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Hace algún tiempo un gran amigo me pidió que contara algo de la historia de este mi primer grupo, esta

es mi historia mis panas, se que hay algo más que contar, pero cuento lo que viví ya que no pude estar
todo el tiempo con ellos, un abrazo a todos quienes formaron parte de esto y una oración para los que ya
no están con nosotros.

CHAQUIÑAN… algo de su historia.

Todos sabemos que el arte siempre ha sido es y será parte de la cultura de un pueblo y el nuestro no tiene
excepción, de una u otra manera el arte ha sido parte cotidiana del vivir de los Guachapalences y la
música ocupa un lugar muy especial en la historia de nuestro cantón.
La banda de música del Sr. Gilberto Castillo (+), honorable músico y artesano era la que alegraba las
tardes de sábado o domingos por la mañana entonando ritmos tradicionales ecuatorianos, melodías
alegres que le daba un matíz especial al corazón parroquiano, pero luego del fallecimiento de este
honorable ciudadano el pueblo sufrió un vacío muy grande, no era lo mismo escuchar a la banda sin su
principal mentor y su inseparable clarinete que de a poco quedó en el olvido, por eso creo que hemos sido
un poco ingratos y malagradecidos por todo el aporte cultural que el Sr. Castillo y otros tantos personajes
le dieron no solo a Guachapala, sino a toda la región.
Nuestro pueblo siempre tuvo grandes músicos, cantantes, solistas, dúos etc., pero pocos han sido los que
han logrado alcanzar objetivos y hacer de la música algo más que un pasatiempo.
El folklore estaba dando sus primeros pasos dentro del gusto de la juventud que por esos tiempos (70-
80’s) consumía todo tipo de música, ya sea foráneo o nacional y es así que después de algunos intentos se
llega a formar un grupo musical que llevaba por nombre Guachapelí y que estuvo integrado por los
jóvenes de esa época entre ellos Avelino Román, Max Zeas, Marcelo Gómez, Miguel Mejía (+) y John
Espinoza, desgraciadamente este grupo no duró mucho tiempo porque no hubo constancia y solo quedó
en eso.
Al cabo de algunos años se pone nuevamente de moda el folklore con más influencias de grupos
latinoamericanos que sonaban constantemente en las emisoras de radio, en las peñas artísticas que se
desarrollaban en las festividades se traía grupos de música latinoamericana para amenizar los programas,
esto gustó y llamó la atención de algunos jóvenes del pueblo y de esta manera luego de una noche de
tertulias nace la idea de crear un grupo netamente folklórico. Muy dura y complicada resultó esta aventura
porque no había muchos recursos económicos para adquirir instrumentos pero con lo poco que se
disponía se logró conformar el grupo de música latinoamericana bajo el nombre de Allcuquiro (nombre
de la montaña más alta que se divisa desde nuestro pueblo) nombre quichua un poco ortodoxo para una
agrupación musical pero la idea era siempre identificar al grupo con algo representativo del pueblo o de la
región.
Juan Suquinagua,músico, fotógrafo y zapatero del pueblo y los jóvenes Dionicio Jara, Edgar López,
Alberto Gómez, Mesías Verdugo, Jorge Monroy (+) y Hernán Crespo logran juntarse y fundar esta
agrupación que de a poco se fue haciendo conocer dentro del ámbito local.
Tras una serie de gestiones y con la ayuda de la Junta Parroquial encabezada por el Sr. Genaro Suco,
Bosco Espinoza, Juan Loja (+) Ernesto Pacheco (+) más el sacerdote Rvd. Eduardo Ochoa y otros
ciudadanos más logramos obtener ayuda económica para poder comprar algunos de los instrumentos que
nos hacían falta y así de a poco esto se fué consolidando, entonces el grupo era ya protagonista en varios
programas que se presentaban dentro de todo tipo de festividades sociales y culturales a nivel regional.
Más como en toda familia, surgieron algunos contratiempos y el grupo se separa por un corto período
para luego regresar con ideas frescas y nombre nuevo, ahí es cuando se forma definitivamente el grupo
CHAQUIÑAN, grupo que por muchos años le dió alegrías a quienes gustaban del folklore y fue motivo
de orgullo del pueblo entero, por muchas razones y además porque eran los artistas y representantes de
GUACHAPALA en todos los lugares a donde eran invitados a tocar.
Muchas noches de ensayos y desvelos serían las que luego vinieron, después de terminar el colegio,
regresar a nuestras casas, hacer deberes y otras obligaciones, cada uno de nosotros teníamos otro
pasatiempo que nos llenaba el alma, era la música, en ese entonces algo que se practicaba con mucho
entusiasmo pero muy poca disciplina, la inexperiencia o tal vez la falta de un líder o guía con algo más de
conocimiento musical se hacía notar, pero el afán y las ganas de superación no se perdía, poco a poco
iban saliendo canciones que se escuchaba con agrado y que la gente las iba conociendo y cantando al
mismo tiempo.
Siempre soñábamos con grabar un disco, sabíamos que era una posibilidad lejana y muy remota debido a
la falta de recursos…pero nunca dejamos de soñar.
Acumulamos miles de experiencias con el pasar del tiempo, viajes, anécdotas, trasnochadas, conquistas
amorosas, desilusiones, caminatas con los instrumentos a cuestas y el típico “regreso del músico” era
recurrente en nuestro camino, pero la ilusión y las ganas de triunfar no nos quitaba nadie, otros jóvenes
empezaron a ilusionarse también y a seguir nuestros pasos, algunos llegaron a formar parte del grupo,
otros solo nos seguían pero ya habíamos logrado sembrar algo y eso nos alegraba mucho porque sabíamos
que estábamos haciendo bien las cosas y dejando huella por donde quiera que íbamos.
Ganas de superación personal e intereses propios de los jóvenes terminaron con este hermoso sueño,
algunos salieron a la ciudad, otros nos fuimos más lejos, algunos amigos se fueron para siempre, otros se
quedaron y así termina esa etapa maravillosa de este recordado grupo que hace más de 30 años sonaba
por las noches en la vieja casona escolar mientras se ensayaba o se tocaba en alguna improvisada tarima
en tiempos de fiesta, lindos recuerdos que quedaron en la memoria de sus integrantes y de los
Guachapaleños que recuerdan con nostalgia esos viejos tiempos.
Alberto Gómez, Dionicio Jara, Edgar López, Hernán Crespo, Mesías Verdugo, Juan Suquinagua, Seferino
Morocho, Duque Rubio(+) Jorge Monroy (+) Julio Astudillo y uno que otro amigo integrante temporal
formaron parte de esta historia, una historia que no termina porque tenemos la esperanza que algún día
nos juntemos de nuevo para recordar o simplemente para incentivar a que otros jóvenes sigan cultivando
este hermoso arte y este género musical que mucha alegría nos regaló en nuestros años de juventud
Edgar Lopez

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