Antonio de Ulloa en 1757 se hizo cargo del gobierno local de la provincia

de Huancavelica y la supervisión de la mina santa bárbara. A fines de 1758

el capitán de navío se encontró con una situación crítica en la
administración local.Los males incluían fraudes, descuidos técnicos en la
explotación de la mina, confabulaciones administrativas. Los esfuerzos de
Ulloa por corregir y castigar estos delitos, lo enfrentaron violentamente a
poderosos intereses.
No era la primera vez que Ulloa denunciaba prácticas corruptas, pues
antes ya había escrito un informe en colaboración con Jorge Juan,
‘Discurso y reflexiones políticas sobre los reinos del Perú’, que trataba
principalmente sobre los abusos administrativos observados en sus viajes
por Sudamérica.El manuscrito fue desconocido por más de 7 décadas
hasta que David Barry lo público en Londres bajo el título de ‘’Noticias
secretas de América’’ para advertir sobre las fatales condiciones políticas
y de inversión en Hispanoamérica,con el tiempo se consideraría como un
texto fundador de la tradición anticorrupción.
Durante su servicio al rey, Ulloa contribuyó a la comprensión de
mecanismos de la corrupción, aunque no fue el primer ni último
reformador puede decirse que fue el más informado del grupo de
reformadores anticorrupción de su época pues se sustentó de la
experiencia como informante privilegiado y autoridad real.
Uno de los problemas principales de los conquistadores y colonos era
cómo arreglar la diversidad de ambiciones de enriquecimiento, la
rebeldía y descontento que se generaba; sin embargo, las hábiles
negociaciones del ‘’pacificador’’ Pedro de la Gasca y la corrupción
condujeron a un acomodamiento de intereses que sirvió como base
de una estabilidad virreinal. Pero esta iba acompañada de la
corrupción, esta solución negociable al conflicto político sobreviviría
en el Perú como un obstáculo arcaico.
En el nuevo siglo borbónico, en 1707 estuvo el virrey Castelldosrius,
que estuvo involucrado en escandalosos casos de contrabando
francés durante su gestión, luego Ladrón de Guevara, que sucedió a
Castelldosrius en el cargo, quien también fue acusado de permitir
contrabando francés de plata.
Sin embargo, durante el gobierno del virrey Castelfuerte se tomaron
urgentes medidas para luchar contra el contrabando. Limitó el flujo
de plata a manos extranjeras, controló el ingreso de textiles de china
y Europa, implemento la vigilancia naval, las inspecciones, los
castigos y confiscaciones de contrabando y pareció haber una caída
temporal del patronazgo corrupto, sin embargo, la corrupción
aumentaría gradualmente durante el gobierno del conde de
Superunda (1741-1761).su sucesor Amat ayudó a elevar la
corrupción a nuevas alturas, se vio envuelto en múltiples corruptelas.
Los muchos cargos presentados contra su gobierno van desde el
fraude, como la apropiación de joyas y propiedades.
En Madrid ganaba fuerza la idea de que el poder excesivo de los
virreyes debía reducirse para que la administración virreinal fuese
menos corrupta, otros se opusieron pues estaban convencidos de
que, para poder gobernar los lejanos reinos americanos, era
necesario la fuerte autoridad del virrey.
En 1780 estalló una gran rebelión, liderada por José Gabriel
Condorcanqui. en esta tradición, Condorcanqui era otro reformador
que criticaba la corrupción de funcionarios coloniales. Los criollos e
indios nobles se opusieron al movimiento de Condorcanqui. Luego
condorcanqui fue apresado y ejecutado, la rebelión se propagó al Alto
Perú.