Responsabilidad del revisor fiscal

“No somos responsables sólo de aquello que decimos, sino también de lo que no decimos”

—Martín Lutero

En Colombia el cargo de revisor fiscal lo reciben aquellos Contadores Públicos cualificados e

imparciales que en razón de sus funciones deben conocer a fondo la situación de la empresa y los
riesgos financieros que la circundan; “es un delegatario de los socios para ejercer inspección
permanente a la administración y validar los informes que ésta presente, debiendo rendir
informes a los mismos en las reuniones estatutarias.” (CTCP,1999)

Adicionalmente el revisor fiscal debe dar cuenta de que los diferentes grupos de interés están
siendo tratados adecuadamanete de acierdo a las condiciones contractuales establecidas, con el
din de que la emresa pueda mantener el equilibrio y garantizar la permanencia en el tiempo.

Pero, pese a las disposiciones frente a la defincicion de las funciones que debe cumplir un revosor
fical, ¿es clara la responsabilidad que este tiene para con las Entidades y el estado?, Para muchos
contadores no precisamente, ya que, dicha responsabilidad ha atravesado distintos procesos de
transición que han generado entre los mismos profesionales inquietudes y desacuerdos.

Antiguamente, los revisores fiscales eran encasillados erróneamente como auditores, digo
erróneamente porque su función va más allá de revisar los Estados Financieros y la situación de las
empresas, pues como bien se sabe, sus funciones iban dirigidas primero, a la fiscalización; es decir,
“cerciorarse de que las operaciones de las entidades se ajustan a las prescripciones de los
estatutos, a las decisiones de los órganos sociales, y concluir si los actos de los administradores se
ajustan a las disposiciones citadas, siempre que las operaciones no violen norma alguna, a
denunciar las irregularidades que identifique en el funcionamiento de la sociedad y en el
desarrollo de sus negocios, a los órganos sociales y a la administración del cliente (comunicación
que debe hacerse de manera escrita) y a impartir instrucciones con el objetivo de establecer un
control permanente sobre los controles sociales; y segundo, a dictaminar la situación financiera de
la empresa, es decir, autorizar con su firma cualquier balance que se haga con su dictamen o
informe”. (LEGIS, 2015)

En efecto, el revisor fiscal tenía claras sus funciones y responsabilidades, sin ebargo, el cambio en
la normatividad ha traído como consecuencia cambios en la actividad desarrollada por este,
ejemplo, la aplicación de las NAI (Normas de Aseguramiento de la Información), la cual adiciona
una nueva función en el desenvolvimiento del cargo; dicha aplicación ha sido una de las más
controversiales para los profesionales del ejercicio, pues, muchos denotaban que ésta
implementación daría fin a la revisoría fiscal en Colombia, sin embargo, lo que se evidenció con la
plicación de las NAI fue la suma de una nueva función para los revisores fiscales, era evidente que
su labor ya no era simplemente fiscalizar y dictaminar, sino también, asegurar la información, es
decir, “… mejorar la productividad, la competitividad y el desarrollo armoìnico de la actividad
empresarial de las personas naturales y jurídicas, nacionales o extranjeras…” (art. 1° ley 1314 de
2009).

Así mismo, Pavas – Sarmiento menciona que “el aseguramiento de la información es el elemento
que complementa el sistema de información financiera, porque contribuye a lograr los objetivos
de información “comprensible, transparente y comparable, pertinente y confiable, útil para la
toma de decisiones económicas…” que persigue la ley. En este sentido, se ratifica que es una
nueva función del revisor fiscal, donde tiene que adaptar sus labores con las NAI sin dejar de lado
las funciones de fiscalización y dictamen.

Sumado a esto, el revisor fiscal como funcionario público, tiene que cumplir a cabalidad todas y
cada una de las normas establecidas y dispuestas en la Ley 145 de 1960, el Decreto 624 de 1989
(Estatuto Tributario), la Ley 43 de 1990, el mismo Estatuto Orgánico del Sistema Financiero, la Ley
190 de 1995 en sus artículos 31 y 80, el Código de Comercio y la Ley 222 de 1995; en especial las
dos últimas referenciadas que hacen énfasis en las responsabilidades de un revisor fiscal.

Además, como lo menciona Peña – Bermúdez, la Corte constitucional determina que “La
obligación de informar oportunamente sobre la crisis del deudor que se radica en cabeza del
revisor fiscal, persigue una finalidad que se ajusta a la Constitución. La inspección y vigilancia a
cargo del Estado, debe contar con herramientas que sean útiles para ejercer una función
preventiva”, esto quiere decir que, el revisor fiscal, aunque debe tener clara la confidencialidad de
la información manejada en las entidades, cuando es solicitada por el estado, o por algunos entes
de control y vigilancia, debe dar cuenta de esta bajo parámetros de oportunidad, confiabilidad y
veracidad en lo que transmite.

Así mismo, el revisor fiscal debe tener claras responsabidades estipuladas en la Constitución
Política de Colombia, tales como: la responsabilidad disciplinaria, la responsabilidad
contravencional, la responsabilidad civil y la responsabilidad penal, que evitan que el profesional
sea sancionado durante el ejercicio de su labor.

Finalmente, se puede decir que el Revisor Fiscal que es elegido para desempeñar el cargo, debe
asumir todas las responsabilidades que se le otorgan pues éste, tiene que responder “por tener
voluntad de hacer cosas que no le son permitidas, de las cuales tiene conocimiento (dolo) o por
dejar de hacer lo que le corresponde bien por negligencia o desconocimiento” (Peña – Bermúdez,
2007). Y, debe ser consiente del esfuerzo que acarrea, pues es su labor la que ratifica la veracidad
de la información de las organizaciones y su perseverancia a través del tiempo.