalado un plazo al afectado con la inhabilidad sobreviniente,
no puede significar que transcurrido dicho plazo el funcionario deja de estar inhabilitado, sino que
se trata más bien de un plazo que le da la posibilidad al funcionario de evitar su alejamiento de la
institución respectiva por aplicación de la medida disciplinaria de destitución. Por consiguiente,
respecto de la condena por crimen o sumple delito -en su doble carácter de inhabilidad sobreviniente
y causal de destitución-, no puede operar la prescripción de la acción disciplinaria (63000/04).
El tribunal que dictó la sentencia definitiva y decretó la medida alternativa deberá determinar si ésta
alcanza, además de la pena restrictiva o privativa de libertad a la pena accesoria de suspensión de
cargo u oficio público. Ello, pues no corresponde a la Contraloría General pronunciarse sobre los
efectos de un fallo judicial (12060/07, 37048/07).
Es improcedente poner término a la contrata de un funcionario por la causal de "no ser necesarios
sus servicios", cuando ha sido condenado por un crimen o simple delito, pues corresponderá que se
tramite el respectivo sumario administrativo, el que deberá culminar con la aplicación de la medida
disciplinaria de destitución (23232/07).
La norma del artículo 119, inciso segundo, letra e) (actual artículo 125, inciso segundo, letra e),
del Estatuto Administrativo, que señala a la condena por crimen o simple delito como causal de
destitución, no atiende a la gravedad de la pena que lleva consigo la conducta criminalmente punible,
sino que, objetivamente, a la circunstancia que la calificación judicial del hecho contenido en la
sentencia condenatoria ejecutoriada se encuadre dentro de las denominaciones genéricas a que
alude la ley 18834 (18143/66, 52190/79, 10010/95).
Si bien las sanciones indicadas por la Contraloría General con ocasión de los procedimientos que
instruye constituyen meras proposiciones para la autoridad competente, en términos que ésta las
puede elevar, rebajar e incluso disponer la absolución del afectado, ello no es posible cuando la ley
asigna una medida disciplinaria específica para determinada infracción (10118/95 -reconsiderado
parcialmente por el 43507/00-).
No corresponde instruir un sumario administrativo en contra de una funcionaria procesada por los
delitos de falsificación, uso malicioso de instrumento privado mercantil y estafa, por cuanto el hecho
de encontrarse sometida a un proceso criminal no significa que necesariamente sea responsable de
los hechos que lo han originado, circunstancias que sólo quedarán establecidas mediante sentencia
judicial ejecutoriada. En el evento que sea condenada por los Tribunales de Justicia, esta condena
será causal suficiente para aplicar la medida disciplinaria de destitución (7468/68).
La Contraloría General cursa resolución que aplica la sanción de multa a una funcionaria, pero
hace presente que al estar la inculpada condenada en primera instancia como autora de delito por
los Tribunales Ordinarios, en el evento de ser condenada en definitiva por sentencia ejecutoriada,
de acuerdo con el artículo 119, inciso segundo, letra e) (actual artículo 125, inciso segundo, letra
e), de la ley 18834, el Servicio, previa reapertura del sumario, debe aplicar en su contra la medida
disciplinaria de destitución (2443/94, 10010/95).
Letra f)
La destitución debe aplicarse también por la comisión de infracciones administrativas que afecten
gravemente el principio de probidad administrativa consagrado en los artículos 62 de la ley 18575
y 55, letra g) (actual artículo 61, letra g), de la ley 18834, aunque el Tribunal de Garantía haya
Conforme al artículo 11 del decreto ley 799, de 1974, sobre uso y circulación de vehículos estatales,
toda infracción a sus disposiciones será sancionada con alguna de las medidas disciplinarias
establecidas en el Estatuto Administrativo, cualquiera sea el régimen estatutario a que estén
sometidos los respectivos servidores, incluyendo la destitución (11785/81 -complementado por el
31730/81-, 14754/00).
Procede señalar que las medidas disciplinarias que corresponda aplicar por las infracciones a que
se refiere el artículo 11 del decreto ley 799, de 1974, serán las del Estatuto Administrativo, cualquiera
que sea el régimen jurídico a que estén sometidos los respectivos servidores. Lo anterior determina,
adicionalmente, que la investigación sumaria que debe preceder a la aplicación de cualquier sanción,
será la que prevé y regula dicho cuerpo estatutario. Asimismo, el decreto ley citado le confiere
directamente a la Contraloría General la potestad fiscalizadora y sancionadora de las infracciones a
sus normas y, por tal motivo, las medidas disciplinarias que aplique en uso de estas atribuciones, no
quedan sujetas a la decisión final de la Jefatura Superior de la respectiva entidad, sino que ellas surten
todos sus efectos desde el instante en que queda totalmente tramitada la resolución del Contralor
General que las impone, previa la antedicha investigación sumaria. Además, las referidas sanciones
deben hacerse efectivas de inmediato, teniendo el Jefe Superior de la entidad correspondiente la
obligación de informar de su ejecución, dentro del plazo de 15 dias. Cabe hacer presente que la
omisión de dicha comunicación al Organismo de Control, en el plazo indicado, acarreará la aplicación
de las medidas y sanciones establecidas en la ley 10336, Orgánica Constitucional de la Contraloría
General, en la forma que corresponda (35593/95, Oficio Circular de la Contraloría General de la
República, que imparte instrucciones sobre uso y circulación de vehículos estatales).
Concordancias: Art. 8, inciso primero, de la CP de laR; Título 111, Arts. 52 al 68 de la LOCBGAE; Arts.
72, inciso final, 84, letras i), j) y k), 119 a 145 del EA; ley 18216, que establece medidas que indica
como alternativas a las penas privativas o restrictivas de libertad; 3 y ss. del Código Penal; 50, inciso
tercero, 56, inciso quinto y 97, inciso primero, de la ley 20255, que establece Reforma Previsional; 11
del DL 799, de 1974, que regula el uso y circulación de vehículos estatales; 17, inciso segundo, del
DFL 7912, de 1927, Ley Orgánica de Ministerios; 101 del DL 830, de 1974, que aprueba el Código
Tributario; 156 a 161 de la ley 10336, LOCGR; 123 del EAM. Dto. 1215, de 2006, del Ministerio del
Interior, que aprueba el reglamento que establece normas que regulan las medidas de prevención
del consumo de drogas en los Órganos de la Administración del Estado, así como el procedimiento
de control de consumo aplicable a las personas que indica.
Comentarios:
El informe de la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno precisó con respecto a esta norma,
que en su inciso primero se acordó eliminar la obligación de fundamentar la aplicación de la medida
disciplinaria de destitución que contenía su texto original, por cuanto esta sanción sería consecuencia
de una investigación sumaria o de un sumario administrativo. ·
Con respecto al inciso segundo, mantuvo, en general, el texto propuesto por el Ejecutivo, eliminando
la causal de destitución consistente en la aplicación de más de dos medidas disciplinarias de multa
en los doce meses anteriores a la última infracción.
Finalmente, la Comisión Conjunta agregó una última causal genérica, relativa a "los demás casos
contemplados en este Estatuto o leyes especiales", acogiendo de esta manera una sugerencia de la
Secretaría de Legislación.
Por otra parte, la modificación introducida al inciso segundo del articulo 119 (actual articulo 125)
del Estatuto Administrativo por el articulo 5, N" 8, de la ley 19653, consistió en reemplazar su
encabezamiento, que expresaba: "La medida disciplinaria de destitución procederá siempre en los
siguientes casos: ... " por "La medida disciplinaria de destitución procederá sólo cuando los hechos
constitutivos de la infracción vulneren gravemente el principio de probidad administrativa, y en los
siguientes casos: ... ".
Por lo tanto, la autoridad administrativa podrá aplicar la medida disciplinaria de destitución en los
siguientes casos: 1) cuando una ley expresa tipifica una determinada conducta con dicha sanción,
como ocurre con las letras a), b), e), d), e) y f) del articulo 125 del Estatuto Administrativo, o con
el articulo 101 del Código Tributario, y 2) en forma genérica, en las situaciones a que alude el
inciso segundo del mencionado articulo 125, el cual se refiere a hechos constitutivos de la infracción
que vulneren gravemente el principio de probidad administrativa, cuyo es el caso, por ejemplo, de
aquellas conductas descritas en el articulo 62 de la Ley Orgánica Constitucional de Bases Generales
de la Administración del Estado.
Resulta interesante destacar lo que establece el articulo 2, inciso segundo, del Código del Trabajo,
en relación con los artículos 84, letra 1), y 125, inciso segundo, letra e), del Estatuto Administrativo,
en cuanto señala que "las relaciones laborales deberán siempre fundarse en un trato compatible con
la dignidad de la persona. Es contrario a ella, entre otras conductas, el acoso sexual, entendiéndose
portal el que una persona realice en forma indebida, por cualquier medio, requerimientos de carácter
sexual, no consentidos por quien los recibe y que amenacen o perjudiquen su situación laboral o sus
oportunidades en el empleo".
ARTICULO 126.- Si el jefe superior de la institución, el Secretario Ley 18.834, Art. 120.
Regional Ministerial o el Director Regional de servicios nacionales
desconcentrados, según corresponda, estimare que los hechos son
susceptibles de ser sancionados con una medida disciplinaria o en el
caso de disponerlo expresamente la ley, ordenará mediante resolución
la instrucción de una investigación sumaria, la cual tendrá por objeto
verificar la existencia de los hechos, y la individualización de los
responsables y su participación, si los hubiere, designando para tal
efecto a un funcionario que actuará como investigador.
Interpretación:
Las investigaciones sumarias y los sumarios administrativos que consulta la ley 18834 son procesos
de carácter reglado, de manera que respecto de ellos no caben otros trámites o instancias que los
previstos expresamente en la normativa pertinente de ese ordenamiento. Por lo tanto, no es posible
interponer en esos procedimientos el reclamo de ilegalidad ante la Contraloría General, establecido
en el artículo 154 (actual artículo 160) de esa ley. Sin embargo, ello no obsta a que el Organismo
Contralor considere las presentaciones que formulen los afectados, como un antecedente en el
trámite de toma de razón a que están afectos los actos que aplican medidas disciplinarias (3634/91,
2190/95, 19763/96, 15060/01, 33336/01, 31606/03, 36814/05).
Los Servicios Públicos deben mantener un libro de sumarios e investigaciones sumarias que se
sustancien en la institución, el cual deberá encontrarse permanentemente al día, a fin de verificar el
cumplimiento cabal de los plazos y especialmente el cierre y término de estos procesos (40806/67,
28661/91 ).
Los funcionarios de exclusiva confianza pueden ser marginados de sus empleos por aplicación de
una medida disciplinaria, previo sumario administrativo o investigación sumaria, en caso de infringir
sus obligaciones o deberes funcionarios, ya que, sin perjuicio de lo relacionado con su nombramiento
o remoción, dichos servidores públicos están sujetos al mismo sistema jurídico que alcanza al resto
de los empleados que están regidos por el Estatuto Administrativo (15461/91 ).
Procede instruir una investigación sumaria por atrasos reiterados e injustificados a un dirigente de
una asociación de funcionarios, porque el fuero de la ley 19296, articulo 25, no impide realizar un
proceso administrativo en contra de quien está amparado por esa inamovilidad (41141/94, 29450/96,
46418/00 -complementado por el42181/01-).
Desde la vigencia de la ley 19345, los Servicios Públicos no están obligados a instruir una investigación
sumaria en los casos en que los funcionarios sufran un accidente laboral, sin perjuicio de tener que
observar las formalidades contenidas en la ley 16744 (40774/95, 4816/96,30257/96, 29918/99).
Los servidores regidos por el Estatuto del Personal de las Fuerzas Armadas están excluidos de la
aplicación de la ley 19345, por lo que procede iniciar una investigación sumaria para determinar si
los accidentes que los afectan han sido o no en actos del servicio (7694/97).
La circunstancia de encontrarse el Jefe Superior de una repartición acogido a alguno de los beneficios
estatutarios que le otorga la ley 18834, como es el permiso sin goce de remuneraciones, no le hace
perder su condición de tal, por lo que nada obsta que en un momento determinado asuma su cargo
. en plenitud, y en el ejercicio de las facultades que le son propias, formalice la instrucción de un
sumario administrativo (744/99).
El dia sábado debe considerarse inhábil para el computo de los plazos que se establecen en
los procesos administrativos contemplados en el Título V de la ley 18834 (8718/91, 12186/91,
33413/97).
Las pólizas de fidelidad funcionaria sólo pueden hacerse efectivas si en un sumario administrativo o
investigación sumaria se sanciona al empleado por infringir sus obligaciones y deberes relacionados
con la custodia de los fondos o bienes confiados a su cuidado (9558/92, 15044/97).
Inciso 1•
La Contraloria General de la República, de acuerdo con lo dispuesto en los articulas 131 y 133
de la ley 10336, goza de prioridad para instruir procesos administrativos en los Servicios bajo su
tuición, cuando aún éstos no se han iniciado, para lo cual dichas entidades deberán poner a su
disposición todos los antecedentes que estén en su poder (9257/91). No obstante lo anterior, no
existe impedimento alguno para la instrucción de dos sumarios administrativos paralelos sobre la
misma materia, cuando uno de ellos ya ha sido ordenado por el Jefe Superior de un Servicio, y otro,
posteriormente es incoado por el Organismo Contralor Si por cualquier motivo el proceso instruido
por la Administración activa interfiere con el ejercicio de la función fiscalizadora, la Contraloria puede
disponer que aquél se suspenda, puesto que su labor se desarrolla al amparo de normas de rango
constitucional, sin que la ley ni precepto alguno de inferior jerarquía puedan suprimir o limitar esas
facultades (20711/00).
La orden de iniciar una investigación sumaria o un sumario administrativo constituye una manifestación
de la potestad disciplinaria de que están investidas las jefaturas competentes de los Servicios
Públicos, salvo que la ley disponga expresamente otra autoridad (7528/93).
Inciso 2°
Inciso 3°
El inciso tercero del articulo 120 (actual articulo 126) del Estatuto Administrativo no contempla la
posibilidad de prorrogar el plazo de cinco días allí señalado para concluir la etapa indagatoria en
las investigaciones sumarias, de manera que si en dicho lapso no se puede dar término a aquélla,
deberá elevarse el proceso a sumario administrativo (4243/90, 15477/93,32582/94, 24718/07).
Inciso 4°
De acuerdo con los artículos 120 (actual articulo 126), inciso cuarto, y 132 (actual articulo 138),
inciso segundo, de la ley 18834, la petición de rendir prueba es un derecho establecido en favor
del inculpado, por lo que, una vez formulada, al investigador o fiscal sólo le corresponde proveerla
y fijar el término dentro del cual debe realizarse con sujeción a los plazos que correspondan, no
encontrándose facultado para evaluar la procedencia o improcedencia de su rendición y su correlativa
recepción (18108/02).
Inciso 5°
El informe o vista que emane del investigador debe contener una relación de los hechos, los
fundamentos y conclusiones a que se hubiere llegado, formulando la proposición que estimare
procedente (31436/93, 1620/00).
Inciso 6°
Corresponde que la autoridad acepte la renuncia voluntaria de una funcionaria sometida a investigación
sumaria por ausencias injustificadas, por haber transcurrido en exceso el plazo durante el cual esa
dimisión pudo ser retenida, debiendo la investigación continuar hasta su normal término de acuerdo
con el artículo 141 (actual artículo 147), inciso finaf, de la ley 18834 (32514/90).
Es improcedente sancionar a un funcionario que incurriera en inasistencias por más de tres días
consecutivos, cuando la licencia médica presentada por éste ha sido rechazada por el organismo de
salud competente, por cuanto ello sólo impide al afectado gozar de las remuneraciones o subsidios
por el período en que no concurrió a trabajar, pero constituye una prueba cierta de su enfermedad
y un principio de justificación de las ausencias laborales (15477/93, 30243/94, 12974/00, 16458/01,
21005/02).
Tanto en el caso de las ausencias reiteradas a que se refiere el inciso final del artículo 66 (actual
articulo 72) de la ley 18834, como en la situación prevista en esta norma, se aplica, para perseguir la
responsabilidad de los funcionarios, el procedimiento contemplado en aquella disposición, esto es,
la investigación sumaria (30830/94).
Inciso 7°
Es improcedente aplicar una sanción al término de una investigación sumaria, cuando la vista o
informe de dicho proceso no indica la fecha en que ella se emitió, omisión que impide determinar si
tal diligencia se efectuó una vez vencido el plazo que tiene el inculpado para formular los descargos,
más aún si se considera que éste no ejerció tal derecho (2101/01).
Las medidas disciplinarias contempladas en el artículo 116 (actual articulo 121) del Estatuto
Administrativo no son recurribles ante la Contraloría General de la República, ya que tanto el recurso
de reposición como el recurso de apelación deben entablarse ante las autoridades expresamente
señaladas en la ley, conforme al artículo 135 (actual artículo 141), letras a) y b), de dicho Estatuto.
Asimismo, no proceden otros trámites o instancias que los previstos en la ley, respecto de las
investigaciones sumarias y de los sumarios administrativos (18239/90, 734/92).
El principio de la doble instancia está consagrado respecto de la investigación sumaria, pero ello
no significa que sea aplicable en todos los procesos, ya que la apelación sólo es admisible en la
medida que se cumpla la exigencia de que debe existir un superior jerárquico al que el órgano
sancionador esté subordinado. Esta condición no se produce tratándose de los Servicios Públicos
descentralizados por no existir en ellos un vinculo de subordinación jerárquica con el Presidente de
la República, sino una relación de supervigilancia a través del Ministerio resped1vo, por lo que la
Jefatura Superior de esta clase de organismos carece de superior jerárquico (30095/92, 30984/93,
2190/95, 1182/96, 26677/97,2890/98 -reconsiderado parcialmente por el 31609/98-).
Las decisiones que corresponde adoptar a la autoridad llamada a resolver sobre la aplicación de
una medida disciplinaria constituyen actos reglados, tanto en lo relativo al procedimiento como en
lo relacionado con los efectos que producen esas determinaciones y que, atendida esa naturaleza,
dichos actos no pueden ser modificados discrecionalmente por la autoridad luego que se han
perfeccionado. En otras palabras, una vez notificada la total tramitación de los documentos, la
medida disciplinaria que debe imponerse como consecuencia de la instrucción de una investigación
sumaria o de un sumario administrativo y resueltos los recursos que la ley franquea para obtener la
enmienda de la correspondiente resolu~ión, queda a firme y no puede ser dejada sin efecto más que
por la vía de la invalidación o anulación por razones de ilegalidad, sea de oficio o a petición de parte
(72589/62, 10754/66, 7073/00).
Concordancias: Arts.72, inciso final, 119 a 145 y 9 transitorio del EA; 124 del EAM.
Comentarios:
El proceso disciplinario presenta dos variantes: la investigación sumaria y el sumario administrativo.
La investigación sumaria que regula el artículo 126 del Estatuto Administrativo, al igual que el
sumario administrativo, tiene por objeto verificar la existencia de hechos que configuran vulneración
a las normas administrativas, determinar la persona del o de los responsables y señalar su grado de
participación.
Sus características más relevantes son: 1) es un proceso verbal que debe concluir con un acta
general, que incluye todas las actuaciones que se lleven a cabo durante la investigación; 2) es breve,
toda vez que la investigación no puede exceder de cinco días; 3) se emplea para investigar hechos
constitutivos de infracciones de menor importancia; 4) por su intermedio no se puede aplicar la
medida disciplinaria de destitución, salvo excepciones expresas; 5) actúa un sólo investigador sin la
asistencia de un ministro de fe o actuario; 6) es un procedimiento secreto durante la investigación o
etapa indagatoria y reservado a partir de la formulación de los cargos o etapa acusatoria. Esto último
significa que el proceso disciplinario sólo es público para el inculpado y su abogado; 7) se puede
sobreseer al acusado en cualquier estado del proceso; 8) los plazos, tanto para las autoridades como
para los afectados deben entenderse de días hábiles y, por lo tanto, no comprenden los días sábado;
9) los vicios de procedimiento que inciden en trámites que no tengan una influencia decisiva en los
resultados de la investigación -esto es, los no esenciales- no afectarán la legalidad de la resolución
que aplique la medida disciplinaria.
Interpretación:
En los casos de investigaciones sumarias en que se ha excedido el plazo establecido por la ley para
su tramitación, no procede que sea prorrogado, y la investigación debe proseguirse como sumario
administrativo (4243190, 15477193, 32582194).
El hecho que una investigación sumaria sea elevada a sumario administrativo no le da a este último
procedimiento la calidad de un nuevo proceso (3480191).
Los Servicios Públicos deben mantener un libro de sumarios e investigaciones sumarias que se
sustancien en la institución, el cual deberá encontrarse permanentemente al d ia, a fin de verificar el
cumplimiento cabal de los plazos y especialmente el cierre y término de estos procesos (40806167,
28661191).
Debe elevarse a sumario administrativo una investigación sumaria que sobresee de responsabilidad
administrativa a un funcionario por ausencias injustificadas, con el fin de que la Comisión de Medicina
Preventiva e Invalidez respectiva determine si el estado de salud del inculpado, que presentaría la
condición de alcohólico intermitente, permite imputarle responsabilidad en esas ausencias y si se
encuentra en condiciones de continuar desempeñándose en la Administración Pública (46523199).
No se ajusta a derecho la resolución emitida por el Director de un Hospital que aplica la sanción de
multa a una funcionaria, porque dicha medida disciplinaria no guarda relación con la gravedad de
los hechos objeto de la investigación sumaria realizada, siendo procedente elevar el procedimiento
a sumario administrativo para determinar la responsabilidad que asiste a la inculpada al haber
delegado facultades indelegables en una estudiante en práctica, que administró, erróneamente, un
medicamento a un lactante, que falleció ese mismo día (47220199).
Procede elevar a sumario administrativo una investigación sumaria instruida por una universidad
estatal para investigar hechos referidos al sobregiro de la cuenta corriente bancaria asignada a
un Departamento de esa casa de estudios superiores, porque los cargos formulados en contra de
los inculpados se relacionan con el incumplimiento del articulo 58 (actual articulo 64), letra a), de
la ley 18834, por las jefaturas que actuaron como apoderados titulares de esa cuenta, los que no
adoptaron las medidas ni ejercieron el control sobre el saldo pertinente, lo que reviste la gravedad y
mérito suficientes para adoptar tal determinación (22534100).
Es improcedente aplicar destitución a una funcionaria al término de una investigación sumaria porque
los hechos en que se ha visto involucrada no son de aquellos que excepcionalmente contempla el
articulo 120 (actual articulo 126), inciso sexto, del Estatuto Administrativo, para aplicar dicha medida
a través de ese procedimiento, por lo que debe reabrirse el mismo y elevarse a sumario administrativo
(27978100).
La orden por la que una investigación sumaria se eleva a sumario administrativo debe materializarse
en una resolución del Jefe Superior del Servicio o del funcionario que posea facultades delegadas
para ello, según corresponda. Sin embargo, para ese propósito resulta suficiente con la emisión
de una resolución interna del Servicio, por lo que, como esta medida incide en un trámite dentro
del respectivo proceso disciplinario, ese documento no se encuentra sometido a tramitación alguna
ante la Contraloria General, la cual examinará su procedencia legal al momento de conocer del
expediente por la vía de la toma de razón del decreto o resolución de término que se dicte en el
sumario administrativo (3765/70, 54135/75, 36340/06).
Concordancias: Arts. 119 a 145 y 9 transitorio del EA; 125 del EAM.
Comentarios:
El articulo 127 del Estatuto Administrativo ordena a la autoridad cambiar de procedimiento a sumario
administrativo, si después de iniciada una investigación sumaria comprueba que los hechos revisten
una mayor gravedad.
ARTICULO 128.- Si la naturaleza de Jos hechos denunciados o su Ley 18.834, Art. 122.
gravedad así Jo exigiere, a juicio de la institución, el Secretario
Regional Ministerial o el Director Regional de servicios nacionales
desconcentrados, según corresponda, se dispondrá la instrucción
de un sumario administrativo.
Interpretación:
La orden de iniciar una investigación sumaria o un sumario administrativo constituye una manifestación
de la potestad disciplinaria de que están investidas las jefaturas competentes de los Servicios
Públicos, salvo que la ley disponga expresamente otra autoridad (7528/93, 21651/96).
Los Servicios Públicos deben mantener un libro de sumarios e investigaciones sumarias que se
sustancien en la institución, el cual deberá encontrarse permanentemente al día, a fin de verificar el
cumplimiento cabal de los plazos y especialmente el cierre y término de estos procesos (40806/67,
28661/91 ).
La Contraloría General de la República, de acuerdo con lo dispuesto en los artículos 131 y 133
de la ley 10336, goza de prioridad para instruir procesos administrativos en los Servicios bajo su
tuición, cuando aún éstos no se han iniciado, para lo cual dichas entidades deberán poner a su
disposición todos los antecedentes que estén en su poder (9257/91 ). No obstante lo anterior, no
existe impedimento alguno para la instrucción de dos sumarios administrativos paralelos sobre la
misma materia, cuando uno de ellos ya ha sido ordenado por el Jefe Superior de un Servicio, y otro,
posteriormente es incoado por el Organismo Contralor. Si por cualquier motivo el proceso instruido
por la Administración activa interfiere con el ejercicio de la función fiscalizadora, la Contraloría puede
disponer que aquél se suspenda, puesto que su labor se desarrolla al amparo de normas de rango
constitucional, sin que la ley ni precepto alguno de inferior jerarquía puedan suprimir o limitar esas
facultades (20711/00).
La Contraloría General no puede pronunciarse respecto de una medida disciplinaria aplicada a una
funcionaria de la Cámara de Diputados, porque sus facultades de control se relacionan con los
actos que emanan de la Administración del Estado, y con el personal e instituciones que la integran,
careciendo de competencia para emitir opiniones sobre circunstancias que afectan a servidores del
Poder Legislativo (34849/97, 41731/99).
Concordancias: Arts. 119 a 145 y 9 transitorio del EA; resolución 236, de 1998, de la Contraloria
General, Reglamento de sumarios instruidos por la Contraloria General de la República; 126 del
EAM.
Comentarios:
El sumario administrativo y la investigación sumaria son las dos modalidades que presenta el proceso
disciplinario.
Al igual que la investigación sumaria, el sumario administrativo tiene también por objeto verificar la
existencia de hechos constitutivos de infracción administrativa, determinar la persona del o de los
responsables y su grado de participación.
Sus características más significativas son: 1) Es un proceso escrito, articulado en fases o etapas
procedí mentales: Constitución de la fiscalía; apercibimiento para señalar domicilio y plantear causales
de recusación; período de investigación; formulación de los cargos y su notificación; presentación
de descargos; período de prueba; dictamen o vista fiscal; remisión del expediente a la autoridad
con potestad sancionadora; aplicación de la sanción, absolución o sobreseimiento mediante un
acto administrativo; notificación de dicho acto; etapa de revisión, esto es, cuando se interponen los
recursos de reposición y apelación, en su caso; toma de razón del acto terminal y notificación de
la medida disciplinaria definitivamente aplicada. 2) 1iene una extensión mayor que la investigación
sumaria, por ejemplo, la etapa indagatoria o de investigación dura veinte días, prorrogables hasta
por sesenta días. 3) Se utiliza para investigar hechos que tipifican infracciones graves. 4) Por su
intermedio se pueden imponer las cuatro medidas disciplinarias consultadas en el articulo 121 del
Estatuto Administrativo. 5) Está a cargo de un fiscal instructor, quien designará, a su vez, un actuario
o ministro de fe. 6) Es secreto durante la investigación o etapa indagatoria y reservado a partir de
la formulación de los cargos o etapa acusatoria. Esto último significa que el proceso disciplinario
sólo es público para el inculpado y su abogado. 7) Se puede sobreseer al acusado en cualquier
estado del proceso. 8) Los plazos, tanto para las autoridades como para los afectados, son de días
hábiles y, por lo tanto, no comprenden los días sábado. 9) Los vicios de procedimiento que inciden
en trámites que no tengan una influencia decisiva en los resultados de la investigación -esto es, los
no esenciales- no afectarán la legalidad de la resolución que aplique la medida disciplinaria.
ARTICULO 129.- El sumario administrativo se ordenará por el jefe Ley 18.834, Art. 123.
superior de la institución, el Secretario Regional Ministerial o el
Director Regional de servicios nacionales desconcentrados, según
corresponda, mediante resolución, en la cual designará al fiscal
que estará a cargo del mismo. El fiscal deberá tener igual o mayor
grado o jerarquía que el funcionario que aparezca involucrado en
los hechos.
Interpretación:
Inciso 1•
Las investigaciones sumarias y los sumarios administrativos que consulta la ley 18834 son procesos
de carácter reglado, de manera que respecto de ellos no caben otros trámites o instancias que los
previstos expresamente en la normativa pertinente de ese ordenamiento. Por lo tanto, no es posible
interponer en esos procedimientos el reclamo de ilegalidad ante la Contraloria General, establecido
en el artículo 154 (actual artículo 160) de esa ley. Sin embargo, ello no obsta a que el Organismo
Contralor considere las presentaciones que formulen los afectados, como un antecedente en el
trámite de toma de razón a que están afectos los actos que aplican medidas disciplinarias (3634/91,
2190/95, 19763/96, 15060/01' 33336/01, 31606/03, 36814/05).
Los Directores de los servicios nacionales desconcentrados están legalmente facultaclos para
disponer la instrucción de investigaciones sumarias y de sumarios administrativos (4761/90, 2629/92,
46796/99).
El sumario administrativo se inicia con una resolución exenta que ordena su instrucción, de lo que
se sigue, en consecuencia, que a partir de la data de ese acto administrativo debe entenderse en
tramitación el proceso disciplinario (16893/90, 28483/95).
Las autoridades facultadas para ordenar la substanciación de un sumario administrativo son el Jefe
Superior del Servicio, el Secretario Regional Ministerial o el Director Regional de servicios nacionales
desconcentrados, pero el hecho de que un sumario administrativo haya sido dispuesto por una
autoridad incompetente, no afecta la validez del proceso, puesto que de acuerdo con el artículo
138 (actual artículo 144) de la ley 18834, los vicios de procedimiento no afectan la legalidad de
la resolución que aplique una medida disciplinaria, cuando incidan en trámites que no tengan una
influencia decisiva en los resultados del sumario (2680/99, 46796/99).
De acuerdo con esta norma el fiscal debe tener igual o mayor grado o jerarquía que el funcionario
que aparezca involucrado en los hechos. Esta exigencia reviste un carácter alternativo, conforme así
lo determina la conjunción disyuntiva "o", que emplea entre las expresiones "grado" y "jerarquía".
Por ello, no existe impedimento legal para que un médico contratado, grado 4, del Servicio Médico
Legal, se desempeñe como fiscal en un sumario administrativo, si el funcionario investigado posee
grado 4 directivo, toda vez que, con arreglo a esta disposición, el fiscal debe tener igual o mayor
grado o jerarquía que el funcionario investigado, careciendo de relevancia para este efecto que el
interesado tenga la calidad de contratado, y el sumariado sea de planta, ya que ambos poseen el mismo
grado 4, debiendo agregarse que, además, no existe inconveniente para que a los funcionarios
contratados asimilados a grado, pueda designárseles investigadores o fiscales en los procesos
disciplinarios (20184/93, 14425/04).
No existe impedimento legal para que a los funcionarios contratados asimilados a grado pueda
designárseles investigadores o fiscales en los procesos disciplinarios (44634/76, 20184/93,
14425/04).
Un funcionario que se desempeña como suplente lo hace con todas las facultades, prerrogativas y
derechos propios del cargo, por lo que entre dichos atributos se haya el de servir funciones de fiscal
en un procedimiento sumarial en que estén comprometidos empleados que sirven plazas de igual
o inferior categoría o grado, más aún si se tiene en consideración que el Estatuto Administrativo no
distingue respecto de la calidad con que el fiscal debe desempeñar ese cargo (8658/73, 15458/96).
No procede designar como fiscal instructor de un sumario administrativo a una persona que se
desempeña en un organismo público en virtud de un contrato a honorarios, porque quien sirve
bajo tal modalidad no posee la calidad de empleado público, sus funciones son accidentales y no
permanentes y además no se rige por el mismo estatuto jurídico que el sumariado (29537/89).
No afecta la legalidad del sumario administrativo el que se hayan formulado cargos a un funcionario
cuando la resolución que lo dispuso ordenaba investigar la responsabilidad administrativa de otro
empleado, porque la competencia del fiscal instructor del sumario no queda limitada a los términos
de la resolución que ordena instruirlo, sino que está facultado para ampliar su actuación a todas las
irregularidades que aparezcan en el curso de la investigación (40308/80, 9262/92, 7626/93).
La Contraloría General carece de atribuciones para revisar la designación del fiscal sumariante, toda
vez que la ley ha confiado privativamente a la Jefatura Superior del Servicio la atribución de calificar
si las circunstancias invocadas para fundar la recusación o implicancia del fiscal son de tal entidad
que determinen su inhabilidad para instruir el sumario (11079/93).
La norma del artículo 67, inciso primero, de la ley 15840, Orgánica del Ministerio de Obras Públicas,
que exceptuaba al personal de la Dirección General de Obras Públicas y sus servicios dependientes
de lo establecido en el artículo 194 del DFL 338, de 1960, en orden a que el fiscal debía tener igual
b mayor grado que el funcionario inculpado, se encuentra derogada, por lo que tales funcionarios,
afectos actualmente a la ley 18834, deben ajustarse a lo que dispone en la materia el artículo 123
(actual artículo 129) de esta última ley (41567/94).
Procede que un funcionario que se encuentra en comisión de servicio en una repartición distinta
de aquella a que pertenece, ejerza legalmente como fiscal de un sumario administrativo, si el Jefe
Superior de esa entidad lo designa mientras dura la comisión (39016/95).
El que el fiscal deba poseer igual o mayor jerarquia que el funcionario que aparezca involucrado en
hechos investigados en un proceso sumarial, tiene por finalidad preservar o garantizar la objetividad
que ha de imperar en todas las actuaciones relacionadas con el desarrollo de su cometido, la que
podria verse afectada por la circunstancia de encontrarse el instructor subordinado al sumariado
(9079/98).
Inciso 2•
Concordancias: Arts 119 a 145 y 9 transitorio del EA; resolución 236, de 1998, de la Contraloria
General de la República; 127 del EAM.
Comentarios:
En el desarrollo del sumario administrativo participan dos funcionarios: el fiscal, que es quien Jo dirige,
y el actuario, que es quien se desempeña como ministro de fe certificando todas las actuaciones que
se llevan a cabo en el sumario.
El fiscal, para ser investido de la calidad de tal, requiere pertenecer a la misma repartición en que
presta servicios el inculpado y tener igual o mayor grado o jerarquía que éste. Estas exigencias que
consulta el artículo 129 del Estatuto Administrativo procuran garantizar la idoneidad del fiscal, su
independencia e imparcialidad.
ARTICULO 130.- La resolución a que se refiere el artículo anterior será Ley 18.834, Art. 124.
notificada al fiscal, quien designará un actuario, el que se entenderá
en comisión de servicio para todos /os efectos legales. El actuario
podrá ser funcionario de cualquier institución de la Administración
del Estado regida por este Estatuto, tendrá la calidad de ministro de
fe y certificará todas /as actuaciones del sumario.
Interpretación:
Inciso 1'
Las investigaciones sumarias instruidas con el objeto de comprobar las causales de término de un
contrato de trabajo de empleados sujetos al Código del Trabajo, no requieren mayores formalidades
y a su respecto no resulta necesaria la designación de un actuario ni proceden las causales de
recusación (23448/94).
Cuando se reabre un sumario administrativo en que un funcionario inculpado fue sobreseído resultando
posteriormente condenado por la justicia del crimen en virtud de una resolución ejecutoriada, procede
nombrar una nueva fiscalía instructora y actuario para que realicen las diligencias destinadas a
constatar esta circunstancia (33667/97).
Inciso 2'
La designación del fiscal ad-hoc se hace para la realización de diligencias del sumario que deban
efectuarse fuera de la ciudad en que se está instruyendo. Resulta improcedente que esta clase de
fiscal sea designado para continuar la sustanciación de un sumario, por cuanto el fiscal titular puede
ser reemplazado sólo por causales de impedimento sobrevinientes, acreditadas fehacientemente
(1 0890/63).
Inciso 3•
Los documentos que componen el expediente en un proceso sumarial deben foliarse en letras y
números (31756/00).
Comentarios:
Los artículos 129, inciso primero, y 130, inciso primero, del Estatuto Administrativo, regulan la
instalación de la fiscalía, lo cual se producirá cuando concurran los siguientes requisitos: que se dicte
por la autoridad competente una resolución designando al fiscal; que éste sea notificado de dicho
acto administrativo, y que acepte el cargo y designe al actuario.
La Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno, con algunas adecuaciones formales, mantuvo los
dos primeros incisos del artículo 130, de acuerdo con la proposición hecha en el texto del Mensaje.
Sin embargo, el inciso tercero es nuevo, y fue incorporado por la Comisión Conjunta para los efectos
de determinar la forma como se debe llevar el sumario administrativo, para lo cual reprodujo el texto
del artículo 197 del DFL 338, de 1960, anterior Estatuto Administrativo.
ARTICULO 131.- Las notificaciones que se realicen en el proceso Ley 18.834, Art. 125.
deberán hacerse personalmente. Si el funcionario no fuere habido
por dos días consecutivos en su domicilio o en su lugar de trabajo,
se lo notificará por carta certificada, de lo cual deberá dejarse
constancia. En ambos casos se deberá entregar copia íntegra de la
resolución respectiva.
Interpretación:
La notificación constituye un trámite esencial del sumario administrativo, que permite al afectado
tomar conocimiento de los hechos que se le imputan y defenderse, por lo que su no cumplimiento
válido vicia de ilegalidad el proceso (1947190, 41363197).
La notificación formal puede entenderse cumplida tácitamente por actuaciones del inculpado que
supongan inequívocamente que tiene conocimiento de los hechos de que se trate, como ocurriría en
el caso del dependiente que, sabiendo de ellos por una vía diferente, hace una presentación de la
que se deduce que ha tenido oportuna noticia de tales hechos (26711190).
Corresponde aplicar el inciso primero del articulo 125 (actual articulo 131) a un funcionario implicado
en un proceso disciplinario que no se encuentra en el país, y si no fuere habido por dos días
consecutivos en su domicilio o lugar de trabajo, se le notificará por carta certificada. Ello es sin
perjuicio de que, además, la fiscalía sumariante, en virtud de las facultades que le asisten, agote
todas las diligencias que sean necesarias para averiguar el domicilio del afectado en el extranjero
para despachar también a ese lugar carta certificada que contenga la comunicación pertinente,
efectuando indagaciones con los familiares de éste, con su representante en la Embajada de Chile
o en el Ministerio de Relaciones Exteriores, para luego despachar carta certificada que contenga la
comunicación respectiva (6448191, 20235104).
La toma de razón de un documento sancionatorio constituye el último trámite del proceso disciplinario
y deja a firme el castigo impuesto a los sumariados, de modo que tanto la notificación de la sanción
como los recursos procedentes en su contra, deben entablarse y resolverse antes de enviar ese
Inciso 1°
Para que sean válidas las notificaciones en el procedimiento disciplinario deben efectuarse
personalmente, levantando un acta de notificación suscrita por el actuario o por un funcionario
autorizado para practicarla y por el notificado, en que se deje constancia, en su caso, de la negativa
de éste a recibir la documentación o a firmar. Si no es posible notificar personalmente al funcionario
procesado, debe hacerse la notificación mediante carta certificada, la que sólo corresponde
despacharla después que se certifique que éste no ha sido habido por dos días consecutivos en su
domicilio o en su lugar de trabajo. El acta de notificación debe incorporarse al expediente, como
constancia de haberse practicado la diligencia, y asimismo, el comprobante que acredite que esa
carta se remitió por correo al domicilio fijado por el sumariado en el proceso o aquél registrado en el
Servicio. La notificación se entenderá perfeccionada una vez cumplidos tres días desde el despacho
de esa carta (23352/93, 28712/01).
Es improcedente notificar cargos formulados al interesado mediante la entrega del acta a una
persona adulta en el domicilio que el inculpado registra en su hoja de vida, porque este precepto
exige que las notificaciones deben hacerse p,ersonalmente, salvo que el funcionario no fuese habido
por dos días consecutivos en su domicilio o en su lugar de trabajo, evento en el cual debe enviarse
carta certificada, ya sea al domicilio fijado por el sumariado en su primera comparecencia o a a-quél
registrado en la institución (13824/91, 5687/00, 28712/01).
La notificación debe acreditarse con la firma del sumariado estampada en el acta respectiva o con
el comprobante que correos otorga al despachar una carta certificada, resultando insuficiente la
constancia que haya estampado el actuario en el expediente, de haber dejado en el lugar de trabajo
del inculpado, en sobre cerrado, la resolución de formulación de cargos (28279/92).
El hecho que en la notificación de la sanción se haya señalado como segundo apellido del sumariado
uno que no corresponde, no reviste la envergadura necesaria como para invalidar tal actuación,
pues conjuntamente con el nombre se utilizó la cédula de identidad, de manera que el notificado se
encontraba suficientemente individualizado como para que hubiera duda en relación con su persona.
Por otra parte, ese error no le impidió ejercer su derecho a defensa según se aprecia de la lectura de
la presentación que efectuó a la Contraloría General (33510/01).
Mientras no conste que se ha notificado legalmente a un inculpado la resolución que afina el sumario
administrativo, cuyo contenido dispone la aplicación de alguna medida disciplinaria en su contra,
no puede hacerse efectiva la responsabilidad pecuniaria en un juicio de cuentas, el que sólo puede
incoarse en el plazo de un año contado desde la notificación personal señalada (37186/94).
No se ajusta a derecho el que la resolución de término que aplica una sanción al concluir un proceso
sumarial, se emita con una fecha anterior a la data de notificación, pues ello significaría no otorgar al
afectado el plazo legal para defenderse (61 08/97, 3555/01, 21614/01 ).
Es improcedente expulsar del Servicio a una funcionaria por no haberse reintegrado a su trabajo al
finalizar un permiso sin goce de remuneraciones, cuya prolongación le fuera denegada, porque el
cargo formulado a la inculpada le fue notificado por carta certificada dirigida al domicilio que tenía
registrado en el Servicio, ubicado en Santiago, en circunstancias que constaba que a esa fecha la
afectada se encontraba radicada en España, donde acompañaba a su marido, becado en ese país.
La necesidad de asegurar a la encausada su derecho a defensa determina que dicha notificación
se realice por carta certificada al domicilio de la misma en dicho país, o de desconocerse éste, se
solicite al Ministerio de Relaciones Exteriores que efectúe tal diligencia a través de Jos funcionarios
del Servicio Exterior destacados en España. Por lo tanto, procede reabrir el proceso administrativo
para notificar válidamente a la inculpada (3772/90).
La notificación de la resolución que rechaza la apelación interpuesta contra una medida disciplinaria
no está contemplada en la ley 18834, resultando en todo caso inoficiosa por cuanto en contra de
aquella decisión no procede recurso alguno (37363/98).
La negativa de una inculpada a firmar el acta de notificación de resoluciones que le daban a conocer
gestiones procesales administrativas, no afectan la legalidad del pertinente sumario administrativo,
pues al establecerse en el expediente tal negativa, constituye certificación suficiente para dar por
realizada y acreditada legalmente la actuación procesal, dado que por emanar de un ministro de fe,
está dotada de presunción de veracidad (38312/98).
El fiscal de un sumario administrativo está facultado para reformular Jos cargos hechos con
anterioridad en el mismo proceso sumarial y, en tal caso, debe cumplir nuevamente con el trámite de
notificación conforme al artículo 125 (actual artículo 131), teniendo el inculpado derecho a presentar
sus descargos del modo como lo establece el artículo 132 (actual artículo 138) de la ley 18834
(33336/01 ).
Inciso z•
Los funcionarios citados a declarar ante el fiscal deben fijar en su primera comparecencia un domicilio
dentro del radio urbano en que la fiscalía ejerza sus funciones y si no se cumpliera esta obligación o
no se informa sobre un nuevo domicilio o se señala uno fuera del perímetro referido, las notificaciones
deben realizarse por carta certificada (15846/91, 16811/97).
La obligación que asiste al inculpado de permanecer dentro del radio urbano en que la fiscalía
instructora ejerce sus funciones investigadoras, concierne sólo al lapso durante el cual se practican
las investigaciones pertinentes, esto es, hasta antes de la emisión de la vista fiscal, con el fin de no
sustraer al implicado de la acción de la fiscalía, permitiéndose así que preste declaraciones y aporte
los antecedentes que se estimen necesarios (12026/94).
y mientras dure su tramitación, de modo que no podría ser alejado de sus funciones en ese lugar por
una medida de destinación, a menos que dicho alejamiento se produzca por aplicación del articulo
215 de ese mismo DFL (articulo 136 del Estatuto Administrativo actual), que prescribe que el Fiscal
podrá ordenar la destinación transitoria a otro cargo dentro de la misma institución y ciudad del
inculpado, la que terminará al dictarse el sobreseimiento o al evacuarse la vista fiscal (27610/75,
12026/94).
Inciso 3•
El plazo de cinco días que establece el articulo 135 (actual articulo 141) de la ley 18834 para
interponer recursos en contra de una sanción administrativa, debe contarse una vez transcurridos los
tres días a que se refiere esta norma, en el evento de efectuarse la notificación por carta certificada
(14923/94).
Comentarios:
La Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno expresó en su Informe que modificó el proyecto
del Ejecutivo para establecer la notificación personal como regla general en los procedimientos
disciplinarios, y sólo si el funcionario requerido no fuere habido en dos días consecutivos en su
domicilio o en su lugar de trabajo, se le notificará por carta certificada.
ARTICULO 132.- Los funcionarios citados a declarar por primera Ley 18.834, Art. 126.
vez ante el fiscal, en calidad de inculpados, serán apercibidos para
que dentro del segundo día formulen las causales de implicancia
o recusación en contra del fiscal o del actuario.
Interpretación:
La omisión de los trámites de apercibimiento para recusar al fiscal o al actuario no revisten el carácter
de actuaciones esenciales que impidan al inculpado defenderse, y por ende, de acuerdo con el
artículo 138 (actual artículo 144) del Estatuto Administrativo, no vician el procedimiento sumarial
(3737199).
Comentarios:
Las implicancias y las recusaciones una vez constatadas y declaradas, hacen que el fiscal o el
actuario con competencia suficiente para intervenir en un proceso disciplinario, deje de tenerla, en
razón de carecer de la imparcialidad necesaria para actuar en él.
ARTICULO 133.- Se considerarán causales de recusación, para los Ley 18.834, An 127
efectos señalados en el artículo anterior, sólo las siguientes:
Interpretación:
Las causas que inhabilitan a un funcionario para desempeñarse como fiscal en un proceso sumarial
son de derecho estricto, por lo que no cabe hacerlas extensivas a otras situaciones que las
contempladas expresamente en las disposiciones legales pertinentes (14835193).
Comentarios:
Las causas de recusación se fijan por ley y su ocurrencia resta imparcialidad a la intervención del
fiscal o del actuario en un sumario administrativo.
ARTICULO 134.- Formulada la recusación, el fiscal o el actuario, Ley 18.834, Art. 128.
según corresponda, dejarán de intervenir, salvo en lo relativo a
actividades que no puedan paralizarse sin comprometer el éxito de
la investigación.
Interpretación:
La Contraloria General carece de atribuciones para revisar la designación o sustitución del fiscal en
un sumario administrativo, toda vez que la ley ha confiado privativamente a la Jefatura Superior de
los Servicios, la atribución de calificar si las circunstancias invocadas por un funcionario para fundar
la recusación o implicancia del fiscal son de tal entidad que determinen su inhabilidad para instruir el
respectivo proceso sumarial (11079193,12856100).
No vicia el procedimiento sumarial si el Jefe de Servicio dicta una resolución que acoge la recusación
del fiscal una vez vencido el término de dos días establecido en esta norma, porque los plazos que
la ley confiere a la Administración para realizar determinados actos o adoptar ciertas medidas no
revisten por lo general el carácter de fatales, sin perjuicio de las responsabilidades en que puedan
incurrir los funcionarios por el retraso en el cumplimiento de sus obligaciones (9471101).
Concordancias: Arts. 62, N' 6, inciso segundo, de la LOCBGAE; 119 a 145 del EA; 132 del EAM.
Comentarios:
Planteada la recusación por los funcionarios que han sido citados a declarar por primera vez, el fiscal
o el actuario deben inmediatamente dejar de intervenir en el sumario, salvo para realizar actuaciones
que por ser esenciales para el éxito de la investigación no puedan paralizarse.
Al respecto, la jurisprudencia administrativa ha declarado, v. gr., en el dictamen 52473, de 1968,
que son válidas las diligencias que continúa realizando un fiscal recusado cuando éstas no puedan
paralizarse sin comprometer el éxito de la investigación.
Además, la solicitud de recusación deberá ser resuelta en el plazo de dos días hábiles siguientes a
su invocación, por el fiscal cuando la causa afecta al actuario, y por la autoridad que ordenó instruir
el sumario administrativo, cuando la causa afecta al fiscal.
En el caso que la causa de recusación sea acogida corresponde designar un nuevo fiscal o
actuario.
Por su parte, las implicancias son las situaciones que hacen valer el propio fiscal o el actuario, y
que a su juicio, les restaría imparcialidad. El Estatuto AdministratÍ~o considera como causas de
implicancia las mismas que establece como causas de recusación y, además, por algún otro hecho
que aquéllos planteen, esto es, "que a su juicio les reste imparcialidad".
A diferencia de las recusaciones, las implicancias no están sujetas a plazo para invocarlas, por lo que
el fiscal o el actuario pueden formularlas en cualquier etapa del proceso administrativo.
Las implicancias se resolverán por la autoridad que ordenó el sumario administrativo en el plazo de
dos días hábiles siguientes a su invocación, en lo relativo al fiscal, y éste respecto de las planteadas
por el actuario. En ambas situaciones, luego de acogida la implicancia se designará un nuevo fiscal
o actuario.
ARTICULO 135.- El fiscal tendrá amplias facultades para realizar Ley 18.834. A;t. 129.
la investigación y los funcionarios estarán obligados a prestar
la colaboración que se les solicite.
Interpretación:
Los plazos relacionados con las actuaciones propias de los procedimientos disciplinarios regulados
por la ley 18834, que venzan el día sábado, deben entenderse necesariamente prorrogados hasta el
primer día hábil siguiente, por ser ese día inhábil (8718191, 12186191).
El artículo 129 (actual artículo 135) se aplica plenamente a las investigaciones sumarias instruidas
por infracción a las disposiciones del decreto ley 799, de 1974, sobre uso y circulación de vehículos
estatales, porque ella es una norma sustantiva de carácter general, destinada al logro del correcto
desarrollo de los procesos disciplinarios, cuya finalidad no es otra que la de permitir que el instructor
recabe todos los antecedentes que sean necesarios para el adecuado desarrollo y término del
cometido (14754100).
Inciso 1'
El fiscal instructor de un proceso sumarial tiene amplias facultades para realizar la investigación
pertinente, de manera que éste puede ordenar todas las diligencias conducentes al esclarecimiento
de los hechos sobre los cuales recae el proceso administrativo (19866191, 11068192, 14754100).
No existe inconveniente alguno para que el fiscal instructor de un sumario administrativo pueda citar
a declarar al Jefe Superior del Servicio, lo cual no inhabilita a dicha autoridad para pronunciarse
posteriormente sobre el mérito del proceso sumarial (58592166).
Los funcionarios están obligados a prestar la colaboración que les solicite el fiscal, y en caso contrario,
procede hacer efectiva la eventual responsabilidad administrativa del o de los infractores mediante
una investigación sumaria (19866191, 4676193).
El fiscal de un sumario administrativo está facultado para reformular los cargos hechos con
anterioridad en el mismo proceso sumarial y, en tal caso, debe cumplir nuevamente con el trámite
de notificación conforme al artículo 125 (actual articulo 131) de la ley 18834, teniendo el inculpado
derecho a presentar sus descargos del modo como lo establece el artículo 132 (actual artículo 138)
de la misma ley (33336101 ).
Inciso 2'
El inciso segundo del artículo 129 (actual artículo 135) consulta dos situaciones diversas: la primera,
es aquella en que agotada la investigación, el fiscal estima que no hay mérito suficiente para
formular cargos, razón por la cual procede derechamente a proponer el sobreseimiento, remitiendo
los antecedentes pertinentes al Jefe Superior del Servicio; y la segunda, se refiere a aquella otra
situación en que el fiscal, luego de haber agotado la investigación, procede a formular los cargos por
estimar que hay mérito para ello (66483/75).
La formulación de los cargos es un trámite obligatorio dentro del sumario administrativo (21815/83).
El Estatuto Administrativo sólo consulta el sobreseimiento definitivo como figura destinada a poner
término a un sumario administrativo, siendo, por lo tanto, improcedente dictar una resolución que
declare el sobreseimiento temporal como causal de suspensión del procedimiento. Por ello, no
corresponde suspender el proceso sumarial para luego reabrirlo, teniendo como fundamento, por
ejemplo, la ausencia del sumariado, toda vez que lo que procede en este caso es solicitar una
prórroga del plazo de la investigación en espera de la comparecencia del afectado o, en su defecto,
declarar su rebeldía y, en último término, correspondería solicitar la designación de un fiscal ad hoc
para realizar las diligencias indagatorias en el lugar donde presta sus servicios. Las diligencias
anotadas constituyen trámites internos del sumario que se encuentran exentos del trámite de toma
de razón ante la Contraloría General (18505/68, 13840/81, 22178/95).
Los plazos que el ordenamiento jurídico fija para que los órganos de la Administración o sus agentes
desarrollen sus cometidos dentro del ámbito de su competencia, como ocurre con las diligencias
relacionadas con un proceso sumarial, no son fatales, por lo que su inobservancia no afecta la
validez del mismo, sin perjuicio de las responsabilidades en que puedan incurrir los funcionarios por
el retraso en el cumplimiento de sus obligaciones (22079/91, 30733/00, 9471/01).
Inciso 3°
Comentarios:
La etapa indagatoria -que debe realizarse en el plazo de veinte días, prorrogables hasta por sesenta
días- termina en el instante que el fiscal declara el cierre del sumario, medida que ordena cuando
estima que se encuentra agotada la investigación.
Declarado el cierre del sumario el fiscal puede, dentro del plazo de tres días, disponer alguna de
las siguientes medidas: primero, proponer al Jefe Superior del Servicio el sobreseimiento del o de
los inculpados, situación que ocurrirá cuando no hay mérito para formular cargo alguno a ningún
funcionario, vale decir, que no ha sido posible acreditar la existencia de hechos constitutivos de
infracciones administrativas o no se ha podido individualizar al o los responsables de esas conductas;
segundo, formular cargos, lo cual tendrá lugar cuando los hechos constitutivos de infracción existan y
se encuentren acreditados, y esté comprobada la participación de uno o más funcionarios.
ARTICULO 136.- En el curso de un sumario administrativo el fiscal Ley 19.653, Art. 5,, 9),
podrá suspender de sus funciones o destinar transitoriamente a otro a}.
cargo dentro de la misma institución y ciudad, al o a Jos inculpados
como medida preventiva.
La medida adoptada terminará al dictarse el sobreseimiento, que será Ley 19.653, Art. so, 9),
notificado personalmente y por escrito por el actuario, o al emitirse el b).
dictamen del fiscal, según corresponda.
En caso de que el fiscal proponga en su dictamen la medida de Ley 18.834, Art. 130.
destitución, podrá decretar que se mantenga la suspensión preventiva
o la destinación transitoria, las que cesarán automáticamente si la
resolución recaída en el sumario, o en alguno de los recursos que se
interponga conforme al articulo 141, absuelve al inculpado o le aplica
una medida disciplinaria distinta de la destitución. Cuando la medida
prorrogada sea la suspensión preventiva, el inculpado quedará
privado del cincuenta por ciento de sus remuneraciones, que tendrá
derecho a percibir retroactivamente si en definitiva fuere absuelto o
se le aplicara una sanción inferior a la destitución.
Interpretación:
Inciso 1°
Las medidas de suspensión de funciones y destinación transitoria a otro cargo dentro de la misma
institución y ciudad, pueden ser dispuestas en cualquier etapa del proceso administrativo por el
fiscal que lleva a cabo su substanciación como una acción preventiva hasta la dictación de la vista
fiscal, sin perjuicio, que en el caso de mantenerse más allá de ella, le corresponderá al dictaminador
disponer su cese (42681/03).
Para considerar a un funcionario como inculpado con el objeto de disponer la suspensión de sus
funciones, no es necesario que el fiscal le haya formulado cargos, ya que el empleado adquiere la
calidad de inculpado desde el momento en que existen presunciones fundadas, precisas y directas,
respecto de su participación en los hechos materia de autos (19532/00).
La suspensión de funciones del inculpado sin goce de sueldo ordenada por el Jefe Superior del
Servicio en un sumario administrativo no se ajusta a derecho, porque no existe ninguna disposición
legal que autorice esa determinación, correspondiendo sólo al fiscal adoptar dicha suspensión
como medida preventiva y sin que este hecho prive al encausado de parte alguna de sus rentas
(16567/93).
Inciso 2°
El fiscal de un sumario administrativo tiene la facultad para poner término anticipado a la suspensión
preventiva dispuesta en el proceso que instruye, mediante la dictación de una resolución expresa y
fundada (11068/92).
La sola notificación de la vista fiscal, sea que ella se practique de manera expresa o que tenga lugar
en forma tácita, produce el término automático de la suspensión preventiva, debiendo el interesado
como consecuencia de ello, y sin necesidad de un nuevo requerimiento, asumir sus funciones
(24391/65, 26711/90).
La suspensión preventiva termina de pleno derecho cuando se evacua la vista fiscal, renaciendo
desde ese instante el derecho del inculpado para ejercer su cargo. La notificación que en este caso
corresponda efectuar al empleado debe referirse al "hecho" de haberse emitido esa vista fiscal,
toda vez que el reintegro del funcionario es sólo una consecuencia del término automático de la
suspensión preventiva, efecto éste que el encausado no puede ignorar en virtud de la presunción
de derecho sobre el conocimiento de la ley que contempla el Código Civil. Si éste no se reintegra
al trabajo, debe practicársele las deducciones de sus remuneraciones que correspondan por el
tiempo no trabajado. La notificación formal aludida puede entenderse tácitamente cumplida por
actuaciones del empleado que supongan inequívocamente que tuvo conocimiento del hecho de
haberse evacuado la vista fiscal, como ocurriría en el caso del dependiente que ha formulado una
presentación por escrito de la que se deduce que ha tenido oportuna noticia del hecho (26711/90).
Inciso 3'
Cuando el fiscal propone en su dictamen la destitución, puede decretar que se mantenga la suspensión
preventiva, caso en el cual el afectado queda privado del 50% de sus remuneraciones, las que tiene
derecho a percibir retroactivamente si se le absuelve o aplica una sanción inferior. La privación de
remuneraciones aludida es una norma sustantiva que reviste claras connotaciones sancionatorias,
puesto que tiene el carácter de una sanción accesoria a la destitución (3858/01 ).
El funcionario que ha sido detenido y encargado reo en un proceso criminal donde ha obtenido su
libertad bajo fianza, debe retornar al ejercicio de su empleo y puede percibir las correspondientes
remuneraciones. Sin embargo, no será admitido en sus funciones, en dos casos: 1) si el fiscal ha
resuelto en un sumario administrativo la suspensión preventiva, de acuerdo con los articulas 212
y 213 del DFL 338, de 1960 -normas cuyo contenido es similar a la del artículo 136 del Estatuto
Administrativo- y 2) en caso de haberse decretado suspensión preventiva por el Tribunal Ordinario, lo
que conlleva la privación del 50% del sueldo por el tiempo que dure la medida. Cuando el funcionario
ha obtenido su libertad bajo fianza, el Jefe Superior del Servicio a que pertenece el afectado tiene
plenas atribuciones para aceptar su reintegro al Servicio y pagarle todas sus remuneraciones, sin
necesidad de autorización o comunicación alguna de otra autoridad (72347/62).
Las inasistencias al trabajo por suspensión administrativa deben reputarse justificadas por fuerza
mayor y confieren derecho a percibir en su totalidad las remuneraciones del cargo (24437/92,
31439/92). (*)
Los funcionarios suspendidos durante un sumario administrativo no tienen derecho al pago de horas
extraordinarias durante ese periodo (13776/95).
Concordancias: Arts. 72, 119 a 145 del EA; 134 del EAM.
Comentarios:
La Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno expresa en su Informe que "acordó recoger en esta
nueva norma el articulo 212 del DFL 338, de 1960, relativa a la facultad del fiscal para suspender de
sus funciones o destinar transitoriamente al o a los inculpados, como medida preventiva para facilitar
la investigación".
Ambas son medidas especiales que puede disponer el fiscal instructor durante el sumario
administrativo.
La suspensión preventiva consiste en alejar temporalmente al inculpado del desempeño del cargo
público con el objeto de asegurar el éxito de la investigación.
La destinación transitoria, en cambio, tiene por objeto desplazar temporalmente al inculpado desde
su empleo habitual a otro cargo dentro de la misma institución y ciudad.
(*) La conclusión a que arriban estos dictámenes debe entenderse referida sólo a la suspensión inicial no
prorrogada, por haber sido emitidos con anterioridad a la vigencia de la ley 19653, cuyo articulo 5, W 9, letras
a) y b), modificó el artículo 130 (actual articulo 136).
Interpretación:
Inciso 1•
El Jefe Superior del Servicio puede sobreseer en un proceso sumarial incoado para determinar la
responsabilidad de funcionarios que se ausentaron injustificadamente de sus labores, aunque dicha
infracción conlleve una sanción disciplinaria específica como es la de destitución, siempre que funde
cabalmente dicha determinación (2017/93).
Debe dictarse sobreseimiento en favor de un inculpado por no haber tenido éste la calidad de
funcionario a la fecha de inicio del sumario administrativo, la que coincidió con aquélla en que
expirara en funciones (18791/94).
Inciso 2•
El inciso segundo del artículo 137 del Estatuto Administrativo, norma legal de carácter simple u
ordinario, en cuanto establece que "el sumario será secreto hasta la fecha de formulación de los
cargos,", ha mantenido su vigencia con posterioridad a la ley 20050, de Reforma Constitucional, que
incorporó a la Constitución Política un artículo 8, cuyo inciso segundo previene que sólo mediante
una ley de quórum calificado se podrá establecer la reserva o secreto de los actos y resoluciones
de los órganos del Estado, así como sus fundamentos y los procedimientos que utilicen, rango que,
como se indicó, no posee el referido precepto estatutario. Ello tiene como principal fundamento la
disposición cuarta transitoria de la Carta Fundamental, que al referirse a "las leyes actualmente en
vigor", entiende cumplidos los requisitos de las leyes de quórum calificado, tanto a las leyes simples
en vigor con anterioridad al 11 de marzo de 1981, fecha de entrada en vigencia de la Ley Suprema,
según lo dispuso el artículo final del decreto ley 3464, de 1980, como a las que se dictaron con
posterioridad, como es el caso del artículo 137 del Estatuto Administrativo (48302/07, 17866/08).
Si bien de acuerdo con el articulo 13, inciso segundo, de la ley 18575, la función pública debe
ser ejercida con transparencia, permitiendo y promoviendo el conocimiento de los procedimientos,.
contenidos y fundamento de las decisiones adoptadas en su ejercicio, tal norma debe interpretarse
armónicamente en conformidad con los artículos 131 (actual artículo 137) de la ley 18834 y 135 de
la ley 18883, al tenor de los cuales el sumario será secreto hasta la fecha de formulación de cargos,
oportunidad en que dejará de serlo para el inculpado y el abogado que asuma su defensa. En otras
palabras, los sumarios son secretos durante la etapa indagatoria, y reservados, en el lapso que
media entre la formulación de los cargos y la fecha en que el proceso queda concluido, período
este último en que sólo pueden tener acceso al sumario las personas indicadas, en tanto que, una
vez afinados, están sometidos al principio de publicidad. En este contexto, el secreto del proceso
sumarial tiene por objeto asegurar el éxito de la investigación, el resguardo del debido proceso, la
honra y respeto a la vida pública de los funcionarios que, eventualmente, podrían tener comprometida
su responsabilidad en los hechos investigados, dado que las conclusiones a que se llegue en dicho
proceso sólo quedan a firme una vez que éste quede totalmente tramitado. Lo contrario, significaría
aceptar la pertinencia de un prejuzgamiento, cuando aún se encuentren pendientes instancias
procesales y resoluciones por parte de la autoridad administrativa. Además, podría hacerse pública
una sanción diferente de la que en definitiva se aplique o informar sobre una medida disciplinaria
propuesta que no llegue a imponerse, al ser sobreseído o absuelto el funcionario, lo que constituiría
una ilegalidad y una arbitrariedad acorde con el artículo 19 Ws. 2, 3 y 4 de la Constitución Política
de la República. Por ello, conforme a dichas normas estatutarias el sumario deja de ser secreto
después de la formulación de cargos, pero sólo respecto del inculpado y su abogado, de modo que
los funcionarios que, pese a ese mandato expreso, dan a conocer los antecedentes sumariales
a terceros, transgreden la normativa vigente y contravienen sus deberes laborales, debiendo ser
investigados y sancionados disciplinariamente (14807/04).
La etapa indagatoria de los sumarios administrativos termina en el momento en que se formulan los
cargos a los funcionarios inculpados y, desde ese instante, aquéllos podrán tomar conocimiento del
mismo, ya sea personalmente o a través del letrado que asuma su defensa, pudiendo requerir las
copias de la pieza sumarial sin objeción alguna por parte de la autoridad administrativa. Lo anterior
tiene por objeto permitir a los afectados una plena defensa, de acuerdo con el principio de legalidad
del juzga miento, consagrado en el artículo 19, W 3, incisos cuarto y quinto, de la Constitución Política,
que garantiza a todas las personas la existencia de normas justas y racionales en la substanciación
de la investigación de que sean objeto, de tal forma que la resolución sancionadora que dicte la
autoridad, sea consecuencia de un proceso que se fundamenta en dicha garantía constitucional.
Por ello, sólo procede proporcionar a los inculpados copias de las piezas o documentos de los
sumarios que, para los efectos de garantizar el pleno ejercicio de su derecho a defensa jurídica,
aquéllos soliciten, siempre que se hayan formulado cargos y, por tanto, se encuentre cerrada la
etapa indagatoria, ya que desde ese instante los respectivos procesos han perdido el carácter de
secretos (17866/08).
El carácter secreto otorgado por la ley a los sumarios administrativos, incluidos los incoados por
la Contraloría General, solamente rige mientras dura la etapa indagatoria, y la publicidad de los
mismos que está restringida al inculpado y a su abogado se extiende únicamente entre la formulación
de cargos y la fecha en que el proceso queda concluido. Por lo tanto, a partir de esta última data,
vuelve a ser aplicable el principio de la publicidad de los actos administrativos, que se encontraba
suspendido excepcionalmente por mandato del inciso segundo del artículo 131 (actual artículo 137),
y que permite tomar conocimiento de los expedientes respectivos a cualquier persona que tenga
interés. No obstante, esta publicidad está sujeta a las limitaciones a que alude el artículo 11 bis (actual
artículo 13) de la ley 18575, pudiendo en todo caso los interesados recurrir a la Justicia Ordinaria, en
conformidad con el artículo 11 ter (actual artículo 14) de este mismo texto legal (3965/94, 20680/94,
23596/95, 15356/97,42779/00, 17466/01).
De acuerdo con el artículo 13 de la ley 18575, en armonía con el artículo 8 de la Constitución Política,
en la parte que interesa, son públicos los actos administrativos de los órganos de la Administración
del Estado y los documentos que les sirvan de sustento o complemento directo y esencial, precisando
además que la función pública debe ser ejercida con transparencia, permitiendo y promoviendo el
conocimiento de los procedimientos, contenidos y fundamentos de las decisiones adoptadas en su
ejercicio. Luego, una vez que los procesos disciplinarios se encuentran totalmente tramitados, a los
documentos que les sirvan de sustento les resulta aplicable el principio de publicidad a que se refiere
la normativa antes mencionada, siendo procedente otorgar copia de los mismos a los interesados
(17866/08).
El inciso segundo del artículo 131 (actual artículo 137) de la ley 18834, dispone que el sumario
administrativo será secreto hasta la fecha de formulación de cargos, oportunidad en la cual dejará de
serlo para el inculpado y para "el abogado que asumiere su defensa", por lo que no cabe la aplicación
supletoria de la ley 19880, específicamente en cuanto a sus artículos 1, 1O y 22, ya que la materia
de que se trata, esto es, la defensa de los inculpados en un procedimiento disciplinario por parte
de terceros, se encuentra regulada en el referido artículo 131 (actual artículo 137), conforme al cual
aquélla puede ser asumida por un abogado (1896/05).
Debe proporcionarse a los inculpados y a sus abogados, a sus expensas, copia de las piezas del
sumario administrativo instruido en su contra después de finalizada la etapa indagatoria secreta, con
el objeto de que puedan ejercer integralmente su derecho a defensa consagrado en la Constitución
Política (40714/99, 10792/00, 18108/02, 55799/06).
Concordancias: Arts. 8 de la CP de laR; 13 de la LOCBGAE; 61, letra h), 119 a 145 del EA; Art.
135 del EAM; 21, 22 y 1o transitorio de la ley 20285, sobre Acceso a la Información Pública, cuyo
artículo primero aprobó la Ley de Transparencia de la Función Pública y de Acceso a la Información
de la Administración del Estado. El artículo transitorio de la ley 20285 dispone que este texto legal
entrará en vigencia ocho meses después de su publicación en el Diario Oficial, hecho que aconteció
el 20 de agosto de 2008.
Comentarios:
La etapa acusatoria en el sumario administrativo es el período que sigue al cierre del sumario, el cual
termina con la emisión del informe o dictamen del fiscal.
En dicho informe el fiscal puede recomendar el sobreseimiento, en cuyo caso elevará los antecedentes
al Jefe Superior de la institución, al Secretario Regional Ministerial o al Director Regional de servicios
nacionales desconcentrados, en su caso, quienes están facultados para aprobar o rechazar tal
proposición.
En otro orden de ideas, con respecto al inciso segundo del artículo 137 del Estatuto Administrativo,
en cuanto declara que "el sumario será secreto ... ", es interesante destacar la doctrina que fluye de
los dictámenes 48302, de 2007 y 17866, de 2008. Al respecto, los mencionados pronunciamientos
expresan que las normas legales que establecen que determinados actos administrativos son secretos
o reservados, dictadas entre el11 de marzo de 1981 y el 26 de agosto de 2005, fecha de vigencia
de la ley 20050, que reformó la Constitución Política, no han sido derogadas por el artículo 8 de la
Carta Fundamental y se les aplica la disposición cuarta transitoria, según la cual "se entenderá que
las leyes actualmente en vigor sobre materias que conforme a esta Constitución deben ser objeto
de leyes orgánicas constitucionales o aprobadas con quórum calificado, cumplen estos requisitos
y seguirán aplicándose en lo que no sean contrarias a la Constitución, mientras no se dicten los
correspondientes cuerpos legales". La citada disposición cuarta transitoria procura solucionar los
conflictos que se pueden suscitar al interior del ordenamiento jurídico por la introducción de estas
nuevas categorías normativas, creadas por el constituyente de 1980, respecto de materias que hasta
entonces eran reguladas por leyes simples. La necesidad de resolver estos problemas se plantea
no sólo al tiempo del texto original de la Constitución, sino que surge igualmente en los casos en
que nuevas materias son reservadas a ese tipo de leyes, como ocurre con las que se refieren al
secreto o reserva. Condicionar la vigencia de las normas legales que establecen secreto o reserva,
anteriores al 26 de agosto de 2005, al cumplimiento de los requisitos de una ley de quórum calificado,
importaría someterlas a exigencias que no eran aplicables en ese periodo, lo que no es razonable.
El criterio que restringe el alcance de la disposición cuarta transitoria sólo a las leyes vigentes
con anterioridad al 11 de marzo de 1981, desconocería la realidad del proceso de elaboración
de normas -constitucionales o legales-, el cual es esencialmente dinámico y cambiante, y que, por
ende, no podría entenderse paralizado a esa fecha.
ARTICULO 138.- El inculpado será notificado de los cargos y tendrá Ley 18.834, Art. 132.
un plazo de cinco dias contado desde la fecha de notificación de éstos
para presentar descargos, defensas y solicitar o presentar pruebas.
En casos debidamente calificados, podrá prorrogarse el mismo por
otros cinco días, siempre que la prórroga haya sido solicitada antes
del vencimiento del plazo.
Interpretación:
Inciso 1°
La notificación de los cargos debe acreditarse con la firma del sumariado, estampada en el acta
respectiva, o con el comprobante que la Empresa de Correos otorga al despachar una carta
certificada, resultando insuficiente la constancia estampada por el actuario en el expediente, de
haber dejado en el lugar de trabajo del inculpado, en sobre cerrado, la resolución de formulación de
cargos (28279192).
El fiscal de un sumario administrativo está facultado para reformular los cargos hechos con
anterioridad en el mismo proceso sumarial y, en tal caso, debe cumplir nuevamente con el trámite
de notificación conforme al articulo 125 (actual articulo 131) de la ley 18834, teniendo el inculpado
derecho a presentar sus descargos del modo como lo establece el articulo 132 (actual articulo 138)
(33336101 ).
Inciso 2°
las pruebas que estime procedente. Lo expresado requiere de una actuación formal en el proceso
que otorgue certeza al inculpado respecto de la data desde la cual se cuenta el plazo concedido por
el fiscal (55290/06).
Para que la resolución que otorga el término probatorio produzca efecto, es necesario que el
inculpado sea notificado de tal hecho, ya sea personalmente o por carta certificada, de acuerdo con
lo preceptuado en el inciso primero del articulo 131 de este Estatuto. Ello armoniza con lo prescrito
en el artículo 45 de la ley W 19880, sobre Bases de los Procedimientos Administrativos, conforme
al cual los actos administrativos de efectos individuales deben ser notificados a los interesados. De
acuerdo con el artículo 144 de la ley W 18834, la falta de notificación de la resolución que dispone
un término probatorio, afecta la legalidad de la sanción disciplinaria que a aquél se haya aplicado,
sólo en la medida que ello hubiere implicado que no tuvo conocimiento de la referida resolución y, en
consecuencia, se vio privado del derecho a rendir sus probanzas (55290/06).
La circunstancia de no dar lugar a las diligencias probatorias pedidas por el inculpado, importa
dejarlo en la indefensión, lo cual contraviene el principio del debido proceso establecido en el artículo
19, W 3, inciso quinto, de la Constitución Política (37683/95, 15297/99).
Solamente es imperativo para el fiscal sumariante recibir la prueba que el inculpado ofrece rendir,
de modo que esa obligación no le afecta si aquél se limita a pedir que se ordenen determinadas
diligencias (17769/94, 10561/03).
Para que las presunciones constituyan medios de prueba idóneos, ellas deben ser fundadas,
múltiples, precisas, directas, graves y concordantes (44826/00, 41708/04).
Comentarios:
También en el dictamen o informe del fiscal se pueden formular cargos cuando concurran dos requisitos
copulativos: 1) que los hechos constitutivos de las infracciones administrativas investigadas existan y
se encuentren acreditados, y 2) que esté comprobada la participación del o de los inculpados.
Los cargos deben ser notificados a los encausados, trámite que es considerado esencial por el
Estatuto Administrativo al establecer su artículo 140, inciso tercero, que ningún funcionario puede ser
sancionado por hechos que no han sido materia de cargos.
(")El decreto 873, de 1990, del Ministerio de Relaciones Exteriores, Promulga la Convención Americana sobre
Derechos Humanos denominada "Pacto de Sari José de Costa Rica", suscrito en San José, Costa Rica, el 22
de noviembre de 1969, cuyo artículo 8, W 1, establece que "Toda persona tiene derecho a ser oída con las
debidas garantias y dentro de un plazo razonable, por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial,
establecido con anterioridad por la ley, en la sustanciación de cualquier acusación penal formulada contra
ella, o para la determinación de sus derechos y obligaciones de orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro
carácter''.
El inculpado tiene un plazo de cinco dias contado desde la notificación de los cargos para formular
descargos, defensas y solicitar o presentar pruebas. Dicho plazo puede prorrogarse por otros
cinco días, en casos debidamente calificados, siempre que la prórroga haya sido pedida antes del
vencimiento del plazo.
Los descargos deben contener la defensa del inculpado y las pruebas que la justifiquen, pudiendo
solicitar rendir prueba, para cuyo efecto el fiscal señalará un plazo que no podrá exceder en total de
veinte días.
ARTICULO 139.- Contestados los cargos o vencido el plazo Ley 18.834, Art. 133.
del período de prueba el fiscal emitirá, dentro de cinco días, un
dictamen en el cual propondrá la absolución o sanción que a su
juicio corresponda aplicar.
Interpretación:
Inciso 1•
No existe norma alguna que establezca la obligación de entregar al sumariado copia del informe
emitido por el fiscal instructor de un sumario administrativo (13346190).
Vencido el plazo que concede la ley al inculpado para contestar los cargos, el fiscal se encuentra
en condiciones de proponer en su vista fiscal, una medida disciplinaria al Jefe Superior del Servicio
(16313191, 19986191).
El dictamen del fiscal es solamente una proposición que no resulta vinculante para la autoridad, en
quien se encuentra radicada la potestad sancionadora, la que puede resolver conforme lo estime,
sobre la base de criterios de racionalidad, en consideración al mérito de los antecedentes que se
acompañen (39447194, 13338100).
Inciso 2•
No se ajusta a derecho vista fiscal que carece de fundamentos concretos y comprobables que
permitan acreditar de modo indubitable la participación y grado de culpabilidad del afectado en los
hechos investigados en un sumario administrativo, y que sólo se apoya en presunciones generales .
no respaldadas por antecedentes precisos y determinados conforme al mérito del proceso (13935194,
10899199).
Inciso 3°
En los procesos sumariales si los hechos investigados pudieran revestir caracteres de delito, debe
formalizarse la respectiva denuncia a la Justicia Ordinaria, sin perjuicio de otras diligencias de
carácter técnico que la autoridad ordene con el objeto de recabar antecedentes especializados que
digan relación con la materia de la investigación (6241193).
En conformidad con lo dispuesto en los articulas 84, W 3, del Código de Procedimiento Penal, 55
(actual articulo 61 ), letra k), y 133 (actual articulo 139), inciso tercero, del Estatuto Administrativo,
los funcionarios públicos tienen la obligación de denunciar a la Justicia Ordinaria (actualmente al
Ministerio Público o a la Policía, en su caso), en la oportunidad debida, los crímenes o simples
delitos de que tomen conocimiento en el ejercicio de sus funciones o con ocasión de la instrucción
de un sumario o de una investigación. En consecuencia, si el fiscal instructor estima que los hechos
que investiga pueden configurar un delito debe proceder de inmediato a formular la correspondiente
denuncia ante el Tribunal competente, salvo que le constare que ya ha sido hecha por otro funcionario
o autoridad administrativa, caso en el cual debe e'ntenderse que ha cesado su obligación por haberse
cumplido la finalidad perseguida en los preceptos legales citados. En tal evento, y para salvar su
responsabilidad, sólo procederá que el fiscal deje constancia en los antecedentes sumariales de no
haber hecho la denuncia precisamente en atención a haber sido ya formulada con anterioridad. Lo
expuesto no obsta al cumplimiento por parte del fiscal de las demás exigencias que establece el
referido inciso tercero del articulo 133 (actual articulo 139) de dicho Estatuto (36324/69, 48988171).
Corresponde a la superioridad del respectivo servicio arbitrar las medidas conducentes a poner en
conocimiento del Ministerio Público aquellos hechos irregulares que conozca en el ejercicio de sus
funciones y que revistan caracteres de delitos, de acuerdo a la obligación impuesta en el articulo 61,
letra k), del Estatuto Administrativo. Lo anterior es sin perjuicio de lo dispuesto en el inciso tercero
del articulo 139 del mismo Estatuto, conforme al cual, cuando los hechos investigados y acreditados
en un sumario administrativo pudieren importar la perpetración de delitos, el informe o vista fiscal
deberá contener, también, la petición de que se remitan los antecedentes a la justicia ordinaria
(48033/05, 1748/07).
Concordancias:Arts. 61, letra k), 119a 145 del EA; 84, W3, del CPP; 137 del EAM.
Comentarios:
La Comisión Conjunta de la Jun!a de Gobierno expresa en su Informe que se reemplazaron en
el inciso primero del texto propuesto· por el Mensaje, los términos "vista o informe" por "dictamen"
y "sobreseimiento" por "absolución", en razón de que estos últimos son más apropiados para los
efectos perseguidos por la norma.
Agrega que los incisos segundo y tercero de esta disposición son nuevos. Al respecto señala
que se consideró necesario recoger los preceptos del articulo 221 del DFL 338, de 1960, a fin de
complementar los aspectos que debe contener el dictamen y de establecer la obligación que éste
incluya la petición de remitir los antecedentes a la Justicia Ordinaria, cuando se haya estimado que
los hechos investigados pudieren importar la perpetración de delitos.
El dictamen es un informe que elabora el fiscal, el cual debe contener de manera resumida, a lo
menos, la individualización del o de los inculpados; la relación de los hechos investigados y la forma
como se ha llegado a comprobarlos; la participación y el grado de responsabilidad que les hubiere
correspondido a los sumariados; la ponderación de las circunstancias agravantes o atenuantes
en relación con la conducta de los presuntos culpables, y la proposición especifica a la autoridad
competente de las sanciones que estimare procedente aplicar o de la absolución de uno o más de
los inculpados.
El fiscal dispone de cinco di as para confeccionar el dictamen, plazo que se cuenta dependiendo de
la actitud que frente a la formulación de los cargos adopte el sumariado. En efecto, si éste formula
descargos, dicho término se cuenta desde que éstos se reciben. Si el inculpado se defiende y
además pide diligencias probatorias, el mencionado plazo corre desde el vencimiento del respectivo
periodo de prueba. En el evento que el encausado no formule descargos el referido lapso rige desde
la fecha en que expira el término para efectuar este trámite.
ARTICULO 140.- Emitido el dictamen, el fiscal elevará Jos antecedentes Ley 18.834. Art. 134.
del sumario al jefe superior de la institución, el Secretario
Regional Ministerial o e/ Director Regional de servicios nacionales
desconcentrados, según el caso, quien resolverá en el plazo de
cinco días, dictando al efecto una resolución en la cual absolverá al
inculpado o aplicará la medida disciplinaria, en su caso. Tratándose de
la medida de destitución, los antecedentes se elevarán a la autoridad
facultada para hacer el nombramiento.
Ningún funcionario podrá ser sancionado por hechos que no han sido
materia de cargos.
Interpretación:
Inciso 1•
No configura vicio de procedimiento con carácter de esencial que pueda invalidar el proceso sumarial,
el hecho que el fiscal instructor haya remitido el expediente sumarial, luego de evacuado su informe
o vista fiscal, a una autoridad distinta de su jefe inmediato, toda vez que es en el Jefe Superior del
Servicio en quien se radica la facultad de aplicar sanciones (9633/83).
De acuerdo con los artículos 120, 123 y 134 (actuales artículos 126, 129 y 140) de la ley 18834,
la facultad de disponer la instrucción de investigaciones sumarias y sumarios administrativos, y
la de aplicar las respectivas medidas disciplinarias, radica directamente en el Jefe Superior de la
institución, el Secretario Regional Ministerial y en los Directores Regionales de los servicios nacionales
desconcentrados. Con respecto a la autoridad competente en un servicio desconcentrado para
aplicar la sanción a un funcionario sujeto a sumario administrativo, cuando a la fecha de término del
proceso el empleado se encuentra desempeñando sus funciones en una región distinta de aquella
donde ocurrieron los hechos y se instruyó el proceso sumarial, es menester revisar si ha existido
interrupción de funcione~ entre ambos desempeños. Al respecto, la jurisprudencia administrativa ha
sostenido que en la medida que el empleado mantenga la calidad de funcionario público sin solución
de continuidad o interrupción de funciones, debe ser castigado disciplinariamente, no obstante
encontrarse sirviendo en otra plaza de ese mismo Servicio o en un organismo distinto de aquel en
que cometió las conductas reprochables, y aun cuando en su nuevo empleo se encuentre afecto a
un estatuto jurídico diferente, agregando la misma jurisprudencia que corresponde a la autoridad
del Servicio en que se instruyó el proceso determinar en definitiva la medida disciplinaria que debe
imponerse al encausado, materializandose el castigo mediante una resolución de la autoridad de
la entidad en la que actualmente se desempeña, no pudiendo ésta modificar lo resuelto por el
organismo en que se cometió la infracción que se sanciona (467/64, 34568/90, 24271/92, 2023/03,
58346/04).
Es incompetente para aplicar medidas disciplinarias la autoridad que delegó las facultades de instruir
sumarios y de aplicar las correspondientes sanciones al personal de su dependencia, porque de
acuerdo con el articulo 43 (actual articulo 41), letra e), de la ley 18575, el delegante no podra ejercer
la competencia delegada sin que previamente revoque la delegación dispuesta (13734/99).
La medida disciplinaria debe ser impuesta por la autoridad competente, y si ello no ocurre, la
resolución que la aplica no puede sanearse mediante la convalidación posterior de la autoridad con
potestad disciplinaria, por cuanto se trata del acto terminal de un sumario administrativo, que exige
ser emitido necesariamente con arreglo a la ley (17790/90).
De acuerdo con el articulo 1, N" 12, de la Resolución 55, de 1992, de la Contraloria General (actual
articulo 1, N" 11, de la Resolución 520, de 1996, de ese mismo origen, que fijó el texto refundido,
coordinado y sistematizado de dicha Resolución 55, que establece normas sobre exención del
trámite de toma de razón), las resoluciones que, aplican medidas disciplina'rias así como las que
disponen un sobreseimiento o absolución en sumarios administrativos e investigaciones sumarias,
deben remitirse al referido Organismo Contralor para su toma de razón (9883/94).
Cuando las autoridades administrativas imponen medidas disciplinarias por delegación de funciones
del Jefe Superior del Servicio, debe entenderse que tales sanciones constituyen la decisión de esta
última Jefatura, siendo improcedente el recurso de apelación ante éste, por cuanto ello obstaría
a la doble instancia consagrada en el artículo 135 (actual artículo 141). En efecto, al suscribir
los delegados los documentos que las aplican están representando a la autoridad máxima de la
Institución, lo cual significa que quien las impone es dicha autoridad, a través de aquél .(2629/92,
41385/94).
Atendido que los sumarios e investigaciones sumarias son procesos reglados, en ellos no caben
otros recursos que los contemplados en la normativa que regula tales procedimientos administrativos
y, por ende, no corresponde que la Contraloria General se pronuncie acerca de su legalidad, sino
hasta el momento de la toma de razón del respectivo acto administrativo que los afina, oportunidad
en la que se podrá considerar, como un antecedente más, las eventuales alegaciones que los
afectados efectúen ante el Organismo Fiscalizador (4207/04, 63086/04). Sin embargo, tratándose
de la prescripción de la acción disciplinaria, no corresponde que el Organismo Contralor al efectuar
el examen preventivo de legalidad de una resolución sancionatoria, declare de oficio o se pronuncie
acerca de esa causal de extinción de la responsabilidad administrativa, si ésta no ha sido alegada
por el interesado, criterio que necesariamente debe ser complementado, en el sentido que si bien
el ordenamiento jurídico no ha establecido un plazo para hacer valer la prescripción por la que
se consulta, ella sólo puede ser alegada dentro del respectivo procedimiento disciplinario, hasta
antes de que éste quede afinado. Luego, la Contraloria General no puede, durante la toma de
razón de un documento que aplica una sanción disciplinaria, declarar la prescripción de la respectiva
acción disciplinaria si ésta sólo ha sido alegada una vez que el sumario o investigación ha concluido
mediante resolución de término (38353/02, 5921/06).
La autoridad administrativa facultada para aplicar una medida disciplinaria al Director del Servicio
de Vivienda y Urbanismo es el Presidente de la República, porque aun cuando tiene el carácter
de autónomo respecto del poder central, en el Primer Mandatario reside la plenitud de la potestad
sancionadora y los Jefes Superiores de los Servicios de Vivienda y Urbanización poseen la calidad
de exclusiva confianza del Jefe del Estado (21651/96).
sino por el Ministro, porque este último es la autoridad facultada para hacer el nombramiento
(39092/97).
Si se han formulado cargos en el procedimiento sumarial, el Jefe Superior del Servicio debe absolver,
pero no sobreseer, en el caso que estime que los hechos investigados no son constitutivos de
infracciones administrativas (1182/08).
No resulta procedente que la autoridad administrativa haya dispuesto la aplicación de una medida
disciplinaria en contra de una persona fallecida, correspondiendo, en cambio, su absolución, en
conformidad con lo dispuesto en el articulo 157, letra a), de la ley 18834 (10431/08).
Inciso 2°
Es improcedente que una vez cerrado el sumario, formulados los cargos y recepcionados los
descargos, se realicen nuevas diligencias. Con todo, en caso que ello se estime necesario, deben
ordenarse por la autoridad correspondiente en la oportunidad señalada en este inciso (24671/91).
La reapertura de un sumario administrativo que se encuentra afinado sólo procede por excepción
cuando se acredita que al momento de aplicarse el castigo disciplinario se incurrió en un error
esencial, o bien, cuando se aleguen hechos nuevos no ponderados en el curso del proceso y de tal
entidad que alterarían sustancialmente el criterio sancionador aplicado por la autoridad (56047/63,
94569/65, 11025/90, 2375/04).
Un sumario administrativo que se encuentra afinado sólo puede reabrirse: a) cuando se acredita
fehacientemente que en él se incurrió en un error de hecho esencial al momento de aplicarse la
sanción, b) cuando se alegan, fundadamente, nuevos antecedentes que de haber sido conocidos
en su oportunidad pudieron haber hecho variar la medida disciplinaria aplicada, como consecuencia
de los hechos investigados, y e) cuando se comprueba la comisión de ilegalidades que afectan la
validez de lo actuado en ese sumario. Todos estos antecedentes deben ser ponderados por la
autoridad competente, la que determinará si tienen o no mérito suficiente para reabrir el sumario
(2190/95, 20697/97, 24320/99).
La autoridad administrativa debe ordenar la reapertura del proceso sumarial, con el objeto de que se
solicite a la Comisión Médica respectiva un dictamen que determine si a la época de la comisión de
Sólo compete a la autoridad superior que aplicó la medida disciplinaria, dar lugar a la reapertura de
un proceso sumarial ya afinado, siempre que se eleve ante ella una petición en tal sentido, lo cual
procede por excepción cuando se acredita que al momento de aplicarse la sanción se incurrió en un
error de hecho esencial, o cuando se aporten antecedentes que acrediten la existencia de hechos
nuevos, no conocidos ni ponderados durante la investigación y que sean de tal entidad que alteren
sustancialmente lo resuelto por la autoridad sancionadora (2375/04, 62862/04).
La medida disciplinaria impuesta a un servidor público no puede ser modificada una vez tomado razón
el acto administrativo que la materializa, a menos que, previa reapertura del correspondiente proceso
sumarial, se acredite en forma inequívoca que al momento de emitirse dicho documento se incurrió
en un vicio de legalidad, o bien, que existen hechos nuevos, no conocidos en el curso del proceso, y
cuya magnitud es tal que permiten alterar sustancialmente lo resuelto por la autoridad sancionadora
(2098/02, 12961/04). Aceptar un criterio diverso, implicaría alterar el principio de permanencia de las
decisiones que aplican medidas disciplinarias, pues se estaría permitiendo que ellas sean modificadas
no por existir vicios de legalidad que afecten la decisión adoptada o por acreditarse fehacientemente la
concurrencia de antecedentes sustanciales con influencia determinante cuya existencia se ignoraba,
sino por el procedimiento de efectuar una nueva ponderación de los hechos con un criterio distinto o
por razones de mérito (35242/76, 29710/80, 20598/83, 28737/86, 2098/02).
Inciso 3°
Los cargos deben formularse por escrito al inculpado, notificándosele personalmente o por carta
certificada, conforme al procedimiento consultado en el artículo 125 (actual artículo 131) de la ley
18834 (21633/91 ).
Los cargos deben formularse en forma concreta, precisando específicamente los hechos constitutivos
de la infracción, no siendo posible la imputación al inculpado de conductas genéricas o imprecisas, de
modo que impidan a éste asumir adecuadamente su defensa. Por ejemplo, el cargo único imputado
a una funcionaria consistente en "abandono de funciones sin justificación" resulta amplio y ambiguo,
por cuanto no señala el periodo a que sé refiere dicha ausencia ni las infracciones en que se habría
incurrido, lo que entraba el ejercicio del legitimo derecho de defensa de la inculpada (32274/89,
18463/92,5699/95,616/96,37472/98, 19690/00,31756/00, 5446/06,26917/06, 51678/06).
El documento que formula cargos contiene aseveraciones contradictorias cuando, por una parte,
indica que existen presunciones de culpabilidad en contra del afectado, y por otra, lo exculpa por
la falta de testigos en relación con dicha presunciones y establece que no existe responsabilidad
administrativa. Esto último es improcedente para determinar dicha responsabilidad, ya que
no es necesaria una declaración testimonial de inculpación directa para ello, cuando hay bases
suficientes para estimar la existencia de presunciones fundadas relativas a los hechos investigados
(31756/00).
La formulación de los cargos es un trámite obligatorio conforme al artículo 134 (actual artículo
140), inciso tercero, del Estatuto Administrativo, cuando a juicio del fiscal le asiste responsabilidad
administrativa a algún funcionario sobre los hechos investigados (21815/83, 13572/00).
al suponer un prejuzgamiento de éste. El fiscal sólo puede proponer la medida disciplinaria al Jefe
Superior del Servicio una vez que el afectado haya contestado los cargos o haya vencido el plazo
que se le otorga para ello (16313/91, 17063/01, 752/02).
Una vez agotado el periodo indagatorio o de investigación, el fiscal debe representar al inculpado las
eventuales faltas en que incurriera, a través de la formulación de los cargos respectivos, los cuales
le deben ser notificados. Si se omiten estos trámites se vulneraria el legitimo ejercicio del derecho a
defensa que asiste al afectado (26714/90).
Es improcedente que se formule como cargo al afectado la imputación del delito de sustracción
de dinero o la transgresión de determinados artículos del Estatuto Administrativo, menciones que
por su imprecisión no reúnen las características ya anotadas, porque los cargos deben referirse a
hechos concretos y verificados que impliquen infracción de deberes funcionarios, no obstante que
puedan constituir conductas delictivas (29537/89, 5850/96).
Ningún funcionario puede ser sancionado por hechos que no han sido materia de cargos, los que
deben formularse en la etapa procesal pertinente, esto es, antes del cierre del proceso (23461/91,
10489/93).
En un proceso disciplinario los cargos deben indicarse en forma concreta, explicitando claramente la
actuación anómala o los hechos constitutivos de la o las transgresiones en que ha incurrido el afectado,
no siendo posible la imputación de conductas precisas o genéricas, pues ello vulnera lo ordenado
por el articulo 134 (actual articulo 140) inciso tercero de la ley 18834, además de impedir al inculpado
asumir adecuadamente su defensa. La improcedencia destacada, dificulta, a su vez, advertir cuáles
son las conductas debidamente probadas y graves cometidas por el sumariado que ameritan, a la
luz de la preceptiva que regula la materia, disponer en su contra alguna medida disciplinaria, vale
decir, no resulta posible determinar con claridad cuál es la causa legal que fundamenta la aplicación
de la sanción (7704/05, 5446/06).
Inciso 4•
La notificación es un acto de comunicación a una persona de un hecho que le afecta, es decir, una
forma de poner en conocimiento del interesado el evento que le concierne, la que se encontrará
afinada, precisamente, cuando el afectado toma dicho conocimiento. Por regla general, la notificación
de los actos de la Administración debe efectuarse en forma personal y si ello no es posible, puede
notificarse por carta certificada. No obstante, también se reconoce validez a la notificación tácita,
la que se produce en los casos en que, sin haber mediado alguno de esos procedimientos, el
interesado toma conocimiento por otros medios del acto administrativo, lo que debe evide.nciarse en
forma inequívoca con sus actuaciones para entendérsele notificado (11589/62, 24747/64, 16682/69,
83894/71' 18570/74, 24041/83, 2129/85, 25879/96, 15419/98, 10484/01 ).
En el evento de omitirse la notificación, será la fecha del reclamo por dicha omisión interpuesto por el
afectado, la que sirva para fijar la data a contar de la cual éste se entendió notificado y desde la que
se verifican las consecuencias de dicho acto, operando una notificación tácita (25879/96, 15419/98,
10484/01, 19462/01).
Procede efectuar la notificación de una sanción administrativa por carta certificada siempre que
se hayan realizado las diligencias previas señaladas en el artículo 120 (actual artículo 126), inciso
segundo, de la ley 18834, referidas a tratar de encontrar al inculpado por dos días consecutivos en
su domicilio o en su lugar de trabajo para notificarlo personalmente (13824/91, 19421/93, 5687/00,
17035/00).
La notificación de la medida disciplinaria tiene por objeto permitir al inculpado ejercer oportunamente
las acciones que el ordenamiento jurídico le ha conferido (19468/93).
No obsta al perfeccionamiento de la notificación por carta certificada el que el afectado tenga registrado
un domicilio falso o no lo hubiere actualizado, porque tales circunstancias no son imputables a la
Administración, sino al empleado (85286/76).
Mientras no exista constancia que se ha notificado legalmente al inculpado la resolución que aplica
una medida disciplinaria, no puede hacerse efectiva la responsabilidad pecuniaria a través del Juicio
de Cuentas, el que sólo puede incoarse en el plazo de un año contado desde la notificación señalada
(37186/94).
Las medidas disciplinarias aplicadas a ex funcionarios deben anotarse en sus hojas de vida luego de
haber sido notificados de las mismas (21587/95).
De acuerdo con los artículos 156 y 157 de la ley 10336, en los procesos eleccionarios que indican, la
materialización de las sanciones expulsivas sólo puede hacerse efectiva una vez transcurrido el plazo
a que aluden, por lo que no debe notificarse al afectado el acto administrativo que la contempla, con
anterioridad a la mencionada fecha (39391/97, 36358/99, 3796/00, 42572/00, 40803/01, 30157/05,
18205/08).
Procede notificar la sanción por carta certificada sin que sea óbice para ello que el inculpado esté
haciendo uso de licencia médica ni que haya cambiado su domicilio particular, porque la licencia
sólo permite al funcionario ausentarse o reducir su jornada de trabajo, manteniendo su calidad de
tal con sus derechos y obligaciones, y además, es de su responsabilidad comunicar al Servicio
oportunamente cualquier cambio de residencia. Lo contrario significaría dejar al arbitrio del interesado
el éxito de toda diligencia que pretenda notificarlo del contenido de las resoluciones dictadas en el
proceso sumarial (39856/99).
La notificación de la resolución que aplica una medida disciplinaria permitirá al afectado interponer
el recurso de reposición previsto en el artículo 135 (actual artículo 141) del Estatuto Administrativo
(17756/93).
La toma de razón de un acto sancionatorio constituye el último trámite del proceso disciplinario y deja
a firme la medida impuesta al funcionario sumariado, de modo que tanto la notificación de la sanción,
como los recursos procedentes en contra de la resolución exenta que ordena aplicarla, deben
producirse y quedar resueltos antes de dictarse y enviarse el respectivo documento de término a la
Contraloria General. En otras palabras, una vez notificada la sanción impuesta al afectado, deberá
dictarse una nueva resolución de término con una fecha posterior a las notificaciones, la que en
definitiva deberá cumplir con el trámite de toma de razón (23999/90, 24671/91, 19266/92, 6108/97,
13572/00, 36885/02, 48602/02).
La sanción impuesta a un funcionario no puede modificarse una vez que se ha tomado razón del
acto administrativo que la materializa, a menos que, pevia reapertura del correspondiente proceso
administrativo se acredite, inequívocamente, que al emitirse dicho documento se incurrió en un vicio
de procedimiento de carácter esencial, o bien, que existen hechos nuevos y desconocidos, cuya
trascendencia sea tal, que permita alterar de modo sustancial la decisión anterior, ponderación y
determinación que, en todo caso, le compete efectuar a la superioridad del servicio respectivo, en
uso de sus amplias atribuciones que en esta materia le asisten (14640/01, 31577/03).
Las reaperturas de un sumario administrativo pueden ser múltiples, si existen razones suficientes
para disponerlas en cada oportunidad (63825/62).
Concordancias: Arts. 119 a 145 del EA; 1, N" 12, de la Resolución 520, de 1996, de la Contraloria
General de la República, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado de la Resolución 55,
de 1992, del mismo Servicio, que establece normas sobre exención del trámite de toma de razón;
Art. 138 del EAM.
Comentarios:
El articulo 140 del Estatuto Administrativo regula aquella situación en que el fiscal, luego de haber
agotado la etapa de investigación, formula cargos, recibe los descargos y, por último, emite un
dictamen, en el cual propone la absolución, el sobreseimiento o la aplicación de la correspondiente
sanción a uno o más de los inculpados, procediendo a remitir a la autoridad competente que debe
aplicar alguna de esas medidas, todos los antecedentes que obren en su poder.
La etapa informativa a la autoridad superior comienza con el informe o dictamen del fiscal y el
envío de todos los antecedentes al Jefe Superior de la institución, al Secretario Regional Ministerial
o al Director Regional de servicios nacionales desconcentrados, según el caso, y termina con la
resolución de alguna de estas autoridades superiores, que se pronuncian sobre el sumario. Si se
propone la medida disciplinaria de destitución, los antecedentes se elevarán a la autoridad facultada
para hacer el nombramiento.
La jurisprudencia administrativa ha señalado que la resolución que aplica una medida disciplinaria
debe reunir las siguientes características: 1) individualizar claramente a los sancionados; 2) indicar
los fundamentos legales en que ella se basa; 3) ordenar su notificación; 4) consultar expresamente su
toma de razón; 5) disponer su anotación en la hoja de vida del funcionario afectado, como asimismo,
su archivo; 6) se rige por la ley vigente al momento de su emisión.
ARTICULO 141.- En contra de la resolución que ordene la Ley 18.834, Art. 135.
aplicación de una medida disciplinaria, procederán los siguientes
recursos:
Interpretación:
Inciso 1•
Conforme al actual Estatuto Administrativo las medidas disciplinarias no son recurribles ante la
Contraloria General, ya que tanto el recurso de reposición como el recurso de apelación deben
entablarse ante las autoridades expresamente señaladas en las letras a) y b) del articulo 135 (actual
articulo 141) (18239190, 21104195, 15060/01 ).
Procede desestimar la reclamación interpuesta ante la Contraloria General por un funcionario que
solicita se revoque la medida disciplinaria de destitución, fundada en el articulo 154 (actual articulo
160) del Estatuto Administrativo, por no estar prevista esta posibilidad en la ley, la que no admite más
trámites o instancias en los sumarios administrativos que aquéllos que ella establece (19763/96).
Los recursos de reposición y jerárquico consultados en el articulo 9 de la ley 18575 (actuales artículos
1O de esa ley y 59 de la ley 19880), constituyen un resguardo mínimo para garantizar que las
personas no queden desprotegidas frente a las resoluciones de la autoridad que pudieren afectarlas.
Como el Estatuto Administrativo consulta todos los elementos para configurar un debido proceso y
garantizar la adecuada defensa de los inculpados en los procedimientos disciplinarios, cabe concluir
que tales recursos no se aplican al sumario administrativo (38894188, 7034/96, 14459/01 ).
Una vez notificado el decreto o resolución que aplica la medida disciplinaria y deducido los recursos
legales, corresponde a la autoridad que impuso la sanción conocer y resolver, dando lugar o negando,
la reposición interpuesta por el afectado en contra de ese acto. En caso que se niegue lugar a la
reposición, no será necesario que se dicte otro decreto o resolución que así lo establezca; basta con
dejar constancia en el expediente del "no ha lugar". Si da lugar a la reposición, y en consecuencia
modifica su anterior decisión, debe dictar un nuevo decreto o resolución que materialice esta
determinación, notificándola al afectado (20913192, 11207/93).
Los sumarios administrativos son procesos reglados conforme a la ley 18834, de modo que a su
respecto no caben otros trámites o instancias que los previstos en ese ordenamiento, el cual, en
materia de recursos, sólo contempla los establecidos en el articulo 135 (actual articulo 141 ). Lo
anterior es sin perjuicio que la Contraloria General considere como un antecedente en el trámite de
toma de razón de los actos que imponen sanciones, las presentaciones que eventualmente formulen
los afectados (22601/96, 15060/01).
La resolución de los recursos constituye una actuación procesal interna del sumario que reviste el
carácter de un antecedente más del legajo sumarial que debe remitirse a la Contraloria General para
la toma de razón del acto formal que aplique la medida disciplinaria (21139/90).
Letra a)
El artículo 135 (actual artículo 141), letra a), de la ley 18834, encomendó a la misma autoridad que
dictó el acto administrativo que ordena la aplicación de una sanción, el conocimiento y resol~ción
del recurso de reposición, esto es, le confirió competencia para pronunciarse directamente sobre la
sanción que se impone al funcionario, como respecto de su inocencia o culpabilidad (1086/01).
La decisión de acoger o denegar el recurso de reposición constituye un trámite interno del proceso
disciplinario y, por ende, no susceptible de toma de razón (22309/90, 7734/91, 12186/91 ).
Es improcedente que el fiscal resuelva un recurso de reposición interpuesto por un funcionario que
ha sido sancionado por el Jefe Superior del Servicio con la medida disciplinaria de destitución, por
cuanto es la autoridad ante quien se interpone el recurso la que debe resolverlo, dado que es ella
quien posee la potestad disciplinaria. Tal actividad del fiscal ha vulnerado, pues, el debido proceso,
ya que además de no tener esa potestad y restar imparcialidad a su actuar como investigador, no
se ha ejercido legalmente dicha atribución acorde con la normativa de un racional procedimiento
conforme lo exige el artículo 18, inciso segundo, de la ley 18575. La circunstancia que el fiscal
sostenga que ha resuelto ese recurso en atención a que tiene atribuciones delegadas del Director
Nacional del Servicio, es asimismo contraria a derecho, toda vez que resulta contradictorio con la
facultad de sancionar ejercida por la autoridad e improcedente con su designación como instructor
del proceso (45422/07).
Letra b)
Cuando las autoridades administrativas imponen medidas disciplinarias en virtud de una delegación
de funciones del Jefe Superior del Servicio, no cabe que los afectados interpongan el eventual
recurso de apelación que ante esta última autoridad pueda existir, ya que ello obstaría a la doble
instancia consagrada en el artículo 135 (actual artículo 141 ), por cuanto aquéllas al suscribir los
documentos que aplican las sanciones están representando a la autoridad máxima de la institución,
por lo que debe entenderse que quien las impone es ésta a través de un delegado (2629/92, 41385/94,
38215/01 ).
La ley 18834 no contempla la notificación de la resolución que rechaza la apelación de una medida
disciplinaria en el respectivo sumario administrativo. Por lo demás, este trámite resultaría inoficioso,
por cuanto en contra de aquella decisión no procede recurso alguno, siendo la siguiente diligencia la
dictación por parte de la autoridad administrativa competente del documento de término que afina el
procedimiento disciplinario, sea sobreseyendo o aplicando la sanción que en derecho corresponda
(37363/98).
Inciso 2'
El recurso de apelación en los sumarios administrativos sólo podrá interponerse con el carácter de
subsidiario de la solicitud de reposición y para el evento que ésta no sea acogida (21584/91 ).
Inciso 3'
Una vez notificada la medida disciplinaria al inculpado, éste dispone del plazo de cinco días hábiles,
contados desde la fecha de esa notificación para interponer los recursos franqueados por la ley.. No
es posible tomar razón de una resolución que aplica una medida disciplinaria de destitución mientras
se encuentre pendiente el término para interponer esos recursos (23999/90).
La autoridad sancionadora posee amplias facultades para acoger los recursos interpuestos por los
inculpados con el sólo mérito de los antecedentes acumulados en el respectivo proceso administrativo,
puesto que el articulo 135 (actual articulo 141) del Estatuto Administrativo no exige fundamentación
de las mismas, limitándose a señalar el plazo dentro del cual debe dictarse por la referida autoridad
el fallo de tales recursos (28491/91).
La toma de razón de un acto sancionatorio constituye el último trámite del proceso disciplinario y
deja a firme la medida impuesta al funcionario sumariado, de modo que tanto la notificación de la
sanción como los recursos procedentes en contra de la resolución exenta que ordena aplicarla, deben
producirse y quedar resueltos antes de dictarse y enviarse el respectivo documento de término a la
Contraloria General (23999/90, 24671/91, 19266/92, 6108/97, 13572/00).
Los procesos disciplinarios deben afinarse mediante un solo documento de término -el que constituye
su última actuación- sujeto, en este caso, al trámite de toma de razón por la Contraloria General, en
el que se materialicen todas las medidas disciplinarias de que se trate, el cual deberá emitirse con
posterioridad a la última notificación que se practique a los afectados con las sanciones acordadas
a su respecto y a la resolución del o los recursos que, en su caso, se interpongan, o al vencimiento
del plazo para entablar estos últimos sin que se haya hecho, no correspondiendo que se concluya
un proceso disciplinario mediante resoluciones sucesivas. Por tal motivo, procede la reapertura del
procedimiento disciplinario, a fin de que la autoridad emita un solo documento de término que afine
legalmente el proceso, respecto de todos los inculpados (29653/06).
Debe adjuntarse a las resoluciones que ponen término a los procesos administrativos y que aplican
medidas disciplinarias, la certificación en la que conste el hecho de haber transcurrido el plazo
establecido por la ley para interponer los recursos correspondientes y la,¡:;ircunstancia de no haberse
ejercido los mismos dentro del respectivo término legal (23999/90).
Corresponde que se informe al inculpado acerca del derecho que tiene a interponer recurso de
reposición y a apelar subsidiariamente ante el superior jerárquico de quien impuso la sanción. La
omisión de esta información coloca al afectado en un eventual estado de indefensión, al impedirle
ejercer los recursos que le franquea la legislación vigente (9339/95, 21797/02).
Los sumarios instruidos por la Contraloría General no se rigen por la ley 18834, motivo por el cual
en ese procedimiento no se aplica este artículo 135 (actual artículo 141). Los aludidos sumarios
se rigen por la ley 10336 y por su respectivo reglamento, conforme a los cuales los inculpados sólo
tienen derecho a formular observaciones por escrito para ante el Contralor, en dos oportunidades:
cuando se les notifica la vista fiscal y cuando se pone en su conocimiento la sanción que el jefe
de la División respectiva propone al Contralor General para su aprobación. Corresponderá a la
autoridad de la Administración activa aplicar la medida disciplinaria que corresponda o absolver a los
funcionarios de su dependencia (6373/99).
Comentarios:
El Informe de la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno expresa que en relación con su texto
original, a este articulo se le efectuaron las modificaciones que se detallan a continuación:
"Se eliminó el recurso de apelación ante el Tribunal Contencioso-Administrativo, por las razones
expuestas en el número 7 de la letra B), de este capitulo. (Este número 7 se reproduce en el párrafo
subsiguiente).
Se agregó un nuevo inciso segundo, que establece que el recurso de apelación podrá interponerse
sólo con el carácter de subsidiario de la solicitud de reposición y en el caso de que ésta no sea
acogida".
La Comisión Conjunta eliminó toda referencia a los Tribunales Contencioso-Administrativos por dos
razones fundamentales: en primer lugar, porque todas esas normas tenían un carácter programático
en tanto el legislador no creara los mencionados Tribunales, situación que es incierta y respecto de
la cual existe discusión sobre el verdadero alcance de las normas constitucionales pertinentes, en
el sentido de si es necesario o no la creación de Tribunales especiales o bastaría la creación de un
"procedimiento" contencioso-administrativo; en segundo lugar, porque en tanto no se constituyeran
los mencionados Tribunales, la resolución de los conflictos pertinentes quedaba entregada a la
Contraloria General de la República, situación análoga a la actual.
En estas condiciones, se estimó más adecuado eliminar las referencias a los señalados Tribunales
y entregar a la Contraloria General de la República el conocimiento de los reclamos de los vicios
de legalidad que importaren la infracción de los derechos funcionarios". (Este criterio dio origen al
articulo 154 -actual articulo 160-).
El articulo 141 del Estatuto Administrativo contempla el reg1men de recursos en contra de las
medidas disciplinarias al consultar los de reposición y de apelación. Ello demuestra que el legislador
ha considerado la doble instancia como un elemento propio y necesario en la tramitación de los
sumarios administrativos, esto es, como una exigencia del debido proceso, sin perjuicio de disponer
que para la procedencia del recurso de apelación se requiere, como supuesto esencial, que exista
un "superior jerárquico" de quien impuso la medida disciplinaria, vale decir, un vinculo jurídico de
subordinación o dependencia de quien aplicó la sanción con respecto a la autoridad revisora de
segunda instancia.
De este modo, si se considera, por ejemplo, que de los artículos 33 de la Constitución Política,
y 23 y 40 de la ley 18575, Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración del
Estado, se desprende que los Ministros de Estado están subordinados jerárquicamente al Presidente
de la República, la circunstancia que el Estatuto Administrativo haya radicado en determinadas
autoridades la facultad de sancionar no obsta a las atribuciones del superior jerárquico pertinente,
en este caso, el Jefe del Estado. Por lo tanto, si un Secretario de Estado aplica una medida
disciplinaria, la apelación subsidiaria deberá ser presentada ante el Presidente de la República, a
quien le corresponderá su conocimiento y resolución.
ARTICULO 142.- Acogida la apelación o propuesta la aplicación Ley 18.834, Art. 136.
de una medida disciplinaria distinta, se devolverá la resolución
correspondiente con el sumario, a fin de que se dicte en el plazo
de cinco dias la que corresponda por la autoridad competente.
Interpretación:
Los actos punitivos son invalidables, dentro de ciertos limites, de oficio por la autoridad que los
dictó, o a petición de parte, mediante recurso interpuesto ante la misma autoridad. Pueden atacarse
mediante este recurso tanto los actos terminales -decretos o resoluciones- como los actos trámite
-toma de razón-. La impugnación que se dirija contra el acto definitivo, esto es, el decreto o resolución
que aplica la medida disciplinaria y ante el órgano que lo dictó, es sin perjuicio que pueda también
atacarse dicho acto por vicio de un anterior acto trámite, en cuyo caso la autoridad que lo dictó
deberá remitir los antecedentes al órgano del cual emanó a fin que éste se pronuncie acerca de su
validez (16604160, 4113186, 199194).
Los actos reglados que dicta la Administración deben ejecutarse y perfeccionarse con sujeción a las
disposiciones que precisa la ley, no siendo procedente disponer su revocación por causa de mérito,
conveniencia u oportunidad, sino que únicamente en razón de afectarles un vicio de ilegalidad
(91355165, 241195).
El control previo de legalidad que constituye la toma de razón de los actos que afinan los sumarios
administrativos, tiene por objeto verificar si en esos procesos se ha respetado la ley estatutaria y
cumplido las reglas de procedimiento que los regulan (16893190).
La toma de razón del acto sancionatorio de término que afina un proceso sumarial, constituye el
último trámite del proceso disciplinario y deja a firme el castigo impuesto al inculpado, de manera
que la formulación de cargos, la notificación de éstos, la resolución exenta que aplica la medida
disciplinaria, la notificación de ésta, como los recursos que procedan en su contra, deben producirse
y quedar resueltos antes de dictarse y enviarse al control preventivo de legalidad el acto administrativo
de término que afina legalmente dicho proceso. En otras palabras, una vez notificada la sanción
impuesta al afectado deberá dictarse una nueva resolución de término con una fecha posterior a
las notificaciones, la que en definitiva será la que deba cumplir con el trámite de toma de razón
(36885102, 48602102, 26917106, 20909108).
Los procesos disciplinarios deben afinarse legalmente mediante un solo documento de término -el
que constituye su última actuación- sujeto al trámite de toma de razón, y en el que se materialicen
todas las medidas disciplinarias de que se trate. Éste debe emitirse con posterioridad a la última
notificación que se practique a los afectados, el cual contendrá las sanciones y resoluciones del o
los recursos que se hayan interpuesto, o al vencimiento del plazo para entablar estos últimos sin que
se haya hecho, no correspondiendo que se concluya un proceso disciplinario mediante resoluciones
sucesivas. Si ello ocurre, debe procederse a la reapertura del procedimiento disciplinario, a fin de
que la autoridad emita un solo documento de término que afine legalmente el proceso respecto de
todos los inculpados (29653/06).
Los decretos y resoluciones disciplinarios deben ordenar expresamente el cumplimiento del trámite
de toma de razón, ya que no pueden emitirse como actos administrativos exentos de ese trámite, de
acuerdo con la resolución 55, de 1992, de la Contraloria General (23130/90, 4716/96). (*)
La toma de razón del decreto o resolución que aplica la medida disciplinaria es el último trámite del
sumario administrativo y deja a firme la sanción impuesta a un funcionario (13572/00). No procede
remitir para la toma de razón los actos que sobreseen o absuelven (50606/04).
La toma de razón del acto administrativo que aplica una medida disciplinaria sólo constituye una
presunción de legalida.d que puede dejarse sin efecto por la Contraloría General si comprueba con
posterioridad que se sustentó en fundamentos irregulares (6511/90).
El acto administrativo que aplica la sanción disciplinaria, una vez tomado razón, debe ser notificado
al respectivo funcionario, dejando constancia en el expediente de la realización de esta diligencia,
ya que sólo a partir de la fecha de la notificación rige el término de servicios en caso de aplicarse
la destitución. Si no se cuenta con la referida acta de notificación, no puede iniciarse el juicio de
cuentas para perseguir la responsabilidad pecuniaria del afectado. Si no ha mediado la referida
notificación, debe ordenarse la reapertura del sumario para que se realice en forma legal dejando
constancia en los autos (18400/93).
La responsabilidad de la notificación del acto administrativo que impone una sanción disciplinaria
corresponde al Servicio, porque una vez cumplido el trámite respectivo ante la Contraloría General,
este Organismo debe devolver el decreto o resolución y el sumario, a la autoridad que lo dictó,
precisamente para que se practique esa notificación y proceda enseguida a archivar dichos
antecedentes (26196/93).
(*)La resolución 520, de 1996, de la Contraloria General de la República, fijó el texto refundido, coordinado y
sistematizado de la resolución 55, de 1992, de ese mismo origen, que establece normas sobre exención del
trámite de toma de razón. Modificaciones: resoluciones 488, de 1997; 147, de 1999; 476, de 2000; 117, de
2001; 164, de 2001 y 678, de 2001; 661 de 2002; 470 de 2003; 595 de 2003; 687 de 2003; 177 de 2004; 621
de 2004; 139 de 2005 y 635 de 2005.
La notificación de la medida disciplinaria es una actuación administrativa que tiene por objeto afinar
completamente la tramitación del respectivo acto sancionatorio, haciéndolo entrar en vigencia.
De aquí, pues, que la jurisprudencia haya concluido que los decretos o resoluciones que aplican
una medida disciplinaria rigen a contar de la fecha en que se haya notificado al funcionario la total
tramitación de ese decreto o resolución, notificación que debe acreditarse con la firma del notificado,
estampada en el acta respectiva (situación consultada en el articulo 125 -actual articulo 131, inciso
primero), o bien, con el comprobante de Correos de haber despachado la correspondiente carta
certificada (49610/68, 19603/71, 30309/84). El medio para acreditar la circunstancia que un inculpado
en un sumario administrativo ha sido debidamente notificado de una medida que lo afecta, es a
través de la firma del mismo estampada en el acta en que se deje constancia de la diligencia sumarial
respectiva, no pudiendo por esta vía, el inculpado, paralizar el sumario con una negativa a firmar, ya
que en tal situación debe el actuario certificar estos hechos y dar por efectuado el emplazamiento en
forma legal (5629/84, 29143/86).
Atendida la naturaleza de la notificación del acto administrativo que aplica una medida disciplinaria,
ella no es indispensable como requisito de validez, cuando la medida disciplinaria no es susceptible
de ulterior recurso, o en aquellos casos en que el sumariado se allana a los resultados del sumario,
renunciando al ejercicio de los recursos que pueda ejercer, renuncia que puede ser expresa o tácita.
Será expresa, cuando así se manifieste formalmente, y tácita, cuando el afectado presente su
renuncia al cargo. En el caso que el funcionario sujeto a sumario se encuentre fuera de Chile, debe
notificársele por correo (19603/71).
El Servicio debe anotar en la hoja de vida del sancionado el decreto o resolución que aplicó la
medida disciplinaria y el hecho de su notificación, archivando el expediente (12185/90).
Comentarios:
El articulo 142 del Estatuto Administrativo regula el procedimiento sumarial una vez resuelta la
apelación por el superior jerárquico, al establecer que "la resolución correspondiente -que es la
que afina el proceso- con el sumario" se devolverá a la autoridad que aplicó la medida disciplinaria
apelada, a fin que en el plazo de cinco días dicte la resolución que ejecute la decisión que se
~op~. .
Esta resolución es el acto terminal del procedimiento, la cual debe enviarse a la Contraloria General
para su registro o toma de razón.
Tratándose de actos exentos del control previo de legalidad -lo que ocurre, por ejemplo, con los actos
sancionatorios municipales- la ratificación se llevará a cabo a través de un oficio aprobatorio de la
Contraloria General, previo análisis de los aspectos legales, formales y sustanciales del pertinente
proceso sumarial y del acto administrativo que aplica la medida expulsiva, a que se refiere el articulo
25 de la ley 19296, tal como lo señalaran los dictámenes Ws. 19918, de 1996 y 17518, de 2000,
entre otros.
ARTICULO 143.- Vencidos los plazos de instrucción de un sumario Ley 18.834. Art 137.
y no estando éste afinado, la autoridad que lo ordenó deberá
revisarlo, adoptar las medidas tendientes a agilizarlo y 'determinar la
responsabilidad del fiscal.
Interpretación:
Debe determinarse la responsabilidad del investigador por no afinar el proceso dentro de los plazos
legales establecidos (28387193).
Los sumarios administrativos ordenados instruir por los Jefes Superiores de los Servicios, los
Secretarios Regionales Ministeriales y los Directores Regionales de los servicios nacionales
desconcentrados, se rigen por la ley 18834, Titulo V, o por leyes especiales, las que señalan las
etapas del procedimiento sumarial y su duración, sin que los plazos que establecen sean fatales.
No obstante, de acuerdo con el artículo 143 de la ley 18834, la función de velar porque los procesos
disciplinarios se instruyan razonablemente dentro de los plazos fijados por la ley, atendida la
complejidad de los hechos y la cantidad de inculpados, corresponde a la autoridad que ordenó
instruirlos. Asimismo, conforme a la resolución 520, de 1996, de la Contraloría General, sólo deben
remitirse para el trámite de toma de razón los sumarios que aplican medidas disciplinarias una vez
finalizados y no aquéllos que resuelven una absolución o sobreseimiento, sin desmedro de lo cual,
en el ejercicio de esa función de control de juridicidad de los actos administrativos, deba pronunciarse
por la demora excesiva en la tramitación de los procesos disciplinarios. El Organismo Contralor, en
el trámite de toma de razón no anota la extensión temporal de los procedimientos sumariales, pero
sí lleva un registro de las sanciones de los funcionarios (50606104).
Concordancias: Arts. 8 de la LOCBGAE; 119 a 145 del EA; 141 del EAM.
Comentarios:
Aunque los plazos no son fatales para la autoridad, constituye un deber de ésta cumplir cabal y
oportunamente con la normativa legal y reglamentaria en materia de procedimientos disciplinarios,
pues su inobservancia acarrea consecuencias que inciden en elementos sustanciales de la carrera
funcionaria, no sólo del afectado, sino de todos los funcionarios del organismo, de tal manera que
la superioridad debe adoptar las medidas que sean necesarias con el objeto de resolver sobre un
proceso sumarial en tiempo y forma.
ARTICULO 144.- Los VICIOS de procedimiento no afectarán la Ley 18.834, Art. 138.
legalidad de la resolución que aplique la medida disciplinaria,
cuando incidan en trámites que no tengan una influencia decisiva
en los resultados del sumario.
Interpretación:
Se consideran trámites que tienen una influencia decisiva en los resultados del sumario administrativo
aquellos cuya omisión priva al afectado del derecho a defenderse oportunamente, como ocurre
con la declaración del inculpado, la formulación de cargos concretos o su formulación tardía, la
notificación legal de los cargos o de la sanción que se pretende aplicar. En estos casos no procede
dar curso a la resolución que aplica una medida disciplinaria por haberse omitido trámites que la ley
considera esenciales. En consecuencia, la orden de sustanciar un sumario administrativo emanada
de una autoridad incompetente, la omisión de los trámites de apercibimiento para recusar al fiscal
y al actuario, y la circunstancia de no haberse decretado el cierre del sumario, son hechos que,
por su naturaleza no esencial, no vician el procedimiento sumarial, y por ende, la legalidad de
la resolución que aplica una sanción, siempre que ésta haya sido impuesta por una autoridad
competente (32919195, 2680199 -complementado por el46796199-, 3737199, 24414107).
Los vicios de procedimiento sólo afectan la legalidad de la resolución que aplica una sanción cuando
inciden en trámites que tengan una influencia decisiva en los resultados del sumario (11079193,
20483195, 30733100, 14640101 ).
La declaración del procesado es un trámite esencial del cual sólo puede prescindirse si se demuestra
que su no comparecencia es imputable al mismo encausado, lo que debe constar en el sumario
administrativo. A su vez, para que la notificación tenga validez debe hacerse personalmente al
afectado, levantando un acta de notificación suscrita por el actuario o por un funcionario facultado para
ello, y por el notificado, expresándose en esa acta, si procediera, la circunstancia que el inculpado se
negó a recibir la documentación pertinente o a firmar (23352193).
Para hacer valer los vicios de procedimiento que conllevan una nulidad en el proceso disciplinario,
deben aplicarse a los funcionarios públicos las disposiciones especiales contenidas en el articulo
138 (actual articulo 144) del Estatuto Administrativo, no correspondiendo hacer valer en estos casos
las normas consultadas en el Código de Procedimiento Civil relativas al juicio sumario (10817181,
9633183).
En un sumario administrativo, ningún funcionario podrá ser sancionado por hechos que no han
sido materia de cargos, los que deben formularse en la etapa pertinente, esto es, antes del cierre
del proceso. Si ello no ha ocurrido, procede que se ordene la reapertura del sumario, se formulen
nuevamente los cargos, se notifique válidamente al inculpado y se continúe con la tramitación del
procedimiento (23461191, 10489193).
los afectados pueden hacer valer sus planteamientos con el objeto de garantizarles una adecuada
defensa y configurar un debido proceso, de suerte que no caben otros trámites o diligencias que los
señalados en la pertinente normativa consultada en dicho Estatuto. Lo anterior es sin perjuicio de
las facultades de la Contraloria General de la República para conocer e informar sobre la legalidad
del proceso disciplinario en el trámite de toma de razón del acto administrativo terminal (29208/93,
5150/96, 9471/01).
Comentarios:
Una de las características más importantes de los procesos disciplinarios -investigaciones
sumarias y sumarios administrativos- consiste en la ineficacia de los vicios de procedimiento no
esenciales, entendiéndose por tales aquellos que no influyen decisiva y sustancialmente en sus
resultados. Son vicios no esenciales, por ejemplo, la inobservancia de los plazos para instruir los
procesos disciplinarios lo que resulta del todo armónico con la aplicación de éstos en el ámbito
administrativo, en el sentido que, a falta de norma expresa, tienen el carácter de no fatales.
ARTICULO 145.- Los plazos señalados en el presente título serán de Ley 18.834. Art. 139.
días hábiles.
Interpretación:
La expresión "días hábiles" empleada por esta norma, al referirse a los plazos que la ley 18834
contempla en materia de responsabilidad administrativa, no comprende los días sábado (8718191,
12186191 ).
Los plazos de días contenidos en el Título V del Estatuto Administrativo están relacionados no con
las normas sustantivas relativas a la responsabilidad administrativa insertas en él, sino con aquellas
regulatorias de la instrucción de los procesos disciplinarios que en dicho apartado se contemplan, y a
la oportunidad en que los afectados pueden hacer valer sus derechos a defensa, como por ejemplo,
las que consultan los articulas 120, 125, 128, 129, 131, 132, 133, 134, 135 y 136 (actuales articulas
126, 131, 134, 135, 137, 138, 139 140, 141 y 142). Ello permite entender el alcance de la regla
contemplada en el articulo 139 (actual artículo145), la cual sólo resulta aplicable a estas disposiciones
procesales, esto es, a las diligencias y recursos relativos al proceso sumarial, no pudiendo aplicarse
a las sanciones administrativas propiamente tales (29734104, 50967104).
Concordancias: Arts. 65, inciso primero, y 119 a 144 del EA; 143 del EAM.
Comentarios:
El texto original de esta norma, propuesta en el Mensaje del Presidente de la República, establecía
que los plazos señalados en el presente titulo serían fatales.
La Comisión Conjunta reemplazó este precepto del proyecto por una disposición que determinó que
los plazos incluidos en el Título V serían de días hábiles.
Aunque en el Informe de la Comisión Conjunta nada se expresa sobre las motivaciones del cambio,
conviene tener presente lo que manifestara con ocasión de la incorporación al artículo 47 (actual
artículo 52) de una nueva disposición -la cual, en definitiva, se incluyó como inciso final del articulo 43
(actual artículo 48)- en cuanto a que los plazos contenidos en este articulo serán de días hábiles.
En este caso la Comisión Conjunta fundamentó su inclusión "a fin que las actuaciones que hayan
de cumplirse con motivo de las calificaciones y de las reclamaciones que pudieran suscitarse, se
realicen durante la jornada laboral".
Lo anterior es concordante con el articulo 65, inciso primero, del Estatuto Administrativo, precepto
del cual se desprende que el día sábado no es laborable para la Administración del Estado, no
siendo posible en derecho dar cumplimiento a obligaciones que venzan ese día, sino que el día hábil
inmediatamente siguiente.
de Funciones
Titulo VI De la Cesación de Funciones 573
ARTICULO 146.- El funcionario cesará en el cargo por las Ley 18.834, Art. 140.
siguientes causales:
a) Aceptación de renuncia;
e) Declaración de vacancia;
d) Destitución;
g) Fallecimiento.
Interpretación:
Los empleados públicos están amparados por el derecho a la función, el cual consiste en que no
pueden ser alejados de sus cargos sino en virtud de alguna de las causas legales de expiración de
funciones que contempla el Estatuto Administrativo. Para que dichas causas tengan eficacia, es
menester que sean aplicadas por la autoridad competente, previo cumplimiento de las formalidades
que procedan, y además, que el acto que materialice tales medidas sea tramitado por la Contraloría
General de la República y transcrito al afectado (62267168, 19049192, 1897101).
Aun cuando la ley otorgue a la autoridad una facultad privativa y excluyente, es decir, discrecional para
poner término a los servicios de un funcionario público, los actos administrativos en que se traduce su
ejercicio deben cumplir con la exigencia, derivada del principio de juridicidad, en un concepto amplio
y moderno, de tener una motivación, esto es, contener las circunstancias, el fundamento y raciocinio
que justifica la adopción de dicha medida, y no obedezcan al mero capricho de esa autoridad, pues
en tal caso resultarían arbitrarios y, por ende, ilegítimos. Además, la necesidad jurídica que obliga
a la Administración de motivar los actos que corresponden al ejercicio de potestades discrecionales,
tiene por objeto asegurar que sus actos no se desvíen del fin considerado por la normativa que
confiere las respectivas atribuciones, que cuenten con un fundamento racional y se ajusten a las
disposiciones constitucionales y legales vigentes, lo cual impide, por cierto, establecer diferencias
arbitrarias entre personas que se encuentran en una misma situación, cautelándose de este modo el
principio de igualdad ante la ley previsto en el articulo 19, W 2, de la Constitución Polltica (23114107.
Reconsidera toda jurisprudencia en contrario).
La licencia médica no confiere inamovilidad alguna a quien hace uso de ella, ni tampoco obsta a la
expiración de funciones cuando concurre alguna causa legal de cesación de funciones (31444/67,
55423/67,22626/78, 15577/92,8312/95, 14476/95, 36800/95, 12692/96, 12468/99, 47118/01).
La circunstancia que el artículo 48 (actual artículo46) de la ley 18575, aplicable a todos los trabajadores
de la Administración del Estado, señale que el personal goza de estabilidad en el empleo y sólo
puede cesar en él por las razones que especifica, no impide el término de la relación laboral de
los funcionarios por aplicación de las causas legales que contempla el Código del Trabajo, cuando
este texto normativo constituye su ordenamiento estatutario, ya que la alusión que realiza el artículo
45 (actual artículo 43) de la ley 18575 al Estatuto Administrativo del personal de los organismos
señalados en el articulo 18, inciso primero (actual artículo 21, inciso primero), de la citada ley 18575,
debe entenderse en estos casos referida al señalado Código, que rige para esos empleados su
desempeño laboral. De este modo, la estabilidad laboral ha de en marcarse no sólo al amparo de la
Ley Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración del Estado, sino también a lo
que determine la respectiva preceptiva estatutaria (33779/95, 13404/96).
Letra a)
Renuncia voluntaria
La fecha de la renuncia no puede ser anterior a aquélla en que el interesado la presente, pues la
autoridad administrativa necesita contar con un plazo prudencial para resolver la dimisión, por cuanto
está facultada para calificar la necesidad y conveniencia del alejamiento de un funcionario en una
época determinada .. Por tal motivo, es improcedente el acto administrativo que la acepta en estas
condiciones y porque, además, no puede operar retroactivamente, salvo disposición legal que así lo
determine (12903/90, 21051/95).
El hecho que el empleado presente la renuncia indicando una fecha determinada para hacer
abandono de su empleo no implica necesariamente que sea esa la data desde la que operará esta
causal de expiración de funciones, ya que para ello es preciso, además, que la autoridad competente
acepte la renuncia presentada en esos términos. En caso contrario, el cese se producirá desde la
data de total trámite del acto administrativo correspondiente (30998/92, 14924/99).
No existe norma legal alguna que obligue a la autoridad a mencionar en el acto administrativo que
acepta la renuncia, las razones o motivos en que se funda la determinación de un funcionario de
renunciar, más aún tratándose de un alejamiento voluntario (19049/92). ·
La renuncia voluntaria sólo es aplicable a los funcionarios públicos, calidad que no reviste el personal
contratado sobre la base de honorarios, respecto del cual sólo procede poner término al convenio
(31271/93, 14225/95).
Renuncia no voluntaria
Un funcionario que presentó su renuncia no voluntaria a contar de una determinada fecha y que fue
aceptada por la autoridad en esos términos, no tiene derecho al pago de remuneraciones durante
Letra b)
La obtención de una pensión anticipada en una Administradora de Fondos de Pensiones por parte
de un funcionario público hace aplicable la causal de cese de funciones prevista en la letra b) del
artículo 140 (actual artículo 146), en relación con el artículo 143 (actual artículo 149) de la ley 18834,
pues dichos preceptos no distinguen respecto de la naturaleza de la pensión que se obtenga en los
diferentes regímenes previsionales (31327/90).
Las leyes 18834 y 18883 han agregado a la jubilación, como causales de término de servicios, la
"pensión o renta vitalicia en un régimen previsional en relación al respectivo cargo público", con el
exclusivo objeto de poner las normas equivalentes del DFL 338, de 1960 -artículos 231, letra d), y
236-, en consonancia con la nomenclatura de todos los beneficios concedidos por el decreto ley
3500, de 1980, que estableció el Nuevo Sistema de Pensiones, sin que pueda distinguirse respecto
de tales franquicias ni agregarse requisitos. La expresión "en relación al respectivo cargo público",
supone que la pensión se obtendrá por un trabajador dependiente y no por un independiente -que
son las dos únicas clases de trabajadores consultados en el nuevo sistema de pensiones, conforme
al artículo 2 del referido decreto ley 3500- como asimismo, que las pensiones obtenidas no sean de
sobrevivencia, que son las que dicho sistema asigna a los familiares del afiliado (1327/91).
Los servidores que obtienen el beneficio de jubilación deben expirar en funciones desde la fecha
en que adquieren la calidad de pensionados, siendo el acto administrativo que se dicte al respecto
meramente declarativo, pues está destinado sólo a precisar la data en la cual se produjo la
desvinculación con el Servicio (22619/91, 13270/93).
Es improcedente que un funcionario que cesó en funciones por jubilación y reingresó al Servicio,
se le considere la calificación de anteriores funciones para el otorgamiento del incremento por
desempeño individual de la asignación de modernización de la ley 19553, ya que el término de la
relación estatutaria del servidor conlleva su desvinculación con el Servicio. Por ello, la calificación
que tenía en el cargo anterior no es válida para otorgar la señalada franquicia (5755/00).
Desde la fecha en que comienza a regir una pensión de invalidez parcial, como es la prevista en el
artículo 38 de la ley 16744, se produce el cese de funciones en las plazas servidas, conforme a los
artículos 140 letra b) (actual artículo 146, letra b)) y 143 (actual artículo 149) de la ley 18834, ya que
dichos preceptos no distinguen al respecto (30257/96).
Comentarios:
Con la entrada en vigor del decreto ley 3500, de 1980, comenzó a regir un nuevo sistema de pensiones,
cuyo manejo y gestión radica en organismos privados -sociedades anónimas- denominadas
Administradoras de Fondos de Pensiones, y aplica un régimen de capitalización individual, sin
perjuicio de permitir que los funcionarios en servicio a esa época y quienes se afiliaron por primera
vez antes del 31 de diciembre de 1982, pudieran optar por mantenerse en el sistema antiguo.
En consecuencia, actualmente los funcionarios públicos pueden jubilar mediante dos sistemas:
1) el de las Cajas de Previsión, en extinción, representadas para estos efectos por el Instituto de
Normalización Previsional -cuyo sucesor y continuador legal es el Instituto de Previsión Social, por
mandato del articulo 53 de la ley 20255, que establece Reforma Previsional-, siempre que se trate
de funcionarios que optaron por quedar adscritos al régimen antiguo de pensiones, con el propósito
de obtener una jubilación, y 2) el de las Administradoras de Fondos de Pensiones respecto de los
funcionarios que se afiliaron a ellas, para los efectos de acceder a una pensión o renta vitalicia.
Conforme a lo dispuesto en los artículos 53 y 54, en relación con los artículos décimo sexto y vigésimo
transitorios de la ley 20255, que establece Reforma Previsional, las referencias que las normas
jurídicas hagan al Instituto de Normalización Previsional con respecto a sus funciones, con excepción
de aquéllas relativas a la ley 16744, sobre Accidentes del Trabajo y Enfermedades Profesionales,
se entenderán efectuadas al Instituto de Previsión Social, que es considerado en este ámbito, su
sucesor y continuador legal, una vez que se constituya e inicie sus actividades según lo disponga
el Presidente de la República. A contar del 17 de marzo de 2008, fecha de publicación de la citada
ley 20255, el Instituto de Normalización Previsional ejercerá las competencias que correspondan al
Instituto de Previsión Social hasta la fecha en que esta última institución entre en funciones.
En relación con esta materia.es necesarioteneren consideración que la Reforma Previsional contenida
en la ley 20255, modifica diversos cuerpos legales. Entre esas modificaciones cabe destacar las que
se contienen en el Titulo 11 de esa ley denominado "Sobre lnstitucionalidad Pública para el 8istema
de Previsión Social", artículos 39 y siguientes, estableciendo que los órganos públicos que tendrán
la principal responsabilidad del sistema de previsión social serán los siguientes: a) el Ministerio
del Trabajo y Previsión Social; b) la Subsecretaría de Previsión Social; e) la Superintendencia de
Pensiones, que reemplaza a la Superintendencia de Administradoras de Fondos de Pensiones; d)
la Superintendencia de Seguridad Social; e) el Instituto de Previsión Social, que es el sucesor y
continuador legal del Instituto de Normalización Previsional, excepto en lo relativo a las funciones
derivadas de la ley 16744, y f) el Instituto de Seguridad Laboral, que reemplaza con esta nueva
denominación al Instituto de Normalización Previsional, salvo en el ámbito de las funciones y
atribuciones que se traspasan al Instituto de Previsión Social.
Letra e)
La declaración de vacancia por calificación insuficiente si bien puede notificarse al afectado por
medio de un simple oficio interno, debe traducirse en un documento formal, sujeto a toma de razón
(8168/90).
La declaración de vacancia por calificación insuficiente surtirá efectos desde el día siguiente al
vencimiento del plazo dentro del cual el empleado debe retirarse del Servicio, por lo que éste pierde,' a
partir de esa fecha, su calidad de funcionario, y no puede continuar percibiendo las rentas asignadas
al empleo, aunque la medida se disponga y notifique en una época posterior (31307/90, 602/96).
se rigen por el Estatuto Administrativo, de acuerdo con su articulo 45 (actual articulo 50), en relación
con el articulo 37 del decreto 1825, de 1998, del Ministerio del Interior, el funcionario evaluado
por resolución ejecutoriada en lista 4 o por dos años consecutivos en lista 3, debera retirarse del
Servicio dentro de los 15 días habiles siguientes al término de la calificación. Si así no lo hiciere se
le declarara vacante el empleo a contar desde el di a siguiente a esa fecha. Para tales efectos, se
entiende que la resolución queda ejecutoriada desde que venza el plazo para reclamar o desde que
sea notificada la resolución de la Contraloría General de la República que falle el reclamo (20029/93,
25763/93, 10099/94, 13201/94, 602/96).
El documento que declara vacante un cargo por haber sido calificado el funcionario que lo sirve
en lista de eliminación es un acto reglado en cuanto al procedimiento y a sus efectos y no puede
revocarse discrecionalmente por la autoridad, a menos que concurra a su respecto algún vicio de
ilegalidad (23644/93).
EL empleado que goza de licencia médica común o aquélla que se otorga por salud irrecuperable,
con arreglo a los artículos 106 y 146 (actuales artículos 111 y 152) del Estatuto Administrativo,
respectivamente, puede ser alejado de su cargo antes del vencimiento del plazo de cada una de
ellas, cuando ocurra alguna causa legal de expiración de funciones, como es la declaración de
vacancia por calificación en lista 4 de Eliminación. Ello, por cuanto tal circunstancia no confiere
inamovilidad al funcionario (12692/96, 3082/97, 28339/01 ).
La sola comprobación de que un funcionario ha gozado de licencia por mas de seis meses en
los últimos veinticuatro meses, sin haberse declarado su salud irrecuperable, faculta al Jefe del
Servicio para solicitar su dimisión. La discrecionalidad que otorga a los Jefes Superiores de los
Servicios el artículo 145 (actual articulo 151) del Estatuto Administrativo tiene tal alcance que en
ciertas ocasiones la autoridad puede resolver que el uso de licencias médicas por un lapso superior
a seis meses en los dos últimos años no significa necesariamente que el funcionario tenga salud
incompatible con el cargo, por lo que el sólo hecho de hacer uso de ellas, en tales condiciones, no
produce necesariamente la declaración de vacancia. En cambio, si la autoridad decide declarar que
el funcionario tiene salud incompatible con el desempeño del cargo, no es preciso fundarla, no tiene
que expresar las razones de conveniencia u oportunidad que se han considerado para resolver en
tal sentido (6298/91, 25877/94).
Las licencias por accidente en acto de servicio no se consideran para determinar el lapso continuo
o discontinuo superior a seis meses de licencia en los dos últimos años, de que ha hecho uso un
funcionario, que faculta al Jefe Superior del Servicio para considerar su salud como incompatible
con el desempeño del cargo, de acuerdo con el articulo 145 (actual articulo 151) del Estatuto
Administrativo (18583/91, 19662/99 -complementado por el43190/99-).
El cese de funciones por salud incompatible con el desempeño del cargo no constituye una medida
disciplinaria, motivo por el cual no es aplicable al afectado el beneficio del artículo 156 de la ley
10336, que impide sancionar con medidas expulsivas en los procedimientos disciplinarios, treinta
días antes y hasta sesenta días después de la elección de Presidente de la República (18294/94,
14778/00).
La declaración de vacancia del cargo de un funcionario por salud incompatible rige a contar de la
fecha en que éste sea notificado de la total tramitación del documento que la dispone y no desde una
fecha determinada (25847/95, 3851/97).
Es improcedente declarar vacante por salud incompatible el cargo servido por un dirigente gremial
que goza de fuero de acuerdo con el articulo 25 de la ley 19296, porque las normas de inamovilidad
en el empleo contenidas en estatutos o textos legales generales o especiales, operan en relación
con la facultad de la autoridad de poner término a las funciones de los empleados, cuyo es el caso
del articulo 145 (actual articulo 151) del Estatuto Administrativo, pero no se aplican cuando es la ley
la que ordena imperativamente el alejamiento del Servicio (38351/95).
Procede reincorporar a una funcionaria a la que se le declaró vacante su cargo por salud incompatible
encontrándose embarazada, por cuanto las normas sobre inamovilidad, como son las de fuero
maternal, deben primar en los casos en que el término de funciones no depende en forma imperativa
de la ley, sino de la eventual facultad de la autoridad respectiva de disponer el alejamiento del
Servicio (5459/00).
Procede declarar vacante el cargo a una funcionaria por salud incompatible, cuyas licencias médicas
otorgadas inicialmente por la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez, como de carácter
profesional, por más de seis meses en los últimos dos años de acuerdo con el articulo 145 (actual
articulo 151) del Estatuto Administrativo, fueron posteriormente desestimadas por la Superintendencia
de Seguridad Social al considerar que sólo tenían origen en una enfermedad común, por cuanto
corresponde a este Organismo impartir instrucciones y decidir en definitiva respecto de la naturaleza
de esta clase de licencias médicas y la calificación de una enfermedad (36776/00).
El personal afecto a la ley 18834, imponente del nuevo sistema de pensiones regulado por el decreto
ley 3500, de 1980, cuya salud fue declarada irrecuperable por la Comisión Médica competente,
durante el plazo de seis meses no estará obligado a trabajar y tendrá derecho a percibir el total de
sus remuneraciones de cargo de su empleador, porque el articulo 146 (actual artículo 152) de la
primera ley mencionada no distingue en cuanto a la afiliación de los funcionarios que deben retirarse
de la Administración por tal motivo (8596/90, 28877/90).
Los seis meses de licencia médica por estado de salud no recuperable que otorga la Comisión
de Medicina Preventiva e Invalidez, deben concederse desde la fecha en que el empleado toma
conocimiento de la declaración de irrecuperabilidad, produciéndose la vacancia del cargo el día
siguiente de transcurrido dicho plazo (15284/90, 31895/01).
Declarada irrecuperable la salud de un funcionario por la Comisión Médica competente, ésta mantiene
su vigencia mientras no sea revisada o rectificada por el organismo médico pertinente. Por tal
motivo, dicha declaración afectará a todos los empleos compatibles que desempeñe el empleado,
no pudiendo ingresar o reincorporarse a la Administración Pública, a menos que medie un nuevo
pronunciamiento de esa Comisión, que lo declare nuevamente apto para ejercer funciones públicas
(19982/91 -reconsiderado parcialmente por el39847/97-, 20418/92).
La licencia de seis meses por salud irrecuperable sólo libera durante ese lapso al trabajador de la
obligación de desempeñar el cargo, manteniendo las remuneraciones correspondientes al mismo,
pero no le confiere inamovilidad, pudiendo ser alejado de su empleo antes del vencimiento de ese
plazo, cuando concurra alguna causa legal de expiración de funciones, como es la declaración de
vacancia por calificación en lista 4, de Eliminación, ya que ese lapso de seis meses constituye el
máximo dentro del cual debe hacerse efectiva la desvinculación del Servicio y no un tiempo mínimo
garantizado de funciones (12692/96).
Dado que en nuestra legislación no existe ningún requisito relacionado con la salud que impida
prestar servicios en un organismo del Estado en virtud de un contrato a honorarios -a diferencia de
lo que ocurre para desempeñar un cargo público, en que se requiere salud compatible, de acuerdo
a lo establecido en el artículo 12, letra e), de la ley 18834-, no resulta procedente hacer extensiva tal
exigencia a quienes cesaron en funciones en la Administración por haberles sido declarada su salud
irrecuperable y sean posteriormente contratados sobre la base de honorarios, toda vez que éstos
no se rigen por el referido Estatuto. Tampoco se encuentran sujetos a la limitación contenida en el
artículo 113 del citado texto legal, pues ella dice relación, exclusivamente, con la reincorporación a
la Administración del Estado, es decir, constituye una inhabilidad referida únicamente al ingreso a
un cargo o empleo público, ya sea en calidad de planta o a contrata, razón por la cual, no resulta
procedente hacerla extensiva a las contrataciones que sobre la base de honorarios efectuén los
servicios públicos. Tales conclusiones se conforman, además, con lo dispuesto en la Constitución
Política en su artículo 19, W 16, en cuanto asegura a todas las personas la libertad de trabajo y
su protección. No obstante lo anterior, las autoridades respectivas deberán ponderar si, en cada
caso, las condiciones de salud que motivaron la declaración de irrecuperabilidad, constituyen un
impedimento para la prestación efectiva y oportuna de los servicios que se requiere contratar sobre
la base de honorarios (14396/08. Reconsidera toda jurisprudencia administrativa contraria).
Es improcedente declarar vacante los cargos de los funcionarios sometidos a proceso por crimen o
simple delito, atendida la naturaleza esencialmente transitoria de la resolución judicial que ordena
su encausamiento (3854/92, 19863/95).
Si un funcionario es condenado por crimen o simple delito, no procede declarar vacante su cargo
por pérdida sobreviniente de alguno de los requisitos de ingreso a la Administración del Estado, sino
que, una vez tramitado el respectivo sumario administrativo, debe aplicársele la medida disciplinaria
de destitución (34373/93, 21054/01 ).
La inhabilidad establecida en el artículo 54, letra e), de la ley 18575, que impide el ingreso a la
Administración Pública de las personas que se hallen condenadas por crimen o simple delito,
condiciona también la permanencia en ella, incluso para quienes tenían la calidad de funcionarios
a la fecha de entrada en vigor de la ley 19653. Ello, por cuanto la inhabilidad señalada resulta
aplicable tanto respecto del ingreso a la Administración como de la permanencia del empleado,
puesto que a falta de reglas especiales, deben cumplirse los mismos requisitos tanto en uno como
en otro caso (37945/04).
Letra d)
Desde treinta días antes y hasta sesenta días después de una elección presidencial y desde treinta
días antes de la realización de una elección ordinaria o extraordinaria dentro de las respectivas
circunscripciones, el personal de la Administración del Estado se encuentra amparado por la
inamovilidad funcionaria a que se refieren los artículos 156 y 157 de la Ley Orgánica de la Contraloría
General de la República, en el sentido que no puede decretarse en su contra la medida disciplinaria
de destitución, salvo que el sumario haya sido instruido por el Organismo Contralor. Por lo tanto, en
estos casos, la autoridad administrativa no puede sancionar con una medida expulsiva dentro de
los períodos a que se refieren las aludidas disposiciones (28780/93, 41363/97,40803/01,30157/05,
18205/08).
funciones. En caso de no presentar la renuncia, previo sumario administrativo, debe ser destituido
(63000/04, 15616/06). El otorgamiento por sentencia ejecutoriada de alguno de los beneficios
previstos en el artículo 29 de la ley 18216 -remisión condicional de la pena, libertad vigilada o
reclusión nocturna-, supone considerar al favorecido como si no hubiese sufrido condena alguna en
lo referente al cumplimiento de los requisitos de ingreso o permanencia en la Administración. Luego,
en este último caso, no se encuentra obligado a declarar la inhabilidad ni presentar su renuncia en
los términos expresados por el artículo 64 de la ley 18575, así como tampoco procede la aplicación
de la medida disciplinaria de destitución en su contra por omisión de dichas obligaciones (16593/04,
36773/06).
Letra e)
La supresión de un cargo o empleo es una facultad privativa conferida por la ley a determinadas
autoridades administrativas, sin condicionar su ejercicio a la concurrencia de determinados
supuestos o causales, correspondiendo a aquéllas, ponderar las circunstancias que aconsejan su
adopción. Por ello, no procede que la Contraloría General califique en estos casos los aspectos
de mérito, oportunidad o conveniencia inherentes a esas decisiones. Esta forma de cesación de
funciones presupone, para dar derecho a la indemnización prevista en el articulo 148 del Estatuto
Administrativo, la existencia de un proceso de encasillamiento por reestructuración de la planta que
regía para la respectiva institución (17565/92, 34686/93, 23449/96).
De acuerdo con diversas disposiciones legales el Rector de la Universidad de Chile tiene atribuciones
para suprimir empleos. La Contraloría General al analizar los actos administrativos emanados de
esa Casa de Estudios Superiores que suprimen cargos, específicamente en lo que concierne a la
acreditación de los hechos que motivan tales medidas, debe, por regla general, limitarse a exigir
un informe de esa autoridad que declare que las mismas obedecen a una necesidad institucional
relacionada con la modificación de la estructura, funciones o programación de las unidades que
conforman la Universidad. No obstante, en los casos en que los afectados con el consecuente
cese de funciones acompañen antecedentes fidedignos de los que aparezca claramente que el
motivo de la supresión es la eliminación de determinado personal, este Organismo Fiscalizador
estará obligado a solicitar y estudiar otros documentos sobre la materia, y sólo podrá dar curso al
decreto respectivo si mediante esos antecedentes se forma la convicción de que la causa final de
la medida es la necesidad de prescindir de los empleos en que incide y no de las personas que los
ocupan (29203/95).
Letra f)
Procede no renovar el contrato de un funcionario, de acuerdo con el artículo 9 (actual artículo 1O) del
Estatuto Administrativo, que venció cuando se encontraba haciendo uso de licencia médica, porque
a su respecto operó la causal legal de expiración de funciones relativa al término del período legal de
nombramiento o cumplimiento del plazo del contrato, cuyo efecto es producir la inmediata cesación
en el cargo (15577/92, 31424/94, 33051/94, 8217/95).
Letra g)
Cuando fallece un empleado afecto a la ley 18834, el cese de funciones se produce a contar del día
siguiente de la defunción. En este caso, corresponde dictar una resolución que declare la vacancia
del cargo, la que debe enviarse a la Contraloria General para su registro y toma de razón (5523/69,
24843/90, 24067/99).
El beneficio que contempla el artículo 109 (actual artículo 114) del Estatuto Administrativo para el
cónyuge, hijos o padres de un servidor fallecido en actividad es independiente del cese de funciones,
pues su sentido es establecer una prestación social para los familiares del funcionario que fallece,
por lo cual no puede entenderse que en virtud de este precepto su vinculo con el Servicio deba
prolongarse más allá del día de su muerte (8571/93).
Concordancias generales: Arts. 43, 46 y 49 de la LOCBGAE; 89, 147 a 156 EA; 144 del EAM.
Comentarios:
El cese de funciones consiste en la extinción del vínculo jurídico que une al funcionario con el
Estado.
La disposición descrita constituye un marco preestablecido sobre cuya base la ley estatutaria ha
desarrollado el régimen de expiración de funciones de los servidores públicos y las modalidades que
deben cumplir las diversas causales para que operen con eficacia. Respecto de ellas, el legislador ha
contemplado requisitos comunes de legalidad, de taxatividad, procedimiento formal y comunicación
al afectado.
La exigencia de legalidad supone que los funcionarios públicos sólo pueden cesar en sus empleos
de acuerdo con una causal prevista en la ley; la taxatividad significa que a los agentes del Estado
únicamente se les puede aplicar las causales que contempla el Estatuto Administrativo; los requisitos
de procedimiento formal y comunicación, importan que las medidas de expiración de funciones deben
ser aplicadas por la autoridad competente mediante el acto administrativo correspondiente sometido
a trámite de toma de razón en la Contraloría General, y comunicado mediante notificación personal
al afectado.
ARTICULO 147.- La renuncia es el acto en virtud del cual el Ley 18.834. Art. 141.
funcionario manifiesta a la autoridad que Jo nombró la voluntad de
hacer dejación de su cargo.
Interpretación:
Inciso 1•
Conforme al articulo 141 (actual articulo 147) de la ley 18834, la renuncia es el acto por el cual el
funcionario manifiesta a la autoridad la voluntad de hacer dejación de su cargo, la cual no puede
formularse condicionada a la concesión de determinados beneficios. Sin embargo, nada obsta
para que una persona, luego de renunciar, sea contratada por el mismo Servicio a que pertenecía
(22037/90, 1730/94).
La fecha de la renuncia al cargo no puede ser anterior a aquella en que el interesado la presente a la
autoridad administrativa, pues ésta necesita contar con un pl~zo prudencial para resolver la dimisión,
por cuanto se encuentra facultada para calificar la necesidad y conveniencia del alejamiento de un
funcionario en una época determinada. Por tal motivo, es improcedente el acto administrativo que la
acepta en esas condiciones y porque, además, no puede operar retroactivamente, salvo disposición
legal que asilo determine (12903/90, 21051/95).
Sobre la eficacia jurídica del desistimiento efectuado mediante soporte electrónico, es menester
señalar que el articulo 3 de la ley 19799, sobre Documentos Electrónicos, Firma Electrónica y
Servicios de Certificación de Firma, dispone, en lo pertinente, que los actos otorgados por personas
naturales, suscritos por medio de firma electrónica, serán válidos de la misma manera y producirán
los mismos efectos que los celebrados por escrito y en soporte de papel, agregando que se reputarán
como escritos en los casos en que la ley exija que los mismos consten de ese modo y en todos
aquellos casos en que la ley prevea consecuencias jurídicas cuando consta igualmente por escrito.
Luego, el desistimiento realizado mediante correo electrónico, en lo que a su soporte y firma se
refiere, es plenamente válido, íntegro y auténtico, e impide que opere la causal de cese de funciones
por renuncia voluntaria presentada. Para que dicha retractación de la renuncia voluntaria produzca
efecto, debe ser presentada antes de la fecha a contar de la cual la renuncia se haría efectiva y el
funcionario renunciado no haber abandonado la institución (49679/05).
Corresponde pagar las remuneraciones a un ex funcionario que cesó en su cargo por aceptación
de renuncia a contar de una fecha determinada, pero continuó prestando funciones hasta la total
tramitación del decreto que aceptó esa dimisión, con conocimiento de la autoridad respectiva y sin
que ésta objetara su desempeño, con provecho para la Administración, teniendo, por tanto, la calidad
de funcionario de lacto. Por tal motivo, esas labores no pueden considerarse como una prolongación
indebida de funciones, y pese a su precariedad, debe aplicarse el principio retributivo que caracteriza
el desempeño de cualquier función pública, cuya vulneración significaría un enriquecimiento sin
causa para la Administración (18672/91, 30697/94).
Un funcionario que presentó su renuncia no voluntaria a contar de una determinada fecha y que fue
aceptada por la autoridad en esos términos, no tiene derecho al pago de remuneraciones durante
el período comprendido desde el instante de presentación de aquélla y la data de aceptación de la
misma, porque si un empleado presenta su renuncia no voluntaria para que se haga efectiva en una
fecha precisa, y de ese modo es aceptada por la autoridad, cesa legalmente en servicio en dicha
data (11609/01).
Procede pagar la asignación por cambio de residencia cuando el término de funciones de un servidor
se debe a la presentación de renuncia voluntaria, puesto que el artículo 93 (actual artículo 98), letra
d), del Estatuto Administrativo, no hace distingos en cuanto a la causal de dicho cese (4479/90,
10178/01).
Si no consta que el afectado ha representado por escrito y en forma oportuna el hecho de haber sido
presionado para presentar su dimisión, y el supuesto apremio de que habría sido objeto no configura
en derecho un requerimiento que lo situara en el imperativo de renunciar, sólo puede estimarse
que su decisión obedeció a su propia manifestación de voluntad para abandonar el cargo (7398/92,
2598/96).
La renuncia es un acto personalísimo. Por tal motivo, si una persona suscribe una renuncia en
nombre de otra en calidad de representante, el poder conforme al cual actúa esa persona como
mandatario debe contemplar, en forma explícita, las facultades de que éste se halla investido, y entre
ellas, la de renunciar al empleo que desempeña el mandante (13737/92).
No existe norma legal alguna que obligue a la autoridad a mencionar en el acto administrativo que
acepta la renuncia, las razones o motivos en que se funda la determinación de un funcionario de
renunciar, mas aún tratandose de un alejamiento voluntario (19049/92).
El empleado que renuncia a un empleo de planta para asumir otro a contrata en el mismo Servicio,
no tiene derecho a continuar percibiendo la planilla suplementaria de que gozaba en el primitivo
cargo. Ello, por no existir una disposición legal que reconozca ese derecho y porque una de las
causales por las cuales un funcionario cesa en sus funciones es, precisamente, la aceptación de la
renuncia, la cual traera como consecuencia, entre otras, que ese trabajador pierda el derecho a las
remuneraciones q~e percibía al desempeñar aquel empleo (17099/92).
La renuncia voluntaria sólo es aplicable a los funcionarios públicos, calidad que no reviste el personal
contratado sobre la base de honorarios, respecto del cual sólo procede poner término al convenio
(31271/93, 14225/95).
Inciso 2•
La renuncia al cargo y sü aceptación por parte de la autoridad hace cesar todos los efectos de los
actos administrativos dispuestos en relación con el vínculo estatutario que, en lo laboral, une al
funcionario con el Estado, el cual queda definitivamente extinguido (36798/95) .
.Es improcedente dejar sin efecto una renuncia voluntaria cuando ha sido aceptada por la autoridad
competente y el documento que la materializa ha sido totalmente tramitado, produciendo todos sus
efectos legales (7398/92, 14924/99).
interesado o hacerlo a contar de la total tramitación del documento respectivo. Luego, si el empleado
presenta la renuncia señalando una fecha determinada para hacer abandono de su empleo, no
implica necesariamente que sea esa la data a partir de la cual operará esta causal de expiración
de funciones, ya que para ello es preciso, además, que la autoridad competente acepte la renuncia
presentada en tales términos (75821/76, 30998/92, 24838/95, 22947/97, 6032/00, 2781/07).
Las renuncias que tienen una fecha determinada, producen sus efectos a contar de la misma, si
asi lo dispone la autoridad, pero ello no puede alterar el principio de la irretroactividad de los actos
administrativos, por lo que la dimisión debe ser presentada antes de la data desde la cual regirá. En
consecuencia, el documento que acepta la renuncia presentada con una fecha cierta puede emitirse
con posterioridad a ella (20016/96, 21290/96).
Inciso 3"
Si bien de acuerdo con el inciso final del articulo 141 (actual artículo 147) de la ley 18834, cuando se
encontrare en tramitación un sumario administrativo en el que estuviere involucrado un funcionario
que cesare en sus funciones, el procedimiento debe continuar hasta su normal término, ello no
permite a la autoridad retener la renuncia voluntaria presentada por el funcionario involucrado por
más de treinta días, conforme al inciso tercero de esa misma norma, correspondiendo que se dicte
un acto administrativo que acepte la renuncia (13463/90, 32514/90, 8820/93, 27980/93, 37834/94).
No existe ninguna disposición que faculte a la autoridad para retener la renuncia de un funcionario no
sometido a sumario, por lo que si la autoridad administrativa no cursa una dimisión, vulnera el principio
de legalidad consagrado en los artículos 6 y 7 de la Constitución Política, reiterado por el artículo
2 de la ley 18575. El inciso tercero del artículo 141 (actual artículo 147), sólo autoriza a retener la
renuncia de un empleado sometido a un proceso disciplinario del cual emanen antecedentes serios
de que puede ser alejado de la institución por aplicación de una medida expulsiva. La autoridad
competente, no puede dejar transcurrir un tiempo más allá del razonable para aceptar la renuncia,
pues en tal evento se configuraría, por una parte, una retención indebida y, por otra, se impondría
al afectado la carga de continuar prestando servicios, la que, de acuerdo con el artículo 19, N" 20,
de la Carta Fundamental, sólo procede establecer por ley. La renuncia a un empleo público no se
fundamenta únicamente en la ley estatutaria sino también en el N" 16 del artículo 19 de la Ley
Suprema, que consagra la libertad de trabajo y la consiguiente opción de cada persona de mantener
o cambiar de oficio, garantía que deben considerar y respetar los órganos de la Administración
(37683/95, 5428/96, 14831/96, 15178/97,6032/00, 61043/05).
La autoridad está obligada a aceptar la renuncia voluntaria presentada por un funcionario sometido a
sumario administrativo del que emanen antecedentes serios de que pueda ser alejado de la institución
por aplicación de la medida disciplinaria de destitución, en un plazo no superior a treinta días, sin que
pueda rechazarla (13934/94).
Existe abandono de funciones si el agente público presenta su renuncia y deja de concurrir a prestar
servicios, sin esperar el pronunciamiento de la autoridad que disponga su aceptación. En cambio, "'e
Q)
o
·¡¡
no se configura este abandono cuando la autoridad no resuelve sobre esa renuncia con la debida
e
diligencia, afectando los derechos del trabajador en términos de colocarlo en la necesidad de dejar ::J
LL
de asistir a cumplir sus funciones, disponiendo luego, por este hecho, la instrucción de un sumario
administrativo (15178/97). "'•O"'c.
·¡¡
Procede retener la renuncia de funcionarios regidos por el Código del Trabajo sometidos a sumario ->m"'
. oü
m
en los términos del inciso tercero del artículo 141 (actual artículo 147) del Estatuto Administrativo, -m
:S-
puesto que si bien ese Código contempla la renuncia como forma de finiquitar el contrato, renuncia ... "'
i=o
que de acuerdo con el principio de libertad de trabajo contemplado en el artículo 19, N" 16, de
la Constitución Política de la República, no puede rechazarse por el empleador, la presentación
voluntaria de una dimisión tampoco podría constituir un medio para eludir sanciones emanadas de la
responsabilidad administrativa, permitiendo la impunidad, por cuanto ello significaría que por esa vía
el empleado evitaría la efectividad de la pena y la inhabilidad del artículo 38, letra f), de la ley 10336
y, además, el principio de probidad administrativa perdería su eficacia jurídica (26608/98).
Inciso 4•
La expresión "se encontrare en tramitación" que emplea el inciso final del artículo 141 (actual artículo
147) debe entenderse referida a partir del instante en que se dicta la resolución exénta que ordena
instruir el proceso y no desde el momento de constitución de la fiscalía. Por lo tanto, desde la fecha
de ese acto administrativo debe entenderse en tramitación el proceso disciplinario (16893/90,
28483/95).
La expresión "sumario administrativo" que utiliza el inciso final del artículo 141 (actual artículo 147) es
genérica e incluye a la investigación sumaría, por cuanto ambos procesos disciplinarios constituyen
los medios idóneos con que cuenta la Administración para hacer efectiva la responsabilidad del
empleado que infringe sus obligaciones y deberes funcionarios (31599/90, 32327/90, 12726/91,
13824/91, 6036/94).
La expresión "cesare en sus funciones" que menciona el inciso final del artículo 141 (actual artículo
147) es genérica y, por ende, debe entenderse que comprende cualquier causal de expiración de
funciones que se produzca encontrándose pendiente la tramitación de un proceso disciplinario
(13640/92).
La frase "hasta su normal término" que emplea el inciso final del artículo 141 (actual artículo 147),
debe entenderse referida al acto administrativo que afina formalmente el proceso disciplinario, esto
es, el decreto o resolución que se emite luego de notificadas las medidas y resueltos los recursos
que procedan (16893/90, 26505/98, 34842/01 ).
su renuncia fue tomada razón y notificada al afectado con posterioridad al comienzo del sumario.
Conforme al inciso final del articulo 141 (actual artículo 147) de la ley 18834, procede, en su caso,
reabrir el proceso administrativo y dictar una resolución de acuerdo con la proposición del fiscal,
dictando finalmente un documento formal sujeto a trámite de toma de razón, que aplique la sanción
pertinente o absuelva si existe mérito para ello (549/92, 9883/94).
Servidor que cesó en funciones por destitución puede ser objeto nuevamente de esa sanción por
hechos distintos investigados en otro sumario administrativo, de acuerdo con el artículo 141, inciso
final (actual artículo 147, inciso final) de la ley 18834 (15083/91 bis).
Si bien de acuerdo con el inciso final del artículo 141 (actual artículo 147) de la ley 18834, cuando
se encontrare en tramitación un sumario administrativo en el que estuviere involucrado un empleado
que haya cesado en funciones, el procedimiento debe continuarse hasta su normal término, ello no
permite a la autoridad rechazar la renuncia voluntaria presentada por el funcionario, ni retenerla por
más de treinta días, correspondiendo que se dicte un acto administrativo que acepte esa renuncia
(13463/90, 17105/90, 31891/90,32514/90, 8820/93,27980/93, 37834/94).
Una investigación sumaria instruida a un ex funcionario que a la época de iniciación de dicho proceso
estaba fuera de la Administración Pública por renuncia voluntaria a su cargo, debe afinarse a través
de un documento formal emitido por la autoridad que disponga su sobreseimiento (9099/91 ).
Debe notificarse la medida disciplinaria que se aplique al empleado alejado del Servicio durante
la tramitación del sumario que le afecta, por cuanto la toma de razón a que están sometidos los
actos que afinan estos procesos tiene por fin verificar si en ellos se ha respetado la ley estatutaria y
cumplido las reglas de procedimiento (16893/90, 26505/98).
El inciso final del articulo 141 (actual articulo 147) es plenamente aplicable a las investigaciones
sumarias incoadas por infracción al decreto ley 799, de 1974, sobre uso y circulación de vehículos
estatales, que afecten al personal regido por la ley 18834, pero no así tratándose de los servidores
públicos sometidos a las disposiciones del Código del Trabajo, como quiera que la referida disposición
del Estatuto Administrativo constituye una norma de carácter sustantivo que concierne a los efectos
que tiene en la instrucción de un proceso administrativo -sumario o investigación sumaria- el
hecho objetivo de que el servidor en él involucrado, sujeto a sus prescripciones, cese en su empleo
encontrándose pendiente la tramitación del mismo (12726/91).
Procede retener la renuncia de los funcionarios regidos por el Código del Trabajo sometidos a
sumario en los términos del inciso tercero de este articulo 141 (actual articulo 147), sin desmedro
de la tramitación del proceso sumarial hasta su término y la anotación pertinente en la hoja de vida
(26608/98).
Concordancias: Arts. 19, N' 16, de la CP de la R.; 46 de la LOCBGAE; 14, 146, letra a), y 157, letra
b), del EA; 12 del CC; 145 del EAM.
Comentarios:
La renuncia a un cargo público se fundamenta no sólo en la ley estatutaria, sino que en el N'16 del
articulo 19 de la Constitución Política de la República, que asegura a todas las personas la libertad de
trabajo y su protección, lo cual supone por parte del legislador crear las condiciones para garantizar
las libertades de contratación y de elección del trabajo y, por ende, permitir el ejercicio en plenitud a
cada persona de optar por mantener o cambiar el oficio, cargo o actividad que desempeñe, garantía
que los órganos de la Administración del Estado deben respetar en forma integral.
Cabe tener presente, en todo caso, que la causal de cese a que se refiere esta disposición se
denomina aceptación de renuncia, lo que significa que además de la manifestación formal de voluntad
del renunciante, para que se tipifique esa causal es necesario también la concurrencia de la voluntad
de la autoridad administrativa.
ARTICULO 148.- En los casos de cargos de exclusiva confianza, la Ley 18.834, Art. 142.
remoción se hará efectiva por medio de la petición de renuncia que
formulará el Presidente de la República o la autoridad llamada a
efectuar el nombramiento.
Interpretación:
Los funcionarios que ocupan cargos de exclusiva confianza se mantienen en los mismos mientras
cuentan con aquélla, dependiendo su remoción de la voluntad de la autoridad facultada para efectuar
el nombramiento. Ello se infiere del articulo 51 (actual articulo 49) de la ley 18575, que señala lo
que debe entenderse por personal de exclusiva confianza, y de los articulas 6, 142 y 144, letra d)
(actuales articulas 6, 148 y 150, letra d), de la ley 18834, que lo excluye de la carrera funcionaria,
y regulan la petición de renuncia y la declaración de vacancia, como formas de cese de funciones
de esa clase de servidores, respectivamente. Por ello, la petición de renuncia que se formula a
estos empleados constituye el ejercicio de una atribución privativa de la autoridad facultada para
disponer su nombramiento y que expresa su propósito de removerlos de sus cargos por estimar que
dejaron de contar con la confianza requerida. Estas remociones producen en materia previsional, los
mismos efectos que la renuncia no voluntaria. En consecuencia, el aludido personal puede jubilar
por expiración obligada de funciones, de acuerdo con los artículos 12 del decreto ley 2448, de 1978,
o 131 del DFL 338, de 1960, en su caso, si con arreglo al articulo 14 transitorio (actual articulo 13
transitorio) de la ley 18834, han podido mantener el régimen previsional antiguo. El otorgamiento de
potestades a la autoridad administrativa en materia de nombramientos y remociones de los empleados
de exclusiva confianza, no significa que pueda actuar arbitrariamente, sino sólo tiene por objeto
permitirle contar con los medios jurídicos idóneos para realizar adecuadamente la administración
del organismo bajo su dependencia, cuya finalidad última es satisfacer el interés general.
Por consiguiente, cuando ejerce una de sus atribuciones con un objetivo distinto del considerado por
el legislador al concederle un poder de apreciación discrecional, la decisión adoptada queda afectada
por una desviación de poder y viciado el acto administrativo que la contiene. Las consideraciones
precedentes deben tenerlas presentes las autoridades administrativas cuando, con el objeto de
crear causales de jubilación prematuras o mejorar significativamente el monto de la pensión sin que
guarde relación con las imposiciones efectuadas durante la carrera funcionaria, nombran en cargos
de exclusiva confianza a servidores de graduación media o baja, a los que luego se les solicita la
renuncia no voluntaria, y en algunos casos incluso, una vez resuelta su remoción, se les contrata en
empleos similares a los que desempeñaban primitivamente (3837101 ).
La regla general relativa a que la renuncia a un empleo sólo produce efectos desde la fecha en que
queda totalmente tramitado el decreto o resolución que la acepta o declara vacante el cargo, según
el caso, salvo que en la renuncia se indique una data determinada y así lo disponga la autoridad,
no es plenamente aplicable a los cargos de exclusiva confianza, porque quienes los ocupan no
están amparados por el derecho a la función previsto en el articulo 83 (actual articulo 89) de la ley
18834, por cuanto se mantienen en sus puestos mientras cuenten con la confianza de la autoridad
correspondiente, dependiendo su remoción de la sola voluntad de ésta. La petición de renuncia
que se formula a esos dependientes, constituye el ejercicio de una facultad privativa que expresa
la voluntad de la Administración -Presidente de la República o la autoridad llamada a efectuar el
nombramiento- de removerlos del empleo que sirven, de modo que una vez presentada la renuncia
o transcurrido el plazo sin que ella se presente, en el acto que la acepte o declare la vacancia del
cargo, bien puede fijar una época distinta a la de su total tramitación, a contar de la cual puede
producir efectos, siempre que esta fecha sea posterior a la petición de renuncia que le sirve de
fundamento (27371/93, 8312/95, 19313/95, 25928/96).
Los cargos de profesionales de la Contraloria General son empleos de la exclusiva confianza del
Contralor General, conforme al articulo 3, inciso segundo, de su Ley Orgánica 10336, norma que
se encuentra plenamente vigente porque no ha sido afectada con la dictación de la ley 18834,
ordenamiento que sólo tiene aplicación supletoria respecto del personal de ese Organismo, en lo no
regulado por dicha Ley Orgánica. La atribución del Contralor para pedir la renuncia no voluntaria
no está restringida por la designación del titular en otro cargo de exclusiva confianza, conforme a
la regla de compatibilidad prevista en el articulo 81 (actual articulo 87), letra e), en relación con el
articulo 82 (actual articulo 88) de la ley 18834 (853/91).
La renuncia solicitada a los funcionarios que han sido contratados en cargos de exclusiva confianza,
en lugar de poner término a sus contratos, produce como consecuencia que el cese de sus funciones
no se haya motivado por expiración de los contratos por no ser necesarios los servicios, sino que
ha derivado de la pérdida de la confianza indispensable para el desempeño del empleo dada la
naturaleza de éstos, circunstancia que implica una renuncia no voluntaria (1491191).
Es improcedente declarar la vacancia del cargo que ejerce una funcionaria de exclusiva confianza si
está embarazada. Ello, porque las facultades de la autoridad para disponer de las plazas que revisten
la calidad de exclusiva confianza se encuentran limitadas por las normas especiales sobre protección
a la maternidad, previstas en el Libro 11 del Titulo 11 del Código del Trabajo, artículos 194 y siguientes,
aplicables a la generalidad de las servidoras de la Administración del Estado. Dicha inamovilidad
se extiende durante el periodo de embarazo y hasta un año después de expirado el descanso de
maternidad, de acuerdo con lo señalado en el articulo 201 del referido Código. Sólo prevalecen
por sobre la mencionada preceptiva de protección a la maternidad, los ceses de funciones de los
servidores de exclusiva confianza a que se refiere la Constitución Política (15483/92, 42867/01).
Los titulares de empleos de exclusiva confianza sólo tienen derecho a remuneraciones hasta la
fecha en que su cargo fue declarado vacante, en conformidad con los artículos 140, letra e), y
142 (actuales artículos 146, letra e) y 148) del Estatuto Administrativo, sin que la circunstancia de
encontrarse haciendo uso de licencia médica les permita percibir emolumentos con posterioridad
a esa data. Ello, porque el hecho que un empleado esté gozando de ese beneficio no obsta a la
expiración de sus servicios, cuando ésta se produce por alguna causa legal, como ocurre en el
caso en estudio, en que la medida adoptada respecto del afectado constituye una facultad del Jefe
Superior del organismo (11802/97).
Comentarios:
Tal como consta en el Mensaje con que el Presidente de la República envió a trámite al Congreso
Nacional la ley 19154 -que modificó la ley 18575, Orgánica Constitucional de Bases Generales de la
Administración del Estado, la ley 18834, sobre Estatuto Administrativo, y otros cuerpos legales que
indica-, "el sistema de carrera es la regla general (lo que se confirma expresamente en el artículo
38, inciso primero, de la Constitución Política), y la excepción, que ha de originarse en la naturaleza,
importancia, jerarquía o directa relación con la autoridad política de los empleos, está constituida por
los que se declaren de la exclusiva confianza".
Es interesante destacar que al no existir un procedimiento taxativo para solicitar la renuncia a los
funcionarios de exclusiva confianza, ella puede ser requerida en forma verbal o escrita. Asimismo,
una vez aceptada la renuncia de estos servidores, produce sus efectos a partir de la notificación al
interesado del decreto o resolución de aceptación. Por último, la remoción así decretada provoca
los mismos efectos de una renuncia no voluntaria, figura jurídica que si bien no está expresamente
regulada en la ley 18834 -como, en cambio, lo estaba en el anterior Estatuto Administrativo aprobado
por el DFL 338, de 1960-, se considera por la jurisprudencia administrativa que subsiste únicamente
respecto de estos personales.
ARTICULO 149.- El funcionario que jubile, se pensione u ob(enga una Ley 18.834, Art. 143.
renta vitaliCia en un régimen previsional, en relación al respectivo
cargo público, cesará en el desempeño de sus funciones a contar del
día en que, según las normas pertinentes, deba empezar a recibir la
pensión respectiva.
Interpretación:
El otorgamiento de una pensión antes de reunir los requisitos de edad establecidos en el decreto ley
3500, de 1980, hace aplicable la causal de cese de funciones prevista en los artículos 140, letra b),
y 143 (actuales artículos 146, letra b) y 149) de la ley 18834, preceptos que no distinguen respecto
de la naturaleza de la pensión que se concede dentro del nuevo sistema de pensiones que regula
ese decreto ley (31327190).
El articulo 69 del decreto ley 3500, de 1980, que permite a los afiliados al nuevo sistema de pensiones
seguir trabajando ininterrumpidamente una vez concedida la jubilación, no se aplica a los funcionarios
públicos que están regidos por normas estatutarias que establecen en forma imperativa la expiración
de funciones por el solo ministerio de la ley en el caso de obtener pensión o renta vitalicia en un
régimen previsional, en relación con un cargo público. En todo caso, el jubilado puede reincorporarse
a la Administración, conservando su pensión (9826191, 21572195).
Las leyes 18834 y 18883 han agregado a la jubilación, como causales de término de servicios,
la pensión o renta vitalicia en un régimen previsional, en relación con el respectivo cargo, con el
exclusivo propósito de hacer equivalentes sus normas con las del DFL 338, de 1960, en armonía con
todos los beneficios que concede el decreto ley 3500, de 1980, sin que pueda distinguirse respecto
de tales franquicias ni agregarse nuevas exigencias respecto de ellos. La expresión "en relación al
respectivo cargo" que consultan los artículos 140 (actual articulo 146), letra b), y 144 (actual articulo
150), letra b) de esos Estatutos, respectivamente, agregada en relación al mencionado decreto ley
3500, de 1980, significa que la pensión debe obtenerse por un trabajador dependiente y no por un
independiente, únicas clases de trabajadores que establece el sistema para que éste opere, y que
la pensión no sea de sobrevivencia, por cuanto ésta es la que se asigna a los familiares del afiliado
(1327191 ).
Procede dejar a firme las remuneraciones que percibió un funcionario con posterioridad a la fecha
en que debió cesar en funciones por haber obtenido jubilación, por cuanto continuó desempeñando
servicios con el conocimiento de la autoridad administrativa, lo cual significó un beneficio para la
Administración. Por tal motivo, el no pago de las mismas produciría un enriquecimiento sin causa
para el Estado (9826191, 5865192, 1075193, 21572195).
La declaración de vacancia del cargo por salud irrecuperable opera como causal especifica de
cesación de funciones, sin que pueda aplicarse el articulo 143 (actual artículos 149) del Estatuto
Administrativo. Ello, por cuanto el cese que en esta disposición se contempla por jubilación,
pensión o renta vitalicia en un sistema previsional, en general, supone un acto voluntario destinado
a la obtención de beneficios previsionales, lo cual no ocurre en el procedimiento de término de los
servicios que culmina con el otorgamiento de una pensión por salud irrecuperable (16032191).
Desde la fecha en que comienza a regir una pensión de invalidez parcial, como es la prevista en el
articulo 38 de la ley 16744, se produce el cese de funciones en las plazas servidas, conforme a los
artículos 140 letra b) (actual articulo 146, letra b) y 143 (actual articulo 149) de la ley 18834, ya que
dichos preceptos no distinguen al respecto (30257196).
A contar del 1 de abril de 1991, fecha de vigencia del decreto 57, de 1990, del Ministerio del Trabajo y
Previsión Social, Subsecretaria de Previsión Social, que aprobó el Reglamento del decreto ley 3500,
de 1980, tratándose de funcionarios regidos por las leyes 18834 y 18883, a quienes se les aplica
el nuevo sistema de pensiones, las Administradoras de Fondos de Pensiones tienen la obligación
de notificar al empleador la fecha de otorgamiento de la pensión, dentro de los cinco días hábiles
siguientes a la presentación de la solicitud de pensión, en caso de vejez, o de la selección de
modalidad de pensión, en el evento de vejez anticipada, de acuerdo con el inciso segundo del
artículo 71 del señalado Reglamento (22124/91).
En el ámbito del Estatuto Administrativo el cese de funciones constituye una consecuencia necesaria
del hecho de acogerse un funcionario a jubilación, cualquiera sea su régimen previsional (4773/92).
Si bien la aplicación del artículo 143 (actual articulo 149) de la ley 18834 está sometida a las
atribuciones que sobre la regulación de las materias estatutarias posee la Contraloría General de la
República, la condición requerida para ello debe ser calificada, conforme al artículo 94 del decreto ley
3500, de 1980, por la Superintendencia de Administradoras de Fondos de Pensiones (15869/96).
Concordancias: Arts. 46 de la LOCBGAE; 89, 146, letra b), del EA; 110 y ss. del DFL 338, de
1960, anterior Estatuto Administrativo; ley 18689, fusiona en el Instituto de Normalización Previsional
las instituciones previsionales que indica; Arts. 53, 54, 63 y décimo sexto y vigésimo transitorios,
todos de la ley 20255, que establece Reforma Previsional, disponen la creación del Instituto de
Previsión Social, el cual será considerado para todos los efectos sucesor y continuador legal del
Instituto de Normalización Previsional; DFL 1340, bis, de 1930, Ley Orgánica de la ex Caja Nacional
de Empleados Públicos y Periodistas; DL 3500, de 1980, establece Nuevo Sistema de Pensiones;
Decreto 57, de 1990, del Ministerio del Trabajo y Previsión Social, Subsecretaría de Previsión Social,
Reglamento del DL 3500, de 1980; Art. 146 del EAM.
Comentarios:
La jurisprudencia administrativa ha declarado, sobre la base del artículo 149 de la ley 18834, que
la fecha a partir de la cual opera la causal de cese de funciones prevista en el artículo 146, letra b),
de esta ley, está determinada por el momento en que según las normas pertinentes el empleado
empieza a recibir la pensión respectiva.
En otro orden de ideas, con la entrada en vigor del decreto ley 3500, de 1980, comenzó a regir un nuevo
sistema de pensiones, cuyo manejo y gestión radica en organismos privados -sociedades anónimas-
denominadas Administradoras de Fondos de Pensiones, y aplica un régimen de capitalización
individual, sin perjuicio de permitir que los funcionarios en servicio a esa época y quienes se afiliaron
por primera vez antes del 31 de diciembre de 1982, pudieran optar por mantenerse en el sistema
antiguo.
En consecuencia, actualmente los funcionarios públicos pueden jubilar mediante dos sistemas:
1) el de las Cajas de Previsión, en extinción, representadas para estos efectos por el Instituto de
Normalización Previsional -cuyo sucesor y continuador legal es el Instituto de Previsión Social, por
mandato del artículo 53 de la ley 20255, que establece Reforma Previsional-, siempre que se trate
de funcionarios que optaron por quedar adscritos al régimen antiguo de pensiones, con el propósito
de obtener una jubilación, y 2) el de las Administradoras de Fondos de Pensiones respecto de los
funcionarios que se afiliaron a ellas, para los efectos de acceder a una pensión o renta vitalicia.
Conforme a lo dispuesto en los artículos 53 y 54, en relación con los artículos décimo sexto y vigésimo
transitorios de la ley 20255, que establece Reforma Previsional, las referencias que las normas
jurídicas hagan al Instituto de Normalización Previsional con respecto a sus funciones, con excepción
de aquéllas relativas a la ley 16744, sobre Accidentes del Trabajo y Enfermedades Profesionales,
se entenderán efectuadas al Instituto de Previsión Social, que es considerado en este ámbito, su
sucesor y continuador legal, una vez que se constituya e inicie sus actividades según lo disponga
el Presidente de la República. A contar del 17 de marzo de 2008, fecha de publicación de la citada
ley 20255, el Instituto de Normalización Previsional ejercerá las competencias que correspondan al
Instituto de Previsión Social hasta la fecha en que esta última institución entre en funciones.
En relación con esta materia es necesario tener en consideración que la Reforma Previsional contenida
en la ley 20255, modifica diversos cuerpos legales. Entre esas modificaciones cabe destacar las que
se contienen en el Titulo 11 de esa ley denominado "Sobre lnstitucionalidad Pública para el Sistema
de Previsión Social", artículos 39 y siguientes, estableciendo que los órganos públicos que tendrán
la principal responsabilidad del sistema de previsión social serán los siguientes: a) el Ministerio
del Trabajo y Previsión Social; b) la Subsecretaria de Previsión Social; e) la Superintendencia de
Pensiones, que reemplaza a la Superintendencia de Administradoras de Fondos de Pensiones; d)
la Superintendencia de Seguridad Social; e) el Instituto de Previsión Social, que es el sucesor y
continuador legal del Instituto de Normalización Previsional, excepto en lo relativo a las funciones
derivadas de la ley 16744, y f) el Instituto de Seguridad Laboral, que reemplaza con esta nueva
denominación al Instituto de Normalización Previsional, salvo en el ámbito de las funciones y
atribuciones que se traspasan al Instituto de Previsión Social.
Los decretos con fuerza de ley 1, 2 y 3, todos de 2008, del Ministerio del Trabajo y Previsión Social,
Subsecretaria de Previsión Social, fijan la planta de personal de la Subsecretaria de Previsión Social;
la planta de personal de la Superintendencia de Seguridad Social y la planta de personal y fecha
de iniciación de actividades de la Superintendencia de Pensiones, respectivamente. Este último
decreto con fuerza de ley, en su articulo 1O, determina que la fecha de iniciación de actividades de la
Superintendencia de Pensiones será a contar de la entrada en vigencia de la planta de personal fijada
en su articulo 1°, y dispone desde igual data, la supresión de la Superintendencia de Administradoras
de Fondos de Pensiones.
ARTICULO 150.- La declaración de vacancia procederá por las Ley 18.834, Art. 144.
siguientes causales:
e) Calificación de/funcionario en lista de Eliminación o Condicional, Ley 19.165, Art. 3", b).
de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 50, y
Interpretación:
Letra a)
Salud irrecuperable
La declaración de vacancia del cargo por salud irrecuperable opera como causal especifica de
cesación de funciones, sin que pueda aplicarse el articulo 143 (actual articulo 149) del Estatuto
Administrativo. Ello, por cuanto el cese que en esta disposición se contempla por jubilación, pensión
o renta vitalicia en un sistema previsional, en general, supone un acto voluntario destinado a la
obtención de beneficios previsionales, lo cual no ocurre en el procedimiento de término de los
servicios que culmina con el otorgamiento de una pensión por salud irrecuperable (16032191).
El cese de funciones que se produce por la declaración de vacancia a que se refiere la letra a) del
articulo 144 (actual articulo 150) del Estatuto Administrativo, debe, en el caso de los funcionarios
afectos al antiguo régimen previsional, asimilarse a la renuncia no voluntaria del DFL 338, de 1960
(27158190).
La Contraloria General carece de atribuciones para calificar o ponderar los aspectos técnicos clínicos
que haya considerado la autoridad médica competente al diagnosticar una enfermedad o determinar
acerca de la recuperabilidad o irrecuperabilidad de un funcionario público, como asimismo, para
declarar la procedencia o improcedencia de algún beneficio de indemnización por los eventuales
daños o perjuicios que tales decisiones médicas pudieran ocasionar al empleado, pues este último
aspecto constituye un asunto de naturaleza litigiosa (5012190, 32463198).
Es improcedente emitir un documento que declare vacante el cargo de un funcionario en forma previa
al informe de la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez que declara la irrecuperabilidad de su
estado de salud, puesto que la vacancia del empleo debe ser adoptada luego que se materialice el
pronunciamiento de la autoridad médica respectiva y concurran los demás presupuestos previstos
en el articulo 146 (actual artículos 152) de la ley 18834 (5254190).
El personal que se rige por el Estatuto Administrativo y es imponente del nuevo sistema de pensiones
del decreto ley 3500, de 1980, tiene derecho a percibir, por el plazo de seis meses, el total de sus
remuneraciones de cargo de su empleador si debe retirarse de la Administración, porque el articulo
146 (actual artículos 152) de la ley 18834 no distingue en cuanto a la afiliación de los funcionarios
(8596/90, 28877/90).
Los seis meses de licencia médica por estado de salud no recuperable deben concederse por la
Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez, desde la fecha en que el empleado toma conocimiento
de la declaración de irrecuperabilidad que emite esa Comisión, correspondiendo declarar la vacancia
del cargo a partir del día siguiente de transcurrido dicho plazo, de acuerdo con el articulo 146 (actual
artículos 152) de la ley 18834 (15284/90).
Declarada irrecuperable la salud de un funcionario por la Comisión Médica competente, ésta mantiene
su vigencia mientras no sea revisada o rectificada por el organismo médico pertinente. Por tal
motivo, dicha declaración afectará a todos los empleos compatibles que desempeñe el empleado,
no pudiendo ingresar o reincorporarse a la Administración Pública, a menos que medie un nuevo
pronunciamiento de esa Comisión, que lo declare nuevamente apto para ejercer funciones públicas
(19982/91 -reconsiderado parcialmente por el 39847/97-,20418/92, 4706/02).
Conforme a lo previsto en los artículos 107 (actual articulo 112) de la ley 18834 y 111 de la ley
18883, la declaración de irrecuperabilidad de los funcionarios afiliados a una Administradora de
Fondos de Pensiones, debe ser resuelta por la comisión médica competente de la Superintendencia
de Administradoras de Fondos de Pensiones (reemplazada por la Superintendencia de Pensiones,
de acuerdo a los articulas 46 y sigUientes de la ley 20255, que establece Reforma Previsional), en
conformidad con las normas que rigen a estos organismos (17920/02, 45885/04, 53296/05).
En el caso de los funcionarios que se rigen por el Estatuto Administrativo, las pensiones se devengan
desde el día siguiente a aquél en que termina la licencia de seis meses por salud irrecuperable,
oportunidad a partir de la cual el trabajador debe retirarse del Servicio o declararse vacante el cargo
(20497/94).
La licencia de seis meses por salud irrecuperable sólo libera al trabajador de la obligación de
desempeñar el cargo, manteniendo las remuneraciones correspondientes al mismo, pero no le
confiere inamovilidad, pudiendo ser alejado del Servicio antes del vencimiento de ese plazo, cuando
concurra alguna causa legal de expiración de funciones, como es la declaración de vacancia por
calificación en lista 4, de Eliminación, ya que ese lapso de seis meses constituye el máximo dentro
del cual debe hacerse efectiva la desvinculación del Servicio y no un tiempo mínimo garantizado de
funciones (12692/96, 32397/96).
La notificación de la resolución que declara a un funcionario con salud irrecuperable debe practicarse
mediante la transcripción que el Jefe Superior del Servicio haga llegar al empleado una vez que la
autoridad médica le haya comunicado esa determinación (41389/96).
Si antes del vencimiento del plazo en que expira el contrato de un funcionario se declara irrecuperable
su salud, la Administración está obligada a mantener el vinculo jurídico con aquél y pagarle sus
remuneraciones por el lapso que reste para enterar los seis meses a que alude el articulo 146
(actual articulo 152) de la ley 18834, debiendo, por ende, renovarle la contratación por dicho lapso
(24532/93, 12572/01 ).
opera con efecto retroactivo, debiendo dejarse sin efecto la declaración de vacancia que a su vez
produjo el cese de sus funciones. En este caso, corresponde reincorporar al afectado con derecho al
pago de remuneraciones por todo el periodo que estuvo alejado del Servicio (28643/98, 42613/98).
Dado que en nuestra legislación no existe nungún requisito relacionado con la salud que impida
prestar servicios en un organismo del Estado en virtud de un contrato a honorarios -a diferencia de
lo que ocurre para desempeñar un cargo público, en que se requiere salud compatible, de acuerdo
a lo establecido en el articulo 12, letra e), de la ley 18834-, no resulta procedente hacer extensiva tal
exigencia a quienes cesaron en funciones en la Administración por haberles sido declarada su salud
irrecuperable y sean posteriormente contratados sobre la base de honorarios, toda vez que éstos
no se rigen por el referido Estatuto. Tampoco se encuentran sujetos a la limitación contenida en el
articulo 113 del citado texto legal, pues ella dice relación, exclusivamente, con la reincorporación a
la Administración del Estado, es decir, constituye una inhabilidad referida únicamente al ingreso a
un cargo o empleo público, ya sea en calidad de planta o a contrata, razón por la cual, no resulta
procedente hacerla extensiva a las contrataciones que sobre la base de honorarios efectuén los
servicios públicos. Tales conclusiones se conforman, además, con lo dispuesto en la Constitución
Política en su artículo 19, N" 16, en cuanto asegura a todas las personas la libertad de trabajo y
su protección. No obstante lo anterior, las autoridades respectivas deberán ponderar si, en cada
caso, las condiciones de salud que motivaron la declaración de irrecuperabilidad, constituyen un
impedimento para la prestación efectiva y oportuna de los servicios que se requiere contratar sobre
la base de honorarios (14396/08. Reconsidera toda jurisprudencia administrativa contraria).
Una ex funcionaria, cuyo cargo se declaró vacante por salud irrecuperable, pensionándose por esa
causal, tiene derecho al incentivo monetario previsto en el artículo 1 transitorio de la ley 19553.
Ello, por cuanto se acogió oportuna, voluntariamente y en forma a ese incentivo antes de solicitar
su pensión, cumpliendo todos los requisitos para su obtención, sin que el hecho sobreviniente y
ajeno a su voluntad como es la declaración de irrecuperabilidad de su salud y el reconocimiento de
su derecho a jubilar con arreglo al artículo 128 del DFL 338, de 1960, le impidan obtenerlo, ya que
el objeto de la franquicia es estimular o motivar al personal de la Administración que puede obtener
una pensión, para retirarse, finalidad que se cumple si a ella se le concede ese beneficio por salud
irrecuperable (19327/00).
Salud incompatible
Si bien conforme al DFL 338, de 1960, artículo 233, letra e), el Jefe Superior del Servicio sólo
estaba facultado para pedir la dimisión del empleado, concurriendo los supuestos que ese precepto
indicaba, los artículos 144 (actual artículo 150), letra a), y 145 (actual artículo 151) de la ley 18834,
no han innovado sustancialmente sobre la materia, ya que no establecen una nueva causal de
término de labores. Al respecto, ambos Estatutos facultaron a esa Jefatura Superior para disponer el
alejamiento del servidor que ha hecho uso de licencias médicas por un lapso superior a seis meses,
en forma continua o discontinua, durante el período de dos años, por lo que nada obsta para que
se consideren licencias cumplidas con anterioridad a la data de entrada en vigor del nuevo Estatuto
Administrativo (18468/90).
La Contraloría General carece de competencia para ponderar y pronunciarse respecto a los motivos
concretos que considere la Jefatura Superior de un Servicio para disponer el cese de funciones por
salud incompatible con el desempeño del cargo (34302/90, 29815/99, 34886/99).
El cese de funciones por salud incompatible con el desempeño del cargo otorga el derecho a jubilar en
forma prematura, conforme al artículo 12 del decreto ley 2448, de 1978, siempre que se cumplan los
requisitos exigidos por dicha disposición. Ello, porque esta norma ha quedado expresamente vigente
de acuerdo con el artículo 14 transitorio (actual artículo 13 transitorio) de la ley 18834 (27158/90,
14761/96, 29339/97).
Es improcedente invocar como causal de cese de funciones el tener salud incompatible con
el Servicio, cuando la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez respectiva ha rechazado las
licencias presentadas lo que involucra que las ausencias no se encuentran respaldadas y carecen
de fundamento legal que las justifiquen (3285/91, 33131/94, 16458/01).
La sola circunstancia de gozar de una licencia médica no significa necesariamente que se incurra
en la causal de declaración de vacancia, pues la consideración de si el uso de dicho beneficio
por el periodo indicado en el articulo 145 (actual articulo 151) de la ley 18834, constituye salud
incompatible, corresponde privativamente al Jefe Superior del Servicio (5916/91, 28488/91, 212/92,
9055/92, 25877/94).
Para determinar un cese de funciones por salud incompatible con el desempeño del cargo, deben
computarse tanto las licencias médicas con reposo total como las de reposo parcial (5916/91,
34886/99, 29884/01). Las licencias médicas otorgadas por medios dias, deben considerarse como
de dias completos para fines de declarar la aludida salud incompatible, pues del tenor literal del
articulo 145 (actual articulo 151) del Estatuto Administrativo, fluye que el lapso que establece tiene
que contabilizarse en meses que son cada una de las doce partes en que se divide el año y que
constituyen, por ende, una unidad de tiempo distinta a la de los di as, los que comprenden el lapso
transcurrido entre dos medias noches consecutivas (1803/97).
Los diagnósticos que emite la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez tienen por objeto dejar
constancia del estado de salud de la persona a que se refiere, y del instante en que, a juicio de la
Comisión, se han producido las alteraciones que impiden al empleado el desempeño de su trabajo.
Por tal motivo, se ajusta a derecho un acto de esa Comisión que declare irrecuperable la salud de
un funcionario, de acuerdo con el articulo 146 (actual articulo 152) del Estatuto Administrativo, a
partir de una fecha anterior a la época de formalización del documento que la contiene, por cuanto
corresponde a las atribuciones de los mencionados organismos determinar la época exacta desde la
cual un trabajador se encuentra con su salud afectada por un impedimento para el desempeño de sus
funciones, y porque tales actos son de naturaleza declarativa, caracteristica que permite otorgarles
vigencia retroactiva. Como la aplicación del articulo 145 (actual articulo 151) de la ley 18834, se
encuentra condicionada a la circunstancia de que no medie "declaración de salud irrecuperable", la
vacancia del cargo por salud incompatible que regula esta disposición no resulta procedente cuando
el Servicio tomó conocimiento que el afectado habia iniciado los trámites destinados a obtener su
jubilación por salud irrecuperable y la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez, si bien dictaminó
precisamente ese estado de salud con posterioridad a la vacancia del empleo, lo hizo a partir de una
fecha anterior a ésta. En este caso, corresponde dejar sin efecto el acto que declaró vacante el cargo,
con arreglo al aludido articulo 145 (actual articulo 151), y conferir al funcionario, por encontrarse
afectado por una invalidez absoluta y permanente, el beneficio contemplado en el articulo 146 (actual
articulo 152) de la ley 18834, con pleno goce de todas las remuneraciones correspondientes a su
cargo, por un periodo de seis meses, al término de los cuales debe declararse vacante su empleo por
salud irrecuperable. (10219/02 Deja sin efecto toda jurisprudencia en contrario).
Para declarar la vacancia del cargo por salud incompatible es improcedente considerar las licencias
por accidente en actos del servicio (18583/91).
El uso de licencia médica en un lapso continuo o discontinuo superior a seis meses, debe cumplirse
dentro del plazo de los dos años contados hacia atrás desde la data de emisión del documento que
disponga el cese de funciones por salud incompatible, porque el artículo 145 (actual artículo 151)
del Estatuto Administrativo cuando emplea la expresión "en los últimos dos años" no especifica que
correspondan a años calendarios, de modo que sólo cabe entenderla referida, conforme a las reglas
sobre cómputo de plazos establecidas en el Código Civil, a la unidad de tiempo que media entre la
fecha de emisión del acto administrativo que dispone la vacancia del cargo y la fecha anterior en dos
años a aquélla (26866/91, 2653/92, 19473/92, 20422/93).
Conforme al artículo 106 (actual artículo 111) de la ley 18834, para que las licencias médicas
produzcan Jos efectos que el ordenamiento legal vigente les atribuye, es requisito indispensable que
sean aprobadas por la Institución de Salud correspondiente, con prescindencia de la circunstancia
que ésta haya o no pagado al beneficiario el subsidio correspondiente (34019/93).
El hecho que un funcionario esté sometido a sumario no obsta a la declaración de vacancia por
salud incompatible, sin perjuicio que el proceso administrativo deba concluirse para Jos fines que
correspondan (2283/94).
El cese de funciones por salud incompatible con el desempeño del cargo no constituye una medida
disciplinaria, por lo que no es aplicable al afectado el beneficio que impide sancionar con una medida
expulsiva a los funcionarios públicos desde treinta días antes y hasta sesenta días después de la
elección de Presidente de la República, a que se refiere el artículo 156 de la ley 10336 (18294/94,
14778/00).
La discrecionalidad que otorga a los Jefes Superiores de los Servicios el artículo 145 (actual articulo
151) del Estatuto Administrativo tiene tal alcance que en ciertas ocasiones la autoridad puede
resolver que el uso de licencias médicas por un lapso superior a seis meses en los dos últimos años
no significa necesariamente que el funcionario tenga salud incompatible con el cargo, por lo que el
sólo hecho de hacer uso de ellas, en tales condiciones, no produce necesariamente la declaración
de vacancia. En cambio, si la autoridad decide declarar que el funcionario tiene salud incompatible
con el desempeño del cargo, no es preciso fundarla, o sea, no tiene que expresar las razones de
conveniencia u oportunidad que se han considerado para resolver en tal sentido (25877/94).
La declaración de vacancia del cargo de un funcionario por salud incompatible rige a contar de la
fecha en que éste sea notificado de la total tramitación del documento que la dispone y no desde una
fecha determinada (25847/95, 58934/05).
Es improcedente declarar vacante por salud incompatible el empleo servido por un dirigente gremial
favorecido con el fuero previsto en el artículo 25 de la ley 19296, porque las normas de inamovilidad
en el empleo contenidas en estatutos o textos legales generales o especiales, operan en relación con
la facultad de poner término a las funciones de Jos empleados, pero no se aplican cuando es la ley la
que ordena imperativamente el alejamiento del Servicio, lo que no ocurre en este caso (38351/95).
La declaración de vacancia por salud incompatible permite el pago de beneficios que han debido
postergarse hasta el cese de funciones en la respectiva entidad empleadora, por causa que otorgue
derecho a percibirlos, como consecuencia del cambio de régimen jurídico que significó la aplicación
de la ley 18834 respecto de quienes, a su vigencia, se regían por el Código del Trabajo u otros
estatutos especiales, ya que dicha declaración, de acuerdo con el artículo 145 (actual artículo 151)
del Estatuto Administrativo, implica una decisión unilateral del empleador de finalizar el vínculo
funcionario, que por su naturaleza no constituye un hecho imputable al dependiente (19386/97,
32818/97).
Las licencias médicas que tienen como causa una enfermedad profesional deben excluirse del
cómputo a que se refiere el artículo 145 (actual artículo 151) del Estatuto Administrativo, para
declarar vacante el empleo por salud incompatible. En estos casos, es necesario que el empleado
que se encuentra haciendo uso de esos reposos, lo comunique oportunamente a la autoridad del
Servicio que corresponda, a fin que ésta dé cuenta del hecho a la Comisión de Medicina Preventiva
e Invalidez respectiva, organismo competente para determinar acerca del carácter profesional
de una afección de la cual no hay constancia. Es improcedente, en consecuencia, invalidar una
resolución que declaró vacante el cargo de un funcionario por salud incompatible, cuando éste no
ha acreditado que las licencias médicas de que ha gozado se han originado en una enfermedad
profesional (17377/00).
Para declarar vacante un cargo por salud incompatible, procede considerar las licencias médicas
otorgadas por enfermedad que la Superintendencia de Seguridad Social desestimó como de carácter
de profesional, y que inicialmente así las calificaran Jos médicos de la Mutual de Seguridad, puesto
que esa Superintendencia es la autoridad técnica de control de las instituciones de previsión, de las
licencias médicas y de la calificación de las enfermedades, debiendo las entidades de salud acatar
sus instrucciones y decisiones (36776/00).
Concordancias: Arts. 12, letra e), 112, 113, 151 y 152 del EA; Decreto 3, de 1984, del Ministerio de
Salud, Reglamento de autorización de licencias médicas por los Servicios de Salud e Instituciones
de Salud Previsional; Arts. 12, W 9, del DFL 1, de 2005, de la Subsecretaría de Salud Pública del
Ministerio de Salud y 45 del Decreto 136, de 2004, del Ministerio de Salud, Reglamento Orgánico
del Ministerio de Salud, que dispone que en cada Secretaría Regional Ministerial se constituirá una
Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez; art. 1O, letra e), del EAM.
Letra b)
Es improcedente declarar vacantes los cargos de los funcionarios sometidos a proceso por crimen o
simple delito, dada la naturaleza esencialmente transitoria de la resolución judicial que así lo dispone
(3854/92, 34373/93).
No procede declarar vacante el cargo por pérdida sobreviniente de alguno de los requisitos de ingreso
a la Administración del Estado, a un funcionario condenado por crimen o simple delito. En estos
casos, esta medida sólo puede ser adoptada una vez tramitado el respectivo sumario administrativo
que aplique la medida disciplinaria de destitución (34373/93).
las medidas de remisión condicional de la pena o de reclusión nocturna a que pueda encontrarse
sometido un miembro de las Fuerzas Armadas o de Carabineros, lo que debe entenderse no sólo
como un mandato en cuanto a la forma en que deben cumplirse las medidas de remisión condicional
o de reclusión nocturna referidas a que puedan éstos encontrarse sometidos, sino que, también,
como expreso reconocimiento en cuanto a que la concesión de alguno de los beneficios alternativos
que prevé la ley 18216 no obliga al respectivo servidor a alejarse de la institución, disposición
aquélla que debe prevalecer por sobre los artículos 64 y 54, letra e), de la ley 18575, que establecen
causales sobrevinientes de cese de funciones. Este criterio es plenamente aplicable al personal
de Gendarmería y de la Policía de Investigaciones de Chile (7426/08. Deja sin efecto toda
jurisprudencia contraria).
En la situación prevista en el inciso final del artículo 141 (actual artículo 147) del EstatutoAdministrativo,
la destitución aplicada después de haber mediado aceptación de la renuncia, aunque no constituye
causal de cese de funciones, produce la pérdida de un requisito de ingreso respecto de otro cargo
que desempeñe el afectado. Ello rige para todos los sumarios administrativos instruidos con motivo de
la dictación de la resolución exenta que los ordena antes de operar la desvinculación del funcionario
con la Administración (26505/98, 32421/00).
Letra e)
La declaración de vacancia por calificación insuficiente puede notificarse al afectado por medio de
un simple oficio interno, pero luego debe traducirse en un documento formal, sujeto a toma de razón
(8168/90).
El documento que declara vacante un cargo por haber sido calificado el funcionario que lo sirve en
lista de eliminación es un acto reglado en cuanto al procedimiento y a sus efectos y no puede, por
ende, revocarse discrecionalmente por la autoridad, a menos que concurra a su respecto algún vicio
de ilegalidad (23644/93).
respectivo y notificación del afectado, por lo que, en este caso, la declaración surtirá sus efectos
desde la fecha precisa que señala la ley o el reglamento. Tratándose de los servidores públicos que
se rigen por el Estatuto Administrativo, de acuerdo con su articulo 45 (actual articulo 50), en relación
con el articulo 37 del decreto 1825, de 1998, del Ministerio del Interior, el funcionario evaluado
por resolución ejecutoriada en lista 4 o por dos años consecutivos en lista 3, deberá retirarse del
Servicio dentro de los 15 días hábiles siguientes al término de la calificación. Si así no lo hiciere se
le declarará vacante el empleo a contar desde el día siguiente a esa fecha. Para tales efectos, se
entiende que la resolución queda ejecutoriada desde que venza el plazo para reclamar o desde que
sea notificada la resolución de la Contraloria General de la República que falle el reclamo (20029/93,
25763/93, 10099/94, 13201/94, 602/96).
Procede pagar la asignación por cambio de residencia cuando el término de funciones se debe a
calificación insuficiente o a la aplicación de la medida disciplinaria de destitución, pues el Estatuto
Administrativo no distingue, en su articulo 93 (actual articulo 98), letra d), en cuanto a la causal de
dicho cese (2891 0/95).
EL Empleado que goza de licencia médica común o aquélla que se otorga por salud irrecuperable,
con arreglo a los artículos 106 y 146 (actuales artículos 111 y 152) del Estatuto Administrativo,
respectivamente, puede ser alejado de su cargo antes del vencimiento del plazo de cada una de
ellas, cuando ocurra alguna causa legal de expiración de funciones, como es la declaración de
vacancia por calificación en lista 4 de Eliminación. Ello, por cuanto tal circunstancia no confiere
inamovilidad al funcionario (12692/96, 3082/97, 28339/01).
Letra d)
La regla general relativa a que la renuncia a un empleo sólo produce efectos desde la fecha en que
queda totalmente tramitado el decreto o resolución que la acepta o declara vacante el cargo, según
el caso, salvo que en la renuncia se indique una data determinada y así lo disponga la autoridad,
no es plenamente aplicable a los cargos de exclusiva confianza, porque quienes los ocupan no
están amparados por el derecho a la función previsto en el articulo 83 (actual articulo 89) de la ley
18834, por cuanto se mantienen en sus puestos mientras cuenten con la confianza de la autoridad
correspondiente, dependiendo su remoción de la sola voluntad de ésta. La petición de renuncia
que se formula a esos dependientes, constituye el ejercicio de una facultad privativa que expresa
la voluntad de la Administración -Presidente de la República o la autoridad llamada a efectuar el
nombramiento- de removerlos del empleo que sirven, de modo que una vez presentada la renuncia
o transcurrido el plazo sin que ella se presente, en el acto que la acepte o declare la vacancia del
cargo, bien puede fijar una época distinta a la de su total tramitación, a contar de la cual puede
producir efectos, siempre que esta fecha sea posterior a la petición de renuncia que le sirve de
fundamento (27371/93, 8312/95, 19313/95, 25928/96).
La renuncia solicitada a los funcionarios que han sido contratados en cargos de exclusiva confianza,
produce como consecuencia que el cese de sus funciones no se haya motivado por expiración de
los contratos por no ser necesarios los servicios, sino que ha derivado de la pérdida de la confianza
indispensable para el desempeño del empleo dada la naturaleza de éstos, circunstancia que implica
una renuncia no voluntaria (1491/91).
Un funcionario de exclusiva confianza a quien se le declaró vacante el cargo a contar del2 diciembre
de 1996, pero que desempeñó funciones hasta el día 16 de ese mismo mes y año, tiene derecho
a que se le paguen los 14 días trabajados después de esa fecha, con conocimiento y aceptación
de la autoridad respectiva y provecho para la Administración, por aplicación del principio retributivo
que caracteriza el desempeño de cualquier función pública, cuya vulneración significaría un
enriquecimiento sin causa para la Administración (14896/97, 36618/97).
Los funcionarios que ocupan cargos de exclusiva confianza se mantienen en los mismos mientras
cuentan con aquélla, dependiendo su remoción de la voluntad de la autoridad facultada para efectuar
el nombramiento. Ello se infiere del artículo 51 (actual artículo 49) de la ley 18575, que señala lo
que debe entenderse por personal de exclusiva confianza, y de los artículos 6, 142 y 144, letra d)
(actuales artículos 6, 148 y 150), letra d), de la ley 18834, que lo excluye de la carrera funcionaria
y regulan la petición de renuncia y la declaración de vacancia, como formas de cese de funciones
de esa clase de servidores, respectivamente. Por ello, la petición de renuncia que se formula a
estos empleados constituye el ejercicio de una atribución privativa de la autoridad facultada para
disponer su nombramiento y que expresa su propósito de removerlos de sus cargos por estimar que
dejaron de contar con la confianza requerida. Estas remociones producen en materia previsional, los
mismos efectos que la renuncia no voluntaria. En consecuencia, el aludido personal puede jubilar
por expiración obligada de funciones, de acuerdo con los artículos 12 del decreto ley 2448, de 1978,
o 131 del DFL 338, de 1960, en su caso, si con arreglo. al artículo 14 transitorio (actual artículo 13
transitorio) de la ley 18834, han podido mantener el régimen previsional antiguo. El otorgamiento de
potestades a la autoridad administrativa en materia de nombramientos y remociones de los empleados
de exclusiva confianza, no significa que pueda actuar arbitrariamente, sino sólo tiene por objeto
permitirle contar con los medios jurídicos idóneos para realizar adecuadamente la administración
del organismo bajo su dependencia, cuya finalidad última es satisfacer el interés general.
Por consiguiente, cuando ejerce una de sus atribuciones con un objetivo distinto del considerado por
el legislador al concederle un poder de apreciación discrecional, la decisión adoptada queda afectada
por una desviación de poder y viciado el acto administrativo que la contiene. Las consideraciones
precedentes deben tenerlas presentes las autoridades administrativas cuando, con el objeto de
crear causales de jubilación prematuras o mejorar significativamente el monto de la pensión sin que
guarde relación con las imposiciones efectuadas durante la carrera funcionaria, nombran en cargos
de exclusiva confianza a servidores de graduación media o baja, a los que luego se les solicita la
renuncia no voluntaria, y en algunos casos incluso, una vez resuelta su remoción, se les contrata en
empleos similares a los que desempeñaban primitivamente (3837/01).
Concordancias generales: Arts. 146, letra e), 148, 149 y 16 transitorio del EA; 147 del EAM; 25 de
la ley 19296.
Comentarios:
La declaración de vacancia es la decisión de la autoridad administrativa de poner término a los
servicios del funcionario por las causas que la ley autoriza, esto es, declaración de salud irrecuperable
o incompatible con el desempeño del cargo; pérdida sobreviniente de alguno de los requisitos
de ingreso a la Administración del Estado; calificación del funcionario en lista de Eliminación o
Condicional, de acuerdo con lo dispuesto en el articulo 50, y por no presentación de la renuncia,
conforme a lo señalado en el inciso final del articulo 148, las cuales, en cada caso, requieren
aplicar un procedimiento determinado, único modo de configurar la referida causal de expiración de
funciones.
ARTICULO 151.- El Jefe superior del servicio podrá considerar como Ley 18.899, Art. 63, e).
salud incompatible con el desempeño del cargo, haber hecho uso Ley 18.834, Art. 145.
de licencia médica en un lapso continuo o discontinuo superior a
seis meses en los últimos dos años, sin mediar declaración de salud
irrecuperable.
Interpretación:
Inciso 1•
Si bien conforme al DFL 338, de 1960, artículo 233, letra e), el Jefe Superior del Servicio sólo
estaba facultado para pedir la dimisión del empleado, concurriendo los supuestos que ese precepto
indicaba, los artículos 144 (actual articulo 150), letra a), y 145 (actual articulo 151) de la ley 18834,
no han innovado sustancialmente sobre la materia, ya que no establecen una nueva causal de
término de labores. Al respecto, ambos Estatutos facultaron a esa Jefatura Superior para disponer el
alejamiento del servidor que ha hecho uso de licencias médicas por un lapso superior a seis meses,
en forma continua o discontinua, durante el periodo de dos años, por lo que nada obsta para que
se consideren licencias cumplidas con anterioridad a la data de entrada en vigor del nuevo Estatuto
Administrativo (18468190).
La salud incompatible con el desempeño del cargo constituye causal de declaración de vacancia,
al igual que la salud irrecuperable, cualquiera sea el sistema de pensiones a que el funcionario se
encuentre afecto (5733190 -reconsiderado parcialmente por el 27158190-).
El cese de funciones por salud incompatible con el desempeño del cargo otorga el derecho a jubilar de
manera prematura, conforme al articulo 12 del decreto ley 2448, de 1978, siempre que se cumplan los
requisitos exigidos por dicha disposición. Ello, porque esta norma ha quedado expresamente vigente
de acuerdo con el articulo 14 transitorio (actual articulo 13 transitorio) de la ley 18834 (27158190,
14761196, 29339197).
Para determinar un cese de funciones por salud incompatible con el desempeño del cargo, deben
computarse tanto las licencias médicas con reposo total como las de reposo parcial (5916191,
27371193, 8312195, 34886199, 29884101 ). Las licencias médicas otorgadas por medios días, deben
considerarse como de días completos para fines de declarar la aludida salud incompatible, pues del
tenor literal del articulo 145 (actual articulo 151) del Estatuto Administrativo, fluye que el lapso que
establece tiene que contabilizarse en meses que son cada una de las doce partes en que se divide el
año y que constituyen, por ende, una unidad de tiempo distinta a la de los días, los que comprenden
el lapso transcurrido entre dos medias noches consecutivas (1803197).
El DFL W 1, de 2002, del Ministerio del Trabajo y Previsión Social, Subsecretaría del Trabajo, fijó el texto
refundido, coordinado y sistematizado del Código del Trabajo.
La sola circunstancia de gozar de una licencia médica no significa necesariamente que se incurra
en la causal de declaración de vacancia, pues la consideración de si el uso de dicho beneficio
por el periodo indicado en el articulo 145 (actual articulo 151) de la ley 18834, constituye salud
incompatible, corresponde privativamente al Jefe Superior del Servicio (5916/91, 28488/91, 212/92,
9055/92, 25877/94).
Los diagnósticos que emite la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez tienen por objeto dejar
constancia del estado de salud de la persona a que se refiere, y del instante en que, a juicio de la
Comisión, se han producido las alteraciones que impiden al empleado el desempeño de su trabajo.
Por tal motivo, se ajusta a derecho un acto de esa Comisión que declare irrecuperable la salud de
un funcionario, de acuerdo con el articulo 146 (actual articulo 152) del Estatuto Administrativo, a
partir de una fecha anterior a la época de formalización del documento que la contiene, por cuanto
corresponde a las atribuciones de los mencionados organismos determinar la época exacta desde la
cual un trabajador se encuentra con su salud afectada por un impedimento para el desempeño de sus
funciones, y porque tales actos son de naturaleza declarativa, característica que permite otorgarles
vigencia retroactiva. Como la aplicación del articulo 145 (actual articulo 151) de la ley 18834, se
encuentra condicionada a la circunstancia de que no medie "declaración de salud irrecuperable", la
vacancia del cargo por salud incompatible que regula esta disposición no resulta procedente cuando
el Servicio tomó conocimiento que el afectado había iniciado los trámites destinados a obtener su
jubilación por salud irrecuperable y la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez, si bien dictaminó
precisamente ese estado de salud con posterioridad a la vacancia del empleo, lo hizo a partir de
una fecha anterior a ésta. En este caso, corresponde dejar sin efecto el acto que declaró vacante
el cargo, con arreglo al aludido articulo 145, y conferir al funcionario, por encontrarse afectado por
una invalidez absoluta y permanente, el beneficio contemplado en el articulo 146 (actual articulo
152) de la ley 18834, con pleno goce de todas las remuneraciones correspondientes a su cargo, por
un periodo de seis meses, al término de los cuales debe declararse vacante su empleo por salud
irrecuperable (10219/02. Deja sin efecto toda jurisprudencia en contrario).
El uso de licencia médica en un lapso continuo o discontinuo superior a seis meses, debe cumplirse
dentro del plazo de los dos años contados hacia atrás desde la data de emisión del documento que
disponga el cese de funciones por salud incompatible o vacancia del cargo por ese motivo, porque
el articulo 145 (actual articulo 151) del Estatuto Administrativo cuando emplea la expresión "en
los últimos dos años" no especifica que correspondan a años calendarios, de modo que sólo cabe
entenderla referida, conforme a las reglas sobre cómputo de plazos establecidas en el Código Civil,
a la unidad de tiempo que media entre la fecha de emisión del referido acto administrativo y la fecha
anterior en dos años a aquélla (26866/91, 2653/92, 19473/92,20422/93, 20604/05).
Conforme al articulo 106 (actual articulo 111) de la ley 18834, para que las licencias médicas
produzcan los efectos que el ordenamiento legal vigente les atribuye, es requisito indispensable que
sean aprobadas por la Institución de Salud correspondiente, con prescindencia de la circunstancia
que ésta haya o no pagado al beneficiario el subsidio correspondiente (19473/92, 34019/93).
La discrecionalidad que otorga a los Jefes Superiores de los Servicios el articulo 145 (actual articulo
151) del Estatuto Administrativo tiene tal alcance que en ciertas ocasiones la autoridad puede
resolver que el uso de licencias médicas por un lapso superior a seis meses en los dos últimos años
no significa necesariamente que el funcionario tenga salud incompatible con el cargo, por lo que el
sólo hecho de hacer uso de ellas, en tales condiciones, no produce necesariamente la declaración
de vacancia. En cambio, si la autoridad decide declarar que el funcionario tiene salud incompatible
con el desempeño del cargo, no es preciso fundarla, o sea, no tiene que expresar las razones de
conveniencia u oportunidad que se han considerado para resolver en tal sentido (25877/94).
El hecho que un funcionario esté sometido a sumario no obsta a la declaración de vacancia por
salud incompatible, sin perjuicio que el proceso administrativo deba concluirse para los fines que
correspondan (2283/94).
La notificación del documento que pone término a los servicios de un funcionario por haberse
declarado vacante el cargo por salud incompatible, debe realizarse en forma personal al trabajador,
lo que constará del acta respectiva suscrita por el notificado y, en el evento que éste se niegue
a firmarla, hará fe de ello y de la notificación el testimonio que al respecto estampe el empleado
que la practique, o por carta certificada dirigida al domicilio que el funcionario tenga registrado en
el Servicio, situación ésta en que la notificación se entenderá producida desde la fecha en que la
carta es recepcionada en el domicilio del afectado, lo cual se acreditará con el comprobante que al
respecto otorgue la Empresa de Correos de Chile (30529/94, 36776/00).
Es improcedente declarar vacante por salud incompatible el empleo servido por un dirigente gremial
favorecido con el fuero previsto en el artículo 25 de la ley 19296, porque las normas de inamovilidad
en el empleo contenidas en estatutos o textos legales generales o especiales, operan en relación con
la facultad de poner término a las funciones de los empleados, pero no se aplican cuando es la ley la
que ordena imperativamente el alejamiento del Servicio, lo que no ocurre en este caso (38351/95).
La declaración de vacancia por salud incompatible permite el pago de beneficios que han debido
postergarse hasta el cese de funciones en la respectiva entidad empleadora, por causa que otorgue
derecho a percibirlos, como consecuencia del cambio de régimen jurídico que significó la aplicación
de la ley 18834 respecto de quienes, a su vigencia, se regían por el Código del Trabajo u otros
estatutos especiales, ya que dicha declaración, de acuerdo con el artículo 145 (actual artículo 151.)
del Estatuto Administrativo, implica una decisión unilateral del empleador de finalizar el vínculo
funcionario, que por su naturaleza no constituye un hecho imputable al dependiente (19386/97,
32818/97).
Es improcedente invocar como causal de cese de funciones el tener salud incompatible con
el Servicio, cuando la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez respectiva ha rechazado las
licencias presentadas lo que involucra que las ausencias no se encuentran respaldadas y carecen
de fundamento legal que las justifiquen (3285/91, 33131/94, 16458/01).
El cese de funciones por salud incompatible con el desempeño del cargo no constituye una medida
disciplinaria, por lo que no es aplicable al afectado el beneficio que impide sancionar con una medida
expulsiva a los funcionarios públicos desde treinta días antes y hasta sesenta días después de la
elección de Presidente de la República, a que se refiere el artículo 156 de la ley 10336 (18294/94,
14778/00).
La Contraloría General carece de competencia para ponderar y pronunciarse respecto a los motivos
concretos que considere la Jefatura Superior de un Servicio para disponer el cese de funciones por
salud incompatible con el desempeño del cargo (34302/90, 29815/99, 34886/99).
Inciso 2°
Para declarar la vacancia del cargo por salud incompatible es improcedente considerar las licencias
por accidente en actos del servicio (18583/91, 55480/05).
Las licencias médicas que tienen como causa una enfermedad profesional deben excluirse del
cómputo a que se refiere el artículo 145 (actual artículo 151) del Estatuto Administrativo, para
declarar vacante el empleo por salud incompatible. En estos casos, es necesario que el empleado
que se encuentra haciendo uso de esos reposos, lo comunique oportunamente a la autoridad del
Servicio que corresponda, a fin que ésta dé cuenta del hecho a la Comisión de Medicina Preventiva
e Invalidez respectiva, organismo competente para determinar acerca del carácter profesional
de una afección de la cual no hay constancia. Es improcedente, en consecuencia, invalidar una
resolución que declaró vacante el cargo de un funcionario por salud incompatible, cuando éste no
ha acreditado que las licencias médicas de que ha gozado se han originado en una enfermedad
profesional (17377/00).
Concordancias: Arts. 111, 115 y 150, letra a), del EA; 148 del EAM; 15 de la ley 18020; ley 16744,
Sobre Accidentes del Trabajo y Enfermedades Profesionales; arts. 194 y ss. del C del T.
Comentarios:
El Informe Técnico del Ministerio de Hacienda que se acompañó al Mensaje del Ejecutivo, que
contenía el proyecto de ley que sustituyó el inciso primero del artículo 145 (actual artículo 151),
expresa que se establece como facultativo del Jefe Superior la declaración de vacancia en el caso
de las licencias por más de seis meses en dos años, por una sola vez, con el objeto de permitir una
evaluación de situaciones reales en las que la sanción prevista en el nuevo Estatuto puede resultar
excesiva.
ARTICULO 152.- Si se hubiere declarado irrecuperable la salud Ley 18.834, A1t. 146.
de un funcionario, éste deberá retirarse de la Administración
dentro del plazo de seis meses, contado desde la fecha en
que se le notifique la resolución por la cual se declare su
irrecuperabilidad. Si transcurrido este plazo el empleado no
se retirare, procederá la declaración de vacancia del cargo.
Interpretación:
Inciso 1•
La notificación de la resolución que declara a un funcionario con salud irrecuperable debe practicarse
mediante la transcripción que el Jefe Superior del Servicio haga llegar al empleado una vez que la
autoridad médica le haya comunicado esa determinación (41389196, 34493108).
Es improcedente emitir un documento que declare vacante el cargo de un funcionario en forma previa
al informe de la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez que declara la irrecuperabilidad de su
estado de salud, puesto que la vacancia del empleo debe ser adoptada luego que se materialice el
pronunciamiento de la autoridad médica respectiva y concurran los demás presupuestos previstos
en el artículo 146 (actual artículo 152) de la ley 18834 (5254190).
Conforme a lo previsto en los artículos 107 (actual artículo 112) de la ley 18834 y 111 de la ley
18883, la declaración de irrecuperabilidad de los funcionarios afiliados a una Administradora de
Fondos de Pensiones, debe ser resuelta por la comisión médica competente de la Superintendencia
de Administradoras de Fondos de Pensiones (reemplazada por la Superintendencia de Pensiones,
conforme a los artículos 46 y siguientes de la ley 20255, que establece Reforma Previsional), en
conformidad con las normas que rigen a estos organismos (17920102, 45885104, 53296105).
Declarada irrecuperable la salud de un funcionario por la Comisión Médica competente, ésta mantiene
su vigencia mientras no sea revisada o rectificada por el organismo médico pertinente. Por tal
motivo, dicha declaración afectará a todos los empleos compatibles que desempeñe el empleado,
no pudiendo ingresar o reincorporarse a la Administración Pública, a menos que medie un nuevo
pronunciamiento de esa Comisión, que lo declare nuevamente apto para ejercer funciones públicas
(19982191 -reconsiderado parcialmente por el39847197-, 20418192).
Dado que en nuestra legislación no existe nungún requisito relacionado con la salud que impida
prestar servicios en un organismo del Estado en virtud de un contrato a honorarios -a diferencia de
lo que ocurre para desempeñar un cargo público, en que se requiere salud compatible, de acuerdo
a lo establecido en el artículo 12, letra e), de la ley 18834-, no resulta procedente hacer extensiva tal
exigencia a quienes cesaron en funciones en la Administración por haberles sido declarada su salud
irrecuperable y sean posteriormente contratados sobre la base de honorarios, toda vez que éstos
no se rigen por el referido Estatuto. Tampoco se encuentran sujetos a la limitación contenida en el
artículo 113 del citado texto legal, pues ella dice relación, exclusivamente, con la reincorporación a
la Administración del Estado, es decir, constituye una inhabilidad referida únicamente al ingreso a
un cargo o empleo público, ya sea en calidad de planta o a contrata, razón por la cual, no resulta
procedente hacerla extensiva a las contrataciones que sobre la base de honorarios efectuén los
servicios públicos. Tales conclusiones se conforman, además, con lo dispuesto en la Constitución
Política en su artículo 19, No 16, en cuanto asegura a todas las personas la libertad de trabajo y
su protección. No obstante lo anterior, las autoridades respectivas deberán ponderar si, en cada
caso, las condiciones de salud que motivaron la declaración de irrecuperabilidad, constituyen un
impedimento para la prestación efectiva y oportuna de los servicios que se requiere contratar sobre
la base de honorarios (14396/08. Reconsidera toda jurisprudencia administrativa contraria).
Los seis meses de licencia médica por estado de salud no recuperable deben concederse por la
Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez, desde la fecha en que el empleado toma conocimiento
de la declaración de irrecuperabilidad que emite esa Comisión, correspondiendo declarar la vacancia
del cargo a partir del di a siguiente de transcurrido dicho plazo, de acuerdo con el articulo 146 (actual
articulo 152) de la ley 18834 (15284/90).
Los diagnósticos que emite la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez tienen por objeto dejar
constancia del estado de salud de la persona a que se refiere, y del instante en que, a juicio de la
Comisión, se han producido las alteraciones que impiden al empleado el desempeño de su trabajo.
Por tal motivo, se ajusta a derecho un acto de esa Comisión que declare irrecuperable la salud de
un funcionario, de acuerdo con el articulo 146 (actual artículo 152) del Estatuto Administrativo, a
partir de una fecha anterior a la época de formalización del documento que la contiene, por cuanto
corresponde a las atribuciones de los mencionados organismos determinar la época exacta desde la
cual un trabajador se encuentra con su salud afectada por un impedimento para el desempeño de sus
funciones, y porque tales actos son de naturaleza declarativa, característica que permite otorgarles
vigencia retroactiva. Como la aplicación del articulo 145 (actual articulo 151) de la ley 18834, se
encuentra condicionada a la circunstancia de que no medie "declaración de salud irrecuperable", la
vacancia del cargo por salud incompatible que regula esta disposición no resulta procedente cuando
el Servicio tomó conocimiento que el afectado había iniciado los trámites destinados a obtener su
jubilación por salud irrecuperable y la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez, si bien dictaminó
precisamente ese estado de salud con posterioridad a la vacancia del empleo, lo hizo a partir de una
fecha anterior a ésta. En este caso, corresponde dejar sin efecto el acto que declaró vacante el cargo,
con arreglo al aludido articulo 145 (actual artículo 151), y conferir al funcionario, por encontrarse
afectado por una invalidez absoluta y permanente, el beneficio contemplado en el artículo 146 (actual
artículo 152) de la ley 18834, con pleno goce de todas las remuneraciones correspondientes a su
cargo, por un período de seis meses, al término de los cuales debe declararse vacante su empleo por
salud irrecuperable. (10219/02. Deja sin efecto toda jurisprudencia en contrario).
Carece del derecho a los seis meses de remuneraciones previsto en el artículo 146 (actual artículo
152) de la ley 18834, una ex funcionaria cuyo cargo fue declarado vacante por salud incompatible
mediante un acto administrativo dictado y tramitado antes que se determinara su irrecuperabilidad,
pues frente a la existencia de dos causales de término de servicios prevalece la que se notifica
primero, siempre que esta última no tenga una vigencia anterior a aquélla (1370/92, 18786/00).
Si antes que venza el plazo de seis meses de licencia el funcionario inicia un procedimiento dirigido
a obtener la declaración de que su estado de salud se ha recuperado,. ya que han cambiado los
fundamentos de hecho en que se basó el dictamen de invalidez, al recuperar su aptitud para el
trabajo, es procedente que se invalide el decreto que declara vacante el empleo que servía con el
mérito del nuevo dictamen de la comisión médica correspondiente, siempre que en éste se establezca
que la recuperación de la salud se produjo antes de que se consumara la vacancia del cargo servido,
aun cuando su comprobación se produzca con posterioridad (55078/63, 20842/72).
Conforme a lo previsto en los articulas 107 (actual articulo 112) de la ley 18834 y 111 de la ley
18883, la declaración de irrecuperabilidad de los funcionarios afiliados a una Administradora de
Fondos de Pensiones, debe ser resuelta por la comisión médica competente de la Superintendencia
de Administradoras de Fondos de Pensiones (reemplazada por la Superintendencia de Pensiones,
conforme a los articulas 46 y siguientes de la ley 20255, que establece Reforma Previsional), en
conformidad con las normas que rigen a estos organismos (17920/02, 45885/04, 53296/05).
El personal de los servicios e instituciones afectos a la ley.18834, que tenga la calidad de imponente del
nuevo sistema de pensiones del DL 3500, de 1980, en el caso que deba retirarse de la Administración
por haber sido declarada su salud irrecuperable por la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez
competente, tiene derecho a percibir durante el plazo de seis meses, el total de sus remuneraciones,
franquicia que debe concederse desde la fecha de notificación al funcionario del dictamen médico
respectivo (32831/90, 16032/91, 21914/91).
En el caso de los servidores públicos afectos al Estatuto Administrativo y afiliados al régimen del
DL 3500, de 1980, es suficiente la declaración de salud irrecuperable de la comisión médica de la
Superintendencia de Administradoras de Fondos de Pensiones (sustituida por la Superintendencia
de Pensiones según la ley 20255) para que el empleado tenga derecho a los seis meses con pago
integro de sus remuneraciones y sin la obligación de trabajar a que se refiere el articulo 146 (actual
articulo 152) de la ley 18834 (13203/03, 13205/03).
Inciso 2•
El personal que se rige por el Estatuto Administrativo y es imponente del nuevo sistema de pensiones
del decreto ley 3500, de 1980, tiene derecho a percibir, por el plazo de seis meses, el total de sus
remuneraciones de cargo de su empleador si debe retirarse de la Administración por haber sido
declarada su salud irrecuperable, porque el articulo 146 (actual articulo 152) de la ley 18834 no
distingue en cuanto a la afiliación de los funcionarios (8596/90, 28877/90).
Carecen del derecho al pago de remuneraciones por el periodo de seis meses, desde que
determinados funcionarios fueron notificados por la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez que
su salud se declaró irrecuperable, porque dichas notificaciones fueron posteriores a la presentación
de sus renuncias voluntarias y a la dictación del decreto que las aceptara, lo que ha provocado su
cese de funciones antes que aquella declaración produjera sus efectos (25155/94).
En el caso de los funcionarios que se rigen por el Estatuto Administrativo, las pensiones se devengan
desde el día siguiente a aquél en que termina la licencia de seis meses por salud irrecuperable,
oportunidad a partir de la cual el trabajador debe retirarse del Servicio o declararse vacante el cargo
(20497/94).
La licencia de seis meses por salud irrecuperable sólo libera al trabajador de la obligación de
desempeñar el cargo, manteniendo las remuneraciones correspondientes al mismo, pero no ·le
confiere inamovilidad, pudiendo ser alejado del Servicio antes del vencimiento de ese plazo, cuando
concurra alguna causa legal de expiración de funciones, como es la declaración de vacancia por
calificación en lista 4, de Eliminación, ya que ese lapso de seis meses constituye el máximo dentro
del cual debe hacerse efectiva la desvinculación del Servicio y no un tiempo mínimo garantizado de
funciones (12692/96, 32397/96).
Una ex funcionaria, cuyo cargo se declaró vacante por salud irrecuperable, pensionándose por esa
causal, tiene derecho al incentivo monetario previsto en el artículo 1o transitorio de la ley 19553.
Ello, por cuanto se acogió oportuna, voluntariamente y en forma a ese incentivo antes de solicitar
su pensión, cumpliendo todos los requisitos para su obtención, sin que el hecho sobreviniente y
ajeno a su voluntad como es la declaración de irrecuperabilidad de su salud y el reconocimiento de
su derecho a jubilar con arreglo al articulo 128 del DFL 338, de 1960, le impidan obtenerlo, ya que
el objeto de la franquicia es estimular o motivar al personal de la Administración que puede obtener
una pensión, para retirarse, finalidad que se cumple si a ella se le concede ese beneficio por salud
irrecuperable (19327/00).
Concordancias: Arts. 12, letra e), 112, 113, 146, letra e), 150, letra a), 151 y 16 transitorio del EA;
Decreto 3, de 1984, del Ministerio de Salud, Reglamento de autorización de licencias médicas por
los Servicios de Salud e Instituciones de Salud Previsional; Arts. 12, N' 9, del DFL 1, de 2005, de la
Subsecretaría de Salud Pública del Ministerio de Salud y 45 del Decreto 136, de 2004, del Ministerio
de Salud, Reglamento Orgánico del Ministerio de Salud, que dispone que en cada Secretaría Regional
Ministerial se constituirá una Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez; 149 del EAM; ley 16744,
sobre Accidentes del Trabajo y Enfermedades Profesionales.
Comentarios:
Con respecto al artículo 152 de la ley 18834, que concede al funcionario declarado irrecuperable
un plazo de seis meses para retirarse de la Administración, al cabo del cual, si no lo hiciese, se le
declarará vacante el cargo, conviene destacar que la causal de jubilación, en este caso, deriva de la
declaración de salud irrecuperable que emana de la correspondiente Comisión Médica -Comisión de
Medicina Preventiva e Invalidez de las Secretarías Regionales Ministeriales de Salud, en el régimen
antiguo de pensiones, o de la Comisión Médica del artículo 11 del decreto ley 3500, de 1980, en el
nuevo sistema de pensiones-, y el cese de funciones se materializa a través del acto que declara
vacante el cargo o mediante la renuncia que antes del plazo de seis meses presentare el empleado,
procedimiento que no fue objeto de modificaciones por la ley 18834, en relación con lo que ocurría
durante la vigencia del DFL 338, de 1960.
ARTICULO 153.- El término del período legal por el cual es Ley 18.834, Art. 147.
nombrado el funcionario, o el cumplimiento del plazo por
el cual es contratado, produce la inmediata cesación de sus
funciones.
Interpretación:
Producido el término del periodo legal por el cual es nombrado el funcionario, o el cumplimiento del
plazo por el cual es contratado, no existe obligación para la autoridad de mantener al funcionario en
su cargo (15577/92, 33051/94, 44140/94, 34422/95).
Es improcedente poner término al contrato de una funcionaria amparada por fuero maternal por la
causal de vencimiento del plazo convenido, sino con expresa autorización judicial, segun lo exige
el Código del Trabajo, debiendo, en caso contrario, renovar la contratación por todo el lapso de
inamovilidad (7899/89, 15454/92).
El goce de licencia médica no impide que los servicios de los funcionarios cesen por término del
periodo legal por el cual son nombrados o por el cumplimiento del plazo por el cual son contratados,
ni obliga a la Administración a renovar su desempeño hasta que finalice la licencia, porque el uso
de esa franquicia médica no les confiere inamovilidad (25351/90, 15577/92, 31424/94, 8217/95,
35069/97, 12660/00, 9119/08).
El contrato que se origina en la prórroga de uno anterior que contemplaba la fórmula "mientras sean
necesarios los servicios", debe entenderse que también posee tal característica, a menos que se
deje expresa constancia de que se ha modificado dicha estipulación (13819/87, 28716/90,24121/91,
28525/95).
La autoridad competente para terminar el contrato de un funcionario es aquélla que debe designarlo
(24121/91).
El cese de funciones de un funcionario contratado bajo la fórmula "mientras sean necesarios sus
servicios" no se produce sino a contar de su notificación al afectado de la total tramitación del decreto
o resolución que pone término a la relación laboral (85703/63, 31364/66, 10794/96, 19473/01).
Una funcionaria suplente no tiene derecho a prolongar la protección maternal que la ha amparado
más allá del período de desempeño en ese carácter, puesto que los ceses de servicio que dispone la
ley, como ocurre en el caso de los suplentes, operan con prescindencia de las normas de inamovilidad
que consulta el fuero maternal (11901/92, 7771/93,40934/95, 41268/07).
Si antes del vencimiento del plazo en que expira el contrato de un funcionario se declara irrecuperable
su salud, la Administración está obligada a mantener el vinculo jurídico con aquél y pagarle sus
remuneraciones por el lapso que reste para enterar los seis meses a que alude el artículo 146
(actual articulo 152) de la ley 18834, debiendo, por ende, renovarle la contratación por dicho lapso
(24532/93, 12572/01 ).
La autoridad no está obligada a emitir un documento formal de cese ni a notificar a los funcionarios
la no renovación de sus contratos, pues ellos expiran por el solo ministerio de la ley (29969/94).
La causal de expiración de funciones establecida en el artículo 147 (actual artículo 153) de la ley
18834, no otorga derecho a feriado proporcional, pues en el Estatuto Administrativo no existen
normas que lo contemplen (44140/94).
El término del período legal que produce la inmediata cesación de funciones de un empleado
contratado, no le otorga el derecho a percibir indemnización en virtud de dicho cese, por cuanto
ese beneficio no está contemplado en la ley, sin perjuicio de su posibilidad de impetrar, si reúne los
requisitos para ello, el pago de subsidio de cesantía (15040/91, 29969/94,9998/99, 21026/00).
El cumplimiento del plazo pone término inmediato a los servicios de un funcionario contratado por
mandato legal, no existiendo para la autoridad la obligación de recontratar (12752/97, 9998/99,
49574/99, 5305/00).
La Contraloría General carece de competencia para ponderar las razones que ha tenido la autoridad
para determinar, en uso de sus facultades privativas, la no renovación de un contrato (12752/97,
9998/99, 49574/99, 5305/00, 21026/00).
Concordancias: Arts. 3, letra e), 4, inciso quinto, 10 y 146, letra f) del EA.
Comenta ríos:
De acuerdo con el tenor literal del articulo 153 de la ley 18834, cabe concluir que la causal de
cesación de funciones que en él se contempla opera tanto respecto de los suplentes que sirven
un cargo vacante como respecto de los nombramientos extendidos a contrata. En el primer caso,
porque la suplencia en conformidad con el artículo 4, inciso quinto, del Estatuto Administrativo, no
puede exceder de seis meses, y en el segundo, porque con arreglo al articulo 1O de ese mismo
ordenamiento, los nombramientos a contrata expiran el 31 de diciembre de cada año, salvo que se
disponga su prórroga.
ARTICULO 154.- En los casos de supresión del empleo por Ley 18.834, Art. 148.
procesos de reestructuración o fusión, Jos funcionarios de
planta que cesaren en sus cargos a consecuencia de no ser
encasillados en las nuevas plantas y que no cumplieren con los
requisitos para acogerse a jubilación, tendrán derecho a gozar
de una indemnización equivalente al total de las remuneraciones
devengadas en el último mes, por cada año de servicio en la
institución, con un máximo de seis. Dicha indemnización no será
imponible ni constituirá renta para ningún efecto legal.
Interpretación:
El cese de funciones establecido en el articulo 148 (actual articulo 154) de la ley 18834, para dar
derecho a la indemnización que consulta, supone la supresión de un empleo como consecuencia de un
proceso de encasillamiento por reestructuración de la planta que regia para la institución respectiva,
derecho que no confiere cuando dicha supresión se debe únicamente a una reestructuración originada
en la facultad privativa de buena administración que otorga la ley a determinadas autoridades
administrativas (17565/92, 26954/94, 19581/95).
Los nombramientos interinos -que revestían bajo la vigencia del DFL 338, de 1960, la calidad
de empleos de planta- han dejado de pertenecer a la planta de los Servicios de la Administración
del Estado regidos por la ley 18834, pasando a constituir cargos sujetos a un régimen especial
determinado por el artículo 5 transitorio de ese cuerpo legal, modificado por la ley 18899, que dispone
su extinción al 31 de diciembre de 1990. En consecuencia, quien invista actualmente la calidad de
interino no posee derecho al ascenso, reservado para el personal de planta, ni tendría derecho a
la indemnización contemplada en el artículo 148 (actual articulo 154) de la ley 18834. Además, la
extinción de cargos interinos conforme al mencionado artículo 5 transitorio no configura los supuestos
indicados en el artículo 148 (actual artículo 154) del Estatuto Administrativo (16722/90). (*)
La designación a contrata dispuesta con la fórmula "mientras fueren necesarios sus servicios",
faculta a la autoridad para poner término a las funciones del empleado en el momento que lo estime
conveniente. El Estatuto Administrativo no contempla el pago de indemnizaciones para el caso del
término de las contratas dispuestas con la fórmula ya indicada, por lo que el beneficio del artículo 148
(actual artículo 154) de dicho ordenamiento es ajeno a esta situación (7289/91).
Para el cálculo de la indemnización a que se refiere el artículo 148 (actual artículo 154) de la ley
18334, debe considerarse cada año de servicio en la institución respectiva, sin distinguir si ellos se
desempeñaron o no en forma continua, siendo útil para ese fin todo el tiempo servido (32502/90,
37474/08).
Es improcedente pagar la indemnización del artículo 150 de la ley 18883 a los funcionarios de la
Municipalidad de Santiago, a quienes se les suprimió el cargo en ese municipio por haber sido
traspasados a la Municipalidad de Recoleta. Ello, porque estos empleados no cesaron en sus
funciones sino que fueron objeto de un traspaso, lo cual significó que la supresión de sus empleos no
pudo dar origen a esta indemnización, como quiera que la medida analizada no importó un proceso
de encasillamiento al que los interesados no accedieran como consecuencia de una reestructuración
o fusión de un Servicio Público. De este modo, es indispensable para que proceda la indemnización
aludida, que los afectados por la supresión de sus cargos no sean encasillados en las nuevas
plantas, como se ha sostenido por la jurisprudencia evacuada en relación con el artículo 148 (actual
artículo 154) de la ley 18834, precepto idéntico al citado articulo 150 del Estatuto Administrativo para
Funcionarios Municipales (15469/92, 17487/92).
Concordancias: Arts. 146, letra e), y 5 transitorio del EA; 150 del EAM, quincuagésimo octavo de la
ley 19882. Sentencia del Tribunal Constitucional, Rol W 523-2006, Considerando cuadragésimo.
(*)El artículo 5 transitorio del Estatuto Administrativo fue modificado por los artículos 63, letra g), de la ley 18899,
15 de la ley 19103 y 15 de la ley 19182, precepto este Llltimo que dispuso que "el personal regido por la ley
18834 que al31 de diciembre de 1992 cumpla funciones en calidad de interino, podrá conservar dicha calidad
durante la vigencia de la presente ley".
Comentarios:
Como se infiere de la historia fidedigna de este precepto, el mecanismo indemnizatorio que consulta
"vino a sustituir a los subsidios de cesantía en los procesos de reestructuración -y fusión de servicios
públicos- y se fue extendiendo progresivamente en su aplicación a través de múltiples leyes
especiales" (Informe de la Secretaría de Legislación de 24 de agosto de 1988).
Para que la supresión del empleo provocada como consecuencia de un proceso de reestructuración
o fusión de Servicios Públicos produzca el efecto de hacer cesar al funcionario en el empleo, se
requiere previamente la dictación de un acto formal por parte de la autoridad administrativa que
ponga término a los servicios del empleado, acto que debe ser sometido a tramite de tom·a de
razón en la Contraloria General, hecho lo cual corresponde su notificación al afectado. Pero si el
funcionario opta por continuar desempeñandose en el Servicio y acepta ser encasillado, carecera del
derecho a la indemnización establecida en el artículo 154 del Estatuto Administrativo.
ARTICULO 155.- El empleado que prolongare indebidamente Ley 18.834, Art. 149.
sus funciones no podrá reincorporarse a la Administración, sin
perjuicio de la responsabilidad penal en que pudiere incurrir. En
este caso, la autoridad correspondiente comunicará el hecho a la
Contraloría General de la República.
Interpretación:
Un ex funcionario a quien se le declaró vacante el cargo que servia por calificación insuficiente por no
haberse retirado del Servicio dentro de los quince dias hábiles siguientes al término de la calificación,
continuando no obstante en funciones, no tiene derecho a percibir remuneraciones por el periodo
comprendido entre la declaración de vacancia y el término efectivo de las labores, por carecer éstas
de justa causa y ser motivadas por una prolongación indebida de funciones (31307190, 13201194,
602196).
Concordancias: Art. 93 del EA; 151 del EAM; ley 19645, que modifica disposiciones del Código
Penal, que sanciona delitos de corrupción.
Comentarios:
La prolongación indebida de funciones se encontraba también regulada en los articulas 217, 218
y 219 del Código Penal, preceptos que tipificaban figuras delictivas en aquellos casos en que el
empleado continuaba desempeñando su cargo después de haber cesado conforme a la ley, cuando
percibía emolumentos en razón del ejercicio de esos empleos, y si se mantenía en ellos pese a haber
sido requerido de inhibición. Estas disposiciones fueron derogadas por el articulo 1, W 2, de la ley
19645.
ARTICULO 156.- Sin perjuicio de lo dispuesto en el articulo anterior, Ley 18.834, Art. 150.
el empleado podrá continuar actuando, aun cuando sus funciones
hubieren terminado legalmente, si se tratare de un órgano o servicio
que no pueda paralizarse sin grave daño o perjuicio y no se presentare
oportunamente la persona que debe reemplazarlo. En tal evento, la
autoridad correspondiente comunicará inmediatamente lo ocurrido
a la Contraloria General de la República y adoptará las medidas
pertinentes para dar solución a la situación producida, en un plazo
no mayor de treinta días.
El empleado que en virtud de lo establecido en el inciso precedente
prolongare· su desempeño, tendrá todas las obligaciones,
responsabilidades, derechos y deberes inherentes al cargo.
Interpretación:
Un funcionario que debió continuar prestando servicios después de la fecha a contar de la cual se
aceptó la renuncia no voluntaria al cargo de confianza exclusiva que desempeñaba, por no poder
asumir aún su sucesor y no existir subrogante, tiene derecho a percibir las remuneraciones por ese
periodo, conforme al inciso segundo del articulo 150 (actual articulo 156) del Estatuto Administrativo.
En estas condiciones, su prolongación de funciones sólo produjo las consecuencias jurídicas que
reconoce esta disposición (7526185, 28906190).
El titular del empleo de un Servicio que no puede paralizarse, y que es designado en otro de exclusiva
confianza, está obligado a desempeñar sólo este último, por lo que no ha podido continuar prestando
funciones en el cargo de que es titular, ya que por no haberse presentado su reemplazante, en este
caso prima la norma de compatibilidad de cargos por sobre las disposiciones del articulo 150 (actual
articulo 156) de la ley 18834 (25912191).
Comentarios:
El artículo 156 del Estatuto Administrativo resulta plenamente concordante con los principios de
continuidad de la función pública y de responsabilidad por falta de servicio que establece la ley
18575, Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración del Estado.
Para que se tipifique la figura de la prolongación necesaria de funciones que regula esa norma
estatutaria es preciso que concurran dos presupuestos básicos: que se trate de un Servicio que
no pueda paralizarse sin grave daño, y que no se presente oportunamente la persona que deba
reemplazar al funcionario que ya ha cesado legalmente en el empleo.
Cumplidas esas exigencias, el empleado que prolonga sus funciones adquiere todos los derechos,
deberes y responsabilidades inherentes al cargo. En este caso, la autoridad correspondiente
comunicará inmediatamente lo ocurrido a la Contraloría General de la República y adoptará las
medidas pertinentes para solucionar la situación producida, en un plazo no mayor de treinta días.
.. Título VII i
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Extíneion de 1a
: i '!!' ' ' ' ' '• /
Responsabilidad Administrativa
TÍTULO VIl Extinción de la Responsabilidad Administrativa 625
Interpretación:
Letra a)
La muerte de un empleado causa el cese de sus funciones a partir del mismo día en que se produce
el deceso. En este caso, aunque la vacancia del cargo la provoque el hecho del fallecimiento del
funcionario, debe dictarse una resolución que la declare a contar del día siguiente al del deceso,
correspondiendo a la autoridad que la emite su envío para registro y toma de razón (5523169,
24843190).
No resulta procedente que la autoridad administrativa haya dispuesto la aplicación de una medida
disciplinaria en contra de una persona fallecida, correspondiendo en cambio su absolución, de
conformidad con lo dispuesto en el artículo 157, letra a), de la ley 18834 (1 0431108).
Letra b)
De acuerdo con el inciso final del artículo 141 (actual artículo 147) de la ley 18834, si durante la
substanciación de un sumario administrativo el empleado involucrado cesa en funciones, el proceso
disciplinario debe continuar hasta su normal término, esto es, con la emisión de un acto formal que
afina el procedimiento respectivo (16893/90, 23870/90, 9099/91, 9212/91, 12407/91 ).
Letra e)
La medida disciplinaria se cumple una vez que el sumario administrativo ha terminado su tramitación.
La expresión "normal término" de un proceso disciplinario a que se refiere el inciso final del articulo 141
(actual artículo 147) del Estatuto Administrativo, comprende la notificación de la medida disciplinaria
para los efectos de la interposición de los recursos que contempla la ley; la emisión del decreto o
resolución que como consecuencia de esas instancias resuelve los recursos deducidos; la toma de
razón de tales actos administrativos; la notificación de ellos al sancionado, una vez tomados razón,
y la respectiva anotación en la hoja de vida funcionaria (16893/90).
Letra d)
Esta causal no tiene aplicación en aquellos procesos disciplinarios iniciados antes de la fecha de
entrada en vigor de la ley 18834 -esto es, el 23 de septiembre de 1989-, porque en tal caso la
acción disciplinaria de la Administración se ejerció bajo el imperio de una normativa diversa como
es la contemplada en el DFL 338, de 1960, que no establecía regla alguna sobre la prescripción
de la acción disciplinaria. Por lo tanto, el precepto sobre prescripción contenido en la letra d) del
artículo 151 (actual artículo 157), sólo rige respecto de hechos y sumarios administrativos ocurridos
e iniciados a partir de la señalada data (10972/90, 16294/90,34130/90,3301/92, 32600/93).
Concordancias: Arts. 158 del EA; 2493 del CC; Resolución 236, de 1998, de la Contraloría General
de la República, que aprueba el nuevo Reglamento de Sumarios Instruidos por este Organismo
Contralor, modificada por la Resolución 43, de 2001, de ese mismo origen.
Comentarios:
La enunciación de las causales que extinguen la responsabilidad administrativa que contempla el
articulo 157 de la ley 18834, sin duda constituye una mejora en relación con el Estatuto Administrativo
aprobado por el DFL 338, de 1960, ordenamiento que no regulaba esta materia, generando un vacío
que la jurisprudencia administrativa fue abordando por la vía de la interpretación general del régimen
estatutario.
En este sentido, uno de los principios que recogió esa jurisprudencia emanada del anterior Estatuto
Administrativo, fue que la desvinculación del empleado con la Administración conlleva la extinción de
su responsabilidad disciplinaria.
Por ello, el Informe de la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno consideró conveniente regular
en el Titulo VIl, mediante tres artículos, del151 al153 (actuales artículos 157 a 159), el problema
de la extinción de la responsabilidad administrativa, con el propósito que las acciones, derechos y
responsabilidades de esa naturaleza, tuvieran un término al cabo de un determinado periodo de
tiempo, evitando la prolongación innecesaria de situaciones de incertidumbre jurídica.
ARTICULO 158.- La acción disciplinaria de la Administración contra Ley 19.653, Art. so, 10).
el funcionario, prescribirá en cuatro años contados desde el día en Ley 18.834, Art. 152.
que éste hubiere incurrido en la acción u omisión que le da origen.
Interpretación:
Inciso 1•
El anterior Estatuto Administrativo aprobado por el DFL 338, de 1960, no consultaba disposiciones
relativas a la prescripción de la acción disciplinaria, motivo por el cual no pudo iniciarse prescripción
alguna al amparo de sus normas. Los plazos en esta materia sólo han podido comenzar a contar del
23 de septiembre de 1989, fecha de entrada en vigencia de la ley 18834. Estimar que el cómputo ha
podido efectuarse desde una data anterior a la señalada, seria atribuir al articulo 152 (actual articulo
158) un efecto retroactivo que no le ha sido conferido (3301/92, 32600193, 39391197).
El plazo de prescripción que señala el articulo 152 (actual articulo 158) del Estatuto Administrativo,
debe contarse desde el día en que el funcionario hubiere incurrido en la acción u omisión que motiva
la responsabilidad administrativa y no desde la fecha en que se ordena instruir el proceso sumarial
(17865195, 21886196,14658199, 30501101 ).
El plazo de prescripción para hacer efectiva la acción disciplinaria que contempla el articulo 152
(actual articulo 158) de la ley 18834, debe contarse desde la fecha en que el inculpado incurrió por
última vez en la conducta irregular que se le imputa, y se suspende, en todo caso, con la notificación
de los cargos. Si desde esta notificación transcurren dos calificaciones sin que el afectado haya sido
sancionado, de acuerdo con el articulo 153 (actual articulo 159) del mismo Estatuto, el plazo continúa
corriendo desde la notificación del último proceso evaluatorio, de manera que si en él se completa el
lapso de prescripción antes que se le notifique la sanción, la acción disciplinaria prescribirá, debiendo
la autoridad ordenar su sobreseimiento en el proceso (2890/98 -reconsiderado parcialmente por
el 31609198-).
la responsabilidad de los sumariados, también deben verificar la existencia de alguna de las causas
de extinción de la responsabilidad administrativa contempladas en el articulo 157 del Estatuto
Administrativo, toda vez que, concurriendo alguna de ellas respecto de los servidores imputados,
la infracción a los deberes funcionarios no pueden ser objeto de sanción. Luego, y sin perjuicio
que la prescripción de la acción disciplinaria pueda ser alegada por el interesado ante la autoridad
competente, y antes de emitirse la resolución de término, dichos órganos de la Administración,
conforme a lo dispuesto en la letra d) del articulo 157, en armonía con los articulas 158 y 159 de la
ley 18834, no sólo pueden sino que deben declarar de oficio la prescripción de la acción disciplinaria,
dictando al efecto el acto administrativo que corresponda en todos aquellos casos en que de los
antecedentes del procedimiento sumarial aparezca que ha transcurrido el plazo señalado por la ley
para hacer efectiva la responsabilidad administrativa (34407/08. Reconsidera toda jurisprudencia
administrativa contraria).
El nuevo plazo de prescripción dispuesto por la ley 19653, que modificó el articulo 152 (actual
artículo 158) del Estatuto Administrativo, aumentó dicho término de dos años a cuatro años, no
concurre respecto de las faltas cometidas con anterioridad al 14 de diciembre de 1999, fecha de
publicación de esa ley en el Diario Oficial. Ello, por cuanto en materia de sanciones administrativas
rige plenamente el principio de irretroactividad de la ley, consagrado en el articulo 19, N" 3, inciso
séptimo, de la Constitución Política de la República, el cual establece que nadie puede ser castigado
con otra sanción que la que señale una ley promulgada con anterioridad a la perpetración del hecho,
a menos que la nueva ley favorezca al afectado (6926/01, 16456/04, 33768/05).
Inciso 2"
El articulo 152 (actual artículo 158) del Estatuto Administrativo consulta en su inciso primero la regla
general en materia de prescripción de la acción disciplinaria, fijándola en cuatro años contados desde
el día en que el funcionario hubiere incurrido en la acción u omisión que dio origen al procedimiento
disciplinario. El inciso segundo de la misma disposición, contempla la excepción cuando se
encuentra acreditado que dentro del sumario existen hechos constitutivos de delito, en cuyo caso
la acción disciplinaria prescribe conjuntamente con la acción penal. Tratándose de hechos que
revisten caracteres de simples delitos, este plazo es de cinco años contado desde su comisión, de
acuerdo con los artículos 94 y 95 del Código Penal (60/96, 43151/01).
Para invocar la prescripción de la acción disciplinaria en conformidad con el inciso segundo del
artículo 152 (actual artículo 158) de la ley 18834, no se requiere que el funcionario aparezca como el
autor del presunto delito, pues sólo basta que los hechos en que se vio involucrado y que originaron
el sumario administrativo sean constitutivos de delitos, ya que es de competencia del Tribunal del
Crimen determinar las responsabilidades que a cada partícipe le pueda corresponder (31609/98,
13328/99).
El hecho que la acción disciplinaria administrativa prescriba conjuntamente con la acción penal no
obsta a que el afectado haya sido objeto de dos calificaciones funcionarias sin haber sido sancionado,
lo cual hizo cesar la suspensión del plazo vigente desde la notificación de los cargos (45969/98).
La expresión "la acción disciplinaria prescribirá conjuntamente con la acción penal", significa que
la prescripción de la aludida acción disciplinaria se produce al mismo tiempo o en la misma data en
que prescribe la acción penal. Luego, si prescribe la acción disciplinaria de la Administración, resulta
improcedente ordenar la reapertura de un sumario administrativo, aun cuando de acuerdo con los
antecedentes que posee la autoridad administrativa, le asista la convicción de que un ex funcionario
ha tenido responsabilidad administrativa y que, por consiguiente, es merecedor de la aplicación de
una medida disciplinaria. De este modo, aquélla está impedida para confirmar la sanción, ya que el
plazo establecido por la ley para ejercer la acción disciplinaria, se ha extinguido. En consecuencia, la
autoridad administrativa se encuentra imposibilitada para aminorar o dejar sin efecto dicha sanción,
por cuanto en la situación en estudio la acción disciplinaria está prescrita, no siendo procedente
acoger la solicitud de reapertura del proceso sumarial (24006/05, 49192/05).
No existen en el Código del Trabajo normas relativas a los plazos de prescripción de la acción
disciplinaria en contra de los funcionarios afectos a ese cuerpo legal. Por ende, a falta de norma
especial, procede aplicar el articulo 2515 del Código Civil, en cuanto a que la acción en estudio
prescribe en el plazo de cinco años, lapso que, por lo demás, resulta más acorde con el término
de cuatro años que para la prescripción de la acción disciplinaria se dispone respecto de los
funcionarios regidos por el Estatuto Administrativo y el Estatuto Administrativo para Funcionarios
Municipales contemplado en los artículos 152 (actual articulo 158) de la ley 18834 y 154 de la ley
18883, respectivamente (29052/02).
Concordancias: Arts. 157, letra d), del EA; 94 y 95 del CP; 2493 del CC; 154 del EAM.
Comentarios:
El Informe de la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno expresa que la norma del articulo
152 (actual articulo 158) se refiere a la prescripción de la acción disciplinaria, en dos situaciones
diferentes, esto es, si los hechos constituyen o no delito. Si los hechos no constituyen delito, la
acción disciplinaria prescribe en dos años (actualmente cuatro años) contados desde su comisión,
y si son constitutivos de delito, la acción disciplinaria prescribirá conjuntamente con la acción penal,
cualquiera que sea el plazo para esto último.
El articulo 5, W 1O, de la ley 19653, sobre Probidad Administrativa, aumentó el plazo de prescripción
de dos a cuatro años previsto en el inciso primero del artículo 152 (actual articulo 158) del Estatuto
Administrativo.
Agrega que el inciso segundo del articulo 152 (actual articulo 158) del Estatuto vincula la prescripción
de la acción disciplinaria con la prescripción de la acción penal, cuando los hechos son constitutivos
de delito, y que establecer un plazo de cuatro años permite concordar el plazo de prescripción de la
acción disciplinaria con el de la responsabilidad civil extracontractual en que pueda haber incurrido
también el funcionario, de acuerdo al articulo 2332 del Código Civil.
Interpretación:
Inciso 1°
El plazo de prescripción para hacer efectiva la acción disciplinaria que contempla el articulo 152
(actual articulo 158) de la ley 18834, debe contarse desde la fecha en que el inculpado incurrió por
última vez en la conducta irregular que se le imputa, y se suspende, en todo caso, con la notificación
de los cargos (2890198).
Una vez afinado el proceso disciplinario instruido por una nueva falta cometida por el mismo servidor
y en el que se aplique una medida disciplinaria, el plazo de prescripción se interrumpirá a contar del
día en que ocurrieron Jos hechos materia de la nueva infracción y, si corresponde, se ordenará la
reapertura del proceso en que el afectado fue absuelto o sobreseído por una prescripción que en
rigor se interrumpió por una infracción posterior (6926101).
Es inaplicable a un funcionario que fue sancionado con multa sobre su remuneración en 1999,
el nuevo plazo de prescripción de cuatro años dispuesto por el articulo 5, N' 1O, de la ley 19653,
que modificó el articulo 152 (actual articulo 158) de la ley 18834, pues éste no procede respecto
de las faltas cometidas con anterioridad a la fecha de vigencia de esa ley -14 de diciembre de
1999-, porque en materia de sanciones administrativas rige el principio de irretroactividad de la ley
consultado en los articulas 19, N' 3, inciso séptimo, de la Constitución Política de la República, y 18
del Código Penal, conforme al cual, nadie puede ser castigado con otra sanción que la que señale
una ley promulgada con anterioridad a la perpetración del hecho, a menos que ésta favorezca al
afectado (6926101 ).
Inciso 2°
Si desde la notificación de los cargos transcurren dos calificaciones sin que el afectado haya sido
sancionado, de acuerdo con el articulo 153 (actual articulo 159) del Estatuto Administrativo, el plazo
de prescripción continúa corriendo desde la notificación del último proceso evaluatorio, de manera
que si en él se completa el lapso de prescripción antes que se le notifique la sanción, la acción
disciplinaria prescribirá, debiendo la autoridad ordenar su sobreseimiento en el proceso (2890198).
Si bien el inciso segundo del articulo 153 (actual articulo 159) del Estatuto Administrativo dispone
que si transcurren dos calificaciones funcionarias sin que el sumariado haya sido calificado, seguirá
corriendo el plazo de la prescripción como si no se hubiese "interrumpido", lo cierto es que del
contexto del precepto y de lo previsto en los artículos 151 (actual articulo 157), 152 (actual articulo
158) e inciso primero del articulo 153 (actual articulo 159) de dicho ordenamiento, aparece que en
esa regla se ha empleado impropiamente la palabra "interrumpido" en lugar de "suspendido". Es
así que, conforme al mandato del articulo 153 (actual articulo 159), la interrupción, por su propia
naturaleza, importa la pérdida del tiempo transcurrido, de manera que no es posible que el periodo
anterior al momento en que ella se produce pueda ser tenido en cuenta para completar el respectivo
plazo de prescripción, a diferencia de lo que sucede, en cambio, con la suspensión, figura jurídica
que si permite considerar el lapso anterior al hecho que la provocara. En estas condiciones, la
expresión final del inciso segundo del articulo 153 (actual articulo 159) no puede sino referirse a la
suspensión de la prescripción, pues de entenderse lo contrario, carecería de sentido la regla de que
"continuará corriendo" el plazo, que el mismo contempla, por ser ella inconciliable con la figura de
la interrupción, la cual, como ya se ha dicho, hace perder el tiempo anterior y, por cierto, no resulta
posible concebir la continuación de algo que ya se ha perdido (17865/95).
Concordancias: Arts. 157, letra d), y 158 del EA; 96 del CP; 155 del EAM.
Comentarios:
La estrecha relación entre el derecho administrativo sancionador, en particular el disciplinario, y el
derecho penal, queda de manifiesto por la similitud entre las normas que regulan la responsabilidad
penal y la administrativa. En efecto, precisamente en materia de prescripción, son de similar tenor
los artículos 96 del Código Penal y 159 de la ley 18834, al punto de incurrir en idéntico defecto
de redacción, al emplear ambos la palabra "interrumpido", cuya connotación errónea destacara el
dictamen 17865, de 1995, ya citado en la parte interpretativa. Es asi que numerosa jurisprudencia
de la Contraloria General ha resuelto el tema de la aplicación temporal de las leyes relativas a la
responsabilidad administrativa, asimilando normas y principios del derecho penal.
Interpretación:
Inciso 1•
Corresponde a laContraloria General de la República, de acuerdo con el articulo 154 (actual articulo
160) del Estatuto Administrativo, conocer y pronunciarse sobre las presentaciones de los empleados
públicos o de las asociaciones de funcionarios en su representación, que impugnen la resolución
denegatoria de un derecho o reclamen por hacerse omitido su dictación o dilatado una resolución por
parte de la autoridad administrativa, habiéndola requerido el interesado, o bien cuando se reclaman
vicios de legalidad que afecten los derechos reconocidos en la ley 18834 (23623/96).
Para interponer el reclamo de ilegalidad ante la Contraloria General se establece un plazo de diez
días habiles desde que se tuvo conocimiento de los hechos, resolución o actuación que dieron lugar
al vicio que se reclama, dentro del cual no deben considerarse los días sábado. Una vez vencido
·este plazo el Organismo Contralor debe abstenerse de emitir el pronunciamiento que se le solicita
(25750/93, 38608/95, 25333/06). .
Las investigaciones sumarias y los sumarios administrativos que consulta la ley 18834 son procesos
de carácter reglado, de manera que respecto de ellos no caben otros trámites o ·instancias que los
previstos expresamente en la normativa pertinente de ese. ordenamiento. Por· lo tanto, no es posible
interponer en esos procedimientos el reclamo de ilegalidad ante la Contraloria Genera,!, establecido
en el articulo 154 (actual articulo 160) de esa ley. Sin embargo, ello no obsta a que' el Organismo
Contralor considere las presentaciones que formulen los afectados, como un antecedente en el
trámite de toma de ·razón a que están afectos los actos que aplican medidas disciplinarias (3634/91,
2190/95,19763/96,15060/01,33336/01,31606/03, 36814/05).
El proceso calificatorio se caracteriza por ser reglado y formal, de modo que en él están establecidas
pormenorizada mente las distintas etapas de desarrollo del sistema de evaluación. Por tal motivo,
el reclamo de ilegalidad ante la Contraloria General, contemplado en el articulo 154 (actual articulo
160) del Estatuto Administrativo, debe interponerse en dicho procedimiento después de notificado
el fallo del recurso de apelación deducido en contra de la determinación de la Junta Calificadora,
de acuerdo con los artículos 43 y 44 (actuales artículos 48 y 49) del mencionado ordenamiento
(8132/93, 38683/94, 38643/99, 6889/01 ).
El reclamo de ilegalidad ante la Contraloria General debe formularse en forma personal y directa por
el funcionario afectado o representado por una asociación gremial, cuando el interesado requiera
expresamente su intervención, no siendo posible, por ende, que un empleado reclame por otros
servidores. Al pronunciarse sobre el reclamo, el Organismo Contralor carece de competencia para
revisar genéricamente el proceso calificatorio del personal de un Servicio (22039/98, 38643/99,
6562/02).
Los vicios que puedan conducir a la invalidación del proceso calificatorio, deben alegarse todos en
un sólo acto, siendo inadmisible la interposición múltiple de reclamaciones sucesivas (20224/93,
21735/94,4318/98, 17463/01).
La circunstancia que un funcionario no hubiere apelado ante el Jefe Superior por las calificaciones
obtenidas, no le impide reclamar con arreglo al artículo 154 (actual articulo 160) de la ley 18834
(10151/96).
Los funcionarios. regidos por estatutos especiales, de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 156
(actual artículo 162) del Estatuto Administrativo, cuyos reglamentos de calificaciones no contemplan
o no regulan un reclamo ante la Contraloria General por los posibles vicios de legalidad que
afecten sus derechos, deben sujetarse a las normas de la ley 18834, Estatuto que les es aplicable
supletoriamente, por lo que pueden formular el reclamo de ilegalidad previsto en su articulo 154
(actual artículo 160) (17316/97, 2986/99).
A los académicos de la Universidad de Chile les resulta aplicable el articulo 160 de la ley 18834,
tratándose de presentaciones por vicios de procedimiento que puedan afectar los procesos
calificatorios de los mismos, atendido que el estatuto especial de calificaciones de académicos de
esa Corporación, no contempla un reclamo ante la Contraloria General (34345/05).
Interpuesto el reclamo de ilegalidad contemplado en el articulo 154 (actual articulo 160) del Estatuto
Administrativo, la calificación de un funcionario no se encuentra ejecutoriada mientras la Contraloria
General no emita un pronunciamiento sobre dicho reclamo (2578/96, 13652/99, 15117/99).
El hecho que un funcionario interponga el recurso que establece esta norma no implica en su favor
el derecho de percibir las remuneraciones durante el tiempo que se encuentra pendiente ante la
Contraloria General el conocimiento y resolución de su reclamo, pues ello implicaría forzar los
términos de ese precepto, en perjuicio del patrimonio del servicio, maxime si se considera que en
ese lapso el funcionario no trabajó por encontrarse desvinculado de hecho de la institución, supuesto
jurídico sobre el cual descansa el derecho al pago de las remuneraciones correlativas, así como el
goce de otros beneficios derivados del ejercicio del cargo para el cual ha sido nombrado (3624/05).
Inciso 2°
Para que los postulantes en los procesos de selección de altos directivos públicos, regulados por
la ley 19882, puedan recurrir ante la Contraloria General, según el articulo 160 de la ley 18834, es
requisito esencial que hayan previamente reclamado ante el Consejo de Alta Dirección Pública,
dentro del plazo de cinco días, desde el cierre del proceso y una vez que la Dirección Nacional del
Servicio Civil le haya notificado, por carta certificada o personalmente, el término del respectivo
concurso, y que, además, dicho Consejo se haya pronunciado respecto del mismo. Si el interesado
no interpuso ese recurso ante el citado Consejo, conforme a los fundamentos y plazos exigidos
por el articulo quincuagésimo sexto de la ley 19882, la Contraloria General no puede pronunciarse
respecto de la reclamación de que trata el citado articulo 160 (40015/06).
Inciso 3°
En aquellos casos en que la Contraloria General de la República conoció la materia por la que se
esta reclamando, a través de la toma de razón, no procede solicitar el informe previsto en este inciso
(19736/90).
Comentarios:
El Informe de la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno expresa, bajo el titulo "Rol de la Contraloria
General de la República", que este precepto se encuentra determinado por la Constitución Política
y por su propia Ley Organica Constitucional, siendo improcedente establecer en un cuerpo legal
de caracter sustantivo reglas atingentes a las atribuciones propias del mencionado Organismo del
Estado. Sin perjuicio de lo anterior, se incluyó el articulo 154 (actual articulo 160), como norma
genérica, que permite a los funcionarios reclamar por cualquier vicio de legalidad en que incurran
los órganos de la Administración, que impliquen la violación de sus derechos estatutarios. Este
texto, que sustituye diversas disposiciones del anterior Estatuto que contenía reglas análogas para
diferentes situaciones o casos, tiene carácter de rango orgánico constitucional y complementa las
atribuciones que posee la Contraloría General.
Al respecto, el Tribunal Constitucional declaró que el artículo 154 (actual artículo 160) de la ley
18834, en cuanto versa sobre las funciones y atribuciones de la Contraloría General de la República,
comprende materias que el constituyente ha reservado a la ley orgánica constitucional de ese
Organismo (Sentencia del Tribunal Constitucional, de 12 de septiembre de 1989, considerandos go
y 10°, Rol N" 79).
ARTICULO 161.- Los derechos de los funcionarios consagrados Ley 18.834, Ar1. 155.
por este Estatuto prescribirán en el plazo de dos años contado
desde la fecha en que se hubieren hecho exigibles.
Interpretación:
La prescripción es una sanción que se impone a la inactividad del titular de un derecho que no lo ha
ejercido durante un lapso determinado (19647190).
La prescripción extintiva es una institución de orden público, cuyo objeto es evitar que las relaciones
jurídicas se mantengan por largo tiempo en una situación de incertidumbre, constituyendo además
una sanción para el acreedor negligente en el ejercicio de sus derechos (24888193).
Los plazos de prescripción se cuentan desde que la obligación o el derecho se torna legalmente
exigible, lo cual, conforme a los principios que regulan la vigencia de los actos administrativos, se
determina a partir del instante en que el funcionario es notificado de la total tramitación de los actos
que lo afectan (407191, 7213192, 13223193). En el caso del ascenso, se entiende que las diferencias
de remuneraciones se han hecho exigibles desde la fecha en que se notifica al interesado la resolución
que dispone su promoción (1347193).
El artículo 155 (actual artículo 161) del Estatuto Administrativo se aplica a todos los beneficios que
no tienen carácter remuneratorio, con excepción del sueldo, como son las asignaciones referidas
en el artículo 94 (actual artículo 99) de este mismo ordenamiento (28609192, 1347193, 26339194,
15769100, 29636101, 3107102).
El artículo 94 (actual artículo 99) del Estatuto Administrativo se aplica a las remuneraciones adicionales
o complementarias al sueldo, estipendio este último que no queda incluido en dicha disposición por
no constituir una asignación, el cual se sujeta a la prescripción de dos años contemplada en el
artículo 155 (actual artículo 161) de la ley 18834 (18582195, 30135104).
La prescripción de dos años que establece el artículo 155 (actual artículo 161) del Estatuto
Administrativo, regula la de los derechos estatutarios de los funcionarios en forma amplia, esto es,
tanto los contemplados en el mencionado Estatuto como en otros cuerpos legales, pero no alcanza a
las asignaciones referidas en el artículo 94 (actual artículo 99) de ese ordenamiento, como tampoco
se rige por la prescripción del artículo 2515 del Código Civil (30135104).
Los beneficios que no tienen carácter estatutario por encontrarse regulados en leyes especiales, no
están sujetos al plazo de dos años previsto en el artículo 155 (actual artículo 161) de la ley 18834.
En estos casos, al no existir un lapso de prescripción que los regule, debe recurrirse a las reglas del
derecho común previstas en el Código Civil, específicamente su artículo 2515, que señala que las
acciones y derechos ordinarios prescriben en cinco años (13843193, 25322193, 36128193).
Se denomina prescribiente a quien puede alegar en su favor la prescripción del derecho que reclama,
y será éste quien, al encontrarse en la situación consultada en el artículo 25 de la Ley de Efecto
Retroactivo de las Leyes, elegirá entre el plazo de cinco años de prescripción previsto en el artículo
2515 del Código Civil y el de dos años consagrado en el articulo 155 (actual articulo 161) del Estatuto
Administrativo (19692/91, 1347/93, 35492/96, 4055/98).
Las asignaciones devengadas al amparo del DFL 338, de 1960, y reclamadas bajo la vigencia de la
ley 18834, pendiente el plazo de cinco años que contemplaba el artículo 382 del anterior Estatuto
Administrativo, da al Servicio prescribiente el derecho de opción del articulo 25 de la Ley de Efecto
Retroactivo de las Leyes, pero si elige el plazo del articulo 94 (actual articulo 99), éste empezará a
contarse, conforme lo establece dicho artículo 25, desde la fecha en que empezó a regir la citada ley
18834 (18465/90, 4055/98).
La prescripción exige como requisitos la existencia de una obligación pendiente, el transcurso del
tiempo y la inactividad del acreedor, los que pueden cumplirse, por ejemplo, aún antes de la petición
de condonación de una deuda. Ello, en todo caso, opera sólo respecto de las deudas pendientes
y no se extiende a la parte que se hubiere pagado con motivo de la concesión de facilidades por la
Contraloria General, correspondiendo solicitar la prescripción de la deuda subsistente (1347/93).
referidas en el articulo 94 (actual articulo 99) del mismo Estatuto (1280/92, 1286/92, 26339/94,
37617/96, 2815/00,46051/00, 29636/01).
Tratándose de los créditos que el Fisco tiene en contra de los funcionarios por estipendios mal
percibidos, ni la ley 18834 ni ningún otro precepto del Estatuto han alterado el régimen de prescripción
que rige al respecto, de modo que tales créditos se rigen en esa materia por el articulo 2515 del
Código Civil, que establece un plazo de prescripción de cinco años (1347/93, 25110/95).
Concordancias: Arts. 99 del EA; 2515 del CC; 25 de la Ley sobre Efecto Retroactivo de las Leyes,
de 7 de octubre de 1861; 157 del EAM.
Comentarios:
Por regla general, los derechos de los funcionarios públicos pueden solicitarse y hacerse efectivos
en cualquier momento mientras no prescriban.
La prescripción es una sanción que la ley impone a la inactividad del titular de un derecho por no
haberlo ejercido durante un determinado lapso. Esta institución se ha establecido como una forma
de dar certeza a las situaciones jurídicas, castigando a quienes no han ejercido sus derechos en la
oportunidad prevista por la ley.
La prescripción debe ser alegada por los respectivos interesados, quienes deben hacerla valer
formalmente para que la Administración pueda aplicarla, no siendo factible que sus organismos la
declaren o reconozcan de oficio. La jurisprudencia administrativa no ha exigido que la alegación
de la prescripción deba hacerse ante los Tribunales de Justicia o previo su pronunciamiento. Por·
el contrario, la Contraloria General ha aplicado y aplica habitualmente, por si sola, la institución de
la prescripción, tanto respecto de los derechos previsionales como de los remuneracionales, cuyo
conocimiento le corresponda de acuerdo con las facultades que le confiere el articulo 6 de la ley
10336.
Esa misma jurisprudencia ha establecido que la autoridad administrativa puede declarar o reconocer
la prescripción que le haya sido alegada o invocada respecto de cualquier tipo de obligación que
sea de su competencia o incumbencia, sin intervención de la judicatura ordinaria y aunque no exista
norma expresa que la autorice para ello.
Si no se alega la prescripción en tiempo y forma, procede exigir al interesado, por ejemplo, el reintegro
de las sumas que adeude a la Administración.
El Informe de la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno expresa, respecto del articulo 155 (actual
articulo 161 ), que corresponde a una norma nueva que la Comisión estimó indispensable incorporar a
fin de establecer un plazo dentro del cual se podrá exigir el cumplimiento de los derechos funcionarios
que consagra el Estatuto. Este plazo de prescripción se incluyó con el objeto de que la incertidumbre
jurídica acerca de situaciones relacionadas con tales derechos no se prolongue demasiado tiempo,
pues podría tener repercusiones o efectos en los ascensos, calificaciones, capacitación u otros, cuya
naturaleza exige la seguridad de que no serán susceptibles de modificaciones extemporáneas.
ARTICULO 162.- Los funcionarios que ejerzan las profesiones y Ley 18.834, Art. 156.
actividades que, conforme al inciso segundo del articulo 43 de
la ley N" 18.575 (*), se regirán por estatutos de carácter especial,
serán los siguientes:
e) Personal del Servicio Exterior del Ministerio de Relaciones Ley 18.899, Art. 63, d).
Exteriores. Asimismo el personal de la planta de Secretaría y
Administración General del Ministerio de Relaciones Exteriores
y de los Servicios Públicos sometidos a la dependencia del
Presidente de la República, a través de este Ministerio, cuando
cumplan funciones en el extranjero;
f) El personal que desempeña actividades directamente vinculadas Ley 19.056, Art. 4°.
a la actividad televisiva en la Corporación de Televisión de la
Universidad de Chile.
Interpretación:
Letra a)
Los estatutos especiales son instrumentos que consultan normas relativas a asuntos de personal
que las universidades estatales pueden dictar en virtud de las atribuciones que les entrega la ley
(7000/95, 42815/04).
(') El DFL 1-19653, de 2000, del Ministerio Secretaria General de la Presidencia, fijó el texto refundido,
coordinado y sistematizado de la ley 18575, Orgánica Constitucional de· Bases Generales de la Administracióbn
del Estado.
('*) El DFL 1, de 2001, del Ministerio de Salud, fijó el texto refundido, coordinado y sistematizado de la ley
15076, sobre Estatuto para los Profesionales Funcionarios.
En las instituciones de educación superior estatales, sólo es posible dictar estatutos especiales para
los académicos, no para los directivos, como son, por ejemplo, los Decanos y Jefes de Departamento,
por disponerlo expresamente el artículo 156 (actual artículo 162), letra a), del Estatuto Administrativo
(9295/96).
Los funcionarios no académicos de las instituciones de educación superior estatales se rigen por
el Estatuto Administrativo, en tanto que a los académicos se les aplica supletoriamente en lo no
previsto por sus estatutos especiales (31081190, 31598/90, 23776/91).
La letra a) del artículo 156 (actual artículo 162) del Estatuto Administrativo es aplicable a los
académicos del Liceo Experimental Manuel de Salas dependiente de la Universidad Metropolitana
de Ciencias de la Educación (19576/93, 11574/94, 11575/94, 35994/01).
Son funcionarios académicos de las instituciones de educación superior estatales, aquéllos cuyos
cargos conforman la planta de esa denominación, excluyéndose a los servidores que integran las
plantas de directivos, profesionales, técnicos, administrativos y auxiliares u otro concepto análogo,
quienes se rigen por la ley 18834 (31598/90).
Las Juntas Directivas de las universidades estatales son incompetentes para conocer las apelaciones
del personal no académico en contra de medidas disciplinarias que se les impongan al término de
procedimientos sumariales, considerando que éstos se rigen por la ley 18834, desde la vigencia
de ese ordenamiento, quedando derogadas aquellas disposiciones que sean contrarias a éste
(31775/95).
El cargo de Decano de las universidades estatales no tiene la calidad de académico, por lo que no
se aplican a éste las normas contenidas en estatutos especiales, sino las disposiciones del Estatuto
Administrativo (4579/91, 25167/93).
Los académicos universitarios deben realizar la declaración de intereses de la ley 18575, artículo 59
(actual artículo 57), cuando desempeñen empleos cuya remuneración sea equivalente a la de Jefe
de División, grado 6, lo que determinará la casa de estudios respectiva. Dada la naturaleza jurídica
de las universidades estatales, sus funcionarios son empleados públicos, sin que su calidad de tales
se altere porque se encuentran afectos a un estatuto especial, el cual no los exime de la observancia
de las disposiciones agregadas a la ley 18575 por la ley 19653, sobre probidad administrativa, pues
uno de los objetivos de esta modificación fue precisamente establecer la obligatoriedad de tales
normas respecto de todo el personal de los organismos de la Administración del Estado (47597/00,
8233/01, 3289/04).
A los académicos de la Universidad de Chile les resulta aplicable el articulo160 de la ley 18834,
tratándose de presentaciones por vicios de procedimiento que puedan afectar los procesos
calificatorios de los mismos, atendido que el estatuto especial de calificaciones de académicos de
esa Corporación, no contempla un reclamo ante la Contraloria General (34345/05).
Letra b)
Desde la vigencia de la ley 18834, los profesionales funcionarios afectos a la ley 15076, se rigen por
ésta en todos los aspectos que hayan sido expresamente regulados por ella, como lo es el horario
máximo de trabajo, fijado en 44 horas semanales (22312/90, 29011/00).
En todas aquellas materias no contempladas parla ley 15076, se aplica a los profesionales funcionarios,
supletoria mente, el Estatuto Administrativo, por lo que la declaración de irrecuperabilidad de la salud
de uno de estos servidores, se rige por la ley 18834, afectando dicha medida, de acuerdo con su
articulo 108 (actual articulo 113), a todos los empleos compatibles que desempeñe el profesional
funcionario. En este caso, la reincorporación de estos servidores a la Administración, procederá sólo
si la Comisión Médica respectiva rectifica su pronunciamiento (20418/92).
Letra e)
A los funcionarios del Servicio Exterior del Ministerio de Relaciones Exteriores no se les aplica el
articulo 70 (actual articulo 76) de la ley 18834, según el cual la comisión de servicio no puede
exceder del término de tres meses en cada año calendario, por cuanto este personal, de acuerdo
con la letra e) del articulo 156 (actual articulo 162) de la ley 18834, se rige por las disposiciones
del DFL 33, de 1979, de esa Secretaría de Estado, sin perjuicio que se sujete a los preceptos
del Estatuto Administrativo en los aspectos o materias no regulados por ese estatuto especial, en
conformidad con el inciso segundo del articulo 156 (actual articulo 162). Como el citado DFL 33, de
1979, establece normas sobre las comisiones en el extranjero, respecto de esos servidores no opera
la aplicación supletoria estatutaria. (31879/89).
El artículo 48 (actual articulo 46) de la ley 18575, al referirse a las causales de cese de funciones
del personal no consulta el cumplimiento de determinados años de edad, motivo por el cual debe
concluirse que la norma del articulo 58 del DFL 33, de 1979, del Ministerio de Relaciones Exteriores
-que señala que la inamovilidad de que gozan los funcionarios del Servicio Exterior cesará cuando
cumplan 60 años de edad, ¡;ualquiera que fuere su grado o categoria- está derogada, por ser
inconciliable con aquella disposición (24862/91, 26678/91, 8788/95).
El personal del Servicio Exterior del Ministerio de Relaciones Exteriores, el de planta de la Secretaria
y Administración General de ese mismo Ministerio y el de los Servicios Públicos dependientes del
Presidente de la República, a través de esa Secretaria de Estado, cuando cumplan funciones en
el extranjero, se rigen por un estatuto especial, sin desmedro de someterse a las normas de la ley
18834, en los aspectos o materias no regulados por aquél. Como el referido estatuto especial no
contempla disposiciones sobre compatibilidades o incompatibilidades en el ejercicio de cargos o
empleos, a estos servidores se les aplica en estas materias la ley 18834, en armonía con lo dispuesto
en el inciso segundo del articulo 156 (actual articulo 162) y, por ende, se encuentran afectos a lo
establecido en los artículos 80 y 81 (actuales artículos 86 y 87) del Estatuto Administrativo (33123/93,
15776/94).
En materia de calificaciones el personal del Servicio Exterior del Ministerio de Relaciones Exteriores
se regía por el decreto 1072, de 1995, de esa Secretaria de Estado (derogado por el articulo 45
del decreto 220, de 2002, actual Reglamento de Calificaciones del referido personal), el cual no
contemplaba ni regulaba reclamos ante la Contraloria General de la República por los vicios de
legalidad que afecten los derechos de estos funcionarios. Por lo tanto, considerando el carácter
supletorio de la ley 18834, tratándose de estas materias se aplica su articulo 154 (actual articulo
160), en cuya virtud estos servidores pueden recurrir ante la Entidad Fiscalizadora por el resultado
de sus evaluaciones funcionarias, cuando se hayan producido vicios de legalidad en el respectivo
procedimiento calificatorio que afecten los derechos que les confiere la ley (17316/97).
Letra d)
Letra e)
El personal de todos los organismos y servicios públicos de la Administración del Estado, con la sola
excepción de los previstos en el inciso segundo del articulo 18 (actual articulo 21) de la ley 18575,
están integralmente regidos por el Estatuto Administrativo. Sin embargo, la dotación de fiscalizadores
a que se refiere la letra e) de su articulo 156 (actual articulo 162), se sujeta a la ley 18834 únicamente
en aquellas materias que no se encuentren regladas en las disposiciones que les son propias, como
lo corrobora, por lo demás, el articulo 4 transitorio del mismo ordenamiento, al disponer que mientras
no se dicten los nuevos estatutos especiales continuarán rigiendo las normas en actual vigencia,
aplicándose en forma supletoria el mencionado Estatuto Administrativo (4411/90, 30568/90).
El personal de la Dirección del Trabajo que no forma parte del escalafón de fiscalizadores se rige por la
ley 18834. No obstante, en materia de requisitos de ingreso, de remuneraciones, incompatibilidades
y prohibiciones se le aplican disposiciones del DL 3551, de 1980 (4411/90).
De acuerdo con los artículos 18 y 45 (actuales artículos 21 y 43, respectivamente) de la ley 18575,
en relación con los artículos 1 y 156 (actual articulo 162), letra e), de la ley 18834, los funcionarios
del Servicio de Impuestos Internos se rigen por las normas del nuevo Estatuto Administrativo, con
excepción del personal que cumple funciones fiscalizadoras, el cual esta afecto a estatutos especiales
(24378/90, 18905/02).
El estatuto especial que rige al personal de fiscalizadores del Servicio de Impuestos Internos esta
contenido en el DFL 7, de 1980, del Ministerio de Hacienda, toda vez que el articulo 4 transitorio de
la ley 18834, establece que mientras no se dicten los nuevos estatutos especiales a que se refiere
su articulo 156 (actual articulo 162), continuaran rigiendo los que se encontraban vigentes a la fecha
de publicación de esta última ley, y a esa fecha los fiscalizadores del mencionado Servicio estaban
sujetos al referido DFL 7, de 1980 (40583/95).
Inciso 2•
De acuerdo con el inciso segundo del articulo 156 (actual articulo 162), los funcionarios mencionados
en esta norma estan afectos al Estatuto Administrativo en aquellos aspectos o materias no regulados
por sus estatutos especiales, de manera que si se encuentra reglamentado específicamente el
sistema de calificaciones de dicho personal, no resulta procedente la aplicación supletoria de las
disposiciones pertinentes de la ley 18834 (11574/94).
Comentarios:
El Informe Técnico del Ministerio de Hacienda, que se acompañó al Mensaje del Ejecutivo que
contenía el proyecto de ley que sustituyó la letra e) del articulo 156 (actual articulo 162) del Estatuto
Administrativo, expresa que la iniciativa persigue incluir ademas del personal del Servicio Exterior
del Ministerio de Relaciones Exteriores, al de Secretaria y Administración General de ese Ministerio
y de sus Servicios Públicos dependientes, cuando cumplan funciones en el extranjero, a los cuales,
sin hacer distinciones de plantas, les correspondería tener un estatuto especial.
Agrega dicho documento que "los funcionarios de esta Secretaria de Estado cumplen funciones
profesionales o desempeñan actividades que son absolutamente diferentes a la de los demas
servidores públicos, debido a que, por una parte, la planta que es la del Servicio Exterior, cumple sus
funciones mayoritariamente en el extranjero, esto es, cinco años fuera de Chile y un periodo de dos
años en el país, y la otra planta de Secretaria y Administración General, en sus distintos escalafones
debe, ademas de su desempeño en Chile, salir destinado al exterior a cumplir funciones de caracter
profesional, técnico, de secretaria y de auxiliares, que no es posible servir con la planta del Servicio
Exterior y que, a la vez, por razones de confiabilidad y seguridad es inconveniente satisfacer con
personal contratado localmente.
Por su parte, los servicios dependientes de este Ministerio, esto es, el Instituto Antártico Chileno,
la Dirección Nacional de Fronteras y Limites del Estado y la Dirección General de Relaciones
Económicas Internacionales deben, de conformidad a sus respectivas leyes orgánicas, destinar a
parte de su dotación de personal, para cumplir funciones específicas en el exterior".
ARTICULO 163.- Derógase el decreto con fuerza de ley N° 338, de Ley 18.834, Art. 157.
1960.
Interpretación:
El articulo 157 (actual artículo 163) de la ley 18834 sólo dispone la derogación expresa del DFL 338,
de 1960. Sobre esta base, se ha entendido que mantienen su vigencia aquellas normas especiales
que no se contradicen con su texto (20419190, 22037190).
El inciso primero del artículo 157 (actual artículo 163) fue aprobado con el carácter de ley orgánica
constitucional (28614189, 32078190, 21837191 ).
El criterio del legislador fue el de derogar pura y simplemente y en forma expresa el antiguo Estatuto
Administrativo, en términos de no admitir su vigencia parcial para determinado grupo de servidores
o instituciones (28614189, 33872189). Esta derogación orgánica ha sido concebida, sin perjuicio
de lo establecido por el artículo 14 transitorio (actual artículo 13 transitorio) de la ley 18834, norma
de protección que hace aplicable determinadas disposiciones del antiguo Estatuto a quienes se
encontraban en funciones al 23 de septiembre de 1989, fecha de entrada en vigencia de la citada
ley 18834 (10150195, 14781103).
Comentarios:
El Tribunal Constitucional declaró que el inciso primero del articulo 157 (actual artículo 163) de la ley
18834 tiene el carácter de norma propia de ley orgánica constitucional, en cuanto deroga disposiciones
de esa naturaleza contenidas en el DFL 338, de 1960 (Sentencia del Tribunal Constitucional, de 12
de septiembre de 1989, considerandos 9°, 11° y 12°, Rol W 79).
El Informe de la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno expresó que la Comisión concordó con
la Secretaría de Legislación en el sentido que resultaba jurídicamente muy inconveniente mantener
en vigencia parcial -para determinadas entidades- el DFL 338, de 1960.
Por tal motivo, se adoptó la decisión de derogar pura y simplemente, y en forma expresa, el antiguo
Estatuto Administrativo, señalando en el artículo 157 (actual artículo 163) del texto sustitutivo que
propone que "toda referencia que las leyes vigentes efectúen al decreto con fuerza de ley 338, de
1960, se entenderá hecha a las disposiciones correspondientes del presente Estatuto Administra-
tivo". Se salvan así los posibles vacíos que pueda generar la derogación total de aquel Estatuto,
especialmente para aquellas instituciones que se remitan al mismo como norma supletoria. Se tuvo
en cuenta también, para los efectos de adoptar esta decisión, la existencia de un órgano como la
Contraloría General, encargado de resolver los problemas de interpretación que pudieren surgir con
motivo de la sustitución integral del Estatuto Administrativo.
ARTICULO FINAL.- El cambio de régimen jurídico que signifique Ley 18.842, Art. Único.
la aplicación de este Estatuto, respecto de los trabajadores de Ley 18.834, Art. Final.
órganos y servicios del Estado, regidos a la fecha de su vigencia
por las normas del Código del Trabajo u otros estatutos especiales,
no importará supresión de cargo o término de relación laboral,
para ningún efecto legal, ni dará derecho al pago inmediato de
beneficio alguno, incluidas las indemnizaciones por años de
servicio que pudieren corresponder a tal fecha.
Interpretación:
Inciso 1•
La aplicación de la ley 18834 a los trabajadores de los organismos y servicios del Estado, regidos
a la fecha de su vigencia por las normas del Código del Trabajo u otros estatutos especiales, no
implica supresión de cargos o término de la relación laboral para ningún efecto legal. De este
modo, quienes estaban en esa situación mantuvieron su vinculo funcionario, pero sometidos ahora
a las disposiciones del nuevo cuerpo estatutario, las cuales, atendida su condición de preceptos
de derecho público, rigen in actum, no obstante las excepciones que ese mismo ordenamiento
contempla (12616190, 17816190, 25365190).
La ley 18834 no contempla la posibilidad de contratar personas con arreglo a las disposiciones del
Código del Trabajo, de modo que los funcionarios que estaban contratados conforme a ese Código,
a partir de la vigencia del nuevo Estatuto Administrativo, pasaron a tener el carácter de empleados
a contrata regidos por el articulo 9 (actual articulo 1O) de este último ordenamiento, dado que esta
figura es la que más se aviene con las características del contrato propio del texto laboral. Ello
resulta especialmente aplicable tratándose de Instituciones que a la época de vigencia de la citada
ley 18834 carecían de una planta de personal (7203191, 27669191 ).
De acuerdo con el articulo final del Estatuto Administrativo, los funcionarios no pueden impetrar
como consecuencia del cambio de su régimen estatutario, el pago de la indemnización por años
de servicio del Código del Trabajo, ni tampoco destinar la suma representativa de esa franquicia a
la compra de acciones de la Corporación de Fomento de la Producción. Los contratos de trabajo
celebrados por el Servicio con su personal han perdido su vigor, desde el momento que dichos
servidores quedaron sujetos a un nuevo régimen jurídico, que es el establecido en la ley 18834,
el cual contempla modalidades diferentes de desempeño funcionario, a las que debe ajustarse la
situación de esos servidores. Por tal motivo, los contratos de carácter indefinido correspondientes
al ejercicio de funciones contemplados en la planta del personal de la Junta Nacional de Jardines
Infantiles, se han transformado, a partir de la vigencia de esta ley, en nombramientos en calidad de
titulares en los respectivos empleos, conforme con su articulo 4 (14903190).
Cuando los contratos regidos por el Código del Trabajo o por estatutos especiales son renovados
sin solución de continuidad, el personal no debe cumplir con los requisitos de ingreso a los diversos
cargos de la Administración, pues la renovación constituye una prolongación de funciones y no un
nuevo ingreso al Servicio. No obstante, quienes ingresen a un empleo público con posterioridad a la
fecha de vigencia del Estatuto Administrativo, deben cumplir con todas las exigencias previstas para
ello, tanto en este ordenamiento como en estatutos especiales (12501/91).
Para acceder a la indemnización a que se refiere este artículo es preciso que el cese de funciones
haya derivado de la voluntad del empleador por motivos no imputables al trabajador. No obstante,
como la expiración de labores se produjo por deceso acaecido con anterioridad a la notificación
de dicho cese, esto es, por la causal del artículo 140 (actual artículo 146) letra g), del Estatuto
Administrativo, lo que impidió que el derecho a la indemnización alcanzara a incorporarse a su
patrimonio, la hija de la funcionaria fallecida no ha podido acceder a ese beneficio, toda vez que
nadie puede adquirir más derechos que los que tenía el causante (49386/04).
Según se desprende de la expresión "incluidas las indemnizaciones por años de servicio que
pudieren corresponder a tal fecha", consultada en el inciso primero del artículo final, la franquicia
indemnizatoria a que tienen derecho los servidores de que se trata no puede ser otra que aquella
que habrían disfrutado de haber cesado en el cargo al momento de producirse la sustitución de su
régimen jurídico, quedando, por ende, determinadas a esa fecha las condiciones de dicho beneficio,
el que por lo mismo debe regularse por la normativa entonces vigente. No obstante, por expresa
disposición de la ley, y habida consideración a que el cambio de su estatuto legal no significó el
término de la relación laboral, su pago quedó suspendido hasta que se produjera el cese efectivo
de servicios por una causal que otorgue el derecho a gozar de esa indemnización, como son
las derivadas de la voluntad del empleador. Atendidas estas consideraciones, el personal de la
Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación que se encontraba contratado conforme
a las normas del Código del Trabajo al 23 de septiembre de 1989, fecha de vigencia del Estatuto
Administrativo, tendrá derecho, en los casos que sea procedente, a una indemnización que debe
calcularse conforme al articulo 159 de la ley 18620, sin que afecte a su aplicación el hecho de haber
sido derogado por la ley 19010, por cuanto se encontraba vigente en la época de entrada en vigor
de la ley 18834 (1623/92).
Inciso 2'
El solo cambio de régimen jurídico de los trabajadores de las entidades estatales, que al entrar en
vigencia la ley 18834 se regían por el Código del Trabajo u otros estatutos especiales, no les da
derecho al pago inmediato de beneficio alguno, incluidas las indemnizaciones por años de servicio,
pago que se entiende postergado hasta el cese de servicios en la respectiva entidad empleadora
"por causa que otorgue derecho a percibirlo", expresión que debe entenderse referida a todos los
términos de funciones que no sean imputables a la voluntad del trabajador, sino a la del empleador
(276/92, 26465/00,45724/00,35041/01, 45891/04).
La declaración de vacancia de un empleo por salud incompatible con el desempeño del cargo,
constituye una causal de expiración de funciones basada en la voluntad del empleador y no en motivos
Un funcionario cuya salud fue declarada irrecuperable por la Comisión de Medicina Preventiva e
Invalidez respectiva, y a quien luego de concedérsele seis meses de licencia se le declaró vacante
el cargo, carece del derecho a la indemnización prevista en el inciso segundo del articulo final de la
ley 18834, por cuanto su cese de funciones no se produjo como consecuencia de la manifestación
de voluntad del empleador, sino que por aplicación de la ley, concretamente del artículo 146 (actual
artículo 152) del Estatuto Administrativo, precepto legal que ordena el retiro de los funcionarios
declarados con salud irrecuperable (21119/94, 45724/00,47925/01, 60686/05).
El calculo de la indemnización prevista en el inciso segundo del artículo final del Estatuto Administrativo
se realiza computando todo el tiempo servido al amparo del Código del Trabajo o de estatutos
especiales hasta el día antes de la vigencia de la ley 18834, esto es, el tiempo servido hasta la
fecha del cambio de régimen estatutario, pero sobre la base de las remuneraciones que el servidor
estuviere percibiendo al momento del cese de sus funciones (19080/92, 3990/95, 31931/96).
Comentarios:
Esta disposición tuvo por objeto proteger la situación laboral y los intereses de quienes, por imperativo
legal, pasaron a regirse por el Estatuto Administrativo.
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ARTÍCULOS TRANSITORIOS 657
ARTICULO 1'.- Delégase en el Presidente de la República, por Ley 18.834, Art. 1'
el plazo de seis meses contado desde la publicación de la transitorio.
presente ley, la facultad de adecuar las plantas y Jos escalafones
establecidos por ley a lo dispuesto en el articulo 5' permanente
de este Estatuto, mediante uno o más decretos con fuerza de ley.
El o Jos decretos correspondientes deberán ser dictados por el
Ministerio del ramo y suscritos, además, por los Ministros del
Interior y de Hacienda.
La facultad que otorga el inciso anterior comprende la de fijar Jos Ley 18.899, Art. 63, e).
requisitos generales y específicos que deberán cumplirse para
el ingreso y promoción en determinados cargos de las plantas
que se adecuen. Los requisitos referidos no regirán para el
encasillamiento que dispone el inciso final de este articulo.
Tratándose de plantas y escalafones que no hayan sido fijados Ley 18.834, Art. 1'
por ley, la autoridad administrativa correspondiente deberá transitorio.
adecuarlos a Jo dispuesto en el artículo 5' permanente de este Ley 18.899, Art. 63, f).
Estatuto, dentro del mismo plazo señalado en el inciso anterior.
En uso de esta facultad se podrá establecer plantas separadas
por unidades o establecimientos.
Los actuales escalafones se mantendrán vigentes, mientras Ley 18.834, Art. 1'
el Presidente de la República o la autoridad administrativa transitorio.
correspondiente no haga uso de la facultad a que se refieren los
incisos anteriores.
Interpretación:
Inciso 1'
Los decretos con fuerza de ley que se dicten en conformidad con el articulo 1 transitorio constituirán
el texto legal que fije la planta de los servicios de la Administración del Estado regidos por el Estatuto
Administrativo, de modo que ellos deberán incluir todos los cargos que en la actualidad conforma
ese ord.enamiento (7252/90).
que poseen y que se encuentra determinada por la denominación del escalafón de que forman parte
(4016/90, 27065/96). .
La facultad otorgada por este precepto no autoriza para cambiar el grado de los empleos, alteración
que, por otra parte, obsta al encasillamiento por el solo ministerio de la ley que en él se prevé
(11890/90).
Como el articulo 5 de la ley 18834 reconoce para fines de la carrera funcionaria sólo las cinco
plantas que indica, sin establecer requisitos ni fijar posiciones relativas en razón de determinadas
profesiones u oficios, ni distinguir otras especialidades que las que menciona, no procede que hayan
otros escalafones como tampoco que se consideren las distintas profesiones u oficios que puedan
existir dentro de cada planta, pudiendo solamente tener cabida en ese ordenamiento los escalafones
de directivos, profesionales, técnicos, administrativos y auxiliares (18647/92).
Inciso 2•
Las normas sobre requisitos para el ingreso y promoción a determinados empleos deben establecerse,
en los pertinentes decretos con fuerza de ley, en términos claros que hagan posible su aplicación
(11790/90).
Mientras no se adecuen las plantas y escalafones según este articulo 1 transitorio, los organismos
y servicios públicos que en materia de ascensos y nombramientos, de todo o parte de su personal,
se regían por una normativa distinta del DFL 338, de 1960, han continuado y continuarán afectos
a las disposiciones que les eran aplicables hasta que el Presidente de la República o la autoridad
administrativa haga uso de la facultad de adecuación, y en caso que la normativa aplicable antes
de la ley 18834 no estableciere requisitos para la provisión de empleos, ésta se hará por concurso
público en este período (16013/90).
Es improcedente la norma de un decreto con fuerza de ley que adecua las plantas y escalafones
de un Servicio, en cuya virtud se exige título profesional otorgado por una Universidad o Instituto
Profesional del Estado para el ingreso o promoción a los cargos de profesionales que indica,
excluyendo a las personas tituladas en establecimientos privados reconocidos por el Estado, pues
ello infringe la Constitución Política, artículo 19, Ws. 2 y 16, sobre igualdad ante la ley y libertad
de trabajo, respectivamente, que prohiben las discriminaciones que no se basen en la capacidad o
idoneidad personal (16941/90).
No puede promoverse a un empleo vacante de grado superior de la respectiva planta, a los funcionarios
que no cuenten con los requisitos de estudio pertinentes y que fueron encasillados en sus actuales
cargos conforme a este precepto, porque para tal ascenso se requiere que el funcionario reúna las
condiciones para el desempeño de la respectiva plaza, aunque el legislador no las haya contemplado
expresamente, ya que el cumplimiento de las exigencias referidas constituye la situación normal para
la provisión de empleos, y sólo de manera excepcional, en virtud de una norma legal, un cargo
puede ser servido por quien no las reúna (24111/90, 30345/90,24157/91, 21653/92, 22989/92).
Para determinar cuáles son las exigencias referidas a las personas que poseen un título profesional
para optar a cargos de su especialidad en la Administración del Estado, es necesario estarse a la
normativa que rige a cada Servicio. Así, las condiciones para desempeñar los cargos contemplados
en los escalafones de los distintos Servicios se contienen principalmente en los decretos con fuerza
de ley dictados de acuerdo con el artículo 1 transitorio de la ley 18834, sobre adecuación de plantas,
requisitos que pueden ser diferentes según el estamento a que pertenezca la respectiva plaza. En
consecuencia, menester será examinar en cada caso los requisitos que contempla la normativa
pertinente y las características del diploma según la entidad que lo otorgó, para así determinar si los
interesados tienen o no la calidad de profesionales (37780/94).
Inciso 3°
Mientras no se aprueben las nuevas plantas para la Subsecretaria de Guerra, sólo tienen derecho
a sobresueldo para los empleados civiles con titulo profesional universitario los funcionarios que,
cumpliendo con las restantes exigencias legales, ocupen cargos de la planta vigente para cuyo
desempeño se requiere poseer diploma profesional (40352/94, 2753/99).
El Rector de la Universidad de Chile puede suprimir empleos declarando que esa determinación
obedece a una necesidad institucional relacionada con la modificación de la estructura, funciones
o programación de las unidades que conforman dicha Casa de Estudios Superiores. No obstante,
si aparecen antecedentes fidedignos que adviertan que el motivo de la supresión es la eliminación
de determinado personal, la Contraloria General sólo podría dar curso a los pertinentes actos
administrativos si éstos se fundan en otros documentos a través de los cuales se forma la convicción
que la causa final de esa medida es la necesidad de prescindir de los cargos en que incide y no de
las personas que los ocupan (29203/95, 37514/95).
Inciso 4°
El personal de los organismos que se rige por el Código del Trabajo y que no adecuaron sus plantas,
han continuado afectos al sistema de nombramiento previsto en dicho Código, sin perjuicio de
recurrir al concurso para la provisión de empleos. En estas entidades mientras esté pendiente el
señalado procedimiento de adecuación, el régimen de ascensos (o promociones) de la ley 18834
no tiene cabida, por cuanto éste opera sobre la base de las plantas que menciona su articulo 5
permanente. En materia de feriados, licencias, calificaciones y cese de servicios, los funcionarios de
esos organismos han quedado, en términos generales, sometidos al nuevo Estatuto Administrativo,
cuyas normas por ser de derecho público, rigen in actum (21837/91).
El escalafón del Servicio Nacional de Aduanas continuó vigente solamente hasta el 27 de abril de
1990, porque el di a 28 de abril del mismo año, se publicó en el Diario Oficial el DFL 6, de 1990, del
Ministerio de Hacienda, que adecuó las plantas y escalafones de ese Servicio de acuerdo con la
facultad contemplada en este articulo 1 transitorio, inciso primero (24767/90).
Los escalafones del DFL 90, de 1977, del Ministerio de Hacienda, y por ende, los requisitos de
ingreso y ascenso que ese texto contemplaba y que aparecían referidos específicamente a los
cargos que conformaban esos escalafones, perdieron su vigencia, desde el afinamiento del proceso
de adecuación previsto en este artículo 1 transitorio (31463/90, 18574/91).
Según este inciso, la facultad de aprobar cursos de capacitación a que alude el DFL 90, de 1977, del
Ministerio de Hacienda, establecidos como requisitos habilitantes para el ingreso y promoción a los
empleos de los escalafones regidos por ese cuerpo legal, perdió su vigor al afinarse el proceso de
adecuación de plantas de personal (13588/91, 4437/94, 871/95).
Conforme al artículo 54 (actual artículo 59) de la ley 18834, para determinar la fecha desde la cual
deben disponerse los ascensos, hay que atender a la data de ocurrencia de la vacante, pero esto
rige desde la vigencia de la adecuación de cargos y en conformidad al escalafón derivado de ese
proceso (12029/92, 21639/01).
A partir del 23 de septiembre de 1989, fecha de vigencia de la ley 18834, y hasta que opere la
adecuación que establece el artículo 1 transitorio, no han podido introducirse modificaciones a las
plantas y escalafones vigentes en la Universidad de Santiago que impidan la aplicación cabal de
la normativa del nuevo Estatuto Administrativo. En otras palabras, es improcedente en esa etapa
ordenar variaciones que afecten la estructura básica de los referidos estamentos, entre las cuales
no es posible entender comprendidas la creación ni supresión de determinados cargos de los
ordenamientos existentes a dicha fecha, medidas que, por ende, pudieron disponerse durante ese
período (4767/93).
Inciso 5•
Los requisitos de ingreso y de promoción que se fijen en el acto de adecuación de las plantas no regirán
para el encasillamiento contemplado en este inciso. No procede que a través del encasillamiento se
efectúen designaciones en cargos de mayor jerarquía, porque el mismo no puede significar variación
en el grado de los funcionarios (11300/90, 12195/91).
La regla que señala que el encasillamiento del personal en actual servicio procederá de pleno
derecho, se refiere exclusivamente al personal de planta en funciones al 23 de septiembre de 1989,
no siendo factible nombrar a servidores contratados aun cuando existieren plazas vacantes, ya que
para ello se habría requerido una disposición expresa en tal sentido (31461/90).
El encasíllamiento a que alude esta disposición no ha tenido el alcance de los que ordinariamente
derivan de la creación de nuevas plantas, puesto que sólo ha consistido en la adecuación de aquéllas
preexistentes a las creadas por la ley 18834, operando de pleno derecho (13423/96).
El cargo de Jefe de Sección Farmacia de un hospital puede continuar siendo desempeñado por
una persona que carece del título de Químico Farmacéutico, no obstante que el DFL 23, de 1992,
del Ministerio de Salud, exige que la referida plaza deba ser servida por quien posea dicho título
profesional, porque la persona que desempeña el cargo indicado fue designada en ese empleo según
los requisitos exigidos con anterioridad a la vigencia del citado DFL, y lo ha podido seguir sirviendo
conforme al inciso quinto del artículo 1 transitorio, precepto que expresa que el encasillamiento del
personal en servicio a la fecha de la adecuación de los cargos opera de pleno derecho. Una vez que
el aludido funcionario cese en funciones, el Servicio de Salud deberá llamar a concurso para proveer
el mencionado cargo, en el cual sólo podrán participar profesionales que estén en posesión del título
de Químico Farmacéutico (2872/98).
ARTICULO 2°.· El personal en actual servicio que no desempeñe Ley 18.834, Art. 2o
funciones propias de la institución, de acuerdo con lo dispuesto transitorio.
en el articulo 2° permanente, continuará en el desempeño de sus
cargos.
Interpretación:
ARTICULO 3°.- La aplicación de las normas contenidas en la presente Ley 18.834, Art. 3'
ley no podrá significar disminución de remuneraciones ni pérdida transitorio.
de cualquier otro derecho para el personal en actual servicio.
Interpretación:
Los funcionarios a quienes se aplica el nuevo Estatuto Administrativo, cuya entrada en vigencia les
significó dejar de percibir la asignación por pérdida de caja debido a las mayores exigencias que
este texto dispone para tener derecho a ella, esto es, manejar dinero efectivo como función principal,
tienen derecho a continuar percibiendo dichos emolumentos por planilla suplementaria, con arreglo
al artículo 3 transitorio, mientras continúen desarrollando las mismas funciones (1487191, 5278191,
14411191, 6357192, 24721192, 4111194).
Esta norma de protección no ampara el derecho a ascender de los empleados que no cuenten con
los requisitos que actualmente exige un determinado cargo en la Administración, pero que pudieron
ser promovidos antes de la vigencia del nuevo Estatuto Administrativo, toda vez que la posibilidad de
ascender constituía para aquellos servidores una mera expectativa (18574191, 24157191, 22989192,
15441193).
Como esta disposición no establece normas especiales respecto de la planilla suplementaria, ésta
no es reajustable, ni se absorbe con el posterior aumento de las remuneraciones (44550198).
El tiempo trabajado a honorarios no puede considerarse para determinar los días de feriado de los
funcionarios del Instituto Nacional de Estadísticas, porque de acuerdo con la ley 18834, artículo 98
(actual artículo 103), y el artículo 45 (actual artículo 43) de la ley 18575, en relación con el artículo
18 (actual artículo 21), inciso primero, del mismo ordenamiento, para conceder dicho beneficio al
citado personal, sólo son útiles los desempeños en los sectores público o privado, efectuados como
"dependiente", carácter que no poseen las labores remuneradas sobre la base de honorarios. Luego,
es improcedente aplicarla ley 18834, artículo 3 transitorio -norma de protección de las remuneraciones
y demás derechos que tenían los empleados en servicio a la fecha de vigencia del nuevo Estatuto
Administrativo-, a los funcionarios de ese organismo, a quienes el artículo 54 del decreto 1062, de
1970, del Ministerio de Economía, Fomento y Reconstrucción, les permitía computar para el feriado
todos los años servidos al Estado, sean de planta, a contrata o a honorarios, siempre que estos
últimos se prestaran regularmente y con un horario fijo. Lo anterior, por cuanto el aludido personal
por expreso mandato del DL 249, de 1973, artículo 28, en concordancia con el artículo 1 del mismo ~
•¡:
texto legal, desde el 5 de enero de 1974, quedó afecto en materia de feriado anual al DFL 338, de
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1960, artículos 88 y siguientes, preceptos que no contemplaban la posibilidad de considerar para tal
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1:
fin, el tiempo trabajado a honorarios. De este modo la entrada en vigor de la ley 18834, no significó
respecto de aquellos empleados la pérdida de su derecho a computar los lapsos servidos en esa
condición (20956194)
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Es improcedente aplicar el artículo 3 transitorio de la ley 18834, al personal que a la fecha de su <(
entrada en vigor tie~e la calidad de interino y mantiene la titularidad de su cargo, no obstante que,
por efecto del artículo 5 transitorio, y su modificación posterior, pudo conservar dicha condición
hasta el 31 de diciembre de 1990, para volver a ejercer el empleo titular al cumplirse el mencionado
plazo. Ello, porque el referido artículo 3 transitorio persigue proteger el monto de las remuneraciones
de los empleados, cualquiera sea la situación jurídica que ostenten, pero no tiene la virtud de
mantener los estipendios de un empleo que se sirve en una calidad precaria más allá del término de
su desempeño, considerando que la propia normativa ha excluido esta modalidad de provisión de
empleos (5734190).
Comentarios:
Según consta del Informe Complementario de la Comisión Conjunta de la Junta de Gobierno, sobre
el proyecto de ley que aprueba el nuevo Estatuto Administrativo, se acordó la redacción de este
precepto en los términos de establecer que la aplicación de las normas de la ley no podían significar
"pérdida de cualquier otro derecho para el personal en actual servicio", con el objeto de subsanar la
observación planteada por el Ministro del Interior, en el sentido que lo prescrito en el inciso tercero
del articulo 1 transitorio del mismo ordenamiento resultaba insuficiente.
ARTICULO 4•.- Mientras no se dicten los nuevos estatutos Ley 18.834, Art. 4•
especiales a que se refiere el articulo 162 continuarán rigiendo transitorio.
los actualmente en vigencia, aplicándose supletoriamente las
normas del presente Estatuto.
Interpretación:
Mientras no se dicten los estatutos especiales a que alude el artículo 156 (actual artículo 162), los
académicos de las Unil(ersidades estatales continuarán rigiéndose por las disposiciones vigentes al
23 de septiembre de 1989, pudiendo, en su caso, ser contratados conforme a las normas del Código
del Trabajo (32661/89, 31081/90).
No obstante que las normas especiales anteriores a la ley 18834, aplicables a los académicos de
las Universidades estatales, se remiten al DFL 338, de 1960, remisiones que hoy deben entenderse
realizadas a la ley 18834, no procede que dichos académicos sean designados como interinos, ya
que esa forma de nombramiento no está actualmente contemplada (15394/90).
De acuerdo con lo dispuesto en la letra a) del artículo 11 (actual articulo 12) de la ley 18834, que
exige ser ciudadano para ingresar a la Administración del Estado, en relación con el articulo 13 de la
Constitución Política, que prescribe que son ciudadanos los chilenos que hayan cumplido dieciocho
años de edad y que no hayan sido condenados a pena aflictiva, no corresponde la contratación
de académicos extranjeros en las Universidades estatales, salvo que lo sean sobre la base de
honorarios. (20393/90).
El personal de fiscalizadores del Servicio Nacional de Aduanas continuará rigiéndose por sus estatutos
especiales mientras no se dicten otros, y supletoriamente, en aquellas materias en que esos textos
especiales nada digan, por la ley 18834. Por lo tanto, a dich()s servidores en materia de calificaciones
se les sigue aplicando lo dispuesto en el artículo 13 del DL 3551, de 1980 (30568/90).
Como el DFL 7, de 1980, del Ministerio de Hacienda, que fija el texto de la Ley Orgánica del Servicio
de Impuestos Internos, y la ley 18834, que aprueba el nuevo Estatuto Administrativo, no contienen
reglas precisas en cuanto a la forma en que deben realizarse los concursos para proveer empleos
públicos, corresponde a la propia autoridad administrativa determinar las bases y condiciones en
que han de desarrollarse dichos certámenes, tratándose del personal de fiscalizadores, pautas
que si bien pueden preestablecerse libremente y según se estime más adecuado para el mejor
desenvolvimiento del respectivo proceso, obligan a la autoridad que las fija a proceder conforme a
ellas y aplicarlas de manera general a todos los candidatos, debiendo en todo caso observarse las
disposiciones previstas en los artículos 16 (actual artículo 18) y siguientes de la referida ley 18834
(3182/91 ).
El artículo 108 (actual artículo 113) de la ley 18834, precepto que expresa que la declaración de
irrecuperabilidad afectará a todos los empleos compatibles que desempeñe el funcionario y le
No corresponde fraccionar por días o medios días los permisos con goce de remuneraciones de los
servidores cuyos estatutos especiales no permiten tal procedimiento, el que ha sido autorizado en el
nuevo Estatuto Administrativo (42633/94, 48220/03).
El personal del Ministerio de Relaciones Exteriores está sometido, de acuerdo con la ley 18575,
artículo 45 (actual articulo 43), en relación con el artículo 18 (actual artículo 21 ), inciso primero, del
mismo cuerpo legal, desde el 23 de septiembre de 1989, a la normativa de la ley 18834, la cual
regula en su Título VI el cese de funciones, con excepción de los funcionarios mencionados en la
ley 18834, artículo 156 (actual artículo 162), letra e), modificado por la ley 18899, articulo 63, letra
d), esto es, el de las Plantas del Servicio Exterior y de la Secretaría y Administración General de
ese Ministerio y los de Servicios Públicos dependientes del Presidente de la República, a través de
la citada Secretaría de Estado, cuando cumplan funciones en el extranjero, respecto de quienes,
mientras no se dicte el estatuto especial a que se refiere el citado articulo 156 (actual articulo 162) y
la ley 18575, artículo 45 (actual artículo 43), mantiene su vigor el DFL 33, de 1979, del Ministerio de
Relaciones Exteriores, sobre Estatuto del Personal de ese Ministerio, como lo ordena la ley 18834, en
su articulo 4 transitorio, con las modificaciones derivadas de la aplicación de las normas contenidas
en el Título 11 de la ley 18575 (6124/91 ).
ARTICULO 5'.- El personal que actualmente cumple funciones en Ley 18.899, Art. 63, g).
calidad de interino, podrá conservar dicha calidad hasta el 31 de Ley 19.103, Art. 15.
diciembre de 1990. Ley 19.182, Art. 15.
Ley 18.834, Art. 5'
transitorio.
Interpretación:
Los nombramientos de interinos, que al amparo del DFL 338, de 1960, constituían empleos de
planta, han dejado de poseer tal calidad en los servicios estatales regidos por la ley 18834, pasando
a constituir cargos sujetos a un régimen especial determinado por el articulo 5 transitorio del actual
Estatuto Administrativo. Desde su entrada en vigencia el desempeño de los cargos de planta sólo
puede desarrollarse en calidad de titulares, suplentes o subrogantes, habiendo desaparecido el
interinato (5169190, 16722190, 29527190, 29827191).
Concordancias: Arts. 63, letra g), de la ley 18899; 15 de la ley 191 03; 15 de la ley 19182.
Comentarios:
La disposición original preceptuaba que: "El personal que actualmente cumple funciones en calidad
de interino, la conservará durante el plazo de seis meses contado desde la publicación de la presente
ley o hasta el término del periodo de nombramiento, si éste fuere menor". Este articulo fue sustituido,
en la forma que aparece en el texto, por el articulo 63, letra g), de la ley 18899.
Posteriormente, el artículo 15 de la ley 19103, que aprobó la Ley de Presupuestos del Sector Público
para el año 1992, expresó lo siguiente: "El personal que se rige por la ley N' 18834 que al 31 de
diciembre de 1991 cumpla funciones en calidad de interino, podrá conservar dicha calidad durante
la vigencia de la presente ley". A su vez, el articulo 15 de la ley 19182, que aprobó la Ley de
Presupuestos del Sector Público para el año 1993, señaló que: "El personal regido por la ley N'
18834 que al 31 de diciembre de 1992 cumpla funciones en calidad de interino, podrá conservar
dicha calidad durante la vigencia de la presente ley".
ARTICULO 6°.- El límite de personal a contrata establecido en el Ley 19.103, Art. 16;
articulo 1Opermanente, inciso segundo, se aplicará a partir del1° de Ley 19.182, Art. 16;
enero del año 2000. No podrá aumentarse la dotación actualmente Ley 19.259, Art. 17;
existente de este personal que exceda de dicho límite. Ley 19.356, Art. 17;
Ley19.430, Art. 17;
Ley 19.486, Art. 17;
Ley 19.540, Art. 17;
Ley 19.596, Art. 17.
Ley 18.834, Art. 6"
transitorio.
Interpretación:
El número total de empleados a contrata de un Servicio no podrá exceder de una cantidad equivalente
al veinte por ciento del total de los cargos de su planta de personal, limitación que debió entrar
en vigencia el 1 de enero de 1992, pero que por sucesivas postergaciones a través de Leyes de
Presupuesto, rige actualmente a contar del 1 de· enero del año 2000 (22037190, 16376100).
Concordancias: Arts. 10 del EA; 16 de la ley 19103; 16 de la ley 19182; 17 de la ley 19259; 17 de la
ley 19356; 17 de la ley 19430; 17 de la ley 19486; 17 de la ley 19540; 17 de la ley 19596.
Comentari.os:
La fecha de aplicación del límite de personal a contrata establecido en el inciso segundo del articulo
1O de la ley 18834, ha sido sucesivamente postergada por las Leyes de Presupuesto, desde 1990
hasta 1999. La ley 19596, de Presupuestos del Sector Público para el año 1999, en su artículo 17, la
fijó a contar del "1 de enero del año 2000".
ARTICULO 7°.- El requisito de haber aprobado la educación básica Ley 18.834. Art. 7°
o de poseer el nivel educacional o titulo profesional o técnico, transitorio.
establecido en el articulo 12 permanente, letra d), no será exigible al
personal en actual servicio.
Interpretación:
Esta norma protege a los funcionarios en servicio al 23 de septiembre de 1989 que no cumplían los
requisitos de estudio exigibles para desempeñar un empleo determinado, con el objeto que puedan
continuar ocupando sus cargos. Los favorecidos con esta disposición no están habilitados para
servir plazas distintas por la vía del ascenso, respecto de las cuales no cumplen las exigencias
correspondientes, por lo que deben permanecer en sus cargos titulares (19020190, 24767190,
14405191).
Para acceder a un cargo de grado superior en la línea jerárquica de una misma planta, se requiere
que el empleado reúna las respectivas exigencias para poder desempeñarlo, aunque el legislador
no lo haya señalado expresamente, pues el cumplimiento de las mismas es la situación normal para
la provisión de empleos y sólo de manera excepcional y en virtud de una disposición legal que asi
lo disponga, un cargo puede ser servido por quien no esté en posesión de los requisitos pertinentes
para ello (13475190, 24111190, 15441193).
Cuando los funcionarios que están protegidos por este precepto se han acogido a retiro temporal o
desvinculado del Servicio, al reincorporarse a éste deberán acreditar el cumplimiento de los requisitos
del cargo al cual postulan (6600194).
ARTICULO 8'.- Las viviendas ocupadas actualmente por funcio- Ley 18.834, Art. 9'
narios que, de acuerdo al presente Estatuto, no tengan derecho a transitorio.
utilizarlas, deberán ser restituidas en el plazo de un año a contar
de la fecha de vigencia de la presente ley. Durante dicho período,
el funcionario deberá cumplir las obligaciones que le imponía la
legislación bajo cuyo amparo sustenta la tenencia de la vivienda.
Interpretación:
El Estatuto Administrativo contenido en la ley 18834, agregó como causal de cese del beneficio
a ocupar vivienda fiscal, la circunstancia que el funcionario o su cónyuge sean propietarios de
una vivienda en la localidad en que trabajan. Quienes se encuentren en esta situación tendrán la
obligación de restituir la vivienda en los términos establecidos en esta norma (20547190, 22039190).
El Gobernador Provincial tiene atribuciones para exigir administrativamente y disponer del auxilio
de la fuerza pública, con el objeto de obtener la restitución de bienes raíces estatales, en caso que
existan personas que los tengan indebidamente en su poder y se nieguen a devolverlos, de acuerdo
con los artículos 26, letra f), y 34 del DFL 22, de 1959 (2812191 ).
Los funcionarios públicos que perdieron su calidad de tal luego de ser traspasados a Servicios que
administran las Municipalidades como son las Corporaciones Municipales, entidades privadas que
se encuentran al margen del Estatuto Administrativo y que se rigen por las normas del Código del
Trabajo, carecen de la protección consultada en el articulo 9 transitorio (actual articulo~ transitorio)
de la ley 18834 (2812191).
El articulo 8 transitorio original de la ley 18834 se refería a que la primera evaluación que debía hacerse
conforme a las normas de este Estatuto, tendría lugar a contar del 1 de septiembre de 1990, y comprendería
el desempeño funcionario entre la fecha de vigencia de este Estatuto -23 de septiembre de 1989- y el 1 de
septiembre de 1990. Nada señaló, sin embargo, con respecto a la calificación del año 1989 por Jos servicios
prestados con anterioridad a esa data. Su inciso segundo ordenaba que el escalafón contemplado en el
artículo 46 debía comenzar a regir el1 de enero de 1991 y que, hasta que éste no entrara en vigencia, debería
constituirse un escalafón de antigüedad por cada una de las plantas establecidas en el articulo 5 permanente.
Dicho artículo 8 transitorio fue derogado, a contar del1 de septiembre de 1990, por el artículo 3 de la ley 19001.
El artículo 1 de esta última ley fue modificado, a su vez, por la ley 19075, según el cual la primera calificación
que debía hacerse conforme a la ley 18834, tendría lugar a contar del1 de septiembre de 1992 y comprendería
el desempeño funcionario entre el1 de septiembre de 1991 y el1 de septiembre de 1992.
Interpretación:
Las investigaciones sumarias y los sumarios administrativos iniciados antes del 23 de septiembre
de 1989, fecha de entrada en vigencia de la ley 18834, se ceñirán a las normas de procedimiento
contenidas en la legislación vigente al momento de su inicio y no al nuevo Estatuto Administrativo,
no obstante lo cual, se aplicarán las sanciones establecidas en éste (905190, 9900190, 25597190,
8615191 ).
El que los procesos administrativos iniciados antes de la vigencia de la ley 18834 deban ceñirse a
las normas de procedimiento contenidas en la normativa vigente al momento de ser incoados, se
refiere a las reglas de tramitación del proceso disciplinario, como son los plazos, notificaciones y
otros aspectos procedimentales (1091190).
Si una investigación sumaria es elevada a sumario administrativo, esa medida no le confiere a este
último procedimiento la calidad de un nuevo proceso que pueda ser tramitado conforme a las normas
de procedimiento vigentes a la fecha de la elevación a sumario y permita obviar, por consiguiente, la
competencia de la Contraloría General en la materia, máxime si ésta ha hecho uso de sus facultades
para representar los vicios que pudieran afectar la legalidad de lo actuado. El criterio expuesto
se contiene en una reiterada jurisprudencia administrativa que señala que en las investigaciones
sumarias no está contemplada la prórroga del plazo fijado por la ley para su tramitación, de manera
que si en dicho lapso no se puede dar término a la indagatoria, debe elevarse el proceso a sumario
administrativo, lo cual constituye un trámite interno del proceso (4243190, 3480191 ).
Comentarios:
La jurisprudencia administrativa ha declarado de manera reiterada que en conformidad con el articulo
9 transitorio del Estatuto Administrativo, las investigaciones sumarias y sumarios administrativos en
tramitación al 23 de septiembre de 1989, se regirán por el procedimiento que consultaba el DFL
338, de 1960, pero que las autoridades con potestad disciplinaria encargadas de resolverlos, deben
aplicar las sanciones previstas en el artículo 121 de la ley 18834.
ARTICULO 10.- Los concursos pendientes a la fecha de vigencia Ley 18.834, Art. 11
de este Estatuto, se regirán por las normas legales aplicables a la transitorio.
fecha de publicación del respectivo llamado.
Interpretación:
Desde la vigencia de la ley 18834, quienes ostentaban cargos que conforme a la antigua normativa
estatutaria eran compatibles, pero que posteriormente dejaron de serlo, han conservado el derecho
a continuar ejerciéndolos. Este es el caso de Jos profesionales funcionarios que servían un empleo
de exclusiva confianza y que de acuerdo con esa calidad, se les solicitó su renuncia no voluntaria,
optando por continuar ocupando un cargo adscrito, el que cumplian en conjunto con un empleo de
horas, dado que el DFL338, de 1960, permitía, a quien desempeñaba un cargo para el cual se exigía
titulo profesional universitario, servir otro remunerado por horas, siempre que no excediera de dos
horas diarias, norma que actualmente no contempla la ley 18834 (2790196).
No obstante que el articulo 80 (actual articulo 86), inciso primero, del Estatuto Administrativo, hace
incompatibles entre sí Jos empleos regidos por sus normas con todo otro que se preste al Estado,
aun cuando no se rija por sus disposiciones, el artículo 12 transitorio (actual articulo 11 transitorio)
de ese mismo ordenamiento permitió mantener sus empleos a las personas que al23 de septiembre
de 1989 desempeñaban cargos que eran compatibles al tenor del articulo 170, letra a), del DFL 338,
de 1960 (30288190).
· ARTICULO 12.- Lo dispuesto en la letra a) del articulo 7° de este Ley 18.972, Art. 2,, 2).
Estatuto, referente a los Ministerios, sólo se aplicará a contar Ley 18.834, Art. 13
de la fecha en que se produzca la adecuación de plantas, en transitorio.
conformidad con el artículo 1° transitorio.
Interpretación:
Con motivo del proceso de adecuación de las plantas de los Ministerios, necesariamente deben
establecerse los cargos de Jefes de División, medida indispensable para dar cumplimiento al
mandato de esta norma y de la ley 18575, referente al régimen de exclusiva confianza que sirve de
fundamento a aquellas disposiciones (4016190).
Comentarios:
A partir del 3 de agosto de 1992, fecha de publicación en el Diario Oficial de la ley 19154, cuyo
artículo 2, N" 2, sustituyó el artículo 7 de la ley 18834, la referencia a los Ministerios que hace el
artículo 13 transitorio (actual articulo 12 transitorio) debe entenderse a la contenida en la letra b) de
dicho articulo 7.
ARTICULO 13.- Las normas del decreto con fuerza de ley N" Ley 18.834, Art. 14
338, de 1960, y el artículo 12 del decreto ley N" 2.448, de 1978, transitorio.
que actualmente rigen los derechos de desahucio, de jubilación
y otros beneficios considerados en el régimen previsional
antiguo, seguirán vigentes respecto de las personas a las cuales
se apliquen dichas disposiciones a la fecha de vigencia de la
presente ley.
Interpretación:
Para acogerse a las normas de protección del artículo 14 transitorio (actual artículo 13 transitorio)
del Estatuto Administrativo, se requiere que a la fecha de vigencia de la ley 18834 -esto es, al 23 de
septiembre de 1989- el interesado se encuentre regido por el DFL 338, de 1960. No son aplicables
sus preceptos, en consecuencia, a quienes a esa fecha se hallaban acogidos al Código del Trabajo
y sus disposiciones complementarias (34901195, 27616103).
La norma del artículo 389 del DFL 338, de 1960, que disponía que los Auxiliares de la Administración
de Justicia que indica se encontraban regidos por los Párrafos 18, 19 y 20 del Título 11 de ese
Estatuto, circunstancia que les confería el derecho a desahucio en relación con los años de servicios
e imposiciones efectuadas al Fondo de Seguro Social de acuerdo con los artículos 102 y siguientes
del mismo ordenamiento, se encuentra vigente en virtud del artículo 14 transitorio (actual artículo 13
transitorio) de la ley 18834 (29646189, 20277190, 14734105, 39051105).
Las normas de los artículos 109, 110, 116, 123, 128,132 y 169 del DFL 338, de 1960, se encuentran
vigentes para quienes cumplen las condiciones establecidas en el artículo 14 transitorio (actual
artículo 13 transitorio) del EstatutoAdministrativo (26965190, 27158190,29546190,8258191, 22591191,
18647192, 26958192 -aclarado por el 42734105-, 50823104).
La protección del artículo 14 transitorio (actual artículo 13 transitorio) del Estatuto Administrativo no
se extiende a quienes se incorporan o reincorporan a partir de la fecha de vigencia de la ley 18834
(28553190, 35420194, 4069199, 14781103).
Acontardel23 de septiembre de 1989 quedó derogado el DFL338, de 1960, y con él, la incompatibilidad
entre sueldo y pensión que consultaba el artículo 172 de ese cuerpo estatutario. Ello tiene su
fundamento en la historia fidedigna del establecimiento de la ley 18834, en especial del Informe
Técnico que se acompañó al Mensaje respectivo, el cual expresa que "el nuevo texto estatutario no
considera la actual incompatibilidad entre remuneraciones y pensiones que afecta a los empleados
públicos. El Gobierno ha resuelto proponer la eliminación de esta incompatibilidad en atención a
que la pensión deriva de un ahorro previsional del propio funcionario, por lo que resultaría injusto
que si se dedica a una nueva actividad pública, se le prive de parte del ingreso que corresponda
a la función". El artículo 14 transitorio (actual artículo 13 transitorio) del Estatuto Administrativo no
puede servir de argumento para mantener esa incompatibilidad, porque se trata de una norma de
protección de beneficios previsionales, carácter que no reviste el régimen que establecía el citado
artículo 172 (28035189, 1091190, 27332190).
Las pensiones de jubilación se determinan de acuerdo con las disposiciones legales vigentes y
requisitos cumplidos a la fecha de expiración en funciones (29524189).
El plazo para solicitar el integro de imposiciones que tienen los funcionarios afectos al régimen
previsional antiguo que hacen uso de permiso sin goce de remuneraciones, es el señalado en
el artículo 91, inciso final, del DFL 338, de 1960, disposición que se encuentra vigente según el
artículo 14 transitorio (actual artículo 13 transitorio) del Estatuto Administrativo, pues reviste el
carácter de beneficio previsional en cuanto autoriza un integro de imposiciones fijando el plazo y la
forma de pago al respecto (14604/90, 13473/00).
De acuerdo con esta norma, el reconocimiento de servicios previstos en el artículo 261 del DFL 338.
de 1960, reviste el carácter de un beneficio del régimen previsional antiguo (24882/90).
El procedimiento para acreditar servicios mediante información para perpetua memoria contemplado
en el artículo 261, inciso tercero, del DFL 338, de 1960, que sólo era útil para los efectos jubilatorios
conforme al artículo 113 del mismo texto, ha mantenido su vigor luego de la derogación de ese DFL
por la ley 18834, artículo 157 (actual articulo 163), para aquellos personales aludidos en el artículo
261, inciso primero (dependientes de las Direcciones de Educación), de dicho DFL 338, afectos al
antiguo régimen previsional y que lo estaban a la data en que comenzó a regir el nuevo Estatuto
Administrativo (24882/90, 27867/90).
Según este precepto transitorio, la norma del articulo 12 del DL 2448, de 1978, continúa vigente,
y se aplica sólo tratándose de trabajadores del régimen previsional antiguo en servicio al 23 de
septiembre de 1989, fecha de vigencia de la ley 18834 (17661/90, 27158/90, 25855/00).
La renuncia no voluntaria solicitada al personal contratado que sirve cargos de exclusiva confianza
del Presidente de la República o de la autoridad llamada a hacer su nombramiento, antes del
vencimiento del plazo y cuya contratación es hasta una fecha determinada y mientras sean necesarios
sus servicios, configura a favor de los interesados el derecho a jubilar conforme al artículo 12 del
DL 2448, de 1978 (33011/90, 1491/91).
Un contratado que cesa en su empleo por estimarse innecesarios sus servicios, no tiene derecho a
jubilar conforme al artículo 12 del DL2448, de 1978, que confiere derecho a pensionarse por expiración
obligada de funciones originada en el término del respectivo período legal, por supresión dispuesta
por la autoridad competente o en la renuncia no voluntaria no motivada por calificación insuficiente
o medida disciplinaria y que tengan 20 ó más años de imposiciones o tiempo computable. Ello, por
cuanto el carácter especial de dicha norma conlleva que su alcance deba referirse estrictamente a
los empleados de planta de un Servicio y no a los contratados, cuyas funciones son esencialmente
transitorias, no forman· parte de la dotación estable del Servicio y cesan normalmente en fechas
predeterminadas (172/91, 35267/94,26588/96, 5555/97).
Los funcionarios que ocupan cargos de exclusiva confianza pueden jubilar por expiración obligada de
funciones de acuerdo con el DL 2448, de 1978, artículo 12, si han mantenido el régimen previsional
antiguo y en los términos del artículo 131 del DFL 338, de 1960 (3837/01).
Las normas sobre desahucio sólo continúan vigentes para quienes les eran aplicables a la fecha de
entrada en vigor de la ley 18834, siendo entonces indispensable que los interesados estuvieren en
servicio al23 de septiembre de 1989 (11204/91, 24006/93, 57081/04).
pues el articulo 102 del DFL 338, de 1960, que regula la materia, ha continuado vigente solamente
para aquellos empleados que, cumpliendo los requisitos pertinentes, se encontraban en servicio al
23 de septiembre de 1989 (24350/91).
El articulo 14 transitorio (actual articulo 13 transitorio) del Estatuto Administrativo protege únicamente
los desempeños en plazas que estaban afectas a cotizaciones en el Fondo de Seguro Social a
la vigencia de la ley 18834 y que se han proyectado ininterrumpidamente luego de su dictación.
En consecuencia, dicha protección incluye sólo a las extensiones horarias de esos mismos cargos
o funciones servidas al 23 de septiembre de 1989 con horario parcial, no pudiendo comprender
situaciones funcionarias consolidadas bajo la vigencia del nuevo Estatuto Administrativo, como son
los nuevos empleos paralelos asumidos después de esa fecha (24006/93).
Pugna con las premisas de la seguridad social la consideración de periodos simultáneos destinados
a la obtención de un mismo beneficio previsional o que hayan sido previamente compensados para
generar esa franquicia, lo que ha sido reconocido por la ley como ocurre con el articulo 113, letra m),
del DFL 338, de 1960, vigente conforme al articulo 14 transitorio (actual articulo 13 transitorio) del
Estatuto Administrativo (12026/91, 12863/91 ).
Los periodos servidos ad honorem no se han contemplado expresamente en el DFL 338, de 1960,
de acuerdo con el articulo 14 transitorio (actual articulo 13 transitorio) del Estatuto Administrativo
(31669/92).
Un médico que registra dos lineas previsionales independientes se encuentra habilitado para obtener
las pensiones correspondientes a los cargos compatibles que desempeña y a que alude el articulo
126 del DFL 338, de 1960, en la medida que optando por esta especial modalidad, acredite una
causal jubilatoria en su linea de afiliación principal y se produzca el cese simultáneo en ambas plazas
compatibles, puesto que está protegido por el articulo 14 transitorio (actual articulo 13 transitorio)
del Estatuto Administrativo y, además, a esa época cumpla con el requisito de tener seis años de
servicios paralelos que establece el aludido articulo 126 (1987/93, 21618/95, 4588/04).
El personal contratado no tiene derecho a jubilar según la norma especial de cálculo de pensiones
contenida en el articulo 132 del DFL 338, de 1960, a menos que hayan servido, durante un lapso
mínimo de un año, un cargo asimilado a una de las cinco primeras categorías que dicho precepto
indica (12324/94, 15354/94, 13004/96, 35867/97, 15967/01).
El desahucio previsto en el DFL 338, de 1960, articulo 102, norma vigente acorde al articulo 14
transitorio (actual articulo 13 transitorio), es compatible con la bonificación para el retiro establecida
en el articulo séptimo de la ley 19882 (46387/03).
Concordancias: Arts. 91, inciso final, 102 a 108, 109 a 137, 169, 261, 389, del DFL 338, de 1960;
DFL 1340 bis, de 1930; 12 del DL2448, de 1978.
Comentarios:
El articulo 13 transitorio del Estatuto Administrativo tiene por objeto mantener vigentes diversas
disposiciones que cita relativas al antiguo sistema previsional aplicable a los funcionarios de la
Administración del Estado, luego de la derogación del DFL 338, de 1960, dispuesta expresamente por
el articulo 163 de la ley 18834, a quienes se encóntraban en funciones al 23 de septiembre de 1989.
En consecuencia, el régimen previsional y de seguridad social de estos servidores, básicamente
contenido en el DFL 1340 bis, de 1930, Ley Orgánica de la ex Caja Nacional de Empleados Públicos
y Periodistas y en el DFL 338, de 1960, no se alteró con arreglo al referido articulo 13 transitorio.
Por el contrario, las personas que ingresaron o se reincorporaron a la Administración del Estado a
partir de esa data no les favorece la protección del articulo 13 transitorio y han pasado a regirse en
materia previsional por los preceptos del decreto ley 3500, de 1980, que establece el nuevo sistema
de pensiones.
ARTICULO 14.- Los funcionarios de los órganos o servicios públicos Ley 18.834, Art. 15
regidos por esta ley, que a la fecha des u entrada en vigencia hubieren transitorio.
cumplido veinte años de servicios computables para jubilación y
se hubieren desempeñado en el grado máximo de su respectivo
escalafón de especialidad durante un periodo de a lo menos un año,
mantendrán estas condiciones habilitantes para los efectos de lo
dispuesto en el articulo 132 del decreto con fuerza de ley N• 338,
de 1960, no obstante las modificaciones que pudieren producirse
en su ubicación en el respectivo escalafón como resultado de la
aplicación de los artículos 5° permanente y 1° transitorio.
Interpretación:
El articulo 15 transitorio (actual articulo 14 transitorio) es una norma excepcional de orden público,
y por tanto, de aplicación estricta, al proteger sólo a los funcionarios en el evento de perder el grado
tope de escalafón al readecuarse las plantas de acuerdo con el articulo 1 transitorio de la ley 18834,
en virtud de la facultad otorgada al Presidente de la República para adecuar las plantas y escalafones
establecidos por la ley. Ello, por cuanto la disposición examinada es eminentemente transitoria, lo
que impide consolidar a su amparo situaciones que no regula, y además, porque ha sido concebida
para aplicarse respecto de determinadas normas, o sea, su sentido y alcance únicamente ha debido
referirse a los efectos jurídicos originados en las alteraciones que pudieren producirse en la ubicación
de los interesados en el respectivo escalafón por la aplicación de los artículos 5 y 1 transitorio de
la ley 18834. Luego, los nuevos cambios de planta experimentados como consecuencia de leyes
posteriores o de ascensos, no están amparados por esta disposición y no habilitan para conservar
el beneficio del articulo 132 del DFL 338, de 1960, salvo en caso de textos legales que dispongan
nuevos encasillamientos y esos se hubieren remitido expresamente a ello (22389104).
Un servidor amparado por el articulo 15 transitorio (actual articulo 14 transitorio) de la ley 18834,
puede renunciar o rechazar el ascenso que le correspondería con el objeto de conservar la posibilidad
de acogerse a jubilación en la plaza protegida (22389104).
La mantención del beneficio contemplado en el articulo 132 del DFL 338, de 1960, si se cumplen
las condiciones señaladas en el articulo 15 transitorio (actual articulo 14 transitorio) del Estatuto
Administrativo, favorece a los empleados de planta que ocupaban un cargo tope de escalafón y que
a causa del encasillamiento o modificaciones de la planta producidas por aplicación de los artículos
5 y 1 transitorio de la ley 18834, queden ubicados en un empleo que no da derecho a jubilar con la
última renta de actividad (14604190, 32936193, 7564194, 4731196, 22389104).
El articulo 15 transitorio (actual articulo 14 transitorio) opera respecto de las adecuaciones de plantas
de personal derivado de la aplicación de los artículos 5 y 1 transitorio de la ley 18834, pero no en
cuanto a las nuevas ubicaciones producto de ascensos o encasillamientos (24427191, 16405192,
3185193, 24379193, 22389104).
La norma del articulo 15 transitorio (actual articulo 14 transitorio) se relaciona solamente con el
cargo que se ocupaba antes de producida una reubicación por encasillamiento o modificaciones de
plantas ordenadas por los artículos 5 y 1 transitorio de la ley 18834. Por ello, no es aplicable a las
modificaciones de escalafones que se produzcan con arreglo a una ley posterior, como es el caso de
la ley 19020 (1395192, 12206192, 22389104).
Concordancias: Arts. 132 del DFL 338, de 1960; 5 y 1 transitorio del EA.
Comentarios:
El beneficio del articulo 14 transitorio del Estatuto Administrativo se relaciona con la mantención del
mecanismo especial de cálculo de pensiones consultado en el articulo 132 del DFL 338, de 1960,
pero no con una causal de jubilación.
ARTICULO 15.- Los funcionarios afectos al régimen previsional antiguo Ley 18.834, Art. 16
que hagan uso de permiso sin goce de remuneraciones podrán efectuar transitorio.
de su peculio, para los efectos del desahucio y de la previsión, las
imposiciones que correspondan.
Interpretación:
El plazo para solicitar el integro de imposiciones que tienen los funcionarios afectos al régimen
previsional antiguo que hacen uso de permiso sin goce de remuneraciones, es el señalado en el
DFL 338, de 1960, articulo 91, inciso final, disposición que, según el articulo 14 transitorio (actual
articulo 13 transitorio) de la ley 18834, debe estimarse vigente, pues reviste el carácter de beneficio
previsional en cuanto autoriza un integro de imposiciones fijando el plazo y forma de pago al respecto
(14604190, 13473/00).
Interpretación:
En el caso de un empleado cuyo cese se produjo antes de la vigencia de la ley 18834, es improcedente
que en la resolución que le declaró vacante el cargo por salud irrecuperable, se considere el beneficio
a percibir el total de sus remuneraciones, sin trabajar, durante el plazo máximo de seis meses. por
cuanto su situación funcionaria quedó regulada por el DFL 338, de 1960, el cual no contemplaba ese
derecho al personal afiliado a una Administradora de Fondos de Pensiones (8596/90).
Interpretación:
Los beneficiarios de desahucio de un funcionario fallecido son el cónyuge sobreviviente, los hijos
o los padres, en ese orden, siendo excluyentes uno de otro, por lo que, encontrándose el cónyuge
sobreviviente en el primer lugar de prelación, es necesario que previamente se acredite que dicha
persona ya no existe. Si ninguna de estas personas comparece a cobrar el desahucio, este beneficio
integrará el haber de la herencia (8370190, 13115191,34901194,28925195, 34744103).
Conforme al articulo 382 del DFL 338, de 1960, el derecho a reclamar el pago de desahucio prescribe
en el plazo de cinco años, contado desde el cese de funciones (34901/94).
En el caso que el desahucio integre el haber de la herencia, los interesados deben presentar ante
la Contraloria General una copia autorizada del auto de posesión efectiva junto con el formulario de
solicitud del desahucio (16465102).
Concordancias: Arts. 102 y ss. y 382, inciso segundo, del DFL 338, de 1960.
ARTICULO 18.- No obstante lo dispuesto en el articulo 76 estarán Ley 18.899, Art. 63, h).
exceptuados del límite del inciso primero de dicho artículo, los Ley 18.834, Art. 19
funcionarios que estaban en comisión de servicios, para realizar transitorio.
estudios, al 23 de septiembre de 1989.
Interpretación:
ARTICULO 19.- El tope máximo a que se refiere el inciso cuarto Ley 19.154, Art. zo, 10).
del articulo 1Opermanente será el de sus respectivos escalafones Ley 18.834, Art. 21
en los órganos o servicios que no hayan efectuado la adecuación transitorio.
dispuesta en el articulo 1° transitorio.
ÍNDICE TEMÁTICO
-A-
Accidentes
- en acto de servicio, derechos 115
116
84 letra 1)
Acreditación de requisitos de ingreso 13
Actividades prohibidas 84
Actuario 130
Adecuación de plantas 10
Anotaciones
-de mérito 42
- de demérito 43, 119, 122, 123, 124
de 44
Apelación
- de calificaciones 48
-en investigación sumaria 126 incisos r y 8°
-en sumario administrativo 141 letra
Apercibimiento inculpados 132
Ascensos
-concepto 54, 89
-de una planta a otra 56,57,58
-efectos 59
-inhabilidad para 55
Asesorías externas 23
Asignaciones
-por pérdida de caja 98 letra a)
- de movilización 98 letra b)
-por horas extraordinarias 98 letra e)
- por cambio de residencia 98 letra d)
- viático, pasajes u otros análogos 98 letra e)
-otras asignaciones contempladas en leyes
especiales 98 letra f)
-familiar 89 inciso 2°, 118
-maternal 89 inciso 2°, 118
Asunción de funciones
- en fecha anterior a la total tramitación del acto 16 inciso 2°
-funcionario de hecho 16 inciso 2°
- notificación para 16 inciso 3°
- no asume dentro del plazo 16 inciso 3°
Atentar contra bienes de la institución 84 letra j)
Calificaciones 32 a 52
-acuerdos y factores de evaluación 46,47
-apelación 48
-reclamo de 49, 160
-efectos 51, 52
- elementos a considerar 41
-exentos de calificación 34,40
-juntas calificadoras 35, 36
- listas de calificaciones 33
-objetivos 32
- período de evaluación 38, 39
- reglas complementarias 37
- en lista de eliminación o condicional 50, 150 letra e)
ARTICULO$
PERMANENTES TRANSITORIOS
~
--- --
Cargo Público
-concepto 3° letra a)
-asignación de grado 9o
- compatibles 87
- de exclusiva confianza yo 12
-de planta 40
- ingreso a cargos de carrera 17
-de jefaturas 8o
-desempeño personal en forma regular y continua 61 letra a)
-prohibición de uso para fines ajenos a sus
funciones 84 letra h)
Cargos, formulación de
-en investigación sumaria 126 inciso 3°
-en sumario administrativo 137 inciso 2°, 138
Carrera funcionaria 3o letra f), 5°, 6°
- ingreso a cargos de carrera 17
Censura como medida disciplinaria 121 letra a), 122
Cesación de funciones 146 a 156
-renuncia voluntaria 146 letra a), 147
- renuncia no voluntaria 146 letra a), 148
- por jubilación, pensión o renta vitalicia 146 letra b), 149
-declaración de vacancia 146 letra e), 150
- destitución 146 letra d),
121 letra d), 125
-supresión del empleo 146 letra e), 154
-término del periodo legal 146 letra f), 153
-fallecimiento 146 letra g)
Código del Trabajo (DFL W 1, de 2002, del 84 letra 1), 89 inciso
Ministerio del Trabajo y Previsión Social) 2°, 104 bis,
151 inciso 2°, Articulo
final
Código Penal 13, 20
Cometidos funcionarios 78
Comisiones de servicio
- en el territorio nacional o en el extranjero 75 a 77
-obligación de cumplirlas 61 letra e)
Concurso
- de ingreso a la Administración 17 a 22 10
- definición 18
- bases y publicidad 20
- preparación y realización 21
-selección de postulantes 22
-opción del empleo a prueba 25
- de promoción 53 y siguientes
-de jefaturas de departamento y niveles
ARTICU!..OS
PERMANENTES TRANSITORIOS
Denuncia
-de crímenes, simples delitos, faltas, hechos
irregulares, contravenciones al principio de
probidad administrativa, obligación de hacerla 61 letra k)
-derechos del denunciante 90A
- requisitos 90 B
-sin fundamento, falsas o con ánimo de perjudicar
al denunciado 125 letra d)
Derechos funcionarios 89 a 118
- estabilidad en el empleo 89
-a defensa 90
-a vivienda 91
-a permutas 92
-a percibir remuneraciones 93
-a percibir asignaciones 93, 98
-a feriados 102 a 107
-a permisos 108 a 110
-a licencias médicas 111 a 113
- a prestaciones sociales 114 a 118
Derogación DFL 338, de 1960 163
Desahucio, derecho a 13, 17
Descanso 68 a 71
-complementario por trabajo extraordinario 68
- complementario por trabajo nocturno 69
Descargos en sumarios administrativos 138
Desempeño funcionario 61
Designación como titular 24
Destinaciones 73, 74
- obligación de cumplirlas 61 letra e)
-transitorias durante la tramitación de un sumario
administrativo 136
Destitución
-atrasos y ausencias reiterados sin justificación 72 inciso 3°
-cesación de funciones 146 letra d)
-medida disciplinaria 121 letra d), 125
-regla general, no se aplica en investigaciones
sumarias 126 inciso 6°
Días hábiles 48 inciso 3°, 145, 160
Dictamen del Fiscal 139, 140
Dignidad
-del cargo 61 letra i)
-prohibición de realizar cualquier acto que atente
contra la de los funcionarios 84 letra 1)
ARTICULO$
PERMANENTES TRANSITORIOS
Fiscal .
-designación 129
- recusación 132 a 134
- facultades 135a140
- ad-hoc (procedencia y designació~) 130
Fiscalía, del Ministerio Público
- 61 letra k)
-
Formulación de cargos
-en investigación sumaria 126 inciso 3•
-en sumario administrativo 137 inciso 2•
Funciones, suspensión en sumario administrativo 136
.
-G- .· .·
- H-
.. ..... . .• f .· .·
35
Jefe directo
-anotaciones de mérito o de demérito que
disponga 44
- califica a delegado del personal si lo pide 34 inciso 2°
- informe en empleo a prueba 25
- precalificaciones 41
- rechazo de solicitud de dejar sin efecto
anotaciones de demérito 45
Jornada de trabajo 65 a 72
-obligación de cumplirla 61 letra d)
- tiempo y extensión 65
-jornada parcial en cargos de planta 65 inciso 2°
-jornada parcial en empleos a contrata 10 inciso 3°
Jubilación
-como cese de funciones 146 letra b), 149
-vigencia del DFL 338, de 1960 y artículo 12 del DL
de 1978 14
ARTICUL.OS
PERMANENTES TRANSITORIOS
-
Juntas Calificadoras
¡-constitución y dirección
-junta calificadora central
j-
¡-
junta calificadora regional
resoluciones y acuerdos .
J 35, 36
34, 35 mcisos zo y 4°
35 incisos 1oy 3°
41,46
----~--_.,-
¡ .
. .· - L- ••••• 1
. ··.
Nombramiento
- provisión de cargos 14
-vigencia 16
- tramitación por la Contraloria General de la
República 16
Notificación
- para asumir funciones 16 inciso 3°
- calificaciones 48,49
- escalafones 52
-investigación sumaria 126 inciso zo
-sumario administrativo 131
-0-
Objetivos de la institución 61 letra b)
"'"'' -+-
Obligaciones
-funcionarias 61
-especiales de autoridades y jefaturas 64
61 letra f)
62
- p,_
-concepto 108
-con goce de remuneraciones 1 09 inciso 1 o
-sin goce de remuneraciones 110
-en caso de muerte de un hijo, del hijo en período
de gestación, del cónyuge, del padre o la madre 104 bis
- entre dos feriados 109 inciso 2°
- imposiciones, derecho a integrarlas durante
1
permisos sin goce de remuneraciones
(imponentes régimen antiguo) 15
Permutas 92
Personal
-a contrata 3° letra e), 1O
-de planta (titulares, suplentes, subrogantes) 3° letra b), 4°
- empleo a prueba 25
toxt;¡u>;'v" confianza yo
cor1tr<llacJos sobre la base de honorarios 11
- de personal
-cargos de
-contempladas para la carrera funcionaria
Plazos, carácter general de días hábiles
Policía
letra h)
14
14
Prueba
-en investigación sumaria 126 inciso 4"
- en sumario administrativo 138 inciso 2", 139
1"
Publicaciones bases de concursos
- R-
Reclamo
- de calificación 49, 160
-de 1 160
Reclutamiento y movilización, Ley de 12 letra b)
Recursos contra medidas disciplinarias
- en investigaciones sumarias 126 inciso T
- en sumarios administrativos 141
Recusación en contra del Fiscal o del Actuario 132, 133, 134
Reincorporación
-declaración de irrecuperabilidad la impide 113
-funcionarios absueltos o sobreseidos por justicia
ordinaria 120
- improcedente respecto de funcionario que
prolonga indebidamente sus funciones 155
-~--------~----~-~+~~~~-----~--~-~---------~---1
de valores mal percibidos 101
sumario a Jefe Superior 140
Remoción cargos de exclusiva confianza 148
Remuneraciones y asignaciones a 101
-anticipos 97
-asignaciones 98
-deducciones 72 inciso 2", 96
-derecho a percibirlas 93, 94
-descuentos por tiempo no trabajado 72 inciso 1"
- embargabilidad 95
-prescripción derecho al cobro de asignaciones 99
-a del funcionario fallecido 114
Salud
-derecho a licencias médicas 111
-efectos de la pérdida 113, 150 letra a)
- enfermedad como consecuencia del desempeño
de las funciones 115
-incompatible 150 letra a), 151
- irrecuperable 112, 113, 116,
150 letra 152
administrativa, independencia
disciplinarias 121
Secreto
- sumario administrativo 137 inciso 2°
-obligación de guardarlo 61 letra
Servicio militar, funcionario 100 inciso 1o
Servicios de Bienestar, afiliación 117
Sindicatos, prohibición de organizar y pertenecer 84 letra i)
Sobreseimiento, efectos del 136, 137
Subrogantes 4° incisos 1° y 8°,
79 al83
- cargo compatible 87 letra d)
- derecho al sueldo 82
79
.S
"
()
:¡;
,,,E:
CONTRALORÍA GENERAL DE LA REPÚBLICA ~ DIVISIÓN DE COORDINACIÓN E INFORMACIÓN JURiDICA
700
V,;c,;nc''", declaración de
-causales
Su artículo 21 deja sin efecto las resoluciones Ws. 55, de 1992 y 520, de 1996,
y sus modificaciones, todas de la Contraloría General.