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El término “dioptría”, fue acuñado por el oftalmólogo francés, Ferdinand Monoyer en 1872, el cual, estableció la potencia

de una lente que enfoca los rayos paralelos a 1 metro. Equivale al inverso de la distancia focal, expresada en metros, de
una lente convergente o divergente.
La potencia de una lente es la inversa de la distancia focal; por ejemplo, una lente de distancia focal de 1 m tiene una
potencia de 1 dioptría, y una lente de distancia focal de 0,5 m tiene una potencia de 2 dioptrías. La potencia de una lente
convexa es positiva y la potencia de una lente cóncava es negativa.

CLASIFICACIÓN DE LAS LENTES


Los diferentes tipos de lentes se pueden clasificar en dos categorías: lentes convergentes y lentes divergentes.
Las lentes convergentes según su forma tienen mayor espesor en la zona central que en los bordes, y se caracterizan por
hacer converger en un punto denominado foco (F) cualquier haz de rayos paralelos que incidan sobre ellas.

Biconvexa:
Son lentes convexas por ambas superficies pero con diferente potencia dióptrica en cada cara.

POTENCIA OPTICA
Esta cualidad, esta muy influenciada por el índice de refracción del material empleado y por la curvatura de la superficie
de separación. En el caso de una lente, son dos las superficies que alteran la trayectoria de los rayos, una corresponde a
la cara anterior y otra a la cara posterior.
La “potencia óptica” de la lente, vendrá originada por la refracción total de los rayos, después de atravesar ambas
superficies. Cuanto más se refracte el rayo, mas corta será la distancia focal y por tanto de más potencia será la lente.
Para medir la potencia óptica, se utiliza una unidad denominada “dioptría”, que es la inversa de la distancia focal expresada
en metros.

¿Cómo Funciona El Ojo Humano?

El ojo humano es un órgano fotorreceptor, cuya función, ya implícita, consiste en recibir los rayos luminosos procedentes
de los objetos presentes en el mundo exterior y transformarlos en impulsos eléctricos que son conducidos al centro
nervioso de la visión en la parte posterior del cerebro.

El ojo necesita de cierto período de adaptación para pasar de una intensidad luminosa correspondiente a la luz del día, a
intensidades de luz menores y viceversa. Este periodo de adaptación se encuentra en relación con una estructura muy
sensible, que es la encargada de captar la luz: la Retina.

Los movimientos del globo ocular hacia la derecha, izquierda, arriba, abajo y a los lados se llevan a cabo por los seis
músculos oculares y son muy precisos. Se ha estimado que los ojos pueden moverse para enfocar en, al menos, cien mil
puntos distintos del campo visual.

Los músculos de los dos ojos funcionan de forma simultánea, por lo que también desempeñan la importante función de
converger su enfoque en un punto para que las imágenes de ambos coincidan; cuando esta convergencia no existe o es
defectuosa se produce la doble visión.

El movimiento ocular y la fusión de las imágenes también contribuyen en la estimación visual del tamaño y la distancia.
Desde el punto de vista óptico, el ojo presenta analogía con la cámara oscura de una máquina fotográfica. Las dos retinas
son excitadas por los estímulos provenientes del medio ambiente y las imágenes ópticas que se forman en ella, son
invertidas. Mediante un proceso que tiene lugar en el cerebro, se reestablece el sentido del objeto percibido.

Para alcanzar la Retina, un haz de luz debe atravesar los medios refringentes del ojo humano, que son cuatro:

La Córnea.

El Humor acuoso.

La lente o cristalino.

El humor vítreo.

Cualquier opacidad o alteración anatómica en estos medios refringentes nos llevará a una visión borrosa.

La superficie curva de la retina es muy importante, ya que permite compensar el cambio de trayectoria que sufre un haz
luminoso, al pasar por medios con índices de difracción tan distintos. Ya dentro del ojo, los índices de refracción del
cristalino, humor acuoso y humor vítreo, son tan parecidos, que el haz de luz no sufre mucho cambio, sólo la inversión
que mencionamos anteriormente.

Funcionamiento del Ojo

El ojo recibe los estímulos luminosos procedentes del entorno. La luz atraviesa los medios transparentes y la lente del ojo
y forma una imagen invertida sobre la retina. En la retina, células especializadas transforman la imagen en impulsos
nerviosos. Éstos llegan a través del nervio óptico hasta la región posterior del cerebro. El cerebro interpreta las señales
mediante un complejo mecanismo en el que intervienen millones de neuronas.

Pupila e iris: El iris es un diafragma circular que regula la cantidad de luz que ingresa en el ojo. Presenta un orificio central
de unos 3 mm de diámetro, la pupila. Ésta se adapta a la intensidad de la luz. Si la luz es intensa, la pupila se contrae
(miosis), si la luz es escasa, la pupila se dilata (midriasis).

La constricción del iris es involuntaria y está controlada de forma automática por el sistema nervioso parasimpático, la
dilatación también es involuntaria, pero depende del sistema nervioso simpático.

Córnea y cristalino: La cornea es un tejido ocular que se encuentra en la parte anterior de nuestros ojos, es totalmente
transparente y entre sus diversas funciones esta la de proteger el iris y el cristalino, la cornea además de proteger a otras
estructuras oculares tiene la función de enfocar junto con el cristalino las imágenes en nuestra retina.

Podemos considerar a la córnea como el primero de los lentes que conforman el sistema óptico de nuestros ojos. Debido
a esta condición de primer lente, la cornea tiene una gran importancia en nuestra visión, una falta de transparencia o una
deformidad en nuestra cornea provocara una mala imagen en la retina.

El cristalino es un cuerpo lenticular del ojo, biconvexo y transparente, cuyas funciones son mantener su propia
transparencia, refractar la luz, y proveer acomodación.

No posse irrigación o inervación tras el desarrollo fetal, dependiente completamente del humor acuoso para sus
requerimiento metabólicos y llevar a cabo sus excreciones de desperdicios. El cristalino se encuentra anterior al cuerpo
vítreo, posterior al iris y está suspendido en posición por las zónulas de Zinn, que son fibras que lo mantienen adherido al
cuerpo ciliar.

Acomodación: Es el proceso mediante el cual la luz procedente de un objeto distante y de un objeto cercano se enfocan
sobre la retina.

Los rayos de luz que penetran en el ojo deben enfocarse exactamente sobre la retina para que la imagen obtenida sea
nítida. Ello requiere un ajuste que ocurre de forma muy similar tanto en el ojo humano como en el resto de los animales
vertebrados. El proceso mediante el cual los rayos luminosos procedentes tanto de objetos cercanos como lejanos se
enfocan con exactitud sobre la retina se llama acomodación. El mecanismo de la acomodación exige la contracción
del músculo ciliar que está unido al cristalino mediante el ligamento suspensorio.

Si el músculo ciliar se contrae, el cristalino se hace más esférico y aumenta su poder de refracción, lo cual permite enfocar
la luz procedente de objetos cercanos. Cuando el músculo ciliar se relaja, el cristalino se hace menos esférico, disminuye
su poder de refracción, lo cual nos permite ver con nitidez objetos lejanos.
Retina En la retina están las células visuales, por lo que se la puede comparar a una película fotosensible. Estas células son
capaces de captar la luz visible que es solo una pequeña parte del espectro electromagnético, la comprendida entre los
400 nanómetros de la luz violeta y los 750 nanómetros de la luz roja.

La luz que incide en la retina desencadena una serie de fenómenos químicos y eléctricos que finalmente se traducen en
impulsos nerviosos que son enviados hacia el cerebro por el nervio óptico.

Conos y bastones Las células sensoriales de la retina reaccionan de forma distinta a la luz y los colores. Los bastones se
activan en la oscuridad, y sólo permiten distinguir el negro, el blanco y los distintos grises. Los conos, en cambio funcionan
de día y en ambientes iluminados, hacen posible la visión de los colores.

En el ojo humano hay tres tipos de conos, sensibles a luz de color azul, rojo y verde respectivamente. Cada uno de ellos
absorbe la radiación de una determinada porción del espectro gracias a que poseen unos pigmentos llamados opsinas.
Las opsinas son unas moléculas que están formadas por una proteína y un derivado de la vitamina A. La eritropsina tiene
mayor sensibilidad para las longitudes de onda largas de alrededor de 560 nm (luz roja), la cloropsina para longitudes de
onda medias de unos 530 nm (luz verde) y por último la cianopsina con mayor sensibilidad para las longitudes de onda
pequeñas de unos 430 nm (luz azul). Mediante las diferentes intensidades de las señales producidas por los 3 tipos de
conos, podemos distinguir todos los colores que forman el espectro de luz visible.

Los conos están concentrados en el centro de la retina (mácula), mientras que los bastones abundan más en la periferia
de la misma. Cada cono está conectado individualmente con el centro visual del cerebro, lo que en la práctica permite
distinguir a una distancia de 10 metros dos puntos luminosos separados por sólo un milímetro. Cada ojo humano dispone
de 7 millones de conos y 125 millones de bastones.
https://histoptica.com/lentes-opticas-dioptria/

http://educamix.com/luisa/mix_ciencia/un_par_dioptrias/no_2.htm

https://www.google.com/search?q=que+es+una+dioptria&source=lnms&tbm=isch&sa=X&ved=0ahUKEwjQ14Stt9riAhU
LpFkKHTLzBuEQ_AUIECgB&biw=1093&bih=500#imgrc=Iec4ces3YMaTZM:

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