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Experimento exploratorio sobre el error del cálculo de la probabilidad conjunta

frente a las opciones electorales de los tres principales candidatos a las elecciones
presidenciales dominicanas del 2004

La Psicología Política es una rama aplicada de la Psicología Social. La Psicología

Política es un conjunto de conocimientos científicos, desarrollados y transmitidos por

una comunidad que se autodenomina psicólogas y psicólogos políticos y que están

reconocidos socialmente como tales, que tienen en común pretender describir y explicar

el comportamiento político humano. Dávila et al (1998).

La Psicología Política es psicología del poder. Ella es un "...conjunto de actos y

actitudes dirigidos a influir de manera más o menos directa y más o menos legal sobre

las decisiones de los detentadores del poder del sistema político o en cada una de las

organizaciones políticas, así como en su misma elección, con vistas a conservar o

modificar la estructura (y por tanto los valores) del sistema de intereses dominante"

(Pasquino, G. 1988, p.180). Cuando hablamos de psicología política nos estamos

refiriendo a psicología del poder, a como los seres humanos se manejan en los resortes

del mismo.

En términos formales la Psicología Política es un área de reciente desarrollo. Harold

Dwight Lasswell es considerado el fundador de la Psicología Política. La fundación en

enero de 1978 de la Sociedad Internacional de Psicología Política (ISPP) constituye un

hecho institucional clave, formalizando la creación de una comunidad que se identifica

y es identificada como psicólogos políticos. En 1979 fundan la revista Political

Psychology, órgano oficial de la sociedad, Dávila et al (1998). La segunda mitad del

siglo XX es el escenario en el cual surge y desarrolla la Psicología política, matizada


por grandes avances científicos y tecnológicos, pero caracterizada por agudos conflictos

políticos nacionales e internacionales con repercusiones mundiales.

La Psicología Política tiene un objeto de estudio bien claro. La Psicología Política es

conocida como la disciplina dedicada al estudio (descripción, explicación y difusión) de

las prácticas comportamentales de contenido y función políticos (Serrano, 2002). La

conducta humana es vista en una nueva dimensión: como ella influye en la política y

como es influida por los fenómenos políticos a pequeña y gran escalas. Pero no solo la

conducta en si misma, también el pensamiento y todos los fenómenos psicológicos

colaterales.

La psicología política ha sido definida de varias maneras. Se la ha visto como la

interacción de los procesos políticos y psicológicos (Deutsch, 1983)), campo que

investiga la intersección entre lo político y lo psicológico (Iyengard, 1993), es estudio

de la actividad política relevante en un contexto dado (Barrer-Barry, 1985), (Citados por

Jiménez, 1996). Esta diversidad de puntos de vista es normal en una disciplina tan joven

como la Psicología política.

Algunos autores llegan a poner en duda la existencia de la Psicología Política como una

disciplina científica. Tal es el caso de Jiménez (1996). Lo cierto es que algunos de los

que creen a la psicología política como una disciplina científica, le reconocen ciertas

debilidades aun, como por ejemplo Dávila et al (1998), que aunque la ven como “un

conjunto de conocimientos científicos, desarrollados y transmitidos por una comunidad

que se autodenomina psicólogas y psicólogos políticos y que están reconocidos

socialmente como tales, que tienen en común pretender describir y explicar el

comportamiento político humano”, reconocen la existencia de una “diversidad en los


marcos teóricos explicativos del comportamiento humano empleados” y ”la falta de una

definición explicitada, concreta y compartida de comportamiento político”, debido esto

quizás a la existencia de varios modelos usados para estudiar la actividad política como

los Legalista o Formalista, Poder, Sistémico, Política como orden social, política como

grupos, creyendo que deberíamos tratar de encontrar una definición que sea inclusiva de

todos estos aspectos.

Una cosa debe quedar clara, y es el hecho de que la Psicología política, como actividad

científica experimental, es realmente muy joven. Sin embargo, el interés por esta

temática crece cada día más. Prueba de esto es la existencia de varias revistas científicas

dedicadas al análisis y la investigación de los diferentes aspectos que constituyen el

objeto de estudio de la psicología política con cientos de comunicaciones, lo mismo que

la existencia de estudios en psicología política a diferentes niveles académicos,

incluyendo los estudios doctorales.

Muy a pesar de la corta existencia de la Psicología política se han ubicado algunos

antecedentes que datan de principios del siglo XX. (Seoane; Moya, Morales; Dávila, et

al). Otros autores sitúan los orígenes de esta disciplina en la antigüedad. Recordando a

Boring, podemos de decir de la Psicología Política, que esta también parece tener un

pasado muy largo, a pesar de su corta historia. Dorna, en 1998 (Serrano, 2003), realiza

un análisis al respecto, planteando que la psicología y la política nacieron al mismo

tiempo "como hermanas gemelas heterocigotas" en la Grecia antigua. Los fenómenos

psicológicos llamaron a atención de los antiguos.

Los fenómenos psicológicos no deben su existencia a una disciplina, sino a la vida

misma del hombre. Uno de los principales propósitos de los filósofos griegos de la

antigüedad, como Sócrates, Platón, y, especialmente, Aristóteles, era instituir cómo


correspondería actuar el Estado perfecto, cómo conseguir que los ciudadanos vivieran

en paz dentro de la sociedad, Serrano (2003).

El hombre es un ser social. La sociedad la componen los individuos. Esto implica que el

funcionamiento del Estado no se da al margen de lo que es comportamiento de los

individuos que componen la sociedad, de modo que la acción del Estado es la

determinación de los hombres en sociedad, por tanto establecer el Estado perfecto

significaba conocer como los individuos integrantes de la sociedad deberían

comportarse para alcanzar ese estado de perfección, Serrano. 2003. Es decir que el

comportamiento de los individuos sería lo que conformaría el Estado.

Otra referencia importante para la Psicología política la vamos a encontrar en la

Florencia de los Médicis. Algunos identifican a Nicolás Maquiavelo como psicólogo

social y a "El Príncipe", como el primer texto de psicología social y de psicología

política.

Más recientemente contamos con tres importantes precursores, que son Alexis de

Tocqueville, Alexander Zinovie y Paul Veyne. Estos tres personajes abordan los

mecanismos psicológicos de diferentes regimenes políticos, La democracia, el

totalitarismo y el autoritarismo. Elster (1995). Como se ve la relación de lo político con

lo psicológico tiene su tradición.

En la actualidad, la Psicología no ha estado al margen de la activad política. Ella

también ha tratado de estudiar estos fenómenos y los ha caracterizado como actividad

psicologica, en tanto que actividad humana. Esto ha dado como resultado, varios

enfoques psicológicos, atendiendo a la orientación teórica de los psicólogos

involucrados. Se trata del psicoanálisis, la biopolítica y el cognitivismo, los cuales


constituyen los puntos de vistas que más han dominado en el campo de la Psicología

política, Jiménez (1996).

El cognitivismo, según Kressel, 1993 (Citado por Jiménez, 1996) ha estudiado todos los

campos del análisis político, desde su propia perspectiva, aprovechando sus aportes en

Psicología Social, tales como los esquemas cognitivos, los mapas cognitivos y las

decisiones. Así se han estudiado como los sujetos estructuran sus informaciones

políticas en esquemas estructurales variables; estudiar los mapas mentales que la gente

tiene, en función de lo que dice, no de lo que piensa, para así inferir sus cogniciones; y,

partiendo de los estudios de Tverski y Kahneman sobre las decisiones a partir de las

ganancias y las perdidas, estudiar las decisiones políticas. Jiménez (1996).

Cuando se va mas allá de la información disponible sobre un asunto particular de la

cognición social se esta haciendo una inferencia social, que es un proceso que conduce a

un producto (Fiske y Taylor), citados por Huchi y Moya 1998).

Si las personas fueran procesadores lógica, no habría cabida a equivocaciones a la hora

de hacer inferencias, sin embargo aquellas casi siempre están presente cuando de emitir

juicios que infieren sobre el estado de un fenómeno o estimulo (Huchi y Moya 1998).

En la recogida de información (Huchi y Moya 1998) se suelen cometer ciertos errores:

*Errores de muestreo y errores en el uso e integración de la información:

-La tendencia a dejarse guiar por los casos extremos de la muestra

-La tendencia a no advertir el carácter sesgado de una muestra


*Errores en el uso e integración de la información

-Fallos en el cálculo de las probabilidades conjunta

-Manejo de la información diagnostica y no diagnostica

-Correlación Ilusoria

De todos estos nos van a interesar los errores en el cálculo de las probabilidades

conjuntas. Se trata del error que se comete al calcular la probabilidad conjunta

de dos hechos al mismo tiempo, calculando la probabilidad de cada hecho por

separado, resultando en consecuencia, la probabilidad conjunta inferida de

ambos hechos mayor que la probabilidad real que en realidad ambos tienen (que

no es mas que la multiplicación del primer evento por la del segundo evento, es

el caso de que la probabilidad de que una persona sea alta y fuerte es menos

probable de que una persona sea alta y fuerte (Huchi y Moya 1998).

Huchi y Moya 1998 citan dos trabajos que son importantes en esta línea, se trata de las

investigaciones realizadas por Slovic et al 1977 y Tversky y Kahneman 1983. En el

primer caso los investigadores preguntaron a los participante por la probabilidad de que

una persona sociable y con interese literarios se matriculase en la universidad para

estudiar ingeniería, La probabilidad de que una persona que estudie ingeniería se

matriculase para estudiar periodismo, y luego la probabilidad de que la persona

sociable y con intereses literarios se matriculase primero en ingeniería y luego pasase a

estudiar periodismo; los participantes consideraron baja las probabilidades para el

primero y el segundo casos y alta la probabilidad del tercer caso, lo cual es un error,
toda vez que este ultimo caso tiene necesariamente una probabilidad menor que los dos

primeros casos.

Tversky y Kahneman por su parte preguntaban por la probabilidad que tenía, el

entonces campeón mundial de tenis de campo Bjorn Borg, si clasificaba para la final del

torneo de Wimbledon, de que ganara el partido, que perdiera el primer set y de que

perdiera el primer set y ganara el partido. Como se había predicho, las probabilidades

para La tercera opción fueron mayores que para la segunda, con lo cual se incurría en el

error de cálculo de las probabilidades conjuntas.

El cognitivismo, según Kressel, 1993 (Citado por Jiménez, 1996) ha estudiado todos los

campos del análisis político, desde su propia perspectiva, aprovechando sus aportes en

Psicología Social, tales como los esquemas cognitivos, los mapas cognitivos y las

decisiones. Así se han estudiado como los sujetos estructuran sus informaciones

políticas en esquemas estructurales variables; estudiar los mapas mentales que la gente

tiene, en función de lo que dice, no de lo que piensa, para así inferir sus cogniciones; y,

partiendo de los estudios de Tversky y Kahneman sobre las decisiones a partir de las

ganancias y las perdidas, estudiar las decisiones políticas. Jiménez (1996).

En un estudio sobre jóvenes militantes S. Gattino, M. Roccato, L. Tamagnone (2002),

estudiando la percepción de la realidad social y afiliación, encontraron que los

militantes de los diferentes partidos tienen percepciones y representaciones muy

distintas de la realidad social.

Partiendo del modelo de comunicación persuasiva de Hovland, C. Delgado y E.

Derecho (2000), empleando la técnica de diferencial semántico de Osgood, midieron la

valoración que la gente daba a dos carteles de dos partidos diferentes, para estudiar el
efecto de variables demográficas y variables psicosociales, encontraron que la opinión

política auto percibida fue la variable más determinante.

En nuestro caso nos proponemos explorar la posibilidad de que este fenómeno del error

del calculo de la probabilidad conjunta pueda presentarse en el área de La psicología

política, explorando como los participantes le asignan probabilidades alta o baja a las

opciones de los tres principales candidatos dominicanos a las elecciones presidenciales

del año 2004, y calculando las proporciones a las distintas opciones electorales de ser

alta o baja la probabilidad de los candidatos en cada opción, quienes eran, en el orden de

preferencia que les asignaban las encuestas, El Dr. Leonel Fernández (Leonel) por el

Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Hipólito Mejía (Hipólito) por el Partido

Revolucionario Dominicano (PRD) y Eduardo Estrella (Estrella) por el Partido

Revolucionario Social Cristiano (PRSC). Las opciones son:

Llagar en primer lugar en la primera vuelta

Ganar las elecciones en la segunda vuelta

Llegar en primer lugar en la primera vuelta y ganar las elecciones en

la segunda vuelta

Sostenemos la hipótesis de que los participantes van a dar una proporción mayor a la

tercera opción que la proporción real que este hecho tiene, la cual se calcula

multiplicando la proporción dada a la primera opción por la proporción dada a la

segunda opción. De esta manera se podría ver si las percepciones y representaciones de

los participantes difieren de la realidad social, como han establecido, Slovic et al 1977

Tverky y Kahneman 1983, Gattino et al 2002; y reforzando la idea de Delgado y


Derecho (2000) de que la opinión política auto percibida puede ser una variable

determinante.

METODO

Participantes. La muestra estuvo constituida por 30 participantes, de los cuales 10 eran

militantes del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), 10 del Partido de la

Liberación Dominicana (PLD) y 10 del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC).

Materiales. Se utilizo un cuestionario con 10 reactivos. De estos el primer reactivo

consigna la filiación partidaria. Los 9 reactivos restantes permiten a los participantes

inferir la probabilidad, alta o baja, de tres opciones electorales para cada uno de los tres

candidatos de los tres partidos que en las ultimas 5 elecciones han ocupado uno de los

tres primeros lugares, marcando con una X la opción de su preferencia. Los reactivos 2,

3 y 4 permiten inferir la probabilidad, alta o baja de Leonel (PLD) en las tres opciones

electorales ya mencionadas; los reactivos 5, 6 y 7 permiten inferir las probabilidades de

las tres opciones electorales para Hipólito (PRD); y los reactivos 8, 9 y 10 para el

candidato Estrella (PRSC):


1. Militancia Política

A. PLD _____

B. PRD _____

C. PRSC _____

A. Probabilidad de que Leonel logre el primer lugar en la primera vuelta electoral

B. ALTA_____
C. BAJA_____

3. Probabilidad de que Leonel gane las elecciones en la segunda vuelta electoral

D. ALTA_____
E. BAJA_____

4. Probabilidad de que Leonel logre el primer lugar en la primera vuelta electoral y


gane las elecciones en la segunda vuelta electoral

A. ALTA_____
B. BAJA_____

5. Probabilidad de que Hipólito logre el primer lugar en la primera vuelta


electoral

A. ALTA_____
B. BAJA_____

6. Probabilidad de que Hipólito gane las elecciones en la segunda vuelta electoral

A. ALTA_____
B. BAJA_____

7. Probabilidad de que Hipólito logre el primer lugar en la primera vuelta electoral


y gane las elecciones en la segunda vuelta electoral

A. ALTA_____
B. BAJA_____

8. Probabilidad de que Estrella logre el primer lugar en la primera vuelta electoral

A. ALTA_____
B. BAJA_____

9. Probabilidad de que Estrella gane las elecciones en la segunda vuelta electoral

A. ALTA_____
B. BAJA_____

10. Probabilidad de que Estrella logre el primer lugar en la primera vuelta electoral
y gane las elecciones en la segunda vuelta electoral

A. ALTA_____
B. BAJA_____

Procedimientos. Los participantes fueron elegidos atendiendo a su militancia política

entre estudiantes universitarios inscritos en la asignatura Metodología de la

Investigación I que al preguntársele declaraban pertenecer a un determinado partido

político. En el caso de que declararan pertenecer a uno de los partidos PLD, PRD,

PRSC se les preguntaban si lo podían demostrar mediante el carné con el cual dicho

partido acredita a sus militantes, en cuyo caso se les pedía su colaboración para una

práctica sobre investigación que el profesor realizaría con los estudiantes de la

asignatura.

Una vez respondido el cuestionario se procedió a calcular la proporción para cada

opción electoral valorada en cada candidato, dividiendo la frecuencia de las

valoraciones de las probabilidades alta y baja en cada opción electoral entre el numero

total respuestas para cada reactivo, es decir entre 30. Para los fines del análisis de los

resultados únicamente se utilizaron las proporciones calculadas para la inferencia de

probabilidad alta para cada opción electoral de los candidatos. Las opciones son Evento

A (inferencia de la probabilidad en la primera vuelta electoral), Evento B (inferencia de

la probabilidad en la segunda vuelta electoral), y Eventos A+B (inferencia de La

probabilidad conjunta para la primera y la segunda vueltas electorales).

Luego fueron calculadas la proporción conjunta, multiplicando la probabilidad

calculada para el Evento A por la probabilidad calculada para el evento B para cada
candidato. En el análisis de los datos se compararon fundamentalmente la proporción

de la probabilidad estimada en la tercera opción en cada candidato con la proporción de

la ocurrencia conjunta del Evento A más el Evento B, que es la proporción real

correspondiente al multiplicar la proporción calculada a partir de la estimación de

probabilidad alta para las des opciones primera.

RESULTADOS Y DISCUSION

Habíamos predicho que las proporciones atribuidas a los candidatos respecto a la

ocurrencia conjunta del evento A más el evento B iban a ser mayores que las

proporciones que dichos eventos tenían de ocurrir juntos. Los resultados confirman esta

presunción. La media de las proporciones de las probabilidad alta inferidas fue de 0.41

con una varianza de 0.13 y la de las proporciones de las probabilidades conjuntas fue de

0.26 con una varianza de 0.13 (Ver Anexo, Cuadro I), diferencia esta que resulto

significativa (t = 2.97, gl = 8, α = 0.05, p< 0.02, (Ver Anexo, Cuadro II). De esta

manera se entiende que tal y como se ha establecido la psicología social (Slovic et al

1977, Tversky y Kahneman 1983, citado por Huici y Moya 1998), en el área de la

psicología política también ocurre que los participantes cuando hacen inferencias

comenten error al inferir la probabilidad conjunta.

Los militantes políticos van a tomar sus decisiones políticas, en este caso electorales, a

partir de sus actitudes políticas de manera irracional y no en función del análisis

realista, racional, de las posibilidades reales de los diferentes candidatos, en


concordancia con Gattino et al 2002 de que los militantes de los diferentes partidos

tienen percepciones y representaciones muy distintas de la realidad social.; ya que los

sujetos estructuran sus informaciones políticas en esquemas, mapas mentales para tomar

sus decisiones en función de lo que piensan (Jiménez 1996).

En este caso como en el de Delgado y Derecho (2000) parece que la opinión política

auto percibida los participantes puede ser una variable determinante.

La discrepancia entre las proporciones la probabilidad inferida y las proporciones de la

probabilidad conjunta de los dos eventos (Eventos A+B) ocurrió en ocho de las nueve

opciones posibles (entre candidatura y la militancia de los tres partidos principales). En

seis opciones se cumplió cabalmente el hecho de que la inferencia de la probabilidad

conjunta inferida para los eventos A+B fue mayor que la probabilidad conjunta de los

dos eventos, a partir de las proporciones calculadas:

Los del PLD para los candidatos Hipólito y Estrella (pertenecientes a los
partido PRD y PRSC,

Los del PRD para los candidatos Leonel y Estrella (pertenecientes a los
partidos PLD y PRSC, y

Los del PRSC para los candidatos Leonel e Hipólito (pertenecientes a los
partidos PLD y PRSC).

No se cumplió lo predicho por la psicología social en tres casos (Ver Anexo). Cuadro

III):

Los del PLD para su propio candidato Leonel (la proporción de la


probabilidad conjunta estuvo ligeramente por encima de la inferida en la
tercera opción).

Los del PRD para el candidato Estrella del PRSC y los del PRSC para su
propio candidato Estrella (la proporción de las probabilidades inferidas
en la tercera opción y las proporciones conjuntas de los eventos A+B fue
igual).
Al analizar la varianza entre los participantes encontramos que el patrón de respuesta,

independientemente de la militancia política, es el mismo, ya que no hubo diferencias

significativa, (Ver Anexo, Cuadros IV y V, y Gráfica I) lo cual refuerza la idea

generalizada del error al inferir la probabilidad de ocurrencia de eventos conjuntamente.

Las proporciones representan las respuestas a la alternativa probabilidad Alta, la cual

se ha dividido entre el total posible de casos que es de 30. No se trata de que cada

participante avance una estimación precisa de probabilidad como .5 o .9, sino de tomar

entre un conjunto de 30 personas que proporción existe de que ellos favorezcan una

opción determinada, de modo que podamos decir que de X cantidad de personas que

elijamos existe una probabilidad X de que consideren opciones favorables para Leonel,

Hipólito o Estrella dependiendo de su filiación política, en funciones de las

proporciones reflejadas, de tal suerte que si sabemos que una persona es del PLD,

tendríamos la certeza de que va a preferir a su candidato independientemente de que las

condiciones objetivas lo favorezcan.

Lo que estaría por verse es si en condiciones anormales, como lo sucedido el 11 de

marzo del presente año en, que proporción de los que militan en un partido estarían

dispuesto a variar su decisión electoral ante un acontecimiento de tanta envergadura

como lo fue este, lo cual nos conduciría a estimar, por la proporción, que probabilidad

existe de que un ciudadano español, en este caso, independientemente de su militancia

estaría en condiciones de variar su decisión. Investigaciones futuras deberían explorar

esta posibilidad.
Una limitación del presente estudio puede ser en cuanto a la estrategia de estimación de

probabilidad usada al dividir toda la escala de probabilidad en dos valores, de modo

que pudiera tomarse en cuenta en estudios posteriores de esta problemática la

estimación numérica de cuanta probabilidad se atribuye en una escala tipo Likert para la

inferencia de probabilidad de ocurrencia de los eventos en las distintas opciones, en vez

de la simple inferencia cualitativa de cuánta probabilidad es "Alta" y cuánta es "Baja"

Para una persona concreta y un reactivo concreto, de acuerdo al procedimiento usado en

la presente investigación, los valores "Alta" y "Baja" pueden dividirse en distintos

lugares de la escala que va de 0 a 1, es decir, no siempre en el punto de 0.5. Además, no

se puede saber cuánto de alta o de baja es la probabilidad estimada. Esto dificulta saber

predecir qué valor se debe dar en el reactivo que pregunta por la probabilidad conjunta

de los dos eventos. De esta manera se podría distinguir si cada persona individual

muestra el sesgo.
CONCLUSION

Las proporciones de las probabilidades atribuidas a los candidatos respecto a la

ocurrencia conjunta del evento A más el evento B son mayores que las proporciones

conjuntas calculadas para la ocurrencia conjunta de dichos eventos. Las decisiones de

los militantes políticos van a ser irracionales, tanto al sobre estimar las posibilidades de

su propio candidato, como al minimizar las posibilidades los candidatos contrarios.

BIBLIOGRAFIA

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publicidad electoral. Revista de Psicología política. 21, 31-54.)

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Colombia. http://www.abacolombia.org.co/areas/social/artpol6.htm)
ANEXOS
CUADRO I. ESTADISTICAS DESCRITIVAS DE LA Probabilidad Inferida
A+B y la Probabilidad de Real de A+B
pI pR

Media 0,411111111Media 0,264444444


Error típico 0,118373754Error típico 0,12060163
Mediana 0,3Mediana 0,05
Moda 0,1Moda 0
Desviación estándar 0,355121263Desviación estándar 0,361804889
Varianza de la muestra 0,126111111Varianza de la muestra 0,130902778
Curtosis -0,760564786Curtosis 0,635556785
Coeficiente de asimetría 0,701060841Coeficiente de asimetría 1,296607433
Rango 1Rango 1
Mínimo 0Mínimo 0
Máximo 1Máximo 1
Suma 3,7Suma 2,38
Cuenta 9Cuenta 9
Cuadro II. Prueba t para medias de dos
muestras emparejadas
Pi pR
Media 0,411111111 0,264444444
Varianza 0,126111111 0,130902778
Observaciones 9 9
Coeficiente de correlación de Pearson 0,91504691
Diferencia hipotética de las medias 0
Grados de libertad 8
Estadístico t 2,974942977
P(T<=t) una cola 0,008868392
Valor crítico de t (una cola) 1,859548033
P(T<=t) dos colas 0,017736784
Valor crítico de t (dos colas) 2,306004133
Cuadro III. Resultado de la diferencias
Entre proporciones de la probabilidad inferida
LEONEL HIPÓLITO ESTRELLA
PLD 0,03 -0,1 -0,25
PRD -0,1 -0,4 0
PRSC -0,24 -0,26 0
Cuadro IV. Análisis de Varianza de dos factores
con una sola muestra por grupo
RESUMEN Suma Promedio Varianza
PLD -0,10666667 0,019633333
PRD -0,16666667 0,043333333
PRSC -0,16666667 0,020933333

LEONEL -0,10333333 0,018233333


HIPÓLITO -0,25333333 0,022533333
ESTRELLA -0,08333333 0,020833333
Cuadro V.
ANÁLISIS DE
VARIANZA
Origen de las Suma de Grados de Promedio de los Valor crítico
variaciones cuadrados libertad cuadrados F Probabilidad para F
Filas 0,0072 2 0,0036 0,124137931 0,886532299 6,94427191
Columnas 0,0518 2 0,0259 0,893103448 0,477894536 6,94427191
Error 0,116 4 0,029
Total 0,175 8

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