Estudiar la Biblia es un gran desafío y una experiencia

fascinante. Ahora bien, este estudio básicamente puede

realizarse desde dos fronteras: (1) con la intención de
aumentar nuestro conocimiento cultural o (2) buscando
compartir la fe de los escritores bíblicos y con la
intención de hacer teología.

Este curso, que está pensado para estudiantes de

teología, busca seguir el segundo camino; pero
irremediablemente tendrá que converger con el primer
método. Es decir, aunque nuestra intención final es
hacer teología (reflexionar sobre la fe judeo-cristiana y
sobre la misión de la iglesia en el mundo); para poder
acercarnos a la Escritura y tener una mejor
comprensión de la misma, nos será necesario
adentrarnos en el mundo de los escritores, esto es, el
mundo en medio del que se originó nuestro texto
sagrado: Mundo Bíblico.

Bajo este entendido, en esta primera unidad nos

adentraremos al contexto histórico. En primer lugar,
conoceremos las civilizaciones antiguas (imperios) con
las que tuvo contacto el pueblo de Israel y nos
adentraremos el mundo donde aparecieron los textos
del Antiguo Testamento. Segundo, estudiaremos los
periodos de la historia de Israel; los cuales son claves
para comprender el mensaje de los textos bíblicos. Y,
por último, para conocer el mundo en el que se originó
el Nuevo Testamento estudiaremos un poco sobre la
cultura griega y el helenismo.

Por esto, les animo a desarrollar las actividades de la unidad y a disfrutar

mucho esta primera estación en nuestro camino hacia una mejor
comprensión bíblica.

Introducción a la Unidad II

Ya hemos dejado nuestra primera estación, en la cual hemos tenido el primer acercamiento
al mundo donde surgió el Antiguo y Nuevo Testamento; así como, las grandes etapas en la
historia del pueblo de Israel.

Ahora bien, nuestro conocimiento de los imperios y las civilizaciones antiguas han sido
posible gracias a diversas disciplinas científicas modernas; lo cual, como hemos visto, nos
ha puesto ante la necesidad de re-comprender algunos textos bíblicos y apreciar de una
manera distinta la novedad de la Biblia.

Por esto, en esta unidad tendremos un primer acercamiento a tres disciplinas científicas que
han sido clave en las investigaciones modernas de las Escrituras: Geografía, Arqueología y
Lingüística. Así, nos introduciremos a la Geografía Bíblica, tanto del Antiguo como del
Nuevo Testamento; también, hablaremos de la Arqueología y su relación con el texto. Y, en
un tercer plano, nos dedicaremos a estudiar los idiomas bíblicos de manera introductoria;
con la ayuda de la lingüística.

Todo esto, con el fin de entender que las

investigaciones modernas, en ningún momento, están
peleadas o intentan demeritar el texto bíblico; sino que,
en todo caso, nos han permitido reforzar o, a lo sumo,
reformular nuestra fe y comprensión bíblica.
Unidad III
Hasta aquí, por lo menos, hemos respondido 2 preguntas: ¿Cuál era el mundo en el que se
formó la Biblia? y ¿Cómo podemos conocer esos datos sobre la Biblia y su mundo? Y, sin
lugar a duda, en el camino siguen apareciendo preguntas; pero en esta unidad ocuparemos
nuestro tiempo en responder: ¿Por qué la Biblia es un libro cerrado y tiene un número finito
(limitado) de textos?

Así, en lenguaje un tanto más técnico, el tema que nos ocupará en esta unidad será lo
relacionado al Canon Bíblico. Es decir, estudiaremos cómo fue que los judíos y los
primeros cristianos determinaron qué libros y por qué deberían ser considerados palabra de
Dios y la emocionante historia que se tuvo que atravesar para llegar a la lista de libros que
hoy integran nuestras biblias.

Para estudiar este tema, hemos acotado la unidad en tres momentos: la necesidad del canon,
el proceso de formación y, por último, el canon protestante en comparación con otros
cánones bíblicos.

Estoy seguro que disfrutaran mucho los contenidos de esta unidad, por ello, les animo a
comenzar sus lecturas lo antes posible y atender las actividades de la unidad en tiempo y
forma.

Unidad IV

Para finalizar este curso nos resta estudiar un poco

sobre los Rollos del Qumrán, las traducciones de la
Biblia al español y la autoridad bíblica.

Así, esta unidad nos servirá para introducirnos al

estudio crítico del texto bíblico y comprenderemos la
importancia de los testigos textuales en las traducciones
bíblicas y, particularmente, al idioma español. Todo
esto, nos permitirá apreciar y reflexionar sobre la
autoridad de la Biblia.

Esperando que este curso haya sido desafiante para su

vida y ministerio, les animo para que atiendan las
actividades calendarizadas y puedan concluirlo de la
mejor manera.

Hola a todos, hermanos y hermanas. Me llena de alegría el poder

acompañarles en su aprendizaje hasta la Unidad IV ¡Ya estamos en
la recta final!