¿QUÉ SIGNIFICA CONOCER EN LAS CIENCIAS SOCIALES?

Apertura al debate sobre métodos de ciencias naturales aplicados a las

ciencias sociales

Integrantes de Grupo

Evelyn Arboleda Figueroa Código 1911025628

Ana Isabel Arboleda Figueroa Código 1521022745

Dora Liliana Castro Bulla Código 1812410239

Jhon Carlos Segura Hurtado Código 1812410101

Francisco Javier de Hoyos Código 1812410111

Fabio Nelson Gaviria Varela Código 1812410134

Argumento a favor
Entrando en contexto del uso de método científico en las ciencias sociales, cabe
resaltar que, en el siglo XIX nace en Francia la ciencia Epistemológica positivista,
según Comte, considerado uno de los estadios más altos que había llegado la
humanidad, en relación con el razonamiento toda vez que fue superado los
pensamientos mítico y metafísico, abandonado así por completo el dogma religioso,
lejos de toda especulación. Por esta razón, se empieza a dar vida al valor científico
con el positivismo, estableciéndose así, que toda ciencia debe ser comprobable en
todos estos estadios del positivismo, siendo común la idea de que el pensamiento
científico debe aferrarse a la experiencia comprobable, a la observación científica,
evitando ante todo la especulación, lo cual permitió el paso al uso de los métodos
de las ciencias naturales en las ciencias sociales con la siguiente afirmación, “toda
disciplina que tenga la pretensión de ser ciencia debe adoptar los métodos de las
ciencias naturales”.
Por lo anterior, en la modernidad se inicia la ciencia experimental haciendo uso de
métodos cuantitativos medibles, entendiéndose la ciencia como la búsqueda de la
realidad, es entonces como el positivismo ha sido determinante para las ciencias
sociales, como lo son; la sociología, la psicología que pretenden sostener la
realidad, abordando sus investigaciones mediante métodos científicos, basando sus
estudios en algunos casos en encuestas de opinión publica y por medio de la
estadística establecer un valor numérico, con cierto grado de certeza en la hipótesis
planteada, sim embargo todas estas hipótesis no pueden ser medibles o confiables
a diferencia, como se da los métodos en las ciencias naturales.

Por último, es importante considerar el valor que le dio el método científico a las
ciencias sociales y ver como esta se diferencia de las ciencias naturales en su objeto
de estudio, siendo para las ciencias sociales la línea de estudio los fenómenos
netamente humanos, la sociedad y su libertad, lo cual hace necesario la aplicación
de métodos tanto cuantitativos como cualitativos, sin que estos puedan darse con
la completa certeza, como se precisan en las ciencias naturales.

Argumento en contra

Si tomamos como referencia la obra de Fleck donde enuncia que la ciencia no

obedece a argumentos lógicos si no históricos, se podría deslegitimar que las
ciencias sociales deben regirse por los mismos criterios y métodos
científicos que orientan la Investigación en las ciencias naturales ya que a
diferencia de la única palabra en común que es la ciencia , lo social y lo natural se
ven diferenciadas en su finalidad ya que los seres humanos poseen habilidades
cognitivas específicas que crean habilidades cognitivas específicas de allí que las
ciencias naturales son aquellas que su objetivo es el estudio de la naturaleza y
estudia los aspectos físicos y no los humanos del mundo.

De esta manera no necesariamente deben regirse bajo los mismos razonamientos

por sus grandes diferencias como se podría afirmar con las ciencias naturales que
usan el método científico las sociales no, estas no tienen leyes o teorías las
naturales si, la sociales no pueden experimentar en hechos o sucesos sociales, los
naturales si pueden hacer experimentación. Las ciencias naturales tienen
resultados comprobables las sociales no.

Determinamos de esta forma que de ninguna manera se deben regir bajo los
mismos parámetros por su finalidad en el campo de acción de cada una de sus
ciencias.

Argumento propio

Es preciso hacer hincapié en la situación presentada entre ciencias “exactas” y

ciencias humanas o sociales, en un primer momento se puede observar que ambas
preponderan un análisis sistemático de datos empíricos, que si bien no llevan el
mismo método, sugieren la existencia de una realidad que es aprehensible hasta
cierto punto. El empirismo, por ejemplo, se fundamentaba en la obcecación para y
por los fundamentos numéricos desprestigiando cualquier otra ruta. Básicamente,
descartaba toda posibilidad de que hay realidades sociales dónde los datos no
emergen en contextos de máxima racionalización y alineación.

Es en este anterior aspecto que podemos defender la idea de que los métodos de
las ciencias naturales no necesariamente deben ser la base de una ciencia social,
esto por el hecho de que una ciencia humana aguarda una cantidad importante de
subjetividad que no es posible determinar con exactitud o precisión general. En las
ciencias sociales contamos con variedad de medios para la obtención de datos
como son: encuestas, cuestionarios, entrevistas, documentación, experimentación
y observación participante.

Las ciencias sociales ya cuentan con su propia forma de estudiar un fenómeno, se

pueden valer de métodos cuantitativos y en mayor medida, cualitativos y con esto
no perderán su carácter ni de ciencia ni de social. Podemos observar que en el
análisis de datos se hace uso de los análisis de regresión y test estadísticos.

De llevarse a cabo un proceso de estudio igual al de las ciencias exactas no

tendríamos la posibilidad de nutrir el conocimiento resultante de ambas ciencias,
creemos firmemente que si de utilizar la misma manera de abarcar un fenómeno se
tratase, no existiría una ciencia diferente, una ciencia que llena vacíos, una ciencia
que posibilita entender lo no tangible “variables invisibles”, lo que existe pero se
sigue subestimando. Se trata de complementar, no de opacar o reducir a las
ciencias sociales, podemos resaltar el papel de la ciencia natural en el desarrollo de
la humanidad en ciertas maneras, pero lo más fascinante sería que la mencionada
ciencia trajera posibilidades de enriquecimiento a lo social, sin la pretensión de
querer gobernar el conocimiento aplicando métodos que puede que no se ajusten
en su totalidad a un fenómeno multidimensional y multidireccional.