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Hebreos 2.

1–4

1 Por tanto, es necesario que con más diligencia atendamos a las cosas que hemos oído, no sea
que nos deslicemos. 2 Porque si la palabra dicha por medio de los ángeles fue firme, y toda
transgresión y desobediencia recibió justa retribución, 3 ¿cómo escaparemos nosotros, si
descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo sido anunciada primeramente por el
Señor, nos fue confirmada por los que oyeron, 4 testificando Dios juntamente con ellos, con
señales y prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad.

Algunos de ustedes alguna vez ha manejado con lluvia, en el barro, otros quizás hemos sido
acompañantes, allí te encuentras manejando bajo la lluvia tranquilo, por el barro, pero sin darte
cuenta el auto comienza a irse a la deriva, las ruedas se van deslizando y lo peligroso es que
todavía no te das cuenta, el cambio no lo notas es pequeño, pero no sientes el peligro todavía,
es más a un conductor principiante el cambio no le parece tan peligroso pero luego el coche
llega a terreno firme, se agarran al suelo las ruedas y el problema es que la ruedas y el coche
están apuntando en dirección opuesta a la que pensabas y escuchas el ruido y a lo mejor es
demasiado tarde y chocas.

El propósito de esta sección es hacer ese ruido, asustarnos un poco, decirnos es posible que
estés yendo a la deriva, hacia la perdición y no lo sabes. Asegúrate que tu vida va a donde
piensas que va.

El autor de hebreos quiere que seamos salvos así que nos exhorta a mantener nuestra dirección
hacia Cristo y el espera que Dios use su exhortación para preservarnos.

Él nos habla de certeza, primero de forma negativa y luego positiva, primero hablándonos de
certeza de perdición si descuidamos el mensaje y segundo la certeza de salvación si atendemos
el mensaje. Serán nuestros dos puntos hoy.

1. La certeza de perdición.
2. La certeza de salvación.

Primero la certeza de perdición si descuidamos el mensaje.

El pasaje comienza con un por tanto y eso nos lleva al capítulo anterior.

Casi siempre los por tanto del nuevo pacto, vienen después de algo que Dios nos ha regalado., es
decir, todo es por gracia y entonces Dios nos motiva por gracia.

Primero dice Cristo es superior, superior a cualquier otro ser, él es mejor que un ángel porque él
es eterno, él es la imagen misma de la naturaleza de Dios, él es el creador y sustentador, el hizo

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un sacrificio perfecto completo, perfecto, luego se sentó a la diestra del padre POR TANTO ya
que Dios ha provisto una salvación tan grande ES NECESARIO, ahí es donde el libro toma un giro
intenso hacia una exhortación

Una palabra fuerte en el original es necesario no es opcional, muchas veces la gente quiere
tomar las cosas necesarias de la Biblia y cambiarlas a cosas opcionales, no podemos hacer eso.

Cómo ilustración, Cristo pregunta ¿no era necesario que Cristo padeciera estas cosas y entrará
en su gloria? era necesario que Cristo muriera, necesario que resucitara entre los muertos
necesario para nuestra salvación si te pregunto si ¿tú puedes ser salvo sin la cruz? ¿Puedes ser
salvo sin la resurrección de Cristo? Claro que no. Es necesario, sí Cristo no hubiera muerto
todavía estaríamos en nuestros pecados, nuestro texto dice es necesario prestar más atención a
lo que hemos oído, necesario no opcional si no prestas más atención no escaparas, es
necesario.

Y sigue diciendo que con más diligencia atendamos, más diligencia de lo que estamos invirtiendo
en este momento, es decir, si no creces, si no creces cada día prestando más atención, mayor
atención al mensaje, No serás salvo, si te quedas en dónde estás, satisfecho con la cantidad de
supuesta santificación que ya tienes, te puedo garantizar que no escaparas, en la Biblia si no
estás creciendo estás muerto no hay una tercera opción o estás creciendo o estás muerto

Y para ilustrar esto el autor de hebreos utiliza varias palabras náuticas, que tiene que ver con la
marinería. El punto acá es claro, es que estamos remando contra la corriente y si no remas nunca
llegarás, sino remas más fuerte nunca vas a llegar a destino es imposible llegar destino sin remar.

La palabra se usa con connotaciones del mar y creo que la idea acá es la de mantener el barco en
cierta dirección. Y esto en el primer siglo no era nada pasivo como hoy en día, no es como un
crucero como un barco moderno, está todo computarizado hoy prenden el motor y salen, se
guían por gps, antes era algo muy muy activo, en particular si vas en contra de la corriente del
viento, en contra la corriente del agua, siempre atento viendo las estrellas, viendo el mapa,
viendo el sol, tomando cuentas de que realmente estás yendo hacia el destino dónde quieres ir o
te vas a perder.

Note en el texto que es muy específico qué debemos atender a algo en particular, dice que
debemos atender a las cosas que hemos oído, a las cosas que hemos oído y no sólo habla del
capítulo 1 el contexto nos indica de qué está hablando de todo el consejo de Dios no sólo la
superioridad de Cristo que vemos en capítulo 1, todo el evangelio, el versículo 3 habla de la
salvación tan grande la cual fue anunciada por el señor y confirmada por los que oyeron, se trata

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de todo el mensaje de salvación que anunció el Señor, todo el consejo de Dios en cuanto a la
salvación a través del arrepentimiento y la Fe en Cristo

Tenemos que prestar mayor atención a lo que hemos oído en la palabra de Dios
¿porque habla tan seriamente esto? Dice: no sea que nos deslicemos

Y otra vez usa una palabra náutica, habla de un barco que va a la deriva y la idea es de que si no
estamos anclados, agarrando activamente el mensaje que hemos oído, si no prestamos atención
a nuestra dirección, constantemente fijándonos hacia dónde vamos, sin darnos cuenta vamos a
deslizarnos hacia la perdición.

El pecado es engañoso, el pecado es engañoso ¿Qué persona aquí en la iglesia piensa que va a ir
al infierno? todos pensamos que somos salvos es por eso que el autor nos amonesta.

La única forma de llegar a la salvación es prestando mayor atención a lo que hemos escuchado si
no escuchas bien, si no atiendes activamente el mensaje, te vas a deslizar, es necesario cada día
más, fijar nuestra dirección hacia las cosas que hemos oído, no sea que vayamos a la deriva y
nunca lleguemos a nuestro destino.

Y luego entra en su argumento en el versículo 2 haciendo una comparación entre los ángeles y
Cristo, como lo ha estado haciendo.

v2 Porque si la palabra dicha por medio de los ángeles fue firme, y toda transgresión y
desobediencia recibió justa retribución

¿Cuál fue el mensaje anunciado por los ángeles? La ley, el antiguo pacto. Esa palabra fue dicha
por los ángeles

Gálatas 3.19

19Entonces, ¿para qué sirve la ley? Fue añadida a causa de las transgresiones, hasta que viniese
la simiente a quien fue hecha la promesa; y fue ordenada por medio de ángeles en mano de un
mediador.

Hechos 7.53

53vosotros que recibisteis la ley por disposición de ángeles, y no la guardasteis.

¿En qué sentido la ley fue ordenada por los ángeles? Bueno no lo sé, yo pensaba que Dios le dio
la ley a Moisés y Moisés la escribió, ¿Dónde estuvieron ahí los ángeles? La Biblia no nos explica
los detalles de cómo es que los ángeles estuvieron involucrados en la transmisión de la ley, la
Biblia solo nos dice que sí estuvieron involucrados en la transmisión de la ley, ¿Cómo? No nos

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dice como, si nos dice que esta palabra dicha por los ángeles fue firme y toda transgresión y
desobediencia recibió justa retribución.

La palabra fue firme, esta palabra FIRME, es inquebrantable, inviolable. Obvio en este caso el
hecho de que la ley fue inviolable, no era nada bueno para los judíos. Cada acción recibió justo lo
que merecía según la ley, la ley era clara, obedeces todo esto y vivirás, desobedeces en un punto
y morirás.

La palabra transgresión habla en general del pecado, el hecho de violar la ley.

Pero la palabra desobediencia es importante porque literalmente es la palabra no escuchar, no


dar oído, es muy importante en nuestro contexto porque el autor de hebreos nos está
exhortando a hacer precisamente eso, escuchar, oír.

Y dentro del contexto de los judíos si nos preguntamos cual fue la acusación más frecuente del
Señor en contra de su pueblo ¿Cuál es la respuesta? NO OISTE, no oíste mis palabras, no
prestaste atención, escuchando para obedecer mi ley en todo.

Luego dice: Toda transgresión y desobediencia, todo, no algunos pecados, no solamente los
pecados serios, todo pecado recibió su justa retribución, su merecida recompensa, exactamente
lo que la ley mandaba, si un pago, un pago, si un sacrificio, un sacrificio, si muerte, muerte.

La palabra retribución muchas veces se usa en forma positiva, recompensa, hablando del pago
que el obrero merece por su trabajo, y obviamente el problema es que el pago que el obrero de
pecado merece es la muerte, la paga del pecado es la muerte. El que violaba la ley recibía
exactamente lo que merecía, siempre, firmemente. Si alguien desobedecía la ley era difícil,
vayamos rápido a Números 15.35 en el contexto los hijos de Israel están en el desierto y hallaron
a un hombre que recogía leña durante el día de reposo, entonces encontrando al hombre, lo
traen a Moisés y en el v35 Jehová dijo a Moisés: Irremisiblemente muera aquel hombre;
apedréelo toda la congregación fuera del campamento.36 Entonces lo sacó la congregación
fuera del campamento, y lo apedrearon, y murió, como Jehová mandó a Moisés.

Fue firme, toda transgresión recibió su merecida recompensa, no importa si a ti te parece algo
leve como juntar leña el día de reposo, toda transgresión recibió su justa recompensa.

Y esto nos lleva al versículo 3 de nuestro texto.

2.3 ¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande?

¿Cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación mucho mayor que lo que tenían
ellos?

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Ellos tenían una ley mediada por ángeles, nosotros tenemos una salvación mucho mayor
mediada por el Señor mismo. Y obvio el autor ni siquiera da la respuesta porque es tan obvia, no
vamos escapar, no es posible escapar, es imposible.

Es un argumento de lo menor a lo mayor. Los ángeles son menores, el Señor es mucho mayor,
más exaltado, la condenación que ellos recibieron mucho menor a lo que vamos a recibir si
descuidamos el mensaje.

Es la primera de las muchas amonestaciones que hay en el libro de Hebreos, todas tienen las
misma estructura primero el autor eleva a Cristo por encima de algo del antiguo pacto, en este
caso capítulo 1 Cristo es superior a los ángeles, después de establecer que Cristo es mayor que
los ángeles, luego dice en base a esto, escucha tú piensas que el castigo que recibieron los judíos
cuando ellos desobedecieron una palabra dicha por ángeles fue terrible, los ángeles no son nada,
su mensaje la ley no era nada, Cristo y su evangelio son mucho mayores, es decir cuando alguien
descuido, cuando alguien no escucho el mensaje dicho por los ángeles en el antiguo testamento
¿Qué les paso? Murieron, irremisiblemente muera. Nosotros tenemos una salvación tan grande,
tenemos un Cristo muy superior a los ángeles ¿Qué va a pasar si nosotros descuidamos un mayor
mensaje, mediado por un mayor ministro? Si ellos no escaparon, mucho menos nosotros.

Nuestra salvación es tan grande, es maravilloso lo que Dios ha provisto en Cristo Jesús para
nosotros, Cristo vivió la vida perfecta que no pudimos vivir, el tomo nuestro lugar, el murió la
muerte que merecemos, recibió la justa retribución que yo merezco por mis pecados y que
Dios acepto esa ofrenda y lo mostro al resucitarlo y sentarlo a su diestra, ahora estamos libres
de penas, libres de culpas, libres de condenación, es una salvación magnifica, majestuosa,
gloriosa, no hay palabras para describirla y hay que cuidarla atentamente prestando mayor
atención, guiando nuestras vidas hacia aquella salvación.

Tantas veces hermanos mostramos con nuestro descuido del mensaje de salvación, que no la
consideramos como algo tan grande, mostramos con nuestra pereza que pensamos que el
mensaje no tiene tanto valor y si este es nuestro caso ya estamos deslizando ¿Cómo
escaparemos?

El autor no dice que hay que hacer algo activo para perder la salvación, él dice algo peor que si
no haces algo para cuidarla no escaparas.

¿Te estoy haciendo pensar?

Digamos que tu abuelo muere y te deja 1 millón de pesos y da instrucciones en un testamento


de lo que tú tienes que hacer para heredarlo, cuando llegas ahí con el abogado y él está leyendo
el testamento, explicándolo, ¿vas a decir, escucha, son muchas palabras, es mucho para mi
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cerebro, mejor vayamos al final? No creo, porque el valor de lo que estas recibiendo te anima a
prestar mayor atención.

Si no escuchas la voz de Cristo en su palabra es porque no aprecias la salvación tan grande que
está explicando.

Obvio todo esto nos lleva a la pregunta ¿Qué significa descuidar la salvación?

¿Un verdadero cristiano puede descuidar su salvación y luego perder su salvación? Obvio que
no, la salvación no se gana, ni se pierde, es una obra de Dios,… pero debemos dejar que el
texto lidie con nuestros corazones un poco, es una exhortación.

Es muy importante entender que el autor no está diciendo que su audiencia ya era salva y que
iba a perder su salvación. Esto es obvio en el contexto por algunas razones:

1- Ahí dice nosotros. En toda la carta el autor se dirige a la iglesia visible es decir, todos los que
están escuchándole, algunos en la iglesia son creyentes y otros no, todos nosotros acá
decimos que somos salvos, pero algo muy importante acá, el autor de Hebreos está hablando
a su audiencia así como yo esto hablando a la aquí a ustedes, a sabiendas de que algunos de
nosotros somos lo que decimos, y algunos de nosotros estamos engañándonos. Es muy
importante notar esto, que no dije alguno de ustedes, dije tal como dice el autor algunos de
nosotros, los que estamos acá. ¿Porque es importante esto? Porque si yo digo tú que piensas
que eres salvo y no lo eres ¿quién me va a escuchar? Nadie, porque todos pensamos que
somos salvos, por eso estamos en la iglesia.
Nadie se da cuenta de que es engañado, es la definición de lo que significa estar engañado,
no lo sabes, por esto el peligro, el pecado es engañoso. Pero Fede yo pensaba que debía
tener certeza de mi salvación y me estas exhortando como que debo dudarla. Bueno
hermano la Biblia nos manda a tener certeza de nuestra salvación pero solo bajo una
condición si andamos en luz, si hay fruto del Espíritu santo presente en nuestras vidas, no
debemos tener certeza de salvación si andamos en tinieblas, lo que debemos sentir es una
certeza de perdición, debes sentir el peligro, el calor de las llamas, el terror.
Y esto es bueno porque nos llevara al arrepentimiento, pero si realmente somos hijos de Dios,
él va a usar esto, el hecho de prestar mayor atención a su exhortación para preservarnos y
regresarnos al camino.
2- Segunda razón, en el contexto por la cual el autor no está diciendo que toda su audiencia ya
era salva. v2 si la palabra dicha por ángeles y esto es paralelo con el v3 la salvación tan
grande ¿de qué salvación habla? Dice la salvación la cual fue anunciada por el Señor. Hay un
mensaje anunciado por ángeles y fue firme v3 ¿Cómo escaparemos si descuidamos el
mensaje anunciado por el Señor, un ministro más grande? No estamos hablando de gente
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que había recibido la salvación, estamos hablando de gente que había escuchado, había oído
de una salvación tan grande. Y la pregunta para ellos como para nosotros ¿Qué vamos hacer
con el mensaje que hemos escuchado? ¿vamos a prestar mayor atención o vamos a
descuidarlo?
Esta palabra descuidar habla de ser negligente, de no hacer caso.
Y el punto del autor es que nosotros si podemos hacerlo, podemos ser negligentes con el
mensaje, y si, nosotros podemos ir al infierno, es el punto de la amonestación. Nota que el
autor se incluye asimismo, no dice si un incrédulo, o si un engañado hace eso, dice si
nosotros, nosotros que decimos que somos salvos si descuidamos el mensaje no
escaparemos.
Escucha Fede esto me asusta. Que bien.
El autor de hebreos no dice que Dios es un fuego consumidor y que es horrenda cosa caer en
sus manos para que te sientas cómodo. El propósito de una exhortación ¿es hacer que? Es
asustarnos, asustarnos un poco, el propósito es animarnos a más diligentemente prestar
atención a lo que hemos oído, y luego asegurarnos de que estamos bien con Dios, que
cuando entramos en su presencia si estamos vestidos de la justicia de Cristo.
Tenemos que prestar mucha mayor atención, escuchando, atendiendo y obedeciendo.
Esto debe asustarnos a pensar, escucha:
¿Cómo es que se si estoy engañándome a mí mismo?
¿Cómo es que se si soy salvo?
¿Cómo es que sé que estoy descuidando el mensaje?
¿Cómo puedo tener certeza no de perdición sino de salvación?
Es simple, preguntarnos: ¿estoy prestando atención? ¿Estoy escuchando?
Hablo de escuchar en un sentido bíblico, es decir, escuchar y obedecer. Cuando la biblia habla
de dar oído, una ilustración podría ser cuando le hablo a mi hijo que me alcance un vaso de
agua, si mi hijo se queda ahí sentado ¿me escucho? No en un sentido bíblico, no.
Vas a saber si estas atendiendo diligentemente al mensaje si al escuchar esta exhortación de
Hebreos dices: ¿sabes qué? por la gracia de Dios si oro, por la gracia de Dios si amo a Cristo, si
confió en Cristo, pero ¿sabes qué? necesito depender más, necesito amarle más, necesito
llenar mi mente más de su palabra, necesito constantemente tener comunión con él y con
mis hermanos, congregarme más fielmente, no hablo de hacer más ritos, hablo de
esforzarnos más, en atender el mensaje que hemos escuchado, no quiero deslizar, no quiero
descuidar, si aprecio la salvación que me fue anunciada, si respondes así, amen, estas
demostrando la obra de Dios en tu vida porque el hecho de escuchar y obedecer la
exhortación de Dios es el medio que Dios usa para preservar a sus escogidos, entonces, si

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puedes salir de aquí con certeza de salvación, pero lo triste es que el que debe sentir horror y
temor normalmente es el que no siente nada, no siente nada.
Entonces es un peligro si escuchas la exhortación y dices: esto es para otra persona, es para
otro que no asiste a la iglesia como yo, no hay peligro para mí, la negación es la primera señal
¿de que? Del engaño. Aun en el mundo pasa. El drogadicto ¿Qué dice? No, yo puedo dejar las
drogas en cualquier momento. Decimos que engaño.
Si no prestas mayor atención a la exhortación te darás cuenta de que nunca has sido
preservado por Dios. Quiero dejar claro que la salvación no se gana ni se pierde, es segura
porque es una obra de Dios. Todos los que Dios preserva entonces perseveran. Y este es el
punto clave. LA ÚNICA FORMA DE SABER SI DIOS TE ESTÁ PRESERVANDO ES SABER SI ESTAS
PERSEVERANDO.

2- La certeza de salvación si escuchamos el mensaje.

Hablando de la salvación, dice hay: la salvación la cual habiendo sido anunciada primeramente
por el Señor.

La salvación fue anunciada primero por el Señor. Cristo hablo del evangelio, él dijo cree en mí y
serás salvo.

Entonces el mensaje que hemos recibido es mayor que la ley ¿Por qué? Porque no fue mediado
por un ángel, fue anunciado por el Señor mismo, el hijo del capítulo 1 es quien nos habló del
mensaje. Cristo origino este mensaje. Si alguien se pregunta ¿Cómo sé que Dios será fiel en
salvarme? La respuesta es: porque su propio hijo lo prometió y él es el heredero de todo, el padre
entrego todo juicio a su hijo, lo exalto a su diestra y el, el Señor mismo nos dio la promesa, nos
dio el mensaje de la salvación y no solo eso también dice: de que nos fue confirmada por los que
oyeron.

Hay una confirmación por los testigos de las palabras de Jesús, y eso es interesante, de que el
autor de hebreos está diciendo que el no escucho las palabras de Jesucristo directamente, él no
era testigo ocular del Señor, escucho el evangelio de parte de otros testigos, pero él considera de
que las palabras de esos testigos son verdaderas ¿porque? Dice el v4 porque Dios mismo
testifico simultáneamente con ellos, v4 testificando Dios juntamente con ellos, con señales y
prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad.

Dios juntamente testificaba con los testigos, ellos con sus palabras, Dios con milagros a través
del Espíritu Santo, es decir, el mensaje es seguro y mayor que la ley, porque el padre mismo
testifico que el mensaje originalmente anunciado por su hijo era autentico, verdadero.

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Este texto es uno de los más importantes para explicar porque existían dones milagrosos en el
primer siglo. Esos milagros, según el autor no tenían un fin en sí mismo, Dios los usó para
testificar de la autenticidad del mensajero y de la veracidad de su mensaje. El milagro no salva, el
mensaje salva y no dice que debemos prestar mayor atención a los milagros dice que debemos
prestar mayor atención al mensaje. El propósito de estos milagros era confirmar el mensaje,
confirmar al mensajero.

Pablo y Bernabé en Iconio.

Hechos 14.3 por tanto, se detuvieron allí mucho tiempo, hablando con denuedo, confiados en el
Señor, el cual daba testimonio a la palabra de su gracia, concediendo que se hiciesen por las
manos de ellos señales y prodigios

¿A qué se refiere señales, prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo?

Señales: una señal señala algo, es obvio, en el contexto señalaba que la persona que lo hacía era
un genuino vocero de Dios.

Prodigio: habla de producir asombro. No es similar a lo que vemos hoy en la tele de los
supuestos apóstoles curando un dolor de cabeza. No es lo mismo a lo que vemos en hechos 3,
donde Pedro esta sanando a un cojo de nacimiento, un incrédulo sin fe está ahí pidiendo
limosna. El texto dice que era cojo de nacimiento, sus piernas estaban totalmente atrofiadas, sin
músculos, sin tendones, y Pedro en un instante lo sana, instantáneamente tiene músculos,
tendones, comienza a caminar y saltar, y el punto es que esto creo asombro, todos se quedaron
atónitos. Aun los fariseos queriendo negarlo no pudieron, dijeron en Hechos 4.16 Porque de
cierto, señal manifiesta ha sido hecha por ellos, notoria a todos los que moran en Jerusalén, y no
lo podemos negar.

Luego habla de diversos milagros, es decir, cualquier cosa que rompe las leyes de la naturaleza
algo que va en contra de la forma normal que Dios obra, diversos, diferentes milagros.

Y finalmente dice: repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad y esto es muy
importante, porque nos muestra que el Espíritu Santo tiene su propia voluntad y el repartía
poder como el quiso, así como Pablo dijo en 1 corintios 12.11 con los dones, de que el Espíritu
reparte dones como él quiere, no todos tenemos los mismos dones.

El Espíritu Santo no es una fuerza, que podemos manipular como nosotros queremos.

Hoy escuchamos en muchos lugares personas dándole ordenes al Espíritu Santo olvidando, o sin
saber que el Espíritu santo es Dios.

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El Espíritu Santo es Dios, él es santo, tan santo como el Padre lo es, y el hizo los milagros como él
quiso para confirmar el ministerio de sus mensajeros los que estaban escribiendo su palabra. Y
obvio ahí está la clave los que hicieron este tipos de milagros Moisés, Pedro, los apóstoles,
estaban dando nueva revelación con nuevos mandatos divinos, Pedro se pone de pie en
pentecostés y dice de este momento en adelante tienes que creer en Jesús para ser salvo y si no
te vas al infierno, y la gente se preguntó, ¿debo dejar de obedecer la ley? ¿Debo dejar de
obedecer lo que Moisés mando? ¿Porque debo creer en ti Pedro? Porque Dios juntamente con
Pedro testificaba que Pedro era su mensajero.

Todo esto, habla de que el mensaje es confiable y seguro y no escaparemos si lo descuidamos.

Muchas personas gastan todos sus esfuerzos buscando cosas que Dios no nos manda a buscar y
descuidan el mensaje poderoso que ya nos fue anunciado, que peligroso.

Debemos invertir todos nuestros esfuerzos atendiendo a las cosas que ya hemos escuchado
porque sino no vamos a escapar tenemos una salvación tan grande, demasiado grande para
desatenderla.

La tragedia más grande de la eternidad será los de nosotros que hoy estamos aquí, que
pensamos que somos salvos, que pensamos que estamos en buen camino pero la verdad sea
que estamos yendo a la deriva.

Que tragedia que la única cosa que nos va a despertar de nuestro engaño es la muerte, cuando
ya será demasiado tarde, es necesario que con más diligencia atendamos a las cosas que hemos
oído.

Recuerdo las primeras vacaciones con mi esposa fuimos a la costa, uno de los primeros días
fuimos al mar, nos metimos, muy contentos disfrutábamos ahí jugando con las olas que iban y
venían pero luego de un rato se escucha el silbato del guardavida, de repente nos dimos
cuenta que estábamos muy adentro del mar, y se nos dificultaba volver a la orilla, hicimos un
intento y no podíamos volver el agua nos llevaba con toda su fuerza, seguimos intentando
hasta que decidí ponerme detrás de ella empujarla para que ella pudiera salir, era tanta la
desesperación, luego de seguir intentando gracias a Dios salimos.

Hermanos hoy escuchemos el silbato de esta exhortación, cuidado, las olas de este mundo, las
olas del pecado, del engaño quizás nos están llevando a la deriva y nosotros creyendo que
estamos bien con Dios, no lo estemos, escuchemos el pitido, con más diligencia atendamos lo
que hemos oído, no descuidemos una salvación tan grande, porque no tendremos escapatoria.

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