Vous êtes sur la page 1sur 98
Sobre este libro En noviembre de 1997, bajo el agobio de un domingo ‘aluroso, legué por primera vera un grupo de Naresticas ‘Anéaimos. Mi mujer de entonces meacompans cai dela ‘mano hasta la parroqula La Consolata, en La Pacernal y te volvié ensegulda para ouidar a nuesto hijo, que habia ‘uedado drmiendo en el deparramento, a dos cuadras de SIC Me dio un beso y me desed buena suerte ‘Yo me quedé en la recepeién, sin entrar del todo a pa- silo lateral que conducfa ls talones donde se juntaban distingos grupos. No habla ningdn cartel y pos nada del mundo me babria animado a preguntar. Qué pregun- tart "Aci recihen drogadictos?”? Niloco, pensé, antes me rmuero. Para distraerme me puse mina la cartelera de setvidades de Is parcoguia, no queria volver temprano & ‘asa y decepeionar auevamente + mi mje. Ells estabs ‘content, habla averiguad todo J le hablaa dicho que los {grupos de Nareéeicor Anénimos eran el mejor lugar para dejar Ia cocaina. Yo la consumia junto con whisky desde las dieciocho afios,y ya para ese entonces tenfa tweinta yruno. Estaba cansado, el consumo me habia arrastrado por todos los higares habidosy por haber, desde hospiales has la creel. Mids de una vex habia estado 2 punto de perder le vida. Habis perdi erabsjor, amigos, matsimo nos... Ya casi nadie confiaba en my mticho menos me tomaba en serio, Lela lor dias de carcino, las misas a pedido, los ho- ratios de secretatla,y me olvidaba, como me pasa sempre, ide qué era lo que habia ido a hacer a ese lugar. Recuerde ‘en sensacién, ese vaco particular, excencara la deriva. De ° selpe una pron, un hamle de lg més de ciniesa Soe ona denpare con una edna yan be ttnomes de or chai deans dela snes 7iNGtetcine visemes Me lady e pregansd “ee pa cer ek ateclano no, faco —me dij el boca tag una ava guru eno de onal teem auc ends clanero dex pare Nik ule lyme pase ro prloshom- bron te cond’ I rly me pec coal watalegs" No Seer nome no reer vor ner alesse melee sh osen pode ofa Slo alban. wSisy Sauk elton delrpaabas ued prs comport expertacncoumig eel stl com de Steeda que le da toons an sa on foci por peeve Tn ye quod Jor eas un ao imple anes de ni priser ra Jn ca lee pl a CG Te hscponds¥ dts neces de una imcmaion fort poder are Jun eco mosey ccd cna rertesatydedeemonecre quo put ana ls Ask ost sean sin YoWes consumo too Sls ev achas cos vale pposy cada es Ferree sini con aime ond comarel ftlsraterd deepens con ie mise pr Tp amps oe fcordaron gue yo me dela ep, Yuan spon cobu ns ads ls plone ‘nme niamarQueesamos eles Gar tos decides un oro ysttmos ovr cn hot acto cud un detec Ale senaban cm. postde tase: sme un alco, un leah be acta mene yor gurus cobs Tass Se pte de. ‘rue en leno, ment lo plea ya coneendo 0 terreno a una idea que en principio es un germen, algo Dequeho y 4 prior! inofensivo, pero que est destinado a trecer como tna planta, una planta camnivora Es wna idea simple, instalada en la tera férll de una mente obsesiva, la mente de un adicto: “Esta ver va ser distingo”. V la dea cree, Kigieay coherence Porque es bgico y coberente pensar asi, ya que si otro puede, por qué no voy a poder ‘yo? Y enronces Ia planta despligge cus tallos y nace una lass "Todo esd bajo control” ¥ ese contel ilusorio, 0 ce llusige de contrel, espliga cambign sus tallosy sus hojasy se expande hacia todos ls aspectos de nuestra vida ‘on una enetgiaingobernabl y Ital Mas 0 menos répido segin las personas, sein ls circunicancis, pero igual de gon al final del trayecto: todos los adicts sabemos eémm0 cempezamos, ninguna de nosotros sabe cfmo ai cudndo ‘De esas pessonas va hablar este libro, de personas aque, como yo, luchan dia ada para seguir adelante. De lbs que amanccen agradeciendo sencillamente por el he- cho de estat limplos, abtinentes, porque no consume por veintcuatro horas significa veinicuato horas de milageos Ininterrampidos. Un adita que no consume est nme 1 contra todos los pronéstcos, algo fuera de lo normal, tuna balla que ee mantiene a floce pesea que toda propicl. sl hundimiento, De aquellas personas y de otras que la enfermedad devasré.o que sencillamente quedaron en el. ‘nino. De muchos que son mi vida o que passion por ‘lla, que supieron mirarme cuando nadie lo hacla ‘Se me ocutre que algunos de estos retratos, de estas ‘rdnleas, podelan tener alga valor para ua lector en espe ‘dal el lector que se identfique de alguna manera com ete sufbimene, Fserbise, entre otras cosas, civlizar el do- Jor. Yo, que alguna ver me senti in deficente moral, in ser perverso que sufra y hacia suftir alos demas, un dia ‘scuché con alivio la palabra “enfermedad”. Que rena una enfermedad es lo que escuche: que la enfermedad podia n estate, y que el connimo compulsive podia parar-Jamés Ihabia peasado, hata ese dia, qe a palabra “enfermedad” jodie hacerme suspirar de alivio.¥escuché, durance horas Yen llenclo, es0% compaeros que hablaban de tres, cuz ‘uo, cinco, der, quince afios sin drogas nl alcool. zAios tn daogse ni alcohol? La viga sin drogas ai alcohol ex Inmposible, aburrida, sin seatido, mejor morir, mejor seguir igual, mejor safe que disivurar de la via sin drogas ni alcohol.

Vous aimerez peut-être aussi