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Los tratamientos superficiales de los metales son procedimientos para mejorar determinadas
características de la superficie de las piezas terminadas, Dependiendo del tipo de material a ser
tratado, los tratamientos superficiales sirven para: Aumentar la dureza de una superficie para
que sea más resistente al desgaste o rayado; Aumentar la fricción de una superficie como en los
frenos; Disminuir la fricción de una superficie como en los cojinetes; El aislamiento para evitar
un arco eléctrico, el contacto con la atmósfera y elementos climáticos; Mejora de la retención
de lubricantes en la superficie; Aumentar la resistencia mecánica; La reconstrucción de piezas;
Obtener características decorativas, etc.
- TRATAMIENTOS MECÁNICOS
- TRATAMIENTO TÉRMICO
Consiste en calentar únicamente la superficie de una pieza de acero mediante inducción o con
soplete, para después enfriar rápidamente y así producir un temple únicamente en la superficie.
- TRATAMIENTOS TERMOQUÍMICOS
- Pinturas industriales: Uno de los tratamientos más utilizado en la industria, pudiendo incluso
sustituir muchos de los anteriores si las necesidades no son de elevadas exigencias.
Existen un sinfín de variedades y aplicaciones para cualquier tipo de superficies dotándolas con
diversas características Como ejemplo el uso de: Esmalte sintético de alto contenido en sólidos,
tiene excelente resistencia a la intemperie y al amarilleo; Esmalte resistente al calor, Esmalte
Ignifugo, Pintura epoxi.
- Temple: se trata del rápido enfriamiento de una pieza previamente calentada, consiguiendo
así modificar las propiedades de los materiales.
- Maduración: seguido del temple y revenido, la maduración natural o artificial trata del
cambio en la estructura del material pasado un período de tiempo.
- Nitruración en horno: Este proceso modifica la composición de las superficies con altas
temperaturas y químicos que aportan nitrógeno a la superficie. Se aplican a piezas sometidas a
grandes fuerzas de rozamiento como engranajes, rodamientos, camisas de cilindros, árboles
de leva, etc.
- Borización: Es un tratamiento por inmersión en metal fundido por encima de los 600ºC para
conseguir una capa de boruro de hierro. Se aplica normalmente en aceros con el
inconveniente de que las piezas pueden sufrir deformaciones. Se suele aplicar en herramientas
y piezas que necesiten una superficie que soportarán cargas elevadas, pero su uso será
prácticamente estático.
- Sherardización o galvanizado: Proceso que reviste una pieza metálica con cinc. Se realiza por
procedimientos electrolíticos, por cementación o bien por baño en metal fundido. Su
aplicación está pensada para metales que estarán expuestos a la intemperie consiguiendo una
superficie que protege los metales de la corrosión.
- Depósitos por inmersión en metal fundido: Este tipo de tratamiento usa calor para fundir el
material a ser depositado, con un intercambio de electrones de forma natural debido a la
reacción química entre ambos materiales.
- Depósitos electrolíticos: Este tipo de tratamiento utiliza la electricidad para transportar los
sedimentos en depósitos con sustancias en estado líquido. Utiliza el intercambio de electrones
entre el ánodo (+) y cátodo (-).
- Depósitos químicos: Este tipo de tratamiento utiliza reacciones químicas para la deposición
de sedimentos en depósitos con sustancias en estado líquido. Existe un intercambio de
electrones debido a la reacción química entre las sustancias empleadas.
- Deposición física en fase vapor: Es un proceso similar a la deposición química, pero en este
caso es puramente física empleando un bombardeo de plasma (arco eléctrico impulsado por
chorro de aire). Muy utilizado en la industria de semiconductores, en herramientas de corte
para el metal y en la creación de diamantes sintéticos.
- Cromatación: Tratamiento químico distinto al cromado. Forma una capa protectora de metal
y óxido de cromo en metales siendo muy resistente a la corrosión. Se aplica en la industria
automovilística, calderas, torres de enfriamiento, etc.
- Sulfuración electrolítica: Proceso electroquímico usado para crear una película resistente en
piezas metálicas. Se emplea en piezas que sufrirán fricción entre ellas y no necesariamente
estarán lubricadas.
- Chapado: Consiste en cubrir un material con otro de aleación metálica pudiendo ser precioso
o no, siendo aplicados en estado sólido en forma de partículas muy pequeñas. Muy utilizado
en la industria de bisutería.
- Rociado térmico: Se trata del metalizado de una pieza con una proyección térmica con llama
de oxicombustible que funde el metal a ser depositado (polvo o hilo) sobre la superficie a ser
tratada.
- Electroformado: es una galvanoplastia mediante una solución acuosa compuesta por sales
metálicas, las partículas se transfieren desde un ánodo (+) a un cátodo (-).
- Recargue por soldadura: Se trata de reconstruir una pieza por soldadura rellenando el área
perdida. Con un mecanizado se recupera la forma que tenía en su día. La deposición se hace
precalentando la zona a ser reconstruida antes de empezar a aplicar los cordones de
soldadura.
- Impacto con láser: se puede decir que es la versión moderna del granallado con la ventaja de
actuar sobre áreas más pequeñas o sobre geometrías complejas.
- Encerado