Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
CORO:
MARÍA, TU QUE VELAS JUNTO A MÍ
Y VES EL FUEGO DE MI INQUIETUD:
MARÍA MADRE, ENSÉÑAME A VIVIR,
CON RITMO ALEGRE DE JUVENTUD. (2)
TÚ ME LLENAS DE GRACIA
ME COLMAS DE FAVORES,
ME TRATAS CUAL PEQUEÑITO
DESTIERRAS MIS DOLORES.
DEL CIELO HA BAJADO
VIRGEN MADRE,
SEÑORA NUESTRA
RECORDANDO
LA ENCARNACIÓN
TE CANTAMOS TODOS
TUS HIJOS
COMO ESTRELLA
DE SALVACIÓN.
CORO:
LA VIRGEN MARÍA ES NUESTRA PROTECTORA
CON TAL DEFENSORA NO HAY NADA QUE TEMER,
- SOMOS CRISTIANOS Y SOMOS MEXICANOS,
GUERRA, GUERRA CONTRA LUCIFER. (2)
MADRE, ÓYEME
MI PLEGARIA ES UN GRITO EN LA NOCHE
MADRE, MÍRAME
EN LA NOCHE DE MI JUVENTUD
MADRE, SÁLVAME
MIL PELIGROS ASECHAN MI VIDA
MADRE, LLÉNAME
DE ESPERANZA, DE AMOR Y DE FE.
MADRE, GUÍAME,
EN LAS SOMBRAS NO ENCUENTRO EL CAMINO.
MADRE, LLÉVAME
QUE A TU LADO FELIZ CANTARÉ.
MADRE, CONSTRUIR,
CAMINAR AUNQUE VUELVA A CAER.
MADRE, SÓLO SOY,
EL ANHELO Y LA CARNE QUE LUCHAN
MADRE, TUYO SOY,
EN TUS MANOS ME VENGO A PONER.
CORO:
VIVA MARIA. VIVA EL ROSARIO
-VIVA SANTO DOMINGO
QUE LO HA FUNDADO ( 2 )
TU NOMBRE ES ARRULLÓ
EL MUNDO LO SABE,
ERES NUESTRO ORGULLO,
MÉXICO ES TUYO,
TU GUARDAS LA LLAVE.
YO SE QUE EN EL CIELO
ESCUCHAS MI CANTO
SÉ QUE CON CELO NOS CUBRE TU MANTO.
VIRGENCITA CHULA, ERES UN ENCANTO.
POR PATRIA NOS DISTE ESTE LINDO SUELO
LO BENDECISTE, PORQUE ERA TU ANHELO
TENER UN SANTUARIO CERQUITA DEL CIELO.
MI VIRGEN RANCHERA,
MI VIRGEN MORENA,
ERES NUESTRA DUEÑA,
MÉXICO ES TU TIERRA
TU SU BANDERA.
CORO:
TU QUE NO SABES AMAR,
PRETENDES ENCONTRAR
MALDAD EN MÍ, EN MÍ
QUE SOLO DOY AMOR
PORQUE TAN SOLO AMOR
SE RECIBIR.
CORO:
ALABARE, ALABARE,
ALABARE, ALABARE,
ALABARE A MI SEÑOR.
CORO:
DIOS ESTA AQUÍ, QUE HERMOSO ES,
EL LO PROMETIÓ, DONDE HAY DOS O TRES
QUÉDATE SEÑOR, QUÉDATE SEÑOR,
QUÉDATE SEÑOR, EN CADA CORAZÓN
QUÉDATE SEÑOR, QUÉDATE SEÑOR
QUÉDATE SEÑOR AQUÍ, AQUÍ, AQUÍ (EN MI).
CORO:
MADRE DE LOS POBRES
LOS HUMILDES Y SENCILLOS
DE LOS TRISTES Y LOS NIÑOS
QUE CONFÍAN SIEMPRE EN DIOS.
TÚ LA MÁS POBRE
PORQUE NADA AMBICIONASTE,
TÚ, PERSEGUIDA VAS HUYENDO DE BELÉN
TÚ QUE EN UN PESEBRE
OFRECISTE AL REY DEL CIELO
TODA TÚ RIQUEZA FUE TENERLE SÓLO A ÉL.
CORO:
AMÉMONOS DE CORAZÓN,
NO DE LABIOS NI DE OÍDOS. ( 2 )
PARA CUANDO CRISTO VENGA. ( 2 )
NOS ENCUENTRE PREPARADOS.
AMÉMONOS DE CORAZÓN
NO DE LABIOS NI DE OÍDOS, ( 2 )
PARA CUANDO CRISTO VENGA ( 2 )
NOS ENCUENTRE PREPARADOS.
Madrecita que tanto me quieres, Yo tengo una madre de dulce mirar, su nombre
Que estas en el cielo rogando por mi es maría la estrella del mar,
Yo te pido que cuando yo muera, Es madre de dios también de los hombres
Piadosa en tus brazos me lleves a mí. (2) La estrella que guía a los pescadores. ( 2 )
Por las noches cuando me acuesto con mucho Yo tengo un madre de dulce mirar su nombre es
cariño me encomiendo a ti, maría la estrella del mar,
Y me entrego profunda en mis sueños mirando Ya viene la aurora me voy a remar
Tus ojos que velan por mí. ( 2 ) Me acompaña siempre la estrella del mar ( 2 )
La familia que reza a la virgen ( 2 ) Allá en el cielo azul, esta reina y señora. ( 2 )
Y sigue su ejemplo ( 3 ) En la feliz entrada,
Llegará hasta dios. Que da para la gloria. ( 2 )
EL SANTÍSIMO ROSARIO
.
MUY BUENAS NOCHES,
MUY BUENAS NOCHES.
EN TU PRESENCIA DESCANSARE.
MADRE MÍA QUE TANTO ME QUIERES
Madre mía que tanto me quieres que estas Estas son tres Aves Marías
en el cielo rogando por mí, Que en toda mi vida yo te prometí
Yo te ruego que el día que me muera . Y te pido madre de la luz
Piadosa en tus brazos me lleves a ti ( 2 ) Que en mi última hora te acuerdes de mi
(2)
A la hora cuando me levanto
Mi primer suspiro siempre es para ti Desde el trono en que estas colocada Virgen
Y te rezo tres Aves Marías de la luz me estás viendo aquí.
Para que en el día te acuerdes de mi ( 2 ) Y te rezo tres Aves Marías para
que en el día te acuerdes de mi ( 2 )
Al llegar las doce del día
Virgen de la luz me acuerdo de ti Aquí estoy rendido a tus plantas puesto de
Y te rezo tres Aves Marías rodillas con fe y con amor
Para que en el día te acuerdes de mí ( 2 ) Esperando para retirarme,
Impartas benignas santa bendición. ( 2 )
Al llegar las tres de la tarde
Me acuerdo de ti virgen de la luz Se te ofrecen corazones puros
Recordar el dolor tan grande De aquellos que te aman con fe y con amor
Que viste a tu hijo morir en la cruz. ( 2 ) Y te pido Virgen de la luz
Le digas Cristo que nos dé el perdón. ( 2 )
Por las noches antes de dormirme con
Dulces plegarias me dirijo a ti Madre mía de la luz querida vengo a
Y me duermo tranquilo soñando que tus despedirme señora de ti
lindos ojos velas sobre mí. ( 2 ) Y a pedirte que cuando me muera
Piadosa en tus brazos me lleves a ti. ( 2 )
MI JESÚS SACRAMENTADO
Coro:
Con nosotros esta
Y no le conocemos
Con nosotros esta,
Su nombre es el señor (2)
ESTROFAS:
Un día caminaba
Muy triste por ahí
Mi corazón gritaba
Ya no quiero vivir
ENSÉÑAME SEÑORA
A ORAR Y SER HUMILDE
A SER MÁS SERVICIAL
Y A DARME A LOS DEMÁS ( 2 )
SANTA MARÍA ÓYEME,
QUIERO SER COMO TÚ,
RUEGA A DIOS POR MÍ.
EN TI NIÑA HERMOSA
EL VERBO SE ENCARNO
DEJAS DE SER NIÑA,
Y ERES MADRE DE DIOS.
MADRE DE JESÚS
QUE VINO A SALVARNOS
GRACIAS DOY A TI
POR HABERNOS DADO NUESTRA LUZ.
Dios es amor
La biblia lo dice
Dios es amor
Búscalo y veras
En el capítulo cuarto
Versículo ocho
Primera de juan
Si señor ven a mí
Ven, ven a mí
Cúbreme con tu manto
Lleno de amor.
Si señora ven a mí
Ven, ven a mí
Cúbreme con tu manto
Lleno de amor.
NO HAY DIOS TAN GRANDE EL TRECE DE MAYO
EL SANTO ROSARIO
CONSTANTE REZAD,
Y LA PAZ DEL MUNDO EL
SEÑOR DARÁ.
Coro:
Hay unos ojos que si me miran
Son de la virgen madre de amor
Son unos ojos tan primorosos
Ojos hermosos no he visto yo.
Coro:
Oh virgen santa
Madre de dios
Sois la esperanza del pecador (2)
Coro:
Señor ven a nuestras almas
Alivias que por ti suspiran ven señor.
ESTROFAS:
Como el siervo que a las fuentes
De agua fresca va veloz
Los anhelos de mi alma
Van en pos de ti señor.
CORO:
MADRE MÍA, QUE TANTO HE QUIERES
QUE ESTAS EN EL CIELO ROGANDO POR MÍ,
YO TE PIDO QUE CUANDO ME HUERA PIADOSA EN TUS
BRAZOS, ME LLEVAS A TI. ( 2 )
TO C A EL CORAZÓN DE QUIENES
O L VI D AN QUE SOMOS HERMANOS
PROVOCAN SUFRIMIENTO Y MUERTE.
AMEN.
DE TU DIVINO ROSTRO
LA BELLEZA AL DEJAR
PERMÍTEME QUE VUELVA
TUS PLANTAS A BESAR.
A DEJARTE OH MARÍA
NO ACIERTA EL CORAZÓN
TE LO ENTREGO SEÑORA,
DAME TU BENDICIÓN.
SEÑOR, PERMITE
QUE TE HABLE HOY,
DEL DULCE ENCUENTRO
QUE ME CAMBIO,
LA HORA FELIZ
EN QUE YO ESCUCHE,
TUS PALABRAS DE AMOR.
Amen
SAN JOSÉ
José de Nazaret fue e! esposo de la virgen maría y por ende el padre en la tierra de
Jesús, el hijo que según la religión cristiana envía dios para salvar al hombre del
pecado original cuando muera crucificado en la cruz. en el libro del nuevo testamento
se lo indica a José como su padre, en tanto, todo lo que se sabe de él aparece allí
volcado.
En tanto, y como indicáramos líneas arriba todo lo que sabe el cristianismo y el mundo
sobre José está escrito en el nuevo testamento.
allí, san mateo, por ejemplo, nos cuenta de la tragedia que significó para José saber
que maría estaba embarazada sin él haber participado, sin embargo, cuando el ángel
enviado por dios se le apareció en sueños y le confirmó del milagro por venir que
salvaría al mundo, José, aceptó feliz la idea y acompañó a maría y luego a su hijo con
entrega suprema. Incluso, cuando sobre los niños de menos de dos años recayó la
amenaza de muerte del rey Herodes, José, salvó al niño y a su madre y se
escondieron en Egipto.
José es el ejemplo más emblemático de buen padre, protector y cariñoso con su hijo,
y de fie! y comprensivo esposo, ya que desde que se unió a maría y todo lo que
tuvieron que atravesar, jamás se apartó de ella y le sacó su apoyo.
QUIEN ERA REALMENTE SU HIJO
Las dudas se disipan con el anuncio divino que su hijo sería Jesús el salvador.
José tenía 30 años cuando fue convocado por los sacerdotes de la tribu a la que pertenecía
para ofrecerles una esposa que sería la virgen María.
José fue el elegido de entre varios porque de las ramas que les habían entregado a todos,
la suya fue la que floreció y ja que dio paso al compromiso con María.
Antes de vivir juntos como las costumbres establecían, María, permaneció con su familia, y
en ese tiempo es que el ángel le anuncia su embarazo.
Esa sería la primera prueba para José, por supuesto que tuvo dudas y se sintió angustiado,
pero un sueño le reveló que su hijo en camino era Jesús y por ello a partir de ese momento
cuidó como nadie de su esposa e hijo y de las amenazas que empezaron a caerles encima,
por parte del poder político y de la sociedad.
Cuando Jesús tenía unos 12 años, José y su esposa fueron testigos de la misión de su hijo
en la tierra al verlo en el templo hablando y haciendo preguntas a los maestros de la ley.
José murió antes que Jesús se convirtiese en una figura pública y comenzase su trabajo
concreto de la sanación del pecado original.
El amor que le tenía a su hijo y a su esposa seguramente lo hubieran hecho sufrir demasiado
si le hubiese tocado ver a su hijo crucificado y torturado en la cruz.
María, ante la muerte de esposo debió afrontar sola, y solamente con la compañía de los
discípulos, la tragedia de su hijo.
Veneración
A lo largo de la historia de la fe cristiana, José, fue distinguido con muchos honores, entre
ellos ser declarado como patrono de la familia, patrono de la buena muerte, patrono de la
iglesia universal, patrono del trabajo, patrono contra el comunismo y contra la duda, entre
otros. Y así mismo es patrono de varias partes de nuestro planeta como ser: China, América,
México, Corea, Bohemia, Bélgica, Croacia, Austria y Vietnam.
BENDITO, BENDITO,
BENDITO SEA DIOS.
LOS ÁNGELES CANTAN
Y ALABAN A DIOS.
Yo creo, Jesús mío, Por el amor al hombre,
que estás en el altar, moriste en una cruz,
oculto en la hostia y al cáliz bajaste
te vengo a adorar. (2) por nuestra salud. (2)
Y NO MIRAR ATRÁS.
Me hinque a rezar pero no por mucho tiempo, tenía muchas cosas que hacer,
esto no es para mí, no puedo perder el tiempo, me tengo que apurar. Pues
muchas cosas hay que terminar, y mientras decía una oración apurada, salí
corriendo, mi deber cristiano estaba hecho, mi alma podía estar tranquila pues
el domingo había ido a misa, ya durante el día no tuve tiempo de decir una
palabra alegría, no tuve tiempo de hablar de cristo a mi amigo, pues temía que
se riera de mí, demasiadas cosas que hacer, esa era mi exclamación constante,
tiempo para darme a los demás y sin darme tiempo, se me acabo el tiempo y
dijo, no puedo encontrar tu nombre, alguna vez lo iba anotar pero nunca tuve
tiempo.
Amen
JUNTO A TI
Viva María
Viva el Carmelo
Viva el escapulario
Prenda del cielo
Que por mis pecados esté contra mí o de mi familia, por la gracia de Dios
venga el aire y se lleve a la región del olvido.
Cristo vence, Cristo reina, Cristo impera, Cristo de todo mal nos defienda.
EX. XI113.
ORACIÓN DE UNA MADRE A LA SANTÍSIMA VIRGEN
¡Madre mía, socorre a mis hijos! que esta palabra sea el grito de mi corazón
desde la aurora. ¡Oh maría!, que tu bendición los acompañe, los guarde, los
defienda, los anime, los sostenga en todas partes y en todas las cosas. Cuando
postrados ante la presencia del señor le ofrezcan sus tributos de alabanzas y
oración, cuando le pregunten sus necesidades, o imploren sus divinas
misericordias, ¡madre mía, socorre a mis hijos!
Cuando se dirijan al trabajo donde el deber los llama; cuando pasen de una
ocupación a otra, a cada movimiento que ejecuten, a cada paso que den y a
cada nueva acción. ¡Madre mía, socorre a mis hijos!
“AMEN”
VAMOS NIÑOS AL SAGRARIO
Serafines de la gloria
Pajaritos de los bosques Jesús es toda bondad
Venid todos a cantar El sagrario es su morada
A ver si con nuestros trinos Manantial de caridad
Le podemos consolar Que la muerte se aproxima
Ven soltero amancebado
A ver la gloria escondida
Agustín Montserrat
Son, pequeñas, humildes campiranas.
Es cierto no tienen la elegancia de las gladiolas,
Ni el glamur de las rosas, ni la presunción de los claveles
Son silvestres, nacidas al amparo del rocío
Y del tibio sol de la mañana.
Madre te traigo un pequeño ramo de flores
Cortadas al amanecer; bajo el canto de flores
Cortadas al amanecer; bajo el canto de los pájaros
El mismo que quizá hayas oído
Aquella madrugada que partiste.
Traje pensamientos, nubes alhelís.
Nacidas al amparo de una tierra generosa como tú
He venido hasta tu tumba a depositarías
Con toda mi tristeza, mi soledad y mi nostalgia
Una pequeña pausa en el desencanto que me consume
(En esta ocasión te habla el niño que tanto te extraña)
Rezare como me enseñaste a hacerlo,
Para sentirme un poco cerca
Los tiempos no son buenos
Hay demasiada salceda, cinismo, hipocresía
Y en la guerra cotidiana cada vez que te quedas más solo
Pero hoy diez de Mayo quizá a algunos les ayude a
Recordar que tienen que ser bueno a su lado
Y lo valoren en todas sus dimensión y los otros que se
Han quedado solo recuerden que laguna vez alguien los
Amo, incondicionalmente y que una flor modesta, sencilla
Humilde representa toda la melancolía por ese amor inolvidable
OCHO REGALOS QUE NO CUESTAN NI UN CENTAVO
1. El regalo de Escuchar.
Pero realmente escuchar, sin interrumpir, bostezar, o criticar. Solo escuchar.
2. El regalo del Cariño.
Ser generoso con besos, abrazos, palmadas en la espalda y apretones de
manos, estas pequeñas acciones demuestra el cariño por tu familia y amigos.
3. El regalo de la sonrisa.
Llena tu vida de imágenes con sonrisas, dibujos, caricaturas y tu regalo dirá:
"me gusta reír contigo"
4. El regalo de las notas escritas.
Esto puede ser un simple "gracias por ayudarme", un detalle como estos puede
ser recordado de por vida Y CAMBIARLA A UN TAL VEZ.
5. El regalo de un cumplido.
Un simple y sincero "te ves genial de rojo", "has hecho un gran trabajo" o "fue
una estupenda comida" puede hacer especial un día.
6. El regalo del favor.
Todos los días procura hacer un favor.
7. El regalo de la soledad.
Hay días que no hay nada mejor que estar solo. Se sensible a aquellos días y
da este regalo o solicítalo a los demás.
8. El regalo de la disposición a la gratitud.
La forma más fácil de hacer sentir bien a la gente es decirle cosas que no son
difíciles de decir como "Hola" y "Muchas Gracias"
FAMILIA
Para tener presente:
Tropecé con un extraño que pasaba y le dije "perdón",
Él contestó "discúlpeme por favor; no la vi..."
Fuimos muy educados, seguimos nuestro camino, nos despedimos.
Más tarde, al estar cocinando, estaba mi hijo muy cerca de mí. Al darme vuelta casi lo golpeo, "¡Quítate!"
le grité; él se retiró dolido, sin que yo notara lo duro que le hablé.
Estando todavía despierta al acostarme, Dios me dijo suavemente: "Trataste al extraño cortésmente.
Pero abusaste del niño que amas.
Ve a la cocina y encontrarás unas flores en el piso, cerca de la puerta.
Son las flores que cortó y te trajo, rosa, amarilla y azul. Estaba calladito para darte la sorpresa y no viste
las lágrimas que llenaron sus ojos."
Me sentí miserable y empecé a llorar.
Suavemente me acerqué, me arrodillé junto a su cama y le dije:
"Despierta, pequeño, despierta... ¿Son éstas las flores que cortaste para mí?"
Él sonrió y dijo: "Las encontré junto al árbol. Las tomé porque son bonitas como tú, en especial la azul."
"Hijo, siento mucho lo que hice, no te debí gritar"...
Él contestó, "Está bien mami, yo te quiero de todos modos."
"Yo también te quiero, y me gustan las flores, especialmente la azul".
Toma en cuenta que si morimos mañana, en cosa de días la empresa cubre el puesto. Pero la familia
que dejamos sentirá la pérdida por el resto de su vida.
Piensa en ello, nos entregamos más al trabajo que a nuestra familia...
¿No crees que es una inversión poco inteligente...?
Entonces, ¿Qué hay detrás de esta historia?
Un sábado de 1531 a principios de diciembre, un indio llamado juan diego, iba muy de madrugada
del pueblo en que residía a la ciudad de México a clase de catecismo y a la santa misa. Al llegar
junto al cerro llamado Tepeyac amanecía y escuchó que le llamaban de arriba del cerro diciendo:
"Juanito, juan dieguito".
Él subió a la cumbre y vio a una señora de sobrehumana belleza, cuyo vestido era brillante como el
sol, la cual con palabras muy amables y atentas le dijo: "juanito, el más pequeño de mis hijos, ¿a
dónde vas?... Sabe y ten entendido, tú el más pequeño de mis hijos, que yo soy la siempre virgen
santa maría, madre del verdadero dios, por quien se vive; del creador cabe quien está todo; señor
del cielo y de la tierra. Deseo vivamente que se me erija aquí un templo, para en él mostrar y dar
todo mi amor, compasión, auxilio y defensa pues yo soy vuestra piadosa madre; a ti, a todos vosotros
juntos los moradores de esta tierra y a los demás amadores míos que me invoquen y en mí confíen;
oír allí sus lamentos, y remediar todas sus miserias, penas y dolores.
Para realizar lo que mí clemencia pretende, ve al palacio del obispo de México y le dirás cómo yo
te envío a manifestarle lo que mucho deseo, que aquí en el llano me edifique un templo: le contarás
puntualmente cuanto has visto y admirado y lo que has oído... Hijo mío el más pequeño; anda y pon
todo tu esfuerzo"
Él se arrodilló y le dijo: "señora mía, ya voy a cumplir tu mandado; por ahora me despido de ti, yo tu
humilde siervo". Y se fue de prisa a la ciudad y camino al palacio del obispo, que era fray juan de
Zumárraga, religioso franciscano.
Cuando el obispo oyó lo que le decía el indiecito juan diego, no le creyó. Solamente le dijo: "otro vez
vendrás, hijo mío y te oiré más despacio, lo veré muy desde el principio y pensaré en la voluntad y
deseo con que has venido".
Juan diego se volvió muy triste porque no había logrado que se realizara su mensaje. Se fue derecho
a la cumbre del cerro y encontró allí a la señora del cielo que le estaba aguardando. Al verla se
arrodilló me delante de ella y le dijo: "señora, la más pequeñas de mis hijas, niña mía, fui a donde
me enviaste a cumplir tu mandado; aunque con dificultad entré a done es el asiento del prelado; le
vi y expuse tu mensaje, así como me advertiste; me recibió benignamente y me oyó con atención;
pero en cuanto me respondió, pareció que no la tuvo por cierto... Comprendí perfectamente en la
manera que me respondió, que piensa que es quizás invención mía que tú quieres que aquí te
hagan un templo y que acaso no es de orden tuya; por lo cual, te ruego encarecidamente, señora y
niña mía, que a alguno de los principales, conocido, respetado y estimado le encargues que lleve tu
mensaje para que le crean porque yo soy un hombrecillo, ella le respondió: "oye, hijo mío el más
pequeño, ten entendido que son muchos mis servidores y mensajeros, a quienes puedo encargar
que lleven mi mensaje y hagan mi voluntad; pero es de todo punto preciso que tú mismo solicites y
ayudes y que con tu mediación se cumpla mi voluntad. Mucho te ruego, hijo mío el más pequeño, y
te mando, que otra vez vayas mañana a ver al obispo. Dale parte en mi nombre y hazle saber por
entero mi voluntad, que tiene que poner por obra el templo que le pido."
Pero al día siguiente el obispo tampoco le creyó a juan diego y le dijo que era necesaria alguna
señal maravillosa para creer que era cierto que lo enviaba la misma señora del cielo. Y lo despidió.
El lunes, juan diego no volvió al sitio donde se le aparecía nuestra señora porque su tío Bernardino
se puso muy grave y le rogó que fuera a la capital y le llevara un sacerdote para confesarse. Él dio
la vuelta por otro lado del Tepeyac para que no lo detuviera la señora del cielo, y así poder llegar
más pronto a la capital. Más ella le salió al encuentro en el camino por donde iba y le dijo:
“Oye y ten entendido, hijo mío el más pequeño, que es nada lo que te asusta y aflige, no se turbe tu
corazón, no temas esa enfermedad, ni otra alguna enfermedad y angustia. ¿No estoy yo aquí que
soy tu madre? ¿No estás bajo mi sombra? ¿No soy yo tu salud? ¿No estás por ventura en mi
regazo? que no apene ni te inquiete otra cosa; no te aflija la enfermedad de tu tío, está seguro que
ya sanó... sube, hijo mío el más pequeño, a la cumbre del cerrillo, allí donde me viste y te di órdenes,
hallarás que hay diferentes flores; córtalas, júntalas, recógelas; en seguida baja y tráelas a mi
presencia.”
Juan diego subió a la cumbre del cerro y se asombró muchísimo al ver tantas y exquisitas rosas de
castilla, siendo aquel un tiempo de mucho hielo en el que no aparece rosa alguna , llenó su larga
ruana blanca con todas aquellas bellísimas rosas y se presentó a la señora del cielo.
Ella le dijo: “hijo mío el más pequeño, estas rosas es la prueba y señal que llevarás al obispo. Le
dirás en mi nombre que vea en ella mi voluntad y que él tiene que cumplirla: tú eres mi embajador,
muy digno de confianza. Rigurosamente te ordeno que sólo delante del obispo despliegues tu manta
y descubras lo que llevas. Contarás bien todo; dirás que te mandé subir a la cumbre del cerrillo que
fueras a cortar flores; y todo lo que viste y admiraste; para que puedas inducir al prelado a que te
dé su ayuda, con objeto de que se haga y erija el templo que he pedido.”
Juan diego se puso en camino, ya contento y seguro de salir bien. al llegar a la presencia del obispo
le dijo: “señor, hice lo que me ordenaste, que fuera a decir a, la señora del cielo, santa maría,
preciosa madre de dios, que pedías una señal para poder creerme que le has de hacer el templo
donde ella te pide que lo erijas; y además le dije que yo te había dado mi palabra de traerte alguna
señal y prueba, que me encargaste, de su voluntad.
Condescendió a tu recado y acogió benignamente lo que pides, alguna señal y prueba para que se
cumpla su voluntad. Me despachó a la cumbre del cerrillo, donde antes yo la viera, a que fuese a
cortar varias rosas de castilla (...). Ella me dijo qué te las había de entregar; y así lo hago, para que
en ellas veas la señal que pides y cumplas su voluntad; y también para que aparezca la verdad de
mi palabra y de mi mensaje. He las aquí: recíbelas”.
Desenvolvió luego su blanca manta, y así que se esparcieron por el suelo todas las diferentes rosas
de castilla, se dibujó en ella y apareció de repente la preciosa imagen de la virgen maría, madre de
dios, tal cual se venera hoy en el templo de Guadalupe en Tepeyac.
La ciudad entera se conmovió, y venían a ver y admirar la devota imagen y a hacerle oración; y le
pusieron por nombre la virgen de Guadalupe, según el deseo de nuestra señora. Juan diego pidió
permiso para ir a ver a su tío bernard1no, que estaba muy grave. El obispo le envió un grupo de
personas para acompañarlo. al llegar vieron a su tío estaba muy contento y que nada le dolía. Y
vinieron a saber que había quedado instantáneamente curado en el momento en que la santísima
virgen dijo a juan diego: "no te aflija la enfermedad de tu tío, está seguro de que ya sanó".
el obispo trasladó a la iglesia mayor la santa imagen de la amada señora del cielo que se apareció
por mandato divino del 09 al 12 de diciembre de 1531.
La ciudad entera desfilaba para admirar y venerar la sagrada imagen, maravillados todos de que
hubiera aparecido por milagro divino; porque ninguna persona de este mundo pintó su preciosa
imagen.
Oh Virgen María ...!
Mi madre no engaña,
lo sabe muy bien.
Por eso te quiero
y al fin te veré.
¡Oh Virgen María
botón de clavel!
JESÚS ES MI PASTOR
NADA ME FALTARA
TODO POR EL AMOR
QUE EL ME TIENE, ME DAÑARA
YO CREO EN JESUCRISTO
PARA LLEGAR AL CIELO
POR LA FE QUE YO TENGO
PORQUE SIEMPRE FUE BUENO
ALABARAS A DIOS
NO IMPORTA LA OCASIÓN
PARA QUE SEAS FELIZ
PARA QUE SEAS MEJOR
YO QUIERO ORAR
POR TI CON TODO EL CORAZÓN
DIOS QUIERE ESO DE MI
DE TODOS PIDE AMOR
YO CREO EN JESUCRISTO
PARA LLEGAR AL CIELO
POR LA FE QUE YO TENGO
PORQUE SIEMPRE FUE BUENO
Por soñar,
Cuando hay tanta gente que se revuelca
En sus pesadillas.
Por vivir,
Cuando hay quien muere
Antes de nacer.
Gracias, '
Por tener poco que pedirte
Y tanto que agradecerte...
¡SEÑOR!
ALABANZAS A MARÍA SANTÍSIMA
Santa Faustina nació en Polonia en 1905, El día que fue a recibir la Primera
Comunión, besó las manos de sus padres para demostrar su pena por haberles
ofendido. Solía ayudar en casa con los quehaceres de la cocina, ordeñando
vacas y cuidando de sus hermanos. Asistió a la escuela, pero sólo pudo
completar tres trimestres porque se dio la orden de que los estudiantes mayores
tenían que salir para dar cabida a los niños menores.
A tos 15 años empezó a trabajar como empleada doméstica y sintió con más
fuerza el llamado a la vocación religiosa. Les contó esta inquietud a sus padres
en varias ocasiones, pero ellos se opusieron. Es así que se entrega a las
vanidades de la vida sin hacer caso del llamado que experimentaba, hasta que
escuchó la voz de Jesús que le pidió dejarlo todo e ir a Varsovia para que entre
en un convento.
Sus miembros, además de los tres votos básicos de pobreza, castidad y obediencia
para ser aceptados en la comunidad religiosa, debían de asumir un cuarto voto en
promesa de servir a los pobres, a quienes la Madre Teresa describe como
encarnaciones de Cristo.
En 1986 se reúne con Fidel Castro en Cuba y consigue el permiso para asistir a los
pobres en la Isla. Ese mismo año obtiene el permiso de Juan Pablo II para construir
un centro dentro del Vaticano, En 1990 el papa le instó a que realizara sus tareas con
menor rigor debido a su cada vez más precaria salud, renuncia al liderazgo de la
congregación, pero el pedido de todas las hermanas la hace retornar,
Canonización
De septiembre de 2016 por Francisco
Beatificación
19 de octubre de 2003 por Juan Pablo II Órdenes
Ordenes
Misioneras de la Caridad
Festividad
5 de septiembre
Patronazgo de la Jornada Mundial de la Juventud
ORACIÓN
Vuelve oh Dios Jesús, desde tu excelso trono tus ojos de clemencia hacia
el seno profundo de la cárcel del Purgatorio; esposas tuyas son las almas
instante tan dichos; que salgan en breve a gozar de su esposo amado que
Amen
SUDARIO
dónde vives y reinas con Dios padre en la unidad del espíritu santo y eres
AMEN.
perpetua.
De las puertas del infierno libra señor su alma que descanse en paz;
así sea.
Amen
LA MAGNIFICA
Amén.