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Actualmente las parejas están cada vez más interesadas en practicar el arte de
dar y recibir masajes eróticos ya que cuando le realizas un masaje erótico a tu
pareja además de proporcionarle placer se mejoran las relaciones sexuales.
Esto no quiere decir que quien aplica el masaje erótico no disfrute. El tocar el
cuerpo de la pareja es algo que también excita y produce placer.
Este tipo de masajes no sólo permite que las personas se relajen, sino que
además prepara al cuerpo para el sexo, elevando la libido y mejorando su
sensibilidad.
El tacto es uno de los sentidos que más estímulos recibe cuando se tiene sexo,
con este tipo de masajes se estimula este sentido de tal manera que esté más
receptivo, lo que permite tener más placer al momento del contacto físico que
se da en una relación sexual.
Así que busquen un lugar en donde sepan que van disfrutar de privacidad y
del tiempo suficiente para estar tranquilos y sin prisas; es muy recomendable
apagar los teléfonos, celulares y cualquier tipo de interrupción que creas
puedan tener.
Lo más conveniente es hacerlo después del trabajo, por la tarde o noche; los
fines de semana son ideales, ya que pueden contar con el tiempo y la
privacidad necesarios. Si les es posible realizar una escapada fuera de casa,
como puede ser a un hotel es mejor.
Entre los eléctricos están los que son vibradores y los que generan calor. No
necesitas un camastro especial, tu cama, un sofá, incluso el piso son
suficientes.
Dentro de los materiales para un buen masaje erótico se debe de contar por lo
menos con un frasco de aceite mineral; sin embargo lo mejor es tener algunos
aceites sensuales.
Existe una gran variedad de este tipo de aceites que puedes adquirir ya sea en
una sex shop, en tiendas especializadas o farmacias.
En una sex shop puedes encontrar también aceites eróticos, que además del
aroma tienen sabor y producen diferentes sensaciones en el cuerpo al que se
les pone, los aromas y sabores de estos hacen que el sexo se convierta en una
experiencia mucho más intensa y sensual.
Cuando adquieras los aceites para masaje verifica que sean hipoalérgicos y
asegúrate de que no vayan a irritar la piel de tu pareja; recuerda que existen
pieles muy sensibles y lo que no irrita a una puede lastimar a otra. Estos
aceites deben de tener un aroma agradable y muy suave; otra características
es que se extiendan fácilmente por la piel y sean de fácil absorción sin dejar
una sensación grasosa ni manchas en la ropa.
Existen guantes para masaje que tienen un motor vibrador que permite
transmitir estos movimientos a través de los dedos proporcionando un masaje
más intenso.
Los masajes eróticos no son dados solamente con las manos, es posible
utilizar cualquier cosa que permita estimular los sentidos, un objeto muy
socorrido son las plumas, pero aquí se debe de tener cuidado con las
cosquillas, más adelante aprenderás a dar un masaje con plumas que vuelva
loco a tu chico.
Dispón de alguna ropa de cama y toallas que utilices específicamente para los
masajes y cerciórate de que el colchón o mueble en que vas a realizarlo no
vaya a resultar manchado con los aceites.
Otro sentido que puede ser estimulado en un masaje erótico es el del olfato
mediante velas aromáticas o incienso utiliza aquellos que tengan aromas
afrodisiacos como la canela o el jazmín.
Existen dos clases de este tipo de masaje el Lingam, que se les da a los
hombres y el Yoni que es para las mujeres.
Después acaricia sus testículos y soba la parte del perineo que es la zona que
se encuentra entre la base del pene y el ano.
Unta el pene con bastante aceite, dale un masaje en esa parte con tus manos
abiertas poniendo una palma sobre la otra con un movimiento que va de la
cabeza del pene hacia la base, al llegar a la base separa las manos y vuelve a
empezar, la presión que ejerzas sobre el pene debe de ser muy suave, ve
variando la velocidad y presión para darle diferentes sensaciones.
Pasado de un rato cambia el sentido del masaje yendo ahora de la base del
pene hacia la punta. Con una mano presiona la base del miembro mientras
con la otra das un masaje que vaya de arriba hacia abajo, debes de tener el
aceite suficiente para que tu mano resbale por todo el pene sin ninguna
fricción.
Cuando sientas que está por alcanzar el orgasmo deja el masaje del pene,
entre más tiempo retardes ese momento mayor será el placer que él obtenga;
con el dedo índice dale un masaje en la zona que se encuentra entre el ano y
los testículos, ejerciendo una ligera presión ya que de esta forma puedes darle
un masaje de forma externa a su próstata, el llamado punto G masculino o
Punto M, mientras con la otra mano puedes seguir dándole un masaje a su
pene.
Los pechos de la mujer son una zona muy erótica por lo que es necesario
dedicarles tiempo para acariciarlos, con movimientos suaves alrededor de
ellos en la base primeramente y después en los pezones.
Esto se hace también con los labios internos pero con mucha más delicadeza
ya que son más sensibles que los externos. Durante este masaje el contacto
visual entre ustedes es primordial, ya que de esa forma se aumentan las
sensaciones placenteras.
Pasado un tiempo se rota la mano de manera que la palma quede viendo hacia
arriba y se mueve el dedo como haciendo la señal para alguien que se
acerque, con ese movimiento se estimula tu punto G, que es el tejido
esponjoso que se encuentra detrás del clítoris.
Híncate sobre el pecho de tu pareja viendo hacia sus pies y empieza a darle
masaje con las palmas de tus manos viendo hacia afuera, esto con un
movimiento que vaya desde los tobillos hasta la ingle por la parte interna de
las piernas, repite este movimiento varias veces.
Después voltéate y ahora realiza unas suaves caricias que vayan desde la
parte externa de las caderas hacia el esternón y de ahí baja hacia el pubis,
mediante este círculo distribuyes la energía sexual en esa zona del cuerpo.
Repite el movimiento pero cada vez acércate un poco más a la zona genital y
a los pezones.
Por último pasa a sus orejas y acaricia sus lóbulos con movimientos
circulares, después de un rato de este tipo de masaje tu pareja estará lista para
tener sexo.
Masaje Tailandés
El masaje tailandés tiene como finalidad el brindar paz y armonía, no solo a
la persona que recibe el masaje sino también a quién lo da.
Basado en el principio de la meditación y yoga orientales, logra elevar la
sensibilidad y energía en las personas que lo reciben.
Para dar este masaje puedes hacer uso de tus manos, pies, codos y muñecas.
El mejor aceite para este tipo de masaje es aquel que con la fricción produce
calor.
Siéntate sobre su espalda y con tus pies soba sus piernas y sus nalgas con un
movimiento rítmico de arriba hacia abajo, mientas con tus manos sobas su
entrepierna evitando tocar sus genital, esto debido a que es necesario enviar
toda la energía de su cuerpo hacia esa zona.
Dedica un rato a sus nalgas acariciando con tus pulgares en la separación de
ellas, tocando muy suavemente su ano, con tus muñecas realiza movimientos
circulares del centro hacia afuera de sus nalgas, distribuyendo toda la energía
que se encuentra en esa zona para que no se concentre ahí y fluya hacia el
área genital.
Después de un rato, pídele que se acueste sobre su espalda e inicia un masaje
con tus manos sobre sus hombros y cuello con movimientos firmes hacia
abajo y suaves hacia arriba.
Acuéstate sobre él de manera que acaricies su pecho con el tuyo, haz que sus
pezones se rocen mientras con las manos aplicas un poco de presión en sus
sienes y en su entrecejo con suaves movimientos circulares.
Un rato después deslízate hacia abajo y con tus manos haz un movimiento
que vaya desde la parte exterior de su pecho hacia el centro y que termine en
la zona abdominal, buscando enviar toda la energía al centro de su cuerpo.
Soba las palmas de sus manos, una a la vez, ejerciendo algo de presión sobre
ellas con movimientos de la muñeca hacia la punta de los dedos.
En esta parte de su miembro podrás sentir los músculos que le dan la firmeza
a la erección, al hacer el masaje de la punta a los testículos, alargas su
eyaculación pues concentras su energía en la base del pene y no en el glande.
Él puede darte también uno de estos masajes, para esto las técnicas de presión
y masajes son similares.
Con movimientos rítmicos de arriba hacia abajo, esto permite que la sangre
fluya hacia la zona de tus labios hinchándolos y aumentando la sensibilidad
en ellos.
Si se dan el masaje de forma alternada los dos pueden disfrutar del erotismo y
sensualidad que proporciona ser el tocado y tocar un cuerpo que los atrae.
Pídele a tu pareja que se recueste boca abajo con los brazos a los lados,
acuéstate al lado de él, pon un poco de aceite en tus manos y fricciónalas para
calentarlo, empieza a acariciar su espalda con movimientos lentos y suaves,
recorre desde la cintura hasta los hombros, ejerciendo una leve presión con
las yemas de tus dedos.
Baja las caricias a sus nalgas y acarícialas mientras con tu lengua lames su
cuello y nuca; pídele que se ponga boca arriba y empieza a darle masaje en el
pecho.
Para que estés más cómoda siéntate sobre su abdomen y masajea su pecho
con un movimiento que vaya del costado hacia el centro y de la cintura hacia
el cuello, en cuanto llegues a sus pechos sóbalos firmemente.
Los pies son un centro de reflejo de todo el organismo, un masaje en los pies
no únicamente le va a dar descanso, también va a estimular sus centros
sexuales haciéndolos más sensibles y alcanzando así orgasmos mucho más
intensos.
Recuerda que esta parte del cuerpo es muy sensible, y muchas personas no
soportan que les tomen de los pies, por lo el masaje se realiza con mucho
cuidado.
Toma sus pies, uno en cada mano, coloca tu dedo pulgar en su planta del pie
y comienza a sobar ejerciendo un poco de presión del talón hacia el centro y
de los dedos hacia el centro. Él te puede hacer este tipo de masaje también a
ti.
Este masaje recibe el nombre del gel que utiliza, el cual es elaborado con
unas algas de la zona oriental llamadas Nori.
Una vez que están totalmente cubiertos con el gel dile que se recueste sobre
sus espaladas y acuéstate encima de él pero boca arriba, de esta forma tu
espalda queda en su pecho, empieza a resbalar sobre él con movimientos
lentos, siente su pecho en tu espalda que tu pareja sienta tus nalgas
resbalando por su pene, tómalo con una de tus manos y acaricia con éste la
línea que separa tus nalgas.
Voltéate, ahora pasa tus pechos por su piel y descubre nuevas sensaciones
cuando los frotes por cada parte de su espalda, nalgas y piernas
Después de unos minutos pídele que se voltee boca arriba, siéntate sobre su
vientre dándole la espalda y acaricia su pene pasándolo por tu vulva, no
tomes su miembro con firmeza, déjalo resbalar entre tus manos y tu cuerpo.
Igualmente resbala su pene por todo tu cuerpo, usa tu imaginación para darle
nuevas sensaciones, por ejemplo: presiónalo con tus pechos y déjalo resbalar,
también lo puedes presionar y sobar entre tu pantorrilla y pierna.
Después de un tiempo estarán preparados para tener un encuentro sexual,
aprovecha la lubricación que tiene para darle un masaje de próstata
introduciendo tu dedo en su recto, empieza suavemente con movimientos
circulares de tu dedo medio sobre su ano para que comience a relajarse y
excitarse, facilitando así la penetración.
Una vez que hayas introducido el dedo, busca con éste en dirección a su
vientre una pequeña protuberancia, cuando la sientas comienza a sobarla con
la yema de tu dedo.
El Masaje Nuro es muy adecuado para iniciarse en el sexo anal, ya que los
niveles de excitación que se logran son muy elevados y al estar
completamente lubricados la penetración es fácil, si se hace con la técnica
adecuada.
Consejos para dar un buen masaje
erótico
Aunque cada tipo de masaje tiene su técnica especial, existen algunos puntos
generales que se deben de tomar en cuenta para que la experiencia de éste
cumpla con su objetivo particular, que es logar una relación sexual excitante
y orgasmos intensos.
Vean que sus uñas estén limadas y que sus manos no tengan callosidades que
puedan rasparlos durante ese momento, la sensación del masaje debe de ser
suave por lo que este tipo de imperfecciones en las manos pueden hacer que
no se logre ese objetivo.
Utilicen aceites o cremas especiales para masajes, ya que éstos tardan más en
absorberse y proporcionan sensaciones muy placenteras en la piel.
No dejen caer la crema o aceite directo del envase ya que puede no estar en la
temperatura adecuada, siempre pongan un poco en su mano y frótenla para
que se caliente, una de las sensaciones más agradables es precisamente el
sentir el aceite tibio en la piel.
En esta guía se presentan los principios básicos de las técnicas usadas en los
diferentes tipos de masajes eróticos; al utilizar un masaje erótico para mejorar
la relación sexual, también te permite conocer qué es lo que le proporciona
placer a tu pareja y que él sepa qué es lo que te gusta hacer y se hagan para
lograr una satisfacción plena.