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La venoclisis consiste en un procedimiento para canalizar una vía venosa, ya sea para la administración de líquidos,
medicamentos o con fines diagnósticos a través de una vena. De hecho, es la técnica por la cual se administra una
inyección de algún tipo de líquido por vía intravenosa a través de una cánula (aguja). Se debe recordar que una vena
es un vaso sanguíneo.
MATERIALES
Bandeja
Catéter (18G, 20G, 22G)
Líquido intravenoso prescripto
Perfus
Prolongador con llave de 3 vías
Lazo hemostático.
Algodón/gasa impregnado con alcohol.
Tela adhesiva hipoalergénica.
Manoplas
Recipiente para residuos orgánicos y descartado
PROCEDIMIENTO
Identificar al paciente
Presentarse con nombre, apellido, cargo y explicar el procedimiento (si está lúcido).
Realizar higiene de manos
Reunir el material en una bandeja.
Cebar el prolongador de vía con suero y colocar la llave de tres vías, manteniendo los principios de asepsia.
Ayudar al paciente a adoptar una posición cómoda
Seleccionar sitio de punción de acuerdo, a la finalidad de la indicación del procedimiento, a las condiciones
del capital venoso y sin interferir en la movilización del miembro.
Colocar la ligadura 10 cm por encima de la zona a puncionar. Vaso dilatar la vena solicitando al paciente
(si esta lúcido) que abra y cierre la mano, aplicar masaje en la zona seleccionada. Si no se dilata puede: vaso
dilatar con calor húmedo local o colocar el miembro en declive unos segundos.
Palpar suavemente la vena con los dedos índice y medio de la mano dominante
Colocarse guantes
Realizar la antisepsia de la zona a puncionar con un movimiento circular desde el punto de inserción
seleccionado hacia fuera cubriendo un área de 5 cm. de diámetro con alcohol al 70%. Dejar actuar 2 o 3
minutos hasta que seque la piel.
Tomar el catéter con la mano dominante y desenfundarlo.
Tensar con el dedo pulgar de la mano no dominante la piel por debajo de la zona de punción seleccionada
para inmovilizar la vena.
Si se utiliza catéter de teflón. Insertar el catéter con el bisel hacia arriba en un ángulo de 15 a 30 grados,
por debajo del sitio elegido, una vez que atraviesa la piel, disminuir el ángulo y seguir la dirección de la
vena. Continuar introduciendo lentamente el catéter, cuando refluya sangre ir retirando la guía metálica e
introduciendo el catéter.
Retirar la ligadura con la mano no dominante.
Presionar por encima de la piel el catéter, retirar el último tramo de la guía metálica y colocar el alargue
con la llave de tres vías. Fijar el catéter según disponibilidad o tiempo de permanencia la vía con una de las
2 técnicas: cruzada o cinta transparente
CAMBIAR EL CATETER CADA 72 HS.
COMPLICACIONES
Extravacion O Infiltración
Flebitis
Embolia Gaseosa
Infección
Hematoma
Oclusión Del Catéter
HERIDAS QUIRURGICAS-CURACIONES
Es la limpieza, seguimiento y fomento de la curación de una herida cerrada mediante suturas o grapas. La herida
quirúrgica aséptica es la rotura de tejidos a través de un procedimiento quirúrgico y que no está infectada por
gérmenes patógenos
MATERIALES:
Paños estériles
Gasas y compresas estériles Guantes desechables y guantes estériles
Solución salina
Solución antiséptica (Povidona yodada, clorhexidina 2%...)
Apósitos
Instrumental estéril (Pinzas, quita- agrafes, hojas de bisturí…)
Contenedor de residuos para material punzante/ cortante
PROCEDIMIENTO
Informar al paciente del procedimiento a realizar.
Preservar la intimidad del paciente (Bajar estor en habitación doble / descubrir solo la zona necesaria para
la cura)
Preguntar al paciente si tiene alergia a productos antisépticos (yodo, mercurocromos… o material de curas
como el esparadrapo)
Lavado de manos según protocolo.
Colocar guantes desechables y retirar apósito suavemente (humedecer con suero si esta adherido.)
Examinar la herida: color, calor, dolor, sangrado, Dehiscencia, inflamación, exudado…). Si se observan
signos de infección o sangrado avisar al médico responsable.
Si existe exudado purulento, tomar muestra para cultivo.
Abrir de forma aséptica el paño estéril y sobre él gasas estériles y pinzas de disección o Kocher para hacer
torundas. En vez de pinzas, también pueden utilizarse guantes estériles.
Limpiar la herida con solución salina por arrastre, limpiando siempre de arriba hacia abajo y del centro a la
periferia. Si la herida está contaminada, limpiar desde la zona limpia hacia la contaminada. Secar la zona
utilizando la misma técnica.
Aplicar el antiséptico.
Cubrir con apósito estéril y /o vendaje si precisa, según la localización y características de la herida.
Si el paciente tiene drenajes (Penrosse, redones… realizar curas por separado)
Si el paciente está ostomizado, hay que aislar la herida del estoma, para ello utilizaremos los dispositivos de
ostomías más adecuados para evitar fugas y cubriremos la herida con apósitos plásticos.
La frecuencia de las curas será según la evolución de la herida. En general el primer cambio de apósito a las
48 horas post-intervención.
Dejar al paciente tapado y en posición cómoda.
Descartar los desechos.
REGISTRO
Si hay algún cambio significativo en la evolución de la herida: Signos de infección, dehiscencia, sangrado, aumento de
exudado, recogida de muestra para cultivo, etc. Dejarlo reflejado en una nota de observaciones de enfermería.
TRAQUEOSTOMIA
Definición: La traqueotomía es la incisión quirúrgica que se realiza de manera electiva en la cara anterior de la
tráquea, a la altura del 2 ó 3 anillo traqueal, por debajo del cartílago cricoides, para la inserción de un tubo, con el fin
de restablecer y mantener la permeabilidad de la vía aérea.
MATERIAL Y EQUIPO
Equipo para aspiración de secreciones.
Gasas de 5 x 5 y de 10 x 10.
Hisopos estériles.
Solución estéril para irrigación o solución fisiológica.
Solución antiséptica.
Cintas para sujeción de la cánula de traqueotomía.
Guantes desechables no estériles.
Guantes quirúrgicos estériles (dos pares).
Barbijo (desechable).
Bolsa para desechos.
PROCEDIMIENTO
Lavarse las manos.
Valorar el estado del estoma, enrojecimiento, edema, datos de infección y hemorragia.
Realizar la aspiración de secreciones de tráquea y faringe (con la técnica adecuada).
Explicar el procedimiento al paciente y así lograr mayor cooperación.
Colocarlo en posición de Fowler, si no está contraindicado para el paciente.
Utilizar la técnica estéril para colocar y preparar el material de curación, solución para irrigación y
antiséptica.
Colocar una compresa estéril bajo la traqueotomía (sobre el pecho del paciente).
Colocarse las lentes de protección, barbijos y guantes (guantes desechables).
Retirar el apósito de la cánula de traqueostomía y desecharlo.
Quitarse los guantes (desechables)
Colocarse los guantes estériles.
Realizar la asepsia del extremo de la cánula con gasas estériles impregnadas con solución antiséptica
(utilizando las reglas básicas de asepsia y repitiendo el procedimiento).
o Continuar la asepsia de la zona del estoma, respetando las reglas básicas de asepsia.
o Utilizar hisopos impregnados de solución antiséptica en los bordes y bajo los bordes de la cánula y realizar una
asepsia completa y minuciosa.
o Quitar el antiséptico con una gasa de solución para irrigación.
o Secar el exceso de humedad con gasas estériles (la humedad propicia la infección e irritación de la piel).
o Si está indicado, aplicar antiséptico (pomada).
Colocar el apósito de la traqueostomía. Existen apósitos especiales para la cánula de traqueostomía, o bien
pueden acondicionar, desdoblando una gasa de 10 x 10 (alargando en forma horizontal) y formar una
especie de corbata, doblando ambos extremos de la gasa, para que exista mayor absorción se puede
utilizar doble gasa. No utilizar gasa en la cual se realice un corte, ya que puede producir pelusa de algodón
e introducirse y posteriormente ocasionar un absceso traqueal. Los apósitos deben cambiarse cada vez que
se manchen, ya que propician el desarrollo de microorganismos patógenos y laceración de la piel. Algunos
médicos prefieren no utilizar apósito en el área de traqueostomía, su opinión es que el apósito conserva la
zona húmeda y oscura propiciando infección en la estoma.
Cambiar las cintas de la cánula de traqueostomía, de preferencia contar con ayuda de otra persona para
que con las manos dotadas con guantes estériles sujete y mantenga el tubo de traqueostomía en su sitio
mientras se cambian las cintas (puede haber expulsión accidental de la cánula si el paciente tose o se
mueve). De no ser posible la ayuda, las cintas limpias deberán ser atadas antes de retirar las sucias.
Acondicionar al paciente en una situación cómoda y confortable.
Mantener disponible el equipo para aspiración de secreciones.
Lavar el equipo y enviarlo para su desinfección y esterilización.
REGISTROS
Registrar en expediente clínico el procedimiento realizado y las observaciones de las condiciones de la estoma
(irritación, enrojecimiento, edema, aire subcutáneo) y las características de las secreciones
SONDA VESICAL
El sondaje vesical es una técnica invasiva que consiste en la introducción aséptica de una sonda desde el meato
uretral hasta la vejiga urinaria.
Material
Sonda vesical de calibre y material adecuado.
Campo estéril.
Lubricante urológico.
Gasas estériles.
Guantes estériles y no estériles.
Solución antiséptica diluída.
Bolsa colectora y soporte para la cama (sondaje permanente).
Suero fisiológico.
Jeringa de 10 cc.
Pinzas Kocher o tapón para pinzar.
Batea.
Procedimiento
Prepararemos el material necesario y lo introduciremos en la batea, nos lavaremos las manos y nos colocaremos los
guantes no estériles, identificaremos al paciente al que le vamos a colocar la sonda y le informaremos del
procedimiento tanto a él como a su familia.
Empezaremos proporcionando al paciente toda la intimidad necesaria en su habitación, le pediremos que se coloque
en decúbito supino si es varón o que adapte la posición de litotomía si es mujer. A continuación, prepararemos el
campo estéril y echaremos el material necesario dentro de él, cargaremos la jeringa de 10 cc con el suero fisiológico y
la incorporaremos al campo, con la ayuda del auxiliar de enfermería limpiaremos la zona genital con las gasas muy
impregnadas en la solución antiséptica. A partir de aquí nos colocaremos los guantes estériles y procuraremos una
asepsia absoluta, cogeremos la sonda vesical e impregnaremos la punta con el lubricante urológico, la sonda la
manejaremos con la mano dominante, con la otra nos ayudaremos a manejar el meato urinario:
En hombres, agarraremos el pene en ángulo recto y con el prepucio retraído, una vez introducidos unos 10 cm,
colocaremos el pene en un ángulo de unos 60º y terminamos de introducir la sonda.
En mujeres, separaremos los labios mayores y menores e introduciremos la sonda hasta el final.
Una vez que salga orina a través de la sonda, la pinzaremos o la conectaremos a la bolsa colectora según la finalidad
del sondaje. Inflaremos el balón de la sonda vesical con la jeringa precargada de suero fisiológico y con cuidado
iremos retirando la sonda hasta que notemos la resistencia por el balón neumático. Si conectamos la sonda a una
bolsa colectora, la colgaremos en el soporte para la cama.
Finalizaremos la técnica recogiendo y desechando el campo estéril y los guantes, nos lavaremos las manos y
registraremos el proceso y sus complicaciones, si las hubiera, en las incidencias de enfermería, así como sus cuidados
y la fecha del próximo cambio si se produjese.
DRENAJE PLEURAL
NEUMOTÓRAX: Consiste en la presencia de aire con cierto grado de colapso pulmonar en la cavidad pleural.
Puede ser cerrado, abierto y a tensión:
Neumotórax cerrado o entrada de aire en el espacio pleural desde el pulmón, que puede producirse de
manera espontánea o por traumatismo torácico no penetrante. Neumotórax abierto debido a la entrada de
aire exterior al espacio pleural.
Neumotórax a tensión que requiere una actuación inmediata, pues supone una urgencia vital, al aumentar
la presión intratorácica hasta el punto de provocar el colapso pulmonar y el desplazamiento de las
estructuras mediastínicas vitales hacia el lado contralateral.
HEMOTÓRAX: Es la presencia de una cantidad importante de sangre en la cavidad pleural. En más del 90% su origen
es traumático y es conveniente el drenaje precoz para evitar la organización de coágulos y el encarcelamiento
pulmonar con una corteza pleural (fibrotórax). Habitualmente utiliza un tubo del 24 o el 28, ya que los drenajes de
calibre inferior pueden obstruirse con coágulos.
Tubo de tórax
El tubo de tórax es un tubo estéril y flexible de vinilo, silicona o látex; multifenestrado en su extremo distal y con
marcas radiopacas para facilitar su localización radiológica. Se podrá escoger entre diversos tamaños de longitud y
grosor en función de la edad del paciente y finalidad terapéutica (nº 10-12 pediátrico, nº 16-28 adulto). Todos ellos
disponen de un trocar metálico y rígido en su interior. Una vez ubicado deberá suturarse a la piel para impedir su
desplazamiento.
Cuidados diarios
Observar la cantidad y características del líquido drenado, marcando en la cámara de recogida el nivel y la
hora de medición.
Medición del débito, ya sea aéreo o líquido por el tubo.
Registro en la gráfica de constantes del paciente, o en la Hoja de Cuidados, de la permeabilidad, salida de
aire, cantidad y aspecto del débito.
Curación diaria de la zona de punción con suero fisiológico, vigilando la aparición de signos de infección,
edema, exudado, crepitación, etc.
Durante la vigilancia diaria se debe valorar la presencia de enfisema subcutáneo que debe ser comunicada al médico
y tranquilizar a los pacientes. Es importante cuando se realiza la curación diaria de los drenajes pleurales evitar los
acodamientos o compresión al colocar los esparadrapos, por lo que aconsejamos la orientación del drenaje hacia
delante.
Vigilar el punto de fijación del drenaje para evitar que éste se salga.
Evitar tracciones y acodamientos con las movilizaciones del paciente o en los traslados.
Atender las necesidades de aseo, movilización y confort del paciente, evitando que el catéter se salga, se
acode, se eleve por encima del tórax del paciente.
Tener a mano dos pinzas de “clamp” por si se produce cualquier desconexión.
El tubo de tórax no debe pinzarse en ningún caso, excepto:
Cuando se cambie la unidad de drenaje.
Para intentar localizar una fuga aérea.
Para valorar la retirada del tubo.
Se debe evitar la entada de aire al quitar el drenaje. Habitualmente se deja un punto de seda sin anudar para cerrar
el orificio una vez quitado el tubo. Se puede recurrir a un “tapón” con pomada o vaselina en aquellos que no tienen
puntos para el cierre.