SÍNDICOS VARGAS, VÉLEZ Y

SÍNDICA BUSTILLO
UNIVERSIDAD DE PUERTO RICO
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Miércoles, 16 de noviembre de 2010

A  LA COMUNIDAD UNIVERSITARIA

Re – La Verdad sobre la Cuota Universitaria.

Como Sindicos y Síndica de la UPR sentimos que es nuestro deber aclarar a la Comuni-
dad Universitaria y a la ciudadanía que apoya a la UPR con el pago de sus contribuciones 
la  información que ha estado circulando en los medios de comunicación sobre la llamada
“Cuota de Estabilización” y el impacto que esta tiene en el acceso a la educación publica.

El 29 de junio y mediante certificación 146, 2009-2010, la Junta de Síndicos aprobó la im-

plantación de una cuota especial de 800 dólares por año académico al estudiantado de la
Universidad de Puerto Rico. A esta cuota se le llamó  Cuota Especial de Estabilización
Fiscal.

Tal cual reza dicha certificación, esta cuota aplicará a todo y toda estudiante independien-
temente del número de créditos que matricule, de si tiene o no asistencia económica para
cubrir sus costos de estudios y de si es elegible según las estrictas normas para determi-
nar elegibilidad.  En esta certificación tampoco se establece fecha límite para su vigencia,
por lo que se entiende será indefinida.  Esto último, es contrario a lo expresado por el Co-
mité Ejecutivo de la Junta de Síndicos al Equipo visitante de la MSCHE en reunión del 13
de septiembre donde se afirmó que esta imposición era por un período de dos años sola-
mente y en ese entonces, tampoco se aclaró cómo esta nueva cuota contravenía la certifi-
cación 60, 2006-2007 de la Junta de Síndicos que le garantizaba a los estudiantes que
una vez ingresan a la UPR que sus costos de matrícula no van a aumentar hasta que se
gradúen. 

El síndico estudiantil y el síndico y la síndica claustral quienes emitimos esta comunica-

ción, cuando formábamos parte de la Junta Universitaria, estuvimos en contra del estable-
cimiento de dicha cuota junto con los demás representantes de la comunidad universitaria
y así consta en la Certificación 43, 2009-2010 del pasado junio por carecer esta  de un
análisis ponderado y riguroso del impacto que su requerimiento implica para miles de es-
tudiantes de nuestro país. En el memorial explicativo del claustro de los 11 Recintos que
acompaña esa certificación, además de objetar la cuota, contenía propuestas de reducción
de gastos y aumentos de ingresos que podrían atenuar la merma de ingresos de la Uni-
versidad por parte del Estado. Estas propuestas tampoco se contemplaron en la imposi-
ción de una cuota por la Junta de Síndicos.

1-    Fundamentar la imposición de la cuota en el aumento esperado de la beca Pell no to-

ma en consideración que los y las estudiantes graduados(as) no reciben esta beca, que el
dinero para ayudantías no ha aumentado y que se sospecha que se reducirá. 

2-        Los datos informados por la UPR al Gobierno federal y publicados por el National
Center of Education Statistics para el 2008-2009 evidencian que afirmar que la beca Pell

cubrirá los costos de estudio y no impactará el acceso y la retención de estudiantes es una
falacia de grandes proporciones. 

3-      Para los estudiantes del Recinto de Río Piedras, tomando el total de quienes se hos-
pedan en el campus el costo de estudios  es de $11,527 para el mencionado año y asu-
miendo un 10% de inflación promedio (según la Junta de Planificación), tenemos que el
Cost of Attendance (costo de estudios) según informado por la Administración de la UPR a
la agencia federal para este sólo recinto, sería igual a $12,679.70.

4-       Para quienes se hospedan fuera del campus de Río Piedras, que son la mayoría, el
costo de estudios informado para el 2008-09 es igual a $13,327 y con una inflación de sólo
10% serían de $14,659.70.

5-       Si asumiéramos el 15% de inflación, los datos serían: $13, 256.05 para quienes se
hospedan en el Campus y $15,326.05 para quienes se hospedan fuera.  Si a estos datos
le añadimos una cuota de $800, los totales aumentarían a $14,056.05 y $16,126.05, res-
pectivamente.

6-     Estos cálculos incluyen otras partidas requeridas para su estimación además del cos-
to de matrícula como son los gastos de alojamiento, libros, transportación, alimenta-
ción, entre otros.

7-    Si bien el 65% del estudiantado de la UPR se beneficia de la beca Pell y que el máxi-
mo de dicha beca ronda en poco menos de $6,000 dólares anuales, es menester aclarar
que, a diferencia de la información que ha circulado públicamente, no todo el estudiantado
de la Universidad de Puerto Rico recibe el máximo de la beca Pell. La asignación depende
de la necesidad económica del estudiante y de la aportación familiar estimada.

8-       Los estudiantes provenientes de familias de la clase media no reciben la beca com-
pleta, de hecho podrían estar recibiendo entre 1,000 y 2,000 dólares dependiendo de su
ingreso  familiar.  Además, las familias de clase media de nuestro país, pagan anualmente,
y por adelantado, parte de los costos de estudios de sus integrantes en el momento que
pagan sus contribuciones. 

9-     Las familias que no cumplen con los requisitos de necesidad económica requerida por
la beca Pell y no tienen acceso a  otras ayudas, serán quienes mayormente cargarán en
sus hombros, esta imposición adicional, que no es otra cosa que un impuesto adicional a
las familias que deciden enviar a sus hijos e hijas a la Universidad pública.

10-   La cuota tampoco atiende las particularidades de los estudiantes que actualmente es-
tán cursando sus estudios graduados (maestrías o doctorados) que provienen del exterior,
particularmente de la región iberoamericana, que sirven como asistentes de cátedras en
cursos y laboratorios y, cuyos visados no le permiten trabajar fuera de la Universidad, así
como para futuros estudiantes de la región que tendrán que garantizar 800 dólares adicio-
nales previo a recibir sus visas de estudios para ingresar o continuar en nuestra Universi-
dad. Es de notar, que estos estudiantes, tienen carga de estudio completa, sus visados les
imposibilita complementar con trabajos fuera de la institución y su único ingreso es la ayu-
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dantía de cátedra o investigación.  De no aumentarse el pago de ayudantía por cátedra o
investigación estos estudiantes estarían forzados a trasladarse a otras instituciones en el
exterior.  La discusión sobre ajustes en las ayudantías de cátedra o de investigación tam-
poco se ha dado.

11-      En nuestro sistema universitario existen departamentos que tienen programas que
emplean a algunos(as) de sus estudiantes sobresalientes (graduados y sub-graduados)
para atender cientos de laboratorios de cursos básicos y en algunos casos, varias dece-
nas de cursos básicos en ayudantías de cátedra.  Otros tantos, sirven como ayudantes de
investigación en varias decenas de investigaciones de nuestra institución.  Estas ayudan-
tías no sólo son fuente de ingreso para costear sus estudios, sino que son escenarios de
formación teórica, profesional e investigativas que les hará competitivos(as) en el mundo
laboral, tanto aquí como en el extranjero.  De existir una merma en estudiantes por el alza
efectiva en los costos de sus estudios que significa la cuota anual indefinida que se impo-
ne, y sin existir fuentes de subvención para apalear el impacto, se reduciría el número de
estudiantes disponibles para atender esta oferta académica, de servicio e investigación. 
Si la institución tuviera que costear estos cientos de laboratorios o cursos básicos con per-
sonal docente regular, los costos institucionales serían muy superiores a lo esperado en
recaudos de tal cuota especial. Tal posibilidad no ha sido evaluada, tampoco.

12-      La cuota no contempla el impacto negativo a estudiantes en programa de tesis o

prácticas, muy cercano al final de sus estudios.  Se  estima que la cuota multiplicaría por
un factor de seis o siete veces el precio pagado de la matrícula de un estudiante graduado
en tesis quien hubiera pagado sin la cuota $132 por crédito y luego de la imposición de la
cuota pagaría $930 el crédito el próximo semestre. Esta situación se ha presentado en
varias ocasiones por estudiantes y facultad y tampoco se ha aceptado enmiendas a la de-
terminación de la imposición de la cuota.

13-  La cuota no contempla el impacto negativo en la demanda de nuestros ofrecimientos

para estudiantes que se matriculan en nuestros cursos y seminarios con el objetivo de lo-
grar mejoramiento profesional.  Por ejemplo, un(a) ciudadano(a) así como cualquier egre-
sado(a) de nuestra institución que interese tomar un curso de 3 créditos subgraduados pa-
ra mejorar su preparación, con la cuota, tendría que pagar un poco más de $950 por el
curso ($315 por crédito), lo que desalentaría su matrícula afectando los ofrecimiento a la
ciudadanía bajo los programas de estudios profesionales, educación continua o universi-
dad nocturna.

14-      Profesores(as) de diversos recintos han propuesto enmiendas al monto de la cuota

que no han sido estudiadas.  Por ejemplo, profesores  del Recinto Universitario de Maya-
güez, han analizando los datos de más de 11,000 estudiantes subgraduados matriculados
según número de créditos por semestre en los pasados 5 años. Este análisis evidencia
que la diferencia en recaudos entre (a) cobrar la cuota en proporción al número de créditos
matriculados si toman menos de 12 créditos por semestre y cobrarla completa si toman 12
o más créditos versus el actual esquema de cobro uniforme de $800 a todo el estudianta-
do según lo impone la Administración sería de sólo un 1% menos (las cifras y las fórmulas
están disponibles, de solicitarlas).  Es una insensatez de la Administración de la Universi-
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dad no considerar seriamente la imposición de una cuota proporcional al número de crédi-
tos matriculados, si es que insisten en la imposición de alguna cuota al estudiantado.

15- La Administración ha argumentado que “no puede ajustar las nuevas cuotas de ma-
trícula de acuerdo a las circunstancias económicas particulares de cada estudiante, pues
ello significaría el establecimiento de clasificaciones, en contravención a los requerimien-
tos para participación del programa federal de Becas Pell” (Memorial Explicativo al Proyec-
to del Senado de Puerto Rico núm 1895 contenido en el Informe de la Comisión de Ha-
cienda de la Cámara de Representantes). No hemos visto la evidencia que fundamente
esta aseveración. Dudamos mucho que los procedimientos y la reglamentación excluya la
posibilidad encontrar formas creativas de ajustes que atiendan de la diversidad de nuestro
estudiantado de manera que responsablemente minimicemos el impacto negativo de esta
determinación en el estudiantado y sus familias.

Por último, queremos reiterarle a la comunidad universitaria nuestro rechazo a cualquier

expresión pública que denote intención de confrontar al estudiantado y rechazamos los
intentos de minimizar su liderato y sus esfuerzos por expresar el rechazo a aquellas ac-
tuaciones que entienden les perjudican. De hecho, exhortamos a que continúen propo-
niendo soluciones, insistan en el pensamiento crítico, formulen preguntas y exijan respues-
tas con el mismo buen juicio, la prudencia y la madurez que ha caracterizado a nuestro
estudiantado.

Quedamos a su disposición,

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René A Vargas Martinez       Waldemiro Vélez Cardona " Marta Bustillo Hernández 

 
Síndico" " " Síndico              " " " Síndica
Consultados:
Comunicación de estudiantes graduados(as) del Departamento de Matemáticas a los(as) senadores(as)
académicos(as) del Recinto Universitario de Mayaguez. 15 de octubre de 2010.

Resolución de la Asamblea del 28 de septiembre de 2010 de la Facultad de Artes y Ciencias del Recinto
Universitario de Mayaguez.

Varias comunicaciones electrónicas de facultativos(as) y estudiantes sometiéndonos sus comentarios y re-

comendaciones sobre la imposición de la cuota.

Certificación 43, 2009-2010, de la Junta Universitaria, fechada el 23 de junio de 2010.

Memorial Explicativo de los y las Representantes Claustrales ante la Junta Universitaria fechado el 25 de
junio de 2010 (referido a la Junta de Síndicos para su discusión previo a la consideración del Presupuesto en
su reunión del 26 y 29 de junio. Solamente fue leído, a viva voz, a insistencia de la entonces Síndica Cotto.)
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