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POLITICA Y DEMOCRACIA
“Los políticos no son necesarios. Hace falta gente inteligente” (James Watson Cronin, Premio Nobel de Física al Diario
Los Andes)
“La Política es cosa demasiado importante para dejarla sólo en manos de los políticos” (Anónimo)

Con el advenimiento de la democracia, comenzaron a


publicarse, desde unos meses antes, una serie de artículos
periodísticos tratando de difundir los principios de la libertad. De
entre todas esas publicaciones recuerdo especialmente una
recopilación de conceptos tomados de la Historia Universal de Will
Durant y otros de Ayn Rand., que aparecieron en un periódico de
Buenos Aires con el título de Paralelos y analogías y que
inexorablemente llevaban al lector a efectuar comparaciones con la
situación de aquellos momentos.

Habiendo pasado veinte años de vivir en Democracia y habida


cuenta los resultados obtenidos, busqué nuevamente a esos autores
para repasar sus ideas, anteponiendo a las mismas algunos pasajes de
la famosa oración fúnebre de Pericles que, no solo es la primera sino
que, desde hace ya 24 siglos, sigue siendo seguramente la mejor
descripción de lo que es una Democracia. Quizas así se podrán
apreciar algunas diferencias y similitudes que nos permitirían sacar
algunas conclusiones con la situación actual, determinando cada uno
de nosotros, con nuestra propia experiencia vivida en este tiempo mas
que suficiente, si es que existen, o no, algunos paralelos y algunas
analogías en los siguientes pensamientos:

La Democracia de Pericles
“Nuestro sistema político no compite con instituciones que
tienen vigencia en otros lugares. Nosotros no copiamos a nuestros
vecinos, sino que tratamos de ser un ejemplo. Nuestra administración
favorece a la mayoría y no a la minoría: es por ello que la llamamos
democracia. Nuestras leyes ofrecen una justicia equitativa a todos los
hombres por igual, en sus querellas privadas, pero esto no significa
que sean pasados por alto los derechos del mérito. Cuando un
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ciudadano se distingue por su valía, entonces se lo prefiere para las


tareas públicas, no a manera de privilegio, sino de reconocimiento de
sus virtudes y en ningún caso constituye obstáculo la pobreza…La
libertad de que gozamos abarca también la vida corriente; no
recelamos los unos de los otros, y no nos entrometemos en los actos
de nuestro vecino, dejándolo que siga su propia senda…Pero esta
libertad no significa que quedemos al margen de las leyes. A todos se
nos ha enseñado a respetar a los magistrados y a las leyes y a no
olvidar nunca que debemos proteger a los débiles. Y también se nos
enseña a respetar aquellas leyes no escritas cuya sanción sólo reside
en el sentimiento universal de lo que es justo…
“Nuestra ciudad tiene las puertas abiertas al mundo; jamás
expulsamos a un extranjero…Somos libres de vivir a nuestro antojo
y, no obstante, siempre estamos dispuestos a enfrentar cualquier
peligro…Amamos la belleza sin dejarnos llevar de las fantasías, y si
bien tratamos de perfeccionar nuestro intelecto, esto no debilita
nuestra voluntad…Admitir la propia pobreza no tiene entre nosotros
nada de vergonzoso, lo que sí consideramos vergonzoso es no hacer
ningún esfuerzo por evitarla. El ciudadano ateniense no descuida los
negocios públicos por atender sus asuntos privados…No
consideramos inofensivos, sino inútiles, a aquellos que no se interesan
por el estado; y si bien sólo unos pocos pueden dar origen a una
política, todos nosotros somos capaces de juzgarla. No consideramos
la discusión como un obstáculo colocado en el camino de la acción
política, sino como un preliminar indispensable para actuar
prudentemente…Creemos que la felicidad es el fruto de la libertad y
la libertad, el del valor, y no nos amedrentamos ante el peligro de la
guerra…Resumiendo: sostengo que Atenas es la Escuela de la Hélade
y que todo individuo ateniense alcanza en su madurez una feliz
versatilidad, una excelente disposición para las emergencias y una
gran confianza en si mismo” (Citado por K.Popper; La Sociedad
abierta y sus enemigos)

Hombres con valores duales.


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“Pero cuando una sociedad establece que los criminales tienen


derechos y los ladrones deben ser protegidos; cuando establecen a
hombres que se apoderan de la riqueza de sus víctimas “desarmadas”,
entonces el dinero se convierte en la Némesis de quien lo creó. Tales
ladrones creen que es seguro poder robar a hombres indefensos una
vez que establecieron una ley que les haya desarmado. Pero su botín
se convierte en imán para otros ladrones que se apoderan de él así
como ellos lo hicieron. La carrera la ganan entonces no quienes son
hábiles en la producción, sino quienes son más fríos en su brutalidad.
Cuando la violencia es la norma, el asesino le gana al carterista. Es
entonces cuando esa sociedad desaparece en una extensión de ruinas
y masacre.
Cuando vean que el comercio no se efectúa por consentimiento
sino por compulsión; cuando vean que para producir deben obtener el
permiso de hombres que nada producen; cuando vean que el dinero
se desliza hacia quienes no negocian bienes sino favores; cuando vean
que los hombres se enriquecen por corrupción en lugar de hacerlo por
trabajo y que las leyes ya no los protegen a ustedes contra ellos sino
a ellos contra ustedes; cuando vean que se recompensa al haragán y
el trabajo y la honestidad se convierten en un autosacrificio, entonces
sabrán que vuestra sociedad está condenada.” (Ayn Rand “Atlas
Shrugged” 1957 - Recopilado por M.F. Schieder)

Decadencia de la Democracia
“De entre la burguesía, que fue rebelde en otro tiempo, está
naciendo una nueva aristocracia, y hace años que la libertad, la
igualdad y la fraternidad no cuentan con las simpatías de los
financieros. La libertad económica se hace cada vez más rara y
estrecha, aún entre las clases medias. En un mundo del que empiezan
a desaparecer la libertad de competencia, la igualdad de
oportunidades y la fraternidad social, la igualdad política no tiene
valor y la democracia no pasa de ser mera farsa.” (Will Durant –
Filosofía Cultura y Vida)
…..
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“La última causa que ha contribuido al fracaso de nuestra


democracia es la generalización de la ignorancia. “La imbecilidad de
los hombres –dice Emerson- siempre está invitando al poder a que se
exceda”.... Es que la teoría de la democracia supone que el hombre es
un animal racional, tal como lo dicen los libros de lógica; pero tiene
mucho mas de animal emocional, racional sólo en algunas ocasiones,
y susceptible de engaño, mediante sus sentimientos, respecto al
contenido de su corazón Quizás es verdad según pretendía creer
Lincoln, que “no se puede embaucar siempre a todos”, pero sí se
puede engañar a los suficientes para regir un gran país.” (op. cit.)
……..
“Solo podemos votar o elegir entre los candidatos que se
presentan y los que verdaderamente gobiernan son los que eligen a
esos candidatos (Maine, Gobierno Popular)
La política es la rivalidad de las minorías organizadas, frente a las
cuales los votantes se limitan a aplaudir a los vencedores y a burlarse
de los derrotados, única contribución que prestan al resultado final.
Bajo tales circunstancias es superfluo votar, y el establecer en la
mente del pueblo la noción de que es él quien hace las leyes es
contribuir a fortalecer las estrías opresoras del contralor social….Así,
la única ventaja que la elección tiene es la oportunidad educativa que
ofrece al pueblo, cuya atención se despierta más entonces. Pero en la
mayoría de los casos tal oportunidad queda anulada por el
ocultamiento astuto de los verdaderos temas espinosos, ya que valdría
bien poco el político que no supiera inventar alguna salida atrayente
y huera que absorbiera la atención del pueblo inculto apartándole de
los problemas verdaderamente interesantes….Un buen escaparate
venderá toda clase de imposturas políticas. Las elecciones vienen a
ser concursos de fraudes y trapacerías y como los argumentos buenos
hacen poco ruido, la verdad se pierde en medio de confusiones.” (op.
cit.)

“Sin embargo, supongamos que hemos votado. La elección


terminó , sube la bolsa y los diputados y senadores elegidos van a
Washington (varios meses después) para formar el Congreso, el
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Parlamento o Bolsa de las palabras, el mentidero oficial. Nada más


desconcertante que las sorpresas que aguardan a estas damas y
caballeros elegidos: una de ellas que, cuando los hombres se juntan
en asambleas, sus orejas se hacen inmediatamente más largas. Han
sido elegidos por lo que en Norteamérica se denomina capacidad
política, o sea, la habilidad para proponerse, proclamarse, aplaudirse
y elegirse a sí mismos, y poseen esa habilidad en forma muy
especializada y desarrollada. Normalmente son gente servicial,
sumisos a la disciplina partidaria, elásticos de conciencia y muy
alejados de las peligrosas originalidades de los genios, pues nada les
descalificaría tan pronto para ocupar cargos públicos…Por lo que se
ve claramente que tienen más probabilidades de llegar a los altos
puestos si logran una reputación permanente de mediocridad.” (op.
cit)

“Pero ahora nuestro representante se ve asaltado por problemas


totalmente distintos de los que ha tenido que resolver para llegar al
poder. Estos eran problemas de política: de lealtad paciente a los jefes
de barrio, de distrito y de región; de influencias subrepticias y
entendimientos secretos; de discursos y acusaciones y negaciones y
publicidad manipulada; de subvenciones solicitadas disimuladamente
y gastadas mirando de reojo a la ley; de favores hechos a los
poderosos y de promesas para los demás. En cambio ahora, los
problemas que le acosan en Washington, y que le abruman con mil
fórmulas, son problemas de economía que tienen mucho que ver con
el derecho de propiedad, las materias primas, las minas de carbón, los
pozos de petróleo, la energía hidroeléctrica, la producción, la
competencia, el transporte, la navegación, la aviación, los arbitrajes,
la distribución, los mercados y las finanzas; tienen estos problemas
detalles esotéricos que solo entienden los especialistas y que
difícilmente soporta un hombre cuya única especialidad es la intriga
política. Nuestro representante se refugia entonces en su partido y
vota tal como allí le digan.” (op. Cit)
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Seguidamente Will Durant, se formuló, hacia 1930, una


pregunta clave: “¿Es por esto por lo que recomendamos tan
insistentemente la democracia a nuestros enemigos? Hoy podríamos
responderle: ¿Acaso hay algo más fácil para manipular para quienes
también manejan el dinero, cuando en realidad, bajo el disfraz de
democracia, solo hay una plutocracia o, en otros casos, una
partidocracia demagógica?

Recuperación de la Democracia
Sin embargo, mas adelante, en párrafos que lo evidencian no
como detractor, sino como defensor de la DEMOCRACIA, pero de
la buena y con mayúsculas, agregó:

“Los políticos profesionales son más que nunca nuestros


amos. Después de cincuenta años de forcejeo han derrotado por fin
a su enemigo, el reformador. La mediocridad ha vencido. La
inteligencia ha huido en todas partes de las tribunas de la democracia,
como de remolinos peligrosísimos. Los ignorantes han ensillado a la
humanidad y cabalgan sobre ella”. El enemigo del Reformador es el
político profesional
…..
“La democracia sin educación significa hipocresía sin
limitación; significa la degradación de la ciencia del Estado a mera
política; significa el mantenimiento costoso, además de las clases
verdaderamente dirigentes, de unas numerosísima clase parásita de
políticos cuya función es servir a los que rigen y engañar a los regidos,
y ha hecho de la vida pública una charca de corrupción que envenena
el hálito de los cielos.” La democracia sin educación es hipocresía

“La última etapa de ella es el poder de los bandidos. Los


delincuentes florecen cómodamente en nuestras grandes ciudades
porque cuentan con la protección plena y la cooperación de la ley. Si
pertenecen a la “organización política” o tienen amigos importantes
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en ella, cuentan con la seguridad de que, si cometen algún crimen, no


serán detenidos; que, si lo fueren, no serán condenados: Que, si fueren
condenados, no irán a la cárcel; que, si llegaran a ir, serán indultados
y que, si no lo fueren, se les facilitará la fuga. Si murieran en el
ejercicio de su profesión, se les enterrará con la pompa y ceremonia
debidas a los miembros de las clases dirigentes y se erigirán en su
honor lápidas conmemorativas. Esto es dejar a la democracia en
cueros. Una Corporación de Políticos implica impunidad
Seremos tenidos por cobardes si seguimos disimulando más
tiempo este triste despertar de nuestros anhelosos sueños. Si no
podemos hallar algún remedio que purgue a la democracia de sus
vilezas y que la libere de su ignorancia, debemos ceder nuestra
Constitución a alguna nación más joven e importar un rey” (Will
Durant – Filosofía Cultura y Vida)

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