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Porfirio Díaz: El ascenso al poder

(Ensayo final)

Por:
Gerardo Morales García

Maestría en Enseñanza de la Humanidades


(Historia, Lengua y Literatura)
Primer Semestre

Materia:
Historia y Literatura del Siglo XIX

Asesor:
Mtra. Ma. Del Carmen Flores Garduño

Junio, 2018.
Porfirio Díaz: El ascenso al poder

Introducción
No existe personaje más controversial en la ruta del México independiente como lo es
José de la Cruz Porfirio Díaz Mori o simplemente, Porfirio Díaz; actor de nuestra historia
con claroscuros remarcados en los libros de texto según se trate del periodo político que
se esté viviendo a capricho de la clase política en turno.
Mucho se puede decir, por un lado, del gran desarrollo económico que se vivió durante
el gobierno de Díaz (a costa del endeudamiento internacional, claro), la construcción de
una inmensa red ferroviaria que llegó a todos los rincones del país, el fortalecimiento del
ejército, la pacificación social y la conciliación política.
En contra parte nos podemos referir a su incontrolable sentido de ambición por el poder,
destacar los excesos que se vivieron durante su administración, el empecinamiento por
hacer de México capital la otra Francia, el abandono del campo; o la represión hacia las
minorías que alzaban la voz exigiendo mejoras en su calidad de vida, como lo señala
una de sus frases más conocidas “Mátenlos en caliente” (ECM-SEP, 2004).
En los últimos años, para tratar de fortalecer y justificar las políticas neoliberales, ha
vuelto a ponerse sobre la mesa de análisis la gestión gubernamental ejercida bajo la
administración de Porfirio Díaz como titular del poder ejecutivo mexicano de fines del
siglo XIX e inicios del XX.
En el presente trabajo se hace un análisis de cómo se fue construyendo la carrera política
de Díaz Mori hasta encumbrarlo a la silla presidencial de México; explorar en su entorno
familiar, el contexto social de su infancia y adolescencia, su formación académica, sus
inicios como militar y su acercamiento con la clase política preponderante de finales de
siglo XIX.

La familia.
De acuerdo con Ávila (2015), José de la Cruz Porfirio Díaz Mori fue el sexto de siete hijos
de José de la Cruz Díaz Orozco, que éste lo fue de Manuel Díaz Olivera, éste de Alberto
Díaz Arjona y éste, a su vez, de Diego Díaz Ordaz; es decir se trataba de una familia
antigua y conocida en Oaxaca ya que, por ejemplo, el padre de Porfirio guardaba
relaciones cercanas con el obispo de Antequera y con el propio gobernador, José María
Díaz Ordaz. La madre de Porfirio, Petrona Mori, hija de Mariano Mori (asturiano de
origen) y Tecla Cortés, era mestiza al igual que su marido y de rasgos indios. La familia
habitaba en el distrito serrano de Ixtlán, donde su padre era trabajador minero,
posteriormente emigraron a Xochistlahuaca, en la costa, hasta establecerse en definitiva
en la capital Oaxaqueña como propietarios y responsables de un mesón.
A la edad de 3 años el niño Porfirio sufre la pérdida de su padre por una epidemia de
colora que azota la ciudad, lo que a decir de Ávila (2015 p. 71), lo condena a “trabajar
desde siempre y construirse un destino propio”. Díaz supo desde niño que la vida no le
sería fácil; bajo la tutela una madre que debía cuidar de sus hijos y soportar además el
señalamiento social del embarazo sin matrimonio de su primogénita mayor ese pecado
antiquísimo y tan marcado en el México del siglo XIX.
Su niñez la pasó aparte de asistir a la escuela, en emplearse en diferentes empleos
simples, desde zapatero hasta carpintero, este último el ofició en el que mayor destreza
desarrolló a decir de sus biógrafos. Al ingresar al servicio militar se dedicó de lleno a
escalar en los diferentes cargos y posiciones dejando de lado la realización de cualquier
otra actividad.
Porfirio Díaz (UNAM 2016), se casó el 15 de abril de 1867 a la edad de 37 años con
Delfina Ortega Reyes, joven de veinte años de edad con quien tenía lazos
consanguíneos al ser su sobrina en primer grado, hija de su hermana Victoria Manuela
Josefa. Tuvieron 8 hijos de los que finalmente solo sobrevivieron 2, Deodato Lucas
Porfirio y Luz Aurora Victoria. Permanecieron casados hasta el fallecimiento de Delfina,
acaecido el 8 de abril de 1880.
En 1881, ya viudo, contrajo matrimonio civil con Carmen Romero Rubio, Hija de Manuel
Romero Rubio, abogado del círculo cercano de Sebastián Lerdo de Tejada. Su
matrimonio duró hasta el fallecimiento de Díaz, el 2 de julio de 1915 en París Francia.

Formación académica
El niño Porfirio Díaz, a decir de Serrano (2012), bajo la tutela del sacerdote José Agustín
Domínguez, su padrino, ingresó a la edad de 6 años a la Escuela Amiga de Primeras
Letras, antecedente de la educación primaria de nuestros días. A los casi diez años, el
1939 ingresa a la Escuela Municipal Lancasteriana en la que perfecciona su lectura y
escritura, así como se inicia en el estudio de la dogma y el urbanismo.
Para 1944, con el apoyo de su padrino, el padre José Agustín, ingresa al Colegio
Seminario Conciliar de Oaxaca donde por tres años estudió física, gramática,
matemáticas, retórica, latinidad y filosofía al tiempo que realiza sus estudios como
bachiller. En 1949 mientras se gradúa como bachiller en artes trabaja como profesor
particular de latín. En ese mismo año abandona el seminario renunciando a la carrera
eclesiástica que le ofrece su tutor.
En 1950 se inscribe como alumno en El Instituto de Ciencias y Artes de Oaxaca (ICAEO)
para estudiar leyes. Es en el instituto donde conoce a un personaje que marcaría su vida
para siempre, su maestro de derecho, el Lic. Benito Pablo Juárez García. El encuentro
con Juárez, a decir de Garner (2015), causó tal impacto en el joven Díaz al sentirse
reconocido dentro de un círculo de intelectuales en el que su voz y presencia contaban.
A partir del acercamiento con Juárez, Porfirio trata de reproducir en su persona las
enseñanzas de su maestro, a tal grado que se inicia en la masonería en 1852 en la Logia
de Cristo del Rito Nacional; a partir de ese acontecimiento se torna más laico y se aleja
de la iglesia. Pasa la mayor parte del tiempo en el ICAEO empleándose como profesor
sustituto y como bibliotecario.
El periodo histórico en el que Porfirio Díaz desarrolló su formación profesional y las
circunstancias en las que se sucedió hicieron de él un personaje que se fue cultivando
intelectualmente en las corrientes de pensamiento predominantes de su tiempo; las ideas
francesas de libertad, el pensamiento crítico; etc.; además el hecho de hacerse partícipe
de reuniones y charlas de los principales intelectuales de Oaxaca ampliaron su visión
respecto a su participación social y sus aspiraciones personales.

La carrera militar
La primera participación militar que tiene Díaz se da en 1846 durante su estancia en el
seminario, saliendo en defensa de la patria tras conocer la noticia de la invasión
norteamericana. Se enlista como parte de los batallones Trujano y Constancia sin que
tenga entonces participación directa en el campo de batalla, según lo refiere Serrano
(2002 p. 12). Pasada la guerra contra los norteamericanos y ya dentro del ICAEO y como
parte del grupo incipiente de liberales, contagiado por las ideas liberales, en 1853, se
declara abiertamente en contra de las políticas del presidente por décima primera
ocasión, Antonio López de Santa Ana.
Ante los pronunciamientos públicos en contra de Santa Ana, el grupo de intelectuales
oaxaqueños comienza a ser objeto de múltiples intentos represivos tales como el cierre
de colegios e institutos y el encarcelamiento de sus líderes morales. Serrano (2002) narra
cómo Porfirio tiene que escalar las paredes del templo de Santo Domingo para
comunicarse con su preceptor, Marcos Pérez, titular del bufete de abogados donde es
empleado como pasante, quien resultó preso por sus ideas contrarias al presidente.
En diciembre de 1854 como parte de los opositores a Santa Ana al participar en un
plebiscito organizado por Juan Álvarez con la pretensión de derrocar a Santa Ana y ser
descubierto por intervenir decide huir y adherirse a la Revolución de Ayutla bajo las
órdenes de Francisco Herrera participando activamente en batalla por primera vez en
Teotongo, en ella organizó bajo el cargo de subprefecto del distrito de Ixtlán el primer
sitio de Oaxaca, este hecho lo encumbró, ya en 1856, al rango de Capitán de Infantería
en la guardia Nacional de Oaxaca por órdenes del gobernador Benito Juárez.
El presidente Ignacio Comonfort al triunfar la causa liberal contra Santa Ana, le confiere
el mando militar del Istmo de Tehuantepec y se le asciende al grado de comandante. Ya
en ese cargo, le escribe a su mentor, el gobernador Juárez diciéndole: “…ofrezco a usted
mi espada para la defensa de los sagrados derechos de nuestra patria” (Serrano 2012
p. 19).
Es durante la llamada Guerra de Reforma, de 1858 a 1861, en el periodo histórico en el
que Porfirio Díaz obtiene triunfos significativos en las batallas, con las que, por méritos
propios escala nombramientos altamente significativos en el ejército; en 1859 es
nombrado Coronel efectivo y en 1861 obtiene el rango de General de Brigada.
Durante la intervención francesa es notable su participación como líder de diferentes
enfrentamientos del ejército nacional contra los invasores. Participó al lado del Gral.
Ignacio Zaragoza el 5 de mayo de 1862 haciendo retroceder al enemigo hasta Orizaba,
en la historia nacional es reconocido como El héroe del 2 de abril” por la toma de puebla
en 1867 ya con el cargo de General de División; además de otras acciones que
permitieron la entrada triunfal a la ciudad de México de Juárez el 15 de julio de ese mismo
año. Es recibido como héroe nacional en Oaxaca donde, a cambio de sus logros militares
el congreso le otorga la hacienda de la Noria, desde la cual años más tarde promulgaría
un plan en contra de quien fuera su maestro.

El camino presidencial
Dueño ya de un nombre a nivel nacional y con el respaldo del aparato militar y tras un
efímero nombramiento como diputado en 1861 por el distrito de Ocotlán, Oaxaca; para
1867 decide postularse como candidato a la presidencia de la república resultando, el 25
de agosto, derrotado en la votación tres a uno por Juárez.
Para 1871 ostentando el cargo de diputado federal acepta nuevamente la candidatura
presidencial contendiendo nuevamente con Benito Juárez y ahora también con
Sebastián Lerdo de Tejada. Tras las elecciones de julio el congreso, mayoritariamente
juarista declara presidente electo a Juárez.
Los resultados provocan revueltas en todo el país pues ni Díaz ni lerdo aceptan la
derrota. El 9 de noviembre del 71 el Periódico Oficial del estado de Oaxaca publica el
Plan de la Noria en el que se denunciaba que Juárez violaba los principios establecidos
en la Constitución de 1857 exigiendo que se respetara el principio de la no reelección.
En medio del descontento popular y levantamientos en diversos puntos del país, el 18
de julio de 1872, muere el presidente Benito Juárez a causa de una insuficiencia
cardiaca. El poder es tomado por el presidente de la Suprema Corte de Justicia,
Sebastián Lerdo de Tejada. Empecinado por llegar al poder Porfirio Díaz luchará hasta
1877 para derrocar a Lerdo y hacerse de la silla presidencial, y el resto, es otra historia.

Reflexión
Es difícil mantener una postura unidireccional respecto a la vida y obra de Porfirio Díaz
Mori. Se trata de un personaje clave en la construcción de la nación mexicana. Su
trayectoria política estuvo basada en sus logros militares, pero estos a su vez,
cimentados en la preparación intelectual que fue desarrollando durante su infancia y sus
años de juventud. No podemos negar que las circunstancias le fueron favoreciendo su
encumbramiento y su reconocimiento social.
La historia nacional oficial pone a Díaz como el antagónico del ideal de gobernante,
Juárez; sin embargo, y sabiendo que en la historia el hubiera no existe, la súbita muerte
de Benito Juárez quizá interrumpió lo que pudo haber sido un régimen dictatorial más
agresivo y menos legitimado que el que se critica que fue el de Porfirio Díaz.

Referencias bibliográficas

ECM-SEP. (2004). Nueva historia mínima de México. México: SEP


UNAM. (2016). Archivo del general Porfirio Díaz Memorias y documentos. Tomo I
(Versión electrónica). México: Universidad Nacional Autónoma de México.
Ávila, R. (2015). Porfirio Díaz y el Derecho. Balance crítico. México: Universidad Nacional
Autónoma de México.
Garner, P. (2015). Porfirio Díaz estadista: Formación y acción política. México: Paidos.
Serrano, P. (2012). Porfirio Díaz y el porfiriato. Cronología (1830-1915). México: SEP.

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