Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
1
En el intento de Claudia Rodríguez de la Universidad de Chile en Las “otras literaturas” de Latinoamérica.
Criterios de inclusión y exclusión en el canon literario (2005) por reseñar sincrónicamente el surgimiento de
una perspectiva estética y una teoría desde el horizonte de las culturas marginadas o historia de los vencidos
introduce el concepto “otra literatura”, acuñada por Edmundo Bendezú (1980 y 1986) para definir ésta línea
de estudio y creación literaria como tendencia opuesta a la literatura oficial.
ejerce el papel sustancial de construir racionalidades, esquemas simbólicos o significados
que inciden en la cultura de una época o responden a las necesidades y condiciones
sociales de una nación, es decir, la literatura es ideológica. Por tal razón, puede afirmarse
que la nueva teoría crítica debe situarse
en el nuevo horizonte teórico, en la medida en que la política del multiculturalismo se basa en gran
parte en la revisión del canon [tradicional] desde la demanda ética de reconocimiento de la marginación
cultural de grupos étnicos, geopolíticos y sexuales” (Pozuelo, 2007:109)
Por lo tanto, el enfoque epistémico de los estudios literarios debe recepcionar una
concepción del canon desde la noción de alteridad (Dussel, 1972). Al mismo tiempo,
emplazar los actos interpretativos en el marco de la historicidad y delimitarla en el
horizonte de lo local. Luego entonces, los criterios de valor estético se revisten de una
condición ideológica2 que se definen en el escenario de la realidad local, los campos
culturales, los acontecimientos de la historia, los valores sociales o el mundo de la vida del
lector crítico pero además, la tendencia ideológica de la literatura y la teoría crítica
pretenden incidir en el espíritu de una época como comentó George Gordon “Inglaterra
está enferma, y… la literatura inglesa debe salvarla” (Eagleton, 2009:36). Esta experiencia
de la literatura inglesa en la cultura victoriana del siglo XIX que intentó influir en el ethos
social de la mujer y la clase trabajadora de la nación, tiene similitud al papel histórico de la
generación del ’98 en la literatura española en el esfuerzo de rescatar el espíritu cultural
en la postrimería finisecular de la España del siglo XIX.
Por otro lado, en la actualidad, las editoriales han modificado la función real de la
literatura, su papel dentro de la cultura; la causa del declive obedece a la fuerte influencia
de los “mass media” en la conciencia del sujeto. Por tal motivo, el objeto histórico de la
literatura es proscripto a simples intenciones, pero el peor caso, es que reducen el acto o
creación literaria a intereses de carácter monetario, puesto el sujeto que diseña las
racionalidades, no es en la actualidad la literatura, sino los medios de masificación, quién
persuade y convence al espectador que debe leer, incluso al escritor que debe escribir;
castrando toda posibilidad del gusto literario. La literatura no es autónoma frente al
lector, no cautiva hacia nuevas experiencias estéticas, la literatura es dominada por la
cultura del mercado, es el sistema de consumo y la publicidad editorial quien determina el
tipo de literatura, es otra forma canónica de dominación (domesticación) cultural de la
creación literaria que margina estéticas ideológicas y críticas al orden establecido o como
afirma Carrión “la literatura que incomoda jamás será canonizada” (2014: s/f) o
reconocida. Por tal motivo, experimentamos el poder de la razón instrumental y el
progreso sobre la cultura3. Esto implica que las dos formas de lo canónico anulan, por una
2
La categoría de ideología es comprendida por Eagleton como “las formas en que lo que decimos y creemos
se conecta con la estructura de poder o con las relaciones de poder en la sociedad en la cual vivimos”
(2009:27)
3
El concepto de cultura como conjunto de significados. Cfr. Geertz Clifford en el texto La Interpretación de
las culturasintenta desarrollar el concepto de cultura desde la perspectiva semiótica. El autor afirma que “el
hombre es un animal inserto en tramas de significación que él mismo ha tejido” (2003: p.16) por lo tanto, el
parte, el carácter histórico, social e ideológico y, por otra, la dimensión semiótica de la
cultura en la literatura.
papel del análisis antropológico consiste en explicar las expresiones sociales (como la literatura) desde la
interpretación para identificar significados dentro de una cultura local o culturas.
4
El concepto Biopoder es un término originalmente acuñado por el filósofo Michel Foucault para referirse a
la práctica de los estados modernos de “explotar numerosas y diversas técnicas para subyugar los cuerpos y
controlar las poblaciones” pero es clasificado según el uso con:Michael Donelly en el textoSobre los diversos
usos de la noción de biopoder, en BALBIER, DELEUZE, DREYFUS, et. al. Michel Foucault, Filósofo, Barcelona:
Gedisa,1990.
Livia Vargas (2007), en una relectura de la libertad en la obra sartriana y del
compromiso literario, plantea que la literatura como acto interpretativo por un autor
inmerso en el mundo debe comprometerse para-sí. Todo compromiso implica la
intencionalidad de un sujeto que interpreta o interpela la realidad histórica y local para
expresar sus postulados o tesis desde un para-sí hacia un ser para-otro, otro que “se nos
hace presente no como un objeto sino como un sujeto, como una subjetividad, con su
libertad, sus valoraciones, sus proyectos5”. En este postulado se infiere que la literatura
no sólo compromete su autor y su obra, sino involucra a la otredad (el lector) desde una
mirada de alteridad, es decir, la creación literaria tiene un fin, para-sí misma y para su
otredad, el afuera de la mismidad del autor.
5
Cfr. El Ser-para-otro. http://www.e-torredebabel.com/Historia-de-la-filosofia/Filosofiacontemporanea/
Sartre/Sartre-Ser-Para-Otro.htm
visión pragmática de las estéticas literarias hacia la comprensión del mundo de la vida, es
decir, la teoría crítica debe aproximarse, desde la literatura, al conocimiento, no de las
formas estéticas en el plano de la autoridad canónica, sino a la intencionalidad
comunicativa del autor o el texto en la producción de sentidos o significados culturales.
Esta concepción hermenéutico-semiótica puede enfocar su estudio de la realidad
fundamentada en los postulados de los estudios culturales que pretenden articular la
práctica teórica con las intervenciones sociales. En este sentido, supera el discurso
disciplinario y univoco de la antropología y lo eleva al estatus transdisciplinario de los
estudios culturales.
¿Por qué el papel de los estudios culturales en la teoría crítica y antípoda del canon
literario? Uno de los principales principios de los estudios culturales es la fuerte “denuncia
de los estragos de la «vida mecanizada» bajo los efectos de la «civilización moderna”
(Matterlart, 2004:19). El discurso moderno de los metarrelatos6, la filosofía positivista de
la ciencia demostró el fracaso de la modernización y la razón instrumental como
alternativa y solución a las demandas sociales, hecho registrado con magnanimidad en el
film “tiempos modernos” (1936) de Charlie Chaplin. Esta racionalidad que produjo y
prolifero imaginarios o significados de progreso, lo que genero fue una hecatombe del
sentido de la vida humana y la naturaleza, masificación de los sujetos, deshumanización
de los individuos, un nihilismo cultural que hoy es necesario resignificar desde los
estudios culturales.
6
Cfr. Lyotard, J. (1987). La condición postmoderna y la postmodernidad: explicada para niños (1987).
al mismo tiempo, identificar los imaginarios sociales de la mujer desde la teoría feminista
en la misma obra literaria, es decir, la lectura crítica no es univoca sino plurivalente. Con
esta postura, las teorías marginales asumen un carácter antidisciplinario y anticanónico de
la teoría crítica, quebrando la condición hegemónica y homogeneizante del ejercicio
escritural e interpretativo.
7
Cfr. Durand, G. (1994). El imaginario. Barcelona: ediciones del bronce.
REFERENCIAS
Bloom, H. (1997). El canon occidental: la escuela y los libros de todas las épocas.
Barcelona: Editorial Anagrama.
Dussel, E. (1972). Para una ética de la liberación latinoamericana. Argentina: siglo XXI
editores.
Pulido, G. (2009). El canon literario en América Latina.UNED. Revista signa 18. P.99-114.
Barthes, R. (1968). La muerte del autor. Traducción: C. Fernández Medrano. Disponible en:
http://www.cubaliteraria.cu/revista/laletradelescriba/n51/articulo-4.html
Carrión, E. (2014). Canon y dominación: otros modos de entender la poesía ecuatoriana en
un país sin lectores. Disponible en:http://www.matavilela.com/2014/10/canon-y-
dominacion-otros-modos-de.html