Cuando hablamos de la venta o cesión de un establecimiento de comercio, nos
encontramos con la llamada prima comercial, que es una especie de sobreprecio que se cobra por el reconocimiento y prestigio del establecimiento de comercio que se supone le representa mayores ingresos. Un establecimiento de comercio tiene un valor superior a la suma de todos los elementos físicos o materiales que lo constituyen. El valor de un establecimiento de comercio incluye también elementos inmateriales tan abstractos como el buen nombre, el reconocimiento, y un largo etcétera que se debe considerar.
Diferencia entre local comercial y establecimiento de comercio
Hay dos figuras jurídicas en derecho comercial que muchas veces por no tener claro su significado podemos confundir, que son, el local comercial y el establecimiento de comercio que aparentemente parecen lo mismo, pero en sustancia son dos figuras diferentes.
El establecimiento de comercio y el local comercial son dos figuras que en
sustancia son diferentes. Sin embargo, es necesario tener en cuenta la finalidad que persiguen, pues los conceptos pueden dar lugar a confusión, precisó la Superintendencia de Sociedades.
De acuerdo con lo previsto en el artículo 515 del Código de Comercio, el
establecimiento de comercio es el conjunto de bienes organizados por el empresario para realizar los fines de la empresa. La misma persona puede tener varios establecimientos de comercio y, a su vez, un solo establecimiento puede pertenecer a varias personas y destinarse el desarrollo de varias actividades comerciales.
¿Qué es un establecimiento de comercio?
Se trata de una unidad de explotación de un negocio: por medio del
establecimiento de comercio, el comerciante pone en marcha realmente su actividad empresarial, destinando unos activos y adquiriendo unas obligaciones ya sea para elaborar sus productos o planear sus servicios, comercializarlos; y, sobre todo, para darlos a conocer a sus potenciales clientes. Así las cosas, el establecimiento de comercio constituye el espacio para la actividad comercial, y para el desarrollo del empresario y de la sociedad.
¿Por qué la importancia del establecimiento de comercio?
Como unidad de negocio, la Ley lo ha querido proteger por los especiales
intereses que importan tanto a su titular como a sus usuarios:
Una vez la clientela tiene acceso al establecimiento, recordará quién es el
comerciante, a qué se dedica y qué productos o servicios vende: el comerciante se hará a un buen nombre y su actividad empresarial crecerá.
Igualmente, el cliente encontrará en el establecimiento un canal de comunicación
con el comerciante, especialmente para reclamar la calidad de los bienes o servicios recibidos.
A la sociedad también le resultan importantes: son un mecanismo esencial para la
generación de empleo y desarrollo social.
¿Cómo protege la Ley el establecimiento de comercio?
La Ley busca proteger la unidad productiva del establecimiento de comercio, por
una parte, otorgándole derechos al comerciante para asegurar su existencia y permanencia, tales como la protección del nombre comercial, de los signos distintivos y procesos productivos, así como prerrogativas en los contratos de arrendamiento de los inmuebles donde funcionan. Y, por otra parte, exige al titular o administrador del establecimiento que en los negocios que haga respecto del mismo preserve esa unidad, así como la obligación al liquidador para vender el establecimiento como un negocio en marcha de manera preferencial a la venta de sus elementos por separado.