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En la Antigüedad
Es imposible saber cual es la fecha exacta del origen del comercio, ya que el acto de
intercambiar cosas (trueque) se remonta a los tiempos bíblicos, debido a que los
primeros hombres debieron de agruparse para poder combatir a las fieras, además no
tenían la capacidad de abastecerse por si mismos para suplir todas sus necesidades, es
así como comenzaron a concentrarse en familias y tribus para poder comercializar entre
sí, intercambiando los resultados de los trabajos de cada uno. Luego varias personas se
dedicaron de manera exclusiva al intercambio de especies, dando lugar a la profesión de
mercaderes, varios pueblos antiguos comenzaron a comercializar unos con otros,
instaurando así un espíritu mercantil que luego pasó a ser una necesidad indeclinable.
Dentro de estos pueblos cabe mencionar, por su destacada participación: India, Egipto,
Fenicia, Cartago, Grecia y Roma.
En la Edad Media
Con la desaparición del Imperio Romano el mundo sufrió profundos cambios, las causas
que provocaron estas transformaciones fueron principalmente la invasión de los
bárbaros, la expansión del cristianismo, la creación del feudalismo, el sistema
municipal y el influjo de las cruzadas.
Los bárbaros acogieron de mayor y mejor manera las enseñanzas del cristianismo
dejando de lado su fiereza, ignorancia y brutalidad y dando paso a la civilización y al
desarrollo de las artes, las ciencias, la industria y el comercio. Las doctrinas cristianas
permitieron, a través de sus enseñanzas, reactivar la industria y aumentar el comercio
alrededor de los monasterios, iglesias o fiestas religiosas, asimismo los monjes en sus
peregrinaciones crearon nuevas rutas para el tráfico y el comercio.
Si bien el feudalismo influyó de manera negativa en un comienzo, pues el comercio se
limitaba a la propiedad feudal, luego provocó en los vasallos un sentimiento de
indignación y la aspiración de obtener libertad, consiguiendo la emancipación se abolió
el servilismo y propagó el tráfico comercial y la cultura en general.
Los monarcas luego de ver disminuido su poder en manos de los señores feudales
crearon el Sistema Municipal, estos asociados a los vasallos se pronunciaron en contra
de la tiranía de los feudos, este sistema aseguró una nueva forma de organización
asegurando la libertad en todos los aspectos, basados principalmente en las culturas
antiguas.
El comercio internacional tuvo un auge considerable gracias a las Cruzadas, aunque
estas no consiguieron su objetivos permitieron abrir caminos y transacciones con
pueblos lejanos, en especial con las culturas asiáticas. Muchos nobles debieron vender a
los vasallos sus propiedades para poder conseguir más fondos e ir a la guerra, esto
colocó en circulación la propiedad territorial y desarrolló la producción de la industria
agrícola.
Los pueblos más importantes de este período son: las Repúblicas Itálicas (Venecia,
Génova, Pisa y Florencia), las Ciudades Anseáticas o de Hansa (Lübeck, Hamburgo,
Brujas de Flandes, Rostock, Wismar, Bremen y Danzig), Marsella y la plaza y el puerto
de Barcelona.
El la Edad Moderna
Este período marca un impulso en el comercio, gracias a los grandes cambios culturales,
institucionales y legales, esto a partir del descubrimiento de América y al finalizar por la
Revolución Francesa.
Los cambios en el modo de ser de los pueblos se relacionaron a la conquista de
América, el descubrimiento de la India, la aparición del protestantismo y la creación de
grandes Estados.
Uno de los hechos que da comienzo a la Edad Moderna es el descubrimiento y
conquista de América, este afectó de manera significativa la industria y el comercio con
la adquisición de materias primas de tierras desconocidas, con las posibilidades que
ofrecían los nuevos mercados trasatlánticos, el aumento en flotas marítimas que se
necesitaban para mantener la comunicación con las tierras colonizadas y la riqueza que
obtuvieron los colonos a través de las expediciones, esta generó una circulación
monetaria de valores considerable.
El descubrimiento de la India, al igual que el de América, abrió nuevos caminos a
tierras y culturas desconocidas, aumentó la navegación y el comercio de Europa, estos
viajaban a India a proveerse de muchos y variados artículos (oro, plata, resinas marfil,
rubíes, miel, esclavos negros, etc.), lo que permitió incrementar la actividad de
transacción (comprar en India y vender en Europa).
Otro gran hecho que afectó la economía en esa época fue la aparición de
Protestantismo, esta fue impulsada por el alemán Martín Lutero alrededor del siglo
XVI, Lutero horrorizado de observar la corrupción y los abusos católicos decidió
combatir y protestar en contra sus dogmas. Esta revolución provocó sangrientas guerras
y como consecuencia quedaron tierras abandonadas, fábricas destruidas, transacciones
cortadas, monedas ocultas, caminos y navegaciones peligrosas en desmedro de la
agricultura, la industria y el comercio.
Luego del Sistema Municipal la Época Moderna dio lugar al comienzo de Grandes
Estados, esta fue lenta y laboriosa, al tener una administración centralizada los pueblos
pasaron de tener un pensamiento e iniciativa particular a una nacional y los intereses
individuales a intereses colectivos. Los principales pueblos comerciales de la época
fueron Inglaterra, Francia, Holanda, Portugal y España
Por muchos años el comercio de Inglaterra estuvo dominado por los extranjeros,
especialmente por los Anseáticos, pero en este período se inició el carácter mercantil y
navegante de los ingleses, en 1497 Cabot conquistó las regiones de América del Norte,
usándola como base para expediciones a la conquista de otras colonias. A través de la
riqueza de las tierras colonizadas los ingleses tomaron una preponderancia mercantil a
nivel mundial, al proclamarse como república Carlos II instauraró una serie de actas
nacionalistas, principalmente sobre la soberanía marítima y la limitación de barcos
extranjeros en sus puertos, que ayudaron a que el comercio inglés se desarrollara de
manera impresionante, llegando a ser un gran depósito de mercancías y obteniendo un
poderío sin igual en el mar. Sus principales errores se debieron al abuso hacia los
súbitos de la India y los impuestos en América el Norte.
Perteneciente de extensas costas, canales, ríos, buenos caminos y tierras Francia poseía
todo lo necesario para ser una nación comercial, navegante e industrial, pero su
desarrollo no fue muy exitoso y su progreso lento, debieron pasar dos dinastías
(Merovingeos y Carlovingeos) para que a la tercera (Carlovingeos) hubiera avances, de
la mano de Carlomagno la industria tuvo desarrollo sobre todo en la producción de sal,
vino, aceite, sombreros, tejidos y papeles, además del aumento del comercio en las
ferias de las ciudades francesas. Después de Carlomagno la monarquía no tuvo la
facultad de prever, ni apoyar con actas legales la industria o el comercio marítimo, más
bien lo limitaron, hasta la llegada del rey Enrique IV, en su reinado se fomento la
agricultura, ganadería y la minería, con la muerte de este casi no hubo comercio por las
luchas con los protestantes y la piratería. Con la proclamación de Luis XIV, a través del
ministro Colvert, se suscitaron una serie de reformas económicas que favorecieron su
flota naval, su expansión colonial, la industria fabril y el comercio, esta administración
encontró su termino con la legislación que prohibía la exportación de cereales,
menguando la agricultura, produciendo hambruna, desprestigio y guerra. Los siguientes
monarcas no fueron capaces de sacar adelante la economía ni al pueblo de Francia, Luis
XVI fue guillotinado a comienzos de la Revolución francesa, trayendo consigo reformas
legislativas y económicas más modernas.
Otra cultura con entorno favorable y buen clima era España, su ubicación a la entrada
del Mediterráneo era propicia para el desarrollo de su comercio marítimo, su
exacerbación caballeresca y su fanatismo religioso le ayudó a establecer y ampliar
colonias, alcanzó su mayor prosperidad gracias a su política y su gran acopio territorial,
esto se percibe en la grandeza e importancia del comercio entre España y sus colonias.
Su administración en un comienzo fue muy vaga y débil lo que estimuló el robo de
mercancías y la evasión de impuestos. Carlos I promulgó una serie de leyes para tratar
de solucionar estos errores, sin embargo no fueron suficientes para controlar la
situación. En 1776 Carlos III organizó las colonias en cuatro Virreinatos y ocho
Capitanías, esta organización y el mayor control en el comercio marítimo atenuó los
robos y fraudes, este control llevó a que se desarrollara de manera ingeniosa el
contrabando y las coimas. La decadencia de este gran cultura colonizadores se debió a
la inoperancia y poca inteligencia de sus gobernantes reflejada principalmente en
fanatismo e intolerancia religiosa que creó la Santa Inquisición, a través del destierro o
la emigración muchos extranjeros se marcharon lo que arruinó al país, además perdieron
muchas de sus colonias e instauraron reglas que impidieron que su economía
mantuviera su estatus. Gracias a la administración de la dinastía de los Borbón la
economía española mejoró impulsando la agricultura, el tráfico, las ciencias, la cultura y
el arte, pero nunca volvió a ser la gran potencia mundial de antaño.
En la Edad Contemporánea
Iniciada gracias a la Revolución Francesa y extendida hasta el día de hoy, este período
es el de mayor progreso en el comercio, la industria, las artes, las ciencias y las
instituciones políticas, sociales jurídicas y económicas y logró desarrollar el libre
comercio y hacer del mundo un gran mercado derribando las barreras proteccionistas de
antaño.
Los hechos que han forjado estos adelantos son: la Revolución Francesa, las Guerras de
Napoleón, la Liberación de América, los progresos científicos y la Primera y Segunda
Guerra Mundial.
Los países que más han destacado en este período son Inglaterra, Alemania, Francia y
Estados Unidos.
En Chile
Desde que los españoles llegaron a estas tierras es que se tiene conocimiento del
comercio en Chile, ya que los colonos, en este caso Pedro de Valdivia, firmaban
contratos con socios para su empresa colonizadora. En esta época el comercio fue
escaso y de forma natural, compuesto por pocas monedas de oro y plata y metales
preciosos, esto debido al monopolio comercial existente con la metrópolis (España) y a
la exigua cantidad de población urbana, pues la gran mayoría vivía en haciendas en
zonas rurales. Luego de dos siglos España permitió el tráfico comercial con otras
culturas, provocando una gran afluencia de productos y una saturación del mercado.
En la Independencia finalmente tuvo una apertura comercial, bajo la premisa del
comercio libre la Primera Junta de Gobierno permitió que el tráfico se realizara con
cualquier país. La economía en el siglo XIX tuvo un desarrollo impresionante gracias a
la explotación y exportación del cobre, trigo y salitre, siendo este último el más
importante y el de mayor utilidad comercial. La explotación de este fertilizante estimuló
la agricultura para poder proveer de alimento a la gran cantidad de obreros dedicados a
este oficio y reactivó el comercio y la navegación interna del país, destacando por sobre
los otros puertos Valparaíso. Hasta ese momento no había dinero circulante en el país, se
comercializaba a través de la plata, el oro, los vales de Tesorería y de algunas pequeñas
tiendas, hasta 1860 que se dictó la Ley de Bancos, permitiendo a estos emitir billetes
convertibles, aumentando la masa monetaria chilena. Este incremento en la economía se
vio reflejado en la organización de las empresas, estas pasaron de ser personales a
sociales a través de vínculos personales y empleados de distintas categorías, fueron en
este aspecto muy importante los extranjeros, que con condiciones modestas, lograron
crear sus negocios debido a sus conexiones con sus países de origen, su dedicación y su
experiencia. La urbanización de la población, una economía neoliberal instaurada por el
régimen militar y los actuales tratados de Libre Comercio firmados con distintos países
del mundo han permitido que el comercio se desarrollara de manera significativa,
desplazando a la exportación minera como eje económico nacional, actualmente provee
de empleo aproximadamente al 18 % (Retail en Chile CCS) de la fuerza laboral.
Debido a los cambios nacionales e internacionales, la globalización, la gran cantidad de
productos y las exigencias de los nuevos consumidores es que nace, adoptado del
extranjero, el fenómeno del Retail en Chile.