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1 H S O ID Il
Cultural de Posdata . N º 93 . Viernes 15 de
a
oc t ubre de 1999
Dossier: Florencio Sánchez ¿ha envejecido? (p 1 a 9) / Anima Mundi : (p 10) / Libros: El crimen de Toledo de
Hugo Fontana (p 11) / Tinta fresca (p 12) / Nota: Adel anto de Soñar con los ojos abiertos. Una vida de Diego
Rivera de Patrick Marnham (p 13, 14) / Rehermann (p 15) / Marosa (p 15) / Golpe de ojo: Federico Rubio (p 16)
UN POLÉMICO TRABAJO DE RICARDO PRIETO
BJ 2 15 de octubre de 1999.
En la borda del Príncipe di Udine
rumbo a Europa.
nos dice: "Si aquel sonámbulo genial hubiera conquistadores. Se estrenaban obras despojadas que culmina de manera arbitraria. El personaje
sido un trabajador metódico, un disciplinado o de vivencialidad, sin caracteres psicológicos bien de Cantalicio es esquemático y pueril y pierde
un equilibrado, con algo menos de bohemio y delineados, cargadas de un lirismo 'culturoso' estatura dramática a medida que la lectura o la
algo más de burgués, creo que su suerte habría de cuño europeo. E ran textos retóricos, representación avanzan.
sido muy distinta de lo que fue, de tal manera melodramáticos, literarios, desprovistos de
halló fácil y llano el camino que debía llevarlo a emoción y teatralidad. EJ,pasado es una pieza absurda. Planteamiento
la consagración de su talento". Florencio irrumpe con un teatro mimético y y desarrollo son poco convincentes. Resulta
La leyenda de la indiferencia y la conjuración carnal que el público de su época, que ha sido artificiosa.
puede ser rebatida con algunos datos puntuales. reflejado en él, celebra con entusiasmo. Se
Sánchez estrenó Puertas adentro, su prin1era obra, apropia de las sustancias del primitivo teatro También es artificiosa Nuestros hijos, obra de
a los veintidós años; la segw1da, La gente honesta, criollo y las instaura en "la corriente renovadora tesis que se desmorona estrepitosamente apenas
a los veintisiete; y a los veintiocho años asistió al del naturalismo adaptado a la realidad nacional'', comienza. El afán de Sánchez de proyectar sus
estreno deMi hijo el doctor,la pieza que lo consagró como dice Walter Rela en el valioso ensayo El ideas desequilibra toda la pieza.
definitivamente. A partir de ese momento su teatro de Florencio Sánchez.
carrera no se detiene nunca. "Si se hiciera un ¿Qué ocurre con su obra revisada hoy? Lo mismo ocurre con Los derechos de la salud,
cómputo de las reacciones que provocó en sus escuálido ejemplo de teatro de ideas que a esta
contemporáneos se vería que fue tratado y Mi hijo el doctor es una pieza con escasa acción altura del siglo xx resulta francamente
también pagado como pocos", afirma Jorge dramática. El lenguaje es retórico y el discurso irrepresentable.
Cruz. Llegó incluso a vivir del teatro, algo que solemne. El primer acto culmina de manera
ningún autor dramático posterior a él pudo excesivamente dramática. Ese dramatismo es Los muertos es un ejemplo bastante acabado
lograr. Con el producto de la venta de Barranca compulsivo, impuesto por el autor, y no se del naturalismo de Sánchez. Es una de sus
abajo se compró una casa en Banfield. Su trabajo carnaliza en acontecimientos.Julio, el hijo, quien mejores obras. Pero se resiente por exceso de
como secretario de redacción de Tribuna le se opone permanentemente al padre y representa retórica. "¡Mátame! ¡Mátameymátate! ¡Tal vez
reportaba el sueldo más alto del diario. En La una nueva escala de valores, es un personaje sea mejor! Le ahorraremos a nuestro hijo el m al
Opinión le pagaban doscientos pesos mensuales endeble, esquem ático y mal delineado; no posee ejemplo de nuestras vidas pervertidas'', exclama
por un artículo semanal. Jerónimo Podestá le vida propia y p arece un simple vocero de Amelía en el final de prim er acto.
compró Mi hijo el doctor, Canillita y Cédulas de San la s conceptualizacion es del autor. El
Juan. Pero aquel "manirroto inigualable", como m elodramatismo debilita continuam ente la Mano santa es un simple apunte que carece
lo califica su amigo Manuel Gálvez, confiesa en pieza . Ésta se desbarranca de man era de desarrollo y de vigor estructur al.
una carta: "Es cosa del diablo que no pueda irremediable en el acto tercero.
adquirir el sentido práctico de la vida. Creo que Moneda falsa es la epidérmica exploración de
si me cayera la lotería del millón, a los quince La pobre gente tiene un primer acto demasiado m1111undo marginal. Pieza sin antagonistas, sin
días andaría galgueando por un peso". exasperado. Es una obra que carece de respiros y personajes creíbles, sin acción dramática.
Sánchez fue, además, designado matices y no fluye adecuadamente. La
Comisionado Oficial del Gobierno Uruguayo descripción psicológica de los personajes es Los derechos de la salud, obra muy celebrada
para estudiar la participación de nuestro país en demasiado ramplona. La decadencia moral está por los críticos teatrales contemporáneos de
la exposición artística mundial de Roma. Este delineada con brocha gorda. La acción dramática Sánchez, y considerada por muchos la mejor de
decreto del presidente Williman revela la solidez se desarrolla arbitrariamente. En el segundo acto las piezas puramente ideológicas, padece de una
del prestigio que tenía el dramaturgo. Sin la obra decae y se precipita en el caos. r etórica asfixiante, casi ridícu la. "Las
embargo, la leyenda negra continuó proyectando circunstancias planteadas por el autor son
el mito hacia adelante. La gringa posee un excelente primer acto. innecesarias y de mal gusto y no contribuyen a
Es cierto que la magnitud de ese mito fue Los caracteres están bien trabajados. T iene imponer la pretendida tesis de la soberanía del
acrecentada por los insoslayables aportes de pr ogresión dramática y ritmo aceptable. En el instinto", dice Alfredo de la Guardia al referirse
Sánchez al teatro rioplatense. Antes de ·su segundo acto el dramatismo se excede: hay a esta pieza.
aparición, los dramaturgos se sometían a los desajustes de ritmo, hay exabruptos. El tercer y
modelos clásicos importados por los cuarto actos son irrepresentables. Es una obra Marta Gruni. Melodramático bosquejo
PtJ 4 15 de ocrubre de 1999.
Escena final de Los muertos. Fotografia
autografiada por Rorencio Sánchez.
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sobre la vida de la gente humilde y marginada. La precaria escritura dramática se De Canillita (acto único, cuadro III)
desborda en escenas violentas que bordean lo cursi casi siempre.
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HI 6 15 d e octubre d e 1999.
TE!TRO APOLO De Los muertos (acto I, escena VII)
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. 1, .. ,.. •..• LISANDRO Y AMELIA
l'Olm I'. PODllB'l'A (...)
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LISAND: (Exasperado.) ¡Dios...! ¡Dios!... (Después de una pausa) Decíme... ¡Y si yo te matase?
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AMELIA: Mátame ... Sería lo único que te quedara por hacer; completar la obra... ¡Estarías en tu
-~::ii:-· " ...... ......... - derecho, desde que sos el marido!...
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A ustedes le permite todo la ley, la sociedad y qué sé yo, hasta la religión. Nadie, nadie sin haberlo
1nmm1•11 pasado, puede imaginarse toda la miseria de nuestra vida conyugal.A la mujer más santa, más
sufrida, la pondría en mi caso, para demostrar la abnegación con que te soporté siempre. Te
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quería cuando me casé, te quise más cuando me hiciste madre, a pesar de que ya empezaba a
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conocerte.
Después manoseaste mi amor propio de mujer, me abandonaste y te fuiste abandonando y
t I::.:~'~ .................. perdiendo poco a poco los escrúpulos, hasta presentarte ante mis ojos como el más vulgar, como
el más indigno y repugnante de los seres.
Todavía me oprime acá el recuerdo de la náusea con que noche tras noche me obsequiaba tu
tOSIUEHTOS borrachera asquerosa... y las privaciones y el oprobio de la mentira y de la embrolla, porque ni el
coraje les queda de tratar con los acreedores... Y el hambre y la mendicidad vergonzante ... todo es
....
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··-· -· ._,..~ poco. Encima el marido se abroga el derecho, amparado por la ley y la sociedad, de matar a la
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infeliz mujer que ha tenido el coraje de emanciparse... y reclamar su parte de dicha en esta vida...
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¡Mátame!... ¡Mátame... y mátate! ... ¡Tal vez sea mejor! Así le ahorraremos a nuestro hijo el mal
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!";... :;:.:..--:::·;... :::·::. .~ .-. -·...r.w ejemplo de nuestras vidas pervertidas.
LISAND: ¡Tenés razón!... ¡He sido un infame!... ¡Ya no hay remedio!. .. ¡Soy un desgraciado!... ¿No es
Canales de atre:3 deArloas. 3dePaysandu. 3de Ril Branco.4 de Chuy. 7 deTacuarembó. Bde Rosatlo, 8 de Salo. 9del\ootla. 9 de Paso de ~s TOios, IO de Rivera. 10 do Bel~ Unión, 11de Durazno, 11delbes. 11 deTreinta yTres,12de Fray Benlos, 12de Mercedes, 12de OOIOles, 12de Me~. 10de GUichón.
Cwlesde Cab~:2 Tele Cate (Paysaról), 16 CatieCola (COO)), 9 Cable Dos f/il (Taamrnbó), 6 Catje\'"oilo (Salkl), 11 RochaCable Cokr (Rocha), 10\ldeo Callle (Rivera). 31 Yl\llsión(Durazoo),22 Trilidad \ldoo C¡¡Jje (Trilidad), 2CabloVISiónTrena yTres Cable S.R.L. (Trelnla yTres). 13 RiolJr-Cablo
'>lsión (fny-), 12lV. CableOokres (Dc*m), 9Mdo T.V. Cable (Má>), 2MinasCable Y"oilo (Mms). BCoósoo:lo\lideoCable (Aolida). 13lazcano 1V. catieColor(Rocha).21 ConSOltioCable Y"oiloC.C.V. (San.José), 2.3Ddm T.V. Ca!UC<iorla, 11Cable\lsóón.José8. Cl'dMel~Salle yllnlól\ez),
14 Cab~ l'isiin (Mercedes),44 l'llnla Cab~ (P. del Esle •Mil<looaoo), 8 San CRs Cablo Salfitll (San Catos). 2Cam1elo Cable \lsión (Ciwmekl), 2CAlV San Gropio de Po/aneo (San G. de Polor<o), 3CAlVSmndl del Yí (Saiand dllYI), 11 Telecab~ La Paz. Las PledJu (La P;Ws Pieáas), Aolida lete-.1!0l2
Cola(Aorida), OinlrlVcatie (SWClaradetQ;re),f-CaHIYisión (M;risW). ,!YCableAchir(AchM).lVGall!e Clr1i1a (Ctrlíla),lVCa!*! Cl'nbúes (Cl'nbúesdelava!e). TVCable Tuias (Tarms), CllileYisilnMsita (Vla Anlina), TVCablePalnal(Sorlano), Canal38(Mljlse\IJ·Moo!Mi0l).
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Ricardo Prieto
Fundación del teatro nacional: colocación de la
primera piedra. Dibujo de Jiménez publicado el
20 de agosto de 1903. Aparecen Florencia
Sánchez, Nicolás Granada y E. García Vel loso.
LUIS: ¡Oh, Tigra! ¡Qué buena eres! Si antes te he para que pueda ofrecerte lo que doy al primer
querido, ahora te admiro, te adoro. Óyeme.Ven desconocido que se me acerca. Déjame con mi vida y
conmigo. Pronto seré mayor y entraré en posesión de con mis costumbres. Mañana no daré más. La suerte
mis bienes.Vente.Te necesito como mujer y te necesito dispondrá del resto de mis días, pero estaré tranquila.
como madre. Ella tendrá ya su carrera y será una institutriz,
LA TIGRA: ¡Oh! ¡Criatura! ¡Criatura! preparada para la lucha, sabrá hallar su lote de felicidad.
LUIS: ¡ Sí, mi Tigra! Abandona ese medio. Nos iremos a Como lo he encontrado yo, como todos lo encuentran.
vivir lejos, al campo, a otro país, donde nadie nos conozca, Luís: (Con intención.) ¿Quieres que te dé un beso?
donde nadie te avergüence. LA TIGRA: Sí.Vení. (Luis se le arroja al cuello, llorando.)
LA TIGRA: Avergonzarme, ¿de qué? ¿Qué? ¿Lloras? (Transportada, le cubre el rostro de
LUIS: Donde nadie se avergüence de ti. La llevaremos a besos.) ¡Mi niño! ¡Mi poeta! (Luego se separa y se
ella, a la nena, donde puedas quererla a tus anchas Con oculta para enjugarse las lágrimas. Pausa. Reaccionando.)
toda libertad, dándole ese mundo de ternura que llevas ¡Vamos, Luis! Es tarde y debo acostarme.
ahí dentro. LUIS: ¡No, no!
LATIGRA: ¡Mi niñito, mi niñito inocente! ¡Mi niñito poeta! LA TIGRA: (Obligándolo, maternalmente.) Toma tu
LUIS: Piensa en ella, piensa también en mí. Educada como sombrero, y mañana hablaremos en el café.
está, mañana cuando descubra la verdad, Podría hasta... LUIS. (Como atontado, se encamina a Ja puerta.Antes de
repudiarte. salir se vuelve suplicante.) ¡Esta noche al menos!
LA TIGRA: ¡Oh! ¡No, nunca! Cálmate y no te exaltes y LA TIGRA: No. Está la nena en casa. (Luis le besa
razonemos como antes. No insistas en lo que no podrá respetuosamente Ja mano y se va.)
ser nunca. Soy lo bastante honrada para negarte tan
franco servicio y te has metido mucho aquí (el corazón) TELÓN
!
en esa cifra las tres piezas que corrieron el extraño
albur de la desaparición y, por ende, el misterio.
Poco más de diez años de escritura y toda una
centuria de estrenos. Porque si algo ha ofrecido
la producción sanchiana es su posibilidad de
común de su época ya no
existen. Incluso el manejo del discurso de sus
personajes puede parecer inactual. Sin embargo,
la visión de sus sainetes, al igual que parte de sus
o bras 'largas' como Los muertos, En familia y de
Creo que las palabras que
cierran el ensayo 'Florencio Sánchez: vida y obra
en tres actos', del propio Erando (y lµego de
haberse leído este incisivo estudi'o en su
totalidad), apuntan con certeza hacia el m eollo
representación. U na y otra vez, como regresando la deslumbrante Barranca abajo, nos muestran una del asunto: la contemporaneidad de Sánchez,
a un viejo mito fundacional, a un clásico venerado, lúcida forma de debatir nuestros problemas, de más allá del nivel textual en sí, radica en el
a las raíces del fenómeno espectacular regional, pensar profundamente nuestros países". acercamiento crítico, o mejor, en el modo en
las distintas compañías teatrales han puesto en En ese mismo lugar, firmas como las de Noé que la mirada crítica se instale frente a su obra:
escena sus piezas urbanas y rurales, sus sainetes. J itrik y Roger Mirza proponen nuevas formas "Se aproxima el siglo de representaciones y,
Por otra parte la tradición escolar se apropió de lectura y representación. Ambos abogan por con distintos argumentos, vuelven a plantearse
- casi con ' naturalidad'- de la obr a del la vigencia del teatro de Sánchez y no niegan la la pertinencia y la vigencia de la obra de Sán.chez.
dramaturgo. Program as liceales, grupos de teatro posi bilidad de "un rescate e fectivo, n o Es posible que una estética m enos dogm ática
escolar, profesores y maestros, textos de estudio celebratario ni precatiamente monumental ista" que la del m edio siglo y a su vez m ás ecléctica (si
y de lectura curriculares, retoman pe1iódicamente de su obra. es esa la que predomina en n uestr os días)
a las páginas de Canillita, Moneda falsa, El desal-Ojo, Ya en el estribo del siglo, la crítica vuelve a la reconozca en Sánchez algo más que la tutela del
En familia y Barranca abajo. carga sobre la obra de Sánchez. En el libro El bronce o las dos o tres obras 'que se salvan'. Es
¿Cómo puede una obra de las características 900 (Tomo I , 1999) coordinado por Osear probable que esa mirada vea como virtudes los
de la de F lorencio Sánchez sostenerse con Erando, se recuperan diversos arúculos y textos altibajos y aun como movimientos voluntarios
absoluta frescura e indiscutible vigencia en el de valor documental y hermenéutico, entre ellos: los desniveles que el dram aturgo impuso en su
campo intelectual, en la dimensión educativa y la conferencia leída por Joaquín de Vedia en el obra con el fin, quizá, de democr atizar el mw1do
en el imaginario de los pueblos de anlbas orillas Teatro Nacion al Norte poco después del representado [...] Ambición pionera, coagulación
del P lata? fallecimiento del dramaturgo y publicada en súbita y un proyecto para el teatro rioplatense
Comoedia est imitatio vitae speculum 1911; el trabajo de David Viñas 'Florencio profundamen te integr ador, precoz y
consuetudines et imago veritatis: la locución latina Sánchez y la revo lu ción de los sorprendentemente masmediático: las tres fases
podría ofrecer una respuesta confortable para esta inte lectuales' (1964); el arúculo (transcripto desembocan en w1 espacio, parlante o mudo, que
interrogante. fragmentariamente) 'Tres miradas sobre tiene como nombre propio Florencia Sánchez."
En un trabajo que ya referí y reseñé en estas Barranca Abajo' de Antonio Larreta, publicado
páginas (lnsomnia, Nº79), intitulado Florencio originalmente en el ya legen dari o volumen Gerardo Ciando
Literatura contemporánea d e Q u ebec - El profesor Aur élien Boivin, de la U niversidad Lava! en Quebec, destacado investigador de
historia literaria, presentará una conferencia en la Facultad de Humanidades y C ien cias de la Educación, titulada 'Literatura contemporá-
nea de Qucbec'. el jueves 21 de octubre d e 1999 a las 16.30 horas. La entrad a es gratuita.
50º aniversario de la República F ederal d e Alem arua - En el mar co de las celebr aciones del cincuenten ario de la RFA, el Instituto
Cocthe, en colaboración con C inem ateca Uruguaya, la Casa Bertolt Br ech y FESUR, invita al ciclo de películas, charlas y confer en cias a
?~s:irroll_ar-.. c en ~inemateca Uruguaya (Lorenzo Carnelli 13 11). Se proyectarán los filmes Las hermanas alemanas, de Margarethe Von
r~ott.1(\ 1 crncs 1) ); P(lmrje perdido, deAndreas Kleinert (sábado 16); País silencioso, de Andreas Dressen (domingo l 7);Alasdel deseo, de Wim
\ \ cndcr~ Oune' 18)) Lt1 promesn, de Margarethe von Trotta (martes 19). Por otra parte, el sábado 16 de octubre a las 20 horas el sem iólogo
Fern;indo \ndac:ht had una breve presentación de la Alemania reunificada. Las invitacion es pueden retirarse en la recepción del Instituto
Goethc,Canclonc 1524.
Toledo for expon
Gracias a las bondades de un libro escrito corrido aleatorio por la his- a la fuerza de las imágenes y la
hace tres décadas, buena parte de las novelas toria de Toledo. Tal como sensibilidad puesta en su des-
de escrito res latinoamericanos que hablan de ocurre con la m emoria, las cripción. Y aunque por m o-
algún pueblito caen en la tentación de sazo- imágenes que llegan del pasa- mentos el vaivén de la memo-
nar el anecdotario propio de ese lugar con do lo hacen a través del cristal ria amenace con h acer
señores muy viejos dotados de alas enom1es colo r eado del propio yo, y tambalear el hilo conductor de
o perros azules con ojos tristes que vuelan. al por ende lo real y lo imaginado son una la historia, la potencia de lo escrito
menor viento que se levanta. Es lo que po- sola cosa en el texto. supera cualquier problema resultan-
dría llamarse el 'Smdrome G . G. M.' o, más Aunque es probable que muchas per- te de la fragmentación del texto.
amistosamente, 'Complejo de Gabo', una en- sonas reales de Toledo, coetáneos de Fon- La edición es correcta y lo úni-
fermedad que ha sido padecida por decenas tana, se den por aludidos (o incluso mo- co relativamente irritante en ella es
de autores, especialmente por la chilena Isa- lestos si se entienden maltratados por la la pasión de los responsables de so-
bel Allende. n arración) ante anécdotas reconocibles, no lapas y contratapa por asignarle al
Debido a lo perdurable que ha r esultado es menos cierto que éstas aparecen reconfi- texto un carácter "policial" del que
ese popular padecimiento, la novela de Hugo guradas por la mirada del escritor. D ónde carece por completo, una insisten- .
Fontana, El crimen de Toledo, poclria haber pro- se sitúa ese ojo, qué cosas selecciona para cia que parece tener que ver más con
vocado fruncimientos de ceño acompañados mostrar al lector y qué caminos elige para una equivocada versión del marke-
de socarronas miradas de inteligencia en la mostrarlas son justamente sus principales ting literario que con el material que
cara de cualquier crítico literario: "Hummm... m éritos. supuestamente describe. Y aunque
otra historia sobre un pueblo que combina Fontana recoge retazos de información el libro se llame El crimen de Toledo,
algún elemento personal con todos los clisés periodística, fragmentos de libros de his- ese asesinato es un componente más (uno de
del realismo mágico". toria, ínfimas experiencias personales y los más misteriosos, es justo reconocerlo) den-
Sin embargo, y como señal de que in- anécdotas de r elevancia local, para pasarles tro del puzzle de recuerdos e imágenes anna-
cluso en U ruguay los tiempos literarios la tabla rasa de su memoria, equiparando do por Fontana.
están cambiando, Fontana escribió un li- así lo históricamente 'importante' (el fa- Contar la historia 'secreta' de un lugar
bro inteligente y sensible que, con un ma- moso descarrilamiento del tren en 1962 que desde una perspectiva tan personal como ar-
terial tan vago como los propios recuerdos provocara decen as de muertos), con lo 'pe- bitraria y construir con eso una novela real-
del pueblo de origen, da lugar a una narra- queño' y arbitrario (la historia de algunos mente interesante, definitivamente no es poca
ción vigorosa y atractiva. Afortunadam en- de los fallecidos en el accidente y cómo el cosa. A contramano del tonto eslogan de la
te, El crimen de Toledo está muy lejos de las narrador recuerda haber vivido esos días). película El Chevrolé, en Toledo, parece decir
rígidas traslaciones ' m ágicas' qu e tantos Extenderse en el rico anecdotario con Fontana, pasa de todo.
dólares han dado a los peores imitadores que el escritor am1a su relato carece de sen-
de García Márquez. tido y sería adelantar a un probable lector Fernanáo Santullo Barrio
Después de una breve introducción , en fragmentos del libro. Vale la pena en cam-
do nde el narrador expone los motivos del bio señalar la especial habilidad de Fonta- EL CRIMEN DE TOLEDO - Hugo
insomnio que lo lleva a contar su historia, na para convertir todo eso en buen m ate- Fontana - Alfaguara - Montevideo, 1999 -
el libro comienza a fragmentarse en un re- rial liter ario, algo logrado sobr e todo gracias 281 págs - Distribuye $antillana.
gestión y cobranza
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Cobranza judicial y extrajudicial de deudores en gestión
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Cuarenta años median entre la última biografía del pintor mexicano y ésta que
Patrick Marnham ha subtitulado 'Una vida de Diego Rivera'. El objeto de estudio
no ha cambiado (Rivera murió en 1957) pero ciertamente sí lo ha hecho el punto
de vista. Es por ello que Marnham propone la lectura de una de las muchas vidas
de Rivera y la de la época que le tocó vivir, rodeado de personajes tan interesantes como complejos.
lnsomnia ofrece, a continuación, un fragmento de dicha biografía publicada por Plaza & J anés.
Por algún motivo, seguramente la en 1916 y lo confundió con un Picasso, Rivera son escasas y no hay nin-
muerte de Porfirio Díaz, que se produjo hasta que le corrigieron; y casi un año g.wrn señal revolucionaria poste-
en París en 1915 cuando el dictador exi- después de pintarlo, Rivera todavía lo lla- nor.
liado contaba ochenta y cinco años, aquel maba "mi trofeo mexicano". Pero "el trofeo mexicano" tuvo otra
año Rivera se sintió lo bastante atraído Aún hay otro motivo para dudar del importancia para Rivera: le condujo a su
por México como para dedicar uno de alcance del compromiso revolucionario primer contacto con un marchante de
sus mejores cuadros cubistas a un tema de Rivera en esa época. En 1915 resulta- arte, Léonce Rosenberg. [...] Al princi-
mexicano. Lo tituló Paisaje zapatista, y ba sumamente difícil seguir desde lejos pio el nuevo acuerdo, que para Rivera
dijo que "representaba un sombrero cam- los acontecimientos políticos que se pro- tenía gran importancia, funcionó bien.
pesino mexicano colgado sobre una jar- ducían en México. El levantamiento ori- Pero desgraciadamente el cuadro que
dinera, detrás de un rifle. Lo realicé sin ginal se había convertido en un derrama- parecía ofrecerle a Rivera un nuevo y bri-
ningún boceto preliminar en mi estudio miento de sangre que duró nueve años. llante futuro también provocó una pelea
de París, y seguramente es la más fiel ex- En 1915, año de la muerte de Díaz, Ma- con Picasso, y no parece que haya gran-
presión del talante mexicano que yo haya dero, el hombre que en 191 1 había exi- d es dudas acerca de quién estaba
conseguido jamás. Picasso visitó mi es- liado al dictador, ya había sido a su vez equivocado.
tudio para ver mis nuevos cuadros, le derrocado y asesinado (en 1913) por uno Hacia finales de 1915 Picasso termi-
gustó, y la aprobación de Picasso hizo de sus propios generales, Huerta, al que nó un gran lien zo cubista que tituló
que prácticamente todo el mundo lo inmediatamente se opusieron otros cua- Honime accoude sur une table. En su ver-
aceptara". El Paisaje zapatista, también tro líderes revolucionarios: Carranza, sión original este cuadro guardaba un
conocido como El guerrillero, es la pri- Zapata, Pancho Villa y Orozco. En 1914 parecido evidente con el Paisaje zapatista,
mera demostración del compromiso de Carranza, Zapata y Villa habían conse- que Rivera había terminado meses atrás,
Rivera con la política progresista. [...]Tras guido exiliar a Huerta y Orozco, después en el veran o de 1915. En su biografía de
el Paisaje zapatista, Rivera, que estaba a de lo cual Villa atacó a Carranza, que lo Picasso, J ohn Richardson su giere que
favor de la Revolución, podía afirmar que venció mientras organizaba el asesinato Rivera acusó a Picasso de plagio para ha-
era un revolucionario; la influencia de de Zapata . Quedaban Carranza y su ge- cerse "un nombre'', pero confirma que
Ehrenburg, Angelina y otros había sur- neral, Obregón, que se pelearon, lo que fue Picasso quien cometió el robo. Des-
tido efecto. En la leyenda que posterior- permitió a este último organizar el asesi- pués de la queja de Rivera, Picasso mo-
mente divulgó para ocultar los hechos nato de Carranza. Para simplificar las co- dificó la parte central de su cuadro para
reales de su vida, Paisaje zapatista era una sas, podríamos decir que Madero exilió a que no se pareciera al de Rivera, pero el
de las pocas pruebas sólidas que sugería Díaz, Huerta mató a Madero, Carranza daño ya estaba h echo. Marevna recorda-
que Rivera había exhibido simpatías re- exilió a Huerta y mató a Zapata, pero ba haber oído tma violenta discusión, que
volucionarias cuando el resultado del le- fue asesinado por Obregón. La caótica terminó cuando Rivera amenazó a Picas-
vantamiento en México todavía se estaba sucesión de acontecimientos, la mezcla so con su enorme bastón mexicano. Tam-
por decidir. Pero aun en este caso hay de tragedia y farsa, hacía difícil que los bién hay pruebas fotográficas de las ma-
problemas, pues Rivera no parece haber fríos bolcheviques de París se tomaran la las relaciones entre los dos pintores. En
dado al cuadro ningún título cuando lo Revolución Mexicana con la adecuada se- 1915, cuando terminó su paisaje mexica-
pintó y, sin el título posterior, su signifi- riedad. [...] En cualquier caso, las refe- no, Rivera se hizo fotografiar con la pa-
cado resulta ambiguo. Max Jacob lo vio rencias mexicanas en las obras cubistas de leta en la mano, de pie, orgulloso, a la
15dcocrubrodo1999. ru: 13
derecha de su cuadro, con pan- acompañar a María del Pilar, que regre- el reportaje fotográfico de Cocteau.
talones oscuros, una camisa saba a México. Al regresar a París, Ange- Aquella mañana -era sábado-, había re-
blanca y corbata del mismo co- lina quedó embarazada. Llevaba cuatro cibido la carta de Roché y le había con-
lor. Para burlarse del ingenuo años viviendo con Rivera y hacía seis que testado inmediatamente, para comunicar-
placer que Rivera obtenía de su lo conocía. Es posible que la madre del le que accedía a venderle dos paisajes por
cuadro, Picasso posó para una pintor la animara, y después del contra- doscientos francos cada uno y un peque-
fotografía, de pie en la misma to con Rosenberg, Angelina debía de al- ño bodegón por cien francos, lo que en
posición que Rivera, con la mis- bergar esperanzas de alcanzar cierta segu- total equivaldría a unos seiscientos
• ma ropa (hasta la corbata), de- ridad económica. [... ] dólares. [...]
lante de la primera versión , muy Había otro motivo por el que Ange- En cualquier caso, Rivera n ecesitaba
parecida, de su Hombre sentado. lina decidió ten er un hijo: cada vez la in- dinero, pues había aprovechado el inter-
Más tarde, después de modifi- quietaba más el creciente interés de Ri- namiento de Angelina en el hospital para
car el cuadro para disimular la vera por Marevna, que era doce años más iniciar un romance con Marevna.
semejanza con la obra de Rive- joven que Angelina y seis que Diego. La noticia no sorprendió a Angelina:
ra, Picasso volvió a posar delan- Cuando se enteró de que Angelina esta- Rivera le había dicho varias veces que se
te del cuadro, pero esta vez con ba embarazada, Rivera se mostró feliz, había enamorado de Marevna. Pero lo
otra ropa. [...] E n otoño de 1915 pero en realidad estaba profundamente que sí le sorprendió fue el momento ele-
Picasso hizo otra referencia a la alterado. gido. En sus memorias Angelina escribió:
pelea. Dibujó un boceto en que En 1916 la vida en Montparnasse ha- "El niño acababa de nacer... Diego
lo vemos frente a la ventana de bía alcanzado cierta estabilidad. [...] Cada parecía muy feliz, decía que quería tener
Gaby, delante del cementerio de vez regr esaban del frente más artistas y más hijos. Pero mientras yo estaba en la
Montparnasse. [...] Está esperan- parnassoís, heridos pero capaces de reanu- clínica, una joven que se hacía llamar
do una señal de Gaby, y en la dar su trabajo. Braque y Apollinaire fue- amiga mía y a la que yo había acogido en
esquina del dibujo vemos que ron dados de baja durante aquel año, con mi casa ante la recomendación de Ehren-
ella está h aciéndola. Entretanto, graves heridas en la cabeza, y a ambos burg y los otros amigos rusos de Diego,
al fondo la fornida pero todavía distante tuvieron que trep an arl os. Braque no aprovechó mi ausencia para seducir a Die-
figura de Rivera, con el bastón mexicano pudo trabajar hasta pasados dieciocho go, que ya me había dicho que le intere-
en la mano, avanza lentamente junto al meses. Al poeta Blaise Cendrars le am- saba lanzarla como pintora." Marevna es-
muro del cementerio. Detrás de Picasso putaron el brazo derecho; André M asson cribió: "Aquí debo confesar mi culpa: me
hay un perro callejero rascándose, que sufrió neurosis de guerra durante la ba- dejé atrapar en tm peligroso juego y, en
acaba de depositar su excremento jmlto talla de Verdún; Fernand Léger fue vícti- lugar de evitar a Rivera a causa del emba-
al poste del reloj. Cuando Rivera llegue ma del gas venenoso que los alemanes uti- razo de su esposa, me acerqué cada vez
con su bastón al reloj, Picasso se habrá li zaron por primera vez durante la más al hombre que me asustaba y fasci-
marchado, estará pasándolo bien, y sólo segunda batalla de Ypres, en mayo de naba." El relato de Marevna se publicó
quedará el excremento para recibir al 19 15. [...] en 1962, cinco años después de la muer-
h ombre del bastón. La discusión con U n reportaje fotográfico realizado por te de Rivera, y las memorias de Angelina
Picasso no puso fin a su amistad, pero Jean Cocteau el 12 de agosto de 1916 ilus- aparecieron en 1986.
privó a Rivera del apoyo público de un tra la vida de Montparnasse en el tercer
poderoso aliado y lo debilitó en las ba- verano de la guerra. [...] SOÑAR CON LOS OJOS ABIER-
tallas posteriores. Podemos descubrir muchas cosas so- TOS. UNA VIDA D E DIEGO RIVERA
En el verano de 1915, después que bre la vida de Rivera a partir del análisis - PatrickMamham - Plaza &Janés - Bar-
River a t erminara el cuadro mexicano , de aquel 12 de agosto de 1916, a pesar de celona, 1999 - 427 págs - Distribuye
Angelina fue a Madri d, seguramente para que el pintor mexicano no participara en Blanes.
~ Encomiendas
~ Cargas ~Autoelevadores
~ Mudanzas ~Amplios locales
CUAREIAI f 825
Pc:L=14 15 d e octubre de J999.
Género y risa
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Al trasluz ·1 M a r o s a
Decías "Son tazas japonesas". Parecía que se movían, o eran también bichos de muchos
Y yo en el lecho, con fiebre, las tomaba con una mano pe- colores, mariposas plegables.
queña, tremante. Tú las volvías con cuidado sumo al estuche y al encierro.
Decías "Fueron regalo de casamiento". Qué belleza.
Y yo miraba las piezas marcadas, al trasluz. Y empezaban a Quisiera tener fiebre de nuevo.
vivir las japonesas. Y que me alcanzaras
Ojos oblicuos, pinchos en el pelo, batones floridos. tazas japonesas.
Federico Rubio