PERONISMO

El peronismo produjo un gran cambio en la vida social, política y económica del país, caracterizado por sus
ideales de soberanía política, independencia económica y justicia social, busca una educación integral que
permita la formación intelectual, física y moral de los alumnos, capacitando para el trabajo y la
militarización, fomentando una formación atlética y deportiva, enseñando religión, tradiciones populares,
prácticas y rituales patrióticos e incentivando la adhesión al régimen peronista.

Dentro de las políticas educativas desarrolladas, impulsó la democratización y popularización del sistema
educativo, intentando hacer masiva la asistencia de argentinos en las escuelas, teniendo como principal
objetivo moldear a las nuevas generaciones y erradicar el analfabetismo del país, para esto dio a conocer
las “verdades” peronistas, buscando una unanimidad a través del apoyo de los trabajadores, el carisma de
los líderes, recortando la libertad política y de expresión y censurando los disentimientos, utilizando a las
escuelas para enaltecer su imagen positiva como la única y mejor alternativa política para progresar como
país y redactando nuevos programas educativos, se impusieron celebraciones propias del partido
justicialista y libros de lectura obligatoria y oficial, entre ellos, el libro “La razón de mi vida” de Eva Perón.
Esto permitió expandir la matricula educativa ya que se impulsó el acceso popular a la educación,
principalmente a los estudios del nivel universitario, suprimiendo los aranceles en la educación. Además se
crearon escuelas de formación profesional y técnicas en las que los alumnos estudiaban y aprendían
oficios, se desarrollaron organizaciones gremiales de trabajadores y movimientos estudiantiles secundarios
que dieron lugar a la formación de centros de estudiantes dentro de las escuelas.

Bajo el lema “Los niños y la juventud son los únicos privilegiados en la Nueva Argentina”, el peronismo deja
implícita la idea de otorgar a la infancia una atención preferencial en lo material y simbólico, estableciendo
una relación directa con niños y jóvenes. De esta forma, el movimiento peronista llevó a cabo una
politización de la infancia, principalmente a través del sistema educativo y la Fundación Eva Perón, la cual
entregaba regalos y organizaba campeonatos de futbol y excursiones, caracterizados por la exaltación del
orgullo peronista y la propaganda partidaria. Además, el peronismo construyó nuevas escuelas y aulas,
constituyó el Ministerio de Educación, otorgó becas y promovió la creación de comedores escolares y de
hogares escuela que brindaban contención a niños huérfanos o provenientes de familias de pocos recursos
para garantizar la educación integral de los mismos.

Por otra parte, para evitar los disensos ejerció el control sobre el sistema educativo y sobre los diversos
medios de comunicación, intentando unificar a todo el pueblo bajo sus convicciones y su ideología
justicialista.