Vous êtes sur la page 1sur 40

JOAQUÍN M.

SÁNCHEZ MACIAS, mccj

LA MISIÓN
ESPERANZA
DE LA IGLESIA
Interrogantes desde la
"Redemptoris Missio"

EMN

EDITORIAL MUNDO NEGRO


Arturo Soria, 101-28043 MADRID
Portada:
Diego Tapia

REDEMPTORIS MISSIO

Vivimos en un mundo en que todos estamos llenos


de actividades y nos falta tiempo para muchas cosas.
Muchos cristianos ya habrán oído hablar de la Encíclica
Redemptoris Missio, sobre la actividad misionera de la
Iglesia, publicada por el Papa Juan Pablo II a principios
del año 1991.
Edición realizada bajo los auspicios de:
No todos los cristianos la leerán.
— Comisión Episcopal de Misiones Con el objetivo de facilitar su difusión y su lectura,
—- Servicio Conjunto de Animación Misionera pensé en hacer una síntesis de los pasajes más significa-
— CONFER tivos añadiendo después de cada número algunas pre-
— Misioneros Combonianos guntas que ayuden a reflexionar y provoquen un diálogo
en el grupo.
La Encíclica consta de una introducción y ocho ca-
pítulos. Después de cada capítulo se han puesto unos
textos bíblicos que sirven de referencia y completan el
© EDITORIAL MUNDO NEGRO contenido del mismo, así como unas preguntas más ge-
Arturo Soria, 101 nerales.
28043 Madrid
Es un material que tiene sus limitaciones, pero que
Depósito legal M 26.075-1991 puede hacer más asequible el conocimiento de la Encí-
I.S.B.N.- 84-729S 115-4 clica.
Imprenta Hareso, S. A.
Paseo de la Dirección, 5 Esto no impide, sino más bien exige, utilizar el texto
28039 Madrid completo para mejor y mayor comprensión.

— 5 —
Un trabajo semejante puede ser útil para los anima-
dores misioneros, para los grupos de misiones en las
parroquias y para otros agentes de pastoral que estén
interesados.
Pido al Señor que esta Encíclica penetre en el cora-
zón de los cristianos y nos haga tener los mismos senti-
mientos de Cristo Jesús.
Madrid, abril de 1991

P. Joaquín M. Sánchez Macías, MCCJ


INTRODUCCIÓN

1.—La misión de Cristo Redentor, confiada a su Igle-


sia, está aún lejos de cumplirse. Esta misión se
halla todavía en los comienzos. Debemos compro-
meternos con todas nuestras energías en su servicio.
¡Ay de mí si no predicara el Evangelio! (1 Cor
9,16).
— El Papa nos habla de la urgencia de la
actividad misionera de la Iglesia en cinco
momentos de la Encíclica. ¿Por qué esta
urgencia?

2.—Muchos son ya los frutos misioneros del Concilio


Vaticano II:
— Multiplicación de las iglesias locales provistas
de Obispo, clero y personal apostólico propio.
— Inserción más profunda de las comunidades cris-
tianas en la vida de los pueblos.
— La comunión entre las iglesias que lleva a un
intercambio efica/ de bienes y dones espiritua-
les.
La labor evangeli/adota de los laicos.
— Las iglesias particulaics se inucstiaii abiertas al

— 6 — _ 7 —
mundo, al diálogo y a la colaboración con otras
iglesias.
— Una conciencia nueva: la misión atañe a todos
los cristianos, a todas las diócesis y parroquias,
a las instituciones y asociaciones eclesiales.
— ¿Qué otros frutos misioneros ha dado el
Concilio?

No obstante y a pesar de esos frutos, la misión


específica "ad gentes" parece que se va parando.
Dificultades internas y externas han debilitado el
impulso misionero de la Iglesia... Este impulso mi-
sionero ha sido siempre signo de vitalidad, así
como su disminución es signo de una crisis de fe.
Quiero invitar a la Iglesia a un renovado compro-
miso misionero.
— ¿Por qué una Encíclica sobre la actividad
misionera de la Iglesia?
El presente documento se propone una finalidad
interna: La renovación de la fe y de la vida cristia-
na. La fe se fortalece dándola... Cristo revela ple-

I
namente el hombre al hombre mismo.
Otras motivaciones y finalidades son: disipar dudas
y ambigüedades sobre la misión "ad gentes", con-
firmando a los misioneros, promover las vocacio-
nes misioneras, animar a los teólogos a profundizar
y a exponer los diversos aspectos de la misión, dar
nuevo impulso a la misión propiamente dicha,
comprometiendo a las iglesias particulares, mostrar W0M
que la actividad misionera tiene como único obje-
tivo servir al hombre, revelándole el amor de Dios
que se ha manifestado en Jesucristo. Obispo zaircño recién <'aleñado poi el l'apa En la Ki'dcmptoris MISMO,
Juan l'ahlo II subraya que la multiplicación de ifileuax locales con sux
— ¿Qué nos parecen los fines que busca esta propios ohi\pos es tino de los /rulos misioneros nu'ts evidentes del Va-
tu uno II
Encíclica? ¿Por qué?

— 8 — y
3.—El número de los que no conocen a Cristo ni for- Preguntas
man parte de su Iglesia aumenta constantemente.
Nuestra época ofrece nuevas ocasiones a la Iglesia: Después de casi dos mil años de la venida de Jesu-
— La caída de ideologías y sistemas políticos opre- cristo, 3.700 millones de habitantes no lo conocen.
sores. — ¿Qué nos dice esto?
— La apertura de fronteras y la configuración de — ¿Qué podemos hacer concretamente nosotros?
un mundo más unido, merced a los medios de
comunicación social.
— El afianzarse en los pueblos los valores evangé-
licos que Jesús encarnó en su vida: paz, justicia,
fraternidad, dedicación a los más necesitados...
— Un tipo de desarrollo económico y técnico falto
de alma que, no obstante, apremia a buscar la
verdad sobre Dios, sobre el hombre y sobre el
sentido de la vida.
Dios abre a la Iglesia horizontes de una humanidad
más preparada para la siembra evangélica. Ningún
creyente en Cristo, ninguna institución de la Iglesia
puede eludir este deber supremo: anunciar a Cristo
a todos los pueblos.
— ¿Sabemos cuántos habitantes tiene nues-
tro mundo? ¿Cuántos de éstos son católi-
cos? ¿Cuántos no conocen a Cristo ni for-
man parte de su Iglesia?
— Nuestra época ¿es propicia para la evan-
gelización? ¿Qué otros signos son favora-
bles? ¿Por qué?

Textos bíblicos

Mt 28,18-20 y Me 16,15-18: Mandato del Señor:


"Idpor el mundo entero... "
Rom 10,9-17: "... la fe nace de la predicación y lo
que se proclama es la Palabra... "

— 10 — — 11 —
CAPITULO I

JESUCRISTO, ÚNICO SALVADOR

4.—La misión universal de la Iglesia nace de la fe en


Jesucristo... Sólo en la fe se comprende y se funda-
menta la misión.
— ¿Qué quiere decir esto para nosotros cris-
tianos?

5.—Cristo es el único Salvador de la humanidad, el


único en condiciones de revelar a Dios y de guiar
hacia Dios. "En Hech 4,10-12 y 1 Cor 8,5-6" se
confiesa a un único Dios y a un único Señor en
contraste con la multitud de 'dioses' y 'señores' que
el pueblo admitía.
Cristo es el único mediador entre Dios y los hom-
bres... "los hombres, pues, no pueden cntiar en
comunión con Dios si no es por medio de Cristo y
bajo la acción del Fspíritu Santo".
— ¿Qué "dioses" y "señores" tenemos en nues-
tra vida?
— ¿Cómo culmino» en comunicación con
Dios?

— 13 —
6 —Así como el Hijo de Dios con su Encarnación se ha
10 —Muchos hombres no tienen la posibilidad de cono-
unido, en cierto modo, con todo hombre, así tam-
cer o aceptar la revelación del Evangelio y de entrar
bién "debemos creer que el Espíritu Santo ofrece a
en la Iglesia Viven en condiciones socio-culturales
todos la posibilidad de que, en forma sólo de Dios que no se lo permiten
conocida, se asocien a este misterio pascual" — ¿Hemos pensado en la gracia que Dios
— ¿Qué nos dice esto? nos ha dado, de poder conocerlo y ser
7.—La urgencia de la actividad misionera brota de la miembro de su Iglesia?
radical novedad de vida traída por Cristo y vivida
por sus discípulos Esta nueva vida es un don de 11 —¿Para qué la misión? Respondemos con la fe y
Dios, y al hombre se le pide que lo acoja y desarro- la esperanza de la Iglesia abrirse al amor de Dios
lle, si quiere realizarse, según su vocación integral, es la verdadera liberación En El, sólo en El, so-
mos liberados de toda forma de alienación y extra-
en conformidad con Cristo
vio, de la esclavitud del poder del pecado y de la
— ¿Estamos acogiendo y desarrollando esta
muerte
vida nueva que es don de Dios?
La misión es un problema de fe Jesús vino a traer
8.—En el mundo moderno hay tendencia a reducir al la salvación integral que abarca al hombre entero y
hombre a dimensión horizontal sin apertura al a todos los hombres
Absoluto ¿Por qué la misión7 La novedad de vida en El es la
La fe exige la libre adhesión del hombre, pero debe "Buena Nueva" para el hombre de todo tiempo a
ser propuesta, pues las multitudes tienen derecho a ella han sido llamados y destinados todos los hom-
conocer las riquezas del misterio de Cristo bres Todos tienen el derecho a conocer el valor de
este don y la posibilidad de alcanzarlo La Iglesia
— ¿En qué se convierte el hombre sin apertu-
y, en ella, todo cristiano, no puede esconder ni
ra al Absoluto?
conservar para sí esta novedad y riqueza, recibidas
— ¿Ya hemos hecho en nuestra vida una ad- de la divina bondad para ser comunicadas a todos
hesión personal a ( risto? los hombres He ahí por qué la misión, además de
— ¿Proponemos la fe, o la imponemos a nues- provenir del mandato formal del Señor, deriva de
tros hijos, compañeros, etc.? la exigencia profunda de la vida de Dios en nos-
— ¿Por qué debemos anunciar a Cristo? otros
9.—Cristo ha adquirido a la Iglesia con su sangre (Hech Quienes han sido incorporados a la Iglesia, han de
considerarse privilegiados y, por ello, mayoi mente
20,28) y la ha hecho su lol.ihoi.idora en la obra de
comprometidos en testimonial la le y la vida uis-
la salvación univeis.il I .i s.ilv.iuón, que es don del
tiana como servicio a los hei manos y respuesta
Espíritu, exige la tol.iboi.u ion del hombre para debida a Dios
salvarse, tanto a sí mismo tomo .i los demás
— ¿Para qué y por qué la misión, según tu
— ¿Cómo estamos colaborando en esta parecer?
obra?
— 15 -
— 14 -
Textos bíblicos

Jn 14,5-7: "...Yo soy el Camino, la Verdad y la


Vida..."
Jn 15,16: "...Soy yo quien os escogí... para que deis
mucho fruto..."
Jn 6,35-70: Discurso del Pan de Vida y reacción de
los discípulos.
Jn 17,1-3: "...Esta es la Vida Eterna: que te conoz-
can a Ti y a quien enviaste, Jesucristo ".
1 Tim 2,3-7: "...Que quiere que todos los hombres
se salven y lleguen al conocimiento de la verdad". CAPITULO II

Preguntas EL REINO DE DIOS


— ¿Qué conclusión hemos sacado de todo esto
para nuestra vida? 12.—Dios, rico en misericordia, es el que Jesucristo nos
— ¿A qué nos lleva la fe que tenemos? ha revelado como Padre. Cristo es la revelación y
la encarnación de la misericordia del Padre. La
salvación consiste en creer y acoger el misterio del
Padre y de su amor, que se manifiesta y se da en
Jesús mediante el Espíritu.
El Antiguo Testamento atestigua que Dios ha es-
cogido y formado un pueblo para revelar y llevar a
cabo su designio de amor. Israel tiene experiencia
de un Dios personal y salvador, del cual se convier-
te en testigo y portavoz en medio de las naciones.
— ¿Cuál es la misión que Dios entregó a su
pueblo?
— ¿Cumplió éste la misión?
— ¿Qué dificultades encontró?
— Y Dios, ¿cómo actuaba con su pueblo?

13.—Jesús de Nazaret lleva a cumplimiento el plan de


Dios. La proclamación y la instauración del Reino
— 16 — — 17 —
de Dios son el objeto de su misión (Le 4,43). Pro- caracterizan la misión de Jesús: curar y perdonar.
clama la "Buena Nueva" no sólo con lo que dice o Mientras cura, Jesús invita a la fe, a la conversión,
hace, sino también con lo que es. al deseo de perdón (Le 5,24) e introduce en la sal-
La entrada en el Reino acaece mediante la fe y la vación (Le 18,42-43).
conversión (Me 1,15) y no por la mera pertenencia — Y nosotros, nuestro grupo y la comuni-
étnica. El Reino que inaugura Jesús es el Reino de dad, ¿revelamos con nuestra vida las ca-
Dios: El mismo nos revela quién es este Dios... Es racterísticas y exigencias del Reino?
sensible a las necesidades, a los sufrimientos de
todo hombre; es un Padre amoroso y lleno de com- 15.—El Reino tiende a transformar las relaciones huma-
pasión, que perdona y concede gratuitamente las nas y se realiza progresivamente, a medida que los
gracias pedidas. hombres aprenden a amarse, a perdonarse, a ser-
El Reino crecerá en la medida en que cada hombre virse mutuamente. La naturaleza del Reino es la
aprenda a dirigirse a Dios como a un Padre en la comunión de todos los seres humanos entre sí y
intimidad de la oración (Le 11,2) y se esfuerce en con Dios.
cumplir su voluntad (Mt 7,21). El Reino interesa a todos: a las personas, a la so-
— Y nosotros, nuestro grupo o comunidad, ciedad, al mundo entero.
¿estamos haciendo crecer el Reino de Trabajar por el Reino quiere decir reconocer y fa-
Dios? vorecer el dinamismo divino que está presente en
la historia humana y la transforma.
14.—Jesús revela progresivamente las características y Construir el Reino significa trabajar por la libera-
exigencias del Reino mediante sus palabras, sus ción del mal en todas sus formas.
obras y su persona. En resumen: El Reino de Dios es la manifestación
El Reino está destinado a todos los hombres, dado y la realización de su designio de salvación en toda
que todos son llamados a ser sus miembros. Jesús su plenitud.
se ha acercado sobre todo a aquéllos que estaban — Y nosotros, nuestra comunidad, ¿nos in-
al margen de la sociedad, dándoles su preferencia, teresamos por el Reino, trabajamos por
cuando anuncia la "Buena Nueva" (Le 4,18-19)...
él, lo estamos construyendo?
Hace vivir ya a estos marginados una experiencia
de liberación, estando con ellos y yendo a comer
16.—Al resucitar Jesús de entre los muertos, Dios ha
con ellos (Le 5,30 y 15,2), tratándoles como a igua-
les y amigos (Le 7,34), haciéndolos sentirse amados vencido la muerte y en I'l ha inaugurado definiti-
por Dios y manifestando así su inmensa ternura vamente su Reino.
hacia los necesitados y los pecadores (Le 15,1-32). Los discípulos predicaban el Reino anunciando a
La liberación y la salvación que el Reino de Dios Jesús muerto y resucitado.
trae consigo, alcanzan a la persona humana en su
dimensión tanto física como espiritual. Dos gestos 17.—Hoy se habla mucho del Reino... Se dan concep-
ciones de la salvación y de la misión que podemos
— 18 —
- 19 -
llamar antropocentricas, al estar centradas en torno
a las necesidades terrenas del hombre... realidad
plenamente humana y secularizada, en la que sólo
cuentan los programas y luchas por la liberación
socioeconómica, política y cultural, pero con unos
horizontes cerrados a lo trascendente.
Otras concepciones ponen el acento sobre el Reino
y se presentan como reinocéntricas... promoviendo
los llamados "valores del Reino", cuales son la paz,
la justicia, la libertad, la fraternidad..., favorecien-
do el diálogo entre los pueblos, las culturas, las
religiones.
Junto a estos aspectos positivos, estas concepciones
manifiestan a menudo otros negativos. Ante todo,
dejan en silencio a Cristo. Además, el Reino, tal
como lo entienden, termina por marginar o menos-
preciar a la Iglesia.
— ¿Qué te parecen estas concepciones? ¿Se
dan en tu medio? ¿Por qué?

18.—No es éste el Reino que conocemos por la Revela-


ción, el cual no puede estar separado ni de Cristo
ni de la Iglesia... ya que el Reino es ante todo una
persona, que tiene el rostro y el nombre de Jesús de
Nazareth... y la Iglesia, aunque no es fin para sí
misma, ya que está ordenada al Reino de Dios, sin
embargo, a la vez que se distingue de Cristo y del
Reino, está indisolublemente unida a ambos.
— ¿Qué otros motivos encuentras para no
separar el Reino ni de Cristo ni de su Igle-
sia?

20.—La Iglesia sirve al Reino: fundando comunidades c


instituyendo iglesias particulares, llevándolas n lu
madurez de la fe y de la caridad, medianil- la aper-
tura a los demás, con el servicio a la pcisomi v f» '*•

— 21 —
sociedad, por la comprensión y estima de las insti-
tuciones humanas y difundiendo en el mundo los
"valores evangélicos".
— ¿De qué otras maneras la Iglesia sirve al
Reino?

Textos bíblicos

Me 1,14-15: "...El Reino de Dios está cerca, con-


vertios y creed en la B. N."
Le 4,18-20: "Misión de Jesús: 'me envió a traer la CAPITULO III
B. N. a los pobres..."
Mt 7,21: "No basta con que me digáis Señor... hay
que hacer la voluntad del Padre ". EL ESPÍRITU SANTO,
Le 15: Parábolas de la misericordia de Dios. PROTAGONISTA DE LA MISIÓN
Jn 10,10: " Yo he venido para que tengan Vida y la
tengan en abundancia ".
Mt /.?: Parábolas del Reino de Dios. 21.—El Espíritu Santo es en verdad el protagonista de
toda la misión eclesial... actúa en los discípulos... y
en los oyentes.
Pregunta — ¿Has percibido en tu vida, en la vida del
grupo o de la comunidad el protagonismo
— ¿Qué podemos hacer concretamente para cons- del Espíritu Santo? ¿En qué?
truir el Reino de Dios con los de cerca y con los
22.—Todos los Evangelistas, al narrar el encuentro del
de lejos? Resucitado con los Apóstoles, concluyen con el
mandato misional: "id a todas las gentes..." Este
envío es envío en el Espíritu.
23.—... dos elementos se hallan en todas las versiones:
a) ante todo, la dimensión universal de la tarea
confiada a los apóstoles: "id a todas las gen-
tes";
b) la certeza dada por el Señor de que en es.i
tarea no estarán solos, sino que recibinín l.i
fuerza y los medios para desarrollar su IUÍNÍÓII
— 22 — — 23 —
Todos los evangelistas subrayan que la misión de
los discípulos es colaboración con la de Cristo.
— ¿Sientes en ti mismo la dimensión univer-
sal?
— ¿Experimentas el no sentirte solo en la ta-
rea eclesial?
— ¿Se vive en tu grupo y en tu comunidad la
dimensión universal y el acompañamiento
del Espíritu?

24.—La misión de la Iglesia, al igual que la de Jesús, es


obra de Dios, obra del Espíritu... los apóstoles vi- s.
ven una profunda experiencia que los transforma:
Pentecostés. La venida del Espíritu Santo los con-
vierte en testigos o profetas (Hech 1,8; 2,17-18),
infundiéndoles una serena audacia que les impulsa
a transmitir a los demás su experiencia de Jesús y
la esperanza que los anima.
El Espíritu asume aún más la función de "Guía":
tanto en la elección de las personas como de los
caminos de la misión.
Los Hechos recogen seis síntesis de los "discursos
misioneros" dirigidos a los judíos en los comienzos
de la Iglesia (Hech 2,22-39; 3,12-64; 4,9-12; 5,29-
32; 10,34-43; 13,16-41).
Pablo y Bernabé se sienten empujados por el Espí-
ritu hacia los paganos (Hech 13,46-48).
En el primer Concilio de Jerusalén (Hech 15,5-
I
11.28)... la Iglesia abre sus puertas y se convierte en
la casa donde todos pueden entrar y sentirse a gus-
to, conservando la propia cultura y las propias tra-
diciones, siempre que no estén en contraste con el
Evangelio.
— ¿Has vivido tú y tu comunidad la expe-
i
Grupo de catequistas en una parroquia de la periferia de Lima (Perú). ¡XU
que, como ellos, trabajan por la misión, son movidos por el Espíritu
riencia de Pentecostés?
— 24 — — 25 —
— ¿Te sientes en la Iglesia como en tu casa?
28.—La presencia y acción del Espíritu son universales,
¿Por qué?
sin límite alguno ni de espacio ni de tiempo... está
presente en el corazón del hombre... le ofrece su luz
25.—Bajo la acción del Espíritu, la fe cristiana se abre y su fuerza.
decisivamente a las gentes. Es el Espíritu quien La presencia y la actividad del Espíritu no afectan
impulsa a ir cada vez más lejos no sólo en sentido únicamente a las personas, sino también a la socie-
geográfico, sino también más allá de las barreras dad, a la historia, a los pueblos, a la cultura y a las
étnicas y religiosas, para una misión verdadera- religiones.
mente universal. El Espíritu se halla en el origen de los nobles ideales
y de las iniciativas de bien de la humanidad en
26.—El Espíritu mueve al grupo de los creyentes a "hacer camino.
comunidades", a ser Iglesia. En efecto, uno de los — Indica algunas iniciativas del Espíritu en
objetivos centrales de la misión es: reunir al pueblo nuestra comunidad, en nuestra sociedad y
para la escucha del Evangelio, en la comunión fra- cultura.
terna, en la oración, en la eucaristía..., instaurando
una comunión bajo todos los aspectos: humano, 29.—La relación de la Iglesia con las demás religiones
espiritual y material. está guiada por un doble respeto:
Las primeras comunidades cristianas eran dinámi- a) Respeto por el hombre en su búsqueda de res-
camente abiertas y misioneras. puesta a las preguntas más profundas de la
— ¿Son así nuestras comunidades? vida.
b) Respeto por la acción del Espíritu en el hom-
bre.
27.—En sus orígenes, la misión es considerada como un
Este Espíritu es el mismo que se ha hecho presente
compromiso comunitario y una responsabilidad de
en la encarnación, en la vida, muerte y resurrección
la Iglesia local, que tiene necesidad precisamente
de Jesús y que actúa en la Iglesia.
de. ".misioneros" para lanzarse hacia nuevas fron-
Toda clase de presencia del Espíritu ha de ser aco-
teras.
gida con estima y gratitud.
Al comienzo de la Iglesia, la misión "ad gentes" era — ¿Cómo están siendo nuestras relaciones
considerada como un fruto normal de la vida cris-
con los miembros de otras Iglesias?
tiana, un compromiso para todo creyente mediante
el testimonio personal y el anuncio explícito, cuan-
30.—Nuestra época... exige un nuevo impulso en la ac-
do era posible.
tividad misionera de la Iglesia. Confiemos en el
— La misión "ad gentes" en nuestra comu- Espíritu. ¡El es el protagonista de la misión!
nidad, ¿es un compromiso y una respon- La Iglesia, guiada por el Espíritu, ha respondido
sabilidad comunitarios? ¿Por qué? Co- siempre a los cambios con generosidad y previsión.
menta. Los frutos no han faltado.

— 26 — 27 —
Hoy se pide a todos los cristianos, a las Iglesias
particulares y a la Iglesia Universal, la misma va-
lentía que movió a los misioneros del pasado y la
misma disponibilidad para escuchar la voz del Es-
píritu.
— ¿Confiamos que es el Espíritu quien guía
a la Iglesia?
— ¿Dejamos que El hable en nosotros?
— ¿Cómo está siendo nuestra respuesta?

Textos bíblicos CAPITULO IV


Mt 28,18-20; Me 16,15-18; Le 24,46-49; Jn 20,21-
23: El mandato del Señor.
Hech 2,1-13: Pentecostés.
LOS INMENSOS HORIZONTES
Hech 1,8: "...Recibirán la fuerza del Espíritu San- DE LA MISIÓN "AD GENTES"
to..."
Hech 2,17-18: "...Derramaré mi Espíritu sobre to-
dos los hombres..." —El Señor Jesús envió a sus apóstoles a todas las
Hech 2,42-47; Hech 4,32-35: Fruto del Espíritu: la personas y pueblos y a todos los lugares de la tierra.
comunidad cristiana de Jerusalén. Por medio de los Apóstoles la Iglesia recibió una
Hech 13,1-3: El Espíritu Santo hace misionera a la misión universal... Ha sido enviada "para manifes-
Comunidad de Antioquía. tar y comunicar la caridad de Dios a todos los
hombres y pueblos".
Esta misión es única al tener el mismo origen y
Preguntas finalidad; pero en el interior de la Iglesia hay tareas
y actividades diversas. Ante todo se da la actividad
— ¿Es misionera nuestra Iglesia local o particular? misionera: misión "ad gentes". Se trata de una ac-
¿En qué se nota? tividad primaria de la Iglesia, esencial y nunca con-
— ¿Es una parroquia misionera? Dar ejemplos que cluida. En efecto, la Iglesia "no puede sustraerse a
lo prueben. la perenne misión de llevar el evangelio a cuantos
— Y yo, ¿tengo espíritu misionero? no conocen a Cristo Redentor del hombre".
— ¿Qué nos dice la misión "ad gentes"?

.—Hoy nos encontramos ante una situación religiosa


bastante diversificada y cambiante; los pueblos es-
— 28 —
— 29 —
tan en movimiento; realidades sociales y religiosas
que tiempo atrás eran claras y definidas, hoy se alejada de Cristo y de su evangelio. En este
transforman en situaciones complejas. Baste pensar caso es necesaria una nueva evangelización.
en algunos fenómenos como el urbanismo, las mi- — ¿En qué situación estamos nosotros? ¿Por
graciones masivas, el movimiento de prófugos, la qué?
descristianización de países de antigua cristiandad,
el influjo del evangelio y de sus valores en naciones 34.—La actividad misionera específica o misión "ad gen-
de grandísima mayoría no cristiana, el pulular de tes"... se dirige a grupos o ambientes no cristianos,
mesianismos y sectas religiosas. debido a la ausencia o insuficiencia del anuncio
Por otra parte, la actividad misionera ha dado ya evangélico y de la presencia eclesial. Se dirige a los
abundantes frutos. "no cristianos"... hay que evitar que esta "respon-
— ¿Qué otros cambios existen en nuestro sabilidad más específicamente misionera que Jesús
mundo? ha confiado y diariamente vuelve a confiar a su
Iglesia", se vuelva una flaca realidad dentro de la
33.—Mirando al mundo actual, desde el punto de vista misión global del Pueblo de Dios y, consiguiente-
de la evangelización, se puede distinguir tres situa- mente, descuidada u olvidada.
ciones: ...ésta es la tarea primordial de la Iglesia, que ha
a) Aquella a la cual se dirige la actividad misio- sido enviada a todos los pueblos, hasta los confines
nera de la Iglesia: pueblos, grupos humanos, de la tierra... El dinamismo misionero crea inter-
contextos socio-culturales donde Cristo y su cambio entre las Iglesias y las orienta hacia el mun-
evangelio no son conocidos, o donde faltan do exterior, influyendo positivamente en todos los
comunidades suficientemente maduras. Esta es sentidos.
propiamente la misión "adgentes". — ¿Hay intercambio entre nuestra comuni-
b) Hay también comunidades cristianas con es- dad y otras iglesias del Tercer Mundo?
tructuras eclesiales adecuadas y sólidas; tienen — ¿Es esto posible?
un gran fervor de fe y de vida, irradian el tes- — ¿Cómo hacer?
timonio del l'vangelio en su ambiente y sienten
el compromiso de la misión universal. En ellas 35.—La misión "ad gentes" tiene así una tarea inmensa
se dcsairolla la actividad o atención pastoral que de ningún modo está en vías de extinción...
de la Iglesia. Las dificultades parecen insuperables y podrían des-
c) La sil nación inici inedia, especialmente en los animar si se tratara de una obra meramente huma-
países de anligua 11 islianclad, pero a veces tam- na. En algunos países está prohibida la entrada de
bién en las iglesias más jóvenes, donde grupos misioneros; en otros, está prohibida, no sólo la
enteros de bautizados han perdido el sentido evangelización, sino también la conversión e inclu-
vivo de la le o incluso no se icconocenyacomo so el culto cristiano...
miembros de la Iglesia, llevando una existencia — ¿Qué otras dificultades conoces con rela-
ción a la misión "ad gentes"?
- 30
— 31 —
36.—No faltan tampoco dificultades internas al pueblo
de Dios, las cuales son ciertamente más dolorosas,
como "la falta de fervor... que se manifiesta en la
fatiga y desilusión, en la acomodación al ambiente
y en el desinterés y, sobre todo, en la falta de alegría
y de esperanza". ... las divisiones pasadas y presen-
tes entre los cristianos, la descristianización de paí-
ses cristianos, la disminución de las vocaciones al
apostolado, los antitestimonios de los fieles... la til
mentalidad indiferentista.
»'^^*SrMr
Las dificultades internas y externas no deben ha-
cernos pesimistas o inactivos. Lo que cuenta es la
confianza que brota de la fe, o sea, de la certeza de
que no somos nosotros los protagonistas de la mi-
sión, sino Jesucristo y su Espíritu. Nosotros única-
mente somos colaboradores.
— Nosotros, con nuestras actitudes y com-
portamientos, ¿facilitamos o impedimos
que la misión "ad gentes" vaya adelante?

37.—La misión "ad gentes" en virtud del mandato uni-


versal de Cristo no conoce confines. Sin embargo,
se pueden delinear varios ámbitos en los que se
realiza.
a) Ámbitos territoriales: la actividad misionera
"ad gentes" se ejerce en territorios y entre gru-
pos humanos bien definidos. En los territorios
confiados a las Iglesias jóvenes, especialmente
en Asia, pero también en África, América La-
tina y Oceanía, hay vastas zonas sin evangeli- ^ ^ f l & a
zar. Incluso en países tradicionalmente cristia-
nos hay regiones confiadas al régimen especial
de la misión "ad gentes", grupos y áreas no
evangelizadas. Vendedor de pescado en Antofagasta (Chile). Como él, una inmensa mul-
b) Mundos y fenómenos sociales nuevos. Hoy la titud de emigrantes urbanos luchan por sobrevivir en un medio difícil. La
Redemptons Missio señala a las grandes ciudades como uno de los ámbi-
imagen de la misión "ad gentes" quizá está tos privilegiados de la misión en nuestros días.

32 — — 33 —
cambiando: lugares privilegiados deberían ser hombre y de los pueblos, sobre todo los de las
las grandes ciudades, donde surgen nuevas cos- minorías; la promoción de la mujer y del niño;
tumbres y modelos de vida, nuevas formas de la salvaguardia de la creación, son otros tantos
cultura, que luego influyen sobre la población. sectores que han de ser iluminados con la luz
...El futuro de las jóvenes naciones se está for- del Evangelio.
mando en las ciudades. — La cultura, la investigación científica, la eco-
No se puede olvidar a los jóvenes que en numerosos nomía, la política, las relaciones internaciona-
países representan ya más de la mitad de la pobla- les...
ción. ... los movimientos eclesiales modernos tienen — ¿Qué podemos decir y hacer ante estos
amplio campo para trabajar con ellos. nuevos retos?
Las migraciones...: los no cristianos llegan en gran
número a los países de antigua cristiandad, creando
nuevas ocasiones de comunicación e intercambios —Nuestro tiempo es dramático y al mismo tiempo
culturales, lo cual exige a la Iglesia la acogida, el fascinador. Mientras, por un lado, los hombres dan
diálogo, la ayuda y, en una palabra, la fraternidad. la impresión de ir detrás de la prosperidad material
Situaciones de pobreza, a menudo intolerable, que y de sumergirse cada vez más en el materialismo
se dan en no pocos países y que, con frecuencia, consumístico, por otro, manifiestan la angustiosa
son el origen de las migraciones de masas. La co- búsqueda de sentido, la necesidad de la interiori-
munidad de los creyentes en Cristo se ve interpela- dad, el deseo de aprender nuevas formas y modos
da por estas situaciones inhumanas: el anuncio de de concentración y de oración... Se busca la di-
Cristo y del Reino de Dios debe llegar a ser instru- mensión espiritual de la vida como antídoto a la
mento de rescate humano para estas poblaciones, deshumanización. La Iglesia tiene un inmenso pa-
c) Áreas culturales o areópagos modernos: trimonio espiritual para ofrecer a la humanidad:
Cristo, que se proclama "el Camino, la Verdad y la
— El mundo de la comunicación, que está uni- Vida".
ficando a la humanidad y transformándola en
una "aldea global". Los medios de comunica-
ción social han alcanzado tal importancia que —La Iglesia, pues, tiene el deber de hacer todo lo
para muchos son el principal instrumento in- posible para desarrollar su misión en el mundo y
formativo y formativo, de orientación e inspi- llegar a todos los pueblos.
ración para los comportamientos individuales, La Iglesia propone, no impone nada, respeta las
familiares y sociales. Las nuevas generaciones, personas y las culturas y se detiene ante el sagrario
sobre todo, crecen en un mundo condicionado de la conciencia.
por estos medios. Quizás se ha descuidado un Me dirijo a todas las Iglesias particulares, jóvenes
poco este areópago. y antiguas: ¡Abrid las puertas a los misioneros!, ya
— El compromiso por la paz, el desarrollo y que una Iglesia particular que se desgajara volun-
la liberación de los pueblos; los derechos del tariamente de la Iglesia universal perdería su refe-

— 34 — — 35 —
rencia al designio de Dios y se empobrecería en su
dimensión eclesial.
— Nuestra Iglesia, nuestra parroquia, ¿está
abriendo las puertas a los misioneros?
¿Por qué?

40.—La actividad misionera representa aún hoy día el


mayor desafío para la Iglesia. Es cada vez más
evidente que las gentes que todavía no han recibido
el primer anuncio de Cristo son la mayoría de la
humanidad.
El crecimiento demográfico del Sur y de Oriente, CAPITULO V
en países no cristianos, hace aumentar continua-
mente el número de personas que ignoran la reden-
ción de Cristo. LOS CAMINOS DE LA MISIÓN
Hay que dirigir, pues, la atención misionera hacia
aquellas áreas geográficas y aquellos ambientes cul-
turales que han quedado fuera del influjo evangé- —La misión es una realidad unitaria, pero compleja,
lico. y se desarrolla de diversas maneras.

—La primera forma de evangelización es el testimo-


Textos bíblicos nio:
El hombre contemporáneo cree más a los testigos
Hech 17,16-34: Pablo en el areópago de Atenas. que a los maestros; cree más en la experiencia que
Jn 17,14-22: Discurso de Jesús a sus discípulos: en la doctrina, en la vida y los hechos que en las
"... Yo también os envío al mundo..." teorías. El testimonio de vida cristiana es la primera
Hech 13; 14; 15,36-20,38: Viajes apostólicos de Pa- insustituible forma de la misión: Cristo es el "testi-
blo. go" por excelencia y el modelo del testimonio cris-
tiano.
La primera forma de testimonio es la vida misma
Preguntas del misionero, la de la familia cristiana y de la
comunidad eclesial, que hace visible un nuevo
¿Cómo nos sentimos ante todos estos retos? modo de comportarse. Todos en la Iglesia... pueden
¿Qué podemos hacer nosotros desde aquí para y deben dar este testimonio.
que la misión "ad gentes" continúe? El testimonio evangélico al que el mundo es más
sensible es el de la atención a las personas y el de la
— 36 — — 37 —
caridad para con los pobres y los pequeños, con los
que sufren.
— ¿Cómo anda nuestro testimonio indivi-
dual, de grupo y comunitario?

43.—La Iglesia está llamada a dar su testimonio de Cris-


to asumiendo posiciones valientes y proféticas ante
la corrupción del poder político y económico; no
buscando la gloria o bienes materiales; usando sus
bienes para el servicio de los más pobres e imitando
la sencillez de vida de Cristo.
— Nuestro testimonio como Iglesia, ¿aproxi-
ma el hombre a Dios? ¿Por qué?

44.—El anuncio tiene la prioridad permanente en la mi-


sión: ... la Iglesia no puede privar a los hombres de
la "Buena Nueva"... El primer anuncio tiene una
función central e insustituible, porque introduce en
el misterio del amor de Dios, quien lo llama a
iniciar una comunicación personal con El en Cris-
to, y abre la vía para la conversión. La fe nace del
anuncio y toda la comunidad eclesial tiene su ori-
gen y vida en la respuesta de cada fiel a este anun-
cio.
El anuncio tiene por objeto a Cristo crucificado,
muerto y resucitado.
— El anuncio de la Buena Nueva ¿está trans-
formando nuestra vida? ¿En qué?

45.—El anuncio nunca es un hecho personal... El misio-


nero está unido a la actividad evangelizadora de
toda la Iglesia.
La prueba suprema es el don de la vida... los "már-
tires" o testigos son indispensables para el camino Este misionero español en Uganda, como muchos otros, ha dejado su país
de origen para compartir las condiciones de vida de sus hermanos africa-
del Evangelio. También en nuestra época hay mu- nos Su tettimonio de fraternidad hace creíble el mensaje evangélico que
chos: obispos, sacerdotes, religiosos/as, así como anuncia.

— 38 — 39 —
laicos; a veces, héroes desconocidos que dan la vida
como testimonio de la fe. Ellos son los anunciado- con la Iglesia universal y, a su vez, se haga misio-
res y los testigos por excelencia. nera.
— ¿Conoces algunos testigos del Evangelio? — ¿Crees que nuestra Iglesia particular es mi-
— ¿Qué ves en ellos? sionera? Indica signos que expresen esto.

46.—El anuncio de la Palabra de Dios tiende a la con- 49.—Es necesario, ante todo, tratar de establecer en cada
versión cristiana, es decir, a la adhesión plena y lugar comunidades cristianas... y que crezcan hasta
sincera a Cristo y a su Evangelio mediante la fe. La llegar a ser Iglesias... La responsabilidad de este
conversión es un don de Dios... se expresa desde el cometido recae sobre la Iglesia universal y sobre
principio con una fe total y radical... determina un las Iglesias particulares, sobre el pueblo de Dios
proceso dinámico y permanente que dura toda la entero y sobre todas las fuerzas misioneras.
existencia, exigiendo un esfuerzo continuo por pa- La fe siempre debe ser presentada como un don de
sar de la vida "según la carne" a la "vida según el Dios para vivirlo en comunidad (familias, parro-
espíritu". La conversión significa aceptar, con de- quias, asociaciones) y para irradiarlo fuera, sea con
cisión personal, la soberanía de Cristo y hacerse el testimonio de vida, sea con la palabra. Es nece-
discípulo suyo. La Iglesia llama a todos a esta con- saria una radical conversión de la mentalidad para
versión. hacerse misioneros, y esto vale tanto para las per-
— ¿Estamos nosotros en proceso de conver- sonas como para comunidades. El Señor llama
sión? siempre a salir de uno mismo, a compartir con los
demás los bienes que tenemos, empezando por el
47.—Los apóstoles, movidos por el Espíritu Santo, invi- más precioso que es la fe. A la luz de este impera-
taban a todos a cambiar de vida, a convertirse y a tivo misionero se deberá medir la validez de los
recibir el Bautismo... Este sacramento debe apare- organismos, movimientos, parroquias u obras de
cer en todo su valor. A este cometido deben dedi- apostolado de la Iglesia.
carse las comunidades eclesiales locales... Invito a — ¿Cómo compartimos nuestra fe con los
los fieles y a las comunidades cristianas a dar autén- demás?
tico testimonio de Cristo con su nueva vida.
— ¿Vivimos realmente una nueva vida? 50.—La división de los cristianos perjudica a la causa
santísima de la predicación del Evangelio a toda
48.—Formación de iglesias locales. La misión "ad gen- criatura y cierra a muchos las puertas de la fe.
tes" tiene este objetivo: fundar comunidades cris- Promuévase la acción ecuménica... de forma que
tianas, hacer crecer las iglesias hasta su completa los católicos colaboren fraternalmente con los her-
madurez... Todo el misterio de la Iglesia está con- manos separados, mediante la profesión común de
tenido en cada iglesia particular, con tal de que la fe en Dios y en Jesucristo delante de las naciones
ésta no se aisle, sino que permanezca en comunión y den vida a la cooperación en asuntos sociales y
técnicos, culturales y religiosos... Es cada vez más
— 40 —
— 41 —
urgente que ellos colaboren y den testimonio uni-
dos en este tiempo en que sectas cristianas y para-
cristianas siembran confusión con su acción.
— ¿Cómo está el ecumenismo en nuestro me-
dio? ¿Y las sectas?

51.—Un fenómeno de rápida expansión en las jóvenes


iglesias... lo constituyen las comunidades eclesiales
de base (CEBs), que están dando prueba positiva
como centros de formación cristiana y de irradia-
ción misionera. Son un signo de la vitalidad de la
Iglesia, instrumento de formación y de evangeliza-
ción, un punto de partida válido para una nueva
sociedad fundada sobre la "civilización del amor"...
Por ello, dan una gran esperanza para la vida de la
Iglesia.
— ¿Qué sabemos de las CEBs en América
Latina y de las Comunidades Cristianas
en África?
— ¿Es posible formar en nuestro medio
CEBs? ¿Cómo?
— ¿Cuáles deberían ser sus características?

52.—Al desarrollar su actividad misionera entre las gen-


tes, la Iglesia encuentra diversas culturas y se ve
comprometida en el proceso de inculturación. "Sig-
nifica una íntima transformación de los auténticos
valores culturales mediante su integración en el cris-
tianismo y la radicación del cristianismo en las di-
versas culturas". Es un proceso lento, profundo,
global y difícil.
— ¿Cómo podemos inculturar el Evangelio
en la cultura dominante actual, en nuestro
medio? Grupo de misioneros seglares trabajando en una improvisada "farmacia"
en la sabana africana. La misión de la Iglesia promueve el desarrollo
integral del ser humano, sobre todo entre pueblos que tareccn de /<>»
55.—El diálogo interreligioso forma parte de la misión servicios más indispensables.

— 42 — — 43 —
evangelizadora de la Iglesia... La Iglesia no ve un del desarrollo con sus escuelas, hospitales, tipogra-
contraste entre el anuncio de Cristo y el diálogo fías, universidades, granjas agrícolas experimenta-
interreligioso. les... Es el hombre el protagonista del desarrollo,
no el dinero ni la técnica.
56.—El diálogo se funda en la esperanza y la caridad y La Iglesia educa las conciencias revelando a los
dará frutos en el Espíritu. Las otras religiones cons- pueblos al Dios que buscan, pero que no conocen;
tituyen un desafío positivo para la Iglesia de hoy. la grandeza del hombre creado a imagen de Dios y
amado por El; la igualdad de todos los hombres
57.—Todos los fieles y las comunidades cristianas están como hijos de Dios; el dominio sobre la naturaleza
llamados a practicar el diálogo. creada y puesta al servicio del hombre; el deber de
— ¿Cómo está realizando en nuestra Iglesia trabajar para el desarrollo del hombre entero y de
el diálogo con personas de otras religio- todos los hombres.
nes? — ¿Cómo "ser más" en una sociedad donde
se cultiva el "tener más"?
58.—Promover el desarrollo educando las conciencias. — ¿Cómo puede el cristiano mostrar al mun-
La misión "ad gentes" se despliega aún hoy día, do que la realización del hombre consiste
mayormente, en aquellas regiones del Sur del Mun- en "ser más"?
do donde es más urgente la acción para el desarro-
llo integral y la liberación de toda opresión. 59.—Con el mensaje evangélico la Iglesia ofrece:
En la Encíclica Solicitudo rei socialis se dice que la a) Una fuerza liberadora y promotora del des-
Iglesia "da su primera contribución a la solución arrollo, porque lleva a la conversión del cora-
del problema urgente del desarrollo cuando pro- zón y de la mentalidad.
clama la verdad sobre Cristo, sobre sí misma y b) Ayuda a reconocer la dignidad de cada perso-
sobre el hombre, aplicándola a una situación con- na.
creta". La conferencia de los obispos latinoameri- c) Dispone a la solidaridad, al compromiso, al
canos en Puebla afirmó que: "El mejor servicio al servicio de los hermanos.
hermano es la evangelización, que lo prepara para d) Inserta al hombre en el proyecto de Dios, que
realizarse como hijo de Dios, lo libera de las injus- es la construcción del Reino de paz y de justi-
ticias y lo promueve integralmente". cia, a partir ya de esta vida.
La misión de la Iglesia no es actuar directamente
La aportación de la Iglesia y de su obra evangeliza-
en el plano económico, técnico, político o contri-
dora al desarrollo de los pueblos abarca no sólo el
buir materialmente al desarrollo, sino que consiste
Sur del mundo, para combatir la miseria y el sub-
esencialmente en ofrecer a los pueblos no un "tener
más", sino un "ser más", despertando las concien- desarrollo, sino también el Norte, que está expues-
cias con el Evangelio. to a la miseria moral y espiritual causada por el
La Iglesia y los misioneros son también promotores "superdesarrollo".
"Contra el hambre cambia la vida" es el lema sur-
— 44 — — 45 —
gido en ambientes eclesiales, que indica a los pue- — ¿Qué importancia tienen los pobres en
blos ricos el camino para convertirse en hermanos nuestra vida y en la vida de la Iglesia?
de los pobres; es necesario volver a una vida más
austera que favorezca un nuevo modelo de des-
arrollo, atento a los valores éticos y religiosos. Textos bíblicos
— ¿A qué nos lleva el mensaje del Evangelio?
Hech 1,8: "...y seréis mis testigos..."
60.—La Iglesia en todo el mundo quiere ser la Iglesia de Hech 4,17-33: Valentía de los discípulos al anunciar
los pobres. al Señor.
La tercera conferencia del episcopado latinoameri- Hech 5,40-42: Gozo de los discípulos al sufrir por
cano en Puebla, después de haber recordado el el nombre de Jesucristo.
ejemplo de Jesús, escribe: Hech 4,1-31: Arrestan a Pedro y Juan por anunciar
a) Que los pobres merecen una atención prefe- al Señor.
rencial, cualquiera que sea la situación moral Rom 10,9-17: "...¿Cómo irán a predicar sin ser en-
o personal en que se encuentren. viados?"
b) Hechos a imagen y semejanza de Dios para ser Rom 8,3-13: Vivir según la carne o vivir según el
sus hijos, esta imagen está ensombrecida y aún Espíritu.
escarnecida. Por eso Dios toma su defensa y Me 1,14-15: ...Convertios y creed en la Buena Nue-
los ama. va.
c) Es así como los pobres son los primeros desti- Hech 2,37-38: Reacción del pueblo ante el discurso
natarios de la misión y su evangelización es de Pedro y respuesta de Pedro.
por excelencia señal y prueba de la misión de 1 Tim 6,6-12: De qué debemos huir y qué debemos
Jesús. buscar.
Fiel al espíritu de las bienaventuranzas, la Iglesia Mt 25,31-46: Juicio del Señor y recompensa a los
está llamada a compartir con los pobres y los opri- que supieron compartir.
midos de todo tipo. Por esto, exhorto a todos los
discípulos de Cristo y a las comunidades cristianas,
desde las familias a las diócesis, desde las parro- Preguntas
quias a los institutos religiosos, a hacer una sincera
revisión de la propia vida en el sentido de la solida- — ¿Podemos quedarnos satisfechos sólo con la par-
ridad con los pobres. ticipación en la Eucaristía y la recepción de los
El amor, que es y sigue siendo la fuerza de la mi- demás Sacramentos? ¿Por qué?
sión, es también "el único criterio según el cual — ¿A qué nos empuja la conversión y la fe que
todo debe hacerse o no hacerse, cambiarse o no recibimos?
cambiarse. Es el principio que debe dirigir cada — ¿Somos testigos del resucitado? ¿En qué lo mos-
acción y el fin a que se debe tender". tramos?
46 — 47 -
CAPITULO VI

RESPONSABLES Y AGENTES
DE LA PASTORAL MISIONERA

61.—No se da testimonio sin testigos, como no existe


misión sin misioneros. Para que colaboren en su
misión y continúen su obra salvífica, Jesús escoge
y envía a unas personas como testigos suyos y após-
toles: "seréis mis testigos"... (Hech 1,8).
Los doce son los primeros agentes de la misión
universal: constituyen un "sujeto colegial" de la
misión, al haber sido escogidos por Jesús para estar
con El y ser enviados "a las ovejas perdidas de la
casa de Israel" (Mt 10,6).
Gracias a Pedro se abren los horizontes de la mi-
sión universal en la que posteriormente destacará
Pablo, quien por voluntad divina fue llamado y
enviado a los gentiles (Gal 1,15-16).
En la expansión misioncia de los orígenes, junto a
Misioneros al pie del árbol, donde se discuten los problemas y se encuen- los Apóstoles encomiamos ¡i otios agentes menos
tran las soluciones en las aldeas rurales de África Ellos suscitan comuni- conocidos que no deben olvidaisc: son personas,
dades cristianas que serán, a su vez, misioneras grupos, comunidades
— 48 — - 4«J
Un típico ejemplo de Iglesia local es la comunidad cumbe al Colegio Episcopal encabezado por el su-
de Antioquía que, de evangelizada, pasa a ser evan- cesor de Pedro.
gelizadora y envía a sus misioneros a los gentiles Mis hermanos obispos son directamente responsa-
(Hech 13,2-3). bles conmigo de la evangelización del mundo, ya
La Iglesia primitiva vive la misión como tarea co- sea como miembros del Colegio Episcopal, ya sea
munitaria, aún reconociendo en su seno a "envia- como pastores de las Iglesias particulares.
dos especiales", como lo son Pablo y Bernabé. El Concilio afirma también que los obispos "han
— ¿Recuerdas en los Hechos personas, gru- sido consagrados no sólo para una diócesis deter-
pos o comunidades que se extendieran por minada, sino para la salvación de todo el mundo"
otras regiones llevando el Evangelio y for- (Ad Gentes 38).
mando comunidades cristianas? La misma responsabilidad se refleja, en diversa me-
dida, en las Conferencias Episcopales y en sus or-
62.—Lo que se hizo al principio del cristianismo para la ganismos a nivel continental.
misión universal, también sigue siendo válido y ur- Amplio es también el deber misionero de cada obis-
gente hoy. La Iglesia es misionera por su propia po como pastor de una iglesia particular. Compete
naturaleza, ya que el mandato de Cristo no es algo a él, "... promover, dirigir y coordinar la actividad
contingente y externo, sino que alcanza al corazón misionera... Procure, además, que se destine una
mismo de la Iglesia. Por esto, toda la Iglesia y cada parte conveniente de operarios y de recursos a la
iglesia es enviada a las gentes. evangelización de los no cristianos".
En este vínculo esencial de comunión entre la Igle- — ¿Existe en la diócesis este interés por la
sia universal y las Iglesias particulares se desarrolla actividad misionera? ¿Por qué?
la auténtica y plena condición misionera, "...las
comunidades eclesiales deben relacionarse entre sí,
64.—Toda iglesia particular debe abrirse generosamente
intercambiarse energías y medios, comprometerse
a las necesidades de los demás. La colaboración
aunadamente en la única y común misión de anun-
entre las iglesias, por medio de una reciprocidad
ciar y de vivir el Evangelio".
real que las prepare a dar y recibir, es también
— ¿Nos sentimos responsables, como Iglesia, fuente de enriquecimiento para todas y abarca va-
de la misión "ad gentes'? ¿Por qué? rios sectores de la vida eclesial.
— ¿Tenemos hermanamiento con alguna Igle- Con este espíritu invito a los obispos y a las Con-
sia del Tercer Mundo? ferencias Episcopales a poner generosamente en
práctica... la colaboración entre las Iglesias parti-
63.—Los primeros responsables de la actividad misione- culares y, especialmente, la mejor distribución del
ra. Así como el Señor resucitado confirió al Cole- clero en el mundo.
gio Apostólico encabezado por Pedro el mandato — ¿Qué ventajas vemos en la colaboración
de la misión universal, así esta responsabilidad in- entre las Iglesias?
— 50 — — 51 -
— ¿Sería necesaria una mejor distribución de La vocación especial de los misioneros "de por
todos los agentes de pastoral? ¿Por qué? vida" conserva toda su validez.
— ¿Hemos invitado a algún misionero para
65.—Misioneros e institutos "adgentes". Entre los agen- que dé su testimonio a los fieles en las
tes de la pastoral misionera, ocupan aún hoy como Misas del sábado o el domingo y en los
en el pasado, un puesto de fundamental importan- grupos de la parroquia, al menos una vez
cia aquellas personas e instituciones a las que el al año?
decreto Ad Gentes dedica el capítulo del título:
— ¿Hemos organizado en la parroquia algu-
"Los misioneros".
na "mesa redonda" o "debate" con algún
Cristo, por medio del Espíritu Santo, que distribu- misionero?
ye los carismas según quiere para común utilidad,
inspira la vocación misionera en el corazón de cada
uno y suscita al mismo tiempo en la Iglesia institu- 67.—Sacerdotes diocesanos para la misión universal.
tos que asuman como misión propia el deber de la Colaboradores del obispo, los presbíteros, en vir-
evangelización, que pertenece a toda la Iglesia. tud del sacramento del Orden, están llamados a
Se trata de una "vocación especial"... se manifiesta compartir la solicitud por la misión: "el don espiri-
en el compromiso total al servicio de la evangeliza- tual que los presbíteros recibieron en la ordenación,
ción; se trata de una entrega que abarca a toda la no los prepara a una misión limitada y restringida,
persona y toda la vida del misionero, exigiendo de sino a la misión universal y amplísima de la salva-
él una donación sin límites de fuerzas y de tiempo... ción hasta los confines de la tierra".
Los misioneros deben meditar siempre sobre la co- Por esto, la misma formación de los candidatos al
rrespondencia que requiere el don recibido por sacerdocio debe tender a darles "un espíritu genui-
ellos y ponerse al día en lo relativo a su formación namente católico que les habitúe a mirar más allá
doctrinal y apostólica. de los límites de la propia diócesis, nación, rito y
— ¿Qué pensamos de los misioneros? lanzarse en ayuda de las necesidades de toda la
— ¿Les hemos escrito alguna vez, como co- iglesia con ánimo dispuesto para predicar el Evan-
munidad, animándolos e interesándonos gelio en todas partes". Todos los sacerdotes deben
por los trabajos que realizan? tener corazón y mentalidad misioneros, estar abier-
— ¿Nos acordamos de ellos en la oración? tos a las necesidades de la Iglesia y del mundo,
atentos a los más alejados y, sobre todo, a los gru-
66.—Los institutos misioneros generalmente han nacido pos no cristianos del propio ambiente.
en las iglesias de antigua cristiandad... todavía "con- Los sacerdotes "no dejarán además de estar con-
tinúan siendo muy necesarios", no sólo por la acti- cretamente disponibles al Espíritu Santo y al obis-
vidad misionera "ad gentes", sino también para la po, para ser enviados a predicar el Evangelio más
animación misionera tanto en las iglesias de anti- allá de los confines del propio país".
gua cristiandad, como en las más jóvenes. — Los sacerdotes de nuestra parroquia ¿tie-
— 52 — — 53 —
nen este espíritu misionero universal? ¿Por bre, son indispensables entre aquellos pueblos y
qué? culturas en que la mujer debe realizar todavía un
— Si la respuesta es negativa, ¿qué podemos largo camino en orden a su promoción humana y
hacer para ayudarles a sentirse más misio- a su liberación. Es de desear que muchas jóvenes
neros? mujeres cristianas sientan el atractivo de entregarse
a Cristo con generosidad, encontrando en su con-
68.—Mi deseo es que el espíritu de servicio aumente en sagración la fuerza y la alegría para dar testimonio
el presbiterio de las iglesias antiguas y que sea pro- de El entre los pueblos que aún no lo conocen.
movido en el presbiterio de las iglesias más jóve- — Nosotras, jóvenes cristianas, ¿hemos pen-
nes. sado alguna vez si Dios nos llama por este
camino?
69.—En la inagotable y multiforme riqueza del Espíritu
se sitúan las vocaciones de los institutos de vida 71.—Todos los laicos son misioneros en virtud del bau-
consagrada, cuyos miembros... "están obligados a tismo. Los Pontífices de la época más reciente han
contribuir de modo especial a la tarea misional, insistido sobre la importancia del papel de los lai-
según el modo propio de su instituto". cos en la actividad misionera. En la Exhortación
a) Siguiendo el Concilio invito a los institutos de Apostólica Christifideles Laici, también yo me he
vida contemplativa a establecer comunidades ocupado explícitamente de la "perenne misión de
en las jóvenes iglesias. llevar el Evangelio a cuantos no conocen todavía a
b) A los institutos de vida activa indico los in- Cristo redentor del hombre", y de la correspon-
mensos espacios para la caridad, el anuncio diente responsabilidad de los fieles laicos. La mi-
evangélico, la educación cristiana, la cultura y sión es de todo el Pueblo de Dios... es tarea de
la solidaridad con los pobres, los discrimina- todos los fieles.
dos, los marginados y oprimidos. Se deben La participación de los laicos en la expansión de la
plantear la posibilidad y disponibilidad a ex- fe aparece claramente, desde los primeros tiempos
tender su propia actividad para la expansión del cristianismo, por obra de los fieles y familias, y
del Reino de Dios. también de toda la comunidad.
— Los religiosos/as ¿han reflexionado sobre En los tiempos modernos no ha faltado la partici-
estas palabras del Papa? pación activa de los misioneros laicos. ¿Cómo no
recordar el importante papel desempeñado por és-
70.—Quiero dirigir unas palabras de especial gratitud a tos, su trabajo en las familias, en las escuelas, en la
las religiosas misioneras, en quienes la virginidad vida política, social y cultural? Es más, hay que
por el Reino se traduce en múltiples frutos de ma- reconocer que algunas iglesias han tenido su origen
ternidad según el Espíritu. El ejemplo y la laborio- gracias a la actividad de los laicos misioneros.
sidad de la mujer virgen, consagrada a la caridad El Concilio Vaticano II ha confirmado esta tradi-
hacia Dios y el prójimo, especialmente el más po- ción, poniendo de relieve el carácter misionero de

— 54 — - 55 —
todo el Pueblo de Dios, concretamente el apostola-
do de los laicos, y subrayando la contribución es-
pecífica que éstos están llamados a dar en la activi-
dad misionera. La necesidad de que todos los fieles
compartan tal responsabilidad no es sólo cuestión
de eficacia apostólica, sino de un deber-derecho
basado en la dignidad bautismal, por la cual "los
fieles laicos participan, según el modo que les es
propio, en el triple oficio —sacerdotal, profético y
real— de Jesucristo". Ellos "tienen la obligación
general, y gozan del derecho, tanto personal como
asociadamente, de trabajar para que el mensaje
divino de salvación sea conocido y recibido por
todos los hombres en todo el mundo.
— Y nosotros, laicos, ¿hemos pensado en que
somos corresponsables en la actividad mi-
sionera del mundo?
— ¿Hemos reflexionado qué es lo que Dios
quiere de nosotros?
— Si Dios no nos llama al Tercer Mundo,
¿qué es lo que podemos hacer desde aquí?
Posibles iniciativas.
— ¿Qué podemos hacer para sensibilizar
más, para informar y ser más solidarios
con las Iglesias del Tercer Mundo?

72.—Los sectores de presencia y de acción misionera de


los laicos son muy amplios. "El campo propio... es
el mundo vasto y complejo de la política, de lo
social, de la economía..." a nivel local, nacional e
internacional. Dentro de la Iglesia se presentan di-
versos tipos de servicios, funciones, ministerios y 1
formas de animación de la vida cristiana. Recuer- Festival celebrado en España a beneficio de las misiones Una de las tmea\
do, como novedad surgida recientemente en no po- misioneras de los seglares es, precisamente, el apoyo a los que praln un
cas Iglesias, el gran desarrollo de los "movimientos el Evangelio en los rincones del mundo donde Cristo aún no ha wiA»
eclesiales", dotados de dinamismo misionero. anunciado

— 56 — 57 —
En la actividad misionera hay que revalorar las de comunidades eclesiales de base y de grupos bí-
varias agrupaciones del laicado, respetando su ín- blicos; encargados de las obras caritativas; admi-
dole y finalidades: asociaciones del laicado misio- nistradores de los bienes de la Iglesia; dirigentes de
nero, organismos cristianos y hermandades de di- los diversos grupos y asociaciones apostólicas; pro-
verso tipo; que todos se entreguen a la misión "ad fesores de religión en las escuelas.
gentes" y la colaboración con las Iglesias locales. Todos los fieles laicos deben dedicar a la Iglesia
— Los diferentes grupos, movimientos y aso- parte de su tiempo, viviendo con coherencia la pro-
ciaciones de la parroquia, ¿tienen espíritu pia fe.
misionero? ¿En qué se manifiesta? — Cada cristiano debería descubrir el don,
carisma, servicio, que el Espíritu le dio.
73.—La obra de los catequistas y la variedad de los ¿Nosotros lo hemos descubierto ya?
ministerios. Entre los laicos que se hacen evangeli- — ¿Estamos insertos en algún servicio en
zadores se encuentran en primera línea los cate- nuestra parroquia?
quistas. "El título de catequista" se aplica por exce-
lencia a los catequistas de tierras de misión... sin 75.—Los responsables y los agentes de la pastoral misio-
ellos no se habrían edificado Iglesias hoy día flore- nera deben sentirse unidos en la comunión que ca-
cientes. Los catequistas son agentes especializados, racteriza al Cuerpo Místico. Para impulsar la mi-
testigos directos, evangelizadores insustituibles, que sión "ad gentes" es necesario un centro de promo-
representan la fuerza básica de las comunidades ción, dirección y coordinación como es la
cristianas, especialmente en las Iglesias jóvenes. El Congregación para la Evangelización de los Pue-
trabajo de los catequistas resulta cada vez más di- blos.
fícil y exigente debido a los cambios eclesiales y
culturales en curso. 76.—Para la orientación y coordinación de la actividad
Es válido también en nuestros días lo que el Con- misionera a nivel nacional y regional, son de gran
cilio mismo sugería: una preparación doctrinal y importancia las Conferencias Episcopales y sus di-
pedagógica más cuidada, la renovación espiritual y versas agrupaciones... Es una acción que debe ser
apostólica. Es importante favorecer la creación y el intensificada y mejor concertada con la de otros
potenciamiento de las escuelas para catequistas. organismos de las mismas Conferencias, de manera
— ¿En nuestra diócesis existen escuelas para que la solicitud misionera no quede reducida a la
preparar a los catequistas según las nece- dirección de un determinado sector u organismo,
sidades de los tiempos actuales? sino que sea compartida por todos.
Que los mismos organismos e instituciones que se
74.—Además de los catequistas, hay que recordar las ocupan de la actividad misionera aunen oportuna-
demás formas de servicio a la vida de la Iglesia y a mente esfuerzos e iniciativas. Que las Conferencias
la misión, así como otros agentes: animadores de de los Superiores Mayores tengan también este
la oración, del canto y de la liturgia; responsables mismo objetivo en su ámbito, en contacto con IIIN

— 58 — — 59
Conferencias Episcopales, según las indicaciones y Preguntas
normas establecidas, recurriendo incluso a comi-
siones mixtas. Hay que promover encuentros y for- ¿Nos sentimos, como iglesia, responsables de la
mas de colaboración entre las diferentes institucio- misión "ad gentes"?
nes misioneras, ya sea para la formación y el estu- ¿Qué hacer concretamente para que todos los
dio, ya sea para la acción apostólica que hay que agentes de pastoral de la diócesis se sientan res-
desarrollar. ponsables de la Iglesia Universal?
— ¿Existe en nuestra diócesis alguna escuela
de formación misionera?
— ¿Creemos que sería útil para formar a los
animadores misioneros y a los miembros
del grupo misionero de las parroquias?
— ¿Sabemos que existe el Consejo Diocesa-
no de Misiones, donde colaboran juntos
sacerdotes, religiosos/as y laicos?

Textos bíblicos

Jn 1,35-51: Jesús llama a los primeros discípulos.


Me 3,13-19: Elección de los doce apóstoles de Je-
sús.
Hech 1,8: Los llama para ser Testigos.
Hech 13,1-3: La comunidad de Antioquía envía a
sus agentes y comparte la misión.
Flp 1,3-6: Los seglares cooperan en el servicio de la
misión.
Hech 8,4-8 y 11,19-30: Los seglares dispersados
anuncian la Palabra y crean Comunidades.
Hech 20,11-37: Discurso de Pablo a los presbíteros
de Efe so.
Gal 1,15-16: "...Me llamó... para que lo anunciara
entre los pueblos paganos".

— 60 — — 61 —
60

CAPITULO VII

LA COOPERACIÓN
EN LA ACTIVIDAD MISIONERA

77.— Miembros de la Iglesia en virtud del Bautismo,


todos los cristianos son corresponsables de la acti-
vidad misionera. La participación de las comuni-
dades y de cada fiel en este derecho-deber se llama
"cooperación misionera".
Tal cooperación se fundamenta y se vive, ante todo,
mediante la unión personal con Cristo: sólo si se
está unido a El, como el sarmiento a la vid (Jn
15,5), se puede producir buenos frutos. La santidad
de vida permite a cada cristiano ser fecundo en la
misión de la Iglesia.
La participación en la misión universal no se redu-
ce, pues, a algunas actividades particulares, sino
que es signo de la maduración de la fe y de una
Misionera española con un jefe tradicional africano Toda su vida se vida cristiana que produce frutos. De esta mancia
dedicara a vivir con este pueblo, ayudándolo, sirviéndolo y creando fra-
ternidad aun en los momentos más difíciles La Redemptons Missio des- el creyente amplía los confines de su caridad, ma-
taca la prioridad de la donación total y perpetua a la obra de fas misiones, nifestando la solicitud por quienes están lejos y poi
especialmente en los institutos exclusivamente misioneros quienes están cerca; ruega por las misiones y poi
— 62 — — 63 —
ver las vocaciones misioneras. A este respecto hay
las vocaciones misioneras, ayuda a los misioneros, que reconocer la validez de las diversas formas de
sigue sus actividades con interés y, cuando regre- la actividad misionera; pero, al mismo tiempo, es
san, los acoge con aquella alegría con la que las necesario reafirmar la prioridad de la donación to-
primeras comunidades cristianas escuchaban de los tal y perpetua a la obra de las misiones, especial-
Apóstoles las maravillas que Dios había obrado mente en los institutos y congregaciones misione-
mediante su predicación. ras, masculinas y femeninas. La promoción de estas
— ¿Qué actividades concretas desarrollamos, vocaciones es el corazón de la cooperación.
personal y comunitariamente, con los que Deseo, por tanto, recordar y alentar esta solicitud
están lejos (misiones)? por las vocaciones misioneras. Las vocaciones al
sacerdocio y a la vida consagrada son un signo
78.—Oración y sacrificio por los misioneros. Entre las seguro de la vitalidad de una Iglesia.
formas de participación, el primer lugar corres- — ¿Promovemos en nuestra parroquia las
ponde a la cooperación espiritual: oración, sacrifi- vocaciones misioneras?
cios, testimonio de vida cristiana. — ¿Por qué en varias naciones, mientras
La oración debe acompañar el camino de los mi- aumentan los donativos, se corre el peligro
sioneros, para que el anuncio de la Palabra resulte de que desaparezcan las vocaciones misio-
eficaz por medio de la gracia divina. neras?
A la oración es necesario unir el sacrificio. El valor — ¿Hemos pensado en crear en nuestra pa-
salvífico de todo sufrimiento aceptado y ofrecido a rroquia alguna "beca" para un seminarista
Dios con amor deriva del sacrificio de Cristo, que del Tercer Mundo?
llama a los miembros de su Cuerpo Místico a unir-
se a sus padecimientos y completarlos en la propia 80.—Pensando en este grave problema, dirijo mi llama-
carne (Col 1,24). El sacrificio del misionero debe da, con particular confianza y afecto, a las familias
ser compartido y sostenido por el de todos los fie- y a los jóvenes.
les... Recomiendo a quienes ejercen su ministerio
Las familias y, sobre todo, los padres... deben dar
pastoral entre los enfermos, que los instruyan sobre
"una contribución particular a la causa misionera
el valor del sufrimiento, animándoles a ofrecerlo a
de la Iglesia, cultivando las vocaciones misioneras
Dios por los misioneros. Con tal ofrecimiento los
entre sus hijos e hijas".
enfermos se hacen también misioneros.
Una vida de oración intensa, un sentido real del
— Individual y comunitariamente, ¿oramos servicio al prójimo y una generosa participación en
por las misiones y por los misioneros? las actividades eclesiales ofrecen a las familias las
— ¿Animamos a los enfermos a ofrecer sus condiciones favorables para la vocación de los jó-
sacrificios junto al de Cristo Redentor por venes.
las misiones y por los misioneros? A los mismos jóvenes ruego que escuchen la Pala-
bra de Cristo que les dice: "Venid conmigo y os
79.—La cooperación se manifiesta además en elpromo-
— 65 —
— 64 —
ofrenda a Dios, y para todas las misiones del mun-
haré pescadores de hombres" (Mt 4,9). Que los do.
jóvenes tengan la valentía de responder igual que — ¿Hemos pensado alguna vez en financiar
Isaías: "¡Heme aquí, Señor, estoy dispuesto, envía- algún proyecto concreto para una parro-
me!" (Is 6,8). quia de las misiones?
— Nosotros, padres, ¿cultivamos la vocación — ¿Conocemos las campañas que la Iglesia
cristiana de nuestros hijos? española realiza cada año para sensibilizar
— Y nosotros, jóvenes, ¿hemos pensado qué a los españoles? ¿Cuáles son?
es lo que Cristo quiere de nosotros?
82.—Nuevas formas de cooperación misionera. La co-
81.—Son muchas las necesidades materiales y económi- operación misionera se abre hoy a nuevas formas,
cas de las misiones; no sólo para fundar la Iglesia incluyendo no sólo la ayuda económica, sino tam-
con estructuras mínimas (capillas, escuelas para ca- bién la participación directa. Nuevas situaciones
tequistas, seminarios, viviendas...), sino también relacionadas con el fenómeno de la movilidad hu-
para sostener las obras de caridad, de educación y mana exigen a los cristianos un auténtico espíritu
promoción humana, campo inmenso de acción, es- misionero.
pecialmente en los países pobres.
a) El turismo a escala internacional es ya un fe-
Deseo dar las gracias a todos aquellos que dan con
nómeno de masas positivo, si se practica con
sacrificio para la obra misionera; sus renuncias y
actitud respetuosa en orden a un mutuo enri-
su participación son indispensables para construir
quecimiento cultural...
la Iglesia y testimoniar la caridad.
Respecto a las ayudas materiales es importante b) También el conocimiento directo de la vida
comprobar el espíritu con el que se da. Para ello, es misionera y de las comunidades cristianas pue-
necesario revisar el propio estilo de vida: las misio- de enriquecer y dar vigor a la fe. Son encomia-
nes no piden solamente ayuda, sino compartir el bles las visitas a las misiones, sobre todo por
anuncio y la caridad para con los pobres. Todo lo parte de los jóvenes que van a prestar un ser-
que hemos recibido de Dios —tanto la vida como vicio y tener una experiencia fuerte de vida
los bienes materiales— no es nuestro, sino que nos cristiana.
ha sido dado para usarlos. c) Las exigencias del trabajo llevan hoy a nume-
rosos cristianos de jóvenes comunidades a re-
La generosidad en el dar debe estar siempre ilumi- giones donde el cristianismo es desconocido y,
nada e inspirada por la fe: entonces sí que hay más a veces, proscrito o perseguido. Esto pasa tam-
alegría en dar que en recibir.
bién con los fieles de países de antigua tradi-
La Jornada Misionera Mundial, orientada a sensi-
ción cristiana, que trabajan temporalmente en
bilizar sobre el problema misionero, así como a
países no cristianos. Estas circunstancias son
recoger donativos, es una cita importante en la
vida de la Iglesia, porque enseña cómo se ha de ciertamente una ocasión para vivir y testimo-
dar: en la celebración eucarística, esto es, como niar la fe.

— 67 —
— 66 —
importancia en cuanto ayudan a conocer la vida de
Las Iglesias locales, con la ayuda de personas
la Iglesia Universal, las voces y la experiencia de
provenientes de los países de los emigrantes y
los misioneros y de las iglesias locales donde ellos
de misioneros que hayan regresado, deben ocu-
trabajan.
parse generosamente de estas situaciones y de
las personas que van a establecerse en otras Para esta formación están llamados los sacerdotes
naciones por motivos de trabajo, de estudios o y sus colaboradores, los educadores y profesores,
bien obligados por las condiciones políticas o los teólogos...
económicas de sus lugares de origen, La enseñanza teológica no puede ni debe prescindir
d) La cooperación puede implicar también a los de la misión universal de la Iglesia, del ecumenis-
responsables de la política, de la economía, de mo, del estudio de las grandes religiones y de la
la cultura, del periodismo, además de los ex- misionología. Recomiendo que, sobre todo en los
pertos de los diversos organismos internacio- Seminarios y en las Casas de Formación para reli-
nales. giosos/as, se lleven a cabo tales estudios, procu-
rando que algunos sacerdotes o alumnos/as, se es-
— En nuestro pueblo o ciudad ¿hay inmi- pecialicen en los diversos campos de las ciencias
grantes del Tercer Mundo? ¿Hemos entra- misionológicas.
do en contacto con ellos? ¿En qué situa- Las actividades misioneras deben orientarse siem-
ción viven? ¿Qué se puede hacer? pre hacia sus fines específicos: informar y formar
— ¿Conocemos a alguien que haya estado al Pueblo de Dios para la misión universal de la
trabajando profesionalmente en países del Iglesia; promover vocaciones "ad gentes"; suscitar
Tercer Mundo? ¿Cómo ha sido su com- cooperación para la evangelización.
portamiento y experiencia cristiana allí? En efecto, no se puede dar una imagen reductiva
de la actividad misionera, como si fuera principal-
83.—Animación y formación del Pueblo de Dios. La mente ayuda a los pobres, contribución a la libera-
formación misionera del Pueblo de Dios es obra de ción de los oprimidos, promoción del desarrollo,
la iglesia local con la ayuda de los misioneros y de defensa de los derechos humanos. La Iglesia misio-
sus Institutos, así como de los miembros de las nera está comprometida también en estos frentes,
Iglesias jóvenes. Esta labor ha de ser entendida no pero su cometido primario es otro: los pobres tie-
como algo marginal, sino central en la vida cristia- nen hambre de Dios y no sólo de pan y libertad; la
na. ...Las Iglesias locales han de incluir la anima- actividad misionera ante todo ha de testimoniar y
ción misionera como elemento primordial de su anunciar la salvación en Cristo, fundando las igle-
pastoral ordinaria en sus parroquias, asociaciones sias locales que son luego instrumento de liberación
y grupos, especialmente juveniles. en todos los sentidos.
Para conseguir este fin, es valiosa, ante todo, la — Nuestra diócesis ¿tiene conciencia de que
información mediante la prensa misionera y los la formación misionera del Pueblo de
diversos medios audiovisuales. Su papel es de gran Dios es obra propia suya, ayudada por los

— 69 —
— 68 —
misioneros, o cree que es deber sólo de los misma. De aquí se derivan unos vínculos de íntima
misioneros? comunión en lo que respecta a riquezas espirituales,
— La animación misionera ¿está incluida en obreros apostólicos y ayudas temporales.
la pastoral ordinaria de nuestra diócesis y Exhorto a todas las Iglesias, a los pastores, sacer-
parroquia? dotes, religiosos y fieles a abrirse a la universalidad
— ¿Conocemos y divulgamos la prensa mi- de la Iglesia, evitando cualquier forma de particu-
sionera en nuestra parroquia: revistas, li- larismo, exclusivismo o sentimiento de autosufi-
bros, vídeos, boletines informativos...? ciencia. La tendencia a cerrarse puede ser fuerte;
— ¿Se estudia la misionología en el Semina- las iglesias antiguas, comprometidas en la nueva
rio y Casas Religiosas de nuestra diócesis? evangelización, piensan que la misión han de reali-
— ¿Existe en la diócesis una escuela de mi- zarla en su propia casa, y corren el riesgo de frenar
siones para seglares? ¿Es útil? ¿Por qué? el impulso hacia el mundo no cristiano, concedien-
Si existe, ¿participan seglares de todas las do no de buena gana las vocaciones a los Institutos
parroquias? ¿Por qué? misioneros, a las Congregaciones religiosas y a las
demás Iglesias. Sin embargo, es dando generosa-
84.—En esta obra de animación el cometido primario mente de lo nuestro como recibiremos.
corresponde a las Obras Misionales Pontificias. — ¿Existe la tendencia, en nuestra Iglesia y
Las cuatro obras —Propagación de la Fe, San Pe- parroquias, a cerrarnos en nuestras activi-
dro Apóstol, Santa Infancia y Unión Misional— dades, problemas y trabajos? ¿Por qué?
tienen en común el objetivo de promover el espíritu
misionero universal en el Pueblo de Dios. Otro 86.—Dios está preparando una gran primavera cristiana
objetivo es suscitar vocaciones "ad gentes" y de por de la que ya se vislumbra su comienzo. En efecto,
vida, tanto en las iglesias antiguas como en las más tanto en el mundo no cristiano como en el de anti-
jóvenes. gua tradición cristiana, existe un progresivo acer-
En el ejercicio de sus actividades, estas Obras de- camiento de los pueblos a los ideales y a los valores
penden... a nivel local, de las Conferencias Episco- evangélicos que la Iglesia se esfuerza en favorecer.
pales y de los Obispos en cada Iglesia particular, Hoy se manifiesta una nueva convergencia de los
colaborando con los centros de animación existen- pueblos hacia estos valores: el rechazo de la violen-
tes: ellas llevan al mundo católico el espíritu de cia y de la guerra; el respeto de la persona humana
universalidad y de servicio a la misión, sin el cual y de sus derechos; el deseo de libertad, de justicia y
no existe auténtica cooperación. de fraternidad; la tendencia a superar los racismos
y nacionalismos; el afianzamiento de la dignidad y
85.—Cooperar con las misiones quiere decir no sólo dar, la valorización de la mujer.
sino también recibir: todas las Iglesias particulares Los hombres que esperan en Cristo son todavía un
están llamadas a dar y a recibir en favor de la número inmenso. No podemos permanecer tran-
misión universal y ninguna deberá encerrarse en sí quilos si pensamos en los millones de hermanos

— 70 — — 71 —
nuestros, redimidos también por la sangre de Cris-
to, que viven sin conocer el amor de Dios. Para el
creyente, lo mismo que para toda la Iglesia, la cau-
sa misionera debe ser la primera, porque concierne
al destino eterno de los nombres y responde al de-
signio misterioso y misericordioso de Dios.

Textos bíblicos

Jn 15,1-8: Unión con Cristo para producir frutos


(vid y sarmientos). CAPITULO VIII
Hech 14,21-28: Importancia de la oración y de los
sacrificios en la vida cristiana.
Mt 9,35-38: "Orad al Dueño de la mies para que ESPIRITUALIDAD MISIONERA
mande obreros..."
Col 1,24: "Completo en mi carne lo que falta a los
sufrimientos de Cristo..." 87.— La actividad misionera exige una espiritualidad
Hech 20,35: "... cómo se debe trabajar a fin de tener específica. Esa espiritualidad se expresa ante todo
también para ayudar a los necesitados". viviendo con plena docilidad al Espíritu; ella com-
Hech 8,4-8 y 11,19-30: Ejemplo de las familias cris- promete a dejarse plasmar interiormente por El,
tianas en la cooperación misionera. para hacerse cada vez más semejante a Cristo. La
Hech 20,30-35: Importancia de trabajar en la vida docilidad al Espíritu compromete, además, a aco-
y saber compartir. ger los dones de fortaleza y discernimiento, que
son rasgos esenciales de la espiritualidad misione-
ra.
Preguntas El Espíritu transformó a los Apóstoles en testigos
valientes de Cristo y preclaros anunciadores de su
—• ¿Existe en nuestra parroquia un grupo misione- Palabra.
ro? ¿Es posible formarlo? ¿Qué trabajos podría También la misión sigue siendo difícil y compleja
realizar? como en el pasado y exige igualmente la valentía y
— ¿Cómo son preparadas las campañas misione- la luz del Espíritu... Hoy conviene orar para que
ras en nuestra parroquia? Dios nos conceda la libertad de proclamar el Evan-
gelio; conviene escrutar las vías misteriosas del Es-
píritu y dejarse guiar por El hasta la verdad com-
pleta.

— 72 — — 73 -
— ¿Qué se entiende por espiritualidad misio- acogida, disponibilidad, interés por los problemas
nera? de la gente.
El misionero es el hombre de la caridad: para poder
88.—Nota esencial de la espiritualidad misionera es la anunciar a todo hombre que es amado por Dios y
comunión íntima con Cristo. "Tened entre vosotros que él mismo puede amar, debe dar testimonio de
los mismos sentimientos de Cristo" (Filp 2,5-8). Se caridad para con todos, gastando la vida por el
describe aquí el misterio de la encarnación y de la prójimo. El misionero es el "hermano universal";
redención como despoj amiento total de sí, que lleva lleva consigo el espíritu de la Iglesia, su apertura y
a Cristo a vivir plenamente la condición humana y atención a todos los pueblos y a todos los nombres,
a obedecer hasta el final el designio del Padre. particularmente a los más pequeños y pobres.
Al misionero se le pide "renunciarse a sí mismo y a El debe amar a la Iglesia (Ef 5,25). Este amor hasta
todo lo que tuvo hasta entonces y hacerse todo dar la vida es para el misionero un punto de refe-
para todos": en la pobreza que lo deja libre para el rencia. Sólo un amor profundo por la Iglesia puede
Evangelio; en el desapego de personas y bienes del sostener el celo del misionero; su preocupación co-
propio ambiente... tidiana es la "solicitud por todas las Iglesias" (2
Precisamente porque es "enviado", el misionero ex- Cor 11,28).
perimenta la presencia consoladora de Cristo que — ¿Nuestra caridad es como la del Buen Pas-
lo acompaña en todo momento de su vida: "No tor? ¿Sentimos la preocupación por todas
tengas miedo... porque Yo estoy contigo" (Hech las Iglesias, o sólo por nuestra parroquia?
18,9-10). — ¿Ayudamos a las parroquias vecinas a
crear un grupo misionero?
— ¿Procuramos tener los mismos sentimien-
tos de Cristo Jesús? ¿Cómo hacer para
90.—El verdadero misionero es el santo. La llamada a la
que sus sentimientos sean los nuestros?
misión deriva de por sí de la llamada a la santidad.
La vocación universal a la santidad está estrecha-
89.—La espiritualidad misionera se caracteriza, además, mente unida a la vocación universal a la misión.
por la caridad apostólica; la de Cristo que vino Todo fiel está llamado a la santidad y a la misión.
"para reunir en uno a los hijos de Dios que estaban La espiritualidad misionera de la Iglesia es un ca-
dispersos" (Jn 11,51); Cristo, Buen Pastor que co- mino hacia la santidad.
noce sus ovejas, las busca y ofrece su vida por ellas El renovado impulso hacia la misión exige misio-
(Jn 10). Quien tiene espíritu misionero siente el neros santos. No basta renovar los métodos pasto-
ardor de Cristo por las almas y ama a la Iglesia rales, ni organizar y coordinar mejor las fuerzas
como Cristo. eclesiales, ni explotar con mayor agudeza los fun-
El misionero se mueve a impulsos del "celo por las damentos bíblicos y teológicos de la fe: es necesario
almas", que se inspira en la caridad misma de Cris- suscitar un nuevo "anhelo de santidad" entre los
to, que está hecha de atención, ternura, compasión, misioneros y en toda la comunidad cristiana.
— 74 — — 75 —
B . "<•'* Pensemos en el empuje misionero de las primeras
comunidades cristianas... en la base de este dina-
mismo misionero estaba la santidad de los primeros
cristianos y de las primeras comunidades.
— ¿Creemos realmente que el Señor nos lla-
ma a la santidad, o pensamos que esto es
sólo para algunas personas?
— ¿Qué significa para nosotros ser santo?

91.—Me dirijo a los bautizados de las comunidades e


iglesias jóvenes. Hoy sois vosotros la esperanza de
nuestra Iglesia. Debéis ser como los primeros cris-
tianos e irradiar entusiasmo y valentía, con genero-
sa entrega a Dios y al prójimo; en una palabra,
debéis tomar el camino de la santidad. Sólo de esta
manera podréis ser signos de Dios en el mundo y
revivir en vuestros países la epopeya misionera de
la Iglesia primitiva. Y seréis también fermento de
espíritu misionero para las iglesias más antiguas.
Por su parte, los misioneros reflexionan sobre el
deber de ser santos. El misionero ha de ser un "con-
templativo en la acción". El halla respuesta a los
problemas a la luz de la palabra de Dios y con la
oración personal y comunitaria. El misionero es un
testigo de la experiencia de Dios y debe poder decir
como los apóstoles: "lo que contemplamos... acerca
de la Palabra de Vida..., os lo anunciamos" (1 Jn
1,1-3).
El misionero es el hombre de las Bienaventuran-
zas...: pobreza, mansedumbre, aceptación de los
sufrimientos y persecuciones, deseo de justicia y de
paz, caridad... Viviendo las bienaventuranzas el mi-
sionero experimenta y demuestra concretamente
Sacerdote misionero celebrando la Eucaristía en un poblado africano El
también es un "hermano universal", un hombre que romperá las barreras
que el Reino de Dios ya ha venido y que él lo ha
culturales para hacerse uno con aquellos a los que ha venido a anunciar acogido. La característica de toda vida misionera
el Evangelio auténtica es la alegría interior, que viene de la fe.

— 76 — — 77 —
En un mundo angustiado y oprimido por tantos
problemas, que tiende al pesimismo, el anunciador
de la "Buena Nueva" ha de ser un hombre que ha
encontrado en Cristo la verdadera esperanza.

Textos bíblicos

Jn 20,19-23: Docilidad al Espíritu.


Hech 5,42-42: Gozo por sufrir por el nombre del
Señor.
Flp 2,5-8: Encarnación y rebajamiento de Jesús.
1 Cor 9,22-23: "... me hice todo para todos... y eso
lo hago por el Evangelio ".
Jn 15,1-17: Unión a Cristo: Amigo y Revelador del
Padre.
1 Jn 1,1-3: Experiencia de Jesucristo en la vida de
Juan.
Gal 2,20: "No vivo yo... es Cristo el que vive en
mí".
Flp 1,21: "Para mí el vivir es Cristo..."
Jn 13,1-17: Jesús Maestro y Servidor: lava los pies
a sus discípulos.

Preguntas

— Como cristianos, ¿tenemos una espiritualidad


misionera universal?
— Las actividades que realizamos ¿son fruto de
una espiritualidad fundamentada en Cristo, o
tienen otras motivaciones?

— 78 —

Vous aimerez peut-être aussi