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La Fuerza Espiritual
Nada causa más paz al hombre y su familia que practicar el amor, nada más placer
que tener una actividad creativa, nada más alegría que actuar con la verdad,
honestidad y perdón; es allí que nos convencemos mejor de la presencia de Dios.
En la familia debe llevarse bien una religión de amor, solo manteniendo una estrecha
y continua relación con Dios, puede lograrse la paz interior.
Los padres deben inculcar la religión en el seno de su hogar, no hay peor error que
permitir a los hijos que cumplan la mayoría de edad para que elijan su religión.
La Buena Ejemplaridad
El gran reto de la paternidad, consiste no como tratar mejor a nuestros hijos sino en
cómo darles un mejor ejemplo.
Debemos enseñar sin esperar resultados, es la ley del buen maestro; su misión no es
levantar la cosecha, su misión es sembrar.
El padre que cree estar haciendo todo bien, es el que más profundamente graba en
sus hijos el dañino patrón de la arrogancia.
FACTORES A TENER EN CUENTA EN LA EDUCACI ON DE LOS HI JOS
Tomado del Libro: Un Grito Desesperado Autor: Carlos Cuahutemoc Sánchez
El Amor Incondicional
“La única energía que fortalece verdaderamente al hogar
y a cada uno de sus miembros es el amor sin condiciones”.
. Desatender a la pareja por atender a los niños es un veneno lento pero seguro
que terminara por intoxicar a todos los miembros del hogar.
Dos basados en condiciones que significan: Debes ganarte mi cariño con actitudes y
acciones que me agraden.
Nivel corriente y elemental “Amor si”: “Te amo si eres bueno, si te portas
bien conmigo, si cumples mis exigencias, si haces lo que me agrada, etc.
Y uno incondicional.
Hay que aplicar la inteligencia para demostrarles a nuestros hijos el amor y a la vez dejarlos
sufrir por sus malos actos; jamás consentirlos o evitarles las experiencias amargas porque
FACTORES A TENER EN CUENTA EN LA EDUCACI ON DE LOS HI JOS
Tomado del Libro: Un Grito Desesperado Autor: Carlos Cuahutemoc Sánchez
eso sería aplicar tontamente el amor que les tenemos. Los muchachos deben saber que
desaprobamos sus faltas, pero que los queremos a pesar de sus tropiezos.
La Comunicación Profunda
“Un parámetro fiel para determinar la calidad de una familia está dado
por el número y frecuencia de conversaciones serias entre sus miembros”.
En este nivel es fácil insultar, vituperar o criticar sarcásticamente, por lo que con
frecuencia se comete el error de herir a quien nos habla con mayor profundidad. Nada
es más dañino en la familia que una constante comunicación superficial.
Se da solo entre personas que se quieren y, al realizarse se abre un cofre del tesoro
en el que se guardan las dudas, temores, anhelos, dolores, tristezas, gustos, quereres,
un cofre que debe estar siempre abierto para nuestra familia.
Pierdan el miedo de abrir sus sentimientos y luego pierdan el miedo a disciplinara sus hijos.