Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
FACULTAD DE PSICOLOGÍA
PROGRAMA DE PSICOLOGÍA
SANTIAGO DE CALI
2018
INFORME FINAL PROYECTO DE PRÁCTICA PROFESIONAL: CREACIÓN DE
UN MANUAL DE HERRAMIENTAS CLÍNICAS PARA LOS ESTUDIANTES DE
PSICOLOGÍA QUE REALIZAN SU PRÁCTICA EN EL HOSPITAL
PSIQUIÁTRICO UNIVERSITARIO DEL VALLE
Cód. 1135771
Asesora académica:
Asesor institucional:
FACULTAD DE PSICOLOGÍA
PROGRAMA DE PSICOLOGÍA
SANTIAGO DE CALI,
2018
TABLA DE CONTENIDO
1 INTRODUCCIÓN ......................................................................................................... 1
2 CONTEXTUALIZACIÓN ........................................................................................... 2
3 DIAGNÓSTICO ............................................................................................................ 4
3.1 Situación General en la Sala de Hospitalización Seis.............................................. 5
3.2 Técnicas e instrumentos ........................................................................................... 5
3.3 Metodología usada para el diagnóstico .................................................................... 6
3.4 Justificación ............................................................................................................. 6
4 OBJETIVOS .................................................................................................................. 7
4.1 Objetivo General ...................................................................................................... 7
4.2 Objetivos Específicos .............................................................................................. 7
5 REFERENTES TEÓRICOS ........................................................................................ 7
6. RESULTADOS ............................................................................................................ 13
6.1 Las funciones del estudiante de psicología en el HPUV ....................................... 14
6.2 La descripción de conceptos teóricos referidos al diagnóstico .............................. 16
6.3 Caracterización de la población ............................................................................. 22
7. DISCUSIÓN: UNA POSTURA CRÍTICA ............................................................... 24
8. CONCLUSIÓN ............................................................................................................ 31
9. CRONOGRAMA ........................................................................................................ 32
10. REFERENTES CONCEPTUALES ............................................................................ 33
1 INTRODUCCIÓN:
Entonces, ante el interés común que surge de los estudiantes que realizan la presente
producción escrita, se ha decido diseñar e implementar una encuesta que permita reconocer
las ausencias descritas por los autores, pasando por la pregunta entorno a la relevancia o
pertinencia del manual y sumadas a algunos posibles contenidos que les parecería interesante
encontrar. Una vez obtenidos los datos, se procederá a la sistematización de los mismos a
1
través del software SPSS, en su vigésimo-quinta versión, para describir y analizar los
resultados en función de la pregunta de investigación.
2 CONTEXTUALIZACIÓN
Años después, luego de pasar por una serie de problemas en la década de los noventa,
en el 2009 recibió el certificado de acreditación en salud por ICONTEC, lo que lo postuló
como el primer centro psiquiátrico del país con un título de este calibre. Hoy en día, el
Hospital Psiquiátrico Universitario del Valle se posiciona como líder en investigaciones
académicas, contando con la vinculación de estudiantes de medicina, psicología, enfermería
entre otras carreras afines a la salud, contando con unidad de intervención y cuidados, en
diferentes salas y un acompañamiento directivo a los pacientes y sus familiares.
Los pacientes que ingresan a este servicio de hospitalización se caracterizan por ser
individuos del suroccidente colombiano, además de estar en una fase aguda de enfermedad
mental, y en fase de recuperación, rehabilitación y seguimiento en especial a estos
diagnósticos identificados como comúnes:
2
Ψ Trastornos Mentales Orgánicos; causados por traumatismos craneoencefálicos,
derrames, coágulos de sangre o demás afecciones del Sistema Nervioso Central.
Ψ Trastornos y Episodios Depresivos; que pueden estar acompañados de ideación
suicida o intento de suicidio estructurado o no estructurado, eventos de irritabilidad,
síntomas psicóticos o laceraciones en extremidades.
Ψ “Trastornos Psicóticos debidos al uso de múltiples drogas o de ingesta de alcohol”,
llamados frecuentemente “Psicosis Tóxicas”.
Ψ Trastorno Mixto de Ansiedad y Depresión.
Ψ Trastorno Obsesivo-Compulsivo.
Ψ Trastornos de Personalidad; en salas de alta contención, es común la presencia de
pacientes con diagnósticos de Trastorno de Personalidad Disocial (Antisocial) o
Trastorno Límite de la Personalidad.
Igualmente cuenta con jefes de enfermería de sala (de carácter rotativo), enfermeros,
auxiliares de enfermería (cada una de ellas rotativas), un psiquiatra a cargo de la sala,
residentes (estudiantes graduadas de medicina que se especializan en psiquiatría), auxiliares
en terapia ocupacional (igualmente rotativos), un médico general y un estudiante de
Psicología de la Universidad de San Buenaventura que realiza en dicha institución su práctica
profesional. Ahora bien, al interior de las salas, se realizan actividades y procesos de toma
de paraclínicos y de administración de medicamentos, tales como:
3
Ψ Actividades de Terapia Ocupacional (Calistenia, Dibujo, Películas,
Acondicionamiento Físico, Juegos de Mesa. Karaoke entre otros).
3 DIAGNÓSTICO
Sumado a esto, entre los conocimientos previos con los que debe contar el practicante
de psicología, están; el examen mental (examen psiquiátrico formal), el conocimiento del
funcionamiento del programa utilizado para las evoluciones, el uso de la semiología
psiquiátrica para la comunicación con los mismos, la indagación previa de los manuales
diagnósticos (específicamente el DSM-V), entre otros.
4
Se reconoce entonces la necesidad de una consigna clara para las funciones o roles
que pueden ser exigidos por la institución, además de un los conocimientos anteriormente
mencionados, por lo cual se considera relevante la creación del manual.
Una de estas labores, consiste en que el trabajador social, tiene contacto con la red de
apoyo familiar del paciente, entendida como sus lazos familiares más próximos, las personas
que le acompañan en la enfermedad, aquellos con quien vive y convive. Bajo este supuesto,
dicho trabajador se encargará de una de las funciones más importantes en el pronóstico y
evolución de la enfermedad: El de realizar una psicoeducación.
La técnica que se emplea podría rastrearse en el saber clínico referenciado por los
manuales diagnóstico DSM y CIE, y en el saber disciplinar, en este caso psicoanalítico. En
cuanto a los instrumentos para el diagnóstico, se emplean principalmente la observación y
descripción de las dinámicas propias del hospital (en relación al trabajo interdisciplinar, la
5
semiología y diagnóstico) y la información que puede ser relevante o de interés para el
estudiante que ingresa a realizar su labor de practicante en dicha institución.
3.4 Justificación:
La justificación para el presente proyecto puede verse desde diversos puntos de vista.
En primer lugar, se han presentado casos de desadaptación por parte de algunos estudiantes
de psicología, quejas comunes y recurrentes en torno a la falta de comprensión del lenguaje
propio de la semiología psiquiátrica, sin embargo gran parte de estos términos corresponden
al examen psiquiátrico formal. De esta forma, en segundo lugar tendría lugar información a
profundidad en torno al examen psiquiátrico formal, con la adición del examen mental en
psicología, basado y citado del material proporcionado por el Hospital Universitario del
Valle, en la Unidad de Salud Mental de dicha institución.
Por otro lado, el apartado que tenga en cuenta el trabajo interdisciplinario y los
horarios previstos para las actividades en el hospital y al interior de las salas, permitirá al
estudiante conocer las dinámicas en las que se verá inmerso por un año, sumado a la
información respecto al uso de lenguaje y recomendaciones ante situaciones comunes y/o
6
posibles que pueden tener lugar desde las respectivas salas a las que hayan sido asignados,
hasta los pasillos mismos del hospital.
4 OBJETIVOS
5 REFERENTES TEÓRICOS
7
residentes”; realiza una serie de anotaciones que tienen como fin fijar una importancia
específica al proceso de adaptación de los estudiantes en sus lugares de práctica.
Esto es algo de crucial importancia para el presente proyecto de práctica, pues si bien
se busca generar herramientas clínicas para la adaptación del psicólogo al formato
psiquiátrico, no se busca que la segunda eclipse a la primera, sino todo lo contrario, permitir
al estudiante un espacio de reflexión en torno al paciente psiquiátrico, lo cual se verá más
adelante al introducir la visión del psicoanálisis en torno a la psicosis, y posteriormente en la
reflexión en torno a los manuales diagnósticos.
8
Continuando con lo anterior, no se busca realizar una acusación hacia la institución
educativa que cobija a los estudiantes en cuestión, pues las necesidades específicas de un
lugar de trabajo conllevan a generar estrategias particulares. Pero no debe ignorarse el hecho
de que al interior de la clínica formal, de corte más sistémico, conductual o apegado al uso
de manuales diagnósticos; la enseñanza se ha visto en ocasiones empobrecida.
Así entonces, la autora señala esta dificultad como propia de muchas instituciones
educativas, donde; "la organización curricular en asignaturas, muchas veces resultaba
alejada de las necesidades con las que se enfrentaban los estudiantes en las instancias de
práctica". (Safranchik, 2016, pp. 7). Razón por la cual, esta ausencia de conocimientos puede
verse reflejada al interior del ejercicio del practicante, nuevamente un indicador de relevancia
para el material o manual que se pretende realizar en el presente proyecto de práctica.
Ahora por otra parte, se buscará establecer la importancia que tiene la creación de un
manual que pueda servir de insumo a los futuros practicantes del HUV. Para ello, Garay,
Hornes, Etenberg, D’alessandro, & Martini (2010), resaltan la importancia que ha tenido la
implementación de una serie de guías clínicas, las cuales cuentan con procedimientos e
información relevante para los profesionales en distintas áreas y enfoques de la salud mental.
Éstos a su vez, rastrean una gran cantidad de guías clínicas utilizadas en algunos
países de Norte América y Europa, a partir de instituciones con reconocimiento internacional,
permitiendo rastrear la utilidad de esta herramienta o instrumento, que para dichos países,
resultan un canon que puede servir de punto de partida y autocrítica en los primeros pasos de
algunos profesionales, llegando en ocasiones a ser consideradas políticas públicas para el
abordaje clínico en instituciones públicas y privadas:
9
Psicología Clínica (Chambless y Hollon, 1998; Chambless y otros, 1996). En Canadá
(Hunsley y otros, 1994), Alemania (Strauss y Kaechele, 1998) y Francia
(I.N.S.E.R.M., 2004) existen desarrollos comparables”. (Garay, Hornes, Etenberg,
D’alessandro, & Martini, 2010).
Por otra parte, resulta llamativo que en los países de habla hispana, el material de
guías clínicas al interior del área de salud mental, se ve impulsado por asociaciones,
alcanzando una difusión local importante aunque sin abarcar la totalidad de ciudades y países
hispanohablantes, los autores estiman que esto se debe a que en muchas ocasiones se han
utilizado modelos anglosajones y traducciones antes que realizar una implementación
contextualizada de las problemáticas y recursos simbólicos propios de cada cultura:
10
Sería útil hasta este punto, hacer un alto sobre el sentido de objetivar la práctica
clínica, postura adoptada por algunos manuales como el ya conocido DSM o el CIE. Los
autores refieren que el surgimiento del pensamiento científico hizo presión sobre los
profesionales en salud mental, que cada vez se veían más remitidos a los aspectos pre-
establecidos de instituciones como la APA o la OMS.
Pero entonces, ¿qué importancia puede cobrar realizar un manual con información
referente a los trastornos psicológicos y/o psiquiátricos? Para ello, Stevens & Méndez (2007),
resaltan el actual crecimiento estadístico-poblacional en materia de diagnósticos en salud
11
mental que se experimenta en algunos países, el registro de cada vez más pacientes con
determinados diagnósticos:
12
Y por supuesto no es posible desconocer la cualidad de estudiantes, que a pesar de
que estén llevando a cabo una labor clínica en determinada institución, suelen estar aún en
función de un proceso de aprendizaje; “es muy frecuente en ciencias de la salud, antes de
practicar un procedimiento, oír a los estudiantes preguntar al profesor ¿cómo quiere que
realice el procedimiento? Lo cuestiona sobre si prefiere que lo haga como le dijo un
determinado profesor o como lo hacen en otra institución o como les dijeron en clase”.
(Amaya Afanador, 2011). Esta confusión puede verse solucionada ante la práctica y
perfeccionamiento del modelo imperante en algunas instituciones o bajo la supervisión de
determinado profesional, para además, dar lugar al surgimiento de estilos y técnicas propias
del estudiante, en miras a convertirse en profesional.
“Esto plantea un objetivo que difiere del planteado para el desarrollo de las guías de
procedimiento, en las cuales no interviene casi el razonamiento clínico y se centran
en el desarrollo de habilidades y destrezas de predominio técnico o instrumental”.
(Amaya Afanador, 2011).
6. RESULTADOS
13
6.1 Las funciones del estudiante de psicología en el HPUV:
Ahora, para describir las funciones específicas del estudiante de psicología que realiza
sus prácticas en el Hospital Psiquiátrico Universitario del Valle, antes es importante definir
y establecer diversas variables, como el servicio al que éste pertenece, el jefe directo
(generalmente un psiquiatra) y su estilo, la cualidad de los pacientes propios del servicio y el
eje multidisciplinar.
Sin embargo, algo que excluye el servicio al que pertenezca el estudiante, será el
respectivo jefe directo del practicante, el cual por lo general es y será un psiquiatra. El estilo
de estos psiquiatras, el imaginario que tenga frente a la psicología o al profesorado, las
demandas propias de cada uno y las funciones que éste delegue sobre el estudiante,
corresponderán de manera directa a las funciones del practicante en cada servicio del
hospital.
Por otra parte, se entiende por cualidad del paciente al nivel de organización
discursiva y comportamental que cada uno posea, pues aunque esto no corresponda a
aspectos propios de la institución o de la relación con la psiquiatría, afectará directamente a
la intervención con cada uno, teniendo en cuenta los aspectos conceptuales o teóricos de su
preferencia y las recomendaciones específicas para cada caso.
14
Y finalmente, el eje multidisciplinar cobrará crucial importancia, desde los servicios
distintivos entre Hospital Día hasta las Salas, la labor de los enfermeros, auxiliares de terapia
ocupacional, estudiantes de medicina, médicos generales, residentes y psiquiatras,
completarán el esquema de totalidad que se busca conseguir con un modelo de intervención
multilateral.
Además de por supuesto trabajar con los pacientes, se interviene de igual forma con
los familiares, para esclarecer las situaciones de hospitalización y analizar el entorno social
del paciente. Además de posibilitar al acudiente el entendimiento de lo que le sucede a su
familiar, la razón por la cual no será el mismo pero, ante todo, la manera en que el apoyo
puede favorecer la mejoría.
15
Por otro lado, el practicante en psicología debe asistir a las revistas de psiquiatría, en
las cuales se realizan evoluciones y cambios en la medicación para los pacientes. Y a las
revistas de enfermería, las cuales tienen lugar a las 7 am, a primera hora del día, en el
momento en que los enfermeros del turno de la noche entregan turno a los del día.
Ahora bien, dentro de los conocimientos que se reconocen ausentes para los
estudiantes de psicología, en base a continuas manifestaciones discursivas durante
conversaciones en tiempos libres y pausas dentro de la institución, está el uso del examen
psiquiátrico formal, el cual a su vez resulta similar al examen mental psicológico, y la
división de los diagnósticos en base a los Cinco Ejes que dispone el DSM de la APA.
Pues bien, en primer lugar está el Examen Mental, el cual permite registrar aspectos
anímicos y comportamentales observados durante la entrevista con el paciente. Éste a su vez
cuenta con unos puntos y un orden para los mismos, además de un aspecto a evaluar; Estos
podrían resumirse de la siguiente manera:
16
2. Actitud frente a la entrevista: En este apartado, se debe describir la
actitud que adopta el paciente frente a la entrevista, si éste se muestra
colaborador con la misma, negativista frente a las preguntas, ausente u
hostil.
3. Contacto visual con el entrevistador: En este punto, como su nombre lo
indica, se describe si hay un contacto visual directo, intermitente,
demandante o si por el contrario puede ayudar a una impresión tal como la
actitud alucinatoria durante la entrevista.
4. Psicomotor: Para este apartado, se tienen en cuenta los aspectos referentes
a la conducta motora del pacientes, las alteraciones de este punto del
examen mental pueden ser desde cualitativas hasta cuantitativas, según si
se debe describir semiológicamente una alteración o si se realizará
únicamente una impresión frente a la cualidad aumentada o disminuida de
la conducta motora.
5. Afecto: El afecto comúnmente es uno de los aspectos más relevantes dentro
del examen mental, en especial en trastornos depresivos o en el trastorno
afectivo bipolar. Principalmente porque puede significar un riesgo de
agitación por evento maniforme o de ideación suicida o autolesión. Y de
igual manera cuenta con alteraciones cuantitativas o cualitativas.
6. Pensamiento: El apartado que corresponde al pensamiento se define en
ocasiones como el más difícil de describir, pues cuenta con tres sub-
apartados correspondientes al curso, donde se describen principalmente
alteraciones en el lenguaje; el contenido, entendido como el espacio de
descripción de ideas de todo tipo y la posible existencia de delirios; y la
forma, que en consecuencia de los dos puntos anteriores puede
corresponder a una forma lógica o ilógica.
7. Sensopercepción: En este punto, como en el anterior, resuenan las
llamadas crisis psicóticas o los síntomas positivos, albergando las
alteraciones correspondientes a las alucinaciones o las ilusiones,
comúnmente alteradas a nivel visual o auditivo, sin dejar de lado las
pseudo-alucinaciones y las ilusiones.
17
8. Sensorio: El sensorio comprende uno de los apartados más largos, pues
contiene diferentes sub-apartados, tales como la memoria, el cálculo, la
atención, la inteligencia, la orientación en las tres esferas mentales (tiempo,
lugar y persona) y la introspección. Para este apartado, comúnmente se
realiza la prueba Mini-Mental, recurso utilizado para evaluar estos ítems
que buscan aproximarse a descubrir alteraciones en ciertos procesos
cognitivos del individuo.
9. Juicio de la realidad: Y finalmente, se encuentra este apartado, el cual
estará comprometido o no en base a las alteraciones principalmente del
pensamiento y de la sensopercepción; lo cual significa que ante la presencia
de delirios o ideas sobrevaloradas, o de alteraciones tales como
alucinaciones o ilusiones, el paciente se encontrará en ese momento con un
juicio de la realidad comprometido.
Sin embargo, es importante recordar que el examen mental no se realiza cada mes o
bajo criterios específicos de tiempo, sino que tras cada evaluación, los resultados de estos
apartados podrían ser diferentes si se llevan a cabo en lapsos apartados de tiempo.
Ejes Diagnósticos
Eje I Trastornos clínicos y otros problemas que pueden ser objeto de atención clínica.
Eje III Enfermedades de origen biológico o con compromiso del Sistema Nervioso.
18
De esta forma, los ejes sirven paran clasificar mejor a un paciente dentro de una gran
subcategoría, que contiene una específica cantidad de diagnósticos al interior de cada una.
De esta forma la clasificación de trastornos se resumiría de manera adecuada de la siguiente
manera:
Para Lacan, las psicosis no fueron objeto de temor o de aislamiento en función de las
neurosis, y es así como en 1956 publica su tercera edición de "El Seminario", el cual lleva
por título: "Seminario III: Las Psicosis", el cual desde su introducción ofrece un recorrido
epistemológico de las psicosis en la historia de la psiquiatría, marcando el acento en la
posibilidad que tienen los psiquiatras para acceder a tratamientos y conceptualizaciones para
estos pacientes, aunque marca continuamente la diferencia entre lo que él desea afirmar y las
definiciones psiquiátricas.
Continuando con lo anterior, Freud (1910) afirma que Schreber retira la energía
libidinal, entendida como las cargas afectivas o montos de afecto, de todas las
representaciones que antes tenían un afecto normal. Por esto, en el momento del
20
desencadenamiento, es posible evidenciar que el sujeto pierde empatía por las cosas que antes
tenían una carga afectiva fuerte, viéndose en un sujeto que puede mostrarse narciso,
referencial con sus seres queridos o en últimas, completamente distanciado de sus relaciones
interpersonales.
De esta forma, Freud afirma que aquella retirada de la energía libidinal sucede porque
el sujeto se enfrenta a una representación inconciliable, entendida como un evento de difícil
resolución, que despliega el mecanismo de generación de síntoma del psicótico; la forclusión
(en el neurótico es la represión). Aquello que se rompe, se desliga o se niega, termina por
distanciar al sujeto de la instancia exterior, lo externo entendido como lo real, es
transfigurado.
Ahora bien, Lacan introduce su esquema R (RSI), para explicar los tres registros que
se encuentran en constante interacción en el ser humano; lo Real, lo Imaginario y lo
Simbólico. El primero de ellos emerge durante la infancia, previo a la adquisición del
lenguaje: El Imaginario, entendido como las nociones imaginarias que el sujeto se hace de
las representaciones. Posterior al lenguaje, emerge lo Simbólico, entendido como aquel
registro por el cual se obtienen significados específicos a determinados significantes. Y, por
último, lo real, que correspondería en resumen a la realidad exterior, completamente inefable
por no poderse describir sin hacer uso del registro simbólico.
"El Otro está excluido verdaderamente de la palabra del delirante, no hay verdad por
detrás, hay tan poca que el sujeto mismo no le atribuye verdad alguna, y está frente a
este fenómeno, bruto a fin de cuentas, en una realidad de perplejidad. (...) estando
pues verdaderamente excluido el Otro, lo que concierne al sujeto es dicho realmente
por el pequeño otro, por sombras de otro, o como se expresa nuestro Schreber para
designar todos los seres humanos que encuentra, por hombrecitos mal paridos, o
hechos a la ligera". (Lacan, 1956, pág.82).
Entonces, una vez entendido esto, es así como las representaciones sociales,
normalistas, políticas, familiares, normativas y en ocasiones morales, quedan retiradas del
sujeto, le resultan ajenas, le son distantes e incomprensibles en algunos casos. Sin embargo,
¿a dónde va la energía libidinal arrebatada? Una vez retiradas estas cargas libidinales de los
21
objetos que antes la tenían, ocurre una regresión y fijación, tal y como Freud lo afirma en su
Introducción al Narcisismo.
Así pues, los registros se desanudan y dejan de tener una interacción lógica y racional,
dando por resultado un sujeto que sobrepone lo imaginario (o lo simbólico), frente a lo real.
Es por esta razón que el delirio aparece completamente ligado a las representaciones propias
del sujeto, el paciente no puede delirar con algo que no haya conocido previamente, y no
evaluará la realidad para llevar a cabo una deducción o una acción, sino que le otorgará razón
a lo imaginario.
Por otra parte, la población que ha llegado al servicio donde se encuentra el estudiante
de psicología que redacta el presente proyecto, se dividirá de manera porcentual en base a los
diagnósticos recurrentes en estos meses, desde Enero del presente año hasta la actualidad.
Esquizofrenias 210
Trastornos Personalidad 25
Trastorno Esquizoafectivo 16
Retraso Mental 12
Trastorno Obsesivo-Compulsivo 5
Trastornos Orgánicos 34
TOTAL 583
22
Como se verá, la mayor incidencia de la Sala 6, o al menos durante el lapso de tiempo
antes mencionado, es de las llamadas “psicosis maniaco-depresivas” y de las esquizofrenias,
teniendo una notable menor concurrencia los demás diagnósticos. Sin embargo se reconoce
que este esquema puede ser absolutamente cambiante al interior de otras salas o del servicio
de Hospital Día.
6%
10%
0%
1%
2% 36%
3%
4%
12%
26%
Sin embargo no debe dejarse de lado que diagnósticos como las Esquizofrenias, las
Psicosis Tóxicas y los TAB, poseen mayor incidencia en eventos de agitación, irritabilidad,
referencialidad o auto/heteroagresión, razón por la cual requieren de contención media-alta
al interior de los servicios de hospitalización.
23
También se debe tener en cuenta que la Sala 6 de hospitalización cumple una función
transitoria en muchas ocasiones, recibiendo pacientes de Sala 8 prontos a su egreso, y
pacientes directamente ingresados del servicio de Urgencias del hospital, resultando casos de
contención media y de pronta mejoría, como lo son los Trastornos o Episodios que involucran
la Depresión y las Psicosis Tóxicas, que tras los procesos de psicoterapia y desintoxicación
respectiva, consiguen un egreso más pronto en relación a los TAB o las Esquizofrenias de
difícil manejo y progresiva desestructuración de los síntomas psicóticos como las
alucinaciones o los delirios; en los casos en los que se consigue.
Una vez esclarecido lo anterior, resulta crucial para la creación del presente proyecto
de práctica, la emergencia de una postura crítica hacia el diagnóstico de manual, el cual tiende
en ocasiones a generar un rótulo que afecta al paciente desde su propia subjetividad, hasta en
su relacionamiento con su familia o su entorno laboral.
De esta forma, no debe olvidarse que hay una familia o un grupo familiar que también
padece por las situaciones que ocurren con su paciente, y es así como Barbagelata (1999),
afirma que favorecer el desarrollo evolutivo del psiquismo, en pacientes con esquizofrenia,
se convirtió en tarea fundamental del grupo familiar o red de apoyo, sin embargo, afirma que
hay cinco objetivos centrales en la utilización de dichas personas con fines terapéuticos:
24
4. Como es de esperar, no todo puede realizarse desde el desahucio, es importante
resaltar las capacidades y virtudes de los familiares al someterse al cuidado
voluntario del paciente.
5. Permitir a la familia la posibilidad de realizar dicha intervención con las redes
sociales próximas al sujeto, amigos y cercanos que puedan beneficiar o verse
beneficiados por el apoyo psicoeducativo en torno al diagnóstico del paciente.
Esto cobra una importancia fundamental, que estará consignada al interior del manual
propiamente dicho; el paciente psicótico tiene un afecto particular, emergiendo en ocasiones
desde un negativismo marcado o un aplanamiento afectivo cada vez más utilizado para
definir a la esquizofrenia.
Pero esto no solo está cuestionado por el hecho de que se llega a pensar que el paciente
con estas características no podrá realizar una prospección ‘normal’, incluso es perceptible
en algunos familiares que se oponen a esta supuesta consecuencia lógica; demandas tales
como “me gustaría que mi paciente ame como antes, desee como antes, que quiera trabajar,
que quiera salir adelante”.
Antes de empezar con esto, parece crucial dar un primer esbozo sobre aquella palabra,
“medicalización”, utilizada en múltiples ocasiones en su libro Clasificar en psiquiatría,
Braunstein la define de la siguiente manera:
25
"¿A qué llamamos 'medicalización'? A una modalidad discursiva en constante
expansión, iniciada en el siglo XVIII, reforzada después de la primera mitad del siglo
XIX, decretada oficialmente como política de los estados a partir de la
nacionalización de la medicina en Inglaterra en 1942, que dio lugar en todo Occidente
a la constitución de 'institutos de seguro social' y cada vez más visible a medida que
avanza el siglo XXI, por el cual diferentes, cuando no todos, los aspectos de la vida
humana son vistos y tratados en términos del 'saber médico', supuestamente científico,
avalado por cifras y estadísticas que muestran a las claras dónde está el bien (la 'salud',
equiparada a la normalidad) y dónde el mal, la 'enfermedad' que nos acecha".
(Braunstein, 2013, pp. 33).
Sin embargo, a partir de esta definición, ya es posible empezar a situar una crítica del
autor al respecto de esta medicalización que se expandió hasta la cultura: La manera en que
el saber clásico de la medicina sigue vigente bajo la lógica del discurso, entonces, la salud
representa el bien y la normalidad, resaltando la labor de éstos en la superación del mal o de
la enfermedad.
Esto podrá apreciarse mejor en el recorrido posterior que se hará en torno al andar de
la psiquiatría clásica en la reclasificación de los llamados “trastornos mentales”, basados en
los “síntomas” y “comportamientos anómalos” respectivos, permite recordar que la locura
fue la base de la psicosis en general, que el loco, alienado completamente de sí y con
posteriores suposiciones al respecto de sus capacidades cognitivas (como se vio, esto no
queda completamente esclarecido hasta años después tras reediciones y modificaciones
nosográficas), sigue siendo pensado como un sujeto que se inscribe en este “mal” de la
“enfermedad, un anormal.
26
como principio canónico y, en este caso, ha de permear también a la psiquiatría. La opinión
de estos expertos, entonces, ejerce una fuerza sobre las personas, además de una justificación
por la cual señalar y diferenciar. En palabras del autor: “...todo, es visto como un
acontecimiento que se clasifica como 'sano' o 'enfermo' pero siempre en la perspectiva médica
y con la vista puesta en criterios de "normalidad". (Braunstein, 2013, pp.34)
Ahora bien, para cumplir una función reguladora y que, a su vez, se presente como
una opción verás y comprobable, los llamados expertos utilizan las estadísticas en su favor,
estudios cuantitativos que pretenden englobar en su totalidad una problemática. Esta
característica, propia del modelo denominado por algunos autores como “la medicina basada
en la evidencia”, permite un contraste parcial en la compresión de ciertos fenómenos que, si
bien pueden llegar a mostrar una media o una tendencia, no necesariamente han de acoger
todos los casos y obtener una veracidad intachable.
Es por esto que Braunstein (2013) denuncia el lugar de privilegio que vienen a ocupar
los doctores y la medicalización dentro de la cultura, pues “...el 'doctor' cuyas opiniones
'científicas' son ávidamente recogidas por las revistas y los medios de difusión de masas que
insisten en convocar a los especialistas y a los expertos en salud física o mental que muestran
pasteles con rebanadas de distintos colores, curvas y escalas de estadística en apoyo de sus
juicios". (Braunstein, 2013, pp.35). Lejos de caer en juicios persecutorios o teorías
conspiratorias, es fácilmente contrastable la manera en la que el argumento que emite un
‘especialista’ gana veracidad por el prestigio del sujeto.
Pues bien, por un momento se puede echar un vistazo hacia más allá de la
medicalización, situando al saber científico, y a la idea de progreso, como los principales
autores de la vinculación de la medicina en un lugar privilegiado. El uso de la tecnología se
erigió como un pilar importante en la vida del ser humano, la sensación de progreso y la
emergencia de avances tecnológicos permitió grandes avances en diversas disciplinas, pero,
consigo trajo consecuencias que serán vistas a continuación.
Es importante, a propósito de lo anterior, fijar una crítica más que ofrece Braunstein
(2013), el modelo de progreso, trajo consigo un encubrimiento de intereses personales dentro
del gran modelo capitalista e individualista, pues las empresas de artefactos médicos y la
27
industria farmacéutica, lograron abrirse paso a través del interés constante de mostrar avances
y soluciones evidentes. Vemos entonces que: "Lo que 'progresa' es el mecanismo de
dominación y control de los seres humanos (de sus cuerpos, de sus vidas) al servicio del
'discurso de los mercados'" (Braunstein, 2013, pp.35).
Pero, sin desacreditar por completo los avances en dichas tecnologías, también es
posible hablar de un decrecimiento y una deconstrucción proveniente de estos avances, que
si bien pueden ser tildados como un acto de juicio subjetivo, merecen un lugar de
consideración por ser posibilidades reales y que son ignoradas ante los demás resultados
positivos. El autor, señala las siguientes problemáticas subyacentes a estos avances:
"No por eso se han de olvidar los contragolpes de ese 'progreso': Iatrogenia,
disminución de las defensas naturales del organismo, sobrevivencia en condiciones
en que la vida pierde sentido y dignidad, creación de sustancias adictivas y producción
industrial de narcóticos, regulaciones absurdas e imposiciones de controles al cuerpo
en nombre de la 'salud pública', ingeniería genérica de incalculables consecuencias
(...), etc.". (Braunstein, 2013, pp.40)
28
El sentido de cuestionar los avances y retrocesos en la medicina, no corresponden a
una crítica dirigida explícitamente a la disciplina, como se vio anteriormente al considerar al
progreso y a los ideales de mercado dentro de esta problemática, sin duda alguna existe una
transformación mayormente positiva en la vida de las personas con la llegada de avances en
esta ciencia.
Ahora, para que emerja un discurso de amo, en palabras de Braunstein (2013), se debe
acceder al fantasma de los comensales, apelar a sus fantasías de normalidad, vitalidad y
bienestar y, consigo, expresar a la ‘enfermedad’ como un riesgo. Como se ha dicho hasta
ahora, la medicina general, que se ocupa de los fenómenos corpóreos o fisiológicos, puede
encontrar diversas justificaciones en este, en la promoción de una salud física, aun frente a
las consideraciones anteriormente expuestas, pero, qué ocurre entonces con la salud mental.
29
El modelo de la medicina basada en la evidencia tiene algo que decir a este respecto.
En la salud mental, especialmente en la psiquiatría y demás modelos que realicen la inclusión
de manuales en sus diagnósticos clínicos, muestran una tendencia a excluir al sujeto en su
subjetividad, para considerarlo un agente con síntomas que lo clasificarán de una u otra
manera dentro de un manual que enlista ‘trastornos’ de la vida anímica. Así, el autor lanza
una crítica contundente a este modelo:
Habiendo considerado esto, entonces qué ocurre con las mismas nociones dentro de
la psiquiatría, el autor hará su crítica más explícita al presentar argumentos en contra de
instaurar una noción de ‘normalidad’ ante la vida de un sujeto, una persona que es un ser
social y que tiene una vida personal regida por sus propias experiencias e interpretaciones:
30
evaluables en términos fisiológicos; los de la psiquiatría son rangos sociológicos,
culturales y, para decirlo rápidamente, políticos pues, en este caso, la atribución de
'enfermedad' es un acto de la polis a través de uno de sus dispositivos". (Braunstein,
2013, pp.45).
Pero entonces ¿qué sentido tiene realizar esta afirmación? Establecer la diferencia
discursiva entre la psiquiatría clásica, y sus reminiscencias que persisten hasta la actualidad,
y el psicoanálisis, que considera al sujeto de una manera estructural, perteneciente a una
estructura clínica, en Freud sería el resultado de la manera en que se ubicó ante la frustración
de la castración y, en Lacan sería la manera en que el sujeto se ubica frente a su deseo.
8. CONCLUSIÓN
31
A este último respecto, debería hacerse el mayor énfasis en futuros profesionales de
psicología, al interior de esta institución, de la Unidad de Salud Mental del HUV y de
cualquier institución que aborde pacientes con la característica de padecer uno de los
llamados “Trastornos Mentales”, pues si bien esta población puede estar internada bajo la
premisa de ser un riesgo para sí mismo o para la sociedad, también es un sujeto que padece
y que tiene la posibilidad de acceder a una prospección, a cumplir sueños y metas, e incluso
en ocasiones; a sobreponerse a los efectos de los psicofármacos en su diario vivir.
9. CRONOGRAMA
SEMANAS 3 4 1 2 3 4 1 2 3 4 1 2 3 4 1 2 3 4 1 2 3 4 1 2
Elaboración
del proyecto
de práctica
Observación
Intervención
en crisis
Revista con
enfermería
Revista con
psiquiatría
Asesorías
académicas
Evaluación y
valoración
mental
32
Intervención
con familiares
Aprendizaje
continuo
Recolección
de la
información
Creación del
manual
Garay, C., Hornes, A., Etenberg, M., D’alessandro, F., & Martini, S. (2010). Guías clínicas
en salud mental: Conocimiento, valoración y uso en el área metropolitana de la ciudad
de Buenos Aires. II Congreso Internacional de Investigación y Práctica Profesional
en Psicología XVII Jornadas de Investigación Sexto Encuentro de Investigadores en
33
Psicología del MERCOSUR. Facultad de Psicología - Universidad de Buenos Aires.,
60-65.
Stevens, K., & Méndez, D. (2007). Nuevas herramientas para la psicología clínica: Las
Terapias Basadas en la Evidencia. Cuadernos de Neuropsicología / Panamerican
Journal of Neuropsychology, 265-272.
34