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MEDITANDO LA ROSA EN LA CRUZ

Extractado del texto “LA CIENCIA OCULTA” de Rudolf Steiner, Edit. RUDOLF
STEINER, S. A. tercera Edición. Madrid, España; Capitulo V; “El Conocimiento de
los Mundos Superiores (De la Iniciación)”. Pág. 282 y Sgts.

Mientras que en la vida ordinaria las energías del alma se hallan repartidas en
muchas direcciones, y las representaciones (las imágenes mentales y
conceptos asociados a los estímulos percibidos por los 5 sentidos) se suceden
con rapidez, en la disciplina espiritual, lo que importa es la concentración de
toda la vida anímica en un sola representación situada voluntariamente en el
centro de la conciencia. (Las mejores representaciones para este fin son las
Simbólicas bien determinadas, capaces por su esencia de despertar las
facultades ocultas del alma).

Las representaciones Simbólicas son más apropiadas que las que reproducen
objetos o hechos exteriores, por la razón de que estos descansan en el mundo
exterior, y por lo tanto, al lama le resulta menos necesario apoyarse solamente
en si misma que en las representaciones simbólicas creadas por la propia
energía anímica. Lo importante no es lo representado como tal, sino el que se
libere lo anímico de toda muleta física, mediante el proceso de la
representación.

Paso 1:- Para empezar construyamos en el alma (visualicemos) alguna


representación, imaginemos una planta, veamos como sus raíces parten por
debajo de la superficie del suelo, en la medida que la planta crece estas se
expanden hacia las profundidades de la tierra. A la par consideremos como se
desarrolla hacia los cielos, hoja por hoja, hasta su plena floración. Así la planta
obedece a leyes puras de crecimiento, de hoja en hoja, sin pasión ni vanidad
alguna, abre su flor a los castos rayos del sol.

Paso 2:- Imaginemos ahora Un hombre, y demos vida al pensamiento de que


el hombre posee al igual que la planta, esa capacidad de crecimiento y vitalidad
natural, mas sus cualidades y facultades parecieran ser aun mas perfectas que
las de la planta, así, el hombre además de la vitalidad pura que comparte con
la planta, puede moverse de un sitio a otro de acuerdo con sus sentimientos y
su voluntad, mientras que la planta esta arraigada al suelo.

Paso 3:- Luego consideremos que mientras la planta mantiene esa pureza e
inocencia que la conecta con las energía del universo, su evolución esta algo
mas restringida ya que su libre albedrío parece ser mucho menor que el del
hombre, luego este por su parte es capaz de cierta perfección que le permite
adaptar su conducta en pos de sus deseos y aspiraciones pudiendo satisfacer
en mayor grado sus anhelos, pero esta misma característica instintiva, apetitiva
y pasional es la que le encamina hacia extravíos y le lleva a cometer abusos
contra si mismo y contra toda otra forma de vida.

Paso 4:- Por su parte esa vitalidad que es característica de ambos es


transmitida por un especial fluido que en el caso de la planta es la sabia verde
que circula por el tallo y las hojas, la cual es a su vez el vehiculo de esa fuerza
vital pura que impulsa su crecimiento, mientras que en el hombre este fluido es
la sangre roja, vehículo a su vez de los instintos apetitos y pasiones.

Paso 5:- Ahora, esas facultades anímicas del hombre le permiten en base al
uso de su voluntad purificar su ser, eliminando gradualmente el influjo de su
aspecto pasional, con lo que su voluntad se ve transmutada en un poder nuevo
mas poderoso y elevado que los animales instintos de antaño. Ese nuevo
poder recibe la triple denominación de Fe, Esperanza y Caridad.

Paso 6:- Ahora visualicemos una rosa roja de fuerte y vigoroso tallo con hojas
verdes frescas y fragantes. El verde nos recuerda la vitalidad pura y casta de la
planta y el rojo de la rosa nos muestra la sangre del hombre que ha
transmutado sus apetitos e instintos animalescos en voluntad pura, puesta al
servicio de las elevadas y castas leyes del crecimiento y evolución que dan
vida al universo entero.

Paso 7:- Por todo esto, la Rosa será para nosotros el símbolo de la sangre en
que se expresan instintos y pasiones sublimadas y purificadas de todo lo bajo y
que son aun mas fuertes que la sabia de la planta que aun no ha
experimentado la Pasión Cristica. Experimentamos en este orden de ideas no
solo una comprensión intelectual de las mismas, si no que nos concentramos
en su vivencia interior sintiendo con toda la intensidad que nos sea posible
concebir, el bienestar y plenitud que vienen de esa vitalidad de la sabia pura y
ajena a todo egoísmo, pero que ha a su vez incrementado de manera infinita
su fuerza por la adición de la voluntad purificada en el rojo de la rosa. Poder
que nos pone ante el umbral de vivencias interiores puras y sublimes. Es lo que
en cabalah se llama “La visión de la armonía de las cosas” por que hemos
trascendido toda angustia y ansiedad proveniente de nuestro aspecto
animalésco y egoísta.

Paso 8:- Después de haber pasado por este proceso de reflexiones y


sentimientos las concentraremos toda esa energía anímica en el siguiente
símbolo el cual será la síntesis de todo lo hasta aquí dicho. Imaginemos una
Cruz Negra, representativa de la personalidad inferior o alma animal en estado
de pasiva contemplación, es el sacrifico de la bestia interna, es el símbolo de
las pasiones e instintos egoístas aquietados y serenos. En el vértice interior
formado por la intersección de los dos brazos, vemos una frondosa brillante
húmeda y luminosa rosa roja, la cual a su vez es símbolo del la sangre que
cual torrente vital nos inunda de energía y vitalidad cristalina potente y pura, en
ella los instintos y pasiones han sido transformados en altruismo, fe
inquebrantable y Altas Aspiraciones.

Paso 9:- Cada vez que visualicemos este símbolo se evocara en el interior del
alma una representación recordativa cargada de toda la energía y sensaciones
de plenitud y vitalidad intensa. Durante su contemplación concertaremos
nuestra atención en dichas sensaciones intentando mantenerlas intensamente
activas por todo el tiempo que nos sea posible y alejando cualquier imagen o
pensamiento ajeno a las ideas ya antes descritas. Esta experiencia interior esta
diseñada para despertar los poderes ocultos del alma de quien se entregue a
ella en intensa concentración interior. Por ultimo cada vez que se evoque esta
imagen como fuente de energía e inspiración mediante una practica
contemplativa como la descrita, ya no será necesario proceder a la
consideración de las ideas preparatorias expresadas en los puntos del uno al
siete inclusiva, bastando dejar flotar la mirada interior con la mayor nitidez e
intensidad posible en el símbolo, dejando a la vez dejar resonar las
Sensaciones Abstractas antes aludidas de manera que inunden con su energía
todo nuestro ser.

Por último y más allá de la práctica contemplativa misma, el recuerdo de esta


imagen nos servirá para evocar los poderes internos que hayamos ido
desarrollando con la practica cada vez que necesitemos un especial influjo de
energía, para enfrentar una determinada situación. Para lo cual si será bueno
recordar las ideas y pensamientos mas significativos contenidos en el símbolo
antes descrito.

NOTAS:

1. Para quien desee ampliar su investigaciones sobre las técnicas de


construcciones de representaciones simbólicas y sus usos y propósitos
iniciáticos, recomendamos en primer término, la lectura razonada de la obra
“LA CIENCIA OCULTA” de Rudolf Steiner, especialmente el Capitulo V; “El
Conocimiento de los Mundos Superiores (De la Iniciación)”. Y en lo
particular a esta practica Pág. 282 a la 359, y para una más amplia
comprensión recomendamos así mismo la lectura de su obra “La Iniciación”
o “El conocimiento de los mundos Superiores.”
2. Las mismas ideas contenidas en el Capitulo V; “El Conocimiento de los
Mundos Superiores (De la Iniciación)” ya tantas veces citados, son una gran
ayuda para comprender la doctrina oculta y las técnicas de construcción y
magnetización psíquica de gran parte de los símbolos iniciaticos propios de
las mas diversas tradiciones, entre las cuales no podemos dejar de destacar
a la Orden Rosacruz, La Masonería y, en General; las Grandes Escuelas de
Misterios de Todos los tiempos.

Frater R.·.+ .·. Jehoshua Ben El

¡PAX BOVIS!
¡QUE LA PAZ SEA CON VOSOTROS¡

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