Vous êtes sur la page 1sur 5

El sargento Canuto

Manuel Ascencio Segura.El sargento Canuto es una comedia del escritor peruano Manuel Ascencio Segura, que subió a

escena en Lima, el 12 de septiembre de 1839. Es una sátira de la figura del militar advenedizo y fanfarrón. La obra tuvo un

gran éxito, y desde entonces ha tenido numerosas puestas en escena.

Estructura[editar]La comedia consta de un solo acto, con trece escenas. Escrita en verso, la mayoría de los versos son

octosílabos, y la estrofa más característica y lograda es la redondilla. La trama, como suele ocurrir en las piezas de Segura,

es muy sencilla. La acción, que es muy breve, se desarrolla en Lima, dentro de una vivienda de clase media “pobremente

amueblada”, en el año de 1838.

Personajes[editar]

 Don Sempronio, padre de familia de clase media, aficionado de la tauromaquia.


 El Sargento Canuto, militar fanfarrón, engreído y charlatán, galanteador de doña Jacoba.
 Doña Jacoba, hija de don Sempronio.
 Doña Nicolasa, hermana de doña Jacoba, llamada afectivamente “Colasa”.
 Pulido Cerezo, joven pretendiente de Jacoba.
 Cazoleta, soldado cuartelero, amigo y subordinado de Canuto.
 Don Juan, amigo de Pulido y pretendiente de doña Nicolasa.
 El escribano Sigismundo.
 Tarima, ayudante del escribano.
 Camote, sirviente de la casa de don Sempronio.

Resumen[editar]
La comedia se inicia cuando la señorita Jacoba le cuenta su desgracia a su hermana Nicolasa: el sinvergüenza del sargento
Canuto anda galanteándola constantemente y se atreve incluso a celarla, como si ella fuese ya su novia. Efectivamente, el
sargento Canuto está muy enamorado de ella y la visita frecuentemente. Sin embargo, Jacoba ama en secreto al joven
Pulido y rechaza al militar atrevido. Don Sempronio apoya al sargento Canuto y le dice que no tiene ningún inconveniente
en que se case con su hija Jacoba. Y es que el padre veía en aquel enlace una oportunidad de ascender socialmente, pues
Canuto prometía escalar imparablemente hasta General.De pronto llega Pulido, quien confronta a Canuto y lo reta a batirse
con pistolas, pero Canuto se acobarda y evita el enfrentamiento, aduciendo que él solo se batía con fusil, en campo de
batalla.Cuando aparece don Sempronio en escena, el sargento Canuto vuelve a cobrar “valentía” y ambos acuerdan cerrar
el contrato de matrimonio. Jacoba se niega a aceptarlo, pero don Sempronio le dice a su hija que tiene que acatar su
decisión, y ordena llamar al escribano para sellar de una vez el contrato. Contento por lo acordado, Canuto se retira.
Mientras tanto, Pulido y Jacoba intentan hacer cambiar su decisión a don Sempronio, aunque inútilmente.El sargento
Canuto vuelve acompañado de un soldado llamado Cazoleta, a quien deja en la puerta, armado con una bayoneta, con la
misión de no dejar pasar a nadie mientras se realice la ceremonia, exceptuando al escribano, que ya estaba en
camino.Canuto teme que el joven Pulido eche a perder su boda y exige que se retire. Pulido se va, aunque llega a decir que
su rival no se saldría con la suya. Al poco rato regresa acompañado de Juan (el pretendiente de Nicolasa), pero
disfrazados, de escribano y secretario, respectivamente.Cuando Canuto cree que ya se iba a cumplir su sueño más ansiado
(casarse con Jacoba), Pulido se descubre y logra desarmar a Cazoleta, aprovechando un descuido de éste. Sorprendido,
Canuto no se atreve a reaccionar y trata de apaciguar a Pulido con demostraciones de amistad.Al poco rato aparece don
Sigismundo, el escribano, que viene acompañado de su ayudante Tarima. Se les informa que deben dar fe del matrimonio
de Jacoba con Pulido. El sargento intenta protestar pero Pulido no lo deja hablar y lo echa fuera. Sin oponer resistencia
física, Canuto y Cazoleta se retiran no sin antes amenazar con volver con un batallón para vengarse (lo cual es otra
demostración de cobardía). Don Sempronio comprende finalmente su gran error y acepta el matrimonio de sus dos hijas:
Jacoba con Pulido y Nicolasa con Juan.Contexto[editar]Soldados peruanos departiendo. Ilustración de Max Radiguet, Lima,
1843.La obra se sitúa, como ya dijimos, en el año de 1838. Gobernaba entonces el Protector Andrés de Santa Cruz, a la
cabeza de la Confederación Perú-Boliviana. En la comedia se mencionan los hechos de armas que preludiaron el
establecimiento de tal creación geopolítica, que por lo demás tendría vida efímera: la batalla de Yanacocha, el encuentro de
Gramadal y la batalla de Socabaya. El sargento Canuto es uno de esos militares advenedizos que merced a su
participación en las luchas fratricidas ha logrado escalar meteóricamente en la milicia. Espera ascender un día a “General”.
El autor tiene el evidente propósito de criticar al militarismo, que ha elevado a la conducción de la República a gente de la
más baja ralea, quienes creen tener el derecho de abusar y aprovecharse del pueblo.

Valoración[editar]
Como en toda las comedias de Segura, más que el argumento lo que destaca es la espontaneidad de los personajes y la
gracia de los diálogos plagados de dichos populares, que ofrecen un vivo retrato —crítico, ingenioso y festivo—, de la
sociedad peruana en sus primeras décadas republicanas.

Bibliografía[editar]

 Basadre, Jorge: Historia de la República del Perú. 1822 - 1933, Octava Edición, corregida y aumentada. Editada por el
Diario "La República" de Lima y la Universidad "Ricardo Palma". Impreso en Santiago de Chile, 1998.
 Samaniego, Antenor: Literatura. Texto y Antología. Tomo 5. Lima, Librería Arica, sétima edición, 1964.
 Sánchez, Luis Alberto: La literatura peruana. Derrotero para una historia cultural del Perú, tomo III. Cuarta edición y
definitiva. Lima, P. L. Villanueva Editor, 1975.
 Segura, Manuel Ascensio: Ña Catita – El Sargento Canuto. Serie “Peruanos Imprescindibles”, Libro 13. Impreso y
publicado por la Empresa Editora El Comercio S.A., Lima, 2005. ISBN 9972-205-93-2
Discurso
El discurso (del latín discursus) es un término que refiere a tendencias de elaboración de un mensaje mediante recursos
expresivos y diversas estrategias. Para comprender el discurso es necesario tener en cuenta el contenido presentado
(tema), el contexto donde es producido, y los elementos expresivos, que pueden tener diversas funciones. Referencial, si
está dirigido hacia el contexto; persuasivo o connotativo, si el propósito es influir en el receptor; metalingüístico, si está en
función del código; de contacto, si está centrado en establecer comunicación con el receptor; y poético, si el mensaje se
representa como signo artístico.1El análisis del discurso es una praxis que se desarrolló en los años 1960 en
la antropología, la lingüística, la sociología, la filosofía, y la psicología. Más tarde, también lo hizo en otras disciplinas como
la historia, el estudio de la comunicación y el psicoanálisis. A partir de esto, algunos autores han logrado definir el
concepto discurso de distintas formas; por ejemplo, para Foucault, los discursos son un material del que parte el análisis de
lo social y de lo histórico. El sujeto hablante queda excluido, no es este quien dota al discurso de realidad y sentido, sino
que son las prácticas discursivas que crean los objetos y sujetos; mientras que para Ricoeur, el discurso se concibe como
una dialéctica de proposiciones y referente. Él piensa que en un texto existen varios sentidos, y estos dependen de la
subjetividad del sujeto, quien asumen un papel de intérprete frente al texto. Por otra parte, Benveniste define al discurso
como la aplicación concreta del sistema lingüístico, cuando este queda a cargo o es asumido, incluso transformado, por el
locutor en su acto de habla; el discurso para él es un modelo de comunicación. 2

Características generales del discurso

Aunque cada tipo de discurso tiene una características propias podemos distinguir aspectos similares entre los diferentes
discursos o formas del discurso.
Las principales características del discurso son la objetividad, especialización, precisión y verificabilidad. Pero existen
muchas más ¡Estas son las características generales que tienen los discursos!
 Contextos. Los factores discursivos que acompañan el texto influyen en el propio discurso. Esto hace referencia al contexto
comunicacional donde se produce el discurso.
 Objetividad. Los hechos y opiniones que se encuentran en el discurso serán tratadas con objetividad por parte del emisor. Siempre que
no se trata de un texto descriptivo subjetivo.
 Universalidad. Aunque el tema del discurso no sea de caracter universal el discurso tiene que comprendido por el receptor. Tenemos que
adecuar nuestro mensaje al tipo de receptor que nos esté escuchando. Si pretendemos cautivar a nuestra audiencia el discurso tiene que
ser comprendido.
 Especialización. Los discursos técnicos y especializados exigen el dominio del tema. Para exponer con éxito un discurso es necesario
conocer el tema del discurso.
 Precisión. Adecuación lo más objetiva posible de la acción que se transmite. Transmitir un mensaje basado en datos claros, precisos y
ordenados.
 Verificabilidad. El receptor tiene que tener la posibilidad de corroborar que la información transmitida en el discurso es real. Esto no es
aplicable por ejemplo al discurso narrativo literal basado en hechos ficticios o el discurso religioso.

 Continuidad. Para comprender el discurso será necesario prestar atención desde el principio hasta el final. Las partes del discurso siguen
una secuencia lógica lo que permite captar la atención del receptor.
El discurso, además, también se caracteriza por transmitir un mensaje de manera ordenada, ágil y con un lenguaje preciso,
conciso y dinámico.

Elementos del discurso

Elementos del Discurso


Los elementos del discurso se han fijado generalmente en nueve, aunque nosotros creemos que deberían ser diez. Estos son
el sustantivo, artículo, adjetivo, pronombre, verbo, participio, adverbio, preposición, conjunción e interjección.Sustantivo ó
Nombre
El sustantivo propio nombra a personas, animales o cosas específicas. Se escribe siempre con mayúscula en su primera letra.
Pueden ser nombres de personas, ríos, países, ciudades, de animales, de títulos, de establecimientos, entre otros.
Ejemplos: Raúl, Pérez.
Existen varios tipos de sustantivos que pueden estar presentes en el discurso en los cuales algunos de ellos son:
 Sustantivo simple: es el que está formado por una sola palabra.
Ejemplos: casa, …ver más…

Participio
El participio es siempre pasivo en castellano y no posee formas compuestas; como es pasivo, puede llevar complementos
agentes (ejemplo: amado por alguien). Denota siempre tiempo pasado y aspecto perfectivo, y sirve para formar los tiempos
compuestos o perfectos de la conjugación regular en castellano (he cantado una canción, había venido, habré temido...), para
conjugar la voz pasiva (la canción ha sido cantada por mí), para formar oraciones subordinadas (ejemplo: dicho esto, se murió)
absolutas o no, y para calificar a sustantivos (el libro prestado era bueno).
Por su construcción, existen dos tipos de participios en castellano: los regulares y los irregulares. Los regulares se construyen
de la siguiente manera:
Los de la primera conjugación terminan en -ado/a y los de la segunda y tercera en -ido/a: de cantar, cantado; de temer, temido;
de partir, partido.
Los participios irregulares ven desfigurado el lexema y pierden el morfema de participio: de ver, visto; de escribir, escrito.
Existen verbos que poseen ambas formas: una para formar los tiempos compuestos (he freído1 la carne; ojalá haya imprimido
el trabajo, por ejemplo), y otra que tiene función adjetiva (el huevo frito; el libro impreso).

Vous aimerez peut-être aussi