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6° Semestre
Unidad 2.
La prevención del delito en el Estado mexicano
Clave:
01143636
Índice
Presentación de la Unidad
Analizarás las atribuciones de las instancias encargadas de la prevención del delito en los
tres órdenes de gobierno e identificaremos los mecanismos que se han creado en el
Estado mexicano para realizar políticas públicas en dicha materia.
Propósitos
Competencia especifica
Max Weber, filósofo alemán y uno de los expositores más representativos de la sociología
moderna, sostenía que una de las principales características de un Estado determinado,
es el monopolio del poder público que ostentan las autoridades, el cual puede servir para
garantizar plenos niveles de vida a la población o, en caso contrario, atentar en contra de
sus propios intereses.
En este sentido, el poder de castigar (ius puniendi) como facultad exclusiva del Estado,
constituye uno de sus pilares fundamentales, pero asimismo los derechos fundamentales
lo son. Bajo este supuesto, la aplicación del derecho penal debe ser exclusiva de las
autoridades, pero siempre vigilando el respeto de los derechos de las personas, ya que en
caso contrario resultaría negativo.
Por otra parte, el derecho penal siempre debe de ser considerado como la última
alternativa que tiene el Estado para afrontar problemas como la delincuencia, ya que debe
de pugnarse por otras medidas basadas principalmente en la prevención del delito, ya que
es la manera más eficaz y dañina para afrontar los flagelos que dañan de raíz el tejido
social.
Para algunos pensadores modernos como Günther Jakobs –jurista alemán que postula
criterios como el Derecho Penal del Enemigo–, legisladores e incluso operadores
jurídicos, no existe más alternativa para afrontar los fenómenos delictivos que el derecho
penal, ya que se posiciona como un medio coercitivo de impacto directo, que sanciona
conductas que afectan bienes jurídicos importantísimos para un Estado Democrático de
Derecho.
Bajo esta tesitura, se aboga por aplicar medidas de seguridad –por ejemplo, la
supervisión de la autoridad– y penas más fuertes –por ejemplo, la prisión–, porque son la
única forma de afrontar verdaderamente los delitos y castigar a los responsables de los
mismos de manera inmediata, ya que otro tipo de medidas como la prevención del delito,
resultan demasiado costosas, sin un impacto social observable a corto plazo, ya que
llevan más tiempo que detener y castigar a una persona. Entre las medidas que podemos
mencionar, están el régimen de excepción punitivo que se establece en los sistemas
jurídicos de los países para luchar contra fenómenos delictivos como es el narcotráfico, y
por el cual se prevé establecer sanciones penales más severas para las conductas
relacionadas con este fenómeno, teniendo como referente la Ley Federal contra la
Delincuencia Organizada.
En este orden de ideas, es usual que se piense que la aplicación del derecho penal, es la
función principal de las Instituciones de Seguridad Pública, ya que a través de él, es
posible generar la certeza de que la población se encuentra protegida y no existe
impunidad para los delitos que se cometen, ya que cada uno de ellos recibe una pena o
castigo proporcional.
De acuerdo con el artículo 21 Constitucional, la seguridad pública “es una función a cargo
de la Federación, el Distrito Federal, los Estados y los Municipios, que comprende la
prevención de los delitos; la investigación y persecución para hacerla efectiva, así como la
sanción de las infracciones administrativas, en los términos de la ley”, en sus respectivas
competencias.
Las policías, Instituciones del Ministerio Público y autoridades penitenciarias –las cuales
participan en la reinserción social con la autoridad jurisdiccional de ejecución de
sanciones penales–, de los tres órdenes de gobierno, trabajan de manera conjunta y
homogénea, lo que permite que el Sistema Nacional de Seguridad Pública refuerce y
consolide las políticas públicas establecidas en materia de seguridad y justicia.
Al respecto, es importante mencionar que las instituciones que llevan a cabo la importante
función de la seguridad pública, son de carácter civil, disciplinado y profesional de
acuerdo a la legislación que determinen las Entidades Federativas y el Distrito Federal,
acorde a lo establecido por la Federación.
Por ello, comprendemos que la prevención del delito está a cargo de las instituciones que
proveen seguridad pública, las cuales cuentan con atribuciones de coordinación
interinstitucional, con la finalidad de impulsar políticas de seguridad pública generales
donde participen los tres órdenes de gobierno y generar y homologar mecanismos de
seguimiento y evaluación.
Por medio del Sistema Nacional de Seguridad Pública, se establecen las bases para la
coordinación y la distribución de competencias en materia de seguridad pública en los tres
niveles de gobierno, el cual está conformado por:
Fuente: Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión. (2009). Reglamento del Secretario Ejecutivo del
Sistema Nacional de Seguridad Pública. Recuperado el 9 de septiembre de 2013, de:
http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/regla/n122.pdf
Asimismo, existe el Servicio de Protección Federal que tiene como función principal
proporcionar servicios de protección, custodia, vigilancia y seguridad de personas, bienes
e instalaciones a las dependencias, entidades de la Administración Pública Federal,
órganos de carácter federal de los Poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, organismos
constitucionalmente autónomos y demás instituciones públicas, así como funciones
En los Consejos Locales, también participan los municipios en los términos que fije cada
legislación de cada entidad federativa. En el caso del Distrito Federal, participan los
titulares de los órganos políticos administrativos de las demarcaciones territoriales –
Delegaciones–.
Dentro de los programas y políticas públicas en materia de prevención del delito, que el
Estado se encuentra obligado a promover y consolidar, encontramos la relativa a depurar
de las Instituciones de Seguridad Pública, a todos aquellos servidores públicos cuya
función asignada no se encuentre apegada a los principios de legalidad, objetividad,
eficiencia, profesionalismo y honradez, lo cual podría afectar tanto a la población en
general como a sus compañeros.
El control de confianza, como programa que tiene a cargo el Estado, no sólo forma parte
de una política pública específica, sino que resulta una obligación por parte de las
autoridades de materializarla y asegurar que se efectúe. En este orden de ideas, la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en su artículo 21, establece la
evaluación y certificación de los integrantes de las Instituciones de Seguridad Pública,
como un requisito indispensable para formar parte de las mismas.
Asimismo, la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, establece el control
de confianza como uno de los requisitos de permanencia e ingreso, de todas aquellas
personas que formen parte de Instituciones de Procuración de Justicia, así como aquellas
consideradas como Instituciones Policiales, estando por lo tanto compelidos sus
elementos a practicar este tipo de evaluaciones.
Ahora bien, se ha analizado en líneas previas, el origen y sustento jurídico del control de
confianza, mostrando la posibilidad que brinda a las Instituciones de Seguridad Pública,
para contar con las personas más adecuadas para llevar a cabo las actividades que
tienen asignadas.
En este orden de ideas, el control de confianza no sólo debe de considerarse como una
actividad programática a cargo del Estado, sino como una herramienta que puede
contribuir, a partir de la prevención, a hacer frente a dos fenómenos que laceran
sensiblemente el tejido social: la corrupción y el delito como veremos a continuación.
Los integrantes de las Instituciones de Seguridad Pública, tiene como una de las
directrices de sus actuaciones, combatir todo acto o conducta que pueda dañar
sensiblemente a la ciudadanía, así como a los bienes jurídicos que se consideran
importantes. En ello reside su principal labor, que puede ser materializada a partir de
diferentes aristas, programas, acciones o políticas públicas en materia de seguridad.
Entre las acciones que el Estado puede tomar en materia de prevención del delito, los
servicios a la comunidad son esenciales, debido a que no sólo facilitan la concreción de
políticas públicas en materia de seguridad y prevención del delito, sino que permiten a su
vez el ejercicio y goce de otros derechos humanos.
Bajo esta tesitura, se observa que los servicios a la comunidad, son acciones
programáticas a cargo del Estado, a través de los cuales se beneficia directamente a los
ciudadanos, contribuyendo a la vez a eliminar factores que pueden provocar la generación
de conductas delictivas.
En este sentido, las acciones de prevención del delito que deben de llevar a cabo las
instituciones de seguridad pública, no deben sólo enfocarse a medidas externas como los
servicios a la comunidad, sino también a fiscalizar y controlar de manera adecuada al
personal que las compone, para evitar que se generen actos de corrupción, lo cual
conlleva un impacto directo para la ciudadanía y la imagen que de las referidas
Instituciones.
Asimismo, se puede comprender como rendición de cuentas, el mecanismo por el cual los
organismos y las organizaciones de carácter público, privado y de la sociedad civil tienen
la responsabilidad del adecuado cumplimiento de sus funciones.
Tanto en el ámbito federal como del fuero común, existen instituciones encargadas de
llevar a cabo funciones de control y de evaluación de la gestión pública de las
dependencias gubernamentales, entre la cual se encuentra la rendición de cuentas.
Ejemplo de este tipo de instituciones son la Secretaría de la Función Pública, así como la
Contraloría General del Distrito Federal, las cuales promueven en sus respectivas
competencias, la participación ciudadana, la transparencia gubernamental y la rendición
de cuentas, ejemplo de ello son la implementación de programas de contraloría
ciudadana, para favorecer la vida democrática e incluyente en los procesos públicos de
prevención de irregularidades en el ámbito gubernamental.
Los programas vecinales son estrategias que implementan las Instituciones encargadas
de la Seguridad Pública, mediante el cual los vecinos de las comunidades conjuntamente
con los servidores públicos, se organizan para determinar acciones que sirvan para
prevenir los delitos.
Uno de los principales objetivos de los programas vecinales, es tener un vínculo activo
con los vecinos de las comunidades y las instituciones que proporcionan seguridad
pública y privada para coadyuvar en la prevención del delito, y generar espacios de
cohesión y gestión social de las políticas públicas en materia de seguridad y justicia.
Son creados para combatir la problemática que se presenta por la comisión de delitos en
determinadas comunidades, que pueden formar parte de zonas de riesgo; se elabora un
diagnóstico en materia de seguridad conjuntamente con la ciudadanía, y de esta manera,
buscar delimitar y prevenir la aparición de modalidades delictivas.
Este tipo de programas de prevención del delito van dirigidos a las comunidades que
presentan un riesgo en materia de seguridad y a la sociedad en general, por medio de
redes vecinales. Entre sus principales objetivos encontramos:
Los programas vecinales, serán coordinados por medio de las Instituciones encargadas
de la Seguridad Pública de la Federación, el Distrito Federal, los Estados y Municipios, de
conformidad a las bases que establece el artículo 21 de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos y la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública,
así como los Programas de prevención del delito de cada uno de los tres órdenes de
gobierno, en el ámbito de su competencia, a través del establecimiento de unidades de
consulta y participación de la ciudadanía por comunidad.
Los programas vecinales, son representados por los coordinadores comunitarios que
forman parte de las Instituciones encargadas de brindar seguridad pública en el ámbito de
sus competencias, y son quienes colaboran de forma directa con los vecinos para la
realización de encuestas y reuniones de asambleas informativas para crear redes
vecinales.
En las asambleas vecinales, se presentan los resultados de las encuestas, que son las
herramientas utilizadas por parte de los coordinadores comunitarios para crear el mapa de
delitos y factores criminógenos de la zona, y así lograr confeccionar las estrategias a
seguir de acuerdo a las respuestas obtenidas.
En el Distrito Federal mediante la instauración del Consejo para la prevención del delito,
se crearon las redes sociales o comunitarias, programa implementado por la Procuraduría
General de Justicia del Distrito Federal, cuyo objeto es establecer las bases para el
fomento a la cultura de la legalidad, así como la promoción de la denuncia y acercamiento
de los servicios que brinda esta institución en materia de procuración de justicia.
El Plan Nacional de Desarrollo puede ser comprendido desde dos aspectos. El primero,
como un documento de planeación que rige la programación y presupuestación de toda la
Administración Pública Federal; el segundo, como un medio de comunicación
gubernamental, mediante el cual se informa de manera clara, sencilla y general a todos
los habitantes de la República Mexicana, la misión, visión y estrategias de gobierno de
cada administración. Asimismo, sirve como un trabajo de análisis y reflexión que conmina
a los ciudadanos a plantear cuáles son los derroteros y expectativas nacionales, y sobre
la responsabilidad compartida que debe asumir la sociedad para generar un desarrollo
como nación.
Integridad
Patrimonio Vida Salud
personal
Mejorar las condiciones de seguridad pública es uno de los principales objetivos del Plan
Nacional de Desarrollo. En este sentido, la transformación institucional y fortalecer las
capacidades de las fuerzas de seguridad las instituciones que desarrollan la importante
función de la seguridad pública tienen por objeto promover; garantizar un sistema de
justicia penal, expedito, imparcial y transparente; y aplicar, evaluar y dar seguimiento del
Programa Nacional para la Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia.
En este sentido, los objetivos sobre los que mayor énfasis se debe poner son aquéllos
destinados a mejorar la coordinación de estrategias de política criminal para reducir los
índices de violencia, a partir de las causas y en función de las variables que propician las
conductas antisociales, así como de la suma de los esfuerzos de organizaciones sociales,
participación ciudadana, sector académico y de especialistas, así como la aplicación de
campañas de comunicación en materia de prevención del delito y combate a la
inseguridad.
En este sentido los ejes rectores que sustentan el Programa Nacional involucran de
manera integral numerosos sectores de la sociedad, entre ellos las juventudes, las
mujeres y las personas en condición de vulnerabilidad. Además, los resultados que
Al igual que muchos países, como España, la política de seguridad pública dirigida a la
prevención y la investigación de los delitos, se encuentra concentrada en una sola
institución policial, lo que permite definir de manera integral las facultades y atribuciones
que le están conferidas. Se argumenta que la implementación de un esquema unificado
permitirá alinear las capacidades y esfuerzos de las agencias policiales en contra del
fenómeno delictivo, sin perder de vista una administración más depurada como respuesta
a la desviación de funciones de la que ha sido objeto la policía, principalmente por lo que
hace a los recursos humanos y materiales.
En este sentido, el modelo de mando único policial que se pretenda adoptar en el ámbito
de la seguridad pública debe tomar en consideración los siguientes aspectos:
Todavía persisten las graves confusiones entre las funciones que debe tener la policía
preventiva y la policía de investigación dependiente de la Institución del Ministerio Público,
por mencionar un ejemplo. Vemos que en numerosas ocasiones se le asigna a la policía
preventiva labores de investigación y viceversa, a la de investigación labores preventivas
de vigilancia.
ingreso, por ejemplo, escolaridad mínima que está por debajo de las exigencias
profesionales.
Es preciso señalar que la policía de la comunidad no debe ser confundida como un medio
de resolución de conflictos de carácter vindicativo frente a las problemáticas sociales, y
mucho menos como un medio de autotutela, lo cual, se encuentra prohibido por la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en el artículo 17, por el que se
establece que: “Ninguna persona podrá hacerse justicia por sí misma, ni ejercer violencia
para reclamar su derecho”.
Por medio de la reforma Constitucional al artículo 21, el Poder Legislativo fortalece a las
instituciones que brindan seguridad pública, otorgando facultades y atribuciones a los tres
órdenes de gobierno en materia de prevención, investigación y persecución de la
criminalidad.
No podemos dejar de tomar en cuenta que, a la par de este bloque normativo se crearon
las leyes especiales, en materia de secuestro, trata de personas y delincuencia
organizada. Estas leyes de carácter reglamentario permiten la distribución de
competencias y la forma de coordinación entre los tres órdenes de gobierno para la
prevención y persecución de dichos fenómenos delictivos, los cuales impactan
indefectiblemente en los intereses de la sociedad.
Como podemos observar, existe una diversidad de leyes que impactan en el ámbito de la
seguridad pública y la prevención del delito, por lo que contamos con una amplia
legislación en este ámbito que permite coordinar las instituciones encargadas de esta
importante labor.
Fuente: Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión. (2013). Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos. Recuperado el 9 de septiembre de 2013, de:
http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/1.pdf
La Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, tiene como principal
fundamento el pacto federal de acuerdo a lo dispuesto por el artículo 21 Constitucional.
Los integrantes del Sistema Nacional, son los poderes Ejecutivos, el Ministerio Público y
las instituciones policiales de los tres ámbitos de gobierno, quienes asentarán las bases
para la implementación de políticas preventivas dentro de las instituciones encargadas de
seguridad pública, y mecanismos que permitirán su control de acuerdo a los principios de
legalidad, objetividad, eficiencia, profesionalismo, honradez y respeto a los derechos
humanos de todos sus integrantes.
Se divide en dos apartados. El primero, define las funciones y características del Sistema
Nacional de Seguridad Pública, se establecen los mecanismos de coordinación,
cooperación y dirección de las políticas de seguridad pública en los tres niveles de
gobierno; el segundo, establece los principios generales que deben regir las políticas de
seguridad pública y los instrumentos institucionales requeridos para cumplir sus
funciones.
Esta Ley establece que la seguridad pública comprende la prevención especial y general
de los delitos, su investigación y persecución para hacerla efectiva así como la sanción de
las infracciones administrativas y define a la prevención como la base de las políticas de
seguridad pública, que deberán tener como objeto la inhibición de la comisión de
conductas ilícitas a través de la erradicación de los factores de riesgo que causan la
delincuencia, que forman parte integral de este fenómeno, la atención de las víctimas y la
reinserción social de los transgresores.
En dicha Ley se establecen de forma general las características que deben cumplir las
instituciones de seguridad pública: civiles, disciplinadas y profesionales. Asimismo, se
incorpora como explícita la obligatoriedad de la rendición de cuentas.
Por otra parte, establece las competencias del Sistema Nacional, para determinar las
políticas a seguir en materia de prevención; atención integral a víctimas; participación
ciudadana; procedimientos de selección, ingreso, formación, permanencia, evaluación,
certificación, promoción y retiro de los miembros de las instituciones de seguridad pública;
los sistemas de estímulos y recompensas así como los disciplinarios y, de manera
imprescindible, el suministro y sistematización de la información de Información sobre
Seguridad Pública.
Las leyes especiales en materia de prevención del delito, tienen como fin tutelar la
libertad, la dignidad y los demás derechos humanos reconocidos universalmente,
mediante la regulación de las acciones del Estado Mexicano por medio de la prevención
del delito en forma particular y general, la investigación, persecución y sanción de los
delitos, establecer los tipos penales, las sanciones y el procedimiento penal aplicables, así
como la distribución de competencias y formas de coordinación entre los distintos órdenes
de gobierno.
Pueden ser reglamentarias y generales, son leyes de orden público e interés social y de
observancia general, tienen por objeto establecer las bases de coordinación entre la
Federación, los Estados, el Distrito Federal y los Municipios en materia de prevención del
delito, la violencia y la delincuencia en el marco del Sistema Nacional de Seguridad
Pública, previsto en el artículo en el artículo 21 de la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos.
La Ley General para Prevenir, Sancionar y Erradicar los Delitos en materia de Trata de
Personas y para la Protección y Asistencia a las Víctimas de estos Delitos, tiene por
objeto tutelar la libertad y la dignidad de las personas y los demás derechos humanos
reconocidos universalmente y regular las acciones del Estado Mexicano en la prevención,
investigación, persecución y sanción de los delitos previstos en ella, así como establecer
los tipos penales, las sanciones y el procedimiento penal aplicable, así como la
distribución de competencias y formas de coordinación entre los distintos órdenes de
gobierno.
Dentro de esta Ley se tipifica el delito de Trata de Personas y cada uno de los delitos que
se le relaciona, estableciendo las sanciones que deben aplicarse en cada caso de la
comisión del ilícito, las sanciones por acumulación de delitos cuando se relacionan con
otros, las hipótesis de su agravamiento y las reglas comunes a todos los casos en la
interpretación y aplicación de estas disposiciones.
Regula todo lo relativo a los derechos de las víctimas y las personas que les rodean, en lo
que hace tanto a su atención integral, sus derechos, protección y seguridad durante los
procesos, el resarcimiento y reparación de los daños, los derechos de las víctimas
extranjeras y las medidas para su protección en el largo plazo, cuando haya participación
de la delincuencia organizada.
Se establecen las obligaciones de la Procuraduría General de la República de crear un
Programa de Protección a Víctimas y Testigos, las reglas generales de su funcionamiento
y la creación de una instancia específica para operarlo.
Los delitos relacionados con la trata de personas se consideran como delitos graves. Se
señala que para el caso de la sustracción de menores, deberán implementarse sistemas
de alerta y protocolos de acción inmediata para su búsqueda y localización, en el que
coadyuven los integrantes del sistema las corporaciones de emergencia, medios de
comunicación, prestadoras de servicios de telecomunicaciones, organizaciones no
Tiene como objeto establecer los tipos penales, sus sanciones, las medidas de
protección, atención y asistencia a ofendidos y víctimas, la distribución de competencias y
formas de coordinación entre la Federación y las Entidades Federativas, las cuales, en el
ámbito de sus competencias, estarán obligadas a coordinarse entre ellas en materia del
delito de privación ilegal de la libertad en su modalidad de secuestro.
Esta Ley de acuerdo a sus disposiciones, establece la coordinación con las instituciones
de seguridad pública entre los tres órdenes de gobierno y se coordinarán a través del
Centro Nacional de Prevención y Participación Ciudadana del Secretariado Ejecutivo del
Sistema Nacional de Seguridad Pública, establecidas en el artículo 21 de la Ley General
para Prevenir y Sancionar los Delitos en Materia de Secuestro, para realizar las siguientes
acciones en materia de prevención del delito:
Aplicar los conocimientos de las ciencias jurídicas penales que permitan generar
estrategias en la prevención del delito de secuestro.
La coordinación entre instituciones para procesar, interpretar la información
obtenida en cualquier parte de la república para establecer cuáles son las zonas,
sectores y grupos que representan un riesgo respecto de delito de secuestro.
Difundir campañas enfocadas a la prevención del delito de secuestro.
Establecer relaciones de colaboración con todas y cada una de las instrucciones
encargadas de la seguridad pública, la procuración y administración de justicia
que conforman los tres niveles de gobierno, así como los sectores, económicos y
civiles.
Establecer relaciones de colaboración con las instituciones competentes del
Estado y las organizaciones sociales con el objetivo de orientar las medidas que
deben adoptar para prevenir los delitos relacionados con el delito de secuestro.
Colaborar con el registro e identificación dentro de las instituciones seguridad
pública, de las personas pertenezcan empresas privadas de seguridad.
Estas acciones permiten a los tres órdenes de gobierno realizar actividades de prevención
de la criminalidad en coordinación todas las instituciones involucradas en brindar
seguridad pública, y facilitan la participación de la ciudadanía en la gran labor de prevenir
la comisión del delito de secuestro, el cual, en la actualidad ha afectado
considerablemente bienes jurídicos comunes a la sociedad en su conjunto, tanto a nivel
nacional como internacional.
Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación de acuerdo a sus contenidos, tiene
por prevenir y eliminar todas las formas de discriminación que se ejerzan contra cualquier
persona, de acuerdo en los términos del artículo primero Constitucional, así como
promover la igualdad de oportunidades y de trato entre todas las personas.
toda distinción, exclusión o restricción que, basada en el origen étnico o nacional, sexo, edad, talla
pequeña, discapacidad, condición social o económica, condiciones de salud, embarazo, lengua,
religión, opiniones, preferencias sexuales, estado civil o cualquier otra, tenga por efecto impedir o
anular el reconocimiento o el ejercicio de los derechos y la igualdad real de oportunidades de las
personas. También se entenderá como discriminación la xenofobia y el antisemitismo en cualquiera
de sus manifestaciones. (P.1-2).
De igual forma al Estado le corresponde incentivar las condiciones necesarias para que
los bienes jurídicos de la sociedad como son la libertad y la igualdad, sean realmente
efectivas y su ejercicio pueda efectuarse sin obstáculos.
Autoevaluación
Con la finalidad de llevar a cabo una recapitulación de los conceptos más importantes
estudiados en la Unidad, resuelve el ejercicio de autoevaluación que se encuentra en la
pestaña de la Unidad.
Actividades de Autorreflexión
Cierre de la Unidad
Identificaste las atribuciones que estable la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, al Sistema Nacional de Seguridad Pública, observando principalmente las
funciones del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, así
como de las instituciones que brindan seguridad pública en las Entidades Federativas y
Municipios en materia de prevención del delito.
Revisa el libro sugerido para obtener más información sobre el tema de prevención social
del delito:
Peñaloza, Pedro José (2012). Prevención social del delito. Asignatura pendiente.
Cuarta Edición. México: Porrúa.
Fuentes de consulta
González Placencia, Luis; Arce Aguilar, José Luis y Álvarez, Metztli (Coord.)
(2007). Aproximaciones empíricas al estudio de la inseguridad. Once estudios en
materia de seguridad ciudadana en México. México: Porrúa/H. Cámara de
Diputados LX Legislatura.
Fuentes cibergráficas
Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión. (2013). Constitución Política de
los Estados Unidos Mexicanos. Recuperado el 19 de febrero de 2015, de:
http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/1_150917.pdf
Ley General para Prevenir, Sancionar y Erradicar los Delitos en materia de Trata de
Personas y para la Protección y Asistencia a las Víctimas del estos Delitos. (2013).
Orden Jurídico. Recuperado el 19 de febrero de 2015, de:
http://www.ordenjuridico.gob.mx/Documentos/Estatal/Veracruz/wo81645.pdf
Ley General para Prevenir y Sancionar los Delitos en Materia de Secuestro. (2011).
Orden Jurídico. Recuperado el 19 de febrero de 2015, de:
http://dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5168835&fecha=30/11/2010
Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública. (2012). Orden Jurídico.
Recuperado el 19 de febrero de 2015, de:
http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/LGSNSP_260617.pdf