UN MOTIVO PARA BENDECIRTE.

Esta semana, precisamente el día lunes, el Señor inquietó mi corazón y me llevó a su Palabra en el
libro de Hageo capítulo 2 verso 18 y 19. “18 Meditad, pues, en vuestro corazón, desde este día en
adelante, desde el día veinticuatro del noveno mes, desde el día que se echó el cimiento del templo
de Jehová; meditad, pues, en vuestro corazón. 19 ¿No está aún la simiente en el granero? Ni la vid, ni
la higuera, ni el granado, ni el árbol de olivo ha florecido todavía; mas desde este día os bendeciré.”
Una preciosa promesa a la que inmediatamente dije Amén. El día martes cuando me aprestaba a
enviar el texto del mensaje que iba a compartir el día de hoy, mensaje que ya estaba preparado con
anterioridad, El Señor nuevamente inquieta mi corazón y me lleva otra vez al Libro de Hageo, yo
acostumbro a leer en paralelo dos versiones de la Biblia, en la Versión Reina Valera 1960 (RV1960)
que es la traducción más popular y en la Nueva Traducción Viviente (NTV) que es una versión que
me gusta mucho porque está en un lenguaje actual que hace mucho más fácil comprender lo que
se lee. Me llamó la atención que en la versión NTV traduce las fechas del calendario lunar (que usan
los judíos) al calendario gregoriano que nosotros usamos. Sentí como un fuego ardiente que
quemaba mi pecho cuando El Señor me lleva a leer Hageo 1: 1, la RV1960 dice refiriéndose a la fecha
en la que El Señor le dio la palabra al profeta “en el mes sexto, en el primer día del mes”, al leer en
la traducción NTV dice “El 29 de agosto”, para Dios no hay coincidencias, un 29 de agosto del año
520 A.C. Él le estaba hablando a Hageo, 2536 años después un 29 de agosto del 2016 el mismo Dios,
el mismo Señor que habló a Hageo me estaba dando una palabra para transmitirle a Su pueblo y
estaba haciéndole a Su Pueblo una promesa, la de bendecirnos.

Inmediatamente me confirmó Dios que esta palabra era la que quería que comparta hoy, y sabiendo
que la promesas del Señor siempre van ligadas a una condición, me llegó una pregunta: ¿Cuál fue la
condición que Dios puso en esta ocasión para darles esa bendición?, para mi sorpresa no hubo en
esta ocasión una condición, hubo un motivo, algo hicieron los israelitas que motivo a Dios a darles
esta preciosa promesa y el motivo es revelado en el verso 18: “desde el día que se echó el cimiento
del templo de Jehová.” Es decir que por cuanto los israelitas se preocuparon de los cimientos del
Templo el Señor decide bendecirlos. Pero analicemos un poco cual era la situación del pueblo de
Dios antes de esta promesa.

Hageo 1: 2 - 10. “2 Así ha hablado Jehová de los ejércitos, diciendo: Este pueblo dice: No ha llegado
aún el tiempo, el tiempo de que la casa de Jehová sea reedificada. 3 Entonces vino palabra de Jehová
por medio del profeta Hageo, diciendo: 4 ¿Es para vosotros tiempo, para vosotros, de habitar en
vuestras casas artesonadas, y esta casa está desierta? 5 Pues así ha dicho Jehová de los ejércitos:
Meditad bien sobre vuestros caminos. 6 Sembráis mucho, y recogéis poco; coméis, y no os saciáis;
bebéis, y no quedáis satisfechos; os vestís, y no os calentáis; y el que trabaja a jornal recibe su jornal
en saco roto. 7 Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Meditad sobre vuestros caminos. 8 Subid al monte,
y traed madera, y reedificad la casa; y pondré en ella mi voluntad, y seré glorificado, ha dicho Jehová.
9
Buscáis mucho, y halláis poco; y encerráis en casa, y yo lo disiparé en un soplo. ¿Por qué? dice
Jehová de los ejércitos. Por cuanto mi casa está desierta, y cada uno de vosotros corre a su propia
casa. 10 Por eso se detuvo de los cielos sobre vosotros la lluvia, y la tierra detuvo sus frutos. 11 Y llamé
la sequía sobre esta tierra, y sobre los montes, sobre el trigo, sobre el vino, sobre el aceite, sobre
todo lo que la tierra produce, sobre los hombres y sobre las bestias, y sobre todo trabajo de manos.
No le parece familiar la situación que estaba viviendo el pueblo en esos tiempos, había escases,
había pobreza, lo que la gente ganaba no le alcanzaba, los negocios que emprendían no prosperaban
y había un motivo, la gente tenía en poco la obra del Señor; el tempo, que era utilizado para alabar
y adorar a Dios estaba en ruinas, la gente decía “No ha llegado aún el tiempo”, no es que no querían,
es que decían, por ahora no, talvez más adelante. Pero una vez que el pueblo decidió poner los
cimientos del templo, en ese mismo día Dios decidió bendecir a su pueblo. Hay una íntima relación
entre las ofrendas dadas por el pueblo para restaurar la alabanza y la adoración a Jehová con la
prosperidad económica del ofrendador.

Quiero llevarles a reflexionar sobre 3 verdades fundamentales respecto al tema.

1.- SATANÁS INVIERTE DINERO EN DESTRUIR LA OBRA Y LOS PLANES DE DIOS.

A lo largo de la historia bíblica encontramos que en varias ocasiones el enemigo de Dios y de su

pueblo, Satanás, ha invertido dinero en intentar destruir los planes de Dios.

- José es vendido por 20 piezas de plata.- Génesis 37:23-24, 28. “…cuando llegó José a
sus hermanos, ellos quitaron a José la túnica de colores que tenía sobre sí; y le tomaron
y le echaron en la cisterna; pero la cisterna estaba vacía, no había en ella agua… Y
cuando pasaban los madianitas mercaderes, sacaron ellos a José de la cisterna, y le
vendieron a los ismaelitas por veinte piezas de plata. Y llevaron a José a Egipto.” José se
convertiría en el salvador del pueblo de Israel en un momento crucial, el pueblo de Dios
corría el riesgo de ser exterminado por la gran hambruna que existió en aquellos
tiempos, ¿sabe que hubiera pasado si la familia de Jacob hubiera muerto de hambre?,
le doy la respuesta, HOY NO FUERAMOS SALVOS.
- Sansón es entregado por monedas de plata.- Jueces 16:5 “Y vinieron a ella los príncipes
de los filisteos, y le dijeron: Engáñale e infórmate en qué consiste su gran fuerza, y cómo
lo podríamos vencer, para que lo atemos y lo dominemos; y cada uno de nosotros te
dará mil cien siclos de plata. “ El total del pago ofrecido por los 5 príncipes era de 5500
siclos de plata, Dalila tendría que haber trabajado más de 61 años continuos para lograr
por sus propios medios obtener esa gran suma de dinero, el objetivo fue cumplido y el
campeón de Israel fue apresado, humillado y finalmente murió.
- Jesús nuestro salvador es vendido por plata.- Mateo 26:15 “y les dijo: ¿Qué me queréis
dar, y yo os lo entregaré? Y ellos le asignaron treinta piezas de plata.” Satanás
nuevamente intentando destruir los planes de Dios y como vemos, invirtió dinero para
intentar hacerlo.

Solo he seleccionado algunos episodios como ejemplos, porque hay muchas más referencias bíblicas
en las que nuestro adversario haciendo uso del dinero intentó destruir la obra y el pueblo de Dios.

2.- RELACIÓN ENTRE OFRENDA Y BENDICIÓN.

Como lo dije hace unos momentos, hay una íntima relación entre las ofrendas dadas por el pueblo
para restaurar la alabanza y la adoración a Jehová con la prosperidad económica del ofrendador, a
continuación citaremos algunos ejemplos.
 - La ofrenda del pueblo en el desierto. (Éxodo. 25.1-9).- Es la primera vez que se hacía
como pueblo una recolecta masiva ¿y cuál era el objetivo de esta ofrenda? Construir el
tabernáculo donde se Adoraría y Alabaría a Dios. Cual fue el resultado de esta ofrenda,
nos lo cuanta la misma Palabra de Dios en Deuteronomio 29:5-9 Y yo os he traído
cuarenta años en el desierto; vuestros vestidos no se han envejecido sobre vosotros,
ni vuestro calzado se ha envejecido sobre vuestro pie. No habéis comido pan, ni
bebisteis vino ni sidra; para que supierais que yo soy Jehová vuestro Dios. Y llegasteis
a este lugar, y salieron Sehón rey de Hesbón y Og rey de Basán delante de nosotros
para pelear, y los derrotamos; y tomamos su tierra, y la dimos por heredad a Rubén y
a Gad y a la media tribu de Manasés. Guardaréis, pues, las palabras de este pacto, y
las pondréis por obra, para que prosperéis en todo lo que hiciereis.
- La ofrenda dada por David y el Pueblo (1 Crónicas 29).- En esta ocasión el Rey David al
final de sus días de reinado presenta al pueblo a su hijo Salomón y lo posesiona como
rey, en esta ocasión también se recoge una ofrenda especial y el objetivo, otra vez
levantar un lugar para adorar y bendecir el nombre de Jehová. El resultado, nunca antes
Israel fue tan prospero como lo fue en los tiempos de Salomón, de hecho es recordada
como la época de oro de la historia de Israel.

En estos dos ejemplos hay varias similitudes, las ofrendas fueran voluntarias, las ofrendas eran
abundantes y el resultado de esta ofrendas ocasionó que Dios los bendiga y los prospere.

¿PORQUÉ QUIERE DIOS QUE YO OFRENDE?

- EL DAR ME ASEMEJA A DIOS.- Juan 3: 16. Porque de tal manera amó Dios al mundo que
dio a su Hijo unigénito
- EL DAR ME ACERCA MAS A DIOS.- Mateo 6: 21. Dónde está tu teso allí estará también
tu corazón.
- EL DAR ES UN ANTIDOTO PARA EL EGOÍSMO Y ES UNA INVERSION PARA LA ETERNIDAD.-
1Timoteo 6:17-19 Adviérteles a los ricos de este mundo que no sean orgullosos ni
confíen en sus riquezas, porque es muy fácil perder todo lo que se tiene. Al contrario,
diles que confíen en Dios, pues él es bueno y nos da todo lo que necesitamos para que
lo disfrutemos. 18 Mándales que hagan el bien, que se hagan ricos en buenas acciones.
Recuérdales que deben dar y compartir lo que tienen. 19 Así tendrán un tesoro que en
el futuro seguramente les permitirá disfrutar de la vida eterna.
- EL DAR FORTALECE MI FE. Confía en el Señor con todo tu corazón, y no te apoyes en tu
pro entendimiento. Honra al Señor con tus bienes, y con las primicias todos tus frutos.
Prov. 3: 5, 9-10 Dad, y os será dado…porque con la medida con que midáis, se os volverá
a medir. Lu 6:38
- EL DAR, EN CAMBIO, BENDICE MI VIDA, PROSPERANDO. El generoso será bendito. Prov.
22:9 El alma generosa será prosperada; Y el que saciare, él también será saciado Prov.
11: 25
- EL DAR ME HACE FELIZ., Jesús dijo: hay más felicidad en dar que en recibir?. Hechos 20:
35

Hemos visto como en la historia de Israel, el ofrendar para levantar la alabanza y la adoración a
Jehová, le ha dado a Dios un motivo para que el los bendiga, hoy yo quiero darle a Dios un motivo
para que me bendiga y me prospere, hoy yo quiero que la promesa dada en Hageo 2: 19 se haga
efectiva en mi vida. Por eso hoy yo dispongo mi corazón para ofrendar conforme a su Palabra, sin
olvidar Eclesiastés 5:4-5 “Cuando a Dios haces promesa, no tardes en cumplirla; porque él no se
complace en los insensatos. Cumple lo que prometes. Mejor es que no prometas, y no que
prometas y no cumplas.”