Vous êtes sur la page 1sur 3

Modernidad , Estética Barroca , Mestizaje Cultural

Barroco NO SOLO concepto arte o literatura sino de análisis de la historia de la cultura

Analizar patrones relacionados con este concepto a lo largo de la historia de la cultura,


patrones que pueden llamarse: Ethos Barroco , que comparten cierto aire barroco en algunos
fenómenos de la cultura.

Crisis civilizatoria : crisis del proceso ante implantación de Modernidad – Capitalista (que lleva
más de 100 años tratando de implantarse)

Crisis por los genocidios y ecocidios producidos en detrimento del trabajo, base de proceso
económico que la modernidad capitalista soslaya y anua en nombre del capital (tanto desde el
Capitalismo de Estado como desde el Capitalismo liberal).

El modelo de modernidad-capitalista parece destino ineluctable y estructura monolítica, pero


no lo es. Hay versiones de ese modelo, formas de captar el modelo civilizatorio.

El ethos barroco guarda relación con una forma de asimilación de la modernidad, distinta a
aquella modernidad-capitalista excluyente y puritana, ligada a “producción, circulación y
consumo de la riqueza social”; sin embargo, ethos barroco aún pervive.

II

Concepción del Ethos barroco es una respuesta a la idea de Weber de que no hay Modernidad
sin capitalismo, en la relación biunívoca que establece entre “ética protestante y capitalismo”

Ethos:

1. “morada”, “abrigo”, “refugio”, “arma” defensiva, activa


2. “uso, costumbre, comportamiento automático, modo de ser” “comportamiento que
busca asimilar el mundo y que es efecto del asimilación del mismo”

Ethos histórico: todo un principio de construcción del mundo de la vida, que apunta a hacer
“vivible lo invivible”.

¿Frente a qué defenderse, armarse”? : Frente al “hecho capitalista” que impone una lógica
de dar acento al valor de cambio como correlativo a la acumulación del capital, en detrimento
del valor de uso, ligado más bien al trabajo y al uso social práctico de disfrute del mismo.
Supone una “contradicción estructural” entre mundo de la vida y sistema económico moderno.

Frente al “hecho capitalista”, cuatro actitudes son las alternativas de relación, sea por
asimilación o desconocimiento.

Ethos Realista: Afirmativo y militante del mundo existente, realista capitalista, y que sirve a
las supuestas bondades del mismo, en tanto comprende que es imposible otra realidad.
(Apegado a la “valorización del valor”) Borra la realidad capitalista.
Ethos Romántico: Igual de afirmativo y militante pero de un modo de entender al capitalismo
como un destino natural malévolo. Parte del destino natural moderno capitalista, frente al cual
se tiene una opinión de que es un infierno, pero parte de la Creación, del destino natural.
(Apegado a “valor de uso”) Niega la realidad capitalista.

Ethos clásico: Posición que valora el capitalismo por el efecto efectivo producido, más allá
de la crítica posible que se le puede realizar y de la asimilación del valor negativo del mismo,
hay una constructiva y comprensiva posición apegada a los supuestos resultados positivos
efectivamente sostenidos, en detrimento de la comprensión negativa que del capitalismo y
modernidad se realice.

Ethos Barroco: Enlazado a la vida cotidiana. Afirma el mundo de la vida, la espontaneidad


que lo caracteriza. Supone a la modernidad capitalista como un hecho inaceptable y ajeno.
Apegado a una inyección de cualidad de “segundo orden”, ya que consciente de que
capitalismo se impone en casi todo ámbito, se resguarda ante tal afirmación generando un
segundo orden distinto y alejado de lo impuesto. Con Bataille: “aprobación de la vida aun
dentro de la muerte”. Resiste al modelo

El ethos que ha obtenido prevalencia y dominancia es el realista, sin embargo eso no quiere
decir que no estén las otras eticidades en constante movimiento y relación. (Implica que la
“valorización del valor mercantil” ha ganado preeminencia frente al “valor de uso”, sin
embargo, no quiere decir que no existan)

III

¿Por qué llamar ethos “barroco”?

En virtud de acepciones que definen “lo barroco”: por ser trasgresor, improductivo y represor
ante tendencia clásica. De-formación de lo clásico, algo no clásico IGUAL lo barroco. Forma
negativa de definirlo.

Lo barroco acepta lo clásico, acepta dicho canon como inconsistente para reinventarlo y
reformarlo, darle otra forma. Es a la vez, fiel al canon y cuestionador del mismo; lo pone a
prueba y lo revitaliza.

Lo barroco despierta el drama que posa dormido sobre el canon clásico, lo anima y regurgita, lo
produce como inconsistente en la medida en que se lo re-crea.

Traspasa el canon y lo infunde de un dramatismo renovador, de “segundo orden”. Para esto se


vale del vacío en el que se produce, del vértigo que genera al ser parte de un gesto
continuamente creacionista. (“respeto al ser y al mismo instante conato nadificante”) (Lo
latinoamericano se funda del vacío, del conflicto de la identidad supuesta “mestiza” que abre la
pregunta sobre que define lo latinoamericano mestizo, qué es lo mestizo latinoamericano)

Arte barroco, ethos barroco, tendencia a estetizar la vida cotidiana. A embellecerla, a


producirla, como efecto de contacto y resietencia ante la modernidad capitalista.
IV

Momento de concreción histórica del ethos barroco: España americana, XVII y XVIII

Ethos barroco: ordenamiento del mundo de la vida ante modernidad capitalista. Es la


identidad consolidad en el mundo latinoamericano que se distancia del folklorismo.

XVII: modernidad cristiana que revitaliza el valor de la fe, en contraposición a modernidad


abstracta soportada del capital. En tensión en ese siglo

Vous aimerez peut-être aussi