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Capítulo 1.

ANTECEDENTES HISTORICOS

1.1 Introducción
En el sistema penal de México, se busca preservar los derechos humanos de un sentenciado
acorde a lo que nos dice la convención interamericana de los derechos humanos “Nadie debe
ser sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes. Toda persona
privada de libertad será tratada con el respeto debido a la dignidad inherente al ser humano.”1
Aunque estos individuos hayan cometido una falta a la sociedad y por ende, ir en contra de
las normas establecidas, lo que resultó en el cumplimiento de una pena privativa de libertad,
si cumplieran con ciertos requisitos y parámetros serán candidatos a obtener alguno de los
beneficios penitenciarios que establece la Ley Nacional de Ejecución Penal tales como la
libertad anticipada, condicionada, modificación de la pena y preliberación.2
Un sentenciado es simplemente un individuo al cual se le ha impuesto una sentencia o pena
a la cual tiene que darle un cumplimiento de distinto tipo, dependiendo del giro del caso, en
este caso nos enfocaremos hacia lo penal por el tinte de esta investigación.
Los sentenciados se someten a penas que pueden variar pero nos interesa hablar sobre
aquellos que están purgando una pena privativa de libertad y que según la Ley Nacional de
Ejecución Penal (la cual será mencionada continuamente pues es a esta ley a la que nos
debemos remitir al hablar de cómo proceden los beneficios penitenciarios en México es aquel
a quien ya le fue otorgada una pena y se encuentre en un centro penitenciario.3
El plan de actividades forma parte importante del proceso del sentenciado, puesto que,
depende del debido cumplimiento de este plan para que se haga acreedor de los beneficios
penitenciarios. El plan de actividades se refiere a “XX.La organización de los tiempos y
espacios en que cada persona privada de la libertad realizará sus actividades laborales,
educativas, culturales, de protección a la salud, deportivas, personales y de justicia
restaurativa, de conformidad con el régimen y organización de cada Centro”4 lo que genera
una apreciación por parte de los administrativos de los centros penitenciarios hacía la
conducta, comportamiento y desenvolvimiento de los sentenciados para poder realizar una
evaluación que determine quienes son aptos para reinsertarse a la sociedad de manera
prematura a lo que ya estaba establecido en su sentencia.

1. ORGANIZACIÓN DE LOS ESTADOS AMERICANOS, CONVENCION AMERICANA SOBRE DERECHOS HUMANOS,


CAPITULO I “ENUMERACION DE DEBERES”, ART 5, COSTA RICA 1969
2. CAMARA DE DIPUTADOS DEL H. CONGRESO DE LA UNIÓN, LEY NACIONAL DE EJECUCIÓN PENAL, TITULO V
“BENEFICIOS PRELIBERACIONALES Y PENAS NO PRIVATIVAS DE LIBERTAD, MÉXICO, 2017
3. IBIDEM, TITULO PRIMERO “DISPOSICIONES GENERALES”, FRACCIÓN XVII MÉXICO, 2017
4. IBIDEM, TITULO PRIMERO “DISPOSICIONES GENERALES”, FRACCIÓN XX MÉXICO, 2017
1.2 Nivel de reinserción de los sentenciados en el siglo XX

A inicios del siglo XX se implementaba el hecho de que cada estado se hiciera cargo de los
centros penitenciarios y que el trabajo en las cárceles era la mejor opción para dar un
escarmiento a quienes tuvieran la suerte de estar dentro de estas.1
Esto se planteó por Venustiano Carranza en una reunión en 1916 del congreso constituyente
para los cambios que se efectuarían en distintos aspectos en la nueva constitución de 1917,
la cual sigue vigente hoy en día y de la cual se han generado leyes y códigos que auxilian a
la impartición de justicia en el país.2
Aunque la idea de que el trabajo era la mejor opción para reintegrar a los individuos a la
sociedad, parecía en ese momento la mejor opción, sobre todo por el hecho de que hasta
cierto punto, los centros penitenciarios serían sustentables para los estados, quienes ahora
con la novedad de que tendrían que organizar, gestionar y organizar todo lo concerniente a
sus sistemas penales, terminaron por crear reclusorios y centros, pero sin que se cumpliese el
ideal de regeneración que añoraba el congreso.
Sumando el hecho de que no fue hasta 1929 que surgieron códigos penales así como leyes
de este mismo ámbito para las entidades, antes de esto no existía ninguna ley que regulara
los sistemas penales y mucho menos que buscara la organización de manera científica para
una aplicación correcta.3 Esto generó que la calidad y el estado de los reclusorios fuera
deplorable, se continuaba con las tradiciones de centros penitenciarios del siglo anterior, no
eran ejemplos de buen trato, y mucho menos de preservación de los derechos y de la dignidad
¿En verdad era posible la regeneración que el congreso constituyente buscaba, en estas
condiciones?4

1.SANCHEZ GALINDO, HISTORIA DEL PENITENCIARISMO EN MÉXICO, INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURIDICAS DE


LA UNAM, MÉXICO 2017

2 DIARIO DE LOS DEBATES DEL CONGRESO CONSTITUYENTE. MÉXICO, 1922, TITULO I, PAG 646-667

3. PRINCIÍOS DEL DERECHO PROCESAL PENAL MEXICANO, 3ERA EDICIÓN., MÉXICO, PORRÚA, 1949, PAG 320.

4. GARCÍA RAMIREZ. SISTEMA PENITENCIARIO MEXICANO DEL SIGLO XIX Y XX,, INSTITUTO DE INVESTIGACIONES
JURIDICAS DE LA UNAM, MÉXICO
Más adelante, los siguientes presidentes del país, al darse cuenta que las reformas que se
habían implementado años atrás, no habían funcionado como se esperaba, debido a que lejos
de que la base de trabajo como ideal para la regeneración funcionará en los sentenciados
buscaron volver a integrar este orden de sustentabilidad en los centros penitenciarios, que
además de rehabilitar al sentenciado, también ayudaría a la producción de las entidades
federativas.8
“Ojalá que en esas tierras, que han sido regadas con lágrimas y con sangre, se levante en
breve una cárcel que responda a nuestra condición de país culto, de país civilizado, y que
sepulte para siempre el estigma de dolor, de venganza y de sangre, que guardan los viejos
muros que aún quedan en pie"9 Así se refería Mellado Guillermo a la cárcel de Belén, el cual
era un penal en el cual habían quedado arraigadas las costumbres de los centros penitenciarios
del siglo pasado.
La manera en que Lazaro Cárdenas abordó el asunto de las prisiones, fue de la misma forma
que Venustiano Carranza años atrás, al referirse a la fuerza de trabajo como la mejor manera
para regenerar a los delincuentes. A pesar de que habían pasado ya varios años seguían
usando el término “regenerar” lo cual resulta bastante radical, para la condición en la que
permanecían los centros penitenciarios.10
Hasta la administración de Ávila Camacho los problemas persistían y de esta manera era casi
imposible pensar que un privado de su libertad siquiera pudiera recapacitar de sus acciones
erróneas y reintegrarse a la sociedad, si antes de entrar a un centro, eran personas no gratas
para la sociedad por haber cometido un crimen, mucho menos al salir de ahí porque era
impensable que el individuo había podido alcanzar el punto de inflexión necesario para
rehabilitarse y poder ser insertado de nuevo a la sociedad
En 1953 el presidente Ruiz Cortines al darse cuenta de la situación del sistema penitenciario
del país implemento un plan para poner en marcha la industria de las Islas Marías, la colonia
penitenciaria más conocida del país y que hoy en día ya no está en funciones.

8 Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, enviada por el C. Presidente de la República, México, Congreso de los Estados
Unidos Mexicanos, Cámara de Diputados, 1964

9 Mellado, Guillermo, Belén por dentro y por fuera, Cuadernos Criminalia, México, Botas, 1959

10. GARCÍA RAMIREZ, LOS PERSONAJES DEL CAUTIVERIO, MÉXICO, SECRETARIA DE GOBERNACIÓN-CVS
PUBLICACIONES
“Readaptación sólo es provisión de medios para elegir entre la conducta debida y el
comportamiento ilícito; se trata de poner en manos del sujeto -un sujeto informado y
competente, en los términos que caracterizan al promedio de sus conciudadanos- la capacidad
para resolver sobre su vida”11
Ruiz Cortines está catalogado como uno de los mejores presidentes de México, por su baja
en la incidencia delictiva y la alza en la tasa de crecimiento económico pero a pesar de esto,
seguía con la ideología de que el trabajo restauraría o regeneraría todo mal en los delincuentes
que se encontraran en los sistemas penitenciarios, y que además de lograr reincorporar a los
reos a la sociedad, la mano de obra que ellos brindarían, funcionaría para reducir los costos
de su manutención que desde el momento en que se instauró el ordenamiento en el que se
establecía que cada estado debía hacerse cargo de su sistema penitenciario, estos centros
estaban significando un alto costo en su presupuesto, problema que permanece hasta hoy en
día.
No fue hasta 1964 cuando el Presidente Lopez Mateos decidió tomar en cuenta todas las
molestias que se tenían con respecto al nulo sistema penitenciario del país, los estados lo
intentaban, sin embargo, no tenían el capital necesario para echar a andar un sistema
carcelario decente, es por esto, que el ejecutivo, al tener los medios necesarios, decidió tomar
cartas, en el asunto, era obvio que la idea de que las cárceles o reclusorios fueran jurisdicción
de cada estado había fracasado rotundamente y es que los presidentes anteriores o le tenían
mucha fe a esta ideología del trabajo como base de la regeneración o simplemente no les
había interesado poner manos en el asunto del sistema penitenciario del país, quizá porque
tuvieron que pasar varias décadas para que la sociedad y los altos mandos se dieran cuenta
de que las consecuencias que un pésimo sistema de centros penitenciarios acarrearía a la
sociedad.12
Es aquí donde reconocemos que las deficiencias existentes en el sistema
penitenciario del país, afectan en gran medida a las personas privadas de su libertad
y resulta casi imposible alcanzar la readaptación adecuada de un individuo puesto
que al purgar su pena, no existen las condiciones adecuadas para que esto suceda.

11.GARCÍA RAMIREZ, LOS PERSONAJES DEL CAUTIVERIO, MÉXICO, SECRETARIA DE GOBERNACIÓN-CVS


PUBLICACIONES

12. SANCHEZ GALINDO, HISTORIA DEL PENITENCIARISMO EN MÉXICO, INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURIDICAS
DE LA UNAM, MÉXICO 2017

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