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PECES ÓSEOS

INTRODUCCIÓN
Hace unos 430 millones de años fue cuando aparecieron los peces, que fueron
los primeros vertebrados que poblaron aquellos mares primitivos. Los primeros
peces aparecieron pues en el Silúrico, hace unos 438 millones de años. Eran
seres marinos sin mandíbula: los Agnatos, precursores de las actuales lampreas
y mixinos.
Los peces tienen el cuerpo dividido en cabeza, tronco y cola. El cuerpo está
recorrido en su interior por un eje esquelético dorsal formado por huesos cortos
llamado columna vertebral. El cuerpo está comprimido lateralmente y de esta
manera ofrece una resistencia mínima al desplazarse por el agua.
La piel está recubierta por escamas imbricadas como las tejas. En la cabeza se
encuentran los opérculos, que cierran las cámaras branquiales donde se
encuentran las branquias. El tronco encierra las vísceras y llega hasta la papila
anal. A los lados está la línea lateral. Presenta aletas pectorales y abdominales
(pares), dorsal, anal y caudal (impares).
El objetivo de esta práctica de laboratorio es lograr comprender el
funcionamiento de un pez óseo y además conocer todos los órganos que
necesita para sobrevivir bajo el agua.
También, adquiriremos conocimientos acerca de la función de los órganos de los
peces y como son en sí (características morfológicas).

MATERIAL Y MÉTODOS
 Set de disepcion
 Bisturí
 Bandejas
 Un ejemplar muerto de pez Bonito (Sarda sp)
RESULTADOS
Para esta práctica utilizamos un pez de nombre común “Bonito”, cuya
clasificación taxonómica es:
Reino: Animalia
Filo: Chordata
Clase: Actinopterygii
Orden: Perciformes
Familia: Scombridae
Género: Sarda
Cuya descripción resalta: Pertenece al grupo de peces poseedores de aletas
dorsales casi fundidas entre sí, o separadas a lo sumo por angostos
interespacios. Tiene todo el cuerpo con escamas, con el área pectoral y lateral
más grandes que el resto. Los Bonitos (peces del género Sarda) difieren del atún
por sus cuerpos más afinados, desdentados, y por coloraciones diferentes.
El bonito del Atlántico comparte las aguas con su pariente bonito rayado, Sarda
orientalis. El bonito rayado abunda más al norte (Isla Block). Son similares en
sus hábitos, pero el último es algo más pequeño. El bonito del Atlántico se
distingue de sus parientes por una raya negra oblicua en su dorso, y porque sus
maxilares sólo cubren la mitad del largo de su cabeza. Crece hasta 80 cm y pesa
4,5 a 5,5 kg.

Aletas, constituidas por lóbulos o expansiones cutáneas que se extienden sobre


una armadura o esqueleto representado por radios, que pueden ser rígidos o
flexibles, articulado en su base y capaces de moverse mediante la acción
muscular (Carmen Bautista, 1988). Las aletas se clasifican en: anales, dorsales
y caudal (aletas impares), que son utilizadas para la propulsión; las otras aletas
son: las torácicas o pectorales y las abdominales.

Las branquias son los órganos respiratorios, que se encuentran ubicados en


cada una de las zonas laterales del cuerpo y que se encuentra cubierto por el
opérculo, pero en algunas especies como tiburones, rayas y lampreas se
encuentran expuestas. “Estos opérculos, constituidos por finas placas óseas,
tienen móvil el borde inferior y posterior, permitiendo con su movimiento la
expulsión del agua que penetra por a boca” (Carmen Bautista, 1988).
La piel, está provista por glándulas que secretan ciertas sustancias que sirven
de protección y lubricación. Su principal característica es que está cubierta por

escamas óseas. “Algunos de sus representantes carecen de escamas o bien su

presencia está reducida a ciertas zonas o presentan dentículos dérmicos (rayas


y tiburones)” (Carmen Bautista, 1988).

El esqueleto, puede ser óseo o cartilaginoso. “Está constituido por piezas


craneales, vertebrales o axiales, y apendiculares o de las aletas. Este último está
articulado con el esqueleto vertebral, y en el caso de las aletas pares, a través
de las cinturas torácicas o pelvianas” (Carmen Bautista, 1988). Internamente se
estructuran de la siguiente forma: El aparato digestivo, inicia por la boca provista
de dientes, seguida por una faringe o esófago que da paso al estómago, seguido
por la porción intestinal. Todos estos órganos digestivos varían en su forma,
longitud y características, según su hábito alimenticio, es decir, herbívoro,
carnívoro u omnívoro. La mayoría de los peces, a excepción de las lampreas,
tiburones, rayas y peces planos y caballa, presentan un divertículo del digestivo
denominado vejiga natatoria (Carmen Bautista, 1988). Esta vejiga actúa como
estabilizador para permitir y regular la flotación y el ascenso y descenso.

El sistema circulatorio es cerrado y está conformado por un corazón el cual


bombea la sangre a través de las arterias hasta llegar a las branquias, lugar en
el que se oxigena la sangre. “La sangre contiene glóbulos rojos y leucocitos,
conteniendo hemoglobina como pigmento respiratorio” (Carmen Bautista, 1988).

Los órganos sensoriales se desarrollan de manera diferente, menos la línea


lateral. “Esta zona sensorial consiste en una serie de estructuras sensoriales
dispuestas en una fila de escamas a cada lado del cuerpo y que parecen
relacionadas con el sentido de la dirección, permitiendo a los peces conocer la
emisión de las ondas del choque (o eco) producido por el agua por la presencia
de otros animales u objetos” (Carmen Bautista, 1988).
Vejiga
Hígado Natatoria

Páncrea
s
Corazón

Estómago
CONCLUSIÓN
La observación de los órganos internos de un pez puede decirnos mucho acerca
de su madurez y estilo de vida. Posteriormente estas observaciones pueden
inferirse a otros datos de su hábitat para sacar conclusiones sobre la ecología
de una especie. Al no observar deshechos en su intestino podemos deducir que
en el momento y lugar donde se encontraba, era escasamente alimentado y que
mantenía sus actividades metabólicas con las reservas de grasas que se
encontraron adheridas a los ciegos pilóricos (que ocupaban gran parte del
espacio toráxico interno), estómago e intestino.

BIBLIOGRAFÍA
Carmen Bautista.1988. Peces marinos tecnología de cultivo. Ediciones Mundi-
prensa. Madrid. Pág. 17-23.

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